Professional Documents
Culture Documents
C A P Í T U L
1O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 11
3. 1. 3. El SAC 18
3. 2. La Comisión Europea 19
3. 2. 1. El Comité de Contacto 19
4. 3. Valor razonable 22
4. 3. 1. Ámbito de aplicación 22
4. 4. Grupos financieros 26
4. 4. 1. Definición legal de la existencia de grupo 26
4. 4. 2. La obligación de consolidar 28
5. Bibliografía 35
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 11
C A P Í T U L
1
O
Contabilidad La oportunidad de su
implantación en España
1. Introducción
Desde hace algún tiempo se vienen sucediendo noticias en los medios especializados de nuestro
país sobre la futura aplicación obligatoria en la Unión Europea –y por tanto en España– de determi-
nadas normas de contabilidad para homogeneizar la información contenida en las cuentas de las so-
ciedades. Aunque se ha hablado mucho, se ha escrito mucho y también se ha polemizado mucho
sobre el alcance de este tema, aún no estamos seguros de que se haya entendido en toda su dimen-
sión por quienes son los llamados a utilizarlas en el futuro como actores o como simples usuarios.
Qué son, qué representan, qué papel habrán de jugar en el futuro y cuándo tendremos que aplicar-
11 ❚ CAPÍTULO 1
las en nuestras contabilidades entendemos que requiere un mayor esfuerzo de acercamiento y difu-
sión y, si se nos permite, vulgarización de lo que establecen dichas normas hasta que los actores so-
ciales lleguen a adquirir un conocimiento suficiente sobre ellas.
En este trabajo, primero de una serie destinada a contribuir al conocimiento de las normas, quere-
mos abordar tres temas de carácter general como preámbulo del resto en los que diferentes autores
las analizarán con mayor detenimiento. Dichos temas son los siguientes:
• Las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF).
• El proceso de formulación de las NIIF.
• El proceso legal de implantación de las NIIF en España.
En cuanto a su contenido, son simplemente unas normas que establecen reglas de valora-
ción y presentación contable, aunque hay que reconocer que el indicar “simplemente” es
muy arriesgado, dados los cambios que incorporan y, sobre todo, su orientación encaminada
a proporcionar la mejor información que puedan necesitar los inversores financieros. Ade-
más, tienen el propósito de contribuir a la armonización internacional y sectorial de los datos
contables, de manera que sean útiles para su comparación entre entidades distintas situadas
en países diferentes. Por ello, la adopción de las NIIF significará un cambio importante en la
filosofía a que estamos acostumbrados, ya que actualmente, tal como se deduce de nuestras
normas, la finalidad de la contabilidad es proporcionar la información contable que necesiten
los usuarios en general, pero sin precisar una categoría específica de ellos. Una vez adopta-
das las NIIF, dicha información se sesgará a favor de las necesidades de los inversores finan-
12 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
cieros, quedando los otros usuarios (principalmente los administradores de la entidad y em-
pleados) relegados a un segundo plano, por entender que los datos que necesitan los podrán
obtener con mayor precisión y comodidad acudiendo a otras fuentes. Es decir, que las NIIF
están orientadas a servir al inversor financiero, desatendiendo otros aspectos, tales como la
protección de acreedores, la distribución del resultado o la fiscalidad.
Lógicamente, como tales normas contables, las NIIF son similares a cualesquiera otras de las
actualmente existentes: americanas, inglesas, las que se derivan de las Directivas Comunita-
rias, las de nuestro Plan General de Contabilidad, etcétera, u otras que se pudieran instru-
mentar en el futuro. Lo que realmente las distingue de las normas citadas es su mayor ampli-
tud y desarrollo, traducido en una gran precisión y minuciosidad –a veces excesiva–; su
orientación hacia el tratamiento armonizado de toda clase de transacción que se produzca en
el mundo de los negocios con independencia de su localización geográfica y, finalmente, su
orientación prioritaria hacia los inversores financieros. Pero en definitiva, estas normas, u
otras de similar desarrollo, lo que tratan es de valorar y reflejar en los estados financieros las
operaciones que realizan las empresas, buscando representar lo que existe o lo que ha tenido
lugar en un espacio de tiempo.
jaron diferencias multimillonarias. Esto bien lo saben y sufren nuestras empresas que cotizan
en Estados Unidos, las cuales también tienen que “reexpresar” sus estados financieros, emi-
tidos originalmente con las normas españolas, acomodándolos a las normas norteamerica-
nas, y dando lugar igualmente a abultadas diferencias.
Cuando surgen estas diferencias derivadas de la simple aplicación de unas u otras normas
contables, la consecuencia inmediata es pensar que, de las distintas imágenes obtenidas,
una será mejor –más fiel– que las otras; es decir, que los estados financieros obtenidos de la
aplicación de unas normas contables concretas representarán mejor la realidad económica
que aplicando las demás, ya que no pueden ser igualmente eficaces todas las normas conta-
bles si dan lugar a realidades diferentes. Como es muy difícil convencer a los usuarios de que
las diferencias vienen originadas por las diferentes perspectivas de las operaciones, por las
valoraciones aplicadas y por la manera de estructurar los datos en la información emitida, al
tiempo que es extremadamente dificultoso pasar de la situación obtenida aplicando unas nor-
mas concretas a la imagen que se obtendría de haber aplicado otras diferentes, la única solu-
ción que parece razonable es conseguir que todas las entidades –con independencia del país
en que estén asentadas– representen contablemente las diferentes transacciones que pue-
dan tener lugar en cualquier espacio geográfico en el que actúen de la misma forma, las valo-
ren igual y las presenten igual en sus estados financieros. Sólo así serán plenamente compa-
rables los estados financieros formulados por empresas de distintos países y sectores, y sólo
así se conseguirá evitar que determinadas entidades tengan la tentación de derivar ciertas
operaciones de unos espacios geográficos a otros en función de la mayor o menor permisibi-
lidad en la aplicación de normas contables.
13 ❚ CAPÍTULO 1
mente locales o nacionales, tanto los inversores financieros como las entidades emisoras de
títulos requieren para efectuar racionalmente sus operaciones que la información contable
que circula por estos mercados sea uniforme y comparable, es decir, que presente datos ho-
mogéneos.
La solución a este problema ha sido desde 1995 una de las preocupaciones de la Comisión
Europea, apoyando los esfuerzos que en este sentido realizaban el IASC y el IOSCO (Interna-
cional Organization of Securities Commissions) –asociación internacional de organismos su-
pervisores de las Bolsas de valores– y que culminó con la recomendación de su utilización
para la preparación de estados financieros a utilizar en operaciones transfronterizas.
En segundo lugar, las normas contables actuales de la Unión Europea contenidas en las Di-
rectivas Comunitarias se estaban quedando obsoletas, al tiempo que su modificación, dada la
estructura de emisión de normas en la Unión Europea, es muy difícil de acometer. Teniendo
en cuenta, además, que una vez emitida una Norma Comunitaria para ser realmente aplica-
ble requiere una transposición a la legislación interna de cada país miembro de la Unión, y
que este refrendo en varias ocasiones ha tenido retrasos considerables por parte de varios
países, hizo que esta vía fuera considerada poco eficaz.
Otra razón que también se ha esgrimido ha sido la de potenciar con la adopción de las NIIF
las defensas contables ante los diversos escándalos financieros en los que nacional e interna-
cionalmente la sociedad se ha visto envuelta, casi todos ellos originados o como consecuen-
cia de un mal uso de la contabilidad. En este sentido se piensa que unas normas más rígidas
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 14
y uniformes, aplicables por todas las entidades y empresas con independencia del país en
que estén domiciliadas y del lugar geográfico donde realicen sus transacciones, impedirían
situaciones como las que nos han salpicado. Nosotros somos bastante escépticos en este as-
pecto y mucho nos tememos que simplemente con el cambio de unas normas contables por
otras no se conseguirá nada positivo, ya que las penosas situaciones producidas tienen mu-
cho más que ver con la honradez de sus actores que con unas normas contables más o me-
nos sofisticadas.
Tal como hemos indicado antes, una solución posible era estudiar y formular unas nuevas
normas contables en el seno de la Unión Europea. Esta alternativa, dada la forma en que se
produce la emisión de normas, buscando amplios consensos y con diversas implicaciones
14 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
políticas, significaría un procedimiento muy dilatado en el tiempo por lo que sería ineficaz
para resolver un problema que requiere actuación inmediata. Aunque posiblemente desde el
punto de vista teórico se conseguirían unas normas contables de la más alta calidad, y muy
próximas a la situación y necesidades específicas de las empresas europeas, su promulga-
ción se dilataría excesivamente, tornándolas en ineficaces, con lo que de esta forma nos ale-
jaríamos cada vez más del objetivo deseado de armonización mundial.
Otra solución era adoptar directamente en las empresas europeas las normas contables nor-
teamericanas. Esta alternativa, indudablemente la más rápida en el tiempo y que tuvo gran-
des defensores, también presentaba ciertos problemas, tales como su poca oportunidad polí-
tica, sus sustanciales diferencias respecto de la situación contable actual en Europa y el he-
cho de que los mayores escándalos financieros producidos hasta ese momento habían tenido
lugar o se habían apoyado en dichas normas norteamericanas. Estando en tela de juicio en el
propio Estados Unidos la bondad de sus normas contables –que están siendo objeto de una
profunda revisión–, no parecía lógico adoptarlas en Europa. Se ha entendido que una cosa
era armonizar las normas contables que deberían ser adoptadas con generalidad y otra muy
distinta un total entreguismo en esta materia.
Obviamente también existían factores negativos en dicha elección tales como los siguientes:
• Estaban emitidas por una asociación privada.
• Su carácter privado chocaba frontalmente con el hecho de que habrían de ser normas de
aplicación obligatoria en los países europeos, y en todos ellos las normas de obligado cum-
plimiento tienen un procedimiento legal de promulgación parlamentaria.
• Dentro de las NIC existían demasiadas opciones abiertas en el tratamiento contable de de-
terminadas operaciones.
• Existía demasiada minuciosidad en algunas normas, llegando a pecar de excesiva en bas-
tantes casos.
• El procedimiento de emisión de nuevas normas o de reforma de las existentes era excesi-
vamente cerrado.
Tras analizar los puntos a favor y en contra, presentes en la adopción de una u otra de las al-
ternativas anteriores, la decisión recayó finalmente en las Normas Internacionales de Contabi-
lidad, si bien fue necesario pactar varios cambios con el IASC, entidad emisora de dichas nor-
mas, tales como una mayor apertura del propio IASC, aceptación de la intervención de orga-
nismos de la Unión Europea en las tareas de emisión o reforma de normas, modificación de
varias normas vigentes cerrando varias alternativas de tratamiento consentidas, etcétera.
Finalmente las NIC, bajo la nueva denominación de NIIF, fueron reconocidas por la Unión
Europea en julio de 2002 mediante el Reglamento (CE) 1606/2002 del Parlamento Europeo y
del Consejo.
15 ❚ CAPÍTULO 1
2. 4. Su adopción, ¿ha sido buena o mala?
Es una buena pregunta que tiene difícil respuesta. Realmente, en nuestra opinión, elegir las NIC
era la alternativa más lógica de las que existían y posiblemente la única posible. Calificar ahora
de buena o mala la decisión tomada, cuando aún no han entrado en funcionamiento práctico
las normas adoptadas, además de ser bastante arriesgado, no nos conduciría a ninguna parte.
Las NIIF, como es lógico, junto con logros positivos tienen aspectos negativos, como por ejem-
plo las altas volatilidades que se introducen en los resultados al adoptar los métodos de valo-
ración propuestos para determinadas partidas. Globalmente significan un conjunto de mejoras
y de peoras respecto de la situación actual, y si bien desde nuestra apreciación personal las
cosas positivas son muchas y las negativas pocas, dichas peoras existen. Igual que entende-
mos las razones de la solución adoptada y la calidad de las normas, todo lo cual compartimos,
consideramos que hubiera sido posible, a poco que la Unión Europea hubiera insistido en ello,
haber contado con un cierto plazo de tiempo para intentar identificar y corregir todas las cosas
negativas que persisten en las NIIF. Por el contrario, el proceso de adopción significó una
aceptación integral y sin condiciones de todas las normas emitidas hasta el momento, las cua-
les quedarían sometidas exclusivamente a la corrección e interpretación del propio organismo
emisor. En este proceso del “todo o nada”, la Unión Europea se plegó aceptando el “todo”.
Prueba de lo que decimos respecto de un mayor reposo en la adopción de las normas la tene-
mos en el largo proceso de adopción de las NIC 32 y 39 todavía no concluido.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 16
Pero esta adopción sin condiciones también ha tenido voces discrepantes, entre las que cita-
mos, por ser la más notoria y conocida, la carta dirigida por Jacques Chirac a Romano Prodi el 4
de julio de 2003, en la que le manifestaba sus temores acerca de que posiblemente no era la
mejor solución la que se había aceptado globalmente, y pidiendo un periodo de reflexión sobre
la conveniencia de aplicar dichas normas a las empresas europeas. La carta termina con una
frase escrita a mano indicando que “este asunto es muy importante para la economía europea”.
Inicialmente es muy posible que se presenten discrepancias con nuestra legislación mercan-
til que habrá que ir solucionando paulatinamente. También es posible que en el momento de
su arranque se produzcan problemas y despistes por parte de las empresas que tienen que
16 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
aplicar las normas, pero, tal como ha sucedido en el pasado ante cambios de parecida o ma-
yor envergadura, estos incidentes tendrán pronta solución. Además, como la aplicación ini-
cialmente sólo afectará a las sociedades que deban participar en un proceso de consolida-
ción, el resto de las entidades que en un futuro más o menos lejano tengan que aplicarlas,
aprovecharán para adquirir experiencia en cabeza ajena. Pero también tendrán que adquirir
conocimiento de las NIIF y experiencia en su aplicación un amplio catálogo de usuarios,
como son el propio Estado y demás entidades públicas, los auditores, analistas, asesores,
consultores, gestores de riesgos, etcétera. que habrán de conocerlas para efectuar su propio
trabajo, y también los docentes, que tendrán que darlas a conocer con la mayor eficacia a las
generaciones futuras, que serán en definitiva las que las aplicarán de forma completa.
FUNDACIÓN IASC
➔ Nombramientos
de miembros
➔
➔
➔ Asesoramientos
➔ IASB Consejo de Normas
➔
➔
Internacionales de Contabilidad
➔
SAC IFRIC/CINIIF
Consejo Asesor de Normas Comité Interpretación NIFF
17 ❚ CAPÍTULO 1
Foundation
En la cúpula del grupo, y manteniendo los más amplios poderes respecto de su estructura,
actividad y funcionamiento figura la International Accounting Standards Committee Foun-
dation, que tiene como responsabilidades fundamentales las de nombrar los miembros del
IASB y de los diferentes consejos y comités, supervisar las actuaciones del conjunto de la
organización y buscar la financiación necesaria, la cual, con independencia de los ingresos
producidos por las publicaciones, procede de aportaciones realizadas por firmas de la pro-
fesión contable, instituciones financieras privadas, compañías industriales de todo el
mundo, bancos centrales y de desarrollo y organizaciones profesionales e internacionales.
Norteamericanos 6 Contables 5
Europeos 6 Organismos internacionales 1
Asiáticos 4 Usuarios 1
De otras áreas 3 Académicos 1
Total 19 Nominación electoral 11
Total 19
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 18
Lo cual, por países, produce un claro predominio de anglosajones que, a su vez, son
quienes tienen en su mano el nombramiento de los administradores de nominación
electoral. Por procedencia profesional, el predominio es de contables.
De forma resumida, los objetivos que tiene este órgano son los siguientes:
18 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Sus 14 miembros, que son nombrados en su totalidad por la Fundación IASC, se resu-
men en el siguiente esquema:
3. 1. 3. El SAC
El Consejo Asesor de Normas (SAC), que se compone de unos 50 miembros de varios
países y profesiones todos ellos nombrados por los administradores de la Fundación
IASC, tiene los siguientes objetivos:
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 19
Este Consejo deberá ser consultado por el IASB en los principales proyectos y sus reu-
niones están abiertas al público.
• Preparar las interpretaciones de las NIIF que habrán de ser aprobadas por el IASB.
• Ayudar al IASB a obtener la convergencia internacional de las normas contables.
19 ❚ CAPÍTULO 1
• Ayudar al establecimiento y mejora de las NIIF en beneficio de formuladores, audito-
res y usuarios de la información financiera.
• Suministrar directrices sobre problemas detectados que no estén específicamente tra-
tados en las NIIF, o sobre puntos tratados o que parezca probable su desarrollo con in-
terpretaciones poco satisfactorias o contradictorias.
• Promover la aplicación rigurosa y uniforme de las NIIF.
3. 2. La Comisión Europea
Derivado del artículo 4 del Tratado de Roma, diferentes órganos de la Unión Europea, como
es el caso del Consejo Europeo, están dotados de un cierto poder normativo para emitir nor-
mas tales como Reglamentos, Directivas y Decisiones, y aunque la facultad legislativa radica
básicamente en el Consejo, éste normalmente actúa a iniciativa de la Comisión Europea.
3. 2. 1. El Comité de Contacto
Este organismo, que fue creado por la cuarta directiva, tenía el objetivo de facilitar su
aplicación, detectando los problemas surgidos en su funcionamiento y aconsejando a la
Comisión, si ello fuera pertinente, los cambios, complementos o enmiendas a dicha di-
rectiva que considerara necesarios.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 20
Está integrado por representantes de todos los estados miembros y de la propia Comi-
sión Europea a la que corresponde su presidencia. Su convocatoria la realiza su presi-
dente por propia iniciativa o a petición de un estado miembro. La representación espa-
ñola en este Comité corresponde al Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas.
cha Comisión una opinión acerca de adoptar –o no adoptar– las normas de contabilidad
aprobadas por el AISB, considerando fundamentalmente que favorezcan el “interés pú-
blico europeo”. Para ello, la Comisión comunica periódicamente al ARC el estado de los
diferentes proyectos en marcha por parte del IASB, junto con la documentación emitida
sobre los mismos, a fin de estudiar y formar opinión para poder aconsejar la adopción o
rechazo de las normas emitidas, siendo de resaltar que, como este organismo no tiene
capacidad para modificar ninguna NIIF, no tiene otra opción.
Desde entonces, varias han sido las normas aprobadas por la Unión Europea en materia con-
table, las cuales en su conjunto constituyen el núcleo del derecho contable europeo:
• Directiva 2001/65/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de diciembre de 2001
sobre el valor razonable, modificando las anteriores Directivas 78/660/CEE y 83/349/CEE
en lo referente a normas de valoración aplicables a las cuentas anuales y consolidadas, in-
troduciendo dicha modalidad de valoración, ya que es el empleado en varias NIIF en su
aplicación a diversos elementos patrimoniales.
• Reglamento (CE) de aplicación de las NIIF, identificado con el número 1606/2002 del Par-
lamento Europeo y del Consejo de 19 de julio de 2002. Este Reglamento, que es de aplica-
ción directa a los sujetos a los que va dirigido, establece en líneas generales:
21 ❚ CAPÍTULO 1
– La obligación de aplicar las NIIF en la formulación de las cuentas anuales consolidadas
de las sociedades cuyos valores hayan sido admitidos a cotización en un mercado regu-
lado de cualquier Estado miembro.
– La opción, concedida a los Estados miembros, de obligar a que las sociedades apliquen
las NIIF en la formulación de sus cuentas individuales o de cuentas consolidadas de gru-
pos que no coticen.
La fecha de entrada en vigor prevista se estableció para los ejercicios que comenzaran a
partir del 1 de enero de 2005, si bien los Estados miembros podían demorar hasta el 1 de
enero de 2007 la obligación de aplicar las NIIF para:
– Grupos que sólo tuvieran admitidos a cotización en un mercado organizado títulos de
renta fija.
– Grupos con títulos admitidos exclusivamente en un mercado organizado situado en un
país ajeno a la Unión Europea.
• Directiva 2003/51/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 18 de junio de 2003, modi-
ficando las Directivas 78/660/CEE y 83/349/CEE sobre cuentas anuales y cuentas consoli-
dadas de determinadas sociedades, actualizando su estructura y contenido para permitir
su comparabilidad con las NIIF.
• Reglamento (CE) número 1725/2003 de la Comisión de 29 de septiembre de 2003 (Diario
Oficial de la Unión Europea de 13 de octubre de 2003) por el que se adoptan determinadas
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 22
Para que una NIIF o modificación a una NIFF sea aplicable tendrá que haber sido aprobada
por la Comisión Europea y publicarse en el Diario Oficial de las Comunidades Europeas (DO-
CE) como Reglamento.
El desarrollo del Reglamento de la Comisión Europea 1606/2002 antes citado, para facilitar la
introducción legal de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) en nuestro
país, tuvo lugar mediante la Ley 62/2003, de 30 de diciembre, de Medidas Fiscales, Administra-
tivas y del Orden Social (BOE del 31 de diciembre de 2003), dentro de su Sección 5ª: Contabili-
dad y auditoría de cuentas. En esta sección, junto con nuevas disposiciones de carácter sustan-
tivo, se reforman varios artículos de nuestro Código de Comercio y de nuestra Ley de Socieda-
des Anónimas para introducir lo dispuesto en el citado Reglamento comunitario. Entre estas
nuevas disposiciones y modificaciones, aparte de normas sobre lo que ha venido en denomi-
narse “contabilidad simplificada” y que no comentaremos, se regulan varios aspectos que afec-
tan directamente a este trabajo y cuyo análisis lo agruparemos bajo los siguientes conceptos:
• Valor razonable.
• Grupos financieros.
• Introducción de las NIIF.
• Entrada en vigor.
4. 3. Valor razonable
La consolidación en nuestro país está regulada por el artículo 46 del Código de Comercio en
el que se establecen las reglas de valoración aplicables. Dado que el concepto de “valor razo-
nable” no estaba contemplado en nuestras leyes, se añade la Regla 9ª, estableciendo su apli-
cabilidad como regla de consolidación.
4. 3. 1. Ámbito de aplicación
En primer lugar, la aplicación del “valor razonable” sólo alcanzará a las sociedades que
intervengan en un proceso de consolidación, y no al resto de las sociedades, que, al no
estar sometidas a procesos de consolidación, no le es aplicable el citado artículo 48 del
Código de Comercio.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 23
23 ❚ CAPÍTULO 1
• Contratos en los que se prevea una contrapartida eventual en la adquisición de em-
presas, motivada por ajustes de la contraprestación por sucesos futuros.
• Otros instrumentos financieros que, por sus especiales características, contablemente
se consideren elementos patrimoniales distintos a los demás instrumentos financieros.
APLICACIÓN DEL
NO APLICACIÓN DEL VALOR RAZONABLE
VALOR RAZONABLE
ACTIVOS Instrumentos no derivados mantenidos hasta su venci-
miento.
De la cartera
de negociación. Préstamos y partidas a cobrar no mantenidos para su
negociación.
Disponibles
para su venta. Participaciones en sociedades del grupo.
Derivados financieros. Títulos propios de capital.
Contratos con contrapartida eventual en la adquisición
PASIVOS de empresas por ajustes de la contraprestación por su-
cesos futuros.
De la cartera
de negociación. Instrumentos financieros que se consideren elementos
patrimoniales distintos a los demás instrumentos fi-
Derivados financieros. nancieros.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 24
En definitiva, que el valor razonable se aplicará única y exclusivamente a todos los deri-
vados financieros y títulos de la cartera de negociación –sean activos o pasivos–, así
como a los activos financieros disponibles para su venta.
Finalmente indicar que la aplicación del valor razonable solamente a los activos y pasi-
vos financieros antes citados impide que pueda ser utilizado en la valoración de otros
elementos patrimoniales, como por ejemplo propiedades de inversión, cuya valoración
por este método se contempla en la NIC 40.
mente dentro de un mercado con estas características como cuando –como es el caso
de determinados derivados financieros– tengan dicha característica de cotización
transparente los subyacentes de los mismos, aunque el derivado en sí no esté nego-
ciado. Así un futuro “fuera de mercado” sobre unas acciones cotizadas se podría valo-
rar tomando el valor de cotización de dichas acciones que son el activo subyacente del
futuro contratado.
Parece claro, por tanto, que la intención del legislador es que el valor razonable se tome
para aquellos instrumentos financieros para los que sea posible obtener un valor con
unas ciertas garantías de objetividad y, por lo tanto, ajeno a manipulaciones.
Como vemos, el criterio general es que las variaciones a que dé lugar el cálculo del valor
razonable se registren en la cuenta de pérdidas y ganancias, lo cual parece lógico. Pero,
¿en qué cuenta de pérdidas y ganancias?, en la correspondiente a las cuentas individua-
les de cada sociedad o en la cuenta de pérdidas y ganancias de la consolidación. Igual-
mente, tal como se indica en el propio artículo reformado, pueden existir supuestos en
los que la variación del valor razonable se deba incluir dentro de los fondos propios en
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 25
una reserva por valor razonable, lo que requerirá establecer con claridad cuáles serán
dichos casos.
En todo caso, el criterio de cómo y dónde se reconocen las diferencias a que dé lugar la
aplicación del “valor razonable” dependerá de la opción que se tome respecto del registro
contable del mismo, todo lo cual deberá ser aclarado vía reglamentaria. De este modo, la
aplicación efectiva del “valor razonable” queda postergada a un próximo Reglamento que
recoja estos importantes aspectos, el cual ya tiene un plazo perentorio de formulación da-
das las fechas en que deberán aplicarse las reglas de consolidación reformadas.
25 ❚ CAPÍTULO 1
ciedades Anónimas, estableciendo los datos que deben figurar respecto de los instru-
mentos financieros. En dicha indicación se prevé que, en la memoria y para cada clase
de derivados financieros, se indicará:
• Su valor razonable cuando pueda determinarse mediante alguno de los métodos antes
comentados y cuya aplicación requiere desarrollo reglamentario.
• Información sobre su alcance y naturaleza.
Finalmente, para limitar los efectos del reformado artículo 200 del Texto Refundido de la
Ley de Sociedades Anónimas, también se modifica la redacción del 201, estableciendo
que la información sobre derivados financieros a consignar en la memoria podrá omitirse
cuando la entidad emisora de los datos la publique en forma abreviada.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 26
En su versión actual, el informe de gestión deberá informar sobre los puntos siguientes:
• Una exposición fiel sobre la evolución de los negocios y situación de la sociedad, des-
cribiendo los principales riesgos e incertidumbres a los que se enfrenta.
• Análisis equilibrado y “exhaustivo” de la evolución y resultados de los negocios y la si-
tuación de la sociedad, teniendo en cuenta la magnitud y complejidad de la misma.
Como simple comentario entendemos que el término “exhaustivo” implica un “juicio
de valor” que, la mayoría de las veces, no podrá precisarse.
26 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
• Cuando sea necesario para entender mejor su evolución, resultados o situación social
se incluirán indicadores clave de resultados financieros y no financieros que sean per-
tinentes sobre la actividad empresarial concreta.
• Información sobre cuestiones medioambientales y sobre el personal.
• Referencias y explicaciones complementarias que se consideren procedentes sobre
los importes detallados en las cuentas anuales.
• Sobre la utilización de instrumentos financieros cuando sea relevante para valorar sus
activos, pasivos, situación financiera y resultados se incluirán:
– La exposición de la sociedad a los riesgos financieros: precio, crédito, liquidez y flujo
de caja.
– Los objetivos y políticas de gestión del riesgo financiero, indicando la política aplicada
para cubrir cada tipo significativo de riesgo utilizando la contabilidad de cobertura.
Como puede verse se amplía bastante su contenido, que deberá proporcionar informa-
ción financiera y no financiera sobre la marcha y estado presente de la sociedad, si bien
se prevé que queden exceptuadas de facilitar información no financiera las sociedades
que puedan presentar su cuenta de pérdidas y ganancias de forma abreviada.
4. 4. Grupos financieros
Con la modificación de los apartados 1 y 2 del artículo 42 del Código de Comercio se amplía y
precisa la existencia de los grupos de sociedades, así como la obligación de consolidar.
cuando varias sociedades constituyan una unidad de decisión”. Por lo tanto, será la
constatación del hecho de que existe una unidad de decisión materializada, por ejem-
plo, en una dirección común, la que determine en todo caso su existencia, lo cual,
desde nuestro punto de vista, es muy importante, ya que de acuerdo con nuestra legis-
lación no será necesario que una sociedad tenga que ser socio de otra para que exista
un grupo.
27 ❚ CAPÍTULO 1
Como vemos, en las presunciones anteriores se requieren dos condiciones: primera, te-
ner una sociedad la condición de socia de otra y, segunda, estar incurso en uno de los
supuestos citados. Además, para contemplar en toda su integridad la existencia de una
“unidad de decisión”, el legislador establece que, a los derechos de voto de la domi-
nante, se añadan los que posea a través de otras sociedades dependientes, de personas
interpuestas, o aquellos de los que disponga en virtud de contrato con otras personas.
Siendo la nota más importante para identificar un grupo la existencia de una dirección
común respecto de varias sociedades, y no los vínculos de propiedad que pudieran lle-
gar a no existir, produce la consecuencia inmediata de que ahora se tengan que tipificar
como grupos conjuntos de sociedades que antes no lo eran legalmente, por ejemplo
conglomerados de empresas familiares o personales en los que una persona o grupo de
personas constituye la unidad de decisión común. También pasan a tener esta conside-
ración los conjuntos de sociedades cuya propiedad o facultad de decisión esté asumida
por una entidad de derecho público, fundación, asociación, etcétera, es decir, que exis-
tirá grupo aunque la cabecera del mismo, o la entidad dominante de su cúpula, no sea
una entidad mercantil.
4. 4. 2. La obligación de consolidar
En general, toda sociedad dominante de un grupo de sociedades estará obligada a for-
mular cuentas anuales consolidadas, incluyendo el informe de gestión consolidado. La
novedad más importante que vemos en este punto es que con la reforma realizada se
elimina la laguna existente hasta ahora acerca de la identificación concreta de la socie-
28 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
dad que debía consolidar. Estos supuestos, que en ocasiones presentaban bastantes
problemas, sobre todo en los casos denominados como “consolidaciones sin matriz con-
solidable”, quedan resueltos al recaer la obligación de consolidar en la sociedad que
presente mayor activo en la fecha de primera consolidación.
Además, como es lógico, todos los nuevos grupos surgidos en función de la nueva defi-
nición legal también quedarán sujetos al cumplimiento de las obligaciones derivadas de
ello, debiendo formular sus cuentas anuales consolidadas y memorias de gestión conso-
lidadas una vez entren en vigor las modificaciones legales que comentamos.
29 ❚ CAPÍTULO 1
los grupos que mantuvieran en su seno sociedades con alguna de las anteriores circuns-
tancias tendrán que incluirlas en sus cuentas consolidadas a partir de la entrada en vi-
gor de las modificaciones a la ley que estamos comentando.
Es decir, que la información que se pide es prácticamente la misma para todos los instru-
30 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
mentos financieros derivados, se hayan valorado o no, tomando sus valores razonables.
La valoración de unos y otros instrumentos se resume en el cuadro siguiente:
Como además se establece distinción según que los títulos emitidos admitidos a negociación
sean de renta variable (acciones), o de renta fija (representativos de deuda), en realidad se
plantean cuatro supuestos que son los que iremos analizando a continuación:
• Sociedades que tienen que adoptar de forma ineludible las NIIF.
31 ❚ CAPÍTULO 1
• Sociedades que pueden demorar la aplicación de las NIIF.
• Sociedades que, formando parte de un grupo, decidan voluntariamente aplicar las NIIF sin
tener obligación de hacerlo.
• Sociedades que, sin formar parte de un grupo, quieran voluntariamente aplicar las NIIF.
Las diversas situaciones que se pueden presentar y que desarrollaremos a continuación son
las que resumimos en el cuadro siguiente.
Obligación de consolidar SÍ SÍ SÍ NO
4. 5. 1. Alcance de la obligación
Debe quedar sentado que la obligación de adoptar las Normas Internacionales de Informa-
ción Financiera NIIF se refiere exclusivamente a las cuentas anuales consolidadas y al in-
forme de gestión consolidado que correspondan a ejercicios iniciados a partir del 1 de
enero de 2005 de sociedades que, de acuerdo con lo previsto en la sección tercera del tí-
tulo III del libro primero del Código de Comercio, se encuentren obligadas a su formulación.
En consecuencia, las cuentas anuales individuales de cada una de las sociedades que
participen en la consolidación se deberán presentar de acuerdo con las normas que se
derivan de nuestra actual legislación mercantil, es decir, sin incorporar lo previsto para la
presentación de las cuentas anuales consolidadas.
Afecta a todas las sociedades que, teniendo la obligación de consolidar de acuerdo con
nuestra legislación, se encuentren incluidas dentro de un grupo en el que, a la fecha de
cierre del ejercicio, alguna de las sociedades componentes del mismo haya emitido valo-
res de renta variable que se encuentren admitidos a cotización en un mercado regulado
de cualquier Estado miembro de la Unión Europea.
Como todos estos grupos tienen la obligación de presentar sus cuentas consolidadas
para los ejercicios iniciados a partir del 1 de enero de 2005 aplicando normas interna-
cionales de contabilidad aprobadas por los Reglamentos de la Comisión Europea, todas
las sociedades que componen dichos grupos deberán adoptar las normas indicadas a
partir de la citada fecha, pero como en su momento se habrán de presentar cuentas
comparativas, la obligación real de aplicar las NIIF ya ha comenzado en realidad el 1 de
enero pasado.
Como podemos ver, se contempla el supuesto de que si alguna sociedad, por la causa
que fuere y de forma voluntaria, hubiera decidido aplicar las NIIF en un ejercicio anterior
a aquél en que su adopción llegue a ser obligatoria, deberá seguir aplicando dichas nor-
mas sin posibilidad de volver atrás.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 33
A la excepción anterior que demora la adopción de las NIIF no se podrán acoger las entida-
des de crédito, dado que, en su caso, tendrán que adoptarlas desde el momento inicial.
Ahora bien, si el grupo optara por la aplicación de las NIIF, las cuentas anuales consoli-
dadas se deberán elaborar de forma continuada de acuerdo con las citadas normas, es
decir, que la opción voluntariamente adoptada en el inicio se deberá mantener en el fu-
turo sin que sea posible regresar a la situación anterior.
33 ❚ CAPÍTULO 1
quieran voluntariamente aplicar las NIIF
Es un supuesto que legalmente no se prevé, por lo que entendemos que no podrá ha-
cerse. Estimamos que una sociedad que no tenga la obligación de aportar sus cuentas a
una consolidación no podrá adoptar en su contabilidad las Normas Internacionales de
Información Financiera (NIIF). En definitiva, la generalidad de las sociedades –con títu-
los admitidos a cotización o no–, si no forman parte de un grupo de sociedades, no po-
drán adoptar dentro de sus contabilidades las Normas Internacionales de Información
Financiera (NNIF).
Esta disposición establece que cualquier sociedad con valores admitidos a cotización en
cualquier Estado miembro de la Unión Europea, que cumpla las condiciones estableci-
das en el punto 13 del artículo 1 de la Directiva 93/22/CEE, de 10 de mayo de 1993, re-
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 34
lativa a los servicios de inversión en el ámbito de los valores negociables, y que sólo
tenga la obligación de formular cuentas anuales individuales, tendrá que informar en su
memoria acerca de las principales variaciones que se originarían en los fondos propios y
en la cuenta de pérdidas y ganancias si hubiera aplicado las NIIF en su formulación.
En estos casos, las sociedades afectadas, que podrán presentar sus cuentas anuales de
forma individual aplicando las normas contables actualmente vigentes, tendrán adicio-
nalmente que realizar un cálculo consistente en determinar las variaciones que se pro-
ducirían en sus patrimonios y en sus resultados si realmente se hubieran aplicado las
NIIF en lugar de las normas españolas. Lo cual se aproxima en gran medida a que tam-
bién estas sociedades tendrán que adoptar las citadas Normas Internacionales.
Como puede apreciarse en todo caso, lo previsto para todas ellas es que su aplicación sea
obligatoria para los ejercicios sociales iniciados a partir del 1 de enero de 2005.
Las NIIF a aplicar son las vigentes a 14 de septiembre de 2003, que han sido publicadas en
el Diario Oficial de 13 de octubre de 2003, y que incluye las NIC y las SIC, más la NIIF 1,
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 35
Adopción por primera vez de las Normas Internacionales de Información Financiera, publi-
cada en el Diario Oficial de 17 de abril de 2004.
Como las normas hasta ahora publicadas no incluyen las NIC 32 y 39, se crea un cierto vacío
en su aplicación inicial, ya que no son de obligada aplicación. Tampoco son aplicables las di-
ferentes NIIF que circulan como aprobadas por la IASB, ni las diversas modificaciones a NIC
anteriores, también publicadas por la IASB, en tanto no sean aprobadas y publicadas en el
Diario Oficial de la Unión Europea.
En lo que respecta a la adopción del valor razonable, según lo previsto en la Ley de Acompaña-
miento de los presupuestos, será obligatoria a partir del 1 de enero de 2005, si bien dicha fe-
cha deberá tomarse como orientativa, ya que falta por publicarse su reglamento de aplicación.
5. Bibliografía
Committee of European Securities Regulators (2003): Draft Standard nº 2 on financial information of en-
forcement activities. (www.europe.fesco.org).
European Financial Reporting Advisory Group (2003): Proposal for the enhancement of the role and pro-
cess of EFRAG. EFRAG, diciembre 2003. (www.efreag.org).
Giner Inchausti, B. (1998): “Los nuevos retos de la armonización contable en Europa: la armonización
contable internacional”, Partida Doble.
• (1999): “La uniformidad de las Normas Contables: liderazgo mundial en materia contable”. Partida
35 ❚ CAPÍTULO 1
Doble.
• (2003): “Algunas claves sobre la contabilidad europea: el nuevo proceso regulador y las nuevas nor-
mas”. Estabilidad Financiera, nº 5.
• (2004): La nueva estrategia contable: de las directivas al reglamento. Dentro de la obra colectiva de Mo-
nografías sobre las Normas Internacionales de Información Financiera. Biblioteca Expansión, tomo I.
Iglesias, C. (2004): Los organismos implicados en la normalización. Dentro de la obra colectiva de Mono-
grafías sobre las Normas Internacionales de Información Financiera. Biblioteca Expansión, tomo I.
Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) (2000): Informe provisional sobre el análisis
comparativo de la normativa contable general española con las normas del IASC (NIC). BOICAC, nº 41.
International Accounting Standards Board (2001): Normas Internacionales de Contabilidad 2001. CISS
PRAXIS, 2002.
• (2003): Normas Internacionales de Contabilidad 2003. CISS PRAXIS, 2004.
Van Hulle, K. (1997): La armonización contable europea. Una nueva estrategia de cara a la armoniza-
ción internacional. Dentro del libro homenaje a don Carlos Cubillo Valverde. ICAC, Madrid, 1997.
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 36
FASCiCULO 01 ok 15/9/04 13:52 Página 37
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 37
C A P Í T U
2
L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Las empresas españolas caminan hacia una mayor
comparabilidad internacional de su información financiera 39
1. 1. Necesidad de establecer criterios que faciliten la comparabilidad
internacional de la información financiera 39
1. 2. Las empresas españolas avanzan en la aplicación
de las normas internacionales de contabilidad 40
1. 3. Las empresas españolas desean cotizar
en las Bolsas estadounidenses 42
C A P Í T U
2
L O
39 ❚ CAPÍTULO 2
financiera
En el mundo de los negocios, las normas y las reglas contables aparecen, en muchas ocasio-
nes, impuestas o sugeridas por los reguladores, y son las empresas las que deben aprender a
manejarlas y a aplicarlas a su entorno específico. Las empresas españolas tienen que hacer
frente, en un futuro inmediato, a un cambio importante en la forma de elaborar y presentar su
información financiera. Las novedades provienen del Reglamento Europeo 1606/2002, que
impone la estrategia que, de forma definitiva, servirá para armonizar la información financiera
en la Unión Europea. Las normas emitidas por el IASB (International Accounting Standards
Board) serán la base para la elaboración de los estados contables consolidados de las empre-
sas europeas cotizadas en el año 2005, como fecha más tardía.
Todas estas modificaciones vienen motivadas como consecuencia de las diferencias existen-
tes entre las normas contables de los distintos países, las cuales dificultan la comparabilidad
de la información publicada por las empresas de dichos países. Dada la globalización de la
economía y ante la ausencia de normas de contabilidad aceptadas con generalidad en el ám-
bito internacional, en muchas ocasiones los usuarios tienen que incurrir en costes muy eleva-
dos para poder interpretar la información financiera de aquellas empresas que utilizan crite-
rios contables diferentes a los seguidos por ella.
Este problema persiste también en el caso de querer analizar la situación de una misma em-
presa, ya que las diferencias existentes en las normas contables de los distintos países hacen
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 40
que las cifras contables muestren unos sesgos difíciles de interpretar por gran parte de los
usuarios de los estados financieros. Sirvan como ejemplo los datos ofrecidos por la empresa
alemana Daimler Benz cuando empezó a cotizar en la Bolsa de Nueva York (NYSE) hace
aproximadamente 10 años. Dicho año, Daimler Benz pasó de presentar una cuenta de resul-
tados con beneficios a situarse en la zona de pérdidas al aplicar los principios contables esta-
dounidenses.
Ahora bien, la nueva situación que se genera en Europa es de una gran trascendencia ya que
las casi 7.000 empresas europeas que cotizan en los mercados de capitales tendrán las NIIF
como referencia normativa obligatoria. En un plazo temporal más o menos dilatado, estas exi-
gencias se extenderán también a otras muchas empresas no cotizadas, en función de lo que
en su momento establezcan las propias regulaciones nacionales, que tendrán que adaptar,
como en el caso de España, sus disposiciones legales a las nuevas exigencias establecidas.
una armonización de carácter mundial. En los momentos actuales, la primera etapa aparece
mejor definida, de hecho sobre ella ya se ha definido la estrategia que se va a seguir, mientras
que la segunda se presenta con un menor nivel de desarrollo pero existen compromisos y
ciertas actuaciones que se están llevando a cabo y que hacen prever un resultado exitoso.
La estrategia europea diseña un sistema de normas contables de modo que las cuentas de las
empresas de la Unión Europea sean más transparentes y puedan compararse de forma más fá-
cil. Ello supone que las empresas europeas tienen ante sí un cambio importante que supone
mucho más que aplicar criterios contables diferentes de los utilizados hasta ahora. La utilización
de las normas internacionales permitirá a las empresas europeas competir por el mercado glo-
bal de recursos financieros en condiciones de igualdad, minorando su coste de capital pero te-
niendo que hacer frente a una mayor transparencia informativa.
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 41
Una de las primeras cuestiones que hay que resaltar es el hecho de que el modelo del IASB
deja, en la actualidad, posibilidades a la opcionalidad contable, lo que supone que, a pesar del
deseo de ir reduciendo paulatinamente las alternativas contables, éstas persisten a fecha de
hoy. Como ejemplo podemos citar el tratamiento contable que las NIC/NIIF dan a las subven-
ciones oficiales, ya que se permite que se contabilicen como ingresos diferidos o como reduc-
ción del valor de los activos que financia. Las empresas españolas deben aprender a convivir
con la flexibilidad inherente al modelo contable del IASB en cuanto a la aplicación de distintas
soluciones contables alternativas, que conducirán, inevitablemente, a ofrecer distintos valores
en los elementos que expresan su situación económica y financiera. Y además, algunas NIIF
que regulan aspectos críticos, como los instrumentos financieros o las retribuciones a emplea-
dos, plantean evidentes dificultades de interpretación e implantación práctica, teniendo ade-
más tras ellos la siempre polémica valoración según el criterio del valor razonable.
Estamos por tanto ante una cuestión de relevancia histórica que tendrá consecuencias econó-
micas tales como la amplificación de la volatilidad de los resultados empresariales y su posible
efecto en los precios bursátiles. España tiene que ir definiendo la forma en la que el modelo
del IASB va a ser introducido en nuestro país. En los momentos actuales se desconocen mu-
chos detalles de la reforma contable, pero sí que existen algunas cuestiones que han ido de-
finiéndose estos últimos años. En marzo de 2001 se creó por parte del Ministerio de Econo-
mía una Comisión de Expertos encargada de elaborar el Libro Blanco para la Reforma de la
Contabilidad en España. En verano de 2002 se publicó el resultado de dicho trabajo, en el
que se recogían una serie de recomendaciones para hacer frente a los requerimientos conta-
bles de la Unión Europea y la aproximación al modelo contable del IASB.
De la próxima Reforma Contable en España se pueden dibujar algunas líneas que giran alre-
dedor de la idea de que el cambio debe hacerse poco a poco. Los cambios de la normativa
41 ❚ CAPÍTULO 2
contable, del PGC y de las normas de consolidación se harán para poner en marcha un
nuevo modelo contable español adaptado al internacional. Se pretende reducir las obligacio-
nes contables de las pymes (empresas pequeñas y medianas), con el fin de que éstas pue-
dan desarrollar una contabilidad simplificada; ello supone que tengan que soportar una me-
nor carga de trabajo en materia contable. La aplicación de las normas del IASB debe afectar
en primer lugar, tal y como señala el reglamento europeo, a la información consolidada de las
empresas cotizadas a partir del 1 de enero de 2005. En el caso del resto de información y del
resto de empresas, la propuesta española es:
El proceso de adaptación del actual modelo contable español al modelo IASB va a tener im-
portantes consecuencias en las empresas españolas ya que las cifras contables más repre-
sentativas del mundo de los negocios (fondos propios y resultados) pueden sufrir importantes
alteraciones.
La empresa española Amadeus Global Travel Distribution SA presenta los siguientes datos conta-
bles en el ejercicio 2002 (en miles de euros):
Una de las primeras cuestiones que surgen al analizar ambas normas es la propia posibilidad
de contemplar que existan distintos tratamientos contables para una práctica contable especí-
fica. Las NIC/NIIF plantean, actualmente, más posibilidades de elección que las planteadas
por los USGAAP, ya que las normas del IASB se caracterizan por estar basadas en criterios sin
desarrollar en muchas ocasiones, toda la casuística que puede darse en el mundo de los nego-
cios y sin contemplar un detalle muy exhaustivo de los distintos conceptos y prácticas conta-
bles. Es decir, las normas del IASB se basan en criterios flexibles en cuanto a la aplicación de
los principios contables, lo que puede dar lugar a que, en ocasiones, no contemplen un trata-
miento contable específico. En tal caso, las empresas pueden recurrir al establecido en su país
de origen siempre y cuando sea consistente con lo definido en el marco conceptual del IASB.
Por su parte, las normas del FASB son mucho más específicas y detalladas, recogiendo un
tratamiento de los distintos conceptos y prácticas contables muy precisas, existiendo pocas
posibilidades de elección contable. Por ello, al estar basados los USGAAP en reglas más es-
pecíficas, se encuentran más orientados a su aplicación concreta.
Las diferencias que actualmente existen entre las normas del IASB y del FASB podemos encon-
trarlas analizando los documentos 20F exigidos por los reguladores norteamericanos, en los que
se exige que se muestre una conciliación del resultado y de los fondos propios con los criterios
estadounidenses para todas aquellas empresas que no utilizan dichos criterios para presentar
sus cuentas anuales. Las conciliaciones son costosas y, en ocasiones, ejercen una influencia
negativa en la propia decisión de cotizar en EE UU. A título de ejemplo, podemos ofrecer datos
de Nokia Corporation siguiendo NIC y USGAAP (datos expresados en millones de euros):
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 43
Por lo que respecta a las empresas españolas que cotizan en la NYSE, las diferencias actua-
les entre las normas que emite el FASB y las normas españolas son bastante relevantes.
Como ejemplo podemos citar la conciliación de las cifras de resultados y de recursos propios
de la empresa Telefónica para los años 2000 y 2001 (datos expresados en millones de euros):
43 ❚ CAPÍTULO 2
2. 1. Las empresas españolas pueden encontrar
soluciones concretas en las pautas establecidas en
el marco conceptual
Las normas internacionales de contabilidad se basan en el denominado “marco conceptual
para la preparación y presentación de los estados financieros”, en el que se detallan los obje-
tivos y los elementos informativos que deben regir la información contable. Dicho marco es
especialmente interesante para las empresas españolas ya que tiene un significado que di-
fiere del que actualmente tenemos en España.
Las normas del IASB suponen la plasmación práctica del desarrollo normativo del denomi-
nado marco conceptual, cuya misión consiste en explicar el objetivo de la información finan-
ciera empresarial dentro de un entorno económico basado en la libertad de mercado y en la
idea de que la información debe fluir para poder tomar decisiones de forma correcta. El obje-
tivo de la información financiera es suministrar información acerca de la situación financiera,
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 44
los resultados y los flujos de efectivo de las entidades empresariales. Así, los estados financie-
ros suelen comprender el balance, el estado de resultados, el estado de cambios en la posi-
ción financiera, así como unas notas, estados complementarios y otro material explicativo que
forma parte integrante de los estados financieros. Puede incorporarse también información
complementaria basada o derivada de dichos estados financieros. Sin embargo, las NIC no
imponen ningún formato para los estados financieros principales en contraste con lo que ac-
tualmente existe en nuestro país. Por otra parte, tampoco se incluyen en los estados financie-
ros informes de la gerencia, informes del presidente de la compañía o cualquier otra informa-
ción que esté incluida en la información financiera o en los informes anuales.
primaria de fiabilidad, y situada al mismo nivel que la neutralidad, el carácter completo, la re-
presentación fiel y el predominio del principio de sustancia sobre forma. Esto supone un
cambio importante para España, ya que actualmente se da una especial relevancia al princi-
pio de prudencia valorativa que debe tenerse en cuenta para una correcta interpretación de
todas las normas contables españolas y que, además, prevalece en caso de conflicto entre
principios o a falta de las correspondientes interpretaciones.
Las definiciones de activo y pasivo aparecen con bastantes restricciones. Así pues, como
ejemplo podemos citar el caso de los gastos a distribuir que en España se consideran como
un gasto activable, mientras que en las NIC no cumplen con la definición ofrecida respecto al
activo. Algo similar ocurre con el tratamiento contable que en España se da a los fondos ge-
nerados para pérdidas futuras, que son tratados como provisiones mientras que según las
NIC no pueden ser considerados como pasivos.
Las definiciones de gastos e ingresos van asociadas a los cambios de valor de los activos y pa-
sivos que no tengan relación con las transacciones realizadas con los propietarios. Conviene
precisar una diferencia importante respecto al tratamiento contable que se da en España. En
España se distingue entre ingresos ordinarios (relacionados con actividades ordinarias de la
empresa) e ingresos extraordinarios (los que ocurren de forma no habitual en la empresa y
que caen fuera de la actividad típica y ordinaria de la empresa y que no se espera, razonable-
mente, que ocurran con frecuencia.
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 45
Queremos destacar que aunque el marco conceptual no expone entre sus métodos de valora-
ción el denominado “valor razonable” (fair value), el mismo se considera en la exposición de
algunas de las normas internacionales. La posibilidad de utilizar este criterio de valoración
para algunas partidas supone una diferencia importante respecto al actual PGC. Además, hay
que considerar que el empleo del valor razonable provoca variaciones en los resultados por
factores que se sitúan fuera del control de la empresa.
La utilización del valor razonable está relacionada con la existencia de mercados organizados
en los que existen precios determinados. Desde un punto de vista contable, el valor razonable
supone tener que realizar una revisión cada vez que se presenten los estados financieros, ya
que las variaciones de valor son consideradas ganancias o pérdidas. La utilización del valor
razonable es obligatoria para los instrumentos financieros, pero los cambios de valor que se
produzcan tienen un tratamiento contable que depende de la utilización que la empresa haga
de los mismos.
45 ❚ CAPÍTULO 2
las nuevas normas sino cambiar en muchos casos de registro. Es recomendable, desde nuestro
punto de vista, que ese reciclaje siga una cierta metodología que, obviamente, surgirá del mejor
modo de entender de cada profesional. Desde nuestro punto de vista consideramos oportuno realizar
una primera aproximación a vista de pájaro de las grandes diferencias para, posteriormente, ir pro-
fundizando en cada una de las NIIF. Con esa finalidad, en este último apartado, realizamos una sín-
tesis de las que consideramos principales diferencias entre los dos marcos legales, clasificándolas en
tres apartados: aspectos formales, estados financieros y valoración.
En todas ellas encontramos una serie de cuestiones que aclaran su exposición, así, aparecen
definidos los objetivos de la misma y su alcance. Se recogen también de forma muy clara e
interesante las definiciones de los principales conceptos contemplados en el desarrollo for-
mativo. Se detalla el tratamiento contable propuesto y en el caso de que haya dos se opta por
utilizar el término tratamiento preferente al elegido por la norma y tratamiento alternativo al
aceptado por la norma. Se contempla también la existencia de interpretaciones, pero de
forma muy distinta a lo que actualmente son las consultas del ICAC.
El estado de tesorería siempre ha sido muy bien acogido por las empresas españolas a pesar
de no ser obligatoria su presentación (excepto en el caso de distribuir dividendos a cuenta).
Cumplir el requisito del IASB supone detallar los cobros y pagos, de manera que se muestre,
con claridad, la situación de liquidez empresarial. Todo hace pensar que esta nueva exigencia
será acogida sin grandes dificultades por las empresas españolas.
El marco conceptual del IASB resalta la gran importancia del estado de flujos de efectivo al
señalar que las decisiones económicas que toman los usuarios de los estados financieros re-
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 47
quieren una evaluación de la capacidad de la empresa para generar efectivo para la misma,
así como la proyección temporal y la certeza de tal generación de liquidez. Contribuye, por
tanto, al cumplimiento de los objetivos básicos de la información financiera, recogiendo los
cobros y pagos realizados durante el ejercicio. Por ello, la adaptación al modelo propuesto por
el IASB va a suponer que las empresas españolas deban incorporar el estado de flujos de efectivo
entre sus documentos a revelar.
El estado de cambios en el patrimonio neto, por su parte, supone también una novedad para las
empresas españolas, aunque conviene tener presente que una nota de la memoria actualmente
existente en España exige la presentación de las variaciones que se producen a lo largo del ejer-
cicio de cada una de las partidas que se incluyen dentro de los denominados fondos propios.
Sin embargo, en ningún momento dicha información adquiere carácter de estado financiero
principal, aunque en el fondo se trata de información de características muy similares.
En términos generales, la variación del patrimonio de una empresa representa el importe total
de las ganancias y pérdidas del ejercicio (mayoritariamente recogidas en el estado de resulta-
47 ❚ CAPÍTULO 2
dos aunque no todas), más los cambios producidos como consecuencia de operaciones con
los propietarios (aportaciones de capital, devoluciones de capital y dividendos distribuidos.
Ahora bien, las exigencias van mucho más allá de los aspectos puramente formales, ya que
se pueden encontrar diferencias en la propia definición del patrimonio neto1 y en los criterios
de valoración utilizados (ya que el PGC no considera la posibilidad de aplicar el valor razona-
ble para la valoración de activos y pasivos2).
Por todo ello, concluir señalando que la formativa internacional va a exigir que las empresas
españolas tengan la obligación de elaborar el estado de cambios en el patrimonio neto.
1El PGC no considera en los fondos propios ni las acciones propias ni el capital pendiente de desembolsar, mientras que las
normas internacionales sí que los consideran.
2Ello supone que los ajustes de mantenimiento del capital quedan limitados a las revaporizaciones realizadas al amparo de la
correspondiente norma legal.
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 48
El concepto de valor razonable es difuso para quienes, como nosotros los españoles, esta-
mos formados en una tradición claramente anclada en el coste histórico. Es frecuente, en
primera instancia, equiparar el valor razonable a nuestro concepto de valor de mercado, y,
ciertamente no es un error, siempre que a ese mercado se le exija la condición de un buen
funcionamiento, transparencia y una gran agilidad a la hora de fijar precios. En estas con-
diciones, el valor fijado por ese mercado es un valor razonable. También es un valor razo-
nable aquel que surge cuando, sin haber un mercado con esas condiciones, se valora un
elemento igual que han sido valorados elementos de características similares en transac-
ciones recientes, o el ofrecido para un inmueble en una tasación. Y también se considera
48 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
razonable el valor que se obtiene aplicando modelos de valoración con rigor reconocido,
porque en este caso simulan adecuadamente las condiciones de un mercado organizado.
Añade luz a la definición del valor razonable su puesta en comparación con otros con-
ceptos valorativos que son más conocidos en nuestra tradición contable: nos referimos
al precio de adquisición, al coste de reposición y al valor realizable.
Por su parte, el precio de reposición es un dato que se daría a la fecha presente: se trata
del precio al que se incorporaría un activo semejante al que deseamos valorar hoy; por
ello, previsiblemente, ofrecería valores más relevantes para quien debe tomar decisiones
hoy. Lo mismo sucede también con el valor realizable, que ofrece valores hipotéticos de
hoy para el caso de que a la fecha de referencia hubieran de ser vendidos forzadamente
los activos a valorar.
de hecho siguen siendo muchos los casos donde este tratamiento es preferente (por
ejemplo, en la mayor parte de las existencias), pero sí se puede afirmar que la transición
del precio de adquisición, consagrado en el PGC, al valor razonable, preferente en las
NIIF, es el salto cualitativo, y por tanto, la diferencia más importante entre ambos mode-
los de regulación. Por ello, en este artículo nos centramos en la identificación de las
áreas donde este cambio va a tener lugar. Sin embargo, no es nuestra intención profun-
dizar en el tratamiento y la casuística precisa de cada área de los estados financieros, ya
que ello es tratado en el resto de artículos que comprenden esta colección.
49 ❚ CAPÍTULO 2
rioro del valor de los activos. Existen, sin embargo, diferencias sustanciales entre ambos.
Entre ellas destacaremos la identidad de los elementos susceptibles de deterioro: activos
individuales o unidades generadoras de efectivo y el valor de referencia respecto al que
debe plantearse el deterioro: el valor recuperable (en lugar del valor de mercado).
Otra diferencia sustancial entre el PGC y la NIIF 36 son los términos en los que se plan-
tea la comparación para determinar si efectivamente el elemento está deteriorado. En el
caso del PGC, la comparación se realizaba entre el valor en libros y el valor de mercado.
En la NIIF 36 se considera que existe deterioro cuando el valor en libros sea mayor que
el valor recuperable. En concreto, la norma dispone que la empresa debe evaluar, en
cada fecha de cierre del balance, si existe algún indicio de deterioro en el valor de sus ac-
tivos. Si se detectase, la empresa deberá estimar el importe del valor recuperable del ac-
tivo en cuestión considerando fuentes externas de información (como el valor de mercado
del activo, circunstancias legales, económicas, del mercado o de otro tipo que hayan te-
nido un impacto desfavorable para la empresa, o la disminución significativa de la tasa de
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 50
interés utilizada para la determinación del valor en uso del activo que haya hecho dismi-
nuir su importe recuperable). También se puede recurrir a fuentes internas tales como
evidencias, o interrupciones de un plan de operaciones que pueda afectar al activo.
El valor recuperable será el mayor entre valor de uso y valor de venta neto. Por su parte,
el valor de uso se calcularía como el valor actual neto de los flujos de tesorería esperados
del activo o UGE aplicando una tasa de descuento. La determinación del valor de venta
neto puede determinarse atendiendo a compromisos de venta menos los costes asocia-
dos a la misma, al precio del elemento o UGE en un mercado activo menos los costes de
venta o bien atendiendo a transacciones recientes de activos similares.
Una vez determinado el importe del deterioro se rebajará en libros el valor del activo o
UGE correspondiente y se aplicarán las diferencias resultantes mediante el método que
se detalla minuciosamente en la norma y se explica en otro de los artículos de esta serie.
Síntesis de las principales diferencias entre PGC y NIIF relativas al tratamiento del deterioro del
valor de los activos
50 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Referencia para la consideración del Valor neto contable versus Valor neto contable versus valor
deterioro valor de mercado recuperable (el mayor entre valor
de uso o valor actual neto)
Método de imputación del deterioro Cuentas compensadoras Existe un detallado método pero
(pérdidas reversibles) o nunca recoge la posibilidad de
rebaja del valor del elemento cuentas compensadoras
(pérdidas irreversibles)
51 ❚ CAPÍTULO 2
Gastos a distribuir y gastos de establecimiento
El PGC considera como activos los gastos a distribuir en varios ejercicios y los gastos de
establecimiento determinando el ritmo al que deben ir siendo computados en la cuenta
de pérdidas y ganancias. En este caso es de nuevo el propio concepto de activo de las
NIIF el que, de manera consistente, impide tratar los gastos mencionados como activos
y obliga, en términos generales, a llevarlos a resultados en el ejercicio en que se incu-
rren, con excepción de los gastos de formalización de deudas que se podrán activar al
igual que otros gastos de naturaleza financiera como mayor valor del activo financiado y
los gastos de ampliación de capital que se presentan como una minoración del patrimo-
nio neto de sus posibles efectos fiscales.
Los gastos financieros
Las NIIF señalan que el tratamiento preferente de los gastos financieros es el de gasto del
ejercicio en que se incurre. Ofrece un tratamiento alternativo para aquellos casos en que
se estén devengando por deudas afectas directamente a la adquisición o producción de
un activo y durante el periodo en que aún no está en condiciones de uso o venta: en este
caso se pueden activar. Hasta aquí el tratamiento es similar al de la norma española. Sin
embargo, la NIC 23 detalla que cuando la financiación obtenida es específica de un ac-
tivo, el importe susceptible de activación será la diferencia entre los costes reales incurri-
dos en el periodo por tales préstamos menos los ingresos financieros que pudieran obte-
nerse de la parte de financiación obtenida no aplicada a la adquisición del activo. Esta fi-
gura minorativa no la presenta el PGC español.
52 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
FASCiCULO 02
Principales diferencias entre el PGC y las NIIF relativas a la aplicación del valor razonable
EXISTENCIAS
18:31
INMOVILIZADOS MATERIALES
Página 52
Bienes recibidos en Valor neto contable Valor razonable del La diferencia entre
permutas (NIC 16) del bien cedido o el bien recibido. valor razonable del
de mercado del Pudiéndose bien recibido son
recibido si éste reconocer resultados positivos
fuera inferior. No beneficios
permite aflorar
beneficios
INMOVILIZADOS INMATERIALES
INSTRUMENTOS FINANCIEROS1
Activos financieros (NIC 39) Menor valor entre Valor razonable Las derivadas de
18:31
INGRESOS
SUBVENCIONES
1 Se entiende por instrumentos financieros a cualquier contrato que origina simultáneamente un activo financiero para la empresa que lo posee y un pasivo financiero o
fondos propios para quien lo emitió. Así, un préstamo es un instrumento financiero que genera un activo financiero al que lo entrega y un pasivo financiero al que lo re-
cibe, mientras que una acción es un instrumento financiero para el que la posee, generándole un activo, y un instrumento de capital para quien lo emitió.
53 ❚ CAPÍTULO 2
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 54
Además, es de resaltar que mientras que en el PGC no se pueden activar gastos finan-
cieros que lleven al valor del activo a un valor superior al de mercado, la NIC establece
que los gastos financieros capitalizados en un periodo no deben exceder de los deven-
gados en el mismo, obligando, si se ha optado por este criterio, a continuar la capitaliza-
ción incluso si a tenor de ello el activo superase el valor recuperable, en cuyo caso debe-
ría reconocerse el consiguiente deterioro del valor.
Síntesis de las principales diferencias entre PGC y NIIF relativas al tratamiento de los gastos
PGC NIIF
CLASIFICACIÓN
Pérdidas debidas a operaciones no Extraordinarios Ordinario
habituales pero que son voluntad
de la empresa (NIC 8)
GASTOS DE I + D
Los de investigación (NIC 38) Pueden activarse No pueden activarse
54 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
GASTOS A DISTRIBUIR
Gastos de formalización de deudas Se pueden activar Se impide la activación excepto en
(NIC 23) el caso de los de formalización de
deudas, que se pueden incorporar
al valor del activo financiado
GASTOS DE ESTABLECIMIENTO
Gastos de ampliación de capital Se activan Son gastos del ejercicio excepto los
(SIC 17) de formalización de deudas, que
minoran el patrimonio
GASTOS FINANCIEROS
Gastos afectos a financiación Se pueden activar por el Se pueden activar por el coste
específica (NIC 23) coste devengado antes de la devengado antes de que el elemento
puesta en funcionamiento esté en condiciones de uso o venta
restando los ingresos financieros
que se obtengan de la parte no
aplicada a financiar el activo
Límite de la posible activación Valor de mercado del activo No hay límite, pero si se supera el
(NIC 23) valor recuperable habrá que
reconocer el consiguiente deterioro
del valor
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 55
55 ❚ CAPÍTULO 2
productos.
b) El no haber retenido ningún compromiso relativo a la gestión y administración del
bien, ni ningún tipo de control sobre los bienes vendidos.
c) El valor del ingreso puede determinarse de manera fiable.
d) Existe probabilidad de que los beneficios económicos de la transacción fluyan a la
empresa.
e) Los gastos relativos a la operación de venta pueden ser determinados con fiabilidad.
Lo mismo ocurre en el caso del reconocimiento de ingresos por prestación de servicios
para los que el PGC no dispone expresamente ninguna condición mientras que las NIIF
exigen condiciones parecidas a las del caso de las ventas:
a) Que se pueda valorar de forma fiable el importe de la operación.
a) Que exista probabilidad de que los beneficios de la operación fluyan a la empresa.
c) Que pueda valorarse el grado de realización de la transacción a la fecha de cierre.
d) Que puedan ser valorados con facilidad los gastos en los que se ha incurrido en la
prestación realizada y los que quedan por incurrir hasta completarla.
En el caso de los intereses, royalties y dividendos, las condiciones son dos:
a) Que sea probable que los beneficios económicos fluyan a la empresa.
b) Que el importe del ingreso pueda ser valorado con fiabilidad.
FASCiCULO 02 15/9/04 18:31 Página 56
cibirá por el cliente) integra la carga financiera que podrá ser explícita (si se ha pactado
respecto al valor al contado de la venta un sobreprecio) o implícita (si aún no habién-
dose pactado, la empresa vendedora cobra al cliente un valor superior al de contado).
Intercambios o permutas de bienes o servicios de naturaleza distinta
La normativa española no permite aflorar ingresos en las permutas. Por el contrario, la
NIC 18 admite que en los casos en que se produzca el intercambio de dos bienes (inmo-
vilizados o existencias) o servicios de naturaleza distinta se reconozcan ingresos. Así,
cuando el valor razonable del bien o servicio recibido o por recibir sea superior al valor
neto contable del que se entrega o presta.
Síntesis de las principales diferencias entre PGC y NIIF relativas al tratamiento de los ingresos
Descuentos por pronto pago Son gastos financieros Parecen decantarse por minorar
el importe de la venta
Ventas con cobro diferido e interés Los intereses se llevan a Se reconocen como ingresos
ingresos diferidos financieros a medida que se
devengan
C A P Í T U L
3O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Existencias 59
1. 1. Introducción 59
1. 2. Alcance y definiciones 59
1. 3. Valoración 60
1. 3. 1. Coste de las existencias 60
1. 4. Coste de adquisición 60
1. 5. Activación de los gastos financieros 62
1. 5. 1. Financiación específica 62
1. 5. 2. Financiación no específica 63
1. 6. Costes de transformación 63
1. 7. Coste de las existencias para un prestador de servicios 65
1. 8. Medición del coste de las existencias 65
1. 9. Métodos de valoración de las existencias 65
1. 10. Valor neto realizable 67
1. 11. Reconocimiento del gasto 68
1. 12. Información a revelar 68
2. Contratos de construcción 68
2. 1. Introducción 68
2. 2. Los contratos de construcción en el IAS 11 69
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 58
2. 2. 1. Objetivo 69
2. 2. 10. Solución 79
3. Agricultura 82
3. 1. Introducción 82
3. 2. Alcance 84
3. 3. Reconocimiento y valoración 85
3. 4. Ganancias y pérdidas 88
3. 5. Subvenciones oficiales 90
3. 6. Presentación e información a revelar 90
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 59
C A P Í T U L
3
O
1. Existencias
1. 1. Introducción
El objetivo de la IAS 2, Existencias, es prescribir su tratamiento contable, siendo fundamental
en la contabilidad de existencias la cantidad de coste que se reconoce como un activo y que
se difiere hasta que los ingresos ordinarios correlativos sean reconocidos.
59 ❚ CAPÍTULO 3
Esta norma constituye una guía práctica para la determinación del coste y su consiguiente re-
conocimiento como gasto del ejercicio incluyendo también cualquier deterioro que reduzca el
importe en libros (depreciación) el valor neto realizable. También sirve de guía sobre las fór-
mulas de coste que se usan para calcular los costes de existencias.
1. 2. Alcance y definiciones
Las existencias son activos, es decir, recursos controlados por la empresa como resultado de
sucesos pasados del que la empresa espera obtener en el futuro beneficios económicos:
• Poseídos para ser vendidos en el curso normal de la explotación.
• En proceso de producción con vistas a tal venta.
• En la forma de materiales o suministros, para ser consumidos en el proceso de producción,
o en la prestación de servicios.
• En el caso de prestación de servicios, las existencias se valorarán por el coste de los servi-
cios para los que la empresa aún no ha reconocido el ingreso correspondiente.
La IAS 2 es aplicable en todos sus aspectos, excepto en el de la valoración, para los siguien-
tes tipos de existencias.
• Existencias procedentes de la producción agrícola y forestal, minerales y productos minera-
les, las cuales se valoran al valor neto realizable de acuerdo con las prácticas establecidas
en la industria.
60 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
• Las existencias en poder de los agentes intermediarios que valoran sus existencias al valor
razonable menos los costes de venta.
1. 3. Valoración
Las existencias deben ser valoradas al coste o al valor neto realizable, según cual sea menor.
1. 4. Coste de adquisición
El coste de adquisición será la valoración a utilizar para aquellas existencias no transforma-
das, es decir, siguiendo las denominaciones utilizadas por el Plan General de Contabilidad es-
pañol, de las materias primas, mercaderías y otros aprovisionamientos. El coste de adquisi-
ción comprenderá el precio de compra, incluyendo aranceles de importación y otros impues-
tos (que no sean recuperables por la empresa), los transportes, el almacenamiento y otros
costes directamente atribuibles a la adquisición de las mercaderías, los materiales o los servi-
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 61
cios. Los descuentos comerciales, las rebajas y otras partidas similares se deducirán para de-
terminar el coste de adquisición. En relación con los descuentos por pronto pago que nuestro
Plan General de Contabilidad no minora del coste sino que los registra como ingresos finan-
cieros, consideramos que es más ortodoxa su inclusión como menor coste del inventario, y en
caso de que haya un aplazamiento en el pago se registrará la diferencia entre el valor razona-
ble de la operación y la cantidad que se paga en efectivo como un gasto financiero, en con-
cordancia con los criterios establecidos en la IAS 18 sobre reconocimiento de ingresos.
[EJEMPLO]
Se han adquirido 1.000 unidades de mercaderías tipo A al precio unitario de 10 u.m./unidad.
La factura emitida por el proveedor presenta el siguiente detalle:
Conceptos Importes
1.000 unidades tipo A, precio unitario 10 10.000
Rebaja promoción 2% –200
Descuento por pronto pago –300
Total 9.500
IVA 16% sobre 9.500 1.520
Total 11.020
Los gastos de transporte de las existencias son por cuenta del proveedor y quedan pen-
diente de pago y ascienden a 100 u.m.
61 ❚ CAPÍTULO 3
Calcular el coste de las existencias. El coste de las existencias estará formado por:
Son ejemplos de costes excluidos del importe en libros de las existencias, y, por tanto, se han de re-
conocer como gastos del ejercicio en el que se incurren los siguientes:
• Las cantidades anormales de desperdicio de materiales, mano de obra u otros costes de producción.
• Los costes de almacenamiento, a menos que dichos costes sean necesarios en el proceso produc-
tivo, previos a un proceso de elaboración ulterior.
• Los costes indirectos de administración que no hayan contribuido a dar a las existencias su condi-
ción y ubicación actuales.
• Los costes de comercialización.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 62
[EJEMPLO]
Calcular el coste de las existencias. El coste de las existencias será de 20.000 u.m. ya que los
costes de almacenamiento no son mayor importe de las mismas.
La IAS 23 plantea como tratamiento general contable de los costes por intereses su imputa-
ción a resultados del ejercicio, salvo que sean capitalizados.
62 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
El tratamiento alternativo permite capitalizar los gastos financieros que sean directamente
atribuibles a la adquisición, construcción o producción de los activos –existencias en este
caso– que necesitan un tiempo prolongado para estar en condiciones de uso o venta.
La IAS 23, en su párrafo 5, señala que entre los costes por intereses de los fondos que se han
tomado prestados se incluyen:
• Los intereses de los préstamos a corto y largo plazo, así como los que proceden de sobregi-
ros en cuentas corrientes.
• La amortización de primas o descuentos correspondientes a préstamos.
• La amortización de los gastos de formalización de contratos de préstamos.
• Las cargas por intereses relativas a los arrendamientos financieros contabilizados de
acuerdo con la IAS 17, Arrendamientos.
1. 5. 1. Financiación específica
Se pueden capitalizar los gastos financieros devengados por préstamos tomados especí-
ficamente con el propósito de obtener un activo cualificado, el importe de los costes por
intereses susceptibles de capitalización en ese activo se determinará según los costes
reales incurridos por tales préstamos durante el ejercicio, menos los rendimientos con-
seguidos por la colocación de tales fondos en inversiones temporales.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 63
1. 5. 2. Financiación no específica
En la medida que los fondos procedan de préstamos genéricos, usados para obtener el
importe de los costes por intereses susceptibles de ser capitalizados, debe ser determi-
nado aplicando un tipo de capitalización a la inversión efectuada en dicho activo. El tipo
de capitalización debe ser la media ponderada de los costes por intereses aplicados a
los préstamos recibidos por la empresa, que han estado vigentes durante el ejercicio y
son diferentes de los específicamente acordados para financiar el activo.
Por último señalar que hay que tener en cuenta los siguientes límites:
• El coste por intereses capitalizados durante el ejercicio no debe exceder del total de
costes por intereses en que ha incurrido en ese mismo ejercicio.
• La capitalización debe ser suspendida durante los ejercicios en los que se interrumpe
el desarrollo de las actividades.
• La capitalización finalizará cuando se hayan terminado sustancialmente las activida-
des para preparar el activo para su venta.
• Las diferencias de cambio no son activables ya que en la versión actual de la IAS 21,
Moneda extranjera, se ha eliminado el tratamiento alternativo que permitía esa posi-
bilidad.
1. 6. Costes de transformación
63 ❚ CAPÍTULO 3
La característica fundamental de las empresas productivas es la obtención de unos produc-
tos elaborados a partir de materias primas y mediante procesos de transformación o fabrica-
ción en los que se utilizan una serie de costes: mano de obra, suministros, etcétera.
Lógicamente, a las partidas anteriores hay que sumar el coste de las materias primas consumi-
das. También señalar que los costes indirectos fijos son aquellos que permanecen relativa-
mente constantes con independencia del volumen de producción, tales como la depreciación y
mantenimiento de los edificios y equipos de la fábrica, así como el coste de gestión y adminis-
tración de la planta. Los costes indirectos variables son todos aquellos que varían directamente,
o casi directamente, con el volumen de la producción obtenida, tales como los materiales y la
mano de obra indirecta. Podemos observar que la IAS se inclina para la valoración de las exis-
tencias por un modelo de costes completos, ya que se incluyen los costes fijos y variables frente
a un modelo de direct costing que sólo incluiría los costes variables de transformación.
El proceso de distribución de los costes indirectos fijos a los costes de transformación se ba-
sará en la capacidad normal de trabajo de los medios de producción. Capacidad normal es la
producción que se espera conseguir en circunstancias normales, considerando el promedio
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 64
Los costes indirectos variables se distribuirán a cada unidad de producción sobre la base del
nivel real de uso de los medios de producción.
[EJEMPLO]
Los costes de una empresa dedicada a la fabricación del producto X en un determinado pe-
riodo son los siguientes:
Conceptos Importes
Consumo de materiales 30.000
Mano de obra directa 10.000
Costes indirectos de fabricación
• Costes indirectos fijos 6.000
64 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Calcular el coste de producción del periodo sabiendo que la capacidad de producción nor-
mal es de 25 unidades en tanto que la producción real ha sido de 20 unidades.
Hay que tener en cuenta que los costes indirectos variables se atribuyen en función de las
unidades reales en tanto que los costes indirectos fijos se atribuyen en función de la capaci-
dad normal deduciendo los costes de subactividad, para lo que se efectúan los siguientes
cálculos:
Coste fijo unitario (capacidad normal): 6.000 u.m./25 unidades = 240 u.m./unidad
Cuantía de costes fijos
a imputar según producción real = 20 unidades x 240 u.m./unidad = 4.800
Costes de subactividad = 6.000 – 4.800 = 1.200
Conceptos Importes
Consumo de materiales 30.000
Mano de obra directa 10.000
Costes indirectos de fabricación
• Costes indirectos fijos 4.800
• Costes indirectos variables 4.000
TOTAL 48.800
El proceso de producción puede dar lugar a la fabricación simultánea de más de un producto. Éste
es el caso, por ejemplo, de la producción conjunta o de la producción de productos principales junto
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 65
a subproductos. Siempre que los costes de transformación de cada tipo de producto no sean identi-
ficables por separado será necesario distribuir el coste total entre los productos sobre bases unifor-
mes y racionales.
