Nacida Para Sufrir

Copyright © 2013 por Amada Hadassah.

Diseño de portada por Steve Hamilton

Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.:   2013914304

ISBN:   Tapa Dura               978-1-4633-6379-6

              Tapa Blanda            978-1-4633-6378-9

              Libro Electrónico   978-1-4633-6377-2

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido utilizados en esta obra de manera ficticia.

El texto Bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades

Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas.

Utilizado con permiso.

Fecha de revisión: 12/09/2013

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473012

ÍNDICE

Dedicatoria

¡Advertencia!

Prólogo

Agradecimientos

Introducción

Parte I   Nacida Para Sufrir

Capitulo 1   La Separación De Mis Padres

Capitulo 2   El Tiempo En El Internado

Capitulo 3   Un Esmalte A La Tristeza

Capitulo 4   La Segunda Separación

Capitulo 5   La Alegría Que Ahoga El Dolor

Capitulo 6   El Tiempo De Despertar Se Acerco

Capitulo 7   La Esperanza Frustrada Aflige Al Corazón

Capitulo 8   Amor Y Odio

Capitulo 9   Cambiando El Dolor Por La Resignación

Capitulo 10   Castillos En El Aire

Capitulo 11   De Vuelta Al Vomito

Capitulo 12   Una Hamburguesa Y Papas Fritas

Capitulo 13   Sin Arrepentimiento No Hay Salvación

Capitulo 14   Unos Días En El Semi Virote Trece

Capitulo 15   ¡Aun En La Tormenta… Está Dios!

Capitulo 16   ¿Amigos O Enemigos?

Capitulo 17   Conociendo La Heroína

Parte II   Perdón Padres Míos Por Mi Vida Loca

Capitulo 18   Los Pies Presurosos Al Mal

Capitulo 19   Mi Encuentro Con La Adivina

Capitulo 20   La Necesidad De Una Dosis

Capitulo 21   Un Bebe Lo Cambia Todo

Capitulo 22   Las Consecuencias Que Jamás Se Olvidan

Capitulo 23   Una Amargura Que Envenena El Alma

Capitulo 24   Dios; Enviando A Su Mensajero

Capitulo 25   Venciendo A Mi Adversario

Capitulo 26   La Balacera

Capitulo 27   Limpiando Mi Cuerpo De Droga

Capitulo 28   Mi Regreso

Capitulo 29   Amor O Venganza

Capitulo 30   El Encarcelamiento De Don Rigo

Capitulo 31   No Hay Un Tercer Camino

Capitulo 32   Buscando Respuestas

Capitulo 33   Al Borde De La Locura

Capitulo 34   Lo Real Y Las Alucinaciones

Capitulo 35   Los Sueños A Veces Te Muestran Como Esta Tu Vida

Capitulo 36   Dios Aun En La Obscuridad Manifiesta Su Poder

Capitulo 37   ¿Inocente O Culpable?

Parte III   ¡Huye Pilar…Huye!

Capitulo 38   Mi Vida En La Cárcel

Capitulo 39   Conociendo El Poder De Dios

Capitulo 40   Dios Obrando En Mí

Capitulo 41   Regalos Espirituales

Capitulo 42   Dejando De Usar Drogas

Capitulo 43   ¡Levántate Pilar!

Capitulo 44   Me Libraste De Varón Violento

Capitulo 45   Como León Rugiente

Capitulo 46   Mi Libertad

Parte IV

Capitulo 47   Recuperando A Mis Hijos

Capitulo 48   Esperando La Luz Verde

Capitulo 49   Confiando En El Señor En Todo Tiempo

Capitulo 50   Todo Tiene Un Propósito

Capitulo 51   La Casa Que Tanto Había Anhelado

Parte V   Una Oportunidad Para Retomar Mis Estudios

Capitulo 52   Todo Esfuerzo Tiene Su Recompensa

Capitulo 53   En El Mundo Del Arte

Capitulo 54   Mi Boda

Capitulo 55   ¿Estudiante De Una Universidad? Nunca Es Tarde

Conclusión

Peticiones Personales

Referencias

Notas Finales

[Cuando Dios haga volver la cautividad de Sion seremos como los que sueñan, entonces nuestra boca se llenara de risas…]

Salmos 126

DEDICATORIA

Dedico este libro a todas las mujeres, mujeres que como yo, han experimentado el fracaso y el sufrimiento, pero que han renacido por el poder de Dios en Cristo Jesús, en amor, fe y esperanza.

