Discover millions of ebooks, audiobooks, and so much more with a free trial

Only $11.99/month after trial. Cancel anytime.

Alauda: Poemas
Alauda: Poemas
Alauda: Poemas
Ebook133 pages42 minutes

Alauda: Poemas

Rating: 0 out of 5 stars

()

Read preview

About this ebook

Alauda. Poemas
Dos mujeres - con la misma y distinta voz -, nos hablan en primera y tercera persona; mujeres que se afirman en su recio decir y alzan su canto en nombre de todas las mujeres de asumido silencio o silenciadas.

El espritu femenino, posee el don de descifrar cunta soledad sola, habita o deshabita una casa - propia o ajena -; sabe tejer o remendar un pensamiento; pulir o avivar un objeto; abrir o cerrar una puerta, como se abre o se cierra una pena - propia o ajena -.

Porque toda mujer es su propia casa; es una caracola, con sus abismos y escaleras sin fin.
LanguageEspañol
PublisherPalibrio
Release dateDec 30, 2010
ISBN9781617641091
Alauda: Poemas

Related to Alauda

Related ebooks

Poetry For You

View More

Related articles

Related categories

Reviews for Alauda

Rating: 0 out of 5 stars
0 ratings

0 ratings0 reviews

What did you think?

Tap to rate

Review must be at least 10 words

    Book preview

    Alauda - Elsa Moreno Pizarro

    Contents

    I

    II

    III

    IV

    V

    VI

    VII

    VIII

    IX

    X

    XI

    XII

    XIII

    XIV

    XVII

    XVIII

    XIX

    XX

    XXI

    XXI

    XXII

    XXIII

    XXIV

    XXV

    XXVI

    XXVII

    XXVIII

    XXIX

    XXX

    XXXI

    XXXII

    XXXIV

    XXXV

    XXXVI

    XXXVII

    XXXVIII

    XXXIL

    XXXL

    XLI

    XLII

    XLIII

    XLIV

    XLV

    Prólogo

    Aria de la soledad, el primer libro de poesía, de Elsa Moreno Pizarro, nos deja sus madrigales de añoranza y un canto de adagios—lentísimos—, sobre la nostalgia, ese dolor tan humano, de lejanías y pesadumbres.

    Alauda es, como el sonido de esta bellísima palabra de origen celta, un vuelo sereno.

    Alauda es una alondra, de alto ascender y cantar, desde el alba hasta el ocaso.

    Alauda quiere ser una gaviota, que ahora levanta su garbo, sobre algún mar del sur.

    Alauda, puede ser también el nombre de una mujer albatros, el ave más sola y extraña, que planea casi todo el año en las corrientes del aire, o se posa en algún espejo plácido, formado en un atardecer del Océano Indico.

    Entre las sílabas aéreas, del ala y el laúd, Alauda amaina el tiempo del verso y hace hogar—fueguito de tokonoma—, en lugares de recogido silencio y noches de candelabro, hasta hallarse confiada, al final del poemario, en las manos abiertas del Amor.

    Toda casa es un alma, reflejada en el espejo de cada hora. Cada espacio de la casa, es un almario para guardar esencias de los seres que la habitan. Precisamente eso es un almario—esa palabra que nos enseñó Lope de Vega—, un armario, iluminado adentro, para guardar el alma.

    La casa dobla y desdobla miedos, ansias y alegrías. Todo techo se vuelve un cielo acercado; cada basamento, desciende a la solidez del mundo y cada pilar, se prolonga en símbolos, hacia el centro de alguna estrella, porque la casa reúne la porción de universo, necesaria a todo viviente.

    Toda casa es, más allá de sus muros, una madre que abriga; una isla azul, refugio al pensamiento.

    El corazón se apacigua en la mirada del objeto que vive y acompaña en su sencillo estar y existir, en el recuerdo de un objeto perdido y bienamado, en una antigua casa de otra tierra, también vivida.

    Un ángel—o una campana—de cristal, una silla de mimbre, una cenefa de crochet, dos jarras de porcelana, vigilantes, tras los visillos

    de la alacena, se transforman, con el paso de los años, en substancias palpitantes, de casa; son otros mudos habitantes de la casa.

    El sol mañanero, siempre vuelve a entrar a la madre, con delantal de flores, a la cocina.

    Una silla giratoria, nos vuelve a marear, porque ella también sabe abrir la ronda, para ir a jugar.

    Afuera, el poema huele a rosa y a azahares, azahara la vida con los símiles y metáforas más evidentes para decir un jardín.

    Un jardín es una de las realidades más claras, para expresar la visión primordial del Paraíso.

    Si se poseen: una quebrada, un naranjo, buganvilias y un patio; la parcela de sistema solar o lunar, a la que todos tenemos derecho de propiedad, está asegurada.

    E N  E L  A L V É O L O  D E  L A  R O S A

    Dos mujeres—con la misma y distinta voz—, nos hablan en primera y tercera persona;

    Enjoying the preview?
    Page 1 of 1