La distribución puede basarse, por ejemplo, en el valor de mercado de cada producto, ya sea como
producción en curso, en el momento en que los productos comienzan a poder identificarse por sepa-
rado, ya sea al haber completado el proceso productivo. La mayoría de los subproductos, por su pro-
pia naturaleza, tienen valores no significativos. Cuando éste es el caso, se miden frecuentemente se-
gún su valor neto realizable, y este valor se deduce del coste del producto principal. Como resultado,
el importe en libros del producto principal no resultará significativamente diferente de su coste.
65 ❚ CAPÍTULO 3
Según se ha explicado anteriormente, el método general es coste o el valor neto realizable si
es menor, sin embargo, la IAS 22 admite otros sistemas de valoración tales como el método
de costes estándar o el método para los minoristas, que pueden ser empleados siempre que
el resultado de aplicarlos se aproxime al coste.
El método de los minoristas se usa a menudo en el sector comercial al por menor para la valo-
ración de existencias cuando hay un gran número de artículos que rotan rápidamente, que tie-
nen márgenes similares y para los cuales es imposible usar otros métodos de coste. El coste de
las existencias, en este método, se determina deduciendo del precio de venta del artículo en
cuestión un porcentaje apropiado del margen bruto. El porcentaje que se usa debe tener en
cuenta la parte de las existencias que se han marcado por debajo de su precio de venta.
• Identificación específica.
• Coste medio ponderado.
• FIFO (Primera entrada, primera salida).
Cuando se trata de existencias de productos que no son intercambiables entre sí, así como
de los bienes y servicios producidos y segregados para proyectos específicos, debe ser deter-
minado a través del método de identificación específica de sus costes individuales. Es el tra-
tamiento adecuado para aquellos productos que se segregan para un proyecto específico,
con independencia de si han sido producidos o comprados en el exterior.
Cuando se trata de existencias que son intercambiables se puede utilizar, como se ha seña-
lado anteriormente, el criterio FIFO o el del coste medio ponderado.
La fórmula FIFO asume que los productos en existencia que fueron comprados o producidos
66 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
antes serán los producidos o comprados más recientemente. Si se utiliza la fórmula del coste
promedio ponderado, el coste de cada unidad o producto se determinará a partir del prome-
dio ponderado del coste de los artículos similares, poseídos al principio del ejercicio, y del
coste de los mismos artículos comprados o producidos durante el ejercicio. Se puede calcular
el promedio periódicamente o después de recibir cada envío adicional, dependiendo de las
circunstancias de la empresa.
[EJEMPLO]
Una empresa ha tenido los siguientes movimientos en su inventario a lo largo del ejercicio:
• Existencias iniciales: 200 unidades valoradas en 10 u.m./unidad.
• Compras de marzo: 300 unidades a 11 u.m./unidad más unos costes de transporte de 1
u.m./unidad.
• Ventas de abril: 350 unidades.
• Compras de septiembre: 400 unidades al precio unitario de 12 u.m.
• Ventas de noviembre: 500 unidades.
Calcular el valor de las existencias finales sabiendo que los rappels asociados a estas unida-
des han sido del 5% por los métodos FIFO y Coste medio ponderado.
Método FIFO
67 ❚ CAPÍTULO 3
curso normal de la explotación, menos los costes estimados para terminar su producción y
los necesarios para llevar a cabo su venta.
A veces puede ocurrir que el coste de las existencias puede no ser recuperable en el caso de
que estén dañadas, obsoletas o bien que hayan disminuido los precios de las mismas en el
mercado. También el coste de las existencias puede no ser recuperable porque se hayan in-
crementado los costes para su terminación o los costes de comercialización.
La rebaja hasta alcanzar el valor neto realizable se calcula generalmente para cada tipo de ar-
tículo, aunque en determinadas circunstancias se pueden realizar agrupaciones (artículos de
la misma línea, los que se producen y venden en la misma zona geográfica).
porte para determinar su valor razonable. Cuando haya existencias cuya finalidad es cumplir
contratos de ventas o prestación de servicios, el valor neto realizable se basa en el precio que
figura en el contrato en cuestión.
El proceso de reconocer como gasto del ejercicio el importe en libros de las existencias vendi-
das tiene como consecuencia el principio de correlación de gastos e ingresos.
nancieros es:
• Las políticas contables adoptadas para la valoración de las existencias, incluyendo la fór-
mula de valoración que se haya utilizado.
• El importe total en libros de las existencias, desglosando en los importes parciales según la
clasificación que resulte apropiada para la empresa –mercaderías, materias primas, pro-
ductos terminados, etcétera–.
• El importe en libros de las existencias que se han valorado según su valor razonable menos
los costes de venta.
• El importe de las existencias reconocido como gastos durante el periodo. La presentación
de esta información se puede hacer clasificando los gastos por naturaleza.
• El importe de cualquier rebaja de valor practicada para reflejar el valor neto realizable reco-
nocido como gasto durante el periodo de acuerdo con el párrafo 34.
– Los importes de las reversiones en las rebajas de valor practicadas para reflejar el valor
neto realizable reconocido como gasto de acuerdo con el párrafo 34.
– Las circunstancias o hechos que han motivado la reversión de las rebajas de valor de las
rebajas de acuerdo con el párrafo 34.
– El importe en libros de las existencias comprometidas como garantía de pasivos.
2. Contratos de construcción
2. 1. Introducción
La adopción del IAS 11 tendrá un impacto especial en el caso español en las empresas cons-
tructoras, así como en las empresas concesionarias de autopistas y las de túneles, puentes y
otras vías de peaje.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 69
69 ❚ CAPÍTULO 3
se permite diferir la imputación de los gastos financieros, de forma que puedan volcarse a la
cuenta de pérdidas y ganancias aquellos gastos financieros correlacionados con los ingresos
que se producen. En definitiva se trata de asociar la parte de los gastos financieros que se
consideran relacionados con los ingresos producidos, teniendo siempre en cuenta que debe
estar asegurada la recuperación vía precios (tarifa) de los gastos a que se ha hecho referen-
cia, ya que de otro modo no sería posible aplicar el sistema considerado, produciéndose la
imputación al ejercicio en que se devenga del gasto correspondiente. En concreto, la norma
de valoración contempla un criterio de imputación de los gastos que se basa en la propor-
ción que representen los ingresos por peaje previstos para cada ejercicio respecto a los in-
gresos totales previstos. No obstante, este planteamiento podría defenderse en el Marco de
las IAS al tratarse de empresas en las que se regula la determinación de precios de sus ser-
vicios, pudiendo activarse los gastos específicos objeto de recuperación futura, siempre que
esté asegurada la recuperación de los mismos, es decir, siempre que sea clara la intención
del regulador de permitir la recuperación de los gastos indicados y que exista evidencia de
que las tarifas futuras producirán ingresos suficientes para la recuperación.
2. 2. 1. Objetivo
El objetivo de esta norma es prescribir el tratamiento contable de los ingresos ordinarios y
los costes relacionados con los contratos de construcción. Debido a la naturaleza propia
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 70
Los siguientes términos se usan, en la presente norma, con el significado que a conti-
nuación se especifica:
Un contrato de construcción es un contrato, específicamente negociado, para la fabrica-
70 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Un contrato de construcción puede acordarse para fabricar un solo activo o bien varios
activos que estén íntimamente relacionados entre sí.
Cuando un contrato cubre varios activos, la construcción de cada uno de ellos debe tra-
tarse como un elemento separado si:
a) Se han recibido propuestas económicas diferentes para cada activo.
b) Cada activo ha estado sujeto a negociación separada, y el constructor y el cliente han
tenido la posibilidad de aceptar o rechazar la parte del contrato relativa a cada uno de
los activos.
c) Pueden identificarse los ingresos ordinarios y costes de cada activo.
71 ❚ CAPÍTULO 3
original.
Esto hará necesario que la ejecución de una obra pública que se adjudica en varias fa-
ses, siendo cada una de éstas objeto de concurso público, deba tratarse como contratos
independientes cada una de las fases, aun en el caso de que la empresa adjudicataria
de las distintas fases sea la misma, lo que impedirá promediar resultados.
Los ingresos ordinarios del contrato se calculan según el valor razonable de la contra-
prestación recibida o por recibir. La valoración de los ingresos ordinarios procedentes del
contrato estará afectada por diversas incertidumbres, que dependen del desenlace de
hechos futuros. Por tanto, la cuantía de los ingresos ordinarios del contrato puede au-
mentar o disminuir de un ejercicio a otro. Por ejemplo:
a) Modificaciones que aumenten o disminuyan los ingresos ordinarios del contrato
72 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Para poder incluir como ingresos ordinarios del contrato las modificaciones, reclamacio-
nes e incentivos, establece de acuerdo con el marco conceptual:
• Que sea probable que el ingreso efectivamente llegue a la empresa.
• Que el ingreso pueda valorarse con suficiente fiabilidad.
Con relación a los costes que las IAS 11 considera como imputables a un contrato de
obras, sigue la misma distribución de costes que recoge la IAS 2 de existencias, estable-
ciendo que los costes del contrato deben comprender:
a) Los costes que se relacionen directamente con el contrato específico; dentro de los que
encontramos: mano de obra, materiales, depreciación de inmovilizado utilizado, des-
plazamiento y traslado de los inmovilizados hasta la obra, alquiler de inmovilizado mate-
rial, de diseño y asistencia técnica, costes de garantía y de reclamaciones de terceros.
b) Los costes que se relacionen con la actividad de contratación en general y puedan
ser imputados al contrato específico como seguros, oficinas técnicas, asistencia legal,
costes derivados de la obtención de clasificación como contratista, costes relaciona-
dos con la gestión laboral de las obras. La distribución de estos costes indirectos de-
berá llevarse a cabo en base al nivel normal de actividad de construcción.
c) Cualquier otro coste que se pueda cargar al cliente, según los términos pactados en
el contrato.
73 ❚ CAPÍTULO 3
Los costes que no puedan ser atribuidos a la actividad de contratación, o no puedan ser
distribuidos a los contratos específicos, se excluirán de los costes del contrato de cons-
trucción. Entre los costes a excluir se encuentran:
a) los costes generales de administración, para los que no se haya especificado ningún
tipo de reembolso en el contrato.
b) los costes comerciales.
c) los costes de investigación y desarrollo para los que, en el contrato, no se especifica
reembolso alguno.
d) la parte de la cuota de depreciación que corresponde a infrautilización, porque los
componentes del inmovilizado material no han sido utilizados en ningún contrato es-
pecífico.
Los costes del contrato comprenden todos los costes atribuibles al mismo desde la fecha
en que éste se convierte en firme hasta el final de la ejecución de la obra correspon-
diente. No obstante, los costes que se relacionan directamente con un contrato, porque
se han incurrido en el trámite de negociación del mismo, pueden ser incluidos como
parte de los costes del contrato siempre que puedan ser identificados por separado y va-
lorados con suficiente fiabilidad, si es probable que el contrato llegue a obtenerse.
Cuando los costes incurridos al obtener un contrato se reconozcan como un gasto del
ejercicio en que han sido incurridos, no podrán ser ya acumulados en el coste del con-
trato cuando éste se llegue a obtener en un ejercicio posterior.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 74
La norma distingue:
En el caso de contratos a precio fijo, el desenlace del contrato de construcción puede
ser estimado con suficiente fiabilidad, siempre que se den las siguientes condiciones:
a) Puedan valorarse razonablemente los ingresos ordinarios totales del contrato.
b) Es probable que la empresa obtenga los beneficios económicos derivados del con-
trato.
74 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
c) Tanto los costes que faltan para la terminación del contrato como el grado de realiza-
ción, a la fecha del balance, pueden ser valorados con suficiente fiabilidad.
d) Los costes atribuibles al contrato pueden ser claramente identificados y valorados
con suficiente fiabilidad, de manera que los costes reales del contrato pueden ser
comparados con las estimaciones previas de los mismos.
b) A partir del examen del trabajo ejecutado sobre la base de mediciones llevadas a
cabo sobre la obra objeto de contrato.
c) A partir de la proporción física del contrato ejecutado, lo cual se efectuará compa-
rando las unidades de obra realizadas respecto de las unidades de obra totales que
representan el contrato.
Este método suministra información útil sobre la evolución de la actividad del contrato y
el rendimiento derivado del mismo en cada ejercicio económico, sin más que detraer al
beneficio total acumulado en la ejecución al cierre del ejercicio el beneficio acumulado
al cierre del ejercicio anterior.
Según el método del porcentaje de realización, los ingresos ordinarios del contrato se re-
conocen como tales, en la cuenta de resultados, a lo largo de los ejercicios en los que se
lleve a cabo la ejecución del contrato, determinándose los ingresos ordinarios del ejerci-
cio por diferencia entre los ingresos acumulados a la fecha de cierre del ejercicio actual
y los acumulados a la fecha de cierre del ejercicio anterior. Los costes del contrato se re-
conocerán como gastos del ejercicio en el que se ejecute el trabajo con el que están re-
lacionados.
El contratista puede haber incurrido en costes que se relacionen con la actividad futura
del contrato. Tales costes se registran como activos siempre que sea probable que los
mismos sean recuperables en el futuro. Estas cantidades hacen referencia normalmente
a acopios de materiales, los cuales deben aparecer en el activo como una existencia.
Tanto estos costes relacionados con la actividad futura como los posibles anticipos entre-
gados a subcontratistas no se tendrán en cuenta a efectos de determinar el porcentaje
75 ❚ CAPÍTULO 3
de realización.
Cualquier pérdida esperada por causa del contrato de construcción debe ser reconocida
inmediatamente como tal en la cuenta de resultados del ejercicio.
Cuando desaparezcan las incertidumbres que impedían estimar con suficiente fiabilidad
el desenlace del contrato, los ingresos ordinarios y los gastos asociados con el contrato
de construcción deben pasar a ser reconocidos en la cuenta de resultados de acuerdo
con el estado de realización de la actividad producida por el contrato en la fecha de cie-
rre del balance.
La empresa debe revelar, para los contratos en curso en la fecha de cierre, cada una de
las siguientes informaciones:
a) La cantidad acumulada de costes incurridos y de ganancias reconocidas (menos las
correspondientes pérdidas reconocidas) hasta la fecha.
b) La cuantía de los anticipos recibidos.
c) La cuantía de las retenciones en los pagos.
La cantidad bruta debida por los clientes, por causa de los contratos, es la diferencia entre:
a) Los costes incurridos más las ganancias reconocidas en la cuenta de resultados.
b) La suma de las pérdidas reconocidas en la cuenta de resultados y las certificaciones
realizadas y facturadas para el conjunto de contratos en curso, en los que los costes
incurridos más las ganancias reconocidas (menos las correspondientes pérdidas reco-
nocidas) excedan a los importes de las certificaciones de obra realizadas y facturadas.
La cantidad bruta debida a los clientes, por causa de los contratos, es la diferencia entre:
77 ❚ CAPÍTULO 3
a) Los costes incurridos más las ganancias reconocidas en la cuenta de resultados.
b) La suma de las pérdidas reconocidas en la cuenta de resultados y las certificaciones
realizadas para el conjunto de contratos en curso, en los que las certificaciones de
obra realizadas y facturadas excedan a los costes incurridos más las ganancias reco-
nocidas (menos las correspondientes pérdidas reconocidas).
Los costes de contratación incurridos en al año 2004 imputables a cada uno de los con-
tratos son:
– Para el centro de formación profesional, 3.000 euros.
– Para el campo municipal de deportes, 3.000 euros.
A comienzos del año 2005 se presenta un proyecto adicional para el campo de deportes
municipal por el que se va a construir un frontón que inicialmente no estaba previsto,
una vez publicado el concurso, se adjudica la ejecución del mismo a la sociedad anó-
nima Arcadia. La obra deberá terminarse en diciembre de 2006.
A finales del año 2004 se lleva a cabo un reformado del proyecto original del centro de
formación profesional en el que se sustituyen los solados que en el proyecto inicial eran
de cerámica por tarima flotante, esto representa un aumento de los ingresos de
100.000 euros.
Al cierre del ejercicio 2004 aparecen acopios de materiales depositados en la obra del
centro de formación profesional por un valor de 10.000 euros.
Los costes acumulados directos de ejecución en los que el contratista incurre y los esti-
mados para terminar a lo largo de los años de ejecución son:
2. 2. 10. Solución
1. Segmentación y agrupación de contratos
El contrato relativo a la construcción del centro de formación profesional, aunque su
ejecución conste de tres módulos, se tomara como un único contrato de obras, ya
que se ha negociado y contratado de forma conjunta, el proyecto reformado no dará
lugar a un nuevo contrato sino que producirá un aumento de los ingresos ordinarios.
Con relación al contrato del centro de deportes municipal nos encontraremos con un
contrato de obras por la adjudicación inicial y un nuevo contrato por el proyecto adi-
cional, ya que es fruto de un nuevo proceso de contratación y no tiene como base los
mismos precios que el contrato inicial, por lo que no se podrán compensar resultados.
2. Resultado estimado en cada contrato a la fecha de la contratación
79 ❚ CAPÍTULO 3
3. Método para el reconocimiento de ingresos
En el caso del centro de formación profesional y el proyecto adicional del estadio mu-
nicipal, existe una estimación de los costes, se pueden valorar los ingresos y existen
beneficios probables, por lo que se reconocerán los ingresos basados en el porcentaje
de realización. Para el caso del estadio municipal de deportes, el resultado estimado
es una pérdida, por lo que los ingresos ordinarios se reconocerán en la medida en la
que sea probable la recuperación de los costes incurridos, debiéndose tener en consi-
deración a tal fin la proporción existente entre costes incurridos y costes totales.
OBRA
AÑO 2004 Centro de F.P. Estadio municipal Adicional estadio
Costes de ejecución incurridos 500.000 600.000 0
Costes estimados para terminar 2.100.000 1.700.000 0
Grado de realización 19,23% 26,09% 0,00%
OBRA
AÑO 2005 Centro de F.P. Estadio municipal Adicional estadio
Costes de ejecución incurridos 1.600.000 1.500.000 75.000
80 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
OBRA
AÑO 2004 Centro de F.P. Estadio municipal Adicional estadio
Ingresos acumulados al cierre 596.130 521.800 0
Ingresos acumulados cierre anterior 0 0 0
Ingreso del ejercicio 596.130 521.800 0
OBRA
AÑO 2005 Centro de F.P. Estadio municipal Adicional estadio
Ingresos acumulados al cierre 1.871.780 1.333.400 241.950
Ingresos acumulados cierre anterior 596.130 521.800 0
Ingreso del ejercicio 1.275.650 811.600 241.950
OBRA
AÑO 2006 Centro de F.P. Estadio municipal Adicional estadio
Ingresos acumulados al cierre 3.100.000 200.000 500.000
Ingresos acumulados cierre anterior 1.871.780 1.333.400 241.950
Ingreso del ejercicio 122.822 666.600 258.050
81 ❚ CAPÍTULO 3
como ingreso en el año 2005 en el contrato correspondiente al centro de formación
profesional no dará lugar a un ajuste negativo de los ingresos reconocidos, sino que
se registrarán como un gasto del año 2006.
Las pérdidas materializadas por la ejecución del contrato cada año teniendo en
cuenta los ingresos reconocidos, los costes de ejecución y los de contratación en
cada ejercicio son:
Las pérdidas totales en función del cambio en las estimaciones son al cierre de
cada ejercicio:
3. Agricultura
3. 1. Introducción
La Norma internacional de Información Financiera 41, referente a las actividades agrícolas,
viene a cubrir un hueco en el tratamiento contable de esta actividad, particularmente en Es-
paña. La pequeña dimensión de las empresas agrarias había ido dejando de lado la normali-
zación contable de éstas, cuyas necesidades de financiación, acicate fundamental para mos-
trar información financiera en una empresa, se había ido supliendo mediante la aportación de
los socios y recurriendo al activo fundamental de estas empresas, la tierra.
La progresiva importancia del sector primario, donde se han ido creando empresas cada vez
de mayor tamaño y con más necesidad de recursos financieros, ha motivado que se necesite
una mayor normalización en la presentación de la información, para lo cual las normas conta-
bles tradicionales no cubrían todas las lagunas existentes.
Así, en España, en el año 2001 surge la adaptación sectorial del Plan General de Contabilidad
para empresas vitivinícolas, sector cada vez más dinámico, llegando incluso algunas empre-
sas de este sector a cotizar en bolsa. La actividad agraria presenta peculiaridades muy impor-
tantes que el sistema actual no resuelve a nuestro juicio satisfactoriamente. Entre las que
más dudas ha planteado es la aplicación del principio del coste de adquisición de los activos
establecido como base en el Plan General de Contabilidad, donde los activos alcanzan su va-
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 83
Estos mismos problemas surgen al valorar una cosecha o un rebaño, donde existe una gran
dificultad para determinar todos los costes que influyen, sobre todo por la existencia de uno
que no se pone de manifiesto con el modelo del coste histórico, como es la tierra, que no se
amortiza, y que sin embargo es una parte fundamental en la elaboración del producto final, lo
que puede dar lugar a que dos empresas valoren de distinta forma un mismo bien, rom-
piendo la comparabilidad entre ellas.
Como consecuencia de todos estos planteamientos y, sobre todo, por las necesidades de las
empresas agrarias, que cada vez acuden más a las fuentes de financiación tradicionales,
surge la necesidad de una regulación específica que responda a todas estas peculiaridades, y
sobre todo que tenga en cuenta el proceso biológico característico de esta actividad. Así, el
Consejo del IASB decidió en 1994 la elaboración de una norma internacional de contabilidad,
que vio la luz en diciembre de 2000 y que es de aplicación a partir de los ejercicios que co-
miencen a partir del 1 de enero de 2003.
83 ❚ CAPÍTULO 3
Las principales diferencias entre la IAS 41 y el Plan General de Contabilidad español son dos:
– La ruptura con el principio del precio de adquisición, y por lo tanto con el coste histórico,
que se sustituye por el valor razonable –el valor de mercado–, en aras de reflejar mejor la
realidad del valor de la empresa y la labor de la dirección de ésta. Esta ruptura es total, no
permitiendo el uso del precio de adquisición ni siquiera como tratamiento alternativo (sólo
se permite en el reconocimiento inicial).
– La ruptura con el principio de prudencia al permitir la incorporación a los resultados del
periodo de los cambios en el valor razonable de los activos biológicos, permitiendo por lo
tanto que los estados financieros reflejen resultados no realizados.
Sin embargo, aunque parezca que la aplicación de la IAS 41 puede dar lugar a un cambio muy
importante en relación al Plan General de Contabilidad español, éste sólo se producirá en las
empresas de ciclo de producción superior al ejercicio económico, como puede ser una planta-
ción de alcornoques para obtener corcho, y en aquellas actividades donde exista algún ele-
mento que dure más de un ejercicio económico, como puede ser una plantación de árboles fru-
tales. El efecto será prácticamente nulo en el caso de producciones de ciclo corto, como puede
ser una plantación de tomates, maíz, trigo, donde al finalizar el ejercicio económico no existe
rastro en el activo del balance de las operaciones efectuadas, ya que las plantas no existen y el
producto –el tomate, maíz…– ha sido vendido y en el balance sólo está reflejado el resultado.
1 Según establece la adaptación sectorial a empresas vitivinícolas, son activables todos los gastos hasta la primera co-
secha productiva.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 84
3. 2. Alcance
Según se establece en el primer párrafo, esta IAS “debe aplicarse para la contabilización de
lo siguiente, siempre que se encuentre relacionado con la actividad agrícola2:
– Activos biológicos3.
– Productos agrícolas4 en el punto de cosecha o recolección.
– Subvenciones relacionadas con la actividad agrícola”.
con la actividad agraria, que recibirá tratamiento diferenciado en la IAS 16, propiedades,
plantas y equipos, la IAS 17, Arrendamientos, o la IAS 40, inmuebles de inversión, según
sean sus características.
Al exigir la intervención empresarial en la obtención del producto, quedan fuera del alcance
de la norma los productos que no han exigido intervención previa, tal y como puede ser la
pesca (no así la acuicultura), la caza y comercialización de animales salvajes, la tala de bos-
ques naturales… Sí entran la cría de caballos, perros… ya que, como hemos señalado ante-
riormente, la transformación biológica sí es la actividad de la empresa.
En cuanto a los productos agrícolas, sólo trata el reconocimiento inicial de los mismos en el
punto de cosecha o recolección, quedando su tratamiento posterior, es decir, su procesa-
miento industrial, bajo el amparo de la IAS 2, Existencias, u otras normas internacionales de
contabilidad relacionadas con los productos obtenidos. Por ejemplo, no trata el tratamiento
de las uvas para conseguir el vino, de la leche para conseguir queso…
Así pues, la IAS 41 se decanta por tratar únicamente la actividad agrícola empresarial y los
activos relacionados con ella, dentro de un marco más estrecho que la normativa internacio-
nal sobre agricultura, que generalmente gira en torno a los activos biológicos, sin limitarlos al
marco de la agricultura5.
2 Actividad agrícola es la gestión, por parte de la empresa, de las transformaciones de carácter biológico realizadas con
los activos biológicos, ya sea para destinarlos a la venta para dar lugar a productos agrícolas o para convertirlos en
otros activos biológicos diferentes (IAS 41.5).
3 Activo biológico es una planta o un animal vivo.
4 Producto ya recolectado, procedente de los activos biológicos de la empresa (IAS 41.5).
5 La AAS 35 gira en torno a los activos biológicos, independientemente de su destino. Así, trata los galgos de carreras,
crecimientos de virus y hongos, sangre…
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 85
[EJEMPLO]
En el ejercicio 5 son vendidos dos cachorros de perro lobo a dos empresas distintas a un
precio de 100 u.m. cada una de ellas. La primera , Crin Dog, se dedica a la cría de perros y va
a usar el cachorro para mejorar su pedigrí. La segunda, Controlator Business, es una em-
presa de vigilancia y lo usará para labores de control antidroga. Al cierre del ejercicio, el va-
lor razonable menos los costes estimados en el punto de venta es de 125 u.m. ¿Por cuánto
figurarán en el balance de cada empresa?
En cuanto a la empresa Crin Dog, su actividad es la cría de perros de raza, actividad que cae
bajo el ámbito de la IAS 41, por lo que valorará el cachorro al final del ejercicio al valor razo-
nable menos los costes en el punto de venta, es decir, a 125 u.m.
3. 3. Reconocimiento y valoración
La pregunta principal de cuándo debe una empresa reconocer un activo biológico o un pro-
ducto agrícola se resuelve en el párrafo 10, donde se habla de que se reconocerá cuando y
sólo cuando:
– La empresa controla el activo como resultado de sucesos pasados. Este control del activo
debemos entenderlo mediante cualquier forma admitida en derecho.
85 ❚ CAPÍTULO 3
– Es probable que fluyan a la empresa beneficios económicos futuros asociados con el ac-
tivo, o sea, es un activo con trascendencia económica, ya que obtendremos de él un pro-
ducto o el mismo activo biológico será vendido.
– El valor razonable o el coste del activo pueden ser valorados de forma fiable, de tal forma
que puede aparecer en el balance. Está muy relacionado con el punto anterior, porque
viene a indicar la existencia de un mercado para ese producto.
En cuanto a la valoración, supone una ruptura total con el tratamiento existente en España
que propugna una valoración estricta según el precio de adquisición o coste de producción,
que se manifiesta tanto en los principios contables enumerados en el PGC como en la adap-
tación sectorial a las empresas vitivinícolas, única regulación existente en España de la activi-
dad agraria. Así, la IAS 41 establece que “un activo biológico debe ser valorado, tanto en el
momento de su reconocimiento inicial como en la fecha de cada balance, según su valor ra-
zonable menos los costes estimados en el punto de venta”, y que “un producto agrícola cose-
chado o recolectado de los activos biológicos de una empresa deben ser valorados, en el
punto de cosecha o recolección, según su valor razonable menos los costes estimados en el
punto de venta”.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 86
[EJEMPLO]
La empresa Granjas Pin y Pon se dedica a la cría de vacas lecheras. Durante el ejercicio han
nacido 10 vacas en sus instalaciones. Los costes incurridos para la obtención de los terne-
ros, tales como alimentación, vacas nodrizas, cuidados veterinarios… ascienden a 100 u.m.
por ternero, y el valor razonable menos los costes estimados en el punto de venta es de 150
u.m. por ternero según el precio publicado por la lonja de la provincia.
De acuerdo con el Plan General de Contabilidad español, la empresa valorará los terneros al
coste, es decir, figurará en el balance de la sociedad por un importe de 1.000 u.m.
No nos ofrece la IAS 41 una guía clara de aplicación que nos permita diferenciar entre pro-
86 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Se pide: Determinar la valoración al cierre del ejercicio del maíz en poder de la empresa.
Clasificar algo como activo biológico o como producto agrícola puede presentar algunos pro-
blemas. El clasificarlo dentro de una u otra categoría sólo es posible si conocemos las inten-
ciones de la empresa. Si el maíz es usado como semilla para producir más plantas, deberá ser
catalogado como activo biológico. Si el maíz va a ser usado para venderlo posteriormente, es-
tará sujeto a la IAS 26. En cuanto a la valoración, los 100.000 kilos que van a ser vendidos son
reconocidos inicialmente al valor razonable menos los costes estimados en el punto de venta,
es decir, 0,15 €/kg, y éste es el coste de las mismas para la IAS 2, párrafo 16. Como esta norma
establece la valoración al coste, al cierre del ejercicio aparecerán en balance a 0,15 €/kg.
6 Algunos autores mantienen que como el producto agrícola ya está en condiciones de venta, y el agricultor lo
mantiene con el objeto de obtener un mayor precio, no debería recibir el trato de existencias, sino de activos
financieros, porque el agricultor está especulando con él.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 87
Por otra parte, los 2.000 kilos tienen la consideración de activo biológico, y se establece la
valoración inicialmente también a 0,15. Ahora bien, a la hora de realizar el balance de cierre
de ejercicio, se volverá a valorar al valor razonable, es decir, 0,16 €/kg.
Aparecerán por lo tanto 100.000 kilos a 0,15 y 2.000 kilos a 0,16, ya que aunque sean bienes
de la misma naturaleza, tienen distinto destino, por lo que se usan distintas normas para su
valoración.
La idea del valor razonable menos los costes estimados en el punto de venta debe entenderse
como un valor neto de mercado, acorde con lo dispuesto en el PGC español, y puesto de ma-
nifiesto tanto en las normas de valoración como en la resolución del ICAC sobre el coste de
producción, pero mientras que en España hablamos de valor de realización menos los gastos
comerciales que correspondan, en las normas internacionales se llega a este mismo valor en
dos pasos. Primero a través de la determinación del valor razonable, que sería el valor de
mercado menos los gastos de poner el producto en el mercado activo, y en segundo lugar de
los gastos en el punto de venta, que son similares a nuestros gastos de comercialización.
Hay una matización que hacer, y es que el valor de mercado será siempre la cotización en la
lonja en el momento, sin tener en cuenta los posibles contratos de venta firmados por la em-
presa con anterioridad, ya que si se establece que el producto se debe valorar al valor razona-
ble, éste es el valor de mercado, porque el contrato de futuro representaba el valor del pro-
ducto agrícola cuando se firmó dicho contrato, pero no cuando se recolectó. En definitiva, no
hay opción. Siempre se debe reconocer el producto agrícola al valor razonable menos los cos-
tes estimados en el punto de venta.
87 ❚ CAPÍTULO 3
[EJEMPLO]
La empresa La Cañada tiene una plantación de tomates para conservas. El coste por kilo de
tomates ha ascendido a 8 céntimos. El precio de venta en la lonja asciende a 20 céntimos, el
coste de recolección a 4 céntimos y el de transporte desde la explotación hasta la lonja a 3
céntimos. Asimismo, el asentador se lleva 2 céntimos de comisión y hay que pagar 1 cén-
timo de comisión a la lonja. En el momento de realizar la plantación, firmó un contrato de
venta con la envasadora local para venderles la producción a 14 céntimos.
Se pide: Determinar el valor razonable, los gastos hasta el punto de venta y el valor por el
que se reconocerá el activo agrícola en el balance.
Mientras que con el PGC español se reconocería al coste de producción, es decir, a 8 cénti-
mos, con la normas internacionales se recoge a 10 céntimos, que es el valor razonable me-
nos los costes estimados en el punto de venta.
No existe prelación entre estas formas alternativas de determinar el valor razonable. Cogere-
mos aquella que represente mejor el valor razonable del activo. Observamos que no se men-
ciona en ningún caso el coste de producción. Éste sólo se puede usar en el momento del reco-
nocimiento inicial cuando ha habido poca transformación biológica o el impacto de ésta no es
importante en el precio (por ejemplo, en los primeros años de una plantación de viñedos) o
cuando no están disponibles precios o no son fiables las estimaciones alternativas del valor ra-
zonable. Pero si la empresa ha valorado ya en ejercicios anteriores un activo biológico al valor
razonable, este procedimiento es irreversible, no pudiendo en ningún momento volver al precio
del coste.
También es normal que no exista un mercado separado para los activos biológicos cuando és-
tos van unidos a la tierra. Por ejemplo, suponiendo una plantación de higueras, no existe un
mercado de árboles sin tierra, sino de todo unido. En este caso, para determinar anualmente el
valor de los árboles, podríamos restar al valor razonable de la plantación el valor razonable de
los terrenos sin preparar y el de las mejoras efectuadas en dichos terrenos.
3. 4. Ganancias y pérdidas
El reconocimiento del beneficio según la IAS 41 es radicalmente distinto de la legislación es-
pañola, ya que rompe totalmente con el principio de prudencia y con el principio del de-
vengo, los pilares de nuestro ordenamiento contable. Esta diferencia es especialmente nota-
ble en las actividades agrícolas de ciclo largo (ganadería, frutales…), siendo prácticamente
inapreciable en cultivos de ciclo corto (cría de pollos, tomates, maíz…), donde al finalizar el
ejercicio económico está la producción generalmente vendida y donde no existen activos bio-
lógicos por valorar.
En cuanto a los activos biológicos, establece, como ya hemos comentado, su valoración al va-
lor razonable. Las diferencias que se producen entre dos valoraciones consecutivas formarán
parte del patrimonio de la empresa, pero no como reservas, sino como resultado neto. Con el
sistema del PGC, el bien se valora al coste, siendo éste el valor máximo, sin tener en cuenta la
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 89
Si bien este método refleja mejor la realidad y la gestión de los activos biológicos, que es la
actividad de la empresa, y por lo tanto pone de manifiesto la calidad de la gestión, introduce
un componente de volatilidad en el resultado de la empresa, ya que cuando un activo bioló-
gico alcanza su cima productiva es cuando tiene también mayor valor, muy por encima del
coste de producción, tanto como consecuencia de la transformación biológica como de la
misma inflación, y a partir de ese momento empieza su declive hasta su valor nulo, que reco-
gemos en resultados en muy pocos años. Bajo las IAS no hay amortización sistemática.
[EJEMPLO]
La sociedad Las Vegas posee una plantación de árboles frutales, que tiene una vida útil de
50 años a partir de que comienza su producción. El coste de la plantación en este momento
es de 1.000 u.m. Su mayor valor lo alcanza en el año 30 con un valor razonable de 6.000
u.m. (se debe tanto a la evolución biológica de los árboles como a la inflación).
89 ❚ CAPÍTULO 3
Con el PGC, se imputa un gasto anual de 20 u.m. anuales (1.000/50).
Con las IAS, imputamos un beneficio entre el año 1 y el 30 de 5.000 u.m., y un gasto anual
entre el año 30 y el 50 de 300 u.m. (6.000/20).
Vemos que si bien el impacto neto en resultados es el mismo, 1.000 u.m., la distribución de
éste en el tiempo es muy distinta.
En cuanto a los productos agrícolas, bajo las IAS no se aplica el principio del devengo, y se re-
conoce el beneficio antes de que se produzca la venta efectiva. Cuando aún no están cosecha-
dos, forman parte del valor del activo, incrementando el valor de éste con contrapartida en re-
sultados, estando valorados por lo tanto al valor razonable. Cuando son cosechados, son reco-
nocidos al valor razonable, que coincide con el valor de mercado neto7; por lo tanto, en este
momento surge la diferencia entre el coste y el valor razonable y se afecta a los resultados.
Cuando se vende sólo es afectado el resultado por la diferencia entre el valor razonable en el
momento de la cosecha y el valor de venta, que no suele ser un importe muy importante.
7 Si en algún estado financiero han sido reconocidos, se minora el valor del activo por ese importe. Éste es un argu-
mento más tenido en cuenta por el consejo del IASB para su reconocimiento a valor razonable. No sería coherente mi-
norar el activo por el valor razonable y reconocer el producto agrícola por el coste. En ese momento se pondría de ma-
nifiesto una pérdida que no reflejaría la realidad de la empresa.
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 90
3. 5. Subvenciones oficiales
Las subvenciones que puede recibir una empresa agraria pueden dividirse en dos tipos, las
subvenciones de explotación o relacionadas con los productos agrícolas, tendentes a asegu-
rar una rentabilidad mínima a las empresas agrarias (producción de trigo, maíz…), y las sub-
venciones de capital, las relacionadas con los activos agrícolas (adquisición de sementales
para mejorar la raza, abandono de cultivos…).
En cuanto al tratamiento de las primeras, es decir, las de explotación, se regulan por las IAS
20, que establece su imputación como un ingreso más, es decir, un tratamiento similar al
PGC español.
– Subvenciones relacionadas con activos valorados al coste (solo puede ocurrir en el mo-
mento de reconocimiento inicial). El tratamiento es el establecido en la IAS 20, que, como
ya hemos señalado, coincide con el PGC, es decir, como ingreso diferido o como menor va-
lor del activo.
– Subvenciones firmes relacionadas con activos biológicos calculados al valor razonable. Se
imputan como ingreso en el momento en que la subvención es exigible. Existe una discre-
pancia con nuestro PGC, que establece su imputación a resultados en proporción a la
amortización del bien
– Subvenciones condicionadas relacionadas con activos biológicos valorados al valor razona-
ble. La empresa debe reconocer la subvención cuando y sólo cuando se han cumplido las
condiciones. Aquí se incluyen también las subvenciones o primas por arranque de viñe-
dos, frutales, abandono de explotaciones ganaderas…, y en comparación con el PGC es-
pañol, se produce el efecto contrario, el de atrasar la imputación a resultados. Si la norma
de Valoración 20 permite reconocer la subvención cuando se cumplen las condiciones o
no hay duda de su cumplimiento, y su imputación a resultados durante un periodo dilatado
de tiempo, las IAS no permiten el reconocimiento de la subvención hasta que no se cum-
plen las condiciones. Observar que es un punto muy severo, porque no sólo no permite la
imputación a resultados, sino tampoco el reconocimiento de la subvención.
• Agrupación de los activos. Éstos se agruparán atendiendo a sus atributos más significati-
vos, tal y como puede ser edad, calidad... determinadas en las cabañas ganaderas por su
raza y genética y en las plantaciones agrícolas por las características del suelo sobre el que
se asientan. Así, según se establece en los párrafos 43 y 44 clasificaremos los activos en:
– Activos biológicos consumibles, que son los que van a ser recolectados como productos
agrícolas (la uva no vendimiada que forma parte del valor razonable de la cepa) o vendi-
dos como activos biológicos (los cerdos vivos).
– Activos biológicos para producir frutos, es decir, aquellos que no acabarán convertidos
en productos agrícolas, sino que a través de la transformación biológica se regeneran a sí
mismos. Un ejemplo de ello serían las gallinas ponedoras en una granja de huevos.
– Activos biológicos maduros o por madurar, siendo los maduros los que son capaces de
producir flujos de efectivo, bien porque han alcanzado las condiciones para su cosecha
(activos biológicos consumibles) o son capaces de sostener una producción (gallinas po-
nedoras).
• Determinación del valor razonable. Éste es quizá el punto más conflictivo, porque revelare-
mos los métodos e hipótesis que hemos seguido para determinar el valor razonable para
cada grupo de activos biológicos o productos agrícolas. Presentaremos una hoja de concilia-
ción con las altas, bajas… por operaciones de compraventa y transformación biológica, si-
milar a las que establece la memoria del PGC. El punto más laborioso radica en determinar
qué parte de la variación en el valor razonable se debe a la mera transformación biológica y
qué parte se debe a variaciones en los precios, con el seguimiento de un ejercicio a otro.
91 ❚ CAPÍTULO 3
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 92
FASCiCULO 03 ok 15/9/04 14:53 Página 93
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 93
C A P Í T U L
4O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 95
C A P Í T U L
4
O
Normas Internacionales de
Inmovilizado no financiero
Contabilidad
José Alberto Toribio Temprado
(Profesor del CEF)
1. Introducción
La implantación de los IAS/IFRS dará lugar a una amplia gama de cambios en relación con los prin-
cipios contables actuales, que pueden resumirse en:
a) Nuevas prácticas sobre clasificación y presentación de partidas, relacionadas con la aparición de
dos nuevas categorías de activos de este tipo: las propiedades de inversión o inversiones inmobi-
liarias y los activos no circulantes poseídos para vender (que se exponen en este capítulo aunque
pueden englobar activos distintos de los inmovilizados materiales o inmateriales tradicionales,
95 ❚ CAPÍTULO 4
como participaciones en asociadas).
b) Adopción de nuevas normas de valoración, aplicables tanto a la medición inicial de las partidas
como a su presentación en balances posteriores al reconocimiento inicial.
c) Introducción de un estándar específico sobre pérdidas por deterioro de valor (IAS 36, que no es
objeto de exposición en este capítulo).
d) Exigencias ampliadas sobre revelación de información en las notas.
En la medida permitida por las evidentes limitaciones de espacio, se destacarán los cambios más
significativos respecto de los IAS aplicables en el ejercicio actual.
b) Su arrendamiento a terceros (salvo que sean terrenos o edificios y el arrendamiento sea ope-
rativo: se clasifican como propiedades de inversión y caen dentro del alcance de IAS 40).
c) Para propósitos administrativos.
Como se ve, el cambio principal en relación con la práctica contable española es la inclusión
en una categoría separada de activo de los inmuebles poseídos como inversión, bajo ciertas
condiciones. No obstante, las normas de IAS 16 se aplican a este tipo de activos (investment
properties):
a) Mientras se encuentran en fase de desarrollo, en cualquier caso.
b) En balances posteriores si la entidad opta por el modelo del coste para su valoración.
Los activos biológicos regulados en IAS 41, las concesiones mineras y las reservas sobre re-
cursos no renovables están expresamente excluidos del campo de aplicación de IAS 16.
A diferencia del texto actual, la versión 2005 de la norma incorpora una regla de reconoci-
miento única aplicable a todos los desembolsos relacionados con la partida, sean iniciales o
posteriores. Verificado el cumplimiento de las condiciones de capitalización indicadas, el in-
movilizado material se valora inicialmente al coste.
Se entiende por costo el importe de efectivo o medios líquidos equivalentes pagados, o el va-
lor razonable de la contraprestación entregada para comprar el activo en el momento de su
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 97
Precio de compra
●
– Descuentos y rebajas de toda clase
●
+ Aranceles de importación
●
+ Impuestos indirectos no recuperables
●
+ Costes directamente relacionados con la puesta en servicio
●
– Importes netos recibidos por venta de partidas originadas durante la
preparación del activo
●
+ Costes de desmantelamiento, retiro y restauración del entorno
●
+ Intereses capitalizados (opcional: IAS 23, párrafo 11)
●
– Subvenciones gubernamentales (opcional: IAS 20, párrafo 24)
●
= Costo de adquisición
97 ❚ CAPÍTULO 4
no aporta ninguna guía para determinar cuándo se cumple esta condición, IAS 23 proporciona
algunas explicaciones que pueden resultar útiles (ver párrafos 26 y 27 de esa norma):
a) Normalmente, el activo está preparado para su utilización esperada cuando se ha comple-
tado la construcción física del mismo, aunque queden trabajos administrativos por ejecutar.
b) La preparación del activo se considera sustancialmente terminada cuando solamente que-
dan modificaciones menores por ejecutar.
c) Si la construcción de un activo se realiza por partes, y cada parte es susceptible de ser uti-
lizada por separado mientras se terminan las restantes, la capitalización termina cuando
estén terminadas, sustancialmente, las actividades necesarias para preparar esa parte
para su utilización (en el mismo sentido, la Norma Séptima de la Resolución del ICAC de
30 de julio de 1991).
[EJEMPLO]
Dado que no son directamente atribuibles a la puesta del activo en la naturaleza y ubicación
necesarias para que opere en las condiciones indicadas por la gerencia, no se incluyen en el
valor inicial de la instalación:
a) Los costes de formación del personal que usará el activo (por lo general, estos costes no
son activables ni por éste ni por ningún concepto).
b) Los costes de las horas empleadas por el personal en la selección de modelo y proveedor,
ni la porción de alquiler imputada, dado que no son costes directos (ni incrementales).
También supone un cambio significativo el tratamiento de los costes relacionados con el des-
mantelamiento y restauración del entorno, cuyo tratamiento IAS es una consecuencia ineludi-
98 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
ble de las definiciones de activo y pasivo del MC. IAS 16 establece que estos costes se midan
con arreglo a IAS 37, y que se agreguen al importe en libros del activo correspondiente, si la
entidad incurre en la obligación (párrafo 16.c):
a) En el momento de adquirir el activo.
b) Como consecuencia de usarlo para una finalidad diferente de la producción de inventarios
en el periodo.
El coste activado se depreciará sistemáticamente a lo largo de la vida útil del activo, si se in-
curre en ellos en el momento inicial, o dentro de la vida útil restante, si se incurrió en ellos
con posterioridad. Tratándose de terrenos, se deprecian en el plazo en que se esperan recibir
los beneficios económicos relacionados con estos desembolsos. En cualquier caso, la exis-
tencia de la obligación (legal o implícita) de retirada o restauración debe ser apreciada
usando las guías de IAS 37.
De acuerdo con IAS 37, estos costes se valoran por la mejor estimación del desembolso que
la empresa debería efectuar en la fecha del balance para liquidar la obligación (párrafo 36).
Si la diferencia entre el valor nominal de la deuda y su valor presente es significativa, se usa el
valor presente (párrafo 45). El valor de la deuda se ajusta entonces en cada balance posterior,
reconociéndose un gasto financiero (párrafo 60). Además, el valor de las provisiones debe ser
revisado en cada fecha de cierre (párrafo 59).
[EJEMPLO]
La legislación vigente en el país obliga a retirar la instalación que acaba de ser adquirida
una vez concluida la explotación (que se espera dure 20 años). Exige también la restaura-
ción del entorno natural. Los costos relacionados con estas obligaciones se cifran en
10.000.000 de euros (a valor presente).
La empresa tiene una obligación legal consecuencia de un suceso pasado. Debe reconocer
una provisión con arreglo a lo prescrito en IAS 37. El costo estimado relacionado con la can-
celación de ese pasivo se trata como un incremento del costo inicial del activo.
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 99
99 ❚ CAPÍTULO 4
●
– Pérdidas por deterioro del valor acumuladas posteriores
●
= Importe según libros
Dado que la posibilidad de usar el valor razonable como base para la valoración de un activo
de este tipo difiere (o más bien choca) con la práctica contable tradicional española, dedica-
remos lo que sigue a la exposición de las líneas principales de este método. De entrada, es
importante subrayar que las revaluaciones no son obligatorias, y que la opción del párrafo 28
se ejerce clase por clase, de modo que es posible revaluar unas categorías de activos (por
ejemplo, inmuebles usados por la entidad) y no otras. Por otro lado, las revaluaciones no tie-
nen por qué ser anuales, salvo que el valor razonable del activo oscile significativamente. No
obstante, y por lo general, todos los activos de una misma clase deben ser revaluados al
mismo tiempo. La norma recomienda que se tome como valor razonable el valor de mercado
que determine un tasador independiente cualificado (se exige que se revele en las notas si ha
sido así). Si no existe valor de mercado evidente para el activo, es posible usar otra base
(como coste de reposición depreciado).
Los cambios en el valor en libros originados por una revaluación cumplen la definición de ga-
nancias o pérdidas del MC. Las revaluaciones, en síntesis, se contabilizan así:
a) Los incrementos de valor en libros se llevan a una partida especial de patrimonio neto
(“superávit de revaluación”), salvo que representen reversión de una pérdida por revalua-
ción previamente cargada a resultados.
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 100
b) Las disminuciones de valor se llevan a resultados en lo que excedan del saldo de superá-
vit previamente reconocido para ese activo.
c) La depreciación acumulada previamente reconocida puede ser cancelada directamente
contra la cuenta de inmovilizado o reexpresada en la misma proporción que ésta.
El método escogido por IAS 12 para la contabilización del efecto impositivo es el del pasivo
basado en el balance. Por consiguiente, el superávit de revaluación se expone neto de todo
efecto impositivo relacionado; esto es, los impuestos corrientes o diferidos relacionados con la
revaluación se llevan contra la propia cuenta de patrimonio neto (IAS 12, párrafo 61).
[EJEMPLO]
Se posee un activo de propiedades, planta y equipo, comprado hace cuatro años por 10.000
euros. Se ha venido depreciando linealmente sobre la base de una vida de servicio de 10
años. Al cierre del ejercicio 2002 se opta por utilizar el valor razonable como base de medi-
ción. Un tasador independiente cifra en 9.000 euros ese valor. Supondremos que la revalua-
ción no está sometida a gravamen, y que la tasa de impuesto es del 30%.
100 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Se indican a continuación los asientos a practicar en cada uno de los casos descritos en el
párrafo 35.
10.000
9.000 – 10.000 – • 4 = 9.000 – 6.000 = 3.000
10
3.000
Que representa un incremento de: = 50%
6.000
El asiento a realizar en este caso es:
En todo caso, la entidad reconoce un pasivo por impuesto diferido. Dado que la entidad
sólo puede deducir 6.000 euros a efectos fiscales en ejercicios posteriores, la recuperación
del activo origina mayores pagos de impuestos que si no hubiese diferencias.
El superávit de revaluación previamente reconocido se traspasa a reservas, sin pasar por re-
sultados, a medida que la entidad cesa en el reconocimiento del activo, esto es:
a) Cuando el activo se retira o enajena (se traspasa todo el saldo restante de la cuenta).
b) A medida que se deprecia, si la entidad recupera su inversión en activos depreciables por
medio del uso.
[EJEMPLO]
Asientos a realizar en el ejercicio siguiente en relación al activo revaluado del ejemplo pre-
cedente.
El nuevo valor en libros (9.000 euros) se deprecia a lo largo de su vida útil residual. Si, apli-
cando el párrafo 41 de IAS 16, se traspasa a las ganancias retenidas un importe igual a la di-
ferencia entre la depreciación calculada sobre la base del costo histórico y la que resulta del
valor revaluado, el importe del traspaso se calculará neto de cualquier impuesto diferido
(IAS 12, párrafo 64):
101 ❚ CAPÍTULO 4
Depreciación (gasto) 1.500
Depreciación acumulada 1.500
2. 4. Depreciación sistemática
La depreciación se define como la distribución del importe depreciable del activo (definido
como diferencia entre su coste, o valor que lo sustituya, y su valor residual) a lo largo de la vida
útil del activo (tiempo durante el cual se espera usar el activo o número de unidades de produc-
ción o similares que se espera obtener). Salvo en lo siguiente, no existen grandes diferencias
conceptuales en esta área respecto de los principios contables aplicados tradicionalmente:
a) IAS 16 exige la revisión anual de las estimaciones usadas en el cálculo de los cargos anua-
les por depreciación (la versión 2004 de la norma sólo exige su revisión “periódica”).
b) Las correcciones de errores contables, bajo IAS 8, han de ser contabilizadas usando el
método retrospectivo (la información se expone como si el error no se hubiese cometido
nunca, reexpresando en consecuencia la información comparativa).
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 102
c) La versión 2005 de IAS 16 modifica la definición de valor residual, que pasa a ser “la can-
tidad que la entidad obtendría en la actualidad por la enajenación del activo, tras deducir
los costes de transmisión, si el activo tuviese la edad y estuviese en las condiciones que se
espera tenga al final de su vida útil”.
d) IAS 16 exige que todo componente con un coste significativo en relación con el coste total
del inmovilizado sea depreciado por separado (la versión 2004 de la norma dispone que
se contabilicen aparte los componentes que tengan vidas útiles o a los que se apliquen
métodos de amortización distintos).
Cuando el valor residual del activo es mayor que su valor en libros, el proceso de deprecia-
ción sistemática se interrumpe (se reanuda si posteriormente cae de nuevo por debajo) aun-
que la entidad siga usando el inmovilizado. Hay que subrayar, no obstante, que el valor resi-
dual se determina sobre la base de transacciones actuales sobre activos semejantes. La ver-
sión derogada de IAS 16 (vigente aún en 2004) lo definía como “cantidad neta que la entidad
espera obtener de un activo al final de su vida útil, después de deducir los eventuales costes
derivados de la desapropiación”, sin precisar si tenía que tomarse o no en cuenta el efecto de
la inflación.
102 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
La compañía espera usar la edificación durante los 40 años siguientes. En ella se hallan ins-
talados los elementos siguientes:
Se pide: determinar el coste inicial de la edificación y del terreno, y el importe del primer
cargo por depreciación (suponiendo valores residuales nulos y amortizaciones lineales).
CARGO POR
VIDA ÚTIL
DEPRECIACIÓN
103 ❚ CAPÍTULO 4
Ya hemos indicado que la versión 2005 de la norma instaura una regla única de capitaliza-
ción aplicable a todos los desembolsos relacionados con la partida. También hemos visto que
los componentes que tengan un coste relativamente importante deben ser depreciados por
separado (aunque la norma permite que se amorticen juntos aquellos que tengan una misma
vida útil y método).
b) Las de IAS 18 para la identificación del momento en que el activo se da de baja en cuen-
tas por venta (y se reconocen los eventuales ingresos).
c) Las normas de IAS 17 para el caso de que el activo sea objeto de una operación de sale
and lease back.
d) Las de IFRS 5 para el caso de que los activos sean clasificados como held for sale previa-
mente a su enajenación.
Salvo que el activo se clasifique como held for sale, el proceso de amortización no se inte-
rrumpe por el hecho de que el elemento sea retirado del servicio con vistas a su venta (se de-
roga la norma del actual párrafo 59). Por otro lado, la versión 2005 de IAS 16 incorpora el en-
foque de SIC 23 sobre indemnizaciones por deterioro del valor de las partidas: el deterioro, la
indemnización y la reparación del activo dañado (o la adquisición de uno sustitutorio) son su-
cesos independientes que se contabilizan por separado.
En la mayoría de los sistemas contables se aplican reglas de valoración comunes a todos los
activos fijos inmobiliarios. Habitualmente, el coste histórico depreciado (corregido, en su
caso, en el importe de las pérdidas por deterioro detectadas) constituye la base de medición
de esta clase de activos, sea cual sea su destino. En muchos países, como España, los acti-
vos inmobiliarios poseídos como inversión a largo plazo se presentan en la misma línea de ba-
lance que los ocupados por la propia entidad.
En 1981, el ASB británico publicó una norma específica (SSAP 19, Accounting for Investments
Properties) sobre contabilidad de inversiones inmobiliarias. Esta norma, que constituye el ante-
cedente inmediato de IAS 40, eliminó la obligación de depreciar sistemáticamente estos activos
sobre la base de SSAP 12 y exigió que se incluyeran en el balance por su valor de mercado, re-
conociéndose los cambios en valor razonable en una cuenta separada de patrimonio neto.
2. 8. Definición y alcance
IAS 40 se aplica a la contabilidad de propiedades de inversión, excepto cuando otro IAS re-
quiera o permita un tratamiento contable diferente. Las propiedades de inversión son terre-
nos, edificios o partes de los mismos (o ambos) que se tienen:
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 105
Conforme al texto aprobado en 2000, el arrendatario sólo podía clasificar el activo inmobiliario
arrendado como propiedad de inversión si el contrato era calificado como arrendamiento fi-
nanciero. La principal novedad de la nueva versión de la norma consiste en permitir la aplica-
ción de la técnica del arrendamiento financiero a contratos que se clasifican como arriendos
operativos según las disposiciones de IAS 17, siempre que se cumplan estas condiciones:
– La partida arrendada cumple la definición de propiedad de inversión.
– La entidad aplica la base del valor razonable para la medición posterior al reconocimiento
inicial.
No se exige la aplicación de esta técnica a todos los arrendamientos operativos sobre propie-
dades de inversión. La opción se ejerce propiedad por propiedad. No obstante, cuando la em-
presa opta por aplicar la base del valor razonable, ha de aplicar esta técnica a todas las propie-
dades de inversión reconocidas en su activo, salvo a aquellas a las que resulte aplicable la ex-
cepción del párrafo 53 (imposibilidad de determinar el valor razonable de modo fiable).
No se consideran propiedades de inversión, y quedan por tanto fuera del alcance de IAS 40
los inmuebles siguientes:
– Los ocupados por la entidad que se usan en la producción o suministro de bienes o servi-
cios, o para propósitos administrativos, contabilizados según IAS 16.
– Los poseídos para su venta en el curso normal de las operaciones, o las propiedades que
105 ❚ CAPÍTULO 4
están siendo construidas o desarrolladas con vistas a dicha venta (se aplica IAS 2).
– Los que están siendo desarrollados o mejorados por cuenta de terceros, contabilizados con
arreglo a IAS 11.
– Propiedades que están siendo construidas o desarrolladas para usarlas como propiedades
de inversión, que se contabilizan bajo IAS 16 hasta que la construcción o desarrollo estén
completos (IAS 40 sí se aplica a las propiedades de inversión que están siendo mejoradas,
si no se prevé un cambio en su uso).
Además, esta norma no resulta aplicable a activos biológicos adheridos al suelo relacionados
con la actividad agrícola ni derechos mineros, exploración y extracción de minerales, petró-
leo, gas natural y recursos no renovables similares.
[EJEMPLO]
ACTIVO CALIFICACIÓN
Una propiedad puede incluir una parte que se posee para ganar rentas o plusvalía, y otra que
se tiene para su uso en la producción o suministro de bienes o servicios, o para propósitos
administrativos. Por ejemplo, un edificio de oficinas en el que 9 de las 10 plantas están ocu-
padas por las oficinas de la dirección de la entidad, mientras que el décimo piso está alqui-
lado a un tercero en arrendamiento operativo. IAS 40 regula esta situación y exige que las dos
partes se contabilicen por separado si pueden ser vendidas o arrendadas (mediante arrenda-
miento financiero) independientemente. Si no es el caso, sólo se contabiliza el activo como
propiedad de inversión si la fracción ocupada por el dueño es insignificante (se rechazó la fi-
jación de un porcentaje concreto). De lo contrario, se aplicará IAS 16 a la propiedad entera.
[EJEMPLO]
La parte del edificio ocupada por el dueño se contabiliza como un inmovilizado material (la
sociedad no estará obligada a determinar su valor razonable para propósitos de medición o
revelación). El resto del costo de la construcción se reconoce como un activo de propieda-
des de inversión. Siempre que sea posible vender o ceder mediante un arrendamiento fi-
nanciero la parte del terreno relacionada con las plantas ocupadas por el dueño (por ejem-
plo, si existe o se insta la división horizontal del inmueble), se clasificará como propiedad
de inversión la porción imputable a las oficinas que se proyecta arrendar, y se incluirá en in-
movilizado material el importe restante.
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 107
[EJEMPLO]
La entidad posee un edificio de apartamentos en una zona turística. Los apartamentos se al-
quilan completamente amueblados. La entidad presta además servicios de limpieza, vigi-
lancia y cuidado de jardines.
Es bastante probable que los servicios adicionales prestados a los ocupantes de los aparta-
mentos tengan una importancia relativamente escasa. La mayor parte de los cobros se reci-
ben en contraprestación de la concesión del derecho al uso del activo. Seguramente, el in-
mueble será clasificado como propiedad de inversión.
107 ❚ CAPÍTULO 4
En algunos países, es común que las entidades efectúen importantes pagos iniciales para to-
mar derechos de arrendamiento a largo plazo (incluso hasta 999 años) sobre terrenos. Es po-
sible que el único modo de transmitir derechos equivalentes a la propiedad de la tierra sea
constituir arrendamientos de esta clase. Dichos derechos son indistinguibles de los que se
adquieren cuando se compra el terreno. IAS 40 no cambia la presunción de IAS 17 en el sen-
tido de que los arrendamientos de suelo son de tipo operativo (IAS 17, párrafo 11) cuando no
se espera que el arrendatario reciba la propiedad al término del plazo de arrendamiento. Sin
embargo, el nuevo texto permite aplicar la técnica del arrendamiento financiero a los arrenda-
mientos operativos sobre propiedades de inversión, siempre que la entidad use la base del
valor razonable para su medición posterior. Si no se aplica dicha técnica, los pagos iniciales o
primas por el derecho de traspaso se consideran en todo caso pagos anticipados por el arren-
damiento, y se amortizan a lo largo del plazo de vigencia del mismo. Si el arrendatario no re-
cibe la propiedad del activo hasta que concluye el plazo de arrendamiento, el terreno se cali-
ficará como propiedad de inversión a partir de esa fecha.
[EJEMPLO]
Se han adquirido derechos de explotación sobre un terreno durante 300 años. Se ha efec-
tuado un pago inicial de 150 millones de euros y se ha comprometido el pago de una renta
anual prepagable de 0,5 millones de euros. La tasa de interés incremental de los préstamos
del arrendatario es del 6%. El terreno se adquiere con el propósito de levantar un edificio de
oficinas que se cederá a terceros en arrendamiento operativo. Las cantidades invertidas en
la construcción de la edificación se elevan a 300 millones de euros (incluyendo certificacio-
nes de obra e impuestos).
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 108
Conforme a la versión de IAS 40 aprobada en 2000, los intereses sobre el terreno se tratan
como un arrendamiento operativo. El pago inicial se distribuye sobre el tiempo de vigencia
de los derechos de explotación (con arreglo al método de la línea recta) y se considera un
anticipo por el arrendamiento. Así, en la fecha del desembolso inicial (en millones):
Propiedades de inversión
300
(en construcción)
Efectivo 300
Suponiendo que la entidad opta por la base del valor razonable para la valoración poste-
rior a la inicial de sus propiedades de inversión, y que contabiliza el arrendamiento ope-
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 109
rativo sobre el suelo como si fuese un arrendamiento financiero, los asientos que efec-
tuará serán:
El valor presente de los pagos mínimos por arrendamiento se ha hallado aplicando la tasa
de interés incremental de los préstamos del arrendatario:
1 – (1 + 0,09)–300
PV = 150.000 + 500.000 • • (1 + 0,09) = 156.055.055,56
0,09
Los pagos por arrendamiento se dividen en pagos de principal y carga financiera. La carga
financiera se calcula usando el método del interés efectivo (la tasa efectiva de la operación
en este caso coincide con la tasa de interés incremental de los préstamos del arrendatario).
Como la primera cuota de arrendamiento no incorpora carga financiera, en el momento de
abonarla se hará:
109 ❚ CAPÍTULO 4
Al cierre del ejercicio, por el interés acumulado:
Suponiendo que los intereses del arrendatario en la propiedad arrendada se valoren en 455
millones de euros en la fecha del cierre (incluyendo el valor de la edificación), el apunte a
efectuar será:
Durante gran parte del plazo de arrendamiento, el importe dedicado a devolución de princi-
pal es despreciable. Al comienzo del año siguiente, por el pago de la cuota por arrenda-
miento anual:
líticas contables uniformes: IAS 27, párrafo 21). IAS 40 considera que el modelo de valor ra-
zonable proporciona más información útil sobre el rendimiento financiero de una propiedad
de inversión. Por ello (ver párrafos 30-32):
a) Si se opta por el modelo del costo, se revelará información sobre el valor razonable de las
propiedades de inversión (por tanto, se exige a todas las empresas la determinación perió-
dica de ese valor).
b) Se considera altamente improbable que un cambio del modelo del valor razonable al mo-
delo del costo produzca una presentación más apropiada de los sucesos y transacciones
(sería un cambio de política contable no permitido, según el párrafo 42 de IAS 8), pero no
al contrario.
Como veremos a continuación, sólo en el caso de que sea impracticable un cálculo fiable del
fair value se considera más apropiado el método del costo.
IAS 40 deja claro que si hay un valor de mercado para la propiedad de inversión, el valor ra-
zonable será ese valor de mercado (que se hallaría a partir de los precios actuales para pro-
piedades similares en la misma localidad y condiciones, y sujetas a contratos de arrenda-
miento que sean similares), sin deducción de costo alguno por desapropiación. En todo caso,
la norma no describe las bases que deben usarse para determinar el valor razonable. Se re-
comienda (pero no se exige) a las empresas el uso de valores determinados según tasación
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 111
Si no hay un mercado activo se considerará información de diferentes fuentes (IAS 40, pá-
rrafo 46):
– Precios actuales en un mercado activo para propiedades diferentes, ajustados para reflejar
tales diferencias.
– Precios recientes en mercados menos activos, con ajustes para reflejar cambios en las con-
diciones económicas desde la fecha en que se determinaron.
– Proyecciones de flujos de efectivo descontados, basados en arrendamientos u otros contra-
tos y apoyados por evidencias externas, tales como rentas actuales de mercado para pro-
piedades similares (considerando la propiedad en su estado actual: se ignoran los desem-
bolsos posteriores proyectados y los beneficios asociados con ellos).
[EJEMPLO]
La sociedad ha comprado un inmueble para su cesión a terceros mediante arrendamiento
operativo. El costo inicial fue de 400 millones de euros, de los que un 30% se considera im-
putable al terreno. Se escoge el modelo del valor razonable para la medición posterior a la
inicial. El valor razonable de la propiedad (según tasación pericial) es de 425 millones de eu-
ros en la fecha del cierre. La vida útil de la edificación se cifra en 30 años.
111 ❚ CAPÍTULO 4
Propiedades de inversión 400
Efectivo 400
Propiedades de inversión 25
Ganancias por valor razonable
(resultados de operación) 25
La característica de identificabilidad permite distinguir el activo intangible como una partida di-
ferente del fondo de comercio cuando se adquiere en una combinación de negocios. Puesto
que el nuevo IFRS 3 incorpora el enfoque de SFAS 142 sobre contabilidad del fondo de comer-
cio (sustitución de la amortización sistemática por una prueba anual de deterioro de valor), se
incorporan nuevas normas que intentan evitar que se incluyan en él activos inmateriales que
deben ser objeto de contabilización separada (como ha sido práctica corriente bajo la versión de
la norma aprobada en 1998). El activo cumple la condición de identificabilidad si, y sólo si:
a) El elemento es separable: es decir, se puede vender, alquilar o intercambiar, o distribuir
los beneficios económicos asociados al activo sin disponer de los beneficios incorporados
a otros distintos.
b) Se han recibido derechos legales o contractuales sobre el activo (en el mismo sentido, el
párrafo 39 de SFAS 141).
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 113
Por lo general, ese poder estará basado en alguna clase de derecho exigible ante los tribuna-
les, de modo que resultará difícil demostrar que existe control si éste no existe. A diferencia
de FRS 10, IAS 38 no se refiere de modo explícito al secreto como medio de control sobre los
beneficios económicos derivados de un conocimiento técnico o intelectual (posibilidad que sí
menciona el MC). No obstante lo anterior, la interpretación que hacen el IASB y el FASB de la
característica de control es más amplia de lo que una primera impresión puede sugerir.
[EJEMPLO]
Indicar cuáles de las siguientes partidas cumplen las características de identificabilidad y
control (supóngase que se trata de partidas adquiridas como parte de una combinación de
negocios).
a) Una licencia de radio.
b) Una base de datos de clientes.
c) Relaciones comerciales con clientes no contractuales.
d) Un pedido cancelable originado por un contrato.
e) Contratos de servicio a clientes, si existe una cláusula que impide la transferencia sepa-
rada del activo (sólo se puede transmitir con la entidad entera).
f) Un registro de títulos (title plant) elaborado por una entidad privada, en el que se recoge
información sobre la situación legal de todas las fincas de un municipio (gravámenes y
cadena de titularidades desde 1900), y que se mantiene actualizado.
113 ❚ CAPÍTULO 4
g) Una tecnología no patentada que se usa para obtener un producto mundialmente cono-
cido, cuya marca está protegida legalmente (la legislación nacional de la entidad le
obliga, en caso de venta de la marca, a transmitir también todo lo necesario para que el
comprador comercialice un producto idéntico).
h) Los beneficios que se espera obtener de un contrato que se encuentra en fase de negocia-
ción en la fecha de la toma de control.
IAS 38 no se aplica al fondo de comercio (cuya contabilidad se rige por IFRS 3) ni a los de-
más activos intangibles cubiertos por otros IAS.
pueda determinar con fiabilidad su valor razonable (se considera que el valor razonable refleja
las expectativas del mercado sobre la probabilidad de que los beneficios económicos asocia-
dos a la partida fluyan hacia la entidad). Normalmente, el valor razonable del intangible podrá
ser determinado con suficiente fiabilidad (párrafo 35). Si existe un rango amplio de valores ra-
zonables posibles, el valor razonable toma en cuenta los efectos de dicha incertidumbre. El pá-
rrafo 38 considera que las únicas circunstancias en que puede no ser posible determinar di-
cho valor se dan cuando el intangible procede de derechos contractuales o legales y además:
a) No es separable.
b) Es separable, pero no existe evidencia ni historial de transacciones sobre activos de este tipo.
[EJEMPLO]
Se ha adquirido la mayoría del capital y de los derechos de voto de una entidad dedicada a
la producción de papel. Esta entidad tiene concedido un permiso para consumir cierta canti-
dad de agua al año. Estos permisos se conceden a muy bajo coste, y se renuevan de ma-
nera prácticamente automática cada 10 años. La entidad no puede funcionar sin consumir
esa agua. Los permisos no son transmisibles si no es como parte del negocio entero.
Los problemas de reconocimiento son especialmente complejos cuando se trata de activos ge-
nerados internamente. Las condiciones de identificabilidad (separabilidad, atribución de dere-
chos legales) y control son más fácilmente demostrables cuando el activo ha sido adquirido en
una transacción de intercambio. Por esta razón, y por la necesidad de distinguir los desembol-
sos en intangibles de la plusvalía generada internamente, se proporcionan guías específicas.
Al igual que los principios contables vigentes en España (Norma Segunda de la Resolución del
ICAC de 21 de enero de 1992), IAS 38 exige dividir en dos fases el ciclo de generación del activo:
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 115
a) Fase de investigación: los desembolsos de esta fase se contabilizan como gastos en el pe-
riodo en que se incurre en ellos. Se entiende por investigación (IAS 38, párrafo 8) “todo
aquel estudio original y planificado, emprendido con la finalidad de obtener nuevos cono-
cimientos científicos o técnicos”.
b) Fase de desarrollo: pueden reconocerse como costos de un activo intangible los desembol-
sos efectuados desde que se cumplen las condiciones para su reconocimiento. Se considera
desarrollo la aplicación de conocimientos “a un plan o diseño en particular para la produc-
ción de materiales, productos, métodos, procesos o sistemas nuevos, o sustancialmente me-
jorados, antes del comienzo de su producción o uso comercial” (IAS 38, párrafo 8).
El párrafo 57 de IAS 38 enumera las condiciones que deben cumplirse para el reconoci-
miento de un activo en la fase de desarrollo. Como podrá apreciarse, no se aportan grandes
novedades con respecto a la Norma Segunda de la Resolución del ICAC de 21 de enero de
1992. Concretamente, se exige a la gerencia que demuestre:
– Que es técnicamente posible completar el desarrollo, de manera que el activo intangible
esté disponible para su uso o su venta.
– Que tiene la intención de completar el activo para usarlo o venderlo.
– Que es capaz de utilizar o vender el activo.
– La forma en que el activo va a generar los beneficios económicos esperados (debe pro-
barse la existencia de un mercado para la producción del intangible o para el activo en sí, o
la utilidad del activo para la entidad si se va usar internamente), para lo que se evaluarán
tales rendimientos usando los principios de IAS 36 (IAS 38, párrafo 48).
115 ❚ CAPÍTULO 4
– Que se dispone de los recursos necesarios para completar el desarrollo y usar o vender el
activo (por ejemplo, obteniendo de un prestamista una declaración de su voluntad de fi-
nanciar el plan: ver párrafo 49).
– Que es capaz de medir fiablemente el desembolso atribuible al desarrollo del activo (por lo
general, el sistema de costos de la empresa puede aportar esta medición).
Los desembolsos relacionados con la partida se cargan a gastos cuando no se cumplen las
condiciones de capitalización, salvo si la partida se adquiere en una combinación de nego-
cios, en cuyo caso la falta de reconocimiento tiene un efecto consecuencial en la valoración
del fondo de comercio. No está permitida la reexpresión de los importes que se cargaron a
gastos en informes anuales o intermedios anteriores.
El modelo de valor revaluado sólo se puede usar si existe un mercado activo para la partida
(un mercado en el que se intercambian partidas homogéneas, donde normalmente se en-
cuentran compradores y vendedores dispuestos, y en el que los precios están a disposición
del público). Además, el funcionamiento contable del modelo es igual que el de IAS 16, que
ya se expuso antes. Por tanto, nos centraremos en el modelo del coste, y en particular en las
normas sobre amortización.
Tras el reconocimiento inicial, la entidad ha de usar las guías de los párrafos 90 a 96 para de-
terminar:
a) Si la vida útil del activo es finita o indefinida.
b) En caso de ser finita, el tiempo durante el cual se espera usar el activo, o el número de
unidades de producción que se espera obtener de él.
En los informes IAS publicados hasta ahora no existen intangibles con vida indefinida. Sin em-
bargo, las normas contables de algunos países recogían ya esta posibilidad (FRS 10, párrafo 17;
SFAS 142, párrafo 16). Algunos ejemplos de partidas que se han considerado como tales son:
– Determinadas marcas.
– Derechos de ruta aérea.
– Licencias de radio o televisión.
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 117
Si el activo procede de un derecho contractual o legal, la vida útil no excederá de la vida del
derecho. Si el derecho es renovable, y es evidente que la entidad podrá prorrogar el derecho
sin costes significativos, la vida útil incluirá las posibles prórrogas (como ocurre en el caso de
las licencias de radio o televisión, por ejemplo). La amortización de los activos con vida finita
está sujeta a las siguientes reglas:
a) Se presume que deben ser amortizados linealmente si no es posible determinar fiable-
mente el patrón de consumo de los beneficios económicos que generan.
b) Se presume que no es apropiado un método que produzca un cargo por amortización in-
ferior al lineal.
c) Se presume que su valor residual es nulo, salvo que exista:
– Un compromiso con un tercero para que compre el activo al final de su vida útil.
– Un mercado activo para la partida, siempre que el valor residual se pueda estimar por re-
ferencia a ese mercado y se espere que el mercado siga existiendo al final de la vida útil.
[EJEMPLO]
La entidad posee una patente con una vida económica de 15 años. La entidad, no obstante,
tiene previsto retirar del uso este activo y venderlo dentro de 8 años. Se considera que se
pueden obtener 100 por su venta en esa fecha, una vez deducidos los costes relacionados
con la transmisión. El activo se contabilizó por su coste inicial de 2.000 euros. Aunque la
vida útil de la partida es sensiblemente más corta que su vida económica, no se considera
valor residual alguno porque no existe un compromiso con un tercero para que lo adquiera.
Por tanto, el cargo por amortización (lineal) será:
2.000
= 250
8
117 ❚ CAPÍTULO 4
Como en IAS 16, todas las estimaciones empleadas en el cálculo de la amortización deben ser
revisadas anualmente. Los cambios en las estimaciones se tratan prospectivamente. Si la entidad
ha calificado como indefinida la vida útil de algunos intangibles, también es necesario evaluar,
cada año cuando menos, si las circunstancias siguen apoyando esa evaluación. Si no es así, es
necesario aplicar una prueba de deterioro de valor a la partida (el cambio se considera un indicio
de deterioro de valor). El valor en libros resultante se amortiza a lo largo de la vida útil restante.
El alcance de las reglas de IFRS 5 es heterogéneo. Sus normas sobre clasificación y presenta-
ción se aplican a todos los activos no corrientes y disposal groups de la entidad. En cambio, las
reglas de valoración no se aplican a ciertos activos (activos por impuesto diferido, activos rela-
cionados con beneficios a empleados, etcétera), que se rigen por sus estándares específicos.
Un disposal group es un grupo de activos que será enajenado, mediante venta o de otro
modo, en una transacción única, junto con pasivos directamente asociados a aquellos acti-
vos, que serán también transferidos en la operación. Incluye fondo de comercio si el grupo es
una unidad generadora de efectivo a la que ha sido imputado, o es una operación incluida en
dicha unidad (ver IAS 36, párrafos 80 y 86).
tención de la gerencia. Más bien se trata de una clasificación basada en reglas cuyo cumpli-
miento ha de quedar acreditado. Concretamente:
a) El activo ha de estar disponible para venta inmediata en su estado actual, de acuerdo con
los plazos y condiciones habituales para este tipo de activos.
b) La venta ha de ser altamente probable (probabilidad significativamente superior al 50%),
lo que, a su vez, supone que:
– El nivel directivo competente se ha comprometido a ejecutar un plan de venta del activo.
– El activo (o disposal group) está siendo comercializado activamente a un precio cohe-
rente con su valor razonable actual;
– Se espera que la venta cumpla las condiciones para su reconocimiento en el plazo de un
año contado desde la fecha de clasificación (se admite una extensión del plazo requerido
para completar la venta cuando está motivada por causas que se hallan fuera de la enti-
dad y es evidente que la entidad sigue comprometida a ejecutar su plan de venta).
– Las acciones requeridas para completar el plan indican que es improbable que se intro-
duzcan cambios significativos o que el plan sea abandonado.