De igual forma lo dedico también a esas mujeres valientes que llevan la preciosa semilla de esperanza a las prisiones y comparten el amor de Jesús, creyéndole a Él y a su promesa; ¡Que aun a los huesos secos, Dios; llenara de vida!. Se necesita valor y Fe para ir a los lugares más peligrosos y alcanzar aquellos que han perdido sus esperanzas

¡ADVERTENCIA!

Querida(o) lectora(o) el contenido de este libro, es apto solo para mayores de 16 años de edad, ya que contiene principalmente relatos, que pueden describir, o detallar, actos violentos.

PRÓLOGO

Es un privilegio para mí, que mi mamá me haya pedido que escribiera esta parte de su libro, aunque yo no conozca toda la historia de su vida… (Pero pronto lo sabré, porque pienso leer este libro) Yo soy una testigo de su transformación a una nueva mujer de Dios. Aún recuerdo la vida que teníamos cuando era pequeña, mi antigua casa era una casa de drogas y mi mamá nunca estaba con nosotros, tenía que verla en condiciones muy malas y un día que salió, ella no regreso…Me tuve que separar de mis hermanos mientras ella estaba en la cárcel y no los mire por un año…Dejarlos en esa casa donde no recuerdo felicidad, fue algo muy doloroso para mí. No recuerdo que era lo que sentía exactamente cuando todo esto pasaba, solo recuerdo que extrañaba mucho a mi mamá y a mis hermanos y quería estar con ellos, no importaba como era mi mamá quería estar con ella otra vez. Cuando ella salió de la cárcel yo mire a mi mamá como una mujer nueva, una mujer que buscaba ayuda para dejar todo aquello malo y que la alejaba de Dios. Ella solo tenía algo en mente; recoger a sus hijos y salir para seguir la voluntad de Dios en su vida. Después de ese momento lo que recuerdo es a mi mamá conmigo y mis hermanos.

Cuando llegamos a la casa hogar, casa del pastor yo mire a mi mamá como creció en Dios, tuvo sus luchas pero siempre ha salido adelante con nosotros. Recuerdo cuando un día mi mamá estaba tendiendo la ropa y yo le pregunte; como se sentía ella, después de haber dejado todo atrás, y lo que ella me respondió fue que se sentía satisfecha, pero yo no entendía lo que ella trato de decir, entonces le pregunte ¿cómo… Satisfecha? Y ella dijo es; como…Cuando comes mucho, y te llenas y no puedes comer más… Así me siento yo. Pero yo no entendía sino con el tiempo, comprendí que esa satisfacción se la había dado Jesucristo.

Ahora a mis 18 años también he podido experimentar esta relación con Dios, he tenido la oportunidad de ir a un colegio bíblico y a diferencia de mi mamá yo tuve la oportunidad de conocer de Dios desde que era pequeña, yo sé que mi vida tiene un propósito y solo quiero buscar la voluntad de Dios.

Yo se que el deseo de mi mamá fue siempre poner su historia en un libro, y ahora ese deseo Dios se lo ha cumplido, creo que Dios usara la historia de mi mamá para ayudar a otras mujeres que están viviendo o vivieron cosas similares a las que ella vivió. Mi mamá trato de buscar felicidad en cosas que solo le trajeron sufrimiento pero Dios le mostro lo que realmente era amor y gozo, y ella entendió que su vida tenía un propósito para llenar la voluntad de Dios. Y este es el mensaje de este libro, que las cosas que pensamos que nos van a ser feliz un día se acaban pero Dios siempre está ahí esperando que nosotros nos rindamos a Él y darle el control de nuestras vidas para que él pueda usarnos para el verdadero propósito por lo cual estamos aquí…En este mundo.

-Vicky

AGRADECIMIENTOS

Con un profundo agradecimiento a nuestro señor Jesús por su inmenso amor, perdón, gracia y salvación.

Agradezco a mi querida amiga Laura y al grupo misionero de Alaska Glacierview Baptist México Mission Team por su gran apoyo… Gracias por creer en el sueño que Dios deposito en mi corazón y hacer posible la publicación de esta historia

Agradezco a Dios a mi querida amiga Lisa y su gran apoyo.

Agradezco a mi esposo Carlos, mi Eliaquim, por su paciencia amor y comprensión. Y a mis tres hijos Vicky, Mario, y Jesús que me apoyaron en cada momento.

Agradezco a Dios por mis queridos padres: Manuel y Rosa María.

