Gobierno Global

sistema.

Capítulo I: Unificación mundial

La globalización ha originado una serie de cambios a nivel mundial, muchos países del mundo han tenido que cambiar sus políticas y programas económicos con la finalidad de cumplir con las directrices internacionales. La conformación de un gran bloque de naciones con el objetivo de una integración, comunicación e interdependencia entre distintos países del mundo, uniendo sus mercados, sociedades y culturas, ha traído consigo que muchas naciones adopten políticas internas con la finalidad de integrarse al gran bloque o de lo contrario, correr el riesgo de quedar excluido del desarrollo mundial.

Los medios de comunicación nos muestran un planeta que en muchos sentidos se hace más homogéneo, aunque en otros revela grandes distancias y contrastes. Vivimos entre dos fuerzas: una centrípeta, que tiende a integrarnos a una sola realidad; y otra centrífuga, que busca compensar, o equilibrar, ese movimiento de reafirmación de nuestra propia identidad y sentido de pertenencia (Cortázar, 1994).

La globalización surge como una solución a diversos problemas que ocurren en distintos países y su vez estos se conjugan para originar crisis regionales o en el peor de los casos, pueden llegar a ser una problemática mundial. La pobreza, crisis económicas, guerras civiles, pueden ser algunos ejemplos de crisis locales que pueden impactar regiones y convertirse en una problemática mundial.

Las grandes guerras mundiales (Primera y Segunda Guerra Mundial) nacieron producto de pequeños conflictos locales que fueron creciendo y agravándose, a tal punto de originar verdaderas confrontaciones entre grandes potencias internacionales, que dejaron a su paso un gran caos, devastación, miles de muertos y pérdidas materiales por miles de millones de dólares.

La integración mundial busca el fortalecimiento de las naciones, consolidación de sus economías y estabilidad social, bajo la transformación de la cultura política, jurídica y económica de cada país. Aunque en sus inicios el proceso de globalización se originó principalmente con la finalidad de crear una unión entre economías locales para crear un mercado económico mundial y así aumentar el crecimiento económico de los países involucrados. Hoy en día, también se han establecidos interrelaciones con la finalidad de lograr un intercambio cultural, social, tecnológico, ampliando los impactos de la globalización a diversos ámbitos de la población mundial. Hablamos entonces de un intercambio cultural y social debido a la conexión de las sociedades y culturas locales, en una cultura global, lo que ha originado integración entre los pueblos. Pero este fenómeno ha tenido sus detractores que ven con desagrado la perdida de la identidad local de muchos pueblos que han adoptado costumbres y tradiciones extranjeras.

Podemos enumerar un sin número de beneficios y transformaciones que han sufrido las naciones producto del fenómeno de globalización. Y debido a la influencia de las grandes potencias mundiales, las naciones pequeñas no han tenido otra opción que involucrase en el proceso con el objetivo primordial de obtener los beneficios del intercambio comercial, abriendo las puertas a las grandes multinacionales e inversionistas que inyecten dividendos a sus economías locales. Pero las transformaciones productos de la globalización no cesan, se incrementan cada día, y surgen nuevas medidas con el propósito de obtener más beneficios producto del intercambio global, más que todo en cuando al aspecto económico se refiere.

La apertura de los mercados nacionales por medio de los tratados de libre comercio ha sido la forma principal que han utilizado los países en busca de ese crecimiento económico, a fin de lograr ese anhelado desarrollo del que solo gozan las grandes potencias mundiales (Estados Unidos, Reino Unido, Japón, Francia, Canadá, Italia, etc.)

Aunque la globalización como tal no surge en el seno de las Naciones Unidas, esta organización internacional, ha tenido un papel importante en este proceso de intercambio mundial. Con su nacimiento el 24 de octubre de 1945, luego de finalizada la Segunda Guerra Mundial, la ONU ha facilitado la cooperación internacional en asuntos de derecho, paz y seguridad, además de promover el desarrollo social y económico de los países miembros. En otras palabras la globalización comienza a formarse con el nacimiento de dicha organización.

El fenómeno de la globalización surge a mediados del siglo XX cuando las grandes potencias participan de pequeños procesos de integración y cooperación económica con la finalidad de que sus economías locales crezcan y se fortalezcan. Pero luego de la caída del comunismo y con el final de la Guerra Fría la globalización toma un mayor auge y comienza a consolidarse a nivel mundial. El surgimiento de las empresas multinacionales, la libre circulación de capitales y la inversión extranjera han sido parte esencial del fenómeno de la globalización.