2. 19. Valoración
Los activos y disposal groups que cumplan las condiciones enumeradas anteriormente se mi-
den por su valor en libros o su valor razonable neto de costes de venta, lo que sea menor, y se
suspende la depreciación o amortización de los activos así clasificados. Las ganancias o pér-
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 119
didas se clasifican como resultados de operaciones que continúan. El valor razonable neto
del disposal group se determina para el grupo entero, pero las pérdidas por deterioro de valor
que se pongan de manifiesto (o sus reversiones) se atribuyen sólo a los activos no corrientes
sometidos a IFRS 5. En valoraciones posteriores del disposal group, se valoran todas las par-
tidas excluidas de las normas de medición de IFRS 5 usando los estándares de referencia an-
tes de hallar el valor razonable neto.
[EJEMPLO]
La empresa B, propietaria de varias refinerías (cada una de las cuales constituye una unidad
generadora de efectivo para los efectos de IAS 36), ha clasificado como disponibles para la
venta los activos y pasivos asociados a una de sus explotaciones. Una tasación indepen-
diente ha evaluado en 1.200 euros el precio de mercado de la misma. Se espera que los cos-
tes asociados a la transacción sean aproximadamente de 50 euros. El detalle de activos y
pasivos que se proyecta enajenar de manera conjunta es:
119 ❚ CAPÍTULO 4
Los activos financieros disponibles para venta están valorados por su valor de mercado en
la fecha del último balance. La entidad ha imputado a patrimonio neto las ganancias acumu-
ladas por revalorización de estos activos (50 euros). El resto de las partidas se valoran por
su coste depreciado o amortizado. Su valor contable incluye cualquier depreciación, amorti-
zación o interés acumulado hasta la fecha de clasificación. El valor de mercado de los acti-
vos financieros disponibles para venta es de 140 euros en la actualidad.
El valor realizable neto de las existencias es de 280 euros.Antes de aplicar las reglas de valo-
ración de IFRS 5 se valoran los activos del disposal group usando los estándares relevantes.
En este caso, es preciso recoger los cambios en el valor razonable de los activos financieros
disponibles para venta y comparar el valor en libros de las existencias con su valor de reali-
zación neto:
Coste de ventas 20
Inventarios 20
FASCiCULO 04 16/9/04 14:46 Página 120
A continuación se compara el valor en libros del disposal group así corregido, con su valor
razonable neto. Las pérdidas por deterioro de valor se distribuyen conforme a lo establecido
en IAS 36 (se llevan primero contra el fondo de comercio asignado y se imputa el exceso a
los demás activos cubiertos por IFRS 5, a prorrata).
C A P Í T U L
5
O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Alcance 124
C A P Í T U L
5
O
IAS 36 se aplica principalmente a inmovilizado material, activos intangibles y fondo de comercio. Re-
emplazó las normas sobre deterioro que anteriormente se encontraban dispersas en varios estánda-
res (IAS 16, 22, 28 y 31). También se aplica a algunos activos corrientes. IAS 36 requiere una revi-
sión anual de eventuales indicadores de deterioro. Si los hay, debe calcularse el importe recuperable
del activo. Excepcionalmente, y tras la entrada en vigor de IFRS 3 y de las versiones revisadas de IAS
36 y 38, el valor recuperable del fondo de comercio y de los activos intangibles con vida indefinida
deben ser calculados cada año. El importe recuperable del activo es el mayor entre:
a) El valor razonable del activo, neto de costes de venta (sustituye al anterior concepto de valor de
123 ❚ CAPÍTULO 5
venta neto).
b) El valor en uso, que es el valor presente de los flujos de efectivo que se esperan recibir del activo.
El principio básico de IAS 36 (que una entidad debe reducir el importe en libros de un activo hasta
su importe recuperable, si el importe en libros no es recuperable por entero) está ya contemplado en
el PGC. Sin embargo, no hay en el sistema contable actual una norma tan detallada y ambiciosa
como ésta. Aunque la contabilidad de pérdidas por deterioro de valor es un tema capital en cualquier
sistema contable desarrollado, no ha sido objeto de atención hasta fechas recientes, con la consi-
guiente pérdida de comparabilidad y utilidad de la información.
Por ejemplo, Estados Unidos no tuvo una norma sobre el tema hasta la emisión de SFAS 121 en
marzo de 1995. La creciente importancia relativa del fondo de comercio y la adopción de nuevas re-
glas que suprimen su amortización sistemática (y la de ciertos intangibles identificables) acrecientan
todavía más su trascendencia.
IAS 36 ha sido objeto de modificación dentro de la Fase I del Proyecto sobre Combinaciones de Ne-
gocios. Aunque el objetivo primordial de esta fase era mejorar la comparabilidad de los IAS/IFRS con
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 124
las reglas de FASB (en particular), subsisten aún importantes diferencias con los US GAAP relevan-
tes, recogidos principalmente en SFAS 144. Emitida en agosto de 2001, esta norma reemplazó a
SFAS 121, aunque reteniendo lo fundamental de sus reglas sobre la materia. SFAS 144 no se aplica
a las pérdidas por deterioro del valor del fondo de comercio ni de los activos intangibles no sujetos a
amortización, que caen dentro del alcance de SFAS 142.
El nuevo texto de IAS 36, como el resto de los promulgados dentro de la Fase I, tiene efectos pros-
pectivos; esto es (IAS 36, párrafo 139):
a) Se aplica al fondo de comercio y a los intangibles adquiridos en una combinación de negocios
cuya fecha de acuerdo es 31 de marzo de 2004 o posterior.
b) Se aplica al resto de los activos desde el comienzo del primer periodo contable anual iniciado des-
pués de esa fecha (no se requiere, por tanto, reajuste de la información comparativa).
La aplicación retrospectiva está permitida, pero condicionada al cumplimiento de las condiciones del
párrafo 85 de IFRS 3 (entre otras cosas, deben aplicarse retroactivamente también IFRS 3 y el nuevo
IAS 38). Se recomienda la implantación anticipada del nuevo texto.
124 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
1. Alcance
IAS 36 constituye la regla general y residual sobre deterioro de valor de los activos. Se excluyen de su
alcance, por tanto, aquellos que cuentan con normas específicas; esto es (IAS 36, párrafo 1):
a) Inventarios (IAS 2).
b) Activos surgidos de contratos de construcción (IAS 11).
c) Activos por impuestos diferidos (IAS 12: a pesar de que el enfoque de valor no descontado de IAS
11 y 12 no es consistente con el de IAS 36, no se han efectuado modificaciones por el momento).
d) Activos procedentes de costos de beneficios a los empleados (IAS 19).
e) Activos financieros que caen dentro del alcance de IAS 39.
f) Propiedades de inversión que se miden por su valor razonable (IAS 40).
g) Activos biológicos relacionados con la actividad agrícola que se miden a valor razonable menos
los costos estimados hasta el punto de venta (IAS 41).
h) Costes diferidos de adquisición y otros activos intangibles originados por los derechos contractua-
les de un asegurador cubiertos por IFRS 4.
i) Activos no corrientes (o disposal groups) poseídos para venta con arreglo a IFRS 5.
Las inversiones en subsidiarias, asociadas y negocios conjuntos son activos financieros que pueden
ser contabilizados en el balance separado de la matriz, partícipe o inversora con arreglo a IAS 39
(IAS 27, párrafo 37.b). Si se hace uso de esta opción, se les aplican también las normas sobre reve-
lación de IAS 32 (IAS 32, párrafo 4.a) además de las de los IAS 27, 28 y 31. En cualquier caso, se
aplica IAS 36 para determinar posibles pérdidas por deterioro de valor relacionadas (IAS 36, párra-
fo 4). Nótese, por otro lado, que el deterioro de valor de las inversiones inmobiliarias queda cubierto
por IAS 36 cuando se usa el modelo de coste depreciado.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 125
A diferencia de IAS 36, SFAS 144 no se aplica a ninguna clase de instrumento financiero, incluyendo
instrumentos de capital contabilizados por su coste o por el procedimiento de puesta en equivalencia
(SFAS 144, párrafo 5). Por otro lado, las normas de SFAS 142 se aplican al fondo de comercio y a los
activos intangibles, incluso cuando han sido adquiridos a intereses minoritarios (SFAS 142, párrafo
6). También se ocupa del fondo de comercio incorporado a una inversión contabilizada bajo puesta
en equivalencia; no obstante las participaciones puestas en equivalencia se someten a prueba de de-
terioro como un solo activo (goodwill incluido) aplicando las normas del párrafo 19.h) de APB 18
(SFAS 142, párrafo 40; en el mismo sentido, los párrafos 23 y 33 de IAS 28). SFAS 142 se aplica
también al fondo de comercio que se pone de manifiesto en una reorganización según el Código de
Quiebras (Bankruptcy Code) contabilizada con arreglo al método de fresh start de SOP 90-7 (la apli-
cación de este método no está contemplada en los IAS/IFRS actuales).
125 ❚ CAPÍTULO 5
Dichas entradas de efectivo han de proceder de terceros ajenos a la entidad, salvo en los casos en los
que existe un mercado activo para el output (IAS 36, párrafo 69). El concepto es básicamente coinci-
dente con el “grupo de activos” del párrafo 10 de SFAS 144. No obstante, éste engloba también pasi-
vos.
El importe recuperable de un activo no podrá ser determinado cuando (IAS 36, párrafo 67).
a) El valor en uso no pueda estimarse como cercano a su precio de venta neto.
b) El funcionamiento continuo del activo no genera entradas de efectivo que sean, en buena me-
dida, independientes del resto de activos.
Si existe un mercado activo para los productos elaborados por un activo o grupo de activos (lo cual
no es muy frecuente: la definición de activo es la misma vista en IAS 38), uno u otros deben ser iden-
tificados como una unidad generadora de efectivo, incluso si alguno o todos los productos elabora-
dos se utilizan internamente (IAS 36, párrafo 70). Si la existencia de precios de transferencia internos
afecta a los flujos de efectivo de un activo o CGU, se usará la mejor estimación de la gerencia sobre
los precios de mercado futuros de los productos:
a) Para estimar las entradas de efectivo que se usan para determinar el valor en uso de dicho activo
o CGU.
b) Para estimar las salidas de efectivo que se consideran para determinar el valor en uso de otros ac-
tivos o CGU afectadas por el precio de transferencia.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 126
[EJEMPLO]
Dado que existe un mercado activo para el crudo extraído, los activos afectos a cada una de
las instalaciones de extracción constituyen una CGU independiente, aun cuando el pro-
ducto obtenido sea objeto de consumo interno.
En general, para el cálculo del importe recuperable se usan las prescripciones que se aplican a los
activos individuales (IAS 36, párrafo 73).
[EJEMPLO]
Identificación de CGU. Una compañía aérea tiene suscrito un contrato con el Gobierno por
el cual se compromete a cubrir una serie de rutas domésticas a cambio de la licencia para
operar en rutas internacionales. Los activos y los cash flows asociados a cada ruta son ob-
jeto de identificación separada. Las líneas domésticas operan con pérdidas significativas.
El tratamiento de algunos activos, como el fondo de comercio o los activos comunes de la compañía,
requiere guías específicas. Las proporcionadas por IAS 36 se abordan a continuación.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 127
[EJEMPLO]
Valor en libros de una CGU. Una compañía petrolera explota un campo de extracción de gas
en el país A. El campo es considerado una CGU autónoma porque se considera que hay un
mercado activo para el output. El valor en libros de los activos afectos es de 1.000 euros. La
legislación nacional obliga a desmantelar las instalaciones y a restaurar el entorno al tér-
mino de la explotación del campo. El valor actual de los costes relacionados con el cumpli-
miento de esa obligación es de 200 euros, y la sociedad tiene contabilizada una provisión
por este concepto.
La previsión de flujos de caja que se usa para hallar el valor en uso incluirá los pagos rela-
cionados con el desmantelamiento de las instalaciones y la restauración del entorno, así
que el valor en libros de la CGU es de 800 euros.
El procedimiento a seguir (si el fondo de comercio ha sido reconocido en los estados financieros) ha
sido modificado en la nueva versión de IAS 36. Hasta ahora, dicho procedimiento era el siguiente
(IAS 36 [revisada en 1998], párrafo 80):
127 ❚ CAPÍTULO 5
1. Comprobación de abajo arriba (bottom-up)
La empresa debe:
a) Determinar si el importe en libros del fondo de comercio puede ser imputado (total o parcial-
mente) de forma razonable y coherente a la unidad generadora de efectivo que se está consi-
derando.
b) Comparar a continuación el importe recuperable de esa unidad generadora de efectivo, con su
importe en libros (que incluirá, en su caso, el importe en libros del fondo).
Esta comparación se efectuará aunque no exista una base razonable para imputar parte del saldo
de la plusvalía comprada a la unidad generadora de efectivo considerada.
2. Comprobación de arriba abajo o top-down test (si no ha podido imputarse a la unidad genera-
dora de efectivo)
Esta comprobación adicional consiste en:
a) Detectar la unidad generadora de efectivo “inmediatamente superior” a la que pueda ser im-
putada el fondo de comercio (la CGU más pequeña a la que se puede imputar dicho goodwill,
que contenga a la unidad que se considera).
b) Comparar el importe recuperable de esa unidad con su importe en libros.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 128
[EJEMPLO]
Atribución del goodwill en la versión revisada en 1998. La entidad adquirió el 100% del capital
y de los derechos de voto de la sociedad X. El fondo de comercio que se puso de manifiesto se
activó y se amortiza en 30 años, y tiene en la actualidad un valor en libros de 100 euros. X se
dedica a la fabricación de papel, y posee tres factorías: A, B, y C, estando identificados los flu-
jos de caja producidos por cada una. Existen indicios de deterioro de valor en A. Los valores
en libros (sin fondo de comercio) y los valores recuperables de cada CGU son los siguientes.
IAS 22 requería una estimación anual del valor recuperable del fondo de comercio cuando
128 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
se empleaba una vida útil superior a 20 años (IAS 22, párrafo 56). En el primer caso, dado
que no se conoce el fondo de comercio atribuible a la CGU, se procedería así:
1. Se compararía el valor recuperable de A con su importe en libros, y se reconocerían las
pérdidas por deterioro correspondientes (20).
2. Dado que la CGU más pequeña a la que puede imputarse el fondo de comercio es la filial
completa, se compararía luego su valor recuperable con su valor en libros (900-20), co-
rregido ya en el importe de las pérdidas por deterioro de valor de A (IAS 38 [revisada en
1998], párrafo 82).
En el caso b), únicamente se realizaría la comprobación “de abajo arriba”, puesto que se ha
identificado el fondo de comercio imputable a cada CGU. Se compara el valor recuperable
de cada CGU con su valor en libros, que incluye la porción de goodwill atribuida, de manera
que la pérdida por deterioro de valor de A sería de 45. Si el fondo de comercio se amortizase
en 20 años, únicamente se estimaría el valor recuperable de A.
En la nueva versión de la norma, el fondo de comercio ha de ser imputado, desde la fecha de la com-
binación, a las CGU del adquirente que se espera se beneficien de las sinergias de la combinación,
con independencia de que se les asignen otros activos o pasivos de la adquirida (IAS 36, párrafo 80).
Dada la naturaleza de este activo, es probable que no pueda ser atribuido a CGU individuales, sino a
grupos de CGU. Dicha unidad o grupo ha de representar el nivel más bajo al que la entidad monitoriza
el fondo de comercio para fines de gestión interna, pero no ha de ser mayor en ningún caso que un
segmento de los definidos en IAS 14 (en cualquiera de sus formatos). El Board consideró que debía ha-
ber una relación entre el nivel al que se practica la prueba de deterioro de este activo y el nivel de repor-
ting interno que refleja la forma en que la entidad gestiona sus operaciones. Cuando se atribuye parte
del fondo de comercio a un grupo de CGU, se procede del modo siguiente (IAS 36, párrafos 88 a 90).
1. Se prueba primero el deterioro de las CGU “inferiores”, si procede, y comparando su valor recu-
perable con su importe en libros (que no incluye ningún fondo de comercio).
2. Se contabilizan las pérdidas por deterioro que correspondan.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 129
El párrafo 18 de SFAS 142 ordena que la prueba de deterioro de valor del fondo de comercio sea
practicada a nivel de reporting unit, que es un segmento operativo (definido en SFAS 131, párrafos
10-15) o un componente del mismo (esto es, una sección de nivel inmediatamente inferior) siempre
que existe información separada sobre dicho componente y que sus resultados de explotación sean
revisados regularmente por la dirección del segmento (SFAS 142, párrafo 30). No obstante, dicha
norma permite agrupar en una sola reporting unit dos o más componentes con características econó-
micas similares. El fondo de comercio no puede ser sometido a prueba de deterioro de valor a un ni-
vel más bajo, ni aun en el caso de que la entidad gestione a menor nivel sus inversiones en fondo de
comercio y cuente con datos internos indicativos de deterioro de valor. Como en IAS 36, el fondo de
comercio se atribuye a las reporting units que se espera se beneficien de las sinergias de la combina-
ción (SFAS 142, párrafo 34). Además, se sugiere que el fondo de comercio atribuible a cada repor-
ting unit puede ser determinado así (SFAS 142, párrafo 35):
a) Con carácter general, del mismo modo que para identificar el fondo de comercio surgido de la
combinación, esto es, como el exceso del valor razonable de la reporting unit sobre el valor razo-
nable de sus activos y pasivos identificables.
b) Cuando la reporting unit no incorpora activos ni pasivos de la entidad adquirida, por el incremento
de valor razonable experimentado por la unidad a consecuencia de la combinación (with and wi-
thout computation).
129 ❚ CAPÍTULO 5
una o más CGU que se fusionan con otras preexistentes, puede ser que el fondo de comercio genera-
do internamente por éstas sirva de “escudo” al adquirido frente a posibles pérdidas por deterioro. El
estándar británico FRS 11 requiere una estimación del importe hipotético del fondo de comercio
internamente generado en la fecha de la adquisición para determinar los deterioros de valor (FRS 11,
párrafos 50 a 53). IAS 36 no incorpora una norma semejante. De parecido modo, el fondo de comer-
cio generado internamente con posterioridad a la adquisición puede amortiguar pérdidas por deterioro
de valor sufridas por el adquirido. No obstante, no hay norma de general aceptación en la actualidad
que permita evitar dicha compensación. Si se atribuye un fondo de comercio a una unidad genera-
dora de efectivo que no está íntegramente participada, el valor recuperable de dicha unidad se debe
comparar con el valor en libros hipotético que tendría si se reconociese el fondo de comercio atribuible
a intereses minoritarios. Naturalmente, sólo las pérdidas por deterioro relacionadas con la participa-
ción de la matriz en el fondo de comercio son reconocidas en los estados financieros. Si la pérdida por
deterioro de la CGU excede del valor hipotético del fondo de comercio, el exceso se atribuye a los de-
más activos de la CGU, siguiendo el orden establecido en el párrafo 104 (IAS 36, párrafos 91 a 95).
[EJEMPLO]
Deterioro de valor e intereses minoritarios. El grupo pagó 2.250 euros por la adquisición del
75% del capital y derechos de voto de B el 1 de abril del año n. En aquel momento, el valor
razonable de los activos netos de B era de 1.900 euros. B constituye la CGU más pequeña a
la que puede ser atribuido el fondo de comercio (no hay otras CGU del grupo que se benefi-
cien de las sinergias de la combinación). Al cierre del año n + 3, el valor en libros de los acti-
vos de la CGU (sin considerar fondo de comercio) es 1.710 euros. El valor recuperable se ci-
fra en 1.800 euros. No se han registrado pérdidas por deterioro hasta el momento.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 130
Antes de practicar la prueba de deterioro se ajusta el valor en libros de la CGU para recoger
el fondo de comercio atribuible a intereses minoritarios. El resultado se compara con el va-
lor recuperable de la CGU: si éste es más pequeño, la diferencia constituirá una pérdida por
deterioro de valor.
Si la entidad enajena una operación incluida en una CGU o grupo de CGU a las que había sido atri-
buido un fondo de comercio, debe proceder a calcular la fracción de fondo de comercio transmitida
con dicha operación, y tomarla en cuenta para determinar el resultado de la venta. En principio, el
fondo de comercio vendido se calcula sobre la base de los valores relativos de la operación vendida y
de las operaciones de la CGU (o grupo) que se retienen (IAS 36, párrafo 86). La norma del párrafo
39 de SFAS 142 mantiene este mismo enfoque.
[EJEMPLO]
Venta de una operación de una CGU. Un grupo farmacéutico tiene su actividad dividida en
varios segmentos. Uno de ellos (Visión) se dedica a la fabricación de lentes de contacto y
productos de uso oftálmico. Cada segmento se gestiona sobre la base de cinco regiones ge-
ográficas (América del Norte, América del Sur, Europa, África y Asia-Oceanía). Estas divisio-
nes representan el nivel más bajo al que la entidad monitoriza el rendimiento de sus inver-
siones en goodwill. La división Visión-Norteamérica, que tiene asignado un fondo de co-
mercio de 100 euros, ha procedido a la venta de una de sus fábricas como un negocio en
marcha. El precio de venta es de 50 euros. El valor recuperable del resto de CGU de la divi-
sión es de 200 euros. El fondo de comercio que se ha de dar de baja como parte del valor en
libros de la operación enajenada es:
50
• 100 = 20
50 + 200
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 131
[EJEMPLO]
Venta de una operación dentro de una CGU. Supongamos ahora que la fábrica vendida era
propiedad del grupo antes de la combinación (su importe en libros previo no incluía ningún
fondo de comercio) y operaba con pérdidas significativas. La venta tiene lugar poco des-
pués de la combinación de negocios en que se pagó el fondo de comercio.
De parecido modo, se requiere una redistribución del fondo de comercio entre las CGU si su compo-
sición se modifica como consecuencia de un cambio en el sistema de información interno (IAS 36,
párrafo 87). Se efectúa también sobre la base de los valores recuperables relativos de las CGU resul-
tantes si no se puede demostrar que existe otro método que refleje mejor el fondo de comercio atri-
buido a cada una (en el mismo sentido, SFAS 142, párrafo 36).
Al comprobar si una unidad generadora de efectivo ha deteriorado su valor, la empresa debe proce-
der a identificar todos los activos comunes que se relacionan con dicha unidad. En la versión de
131 ❚ CAPÍTULO 5
1998, la entidad aplicaba las mismas comprobaciones establecidas entonces para el fondo de co-
mercio. La nueva versión incorpora este método sin variación. Por tanto (IAS 36, párrafo 102):
a) Si el importe en libros del activo puede ser razonablemente imputado a la unidad generadora de
efectivo, sólo se aplica la comprobación “de abajo arriba”, comparando el valor recuperable de la
CGU con su valor en libros, que ha de incluir la porción imputada del activo corporativo.
b) Si el importe en libros del activo común no puede ser distribuido, se efectúa (adicionalmente) la
comprobación “de arriba abajo”, luego:
– Se compara el valor recuperable de la CGU “inferior” con su valor en libros (que no incluye
fracción alguna del activo corporativo).
– Se registran las pérdidas por deterioro correspondientes.
– Se identifica la CGU “superior”; esto es, el grupo de CGU más pequeño al que puede ser impu-
tado el activo, y se compara su valor recuperable con su valor en libros, que incluye el activo
corporativo y las pérdidas por deterioro previas.
Bajo US GAAP, la prueba de deterioro de los activos corporativos se practica en la entidad completa
(SFAS 144, párrafo 11).
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 132
El nuevo IAS 38 suprime la obligación general de amortizar todos los activos intangibles, requiriendo en
su lugar que se evalúe si su vida es limitada o indefinida (IAS 38, párrafo 88). IFRS 3 también elimina
la tradicional amortización anual del fondo de comercio (IFRS 3, párrafo 54). En consecuencia, las
nuevas reglas exigen que el importe recuperable de estas partidas sea establecido cada año, y también
siempre que se aprecien indicios de deterioro de valor (IAS 38, párrafo 108; IAS 36, párrafo 10). Las
normas sobre la materia son:
132 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
1. Los distintos intangibles con vida indefinida, y los que no se hallan aún listos para su uso, pueden
someterse a la prueba de deterioro anual en diferentes fechas, pero el valor recuperable de cada
uno se establece en las mismas fechas de cada periodo (IAS 36, párrafo 10 a: el Board eliminó la re-
gla contenida en el ED, que requería que la prueba de deterioro se realizase en la fecha del cierre).
2. Si el intangible ha sido reconocido durante el periodo corriente, ha de ser sometido a prueba de
deterioro antes del cierre (IAS 38, párrafo 10.b).
3. El fondo de comercio se imputa a una o más CGU usando las guías ofrecidas en los párrafos 80 a 87.
4. Las CGU a las que se ha imputado un fondo de comercio pueden someterse a prueba de dete-
rioro en diferentes fechas; el valor recuperable de cada CGU ha de ser establecido en las mismas
fechas cada año (IAS 36, párrafo 96). En ciertos supuestos, no obstante, puede usarse el cálculo
más detallado de valor recuperable efectuado en un periodo anterior (IAS 36, párrafo 99).
5. Las unidades a las que se ha imputado todo o parte de un fondo de comercio adquirido en una
combinación efectuada durante el año han de ser sometidas a prueba de deterioro antes del cie-
rre (IAS 36, párrafo 96). En la evaluación de los indicios de deterioro se considerarán, al menos,
las siguientes circunstancias (IAS 36, párrafo 12):
La entidad posee una participación del 40% en el capital de otra sociedad. Controla el órgano
[EJEMPLO]
de administración, dado que el resto del accionariado se halla disperso en manos de peque-
ños accionistas. El valor de mercado de la acción ha caído significativamente en el periodo.
La caída de valor de la acción es un indicio de deterioro de valor de la inversión en la filial. Si
la matriz contabiliza la participación por su valor razonable con arreglo a IAS 39, la reducción
de valor se habrá recogido en sus estados financieros. Las ganancias o pérdidas por valor ra-
zonable se ajustan en el proceso de consolidación antes de efectuar la prueba de deterioro.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 133
b) Durante el periodo han tenido lugar, o van a tener efecto en el futuro inmediato, cambios signi-
ficativos con una incidencia adversa sobre la empresa, referentes al entorno legal, económico,
tecnológico o de mercado en los que ésta opera, o bien en el mercado al que está vinculado el
activo en cuestión.
Un grupo editorial y de comunicación viene explotando una licencia de radio desde hace
[EJEMPLO]
varios años. La licencia se ha venido renovando cada 10 años con un coste insignificante. Le
ha sido comunicado a la entidad que la licencia no será renovada de nuevo.
c) Durante el periodo las tasas de interés de mercado, u otras tasas de rendimiento de mercado
de inversiones, han sufrido incrementos que probablemente afecten a la tasa de descuento
utilizada para calcular el valor de uso del activo, de forma que disminuyan su importe recupe-
rable de manera significativa (el principio subyacente es que el activo debe cubrir su propio
coste de capital).
El banco central del país X, en el que opera una de las subsidiarias del grupo, ha elevado la tasa
[EJEMPLO]
de interés del activo sin riesgo. Además, el riesgo asignado a las inversiones en instrumentos
de capital emitidos por entidades del país X ha experimentado un incremento significativo.
Los sucesos descritos darán lugar a un incremento de la tasa de descuento a aplicar para la de-
terminación del valor en uso del activo (o CGU). Se requiere una prueba de deterioro de valor.
133 ❚ CAPÍTULO 5
d) El importe en libros de los activos que la empresa presenta, en sus estados financieros, es ma-
yor que su capitalización bursátil.
b) Durante el activo han tenido lugar, o se espera que tengan lugar en el futuro inmediato, cam-
bios significativos en la forma en que se usa o se espera usar el activo que afectarán desfavo-
rablemente a la empresa; entre tales cambios pueden encontrarse los planes de interrupción o
reestructuración de la operación a la que pertenece el activo, o que se haya decidido la des-
apropiación del mismo antes de la fecha prevista.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 134
[EJEMPLO]
La entidad tiene proyectos para trasladar a China algunas de sus factorías en Europa. Han
sido ya seleccionadas las actividades que van a ser deslocalizadas, y las instalaciones que
van a verse afectadas, pero no conoce aún cuántos contratos de trabajo se extinguirán, ni la
fecha de implantación del plan.
La entidad no tiene reconocido aún pasivo por reestructuración alguno. La existencia del
plan, no obstante, es en sí misma un indicio de deterioro de valor. El valor en uso del activo
no incluirá los desembolsos relacionados con la reestructuración hasta que dicho pasivo
cumpla las condiciones de reconocimiento.
c) Se dispone de evidencia, procedente de informes internos, que indica que el rendimiento eco-
nómico del activo es, o va a ser, peor que el esperado; ello incluye la existencia de (párrafo 14).
– Flujos de caja derivados de la adquisición del activo, o flujos posteriores para su manteni-
miento o explotación, significativamente mayores que los presupuestados.
– Flujos de caja actuales o resultados operativos del activo significativamente peores de lo es-
134 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
perado.
– Una reducción significativa de los flujos de caja presupuestados, o del resultado operativo, o
un incremento de las pérdidas por explotación del activo presupuestadas.
– Pérdidas operativas o flujos netos de caja negativos relacionados con el activo, una vez agre-
gados los valores del periodo corriente y los previstos para ejercicios posteriores.
Cada concesión se considera una unidad generadora de efectivo independiente. Los infor-
mes internos indican un descenso superior al previsto del número de viajeros en la locali-
dad A, debido a la apertura de la red de metro.
Todos los indicadores enumerados se aplican también a las unidades generadoras de efectivo que se
verán más tarde, y coinciden sustancialmente con los del párrafo 8 de SFAS 144. No obstante, esta
norma considera que sólo existe pérdida por deterioro de valor si el importe en libros del activo (o
grupo de activos) supera el valor no descontado de los flujos que se espera recibir del uso y eventual
enajenación del mismo (SFAS 144, párrafo 7). Esta condición (screening mechanism) determina
que, bajo US GAAP, sólo se reconozcan pérdidas por deterioros severos.
Los indicadores citados constituyen una lista no cerrada, de manera que la entidad puede basar el
deterioro de valor en otras circunstancias. A la inversa, la presencia de un indicador de deterioro no
supone que sea necesario contabilizar una pérdida: puede ser evidente, por ejemplo, que el valor re-
cuperable del activo está muy por encima de su importe en libros. No obstante, puede ser necesaria
una revisión de la vida útil del activo, del valor residual o de los métodos de depreciación o amortiza-
ción que se aplican.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 135
El importe recuperable se calcula para cada activo individualmente, salvo que los activos no genera-
sen entradas de efectivo que fueran en buena medida independientes de las producidas por otros
activos (o grupos de ellos). En ese caso, el importe recuperable se determinará para la unidad gene-
radora de efectivo a la que pertenece.
IAS 36 permite usar el cálculo detallado de valor recuperable más reciente efectuado en un periodo
anterior para la prueba de deterioro de valor de los activos intangibles con vida ilimitada y del fondo
de comercio (IAS 36, párrafos 24 y 99), supuesto el cumplimiento de las condiciones siguientes (en
el mismo sentido, SFAS 142, párrafo 27):
1. Los activos y pasivos que conforman la CGU (o grupo, en su caso, si se trata de goodwill) al que
se imputó el fondo de comercio o el intangible con vida indefinida no han cambiado sustancial-
mente desde entonces.
2. El cálculo citado dio como resultado un valor recuperable significativamente más alto que el valor
en libros.
3. La probabilidad de que el valor recuperable sea menor que el valor en libros se considera remota,
a la luz de los sucesos y de los cambios en circunstancias acaecidos desde entonces.
El valor recuperable se determina sobre una base de valor razonable bajo US GAAP.
135 ❚ CAPÍTULO 5
8. Valor razonable neto
Los párrafos 25 a 29 incorporan sin cambios las reglas sobre determinación del precio de venta neto
de los párrafos 21 a 25 de la versión de 1998.
a) Si hay un compromiso formal de venta en una transacción entre partes no relacionadas se toma el
precio cerrado, ajustado por los costos incrementales directamente atribuibles a la desapropiación.
b) Si no hay un compromiso formal de venta pero existe un mercado activo para esta partida, se
toma el precio de mercado (precio vendedor del momento o precio de la transacción más reciente
si no se dispone de aquél), deducidos los costos de desapropiación. El mercado activo se define
en los mismos términos que en IAS 38. No es corriente disponer de un mercado activo para los
activos cubiertos por IAS 36 (salvo, eventualmente, para participaciones en subsidiarias, asocia-
das y negocios conjuntos).
c) Si no hay compromiso firme de venta ni mercado activo, se usará la mejor información disponible
para reflejar el importe que la empresa puede obtener en una transacción libre, una vez deduci-
dos los costos de desapropiación, basándose en transacciones recientes sobre activos similares
en el mismo sector.
El precio de venta neto no reflejará una venta no forzada, salvo que la gerencia se vea obligada a ven-
der de inmediato.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 136
9. Valor en uso
Se darán los siguientes pasos para determinar el valor en uso:
a) Se determinan los flujos de efectivo relacionados con el uso y desapropiación del activo.
b) Se aplica una tasa de descuento apropiada a estos flujos de efectivo.
Las incertidumbres citadas pueden incorporarse al cálculo ajustando los flujos de caja o primando la
tasa de descuento (IAS 36, párrafo 32). Con arreglo al enfoque tradicional, los riesgos se han incor-
porado al cálculo ajustando la tasa de descuento, y se usan, en consecuencia, los flujos netos de
efectivo más probables estimados. Aunque este método siga siendo válido, IAS 36 sugiere (siguiendo
a FASB: CON 7, párrafos 42 y siguientes) que un enfoque basado en el flujo de caja esperado puede
constituir en muchos casos una herramienta más útil. Entre otras cosas, por su mayor aptitud para
reflejar las incertidumbres relacionadas con el momento del tiempo en que se producirán los flujos.
Conforme a este método, se elaboran diferentes proyecciones de flujos de caja en función de las di-
ferentes expectativas de la entidad, y se asigna una probabilidad de ocurrencia a cada escenario. El
resultado es un flujo de caja neto esperado ajustado en función de la probabilidad. Los riesgos incor-
porados a su cálculo no han de ser tomados en cuenta al seleccionar la tasa de descuento.
[EJEMPLO]
137 ❚ CAPÍTULO 5
8 6,0 5,0 5,5 5,1 6,1% 0,62 3,20
9 6,3 5,2 5,8 5,0 6,5% 0,57 2,80
10 6,3 6,0 6,5 6,0 6,6% 0,53 3,20
Flujo de caja sin 56,4 Valor en uso 42,10
descontar
Se pone de manifiesto una pérdida por deterioro de valor de 7,9 (50 – 42,1). Bajo US GAAP, no
hay deterioro de valor del activo (flujo de caja no descontado mayor que el valor en libros).
En la determinación de los flujos de efectivo se observarán las siguientes pautas (IAS 36, párrafo 33):
a) Se usarán hipótesis razonables y fundadas, que representen la mejor estimación de la gerencia
respecto del conjunto de condiciones que se darán durante el resto de la vida del activo (se re-
quiere el uso del criterio para determinar el horizonte temporal apropiado cuando se trata de un
grupo de activos con vidas útiles diferentes). Se otorgará un peso mayor a las evidencias externas.
b) Las proyecciones se basarán en los presupuestos y previsiones más recientes. No obstante, para
reducir la subjetividad, no podrán usarse estas estimaciones para más de cinco años, salvo que
se pueda justificar un plazo mayor (porque la gerencia crea que son fiables y pueda demostrar a
partir de la experiencia pasada su capacidad para predecir los flujos de efectivo con precisión
más allá de ese horizonte).
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 138
c) Las proyecciones sobre flujos de efectivo que superen el horizonte cubierto por los pronósticos
más recientes se hallan extrapolando las proyecciones anteriores a partir de tales previsiones. Se
usa para ello una tasa de crecimiento constante o decreciente, salvo que se pueda justificar el
empleo de una tasa creciente. Dicha tasa no debe superar la tasa media de crecimiento a largo
plazo para los productos, industrias, país o países en que opera la empresa, o en el mercado en
que se usa el activo, salvo que se pueda justificar el uso de una tasa mayor.
Los flujos se expresan en unidades monetarias nominales si la tasa de interés toma en cuenta el efecto
de la inflación (IAS 36, párrafo 40). Si no, se expresan en unidades de poder adquisitivo constante. Si
los flujos se producen en moneda extranjera, deben descontarse usando una tasa de interés apro-
piada para esa divisa, y luego convertirse usando el cambio de contado al cierre (IAS 36, párrafo 54).
El flujo de efectivo neto relacionado con la enajenación del activo al final de su vida útil se halla sobre
la base de transacciones actuales sobre activos similares que tengan la edad y condición que se es-
pera del activo en el momento de la venta (como el valor residual en la nueva versión de IAS 16: pá-
rrafo 6); este importe se ajusta para recoger variaciones esperadas en el precio de mercado del activo
(y cambios en el índice general de precios, si los flujos se expresan en unidades nominales: IAS 36,
párrafo 55).
138 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
[EJEMPLO]
Selección de flujos de efectivo. Una empresa está realizando una prueba de deterioro a una
máquina que utiliza en la fabricación de un producto. Ha recopilado la siguiente informa-
ción en relación con el mismo (importes por unidad).
• Precio de venta: 100 euros.
• Coste variable de producción: 70 euros.
• Coste de envasado: 1 euro.
Los costes generales fijos fueron de 10.000 euros en el último año. Se espera que todos los
importes crezcan a razón de un 3% anual. Se prevé un crecimiento anual del 4%. El último año
se vendieron 1.000 unidades. La tasa de crecimiento a largo plazo en la industria es del 1,5%.
Año 1 2 3 4 5 6 7 8
Unidades
1.040,00 1.082,00 1.125,00 1.170,00 1.217,00 1.235,00 1.253,00 1.272,00
vendidas
Precio venta
102,00 104,04 106,12 108,24 110,41 112,62 114,87 117,17
unidad
139 ❚ CAPÍTULO 5
Valor
11.716,59
recuperación
Total entra-
106.080,00 112.529,66 119.371,47 126.629,25 134.328,31 139.070,10 143.979,28 160.778,34
das efectivo
Coste varia-
71,40 72,83 74,28 75,77 77,29 78,83 80,41 82,02
ble unidad
Coste fijo
10.200,00 10.404,00 10.612,08 10.824,32 11.040,81 11.261,62 11.486,86 11.716,59
general
Coste enva-
1,02 1,04 1,06 1,08 1,10 1,13 1,15 1,17
sado unidad
Reemplazo
10.404
componente
Total salidas
–85.516,80 –100.704,06 –95.365,82 –100.731,09 –106.413,91 –110.001,40 –113.712,14 –117.550,43
efectivo
Flujos de
20.563,20 11.825,60 24.005,65 25.898,16 27.914,40 29.068,71 30.267,13 43.227,91
caja netos
Se utiliza la tasa de crecimiento presupuestada del 4% para los primeros cinco años. A partir
del año quinto se utiliza la tasa de crecimiento a largo plazo del sector (1,5%). Todos los costes
y precios se incrementan anualmente en un 3%, de modo que la tasa de descuento deberá to-
mar en cuenta, asimismo, el efecto de la inflación. El coste de sustitución del componente (ex-
presado en unidades nominales de la fecha en que se desembolsa) se incluye en la proyec-
ción. No así los flujos de entrada o salida que se espera origine la mejora no ejecutada.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 140
Como punto de partida (IAS 36, párrafo A 17), pueden tomarse las siguientes tasas:
a) El costo de capital promedio ponderado de la empresa, utilizando técnicas tales como el CAPM.
b) La tasa incremental de los préstamos tomados por la empresa.
c) Otras tasas de mercado para préstamos.
b) Para excluir los riesgos que no sean relevantes respecto de los flujos de efectivo proyectados.
Se considerarán también otros riesgos como el riesgo-país, el riesgo de tasa de cambio y el riesgo de
precios.
Por otro lado, la tasa de descuento es independiente de la estructura de capital mantenida por la em-
presa, y también de la manera en que se ha financiado la compra del activo (IAS 36, párrafo A 19).
[EJEMPLO]
Selección de la tasa de interés. La entidad emplea el CAPM para calcular el coste de capital.
Está valorando una unidad de negocio establecida en el extranjero. Se dispone de los datos
de una competidora no relacionada cotizada y que realiza sus operaciones en la misma
zona geográfica donde opera la división analizada.
Entidad Rf Rm Beta
Matriz 5% 7,5% 1,01
Competidora 11% 17,5% 1,40
[EJEMPLO]
Tasas de interés antes de impuestos. La entidad posee un activo que tiene un importe en li-
bros de 1.200 euros y una vida útil residual de cinco años. La base fiscal del activo coincide
con su valor contable. La tasa de impuestos es del 30%, y los impuestos se ingresan o reci-
ben en el ejercicio siguiente al de su devengo. El rendimiento después de impuestos reque-
rido a esta unidad es del 20,2%, con arreglo a las siguientes proyecciones de flujos:
Año 1 2 3 4 5 6
Flujos netos antes 600 500 400 350 300
de impuestos
30% flujos netos –180 –150 –120 –105 –90
30% depreciación activo 72 72 72 72 72
Flujos por impuesto –108 –78 –48 –33 –18
sobre beneficios
Flujos netos después 600 392 322 302 267 –18
de impuestos
El rendimiento del 20,2% es la tasa de descuento que hace que el valor presente de los flu-
jos netos de impuesto sea igual al valor corriente del activo. La tasa de interés antes de im-
puestos real sería la que iguala ese importe y el valor presente de los flujos antes de im-
puestos: en este caso, el 27,1%. En cambio, si incrementásemos dicha tasa en función del
tipo de gravamen del 30%, se obtendría un tipo del:
20,2%
= 28,92%
(1 – 30%)
141 ❚ CAPÍTULO 5
10. Reconocimiento y medición de pérdidas
por deterioro de valor
La pérdida por deterioro aparece cuando el importe recuperable del activo es menor que el importe
en libros (IAS 36, párrafos 6 y 59). Su contabilización observará las mismas pautas establecidas en la
versión de 1998; esto es:
a) Por lo general, se reconocen inmediatamente en el estado de resultados (IAS 36, párrafo 60).
b) No obstante, se tratan como una reducción del superávit de revaluación en la medida que afecten
a activos revaluados en virtud de lo permitido por otros IAS (IAS 36, párrafo 60).
c) Si la pérdida por deterioro es mayor que el importe en libros del activo, la empresa reconocerá un
pasivo si, y sólo si, está obligada a ello por otro IAS (IAS 36, párrafo 62).
d) Si la pérdida afecta a activos depreciables o amortizables, se distribuirá la diferencia entre el im-
porte depreciable y el valor residual a lo largo de la vida útil restante del activo (IAS 36, párrafo 63).
e) Se reconocerán los activos y pasivos por impuestos diferidos relacionados con la pérdida por de-
terioro (IAS 36, párrafo 64; el reconocimiento de los activos está subordinado al cumplimiento de
las condiciones de IAS 12 sobre su recuperabilidad).
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 142
Al igual que para los activos aislados, se reconoce una pérdida por deterioro del valor de una unidad
generadora de efectivo cuando el importe recuperable es menor que el importe en libros. La pérdida
por deterioro debe ser distribuida observando este orden (IAS 36, párrafo 104).
a) En primer lugar, se imputará al fondo de comercio que en su caso se hubiera atribuido a la uni-
dad en cuestión (hasta agotar el saldo imputado: IAS 36, párrafo 90).
b) El importe restante se imputa al resto de los activos de la unidad generadora de efectivo, en pro-
porción a su importe en libros respectivo.
No obstante esto último, el importe en libros de un activo no podrá reducirse por debajo del mayor
entre estos tres valores:
a) Su valor razonable neto (si se puede determinar).
b) Su valor en uso (si se puede determinar).
c) Cero.
La pérdida que no se pueda imputar a un activo por aplicación de esta regla se imputa a los demás
142 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
activos de la unidad en proporción a su importe en libros respectivo (IAS 36, párrafo 105). Dichas re-
ducciones del valor contabilizado se tratan como se ha visto para las de los activos individuales. La
pérdida por deterioro que quede sin imputar tras culminar el proceso descrito sólo da lugar al reco-
nocimiento de un pasivo si hay otro IAS que lo exija (IAS 36, párrafo 108).
[EJEMPLO]
Deterioro de una unidad generadora de efectivo. Los activos atribuidos a una unidad gene-
radora de efectivo son (se incluye la fracción de activos comunes correspondiente):
Valor Precio de
Activos de la CGU en libros venta neto
[EJEMPLO]
Contabilización de las pérdidas por deterioro (activos revaluados). Asientos a efectuar para
contabilizar la pérdida por deterioro del valor de los inmovilizados materiales si se ha conta-
bilizado por su valor revaluado. El costo del activo fue de 2.000 euros, y se le había atri-
buido una vida útil de 10 años. El valor residual se cifró en 500 euros. El deterioro se conta-
biliza cinco años después de la puesta en marcha del activo (debe prescindirse de los efec-
tos impositivos).
El superávit de revaluación contabilizado será igual a la diferencia entre el importe en libros del
activo (1.500 euros) y el valor que se habría obtenido aplicando la base del costo depreciado.
La pérdida por deterioro atribuible se trata como una reducción del superávit de revalua-
ción previamente contabilizado. El exceso sobre ese importe se carga en resultados.
143 ❚ CAPÍTULO 5
11. Reversión de pérdidas por deterioro de valor
IAS 36 requiere que se compruebe anualmente la existencia de eventuales indicios de reversión
de una pérdida por deterioro contabilizada en años anteriores. Si existen tales indicios, debe esti-
marse de nuevo el importe recuperable del activo, o de la unidad generadora de efectivo en cues-
tión (IAS 36, párrafo 110). El párrafo 111 contiene una lista mínima de circunstancias que pueden
indicar una posible reversión, y que vienen a ser la inversa de las que menciona el párrafo 12
como indicios de deterioro.
Por tanto, la reversión sólo se produce si hay un cambio en las estimaciones utilizadas para calcular
el importe recuperable desde que se reconoció por última vez la pérdida. En ese caso, el importe en
libros del activo (o de los activos que integran la unidad generadora de efectivo) se incrementa de
nuevo hasta su importe recuperable (IAS 36, párrafo 114). A la inversa no se registra reversión al-
guna porque el valor recuperable exceda del valor en libros, si se mantienen constantes dichas esti-
maciones. El nuevo texto, como SFAS 142, suprime la posibilidad (ya muy restringida en la norma de
1998) de revertir pérdidas por deterioro del fondo de comercio.
El nuevo importe en libros del activo no debe exceder del importe en libros (neto de depreciación o
amortización, en su caso) que se habría obtenido si no se hubiera reconocido la pérdida por dete-
rioro (IAS 36, párrafo 117).
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 144
Cuando revierte una pérdida por deterioro que afecta a una unidad generadora de efectivo, es pre-
ciso también distribuir su importe entre los activos individuales que la integran. Como no resulta po-
sible imputar la reversión al fondo de comercio, se distribuye a prorrata entre los activos restantes
(IAS 36, párrafo 122). No obstante lo anterior, los activos integrados en la unidad generadora de
efectivo (o los activos individuales a los que se asocia la reversión de la pérdida) no podrán quedar
valorados por encima del menor valor entre:
a) Su importe recuperable (si pudiera determinarse).
144 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Reversión de pérdidas. Hace dos años que se contabilizó una pérdida por deterioro para un
inmovilizado material. En ese momento el activo tenía un valor en libros de 100 euros, que
se redujo en 25 hasta su valor recuperable (75). Le quedaba una vida útil de 10 años. El ac-
tivo se valora sobre la base de su coste depreciado.
En el momento actual se estima que su valor recuperable es (se trata de dos hipótesis inde-
pendientes):
a) 71.
b) 85.
La depreciación de los dos últimos años se habrá calculado sobre el valor recuperable de
75. Dado que el activo no puede quedar valorado por encima del menor entre su valor recu-
perable y el importe en libros que tendría el activo si no se le hubiesen asignado pérdidas,
la reversión de la pérdida por deterioro es, en cada uno de los casos:
12. 1. Provisiones
Dependiendo de la naturaleza del suceso pasado que origina la obligación, IAS 37 clasifica
los pasivos en:
a) Obligaciones legales.
b) Obligaciones implícitas.
Las obligaciones legales se derivan de contratos, de la legislación o de otras causas de tipo le-
gal. Las obligaciones implícitas, en cambio, se derivan de actuaciones de la propia entidad;
concretamente, de políticas empresariales que son de dominio público, declaraciones públi-
cas o patrones de comportamiento establecidos en el pasado, siempre que, a consecuencia
145 ❚ CAPÍTULO 5
de ellas (IAS 37, párrafo 10):
a) La empresa haya puesto de manifiesto ante terceros que está dispuesta a aceptar determi-
nadas responsabilidades.
b) Haya creado una expectativa válida ante aquellos con los que debe cumplir sus compro-
misos o responsabilidades.
gan de unos grandes almacenes. La entidad tiene una política suficientemente conocida en
materia de devoluciones capaz de crear una expectativa entre la clientela en el sentido de que
devolverá el precio si se desea. La venta de un producto es el suceso que da origen a la obliga-
ción presente, y se debe proceder al reconocimiento de una provisión. No existe impedimento
al reconocimiento del ingreso por venta en el punto de entrega (IAS 18, párrafo 14).
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 146
Como la provisión refleja el importe de una obligación existente en la fecha del balance gene-
ral, no se reconocen provisiones por gastos necesarios para funcionar en el futuro, ni como
consecuencia de pérdidas derivadas de operaciones futuras (IAS 37, párrafos 18 y 63). En el
146 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
caso de los contratos de carácter oneroso (aquellos en que los costos inevitables de cumplir
las obligaciones que imponen exceden de los beneficios que se espera recibir de ellos: IAS 37,
párrafo 10), las obligaciones presentes que se derivan del mismo se reconocen en los estados
financieros como pasivos (IAS 37, párrafo 66) porque hay un suceso pasado (un contrato no
revocable unilateralmente sin costes significativos) que las crea.
[EJEMPLO]
Como sucede con la primera condición, se requiere que la salida de recursos tenga asignada
una probabilidad superior al 50% para que se considere cumplida la segunda. Esta acepción
de “probable” es aceptada por otras normas (IFRS 3 o IFRS 5 son buenos ejemplos) y es la
habitual bajo US GAAP. No obstante, existen otras declaraciones (como IAS 12) que la usan
en un sentido diferente. Cuando existe un número elevado de obligaciones similares, la pro-
babilidad se aplica al conjunto que forman (IAS 37, párrafos 23 y 24).
En ciertos casos, la entidad puede esperar el reembolso, por parte de un tercero, de todo o
parte del desembolso a efectuar para la cancelación de la obligación. El derecho al reembolso
constituye, en su caso, un activo independiente, que sólo se reconoce en los estados finan-
cieros cuando sea prácticamente segura su recepción (IAS 37, párrafo 53), y en ningún caso
por un importe superior a la provisión contabilizada (asset ceiling). Cumplidas las condiciones
de reconocimiento, la provisión se reconoce en el pasivo por la mejor estimación que se
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 147
pueda efectuar, en la fecha del balance, del importe a entregar para su cancelación (IAS 37,
párrafo 36). Ello viene a ser el importe que la entidad tendría que entregar para su cancela-
ción en la fecha del balance o para transferirla a un tercero en ese momento. Las reglas para
su estimación son semejantes a las que se han visto antes para determinar el valor en uso
bajo IAS 36:
El efecto de sucesos futuros puede tomarse en cuenta al evaluar el importe de los desembol-
sos futuros, pero sólo si existe una evidencia suficiente de que pueden aparecer efectiva-
mente. Por ejemplo, un cambio legislativo sólo puede ser tomado en consideración si es
prácticamente seguro que las normas proyectadas se aprobarán sin apenas cambios (IAS 37,
párrafos 48 a 49).
147 ❚ CAPÍTULO 5
de su cancelación, como consecuencia:
a) Del mero transcurso del tiempo (el incremento de valor se contabiliza como un gasto finan-
ciero).
b) De los cambios en el valor de los flujos, en la probabilidad de ocurrencia asignada, o en la
tasa de descuento aplicada (son cambios en estimaciones que afectan al ejercicio del
cambio y a los posteriores, y se anotan, por lo general, como ingresos o gastos: IAS 8, pá-
rrafo 36).
[EJEMPLO]
La entidad ha debido añadir el importe inicial de la provisión al valor en libros del inmovili-
zado material (IAS 16, párrafo 16.c). En consecuencia, el cambio en el valor de la provisión
reduce el valor en libros del activo (hasta anularlo, como máximo: IFRIC 1, párrafo 5).
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 148
mente cierta” (IAS 37, párrafo 33). Si se considera probable la entrada de beneficios econó-
micos relacionados con la partida, se incluye en las notas información sobre su naturaleza y
efectos financieros previsibles (IAS 37, párrafo 89; ver MC, párrafo 49.a). El IASB ha pro-
puesto la eliminación de estas asimetrías dentro de la Fase II del Proyecto de Combinaciones
de Negocios.
FASCiCULO 05 17/9/04 12:09 Página 149
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 149
C A P Í T U L
6
O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción. Alcance de la norma 151
C A P Í T U L
6
O
Normas Internacionales de
Moneda extranjera
Contabilidad
José Alberto Toribio Temprado
(Profesor del CEF)
151 ❚ CAPÍTULO 6
Dado que las transacciones en moneda extranjera deben ser expresadas en la moneda que se usa para
establecer las cuentas, y que las operaciones en moneda extranjera deben ser presentadas en la mo-
neda de los estados financieros de la empresa, las normas contables deben proporcionar guías sobre:
a) La tasa de cambio que debe aplicarse para la conversión.
b) El tratamiento contable de las diferencias consecuentes.
El texto que sigue está preparado sobre la base de la última versión de IAS 21 aprobada por el IASB,
que es la publicada en diciembre de 2003 como parte del Improvements Project. Este texto se aplica
a todos los periodos contables anuales que comiencen a 1 de enero de 2005 o con posterioridad. Se
subrayan los cambios principales respecto a la versión vigente en 2004.
La norma incorpora también criterios para la selección de la moneda funcional (moneda de medi-
ción, en la versión 2004) y deroga la interpretación SIC 19. Dichos criterios son, en esencia, los de
los párrafos 5, 6 y 42 de SFAS 52. También regula la conversión de los estados financieros de la en-
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 152
tidad a una moneda diferente de la funcional (actualmente en SIC 30). Quedan expresamente exclui-
dos del alcance de sus normas:
a) La contabilidad de las coberturas de partidas en moneda extranjera, que cae dentro del campo de
aplicación de IAS 39 (donde se traspasa la regulación de las obligaciones que se tratan como co-
bertura de la inversión neta en una entidad extranjera, actualmente dentro de IAS 21).
b) La presentación de los flujos de efectivo en moneda extranjera (aspecto cubierto por los párrafos
25 y 26 de IAS 7).
c) El tratamiento del efecto impositivo relacionado con las diferencias de conversión y cambio, que
se rige por las disposiciones de IAS 12 (IAS 21, párrafo 41).
como la del actual párrafo 4 (la moneda de los estados financieros será usualmente la del domicilio;
deben revelarse los motivos de que difiera, en su caso: actual párrafo 43). En su lugar, toma de SFAS
52 una lista no cerrada de indicadores para la identificación:
1. Indicadores del precio de venta:
a) Moneda que principalmente influye, a corto plazo, en la formación de los precios de venta de
los bienes o servicios (normalmente, la moneda en que se fijan y reembolsan tales precios).
b) Moneda del país cuya competencia o regulación determina principalmente los precios de
venta de sus productos o servicios.
2. Indicador del gasto: la moneda que influye principalmente en los costes de personal, materiales y
de suministro de bienes o servicios (normalmente, aquella en que se fijan y reembolsan dichos
costes).
3. Indicadores financieros:
a) Divisa en que se generan los fondos por actividades de financiación (por emisión de instru-
mentos de capital o deuda).
b) Divisa en que se retiene el efectivo procedente de las actividades de operación.
Toda entidad (incluyendo sucursales) ha de identificar su moneda funcional conforme a estos crite-
rios. Si la entidad en cuestión es una operación extranjera, ha de considerar indicadores adicionales
para determinar si su moneda funcional es diferente de la de la entidad informante:
a) Si las actividades de la operación extranjera constituyen una mera extensión de las actividades de
la entidad informante o se ejecutan con un grado considerable de autonomía.
b) Si las transacciones con la entidad informante representan una proporción baja o elevada de las
actividades de la operación extranjera.
c) Si los flujos de efectivo de las actividades de la operación extranjera afectan directamente a los
flujos de la entidad informante y están disponibles para su remisión a la misma.
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 153
d) Si los flujos de efectivo de las actividades de la operación extranjera bastan para reembolsar la
deuda existente y prevista sin necesidad de envío de fondos adicionales por parte de la entidad
informante.
Recordar, por otro lado, que el ICAC considera que el método monetario-no monetario es el apro-
piado para la conversión de los estados financieros de las sucursales y agencias radicadas en el ex-
tranjero, con independencia de los vínculos que mantengan con la central (ver consulta 4 del BOI-
CAC 32, de diciembre de 1997). Los criterios de conversión de IAS 21 sólo atienden a la naturaleza
de las relaciones entre la entidad informante y las operaciones en el extranjero (incluidas agencias y
sucursales), dejando de lado las consideraciones de tipo legal (ausencia de personalidad jurídica in-
dependiente) en que se sustenta la posición del regulador español. Por tanto, no será imposible apli-
car el método de cambio al cierre a los estados financieros de una sucursal.
[EJEMPLO]
Una empresa mexicana seleccionará, por lo general, el peso mexicano como moneda de
medición, pero es preciso un examen de las circunstancias para determinar si la elección es
idónea. El proceso, por tanto, será:
1. La selección de la moneda funcional (supongamos, peso mexicano).
2. La expresión de las transacciones en otras monedas a pesos mexicanos, haciendo uso de
las disposiciones de IAS 21.
3. La conversión de los estados financieros de operaciones en el extranjero a pesos mexica-
nos, según las prescripciones de IAS 21. Si los estados financieros de operaciones en el ex-
tranjero están expresados en la moneda de una economía hiperinflacionaria, se reexpre-
san con arreglo a IAS 29 antes de su conversión a pesos mexicanos (IAS 21, párrafo 42).
4. Si se considera que el peso mexicano es la moneda de una economía hiperinflacionaria,
153 ❚ CAPÍTULO 6
los estados financieros se reexpresan en pesos mexicanos corrientes en la fecha del cie-
rre (aplicando las normas de IAS 29).
5. Si la gerencia lo considera oportuno, puede reexpresar sus estados financieros en otra
moneda (por ejemplo, en dólares estadounidenses); sin embargo, las diferencias de cam-
bio o de conversión que aparecían en los estados financieros en pesos mexicanos no son
sustituidas por las que se habrían obtenido tomando el dólar estadounidense como mo-
neda de medición. La conversión se realiza aplicando el método de cambio de cierre.
3. Las condiciones que permiten la capitalización de diferencias de cambio como parte del costo de
un activo.
4. La contabilidad de las coberturas.
Es sabido que la contabilidad de las transacciones en moneda extranjera no se halla cubierta por las
previsiones de las directivas contables. Por tanto, no es de extrañar la acusada divergencia que
muestran sobre este punto los diferentes ordenamientos nacionales, aun dentro de la zona euro.
Las prescripciones de IAS 21 sobre este punto son sencillas y no precisan de mayores explicaciones:
a) La medición inicial de las transacciones en moneda extranjera se realiza aplicando la tasa de
cambio vigente en la fecha de la transacción (párrafo 21), que es la fecha en que se cumplen las
condiciones de reconocimiento de la partida.
b) A la conclusión del periodo contable anual:
1. Las partidas monetarias (efectivo y saldos a pagar o recibir en efectivo) se expresan en la mo-
neda funcional aplicando la tasa de cambio vigente en la fecha del cierre.
154 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
A diferencia de lo previsto en el PGC vigente, las diferencias de cambio en partidas monetarias se im-
putan a la ganancia o pérdida neta del periodo con independencia de su signo, y tanto si surgen en
el momento de liquidar las transacciones en moneda extranjera como si se ponen de manifiesto en la
fecha del balance general. El tratamiento general de las diferencias es coherente con el previsto en el
párrafo 15 de SFAS 52.
[EJEMPLO]
Efectivo 1.130.000
Deudas a corto plazo con entidades 1.130.000
de crédito en moneda extranjera
En la fecha del cierre, la partida monetaria se expresa en la moneda funcional aplicando la tasa
de cambio actual, y se tratan como ingresos las diferencias de cambio que resultan del ajuste:
Es posible que la entidad cuente con activos monetarios en moneda extranjera que deban ser conta-
bilizados a valor razonable. Si un activo monetario tal se clasifica como disponible para venta para los
efectos de IAS 39, entonces:
a) Calcula las diferencias de cambio originadas como si la partida se contabilizase a su coste amorti-
zado.
b) Registra en resultados dichas diferencias, aplicando el principio general del párrafo 28 de IAS 21.
c) Carga o abona en una cuenta separada de patrimonio neto los cambios de valor restantes.
[EJEMPLO]
Supongamos que una entidad ha adquirido 100 bonos cupón cero a su valor nominal de
100 dólares, cuando el cambio era 1 dólar = 0,95 euros. El tipo de interés efectivo aplicable
es el 6% (supondremos que el tipo se mantiene constante). Los bonos se han clasificado
como activos financieros available for sale (AFS) para los propósitos de IAS 39. Las cotiza-
ciones del bono y los tipos de cambio aplicables son las que se indican a continuación para
las fechas que se señalan:
A los efectos de identificar las diferencias de cambio imputables, los bonos se consideran
activos monetarios en moneda extranjera que se valoran a coste amortizado. Suponiendo
que es aceptable el uso de una tasa de cambio promedio ponderado, las diferencias de
cambio y los resultados por cam-
155 ❚ CAPÍTULO 6
bios en valor razonable serían los si- 31-12-01 31-12-02
guientes:
Dólar Tasa Euro Dólar Tasa Euro
Inversión inicial 10.000 0,950 9.500 10.600 0,940 9.964
Rendimiento financiero devengado 600 0,945 567 636 0,955 607
Total 10.600 10.067 11.236 10.571
Valor según cambio cierre 0,940 9.964 0,970 10.899
Diferencia de cambio (resultados) –103 328
Valor en libros después de ajustes
9.964 10.386
por variación en el tipo de cambio
Valor razonable cierre 10.058 10.670
Cambios en valor razonable
94 284
(patrimonio neto)
Bonos 1.219
Diferencias positivas de cambio 328
Ingresos por intereses 607
Ganancias por cambios en valor
284
razonable de activos financieros AFS
Ciertos estándares requieren o permiten una contabilidad a valor razonable, o basada en valores ra-
156 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
zonables, para ciertas partidas no monetarias. Cuando tales valores razonables se determinan en
moneda extranjera, se convierten a la moneda funcional usando la tasa de cambio de cierre. Las ga-
nancias o pérdidas por variación de la tasa de cambio se registran entonces igual que los otros resul-
tados por cambios en el valor de la partida, imputándose a patrimonio neto o a resultados según lo
exija la norma de referencia.
[EJEMPLO]
Una entidad compra 100 acciones de valor nominal 10 dólares al 150%, cuando la tasa de
cambio es 1 dólar = 0,95 euros. En la fecha del cierre, las acciones cotizan al 160%, y el cam-
bio es 1 dólar = 0,94 euros. La inversión se clasificó como activo financiero disponible para
venta para los propósitos de IAS 39.
Los cambios en el valor razonable de la partida se imputan a patrimonio neto hasta la enaje-
nación o baja en libros, incluyendo las ganancias o pérdidas por variación de la tasa de
cambio (IAS 21, párrafo 30; IAS 39, párrafo 55b y AG 83).
Además de las reglas específicas de IAS 39 sobre la contabilidad de las coberturas (que incluyen
ahora las obligaciones en moneda extranjera que se tratan como cobertura de la inversión neta en
una entidad extranjera, para 2004 reguladas todavía por IAS 21), existe un tratamiento especial para
las partidas monetarias en moneda extranjera que se pueden considerar como parte integrante de la
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 157
inversión neta en una operación extranjera. Una operación extranjera es una entidad que es una
subsidiaria, asociada, negocio conjunto o sucursal de una entidad informante, cuyas actividades es-
tán basadas o se realizan en un país o divisa diferente a la de la entidad informante (párrafo 8).
Se consideran incluidas dentro de este concepto las partidas que cumplen las condiciones siguientes:
a) Se trata de préstamos a largo plazo concedidos a la entidad extranjera o tomados de ella (no de
partidas de deudores o acreedores comerciales.
b) Su liquidación no es probable en un futuro previsible (se requiere el uso del criterio para deter-
minarlo).
En consecuencia, y para los propósitos de IAS 21, tales partidas se tratan como una extensión o de-
ducción de la inversión neta en la entidad extranjera, con independencia de la calificación que me-
rezcan según IAS 32. Claramente, se trata de una aplicación del principio general de esencia sobre
la forma: las diferencias de cambio relacionadas con esta clase de transacciones se imputan al patri-
monio neto (al igual que las diferencias de conversión que afectan a la inversión neta en la entidad
extranjera). Al desapropiar la inversión, se imputan a resultados las diferencias acumuladas.
[EJEMPLO]
Una sociedad española suscribe el 1 de enero del año 1 el 75% de las acciones de una socie-
dad con sede en Nueva York, pagando 75 millones de dólares estadounidenses, y formaliza
un préstamo con dicha sociedad al 2% (coincidente con la tasa efectiva) por valor de 100 mi-
llones de dólares (intereses que se abonan cada 31 de diciembre); en ese momento el cam-
bio es 1 dólar = 1,1 euros. El objeto de dicho préstamo es proporcionar recursos estables a
la subsidiaria, y no se prevé su restitución en el futuro. El cambio vigente en la fecha de con-
clusión del ejercicio anual es 1 dólar = 1,05 euros, y el promedio del periodo 1 dólar = 1,08
157 ❚ CAPÍTULO 6
euros. La participación en la subsidiaria se valora por su coste.
Los asientos relativos al préstamo serían (en millones de euros) los siguientes. En el mo-
mento de la concesión:
Efectivo 2,10
Diferencias negativas de cambio 0,06
Ingresos por intereses 2,16
Diferencias de conversión
5,00
(patrimonio neto)
Resultados (sociedad matriz) 5,00
matriz):
El nuevo texto de IAS 21 no permite la capitalización de diferencias de cambio bajo ningún concepto.
La versión 2004 de IAS 21 (párrafo 21) autorizaba la capitalización de ciertas diferencias de cambio, si
bien bajo condiciones sumamente restrictivas, que han sido precisadas por la interpretación SIC 11.
Podían tratarse como una modificación del costo de adquisición de un activo las diferencias de cam-
bio cuando:
a) Surgían como consecuencia de devaluaciones muy importantes.
b) Afectaban a pasivos por compra de activos surgidos en los doce meses anteriores a la devaluación.
c) No había existido posibilidad de cobertura, o de liquidación del pasivo afectado, antes de la deva-
luación.
d) El valor resultante de la capitalización no superaba el importe recuperable del activo.
Se trataba, como se ve, de una norma más restrictiva aún que la Norma de Valoración 14ª.6 del PGC.
Si la entidad no aplica dicho procedimiento de conversión (por ejemplo, porque el uso de una mo-
neda de presentación diferente se limita a partidas seleccionadas), debe:
a) Identificar dichos datos como información complementaria, a fin de distinguirlos de aquellos otros
que son conformes con IFRS.
b) Revelar la divisa en que se muestra la información complementaria.
c) Revelar la moneda funcional de la entidad y el método de conversión utilizado.
5. Operaciones en el extranjero
Al igual que en el apartado precedente, los temas básicos de la contabilidad de operaciones en el ex-
tranjero son:
a) La selección de la tasa de cambio apropiada para la expresión de sus estados financieros en la
moneda funcional de la entidad informante.
b) El tratamiento de los ajustes derivados de la conversión.
Históricamente, las profesiones contables han escogido entre cuatro métodos de conversión:
a) El método circulante-no circulante prescribe la conversión de las partidas de circulante (existen-
cias, cuentas a cobrar y por pagar, y efectivo y equivalentes) al tipo de cambio de cierre, valo-
rando a tipos históricos el resto de partidas del balance.
b) El método monetario-no monetario aplica el cambio de cierre para la conversión de las partidas
monetarias (efectivo y saldos a pagar o cobrar en efectivo) tengan el vencimiento que tengan. Las
partidas no monetarias del balance general se convierten aplicando la tasa de cambio vigente en
159 ❚ CAPÍTULO 6
la fecha de las correspondientes transacciones, al igual que los ingresos y gastos (los gastos por
consumo de activos no monetarios, como la depreciación, se convierten a la tasa de cambio apli-
cada a las correspondientes inversiones).
c) El método temporal es un desarrollo del método monetario-no monetario que contempla la posibi-
lidad de que existan partidas no monetarias medidas a valor razonable o revaluado: se aplica la
tasa de cambio vigente en la fecha en que se estableció ese valor para convertir tales activos y los
gastos relacionados con su consumo (para las partidas valoradas a costos históricos, el método
temporal opera igual que el monetario-no monetario).
d) El método del tipo de cambio de cierre prescribe la aplicación de esa tasa para la conversión de
todas las partidas del estado de situación financiera.
El nuevo texto de IAS 21 sólo permite el uso del método de cambio de cierre. La versión 2004 obliga a
aplicar el método temporal para la conversión de las entidades que son parte integral o mera extensión
de las actividades de la matriz (que se convierten usando el método monetario-no monetario en el RD
1815/91). Estas entidades están obligadas a informar en la misma moneda funcional que la matriz, de
manera que las diferencias de cambio que antes surgían en el proceso de conversión (aplicando el
método temporal) han de aparecer ya en el informe IAS/IFRS de la operación extranjera.
El método del tipo de cierre descansa sobre la hipótesis de que la variación de la tasa de cambio no
incide, o incide escasamente, sobre los flujos de efectivo de ambas entidades, y de que es la inver-
sión neta (la porción del activo neto atribuible a la matriz) la que está expuesta al riesgo de cambio.
Aunque es el método principal de conversión en todo el mundo desde que el FASB sustituyó SFAS 8
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 160
(que prefería el método temporal) por SFAS 52, ha recibido críticas contundentes por parte de quie-
nes consideran que carece de sentido aplicar a las diferencias de conversión un rasero diferente del
empleado en los informes individuales de las empresas del grupo.
Los principios básicos del método de tipo de cambio de cierre de IAS 21 son:
a) Los activos y pasivos se convierten aplicando la tasa de cambio de cierre.
b) Los ingresos y gastos se reexpresan según el cambio existente cuando se incurre en ellos (aun-
que puede hacerse uso de un promedio).
c) Las diferencias imputables a minoritarios se incluyen en la partida de intereses minoritarios.
d) Las diferencias atribuibles al grupo se inscriben en el patrimonio neto hasta la desapropiación de
la inversión.
e) Si los estados financieros de la entidad extranjera se refieren a una fecha anterior a la de cierre de
la controladora (el párrafo 27 de IAS 27 admite que la diferencia entre dichas fechas no supere
los tres meses), la tasa de cambio a utilizar es la de la fecha de esos estados financieros. Si ha ha-
bido variaciones significativas de la tasa de cambio en el intervalo, se practican los ajustes nece-
160 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Los US GAAP aplicables a este último punto, contenidos en el párrafo 2 de la interpretación FIN 37
(que desarrolla en este punto las prescripciones de SFAS 52) son consistentes con el planteamiento
del IASB. Recordemos que el artículo 55.2 del RD 1815/91 las considera reservas de la sociedad
que detentaba la participación.
El IASB trabaja en la actualidad para aclarar la contabilidad de este “reciclaje” de las diferencias de
conversión como ganancias o pérdidas. De prosperar finalmente sus propuestas, las reglas sobre
este punto quedarían así:
a) La totalidad de los ajustes de conversión acumulados se imputan a resultados en el momento en
que cesa el control sobre la operación extranjera, aun en el caso de que se conserve influencia
notable o control conjunto sobre ella. El mismo método se aplicaría para las demás ganancias o
pérdidas integradas en el patrimonio neto del negocio enajenado.
b) Si la operación extranjera es una asociada o un negocio conjunto, se aplica el mismo criterio ante-
rior en el momento en que cesa la influencia notable o el control conjunto sobre ella.
SFAS 52 considera que los activos y pasivos por impuestos diferidos son partidas monetarias que de-
ben ser valoradas a la tasa de cambio de cierre cualquiera que sea el método de conversión elegido.
IAS 21 no se ocupa específicamente de este problema, que se aborda en IAS 12: las diferencias de
cambio que se ponen de manifiesto pueden tratarse como gasto o ingreso por impuesto a las ganan-
cias (IAS 12, párrafo 78).
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 161
[EJEMPLO]
Una sociedad española suscribe el 1 de enero del año 1 el 75% de las acciones de una socie-
dad con sede en Nueva York, pagando 75 millones de dólares estadounidenses, y formaliza
un préstamo con dicha sociedad al 2% (coincidente con la tasa efectiva) por valor de 100 mi-
llones de dólares (intereses que se abonan cada 31 de diciembre); en ese momento el cam-
bio es 1 dólar = 1,1 euros. El objeto de dicho préstamo es proporcionar recursos estables a
la subsidiaria, y no se prevé su restitución en el futuro. El cambio vigente en la fecha de con-
clusión del ejercicio anual es 1 dólar = 1,05 euros. La participación en la subsidiaria se va-
lora por su coste. Los estados financieros de la subsidiaria estadounidense, a 31 de diciem-
bre, son los que se muestran a continuación.
161 ❚ CAPÍTULO 6
Suma el pasivo 150 Resultado actividades ordinarias 20
Capital emitido 100
Ganancia neta del periodo 20
Ganancias acumuladas 20
Las tasas de cambio son las que se indican a continuación para las fechas que en cada caso
se señalan:
163 ❚ CAPÍTULO 6
(Eliminación del crédito interno)
(Reclasificación de las diferencias de cambio que relacionadas con el préstamo que se con-
sidera parte integrante de la inversión neta en la entidad extranjera)
Eliminaciones
Controladora
Consolidado
Agregado
Filial
Eliminaciones
Controladora
Consolidado
Agregado
Filial
165 ❚ CAPÍTULO 6
Diferencias negativas cambio 5,06 5,06 –5,00 0,06
Impuesto a las ganancias 10,80 40,00 50,80 50,80
Intereses minoritarios 0,00 5,40 5,40
Ganancia neta del periodo 21,60 43,00 64,60 –10,40 64,20
Como se ve, las diferencias de cambio que afectan al préstamo a largo plazo se tratan como
incremento de la diferencia negativa de conversión relacionada con la inversión neta en la
entidad extranjera.
[EJEMPLO]
Supongamos ahora que la controladora española del ejemplo anterior vende su participa-
ción el 1 de enero de 2003 por 95 millones de dólares. El cambio es de 1 dólar = 1,05 euros
en ese momento. La antigua subsidiaria toma prestados 100 millones de dólares para liqui-
dar el préstamo concedido. [Nota. La finalidad de este ejemplo es ilustrar el “reciclaje” de
las diferencias de conversión acumuladas como ganancias o pérdidas en el momento en
que cesa el control sobre la operación extranjera. Por tanto, se ha hecho abstracción de las
implicaciones derivadas de la aplicación de IFRS 5, que con toda probabilidad exigiría que
los activos y pasivos de la filial extranjera se tratasen como un disposal group para los fines
de esa norma].
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 166
(Venta de participación)
La posición del IASB ante el problema (IAS 21, párrafo 42; IAS 29, párrafos 20, 35 y 36) es bastante
diferente, ya que exige que
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 167
Las normas del RD 1825/91 para este supuesto (que son en realidad un calco de las del Plan Comp-
table Général francés de 1982) han sido duramente criticadas por escasas y por conceder un grado
excesivo de discrecionalidad a la gerencia. En efecto, el artículo 57:
a) No contiene una definición de “altas tasas de inflación” (ni siquiera proporciona indicios o guías
al estilo de IAS 29).
b) Se remite a la legislación nacional de la subsidiaria extranjera en todo lo referido a la obligación de
tomar en cuenta los cambios en los precios, y a los métodos que deben ser aplicados para la re-
expresión.
c) Hace depender el método de conversión a aplicar de lo que se establezca en la legislación nacio-
nal de la subsidiaria, porque:
– Se hace uso del método del cambio al cierre si los principios contables de ese país exigen la re-
expresión de los estados financieros.
– Se emplea el método monetario-no monetario si (por no exigirlo dichas normas) no ha habido
reexpresión.
167 ❚ CAPÍTULO 6
Las guías sobre identificación de un economía hiperinflacionaria, y el material sobre reexpresión de
los estados financieros expresados en esa moneda, se hallan en IAS 29. Esta norma exige que sus ci-
fras se establezcan en unidades de poder adquisitivo corriente al cierre, y permite usar el coste de
reposición como base de valoración. El ejemplo siguiente es una breve exposición de las reglas sobre
reexpresión y conversión de estados financieros en este supuesto.
[EJEMPLO]
Los estados financieros de una subsidiaria participada al 100% desde su fundación presen-
tan las cifras que se exponen a continuación. La divisa de sus estados financieros se consi-
dera moneda de una economía hiperinflacionaria a partir del ejercicio X1. La controladora
contabiliza la participación en sus estados individuales usando el método del coste.
X0 X1
Compras 30.000
Inventario inicial 15.000
Inventario final –20.000
Depreciación 10.000
Amortización intangibles 2.000
Otros gastos de operación 8.714
Todos los activos aparecen valorados por su costo histórico debidamente depreciado, con
excepción de los integrantes de propiedades, planta y equipo, que han sido revaluados a 31
de diciembre de X0. El ejercicio X1 es el primer periodo de aplicación de IAS 29. Los índices
de precios, y las tasas de cambio de la divisa local frente al euro, son los que se indican a
continuación para cada fecha.