Doy gracias a Dios por las amigas y compañeras de oración que Dios ha puesto en mi vida.

Agradezco a la mujer que Dios puso como mentora a mi vida y compartió conmigo el amor de Dios, y que a pesar del poco tiempo que pude estar cerca de ella, fue ejemplo DE UNA MUJER DE FE.

Agradezco a Dios por la casa hogar para mujeres Casa del Pastor y por las directoras Jeanie y Lisa. Que Dios usó para tratarme, enseñarme y prepararme para su propósito.

Agradezco a Dios por todas esas preciosas mujeres que semana tras semana visitan la prisión y animan a mujeres como yo.

Agradezco a Dios por el Pastor Harry y su esposa Irma y toda su iglesia de Calvary Chapel Bellmawr por su apoyo y construcción de mi casa.

Agradezco a Dios por David y su esposa Miriam y el grupo misionero por su apoyo y ayuda en la construcción de mi casa.

Agradezco a Dios por el Pastor Louie de la iglesia Calvary Chapel Norco California, y al grupo misionero entre los cuales doy gracias a Linda que año tras año planeaba el viaje, y recolectaba todas las cosas necesarias para la decoración de las casas; A Manuel y su esposa Tracy que fueron los líderes, y a Joanne y a todo el grupo misionero por el amor que Jesús me mostró por medio de ustedes a mí y a mi familia.

Agradezco a Dios por el Pastor Jim y su esposa Lory y todo su apoyo.

Agradezco a Dios por el Pastor José Luis y su esposa Martha y toda la iglesia Nazareno de San Vicente, B.C. Gracias por sus ánimos y oraciones en los tiempos difíciles.

Agradezco a Dios por mis queridos amigos Heath y su esposa Adeliz y al grupo misionero de Rainier View Christian Church Tacoma WA. Que año tras año mi familia y muchas más personas hemos sido bendecidos por medio del arduo trabajo que realizan en San Vicente y Colonet B.C.

Agradezco a Dios por mi familia en la fe de la iglesia Capilla calvario Horizonte de San Vicente, B.C…Gracias por sus oraciones.

Faltarían hojas para agradecer a tantas y tantas personas que Dios ha puesto en mi vida y que han sido de ánimo, soporte y bendición.

¡Muchas gracias!

A Jehová presta el que da al pobre, y el que bien ha hecho, se lo volverá a pagar. Proverbios 19:17

Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.Efesios 2:4-7.

INTRODUCCIÓN

Los personajes de esta historia, son, por supuesto, reales, pero se han cambiado sus nombres. El propósito de relatar la historia de mi vida, es llevar al lector(a) junto conmigo, a dar un recorrido al pasado, a las etapas de mi vida que han sido las más significativas, ya sea de dolor o satisfacción. Y con esto influir a creer en Dios y su hijo Jesucristo. ¡Creer en los milagros! ¡Creer en el cambio! Y creer en ese despertad espiritual que te lleva a la renovación de 180 grados. Trató de expresar los sentimientos más profundos que he experimentado. Las reflexiones que he vivido y aprendido a través de los años; como mujer sin Dios y como una mujer de Dios. No son formulas, ni reglas, sí no que simplemente son: Descubrimiento y resultados que he tenido que afrontar, para poder comprender que mi vida siempre ha tenido un propósito. Porque todos estos años ese molde mental me hacía creer que no era nada ni nadie. Pero ahora con la ayuda de Dios, la vida me ha besado, me ha llenado de oportunidades y una de esas oportunidades es relatar mi historia. Contarle al mundo que las derrotas, las contrariedades en la vida no, nos impiden las victorias, el triunfo, y el premio…Si no que más bien todas nuestras derrotas nos deben de impulsar a dar nuestro último esfuerzo, nuestro último golpe… ¿Por qué quién sabe? Tal vez es el día que se realice lo que precedes. Dios me ha hecho olvidar poco a poco mi pasado, y me ha hecho fructificar en la tierra de mi aflicción me ha recompensado mis sufrimientos con nuevas alegrías. Dios me lleno de nuevas fuerzas para salir de la drogadicción, salir del círculo vicioso donde yo me encontraba, recuperar mi vida, recuperar a mis hijos, recuperar el valor de mujer, recuperar la oportunidad de tener una carrera educativa… Y solo puedo decir: ¡Gracias a Dios que me rescato y me extendió el cetro de su perdón y misericordia!