Producto del proceso de globalización las naciones han conformados bloques o grupos para facilitar el proceso de integración y cooperación internacional, principalmente en el aspecto económico y otros para cooperar en aspectos políticos y gobernabilidad. La Unión Europea, la OEA (organización de Estados Americanos), OMC, OPEP, NEPAD (Nueva Sociedad para el Desarrollo de África), ALBA (Alianza Bolivariana para las Américas), Mercosur, PARLACEN (Parlamento Centroamericano), entre otros. Sin importar el tipo de alianza que se forme su propósito es el mismo, la cooperación de distintas naciones con el objetivo de fortalecer intereses en particular.

El nacimiento de la OMC (Organización Mundial del Comercio) como organismo internacional conformado por la mayoría de los países soberanos del planeta fue un evento importante ligado a la globalización. Con el nacimiento de la OMC en 1995 se ha incrementado la firma de tratados de libre comercio, intercambios comerciales de productos y servicios, y la integración económica mundial.

Cada vez son más los lasos que se trazan entre los países, estos por muy pequeños que sean buscan firmar tratados internacionales, los cuales sirven de fundamento legal para el cumplimiento de los acuerdos pactados entre las partes. Estos tratados pueden ser para cooperación tecnológica, apoyo humanitario, intercambio profesional o recurso humano, pero en su mayoría se firman tratados de libre comercio con la finalidad de obtener un mayor crecimiento económico. Con la globalización también han surgido instituciones internacionales que buscan fortalecer la justicia, libertad y democracia entre las naciones; la creación de la Corte Penal Internacional es un ejemplo de este caso.

Tanto las tendencias globalizadoras como las fórmulas de integración en las que se apoyan aquéllas, están generando una dinámica en la que lo global y lo local establecen una especie de entramado en el que ambas dimensiones se funden en un sólo proceso. En este contexto, se está produciendo el estallido de particularismos, revitalización de etnias al interior de los estados nacionales, lo cual evidencia una paradoja histórica: al tiempo que nos fusionamos, nos fragmentamos. Fusión-fisión parecen ser los ejes tensionales que movilizan a la sociedad de hoy (Arenas, 1999).

La globalización es un fenómeno que llego para quedarse, y aunque todavía tiene sus detractores, todos los países, hasta lo más aislados desde el punto de vista político (comunistas), establecen alianzas con otros de su misma ideología con la finalidad de buscar algún tipo de beneficio. La globalización ha transformado los pueblos, los cuales han sufrido modificaciones producto de la influencia social y cultural de otras naciones.

Para que la globalización sea positiva, ha de serlo para pobres y para ricos por igual. Tiene que aportar el mismo grado de derechos que de riquezas. Tiene que suministrar el mismo grado de justicia y equidad social que de prosperidad económica y de buenas comunicaciones.

Kofi Annan

El fenómeno de la globalización ha establecido un cambio dinámico en todos los rincones del mundo, aunque su impacto se ha sentido en unos países más que en otros, las consecuencias de la globalización son mundiales e inevitables.

Según la Organización Mundial del Comercio (2010) la globalización es un proceso en marcha, que no ha terminado todavía. El comercio no es simplemente la circulación de bienes y servicios, sino también la circulación de personas. Asimismo, dada la importancia de la demografía a comienzos del siglo XXI, el movimiento transfronterizo de personas debe ser objeto de atención urgente y seria. Dentro de poco, nos encontraremos con una enorme expansión demográfica, además de una tasa elevada de desempleo que afectará específicamente a los jóvenes. La mayor libertad en la circulación transfronteriza de personas es un factor importante para crear una sociedad mundial equitativa, sostenible, sólida e integradora.

La globalización, de acuerdo con algunas definiciones, es una apertura o liberalización del comercio. En los últimos 10 años esta liberalización ha tenido lugar principalmente en los antiguos países socialistas, que abandonaron la planificación centralizada para integrarse a la economía mundial, y en los países en desarrollo, que remplazaron sus estrategias de industrialización mediante la sustitución de importaciones para adoptar un enfoque basado en la exportación, junto con desmantelar parcialmente las operaciones del Estado. Esta liberalización no fue el resultado de decisiones adoptadas con total libertad; se produjo en parte como una reacción frente a la evolución mundial, las expectativas de beneficios derivados del progreso económico mundial, las presiones ejercidas por el Banco Mundial y el FMI sobre sus países miembros a través de los programas de estabilización y ajuste estructural, y las doctrinas sobre minimalismo estatal promovidas en los países ricos (Streeten, 2001).

En los siguientes capítulos profundizaremos más en el tema, y estableceremos la relación de la globalización con el surgimiento de un nuevo sistema de gobierno mundial o y la aparición junto con este sistema de un nuevo modelo de liderazgo mundial.

Capítulo II: Origen de la propuesta

El crecimiento económico de los