IPC local Divisas por €
Constitución de la firma 100 2,00
Promedio de X9 120 2,39
Adquisición de intangibles 130 2,54
Promedio de X0 230 4,48
Cierre de X0 260 5,03
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 169
169 ❚ CAPÍTULO 6
Patrimonio neto 140.000 161.957
Comentarios:
a) Las partidas monetarias no se reexpresan, porque se hallan ya medidas en la unidad de
medida corriente al cierre (IAS 29, párrafo 12).
b) Los elementos de propiedades, planta y equipo no necesitan ser reexpresados porque se
han medido por su valor corriente en la fecha del balance, usando el tratamiento alterna-
tivo permitido del párrafo 29 de IAS 16 (IAS 29, párrafo 14).
c) Las demás partidas no monetarias deben ser expresadas en la unidad de medida co-
rriente al cierre, tomando en cuenta la variación experimentada por el índice de precios
desde la fecha en que se incurrió en los gastos de compra o conversión (IAS 29, párrafo
15). En el caso de los inventarios, se toma en cuenta la variación promedio del índice de
precios registrada en el periodo, ya que se aplica el convenio de costo medio ponderado
para su medición (tratamiento por punto de referencia del párrafo 21 de IAS 2).
d) Se ha prescindido de posibles pérdidas por deterioro del valor de los activos, que po-
drían ponerse de manifiesto al reexpresar su importe (IAS 29, párrafo 19).
e) El patrimonio neto se reexpresa conforme a lo señalado en el párrafo 24 de IAS 29:
– El capital emitido se actualiza tomando en cuenta la variación del índice de precios que
se ha registrado desde el momento de la aportación.
– Se suprime todo superávit de revaluación.
– Se calculan por diferencias las ganancias acumuladas.
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 170
Comentarios:
3. Reexpresión del estado de resultados y cálculo de las ganancias y pérdidas por la posi-
ción monetaria neta.
171 ❚ CAPÍTULO 6
Ganancia o pérdida neta
3.000 –15.117
del periodo
Comentarios:
valen menos cada vez. IAS 29 fija dos procedimientos para establecer las ganancias o
pérdidas derivados de la posición monetaria neta (diferencia entre activos y pasivos
monetarios):
1. Mediante la suma algebraica de todos los demás ajustes realizados para la reexpresión
de los estados financieros.
2. Aplicando la variación en el índice general de precios a la posición monetaria media
ponderada del periodo.
Pérdidas por la posición monetaria neta (método de IAS 29): se representan los ajustes
acreedores con signo negativo, y con signo positivo los deudores.
El resultado del periodo es igual al incremento de patrimonio neto que queda después de
haber mantenido la capacidad adquisitiva del capital invertido, y una vez descontado el
efecto de las aportaciones o retiros de fondos efectuados por los propietarios. En este caso:
173 ❚ CAPÍTULO 6
Patrimonio neto 225.281 32.170
Estado de resultados del periodo concluido el 31 de diciembre de X1:
Concepto Reexpresado Tasa Euro
Ventas netas 58.494 7,00 8.353
Compras –35.096 7,00 –5.012
Inventario inicial –23.804 7,00 –3.399
Inventario final 23.397 7,00 3.341
Depreciación –14.038 7,00 –2.005
Amortización intangibles –5.615 7,00 –802
Otros gastos de operación –10.195 7,00 –1.456
Total gastos de operación –65.352 7,00 –9.332
Resultado de operación –6.858 –979
Impuestos a las ganancias –1.504 7,00 –215
Pérdidas por la posición monetaria neta –6.755 7,00 –965
Ganancia o pérdida neta del periodo –15.117 –2.159
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 174
Comentarios:
a) Las cuentas de capital emitido se convierten usando tasas de cambio históricas, puesto
que la controladora ha empleado el método del costo para contabilizar la participación.
b) Las ganancias acumuladas que resultan de la reexpresión del balance referido a 31 de di-
ciembre de X0 (IAS 29, párrafo 24) se convierten usando el tipo de cambio vigente a esa
fecha.
c) Todas las demás partidas del balance se convierten aplicando la tasa de cambio al cierre
sobre los valores en unidades de poder adquisitivo constante que se han obtenido de la
aplicación de IAS 29 (IAS 29, párrafo 35; IAS 21, párrafo 42a).
d) Los ingresos y los gastos se traducen a euros aplicando la tasa de cambio al cierre a los
valores reexpresados (IAS 21, párrafo 42a).
e) Recordemos una vez más que si las cifras de los estados financieros consolidados referi-
das a periodos anteriores han sido presentadas en la moneda de una economía no hipe-
rinflacionaria (el euro, en este caso), no deben ser reexpresadas.
174 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
La opción escogida en la nueva versión de IAS 21 es un paso más hacia la implantación de normas
de consolidación basadas en la teoría de la entidad. Recordemos que la nueva norma sobre combi-
naciones (IFRS 3, que deroga IAS 22) obliga a medir todos los activos, pasivos y pasivos contingen-
tes de la entidad adquirida por sus valores razonables en la fecha de adquisición (con independencia
del porcentaje de propiedad adquirido por la entidad informante), y que en el momento actual (den-
tro de la Fase II del Proyecto sobre Combinaciones de Negocios) se discute la aplicación del full va-
lue method a la valoración del fondo de comercio (lo que supondría incluir en su valor la fracción de
este activo imputable a intereses minoritarios). Por otro lado, no cabe duda de la recuperación de los
activos, y la liquidación de los pasivos tendrá lugar en la moneda funcional de la operación extranjera
(la operación extranjera genera y gasta efectivo principalmente en una moneda diferente de la divisa
de la matriz).
Las NFCAC no abordan este problema de manera específica. Parece que su posición al respecto
pasa por considerar que estamos ante activos y pasivos de la controladora, expresados usualmente
en euros.
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 175
[EJEMPLO]
Una sociedad española compra el 1 de enero del año 1 el 75% del capital inicial de una so-
ciedad con domicilio en Nueva York, pagando 95 millones de dólares estadounidenses. El
capital contable de la sociedad estadounidense presentaba el siguiente detalle en el mo-
mento de la adquisición (en millones de dólares).
El tipo de cambio es en ese momento 1 dólar = 1,1 euros; en la fecha del cierre, la tasa se si-
túa en 1 dólar = 1,05 euros. Los valores en libros de los activos y pasivos adquiridos se han
aceptado como representativos de sus respectivos valores razonables. La moneda funcional
de la filial es el dólar USA, y la de la dominante española es el euro. La sociedad compra-
dora ha aplicado el método del coste para la contabilización de la inversión en sus estados
financieros individuales.
Menos: participación de la
matriz en el valor razonable de los –90,00
activos netos (dólares)
175 ❚ CAPÍTULO 6
Tipo de cambio de cierre 1,05
El método antedicho es de aplicación prospectiva. Esto es, se emplea en la contabilidad de las adqui-
siciones posteriores a la entrada en vigor del nuevo texto (1 de enero de 2005), aunque se permite su
aplicación retroactiva. Por tanto, si la entidad venía tratando el fondo de comercio y los referidos ajus-
tes por valor razonable como activos o pasivos de la entidad informante, o como partidas no moneta-
rias de la operación extranjera (valoradas por tanto a tasa de cambio histórica), no está obligada a re-
expresar su valor. Recordemos, por otro lado, que el nuevo IFRS 3 suprime la amortización sistemá-
tica del fondo de comercio desde el inicio del primer periodo contable anual que comience el 31 de
marzo de 2004 o con posterioridad a esa fecha (no se requiere la aplicación retrospectiva, pero se
permite bajo ciertas condiciones).
8. Información a revelar
Resumidamente, los párrafos 51 a 57 de IAS 21 exigen revelar información sobre los siguientes ex-
tremos (algunos otros han sido mencionados a lo largo del texto):
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 176
a) El importe de las diferencias de cambio incluidas en los resultados (excepto para las relacionadas
con instrumentos financieros estimados a valor razonable a través de resultados).
b) Las diferencias de cambio incluidas en el patrimonio neto, y una conciliación del saldo inicial y final.
c) Cuando sea el caso, la utilización de una moneda de presentación diferente de la funcional, y las
razones para emplearla.
d) En su caso, un cambio en la moneda de los estados financieros, y las razones para efectuarlo.
176 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
FASCiCULO 06 20/9/04 18:00 Página 177
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 177
C A P Í T U
7
L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 179
C A P Í T U
7
L O
Normas Internacionales de
Combinaciones de negocios
Contabilidad
José Alberto Toribio Temprado
(Profesor del CEF)
1. Introducción
Los nuevos IAS/IFRS aplican normas contables comunes a todas las combinaciones de negocios que
caen dentro de su alcance, con independencia de la forma legal que adopten (esencia sobre la
forma: MC, párrafo 35), y se incorporan a la tendencia liderada por FASB hacia la uniformidad de las
reglas contables sobre la cuestión. Los temas principales de la contabilidad de combinaciones de ne-
gocios son:
– Qué se entiende por combinación de negocios.
179 ❚ CAPÍTULO 7
– El método contable que ha de aplicarse.
– La contabilidad del fondo de comercio, positivo o negativo, que se pone de manifiesto cuando se
usa el método de compra.
Lo que sigue es, principalmente, un comentario a las reglas de IFRS 3 Business Combinations, publi-
cado en marzo de este año. En el momento de preparar este trabajo, se discuten ciertas modificacio-
nes a sus reglas (dentro de la Fase II). IFRS 3 se aplica a todas las combinaciones de negocios con
fecha de acuerdo posterior a 31 de marzo de 2004. No se requiere la aplicación retrospectiva (aun-
que se autoriza, bajo ciertas condiciones). Por esta razón, y por la importancia del tema, no he consi-
derado oportuno omitir una exposición, siquiera esquemática, del contenido de las normas deroga-
das, contenidas en IAS 22 (versión revisada en 1998). Se incluyen, en lo posible, las referencias
oportunas a los US GAAP relevantes, imprescindibles en esta área.
b) Costes menores de forma directa y proporcional a los titulares de pólizas o partícipes (en el caso,
por ejemplo, de las cooperativas o las sociedades de seguros mutuos).
Para desarrollar la noción de negocio, el IASB se apoyó en las conclusiones de EITF 98-3 Determi-
ning Whether a Nonmonetary Transaction Involves Receipt of Productive Assets or of a Business
(norma a la que se remite el párrafo 9 de SFAS 141), aunque introdujo ciertas modificaciones sobre
ellas. Por otro lado, IFRS 3 no cubre combinaciones.
a) Efectuadas para formar una joint venture (la discusión sobre la contabilidad de estas operaciones, in-
cluyendo fresh start accounting, se trata en la Fase II del Proyecto sobre Combinaciones de Negocios).
b) De entidades bajo control común.
c) De una o más mutualidades.
180 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
IAS 22 (párrafos 5 y 6) únicamente excluía de su alcance las transacciones entre empresas bajo con-
trol común y las participaciones en negocios conjuntos.
[EJEMPLO]
Identificar qué operaciones, de entre las siguientes, son combinaciones de negocios, y si es-
tán o no cubiertas por las normas de IFRS 3.
1. La sociedad A adquirió el 1 de enero del año 1 el 100% del capital y de los derechos de
voto de la entidad B, pagando 4.000 euros. La sociedad B es una sociedad patrimonial y
su activo está íntegramente formado por terrenos adquiridos con la finalidad de obtener
ganancias por revalorización a largo plazo.
Las operaciones de B no pueden ser consideradas negocios. Cuando se adquiere control
sobre una entidad cuyas operaciones no son negocios, la operación no es una combina-
ción (IFRS 3, párrafo 4). El coste del grupo de activos y pasivos adquirido se distribuye
entre todos ellos a prorrata de su valor razonable en la fecha de adquisición. No se reco-
noce fondo de comercio alguno.
2. La sociedad B es una compañía dedicada a la fabricación de cerveza. A cambio de un pago
de 4.000 euros en efectivo, ha vendido la totalidad de sus operaciones de fabricación y
distribución en España a la compañía A. Ello incluye la transferencia de toda clase de acti-
vos relacionados con dicha actividad, y de los pasivos directamente asociados. El valor ra-
zonable de los activos netos de las operaciones transferidas se cifra en 3.000 euros.
Existe un fondo de comercio de 1.000 euros (4.000-3.000) asociado al conjunto de activos
y pasivos transferido. Se presume que éste es un negocio, y que la operación es una
combinación.
3. La sociedad A es propietaria del 60% del capital de B. Los accionistas titulares del 40%
restante han aceptado canjear sus títulos por acciones de A. La adquisición de intereses
minoritarios (combinación descendente) es una combinación de entidades bajo control
común, y no está cubierta por los IAS/IFRS actuales (es objeto de discusión en la Fase II).
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 181
181 ❚ CAPÍTULO 7
las respectivas entidades (no caben step-up adjustments o ajustes de primera consolidación), sin
más variación que la impuesta por la necesaria homogeneidad de las políticas contables a aplicar
(IAS 22, párrafo 81).
b) No se reconoce ningún fondo de comercio en el activo.
c) La diferencia entre el valor contable de las participaciones entregadas, más cualquier contrapres-
tación adicional, y el valor asignado a las participaciones adquiridas (o a los activos netos recibi-
dos) se lleva contra cuentas de patrimonio neto (IAS 22, párrafo 79).
d) Toda la información comparativa se presenta como si la combinación hubiese tenido lugar al co-
menzar el periodo más antiguo sobre el que se presenta información (IAS 22, párrafo 78).
e) Al preparar (en su caso) los estados financieros consolidados, se elimina el efecto de todas las
transacciones entre las entidades que se combinan, sean anteriores o posteriores a la combina-
ción (IAS 22, párrafo 81).
f) Los gastos relacionados derivados de la operación (incluyendo salarios de personal que participó
en la operación y costos o pérdidas derivados de combinar las entidades que antes funcionaban
por separado: IAS 22, párrafos 82 y 83) se cargan a resultados en cuanto se incurre en ellos.
Las combinaciones que se clasifican como uniones de intereses han de envolver alguna clase de in-
tercambio de instrumentos de capital de las entidades combinadas, puesto que los propietarios de
todas ellas han de conservar intereses en las operaciones del negocio resultante. Este método ha
sido ampliamente utilizado durante largo tiempo y especialmente en Estados Unidos, mientras es-
tuvo vigente la Opinión APB 16. Esta norma (párrafos 43, y 45 a 47) hacía depender la aplicación del
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 182
Consecuentemente, se volverá más probable la identificación de un adquirente (IAS 22, párrafo 16)
cuando:
182 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Las políticas contables seguidas por ambas entidades son sustancialmente homogéneas,
salvo en lo referente a la valoración de los inmuebles de uso propio, que A mide a valor re-
valuado (B usa la base de coste amortizado). Los inmuebles en poder de B, que tienen un
valor en libros de 1.000 euros, valen en la actualidad 1.500 euros. La tasa de impuesto es del
30%. La revaluación no está gravada (hasta que se vende el inmueble).
Parte de las existencias que figuran en poder de B fueron vendidas por A en el curso del
183 ❚ CAPÍTULO 7
ejercicio precedente, repercutiendo un beneficio de 100 euros.
Las reglas contables de IAS 22 sobre la contabilidad de estas operaciones son poco detalla-
das en cuanto a las correcciones a efectuar sobre las cuentas de patrimonio neto. En particu-
lar, no se indica:
En la resolución de este extremo se han aplicado las reglas de la Opinión APB 16 (párrafos
52 y 53), que establecía:
En este caso, la entidad emite capital por 1.250 euros (esto es, 125 acciones de valor nomi-
nal 10) para sustituir el capital de 2.000 euros de B. La diferencia se consigna como prima de
emisión. En forma de asiento resumido, el ajuste a efectuar sería:
Como se ha indicado, los activos y pasivos de las entidades que se combinan no reciben
otros ajustes que los necesarios para asegurar la homogeneidad de criterios contables y los
derivados de las eliminaciones por operaciones entre dichas entidades. En forma de en-
trada de diario, los ajustes a realizar serían:
En junio de 2001, FASB aprobó SFAS 141, iniciando una tendencia hacia la eliminación del método
de unión de intereses a la que pronto se incorporaron otros países, como Canadá, Australia o Nueva
Zelanda. El IASC ya había limitado en gran medida el alcance del método de pooling tras la revisión
de IAS 22 efectuada en 1998. No obstante, dado que la mejora de la convergencia con la regulación
de ciertos Estados se designó como uno de los objetivos de la Fase I del Proyecto de Combinaciones
de Negocios, IFRS 3 (que sustituye a IAS 22) incorpora los planteamientos básicos de SFAS 141 y
SFAS 142. Por tanto:
– Todas las combinaciones se contabilizan bajo el método de compra.
– Los activos, pasivos y pasivos contingentes de la entidad o negocio adquirido se registran por su
valor razonable de la fecha de adquisición (se elimina el actual tratamiento por punto de referencia
del párrafo 32 de IAS 22).
– Se suprime la amortización sistemática del fondo de comercio, y se sustituye por un test anual de
deterioro.
– Se prescribe la imputación inmediata a resultados del fondo de comercio negativo.
La contabilización de una combinación de negocios por el método de la compra exige completar los
siguientes pasos:
1. Identificación del adquirente.
2. Cuantificación del coste de la combinación.
3. Distribución del coste de la combinación entre los activos, pasivos y pasivos contingentes del ne-
gocio adquirido.
4. Identificación del fondo de comercio asociado a la operación, o del exceso de la participación del
185 ❚ CAPÍTULO 7
adquirente en el valor razonable de los activos netos de la operación adquirida sobre el coste de la
combinación.
Los párrafos 20 a 23 de IFRS 3 contienen indicadores adicionales para la identificación del adqui-
rente. Algunos de ellos se comentan en el ejemplo siguiente.
[EJEMPLO]
4. La sociedad A es propietaria del 42% del capital y derechos de voto de B. Posee opciones
sobre acciones ordinarias de B, ejercitables en la fecha del cierre, por un 10% más del capi-
tal común. Para evaluar si existe control, se computan los derechos de voto potenciales (re-
presentados por las opciones call sobre acciones comunes) siempre que sean ejercitables
en el momento actual (IAS 27, párrafos 14 y 15). Se toman en cuenta tanto los poseídos por
la entidad como los que están en manos de terceros no relacionados. El ejercicio de la op-
ción no ha de estar condicionado a la ocurrencia de un suceso futuro o al paso del tiempo.
5. Coste de la combinación
El coste de la combinación viene dado por la suma de (IFRS 3, párrafo 24):
a) Los valores razonables, en la fecha del intercambio, de los activos entregados, los pasivos asumi-
dos o incurridos, y los instrumentos de capital emitidos por el adquirente.
b) Los costes directamente atribuibles a la combinación.
El planteamiento es coincidente con el de los párrafos 20 a 23 de SFAS 141 (que no hacen sino transcri-
bir las reglas de los párrafos 72 a 75 de la Opinión APB 16 sobre contabilidad bajo el método de la com-
pra). Por lo general, el valor razonable de los instrumentos de capital emitidos será su valor de cotización,
si es que existe. IFRS 3 proporciona guías adicionales para evaluar dicho valor en defecto de valores di-
rectamente observables en el mercado, además de remitirse a las reglas de IAS 39 sobre la materia.
Los socios propietarios del 75% del capital y derechos de voto de la sociedad Y canjearán
sus acciones por 250.000 acciones de la sociedad X emitidas con ese fin. El valor razonable
de Y se cifra en 400 millones de euros, y el de X, en 1.250 millones, según tasaciones inde-
pendientes. El capital de X está dividido en 1 millón de acciones. Ni las acciones de X ni las
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 187
de Y están admitidas a cotización. Socios titulares de otro 5% del capital de Y aceptaron una
contraprestación en metálico por valor de 21 millones.
Con arreglo al párrafo 27 de IFRS 3, las siguientes serían bases válidas para establecer el
coste de la combinación:
La entidad del punto anterior incurrió en los siguientes gastos relacionados con la opera-
187 ❚ CAPÍTULO 7
ción (en millones):
a) Honorarios de tasadores independientes: 10 euros.
b) Honorarios de asesores legales y otros: 1,5 euros.
c) Gastos por confección de títulos, impuestos e inscripción registral de la emisión de capi-
tal: 4 euros.
d) Coste estimado del tiempo dedicado por la dirección al estudio de la adquisición: 1 euro.
Los honorarios de tasadores y asesores legales son costes directos e incrementales origina-
dos por la adquisición, y se integran en el coste de la combinación. Los gastos relacionados
con la emisión de instrumentos de capital se deducen del capital emitido (en el párrafo 25
de IAS 22 se consideran costes de la combinación), aplicando la regla general del párrafo 37
de IAS 32. Los costes generales e indirectos se imputan a gastos cuando se incurre en ellos
(las reglas citadas son consistentes con las del párrafo 24 de SFAS 141, a su vez tomadas del
párrafo 76 de APB 16).
b) Cuando deviene probable y se puede determinar el valor razonable de un ajuste que no había
sido incluido en el coste de la combinación por faltar una de esas condiciones (o ambas) en la fe-
cha de adquisición (párrafo 34).
El coste de la combinación no se modifica cuando ocurre el suceso futuro contingente en este último
caso. El adquirente computa una rebaja de valor de los instrumentos entregados en la fecha de ad-
quisición al mismo tiempo que registra la contraprestación contingente (IFRS 3, párrafo 35; en el
mismo sentido, SFAS 141, párrafo 30).
188 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
IFRS 3 no introduce apenas cambios respecto a las reglas de IAS 22 (párrafos 68 a 70). Los actuales
IAS/IFRS no proporcionan reglas contables específicas para este tipo de contraprestaciones, exclui-
das del alcance de IAS 32 (párrafo 4 d) y de IFRS 2 (si dan lugar a la emisión de instrumentos de ca-
pital: párrafo 5). Si el suceso contingente da lugar a la emisión de instrumentos de capital, parece ló-
gico incluir en patrimonio neto (y en el coste de la combinación) una estimación del valor razonable
de los mismos, si se considera probable el cumplimiento de la condición futura. Ésta es la solución
adoptada en el estándar británico FRS 7 Fair Values in Acquisition Accounting (párrafos 81 y 82), y
parece la más coherente con el planteamiento de IAS 32 y de IFRS 3. FRS 7 aplica el mismo método
(abono a patrimonio neto: FRS 7, párrafo 83) al caso de que la adquirente pueda satisfacer la contra-
prestación contingente en efectivo o en sus propias acciones, a su elección.
El hecho de que los valores de emisión contingente sean entregados en garantía o traspasados a un
fideicomisario independiente no modifica el tratamiento bajo SFAS 141.
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 189
Queda suprimido (con efectos prospectivos a 31 de marzo de 2004) el tratamiento por punto de refe-
rencia del párrafo 32 de IAS 22, que establecía una base de valoración mixta. Según este método,
los activos y pasivos del negocio adquirido se valoraban por la suma de:
a) La participación del adquirente en el valor razonable que tuvieran en la fecha de adquisición.
b) La participación de minoritarios en el valor consignado en los libros de la adquirida.
189 ❚ CAPÍTULO 7
[EJEMPLO]
La sociedad A adquirió el 1 de enero del año 1 el 60% del capital y derechos de voto de la so-
ciedad B, pagando 5.000 euros. Los valores razonables de los activos y pasivos de B en la
fecha de adquisición, según las estimaciones disponibles al cierre del primer trimestre, son
los que se indican a continuación, junto con los valores que aparecen en el balance inde-
pendiente de B:
Sociedad B
Concepto
Valor en libros Valor razonable
Activo intangible 1.000 3.000
Propiedades, planta y equipo 4.000 5.000
Inventarios 500 600
Créditos comerciales 250 200
Efectivo 100 100
Suma el activo 5.850 8.900
Préstamos a largo plazo 1.000 1.320
Pasivos comerciales 150 150
Suma el pasivo 1.150 1.470
Suma el activo neto 4.700 7.430
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 190
Se pide: establecer los valores en la fecha de primera consolidación para los activos y pasi-
vos de B, aplicando:
Según el párrafo 32 de IAS 22, los activos y pasivos de la adquirida se llevan al balance con-
solidado por un 60% del valor razonable que tenían en la fecha de primera consolidación,
más un 40% del valor según libros de B:
Sociedad B Valor
Concepto
Valor en libros Valor razonable para consolidar
Con arreglo a IFRS 3, los activos y pasivos de B que cumplen las condiciones de reconoci-
miento en la fecha de adquisición (en el ejemplo, los que figuran en el balance de B, y nada
más que éstos) se llevan al balance consolidado a su valor razonable. El importe registrado
como fondo de comercio en el activo no cambia.
Sociedad B Ajustes
Valor para
Concepto primera
consolidar
consolidación
Valor en libros Valor razonable
Activo intangible 1.000 3.000 1.200 2.200
Propiedades, planta y equipo 4.000 5.000 600 4.600
Inventarios 500 600 60 560
Créditos comerciales 250 200 250
Efectivo 100 100 100
Suma el activo 5.850 8.900 7.710
Préstamos a largo plazo 1.000 1.320 1.000
Pasivos comerciales 150 150 150
Suma el pasivo 1.150 1.470 1.150
Suma el activo neto 4.700 7.430 6.560
191 ❚ CAPÍTULO 7
La supresión del tratamiento por punto de referencia de IAS 22 permite una mejor convergencia con
SFAS 141 (que opta por el valor razonable como base única de medición). El Apéndice B de IFRS 3
contiene guías adicionales para la determinación del valor razonable, que son en su mayor parte
coincidentes con las del párrafo 37 de la norma de FASB. No obstante, subsisten importantes dife-
rencias en ciertas áreas, como el tratamiento de partidas contingentes.
Para IFRS 3, la adquirente reconoce los pasivos contingentes de la adquirida si es posible establecer
fiablemente su valor razonable (párrafo 47). Un pasivo contingente es:
a) Una obligación posible originada por sucesos pasados y cuya existencia será confirmada por la
ocurrencia o no ocurrencia de uno o más sucesos futuros e inciertos, que no están enteramente
bajo control de la entidad.
b) Una obligación presente originada por sucesos pasados pero que no cumple las condiciones para
su reconocimiento como pasivo porque:
– No es probable que dé lugar, para su cancelación, a una salida de recursos que incorporan be-
neficios económicos.
– No es posible establecer su valor razonable con fiabilidad.
Como es lógico, IAS 37 no permite el registro de los pasivos contingentes, dado que no cumplen la
definición de pasivo (caso a) o las condiciones de reconocimiento (caso b). Sin embargo, IFRS 3
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 192
obliga a reconocerlos como tales cuando se adquieren como parte de una combinación de negocios,
si se cuenta con un valor razonable fiable (el importe que cargaría un tercero independiente por ha-
cerse cargo de la obligación en la fecha de la combinación). Dentro de la Fase II se ha propuesto una
modificación de las reglas actuales, de modo que:
a) Los pasivos contingentes pasarían a definirse como obligaciones condicionales originadas por su-
cesos pasados, que pueden exigir una salida de recursos basada en la ocurrencia o no ocurrencia
de sucesos futuros inciertos que no están enteramente bajo el control de la entidad.
b) No se reconocerán activos o pasivos que no cumplan las condiciones de reconocimiento del
Marco Conceptual.
c) Los pasivos contingentes no se reconocerán como pasivos si no van acompañados de obligacio-
nes incondicionales.
A falta de tales características, la entidad adquirente no contabiliza pasivo alguno (tampoco computa un
pasivo contingente), ni aun en el caso de que la ejecución del plan esté condicionada a la combinación.
[EJEMPLO]
La entidad espera ingresar 10 euros por la venta de otros inmuebles vinculados a las activi-
dades que se interrumpen. La entidad adquirida contabiliza una provisión por reestructura-
ción en su pasivo, dado que se cumplen las condiciones de reconocimiento establecidas en
IAS 37 (existe un plan formalmente aprobado por la dirección que ha sido objeto de comu-
nicación a los afectados). La provisión sólo puede incluir los desembolsos que surjan direc-
tamente de la reestructuración. Por tanto, el valor inicial de la provisión será de 105 euros;
esto es, se excluyen de su valor:
a) Los gastos de traslado de los trabajadores que siguen en la empresa (no se incluye nin-
gún desembolso asociado a las actividades que continúan: IAS 37, párrafos 80 y 81).
b) Las cantidades que la entidad espera obtener por la venta de activos (IAS 37, párrafos 51
y 83).
Dado que la adquirida no tiene reconocido pasivo alguno, el adquirente no refleja tampoco
ninguna provisión por reestructuración (párrafo 41 a) al distribuir el coste de la combinación
entre los activos, pasivos y pasivos contingentes de la adquirida.
Las normas del párrafo 31 de IAS 22 (aplicables a combinaciones anteriores a 31 de marzo de 2004)
establecen que, en la fecha de adquisición, la adquirente ha de reconocer una provisión por una
obligación que no era un pasivo para la adquirida cuando se den las siguientes condiciones:
a) La adquirente ha desarrollado un plan en la fecha de adquisición o con anterioridad a la misma
193 ❚ CAPÍTULO 7
para reducir o eliminar las actividades del negocio adquirido, y que se refiera a:
– Indemnizaciones por extinción de contratos de los empleados de la adquirida.
– Clausura de fábricas, talleres y otras ubicaciones de la adquirida.
– Eliminación de líneas de producción del negocio adquirido.
– Terminación de contratos de la adquirida que resulten contratos onerosos para la adquirente,
siempre que el adquirente hubiese comunicado la finalización del contrato a la otra parte en la
fecha de la adquisición o con anterioridad.
b) La adquirente ha procedido a dar publicidad a las principales características del plan en la fecha
de adquisición o con anterioridad, de modo que ha creado una expectativa válida de que el plan
será llevado a cabo entre los afectados por él.
c) El plan se ha plasmado en planes formales detallados dentro de los tres meses siguientes a la adqui-
sición o en la fecha en que se autoriza la publicación de los estados financieros, lo que ocurra antes
(dichos planes han de contener, como mínimo, los datos indicados en el párrafo 72 a de IAS 37).
anterior. Exceptuando la regla general del párrafo 29 (no se reconocen pasivos por actuacio-
nes a realizar por el adquirente), y supuesto el cumplimiento de las condiciones fijadas en el
párrafo 31, la entidad adquirente reconoce un pasivo por reestructuración al distribuir el
coste de la combinación por valor de 105 euros, con el consiguiente efecto sobre el fondo
de comercio (positivo o negativo) de la operación.
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 194
La principal modificación adoptada por IFRS 3, y traída de SFAS 141, es la supresión de la regla de
amortización sistemática contenida en las antiguas normas. En efecto, IAS 22:
a) Exigía que el fondo de comercio fuese amortizado sistemáticamente en todo supuesto.
b) Establecía la presunción rebatible de que no debía utilizarse en ningún caso un plazo superior a
20 años.
c) Consideraba que debía adoptarse un criterio lineal de distribución (salvo evidencia convincente a
favor de otro sistema).
194 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
IFRS 3 sustituye la amortización de este activo por una prueba anual de deterioro de valor que regula
IAS 36, pero con efectos prospectivos. Esto es, la amortización sistemática del fondo de comercio ad-
quirido en una combinación anterior a 31 de marzo de 2004 (esto es, con fecha de acuerdo anterior
a esa fecha) se interrumpe al comenzar el primer ejercicio anual iniciado después del 31 de marzo
de 2004 (o abierto en esa misma fecha: IFRS 3, párrafo 79). Se elimina al mismo tiempo toda la
amortización acumulada, registrándose una disminución correlativa del fondo de comercio.
(En el modelo de balance propuesto en IAS 1, los resultados retenidos aparecen en una sola
línea, ya sean generados en el año, ya sean reservas acumuladas en ejercicios anteriores). Y
para el estado de resultados:
195 ❚ CAPÍTULO 7
tratamiento contable
Ni IFRS 3 ni SFAS 141 usan la denominación “fondo de comercio negativo” para designar el exceso
que representa la participación del adquirente en el valor razonable neto de los activos, pasivos y pa-
sivos contingentes de la adquirida sobre el coste de la combinación. Ambas normas (IFRS 3, párrafo
56; SFAS 141, nota 19) exigen en este caso una revisión de:
a) La identificación de los activos, pasivos y pasivos contingentes, así como de su valoración.
b) La valoración del coste de la combinación.
De acuerdo con IFRS 3, la diferencia que subsiste después de efectuar dicha revisión se consigna
como una ganancia en el estado de resultados. SFAS 141 exige que previamente se haya reducido, a
prorrata, el valor de ciertos activos, y dispone que dicha ganancia se presente como una partida ex-
traordinaria, de acuerdo con APB 30 (la versión de IAS 8 aplicable desde el 1 de enero de 2005 pro-
híbe que se presente importe alguno como resultado extraordinario). La norma de FASB, además,
contiene reglas especiales para el caso de que se hayan pactado contraprestaciones contingentes.
IFRS 3 modifica las reglas de IAS 22 sobre contabilidad del fondo de comercio negativo. IAS 22 exige
que se presente como un activo negativo, en la misma sección del balance utilizada para recoger el
fondo de comercio positivo. Su saldo se imputa a resultados como un ingreso:
1. Si tiene que ver con expectativas de pérdidas o gastos futuros identificados en un plan efectuado
por la adquirente y que puedan ser objeto de medición fiable en la fecha de la combinación (pero
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 196
que no han podido ser reconocidos como pasivos), en los periodos en que se reconocen dichos
gastos o pérdidas.
2. En los demás casos:
– La fracción que no exceda del valor razonable de los activos no monetarios adquiridos a lo largo
de la vida útil promedio ponderado de los activos no monetarios amortizables.
– El resto, de manera inmediata.
Merece la pena subrayar que la contabilidad del fondo de comercio negativo ha sido objeto de modi-
ficación en todas las revisiones de los estándares IAS sobre combinaciones de negocios. El plantea-
miento de IFRS 3, básicamente, se apoya en la idea de que, en una transacción libre entre partes in-
dependientes, es improbable que una de ellas consiga una compra a precio de ganga (bargain pur-
chase); antes bien, la existencia de un fondo de comercio negativo sugeriría posibles errores de
valoración o de identificación de partidas (por ejemplo, omisión de un pasivo).
Como sucede con el fondo de comercio positivo, la modificación propuesta tiene efectos desde el 31
de marzo de 2004, de modo que:
196 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
La entidad tomó una participación del 80% en el capital de otra entidad el 1 de julio de 2000,
pagando 1.316 euros. En aquel momento, los activos y pasivos identificables de la entidad
adquirida, y su valor razonable, eran los que se muestran a continuación:
Se pide: ajustes a realizar para la obtención de los informes IAS consolidados de la entidad
a 31 de diciembre de 2004 y a 31 de diciembre de 2005 (sólo los relacionados con el fondo
de comercio negativo).
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 197
Dado que el valor de los activos intangibles no se pudo determinar por referencia a un mer-
cado activo, el importe que se reconoce por este concepto en el balance en la fecha de pri-
mera consolidación se limita a una cantidad tal que no origine o incremente el fondo de co-
mercio negativo (IAS 22, párrafo 40): por tanto, el valor asignado a este activo será cero. El
fondo de comercio negativo que, pese a todo, resulta se imputa a ingresos sistemática-
mente a lo largo de la vida útil de los activos amortizables (los inmovilizados materiales, en
este caso). Nótese que el valor de la minusvalía es menor que el asignado a los activos no
monetarios adquiridos (IAS 22, párrafo 59 a). Resumidos, los valores asignados a las dife-
rentes partidas serían:
197 ❚ CAPÍTULO 7
Coste de la participación 1.316
Participación del adquirente en el valor razonable neto 1.416
Fondo de comercio negativo –100
La diferencia restante se elimina contra las reservas de apertura el 1 de enero de 2005 (sin
reflejo en resultados consolidados). Por tanto, la eliminación a efectuar para la obtención
del balance consolidado cerrado a 31 de diciembre de 2005 sería:
9. Contabilización provisional
198 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Dada la complejidad de los cálculos, evaluaciones y estimaciones necesarios para completar la con-
tabilización de una combinación de negocios, IFRS 3 concede a la entidad adquirente un plazo rela-
tivamente dilatado para ello, introduciendo ciertas modificaciones respecto a las normas anteriores.
De este modo, si en la fecha del primer cierre posterior a la fecha de la combinación (o en cierres inter-
medios) no es posible contabilizar la combinación si no es de forma provisional, la entidad contabiliza
la combinación usando los valores provisionales, y revela información sobre ello (IFRS 3, párrafos 62 y
69). Dentro de los 12 meses siguientes a la fecha de adquisición, el adquirente contabiliza los cambios
en los valores provisionales como si se hubiesen producido en la fecha de adquisición. Esto es:
a) Los activos, pasivos o pasivos contingentes que se reconocen o ajustan aparecen por el valor que
tendrían hoy si hubieran sido reconocidos en la fecha de adquisición y medidos a su valor razona-
ble de aquel momento.
b) El fondo de comercio, positivo o negativo, se ajusta en contrapartida.
c) Se reexpresa la información comparativa.
Una vez concluido el periodo de contabilización provisional, sólo la corrección de un error puede mo-
tivar una revisión de los valores contables asignados en la fecha de adquisición. IAS 8 exige que la
rectificación de un error contable sea contabilizada retrospectivamente; esto es, como si el error no
hubiese tenido lugar.
Con un planteamiento algo diferente, IAS 22 ha venido exigiendo que los activos y pasivos identifica-
bles adquiridos en la combinación sean reconocidos en el balance en cuanto cumplan las condicio-
nes de reconocimiento, aunque no las reunieran en la fecha de la combinación. También requiere
que el valor contabilizado se ajuste posteriormente, cuando se disponga de evidencias adicionales
sobre su valor en tal momento. Dichas correcciones (IAS 22, párrafos 31, 71 y 75):
a) Dan lugar a cambios en el valor del fondo de comercio positivo o negativo si se cumple que:
– Los ajustes tienen lugar al finalizar el primer ejercicio comenzado tras la adquisición (recordemos
que existe un plazo especial para los pasivos por planes de reestructuración del adquirente).
FASCiCULO 07 ok 21/9/04 13:06 Página 199
– En el caso del fondo de comercio positivo, su valor en libros no es mayor que su valor recupera-
ble, determinado con arreglo a IAS 36.
b) Se contabilizan como gastos o ingresos en cualquier otro caso.
[EJEMPLO]
La sociedad A adquiere el 60% del capital y los derechos de voto de la sociedad B el 1 de
enero del año 2005, pagando 2.200 euros. El balance resumido de la entidad adquirida es,
en la fecha de adquisición, el siguiente:
199 ❚ CAPÍTULO 7
A presenta información intermedia trimestral conforme a IAS 34. El valor asignado al inmovi-
lizado material de B (5.000 euros) al cierre del primer trimestre de 2005 sólo pudo ser deter-
minado de manera provisional. Al término del segundo trimestre, A dispone de una tasación
más completa, según la cual su valor sería de 4.800 euros (en la fecha de adquisición). B ha
presentado unos beneficios de 100 en el primer trimestre, y de 120 euros en el segundo. No
existen operaciones internas ni distribuciones de dividendo en el periodo considerado.
Por tanto, el coste de la adquisición se distribuirá entre los activos y pasivos identificables
de B como se indica:
Los ajustes para la obtención del balance consolidado IAS a 31 de diciembre del año 1 son:
(Reducción del pasivo por impuestos diferidos como consecuencia de la depreciación del
inmovilizado material)
201 ❚ CAPÍTULO 7
Concepto Debe Haber
Resultado del ejercicio (filial) 3,75
Gasto (o ingreso) por impuesto sobre beneficios 3,75
(Ajuste al gasto por impuesto sobre beneficios: reducción del pasivo por impuesto diferido)
Resultados B
Disminuciones:
En la preparación del informe consolidado del segundo trimestre se toma en cuenta la mo-
dificación del valor asignado al inmovilizado material, de tal modo que el balance y el es-
tado de resultados consolidados se presentan como si dicho activo hubiese sido valorado
en 4.800 euros desde el principio, con el consiguiente efecto sobre los pasivos por impuesto
diferido, que quedarían ahora así:
202 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
El cambio en el valor del inmovilizado y del pasivo por impuesto diferido modifica la valora-
ción de los activos netos de B en la fecha de primera consolidación. El coste de la combina-
ción, según la nueva estimación, se habría asignado a los activos y pasivos identificables de
B de la manera siguiente:
De modo que la valoración inicial del fondo de comercio quedaría ahora así:
Los ajustes de consolidación a realizar para la obtención del balance consolidado a 30 de ju-
nio de 2005 serían:
203 ❚ CAPÍTULO 7
(Eliminación inversión-fondos propios y reconocimiento de diferencias de primera consoli-
dación)
(Ajuste del gasto o ingreso por impuesto a las ganancias, como consecuencia de la reducción
del pasivo por impuesto diferido)
C A P Í T U L
8
O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 207
C A P Í T U L
8
O
1. Introducción
Los estados financieros consolidados muestran la posición financiera, resultados y flujo de efectivo (o
cambios en la posición financiera) de una entidad económica individual dividida en diferentes entida-
des legales independientes. Por lo común, se exige su presentación en los casos en que una entidad
ostenta el control sobre otra, porque se considera que proporcionan una información más útil y com-
pleta que la que se puede hallar en los respectivos individuales. No obstante, los diferentes emisores
de normas contables mantienen puntos de vista divergentes sobre las circunstancias que determinan
207 ❚ CAPÍTULO 8
la existencia de control. Los temas principales de la consolidación de estados financieros son:
– La delimitación del conjunto consolidable (entidades cuyos activos, pasivos, gastos, ingresos, re-
sultados y flujos de efectivo se incluyen en el informe consolidado).
– La selección de los métodos de consolidación.
– Los métodos aplicables para la contabilización de las participaciones en subsidiarias, multigrupo y
asociadas en los estados financieros separados de la entidad que las posee.
Los principios contables IAS sobre consolidación de estados financieros se hallan en las siguientes
normas:
– IFRS 3, Combinaciones de Negocios.
– IAS 27, Estados Financieros Consolidados y Separados.
– IAS 28, Inversiones en Asociadas.
– IAS 31, Intereses en Negocios Conjuntos.
Las tres últimas normas fueron modificadas dentro del Proyecto de Mejoras publicado en diciembre
de 2003. La nueva versión es aplicable a los ejercicios con fecha de inicio 1 de enero de 2005 o pos-
terior, aplicándose a la transición las reglas generales del párrafo 19 b de IAS 8 sobre adopción de un
IAS/IFRS (aplicación retrospectiva con ajuste de la información comparativa). Las normas de IFRS 3
ya fueron objeto de exposición y comentario en el capítulo precedente, pero he considerado oportuno
incluir en éste ciertos supuestos específicos para comentar su tratamiento en el informe consolidado.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 208
En el momento de preparar este trabajo no ha culminado aún la Fase II del Proyecto de Combinacio-
nes de Negocios, en el que se discuten profundas modificaciones a las reglas actuales que afectarán
en particular a la valoración del fondo de comercio y de los intereses minoritarios. En el mismo es-
tado se encuentra el Proyecto sobre Consolidación, que se espera que cristalice en un IFRS que sus-
tituirá a IAS 27 y SIC 12.
Los principios aplicables en la actualidad en España están recogidos en las Normas para la Formula-
ción de las Cuentas Anuales Consolidadas (NFCAC) aprobadas por el RD 1815/1991. Las diferencias
más sobresalientes con las últimas versiones de los IAS/IFRS afectan a:
a) Las entidades a incluir en la consolidación.
b) El cálculo de las diferencias de primera consolidación.
c) El tratamiento del fondo de comercio.
En el momento actual, el IASB sigue adelante con la revisión de las reglas contables sobre combina-
ciones de negocios. Se prevé que estas reglas afecten a las combinaciones de negocios con fecha de
acuerdo 1 de enero de 2006 o posterior, con aplicación prospectiva (sin permitir la aplicación retro-
208 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
activa en ningún caso), de modo que a las diferencias de primera consolidación (incluido fondo de
comercio) originadas en compras de filiales anteriores a esa fecha se les seguirían aplicando sus nor-
mas relevantes. Esto es, la versión actual de IFRS 3 para las que tienen fecha de acuerdo posterior a
31 de marzo de 2004 (o las anteriores en los casos especiales en que se permite la aplicación retro-
activa) o IAS 22 para las otras.
Las condiciones enumeradas difieren de las fijadas en el artículo 9 de las NFCAC para la exclusión
de los subgrupos en los siguientes puntos:
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 209
a) La norma española se limita a las dominantes que sean a su vez dependientes de entidades espa-
ñolas o domiciliadas en la UE.
b) Exige que la participación de dichas dominantes (en la sociedad que encabece el subgrupo) sea
de, al menos, el 50%.
c) Dispone que, para que no opere la exclusión, la presentación de estados consolidados del sub-
grupo ha de ser solicitada por no menos del 10% del capital.
d) Requiere que ninguna sociedad del subgrupo (y no sólo su matriz) haya emitido valores admitidos
a cotización en un mercado bursátil (artículo 7).
Por otro lado, IAS 27 no contiene ninguna excepción por razón del tamaño asimilable a la del artículo
8 de las NFCAC.
Aun siendo significativa, no es ésta diferente regulación de las excepciones (curiosamente denomi-
nadas “dispensas” en las NFCAC) la novedad de más calado que supone la adopción de los
IAS/IFRS en esta materia. Probablemente, el cambio más significativo en este punto afecte a la raíz
misma de la obligación de consolidar, esto es, a la existencia de control.
Manifestación, una vez más, de la primacía de la esencia económica de las transacciones sobre su
forma legal (MC, párrafo 35) son las reglas que establecen IFRS 3 e IAS 27 para identificar la existen-
cia de control, que se define como el poder para dirigir las políticas financieras y operativas de una
entidad, así como para obtener beneficios de sus actividades (IAS 27, párrafo 4). Para estas normas,
la existencia de control es una cuestión de hecho que puede requerir del uso del criterio, aunque
proporcionan presunciones en que apoyarla:
1. Si la entidad posee más de la mitad de los derechos de voto de otra, se presume que posee con-
209 ❚ CAPÍTULO 8
trol sobre ella (salvo en los casos excepcionales en que pueda demostrarse que no existe dominio
a pesar de todo).
2. Si no dispone de mayoría de voto, puede existir control si posee:
– La mayoría de los derechos de voto, en virtud de acuerdos celebrados con otros inversores.
– Poder para dirigir las políticas operativas y financieras de la entidad por norma legal o por contrato.
– Poder para nombrar o destituir a la mayoría de los miembros del órgano de administración.
– Poder para reunir la mayoría de los votos en las reuniones del órgano de administración.
Estas reglas vienen a coincidir con las del artículo 2.1 de las NFCAC salvo en lo que sigue.
1. Las NFCAC (artículo 2.1.d) consideran que existe dominio cuando una sociedad ha nombrado ex-
clusivamente con sus votos a la mayoría de miembros del órgano de administración que desem-
peñen su cargo en el momento en que deban formularse las cuentas consolidadas y durante los
dos ejercicios inmediatamente anteriores (supuesto que no exista otra entidad que posea la ma-
yoría de derechos de voto o tenga la facultad de nombrar o destituir a la mayoría de los miembros
del órgano de administración). Es probable que en este caso la entidad disponga de “poder para
reunir la mayoría de votos en las reuniones del órgano de administración”, pero es claro que la
norma de IAS 27 es considerablemente más general y comprensiva.
2. Las NFCAC no contemplan la posibilidad de que el control se obtenga en virtud de contrato o
norma legal.
3. Ante todo, la enumeración del artículo 2.1 de las NFCAC ha de entenderse como una lista ce-
rrada, a diferencia del catálogo de indicadores contenido en IAS 27.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 210
Otros puntos en los que existen diferencias respecto a los principios contables de las NFCAC son los
referidos a la forma legal de las entidades consolidables y a la participación en el capital de las de-
pendientes. IAS 27 se aplica a entidades, y deja claro que una dependiente puede no tener forma
societaria (párrafo 4). Además, la existencia de una participación en el capital de una entidad no es
condición necesaria para definir una relación matriz-filial. Las NFCAC, por su parte, exigen:
a) Que la dominante sea una sociedad con forma mercantil.
b) Que la dependiente tenga forma societaria.
c) Que la dominante sea socio de la dependiente.
Obviamente, estas divergencias no afectan a la generalidad de las entidades sobre las que existe
control, pero sí a algunas especialmente importantes (como las SPE). El IASB ha confirmado que el
nuevo IFRS sobre la materia basará en el control la obligación de consolidar todas las entidades, y
que el control requiere que se cumplan las siguientes condiciones:
a) Capacidad para establecer la dirección estratégica y para dirigir las políticas financieras y operati-
vas, así como la estrategia (criterio del poder o power criterion).
b) Capacidad para obtener beneficios (criterio del beneficio o benefit criterion).
210 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
c) Capacidad para usar dicho poder para incrementar, proteger o mantener la cuantía de dichos be-
neficios (link).
El párrafo 14 de IAS 27 exige que los derechos de voto potenciales sean tenidos en cuenta al evaluar la
existencia de control (incluyendo los que se encuentren en poder de otra entidad) siempre que sean
ejercitables o convertibles en el momento actual. No se consideran si su ejercicio o conversión está con-
dicionado a la ocurrencia de un suceso futuro o al transcurso de un plazo. Al evaluar si existe control,
han de tomarse en cuenta todas las circunstancias relacionadas con dichos derechos de voto potencia-
les, con excepción de la intención de la gerencia y de su capacidad financiera (IAS 27, párrafo 15).
[EJEMPLO]
X ejerce control sobre Y a través de la propiedad de 55 de sus 100 acciones comunes con de-
recho de voto. Y tiene en circulación además 40 opciones call sobre acciones comunes que
se hallan en poder de Z. Las opciones son ejercitables en el momento actual, y tienen sus-
tancia comercial (esto es, un precio de ejercicio razonable en comparación con el valor de
mercado de las acciones subyacentes), aunque actualmente se hallan out of the money. Z
no tiene participación previa en el capital de Y, y el resto del accionariado se halla en manos
de numerosos inversores individuales.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 211
El ejercicio de las opciones daría lugar a que B perdiese la mayoría de los derechos de voto
(tendría ahora 55 sobre 140; esto es, un 39,29%). Sin embargo (según las decisiones provi-
sionales del IASB), ello no supondría pérdida de control (más exactamente, se sigue cum-
pliendo la condición de poder): una entidad que tenga en la actualidad la capacidad de de-
terminar las políticas estratégicas operativas y de financiación cumple la condición de po-
der a falta de otra parte que sea capaz de dominar su determinación (Z se encontraría con
40 derechos de voto sobre 140). El hecho de que el precio de ejercicio de la opción se halle
por encima del valor de mercado actual de la acción no es obstáculo para ello (si la opción
tiene sustancia comercial).
211 ❚ CAPÍTULO 8
exclusivamente con vistas a su venta en un futuro próximo.
b) Opera bajo fuertes restricciones a largo plazo, que menoscaban de forma significativa su capaci-
dad para transferir fondos a la controladora (en ambos casos se aplican las normas de IAS 39 a la
participación en las filiales excluidas).
La revisión de IAS 27 efectuada dentro del Proyecto de Mejoras retuvo la excepción a), modificándola
para especificar que la venta de la participación debía tener lugar en los 12 meses siguientes a la ad-
quisición y para requerir que la dirección estuviese buscando un comprador activamente. En la prác-
tica, la expresión “en un futuro próximo” había sido interpretada con laxitud, aplicándose en casos en
que se había mantenido la propiedad durante tres años o más. Al propio tiempo, la exclusión b) se su-
primió como tal, considerándose que dichas restricciones no impiden en sí mismas la existencia de
control, aunque deben ser evaluadas al determinar si lo hay (IAS 27, párrafo 21; BC 15).
IFRS 5 ha eliminado la exclusión de filiales adquiridas con vistas a su venta posterior, siguiendo la línea
de SFAS 144. Esta norma suprimió en 2001 la excepción aplicable a los casos en que era probable que
el control fuese meramente temporal, pero retuvo la otra prevista en el párrafo 2 de ARB 51 (introdu-
cida por SFAS 94), que opera cuando en los casos excepcionales en que el control no está en manos
del accionista mayoritario (por ejemplo, por reorganización legal o bancarrota). IFRS 3, que deroga tam-
bién el actual IAS 35, considera que una subsidiaria que cumple, en el momento de su adquisición, las
condiciones fijadas para su clasificación como “poseída para venta” debe ser presentada como una
operación en discontinuación en el informe consolidado (IFRS 5, párrafo 32.c). Recordemos que los
activos no corrientes y disposal groups calificados como “poseídos para venta” en la fecha de su adqui-
sición en una combinación de negocios se estiman por su valor razonable neto de costes de enajena-
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 212
ción (IFRS 3, párrafo 36, reformado por IFRS 5). Las normas sobre presentación de operaciones en dis-
continuación ya fueron comentadas en el capítulo dedicado al inmovilizado no financiero.
Las reglas del artículo 11.2 de las NFCAC difieren de las expuestas en los siguientes aspectos:
1. Ante todo, las exclusiones no son obligatorias (la norma dice que “podrá exceptuarse de la aplica-
ción de este método de consolidación...”).
2. Permiten la no consolidación (por integración global) de las entidades que, en conjunto, presen-
ten un interés poco significativo; IAS 27 no contiene una alusión similar, que podría ampararse en
la regla general de importancia relativa.
3. Contemplan la exclusión en los casos en que existen restricciones importantes y permanentes
que dificultan sustancialmente el ejercicio de los derechos de la dominante sobre el patrimonio y
la gestión del grupo. Se citan expresamente la intervención judicial gubernativa y la insolvencia ju-
dicialmente declarada como casos en los que existen tales restricciones (en el mismo sentido que
la norma US GAAP citada más arriba). IAS 27 enfoca estas situaciones como circunstancias que
pueden determinar pérdida de control.
212 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
4. Incluyen un supuesto basado en el equilibrio entre costes y beneficios cuando autorizan la exclu-
sión en los casos en que no es posible reunir la información precisa sin incurrir en gastos despro-
porcionados (o sin incurrir en un retraso en el plazo de formulación). IAS 27 no menciona este
caso, aunque la restricción basada en el equilibrio coste-beneficio es una de las características
cualitativas de la información financiera (MC, párrafo 44).
5. Como en el texto derogado por IFRS 5, las NFCAC permiten no consolidar las sociedades depen-
dientes cuando las participaciones han sido adquiridas y se mantienen exclusivamente con vistas
a su venta a corto plazo (aunque no se exige búsqueda activa de un comprador).
6. IAS 27 no permite que una sociedad dependiente sea excluida de la consolidación simplemente
porque tiene unas actividades diferentes a las de otras entidades del grupo. Las NFCAC autorizan
la no consolidación por este motivo en los grupos en que coexisten entidades financieras o de se-
guros con otras comerciales, industriales o de servicios, mencionándose en la memoria la socie-
dad excluida con la debida justificación. Se aplica el procedimiento de puesta en equivalencia a
las participaciones en el capital de las sociedades excluidas (artículo 14.1.b).
Aunque sin usar esta expresión, IAS 27 regula las operaciones de homogeneización temporal y valo-
rativa en unos términos que, con alguna excepción, son asimilables a los ya usados por nosotros.
– Homogeneización temporal. Los estados financieros individuales que sirven de base a la consoli-
dación se refieren a las mismas fechas. Si los estados financieros de la filial se refieren a una fecha
diferente de los de la matriz, la filial ha de preparar nuevos estados financieros. Se admite, no obs-
tante, una diferencia no superior a tres meses entre las fechas de cierre de la matriz y la filial,
siempre que se efectúen ajustes para recoger los efectos de las transacciones y otros sucesos sig-
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 213
nificativos que hayan ocurrido entre esas fechas y la de cierre de los estados financieros de la ma-
triz (IAS 27, párrafos 26 y 27). Esto último incluye cambios en la tasa de cambio en el caso de las
entidades extranjeras (IAS 21, párrafo 46). La extensión de los ejercicios contables y la diferencia
entre fechas de cierre han de ser las mismas de un periodo a otro.
– Homogeneización valorativa. La información consolidada se prepara usando políticas contables
uniformes para iguales sucesos y transacciones en circunstancias similares (IAS 27, párrafo 28).
La norma española exige que se empleen los criterios usados por la sociedad dominante en sus
propias cuentas anuales, salvo en los casos excepcionales en que se considere que un criterio em-
pleado por una sociedad dependiente es “más significativo” (NFCAC, artículo 18).
Como las NFCAC, IAS 27 dispone la eliminación íntegra de los resultados internos no realizados, y los
gastos, ingresos y saldos derivados de transacciones intragrupo (IAS 27, párrafo 25). No se aportan
indicaciones sobre cómo efectuar dicha eliminación en cada supuesto, pero con seguridad no existi-
rán diferencias de gran impacto en esta área. No es el caso de la eliminación inversión-fondos pro-
pios y de las diferencias de primera consolidación. A las sustanciales divergencias entre los estánda-
res internacionales relevantes (IAS 22 para combinaciones de negocios con fecha de acuerdo poste-
rior a 31 de marzo de 2004 e IFRS 3 para las posteriores) y las normas españolas, que ya fueron
expuestas en el capítulo anterior, cabe añadir otras de menor alcance como éstas:
a) Los intereses minoritarios se presentan en el balance consolidado dentro de la sección de patri-
monio neto, y no en una sección independiente (IAS 27, párrafo 22.c; IAS 1, párrafo 68.o).
b) Dado que el control puede estar basado (en parte, cuando menos) en la tenencia de derechos de
voto potenciales, IAS 27 especifica que la participación de los accionistas de la matriz en el patri-
monio y los resultados de la filial han de estar basados en los intereses actuales en su propiedad
(IAS 27, párrafo 23).
213 ❚ CAPÍTULO 8
[EJEMPLO]
La sociedad A compró por el 75% del capital y de los derechos de voto de B, pagando en
una sola transacción efectuada el 1 de enero del año 1. El valor en libros y el valor razonable
de los activos y pasivos de B, en la fecha de la combinación, es el que se muestra a conti-
nuación:
Los balances de A y B son los que se muestran a continuación para el periodo terminado el
31 de diciembre del año 1.
Entidad
Balances
A B
214 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Se pide:
1. Identificar las diferencias de primera consolidación y el fondo de comercio resultante con
arreglo a IFRS 3.
2. Ajustes para obtener el balance consolidado al cierre del año 1 con arreglo a IAS 27.
215 ❚ CAPÍTULO 8
lor razonable en la fecha de adquisición, supuesto el cumplimiento de las condiciones de re-
conocimiento especificadas en cada caso. Dado que se supone que las bases fiscales coinci-
den con los valores según los libros que aparecen en los respectivos balances individuales,
los ajustes de primera consolidación dan lugar a la aparición de activos y pasivos por im-
puesto diferido. En la tabla siguiente se muestran dichos activos y pasivos.
Imponibles
Deducibles
Base fiscal
Concepto
Pasivos
Activos
Valor
Activos financieros
357 500 0 143 0 43
disponibles para venta
consolidado
Imponibles
Deducibles
Base fiscal
Concepto
Pasivos
Activos
Valor
Efectivo 100 100 0 0 0 0
Suma el activo 7.100 7.950 0
Préstamos a largo plazo 2.000 2.100 100 0 30 0
Impuesto corriente
50 50 0 0 0 0
216 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
a pagar
La base fiscal de los activos financieros disponibles para venta (available-for-sale o AFS) no
coincide con su valor en libros, pero la consiguiente diferencia temporaria no se ha origi-
nado en el proceso de consolidación (el correspondiente pasivo por impuesto diferido ya se
había reconocido en el balance individual de B). Por otro lado, el ajuste al valor razonable de
la propiedad de inversión se trata como un ajuste de homogeneización, y lo mismo para su
efecto impositivo asociado.
Puesto que la base fiscal de las propiedades de inversión coincide con su coste histórico de-
preciado (valor según balance de B), la revaluación origina una diferencia temporaria impo-
nible por valor de 525 euros (1.300 – 775); el correspondiente impuesto diferido se carga a
resultados, igual que la transacción que lo ha originado. Las eliminaciones de consolidación
propiamente dichas se muestran seguidamente, empezando por la eliminación inversión-
fondos propios referida a la fecha de primera consolidación.
217 ❚ CAPÍTULO 8
Las reservas de la filial eliminadas en el ajuste precedente son las que presentó B en la fe-
cha de primera consolidación, corregidas para recoger el cambio de criterio contable res-
pecto a las inversiones inmobiliarias.
Impuestos
consolidación
diferidos asociados
adquisición
resultados
Imputado
Pasivos
Ajustes
Partida
Activos
Ajuste
cierre
Nota
Impuestos
consolidación
diferidos asociados
adquisición
resultados
Imputado
Pasivos
Ajustes
Partida
Activos
Ajuste
cierre
Nota
Inventarios 2 100 90 10 3
Cuentas a cobrar 3 –50 –50 0
Préstamos a largo plazo 4 100 17 83 25
4. Desde el punto de vista consolidado, el exceso de la cantidad pagada (2.000 x 10% = 200)
sobre el interés efectivo acumulado (2.100 x 8,72% ≈ 183) representa un reembolso de
principal, no un gasto financiero.
Los ajustes de consolidación a realizar por todo ello son los que se muestran ahora:
Inmovilizado material 30
Ganancias retenidas (filial) 21
Impuesto diferido (activo) 9
Cuentas a cobrar 50
Ganancias retenidas (filial) 35
Impuesto diferido (activo) 15
219 ❚ CAPÍTULO 8
mediante el ajuste siguiente:
Del ejemplo anterior se desprende con claridad que los procedimientos de consolidación son en sí
esencialmente iguales, pero que existen cambios significativos en puntos importantes derivados del
distinto tratamiento dispensado a las diferencias de primera consolidación y a los efectos impositivos
asociados. En resumen:
a) Los activos y pasivos de la subsidiaria se muestran a full fair value en la fecha de primera consoli-
dación, incluyendo la porción correspondiente a socios externos.
b) La adquirente ha de incluir entre los activos y pasivos de la adquirida los impuestos diferidos
(deudores o acreedores) originados por las diferencias de primera consolidación.
c) La imputación a resultados de las diferencias de primera consolidación se lleva a cabo ajustando
los resultados o reservas de la dependiente (no los de la matriz), por cuanto los minoritarios tam-
bién participan en ellas.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 220
se refiere, en cambio, a la fecha de la combinación (IFRS 3, párrafos 24.a y 36). Cuando el control se
adquiere en etapas (típicamente, por medio de varias compras de acciones), la fecha de intercambio
y la fecha de combinación no coinciden. Los problemas son, en este caso, determinar el coste de ad-
quisición y el importe del fondo de comercio que surge. IFRS 3 incorpora, en este sentido, un mé-
todo contable más complejo que el de las NFCAC al establecer que:
a) El coste de la combinación se refiere a la fecha de cada transacción (de cada compra parcial).
b) El fondo de comercio se calcula tomando en cuenta la información sobre los valores razonables
de los activos, pasivos y pasivos contingentes de la adquirida en la fecha de cada transacción.
c) En la fecha de la toma de control, la participación previa del adquirente en las variaciones de valor ra-
zonable registradas desde la fecha de cada transacción anterior se contabiliza como una revaluación.
Las NFCAC no contienen reglas específicas para este supuesto; las diferencias de primera consolida-
ción se calculan comparando el valor contable de la participación (tras una o más compras) con el in-
terés de la dominante en los fondos propios de la dependiente, en la fecha de primera consolidación.
[EJEMPLO]
A obtuvo dominio sobre B el 1 de enero de 2008 al hacerse con la mayoría de sus acciones
con derecho a voto. Los valores clave para efectuar las eliminaciones en la fecha de primera
consolidación se ofrecen a continuación:
01/01/2005 01/01/2007 01/01/2008
Porcentaje comprado 25% 15% 20%
Coste adquisición 350 370 500
Patrimonio neto B 1.000 1.700 1.800
Ajustes al valor del inmovilizado material
Valor en libros inmovilizado 500 400 350
Valor razonable 600 500 700
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 221
Información adicional:
a) No ha habido transacciones entre A y B en el periodo considerado.
b) B ha retenido la totalidad de sus ganancias.
c) Todos los cambios en el patrimonio neto de B proceden de resultados.
d) El capital de B es de 700 desde su fundación.
e) Los inmovilizados se valoran a su coste amortizado, tanto en el balance de B como a
efectos de consolidación.
f) Los ajustes se refieren a un mismo activo, al que le restaban diez años de vida útil en el
momento de la primera compra.
g) A aplica el método del coste para la medición de la participación en sus estados financie-
ros separados.
h) No se han detectado pérdidas por deterioro de valor del fondo de comercio.
i) Se prescinde de efectos impositivos.
Según las normas de IFRS 3, el fondo de comercio que se pone de relieve es de 245, desglo-
sado de este modo:
01/01/2005 01/01/2007 01/01/2008
Coste adquisición 350 370 500
Patrimonio neto B 1.000 1.700 1.800
Diferencia en valor inmovilizado 100 100 350
221 ❚ CAPÍTULO 8
Fondo de comercio 75 100 70
Comentarios:
a) El valor razonable pendiente de amortización se ha obtenido considerando una vida útil
de 10 años contados desde el 1 de enero de 2005.
b) La cantidad imputada a reservas se halla aplicando el porcentaje que corresponda a la
fracción amortizada de cada ajuste al valor razonable.
c) El superávit por revaluación contabilizado se ha calculado aplicando el porcentaje de par-
ticipación correspondiente a la diferencia entre el respectivo valor razonable no amorti-
zado y el que se atribuye al activo en la fecha de primera consolidación. Por ejemplo,
para la participación tomada el 1 de enero de 2005:
25% • (700 – 420) = 70
01/01/2005 01/01/2007
222 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Las eliminaciones necesarias para la obtención del balance consolidado IAS referido a 1 de
enero de 2008 (fecha de primera consolidación) serían las que se muestran seguidamente.
223 ❚ CAPÍTULO 8
IFRS 3, no obstante, no limita la aplicación de las normas anteriores a los casos en que la participa-
ción se venía contabilizando por el procedimiento de puesta en equivalencia. Es más, ni siquiera
contiene una precisión del estilo de la del párrafo 36 de IAS 22, que restringe su uso a las adquisicio-
nes previas importantes.
También este punto será objeto de modificación al término de la Fase II del Proyecto de Combinacio-
nes de Negocios: el IASB ha decidido provisionalmente que las participaciones previamente poseí-
das se midan a su valor razonable en la fecha de la toma de control, con imputación a pérdidas y ga-
nancias de las diferencias. Si la participación ha sido previamente contabilizada como activo finan-
ciero disponible para venta en el balance separado de la matriz, las ganancias o pérdidas imputadas
previamente a patrimonio neto se reciclan contra resultados. De este modo, el valor razonable de los
derechos de propiedad adquiridos por la controladora es:
a) El valor razonable de la contraprestación pagada por el adquirente en la fecha de adquisición.
b) El valor razonable en esa fecha de la inversión previa del adquirente.
El fondo de comercio atribuido a la controladora será igual a la diferencia entre este valor y la partici-
pación de la controladora en el valor razonable neto de los activos y pasivos identificables de la ad-
quirida. El fondo de comercio restante se asignará a intereses minoritarios.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 224
[EJEMPLO]
El valor razonable de la entidad adquirida se ha inferido del precio pagado por la participa-
ción (no existen primas de control)
El fondo de comercio se reparte entre la matriz y los socios externos del modo siguiente:
Las eliminaciones a efectuar para la obtención del balance consolidado referido a la fecha
de primera consolidación serían:
Los US GAAP sobre la materia se contienen principalmente en SFAS 141, que (también en este
punto) incorpora y prolonga la vigencia de las anteriores disposiciones de APB 16. Otras reglas apli-
cables se encuentran en la AICPA Accounting Interpretation 26, y en FTB 85-5 . Según ellas, una ad-
225 ❚ CAPÍTULO 8
quisición de intereses minoritarios no es una combinación de negocios, y debe aplicarse el método
de la compra para su contabilización (SFAS 141, párrafo 14; APB 16, párrafo 43). Ejemplos de trans-
acciones que se tratan como adquisiciones de intereses minoritarios son (SFAS 141, Apéndice A, pá-
rrafo 6, tomado de AIN 26-APB 16):
a) La matriz entrega acciones comunes, activos o deuda a cambio de acciones comunes en poder
de los accionistas minoritarios de una subsidiaria.
b) La subsidiaria compra como acciones propias las acciones comunes poseídas por dichos minori-
tarios.
c) Otra subsidiaria de la misma matriz intercambia sus acciones comunes, activos o deuda por ac-
ciones comunes poseídas por los minoritarios.
d) Una subsidiaria intercambia sus acciones comunes por acciones comunes con derecho a voto de
su matriz (combinación descendente o downstream merger).
e) Una nueva corporación intercambia sus acciones comunes por las acciones comunes de la ma-
triz y las acciones comunes de la matriz en poder de socios externos.
Con un planteamiento semejante, las NFCAC disponen que se apliquen las reglas generales sobre
eliminación inversión-fondos propios a los aumentos en el porcentaje de participación, precisando
que han de tomarse en cuenta los ajustes derivados de operaciones internas. No obstante, si el au-
mento de participación tiene lugar sin inversión adicional (por ejemplo, por una operación de auto-
cartera de la subsidiaria), no se modifica el fondo de comercio o la diferencia negativa inicialmente
reconocidos, sino que modifican las reservas en sociedades consolidadas (artículo 28).
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 226
Con la publicación de las Mejoras a los IAS en diciembre de 2003 se obligó a presentar los intereses
minoritarios en la sección de patrimonio neto de los balances IAS/IFRS (IAS 1, párrafo 68.o; IAS 27,
párrafo 33). Hasta ahora se presentaban, como en las NFCAC, en una rúbrica independiente de los
pasivos y el neto: la razón de la modificación es que, obviamente, no cumplen la definición de pasivo
del párrafo 49.b) del MC. No obstante, dicha calificación tiene importantes ramificaciones que afec-
tan a las políticas de consolidación; por ejemplo:
a) Si los intereses minoritarios se clasifican como patrimonio neto, los cambios en el porcentaje de
participación de las subsidiarias han de registrarse como transacciones con propietarios (como
compras de acciones propias), de modo que las primas o descuentos pagados u obtenidos en di-
chas transacciones han de contabilizarse dentro del patrimonio neto (así lo ha decidido el Board
provisionalmente) y mostrarse en el estado de cambios de esta partida (ver IAS 1, párrafo 97.a).
b) No existen razones para valorar de modo diferente la participación de los externos en los activos y
pasivos, y eso afecta también al fondo de comercio.
Tradicionalmente han existido dos puntos de vista sobre las políticas de consolidación, conocidos
como el enfoque de la compañía matriz (que es el generalmente adoptado hasta ahora) y el enfoque
226 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Las reglas para contabilizar los efectos de una reducción en el porcentaje de propiedad que dan lugar
a pérdida de control han sido también objeto de revisión dentro de la Fase II. Las ganancias o pérdidas
que se ponen de manifiesto se imputan a resultados directamente, y se calculan comparando:
a) El importe recibido (en su caso) por la venta de los intereses de propiedad.
b) La participación de la matriz en el importe en libros de los activos netos de la subsidiaria menos el
valor razonable de la inversión retenida.
Ello incluye todo tipo de resultados imputados a patrimonio neto previamente (diferencias de conver-
sión, ganancias o pérdidas en activos financieros disponibles para venta...), aun en el caso de que la
antigua filial siga incluida en la consolidación como asociada o joint venture. Al propio tiempo, se re-
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 227
duce el importe de los intereses minoritarios presentados en balance por una cuantía igual a su par-
ticipación en el importe en libros de los activos netos de la filial.
Al igual que las compras de intereses minoritarios, y según las conclusiones de la Fase II, las reduc-
ciones en el porcentaje de participación se tratarán como transacciones con propietarios cuando no
den lugar a pérdida de control. En consecuencia, las pérdidas o ganancias que se pongan de mani-
fiesto se llevarán al estado de cambios en el patrimonio neto, no a resultados. Se proyecta la aplica-
ción retroactiva de estas reglas: esto es, toda información comparativa habrá de ser reajustada.
227 ❚ CAPÍTULO 8
Con la publicación de la nueva versión de IAS 27 en diciembre de 2003 se eliminó la posibilidad de
aplicar puesta en equivalencia en el balance separado de la matriz (IAS 27, párrafo 37), y la restric-
ción relacionada con la calificación del activo a los efectos de IAS 39. El nuevo texto de esta norma
permite calificar cualquier instrumento financiero como “a valor razonable a través de pérdidas y ga-
nancias” en el momento de su reconocimiento inicial (excepto en el caso de instrumentos de capital
no cotizados cuyo valor razonable no pueda ser medido fiablemente).
o estructura financiera separada de los partícipes. Cada partícipe reconoce en sus propios esta-
dos financieros:
– Los activos que controla y los pasivos en que incurre.
– La fracción de ingresos que recibe y los gastos que soporta.
b) Activos controlados conjuntamente. Se establece control conjunto (incluso propiedad compar-
tida) sobre un activo. Cada uno de los partícipes recibe una fracción del producto producido por
el activo y soporta una porción pactada de los costes relacionados. El partícipe reconoce:
– Su participación en el activo controlado conjuntamente.
– Los pasivos en que incurre.
– Su participación en los pasivos incurridos conjuntamente con los otros partícipes.
– Los ingresos por venta o uso de su parte de producto obtenido del activo bajo control conjunto,
y su parte en los gastos del negocio conjunto.
– Gastos incurridos respecto a su participación en el negocio conjunto.
228 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
c) Entidades bajo control conjunto. El negocio conjunto da lugar a la creación de una corporación u
otra entidad en la que cada partícipe tiene intereses. Esta entidad controla los activos del negocio
conjunto, incurre en sus pasivos, produce sus ingresos y soporta sus gastos. IAS 31 admite, como
las NFCAC, dos métodos contables en este caso:
– Integración proporcional, que es el método recomendado.
– Procedimiento de puesta en equivalencia.
La aplicación del método de integración proporcional no presenta diferencias importantes con el sis-
tema de las NFCAC, de modo que no profundizaremos sobre este punto (el procedimiento de puesta
en equivalencia se trata en el apartado siguiente). Las reglas sobre contabilización de la participación
en el balance separado del partícipe son las vistas de IAS 27. También son prácticamente iguales las
limitaciones a la obligación de consolidar este tipo de entidades, que operan (IAS 31, párrafo 2):
a) Cuando opera el partícipe es una matriz no obligada a consolidar en virtud del párrafo 10 de IAS
27 (exclusión de los subgrupos).
b) Y cuando el partícipe (distinto del anterior) reúne las condiciones descritas en dicho párrafo.
Por último, recordemos que IFRS 3 no regula las combinaciones en las que se unen dos o más enti-
dades o negocios para formar una joint venture. Se prevé que la contabilidad de este tipo de opera-
ciones sea discutida dentro del Proyecto sobre Combinaciones. Entre otras propuestas, se explorará
la aplicación del método fresh start. Este método se apoya en la idea de que la combinación da lugar
a la creación de una entidad nueva. Según él, todos los activos y pasivos de la entidad combinada se
valoran a valor razonable en la fecha de la combinación, incluyendo aquellos no reconocidos previa-
mente en los balances individuales.
forma societaria o no) en las que la entidad ejerce influencia notable, y que no son subsidiarias o ne-
gocios conjuntos (IAS 28, párrafo 2). Se presume, salvo prueba en contra, que el inversor tiene in-
fluencia notable cuando posee un 20% o más de los derechos de voto de aquella entidad (IAS 28,
párrafo 6). A la inversa, se presume que no hay influencia notable si se posee una porción menor de
derechos de voto. La influencia notable puede ponerse de manifiesto por (IAS 27, párrafo 7; los ca-
sos son esencialmente los mismos que en US GAAP: ver APB 18, párrafo 17):
a) Representación en el órgano de administración.
b) Participación en el proceso de determinación de políticas.
c) Transacciones importantes entre el inversor y la participada.
d) Intercambio de personal directivo.
e) Suministro de información técnica esencial.
[EJEMPLO]
IAS 28 no indica ninguna circunstancia que destruya la presunción de influencia notable del
párrafo 6. Los US GAAP sobre la materia (FIN 35, párrafo 4) consideran que puede haber falta
de influencia notable cuando se da, por ejemplo, alguna de las siguientes circunstancias:
– La participada se opone a la inversión e interpone una demanda contra ella.
– La inversora fracasa en su intento de obtener representación en el órgano de administración.
– La participada se niega a entregar la información financiera necesaria para aplicar el pro-
cedimiento de puesta en equivalencia.
229 ❚ CAPÍTULO 8
Los derechos de voto potenciales se toman en cuenta para determinar la existencia de influencia no-
table, en las mismas condiciones vistas para el control. Por tanto, la participación de la inversora en
los cambios de patrimonio neto de la participada se calcula sobre el porcentaje de participación ac-
tual. Todas las participaciones en asociadas se contabilizan usando el procedimiento de puesta en
equivalencia (IAS 28, párrafo 13) salvo que:
a) La inversora sea una matriz exenta de la obligación de consolidar por el párrafo 10 de IAS 27.
b) La inversora sea una entidad en las que concurran todas las circunstancias señaladas en dicho
apartado.