Parte I

NACIDA PARA SUFRIR

Toda obra del señor tiene un propósito; ¡Hasta el malvado fue hecho para el día del desastre!

(Prov.16:4)

CAPITULO 1

La separación de mis padres

Aunque mi padre y mi madre me dejaren, con todo, Jehová me recogerá (Salmos 27:10)

Nací en una familia destruida por la droga y el alcohol, de un matrimonio que no funciono. Cuando yo nací mis padres eran muy jóvenes; mi madre tenía 15 y mi padre 16, tres años después de estar juntos, me tuvieran a mí y a mi única hermana. A mi mamá no la recuerdo muy bien pero me dejo una sensación de vacío, la recuerdo distante…Pero era una gran madre, ya que recuerdo los cuidados que nos daba a mí y a mi hermana… Mi papá aunque diferente a ella, él parecía cariñoso e igualmente un buen padre, pero inmaduro; ya que eran muy jóvenes cuando fueron padres.

Ellos, como pareja tenían muchos problemas, mi papá cada vez bebía más y sus problemas cada día eran más fuertes y él empezó a golpearla. Varias veces nos sacaban de la casa para que no miráramos, y una tarde ellos empezaron a gritarse, mi mamá traía un cuchillo en su mano, algo le gritaba a mi papá pero no alcanzaba yo a entender; nos sacaron de la casita que teníamos para que no miráramos sus pleitos y mi papá se encerró con ella. Yo oía que se gritaban, me asome por un hoyo que tenia la puerta, él estaba golpeándola, mi mamá estaba llorando muy fuerte yo creo que aparte del dolor lloraba de impotencia por no poder hacer nada, y decepción. Deje de mirar y volteé con mi hermana que me estaba hablando, nos quedamos afuera de la casa hasta que todo termino.

Eso que paso ese día había llegado a un grado grave entre ellos, así que yo creo que por eso mi mamá estaba esperando una oportunidad para irse. Yo no sabía a quién elegir o pensar quién era el bueno o quién era el malo a los dos los amaba aunque mi mamá me rechazaba y mi papi era un alcohólico, me dolía al pensar que ellos se iban a separar. En ese tiempo mi edad era de 6 años y vivíamos en una casita de dos cuartos chicos…Era amarilla….Había muchas plantas alrededor, siempre estaba limpia y siempre que mi mamá terminaba de limpiar se sentaba y se fumaba un cigarro, ella pensaba mucho, y más por lo que había pasado entre mi papá y ella. Pasaron días y parecía que todo iba bien entre ellos, pero mi mamá ya tenía sus planes y aprovechando que mi papá no estaba, empezó a empacar nuestra ropa y salimos de la casa apresuradamente, cruzamos una calle y esperamos un poco mientras pasaba el transporte. Yo no sabía a dónde nos llevaba a mí y a mi hermana; pero lo que si sabía era que dejábamos a mi papá. En realidad me sentía muy triste…Sentía un nudo en la garganta al imaginarme que mi papá llegaría a la casa contento, con comida y no nos iba ya a encontrar, pero no dije nada.

-¿A dónde vamos ama? Le pregunte ella me respondió: -Aun lugar donde van a estar bien Tomamos el primer transporte y luego el segundo…Era tarde ya. Nos llevo a un lugar llamado Maneadero, era un pequeño ejido, a un orfanato. Ese día nos quedamos internadas allí, nos enseñaron nuestro dormitorio, nuestras camas; por cierto eran literas y nos dieron unos muñeco pelones que parecían bebes, a pesar de todo lo que estaba pasando yo estaba contenta con mi muñeco. Al oscurecer nos mandaron llamar y me dijeron que mi mamá había regresado por nosotras… ¡Mi papá venía con ella! Él la había encontrado e hizo que ella fuera por nosotras y nos sacara del internado. Regresamos a la casa con todas nuestras cosas menos con los muñecos pelones esos los tuvimos que dejar y así estuvimos por un tiempo mientras mi mamá seguía con sus planes de irse.

"Que pienso yo sobre eso ahora que ya soy adulta y madre conociendo el amor de Cristo…Es triste no poder tener a mis padres juntos, Es triste no poder recibir el calor del hogar, la seguridad que necesitábamos yo y mi hermana. Siempre hubo un resentimiento con la vida…Con Dios…Pero ahora sé que hay decisiones que van a afectar aquellos que amas, consecuencias que van a surgir a través de aquellas acciones que tomamos y que afectaran a las personas más cercanas a