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Kama Sutra 120 ilustraciones
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Ebook186 pages2 hours

Kama Sutra 120 ilustraciones

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El volumen de Mega Square Kama Sutra es un manual educativo universal que rinde homenaje a la magia del amor. Esta edición cuenta con unas ilustraciones exquisitas que incluyen frescos primorosos y delicados grabados. El formato práctico y compacto de Mega Square hace de este libro un regalo perfecto.
LanguageEspañol
Release dateNov 14, 2023
ISBN9781783102129
Kama Sutra 120 ilustraciones

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    Kama Sutra 120 ilustraciones - E. Lamairesse

    EL HIMNO A KAMA

    ¿Quién es esa poderosa divinidad que, desde los setos y campos occidentales de Agra, se remonta a los más altos aires donde reina la purísima luz, mientras todos los tallos mustios de las flores, devueltos a la vida con los primeros rayos del sol, se entrelazan en las cunas, dulces refugios de la armonía, donde las suaves brisas alegremente les roban sus más magníficos perfumes?

    Salve, poder desconocido… al menor gesto de tu graciosa cabeza, los valles y los bosques se apresuran a adornar tus fragantes senos, y cada flor en eclosión, sonriente, engalana tus cabellos de almizcle con deslumbrantes perlas de rocío.

    Puedo sentir, sí, puedo sentir cómo tu fuego divino perfora mi corazón, te adoro y beso con frenesí tus altares.

    ¿Y podrías desconocerme?

    No, hijo de Maya, no, conozco tus flechas con puntas de flores, el aguerrido vástago de que está hecho tu arco, tu resplandor habitual con escalas nacaradas, las misteriosas armas que posees. He sentido todos tus sufrimientos, he saboreado todos tus placeres. ¡Kama omnipotente, o, si usted lo tuviera, deslumbrante Smara, majestuosa Ananya!

    Dondequiera que esté la sede de tu gloria, por cualquier nombre que seas invocado, los mares, la tierra y el aire proclaman tu poder; todos te rinden homenaje, todos reconocen en ti al Rey del Universo.

    Tu joven compañero, Placer, sonríe a tu lado, escasamente cubierto por su deslumbrante vestido. En su cortejo, doce vírgenes, cuyos cuerpos esbeltos y llenos de encantos se presentan con gracia; sus delicados dedos acarician levemente las cuerdas doradas, y sus brazos curvos se entrelazan en una danza voluptuosa. Alrededor de sus elegantes cuellos llevan perlas más brillantes que las lágrimas del amanecer.

    ¡Dios de las flechas florecidas, del arco lleno de dulzura, delicias del cielo y de la tierra! Tu inseparable compañero, llamado Vasanta entre los dioses, dulce Primavera sobre la tierra, dejas bajo tu delicada pisada un suave y delicado tapete de verdor, levantas sobre tu cabeza de infante arcos que no pueden ser traspasados por los fuegos abrasantes de la luna. Es él quien invoca desde las nubes, para refrescarte, un rocío de perfumes, quien rellena tu aljaba más imponente, como el regalo sin precio de un amigo aún más inestimable.

    A su turno, mil aves, tiernas y afectuosas, enamoradas, con el encanto deslumbrante de sus delicadas llamadas ponen en libertad las flores todavía cautivas de sus lazos.

    Su mano amistosa dobla hábilmente la exquisita madera, como cuerda del arco una guirnalda de abejas cuya miel perfumada es tan dulce pero cuyo aguijón, lástima, causa tan agudos dolores. El es de nuevo quien provee los puntos glaciales de sus saetas que nunca descansan, hiere el corazón a través de todos los sentidos, y lo reanima con el embeleso de las cinco flores:

    Desgarrador Champaca, como oro perfumado;

    Cálido Amra, repleto de celestial ambrosía;

    Resecador Kessara, con follaje plateado;

    Ardiente Ketassa, que desordena los sentidos;

    Deslumbrante Bilva, que inculca en las venas un ardor voraz.

    ¿Qué mortal, oh poderoso Dios, podría resistir tu poder, cuando el mismo Krishna es su esclavo? Sí, Krishna, quien en constantes embelesos de delicia en las benditas llanuras de Malhura, inspira sonidos bajo sus dedos divinos, desde la flauta pastoril hasta las cuerdas melodiosas de una armonía celestial, y con el coro de gopis (pastoras), perdidamente enamorado por sus encantos, inventa danzas voluptuosas a la dulce luz de Lunus, la misteriosa linterna de la noche.

    ¡Oh Dios, seductor Dios, nacido antes de la creación, Dios eternamente joven! ¡Que la canción de tus brahmines, cautivados por tus leyes, puedan resonar para siempre sobre las orillas sagradas del Ganges! ¡Y llegada la hora cuando tu ave favorita, desplegando sus alas esmeralda, te lleve a través del espacio con su rápido vuelo; cuando, en medio de la luz silenciosa, los rayos temblorosos de Ma (la luna) miren a hurtadillas los misteriosos refugios de los amantes afortunados y desafortunados, pueda la más dulce influencia ser compartida por tus bardos más queridos, y pueda su corazón ser voluptuosamente calentado por tu fuego divino sin ser consumido!

    Conversación.

    ¿Cuál es la visión más bella que puede verse? El rostro de una chica encendida por el amor.

    INTRODUCCION

    Los principios de qué es lo bueno y lo justo y qué no lo es son los mismos en todo tiempo y lugar: llegan a ser la moralidad absoluta.

    Los principios relacionados con las costumbres sexuales, sin embargo, varían de época a época y de país a país. Desde la desenfrenada promiscuidad de las tribus violentas hasta la absoluta prohibición de los juegos carnales por fuera del matrimonio, ¡cuántos grados diferentes de libertad se han acordado a las relaciones sexuales por parte de la opinión pública, las leyes sociales y las leyes religiosas! Con excepción de ciertos pueblos, todo el mundo antiguo consideró el acto sexual como permisible, con la condición de no transgredir los derechos de nadie más, tales como, por ejemplo, el acto sexual con una viuda, o con cualquiera otra mujer que podría no ser completamente dueña de su propia persona…

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