Como en el caso de las dependientes y de las multigrupo, IFRS 5 eliminó la excepción aplicable a las
inversiones en asociadas que se adquirieron, y se mantienen, únicamente con vistas a su venta pos-
terior. Si la inversión cumple las condiciones señaladas para su clasificación como “poseída para
venta”, se valora al menor entre su importe en libros y su valor razonable neto de costes de venta, y
se muestra en una sección separada del activo (el cambio se aplica prospectivamente a las participa-
ciones que cumplan las condiciones señaladas en IFRS 5 en un periodo anual comenzado el 1 de
enero de 2005 o posterior). Las enmiendas aprobadas en diciembre de 2003 suprimieron antes la
posibilidad de valorar a coste histórico las participaciones en asociadas que operaban sometidas a
restricciones severas a largo plazo, que deterioraban significativamente su capacidad para transferir
fondos al inversor (IAS 28 [revisión de 2000] párrafos 8 y 11.b). Como en el caso de las filiales, estas
circunstancias han de ser sopesadas al evaluar si existe influencia notable. Si ésta falta, el activo no
se clasifica como “participación en asociada”, y resultan entonces plenamente aplicables las reglas
de IAS 39, que exigen el uso del valor razonable como base de medición, dependiendo el tratamiento
de los cambios de la calificación otorgada a la inversión.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 230
La fuente de las divergencias que se observarán en la práctica entre la valoración actual de las parti-
cipaciones asociadas y la que se obtiene bajo IAS/IFRS proceden, ante todo, del diferente criterio de
cálculo de las diferencias de consolidación, y del método aplicado para la valoración del fondo de co-
mercio positivo con posterioridad al reconocimiento inicial. Como ya se ha indicado con anterioridad,
IFRS 3 suprime la amortización sistemática del fondo de comercio positivo, y establece la imputación
inmediata a resultados de las diferencias negativas de consolidación. La modificación tiene efectos
230 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
A suministra mercancías a B, con un margen del 50% sobre precio de venta. En la fecha de
cierre, B tiene mercancía servida por A con un valor en libros de 50 euros.
31/12/2004 31/12/2005
Saldo actual 1.100,00 1.170,00
Saldo fecha adquisición 800,00 800,00
Reservas generadas 300,00 370,00
Participación de A 75,00 92,50
Ajustes:
Amortización del fondo de comercio –33,75 –33,75
Los ajustes a realizar por aplicación del método de puesta en equivalencia para obtener los
balances consolidados a 31 de diciembre de 2004 y 31 de diciembre de 2005 son (el fondo
de comercio incorporado a participaciones en asociadas no se presenta separado en el ba-
231 ❚ CAPÍTULO 8
lance IAS):
Por otro lado, cualquier pérdida por deterioro de valor del fondo de comercio contabilizada por la par-
ticipada habrá de ser ajustada para determinar la participación de la inversora en sus resultados.
Dado que el fondo de comercio no es (bajo IAS/IFRS) un activo independiente de la participación en
la asociada, la prueba de deterioro de valor de IAS 36 se aplica a la inversión completa.
FASCiCULO 08 ok 22/9/04 12:30 Página 232
[EJEMPLO]
Suma 180,00
Participación de la inversora 0,30
232 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
C A P Í T U
9
L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. IAS 33, Ganancias por acción 235
1. 1. Alcance 235
1. 2. Ganancias por acción básicas 236
1. 3. Resultado atribuible a los accionistas ordinarios (ganancias) 237
1. 4. Promedio ponderado de acciones ordinarias en circulación
durante el periodo (por acción) 238
1. 5. Ganancias por acción diluidas 240
1. 5. 1. Ganancias: nivel diluido 240
1. 5. 2. Por acción: nivel diluido 241
1. 6. Dilusividad 243
C A P Í T U
9
L O
Contabilidad Seguros
235 ❚ CAPÍTULO 9
cicios iniciados el 1 de enero de 2005 o más tarde, y pueden suponer la introducción de diferencias
con los US GAAP aplicables a esta área, contenidos en SFAS 128. Consecuentemente, FASB ha emi-
tido un Exposure Draft que propone la aprobación de ciertos cambios. FASB estudia aún esta cues-
tión en el momento en que se prepara este material.
1. 1. Alcance
Este estándar debe ser aplicado por (IAS 33, párrafos 2 y 3):
a) Las entidades obligadas a presentar cifras de ganancias por acción, que son:
1. Aquéllas cuyas acciones ordinarias o potenciales acciones ordinarias se comercializan
públicamente.
2. Las que se hallan en proceso de emitir acciones ordinarias o acciones ordinarias po-
tenciales para su comercialización pública.
b) Las entidades que revelen voluntariamente cifras de ganancias por acción (dentro de un
informe que contenga una declaración de cumplimiento de los IAS/IFRS).
Una acción ordinaria es un instrumento de capital (esto es, un contrato que pone de mani-
fiesto un interés residual en los activos de una entidad después de deducir todos sus pasivos:
IAS 32, párrafo 11) que está subordinado a todas las otras clases de instrumentos de capital
(IAS 33, párrafo 5). En particular, las acciones ordinarias sólo participan en los beneficios del
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 236
periodo una vez deducida la participación de otras clases de acciones, como las preferentes
(IAS 33, párrafo 6).
Una acción ordinaria potencial es un instrumento financiero (esto es, un contrato que da lu-
gar, simultáneamente, a un activo financiero en una entidad y a un pasivo financiero o un ins-
trumento de capital en otra: IAS 32, párrafo 11) u otro tipo de contrato que da derecho a su
tenedor a recibir acciones ordinarias. Ejemplos de acciones ordinarias potenciales son (IAS
33, párrafo 7):
a) Los instrumentos de capital o deuda convertibles en acciones ordinarias, como las obliga-
ciones convertibles o las acciones preferentes convertibles.
b) Los warrants y opciones sobre acciones, que son contratos que otorgan a su tenedor el de-
recho a comprar acciones ordinarias (IAS 33, párrafo 5).
c) Las acciones ordinarias de emisión contingente, que son acciones ordinarias que se emiten
a cambio de una pequeña cantidad de efectivo, o incluso sin contraprestación, cuando se
satisfacen ciertas condiciones con arreglo a un acuerdo de emisión contingente de acciones
(IAS 33, párrafo 5).
236 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
El alcance de la norma y las definiciones son sustancialmente coincidentes con SFAS 128
(párrafo 6 de esa norma).
El informe financiero suele incluir los estados financieros consolidados y los estados separados
de la dominante. Las revelaciones exigidas por IAS 33 se refieren a las cifras consolidadas; la
entidad puede publicar cifras de ganancias por acción basadas en los estados individuales de
la dominante, pero sólo en el cuerpo principal de su estado de resultados (no puede aparecer
ese dato en las notas, ni tampoco en la información consolidada: IAS 33, párrafo 4).
Dichas ganancias o pérdidas serán, en todo caso, las atribuibles a los accionistas ordinarios
(IAS 33, párrafo 9). Esquemáticamente, el método de cálculo es:
Las normas que siguen son básicamente iguales a las de SFAS 128 (párrafos 8 a 10).
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 237
237 ❚ CAPÍTULO 9
Las partidas enumeradas (y sus efectos impositivos) se contabilizan como cargos o abonos a
reservas si las acciones preferentes se clasifican como instrumentos de capital. Para determi-
nar si son pasivos o instrumentos de capital, se aplican las guías de IAS 32.
[EJEMPLO]
Acciones preferentes y cálculo del numerador de la EPS básica. Una entidad tiene en circu-
lación 100.000 acciones rescatables, con derecho a dividendo preferente no acumulativo del
5% y valor nominal 10. La entidad ha declarado ese dividendo en el periodo. La ganancia de
las operaciones que continúan, coincidente con la ganancia neta del periodo, es de 200.000
euros. Calcular el importe del numerador de la cifra de ganancias por acción básicas en las
hipótesis siguientes:
a) El titular de la acción preferente tiene derecho a escoger, dentro de tres años, entre el re-
embolso de la acción en efectivo y la conversión en acciones ordinarias.
b) La misma opción anterior para la sociedad emisora.
En el supuesto a), las acciones preferentes se clasifican como pasivos financieros, (IAS 32,
párrafo AG25), de modo que los dividendos preferentes se clasificarán como gastos en el
estado de resultados (IAS 32, párrafo 35). No es preciso ningún ajuste para obtener el nu-
merador de la EPS básica (200.000). En el caso b), las acciones preferentes se consideran
instrumentos de capital (si es el emisor el que tiene la opción de reembolsar, no existe obli-
gación presente para él, y no se cumple la definición de pasivo financiero). Por tanto, el divi-
dendo preferente se contabiliza como una reducción del patrimonio neto. Su importe se
resta de la cifra de ganancias para obtener el numerador de la EPS básica (200.000 –
100.000 x 10 x 5% = 150.000).
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 238
Como en el texto actual, el promedio se ajusta para todos los periodos sobre los que se pre-
senta información cuando ocurre un cambio en el número de acciones ordinarias en circula-
ción que no tiene un reflejo correlativo en los recursos (IAS 33, párrafos 26 y 64). Ejemplos
de operaciones que dan lugar a esta clase de ajustes son:
a) Las ampliaciones de capital liberadas (o “dividendos en acciones”).
b) Los splits o divisiones de nominal.
c) Las concentraciones de nominal (splits inversos).
d) Las emisiones con derecho de suscripción cuando el precio de las nuevas acciones es
menor que el fair value de las antiguas.
En este último caso, y a estos efectos, es necesario un ajuste sobre el número de acciones
anterior a la fecha de la operación para que el denominador represente acciones homogé-
neas. El número de acciones anterior a la emisión se multiplica por (IAS 33, párrafo A2).
239 ❚ CAPÍTULO 9
Siendo el valor teórico de la acción “ex derecho”:
Valor del mercado de todas las acciones antes del ejercicio de los derechos + precio de emisión acciones nuevas
Número de acciones en circulación tras la ampliación
La reexpresión se exige aun en el caso de que el cambio en el número de acciones tenga lu-
gar entre la fecha del cierre y el momento en que se autoriza la publicación de los estados fi-
nancieros (se trata de un acontecimiento posterior que implica ajuste).
[EJEMPLO]
Nivel básico: cálculo del promedio anual de acciones ordinarias en circulación. Calcular el
promedio anual de acciones ordinarias en circulación (denominador de la EPS básica) par-
tiendo de los datos siguientes:
• Acciones ordinarias en circulación a 1 de enero (valor nominal 10): 100.000 desembolsa-
das al 75%.
• Desembolso 25% del nominal el 1 de abril.
• Ampliación de capital 1 de julio (una nueva por una antigua, a la par; valor razonable “ex
ante”: 30): 100.000.
• Compra de acciones propias 1 de octubre: 5.000.
• División de nominal (nominal nuevo, 5) ejecutada el 15 de enero.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 240
100.000 • 30 + 100.000 • 10
= 20
100.000 + 100.000
2. Tomando en cuenta el factor anterior, y el tiempo durante el cual han estado en circula-
ción las acciones durante el periodo, se halla el promedio ponderado:
240 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
9 6 3
100.000 • 0,75 + 100.000 • 0,25 • • 1,5 + 100.000 • – 5.000 • = 189.375
12 12 12
3. El importe anterior se multiplica por 2 para reflejar el efecto de la división del nominal
que ha tenido lugar entre la fecha del cierre y la emisión de los estados financieros. El re-
sultado es el denominador para las ganancias por acción de nivel básico.
189.375 • 2 = 378.750
Por último, se ajustan retroactivamente las ganancias por acción (en sus dos niveles) co-
rrespondientes a todos los periodos anteriores presentados para reflejar el efecto de la am-
pliación a precio rebajado (con derecho de suscripción) y de la ampliación del nominal so-
bre el promedio ponderado de acciones ordinarias en circulación.
Han de tomarse en cuenta todos los efectos indirectos que tendría la conversión de tales
acciones ordinarias potenciales sobre la ganancia atribuible a los accionistas ordinarios:
por ejemplo, si los empleados tienen derecho a participar en las ganancias, el numera-
dor de la EPS diluida debe tomar en cuenta el efecto que tendría sobre su importe la
conversión de las acciones potenciales dilusivas (IAS 33, párrafo 35).
241 ❚ CAPÍTULO 9
fracción de tiempo transcurrida desde el comienzo del ejercicio (o desde la emisión de la
acción potencial) hasta la fecha de conversión. A partir de este punto, se incorporan al
denominador de la EPS básica y no es preciso ningún ajuste (IAS 33, párrafo 38).
En caso de que se haya previsto más de una base para la conversión, se presumirá el
precio de ejercicio o tipo de conversión más ventajoso desde el punto de vista del tene-
dor (IAS 33, párrafo 39). IAS 33 proporciona guías adicionales para el tratamiento de
una variada gama de acciones ordinarias potenciales, ampliando las incluidas en el texto
anterior. Aquí, por razones de espacio, nos ocupamos tan sólo de los más importantes:
opciones, warrants y valores convertibles.
Dicho de otro modo, se considera que la acción potencial puede dividirse en dos contra-
tos (IAS 33, párrafo 46):
a) Uno de emisión de acciones ordinarias a precio de mercado (que no es dilusivo).
b) Otro de emisión de acciones sin contraprestación.
Como se verá, las opciones y los warrants sólo tienen efecto dilusivo cuando están in the
money; esto es, cuando el precio de ejercicio se halla por debajo del precio medio de
mercado de la acción ordinaria (IAS 33, párrafo 47).
[EJEMPLO]
Opciones y warrants (call). La entidad tiene en circulación 100.000 opciones sobre acciones
242 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
ordinarias. Cada una da derecho a comprar una acción ordinaria a un precio de ejercicio de
150 euros. La cotización media de las acciones ordinarias en el periodo ha sido de 200 euros.
Como las opciones se hallan in the money, se toman en cuenta para calcular las EPS diluidas.
100.000 • 150
= 75.0000 acciones
200
c) La diferencia entre las acciones que se habrían emitido si los derechos de opción se hubie-
sen ejercido y el número de acciones anterior se considera una emisión sin contrapresta-
ción (dilusiva), y se incluye en el denominador de la EPS diluida (100.000 – 75.000 =
= 25.000).
[EJEMPLO]
Valores convertibles. Una entidad tiene en circulación 10.000 obligaciones convertibles de
valor nominal 500, convertibles cada uno en cuatro acciones ordinarias de la entidad. Tasa
de interés 3% anual.
La tasa de gravamen del impuesto sobre las ganancias es del 30%. Los directivos tienen de-
recho a un bonus equivalente al 2% de las ganancias netas. Las ganancias netas declaradas
son de 1.000.000 de euros (no hay operaciones en discontinuación), y el promedio ponde-
rado de acciones ordinarias en circulación es 100.000.
1.000.000
= 10
100.000
Para calcular el numerador de la EPS diluida, se toman en cuenta los efectos de la conver-
sión hipotética de las acciones potenciales:
243 ❚ CAPÍTULO 9
Numerador de la EPS diluida 1.102.900
1.102.900
≈ 7,88
100.000 + 10.000 • 4
1. 6. Dilusividad
Se ha repetido insistentemente que las acciones potenciales que se agregan al denominador
de la EPS diluida son aquellas que tienen efecto dilusivo, y se ha señalado que la dilución es
la reducción de las ganancias por acción o el incremento de las pérdidas por acción que su-
pondría la conversión de las acciones potenciales.
IAS 33 arbitra un procedimiento para identificar qué acciones potenciales han de ser consi-
deradas dilusivas. Consiste en lo siguiente:
1. Sólo se consideran dilusivas cuando su conversión produzca una reducción de la EPS pro-
cedente de operaciones que continúan (IAS 33, párrafo 41), aunque su conversión con-
lleve un aumento de la EPS procedente de la ganancia o pérdida neta del periodo.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 244
470.000
= 7,715
60.917
245 ❚ CAPÍTULO 9
Ganancias que aporta cada acción adicional 6,65
Observando el orden del párrafo 44 de IAS 33, el orden de inclusión será (para verificar si
las acciones potenciales tienen efecto dilusivo):
1. Opciones.
2. Acciones preferentes convertibles.
3. Obligaciones convertibles.
Promedio
Resultado acciones EPS Dilusivas
ordinarias
Resultado antes del pago de dividendos 500.000 60.917
Dividendo preferente 30.000
Ganancias nivel básico 470.000 60.917 7,71545828
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 246
Promedio
Resultado acciones EPS Dilusivas
ordinarias
Las ganancias por acción procedentes de las operaciones que continúan se usan como “nú-
mero de control” para identificar las acciones potenciales dilusivas. Si la entidad informa so-
bre alguna operación en discontinuación, es necesario, además, publicar datos de resultados
por acción (en sus dos niveles) procedentes de dichas operaciones y de la ganancia o pér-
dida neta del periodo. No obstante, el denominador de la EPS diluida es el mismo para todas
las cifras de resultado por acción, dado que la dilusividad de los valores se determina exclusi-
vamente por referencia a los resultados de las operaciones que continúan.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 247
[EJEMPLO]
Supongamos ahora que la entidad hubiese presentado un resultado de las operaciones que
continúan de 100.000 euros, y beneficios por operaciones en discontinuación de 400.000
euros (permaneciendo invariables todos los datos y suposiciones restantes).
Como se ve a continuación, la opción es la única acción ordinaria potencial con efecto dilusivo:
Procedente
de las operaciones que continúan
Promedio
Resultado acciones EPS Dilusivas
ordinarias
247 ❚ CAPÍTULO 9
3. Efecto de la conversión de las ac-
ciones preferentes,
2. Efecto de la conversión
del empréstito
Es fácil ver que el denominador de la EPS de nivel diluido sería diferente si se tomase en
consideración el efecto dilución sobre la ganancia o pérdida neta del periodo. Más concreta-
mente, las acciones preferentes se considerarían dilusivas respecto a ese resultado por ac-
ción (las mismas 500.000 que se vieron en el ejemplo anterior). Las ganancias por acción de
nivel diluido quedarían como se muestra a continuación.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 248
2. 1. Introducción
Ésta es la primera IFRS que trata sobre los contratos de seguro. Las prácticas contables rela-
tivas a los contratos de seguro han sido muy diversas, y a menudo han diferido de las prácti-
cas contables en otros sectores. Debido a que muchas entidades adoptarán las IFRS el 1 de
enero de 2005, el Consejo de Normas Internacionales de Contabilidad ha emitido la IFRS 4 al
objeto de:
a) Realizar un conjunto de mejoras limitadas en la contabilización de los contratos de seguro
hasta que el Consejo complete la segunda fase de su proyecto sobre los mismos. Se es-
pera que la publicación de la segunda fase de esta IFRS tenga lugar durante 2005 y que
su entrada en vigor sea posterior a dicho año.
b) Requerir a cualquier entidad que emita contratos de seguro, es decir, a las entidades ase-
guradoras, para que revelen información sobre dichos contratos.
La IFRS 4, por tanto, es un escalón que permite acceder a la fase II del proyecto citado. El
Consejo se ha comprometido a completar la fase II sin demora, una vez haya procedido a in-
vestigar todas las cuestiones, tanto conceptuales como prácticas que sean relevantes, y haya
sometido los resultados al procedimiento debido para su aprobación.
Las entidades aseguradoras deben aplicar la IFRS 4 para los ejercicios que comiencen a par-
tir del 1 de enero de 2005. La entidad aseguradora no estará obligada a aplicar algunos as-
pectos de la IFRS para elaborar la información comparativa relativa a ejercicios comenzados
antes del 1 de enero de 2005.
Nota: Se advierte que este artículo no pretende ser una traducción literal de la IFRS 4 y los comentarios, conclusiones e inter-
pretaciones son vertidos por los autores a título estrictamente personal.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 249
2. 2. Objetivo
El objetivo de la IFRS 4 ha sido esbozado en la introducción, y no es otro que introducir aque-
llas mejoras para las que existe consenso en el Consejo referentes a la contabilización de los
contratos de seguro por las entidades aseguradoras con la intención de completarlas en una
segunda fase.
Otro objetivo fundamental de la IFRS 4 es requerir a cualquier entidad que emita contratos de
seguro para que revele información sobre dichos contratos en sus estados financieros.
2. 3. Ámbito de aplicación
La IFRS 4 se aplicará a los:
a) Contratos de seguro que emitan las entidades aseguradoras, entendiendo el contrato de
reaseguro aceptado como un tipo de contrato de seguro emitido, y también a los contratos
de reaseguro cedido.
b) Instrumentos financieros que emita la entidad aseguradora con un componente de partici-
pación discrecional. Podemos definir este componente como un derecho contractual
idéntico a la participación en beneficios, es decir, consiste en un suplemento adicional a
las prestaciones garantizadas que se basa en determinadas rentabilidades o rendimientos
fijados en el contrato. La IAS 32, Instrumentos Financieros: Presentación e Información a
Revelar, requiere la revelación de información sobre los instrumentos financieros, inclu-
yendo los instrumentos que contengan dicho componente.
249 ❚ CAPÍTULO 9
La IFRS 4 no aborda otros aspectos de la contabilización de las entidades aseguradoras,
como, por ejemplo, la contabilización de los activos financieros poseídos por aseguradoras y
pasivos financieros emitidos por las mismas (véase la IAS 32 y la IAS 39, Instrumentos Finan-
cieros: Reconocimiento y Valoración), salvo por lo establecido para cambios de políticas con-
tables en activos financieros, que se estudia en el apartado correspondiente.
d) Las garantías financieras realizadas por una entidad al ceder a un tercero activos financieros
ni tampoco a las garantías financieras retenidas por la misma al ceder a un tercero pasivos fi-
nancieros, siempre que tales activos o pasivos financieros estén dentro del ámbito de aplica-
ción de la IAS 39, con independencia de que las garantías financieras tengan ese nombre o
reciban la denominación de cartas de crédito o contratos de seguro (véase la IAS 39).
e) Las contrapartidas contingentes, a pagar o cobrar, en una combinación de negocios (vé-
ase la IFRS 3, Combinaciones de Negocios).
f) Los contratos de seguro directo donde la entidad sea la tomadora del seguro. No obstante,
el cedente aplicará la IFRS 4 a los contratos de reaseguro que haya cedido.
Es importante destacar que la IFRS 4 denomina aseguradora a toda entidad que emita un
contrato de seguro, con independencia de que dicha entidad se considere aseguradora a
efectos legales o de supervisión. Un contrato de reaseguro es un tipo de contrato de seguro.
De acuerdo con ello, todas las referencias que se hacen a los contratos de seguro en la citada
IFRS son aplicables también a los contratos de reaseguro.
250 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Por tanto, la cuestión esencial de esta nueva definición del contrato de seguro es la
transferencia de un riesgo significativo de seguro del tomador al asegurador, lo cual debe
valorarse contrato a contrato. El Apéndice B de la IFRS 4 recoge las directrices necesa-
rias para considerar que existe riesgo significativo de seguro. Para establecer que un
riesgo de seguro es significativo, necesitamos verificar que se dan en los diferentes esce-
narios los elementos que definen las transacciones mercantiles.
Además, para que exista riesgo de seguro significativo debe tratarse de un riesgo pree-
xistente para el tomador del seguro y no de un riesgo que haya nacido de las condicio-
nes del contrato. El riesgo de seguro es considerado significativo si y sólo si un evento
asegurado pudiera provocar el pago por parte del asegurador de una indemnización adi-
cional importante en cualquier escenario. Esta afirmación se verifica incluso si el evento
asegurado es extremadamente improbable o incluso si el valor actual esperado de los
flujos de caja contingentes con dicho evento representa una pequeña proporción del va-
lor actual esperado de todos los flujos de caja contractuales que permanecen en vigor.
[EJEMPLO]
Un contrato del tipo unit-linked que paga prestaciones vinculadas al valor razonable de un
grupo de activos definido previamente.
La prestación es del 100% del valor razonable de los activos en caso de rescate o venci-
miento y del 105% del valor de la unidad de cuenta en caso de muerte. Además, existe una
comisión de rescate del 0,2% que el asegurador no percibirá en caso de muerte. En la fecha
de formalización del contrato, el valor razonable de los activos que corresponde al tomador
del seguro es de 1.000 euros.
Para discernir si existe riesgo de seguro significativo, comprobamos que existe sustancia
mercantil, que se trata de una transferencia al asegurador de un riesgo del tomador preexis-
tente al contrato y comparamos los pagos que debe afrontar el asegurador en caso de pro-
ducirse la muerte del asegurado respecto a los pagos del asegurador en caso de rescate an-
ticipado. Esta comparación debe hacerse necesaria y únicamente a la fecha de inicio del
contrato, según se establece en las Bases para las Conclusiones de la IFRS.
En porcentaje, 51 euros representa el 5,1% de 1.000 euros. Sin embargo, la comisión de res-
cate a la que el asegurador renuncia en caso de muerte no es un riesgo preexistente del to-
mador que se transfiera al asegurador, sino que se deriva de los términos del contrato. Por
tanto, esa cantidad no se tendrá en cuenta para comparar los pagos en los dos escenarios
planteados y los cálculos serán los siguientes:
251 ❚ CAPÍTULO 9
Pagos en caso de muerte: (1.000 € x 105%) – (1.000 € x 0,2%) = 1.049 €
Pagos en caso de rescate: (1.000 € x 100%) – (1.000 € x 0,2%) = 999 €
Diferencia bruta: 50 €
Podemos concluir que la indemnización adicional que el asegurador debe pagar en caso de
producirse la muerte del asegurado es de 50 euros, pero la norma no establece un criterio
objetivo y cuantificable para comprobar si esa indemnización adicional es o no relevante y,
por tanto, el riesgo transferido es significativo.
El riesgo de seguro se define en la IFRS 4 como todo riesgo, distinto del riesgo financiero,
transferido por el tomador de un contrato al emisor del mismo. Un contrato que exponga al
emisor a un riesgo financiero, pero no tenga un componente significativo de riesgo de se-
guro, no es un contrato de seguro.
Si, por el contrario, el riesgo de seguro fuera significativo, la disociación del componente de
seguro y el de depósito será obligatoria, estará permitida, pero no será obligatoria o bien,
estará prohibida en los términos que establece la IFRS 4 en sus párrafos 10 a 12.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 252
Dada la importancia que la calificación del riesgo, como significativo o no, tiene para de-
terminar el ámbito de aplicación de la IFRS 4, consideramos que quedan abiertas las si-
guientes cuestiones:
• La Guía de Implementación no aclara si se considera significativo el riesgo siempre
que supere el 1%.
• En las Bases para las Conclusiones de la Norma se requiere que la evaluación de la
significatividad del riesgo se realice únicamente al inicio del contrato, sin embargo,
cabe preguntarse:
– Para los contratos en vigor en la fecha de primera aplicación de la IFRS 4, ¿deben
las entidades juzgar si el riesgo transferido en dichos contratos era significativo en
su inicio o en dicha fecha de primera aplicación?
– Para aquellos contratos donde no hay transferencia de riesgo de seguro significativo
al inicio, pero lo puede haber en un momento posterior, ¿pueden las entidades tener
en cuenta esa transferencia de riesgo futura desde el inicio? o ¿pueden las entida-
des volver a plantearse la significatividad del riesgo en un momento posterior al ini-
252 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
cio? ¿Qué tratamiento darán las entidades a aquellos contratos que tengan una
transferencia de riesgo creciente, pasando éste de no significativo a significativo?
– La IFRS sí explicita qué ocurre con los contratos que tienen transferencia de riesgo de
seguro significativo al inicio, pero no en un momento posterior y también qué trata-
miento están obligadas a dar las entidades a aquellos contratos que tengan una trans-
ferencia de riesgo decreciente, pasando éste de significativo a no significativo. Puesto
que un contrato que ha sido calificado como contrato de seguro se mantiene como
contrato de seguro hasta que todos los derechos y obligaciones se extingan o expiren.
Desde nuestro punto de vista, entendemos que el desarrollo de esta IFRS 4 debe estable-
cer un criterio objetivo para determinar la significatividad del riesgo de seguro con el fin
de evitar arbitrajes regulatorios. Esto es, que los agentes traten de obtener ventajas en el
ámbito impositivo, supervisor o contable, aprovechando la subjetividad de la definición.
En cualquier caso, las entidades necesitarán fijar y mantener en el tiempo un criterio
cuantificable que garantice la coherencia en todos sus contratos respecto de la califica-
ción del riesgo de seguro como significativo o no.
2. 3. 2. Derivados implícitos
La IAS 39 requiere que la entidad separe ciertos derivados implícitos de sus correspon-
dientes contratos principales y los mida por su valor razonable, contabilizando los cam-
bios en los resultados del ejercicio. La IAS 39 es también aplicable a los derivados implí-
citos en un contrato de seguro, salvo que el derivado en cuestión sea en sí mismo un
contrato de seguro.
Excepción:
• La opción que el tomador del seguro tenga para rescatar el contrato de seguro por una
cantidad fija (o por un importe basado en una cantidad fija más un tipo de interés), in-
cluso aunque el precio de ejercicio sea diferente del importe en libros del pasivo por el
seguro principal.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 253
Sí es necesario separar y medir por su valor razonable una opción de venta o a una
opción para rescatar en efectivo, que estén implícitas en un contrato principal, siem-
pre que el valor de rescate varíe en función del cambio en una variable financiera, por
ejemplo, un precio, o del cambio en una variable no financiera que no afecte a una de
las partes del contrato. Además, dicho requisito también será aplicable si la posibili-
dad de ejercitar la opción de venta o la opción para rescatar en efectivo se activa
cuando ocurre un cambio en esa variable (por ejemplo, una opción de venta que
puede ejercitarse si un determinado índice bursátil alcanza un valor fijado).
253 ❚ CAPÍTULO 9
independencia de las bases que se utilicen para valorar esos derechos y obligaciones.
• Tendrá prohibida la disociación si no puede valorar por separado el componente de
depósito. En la disociación de un contrato, la entidad aseguradora aplicará la IFRS 4 al
componente de seguro y aplicará la IAS 39 al componente de depósito.
2. 4. Reconocimiento y valoración
existen en la fecha de los estados financieros. Por tanto, no reconocerá como pasivos
las provisiones para catástrofes o para estabilización.
b) Llevará a cabo la prueba de adecuación de los pasivos.
c) Eliminará un pasivo derivado de un contrato de seguro, total o parcialmente, de su
balance cuando y sólo cuando se extinga. Es decir, cuando la obligación especificada
en el contrato sea liquidada o cancelada, o bien expire su exigibilidad.
d) No procederá a compensar:
• Activos derivados de contratos de reaseguro con los pasivos derivados de contratos
de seguro que se relacionen con ellos.
• Gastos o ingresos procedentes de contratos de reaseguro con los ingresos o gastos,
respectivamente, de los contratos de reaseguro que se relacionen con ellos.
e) Considerará el deterioro del valor de sus activos por reaseguro.
Si la entidad aseguradora está aplicando una prueba de adecuación de los pasivos que
cumple los requisitos mínimos especificados, es decir, que es una prueba idónea, esta
IFRS no le impondrá otros requerimientos adicionales, aplicándose incluso el nivel de
agregación propuesto por la política contable de la entidad.
Los requisitos mínimos que debe cumplir la prueba de adecuación de los pasivos a in-
cluir en las políticas contables de las aseguradoras son los siguientes:
a) La prueba deberá considerar las estimaciones actuales de todos los flujos de efectivo
que se deriven del contrato, y de los flujos de efectivo relacionados con ellos, como
puede ser el caso de los costes de tramitación de los siniestros, así como de los flujos
de efectivo que procedan de las opciones y garantías implícitas.
b) Si la prueba mostrase que el pasivo es inadecuado, el montante total de la diferencia
se reconocerá en los resultados.
• Los activos intangibles relacionados, tales como los adquiridos en una combina-
ción de empresas o cesión de cartera. No obstante, los activos derivados de con-
trato de reaseguro relacionados no se tendrán en consideración, puesto que la ase-
guradora los contabiliza por separado.
b) Determinará si el importe descrito en a) es menor que el importe en libros que se re-
queriría en caso de que los pasivos derivados de contratos de seguro estuvieran dentro
del alcance de la IAS 37, Provisiones, Pasivos Contingentes y Activos Contingentes. En
caso de que así fuera, la aseguradora reconocerá la diferencia total en el resultado, dis-
minuyendo al mismo tiempo el importe en libros de los costes de adquisición o activos
intangibles relacionados, o bien, aumentando el importe en libros de los pasivos deriva-
dos de contratos de seguro a los que no se aplique una prueba idónea.
El importe descrito en el apartado b) anterior (esto es, el resultado de aplicar la IAS 37)
reflejará los márgenes de inversión futuros si y sólo si el importe descrito en el apartado
a) anterior también refleja dichos márgenes.
255 ❚ CAPÍTULO 9
cedente reducirá su importe en libros de acuerdo con este hecho, y reconocerá una pér-
dida por deterioro en los resultados. Un activo derivado de un contrato de reaseguro ha-
brá deteriorado su valor si y sólo si:
a) Existe la evidencia objetiva de que, a consecuencia de un evento que ha ocurrido
después del reconocimiento inicial del activo derivado de un contrato de reaseguro,
el cedente puede no recibir todos los importes que se le adeuden en función de los
términos del contrato.
b) Ese evento tiene un impacto valorable con fiabilidad sobre los importes que el ce-
dente vaya a recibir de la entidad reaseguradora.
La IFRS 4 permite que la aseguradora cambie las políticas contables relativas a los contratos
de seguro si, y sólo si, a consecuencia de ello sus estados financieros presentan información
que es más relevante pero no menos fiable, o bien más fiable pero no menos relevante.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 256
En lo que afecta a los contratos de seguro, la IFRS 4 trata de la continuidad de las prác-
ticas contables que la entidad viene observando, así como de la posibilidad o necesidad
de cambiar sus políticas contables para reflejar los tipos de interés actuales de mercado,
incluir o no los márgenes de inversión futuros, modificar el nivel de prudencia y estable-
cer un modelo de reconocimiento de pérdidas y ganancias no realizadas.
La IFRS 4 permite a las entidades aseguradoras continuar con las prácticas contables
que se enumeran a continuación, pero no pueden introducir ninguna de ellas ya que eso
haría que sus estados financieros resultasen menos fiables o menos relevantes. Estas
prácticas son:
a) Valorar los pasivos derivados de contratos de seguro sin proceder a descontar los im-
portes.
b) Valorar los derechos contractuales relativos a futuras comisiones de gestión de inver-
siones por un importe que exceda su valor razonable, obtenido éste por comparación
con las comisiones que actualmente cargan otros participantes en el mercado por
servicios similares.
256 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
c) Utilizar políticas contables no uniformes para los contratos de seguro de las entidades
dependientes (así como, en su caso, para los costes de adquisición diferidos y los ac-
tivos intangibles que se relacionen con dichos contratos), con la salvedad de la utiliza-
ción de tipos de interés actuales de mercado, que analizamos seguidamente. Si esas
políticas contables no fueran uniformes actualmente, la entidad aseguradora puede
cambiarlas, siempre que del cambio no resulten políticas contables menos uniformes
que las actuales y también se satisfagan el resto de los requerimientos de la IFRS 4.
La IFRS 4 permite, pero no obliga, a las entidades aseguradoras a designar unos pasivos
derivados de contratos de seguro sobre los que aplicar nuevas políticas contables, las
cuales impliquen recalcularlos utilizando tipos de interés vigentes en el mercado y reco-
nocer los cambios que se produzcan en dichos pasivos como resultados del ejercicio. En
ese momento, la aseguradora puede también introducir políticas contables que requie-
ran de otras estimaciones e hipótesis actuales para los pasivos designados.
La entidad aseguradora que designe estos pasivos deberá aplicar las nuevas políticas de
forma coherente a los mismos en todos los ejercicios hasta que se extingan. No obstante,
no tendrá necesidad de aplicar estas políticas de forma coherente a todos los pasivos simi-
lares como exigiría la IAS 8. Cuando una entidad aseguradora cambie sus políticas conta-
bles sobre pasivos derivados de contratos de seguro, podrá reclasificar algunos o todos sus
activos financieros “al valor razonable a través de resultados”. Dicha reclasificación estará
permitida únicamente si el citado cambio en las políticas contables se produce al aplicar
por primera vez la IFRS 4 y cumple con los requisitos establecidos en la IAS 8.
La IFRS 4 establece la presunción iuris tantum de que los estados financieros de la asegu-
radora serán menos relevantes y menos fiables si utiliza una política contable que refleje
márgenes de inversión futuros en la valoración de los contratos de seguro, a menos que di-
chos márgenes influyan en pagos contractuales. Las entidades aseguradoras podrán utili-
zar políticas contables que reflejen márgenes de inversión futuros en la valoración de los
contratos de seguro si ya las venían aplicando, ya que la IFRS 4 les faculta para ello.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 257
Las entidades que pretendan cambiar sus políticas contables, de forma que reflejen már-
genes de inversión futuros en la valoración de los contratos de seguro, podrán desvirtuar
la presunción si y sólo si los demás componentes del cambio en las políticas contables
aumentan la relevancia y fiabilidad de sus estados financieros en una medida suficiente
como para compensar las pérdidas de relevancia y fiabilidad que supone la inclusión de
los márgenes de inversión futuros. Es decir, que el efecto neto del cambio ha de ser hacia
una mayor relevancia y fiabilidad. En caso de no desvirtuar la presunción, no podrán in-
troducir dichas políticas contables de acuerdo con lo establecido por la IAS 8.
La entidad aseguradora no necesita cambiar las políticas contables que viene aplicando
a los contratos de seguro con el fin de eliminar el exceso de prudencia. No obstante, si la
aseguradora ya valora sus contratos de seguro con suficiente prudencia, no debe intro-
ducir dosis adicionales de la misma. Es decir, el cambio de política contable no puede
suponer una prudencia excesiva
En algunos modelos contables, las ganancias o las pérdidas de los activos de la entidad
aseguradora tienen un efecto directo en algunas o todas las siguientes partidas: a) sus pa-
sivos derivados de contratos de seguro, b) los costes de adquisición diferidos relaciona-
dos con ellos y c) los activos intangibles relacionados también con ellos. Se permite, pero
no se obliga, a la entidad aseguradora a que cambie sus políticas contables de forma que
la ganancia o pérdida en los activos, reconocida pero no realizada, afecte a dichas valora-
ciones de la misma forma que lo hace la ganancia o pérdida realizada. El ajuste corres-
pondiente en el pasivo derivado de contratos de seguro (o en los costes de adquisición di-
feridos o en los activos intangibles) será reconocido en el patrimonio neto si y sólo si las
ganancias o pérdidas no realizadas se reconocen directamente en el patrimonio neto.
257 ❚ CAPÍTULO 9
Esta práctica, que se denomina en ocasiones “contabilización tácita”, no es idéntica a la
contabilización de la cobertura de activos recogida en la IAS 39 y, normalmente, no ten-
drá los mismos efectos.
Los activos intangibles descritos están excluidos del alcance de la IAS 36, Deterioro del
Valor de los Activos, y de la IAS 38, Activos Intangibles. No obstante, la IAS 36 y la IAS
38 se aplican a las listas de clientes y a las relaciones con los clientes que reflejen ex-
pectativas de contratos futuros, pero no forman parte de los derechos ni de las obligacio-
nes derivadas de contratos de seguro existentes en la fecha de la combinación de nego-
cios o de la cesión de cartera.
b) Si el emisor clasificara la totalidad o una parte de este componente como una partida
separada de patrimonio neto, el pasivo reconocido por el contrato en su conjunto no
será menor que el importe que resultaría de aplicar la IAS 39 al elemento garanti-
zado. Este importe incluirá el valor intrínseco de las eventuales opciones de rescate
del contrato, pero no tendrá que incluir necesariamente su valor temporal.
c) Aunque estos contratos son instrumentos financieros, el emisor puede continuar re-
conociendo las primas recibidas por los mismos como ingresos, y reconocer como
gastos los incrementos correspondientes del importe en libros del pasivo.
2. 5. Información a revelar
259 ❚ CAPÍTULO 9
Para los apartados a) y b) la entidad deberá aplicar los requerimientos sobre información
a revelar de la IFRS 4 a la información comparativa que se relacione con ejercicios anua-
les que hayan comenzado antes del 1 de enero de 2005, pero no respecto de la informa-
ción de los apartados c) a e) siguientes.
En ocasiones, aplicar un requerimiento concreto a la información comparativa, relacionada
con los ejercicios anuales cuyo inicio es anterior al 1 de enero de 2005, resulta “impracti-
cable” (en los términos de la IAS 8), en cuyo caso, la entidad deberá revelar este hecho.
Además, si la aseguradora es también cedente, revelará:
• Las ganancias y pérdidas reconocidas en el resultado por reaseguro cedido.
• Si el cedente difiere y amortiza ganancias y pérdidas procedentes de cesiones de rea-
seguro, la amortización del ejercicio, así como los importes que permanezcan sin
amortizar al inicio y al final del mismo.
c) El procedimiento utilizado para determinar las hipótesis que tengan un mayor efecto
sobre la valoración de los importes reconocidos. Cuando sea posible, la entidad ase-
guradora dará también información cuantitativa respecto a dichas hipótesis.
d) El efecto individualizado de cada uno de los cambios significativos en las hipótesis
utilizadas para valorar los activos y los pasivos derivados de contratos de seguro.
e) Conciliaciones de los cambios en los pasivos derivados de contratos de seguro, en los
activos derivados de contratos de reaseguro y, en su caso, en los costes de adquisi-
ción diferidos que se relacionen con ellos.
FASCiCULO 09 ok 24/9/04 18:28 Página 260
• La sensibilidad del resultado y del patrimonio neto a cambios en las variables que
tengan un efecto significativo en los mismos.
• Las concentraciones del riesgo de seguro.
• La siniestralidad real comparada con las estimaciones previas. Dicha comparación
estará referida al intervalo de tiempo desde que surgiera la primera reclamación,
para la cual exista todavía incertidumbre respecto al importe y calendario de pagos
pendientes por siniestros, sin que sea necesario retrotraerla más allá de 10 años.
La aseguradora no tiene que revelar esta información para siniestros cuya incerti-
dumbre y calendario de pagos se vaya a resolver normalmente en el transcurso de
un año. La entidad no precisa revelar información acerca de la evolución de la si-
niestralidad que haya tenido más allá de los cinco años anteriores del primer ejerci-
cio en que aplique la IFRS 4.
d) La información respecto al riesgo de tipo de interés y el riesgo de crédito que exigiría
la IAS 32 si ésta fuera de aplicación a dichos contratos de seguro.
e) Información acerca de la exposición al riesgo de tipo de interés o riesgo de mercado
procedentes de derivados implícitos en un contrato principal que sea de seguro,
cuando la aseguradora no esté obligada a medir esos derivados implícitos por su va-
lor razonable y no lo haya hecho.
C A P Í T
10
U L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 263
C A P Í T
10
U L O
1. Introducción
Consecuencia de las definiciones de activo y de pasivo adoptadas en el MC es el enfoque en el que
basa IAS 12 la contabilidad de los activos y pasivos por impuesto diferido. La versión original de esta
norma permitía el uso de dos métodos contables en esta materia:
• El método del diferimiento (usado en Estados Unidos hasta la derogación de APB 11) determinaba
el gasto por impuesto aplicando la tasa de gravamen actual al resultado antes de impuestos, y con-
263 ❚ CAPÍTULO 10
sideraba cualquier diferencia entre dicho importe y la cantidad a pagar como un ajuste a los im-
puestos diferidos.
• El método del pasivo basado en el estado de resultados, que es el que utiliza el PGC, se centra en
las diferencias entre ganancias contables y ganancias fiscales que se originan en un periodo y re-
vierten en otro posterior: son estas diferencias temporales (timing differences) las que originan ac-
tivos y pasivos por impuestos diferidos.
Siguiendo los pasos de FASB, la revisión efectuada en 2000 suprimió estos dos sistemas e impuso un
único método: el del pasivo basado en el balance (o método de activo-pasivo). FASB había optado por
este sistema en 1987 al aprobar SFAS 96 (norma que sustituyó a APB 11), aunque la oposición susci-
tada por su complejidad supuso primero que se retrasase su entrada en vigor (tres veces en cuatro
años), y posteriormente que se sustituyera por el actual SFAS 109, aprobado en febrero de 1992.
Conforme al método del pasivo basado en el balance, son las diferencias temporarias (temporary diffe-
rences) que surgen al comparar el valor en libros de los activos o pasivos con su respectivo valor para fi-
nes de impuestos las que motivan la aparición de activos o pasivos por impuesto diferido. Todas las ac-
tuales diferencias temporales son, asimismo, diferencias temporarias. Sin embargo, en este concepto
caben otras no originadas por transacciones reflejadas en el estado de resultados, que serán las que
mayores cambios incorporen en relación con la práctica actual. Es el caso, por ejemplo, de las asociadas
con ganancias o pérdidas imputadas al patrimonio neto y con las diferencias de primera consolidación.
IAS 12, al igual que SFAS 109, proporciona reglas aplicables a todos los impuestos corrientes o dife-
ridos relacionados con las ganancias, sean éstos nacionales o extranjeros, y no da reglas específicas
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 264
para la contabilidad de impuestos a las ganancias en informes intermedios (IAS 34 proporciona guías
sobre este punto).
Se llaman diferencias temporarias imponibles a las que originan cantidades imponibles en el mo-
mento en que se recuperan los activos o se liquidan los pasivos, y se denominan diferencias tempo-
rarias deducibles a las que darán lugar a cantidades deducibles en ese momento. Cuando surgen di-
ferencias imponibles, la cancelación del pasivo o la recuperación del activo da lugar a pagos fiscales
mayores que los que se soportarían si la diferencia fuese nula: dichos pagos se registran como pasi-
vos por impuestos diferidos desde que la diferencia se pone de manifiesto. Cuando las diferencias
sean deducibles, se producirán menores pagos de impuesto que si la diferencia no existiese. Estos
importes serán contabilizados como activos por impuesto diferido en la medida en que no existan
dudas sobre su recuperación futura.
En el siguiente ejemplo se muestran varios casos elementales de identificación de bases fiscales con
diferencias temporarias que pueden servir para ilustrar algunos cambios respecto de las actuales
prácticas.
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 265
[EJEMPLO]
Comparación IAS 12 y Norma de Valoración 16ª. Diferencias temporarias y temporales. Base
fiscal y valor en libros.
A) En el balance de una sociedad española figuran los siguientes activos y pasivos. Indicar
su base fiscal y el tipo de diferencias que se produzcan en cada caso.
1. Una cuenta por cobrar, con un importe en libros inicial de 2.000 euros, venció el día 1
de octubre (fecha del cierre, 31 de diciembre). La sociedad ha reconocido una pérdida
por deterioro equivalente al 50% del saldo.
El deterioro (provisión para insolvencias) no se admite a efectos fiscales si en la fecha
del cierre fiscal no han pasado más de seis meses desde el vencimiento del crédito. La
recuperación del activo en el futuro produce una entrada de beneficios económicos de
1.000 euros (según estimación). Como la base fiscal del activo es 2.000 euros, la ga-
nancia fiscal incluirá entonces una pérdida por valor de 1.000 euros. Por tanto, surgiría
una diferencia temporaria deducible de:
Esta diferencia temporaria es también una diferencia temporal para la Norma de Valoración
16ª del PGC. Esto es, obtendríamos la misma diferencia partiendo del estado de resultados:
265 ❚ CAPÍTULO 10
Diferencia temporal positiva 1.000
2. Una provisión para garantías de reparaciones por valor de 10.000 euros. La dotación
fiscalmente deducible es de 7.500 euros.
La liquidación del pasivo dará lugar a un pago de 10.000 euros (según estimaciones).
Cualquier cantidad que se pague en el futuro por encima de 10.000 euros constituye
un gasto. Si la base fiscal es inferior al valor en libros del pasivo, en el momento de la
cancelación aparece una diferencia entre la ganancia fiscal y la contable (hay una can-
tidad deducible que no se corresponde con un gasto contable).
Como ésta es también una diferencia temporal, llegamos al mismo resultado con el sistema
del PGC:
Con arreglo al PGC registraríamos también una diferencia temporal positiva de 10 eu-
ros, relacionada con los intereses no deducibles, y dos diferencias permanentes res-
pecto de los otros dos conceptos (sanción y cuota). IAS 12 no trata del concepto “dife-
266 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
rencia permanente”, que afecta sólo a los impuestos corrientes a pagar o recibir.
4. Una entidad tiene inversiones en inmovilizados por valor de 10.000 euros, libremente
amortizables a efectos fiscales por estar afectos a actividades de investigación y des-
arrollo. Su vida útil se ha cifrado en 10 años, y se ha deducido hasta ahora el 50% de
su coste.
Si los activos se valoran sobre la base de su coste depreciado, su valor contable será
mayor que su base fiscal debido a la mayor depreciación contabilizada:
B) Una entidad tiene diferentes activos financieros clasificados como “disponibles para la
venta” y adquiridos por su valor de mercado de 500 euros. En el momento actual, su co-
tización en el mercado es de 650 euros. Los cambios en el valor razonable de estos acti-
vos no tributan hasta la venta del activo. Puesto que el valor en libros excede de la canti-
dad deducible en ejercicios futuros, surge una diferencia temporaria imponible:
C. Se toma una participación del 100% en el capital de otra entidad. Los valores contables se
aceptan como representativos de los de mercado de los diferentes activos y pasivos, con
excepción de un terreno, contabilizado en 10.000 euros y con un valor de mercado de
15.000 euros. La filial y la matriz presentan declaraciones de impuestos independientes.
La base fiscal del terreno coincide con el coste histórico para la dependiente.
El valor del terreno a efectos de consolidación es su valor razonable en la fecha de la ad-
quisición, así que surge una diferencia temporaria imponible:
267 ❚ CAPÍTULO 10
4. Condiciones para el reconocimiento
de los pasivos por impuestos diferidos
Por regla general, se reconoce un pasivo por impuesto diferido siempre que surge una diferencia
temporaria imponible. No obstante, existen ciertos supuestos en los que se prohíbe su contabiliza-
ción (IAS 12, párrafo 15, reformado por IFRS 3); concretamente, cuando surgen por:
a) El reconocimiento inicial del fondo de comercio.
b) El reconocimiento inicial de un activo o un pasivo en una transacción que cumple estas condiciones:
– No es una combinación de negocios.
– No afecta a la ganancia contable o fiscal del periodo.
Existen además reglas específicas que impiden el reconocimiento de los pasivos por impuesto dife-
rido relacionados con inversiones en subsidiarias, filiales y joint ventures, cuando se cumplen estas
dos condiciones (IAS 12, párrafo 39):
a) La matriz o inversora es capaz de controlar el momento de la reversión de la diferencia temporaria.
b) Es probable que la diferencia temporaria no revierta en un futuro previsible.
[EJEMPLO]
Fondo de comercio. La matriz de un grupo paga 1.000 euros en efectivo por la propiedad de
varios restaurantes de comida rápida. El valor razonable neto de los activos y pasivos recibi-
dos es de 400 euros, de modo que se ha registrado un fondo de comercio de 600 euros. La
matriz prepara estados financieros con arreglo a sus principios contables nacionales y pre-
senta un informe consolidado IAS. Los principios contables nacionales exigen la amortiza-
ción lineal del fondo de comercio a lo largo de los 20 años siguientes, como máximo. Dicho
plazo es válido para fines de impuestos. Tasa de impuesto: 35%.
ción como una combinación de negocios cubierta por sus reglas. En el momento inicial, no
existiría ninguna diferencia de criterio entre la valoración IAS/IFRS y la que se obtiene con
GAAP nacionales (sobre los españoles, ver la Resolución del ICAC de 21 de enero de 1992,
Norma Quinta). Tampoco existen diferencias temporarias: dado que el fondo de comercio es
deducible vía amortización, su base fiscal es igual a su valor en libros. Al término del primer
año, en cambio, será preciso efectuar un ajuste de homogeneización para eliminar el gasto
por amortización del fondo de comercio en el informe consolidado del periodo (y en el ba-
lance separado IAS de la matriz):
[EJEMPLO]
Reconocimiento inicial de un activo. Se aprueba una ampliación de capital para recibir una
aportación no dineraria. El precio de emisión de las acciones a entregar (que representan un
6% del capital después de la ampliación) es de 1.000 euros. El activo aportado estaba conta-
bilizado por 750 euros en los libros del nuevo accionista.
La sociedad adquirente hace uso de la opción del artículo 94 del RDL 4/2004.
269 ❚ CAPÍTULO 10
El artículo aludido permite aplicar a las aportaciones no dinerarias el régimen especial de fu-
siones, escisiones y canje de valores previsto en la misma ley. En consecuencia, el activo se
valora a efectos fiscales por el valor que tenía en los libros del transmitente (o, dicho de otro
modo, el valor del activo en los libros del adquirente no es deducible enteramente). Por tanto:
Sin embargo, no se reconoce ningún pasivo por impuestos diferidos (cae de lleno en la pro-
hibición del párrafo 15.b): la diferencia está originada por una operación que no es una
combinación de negocios y no afecta a la ganancia contable ni fiscal del periodo. Tampoco
se reconocen pasivos por impuestos diferidos en ejercicios posteriores, aunque la diferen-
cia cambie por efecto de la depreciación del activo (párrafo 22.c).
[EJEMPLO]
Los párrafos 31 y 32 de IAS 32 (ver también Application Guidance, párrafos 30 a 35) contem-
plan la medición residual del componente de capital. Dado que generalmente es más fácil
medir el valor del componente de pasivo, se procede de la siguiente manera:
1. Se mide el valor del componente de pasivo actualizando el importe de los flujos de efec-
tivo (intereses y principal) por pagar. Se usa la tasa de interés vigente en el mercado para
obligaciones que no tengan convertibilidad.
2. Se obtiene la cuantía del componente de capital restando al valor total del instrumento fi-
nanciero (valor razonable de la contraprestación recibida) el del componente de pasivo
hallado anteriormente.
Claramente, existe una diferencia entre la base fiscal y el importe en libros del pasivo:
[EJEMPLO]
Método de participación o puesta en equivalencia. La entidad suscribió el 1 de enero el 25%
del capital de otra sociedad, obteniendo influencia notable sobre ella, pagando 1.000 euros
(todos los socios aportan efectivo). La participación se contabiliza por su coste en el balance
separado de la inversora (dicho valor coincide con su base fiscal). La asociada ha presen-
tado un resultado de 300 euros. No ha habido distribución de dividendo ni otros cambios en
el patrimonio neto. Tasa de impuesto: 30%.
Por lo general, la entidad asociada no tendrá capacidad para determinar la política de distri-
bución de dividendos: el pasivo por impuesto diferido se reconoce porque no hay control
sobre la reversión de las diferencias (IAS 12, párrafo 42). Los ajustes para obtener el balance
consolidado serán, por tanto:
271 ❚ CAPÍTULO 10
Ganancias retenidas (resultados matriz) 75,00
Si la entidad participada fuese una sociedad multigrupo, sería más probable que el partici-
pante pudiese controlar la reversión de las diferencias; si tal es el caso, y no es probable que
la reversión se produzca en el futuro previsible, no se reconocen los pasivos por impuesto di-
ferido. Los acuerdos en los que se establece el control conjunto especificarán si la decisión
de repartir dividendos ha de ser tomada por unanimidad o por una mayoría cualificada.
fiscales contra las que cargar la reversión de las diferencias deducibles o la compensación de las
pérdidas. Además de esta limitación, basada (como las de la Norma Primera de la Resolución del
ICAC de 9 de octubre de 1997) en el principio de prudencia, existe la prohibición de reconocer los
activos por impuestos diferidos que surgen en el reconocimiento inicial de un activo o de un pasivo
en una transacción que (IAS 12, párrafo 24):
a) No es una combinación de negocios.
b) No afecta a la ganancia contable o fiscal del periodo.
Recordemos que IFRS 3 suprime el método contable de IAS 22 para el fondo de comercio negativo.
Esta última norma contemplaba dos supuestos en los que este importe era traspasado a resultados a
lo largo de varios ejercicios (IAS 22, párrafos 61 y 62):
• Cuando se relacionaba con gastos o pérdidas a soportar en el futuro por el adquirente que no ha-
bían sido contabilizados como una provisión por reestructuración.
• Cuando, faltando esa relación, el fondo de comercio negativo no superaba el valor atribuido a los
activos no monetarios identificables.
272 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Como se vio en el capítulo dedicado a IFRS 3, el valor en libros del fondo de comercio negativo origi-
nado en una combinación de negocios con fecha de acuerdo anterior a 31 de marzo de 2004 se eli-
mina contra reservas a la apertura del primer ejercicio anual posterior a esa fecha (IFRS 3, párrafo 81).
[EJEMPLO]
Fondo de comercio negativo. Supongamos ahora que la entidad que compró la cadena de
restaurantes de comida rápida en un ejemplo anterior pagó 300 euros al anterior propieta-
rio de dicho negocio el 1 de enero de 2004. Aplicando sus principios contables nacionales,
la matriz contabilizó dicho importe con abono a una provisión para riesgos y gastos, por
considerar que estaba asociado con una regulación de plantilla planeada por la adquirente.
Dicho tratamiento es aceptado para fines de impuestos. Se han pagado indemnizaciones
por valor de 40 euros en 2004, y de 35 euros en 2005. Tasa de impuesto: 30%.
Valor en libros 0
Base fiscal 60
Diferencia temporaria deducible 60
Debido a los pagos de indemnizaciones registrados durante el año, la base fiscal del pasivo
se reducirá hasta 25 euros (60-35) en la fecha del cierre. Se reconoce un activo por impuesto
diferido por valor de 7,5 (25 x 30%) con abono a patrimonio neto, al igual que la transacción
que lo ha originado (eliminación del fondo de comercio negativo contra reservas de aper-
tura). Los ajustes a realizar para la obtención del consolidado IAS son:
273 ❚ CAPÍTULO 10
Concepto Debe Haber
Ganancias retenidas (resultados matriz) 35,00
Fondo de comercio negativo 35,00
(Balance [transición a IFRS 3]: eliminación del fondo de comercio inicial contra reservas)
[EJEMPLO]
Con arreglo al párrafo 24 de IAS 20, es posible contabilizar las subvenciones relacionadas
con activos:
a) Como partidas de ingresos diferidos.
b) Como deducciones del valor de los activos subvencionados.
Si se opta por la primera alternativa, aparecerá una diferencia entre el importe en libros de
la partida de ingresos diferidos y su base fiscal:
Cuando se opta por la segunda alternativa, aparece una diferencia entre el valor en libros y
la base fiscal del activo relacionado con la subvención:
Importe en libros 50
Base fiscal (150)
Diferencia temporaria deducible 100
La base fiscal de los ingresos que se reciben por anticipado (IAS 12, párrafo 8) es igual a la di-
ferencia entre el importe en libros del pasivo y las cantidades que no resultan imponibles en
periodos posteriores: parece lógico aplicar el mismo tratamiento a los ingresos diferidos re-
lacionados con la subvención oficial. La diferencia temporaria deducible está relacionada con
el reconocimiento inicial de un activo en una transacción que no es una combinación de ne-
gocios y que no afecta a la ganancia contable y/o fiscal. No se contabilizan activos por im-
puestos diferidos, ni en el momento del reconocimiento inicial ni en ninguna fecha posterior.
El IASB ha decidido que IAS 20 sea derogado y su modelo contable sustituido por otro con-
sistente con el establecido en IAS 41.
La activación de los activos por impuestos diferidos y créditos por pérdidas a compensar está condi-
cionada en IAS 12 a la no existencia de dudas razonables sobre su recuperación posterior. Esta
norma no contiene, no obstante, ningún plazo de reversión arbitrario como el de 10 años de la Reso-
lución de ICAC de 9 de octubre de 1997.
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 275
Se considera que no existen dudas sobre la recuperación futura de los activos por impuesto diferido
cuando se dispone de diferencias temporarias imponibles, relacionadas con la misma entidad y au-
toridad fiscal, y que revierten (IAS 12, párrafos 29 a 31, y 34 a 36):
• En el mismo periodo que las deducibles.
• En un periodo posterior en el que está autorizada la compensación de las pérdidas fiscales origina-
das por la reversión de la diferencia deducible.
Como se ve, se trata de una norma más amplia que la española, y no sólo por la falta de un techo
temporal.
[EJEMPLO]
Sea un edificio para usos administrativos con un costo de 1.000. Se deprecia contablemente
en veinte años. Las normas fiscales permiten una deducción máxima equivalente al 3%
anual del costo.
Al cierre del primer periodo contable anual se produce una diferencia temporaria que es
también una diferencia temporal:
275 ❚ CAPÍTULO 10
porales asociadas se prevé que comience en el año 21 (salvo venta anticipada del activo).
IAS 12 considera que se debe reconocer el activo fiscal si es probable la obtención de sufi-
cientes ganancias fiscales, sin precisar un plazo específico.
[EJEMPLO]
Una sociedad española tiene acumuladas diferencias temporarias deducibles por valor de
15.000 euros. Se estima que su reversión tendrá lugar así:
• En n + 11: 10.000.
• En n + 12: 5.000.
Al propio tiempo, se dispone de diferencias temporarias imponibles por valor de 20.000 eu-
ros, cuya reversión se prevé del modo siguiente:
• En n + 12, 2.000.
• En n + 13, 6.000.
• En n + 14, 12.000.
A diferencia de las normas españolas, IAS 12 exige el reconocimiento de todo el activo por
impuesto diferido (la reversión de las diferencias temporarias imponibles tiene lugar dentro
del plazo legal para compensación de pérdidas: 15 años, según el artículo 25.1 del RDL
4/2004).
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 276
A falta de diferencias imponibles contra las que cargar la reversión de las deducibles, la activación
estará condicionada a que se cumplan alguna de estas condiciones:
a) Es probable la obtención de ganancias fiscales suficientes, referidas a la misma autoridad o sujeto
fiscal.
b) La empresa puede generar ganancias fiscales haciendo uso de la planificación fiscal.
c) En el caso de los créditos por pérdidas a compensar, dichas pérdidas han sido originadas por
causas identificables, que es improbable que se repitan.
En todo caso, es necesaria una reconsideración anual de los activos por impuesto diferido y de los
créditos por pérdidas compensables, reconocidos o no (IAS 12, párrafo 37). Existen reglas especia-
les para los adquiridos en una combinación de negocios que cumplen las condiciones de reconoci-
miento en una fecha posterior a la misma (IAS 12, párrafos 67 y 68).
g) Los activos o pasivos por impuesto diferido en moneda extranjera son partidas monetarias que de-
ben ser presentadas en balance por el valor que resulta de aplicar el cambio de cierre (las dife-
rencias de cambio se tratan como ajustes al gasto o ingreso por impuesto sobre beneficios: IAS
12, párrafo 78).
Tipos prácticamente aprobados. En la fecha del cierre del ejercicio, se halla prácticamente
[EJEMPLO]
aprobado el Proyecto de Ley de Presupuestos para el año n+1. En él se prevé una reducción
del tipo de gravamen del impuesto sobre sociedades desde el 35% hasta el 30%, para la ge-
neralidad de los sujetos pasivos.
Los activos y pasivos por impuestos diferidos se valoran aplicando la tasa del 30%.
[EJEMPLO]
se aprobase en marzo del ejercicio siguiente como parte de un paquete de medidas fiscales
urgentes, poco antes de que se autorizase la publicación de los estados financieros. No
existía ningún anuncio oficial de este tipo en la fecha del balance.
IAS 12 obligaría a aplicar la tasa del 35% para la medición de los activos y pasivos por im-
puestos diferidos. El suceso se considera como un acontecimiento posterior que no implica
ajuste, pero puede ser necesario revelar información sobre este hecho y sobre sus previsi-
bles efectos financieros (IAS 10, párrafos 2 b y 9; IAS 12, párrafo 88). Nótese que los princi-
pios contables españoles exigirían la aplicación de la nueva tasa para la valoración de dichos
créditos y débitos impositivos (Resolución del ICAC de 9 de octubre de 1997, Norma Octava).
277 ❚ CAPÍTULO 10
Forma esperada de recuperación de un activo. Una firma española posee varios activos in-
[EJEMPLO]
mobiliarios para su explotación mediante arrendamiento operativo. Su costo inicial fue de
10.000 euros. Su valor razonable en la fecha del cierre es de 12.000 euros. La compañía
mide estos activos sobre la base del coste, habiendo practicado hasta la fecha unas dotacio-
nes deducibles de 3.000 euros: ver IAS 40, párrafos 27, 28, 51 b y 54.
En caso de venta, la corrección monetaria a practicar con arreglo a la legislación fiscal apli-
cable sería de 500 euros. No hay ajuste por inflación en caso de recuperación del activo vía
depreciación, ni tampoco si la venta origina pérdidas para la entidad. La tasa de gravamen
aplicable es del 35%.
Si la entidad proyectase la venta del activo, los activos o pasivos por impuestos diferidos
deberían reflejar las consecuencias fiscales derivadas de dicha venta, de manera que, en la
fecha del cierre, se daría la siguiente situación:
[EJEMPLO]
Forma esperada de recuperación de un activo. Supóngase ahora que la entidad del apartado
anterior aplicase la base del valor razonable para la valoración de este activo (se valora a su
costo depreciado para propósitos fiscales): ver IAS 40, párrafos 27, 28, 51 b y 54. La deduci-
bilidad de los gastos por amortización está condicionada a su previa inscripción contable.
Puesto que el activo es una propiedad de inversión que se valora a valor razonable, no es
posible recuperar la inversión mediante su explotación (deduciendo de los ingresos una
fracción del coste histórico igual a la depreciación contabilizada). Por tanto, los activos o pa-
sivos por impuestos diferidos tomarán en cuenta las consecuencias fiscales que se deriva-
rán de la venta del activo (SIC 21, párrafo 5).
El impuesto diferido se contabiliza con cargo a los resultados del período, al igual que la re-
278 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Pagos de dividendo. Una sociedad ha obtenido una ganancia contable (antes de impuestos:
IAS 12, párrafo 5) de 10.000 euros. En las notas a los estados financieros (IAS 1, párrafo 74;
IAS 10, párrafos 11 y 12) se revela que se propondrá a los propietarios la distribución de un
dividendo total de 2.000 euros. Los accionistas aceptaron la propuesta de distribución en ju-
nio de 2003.
La legislación del país del domicilio establece una tasa de gravamen del 35% para las ga-
nancias retenidas, y del 25% para las distribuidas (la distribución del dividendo da derecho
a una deducción en la declaración del periodo en que se efectúa). La sociedad había efec-
tuado pagos a cuenta por valor de 1.200 euros. Se reconocen diferencias temporarias impo-
nibles por valor de 1.000 euros (no hay restricción para el reconocimiento de los pasivos por
impuestos diferidos).
279 ❚ CAPÍTULO 10
Contabilidad Aplicables a las Fusiones y Escisiones de Sociedades, párrafo 28 y apartado 18 de la
Introducción; Consulta 2 BOICAC 34 y Consulta 1 BOICAC 47).
b) Los que surgen como consecuencia de una aportación no dineraria (Consulta 3 BOICAC 41).
Otro de los principios básicos de IAS 12 se encuentra en su párrafo 57: los activos y pasivos fiscales
(relacionados con impuestos del ejercicio o diferidos) se contabilizan de forma coherente con la
transacción o suceso que los origina. De este modo:
a) Los impuestos se contabilizan, por regla general, contra resultados.
b) Se cargan o abonan a patrimonio neto cuando se relacionan con partidas que se han llevado a
patrimonio neto, en el mismo periodo o en uno anterior.
c) Dan lugar a ajustes en el valor del fondo de comercio cuando surgen en una combinación de ne-
gocios que se contabiliza como compra (recordemos que IFRS 3 suprime el método de unión de
intereses).
Otras reglas novedosas (incluso sorprendentes) son las que se refieren a la presentación de los acti-
vos y pasivos fiscales. Estas reglas pueden sintetizarse así:
1. Los activos y pasivos fiscales han de mostrarse separados de los demás activos y pasivos; a su
vez, los activos y pasivos por impuesto diferido se separan de los relacionados con impuestos del
ejercicio (IAS 12, párrafo 69).
2. Los activos y pasivos por impuesto diferido no pueden mostrarse como activos o pasivos circulan-
tes (IAS 12, párrafo 70).
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 280
3. Los activos y pasivos por impuestos corrientes se presentan compensados cuando la entidad (IAS
12, párrafo 71):
• Tiene reconocido el derecho a efectuar dicha compensación frente a la autoridad fiscal.
• Tiene la intención de liquidar las deudas netas que resultan, o proyecta realizar los activos y li-
quidar los pasivos de modo simultáneo.
4. Los activos y pasivos por impuesto diferido se presentan compensados si:
• La entidad tiene un derecho legal a efectuar dicha compensación frente a la autoridad fiscal.
• Los activos y los pasivos corresponden a la misma autoridad fiscal, y recaen sobre:
– La misma entidad o sujeto fiscal.
– Un grupo de ellos que pretende liquidar los activos y pasivos corrientes por su importe neto,
o bien realizar los activos y liquidar los pasivos simultáneamente en los periodos posteriores
en los que se produzcan reversiones significativas (IAS 12, párrafo 74).
En el capítulo dedicado a IFRS 3 se expusieron ya algunos ejemplos ilustrativos del método contable
280 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
establecido en IAS 12 para los impuestos diferidos que se originan en combinaciones de negocios.
Los ejemplos que siguen están, en consecuencia, algo más orientados a las diferencias temporarias
relacionadas con transacciones llevadas a patrimonio neto (las que se llevan a resultados son dife-
rencias temporales que no exigen de explicación adicional, por conocidas).
[EJEMPLO]
Las ganancias o pérdidas por cambios en valor razonable de instrumentos financieros dis-
ponibles para venta se imputan a patrimonio neto (IAS 39, párrafo 55 b). El pasivo por im-
puesto diferido se contabiliza también contra patrimonio neto:
En el caso b) no surgen activos ni pasivos por impuesto diferido. El impuesto corriente a pa-
gar (o el menor impuesto corriente a recibir) relacionado con el incremento del valor del ac-
tivo financiero se contabiliza también con cargo a patrimonio neto.
[EJEMPLO]
Revaluaciones de activos. A 31 de diciembre del año n, hace tres años que se posee un in-
movilizado material amortizable en nueve. El coste inicial fue de 30.000 euros, y se consi-
deró un valor residual de 3.000 euros. Hasta ahora se ha medido sobre la base de su coste
depreciado (coincidente con su base fiscal). La entidad decide aplicar el modelo de valor re-
valuado del párrafo 31 de IAS 16. Una tasación independiente establece que el valor de mer-
cado del activo es en la actualidad de 24.000 euros (para simplificar, supondremos invaria-
bles las estimaciones relacionadas con el valor residual. Tipo de gravamen: 30%.
La revaluación, que no tiene efecto fiscal, da lugar a una diferencia temporaria imponible y
a un pasivo por impuesto diferido:
281 ❚ CAPÍTULO 10
Los asientos a realizar para recoger el efecto de la revalorización contable son (la amortiza-
ción acumulada se elimina por completo: IAS 16, párrafo 35.b):
[EJEMPLO]
Aplicando el párrafo 41 de IAS 16, en el ejercicio siguiente se traspasa a reservas (sin pasar
por el estado de resultados) la diferencia entre la depreciación contabilizada sobre la base
del valor revaluado y la que se habría practicado si se hubiera mantenido la base del coste
histórico. Dicho traspaso se efectúa neto del efecto impositivo diferido (IAS 12, párrafo 64).
Teniendo en cuenta que la amortización deducible es la que se venía practicando sobre la
base de costes históricos, el impuesto del ejercicio a pagar sería:
plo anterior el hecho de que, a 31 de diciembre del año n, esté prácticamente aprobada una
reducción de la tasa de impuesto, que pasa a ser del 25% desde el 1 de enero del año n + 2.
El cambio no afecta al pasivo por impuesto corriente, pero sí al pasivo por impuesto dife-
rido pendiente de reversión. El cambio en su valor se imputa también a patrimonio neto
(IAS 12, párrafo 60):
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 283
[EJEMPLO]
Revaluaciones fiscales y contables. Alternativamente a lo anterior, supongamos que las au-
toridades fiscales aprueban una actualización de activos el 1 de enero de n + 2, sin reflejo
contable (en el estado de cosas actual, podría tener reflejo contable en el balance individual
preparado según PGC, requiriéndose entonces un ajuste de homogeneización para el con-
solidado IAS). La base fiscal del activo se eleva hasta 6.000 euros.
El cambio en el valor del pasivo por impuesto diferido se imputa al patrimonio neto ya que
tiene relación con una revaluación contable previa (IAS 12, párrafo 65).
283 ❚ CAPÍTULO 10
Concepto Debe Haber
Pasivo por impuestos diferidos 300
Superávit de revaluación 300
[EJEMPLO]
Revaluaciones fiscales y contables. Supóngase ahora que la actualización fiscal afectase a
un activo de propiedades, planta y equipo que se valora sobre la base del costo (la actuali-
zación fiscal no tiene reflejo en la contabilidad). La gerencia no tiene previsto aplicar el mé-
todo del valor razonable a este activo. El costo inicial del activo fue de 10.000 euros. Se
compró hace cinco años, y se ha venido depreciando uniformemente sobre la base de una
vida útil de diez.
Como la revaluación fiscal no está relacionada con otra contable, ni pasada ni futura, el efecto
del ajuste de la base fiscal del activo se imputa a los resultados del periodo (IAS 12, párrafo 65).
Es posible que la actualización fiscal haya de ser reflejada en el balance individual de la en-
tidad propietaria del activo. Si las entidades individuales del grupo preparan estados finan-
cieros según principios contables nacionales, la revaluación contabilizada se elimina para
preparar el consolidado IAS (se supone que la revaluación es posterior a la adopción de
IAS/IFRS por el grupo).
[EJEMPLO]
Combinaciones de negocios. Sea una sociedad que presenta el siguiente patrimonio neto:
284 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Esta sociedad será absorbida por otra, también española, que se compromete a emitir capi-
tal por 25.000 euros para compensar a los propietarios de la adquirida. El valor razonable de
los activos inmobiliarios de la adquirida se cifra en 35.000 euros, siendo 30.000 euros su
coste histórico. El valor razonable de los demás activos y pasivos de la adquirida se estima
coincidente con su valor en libros. La fusión se contabiliza usando el método de la compra.
La tasa de impuesto es del 30%. Los elementos adquiridos conservarán (a efectos fiscales)
los valores contables que tenían antes de la transmisión (el valor en libros de los activos no
es enteramente deducible en ejercicios posteriores).
Se reconoce un pasivo por impuestos diferidos (regla general del párrafo 15) contra el
fondo de comercio, que sería, por tanto:
[EJEMPLO]
Combinaciones de negocios. Supóngase que, a efectos de la operación anterior, los pasivos
por impuesto diferido se han valorado por su valor descontado de 1.200 euros.
Los pasivos por impuesto diferido aparecerían por 1.500 euros en el balance IAS. La dife-
rente valoración de estos pasivos a efectos de la operación repercute en el importe recono-
cido como fondo de comercio (IFRS 3, párrafo 57.b; Apéndice B, párrafo 16.i). En la Consulta
1 BOICAC 47 la diferencia se lleva contra la prima de emisión.
Un problema particular relacionado con las combinaciones de negocios, cualquiera que sea su
forma legal, es el del reconocimiento de activos por impuesto diferido o créditos por pérdidas a com-
pensar. Los problemas principales en esta área son:
a) Si, al evaluar si los activos fiscales de la adquirida cumplen las condiciones de reconocimiento,
deben tomarse en cuenta o no los efectos de la combinación.
b) Qué hacer si un activo fiscal de la adquirida sólo cumple las condiciones de reconocimiento en
una fecha posterior a la de combinación.
c) Si la adquirida puede aflorar activos fiscales no reconocidos cuando se considera probable su re-
cuperación como consecuencia de la combinación, y cómo deben tratarse dicho afloramiento en
su caso.
Como en otras áreas relacionadas, IFRS 3 modifica el anterior material de los IAS 12 y 22 sobre el
tema. Hasta ahora, estas normas establecían que en las combinaciones de negocios que se contabi-
285 ❚ CAPÍTULO 10
lizaban según el método de la compra:
1. Los activos y pasivos por impuestos se valoran desde la perspectiva de la entidad combinada o
grupo resultante de la combinación (IAS 22, párrafo 39.i).
2. Cuando un activo por impuesto diferido que no cumple las condiciones de reconocimiento en la
fecha de la combinación se realiza sin embargo con posterioridad, la empresa adquirente pro-
cede así:
• Reconoce el activo fiscal, con abono a ingresos.
• Ajusta el valor en libros original del fondo de comercio, y su amortización acumulada, hasta los va-
lores que habría registrado si el activo fiscal hubiera sido reconocido en la fecha de la combinación.
• Contabiliza como un gasto la reducción del importe en libros del fondo de comercio.
del goodwill (el nuevo párrafo 68 de IAS 12 mantiene la limitación relacionada con el fondo de co-
mercio negativo).
• Se elimina el tratamiento de IAS 22 para los activos fiscales no reconocidos previamente por la ad-
quirente: su reconocimiento no da lugar a un cambio en el valor del fondo de comercio (IAS 12,
párrafo 67, reformado por IFRS 3).
[EJEMPLO]
El precio pagado por la participación fue de 11.000 euros. La amortización del fondo de co-
mercio no es deducible para fines de impuestos, ni lo son las eventuales pérdidas por dete-
rioro de valor este activo. Tampoco se admite la deducibilidad fiscal de su coste en caso de
venta de la empresa comprada (no se pretende ilustrar el tratamiento que da la legislación
española al fondo de comercio adquirido a título oneroso).
Se pide determinar el valor de los activos y pasivos por impuesto diferido, y el fondo de co-
mercio que se pone de manifiesto en la combinación según el párrafo 32 de IAS 22 y según
IFRS 3.
Como ya se indicó antes, IAS 12 no permite la contabilización del pasivo por impuesto dife-
rido originado por el fondo de comercio no deducible. La siguiente tabla muestra el valor
atribuido a los activos y pasivos identificables:
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 287
Diferencias Impuestos
Valor para Base temporarias diferidos
consolidar fiscal
Imponibles Deducibles Activo Pasivo
El fondo de comercio que se pone de manifiesto es igual a la diferencia entre el precio pa-
gado y la participación de la adquirente en el valor razonable de los activos y pasivos identi-
ficables (el 100% del valor para consolidar del impuesto diferido y el 80% de las restantes):
287 ❚ CAPÍTULO 10
Fondo de comercio 240
Según IFRS 3, los activos, pasivos y pasivos contingentes de la adquirida que cumplan las
condiciones de reconocimiento en la fecha de la combinación se valoran a su valor razona-
ble de esa fecha (como en el
anterior párrafo 34 de IAS 22; Diferencias Impuestos
IFRS 3, párrafo 36). Por tanto, Valor para Base temporarias diferidos
los valores asignados son: consolidar fiscal
Imponibles Deducibles Activo Pasivo
Reconocimiento posterior de activos fiscales. Supóngase ahora que, dos años más tarde, se
decidiese el reconocimiento de un activo por impuestos diferidos relacionado con pérdidas
fiscales compensables de la adquirida por valor de 600 euros. Dichas pérdidas fiscales se
originaron con anterioridad a la adquisición. En la fecha del reconocimiento, la tasa de im-
puesto es del 35%.
El activo por impuesto diferido se mide usando las tasas aprobadas o a punto de aprobarse
288 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Con arreglo a IAS 22 (y la versión anterior de IAS 12), el activo fiscal de la adquirente se in-
cluye entre los activos adquiridos en la combinación, reduciéndose el valor del fondo de co-
mercio de consolidación hasta 60 euros (240 – 600 x 30%). Bajo IFRS 3, el activo fiscal se re-
conoce, pero no como un activo adquirido en la combinación (IAS 12, párrafo 67). Se aplica-
rían las reglas de contabilización generales, así que, por lo general, se registraría contra
resultados, y se mantendría el valor atribuido al fondo de comercio.
FASCiCULO 10 22/9/04 17:19 Página 289
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 289
C A P Í T
11
U L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Normas aplicables y alcance 291
7. 3. Definiciones 303
7. 4. Planes de aportaciones definidas 305
7. 5. Planes de prestaciones definidas 305
7. 6. Valor actuarial presente de las prestaciones garantizadas
por retiro 307
7. 7. Frecuencia de las evaluaciones actuariales 307
7. 7. 1. Valoración de los activos del plan 308
C A P Í T
11
U L O
Esta norma es aplicable para todas las empresas al contabilizar las retribuciones complementarias
291 ❚ CAPÍTULO 11
de sus empleados y se refiere a todo tipo de prestaciones entregadas por una entidad a cambio de
los servicios prestados por empleados, con excepción de las reguladas en el nuevo IFRS 2, Share-
based Payment. Ello incluye las que se derivan de:
a) Planes u otro tipo de acuerdos formales entre una empresa y sus empleados o sus representantes.
b) Exigencias legales o acuerdos sectoriales, en virtud de los cuales las empresas están obligadas a
realizar aportaciones a planes nacionales, estatales, sectoriales o multiempresariales.
c) Prácticas no formalizadas que den lugar a obligaciones asumidas por la propia empresa de forma
efectiva cuando la empresa no tenga otra alternativa que hacer frente a los pagos derivados de las
prestaciones comprometidas.
Entre las prestaciones a los empleados se incluyen tanto las proporcionadas a los propios trabajado-
res como a las personas relacionadas con ellos, y que pueden ser satisfechas mediante pagos (o su-
ministrando bienes y servicios previamente comprometidos) directamente a los empleados o a sus
cónyuges, hijos u otras personas relacionadas con aquéllos, o bien a terceros designados previa-
mente, como compañías de seguros.
a) Un pasivo (por el gasto devengado), una vez deducida cualquier cantidad ya satisfecha. Si el im-
porte pagado es superior al importe, sin descontar, de las prestaciones, el exceso debería recono-
cerse como un activo (gasto anticipado) en la medida en que el pago anticipado vaya a dar lugar,
por ejemplo, a una reducción en los pagos futuros o a un reembolso en efectivo.
b) Un gasto, salvo que otro IAS/IFRS exija o permita incluir el importe de las prestaciones en el coste
de un activo.
Como se dijo, los beneficios a corto plazo incluyen el coste de las ausencias remuneradas. Cuando el
derecho a su disfrute no es acumulativo (como ocurre, por ejemplo, con los permisos retribuidos por
enfermedad de un familiar o por traslado, o con las prestaciones por incapacidad temporal que son a
cargo del empleador), el gasto se reconoce cuando el trabajador ejerce su derecho. Cuando éste es
acumulativo (es posible disfrutar en un periodo los permisos no utilizados en el precedente), la enti-
dad contabiliza un pasivo, el importe que la entidad espera pagar por los derechos acumulados al
cierre (IAS 19, párrafo 14), tomando en cuenta la experiencia pasada sobre derecho a días de per-
miso que se dejan decaer y, eventualmente, su revocabilidad (los trabajadores que abandonan la en-
tidad no perciben compensación alguna por los derechos no utilizados).
[EJEMPLO]
Ausencias remuneradas. La entidad tiene 400 trabajadores en plantilla. Cada uno de ellos
tiene derecho a 10 días de permiso retribuido cada año. Los permisos no disfrutados en el
periodo en que se generan pueden ejercerse en el siguiente. El promedio de días no disfru-
tados por empleado en la fecha de cierre es de tres. El empleador impone una restricción
LIFO en orden al disfrute de los permisos (esto es, se consumen primero los días de per-
miso del año corriente, y los del año anterior una vez agotados éstos). Según la experiencia
pasada, un 75% de los trabajadores no disfruta más de ocho días anuales de permiso. El
otro 25% disfrutará dos días extra.
una obligación presente (legal o implícita) cuando la entidad no tiene una alternativa más realista
que el pago; una entidad que acostumbra a liquidar un bonus sin estar obligada a ello por ley o con-
trato tiene una obligación implícita que ha de ser reconocida si se puede estimar con fiabilidad su
importe (IAS 19, párrafo 19). La medición fiable sólo es posible si:
a) Las cláusulas del plan establecen una fórmula para su cálculo.
b) La entidad determina el importe a pagar antes de que se autorice la publicación de los estados fi-
nancieros.
c) La práctica pasada proporciona una evidencia clara del importe de la obligación implícita.
Es posible que el pago del bonus esté condicionado a que el empleado permanezca en la entidad
durante un plazo. En ese caso, la valoración del pasivo ha de tomar en cuenta la probabilidad de que
un cierto número de beneficiarios abandone la empresa antes de consolidar sus derechos. No obs-
tante, cuando su pago no deba efectuarse dentro de los 12 meses siguientes, estas formas de remu-
neración se consideran “otros beneficios a empleados a largo plazo”.
3. Beneficios posempleo
3. 1. Planes de pensiones de aportación definida
Los planes de este tipo se caracterizan porque (IAS 19, párrafo 25):
a) La obligación de la entidad se limita al importe que se pacta aportar (la prestación a recibir
293 ❚ CAPÍTULO 11
por el empleado es igual a las aportaciones efectuadas por el empleador y por él mismo,
más los rendimientos que han producido).
b) El empleador soporta el riesgo actuarial y el riesgo de inversión.
Cuando un empleado haya prestado sus servicios durante un ejercicio, la empresa debería
reconocer la aportación a realizar al plan de aportación definida por los servicios prestados
como (IAS 19, párrafo 44):
a) Un pasivo (gasto devengado), una vez deducida cualquier aportación satisfecha ya. Si el
importe satisfecho fuese superior a la aportación que se debe realizar por los servicios
prestados hasta el cierre del ejercicio, el exceso debería reconocerse como un activo
(gasto anticipado) en la medida en que el pago anticipado vaya a dar lugar, por ejemplo, a
una reducción en los pagos futuros o a un reembolso efectivo.
b) Un gasto, salvo que otro IAS/IFRS exija o permita incluir el importe de la aportación en el
coste de un activo.
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 294
años después de que los empleados hayan prestado los correspondientes servicios (se des-
cuentan incluso si una parte de los pagos tiene vencimiento en los 12 meses siguientes: IAS
19, párrafo 66).
La contabilidad de estos planes implica los siguientes pasos (IAS 19, párrafo 50):
a) Estimar con suficiente fiabilidad el importe de las prestaciones devengadas por los servi-
cios prestados por los empleados durante el ejercicio actual y los anteriores, para lo cual
deberán utilizarse técnicas actuariales (se recomienda, pero no se exige, que se empleen
los servicios de un actuario para la valoración de estas obligaciones: IAS 19, párrafo 57).
Esto requiere que la empresa:
• Determine el importe de las prestaciones atribuibles al ejercicio actual y a los anteriores.
• Realice estimaciones (hipótesis actuariales) sobre las variables demográficas (por ejem-
plo, rotación de los empleados y mortalidad) y las variables financieras (como incremen-
tos salariales esperados, tasas de descuento, costes médicos futuros y rendimiento de
los activos del plan) que influirán en el coste de la prestación (IAS 19, párrafo 73).
b) Descontar las prestaciones de acuerdo con el método de la unidad de crédito proyectada
(Projected Unit Credit Method) para determinar:
• El valor actual de la obligación, es decir, el valor actual, sin deducir los activos del plan,
de los pagos futuros que serán necesarios para liquidar la obligación derivada de los
servicios prestados por los trabajadores en el ejercicio actual y en los anteriores.
• El coste por los servicios del ejercicio actual, es decir, el incremento en el valor actual de
la obligación que sea consecuencia de los servicios prestados por los trabajadores en el
ejercicio actual.
c) Determinar el valor razonable de los activos del plan. Si éstos consisten en una póliza de
seguro calificada (ver IAS 19, párrafo 7) que coinciden en tiempo e importe con todos o al-
gunos de los beneficios a pagar, se estimará que su valor razonable es igual al valor pre-
sente de los pasivos relacionados (IAS 19, párrafo 104).
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 295
d) Determinar el importe total de las ganancias y pérdidas actuariales (que se producen por
cambios en las hipótesis actuariales y por diferencias entre la experiencia real y las supo-
siciones del actuario) y el importe de aquellas ganancias o pérdidas actuariales que debe-
rían reconocerse en la cuenta de pérdidas y ganancias. IAS 19 adopta el mismo 10 per
cent corridor de SFAS 87, permitiendo no obstante el uso continuado de cualquier método
sistemático que produzca una imputación más rápida, sin excluir el reconocimiento inme-
diato (IAS 19, párrafo 95).
e) Cuando el plan sea nuevo o se hayan modificado las características de un plan existente,
determinar el coste por servicios pasados resultante, es decir, el incremento en el valor ac-
tual de la obligación derivada de los servicios prestados en ejercicios anteriores y que
surge en el ejercicio actual por la introducción de nuevas prestaciones o cambios en las
prestaciones existentes.
f) Determinar la ganancia o pérdida derivada de recortes o liquidaciones en los planes.
Estos procedimientos deben aplicarse separadamente para cada uno de los planes significa-
tivos que tenga una empresa. El valor reconocido como un pasivo en el balance de cierre es,
por tanto (IAS 19, párrafo 54):
295 ❚ CAPÍTULO 11
Valor del pasivo reconocido
Si la anterior suma algebraica es menor que cero, la entidad reconocerá un activo igual al
menor entre (IAS 19, párrafo 57):
a) El importe negativo así hallado.
b) El resultado de sumar:
• El importe de las pérdidas actuariales y costes de servicios pasados (incrementos en el
valor presente de una obligación de beneficios definidos correspondientes a servicios de
periodos anteriores, resultantes de la introducción o modificación de beneficios posem-
pleo o a largo plazo) no reconocidos.
• El valor presente de los beneficios económicos disponibles en forma de reembolsos o fu-
turas contribuciones al plan.
[EJEMPLO]
Valor negativo del pasivo por pensiones en un plan de beneficios definidos. Se cuenta con la
siguiente información en la fecha del cierre en relación con el plan de beneficios posempleo.
• Valor bruto de la obligación de beneficios a empleados: 500.
• Valor razonable de los activos del plan: 700.
• Pérdidas actuariales no reconocidas: 50.
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 296
El importe determinado con arreglo al párrafo 54 es menor que cero (500 – 700 – 50 – 20 = -
270). El valor asignado al activo es el menor entre aquél y el techo cuantitativo del párrafo
58, que es el que prevalece en este caso:
Salvo que otro IAS/IFRS permita su integración en el coste de un activo, se contabilizan como
ingresos o gastos (IAS 19, párrafo 61):
a) El coste de los servicios prestados en el periodo actual.
b) El coste por intereses.
c) El retorno esperado de los activos del plan y de los derechos de reembolso.
296 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Planes de beneficios definidos. Asignación del coste por servicios. La entidad ha compro-
metido el pago de un capital igual al 2% del salario anual por año de servicio a uno de sus
empleados en la fecha de su retiro, que se espera tenga lugar dentro de 10 años. El salario
actual es de 10.000 euros y se espera un crecimiento anual del 4%. El rendimiento a venci-
miento de los bonos de la compañía (de alta calidad y cotizados en un mercado profundo:
IAS 19, párrafo 78) es del 6%.
Con arreglo al método de la unidad de crédito proyectada, se considera que cada año el be-
neficiario genera el derecho a recibir, en la fecha del retiro, una cantidad igual al 2% de una
anualidad de salario (IAS 19, párrafo 64). Cada unidad se mide por separado (IAS 19, párrafo
65). Por tanto, al cierre del año 1, se reconoce un gasto (y un pasivo) igual al valor presente
de tal importe.
Si las hipótesis actuariales se mantuviesen sin cambios, la cantidad asignada como costes
por servicios al año 2 sería:
Asignación del coste por servicios. Se ha reconocido el derecho a recibir un pago de 500 eu-
ros anuales por cada año trabajado hasta el retiro, que se prevé tendrá lugar a los 65 años, a
un trabajador que tiene ahora 45. Se considera una esperanza de vida de 10 años desde el
retiro. La tasa de descuento del bono del Estado (que se usa a falta de un mercado profundo
para bonos corporativos: IAS 19, párrafo 78) es del 6%.
Al cierre del año 1, el empleado ha generado el derecho a recibir una anualidad de 500 eu-
ros hasta su fallecimiento, desde el momento de su jubilación dentro de 20 años. El gasto
por servicios asignado a ese periodo (coincidente con el valor del pasivo) es:
1 – (1 + 0,06)–10
500 • • (1 + 0,06)–20 1.147,45
0,06
Igualmente, los servicios prestados durante el año 2 dan derecho a recibir una anualidad vi-
talicia de otros 500 euros a partir del retiro, así que el coste por servicios del periodo será:
1 – (1 + 0,06)–10
500 • • (1 + 0,06)–19 1.216,30
0,06
297 ❚ CAPÍTULO 11
diciones establecidas para la irrevocabilidad de sus derechos (IAS 19, párrafo 69).
Los trabajadores menores de 45 años no han comenzado a acumular derechos sobre este
beneficio, así que no se reconoce coste alguno en relación con ellos, por el momento. A par-
tir de los 45 años (primer año en que los empleados devengan derechos sobre los benefi-
cios del plan), el empleado acumula, cada año, un derecho a recibir 300 euros (4.500/15) en
la fecha del retiro (a los 65 años), así que reconoce como gasto el valor descontado de ese
importe. El reconocimiento de costes por servicios concluye cuando el empleado cumple 60
años, porque los servicios prestados en adelante por el empleado no le confieren derecho a
recibir importes adicionales (IAS 19, párrafo 67). Si los derechos no son irrevocables, la valo-
ración del pasivo y del coste toma en cuenta la probabilidad de que las condiciones de con-
solidación no se cumplan.
Imputación temporal del coste de los servicios. Diez años de servicio en la empresa dan de-
recho (irrevocable) a la percepción de un capital único de 2.000 euros en la fecha de jubila-
ción (65 años). Este capital se incrementa hasta 5.000 euros para los trabajadores con 20
años de servicio o más.
Los trabajadores que ingresan en la empresa con más de 55 años no causan derecho al-
guno. Los que ingresan con más de 45 y menos de 55 generan cada año un crédito de 200
euros (2.000/10) cancelable en la fecha de jubilación, así que se reconoce un coste por servi-
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 298
cios igual al valor descontado de esa cantidad. Los demás, con independencia de la edad de
ingreso, generan un derecho anual de 250 euros (5.000/20). En este caso, la prestación de
servicios durante un periodo adicional de 10 años da derecho a recibir un importe sustan-
cialmente mayor: la imputación se realiza linealmente hasta la fecha en que los servicios
adicionales no dan nuevos derechos de cuantía significativa (IAS 19, párrafo 70). Los servi-
cios prestados una vez cumplidos 20 años de antigüedad no dan derecho a recibir benefi-
cios adicionales. En cualquier caso, la probabilidad de abandono antes de la conclusión de
los respectivos periodos condicionales ha de ser considerada en la valoración.
Imputación temporal del coste de los servicios. El mismo supuesto anterior si el premio por
antigüedad mayor de 20 años es de 2.500 euros.
Los servicios prestados después de 10 años de servicio no otorgan derechos que sean sus-
tancialmente mayores, de manera que la imputación a los periodos individuales se realiza
sobre la base de la fórmula de beneficios del plan (IAS 19, párrafo 70). Los trabajadores que
ingresan con 45 años, o menos, generan un derecho anual de 200 euros (2.000/10) durante
los diez primeros años de servicio, y de 50 euros (500/10) en cada uno de los 10 siguientes.
La atribución de beneficios causados por los restantes empleados queda igual que antes.
298 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Coste de servicios pasados. Implantación de un plan. La entidad pacta con sus trabajadores
el pago de un capital de 2.000 euros en la fecha de jubilación, aplicable a los trabajadores en
activo que acrediten una antigüedad en el empleo de 10 años en el momento del retiro.
Se reconoce inmediatamente el coste (valor presente de 2.000 euros) por servicios pasados
de los trabajadores que, en el momento de la implantación, tienen totalmente consolidado
su derecho (los que ingresaron en la entidad hace 10 o más años). El coste por servicios
prestados en el pasado por todos los demás se periodifica de manera lineal a lo largo del
periodo de consolidación restante (un año para los que ingresaron hace nueve, dos para los
que llevan ocho años en la entidad, etcétera).
Ganancias o pérdidas actuariales. Aplicación del 10 per cent corridor. Al inicio del periodo
contable se disponía de los datos siguientes:
• Valor presente bruto de la obligación de beneficios definidos: 1.000 euros.
• Valor razonable de los activos del plan: 900 euros.
• Ganancias actuariales no reconocidas: 85 euros.
Supongamos, por ejemplo, que la rentabilidad de los activos del plan durante el ejercicio ha
sido de 108 euros, cuando se habían pronosticado unos rendimientos de 90 euros. La vida
laboral residual promedio de los beneficiarios del plan se ha estimado en 10 años.
La diferencia entre el retorno real y el previsto es una ganancia actuarial (IAS 19, párrafo
105). El exceso de 103 (108-90+85) sobre la cantidad mayor entre el 10% del valor presente
del pasivo y el 10% del valor razonable de los activos del plan (3 = 103 – 10% x 1.000) ha de
imputarse a resultados durante los 10 años siguientes (IAS 19, párrafos 92 y 93).
significativo. Por eso, el método contable utilizado para el registro contable de estas prestaciones es
simple. Este método difiere de la contabilización de las prestaciones por jubilación en que:
a) Las pérdidas y ganancias actuariales se reconocen inmediatamente, sin posibilidad de aplicar
ningún sistema de diferimiento.
b) El coste por servicios pasados también se reconoce de forma inmediata.
Por tanto, el importe del pasivo relacionado con estos beneficios a largo plazo para empleados es igual
al valor presente de la deuda menos el valor razonable de los activos del plan (IAS 19, párrafo 128).
[EJEMPLO]
Participación en beneficios a largo plazo. La entidad ha aprobado un plan por el que con-
cede a los empleados que permanezcan en la entidad durante los tres años siguientes un
bonus equivalente al 2% de los resultados netos obtenidos en el periodo de consolidación,
que se espera que sean de 3.000 euros.
299 ❚ CAPÍTULO 11
5. Prestaciones por extinción del contrato
Las prestaciones por rescisión de contrato deberían reconocerse como un pasivo y como un gasto
sólo cuando la empresa se haya comprometido de forma demostrable a:
a) Resolver el contrato de trabajo de uno o varios empleados antes de la fecha normal de jubilación.
b) Pagar indemnizaciones como resultado de una oferta realizada para animar a uno o varios traba-
jadores a renunciar de forma voluntaria.
Cuando las prestaciones por rescisión de contrato no se vayan a pagar en los 12 meses siguientes al
cierre, deberían descontarse.
IAS 24 exige incluir información sobre las prestaciones al personal directivo clave y el IAS 1
sobre los costes de personal.
c) Una conciliación de los activos y pasivos reconocidos en el balance que, como mí-
nimo, incluya:
• El valor actual a la fecha del balance de la obligación por prestaciones definidas
que no estén cubiertas por un fondo.
• El valor actual (antes de deducir el valor razonable de los activos del plan) a la fe-
cha del balance de las obligaciones por prestaciones definidas que estén total o
parcialmente cubiertas por un fondo.
• El valor razonable de los activos afectos al plan en la fecha del balance.
• Las pérdidas o ganancias netas actuariales no reconocidas todavía en el balance.
• El coste por servicios pasados no reconocido todavía en el balance.
• Cualquier importe no reconocido como activo debido al límite establecido por el
propio IAS 19.
• Los importes reconocidos en el balance.
d) Los importes incluidos en el valor razonable de los activos afectos al plan respecto a:
• Cada categoría de instrumentos financieros emitidos por la sociedad que presente
los estados financieros.
• Cualquier propiedad ocupada por, u otros activos utilizados por, la sociedad;
e) Una conciliación que muestre los movimientos habidos durante el ejercicio en el pa-
sivo (activo) neto reconocido en el balance.
f) El gasto total correspondiente a cada uno de los siguientes conceptos junto con las lí-
neas de la cuenta de pérdida y ganancias donde se incluyen:
• Coste por servicios del ejercicio actual.
• Gastos financieros.
• Rentabilidad esperada de los activos afectos al plan.
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 301
301 ❚ CAPÍTULO 11
a) El hecho de que el plan es un plan de aportaciones definidas; la razón por la que no
se dispone de información suficiente que permita contabilizar el plan como un plan
de prestaciones definidas.
b) En qué medida un exceso o déficit en el plan puede afectar al importe de las aporta-
ciones futuras, incluyendo cualquier información disponible sobre el exceso o el défi-
cit y la base utilizada para determinar ese exceso o déficit; y las implicaciones, en su
caso, para la sociedad.
Cuando así lo exija el IAS 24, se expondrá información sobre (IAS 19, párrafo 124):
a) Transacciones entre partes relacionadas con planes de prestación para el personal
jubilado y prestaciones posteriores a la jubilación del personal directivo clave.
b) Información sobre pasivos contingentes que surjan por prestaciones posteriores a la
jubilación.
Cuando la empresa presente información, agrupada por totales para diferentes clases de
planes, tales datos se suministrarán en forma de medias ponderadas o utilizando rangos
de valores relativamente pequeños.
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 302
Los planes de prestaciones por retiro constituyen uno de los varios instrumentos que pueden
utilizar las empresas y los trabajadores para materializar los compromisos por pensiones que
asuman las primeras frente a los segundos.
Esta norma pretende establecer el mínimo de información que deben poseer los planes de
prestaciones por jubilación para sus beneficiarios como colectivo o grupo, pero no trata sobre
las informaciones individuales a los partícipes en estos instrumentos de previsión acerca de
sus derechos adquiridos1, ni tampoco trata del coste que supone para la empresa estos ins-
trumentos, ya que, como se indicó, de ello se ocupa la IAS 19.
Puntualizar que los planes de prestaciones por retiro son conocidos también con otros nom-
bres, tales como “planes de pensiones” o “sistemas complementarios de prestaciones por ju-
bilación”. Los planes de prestaciones por retiro se consideran en esta norma como entidades
distintas de los empleadores y de las personas que participan en dichos planes.
7. 2. Alcance
La IAS 26 se aplicará en la elaboración de informes de los planes de prestaciones por retiro
cuando tales informes se elaboren y presenten.
Los planes de prestaciones por retiro pueden ser de aportaciones definidas o de prestaciones
definidas, en los que posteriormente nos detendremos. Asimismo, indicar que muchos de és-
tos exigen la creación de fondos separados2, que pueden o no tener personalidad jurídica in-
dependiente, así como pueden o no tener administración fiduciaria. Estos fondos son los que
reciben las aportaciones de los empleadores y/o de los partícipes y pagan las prestaciones
por retiro a los beneficiarios. Esta norma es de aplicación con independencia de la creación
del fondo separado o de la existencia de una administración fiduciaria del plan.
Esta norma no se aplica a la instrumentación de otros tipos de ventajas sociales que se otor-
303 ❚ CAPÍTULO 11
guen a los empleados tales como las indemnizaciones por cese, los acuerdos de remunera-
ción diferida, las gratificaciones por ausencia prolongada, los planes de retiro anticipada o de
reestructuración de plantilla (vulgarmente conocidos como prejubilaciones), los programas
de seguros de enfermedad y de previsión colectiva o los sistemas de bonos a los trabajadores.
Por último, también se excluye de la aplicación de esta norma los programas de seguridad
social de las Administraciones Públicas.
7. 3. Definiciones
En esta norma, como en el resto, se establecen una serie de definiciones que facilitan el en-
tendimiento de los conceptos que en ella se utilizan, y entre los que podemos destacar:
a) Planes de prestaciones por retiro. Son acuerdos en los que la empresa se compromete a
suministrar prestaciones a sus empleados en el momento de terminar sus servicios o des-
pués, ya sea en forma de renta o como pago único, siempre que tales prestaciones o las
aportaciones a los mismos que dependan del empleador puedan ser determinadas o esti-
madas con anterioridad al momento del retiro, ya sea a partir de las cláusulas establecidas
en un documento o de las prácticas habituales de la empresa.
2Recordar que, de acuerdo con el texto refundido de la Ley de Regulación de los Planes y Fondos de Pensiones, aprobado por
Real Decreto Legislativo 1/2002, de 29 de noviembre, norma básica que regula nuestro sistema de planes de pensiones, éstos
se articulan a través de los fondos de pensiones, los cuales instrumentan los recursos de los planes de pensiones adscritos pero
no gozan de personalidad jurídica independiente.
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 304
b) Planes de aportación definida. Son planes de pensiones en los que las cantidades a pagar
como prestaciones se determinan en función de las aportaciones al fondo y de los rendi-
mientos de la inversión que el mismo haya generado.
c) Planes de prestación definida. Son planes de pensiones en los que las cantidades a pagar
en concepto de prestaciones se determinan por medio de una fórmula, normalmente ba-
sada en los salarios de los empleados, en los años de servicios o en ambas cosas a la vez.
d) Planes mixtos. Son planes de pensiones con las características de los dos anteriores y son
considerados a efectos de esta norma como planes de prestación definida.
e) Trasvase o aportación de fondos. Es el proceso de transferencia de los activos a una enti-
dad separada (el fondo asociado) con cuyo patrimonio se cubre el pago de las obligacio-
nes derivadas del plan de pensiones.
f) Partícipes. Son los miembros del plan de pensiones y otros beneficiarios que tienen dere-
cho a prestaciones en virtud de las condiciones del plan.
g) Activos netos disponibles para el pago de las prestaciones. Son los activos afectos al plan
304 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
menos las obligaciones del mismo diferentes del valor actual actuarial de las prestaciones
prometidas o garantizadas.
h) Valor actual actuarial de las prestaciones garantizadas por retiro. Es el valor actual de los
pagos que se espera hacer a los empleados, pasivos y activos, en razón de los servicios
por ellos prestados hasta el momento de la valoración.
i) Prestaciones irrevocables (o derechos consolidados de los partícipes). Son prestaciones,
derivadas de las condiciones contractuales de un plan de pensiones, en las que el dere-
cho a recibirlas no está condicionado a la continuidad en el empleo.
Por otra parte, hay que advertir que los planes de pensiones pueden ser financiados por per-
sonas distintas de los empleadores, ya sean los mismos trabajadores o incluso terceros; esta
norma también es de aplicación a la información financiera sobre tales planes.
También hay que precisar que muchos planes de pensiones prevén el establecimiento de
fondos independientes a los que se entregan las cotizaciones o aportaciones y se reclaman
posteriormente las prestaciones. Estos fondos son administrados por terceros, que actúan de
forma independiente en la gestión de los activos del fondo. Estas personas, en algunos paí-
ses, son denominadas administradores fiduciarios. El término administrador fiduciario se uti-
liza en esta norma para describir a estas personas, con independencia de la existencia,
desde el punto de vista jurídico, de una fiducia. En España, por ejemplo, ese administrador
del fondo externo se denomina entidad gestora de fondos de pensiones, y no tiene la conside-
ración en absoluto de administrador fiduciario, puesto que quien tiene las facultades de deci-
sión sobre dicho fondo es la comisión de control del fondo de pensiones, con independencia
de que ésta delegue algunas de las mismas en la entidad gestora del fondo.
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 305
Los partícipes del plan tendrán interés en conocer las inversiones del mismo puesto que ello
afectará a las cantidades futuras que recibirán. También querrán tener información sobre la
realidad de las aportaciones realizadas por la empresa. Por otra parte, la empresa que realiza
las aportaciones al fondo tendrá interés en que exista una administración eficiente y equita-
tiva del mismo. La información que debe suministrar un plan de aportaciones definidas, para
contentar los intereses de los partícipes y de la empresa empleadora de los mismos, será:
• Descripción y evolución de los activos del plan, con estados de las transacciones del mismo
y del rendimiento de las inversiones.
• Detalle de los posibles cambios acaecidos en el plan durante el periodo sobre el que se re-
aliza el informe.
305 ❚ CAPÍTULO 11
• Descripción de la política de inversiones del fondo al que está adscrito el plan.
[EJEMPLO]
Planes de pensiones de aportaciones definidas. Una empresa X promueve un plan de pen-
siones a favor de sus trabajadores, comprometiéndose a aportar anualmente al mismo el
2% del salario de cada trabajador con una antigüedad en la empresa de al menos un año.
Comentario:
Como vemos en este plan, la empresa no se compromete a que los trabajadores perciban
una determinada prestación en el momento de su jubilación, sino que ésta efectuará aporta-
ciones por el importe convenido mientras el trabajador no se jubile.
En este caso, la prestación futura de jubilación que corresponderá al trabajador dependerá
tanto de las aportaciones realizadas como de la rentabilidad obtenida sobre las mismas (la
cual resultará no sólo de la optimización de las decisiones de inversión sino también de la
marcha de los mercados), así como de los gastos que haya de soportar el normal desarrollo
del plan de pensiones.
depende tanto de la situación financiera del plan y de la capacidad de los aportantes para re-
alizar las aportaciones futuras como del rendimiento de las inversiones del plan y de la efi-
ciencia conseguida en la gestión del mismo.
Estos planes deberán suministrar información de uno de los dos puntos siguientes:
a) Un estado que demuestre:
• Los activos netos para atender prestaciones.
• El valor actual actuarial de las prestaciones garantizadas, distinguiendo entre los dere-
chos consolidados y los que no lo son.
• El superávit o déficit resultante.
b) Un estado de los activos netos disponibles para atender al pago de las prestaciones inclu-
306 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
yendo:
• O bien una nota en la que se desglose el valor actual actuarial de las prestaciones ga-
rantizadas distinguiendo entre los derechos consolidados y los que no lo son.
• O bien una referencia al informe adjunto del actuario que contenga esta información.
El valor actual actuarial de las prestaciones esperadas debe basarse en las prestaciones defi-
nidas en virtud del plan, teniendo en cuenta los servicios prestados hasta la fecha en que se
realice la rendición de cuentas por cada partícipe. La determinación de la cifra concreta se
hará en función de los salarios actuales o de los proyectados, con indicación explícita del mé-
todo proyectado.
En caso de que se realice un cambio en las hipótesis actuariales, se indicará el efecto que
pueda tener en el valor actual actuarial de las prestaciones garantizadas.
[EJEMPLO]
Planes de pensiones de prestaciones definidas. Una empresa H promueve un plan de pensio-
nes a favor de sus trabajadores comprometiéndose a que los mismos perciban en el momento
de su jubilación el 50% del diferencial entre la pensión de la Seguridad Social que cobren en-
tonces y su salario medio en activo el año inmediato anterior a la ocurrencia de la contingencia.
Comentario:
En este plan de pensiones, la magnitud que se fija son las prestaciones a cobrar en el futuro
por los partícipes, y el coste (es decir, las aportaciones) para la consecución de dicho obje-
tivo correrá a cargo de la empresa. De tal manera que las aportaciones a realizar por ésta
deberán ser las necesarias y precisas para que todos y cada uno de los partícipes en dicho
plan perciban las prestaciones determinadas a priori.
Como se puede observar, el riesgo y la incertidumbre en los planes de prestaciones defini-
das es muy superior dado que será el promotor que financia el plan quien sufrirá las desvia-
ciones negativas resultantes de las hipótesis actuariales inicialmente establecidas.
Las ventajas del método de los salarios actuales son las siguientes:
a) El método de salarios proyectados implica realizar suposiciones e hipótesis valorativas
307 ❚ CAPÍTULO 11
para estimar éstos, con toda la dificultad que ello entraña.
b) Los incrementos de las prestaciones por un aumento de los salarios se convierten en obli-
gaciones para el plan de pensiones en el momento de producirse.
c) El método de los salarios actuales se ajusta más a la cantidad a pagar si se produce el
cese o interrupción del plan.
Las ventajas del método de los salarios proyectados son las siguientes:
a) La información financiera debe prepararse sobre la base de la continuidad del plan, con
independencia de las hipótesis y estimaciones que se deban realizar.
b) Las prestaciones se determinan en función de los salarios en el momento de la jubilación,
por lo cual es necesario hacer proyecciones de salarios, niveles de aportación y tipos de
rendimientos de las inversiones (a lo que habría que unir una estimación sobre los niveles
de inflación futura).
c) El hecho de no incorporar proyecciones de salarios puede dar como resultado que el plan
aparezca, en la información presentada, como supercapitalizado cuando en realidad no lo
está, o aparezca suficientemente dotado cuando en realidad está infracapitalizado.
nimo cada tres años). En caso de que no se disponga de un informe actuarial a la fecha del
informe, se utilizará el más reciente indicando la fecha en que se realizó.
poseer la totalidad del capital de una empresa, se indicará en los estados financieros la
razón para no usar el valor razonable.
Los activos en los que se materializan las operaciones del fondo se contabilizan según su
naturaleza, aplicando la IAS correspondiente. Dentro del marco de la normativa española,
es el artículo 75 del reglamento de planes y fondos de pensiones aprobado por Real De-
creto 304/2003, de 20 de febrero, el que determina los criterios de valoración aplicables a
los activos en que se materializan la inversión de los fondos de pensiones, y que son:
• Los títulos cotizados: a valor de mercado, con excepción de los valores de renta fija
con vencimiento inferior o igual a seis meses que se valorarán por su precio de adqui-
sición incrementado en los intereses devengados correspondientes.
• Los títulos no cotizados: mediante la aplicación de criterios racionales valorativos
aceptados en la práctica, excepto los títulos de renta fija cuya valoración se efectuará
mediante la actualización de flujos futuros.
• Los inmuebles se computarán por su valor de tasación.
309 ❚ CAPÍTULO 11
• Detalle de las condiciones de cese del plan.
Además, para los planes de pensiones de prestación definida se indicará una descrip-
ción de las hipótesis actuariales, así como del sistema utilizado para el cálculo del valor
actuarial de las prestaciones garantizadas.
8. 1. Alcance
Las reglas de esta norma se aplican (con las excepciones que luego se ven) a todas las trans-
acciones con pago basado en acciones, que son aquellas en las que se reciben o adquieren
bienes o servicios, y además:
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 310
experimentado por la acción común de la entidad durante el plazo de vida del plan (trans-
acción con pago basado en acciones a cancelar en efectivo).
3. El mismo plan anterior si en lugar de establecer liquidación automática de diferencias en
efectivo concede al directivo (o incluso a la entidad) la posibilidad de optar por el pago en
acciones comunes de la entidad.
En lo anterior quedan incluidas las transacciones en las que la entidad recibe bienes o servi-
cios a cambio de la entrega de instrumentos de capital de su matriz, o de cualquier otra enti-
dad del grupo. Se presume, además, que cualquier entrega de instrumentos de capital a
quienes hayan suministrado bienes o servicios a la entidad es una transacción cubierta por
IFRS 2. Quedan, no obstante, fuera de su alcance:
a) Las transacciones efectuadas con empleados y otros suministradores de servicios o bienes
en su condición de accionistas.
b) Los instrumentos de capital emitidos en una combinación de negocios a cambio del con-
trol sobre la entidad adquirida.
c) Las transacciones con pago basado en acciones en las que la entidad recibe bienes o ser-
vicios bajo un contrato que cae dentro del alcance de los párrafos 8 a 10 de IAS 32 (con-
tratos para comprar o vender una partida no financiera que pueden ser cancelados me-
diante la entrega de efectivo u otro instrumento financiero, o mediante el intercambio de
instrumentos financieros).
311 ❚ CAPÍTULO 11
a lo largo de dicho periodo condicional).
c) Si el periodo de servicio a completar por la otra parte termina cuando se alcanza un obje-
tivo de rendimiento determinado, entonces:
• Si el objetivo consiste en una condición de mercado (por ejemplo, cotización de la ac-
ción común de la entidad, valor intrínseco de una opción call sobre acciones comunes
de la entidad, revalorización de la acción común de la entidad por encima de la experi-
mentada por un índice), la duración del periodo condicional se estima en la fecha de en-
trega (considerando la fecha más probable de cumplimiento) y no es objeto de revisión
posterior.
• Si la condición impuesta es de otra clase (por ejemplo, objetivos de ventas o resultados),
la entidad ha de revisar la duración asignada al periodo de consolidación cuando la in-
formación sugiera que puede apartarse de la inicialmente estimada.
valoración se basa en su precio de mercado (o de una estimación del mismo, si no están ad-
mitidas a cotización), que se ajusta para tomar en cuenta las condiciones bajo las que se han
entregado. Es raro que existan precios de mercado comparables para el caso de que se en-
treguen opciones sobre acciones. La medición requiere entonces del uso de un modelo de
valoración de opciones; IFRS 2 no prescribe ni recomienda el uso de ninguno concreto, aun-
que recuerda que las especiales peculiaridades de las opciones para empleados (en particu-
lar, la posibilidad de ejercicio anticipado, una vez concluido el periodo de consolidación) sue-
len excluir el uso de la habitual fórmula Black-Scholes-Merton (admitida hasta ahora bajo US
GAAP [SFAS 123, párrafo 9], que permiten como alternativa el uso del valor intrínseco de la
anterior Opinión APB 25). El Apéndice B de la norma enumera los factores que deben ser to-
mados en cuenta en la valoración, que aquí quedan omitidos por razones de espacio.
Por lo general, las condiciones para la consolidación de los derechos (vesting conditions) no
se toman en cuenta al determinar el valor razonable de los instrumentos de capital entrega-
dos en la fecha de medición, sino al estimar el número de ellos que serán finalmente consoli-
dados. Así, y durante el periodo de consolidación (vesting period), la valoración de los servi-
cios recibidos parte del número de instrumentos de capital que, según la mejor estimación
312 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Los empleados que causan baja en la entidad durante el periodo de consolidación, el creci-
miento de resultados y las previsiones manejadas por la dirección al cierre de cada año (re-
feridas a los restantes del periodo de consolidación) son:
1 14 26 10% 11,50%
2 12 19 12,5% 14%
3 18 14,50%
FASCiCULO 11 ok 29/9/04 09:54 Página 313
El gasto (e incremento en el patrimonio neto) que se contabiliza en cada uno de los tres
años del periodo de consolidación es el que se muestra a continuación. La fecha de medi-
ción es la del acuerdo del comité de retribuciones (IFRS 2, IG 3).
2
2 (300 – 14 – 12 –19) • 60 • 15 • – 39.000 = 114.000
3
[EJEMPLO]
Consolidación condicionada al cumplimiento de un objetivo de cotización. Se entregan 400
opciones a un directivo, ejercitables bajo condición de que permanezca en la entidad du-
rante los siguientes cuatro años, siempre que, al término de ese plazo, la cotización de la ac-
ción común de la entidad se sitúe por encima de 25 euros. Empleando una fórmula de valo-
ración de opciones, la entidad valora en 10 euros el valor razonable de la compensación. El
313 ❚ CAPÍTULO 11
directivo abandona la entidad al comienzo del año 3.
2. La deuda, y los bienes o servicios recibidos, se mide por el valor razonable del pasivo con-
traído, que se determina aplicando un modelo de valoración de opciones.
3. El valor de la deuda es objeto de revisión en cada cierre hasta la fecha de cancelación,
con imputación de las diferencias a la cuenta de pérdidas y ganancias. Igual tratamiento
reciben las que se ponen de manifiesto en el momento de la liquidación de la deuda.
[EJEMPLO]
Stock appreciation rights. La entidad ha establecido un plan de retribución por el que ha con-
cedido 50 SAR a cada uno de los 100 empleados beneficiarios, a condición de que permanez-
can en la entidad durante los dos años siguientes. Los empleados recibirán una suma en
efectivo igual a la diferencia entre la cotización de la acción común de la entidad en la fecha
de ejercicio y la que tiene el 1 de enero del año 1 (el de concesión). Los derechos son ejercita-
bles en cualquier momento entre la fecha de su consolidación y el 31 de diciembre del año 4.
Durante el año 1 causan baja 10 empleados, y se espera que otros 10 abandonen la entidad
en el curso del año siguiente. El valor razonable de los derechos se cifra en 10 euros. En con-
secuencia, la entidad contabiliza un gasto (y el correspondiente pasivo) por:
1
314 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
[EJEMPLO]
Stock appreciation rights. Supongamos que el plan de SAR del ejemplo anterior concede a
los beneficiarios la posibilidad de optar por la liquidación de su crédito diferencial en accio-
nes comunes de la entidad, que se valoran a su valor razonable en la fecha de ejercicio.
El valor del componente de pasivo es igual al valor razonable del instrumento financiero
compuesto emitido. El valor asignado al componente de patrimonio neto es cero, y la opera-
ción se contabilizaría durante el periodo de consolidación del mismo modo que se vio antes.
315 ❚ CAPÍTULO 11
patrimonio neto cuando pide que se le entregue efectivo en lugar de un instrumento de
capital (recordemos que, en las transacciones a liquidar con instrumentos de capital, el
patrimonio neto no cambia por el hecho de que la otra parte pierda sus derechos sobre
ellos tras la conclusión del periodo condicional). La totalidad de la cantidad pagada se
imputa al componente de pasivo, y las diferencias se llevan a resultados siguiendo la re-
gla general de las transacciones a liquidar en efectivo.
[EJEMPLO]
Supongamos que, de los 20 empleados que ejercen sus derechos al cierre del año 3, hay 5
que optan por la liquidación en acciones comunes de la compañía. Las acciones se valoran
a los efectos por su valor razonable en la fecha actual, que es de 30 euros (valor nominal 10).
Los asientos a efectuar serán:
(Gasto por compensación imputable al periodo, antes del ejercicio de los derechos)
C A P Í T
12
U L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 319
C A P Í T
12
U L O
1. Introducción
En el momento de redactar estas líneas, la IAS 39, que establece la contabilización de instrumentos
financieros, y la IAS 32, que establece los requisitos de revelación, no han sido todavía reconocidas
por la UE mediante su publicación en el Diario Oficial de las Comunidades Europeas (DOCE), aun-
que es previsible que se realice en breve plazo.
Además del retraso con que serán aprobadas las normas relativas a los instrumentos financieros en
319 ❚ CAPÍTULO 12
relación a otras normas ya publicadas, la contabilización de algunas de las operaciones contenidas
en IAS 39 plantea una serie de problemas adicionales.
Por otra parte, la normativa contable general española y en particular el Plan General de Contabilidad
de 1990 no abordaron la problemática de muchos de estos productos, dejando a un posterior des-
arrollo la contabilidad de los mismos. Este desarrollo, que no se ha llegado a producir, hace que
exista un gran desconocimiento de esta materia por parte de muchos profesionales de la contabili-
dad y las finanzas. Al carecer de referencias con las que se puedan establecer comparaciones con
las nuevas normas que vamos a analizar, su estudio puede ser más complejo que el de otras normas
internacionales de información financiera. Tan sólo en algunos ámbitos muy concretos, como pue-
den ser el sector financiero o el sector asegurador, son suficientemente conocidos estos productos,
ya que su regulación específica sí ha establecido normas en relación con la mayor parte de los ins-
trumentos financieros que constituyen operaciones habituales de su actividad, y es en realidad a este
tipo de entidades a las que afectan de una forma más directa la mayor parte de las operaciones que
se regulan en IAS 32 y 39.
Por las razones anteriores, el esfuerzo a realizar para comprender este capítulo será para muchos
lectores mayor que el que han debido hacer en otros capítulos, si bien la dimensión de esta obra no
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 320
pretende agotar los innumerables aspectos que pueden plantear los instrumentos financieros, sino
que únicamente intentaremos comentar algunos aspectos básicos, dejando las complicaciones ma-
yores para un estudio más profundo.
La IAS 39 es aplicable a todas las empresas y para toda clase de instrumentos financieros con las ex-
cepciones que se señalarán más adelante. Establece como norma general de valoración el fair value,
que ha sido traducido en España como valor razonable, de ahí que antes de pasar a analizar los dife-
rentes instrumentos financieros que regula la IAS 39, vamos a comentar los aspectos relevantes de lo
que representa el valor razonable.
información suficiente como para evaluar adecuadamente las características del activo o el pasivo en
cuestión.
Este concepto ha venido a completar los diferentes medios contables de valoración de instrumentos
y, como se ha expuesto en capítulos anteriores, ya ha sido incorporado a la regulación comunitaria
en materia de Derecho Contable de Sociedades de Capital.
El amplio uso de este, relativamente, nuevo concepto de valor razonable se debe a la insatisfacción
con los procedimientos valorativos generalmente denominados LOCOM (el más bajo del coste o el
mercado Lower of cost or market).
Como es conocido, la regulación contable mercantil española general en vigor prohíbe expresamente
la valoración al precio de mercado de los instrumentos financieros (salvo instrumentos FIAMM) que
en la Resolución del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas de 27 de julio de 1992 ya esta-
bleció la valoración de las participaciones en este tipo de fondos de inversión por su valor liquidativo
en la fecha de cierre de ejercicio. (Como consecuencia de la entrada en vigor de la Ley 35/2003 de 4
de noviembre, la denominación FIAMM de estos fondos ha desaparecido).
Debe hacerse hincapié en que se trata de la regulación mercantil general (Plan General de Contabili-
dad, Ley de Sociedades Anónimas...), ya que existen varios planes sectoriales que aceptan las valo-
raciones a precio de mercado (por ejemplo, Circular 4/91 del Banco de España sobre Contabilidad y
Estados Financieros de Entidades de Crédito).
Una última advertencia de importancia es que valor razonable y precio de mercado solamente coinci-
dirán en los casos en los que los instrumentos financieros sujetos a valoración coticen en mercados
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 321
públicos y ágiles, profundos y líquidos. De lo contrario, el valor razonable ha de ser obtenido a través
de métodos de valoración y modelos de uso general (aceptados por la comunidad contable y finan-
ciera como estándares). Un ejemplo es el modelo Black-Scholes de valoración de opciones; si debié-
ramos valorar una cartera de opciones que no cotizan en mercados organizados y profundos, una al-
ternativa aceptable –desde el punto de vista del valor razonable– es utilizar la conocida fórmula BS:
Otros modelos financieros, aceptados a estos efectos, son: modelo de arbitraje de precios de activos
financieros (Ross y otros), modelos de base Beta para activos de renta variable…
EL VALOR RAZONABLE
En primer lugar, EL PRECIO DE MERCADO, si existe tal mercado activo. Si hubiera varios
Para activos (o pasivos futuros) Para pasivos (o activos a adquirir)
321 ❚ CAPÍTULO 12
el PRECIO COMPRADOR el PRECIO VENDEDOR
JERARQUÍA DE VALOR
RAZONABLE
Descuento de flujos
Black-Scholes
APT
Otros
A efectos de la determinación del valor razonable, al menos habrá que considerar los siguientes factores:
• Tipo de interés.
• Riesgo de crédito.
• Riesgo de cambio.
• Riesgo de precio.
• Volatilidad.
• Costes de servicio financiero.
• Riesgo de pago anticipado/Rescate.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 322
De acuerdo con esta definición, parece obvio que un instrumento financiero implica a dos partes, por
un lado el inversor que adquiere un activo financiero y por otro el emisor del instrumento financiero
que asumirá una obligación de pago o en su caso tendrá un aumento de su patrimonio si el instru-
mento financiero emitido forma parte del capital.
En consecuencia, hay que determinar qué se entiende por activo financiero, pasivo financiero e ins-
trumento de capital.
Un activo financiero es, según el mismo documento, todo activo que posee cualquiera de las si-
guientes formas:
a) Efectivo.
322 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
b) Un derecho contractual a recibir efectivo u otro activo financiero por parte de otra empresa.
c) Un contrato que da o permite un derecho de liquidación en instrumentos de capital de la propia
empresa y es un no derivado que obliga a recibir un número variable de instrumentos de capital,
o es un derivado que no se puede liquidar intercambiando un importe fijo de efectivo u otros ins-
trumentos financieros por una cantidad fija de instrumentos de capital de la propia empresa.
d) Un derecho contractual a intercambiar instrumentos financieros con un tercero, en condiciones
que son potencialmente favorables.
e) Un instrumento de capital de otra empresa.
El emisor de un instrumento financiero clasificará dicho instrumento como capital (fondos propios)
si, y sólo si, se cumplen las siguientes dos condiciones:
a) El instrumento citado no incluye ningún tipo de obligación contractual de:
• Entregar efectivo u otro activo financiero a un tercero.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 323
ACTIVOS INSTRUMENTOS PASIVOS
FINANCIEROS DE CAPITAL FINANCIEROS
A los tres tipos anteriores de instrumentos se les denomina instrumentos financieros primarios por
oposición a los instrumentos financieros derivados. Estos últimos son unos instrumentos financieros
particulares en los que concurren las siguientes circunstancias:
a) Requieren una inversión neta muy pequeña, o nula, respecto de otro tipo de contratos que incor-
323 ❚ CAPÍTULO 12
poran una respuesta similar ante cambios en las condiciones de mercado.
b) Se liquidan en una fecha futura, sin ser relevante que tal operación se realiza por entrega o por di-
ferencias.
c) Sus valores cambian en respuesta a los cambios en los tipos de interés, en el precio de las accio-
nes, en el precio de una mercancía, en el tipo de cambio de las divisas, en la evolución de un ín-
dice de precios o crediticio u otro valor (habitualmente denominado subyacente).
Dicho de otra manera, un instrumento, producto o contrato derivado es aquel instrumento, financiero
o real, cuyo precio deriva del precio de otro instrumento denominado producto subyacente. Si este
subyacente es un bien real, por ejemplo, arroz, carne, metal…, sus derivados correspondientes son
derivados no financieros. En cambio, si el subyacente es un bien financiero, típicamente un bono o
una acción, sus respectivos derivados también tendrán la consideración de financieros. Todo ello con
independencia de que las normas contables, en ciertos casos, obliguen a contabilizar los derivados
no financieros como si fueran derivados financieros.
c) Swaps: acuerdos entre dos partes para intercambiar una sucesión de flujos de efectivo (por ejem-
plo, pagos con un tipo de interés fijo que se intercambian por otros pagos con un tipo de interés
variable) en el futuro.
Los productos derivados financieros pueden establecerse sobre distintos productos subyacentes. Los
más habituales son:
• Derivados sobre índices.
• Derivados sobre valores.
• Derivados sobre divisas.
• Derivados sobre materias primas.
Además de los futuros, opciones o swaps ya citados, hay otros derivados menos conocidos entre los
que pueden citarse los siguientes:
• FRA.
• FXA.
324 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
• ERA.
• Cap, floor y collar.
• PIRA.
• Cilindro.
• Estructurados.
Los productos derivados sobre bienes reales son conocidos desde la China imperial a través de los
futuros sobre el arroz. No obstante, habría que esperar hasta el siglo XIX para que un nuevo tipo de
derivado no financiero, los derivados sobre la carne en el oeste de Estados Unidos, volviera a tener
un gigantesco éxito.
De los derivados estrictamente financieros sólo conocemos, por el autor español de Confusión de con-
fusiones, que eran comunes en la Amsterdam de la revolución comercial. Nuevamente habría que es-
perar varios siglos, hasta principios de la década de los setenta, para asistir a la generalización, esta
vez ya imparable, de los derivados con subyacente financiero. En efecto, la declaración de inconverti-
bilidad del dólar, efectuada por R. Nixon en agosto del año 1971, creó una enorme volatilidad en los
mercados de divisas, haciendo que los agentes demandaran instrumentos de cobertura contra el
riesgo cambiario: había nacido el primer derivado sobre riesgo de cambio en el mercado de Chicago.
Con posterioridad, la combinación de una serie de factores, tales como la liberalización, el incre-
mento del comercio internacional, la desregulación, la revolución en las comunicaciones y la infor-
mática…, no ha hecho sino fortalecer la demanda de los agentes económicos a favor de instrumen-
tos de cobertura de riesgos. La demanda se centró, en un primer momento, en la necesidad de cu-
brir los riesgos de precio en sus distintas variantes: cambio, intereses, acciones… En la actualidad,
se demandan también coberturas sobre subyacentes crediticios, lo que explica el éxito de los deriva-
dos denominados total return swap, credit defalult swap…
En cualquier caso, lo que parece evidente es que los agentes económicos han impulsado a los espe-
cialistas financieros hacia el diseño (o la invención) de productos de cobertura de los riesgos financie-
ros e, indirectamente, han obligado a que se discuta a escala internacional el criterio contable que se
considera más acertado para valorar los productos derivados: el tantas veces citado valor razonable.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 325
Una última clasificación que es oportuna a nuestros efectos es la que distingue entre instrumentos fi-
nancieros derivados e instrumentos híbridos. Estos últimos presentan características comunes a los
instrumentos financieros primarios, o también denominados tradicionales, y los instrumentos finan-
cieros derivados, pero, al ser un único instrumento, se considera que el instrumento financiero deri-
vado está implícito (a veces, también se identifican como productos financieros derivados incorpora-
dos o imbuidos).
La regla contable para estos productos híbridos es la siguiente: un derivado implícito debe ser objeto
de separación del contrato principal, y en consecuencia tratado como un derivado independiente si
se cumplen todas y cada una de las siguientes condiciones:
a) Las características económicas –y los riesgos inherentes– del derivado implícito no están estre-
chamente relacionadas con las correspondientes al contrato principal.
b) Un contrato independiente con sus mismas características cumpliría las condiciones de la defini-
ción de instrumento derivado que hemos analizado en el apartado anterior.
c) El instrumento híbrido no se mide según su valor razonable con impacto en pérdidas y ganancias.
325 ❚ CAPÍTULO 12
c) Una opción de renovación de deuda salvo que se ajuste el tipo de interés aproximándolo al del
mercado.
d) Pagos de intereses o principal en deudas o contratos de seguro dependientes de índices de renta
variable.
e) Una opción de conversión en fondos propios incluida en un instrumento de deuda.
f) Cualquier clase de opción (compra, venta, rescate, etcétera) implícita en un instrumento de
deuda salvo que el precio de ejercicio sea aproximadamente igual al valor amortizado del instru-
mento en cada una de las fechas de ejercicio.
g) Los derivados crediticios implícitos en instrumentos de deuda en los que el beneficiario transfiere
el riesgo de crédito al garante.
d) Los derivados implícitos sobre riesgo de cambio en instrumentos no financieros si no están apa-
lancados, no contienen características opcionales y los pagos han de hacerse en la moneda fun-
cional de alguno de los participantes o en la moneda ordinaria de las operaciones del mercado del
bien o en una moneda que se usa habitualmente en el entorno respectivo.
e) Una opción de pago anticipado en strips si no incluyen elementos que no estuvieran presentes en
el instrumento original.
f) Los derivados implícitos en operaciones de arrendamiento financiero que indexan las cuotas a la
inflación, a una cifra de ventas o a tipos de interés variables.
Si existiera obligación de separación del derivado implícito pero la entidad no pudiera medirlo, en pri-
mer lugar, la entidad debería medirlo indirectamente como diferencia entre el valor razonable del ins-
trumento híbrido y el componente no derivado de dicho instrumento.
Si no fuera posible, entonces el instrumento híbrido en su totalidad debería ser medido al valor razo-
nable con impacto en pérdidas y ganancias.
326 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
4. Exclusiones de IAS 39
Quedan exceptuados de la aplicación de los criterios establecidos en IAS 39 todos los instrumentos
siguientes:
a) Instrumentos de renta variable que hayan de ser contabilizados de acuerdo con las reglas de con-
solidación, esto es, participaciones en filiales (IAS 27), participaciones en asociadas (IAS 28) y
participaciones en multidominadas (IAS 31).
b) Contratos de arrendamiento (contabilizados de acuerdo con IAS 17), pero no los derivados implí-
citos que pudieran tener ni el sistema de cálculo del daño por parte del arrendador.
c) Los derechos y obligaciones generados en el marco de acuerdos con los empleados que han de
ser contabilizados según las reglas de IAS 19.
d) Derechos y obligaciones generados por contratos de seguro y reaseguro. Sin embargo, IAS 39 se
aplica a los derivados implícitos de dichos contratos y a los instrumentos que, bajo la apariencia
de ser contratos aseguradores, son genuinos productos financieros.
e) Los instrumentos de capital de la empresa que confecciona las cuentas. Este concepto incluye
no sólo las acciones sino también las opciones, warrants u otros contratos de análoga naturaleza.
f) Los contratos contingentes en las combinaciones de negocios a los que se aplican las reglas con-
tables de IAS 22.
g) Los compromisos de concesión de préstamos quedan excluidos si no se pueden liquidar por neto
o por otro instrumento financiero, a no ser que voluntariamente la entidad decida incluirlos en su
cartera de negociación.
h) Los contratos de garantía financiera (avales y derivados crediticios similares) que realizan pagos
dependientes a favor del tenedor si un deudor incumple sus obligaciones quedan excluidos de las
mediciones posteriores, pero los contratos de garantía financiera que realizan pagos dependien-
tes de la evolución de índices, tipos de interés, precios de activos, calificaciones de crédito u otras
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 327
variables similares sí quedan incluidos en el IAS 39. No obstante, en estos momentos el IASB se
está replanteando esta regla.
i) En relación con los contratos de compraventa de instrumentos no financieros (mercancías), que-
dan también incluidos si pueden ser liquidados por neto, o por otro instrumento financiero, o la
entidad habitualmente no espera al vencimiento sino que especula en el mercado para obtener
beneficios a corto plazo.
j) El factor riesgo de cambio de la compraventa de mercancías a plazo puede quedar incluido en el
IAS 39 si se cumplen ciertas condiciones, ya que es un forward, corto o largo, sobre divisas.
327 ❚ CAPÍTULO 12
sometida a cambios.
b) Cartera de inversión a vencimiento. Un activo financiero puede ser identificado como una inver-
sión a vencimiento si sus cobros son de cuantía fija, o determinable, su vencimiento está fijado en
el tiempo y si, además, la empresa tiene la intención –y la posibilidad financiera– de conservarlo
en cartera hasta el momento de su efectivo reembolso.
c) Cartera de préstamos y partidas a cobrar. Esta cartera incluye los activos financieros que ha cre-
ado la propia empresa, habitualmente, a cambio de suministrar bienes o servicios al deudor co-
rrespondiente y no se han originado con el fin de ser inmediatamente vendidos o negociados. Por
ejemplo, facturas, crédito comercial, anticipos, etcétera.
d) Cartera de activos financieros disponibles para la venta. Esta cartera se define negativamente,
es decir, está integrada por los instrumentos financieros que no son ni de negociación, ni de in-
versión a vencimiento, ni son préstamos u otras partidas a cobrar.
Como puede observarse, existen dos criterios diferentes para establecer la clasificación de los instru-
mentos financieros en las distintas carteras:
• Naturaleza de los instrumentos.
• Objetivo de su tenencia (o emisión, en el caso de los pasivos).
Una operación de cobertura es aquel contrato (o contratos) diseñado de tal manera que los eventua-
les cambios que pudieran ser experimentados en el valor del instrumento denominado cubierto se-
rán compensados, total o parcialmente, con los cambios que experimente el valor (o los flujos de
efectivo procedentes) del elemento denominado cobertor.
c) Ha sido explícitamente señalada como objeto de cobertura de acuerdo con una serie de reglas
(que más adelante se detallarán).
7. Reglas de reconocimiento
Con carácter general, una empresa debe reconocer un activo financiero o un pasivo financiero en su
balance si y sólo si la entidad se convierte en parte obligada, según las cláusulas contractuales del
instrumento financiero correspondiente. Por tanto, deben ser reconocidos en los estados financieros
todos los derechos y obligaciones, naturalmente de acuerdo con su naturaleza, es decir, como acti-
vos o pasivos.
Los contratos que se denominan “de contado” no generan problemas de reconocimiento. De hecho,
la técnica registral habitual es precisamente ésta, y si una entidad se convierte en parte de un
acuerdo de entrega o emisión de un activo financiero, se registran los correspondientes saldos conta-
bles ya que existen flujos de cobro o pago que se realizarán en un corto espacio de tiempo. Lo nor-
mal es que una de las partes ejecute su parte del acuerdo y ello conlleve, inexorablemente, el regis-
tro contable por ambos.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 329
Una característica natural de los contratos a plazo es que en el momento de su nacimiento es proba-
ble que tengan un valor razonable nulo y, por tanto, que no originen registros inmediatos. No obs-
tante, la misma naturaleza de los riesgos de precio de los contratos financieros debe hacer que la va-
loración del contrato se modifique de manera diaria y, en consecuencia, deban ser registrados acti-
vos o pasivos.
Un problema adicional es el eventual registro de los nocionales de los contratos a plazo en las cuen-
tas de orden. Tal técnica registral sólo se exige a los especialistas financieros, con independencia de
que sea aconsejable llevar, como mínimo, un inventario extracontable de las posiciones abiertas, cor-
tas o largas en los instrumentos financieros a plazo.
Por las mismas razones, la empresa debe dar de baja un activo financiero cuando pierda el control so-
bre los derechos contractuales en los que está incluido el activo en cuestión. El criterio más común para
interpretar que ha sido perdido el control de los derechos contractuales es uno de los siguientes casos:
329 ❚ CAPÍTULO 12
a) Ha existido cesión (por ejemplo, operaciones de titulización estricta).
b) Ya se han realizado los derechos de acuerdo con las especificaciones contractuales y, en conse-
cuencia, se han recibido los beneficios esperados.
c) Han expirado los derechos correspondientes.
Al dar de baja un activo financiero debe reconocerse simultáneamente el beneficio, o pérdida, neto
generado por la diferencia entre el valor en libros del activo y la suma de los importes recibidos (o por
recibir) conjuntamente con los ajustes necesarios para reflejar el importe del valor razonable que hu-
bieran sido llevados a cuentas patrimoniales.
Por su parte, un pasivo financiero ha de ser dado de baja en el balance de una empresa cuando se
haya extinguido la correspondiente obligación, es decir, cuando haya sido pagada, cancelada o haya
expirado. La diferencia entre el valor en libros de un pasivo cancelado o transferido y el importe pa-
gado por él debe ser llevada a los resultados del ejercicio. No obstante, las operaciones de titulización
tienen reglas especiales más complejas pero que quedan fuera del alcance de este estudio preliminar.
8. Reglas de medición
Éste es, sin duda, uno de los apartados más novedosos que establecen las NIIF comparándolas con
la normativa en vigor. Tres son los problemas a considerar:
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 330
a) La medición inicial.
b) Las mediciones posteriores (valoración).
c) La aplicación de técnicas contables que registren adecuadamente la existencia de coberturas fi-
nancieras efectivas.
8. 1. La medición inicial
Al reconocer en el origen de las operaciones un activo o un pasivo de carácter financiero, la em-
presa debe registrarlos por el valor razonable de la contraprestación que se haya dado (en los
activos) o que se haya recibido (en los pasivos). Los costes de transacción deben formar parte
de tal concepto, salvo en la cartera que se mide al valor razonable de pérdidas y ganancias.
Lo habitual será determinar dicho valor de acuerdo con los precios de mercado, pero no se
descarta que tales precios no pudieran ser determinados de forma fiable y, en tal caso, hu-
biera que valorar las contraprestaciones de acuerdo con el método del valor actual de los flu-
330 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Como principio general, después del reconocimiento inicial, todo activo financiero (inclu-
yendo los productos derivados) debe ser valorado de acuerdo con su correspondiente valor
razonable, sin deducir los costes de transacción, salvo:
a) Los que integran la cartera de inversión a vencimiento.
b) Los préstamos y partidas a cobrar que no se mantienen para su negociación.
c) Cualquier otro instrumento financiero que no tenga precio de cotización en un mercado
activo (y su valor no pueda ser medido de forma fiable).
Los activos financieros excluidos de la medición por su valor razonable deben ser valorados
según su coste modificado en base TIR.
Los pasivos financieros, después de su reconocimiento inicial, deben ser valorados por el mé-
todo del coste amortizado, también en base TIR, salvo los pasivos mantenidos para la negocia-
ción y los derivados con naturaleza de pasivos. Como excepción, los derivados con naturaleza
de pasivo que estén vinculados y deban ser liquidados mediante la entrega de un instrumento
de capital no cotizado no deben medirse por su valor razonable sino por el método del coste.
reiterar que todos los productos derivados son, en principio, de negociación, salvo que sean
asignados a coberturas (en cuyo caso se aplican las reglas que se verán posteriormente).
b) El beneficio, o en su caso la pérdida, de los instrumentos de la cartera disponible para la
venta deberá ser llevado al patrimonio neto pero sin que pase por la cuenta de resultados.
En este último caso, habrá que detallar en la información pública tal registro.
c) Los instrumentos financieros incluidos en la cartera de inversión a vencimiento no deben
ser valorados de acuerdo con sus valores razonables si se cumplen los requisitos expresa-
dos anteriormente. No obstante, hay que analizar la solvencia de los emisores para saber
si es necesaria la cobertura del riesgo de crédito y en consecuencia están sometidos al
análisis de daño (lo que, en su caso, puede obligar a reducir el valor del instrumento).
d) Los activos de la cartera de préstamos y partidas a cobrar se valoran por su coste, aun-
que hay que analizar la solvencia de los clientes y similares para saber si es necesaria la
cobertura del riesgo de crédito.
Sólo se podrá aplicar la regla de simetría en las coberturas (también llamada principio espe-
331 ❚ CAPÍTULO 12
cular) si se cumplen todas y cada una de las siguientes condiciones:
a) En el momento del inicio de la operación de cobertura existe documentación formal de la
relación, estrategia y objetivo de la empresa respecto del riesgo cubierto.
b) La cobertura debe ser altamente eficaz en la compensación del valor razonable o de los
flujos de efectivo. Se considera eficaz una cobertura en la que los movimientos en el ele-
mento cubierto quedan compensados por movimientos en el elemento cobertor y los re-
sultados reales están en un rango del 80% al 125%.
c) La eficacia de la cobertura debe poder medirse de forma fiable.
d) En las operaciones de cobertura de transacciones futuras en las que se cubren los flujos
de efectivo, la transacción a cubrir debe ser altamente probable.
e) La cobertura ha de ser evaluada en un contexto de gestión continuada de la empresa.
Teniendo en cuenta las anteriores características, IAS 39 establece tres tipos de coberturas:
a) Cobertura del valor razonable: Una cobertura tiene tal denominación si el elemento cober-
tor (habitualmente, un producto derivado), del activo o pasivo correspondientemente identi-
ficado como elemento cubierto, cambia su valor de manera inversa a los cambios de valor
del elemento cubierto y en relación con un riesgo identificado. Los movimientos en ambos
elementos son inmediatamente reconocidos en la cuenta de resultados del periodo.
b) Cobertura de flujos de caja: En este caso no se pretende cubrir el valor sustancial sino la
variabilidad de los flujos de caja futuros, y el derivado de cobertura debe replicar los movi-
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 332
En los estados financieros, se incluirán los siguientes aspectos relacionados con las operaciones de
cobertura:
a) Descripción de los objetivos y políticas de gestión del riesgo financiero de la entidad.
b) Descripción de la política de cobertura de los tipos más importantes de operaciones.
c) Descripción de las coberturas.
d) Descripción de los elementos financieros de cobertura y su valor razonable.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 333
En los estados financieros deben incluirse las siguientes informaciones adicionales sobre instrumen-
tos financieros:
a) Si se han realizado operaciones de titulización, información suficiente sobre tales contratos.
b) Información sobre los eventuales deterioros por riesgo crediticio, no incluidos en las valoraciones
a valor razonable, de los activos financieros de la empresa.
c) Descripción de las partidas significativas de gastos e ingresos procedentes de instrumentos finan-
cieros.
En cada fecha de presentación de estados se evaluará si existe evidencia objetiva de daño en el ele-
333 ❚ CAPÍTULO 12
mento o cartera. Dicha evidencia estará relacionada con eventos ya ocurridos (pérdidas ya incurri-
das) y en ningún caso con eventos probables. Además, tales eventos ya ocurridos deberán tener un
impacto negativo en relación con los flujos futuros de caja.
La evidencia objetiva del daño en los instrumentos financieros puede obtenerse por alguno de los si-
guientes motivos:
• Dificultades financieras significativas del deudor.
• Impagos por parte del deudor.
• Concesión de facilidades especiales.
• Probable situación concursal.
• Retirada de cotización por dificultades financieras del emisor.
• Datos que indiquen reducción de los flujos de caja a recibir por grupos aun cuando no puedan ser
identificados individualmente.
recuperable y el valor contable del elemento descontando flujos al tipo efectivo original y ex-
cluyendo cualquier pérdida futura.
En todo caso, IAS 39 espera que la entidad tenga establecida una política de revisión uno a
uno de, al menos, los elementos individualmente significativos. Sin embargo, otras políticas
adicionales son posibles y deseables. Se permite tanto la creación de una cuenta de provisión
como la reducción del valor del elemento de forma directa. La cuenta de contrapartida es,
siempre, un gasto que se llevará a pérdidas y ganancias.
Para el cálculo del daño existen varios sistemas en función de cuál debe ser el valor con el
que se establece la comparación del coste amortizado de los instrumentos financieros.
a) Estándar: El coste amortizado se compara con el valor actual de los flujos que se dejarán
de percibir.
334 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Si, por el contrario, se verifica esta desigualdad no se provisiona (o, en su caso, se revierte).
1
CFn (1 + i)–t > LAV
n
Nótese que si “i = tipo de mercado”, lo que estamos haciendo es medir el riesgo al valor razo-
nable.
1
La generación del mapa de flujos no presenta dificultades de relevancia en los productos con
fechas de cobro contractualmente prefijadas, pero en todos los demás casos sí supone una
dificultad añadida para el cálculo del deterioro. Por su parte, el tipo efectivo original ha de ser
calculado en el origen de acuerdo con la metodología TIR, y los devengos de intereses, a par-
tir de dicha fecha, serán los que genere la citada tasa TIR.
En segundo lugar, también es posible utilizar el método del colateral, de tal manera que el
análisis del daño crediticio tenga en cuenta los flujos estimados asociados a la eventual eje-
cución de la garantía.
– ct (1 + i)–k + CFE (1 + i)–k < LAV Siendo: CFE = realización de la garantía
CT = costes asociados a su realización
Por último, si hay precios de mercado, se puede utilizar dicho precio en lugar de hacer el cálculo
anterior. En España, por ahora, va a ser difícil utilizar con profusión este método, salvo en ciertas
operaciones del mercado de titulizaciones, y del incipiente mercado de activos impagados.
Por último, si se utiliza el tercer método, la comparación con el precio de mercado, la ecua-
ción es la siguiente:
Una vez que un activo ha sido identificado como dañado y ha sido dotado/saneado, en las fe-
chas de presentación de los sucesivos estados financieros se debe volver a medir el importe
335 ❚ CAPÍTULO 12
del daño.
El importe de la cuantificación del daño no ha de ser necesariamente una cantidad fija y de-
terminada, sino que puede ser un rango calculado de acuerdo con el párrafo 39 del IAS 37
que tendrá en cuenta diversos escenarios que conducirán lógicamente a cuantificaciones di-
ferentes del daño estimado por el activo dañado.
EL DAÑO
EL DAÑO SE AMPLÍA EL DAÑO SE REDUCE
PERMANECE CONSTANTE
SE REALIZA EL
SE SANEA/DOTA NO SE DOTA/SANEA APUNTE INVERSO AL DEL
LA NUEVA DIFERENCIA ADICIONALMENTE EJERCICIO ANTERIOR
Un problema adicional surge con los intereses que pueden generar los activos dañados. Al
calcular la provisión, tal y como hemos comentado, se está incluyendo en el daño crediticio el
tipo de interés que se genera al calcular financieramente la cantidad del daño.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 336
La cuestión a debatir es cómo deben imputarse estos “intereses” llamados el efecto temporal
del análisis de daño. Existen dos modelos básicos al respecto: imputarlos como ingresos fi-
nancieros o bien reducir los cargos por daño en fechas sucesivas.
La evaluación colectiva de daño crediticio exige la estimación de los flujos de caja de los acti-
vos agrupados teniendo en cuenta la experiencia histórica de pérdidas del grupo de análoga
336 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Por tanto, el problema es ¿en qué punto la reserva negativa ha de pasarse por resultados?
Como regla general objetiva se aplica el criterio de pasar por pérdidas y ganancias la diferen-
cia entre el precio de adquisición corregido y el valor razonable de la fecha (salvo correccio-
nes anteriores). En su caso, hay reversión simétrica en ejercicios posteriores.
tados? Como regla general, el importe a pasar por pérdidas y ganancias es la diferencia entre
el precio de adquisición corregido y el valor razonable de la fecha (salvo correcciones anterio-
res). En esta ocasión, no hay reversión simétrica en ejercicios posteriores, en su caso.
La diferencia entre el valor contable y el valor actual de los flujos estimados de caja, descon-
tados con la ETTI más la prima de riesgo correspondiente a activos similares, puede originar
correcciones de valor. También en este caso habrá que sanear las reducciones de valor y,
tampoco, hay reversión simétrica.
337 ❚ CAPÍTULO 12
Al cierre del ejercicio 2004, la cotización de las acciones de Repsol es de 18 euros y la de las
acciones de Telefónica de 11,8 euros. En caso de venta, los gastos de transacción ascienden
al 1% del precio. Durante 2005 no se realizan nuevas adquisiciones ni ventas relativas a las
acciones anteriores. Al cierre de dicho ejercicio la cotización de las acciones de Repsol es de
17,5 euros y la de las acciones de Telefónica de 12,6 euros.
Realizar los apuntes contables que correspondan a las operaciones descritas en los libros de
Tapia SA.
Solución
En el momento de la compra procederá el asiento siguiente:
Los gastos de transacción no se incorporan al valor de los activos financieros sino que se llevan
directamente contra resultados del ejercicio en que se adquieren dichos activos, ya que éste es
el criterio que establece IAS 39 para los activos que forman parte de la cartera de negociación.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 338
Conviene señalar la diferencia entre este proceder y el criterio que establece nuestro Plan Ge-
neral de Contabilidad de 1990, que en la norma 8ª de su quinta parte relativa a las normas de
valoración establece que los gastos inherentes a la adquisición de valores negociables deben
formar parte del precio de adquisición de dichos valores.
Parece más coherente la solución de IAS 39, ya que en el caso de aplicar la norma del Plan
General de Contabilidad, si se adquieren unos valores y su cotización se mantiene estable,
habría que registrar una pérdida al comparar el precio de adquisición con el valor de mer-
cado como consecuencia de los gastos inherentes a la compra.
Al cierre del ejercicio se compara el precio de adquisición con el valor razonable al cierre, que
no es otro que su cotización en Bolsa (sin descontar tampoco en este caso los gastos de
transacción), y obtenemos los siguientes resultados:
La valoración a valor razonable, que en este caso es la cotización de las acciones en Bolsa, pro-
duce un resultado muy similar al que se habría producido si se hubieran vendido los títulos en
el mercado. Este criterio parece lógico ya que la venta de estos títulos se puede llevar a cabo en
cualquier momento que decida la empresa, dado el alto grado de liquidez de estos títulos.
Al cierre del ejercicio 2005 volvemos a comparar el valor contabilizado de las acciones con la
nueva cotización con el siguiente resultado:
Días más tarde, previo acuerdo de la Junta General de Accionistas, la sociedad Noya paga un
dividendo de 10 euros por acción con cargo a los beneficios del año 2003.
Al cierre del ejercicio, el valor teórico de las acciones de Noya es de 163 euros por acción y
subsisten las plusvalías tácitas existentes en el momento de la compra. Registrar las anotacio-
nes contables que se deriven de las anteriores operaciones en los libros de Carballo SA.
Solución
Estas acciones se van a considerar dentro de la categoría –residual– de activos financieros
disponibles para la venta, ya que a pesar de no cotizar pasan el test de cálculo de precio y en
consecuencia no se valoran al coste sino al fair value de patrimonio.
339 ❚ CAPÍTULO 12
Por el cobro del dividendo, se rebaja el valor de las acciones ya que dicho dividendo se debe
considerar devengado con anterioridad a la compra de las acciones.
Siendo “t” el tipo que corresponda a la retención fiscal sobre los dividendos.
La diferencia entre este valor razonable y el saldo de las acciones asciende a 23.000 euros
que deben contabilizarse mediante el apunte siguiente:
Estos títulos tienen la posibilidad de separar el valor de reembolso de los cupones (strip), por
lo que simultáneamente a la adquisición de los mismos Celada vende los cupones de estos tí-
tulos por su valor actualizado.
La intención de Celada es mantener esta inversión hasta su vencimiento. Al cierre del ejerci-
cio, el tipo de interés para este tipo de activos se ha situado en el 5,20%.
340 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Solución
Hipótesis a)
En el momento de realizar la compra, el importe a satisfacer por las obligaciones sería de
100.000 euros (100 x 1.000), pero teniendo en cuenta que en el mismo momento se venden
los cupones, se percibiría una cantidad correspondiente al valor actual de la renta que va a
recibir el comprador.
En la primera hipótesis, este valor actual sería el siguiente:
El precio de venta será el valor actual de una renta de 10 términos de 5.000 euros anuales al
5% de interés, esto es:
5.000 5.000 5.000 5.000
Valor actual = + + .................... + + = 38.608,67
1,05 1,052 1,059 1,0510
En este momento la inversión realizada queda valorada en 61.391,33 euros (100.000 –
– 38.608,67), que es el valor actualizado al 5% del importe a percibir dentro de 10 años. La
inversión realizada con un interés explícito se ha convertido ahora en una inversión con inte-
rés implícito. El asiento a registrar en la contabilidad sería el siguiente:
Al cierre el tipo de interés es mayor que en el momento de la compra, por lo que si actualizá-
semos el valor de reembolso al nuevo tipo, obtendríamos un valor inferior del activo financiero
al que figura en la contabilidad. Sin embargo, al tratarse de una cartera que se va a mantener
hasta el vencimiento no es relevante la variación del valor y no procederá ajuste alguno.
Hipótesis b)
En el momento inicial el desembolso neto sería la diferencia entre los 100.000 euros que en
principio hay que satisfacer por las obligaciones y el valor de los cupones vendidos que ahora
se actualiza al 4,75%.
La inversión neta en este momento queda valorada en 60.436,41 euros (100.000 – 39.563,59),
que es el valor actual de los 100.000 euros que la empresa percibirá a los 10 años. La TIR de
esta operación será superior al 5% que se establece en la primera hipótesis.
Lógicamente el mayor importe recibido por la venta de los cupones hace que la rentabilidad
de nuestra inversión sea mayor que antes.
En principio caben dos soluciones contables. Una consistiría en tratar esta operación como
una inversión única de 60.436,41 euros que generaría unos intereses con la nueva TIR cal-
341 ❚ CAPÍTULO 12
culada y que se contabilizaría del modo siguiente:
La solución alternativa consistiría en registrar una inversión por los 100.000 euros iniciales de
la que se segrega una parte que se vende con un tipo de interés diferente al de la compra,
por lo que genera un apunte en resultados. Los asientos serían los siguientes:
El beneficio corresponde a la diferencia entre el valor actual de los cupones al precio de com-
pra y el valor actual de los mismos al precio de venta.
En nuestra opinión, esta segunda alternativa es más coherente con los criterios establecidos
en IAS 39.
Al 31 de diciembre de 2004, fecha de cierre del ejercicio, el tipo de interés de mercado para
342 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Solución
En el momento de la adquisición se registra el siguiente apunte:
Como consecuencia de la variación en el tipo de interés y del cambio del dólar, al cierre del
ejercicio el valor razonable de este activo asciende a:
5.000 5.000 5.000
Valor actual de un título = + + = 95,8884552 dólares
1,080,5 1,081,5 1,082,5
Valor actual de la cartera = 1.000 títulos x 95,8884552 dólares / 1,22 = 78.597 euros
Se debe registrar una pérdida por 4.736, que es la diferencia entre el importe satisfecho de
83.333 euros y su valor razonable al cierre, 78.597 euros.
El resultado producido es consecuencia de dos efectos distintos. Por una parte se produce
una diferencia de valor debida a la variación en el tipo de interés y por otra hay otra diferencia
motivada por la variación en el tipo de cambio de la divisa. Estos dos efectos pueden tener el
mismo signo, como ocurre en nuestro caso, o signos contrarios. En todo caso y aunque el re-
sultado final sea coincidente con el registrado en el asiento anterior, sería necesario calcular
cada uno de ellos por separado ya que dicha información debe facilitarse en la Memoria.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 343
Solución
En el momento de la compra debemos calcular el valor actual de los compromisos adquiridos
y ése será el valor atribuido al inmovilizado.
100.000 150.000
Valor actual = 50.000 + + = 277.839 euros
1,06 1,062
343 ❚ CAPÍTULO 12
a Pagarés a corto plazo 94.340
En caso de que la empresa hubiera optado por considerar estos pasivos financieros como de
negociación, se actualizaría su valor con el nuevo tipo de interés al cierre y la diferencia se lle-
varía a pérdidas y ganancias.
FASCiCULO 12 ok 30/9/04 12:17 Página 344
Al cierre del ejercicio las acciones del BBVA han sufrido una disminución de valor de 5.000 x
(12 – 10,27) = 8.650 euros, que deberían generar el apunte siguiente:
Ahora bien, la pérdida generada por las acciones se compensa con el beneficio correspon-
diente al contrato de futuros que se ha establecido precisamente como cobertura. Por tanto,
procedería el siguiente apunte contable:
También se pueden ajustar los importes de las cuentas de orden para ajustarlos al nuevo va-
lor del compromiso adquirido por la empresa, como consecuencia de la bajada en la cotiza-
ción de las acciones, y en caso de ajuste en la fianza constituida contabilizar la recuperación
de una parte de ésta con un asiento inverso al de su constitución.
Por los intereses que genere la fianza constituida procederá un asiento como el siguiente:
C A P Í T
13
U L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 347
4. Balance 352
4. 1. Finalidad 352
4. 2. Contenido del balance 352
4. 3. Clasificación de partidas 354
4. 3. 1. Activo 354
4. 3. 2. Pasivo 355
6. 1. Finalidad 360
6. 2. Contenido 361
8. Bibliografía 371
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 347
C A P Í T
13
U L O
1. Introducción
La IAS 1, Presentación de Estados Financieros, proporciona una guía que contiene los criterios fun-
damentales que guían la presentación de la información contable con propósitos de información ge-
neral. Además, dicha norma contiene referencias acerca de la estructura y el contenido que, con ca-
rácter de mínimo, deben incorporar los estados financieros que, anualmente, elaboren las empresas,
ya estén referidos a un único sujeto (información individual) o a un grupo de empresas (información
347 ❚ CAPÍTULO 13
consolidada). Junto a la anterior, es necesario referirse a la IAS 7, Estado de Flujos de Efectivo, por
cuanto en la misma se desarrolla la forma de elaborar y presentar el estado de flujos de tesorería
que, como se indica más adelante, constituye un documento de presentación obligatoria para las
empresas que suministren información con arreglo a las NIIF.
En este proceso de preparación y emisión de la información contable, la IAS 1 reconoce que la res-
ponsabilidad asociada a la emisión de los estados financieros corresponde a la propia empresa y re-
cae sobre el órgano de administración correspondiente.
Para alcanzar su propósito, la IAS 1 bebe, como no puede ser de otro modo, en el Marco Conceptual
para la Preparación y Presentación de los Estados Financieros, y antes de desgajar el contenido y es-
tructura de los estados financieros aborda algunas consideraciones generales, entre las que cabe
mencionar: el objetivo y componentes de los estados financieros, algunas implicaciones y extensio-
nes de las características cualitativas de la información financiera, así como de las hipótesis funda-
mentales (empresa en funcionamiento y devengo) recogidas en el propio Marco Conceptual.
Aunque los requisitos generales contenidos en la norma son aplicables a todos los sujetos, es nece-
sario considerar que atendiendo a las características específicas de la actividad desarrollada por las
entidades financieras, la IAS 30, Información a Revelar en los Estados Financieros de Bancos y Enti-
dades Financieras Similares, contiene requisitos adicionales en lo que se refiere a la información a
suministrar por los mismos, haciendo especial hincapié no sólo en el contenido de las partidas pro-
pias de balance y cuenta de resultados, sino también en la información a suministrar sobre los ries-
gos derivados de la actividad que desarrollan.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 348
Sin perjuicio de los estados señalados, la propia norma recoge la sugerencia de extender la infor-
mación a presentar más allá de la contenida en los mismos a través de otros documentos, como
pueden ser un informe de gestión o cualquiera otra información que a juicio de la dirección de la
empresa pueda contribuir a que los usuarios adopten sus decisiones en un ambiente de menor in-
certidumbre. No obstante, cualquier otro informe o estado (por ejemplo, el informe de gestión o un
estado demostrativo de la generación y el reparto del valor añadido, etcétera) presentado además
de los descritos están fuera del alcance de las NIIF. En este sentido, toda empresa cuyos estados fi-
nancieros cumplan con el contenido de las NIIF deberá pronunciarse de manera explícita en las no-
tas a los estados financieros sobre el cumplimiento o no de las NIIF en la preparación de los esta-
dos financieros.
En el caso de que la dirección llegara a la conclusión de que cumplir con un determinado re-
quisito establecido en una norma podría dar un resultado tan confuso que entrara en con-
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 349
flicto con el propio objetivo de los estados financieros, la empresa abandonará el requisito,
siempre que el marco legal aplicable exija, o bien no impida, este abandono, revelando obli-
gatoriamente que:
a) Los estados financieros presentan razonablemente la situación y rendimiento financieros,
así como los flujos de efectivo de la entidad.
b) Se ha cumplido con las normas aplicables, excepto en el requisito abandonado.
c) El título de la norma que la entidad ha dejado de cumplir, la naturaleza de la disensión so-
bre la misma y el tratamiento que la norma o interpretación requeriría, las razones por las
que ese tratamiento sería confuso y entraría en conflicto con el objetivo de los estados fi-
nancieros fijado en el Marco Conceptual, así como el tratamiento alternativo adoptado.
d) Para cada ejercicio sobre el que se presente información, el impacto financiero que haya
supuesto el abandono descrito sobre cada partida de los estados financieros que habría
sido presentada cumpliendo con el requisito en cuestión.
349 ❚ CAPÍTULO 13
del futuro de la empresa. En este sentido, y salvo que la dirección de la empresa tenga la in-
tención de liquidarla o cesar en su actividad, o bien no exista una alternativa más realista que
proceder de alguna de estas formas, los estados financieros se prepararán bajo la hipótesis
de empresa en funcionamiento. En caso de que los estados financieros no se preparen según
este criterio, la empresa deberá poner de manifiesto explícitamente este hecho, junto con las
hipótesis alternativas sobre las que han sido elaborados, así como las razones por las que la
empresa no puede ser considerada como una empresa en funcionamiento.
De lo anterior se sigue que la dirección, al preparar los estados financieros, debe evaluar en
qué medida es probable que la empresa continúe en funcionamiento. Si de dicha evaluación
se desprendiera la existencia de graves incertidumbres, asociadas a hechos o condiciones
que pueden constituir dudas significativas sobre la posibilidad de que la empresa siga des-
empeñando sus funciones con habitualidad, procederá a revelarlas en los estados financie-
ros. Para ello, la dirección de la empresa deberá considerar toda la información disponible
para el futuro previsible que cubrirá, al menos, los 12 meses siguientes a la fecha a la que se
refieren los estados financieros.
Como es lógico, y a los efectos de lo señalado anteriormente, cuando la empresa cuente con
un historial de explotación rentable, y con facilidades de acceso al crédito financiero, la con-
clusión adecuada será la de utilizar la hipótesis de empresa en funcionamiento sin que sean
precisos análisis más sofisticados. Si no fuera ese el caso, habrá que considerar y ponderar di-
versos factores relacionados, entre otros, con la rentabilidad actual y futura, las expectativas de
reembolso de la deuda y las fuentes potenciales de sustitución de la financiación existente.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 350
Además, y a excepción del cálculo y elaboración del estado de flujos de tesorería, la empresa
presentará los estados financieros según el criterio del devengo, debiendo reconocer los ele-
mentos de los estados financieros como activos, pasivos, patrimonio neto, ingresos y gastos
cuando satisfagan las definiciones y los criterios de reconocimiento previstos en el Marco
Conceptual para tales elementos.
No obstante, la norma exige un contenido mínimo, si bien no contempla formato alguno para
los estados financieros. En este sentido, cada clase de partidas de similar naturaleza o fun-
ción que posea la suficiente importancia relativa deberá ser presentada por separado en los
estados financieros, agrupando aquellas partidas que por sí solas no tengan la suficiente im-
portancia relativa con otras de similar naturaleza o función.
La consideración acerca de la relevancia (importancia relativa) de cada partida de los estados fi-
nancieros queda a juicio de la dirección de la empresa, si bien la norma trata de clarificar el con-
cepto de importancia relativa, indicando que las omisiones o las inexactitudes de partidas tienen
importancia relativa (o son materiales) si pueden, individualmente o en su conjunto, influir en las
decisiones económicas que adopten los usuarios a partir de los estados financieros. La materia-
lidad depende del importe y la naturaleza de la omisión o inexactitud, enjuiciadas en función de
las circunstancias particulares en que se haya producido. De la aplicación del concepto de im-
portancia relativa se deriva que no es necesario cumplir un requerimiento específico, aun
cuando esté en una norma, si la información correspondiente carece de importancia relativa.
Los resultados asociados a transacciones accesorias respecto a las actividades que generan
los principales ingresos se presentarán compensando los ingresos con los gastos que genere
la misma operación, siempre y cuando esta presentación refleje el fondo de la transacción. A
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 351
estos efectos, los resultados derivados de la enajenación o abandono de activos fijos se sue-
len presentar netos, deduciendo del importe recibido por la venta el valor contable del activo
y los gastos relacionados con la venta o abandono.
351 ❚ CAPÍTULO 13
a) El motivo para no reclasificar los importes.
b) La naturaleza de los ajustes que tendrían que haberse efectuado si los importes hubieran
sido reclasificados.
Sin perjuicio de los pormenores mencionados acerca de la estructura de los estados financie-
ros, y sin abordar ahora el contenido de cada uno de ellos que será tratado en los siguientes
apartados, sí resulta común a todos ellos la existencia de algunos elementos que seguida-
mente se enumeran:
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 352
Esta información debe figurar en lugar destacado y repetirse tantas veces como sea necesa-
rio, generalmente en la cabecera de cada página o en el encabezamiento de las columnas de
que conste el estado correspondiente, para obtener una adecuada comprensión de la infor-
mación presentada.
352 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Los estados financieros deberán ser objeto de presentación con una periodicidad que, como
mínimo, ha de ser anual. Cuando cambie la fecha del balance de la entidad y presente esta-
dos financieros para un periodo contable mayor o menor a un año, la entidad deberá informar
del periodo concreto cubierto por los estados financieros, y además de la razón para usar un
periodo más corto o más largo. Junto con dicho extremo deberá indicarse el hecho de que no
son totalmente comparables las cifras comparativas que se ofrecen en los estados financieros
distintos del balance (por referirse a periodos de tiempo de diferente duración).
4. Balance
4. 1. Finalidad
El balance es el estado financiero en el que se muestran los activos y pasivos de la empresa y,
por diferencia entre ambos, el patrimonio neto. Como es lógico, el reconocimiento de los ele-
mentos del balance (activo, pasivo y fondos propios) requiere el cumplimiento de la definición
y de los requisitos para el reconocimiento de los mismos contenidos en el marco conceptual.
f) Activos biológicos.
g) Existencias.
h) Deudores comerciales y otras cuentas a cobrar.
i) Efectivo y otros medios líquidos equivalentes.
j) Acreedores comerciales y otras cuentas a pagar.
k) Provisiones.
l) Pasivos financieros (excluyendo los importes mencionados en los apartados j) y k) anteriores).
m) Activos y pasivos por impuestos corrientes.
n) Activos y pasivos por impuestos diferidos.
ñ) Intereses minoritarios.
o) Capital emitido y reservas atribuibles a los poseedores del capital de la dominante.
353 ❚ CAPÍTULO 13
existencias, cuentas a cobrar y el efectivo.
c) Los importes, naturaleza y plazo de los pasivos, lo que llevará, por ejemplo, a diferenciar
los préstamos y provisiones con coste de aquellos que no lo tienen, debidamente clasifica-
dos como corrientes o no corrientes.
Además, el nivel de información suministrada para cada partida deberá hacerse atendiendo a
los siguientes extremos:
a) El inmovilizado material se desagregará por clases o grupos, según lo establecido en la IAS 16.
b) Las cuentas a cobrar se descompondrán según su origen, atendiendo a si proceden de
clientes comerciales, de partes vinculadas, de anticipos o de otras partidas.
c) Las existencias se subdividirán en categorías tales como mercaderías, materias primas,
productos en curso y productos terminados.
d) Las provisiones se desglosarán de forma que se muestren por separado las que corres-
ponden a provisiones por retribuciones a los empleados y el resto.
e) El patrimonio neto de la empresa se desglosará de forma que muestre por separado las dis-
tintas clases de aportaciones a título de capital, primas de emisión y reservas, y la descrip-
ción de la naturaleza y destino de cada partida de reservas que figure en el patrimonio neto.
f) Para cada una de las clases de capital aportado deberá poner de manifiesto:
• El número de acciones autorizadas para su emisión, el número de acciones emitidas y des-
embolsadas totalmente, así como las emitidas pero aún no desembolsadas en su totalidad.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 354
Además, se presentarán por separado las partes de cada partida relativas a cantidades a pa-
gar o cobrar de la empresa dominante, de las dependientes, de las asociadas y de otros que
tengan la consideración de partes vinculadas con la empresa, precisando cuál es el criterio
de valoración aplicado a cada una de ellas.
354 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
4. 3. Clasificación de partidas
La presentación de los activos y pasivos deberá hacerse diferenciando las partidas circulan-
tes o corrientes de las de carácter no corriente. En cambio, se permite de forma residual la
presentación de los activos y pasivos ordenados atendiendo a su liquidez sólo cuando tal pre-
sentación dote a la información contable de mayores cotas de relevancia y fiabilidad que la
clasificación corriente-no corriente.
4. 3. 1. Activo
A estos efectos, la IAS 1 califica como corriente a los activos que satisfagan alguno de los
siguientes criterios:
a) Su saldo se espera realizar, o se tiene para su venta o consumo, en el transcurso del
ciclo normal de la explotación de la empresa.
b) Se mantiene fundamentalmente con fines de negociación.
c) Se espera realizar dentro del periodo de los 12 meses a contar después de la fecha
del balance.
d) Se trata de efectivo u otro medio equivalente al efectivo (tal y como se define en la
IAS 7), cuya utilización no esté limitada, para ser intercambiado o usado para cance-
lar un pasivo, al menos dentro de los 12 meses siguientes a la fecha del balance.
Como puede verse, aunque la elección con carácter único de un plazo basado en el ci-
clo de explotación o periodo medio de maduración pudiera ser más riguroso desde un
punto de vista técnico, no es fácil obviar las dificultades prácticas que plantearía, razón
por la que las empresas se inclinarán con carácter general por el criterio más habitual
basado en la realización esperada o vencimiento del activo dentro del periodo de los 12
meses siguientes tras la fecha del balance.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 355
Los activos no corrientes se definen, por exclusión, como aquellos que no tienen la con-
sideración de corrientes. Así pues, bajo este paraguas es posible agrupar tanto activos
tangibles (inmovilizado material y propiedades inmobiliarias) como intangibles (gastos
de desarrollo, fondo de comercio, y otros) y financieros (inversiones en empresas del
grupo o asociadas y otros activos financieros permanentes), siendo común a todos ellos
el estar ligados a la empresa a largo plazo. Entre las inversiones de carácter financiero
cabe destacar las mantenidas con empresas no controladas pero vinculadas al grupo, lo
que suele implicar que los porcentajes de propiedad se sitúen entre el 20% y el 50% del
capital. El resto de inversiones financieras se incluirán entre los activos no corrientes,
siempre y cuando no se vaya a negociar con ellas; o formarán parte de los corrientes, in-
cluso como parte de los equivalentes de efectivo al satisfacer la definición que, para los
mismos, recoge la IAS 7.
Por otra parte, siempre que la empresa hubiera efectuado la distinción entre partidas co-
rrientes y no corrientes, el activo corriente incluirá las existencias y los deudores comer-
ciales que se vayan a vender, consumir y realizar dentro del ciclo normal de explotación,
incluso aunque los mismos no se esperen realizar dentro del periodo de 12 meses si-
guientes a la fecha del balance. Los activos corrientes también incluyen activos que se
mantienen inicialmente con fines de negociación, así como la parte corriente de los acti-
vos financieros no corrientes.
4. 3. 2. Pasivo
Las obligaciones asumidas por la empresa pueden clasificarse siguiendo un criterio ho-
355 ❚ CAPÍTULO 13
mogéneo con el expuesto para los activos. Según el plazo en el que espere liquidarse la
correspondiente obligación, se podrá distinguir entre pasivos corrientes y no corrientes.
Siguiendo la IAS 1, un pasivo tendrá la consideración de corriente cuando satisfaga al-
guno de los siguientes criterios:
a) Se espera liquidar en el curso normal de la explotación de la empresa.
b) Se mantiene fundamentalmente con fines de negociación.
c) Debe liquidarse dentro del periodo de 12 meses desde la fecha del balance.
d) La empresa no tiene un derecho incondicional para diferir el vencimiento del pasivo
por, al menos, los 12 meses siguientes a la fecha del balance.
Los pasivos que no queden incluidos en alguno de los anteriores apartados tendrán la
consideración de no corrientes.
De lo anterior se sigue que aquellos pasivos relacionados con la explotación, tales como
los acreedores comerciales y los pasivos por gastos de personal, serán corrientes aun
cuando su vencimiento tenga lugar después de transcurridos los 12 meses siguientes a
la fecha del balance.
También existen pasivos corrientes que no proceden del ciclo normal de la explotación,
pero deben ser atendidos porque o bien vencen dentro de los 12 meses siguientes a la
fecha del balance o bien son mantenidos, esencialmente, con propósitos de negocia-
ción. Sirvan a modo de ejemplo los pasivos financieros mantenidos para negociar de
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 356
acuerdo con la IAS 39, los descubiertos bancarios, la parte corriente de los pasivos no
corrientes, los dividendos a pagar, etcétera. Los préstamos que financian el capital circu-
lante a largo plazo se clasificarán como pasivos no corrientes siempre y cuando no vayan
a liquidarse antes de 12 meses.
Finalmente, debe tenerse en cuenta que la empresa deberá clasificar sus pasivos finan-
cieros como corrientes cuando deban liquidarse dentro de los 12 meses siguientes a la
fecha del balance, aunque:
a) El plazo original del pasivo fuera un periodo superior a doce meses.
b) Exista un acuerdo para la refinanciación a largo plazo, o para la reprogramación de
los pagos, que se haya concluido después de la fecha del balance y antes de que los
estados financieros hayan sido formulados o autorizados por el órgano de administra-
ción correspondiente para su emisión.
al menos, 12 meses tras dicha fecha. A continuación se ilustra la presentación del balance
en el que se han clasificado las partidas atendiendo a su naturaleza corriente-no corriente.
20X4 20X3
ACTIVOS
Activos no corrientes
Inmovilizado material X X
Fondo de comercio X X
Propiedad industrial X X
Inversiones en empresas asociadas X X
Otros activos financieros X X
X X
Activos corrientes
Existencias X X
Deudores comerciales y otras cuentas a cobrar X X
Efectivo y otros medios líquidos X X
X X
Total activo X X
20X4 20X3
Pasivo corriente
Acreedores comerciales y otras cuentas a pagar X X
Préstamos a corto plazo X X
Préstamos a largo plazo con vencimiento a corto plazo X X
Provisiones para garantías X X
X X
5. Estado de resultados
La definición contenida en el Marco Conceptual para el patrimonio neto, definido como la parte resi-
dual de los activos una vez que se ha deducido el valor de los pasivos, condiciona el concepto de in-
greso o ganancia, como el incremento (disminución) de valor de los activos (pasivos) que da lugar a
aumentos (disminuciones) en el patrimonio neto. El concepto de gasto o pérdida se define en sentido
inverso al de ingreso o ganancia.
357 ❚ CAPÍTULO 13
grarán dicho estado contable llevándose directamente a partidas de patrimonio neto. Sirva citar a
modo de ejemplo las reservas de revalorización de inmovilizado material e inmaterial y las ganancias
o pérdidas por la conversión de los estados financieros en moneda extranjera.
Esta circunstancia obliga a leer el resultado a través de dos estados financieros que, en alguna me-
dida, pueden parecer redundantes: el estado de resultados y el estado de cambios en el patrimonio
neto. A continuación se aborda el contenido de cada uno de ellos.
5. 1. Contenido
La IAS 1 huye, como se ha dicho, de los formatos por lo que no recoge sino un conjunto de
informaciones a incluir en el cuerpo del estado de resultados. En concreto son:
a) Ingresos ordinarios.
b) Gastos financieros.
c) Participación en las pérdidas y ganancias de las empresas asociadas y negocios conjun-
tos que se contabilicen según el método de la participación.
d) Pérdidas o ganancias, antes de impuestos, que se hayan reconocido por la venta o aban-
dono de activos, así como por la cancelación de pasivos, correspondientes a explotacio-
nes en interrupción definitiva.
e) Gasto por el impuesto sobre beneficios.
f) Ganancia o pérdida neta del ejercicio.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 358
Como puede verse, no hay cabida para los resultados extraordinarios, ya que la IAS 1 y la IAS 8
no permiten que se presente, ni en el estado de resultados ni en las notas, ninguna partida de
ingresos o gastos bajo esa denominación. Se deberán presentar, como ya se indicara para el ba-
lance, también en el estado de resultados líneas adicionales que contengan otras partidas, así
como agrupaciones y subtotales de las mismas siempre y cuando dicha incorporación sea rele-
vante para la comprensión del rendimiento financiero de la entidad. Los factores a considerar
para la inclusión o no de nuevas partidas se corresponden con los recogidos para el balance,
debiendo incluir, entre otros, la importancia relativa, así como la naturaleza y función de los dife-
rentes componentes de los ingresos y los gastos.
5. 2. Estructura
358 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
La presentación de los componentes del resultado puede hacerse en forma de cuenta, en-
frentando gastos e ingresos o, alternativamente, como viene siendo práctica habitual entre las
empresas que presentan sus estados financieros según NIIF, en forma de estado, en el que
mediante un formato vertical se van desgranando los resultados.
Además, la cuenta de resultados deberá contener en el cuerpo principal o en las notas a los
estados el detalle de los gastos, pudiendo emplear para ello dos criterios de clasificación: se-
gún su naturaleza y por funciones.
Según el primer método, los gastos se agrupan en el estado de resultados de acuerdo con su
naturaleza (amortización, compras de materiales, costes de transporte, retribuciones a los em-
pleados, costes de publicidad) y no se distribuyen en las diferentes funciones que se desarro-
llan en el seno de la empresa. Seguidamente se incluye un ejemplo.
20X4 20X3
Ingresos ordinarios X X
20X4 20X3
359 ❚ CAPÍTULO 13
EL 31 DE DICIEMBRE DE 20X4
(Clasificación de los gastos por función) (En miles de unidades monetarias)
20X4 20X3
Ingresos ordinarios X X
Cuando se utiliza el método por funciones, y puesto que la información sobre la naturaleza de
ciertos gastos es útil al predecir flujos de efectivo, se exige en todo caso la presentación de
datos adicionales sobre ciertos gastos por naturaleza, en concreto, el importe de los gastos
por amortización y de gastos de personal.
Además del detalle referido para los gastos, la empresa deberá revelar por separado informa-
ción de aquellas partidas de especial relevancia atendiendo a su importancia relativa, natura-
leza e importe. En concreto, deberá suministrar información al menos acerca de los ingresos
y gastos derivados de:
a) El deterioro del valor de los activos así como la reversión de las pérdidas que se hayan po-
dido producir a lo largo del periodo.
b) operaciones en explotación interrumpida y las actividades de reestructuración que haya
iniciado la empresa.
c) Enajenaciones o abandonos de elementos del inmovilizado material, inmaterial o financiero.
d) Reversiones de provisiones con indicación de la naturaleza y motivos.
360 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
e) El importe de los beneficios por acción, básicos y diluidos, calculados de acuerdo con la
IAS 33, y el importe de los dividendos por acción para el ejercicio cubierto por los estados
financieros, incluyendo tanto los acordados como los propuestos a la fecha del balance.
Por esa razón, es necesario contar con un estado financiero que muestre las operaciones
que han dado lugar a variaciones en el patrimonio neto de la empresa y que no están pre-
sentadas en el estado de resultados. Además, este documento contribuye a que el usuario
identifique y comprenda el sentido de las minusvalías y plusvalías no realizadas en función
de su origen y de su imputación a unas u otras partidas de patrimonio. Consiguientemente,
el estado de cambios en el patrimonio neto de un lado complementa la información conte-
nida en el estado de resultados, y de otro, dota de cierto dinamismo a las cifras del neto pa-
trimonial que, referidas a dos ejercicios consecutivos, muestra el balance. En definitiva, per-
mite al usuario conocer las causas de la variación habida en el periodo en la riqueza de los
propietarios de la empresa, así como justificar la adopción de determinadas políticas de re-
parto de beneficios.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 361
6. 2. Contenido
El estado de cambios en el patrimonio neto refleja el aumento o disminución experimentado
por los activos netos de la empresa a lo largo de un periodo. En definitiva, recoge la variación,
expresada en términos cuantitativos y cualitativos, que sufre el patrimonio neto de la entidad
a lo largo de un determinado periodo de tiempo.
De acuerdo con la IAS 1, la empresa debe incluir entre sus estados financieros un estado de
cambios en el patrimonio neto que muestre en el cuerpo principal:
a) Las pérdidas o ganancias del ejercicio.
b) Cada una de las partidas de ingresos y gastos del ejercicio que, según lo dispuesto en
otras normas, haya reconocido directamente en el patrimonio neto, así como el importe to-
tal de esas partidas, siendo posible identificar, entre otras:
• Diferencias de cambio de la conversión de estados financieros de empresas extranjeras.
Son las derivadas de la conversión de los activos y pasivos de la entidad extranjera al
tipo de cambio de cierre, y que según la IAS 21, Efectos de las Variaciones en los Tipos
de Cambio de la Moneda Extranjera, deben clasificarse como componentes del patrimo-
361 ❚ CAPÍTULO 13
nio neto hasta que tenga lugar la enajenación de la inversión neta.
• Revalorización del inmovilizado material e inmaterial, de acuerdo con la IAS 16, Inmovi-
lizado Material, e IAS 38, Inmovilizado Inmaterial bajo determinados supuestos, y siem-
pre siendo su aplicación uniforme, es posible reconocer los activos por su valor revalori-
zado, determinado en la fecha de revalorización menos la amortización acumulada
practicada posteriormente y el importe acumulado de las pérdidas por deterioro de valor
que haya sufrido el elemento. Las variaciones que experimenten los activos revaloriza-
dos deberán recogerse en una cuenta de reserva de revalorización, dentro de patrimo-
nio neto. Las revalorizaciones acumuladas pueden trasladarse a las cuentas de reservas
cuando la plusvalía correspondiente se realice, ya sea por enajenación o retiro del
mismo. No obstante, una parte de la plusvalía puede ser realizada a medida que se usa
el activo por parte de la empresa, por la diferencia entre la depreciación calculada se-
gún el valor revalorizado del activo y la calculada por su coste original.
• Pérdidas y ganancias por aplicación del valor razonable en instrumentos financieros dis-
ponibles para la venta. La IAS 39 ofrece dos posibilidades para el tratamiento de las pér-
didas y ganancias por la revalorización de los activos financieros disponibles para la
venta según el valor razonable: que sean incluidas en la ganancia o pérdida neta del pe-
riodo en el que ha surgido, o llevarlas directamente a patrimonio neto, suministrando in-
formación de este hecho en el estado de cambios en el patrimonio neto, hasta que el
activo financiero sea vendido o reembolsado o hasta que se determine que el activo en
cuestión ha sufrido un deterioro de valor, en cuyo caso las ganancias o pérdidas acumu-
ladas, previamente reconocidas como componentes del patrimonio neto, deben ser in-
cluidas en la ganancia o la pérdida neta del periodo.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 362
• Pérdidas y ganancias por operaciones de cobertura sobre los flujos de efectivo. En las
operaciones de cobertura sobre flujos de efectivo, la parte de la pérdida o ganancia ori-
ginada en el instrumento de cobertura, que se haya determinado como una cobertura
eficaz o eficiente, debe ser reconocida directamente en el patrimonio neto.
c) El total de los ingresos y gastos del ejercicio –calculado como la suma de los apartados a)
y b)–, identificando por separado el importe total atribuido a los propietarios del capital de
la sociedad dominante y el que corresponde a los intereses minoritarios.
d) Para cada uno de los componentes del patrimonio neto, los efectos derivados de los cam-
bios en las políticas contables y de la corrección de errores de ejercicios anteriores según
lo previsto en la IAS 8. A este respecto, la IAS 8 establece que en la rectificación de erro-
res de ejercicios anteriores el importe de la corrección dará lugar al ajuste del saldo inicial
de reservas, sin perjuicio de que la información comparativa sea corregida, a menos que
esto no resulte posible. Y en el mismo sentido, los cambios en las políticas contables de-
ben aplicarse de forma retroactiva a menos que tal proceder sea impracticable, dando lu-
gar a una modificación del saldo inicial de reservas.
362 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Además, la empresa deberá presentar también en el cuerpo del estado de cambios en el pa-
trimonio neto o, alternativamente, en las notas a los estados financieros:
a) Los importes de las transacciones realizadas con los propietarios en tanto tales, distin-
guiendo las distribuciones acordadas para los mismos, entre otras, ampliaciones y reduc-
ciones de capital, operaciones con acciones propias y distribución de dividendos.
b El saldo de las pérdidas o ganancias acumuladas al principio del ejercicio y en la fecha del
balance, así como los movimientos experimentados durante el ejercicio.
c) Una conciliación entre los importes en libros iniciales y finales de cada clase de capital so-
cial, prima de emisión y reservas, informando por separado de cada movimiento habido
en los mismos.
Revalorización de inmovilizado
material e inmaterial X X
Déficit de revalorización de inversiones (X) (X)
Diferencias de conversión (X) (X)
Pérdidas y ganancias netas no
reconocidas en el estado de resultados X (X) X
Revalorización de inmovilizado
363 ❚ CAPÍTULO 13
material e inmaterial (X) (X)
Exceso de revalorización de inversiones X X
Diferencias de conversión (X) (X)
Pérdidas y ganancias netas no
reconocidas en el estado de resultados (X) (X) (X)
Consiguientemente, es necesario que los usuarios dispongan de un estado financiero que re-
coja los cobros y pagos realizados por la empresa a lo largo del ejercicio, distinguiendo el ori-
gen y el destino del efectivo y de los equivalentes de efectivo, según las actividades corrientes,
de inversión o de financiación. Es más, la IAS 7, Estado de Flujos de Efectivo, reconoce entre
364 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Por esa razón, la IAS 7 establece la obligatoriedad de que las empresas presenten un estado
de flujos de efectivo como documento integrante de los estados financieros elaborados según
NIIF.
tos bancarios, para las que en algunos países forman parte de la gestión de tesorería de la
empresa y, en consecuencia, permite en ese caso que tengan la consideración de compo-
nentes del efectivo y demás equivalentes líquidos.
7. 2. Contenido
El estado de flujos de efectivo muestra los movimientos de efectivo y de los equivalentes líqui-
dos (excluyendo los movimientos entre las partidas que constituyen dicho efectivo y sus equi-
valentes), clasificados en función de la actividad a la que están adscritas las transacciones, a
saber, ordinarias, de inversión y de financiación.
Como ya se ha dicho, a la elaboración de dicho documento no le son ajenos los criterios ge-
nerales sentados al comienzo de este capítulo, especialmente los de uniformidad y compara-
365 ❚ CAPÍTULO 13
bilidad; por esa razón, la norma aborda en detalle la regulación de dos cuestiones fundamen-
tales: la clasificación por actividades y la presentación de los flujos de efectivo procedentes
de las actividades ordinarias.
Como ya se ha dicho, el estado de flujos de efectivo deberá presentar por separado los flujos
de efectivo procedentes de actividades ordinarias, de inversión y de financiación. Por esa ra-
zón, es necesario precisar el contenido de cada una de las mismas, si bien para ello, deberá
tenerse en cuenta la naturaleza de la actividad realizada por la empresa, dado que una misma
operación puede considerarse en distintos tipos de actividad en función del tipo de empresa.
7. 2. 1. Actividades ordinarias
Las actividades ordinarias constituyen la principal fuente generadora de efectivo y equi-
valentes de efectivo para la empresa, y recoge las actividades que no pueden tener la
consideración de actividades de inversión o de financiación. Si bien es necesario dete-
nerse en la actividad económica desarrollada por la empresa, es posible señalar entre
otras transacciones las siguientes:
a) Cobros procedentes de la venta de bienes y prestación de servicios, royalties, comi-
siones, etcétera.
b) Pagos a proveedores por el suministro de bienes y servicios.
c) Pagos a los empleados y por cuenta de los mismos.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 366
presentan por separado las principales categorías de cobros y de pagos en términos bru-
tos. La información puede obtenerse de dos formas:
a) Directamente de los registros contables de la empresa.
b) Ajustando las ventas, el coste de ventas y otras partidas del estado de resultados con:
• La variación de existencias, cuentas a cobrar y cuentas a pagar de las actividades
ordinarias.
• Otras partidas que no tienen impacto en el efectivo o equivalentes.
• Partidas que tienen la consideración de actividades de inversión o financiación.
FLUJOS DE EFECTIVO
DE LAS ACTIVIDADES ORDINARIAS X
FLUJOS DE EFECTIVO
DE LAS ACTIVIDADES ORDINARIAS X
367 ❚ CAPÍTULO 13
mite diferenciar cómo se generan y utilizan los flujos de efectivo de las operaciones, in-
formación que no puede ser recogida en otro estado financiero.
7. 2. 2. Actividades de inversión
Los flujos de efectivo de las actividades de inversión, obtenidos como diferencia entre los
cobros y pagos de las distintas operaciones de inversión, representan los cobros o pagos
netos derivados de la adquisición de recursos económicos o inversiones financieras que
van a generar ingresos y flujos de efectivo futuros.
Entre las operaciones que dan lugar al cálculo de las actividades de inversión, cabe
mencionar:
a) Pagos para la adquisición de inmovilizado material, inmaterial y otros activos a largo
plazo, incluyendo los relativos a actividades de desarrollo capitalizados y trabajos rea-
lizados por la empresa para su inmovilizado.
b) Cobros por ventas de activos materiales o inmateriales.
c) Pagos por la adquisición de instrumentos de pasivo o de capital emitidos por otras em-
presas, así como participaciones en negocios conjuntos (distintos de los pagos por esos
mismos títulos e instrumentos que sean considerados efectivo y equivalentes al efectivo,
y de los que se tengan para intermediación u otros acuerdos comerciales habituales).
d) Cobros por la venta y reembolso de los instrumentos e inversiones anteriormente se-
ñalados.
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 368
7. 2. 3. Actividades de financiación
Por último, las actividades de financiación se definen como aquellas que producen cam-
bios en el tamaño y composición de los fondos propios y ajenos tomados por la empresa.
Permiten realizar la predicción de las necesidades de efectivo para hacer frente a los
compromisos con los suministradores de capital a la empresa.
Tanto los flujos de efectivo de las actividades de inversión como los de las actividades de
financiación deben presentarse en términos brutos, salvaguardando de esa forma el cri-
terio de no compensación, excepto en los siguientes casos, en los que se admite la pre-
sentación de los flujos en términos netos:
a) Cobros y pagos por cuenta de clientes, siempre que los flujos de efectivo reflejen la ac-
tividad del cliente más que la correspondiente a la empresa, por ejemplo, los fondos
de clientes que posee una empresa dedicada a la inversión financiera, o los alquileres
cobrados por cuenta y pagados a los propietarios de propiedades inmobiliarias.
b) Cobros y pagos procedentes de partidas en las que la rotación y los importes son eleva-
dos y el vencimiento a corto plazo, por ejemplo, la compra y venta de inversiones finan-
cieras, y otros préstamos tomados a corto plazo, por ejemplo a tres meses o menos.
7. 3. Casos particulares
7. 3. 1. Flujos de efectivo de operaciones en moneda
extranjera
De acuerdo con lo dispuesto en la IAS 21, los cobros y pagos en moneda extranjera se
convertirán a la moneda de presentación de los estados financieros aplicando el tipo de
cambio existente en el momento en el que se produce cada flujo de efectivo. Y en el
mismo sentido, los flujos de efectivo procedentes de una sociedad dependiente extranjera
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 369
se convertirán utilizando el tipo de cambio en vigor en la fecha en la que tuvo lugar el cobro
o el pago. No obstante, con carácter alternativo, es posible utilizar un tipo de cambio medio
del periodo para convertir los flujos de efectivo de una empresa dependiente, siempre y
cuando el resultado se aproxime al cambio efectivo del conjunto de las transacciones.
369 ❚ CAPÍTULO 13
dad para mantener de forma consistente los criterios de clasificación de dichas partidas en
actividades ordinarias, de inversión y de financiación, según el criterio de la empresa.
Así, para cada una de las partidas mencionadas contempla las siguientes alternativas:
a) Intereses y dividendos cobrados se contempla la posibilidad de incluirlos dentro de
las actividades ordinarias o como actividades de inversión, ya que representan los flu-
jos obtenidos como rendimiento de las inversiones financieras.
b) Intereses y dividendos pagados. Los intereses pueden ser considerados flujos de acti-
vidades ordinarias o de actividades de financiación. Debiendo incluir tanto los recono-
cidos como gasto como aquellos que hayan sido incorporados como mayor valor del
activo, siempre y cuando hayan dado lugar a un pago. Los argumentos en un sentido
y en otro descansan, en el primer caso, en que forman parte del resultado ordinario; y
en el segundo, que proceden de la utilización de recursos financieros. En lo que res-
pecta a los dividendos, pueden incluirse como pago del coste de la utilización de fi-
nanciación propia, o alternativamente, como pago por actividades ordinarias, en tanto
que contribuiría a que los usuarios determinen la capacidad de la empresa para aten-
der al pago de dividendos con flujos de efectivo procedentes de actividades ordinarias.
de los flujos de efectivo. Por esa razón, cualquier operación al margen de su naturaleza
o de la frecuencia con la que acontezca deberá ser considerada como un cobro o un
pago por actividades ordinarias, de inversión o de financiación.
En la medida en la que sea posible determinar qué tipo de transacciones dan lugar al
importe a pagar por el impuesto sobre beneficios, la IAS 7 obliga a incluirlo entre las
operaciones de inversión o financiación de las que se deriva el importe. Si no es posible
identificar las transacciones que dan lugar al pago del impuesto, tendrá la consideración
370 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
de actividades ordinarias.
371 ❚ CAPÍTULO 13
Además de la información recogida en los formatos presentados, la empresa debe proporcio-
nar otra información adicional al estado de flujos de efectivo. En concreto, cabe mencionar:
a) Saldos de efectivo y equivalentes de efectivo no disponibles por existir sobre los mismos
alguna restricción.
b) Transacciones no monetarias.
c) Disponibilidades de la empresa para obtener efectivo, lo que facilitará una evaluación ade-
cuada de la solvencia y liquidez de la misma.
d) Información de flujos de efectivo por segmentos.
8. Bibliografía
Brusca, I; Montesinos, V., y Benito, B. (2004): Estado de flujos de tesorería y de cambios en el patrimo-
nio neto (Madrid. AECA, Recoletos).
Gonzalo Angulo, J. A. (2003): El estado de flujo de efectivo y el estado de cambios en el patrimonio neto:
origen, contenido y utilidad. Boletín de Estudios Económicos. Abril, páginas 41-74.
Martínez Churiaque, J. I. (2003): El resultado contable en las Normas Internacionales de Información Fi-
nanciera. Revista AECA, 66; páginas 31-35.
Pérez, J., y Serrano, R. (2004): Presentación de estados financieros: balance, resultados y notas (Ma-
drid. AECA, Recoletos).
372 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
FASCiCULO 13 29/9/04 20:08 Página 373
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 373
C A P Í T
14
U L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Cuestiones básicas para entender la relación entre el impuesto
sobre sociedades y las normas internacionales de contabilidad 375
C A P Í T
14
U L O
375 ❚ CAPÍTULO 14
más significativas:
• ¿Podrá mantenerse el actual sistema o modelo de determinación de la base imponible del im-
puesto sobre sociedades?
• ¿Cuál sería el impacto sobre la base imponible del impuesto sobre sociedades, tal y como lo regula
el vigente texto refundido del impuesto sobre sociedades (TRIS), de un resultado contable determi-
nado según las NIC o NIIF?
• ¿Qué correcciones al resultado contable NIC o NIIF deberían realizarse para determinar la base im-
ponible del impuesto sobre sociedades?
• ¿Qué influencia tendrán las NIC o NIIF en la evolución de la estrategia de la Comisión de la Unión
Europea respecto de la imposición sobre los beneficios?
Aunque la apelación directa al resultado contable se produce por vez primera en la historia del Im-
puesto sobre Sociedades con la Ley 43/1995, en la práctica tal tributo ha venido descansando a lo
largo de toda su existencia en la contabilidad.
El resultado contable es la magnitud sobre cuyo destino y aplicación deciden los socios, porque se
entiende, si está correctamente calculado por aplicación de las normas legalmente establecidas, que
representa una renta realizada, efectiva y disponible. Esta característica, esto es, la de ser suscepti-
ble, dentro de las previsiones legales y estatutarias, de ser distribuido o aplicado por los socios, es la
que determina que el resultado contable sea una magnitud idónea para constituir el núcleo de la
base imponible. En efecto, un fruto susceptible de apropiación por parte de los socios, o de ser acu-
mulado incrementando el patrimonio de la sociedad, es suficientemente demostrativo de capacidad
económica.
Además, ese resultado contable es una magnitud jurídicamente regulada, en cuanto el algoritmo
contable está regulado por las normas legales y reglamentarias mencionadas, de manera tal que la
reserva de ley en materia tributaria queda perfectamente salvaguardada.
376 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Ahora se trata de bosquejar si tal modelo podría conservar su validez en el marco de un derecho con-
table configurado en torno a las normas internacionales de contabilidad.
Verdaderamente, abordar tal cometido cuando, en el momento de escribir estas líneas, la Comisión
no ha declarado todavía aplicables a la Unión Europea todas las normas internacionales de contabili-
dad, y cuando, incluso, algunas de las publicadas en el Reglamento (CE) nº 1.725/2003 de la Comi-
sión, han sido modificadas por la IASB, y cuando, por último, esta institución está elaborando pro-
yectos de reforma y ampliación de las normas internacionales de contabilidad o normas internacio-
nales de información financiera, pudiera, tal vez, tacharse de prematuro. Sin embargo, las líneas
maestras de las normas internacionales de contabilidad no están en discusión, y, lo que es revelador,
el Banco de España, ha formulado un proyecto de circular contable (PCBE) fundamentado en las ci-
tadas normas internacionales que, por sí solo, suscita la conveniencia de una reflexión como la que,
sin duda con carácter provisional, se propone en el presente escrito.
La doctrina contable ha venido señalando, con justificada insistencia, que las normas internacionales
de contabilidad producen una información orientada a las necesidades del inversor, en tanto que las
normas contables vigentes producen una información enfocada a la rendición de cuentas. Siendo
esto cierto, de ahí no se deriva, sin más, la necesidad de abandonar el vigente modelo de determina-
ción de la base imponible a partir del resultado contable. En efecto, la diversa orientación de la infor-
mación no implica que los productos de la nueva información sean no apetecibles fiscalmente.
En particular, nos interesará la contextura del resultado contable fruto de las NIC. Este resultado con-
table es consecuencia de la aplicación de unas normas que están inspiradas por el denominado
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 377
marco conceptual de la misma manera que el resultado contable vigente es fruto de los principios de
contabilidad del artículo 38 del Código de Comercio.
¿Existen diferencias apreciables entre el marco conceptual NIC y los principios de contabilidad gene-
ralmente aceptados del artículo 38 del Código de Comercio?
La doctrina contable mayoritaria así parece entenderlo, porque, si bien es verdad que la práctica to-
talidad de los conceptos del marco conceptual tienen su correspondiente en los principios del artí-
culo 38 del Código de Comercio, es lo cierto que aquéllos están enmarcados en orden lógico que,
por sí mismo, establece una diferencia cualitativa. Así, el devengo y la empresa en funcionamiento
tiene la consideración de hipótesis fundamentales (marco conceptual 22 y 23); la prudencia no pasa
de ser un componente de la fiabilidad, la cual, junto a la comprensibilidad, la relevancia y la compa-
rabilidad, es una característica cualitativa de los estados financieros (marco conceptual 24 y siguien-
tes); y, en fin, el precio de adquisición deja de ser, en servicio a la relevancia, el único criterio de va-
loración, dejando el paso, en bastantes supuestos, al valor razonable (marco conceptual 100).
Sin embargo, los redactores del Proyecto de Circular Contable del Banco de España (PCBE) parecen
matizar la doctrina contable mayoritaria, pues siendo claro que sus 63 normas, dos disposiciones
adicionales, otras dos transitorias y una final, así como los ocho anejos respiran por todos sus poros,
con limitadas salvedades, la letra y la música de las normas internacionales de contabilidad, el apar-
tado 2 de la norma primera declara que tal conjunto normativo “… constituye el desarrollo y adapta-
ción al sector de entidades de crédito de las normas contables establecidas en el Código de Comer-
cio, la Ley de Sociedades Anónimas y la normativa legal específica…”, y, al tiempo, advierte que en
la elaboración de dichas normas “… se ha respetado el contenido de las normas internacionales de
información financiera aprobado por los reglamentos de la Unión Europea y se ha atenido al marco
377 ❚ CAPÍTULO 14
conceptual en que se basan…”.
Probablemente, el deseo de entroncar con las normas reglamentarias a que hace referencia el artí-
culo 10.3 del TRIS haya pesado en el ánimo del redactor del PCBE, pero también es muy posible
que el mismo haya considerado que, respondiendo las NIC y las normas contables vigentes a los
principios o hipótesis fundamentales de devengo y empresa en funcionamiento, existe un amplio
campo común, truncado, eso sí, por la preterición del principio del precio de adquisición en mérito
de la valoración por el valor razonable, de manera tal que la reconducción de los efectos de tal cri-
terio de valoración a un estado financiero no recogido por las normas mercantiles vigentes, el “es-
tado de ingresos y gastos totales” (norma quincuagésima séptima del PCBE), el acotamiento de sus
efectos sobre el balance mediante la utilización de una rúbrica especial desprovista de la califica-
ción mercantil de fondo propio, esto es, los “ajustes por valoración” (norma 55.3 del PCBE), y el au-
xilio del precedente concretado en la valoración de la cartera de negociación por el valor de mer-
cado justificada teóricamente por una concepción amplia o dinámica del principio del devengo, po-
dría coadyuvar, eficazmente, a enmarcar el PCBE bajo la legalidad del Código de Comercio y el
TRLSA, sin mengua de ser instrumento inequívoco de incorporación de las normas internacionales
de contabilidad.
No está claro si el PCBE fructificará, pues en un orden lógico de acontecimientos lo apropiado sería
que el desarrollo reglamentario del Código de Comercio en materia de contabilidad, a los efectos de
incorporar las NIC, se hubiera producido después y a partir de la modificación del Título III del Libro
Primero del Código de Comercio, relativo a la contabilidad de los empresarios, en orden a asumir el
marco conceptual NIC y las normas más relevantes.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 378
El PCBE no desmiente, sin embargo, a la doctrina contable. Las diferencias entre el marco concep-
tual NIC y los principios de contabilidad generalmente aceptados son apreciables, como también lo
son, lógicamente, los conjuntos normativos que derivan de aquél y de éstos. El propio PCBE así lo
demuestra. Pero no hay incompatibilidad sustancial entre ambos conjuntos normativos. Diferentes
sí, incompatibles no. Comparemos el PGC con el PCBE y podremos apreciar notables diferencias,
pero no incompatibilidades. Rigor en la aplicación del principio del devengo, en ambos, y también en
ambos el trasfondo de la empresa en funcionamiento, y, finalmente, también en ambos la incidencia
de la prudencia, tal vez no enfáticamente proclamada en el PCBE, pero desde luego aplicada con ri-
378 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
gor. La diferencia sustancial está en la aplicación del valor razonable, totalmente desconocido en el
Código de Comercio y en el PGC, y profusamente utilizado en las NIC y en el PCBE. Pero de aquí no
se deriva incompatibilidad, debido, esencialmente, a la forma en que el PCBE ha regulado los efec-
tos del valor razonable, que ha permitido distinguir un resultado contable afectado por el valor razo-
nable en unos supuestos de naturaleza tal que no desmienten su carácter de realizado y distribuible,
y otro resultado más amplio o resultado global, plenamente afectado por el valor razonable en los tér-
minos de las NIC; y también ha permitido distinguir el neto patrimonial procedente de los fondos
aportados por los accionistas y de las ganancias acumuladas, del procedente de los denominados
ajustes por mantenimiento de capital, que derivan, en buena parte, de la aplicación del valor razona-
ble en ciertos supuestos.
Así las cosas, puede afirmarse que el modelo contable NIC, cuidadosamente desarrollado, permite
llegar a unos estados financieros que proporcionan un resultado contable próximo al modelo conta-
ble derivado de los principios de contabilidad del artículo 38 del Código de Comercio, a modo de
componente de una información contable, igualmente contenida en dichos estados financieros, de
más amplio alcance.
En suma, el modelo contable NIC proporciona una magnitud, el resultado del ejercicio, que es el
saldo de la cuenta de resultados que, sin ser idéntico al resultado contable derivado de la aplicación
de las normas vigentes, sí es lo suficientemente próximo para ser entendido como realizado, efectivo
y susceptible de distribución, y, consecuentemente, respetuoso con el principio de capacidad econó-
mica, de donde se sigue que el vigente modelo de determinación de la base imponible del Impuesto
sobre Sociedades podrá pervivir en el contexto de un futuro Derecho contable configurado en torno
al modelo contable NIC.
Nos restan dos pinceladas sobre el obligado respecto al principio de reserva de ley en materia tribu-
taria. Según la doctrina del Tribunal Constitucional, el establecimiento del tributo y la regulación de
unos elementos esenciales debe hacerse mediante ley (SSTS 185/1995, 9/1987 y 233/1999). El re-
sultado contable al que convoca el artículo 10.3 del TRIS es una magnitud que se determina por
aplicación de la ley y de los reglamentos que la desarrollan, y por ello cumple con la reserva de ley.
La adaptación de nuestro Derecho contable al modelo NIC puede conservar tal cualidad con tal de
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 379
que la ley y sus reglamentos sean el cauce jurídico de incorporación. Una incorporación del modelo
NIC a través de la reforma del Título III del Libro Primero del Código de Comercio, y el consiguiente
desarrollo reglamentario mediante un nuevo Plan General de Contabilidad, sería lo apropiado a estos
efectos.
379 ❚ CAPÍTULO 14
Junto a ese resultado contable hay otro más amplio que, partiendo del mismo, integra tam-
bién todos los ingresos y gastos que, según las diferentes NIC, deben reflejarse directamente
en el patrimonio neto, esto, sin pasar previamente por la cuenta de resultados. En ocasiones
se denomina a este resultado con la expresión “resultado global”. Este resultado global no es
el que convoca el artículo 10.3 del TRIS como núcleo de la base imponible. La citada norma
fiscal se refiere a aquel otro, más restringido, que constituye el saldo de la cuenta de resulta-
dos. Baste para justificar tal afirmación que el artículo 10.3 del TRIS se origina en un tiempo
en el que el resultado contable era el saldo de la cuenta de pérdidas y de ganancias, pues no
existía (ni todavía hoy existe para cuentas individuales) un estado de patrimonio neto en el
que pudiera cobijarse el denominado resultado global.
El PCBE nos ilustra acerca de la relación entre el resultado contable en sentido propio y el de-
nominado resultado global.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 380
La descripción que del estado de ingresos y gastos totales efectúa la norma quincuagésima
séptima del PCBE es elocuente, pues distingue nítidamente el resultado del ejercicio de los
ingresos y gastos totales, siendo estos últimos la suma del resultado del ejercicio y de los in-
380 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Podrá discutirse si es correcto entender, como lo hace el PCBE, que los ajustes por valoración
constituyen un concepto diverso de los fondos propios, pero lo que no parece discutible es
que existe un claro deslinde entre los ingresos y gastos que configuran el resultado del ejerci-
cio y aquellos otros que son aplicados directamente a patrimonio neto. El apartado 81 del
marco conceptual es revelador, a este respecto: “La reevaluación o reexpresión del valor de
los activos y pasivos da lugar a incrementos o decrementos en el patrimonio neto. Aun
cuando tales incrementos y decrementos cumplan la definición de ingresos y gastos, respec-
tivamente, no son incluidos dentro del estado de resultados, bajo ciertos conceptos de man-
tenimiento del capital...”.
En conclusión, tanto las NIC como el PCBE identifican el saldo de la cuenta de resultados con
el resultado del ejercicio, y éste es, bajo la hipótesis de un nuevo derecho contable confor-
mado en torno a tales normas, el resultado contable del artículo 10.3 del TRIS.
El valor razonable es el que podría obtenerse por la venta no forzada, o, en otros térmi-
nos, el valor de intercambio entre un comprador y un vendedor debidamente informa-
dos. Podría, ampliamente hablando, entenderse que el valor razonable es el valor de
mercado.
381 ❚ CAPÍTULO 14
Aplicados estos mandatos sobre las revalorizaciones derivadas de la valoración por el
valor razonable, se llega a la conclusión de que solamente se integrarán en la base im-
ponible del impuesto sobre sociedades aquellas en las que concurran los siguientes re-
quisitos:
• La revalorización es obligatoria. Esto es, el método de valoración por el valor razonable
ha de aplicarse de manera obligatoria y exclusiva.
• El importe de la revalorización ha de llevarse, también obligatoriamente, al resultado
contable.
c. r. = cuenta de resultados
p. n. = patrimonio neto
382 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
A la vista del cuadro precedente, y tomando en consideración los mandatos del artículo
15.1 de la Ley del Impuesto sobre Sociedades, pueden sentarse los siguientes criterios
respecto de los efectos sobre la base imponible de la valoración por el valor razonable:
• Se integrará en la base imponible el ingreso (o el gasto) derivado de la valoración por
el valor razonable de los activos y pasivos financieros para negociación, de los instru-
mentos derivados y de los activos biológicos y productos agrícolas.
• No se integrará en la base imponible el ingreso derivado de la valoración por el valor
razonable de los activos financieros disponibles para la venta porque, pese a ser obli-
gatorio tal método de valoración, la cuenta de contrapartida no es la cuenta de resulta-
dos sino una de patrimonio neto.
• No se integrará en la base imponible el ingreso derivado de la valoración por el valor
razonable de las propiedades de inversión, pese a que se aplica a la cuenta de resulta-
dos, por no ser obligatorio tal método de valoración.
• No se integrará en la base imponible el ingreso derivado de la valoración por el valor
razonable de los restantes elementos patrimoniales a los que se aplica la valoración
por el valor razonable, pues ni tal aplicación es obligatoria (lo que ya sería suficiente
para descartar dicha integración), ni ha de llevarse a cuenta de resultados sino a patri-
monio neto.
De acuerdo con lo expuesto, la valoración por el valor razonable únicamente provocará in-
gresos (o gastos) adicionales respecto de los que proceden por aplicación de la normativa
contable vigente, con efectos sobre el resultado contable, respecto de ciertos instrumen-
tos financieros, los activos biológicos y las propiedades de inversión, y no todos esos in-
gresos (o gastos) se integrarán en la base imponible del impuesto sobre sociedades.
valor razonable contra cuenta de resultados y lo mismo sucede respecto de los instru-
mentos financieros derivados contratados en mercados regulados.
En fin, parece claro que el impacto de la valoración por el valor razonable sobre el resul-
tado contable proviene del ámbito de los instrumentos financieros. En este sentido dedi-
camos el siguiente apartado a exponer, brevemente, las normas de valoración relativas a
los instrumentos financieros no derivados, el siguiente apartado a los instrumentos fi-
nancieros derivados y, finalmente, uno tercero y último a la denominada contabilidad de
cobertura.
383 ❚ CAPÍTULO 14
Un instrumento financiero es un contrato que da lugar, simultáneamente, a un activo fi-
nanciero en una empresa y a un pasivo financiero o un instrumento de capital en otra
empresa (NIC 32.5). Bajo esta definición caben los valores, de renta fija o variable, los
préstamos, con o sin garantía, y los créditos sobre clientes, entre otros.
La NIC 39 clasifica los activos financieros en cuatro grupos: activos mantenidos para ne-
gociar, préstamos concedidos y partidas por cobrar, inversiones mantenidas hasta el
vencimiento, y activos financieros disponibles para la venta. La norma 22.3 del PCBE re-
coge la referida clasificación con ligeros matices.
La NIC 39 clasifica los pasivos financieros en dos grupos: pasivos financieros manteni-
dos para negociar y otros pasivos financieros. Y lo propio hace el PCBE.
La ubicación de un activo o pasivo financiero en una u otra categoría depende del pro-
pósito que la empresa tenga.
En el futuro, los ingresos y gastos derivados de la valoración por el valor razonable de los
pasivos financieros mantenidos para negociar se integrarán en el resultado contable, y
por tanto también en la base imponible del impuesto sobre sociedades, de acuerdo con lo
previsto en el artículo 10.3 del TRIS, pues, por otra parte, no existe en el TRIS, ni podía
existir debido a que las normas contables hasta el momento presente no contemplaban la
medición de pasivos financieros posterior a su reconocimiento, una norma correctora.
El resto de los activos y pasivos financieros o bien no se valoran por el valor razonable, o
bien valorándose por el valor razonable la contrapartida es una cuenta de patrimonio
neto (disponibles para la venta) de manera tal que, sin perjuicio de considerar la depre-
ciación o deterioro, no determinarán efectos sobre el resultado contable ni, por lo tanto,
sobre la base imponible.
Bajo tal descripción quedan comprendidos los contratos a plazo y los futuros, las permu-
tas financieras y las opciones. Es decir, se trata de contratos que se liquidarán en un
tiempo futuro en función de unas condiciones que en los mismos se establecen. No obs-
tante, las opciones podrán o no ser ejecutadas a voluntad de su titular.
Los derivados pueden ser contratados para cubrir riesgos o para obtener ganancias en
función de la evolución de su valor. Esta distinción, no siempre clara, es fundamental
porque la contabilidad de unos y otros es diversa.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 385
Los derivados pueden ser contratados en mercados organizados o bien fuera de los mis-
mos. En el primer caso se trata de contratos modelo o tipo, y en el segundo a medida de
las necesidades de las partes contratantes. Esta distinción tiene, en la vigente Circular
4/1991 del Banco de España, trascendencia contable, pues tratándose de derivados
contratados en un mercado organizado, las diferencias de valor deben registrarse a me-
dida que se producen, pero cuando la contratación no se realiza en el mercado, las ga-
nancias sólo se registran en el momento de la liquidación en tanto que las pérdidas de-
ben ser provisionadas.
Los efectos de la valoración por el valor razonable de los instrumentos financieros deriva-
dos (no designados como instrumento de cobertura) se reflejan en el balance y en la
cuenta de resultados. Por tanto, también se integrarán en la base imponible del im-
puesto sobre sociedades, de acuerdo con lo previsto en el artículo 10.3 del TRIS, al no
existir norma correctora alguna en relación con los mismos.
385 ❚ CAPÍTULO 14
Si comparamos tal fiscalidad, consecuente con la previsible norma contable futura, con
la vigente, vemos que se producirá una importante diferencia respecto de los instrumen-
tos financieros derivados no contratados en mercados organizados. En efecto, hasta el
presente, los ingresos o gastos imputables a los mismos se integran en la base imponible
del impuesto sobre sociedades en el momento de la liquidación del contrato, pues, res-
pecto de los ingresos, se contabilizan en tal momento, y respecto de las pérdidas, la pro-
visión constituida no es fiscalmente deducible de acuerdo con lo previsto en el artículo
13.1 del TRIS, según doctrina económico-administrativa.
La nueva forma de contabilizar los instrumentos financieros derivados será muy dife-
rente de la actualmente vigente. En efecto, de ser considerados contratos determinantes
de operaciones fuera de balance, pasan a ser calificados como activos o pasivos, en
constante evolución de valor debido a su valor razonable, con contrapartida en la cuenta
de resultados. Y esta nueva forma de contabilización repercute en la base imponible del
impuesto sobre sociedades.
Por excepción, deberán valorarse al coste los derivados asociados a instrumentos de capi-
tal no cotizados en un mercado activo cuyo valor razonable no pueda determinarse de ma-
nera fiable. En este supuesto no se producirá una modificación de la fiscalidad vigente.
Tanto la NIC 39 como el PCBE (normas trigésima primera y trigésima segunda) distin-
guen cuatro grupos de normas de contabilidad de cobertura: cobertura del valor razona-
ble, cobertura sobre los flujos de efectivo, cobertura sobre la inversión neta en una enti-
dad extranjera y cobertura sobre el tipo de interés de una cartera (macrocobertura admi-
tida en la modificación de marzo de 2004 de la norma 39).
31.12.b) del PCBE recalca: “… incluso si la partida cubierta fuese un activo financiero in-
cluido en la de disponibles para la venta…”.
La contabilidad de cobertura de flujos de efectivo determina que la variación del valor ra-
zonable del instrumento de cobertura se recoja en cuenta de patrimonio neto, debiendo
aplicarse a cuenta de resultados en el ejercicio en que se apliquen a cuenta de resulta-
dos las ganancias o pérdidas de las partidas cubiertas. Aquí, los instrumentos financie-
ros derivados de cobertura no se contabilizan de acuerdo con las normas generales,
puesto que la contrapartida de la variación de su valor razonable no es la cuenta de re-
sultados sino patrimonio neto. Por el contrario, las partidas cubiertas se rigen por las
normas generales (norma 31.15 del PCBE).
La cobertura del riesgo del tipo de interés de una cartera es una “macrocobertura”, ba-
sada en instrumentos financieros derivados, que cubre la exposición al riesgo del tipo de
interés de una cartera de activos o pasivos financieros. Por la naturaleza del activo o pa-
387 ❚ CAPÍTULO 14
sivo financiero cubierto se distingue entre macrocobertura del valor razonable (para ins-
trumentos cuyo valor razonable varía con el tipo de interés cubierto) y macrocobertura
de los flujos de efectivo (para instrumentos financieros que no cumplan los requisitos
exigidos para ser designados como partidas cubiertas en coberturas de valor razonable).
La distinción es importante a efectos contables.
En la cobertura del valor razonable del riesgo del tipo de interés, los instrumentos finan-
cieros derivados de cobertura se valoran por su valor razonable con contrapartida en
cuenta de resultados, y las ganancias o pérdidas imputables al valor razonable del im-
porte cubierto atribuibles a riesgo cubierto se reconocerán en la cuenta de resultados,
con contrapartida en una partida específica de activo o pasivo. Por tanto, el instrumento
de cobertura se contabiliza de acuerdo con las normas generales, pero no así el activo o
pasivo cubierto (norma 32.5 del PCBE).
En la macrocobertura de los flujos de efectivo del riesgo del tipo de interés, los instru-
mentos financieros derivados de cobertura se valorarán por su valor razonable con con-
trapartida en cuenta de patrimonio neto, debiendo revertir el saldo a la cuenta de resul-
tados en el ejercicio en que el importe cubierto se aplique a la cuenta de resultados. Por
tanto, la contabilidad del instrumento financiero derivado de cobertura sufre una modifi-
cación respecto de las reglas generales (norma 32.7 del PCBE).
El deterioro de valor de los activos está regulado, con carácter general, en la NIC 36. No obs-
tante, determinados activos, en particular los instrumentos financieros de la NIC 39, se some-
ten a regulaciones específicas.
Considerando las previsiones que sobre la materia establece el TRIS, distinguimos, a efectos
del deterioro de valor, los siguientes activos: instrumentos financieros de deuda (clientes,
préstamos y valores de renta fija), instrumentos financieros de capital (acciones y participa-
ciones), fondo de comercio, y otros activos.
Un activo financiero se ha deteriorado cuando su importe en libros sea mayor que su im-
porte recuperable estimado. El importe recuperable es el valor descontado de los flujos
de efectivos esperados (NIC 39). Para determinar la existencia de la situación de dete-
rioro se puede acudir a la evidencia objetiva concretada en un conjunto de circunstan-
cias atinentes al activo financiero o a un grupo de activos financieros o bien a patrones
de comportamiento histórico (NIC 39).
El PCBE desarrolla las normas contables de la NIC 39 en relación con las entidades de
crédito. Las normas del PCBE (apartados 2 a 17 de la norma 29) se aplican indistinta-
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 389
mente a los créditos sobre clientes y a los valores de renta fija, a diferencia de la Circular
4/1991, que aborda el tratamiento del denominado riesgo de crédito en las normas 10 y
11 y la denominada depreciación de la renta fija en la norma 27.
La lectura del PCBE revela el gran esfuerzo que se ha realizado para enmarcar en la filo-
sofía de las normas internacionales de contabilidad los tradicionales requerimientos de
prudencia requerida a las entidades de crédito en materia de cobertura de riesgo de cré-
dito. La clave de la regulación está en la admisión de dos métodos para determinar la
evidencia objetiva de deterioro: el método individual (para cada instrumento financiero)
y el método colectivo (para grupos homogéneos de instrumentos financieros). La cuanti-
ficación de los flujos de efectivo esperados en relación con el método colectivo “… se
estimará sobre la base de la experiencia histórica de la entidad para activos financieros
con características de riesgo similares a las del respectivo grupo, una vez realizados los
ajustes necesarios para adaptar los datos históricos a las condiciones de mercado…”.
No obstante, se admite, ante la ausencia de experiencia histórica, utilizar “… los datos
disponibles de la experiencia de otras entidades que operen en el mismo mercado para
grupos comparables de activos financieros…”. También se admite que las pérdidas por
deterioro se calculen mediante “… modelos basados en fórmulas o métodos estadísti-
cos, siempre que sean consistentes con los requerimientos establecidos en esta
norma…”, estando comprendidos en tales modelos “… los denominados calendarios de
morosidad, que calculan las pérdidas en función de la antigüedad de los importes paga-
dos…”. Finalmente, para los instrumentos cotizados (valores de renta fija), como susti-
tuto del valor actual de los flujos de efectivo esperados se puede “… utilizar el valor de
mercado siempre que éste sea suficientemente fiable como para considerarlo represen-
389 ❚ CAPÍTULO 14
tativo del valor que pudiera recuperar la entidad…”. Y, a modo de colofón, el apartado
21 de la norma 29 exhorta a las entidades a tomar en consideración todas las circuns-
tancias que hacen al caso, incluso las previsiones coyunturales, a los efectos de confor-
mar y aplicar adecuadamente los modelos de cálculo de pérdidas por deterioro de los
instrumentos financieros.
Tanto la NIC 39 como la norma 29 del PCBE refieren el deterioro a los instrumentos finan-
cieros contabilizados al coste amortizado y a los instrumentos financieros contabilizados
al valor razonable con contrapartida en patrimonio neto, pero no a los instrumentos finan-
cieros contabilizados a valor razonable con contrapartida en cuenta de resultados. Esto es
lógico porque en esta clase de instrumentos financieros no puede existir una diferencia
entre el valor en libros del instrumento financiero y su importe recuperable.
Desde la perspectiva fiscal ha de tenerse en cuenta, en primer lugar, que el artículo 12.2
del TRIS regula el deterioro de los instrumentos financieros no incorporados a valores,
pero que tal regulación no afecta a las entidades de crédito, las cuales están sometidas
exclusivamente a lo previsto en los artículos 6 a 9 del reglamento del impuesto sobre so-
ciedades (RIS), y, en segundo lugar, que el artículo 12.4 del TRIS regula el deterioro de
los instrumentos financieros de deuda incorporados a valores, en este caso sin distinción
ni excepción en relación con las entidades de crédito.
El artículo 12.2 del TRIS supedita la deducción fiscal de la pérdida por deterioro a la
concurrencia de un conjunto de circunstancias.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 390
Los artículos 6 a 9 del RIS, partiendo de la aceptación de la eficacia fiscal de las normas
contables de la Circular 4/1991, están construidos en función de estas últimas. La Circu-
lar 4/1991 establece tres vías para concretar el importe del deterioro de los instrumentos
financieros (directa o individualizada, estadística basada en la experiencia y “forfataria”),
y las normas fiscales admiten, con ciertas restricciones tipificadas en función de las cir-
cunstancias concurrentes, el gasto derivado de la primera vía, no admiten el gasto deri-
vado de la segunda, y recortan el derivado de la tercera.
La aplicación de las normas contenidas en los artículos 6 a 9 del RIS al deterioro de va-
lor de los instrumentos financieros calculado según las normas contables del PCBE ten-
390 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Parece claro que, desaparecida del PCBE la vía “forfataria” y rechazada fiscalmente la
evaluación colectiva del deterioro, el importe del gasto contable imputable al deterioro
que será fiscalmente deducible habrá de disminuir sensiblemente.
El artículo 12.4 del TRIS no impedirá, por el contrario, la deducción de la pérdida por
deterioro tratándose de instrumentos de deuda de renta fija negociados en mercados re-
gulados, con el límite de la depreciación o deterioro global de los valores de renta fija ne-
gociados en dichos mercados. Y este deterioro será el calculado de acuerdo con las nor-
mas contables, pues la norma fiscal no establece regla de cálculo alguna. Adicional-
mente, debe observarse que para calcular el referido límite la doctrina administrativa
venía excluyendo los avatares de la cartera de negociación, es decir, en el marco de las
NIC, de los instrumentos de deuda cotizados en mercados regulados a valor razonable
con contrapartida en cuenta de resultados.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 391
Las circunstancias relativas a la evidencia del deterioro van referidas al emisor. Por el
contrario, el valor de mercado juega un papel no concluyente. Así, sólo será evidencia
del deterioro “… un descenso significativo o prolongado (del valor razonable) por debajo
de su valor contable…”.
Distingue la norma 29 del PCBE, a los efectos de establecer las reglas relativas al cálculo
391 ❚ CAPÍTULO 14
del importe del deterioro, entre instrumentos de capital disponibles para la venta e ins-
trumentos de capital valorados al coste. Los instrumentos de capital a valor razonable
con contrapartida en cuenta de resultado (cartera de negociación) no pueden sufrir un
deterioro justamente debido a la valoración por el valor razonable.
Tratándose de instrumentos de capital disponibles para la venta, esto es, activos finan-
cieros que se valoran por su valor razonable con contrapartida en patrimonio neto, se
toma, entre otros supuestos, como evidencia objetiva del deterioro “… una caída du-
rante un periodo de un año y medio y de un 40% de su cotización…”. En este caso, las
minusvalías latentes previamente reconocidas en cuenta de patrimonio neto se aplicarán
a la cuenta de resultados. En esta cartera de instrumentos de capital disponibles para la
venta no entran las participaciones en asociadas, dependientes y multigrupo [norma
22.3 d) del PCBE].
El artículo 12.3 del TRIS establece las reglas relativas a la eficacia fiscal del deterioro de
los instrumentos de capital. Tratándose de instrumentos de capital cotizados en merca-
dos regulados, el deterioro, calculado de acuerdo con las normas contables, tiene plena
eficacia fiscal, ya que dicho precepto no establece nada sobre el particular.
3. 3. 3. Fondo de comercio
392 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Así pues, el fondo de comercio no se amortiza pero se somete al control del deterioro.
Un régimen totalmente diferente al vigente, en el que el fondo de comercio debe amorti-
zarse por veinteavas partes, como mínimo (artículo 194 del TRLSA). Los artículos 11.4 y
89 del TRIS establecen un régimen dual respecto del fondo de comercio. Bajo el cumpli-
miento de ciertos requisitos, el importe de la amortización es fiscalmente deducible con
el límite anual máximo de la veinteava parte del valor del fondo de comercio. No cum-
pliéndose los requisitos previstos, “… las dotaciones para la amortización del fondo de
comercio (…) serán deducibles si se prueba que responden a una depreciación irrever-
sible…”.
Bajo las NIC el fondo de comercio no se amortiza, pero el deterioro implica una depre-
ciación irreversible. Por tanto, el importe del deterioro será fiscalmente deducible en
cuanto haya sido determinado por una aplicación correcta de las normas contables. Tal
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 393
vez podría sostenerse que la deducción estaría limitada a la veinteava parte de su im-
porte. Se opina, contrariamente, que la prueba del deterioro justificaría la deducción de
su importe total, pues, en definitiva, es deducible el importe de la amortización que el
sujeto pasivo pruebe, aunque sea superior a la derivada de la aplicación de los métodos
legalmente establecidos [artículo 11.1.e) del TRIS].
3. 3. 4. Otros elementos
La NIC 36 regula el deterioro, ya lo hemos visto, en función de la diferencia existente en-
tre el valor en libros y el valor recuperable. Y éste, a su vez, es el mayor de entre el pre-
cio de venta neto y el valor de uso. El precio de venta neto es el precio que se puede ob-
tener de la venta del activo concernido, minorado en los costes de transacción, realizada
393 ❚ CAPÍTULO 14
entre un comprador y un vendedor adecuadamente informados. El valor de uso es el va-
lor actual de los flujos de efectivo estimados derivados de la aplicación del activo al pro-
ceso productivo y de su enajenación. El deterioro debe determinarse, preferiblemente,
en relación con cada activo individualmente, y si no fuera posible en relación con la uni-
dad generadora de efectivo a la que el activo pertenece.
El TRIS no contiene una regulación plena de las pérdidas por deterioro. Sólo ciertas nor-
mas de carácter particular se refieren a la misma. Además de las ya estudiadas en apar-
tados anteriores, señalamos el artículo 12.1, relativo a los fondos editoriales, fonográficos
y audiovisuales, y el artículo 11.5, relativo al inmovilizado inmaterial. Fuera de los su-
puestos aludidos, el deterioro contable constituirá una pérdida a efectos fiscales por apli-
cación del artículo 10.3 del TRIS, en cuanto dicho deterioro haya sido calculado correc-
tamente en aplicación de la norma contable correspondiente. La eficacia fiscal de la pér-
dida está supeditada su imputación a la cuenta de pérdidas y ganancias (art. 19.3 del
TRIS).
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 394
Como regla general, las pérdidas por deterioro también están sujetas a reversión en las
NIC, y la cuenta de contrapartida es la cuenta de resultados. Así, “… la reversión de una
pérdida por deterioro en un activo debe ser reconocida como un ingreso inmediata-
mente en la cuenta de resultados…” (NIC 36.104). Sin embargo, en determinados ca-
sos, esta regla general sufre excepciones. Las podemos identificar perfectamente en el
PCBE y en las NIC 36 y 39.
Las pérdidas por deterioro del fondo de comercio no revierten (norma 30.14 del PCBE).
La NIC 36 es menos tajante, pues admite la reversión cuando “… la pérdida por dete-
rioro fue causada por un suceso específico de naturaleza tan excepcional que no se es-
pera su repetición en el futuro y hayan ocurrido, con posterioridad, sucesos externos
que hayan conseguido revertir el efecto de tal suceso…” (NIC 36.109).
La reversión de una pérdida por deterioro cargada a cuenta de patrimonio neto debe
abonarse a patrimonio neto (NIC 36.105), lo cual parece lógico porque respeta la corre-
lación entre la aplicación contable del deterioro y de la reversión. Sin embargo, esta co-
rrelación se quiebra, según el PCBE, en los instrumentos financieros de capital. El apar-
tado 19 de la norma 29 establece que “… si con posterioridad se recuperan todo o parte
de las pérdidas por deterioro, su importe se reconocerá directamente en la correspon-
diente cuenta de patrimonio neto…”. Responde esta norma a lo previsto en la NIC
36.69, en relación con los instrumentos de capital disponibles para la venta. Y, final-
mente, el apartado 20 de la norma 29 establece que las pérdidas por deterioro registra-
das en las cuentas de pérdidas y ganancias no son susceptibles de recuperación o re-
versión “… salvo en caso de venta…”. Responde esta norma a lo previsto en la NIC
36.66 en relación con los instrumentos de capital valorados al coste.
Vemos, pues, que en ciertos supuestos la norma contable no impone la reversión, que
en otros impone la no reversión, y, finalmente, que en otros aplica la reversión a cuenta
de patrimonio neto cuando el deterioro se aplicó a cuenta de resultados.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 395
La norma fiscal pretende guardar una estricta neutralidad. Y así cuando se produzca la
recuperación de valor, el deterioro de valor previamente considerado gasto fiscalmente
deducible tendrá la consideración de ingreso, a efectos fiscales, esto es, aun cuando no
lo sea a efectos contables, por aplicación de lo previsto en los apartados 6 y 9 del artí-
culo 19 del TRIS. Establece el apartado 6 que “… la recuperación de valor (…) se impu-
tará en el periodo impositivo en el que se ha producido dicha recuperación…”, y el apar-
tado 9, que en el caso de eliminación de provisiones no aplicadas a su finalidad “… su
importe se integrará en la base imponible de la entidad que las hubiese dotado, en la
medida en que dicha dotación se hubiese considerado gasto deducible…”. Por tanto,
aunque no exista reversión contable, sí existirá recuperación fiscal, con el consiguiente
efecto sobre la base imponible (artículo 19.6 del TRIS), y aunque la reversión contable
no se aplique a la cuenta de resultados, el correspondiente ingreso sí se integrará en la
base imponible (artículo 19.9 del TRIS).
La no reversión contable del fondo de comercio tal vez sea una excepción a la regla ex-
puesta, considerando que la norma fiscal admite la deducción de la amortización conta-
ble. En este sentido, la no reversión contable podría asimilarse a la constitución de un
fondo de amortización basado en la depreciación efectiva demostrada a través del pro-
cedimiento para determinar y evaluar el importe del deterioro.
3. 4. Las provisiones
El Plan General de Contabilidad distingue entre provisiones que reflejan una corrección de
valor y provisiones para la cobertura de riesgos y gastos. Las NIC no admiten el primer tipo de
395 ❚ CAPÍTULO 14
provisión (el deterioro minora el valor en libros del activo) y regulan las segundas de manera
mucho más restrictiva, considerando, además, que son pasivos.
Para la NIC 37 y la norma 37 del PCBE, la provisión es un pasivo respecto del que existe in-
certidumbre en su cuantía o vencimiento. Por tanto, la empresa está sujeta a una obligación,
sólo que afectada por tales factores de incertidumbre. Esa obligación dimanará de la ley o
tendrá carácter natural, y también podrá ser de tipo contractual aunque, por lo general, estas
obligaciones no adolecen de las incertidumbres referidas.
El artículo 13.1 del TRIS niega la consideración de partida fiscalmente deducible a las dota-
ciones para “… la cobertura de riesgos previsibles, pérdidas eventuales, gastos o deudas pro-
bables…”.
Puesto que la provisión NIC se fundamenta en una obligación, y ésta debe dimanar de suce-
sos pasados (marco conceptual), las dotaciones para la cobertura de riesgos previsibles y pér-
didas eventuales no serán posibles bajo la NIC 37. En cuanto a los gastos o deudas probables
sí podrán motivar una provisión bajo la NIC 37, en cuanto tales deudas tengan origen en un
suceso pasado y sea mayor la probabilidad de existencia de la obligación que de lo contrario.
El artículo 13.2 del TRIS especifica un conjunto de provisiones cuya dotación es fiscalmente
deducible. Si dejamos de lado las provisiones de carácter técnico (compañías de seguros y
sociedades de garantía recíproca), vemos que todas ellas podrán estar dotadas bajo la NIC
37, excepto la provisión para reparaciones extraordinarias, la provisión de las compañías de
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 396
navegación marítima o aérea y el fondo de reversión, que pasará a ser tratado, se opina, a
modo de fondo de amortización.
Las pérdidas futuras de la explotación no son susceptibles de provisión, ni tampoco los me-
nores beneficios futuros, todo ello sin perjuicio de la existencia de un posible deterioro de los
activos que sea, precisamente, la causa de tales pérdidas futuras.
Un contrato es oneroso cuando los costes de su cumplimiento rebasan los beneficios espera-
dos derivados de su ejecución. La conducta racional de la empresa es apartarse del contrato,
no cumplirlo, y pagar la pena contractual o la indemnización, si ésta es menor que aquella
diferencia.
sentido y ha provocado una expectativa válida entre los afectados. La provisión debe limitarse
a los costes de reestructuración, sin que pueda abarcar a los realizados en relación con las
actividades empresariales de continuación.
La regulación que de la provisión efectúa la NIC 37 y la norma 37 del PCBE determina un no-
table acercamiento con la regulación fiscal. En efecto, la provisión contable sólo procede
cuando existe una obligación presente, anclada en un suceso pasado, que puede ser fiable-
mente cuantificada. Por lo tanto, los riesgos previsibles y las pérdidas eventuales no motiva-
rán la provisión, ni tampoco las deudas meramente probables, excepto si la probabilidad de
su ocurrencia es superior que lo contrario.
Admitiendo una ligera exageración, puede afirmarse que el artículo 13.1 del TRIS está redac-
tado con criterios similares a los que responde la NIC 37.
En este sentido, cuando el artículo 14.1.a) del TRIS establece que no tendrán la considera-
ción de gastos fiscalmente deducibles “los que representen una retribución de los fondos
propios”, se refiere a la retribución de los activos financieros mercantilmente calificados como
instrumentos de capital.
La introducción de las NIC implicará una innovación sustancial, ya que las mismas estable-
cen criterios para distinguir entre instrumentos de capital y pasivos financieros (NIC 32), de
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 397
manera que nuestro futuro derecho contable, inspirado en las mismas, también los estable-
cerá. Y así, podrá acontecer que un activo financiero calificado mercantilmente como instru-
mento de capital tenga la calificación contable de pasivo financiero, o viceversa. Y de ahí que
retribuciones que mercantilmente tengan la consideración de distribución de beneficios, po-
drán tener la calificación contable de intereses.
De igual manera, la norma 56 del PCBE establece que, entre los intereses y cargas asimila-
das, se incluye “… el importe de las retribuciones a los instrumentos financieros que, con la
naturaleza jurídica de capital, no cumplan los requisitos para clasificarse como patrimonio
neto…”, y, consecuentemente, la norma 54 clasifica como pasivo financiero a los “… instru-
mentos financieros que teniendo la naturaleza jurídica de capital no cumplan los requisitos
para calificarse como patrimonio neto…”.
397 ❚ CAPÍTULO 14
divergencia apuntada era inexistente e impensable. A partir de la implantación de las NIC, tal
divergencia podrá ser real.
La configuración de la base imponible en función del resultado contable (artículo 10.3 del
TRIS) invitaría a entender válida, a los efectos del artículo 14.1.a) del TRIS, la calificación
contable. Pero, inversamente, también podría ser entendido dicho precepto como una co-
rrección del resultado contable de las aludidas en el artículo 10.3 del TRIS, a los efectos de
determinar la base imponible, fundada en la calificación mercantil.
Esta enojosa cuestión sólo puede resolverse satisfactoriamente mediante la superación de las
divergencias entre las normas contables y las mercantiles. Superación que, por otra parte, es
la solución natural a un ordenamiento jurídico-privado que ancla la validez y efectos de los
contratos en la causa de los mismos (artículo 1.276 del Código Civil) y en un ordenamiento
contable en el que el fondo prima sobre la forma (marco conceptual NIC). Y, a tal efecto, ha
de reconocerse que las normas NIC establecen unos criterios de clasificación o calificación
fundamentados en las obligaciones que nacen del contrato del que se deriva el instrumento
financiero, en tanto que las normas mercantiles vigentes no explicitan, en rigor, criterio al-
guno, si bien, implícitamente se fundamentan en los derechos y obligaciones dimanantes de
la cualidad de socio, de manera tal que aquellos instrumentos que confieran tales derechos
son clasificados entre los representativos de la participación en fondos propios o instrumen-
tos de capital. Ahora bien, los derechos inherentes a la cualidad de socio son, justamente,
aquellos que, según la NIC 32, determinan la calificación de un activo financiero como instru-
mento de capital. Así, en la comunicación de 17 de diciembre de 2003, siguiente a la modifi-
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 398
cación de la NIC 32, se afirma que “… un instrumento financiero es capital si concede un de-
recho en los activos de la entidad una vez deducidos todos los pasivos…”, y es claro que tal
derecho sólo lo tiene, de acuerdo con nuestras normas mercantiles, quien ostenta la cualidad
de socio [artículo 48.2.a) del TRLSA].
Se concluye así que no hay divergencias entre los criterios de clasificación NIC y los criterios
de clasificación mercantiles, de manera tal que cualquier divergencia en relación con un ins-
trumento financiero concreto deriva de una inadecuada clasificación o calificación del mismo
debido a la incorrecta aplicación de los criterios, sean mercantiles o contables. A la misma
conclusión llegamos en el marco del PCBE, ya que la norma 20.2 también define el instru-
mento de capital como “… un contrato que evidencia un interés en los activos de la entidad
que lo emite una vez deducidos todos sus pasivos…”.
Así, una participación preferente que otorgue el derecho a una remuneración prefijada y, en
su caso, a recuperar el capital entregado, pero no a participar en los beneficios ni en los acti-
vos netos de la entidad emisora en caso de disolución, no puede ser calificada como instru-
mento de capital, ni con arreglo a la NIC 32 ni a tenor de la legislación mercantil; y una ac-
398 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
ción rescatable, en la que el importe del rescate esté desligado de las ganancias obtenidas
por la entidad, tampoco podrá ser calificada como instrumento del capital, en atención tanto
a las normas contables NIC como a los criterios implícitos en las normas mercantiles, por más
que se hallen reguladas dentro del capítulo IV del TRLSA, seguramente forzando la pureza de
las instituciones.
En suma, la NIC 32 cifra la característica del instrumento de capital en que concede un dere-
cho en los activos de la entidad emisora, una vez deducidos todos los pasivos, y este derecho
es el que configura, entre otros, la cualidad de socio según el artículo 48.2 del TRLSA, de ma-
nera tal que no existe un conflicto entre las normas contables NIC y las normas mercantiles
españolas, sin perjuicio de las divergencias que pudieran derivarse de los errores de clasifica-
ción o calificación padecidos en la aplicación concreta de los criterios en los que se asientan
las referidas normas, contables y mercantiles.
Los criterios de distinción entre los instrumentos de capital y los pasivos financieros estableci-
dos en la NIC 32 son llevados hasta sus últimas consecuencias en relación con los denomi-
nados instrumentos financieros compuestos, esto es, aquellos que crean, para su emisor, si-
multáneamente, un instrumento de capital propio y un pasivo financiero, como pueden ser
las obligaciones convertibles. Estos instrumentos financieros deben registrarse contable-
mente separando en dos componentes, como así lo advierte la comunicación de 17 de di-
ciembre de 2003, anteriormente mencionada. En este sentido se expresan también las nor-
mas 20.6.b) y 21.11, 12, 13 y 14 del PCBE, estableciendo el inciso final del apartado 14 que
“… las remuneraciones de los instrumentos financieros compuestos se imputarán a cada
uno de sus componentes de manera consecuente y consistente”.
La norma 55.2.i) del PCBE establece una partida específica, dentro del patrimonio neto, pero
diferenciada del capital, denominada Otros instrumentos de capital. De instrumentos finan-
cieros compuestos que, “… incluye el importe correspondiente al componente de los instru-
mentos financieros con el carácter de patrimonio neto…”. Tal separación no está prevista por
las normas mercantiles vigentes.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 399
Por otra parte, los criterios relativos a la configuración del patrimonio neto como la cifra resi-
dual de la diferencia entre los activos y los pasivos (marco conceptual) determinan que las ac-
ciones o instrumentos de capital propios adquiridos, ya sea para su amortización o posterior
transmisión, sean considerados como modificación del patrimonio neto. En este sentido, la in-
terpretación de la NIC 16 establece que “... la adquisición de acciones en cartera debe ser
presentada, en los estados financieros, como una modificación del patrimonio neto...”, con la
consecuencia de que “... al vender, remitir o cancelar las acciones propias, la empresa no
debe proceder a reconocer ningún resultado, ya sea pérdida o ganancia en el estado de resul-
tados...”. En el mismos sentido, la norma quincuagésima quinta.2.b) del PCBE minora el pa-
trimonio neto en “... el importe de los instrumentos de capital en poder de la entidad...”. Y la
norma vigésima primera excluye la contabilización de cualquier resultado en relación con las
operaciones sobre instrumentos calificados como de capital propio, de manera tal que “... las
contraprestaciones recibidas o entregadas a cambio de ellos se añadirán o deducirán directa-
mente del patrimonio neto de la entidad...” (apartado 4).
Actualmente, de acuerdo con lo previsto en la cuenta 198 del PGC, las transmisiones de ac-
ciones propias pueden deparar ganancias o pérdidas, imputables a la cuenta de resultados,
399 ❚ CAPÍTULO 14
y, consecuentemente, en ausencia de una norma fiscal correctora, tales rentas se integran en
la base imponible. La modificación de la norma contable en el sentido expuesto, determinará
la inexistencia de rentas y, por tanto, las transmisiones de acciones propias no tendrán reper-
cusión sobre la base imponible.
Las inversiones en sociedades dependientes deben figurar en los estados financieros indivi-
duales de la sociedad dominante al coste o bien ser tratadas como activos financieros dispo-
nibles para la venta (NIC 27.29). A raíz de la modificación de diciembre de 2003 desapareció
la posibilidad de aplicar el método de la participación. La norma 22.3.d) del PCBE elimina la
opción de la contabilización como activo financiero disponible para la venta.
Las inversiones en sociedades asociadas deben figurar en los estados financieros individuales
de la entidad inversora por el coste o bien ser tratados como activos financieros disponibles
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 400
para la venta (NIC 28.12). También a raíz de la modificación de diciembre de 2003 desapare-
ció la posibilidad de aplicar el método de la participación. La norma 22.3.d) del PCBE elimina la
opción de la contabilización como activo financiero disponible para la venta, y la norma 55.2.g)
precisa que la valoración por el método de la participación de las inversiones en sociedades
asociadas solamente puede realizarse en los estados financieros consolidados, dando lugar a
las “reservas/pérdidas de entidades valoradas por el método de la participación”.
La NIC 31, relativa a los negocios conjuntos, una de cuyas modalidades son las entidades
multigrupo, no establece normas en relación con la contabilización de tales inversiones en los
estados financieros individuales (apartado 38). La norma 44, relativa a negocios conjuntos,
del PCBE, remite a la 46 en relación con el tratamiento contable de las entidades multigrupo,
y esta última norma, reguladora de los criterios generales de consolidación, establece la apli-
cación del método de integración proporcional.
Como quiera que, a efectos fiscales, lo relevante son los estados financieros individuales, in-
cluso en el régimen de los grupos fiscales, omitimos toda referencia a la contabilidad de con-
solidación en relación con las inversiones financieras en dependientes, asociadas y entidades
400 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
multigrupo.
Por tanto, dejando a salvo las diferencias de cambio, la cuenta de resultados de la sociedad
inversora solamente registrará imputaciones positivas por razón de los dividendos y en el mo-
mento de transmisión de la participación.
La NIC 18, relativa a los ingresos, establece que los dividendos deben reconocerse cuando
exista el derecho a recibirlos por parte del accionista, y formula una regla especial en relación
con aquellos dividendos que procedan de “… ganancias netas obtenidas antes de la adquisi-
ción de los títulos…” (apartado 32), en el sentido de que no deben imputarse a cuenta de re-
sultados sino a minorar el coste contable de la participación. El PCBE se refiere a esta cues-
tión en la norma 17.5, al establecer que “… el importe de los (…) dividendos devengados
con anterioridad a la adquisición y pendientes de cobro se incluyan en cuentas separadas de
activo…”, y también en la norma 56.1.c) al considerar como rendimientos de instrumento de
capital imputables a la cuenta de resultados a “… los dividendos y retribuciones de instru-
mentos de capital cobrados o anunciados en el ejercicio, que correspondan a beneficios ge-
nerados por las entidades participadas con posterioridad a la adquisición de la participa-
ción…”. Nótese que la norma citada en primer lugar solamente parece permitir aplicar a la
reducción del coste de la participación los dividendos declarados con anterioridad a la fecha
de adquisición de la participación, en tanto que la segunda parece que se centra, más bien,
en los ejercicios de generación del beneficio que se distribuye, de manera tal que cuando és-
tos fueran anteriores a la toma de la participación, los dividendos se aplicarían a minorar el
coste de la participación.
Las normas contables comentadas no abordan el caso de los dividendos distribuidos con
cargo a beneficios obtenidos después de la adquisición de la participación, pero desconta-
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 401
La tributación de los beneficios distribuidos está regulada en tres preceptos del TRIS: artículo 30
(dividendos internos), artículo 21 (dividendos extranjeros, método de exención), artículo 32 (di-
videndos extranjeros, método de imputación).
La regulación que de los dividendos distribuidos con cargo a beneficios existentes en el momento
de la toma de la participación efectúa la NIC 18.32 casa perfectamente con el sistema de deduc-
ción para evitar la doble imposición establecido por el TRIS, e incluso facilitará su aplicación.
401 ❚ CAPÍTULO 14
del “lavado de dividendos” cuando se pretende aplicar la deducción para evitar la doble im-
posición sin que la plusvalía derivada de la transmisión de la participación hubiera tributado.
Pues bien, este conflicto no se plantea cuando el “dividendo comprado” se aplica a la reduc-
ción del valor de adquisición de la participación, como establece la NIC 18.32, de manera tal
que la restricción del artículo 30.4.e) del TRIS en cierto modo se ha visto ratificada por dicha
norma contable.
pecto de su proyección temporal. Los cambios en las políticas contables no tratan de corregir
errores sino de lograr una presentación más adecuada en los estados financieros de las ope-
raciones realizadas por la empresa.
Un error determinante de la omisión de una operación implica que el resultado contable del
ejercicio en que se produjo el error no respondía a la aplicación correcta de las normas con-
tables. Por tanto, tal resultado contable no pudo ser el núcleo de la base imponible en los tér-
minos previstos en el artículo 10.3 del TRIS, pudiendo la inspección tributaria proceder a su
correcta determinación, de acuerdo con lo previsto en el artículo 143 del TRIS, sin perjuicio
402 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
En suma, la corrección de los errores con carácter retrospectivo o retroactivo utilizando una
cuenta de reservas no puede impedir que, a efectos fiscales, se determine correctamente el re-
sultado del ejercicio o ejercicios afectados en aplicación de lo previsto en el artículo 143 del TRIS.
El cambio de una política contable procede cuando ello sea obligatorio en virtud de una
norma legal, o porque la NIC correspondiente se modifica, o, en fin, cuando el órgano com-
petente encuentra razones que lo justifiquen (NIC 8.42 y norma 8.6 del PCBE).
El cambio de políticas contables, a diferencia de los errores, no implica que el resultado con-
table del ejercicio o ejercicios afectados no fuera correcto. Lo fue, y por tanto no admite modi-
ficación alguna a los efectos de determinar la base imponible, por razón de un cambio de po-
líticas contables, en los periodos impositivos afectados.
Los supuestos que pueden plantearse son bien diversos, y por tanto no es posible, en abs-
tracto, describir la regulación que el TRIS establece. Sin duda, la posibilidad de admitir la de-
ducción de gastos cargados a cuenta de reservas del artículo 19.3 del TRIS podrá dar res-
puesta a ciertos casos, pero habrá otros respecto de los que no sea fácil determinar la norma,
y su forma de aplicación, que produzca una solución satisfactoria.
403 ❚ CAPÍTULO 14
de resultados
En el apartado 3.1 se expuso que el resultado contable a que se refiere el artículo 10.3 del
TRIS es el saldo de la cuenta de resultados, esto es, la diferencia entre los ingresos y los gas-
tos que se imputan a la cuenta de resultados.
La aplicación de las NIC origina, además de los aludidos ingresos y gastos, otros que no se
imputan a la cuenta de resultados, sino que imputan directamente a patrimonio neto. De en-
tre ellos, algunos, los más, se imputan a la cuenta de resultados en un momento determinado
de la operación, generalmente con ocasión de su extinción, pero otros permanecen en patri-
monio neto. Seguidamente se describen estos ingresos y gastos con la finalidad de precisar
su régimen fiscal.
• Diferencias de cambio derivadas de una partida monetaria que, en sustancia, forma parte
de la inversión neta realizada por la empresa en una entidad extranjera (NIC 21.17). En el
momento de la transmisión de la participación, la diferencia de cambio se imputa a la
cuenta de resultados (NIC 21.37).
• Diferencias de cambio derivadas de un pasivo a largo plazo, que se trata de forma contable
como una cobertura para la inversión neta de la empresa en una entidad extranjera (NIC
21.19). En el momento de la transmisión de la participación la diferencia de cambio se im-
puta a la cuenta de resultados (NIC 21.37).
• Diferencias de cambio derivadas de partidas no monetarias registradas a valor razonable
con contrapartida en patrimonio neto, que desglosarán el componente de tipo de cambio
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 404
se imputará a patrimonio neto, hasta el momento de la baja del instrumento financiero, impu-
tándose en tal momento a cuenta de resultados [NIC 39.103.c); norma 22.11 del PCBE].
• Ganancias o pérdidas derivadas de un instrumento financiero de cobertura sobre los flujos de
efectivo, con imputación a cuenta de resultados cuando se apliquen a la misma las ganancias
y pérdidas del elemento cubierto (NIC 39.158 y siguientes; norma 31.15 del PCBE).
• Ganancias o pérdidas derivadas de un instrumento financiero de cobertura de inversiones
netas en negocios en el extranjero, con imputación a cuenta de resultados con ocasión de
la transmisión, baja en balance o deterioro en el negocio extranjero (NIC 39.164 y siguien-
tes; norma 31.17 del PCBE).
• Ganancias latentes en instrumentos de capital inicialmente clasificados como activos finan-
cieros disponibles para la venta que a la fecha del balance figuran clasificados como acti-
vos no corrientes en venta por operaciones en interrupción, con aplicación a cuenta de re-
sultados con ocasión de la transmisión (norma 34.16 y 17 del PCBE).
• Ajustes derivados de la corrección de errores y del cambio de políticas contables (NIC
8.34.49; normas 8.8 y 19.3 del PCBE).
La relación precedente muestra que todos los ingresos y gastos, ganancias y pérdidas, aplicados
a cuentas de patrimonio neto revierten a la cuenta de resultados, excepto la revalorización del in-
movilizado material e inmaterial. Igualmente, la contabilización de los efectos de la corrección de
errores y del cambio en políticas fiscales puede sustraer partidas a la cuenta de resultados.
Respecto de los errores contables y cambios en las políticas contables, nos remitimos a lo di-
cho en el apartado precedente, en relación con su incidencia en la base imponible.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 405
Finalmente, por lo que se refiere a las diferencias de cambio, puesto que el TRIS no contiene
normas respecto de las mismas, se integrarán en la base imponible todas ellas en cuanto for-
men parte del resultado contable. Y así es, pues tanto la NIC 21.15 como la norma 18.11 del
PCBE ordenan que las ganancias y pérdidas derivadas de las diferencias de cambio se impu-
ten, con carácter general, a la cuenta de resultados, y aquellas que, excepcionalmente, se
imputen a patrimonio neto, reviertan, llegado el caso, a cuenta de resultados.
Ya se ha indicado que el PCBE ofrece dos resultados contables. El que tomamos en consideración es
el saldo de la cuenta de resultados o cuenta de pérdidas y ganancias. Este resultado contable sufrirá
ciertas variaciones en relación con el que actualmente se calcula por aplicación de la Circular
4/1991. No creemos, sin embargo, que toda variación deba ser neutralizada mediante una correc-
405 ❚ CAPÍTULO 14
ción fiscal, a los efectos de determinar la base imponible. Más aún, un criterio de modificación de la
normativa tributaria basado en el mantenimiento de la base imponible previa a la reforma contable
sería aberrante. Lo oportuno es investigar si el resultado contable del PCBE reúne las características
precisas para constituir el núcleo de la base imponible. Y a partir de ahí, determinar las correcciones
pertinentes.
El resultado contable del PCBE es el fruto de un conjunto de normas regidas por dos hipótesis funda-
mentales, devengo y empresa en funcionamiento (norma 10 del PCBE), y que se inserta en unos es-
tados financieros que deberán suministrar una información clara, relevante, fiable y comparable,
siendo la información fiable cuando sea completa y objetiva, prevalezca el fondo sobre la forma y se
observe la prudencia en las estimaciones y valoraciones (norma 7 del PCBE). Nada hay que objetar a
un resultado contable así determinado. No obstante, el último inciso de la letra b) de la norma 10 pa-
rece indicar que la valoración por el valor razonable determina una excepción al principio del de-
vengo. Si, efectivamente, estuviéramos ante una excepción al principio del devengo, se crearía un
conflicto en los ámbitos mercantil y fiscal, pues no parece correcto que la junta general pueda dispo-
ner sobre un resultado del ejercicio no devengado ni que la base imponible del impuesto sobre socie-
dades deba integrar tal resultado. Pero, en rigor, no hay tal conflicto. La valoración por el valor razo-
nable no implica una excepción del principio del devengo con tal de que éste se interprete de ma-
nera amplia y dinámica, como, por otra parte, la doctrina contable española había venido ya
sugiriendo aun al margen de los problemas derivados del modelo contable NIC. La propia Circular
4/1991, ya en la actualidad, valora por el valor razonable con contrapartida en cuenta de resultados
a los instrumentos financieros integrados en la cartera de negociación y a los instrumentos financie-
ros derivados especulativos contratados en mercados regulados.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 406
El devengo (o base de acumulación) consiste en que “... los efectos de las transacciones y demás
sucesos se reconocen cuando ocurren (y no cuando se recibe o paga dinero u otro equivalente al
efectivo)...” (Marco conceptual 22). Así, la ganancia en relación con un elemento valorado por el va-
lor razonable ocurre cuando, de acuerdo con las normas que rigen la determinación del valor razona-
ble, el elemento ha incrementado su valor. En el modelo NIC el devengo no se demora hasta el mo-
mento de la transacción, porque la modificación de valor de ciertos elementos patrimoniales es un
suceso determinante del devengo. Esta interpretación amplia o dinámica del devengo es suficiente
para armonizar la hipótesis fundamental del devengo y la valoración por el valor razonable.
Una concepción tan amplia, por más que no carente de lógica, del principio del devengo, presenta el
riesgo de acumular en el resultado contable magnitudes que, aun estando respaldadas por su valor
de mercado actual, tal vez no se hagan efectivas cuando se liquide la operación. El PCBE, con indu-
dable apoyo en el modelo NIC, ha obviado este riesgo, ya que los efectos de la valoración por el valor
razonable se aplican, como ya se ha visto, a cuenta de resultados o a patrimonio neto, según los ca-
sos, de manera tal que sólo cuando se aplica a cuenta de resultados la junta general puede resolver
en relación con el mismo, e inclusive distribuirlo a los socios.
406 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Se sigue de lo expuesto que el resultado del ejercicio de la norma 56.1.x) del PCBE puede, sin difi-
cultades de orden sustantivo, ser considerado como el resultado contable a que se refiere el artículo
10.3 del TRIS. Cuestión diversa es la consideración del PCBE como desarrollo formal del Código de
Comercio. Lo más correcto es que el PCBE se formule a partir de la reforma del Código de Comercio
para incorporar las NIC.
• Fondo de comercio (normas 28.6 y 30.8 y siguientes). Puesto que contablemente no se amortizará
el fondo de comercio, se debería suprimir el artículo 11.4, y también el artículo 89.3, sin perjuicio
de admitir la deducción del importe del deterioro, debidamente justificada, y bajo el cumplimiento
de los requisitos pertinentes.
• Intangibles de vida indefinida (norma 28.4). Estos activos tampoco se amortizan. Por tanto será
preciso modificar el artículo 11.5 para excluirlos de su ámbito de aplicación.
• Deterioro de valor de activos financieros (norma 29). Los artículos 6, 7, 8, y 9 del RIS deberán ser mo-
dificados totalmente para adaptarlos al contenido de la norma 29 del PCBE. Bajo la aceptación del
deterioro derivado de la aplicación de dicha norma contable, lo previsible es que las nuevas normas
fiscales intenten, entre otros aspectos, objetivar la “… experiencia de pérdidas históricas…” [aparta-
dos 11.b) y 12.d) y e)], que se exijan ciertos requisitos de convalidación a “… los modelos basados
en fórmulas o métodos estadísticos…” (apartado 13), que se establezcan límites a los “… calenda-
rios de morosidad…” (apartado 13).
• Provisiones (norma 37). Los apartados 2 y 3 del artículo 13 deberían ser modificados totalmente al
objeto de acomodarse a la nueva regulación contable de la provisión. Lo previsible es que se adop-
ten ciertas cautelas en relación con las obligaciones de carácter implícito o tácito.
• Valor teórico. El artículo 12.3 del TRIS construye el límite relativo al deterioro de valor de los instru-
mentos financieros de capital no cotizados en mercado organizado en función del valor teórico. A
estos efectos, debería precisarse si los “ajustes por valoración” (norma 55.3) deben ser tomados
en consideración a los efectos de determinar el valor teórico.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 407
• Remuneración de capital con naturaleza de pasivo financiero [norma 56.1.b) e i)]. Lo mejor sería
que la legislación mercantil y la contable aplicaran los mismos criterios de calificación para evitar la
aparición, siempre conflictiva, de esta partida. Si tal empeño no se lograra, en el artículo 14.1.a)
debería explicitarse la prevalencia de una u otra norma.
• Políticas contables (norma 8). En el artículo 19 sería conveniente incorporar un apartado relativo al
régimen de modificación de las políticas contables.
• Acciones propias (norma 21.4). La regulación contable debería ser aceptada a efectos fiscales,
como sucede en la actualidad. Pero, puesto que la transmisión de las acciones propias no determi-
nará resultado contable, a diferencia de la regulación vigente, sería oportuno, para evitar equívo-
cos, derogar el artículo 15.9 del TRIS, en el bien entendido que tal derogación implica la acepta-
ción plena de la regulación contable.
También debería examinarse si otras nuevas correcciones al resultado contable serían necesarias.
Estas correcciones deberían estar inspiradas en el principio de que la renta disponible ha de ser gra-
vada. Así cualquier renta desviada de la cuenta de resultado hacia una de patrimonio neto podría ser
atribuida a la base imponible si se entendiese realizada o disponible. A grandes rasgos, este tipo de
correcciones no serán precisas. En rigor, el modelo NIC las hace innecesarias, pues habiendo si-
tuado el principio de prudencia bajo la característica de fiabilidad, los excesos en la constitución de
provisiones o en la evaluación del deterioro son rechazados por la norma contable. En este sentido, el
resultado contable NIC es más idóneo que el vigente resultado contable para configurar el núcleo de
la base imponible.
Ahora bien, para que el resultado contable NIC sea aceptado, tanto por la autoridad fiscal como por
las empresas, como el núcleo de la base imponible del impuesto sobre sociedades, debe quedar bien
407 ❚ CAPÍTULO 14
claro, desde el inicio del proceso de transición, que el resultado contable concernido es, como veni-
mos repitiendo, el saldo de la cuenta de resultados. Por tanto, los ingresos y gastos, ganancias o pér-
didas, reconocidos directamente en patrimonio neto no influirán en la determinación de la base impo-
nible, sin perjuicio de las especialidades de los errores y de las variaciones en las políticas fiscales.
Bajo tal consideración podrá mantenerse sin esfuerzo ni fricción el modelo actual de determinación
de la base imponible del impuesto sobre sociedades y, aunque no es posible establecer con rigor una
previsión acerca de una posible evolución de aquélla bajo el modelo contable NIC, lo más probable
es que no se produzcan, en su conjunto, modificaciones apreciables.
No obstante, para las empresas que operan con instrumentos financieros derivados no designados
para cobertura, el resultado contable se incrementará en la medida en que, a diferencia de la situa-
ción actual, deberán reflejar las ganancias potenciales en la cuenta de resultados. Pero, en su con-
junto, esta regla contable no aumentará la base imponible porque las pérdidas potenciales, que ac-
tualmente se integran en el resultado contable a través de una provisión de pasivo fiscalmente no de-
ducible, se integrarán mediante la valoración por el valor razonable, y tal pérdida debería ser
rechazada a efectos fiscales.
Las modificaciones que del TRIS se han sugerido parten de que el resultado contable a tomar en
consideración a los efectos del artículo 10.3 del TRIS es el contenido en la cuenta de pérdidas y ga-
nancias o cuenta de resultados (NIC 8 y norma 56). Por tanto, los ingresos y gastos directamente re-
conocidos en patrimonio neto, dejando a salvo las observaciones realizadas en relación con los erro-
res y la modificación de políticas contables, no se tomarán en consideración a los efectos de confor-
mar el resultado contable.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 408
Sería muy deseable que este aspecto quedase perfectamente claro, pues, de lo contrario, podría ori-
ginarse una reacción contraria a las nuevas normas contables por motivos fiscales. En efecto, la in-
clusión de los mencionados ingresos y gastos en el resultado contable y, por lo tanto, en la base im-
ponible, determinaría una tributación desmesurada. En buena lógica esto no debería suceder.
Las modificaciones que habrán de producirse en relación con el resultado contable derivado de la
aplicación de la Circular 4/1991, afectarán, fundamentalmente, al área de instrumentos financieros
derivados. La integración en el resultado contable de las ganancias o pérdidas imputables a los ins-
trumentos financieros derivados que no sean designados para cobertura aumentarán el mismo, pero,
a efectos fiscales, la tributación será más neutral que la actual. En efecto, en la actualidad, tratán-
dose de instrumentos financieros derivados no contratados en mercados organizados, las ganancias
potenciales no se incluyen en el resultado contable, pero las pérdidas provisionadas no son fiscal-
mente deducibles. En la regulación NIC las ganancias se incluyen en el resultado contable, y de ahí
un aumento de la base imponible, pero las pérdidas, que también se incluyen en el resultado conta-
ble por la vía del valor razonable, deberían ser aceptadas a efectos fiscales, y de ahí la neutralidad.
La menor relevancia que las normas internacionales de contabilidad confieren a la prudencia debería
408 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
repercutir en un aumento del resultado contable, pero no de la base imponible, porque ya las nor-
mas fiscales en vigor recortan la incidencia fiscal de la prudencia, básicamente en el campo de la
provisión para insolvencias y en el de las denominadas provisiones de pasivo.
Con todo, las NIC son un estímulo para avanzar en el proyecto de base imponible común consoli-
dada europea.
FASCiCULO 14 30/9/04 19:25 Página 409
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 409
C A P Í T
15
U L O
Normas Internacionales de
Contabilidad
1. Introducción 411
C A P Í T
15
U L O
1. Introducción
La oportunidad y utilidad de difundir el contenido de las normas contables internacionales IASB es a
todas luces palmaria ante el escenario actualmente abierto de la reforma de la contabilidad española,
como consecuencia de la decisión tomada por la Unión Europea (UE) de ir a un modelo informativo
de cuentas anuales (CA) de sus empresas, con un alto grado de proximidad a las normas e interpre-
taciones contables (conocidas como NIC-SIC o también como IFRS-IFRIC) emitidas por dicho orga-
nismo internacional de carácter privado o profesional.
411 ❚ CAPÍTULO 15
Todo arranca formalmente del Reglamento (CE) nº 1.606 del Parlamento Europeo y del Consejo del
19/7/2002 por el que la UE decidió la adopción y aplicación de las normas internacionales de conta-
bilidad, limitadas en principio exclusivamente a la formulación de las cuentas anuales consolidadas
(CAC) de las sociedades de países miembros de la UE que tuviesen admitidos a cotización sus valo-
res en un mercado regulado de esta área a partir de los ejercicios que comiencen el 1/1/2005 y con
relación a aquellas NIC-SIC emitidas por IASB convalidadas formalmente por la Comisión de la UE,
circunstancia ésta que se produjo, en relación con la mayor parte de tales textos, por el Reglamento
(CE) nº 1.725/2003 de la Comisión del 29/9/2003.
Hay que hacer constar que el llamado Marco Conceptual para la Preparación y Presentación de los
Estados Financieros (MC) emitido por IASB (documento del que vamos a ofrecer aquí una visión sin-
tética, comentada hasta donde permiten las restricciones de tamaño de este número de una publica-
ción sobre normas de este modelo contable) no ha sido objeto de convalidación por la UE, por
cuanto que de acuerdo con el texto del MC (párrafo 2), “no es una Norma Internacional de Contabi-
lidad y, por tanto, no define reglas para ningún tipo particular de medida o presentación, ni tampoco
tiene poder derogatorio sobre ninguna Norma Internacional de Contabilidad”.
Así pues, al no haberse adoptado formalmente el MC.IASB, por no ser en sentido estricto norma de
obligado cumplimiento en dicho modelo (es decir, por no ser ni NIC ni SIC), el contenido de éste no
será, en rigor, de aplicación obligatoria tampoco dentro de la información contable de sociedades do-
miciliadas en la UE, al menos directamente, sino que a lo sumo será un elemento de referencia o de
justa interpretación de las NIC-SIC del modelo IASB y posiblemente podría servir como fuente de ins-
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 412
piración para la reforma contable que realice nuestro país ante un lógico movimiento de acerca-
miento de nuestra regulación contable vigente (Plan General de Contabilidad –PGC– básicamente) a
las bases conceptuales reformuladas que puedan hacerse del PGC, en su aplicación al espacio infor-
mativo no sometido imperativamente a las NIC-SIC de acuerdo con el referido Reglamento, o sea,
para la elaboración de las CA individuales de todo tipo de entidades españolas –cotizadas o no– y, en
su caso, para las consolidadas no cotizadas, en el supuesto de que no se decida generalizar la apli-
cación de las NIC-SIC homologadas por la UE a todo el conjunto informativo de nuestro país (CAC y
CA individuales de cotizadas y no cotizadas), lo que es previsible que ocurra.
En esta serie de documentos de difusión y comentarios del modelo de normas IASB, se me ha enco-
mendado glosar el MC, pues aun cuando no tenga la categoría de NIC o SIC de obligado cumpli-
miento en dicho modelo, sí es un intento importante de definir el armazón teórico que sostiene el
modelo y sobre el que –teóricamente al menos– habrían de surgir en consecuencia sus distintas
NIC-SIC, con lo que es un documento de importancia conceptual evidente, pues nos marcará los
grandes ejes soporte a los que deberían responder las diferentes piezas normativas de este modelo
de regulación contable.
412 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
Previo a la descripción del MC.IASB, será conveniente formular un conjunto de reflexiones generales
acerca de la necesidad o conveniencia que tiene todo modelo de regulación contable de contar con
un documento o declaración en donde se fijen las bases conceptuales de referencia, sujeción e ins-
piración de las soluciones contables que habrían de surgir de dicho modelo, cualquiera que sea la
denominación asignada a tal tipo de pronunciamiento.
Hablando de los usuarios externos de la información contable (paquete estándar de EF), ésta hoy se
concibe como un bien público en cualquier país moderno. Pues bien, se presupone que esta informa-
ción es útil para la toma de decisiones de cualquier tipo de usuario si cumple una serie de propiedades.
2. 1. Fiabilidad de la información
Al margen de los contenidos concretos que deban figurar dentro de la información revelada al
público, para que ésta sea útil para la toma de decisiones debe garantizarse la fiabilidad o
credibilidad de lo que se dice en ella. Esto va a su vez ligado al cumplimiento de varios requi-
sitos: objetividad, verificabilidad o auditoría externa, neutralidad o imparcialidad, relevancia o
importancia, oportunidad temporal, etcétera.
2. 2. Comparabilidad de la información
Para garantizar al máximo una competitividad auténtica interempresarial, sin ventajas u orto-
pedias de unas sobre otras, es preciso que las normas o reglas de juego contable que han de
regir para el cálculo de los costes, resultados, patrimonio, etcétera, sean las mismas para las
empresas de un mismo entorno competitivo o lo más parecidas posible. Asimismo, para que
las decisiones de inversión-desinversión en unas empresas u otras sean correctas, es preciso
que la información contable sobre ellas entregada al público sea comparable, lo que exige
unas reglas contables de juego análogas para todas ellas.
2. 3. Relevancia de la información
Para que la información contable que llega a los usuarios pueda ser útil en su toma de deci-
siones, es preciso que sea relevante o importante para tal fin.
413 ❚ CAPÍTULO 15
Ahora bien, hay que subrayar que no existe una conexión visible entre el suministro de infor-
mación relevante con la necesidad de que ésta surja desde un cuadro regulatorio de princi-
pios y normas contables concretas, conexión de necesidad que en cambio sí se aprecia a
partir de los requerimientos de fiabilidad y comparabilidad de la información a suministrar por
las distintas empresas.
Lo que se quiere decir es que la razón genuina de contar con un sistema de regulación con-
table es garantizar al máximo la fiabilidad de la información empresarial que ha de llegar a
manos del público y también su comparabilidad interempresarial e intertemporal, lo que en
modo alguno está reñido con que la información que resulte de dicho modelo tenga que ser
también relevante como es natural, pero entendemos que en un modelo de regulación para
la información pública se debe poner la fiabilidad y la comparabilidad por encima de la su-
puesta relevancia de lo que se informa cuando ésta resultase de la aplicación de criterios de
dudosa o deficiente fiabilidad.
Hay que entrar, pues, en cómo debería construirse un edificio sólido de regulación contable
que permitiese contar con un código completo y robusto de principios y normas de tal natura-
leza para el fin perseguido.
Entendemos que no hay más que un camino auténticamente racional, es decir, seguir un iti-
nerario lógico-deductivo que habría de comenzar por definir el armazón o estructura concep-
tual básica del modelo regulatorio al que debe responder el conjunto del edificio a construir
encarnado en sus distintas piezas normativas específicas, todas las cuales deberían inspi-
rarse, ajustarse y guardar coherencia con los conceptos básicos definidos para el armazón o
estructura contable previamente señalada.
414 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
En otras palabras, un modelo de regulación contable que no cuente como punto de arranque
con la definición de una base o marco conceptual completo, robusto y suficientemente con-
gruente en el plano de la racionalidad económico-financiera de los hechos empresariales so-
bre los que se pretende informar, difícilmente podría calificarse de verdaderamente útil para
el propósito informativo que ha de cumplir y que ha quedado señalado.
Por consiguiente, un modelo de regulación contable que fuera surgiendo pieza a pieza, es
decir, sin partir de un marco inicial de referencia común para el conjunto de las distintas pie-
zas individuales que vayan surgiendo, es posible que pudiese ser completo, copioso o abun-
dante en sus detalles, pero es seguramente más probable que sean más frecuentes y visibles
sus contradicciones, incoherencias y fisuras en el plano de la racionalidad de conjunto al fal-
tar ese armazón conceptual de referencia central, o sea, al carecer de una base motriz co-
mún inspiradora de los contenidos de las distintas piezas normativas.
Pues bien, esto es lo que se aprecia en la historia de la regulación contable del área anglosa-
jona, la cual durante muchos años se realizó pieza a pieza, o sea, a base de normas conta-
bles separadas para el tratamiento de cuestiones específicas de la vida empresarial, carecién-
dose de un pronunciamiento previo, robusto y completo de la estructura básica común a la
que se debieran ajustar cada una de ellas, con el fin de que la información resultante para el
conjunto fuese armónica. Este defecto inicial sólo se ha logrado paliar tardíamente con la pro-
mulgación por ejemplo por el FASB norteamericano en 1988 de sus pronunciamientos suce-
sivos de marco conceptual (Statements of Financial Accounting Concepts), o por el modelo
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 415
IASB, con su documento declarativo de Marco Conceptual para la Presentación de los Esta-
dos Financieros (MC).
415 ❚ CAPÍTULO 15
delo de regulación contable para la información empresarial pública con fines generales. Debe con-
tener la definición o el trazado de las vigas maestras del edificio de la regulación contable que se
quiere construir, que son las que le darán soporte y forma y serán al mismo tiempo los condicionan-
tes de coherencia en cuanto a la definición posterior de cada una de sus piezas normativas de deta-
lle, de tal modo que éstas deberían guardar armonía y concordancia con los planteamientos senta-
dos en el MC.
Partiendo de esta premisa, hay que señalar que no hay un único e indiscutible molde de lo que debe
ser y contener un MC de contabilidad financiera para todo modelo de regulación contable, aunque
como es lógico, tiene que haber una afinidad próxima en cuanto al índice de contenidos a abordar
para todos los pronunciamientos de esta guisa.
En este sentido, también hay que apuntar que las definiciones de MC de algunos de los modelos re-
gulatorios (cualquiera que fuese la denominación utilizada en cada caso), más allá de sus posibles
afinidades, pueden en unos casos ser más escuetos o mucho más desarrollados en sus contenidos o
detalles.
Así, por ejemplo, estas declaraciones en el área anglosajona (la del modelo FASB o la del modelo
IASB) son mucho más amplias y estructuradas y más ricas en detalles que las que encontramos, por
lo general, en los modelos de procedencia o influencia latina, donde puede que ni tan siquiera se en-
cuentre un documento nítidamente sustantivado con una etiqueta de este estilo, aunque natural-
mente puedan contar con bases conceptuales bastante satisfactorias dentro de su conjunto norma-
tivo o en alguna parte especial del mismo. Es el caso, por ejemplo, de nuestro modelo de PGC,
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 416
Consignado que no existe un molde único e indiscutible sobre el contenido de cuestiones a incluir en
una declaración de bases conceptuales de un modelo de regulación contable, ni tan siquiera que
tenga que llamarse por esencia ontológica MC, se podrían apuntar las siguientes cuestiones básicas
para ser tratadas dentro de un pronunciamiento de esta índole, tomando para ello –además por ser
objeto de referencia de este trabajo– el índice de contenidos del MC.IASB:
• Introducción: propósito y valor normativo, alcance y usuarios y necesidades de la información con-
table.
• Objetivo de los estados financieros.
• Hipótesis fundamentales de la información incorporada a los estados financieros.
416 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
b) Otra manifestación genuina de este fenómeno de que la declaración de MC no ha servido para es-
tablecer sólidamente un sentido de unidad y de congruencia conceptual para el conjunto norma-
tivo del modelo nos la da el hecho bastante frecuente y alarmante de los dobles tratamientos con-
tables, a veces incluso contradictorios entre sí (por ejemplo, que una cierta operación pueda ser
tratada como gasto consuntivo o como activo a voluntad de la empresa). En ese sentido, no en
otros, podría decirse que respeta poco su propio MC o se cree no demasiado en la virtud real de
esta pieza. La no revisión de su texto original en 15 años es un síntoma de que quizá pueda ser
un referente más bien lejano a efectos de la creación de las normas.
c) Declara el propio texto del MC que no es norma contable internacional de este modelo, por lo que
no define reglas para ningún tipo particular de valoración o de presentación, ni poder derogatorio
sobre ninguna norma ni sobre ninguno de sus contenidos. Por eso, no ha sido convalidado por la
UE, por lo que únicamente tendría el mero papel de guía o de referente secundario a lo sumo en
este contexto, papel secundario reconocido implícitamente por el propio modelo IASB al colocar
los distintos contenidos específicos de las NIC-SIC de obligado cumplimiento sobre los del MC,
cuando más bien parecería que debería ser a la inversa.
d) Sorprende sobremanera que existan ciertas figuras o fórmulas contables básicas, avaladas, reco-
gidas o que aparecen con cierta frecuencia en determinadas NIC-SIC que, sin embargo, no se en-
cuentran reconocidas abiertamente en la declaración de MC.IASB. La anomalía más llamativa en
este sentido, por su gran resonancia y trascendencia informativa, sería el criterio de valoración fair
value (valor razonable en la traducción aséptica hecha al castellano), del que se habla y prescribe
en numerosas normas específicas y que sin embargo no aparece reconocido singularmente como
uno de los criterios de valoración enumerados en esta sección específica del MC.
417 ❚ CAPÍTULO 15
e) Los contenidos de la información contable a presentar públicamente propugnados por la declara-
ción de MC son comunes para todos los usuarios externos potenciales de esta información, lo que
por otra parte no puede ser en términos lógicos de otro modo. Sin embargo, el documento porme-
noriza los posibles grupos de usuarios externos (inversionistas, empleados, prestamistas, provee-
dores y otros acreedores comerciales, clientes, Gobierno y organismos públicos y público en ge-
neral) e incluso enuncia someramente las supuestas necesidades informativas de los distintos
grupos, para acabar reconociendo al final algo tan tópico como que el paquete informativo están-
dar común reconocido por el MC.IASB puede servir con eficacia para la toma de decisiones de
signo no coincidente para los distintos grupos mencionados.
f) Se echa en falta en la declaración del MC.IASB una definición expresa y sintética de las condicio-
nes o características del entorno económico y social sobre el que operan las empresas a las que
resultan aplicables los distintos conceptos básicos de este documento (y por supuesto el conjunto
normativo de este modelo), al modo en que lo ha hecho, por ejemplo, la Asociación Española de
Contabilidad y Administración de Empresas (AECA) en su declaración de Marco Conceptual para
la Información Financiera, siendo este documento en todo lo demás un trasunto prácticamente
fiel del MC.IASB.
Naturalmente no es imprescindible que esto tenga que figurar en un texto de MC, pero podría ser
conveniente que figurase y desde luego no menos revelador que la enunciación detallada de
usuarios externos y de supuestas necesidades informativas respectivas, que sí consta en el docu-
mento y que carece de trascendencia práctica alguna.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 418
ción), aunque después, en su NIC 1. Presentación de los EF, se ha decantado por que sea
a través del primero de ellos. Asimismo, esta misma norma requiere además la presenta-
ción de otro EF, el estado de variación del patrimonio neto (fondos propios en terminología
del PGC), que no está contemplado en el MC.
• Unas notas, estados complementarios u otro material explicativo que formará parte integral
de los EF, es decir, información relevante para la toma de decisiones de los usuarios (que
podría ser equivalente a la memoria de nuestra regulación actual).
Hay que dejar constancia (aunque sea de pasada por no disponer de espacio suficiente para
el razonamiento) de la insuficiencia intrínseca de la información contable estándar de carác-
ter retrospectivo propugnada por este o por cualquier otro modelo informativo para el gran
lema enunciado de constituir un instrumento útil para la buena toma de decisiones (actividad
eminentemente prospectiva o predictiva orientada hacia el futuro) por parte de tan larga lista
de usuarios como menciona el MC, frente a la declaración tan idealista como parece hacer
creer el documento, pero tan difícil de poder serlo en condiciones satisfactorias por este o por
cualquier otro modelo similar ciertamente.
Además, hay que consignar que la esencia del objetivo básico de la información que llega a
través de los EF, así como el mensaje y contenidos centrales informativos, según esta parte
del MC.IASB, son bastante parecidos a los que vienen expresados en cualquier modelo de re-
gulación contable de un país de cierto nivel de desarrollo y de extensión de sus prácticas in-
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 419
formativas, como por ejemplo nuestro PGC, más allá de que pudiesen variar algunos de los
contenidos informativos concretos, seguramente más exigentes en ciertos aspectos (por
ejemplo, en notas de memoria) en el modelo IASB, pero sin exagerar la nota tampoco, ya que
en lo fundamental (en lo que alude y requiere el MC como información básica del modelo)
todo es bastante parecido.
5. 2. Hipótesis fundamentales
Como es sabido, la contabilidad empresarial no tiene siempre una solución única e indubita-
ble para los diferentes hechos empresariales cuyos efectos han de ser informados dentro de
los EF, sino que las soluciones dependen de un conjunto de convenciones de partida con
arreglo a las cuales resultan unas determinadas magnitudes o datos contables, de tal modo
que de haber sido otras las convenciones o presupuestos de partida, la información resul-
tante hubiese sido distinta en mayor o menor medida. Ese conjunto de convenciones de par-
tida con arreglo a las cuales se entiende o tiene validación condicionada la información de los
EF se había venido conociendo como principios contables básicos del modelo.
Pues bien, contrariamente a lo que hizo el IASB en su primera andadura, en cuyo primer do-
cumento enumeró una serie de seis principios contables básicos (divididos en tres supuestos
fundamentales y tres prácticas contables habituales) que debía regir su modelo de EF, a par-
tir de un momento e imitando lo que hizo la regulación norteamericana con sus declaraciones
de estructura conceptual básica (Statemens of Financial Accounting Concepts), el IASB en
su réplica de MC dejó de hablar de principios contables y pasó a otras denominaciones, frag-
mentando la relación unitaria, desperdigándolos y quedando un tanto enmascarados en dis-
419 ❚ CAPÍTULO 15
tintas partes de su flamante texto de MC, tarea ésta que más allá de su dudoso interés acade-
micista, ha servido para poco más que hacer más dificultosa su identificación y más complejo
de apreciar su efecto sobre el modelo de los EF, por cuanto que las convenciones básicas
que sujetan el modelo, bajo una denominación u otra, con o sin enunciación unitaria de ellas,
son prácticamente muy parecidas y su incidencia informativa bastante similar.
En la versión del MC.IASB, dos de los viejos principios de antaño aparecen como hipótesis
fundamentales (devengo y empresa en marcha) y el resto aparece encajado en otras piezas
del texto, de una forma algo más difícil de identificar en algún caso (como características cua-
litativas: esencia sobre forma, prudencia, importancia relativa, o en otros espacios del texto
como en el caso de la uniformidad o en el de correlación de ingresos y gastos, etcétera). En
suma, un giro más formal que otra cosa.
Empecemos por atenernos a la estructura temática del MC, a sus dos hipótesis fundamenta-
les (o principios contables en nuestra terminología más sencilla de ver las cosas): devengo y
empresa en marcha. La redacción que da el MC de estas dos hipótesis fundamentales es
prácticamente la misma que da nuestro PGC para dos de sus principios contables de seme-
jante denominación.
Devengo1: indica la regla a seguir para el registro contable de las transacciones y demás su-
cesos empresariales y su consiguiente efecto en los EF. Sus efectos se reconocerán cuando
ocurren (no cuando se cobra o se paga el dinero u otro equivalente que pudiesen comportar).
Por lo tanto, los EF suministrarán los efectos de transacciones y otros sucesos pasados o ya
ocurridos.
Este criterio también está reconocido en términos similares en nuestro PGC. En realidad, exis-
ten dos principios contables que apuntan a lo mismo: el de devengo (circunscrito en su litera-
lidad actual al registro de las transacciones que comportan ingresos y gastos) y el de registro,
que tiene una enunciación más general al referirse a cualquier transacción, portadora o no de
ingresos y gastos y donde se dice que “los hechos económicos deben registrarse cuando
nazcan los derechos u obligaciones que los mismos originen”2. Por tanto, al margen de otras
consideraciones de detalle, la hipótesis fundamental del devengo en el MC.IASB tiene cober-
tura prácticamente equivalente en nuestro PGC.
rarse sobre bases diferentes de las contempladas en el MC.IASB. Hipótesis prácticamente coin-
cidente en lo sustancial con nuestro principio contable de empresa en funcionamiento.
Vemos, pues, cómo nuestro PGC y el MC.IASB, aunque con etiquetas distintas (hipótesis fun-
damentales o principios contables), coinciden en lo sustancial.
421 ❚ CAPÍTULO 15
Fiabilidad. Es la característica cualitativa que merece más desarrollo, pero más que por la
esencia de su propio significado en sí, lo es por las derivaciones o consecuencias asociadas a
la fiabilidad que hace el MC, donde, sobre todo, hay que destacar la aparición de lo que se
correspondería con principios contables básicos, como la prevalencia del fondo económico
sobre la forma o la prudencia, o como el propio objetivo final perseguido para el conjunto nor-
mativo de poder alcanzar una (no la) imagen fiel para el conjunto que se pretende mostrar
sobre la realidad empresarial.
La idea de fiabilidad que transmite el MC es la de que la información debe “estar libre de
error material, de sesgo o de prejuicio”, quedando eclipsada la idea básica de la fiabilidad,
que es la necesidad de elaborar-presentar la información con arreglo a un modelo de regula-
ción completo, con soluciones inspiradas en la racionalidad de los hechos empresariales, de
aplicación automática u objetiva, con soluciones únicas y no plurales u opcionales, etcétera.
Esto es lo que entendemos que debería figurar o, lo que es más importante, lo que debe regir
en un cuadro de normas contables, al margen de cuál sea la idea de síntesis que sobre el
concepto de relevancia declare el modelo en su documento de MC.
mativo final de imagen fiel y, por tanto, una condición más de la fiabilidad de la información
suministrada, no está recogida en nuestro PGC como un principio contable más, cuando en
nuestra opinión debería estarlo, por más que evidentemente se puede demostrar su presen-
cia fáctica en el tratamiento de hechos aislados (como en el caso del tratamiento del arrenda-
miento financiero, por ejemplo). Es conveniente, sin embargo, su presencia como principio
contable porque ello permitiría una aplicación más generalizada o de numerus apertus, y no
como ahora, que es de casos aislados o numerus clausus.
Asimismo, la referencia a la prudencia como asociada a la característica de fiabilidad que
hace el MC y que pudiera parecer forzada, sin embargo, es una idea importante que debe fi-
gurar en la base declarativa de todo modelo de regulación contable.
Sin embargo, las pautas descriptivas sobre la prudencia que hace el MC (en relación a las in-
certidumbres que rodean muchos acontecimientos empresariales y sobre las precauciones a
tomar en cuanto a las estimaciones a hacer en condiciones de incertidumbre) no parece que
permitan apreciar de una manera clara las consecuencias concretas de esta idea, a modo de
una regla de síntesis de actuación contable general como podría ser la enunciación escueta
de un principio contable de prudencia, con vistas a actuar de un modo u otro en relación con
422 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
las situaciones latentes (si se han de registrar las pérdidas latentes de los activos y deudas de
la empresa al cierre en el sistema contable principal (SCP) o cómo debe actuarse en relación
con los hechos de naturaleza aleatoria, etcétera), que son las consecuencias prácticas de la
idea de imagen prudente.
En ese sentido, la incorporación como principio contable de la idea de prudencia que hace
nuestro PGC nos parece mucho más operativa que una descripción teórica y amplia de esta
idea, que es lo que se ve en el MC. Ahora bien, esto no quiere decir que lo que hoy consta
como expresión del principio de prudencia en el PGC sea lo más acertado o conveniente, ni
mucho menos por supuesto, sino que habrá que rebajar su contenido actual en relación a la
supremacía de este principio en aquellas situaciones en las que entrase en conflicto con otros.
Comparabilidad. Los usuarios deben poder comparar los EF de una empresa a lo largo del
tiempo y los de diferentes empresas entre sí de igual forma. Por consiguiente, el reflejo y pre-
sentación de unos mismos hechos para todas las empresas de un mismo sector y a lo largo
del tiempo deben ser los mismos.
El MC está hablando de algo que no es nuevo, que es el sometimiento de todas las empresas
de un entorno a las mismas reglas contables y a su aplicación uniforme de éstas a lo largo del
tiempo. Esta misma lógica está reconocida expresamente en nuestro PGC y puede que hasta
realzada en parte al elevarse la consecuencia de parte de su contenido (uniformidad en el
tiempo para cada empresa) a la categoría de principio contable.
Finalmente, la invocación que encontramos en el MC.IASB a la imagen fiel como objetivo fi-
nal de la información de los EF es la que debe ser, como no podía ser de otra manera, como
lo es la misma consecuencia final que expresa nuestro PGC de la aplicación del conjunto de
principios y normas de un modelo de regulación contable.
Hay que significar además que nuestra PGC cuenta ya en su introducción (punto 10) con
una enunciación escueta pero coincidente en lo sustancial con buena parte de lo que, con
mayor desarrollo y ostentación estética, constituye la larga declaración de características cua-
litativas de los EF que hace el MC.IASB. En otras palabras, el PGC dice con sobriedad y con-
cisión, en pocas palabras, lo sustancial del asunto que es lo verdaderamente importante,
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 423
aunque esté poco visible al estar recluido en el largo texto de su introducción. De esta parte
del MC no sacamos por tanto casi nada nuevo para nosotros, salvo la conveniencia de intro-
ducir dentro de nuestra serie de principios contables el de predominio del “fondo económico
sobre la forma”, un menor énfasis a corregir de nuestro principio de prudencia y poco más
verdaderamente útil o novedoso. En otras palabras, entendemos que es mejor incluso con-
servar el formato sencillo de enunciación que hace el PGC de las características cualitativas
(comprensible-relevante-fiable-comparable-oportuna), aunque quizá sea conveniente resca-
tar esto de la introducción y encajarlo dentro de una primera parte reformada de bases con-
ceptuales y principios contables (o marco conceptual si se prefiere este rótulo), donde se in-
corporase lo sustancial del armazón conceptual del modelo de las CA o EF.
En verdad, con relación a lo esencial de lo que el MC.IASB señala a lo largo de sus 46 prime-
ros párrafos (introducción, usuarios de la información objetivos de los EF, hipótesis funda-
mentales y características cualitativas de los EF), salvo las pequeñas cuestiones señaladas, lo
demás es perfectamente homologable con lo que ya cuenta nuestro PGC, con mayor econo-
mía de términos y mayor sencillez en nuestra regulación, lo que puede ser una ventaja prác-
tica. Hay que ver el fondo de las cosas y no dejarse llevar por otras ilusiones.
423 ❚ CAPÍTULO 15
Definir la noción sustentada por el modelo de lo que es el balance de una empresa, su perí-
metro para saber lo que debe ir o quedar fuera de él (en suma, lo que son sus activos, pasi-
vos exigibles y fondos propios o patrimonio neto concordes con esa noción de balance), lo
que es la noción del resultado contable periódico de una empresa y por ello sus elementos
concordantes con esa noción (ingresos-ganancias, gastos-pérdidas), etcétera, todo esto, en
suma, supone fijar los pilares o las vigas maestras del modelo que toda declaración de estruc-
tura conceptual básica de regulación contable debería precisar. Esto es lo que hace el
MC.IASB aquí.
Aprovechamos ya esta pequeña introducción para señalar que, aunque nuestra regulación
contable cuenta con nociones escuetas y dispersas a lo largo de su texto central (PGC) de lo
que son los elementos que constituyen las CA representadas en sus distintos formatos–tipo,
sin embargo, debe considerarse una aportación notoriamente insuficiente si se compara con
la extensión y grado de desarrollo que todo esto alcanza en el MC.IASB. En todo caso, hay
que aclarar que no por ello todo lo que diga este documento sobre tal materia “tenga que ir a
misa” ni mucho menos. Lo que sí es claro es que la definición concienzuda y detallada de lo
que son o lo que representan, bajo la percepción de nuestro modelo de regulación contable,
el balance y el resultado contable periódico, así como las nociones de sus elementos básicos
respectivos (activos, fondos ajenos, fondos propios, ingresos-ganancias, gastos-pérdidas…),
debe constituir un componente declarativo clave junto a otros (principios contables, criterios
de reconocimiento, criterios de valoración…) de la declaración conceptual de las bases a que
obedece nuestro modelo (cualquiera que sea la denominación utilizada para esta primera
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 424
parte declaratoria del PGC: marco conceptual u otra). Esto debe ser tenido en cuenta de
modo particular para la reforma de nuestro modelo contable actual, que debe mejorar y aña-
dir unos conceptos claros y con base económica de lo que son los distintos elementos de sus
CA, y en ello hay bastantes rasgos de las nociones que da el MC.IASB que podrían ser apro-
vechables a tal fin.
El documento se refiere únicamente a dos de los EF, balance y estado de resultados, descri-
biendo los rasgos definidores de los elementos respectivos de uno y otro: activos, pasivos y
patrimonio neto para el balance e ingresos y gastos para el estado de resultados.
Hay que dejar claro que, según la técnica elegida por el MC.IASB de articular este docu-
mento, las definiciones sobre los distintos elementos constitutivos de estos dos EF básicos
son por así decirlo de “laboratorio” o parecen tener un carácter más bien didáctico, en el sen-
tido de que se limitan a enumerar los rasgos o condiciones necesarias que han de darse en
un flujo de entrada o de salida contable para poder catalogarlo o poner la etiqueta que pro-
ceda de lo que es (activo, pasivo, patrimonio neto, ingresos o gastos), pero no establecen las
condiciones a cumplir para que tengan que ser reconocidos, es decir, para que puedan ser
presentados como tales en el balance o en el estado de resultados de la empresa correspon-
diente a un determinado momento, pues esto segundo dependerá de que los elementos “po-
tenciales” a poder figurar en alguno de esos estados cumpliesen las condiciones de reconoci-
miento establecidas en la siguiente sección del MC (párrafos 82 al 98) dedicada a señalar es-
tas condiciones indispensables de suficiencia. En palabras del MC, podrían existir partidas
contables que cabrían en las respectivas definiciones de los elementos de los EF y sin em-
bargo no poder figurar en ellos como lo que son, según su naturaleza con arreglo al MC, si no
cumpliesen en el momento de la presentación de los EF las condiciones suficientes de reco-
nocimiento requeridas para ello en el propio MC. Es más que discutible si este procedi-
miento, tan analítico en puro estilo académico, es el más adecuado para la formulación de las
bases conceptuales soporte de un modelo de regulación contable, que debe tener una orien-
tación eminentemente pragmática. Pensamos que resulta mucho más claro subsumir de una
manera sintética en un mismo apartado las condiciones necesarias y suficientes de los distin-
tos elementos que habrían de figurar como lo que son en los EF de un determinado ejercicio,
más que esta separación artificial o teórica, que lejos de simplificar el asunto contribuye a en-
redarlo innecesariamente. Eso es lo que recomendaríamos para nuestra reforma contable.
Empezando por el balance, el párrafo 49 es clave porque define escuetamente los conceptos
de activos, pasivos y patrimonio neto, como sus elementos constitutivos, cuyos rasgos señala-
dos definirán la frontera de entre lo que podría aparecer en un balance (por ser activos, pasi-
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 425
vos o patrimonio neto) y lo que tendría que aparecer en el estado de resultados (gastos o in-
gresos) o incluso, en su caso, meramente como notas de la memoria.
Es importante señalar la alusión a que, al evaluar los rasgos o condiciones establecidas en las
definiciones respectivas de los elementos constitutivos del balance (el MC identifica el ba-
lance como expresión de la situación financiera de la empresa) deberá atenderse a las condi-
ciones esenciales y a la realidad económica que subyace en dicha partida y no a su mera
forma o apariencia legal, volviendo a insistir en su apuesta por la prevalencia de lo primero
sobre lo segundo como derivación de la característica cualitativa de fiabilidad de la informa-
ción presentada. Declaración ésta evidentemente positiva como objetivo de la información,
pero que podría ser puesta en duda sobre su cumplimiento efectivo a la vista de determina-
das soluciones contables concretas contenidas en algunas de sus normas, donde más bien
parecería que se inclinan hacia lo contrario.
425 ❚ CAPÍTULO 15
En la noción de activos se aprecian estos rasgos o requisitos:
a) Deben ser un recurso (económico aunque no figure este término) controlado por la em-
presa, lo que viene a significar que cualquier bien o derecho en manos de ésta (“contro-
lado”), es decir, susceptible de ser utilizado por ella en su proceso de actividad empresa-
rial, aunque no se ostentase el derecho legal de propiedad sobre él, sino cualquier vía de
posesión legal que garantizase su control por aquélla, cumpliría esta primera condición.
b) Deben ser consecuencia o resultado de sucesos pasados (se sobreentiende en los que la
empresa hubiera estado implicada en la obtención externa o interna de tal recurso). Es la
concreción de la hipótesis fundamental de devengo, que deja fuera naturalmente del ba-
lance las futuras consecuencias de contratos incluso ya concertados, pero cuya materiali-
zación de sus prestaciones correspondientes deberá realizarse en el futuro.
c) Deben ser portadores, en términos de expectativa, de beneficios económicos futuros3
para la empresa. Ésta es la cuestión más problemática de la noción dada por el MC, por-
que podría llevar a una interpretación en la que podría defenderse como activos no sólo
aquellos recursos con beneficios económicos ciertos de cara al futuro, sino también cual-
quier beneficio económico de naturaleza incierta o contingente. El MC.IASB dará alguna
pista sobre su posición al respecto al formular las condiciones de reconocimiento de acti-
vos potenciales en el balance de un momento dado, al exigir que el beneficio económico
3 La expresión (probablemente por imprecisión de la traducción) no es muy afortunada, porque podrá haber un activo con tal
de que fuese capaz de proporcionar para la empresa un ingreso futuro esperado, aunque no deparase necesariamente ganan-
cia para ésta, sino incluso pérdida en relación con el importe invertido en su obtención.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 426
esperado sea probable (palabra ciertamente ambigua) y además que su coste o valor de-
bería ser cuantificado de modo fiable. Hay que reconocer que la cuestión no queda re-
suelta de modo incontrovertible ciertamente.
A pesar de ciertas dudas, ambigüedades, etcétera, que pudieran encontrarse en la definición de
activo dada por el MC.IASB, hay que reconocer que ésta nos aproxima a la visión económica o
moderna del balance, la cual trascendería la visión tradicional o jurídico-patrimonial. ¿Hasta
dónde llega el avance real en esa dirección? Eso es difícil de precisar, pues ello dependerá de
que las soluciones concretas que se encuentren en las distintas normas IASB estén efectiva-
mente en consonancia con tal declaración de principios, y en eso ya no puede estarse tan segu-
ros, pues podrían encontrarse contradicciones en casos con sustratos económicos comunes o
analógicos en los que unos son considerados activos y otros en cambio son considerados gastos.
4 Esta equivalencia al castellano como “pasivos” para las deudas o fondos ajenos (ciertos o estimados) con que cuenta y sobre
los que tiene que responder la propiedad jurídico-formal de la empresa no nos parece afortunada en términos del rigor teórico o
conceptual de la contabilidad financiera, pues si el término activos expresa los recursos económicos con que cuenta la empresa
(aplicación o empleos), su antónimo general serán sus pasivos como expresión del origen o procedencia de tales recursos eco-
nómicos, por la lógica y elemental dialéctica de la partida doble (no hay aplicación sin origen o viceversa). En otras palabras, la
identidad lógica es activos=pasivos. Otra cosa es que dentro de los pasivos se establezcan dos grandes bloques o rúbricas de
éstos, es decir los fondos ajenos y los fondos propios, o como quieran llamarse para expresar la procedencia y el efecto del régi-
men jurídico de aportación o condición de los diferentes recursos financieros con que cuenta la empresa como expresión de
sus activos, al igual que también convendrá mostrar subdivididos los activos por otros grandes bloques. En definitiva, cuando el
MC.IASB está utilizando impropiamente el término pasivos a secas, nosotros estamos invocando la expresión más precisa de
pasivos exigibles (como expresión amplia de lo que en nuestra regulación actual serían las deudas devengadas –fondos ajenos–
y ciertos compromisos contraídos por diferentes motivos, de naturaleza suficientemente probable y de cuantía estimada de
modo objetivable –provisiones para riesgos y gastos.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 427
La verdad es que esta sección daría para comentarios que rebasan los propósitos y posibili-
dades de este trabajo. En todo caso, pensamos que la distinción entre pasivos exigibles y pa-
trimonio neto (fondos ajenos y fondos propios en la terminología asentada del PGC) debería
basarse en la naturaleza jurídico-formal del instrumento financiero en la fecha en que se pre-
senta la información, con arreglo a derecho, lo cual no es óbice para que vía memoria se die-
sen las explicaciones aclaratorias de su destino futuro, en firme o previsible, pues no se
puede desnaturalizar este rasgo esencial de la imagen fiel superponiendo criterios fácticos
basados en si van a suponer o no salidas de activos para su cancelación, cuando ni el propio
MC es coherente en esta postura en todo su texto.
427 ❚ CAPÍTULO 15
En cuanto al patrimonio neto, hay que señalar que el MC lo considera una categoría o parte
meramente residual (diferencia entre activos y pasivos exigibles), es decir, no tendría entidad
conceptual propia en rigor con sus propios rasgos singulares de identificación como los tie-
nen expresamente enunciados los otros dos elementos. Ello trae como consecuencia el que
la magnitud relevante del patrimonio neto (fondos propios) quedase subordinada a la inter-
pretación que se hiciera en cada momento de lo que son pasivos exigibles de una empresa,
cuando lo cierto es que la categoría general de fondos propios debería tener también su no-
ción sustantiva propia o per se al representar las aportaciones de recursos financieros –direc-
tas o indirectas mediante retención de beneficios– hechas a una empresa bajo título de socio
o propietario, en alguna de sus distintas modalidades, todo ello con arreglo a lo que resulte de
la calificación otorgada por el ordenamiento jurídico a las diferentes clases de aportaciones.
En tal sentido, pensamos que contar con nociones sustantivas de fondos ajenos y fondos pro-
pios (pasivos exigibles y patrimonio neto para el MC), que además lo son ambas, añadiría un
referente de contrastación de doble sentido que ayudaría a dar una solución más automática
según la naturaleza de cada instrumento o partida financiera, atenuando posibles discreciona-
lidades interesadas en cuanto a la expresión de ambas categorías en el balance y, por ende, a
un mejor cerramiento del resultado contable que debería ser el del y para el capital-propiedad
de la entidad5.
5 Hemos fundamentado con mayor detalle esta posición: En el umbral de la reforma de la regulación contable española ante la
adaptación al modelo IASB. Algunas reflexiones desde una disidencia parcial pero sustancial con el Libro Blanco de la reforma.
Revista de Contabilidad y Tributación nº 236. Noviembre 2002. Páginas 180-185.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 428
Consideramos, por tanto, que nuestra reforma contable, cuando aborde la definición de los
elementos contables básicos de las CA –una parcela susceptible de mejora–, debería cubrir
todos ellos: activos, pasivos exigibles (incluidos fondos ajenos y provisiones para riesgos y
gastos) y desde luego también fondos propios, y no dejar reducidos estos últimos a la condi-
ción de simple parte residual, como hace el MC.
En cuanto a los resultados de la actividad6, empieza por dar las definiciones respectivas de
sus elementos constitutivos, ingresos y gastos, si bien luego en la explicación complementaria
de cada uno de ellos incorpora también los términos asociados a ellos de ganancias y pérdi-
das respectivamente.
Hay que empezar por decir que sorprende en la declaración del MC.IASB la ausencia de una
definición explícita, clara y de síntesis, de la noción que defiende este modelo de regulación
contable sobre algo tan esencial a precisar como es lo que entiende que debe ser el resultado
contable periódico de una empresa. Omisión sin duda importante porque estamos hablando
de la magnitud de mayor interés para los inversores financieros, con lo que el modelo de regu-
428 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
lación debería tener meticulosamente no sólo la noción sustentada del resultado contable pe-
riódico, sino también un conjunto de reglas auxiliares a modo de corolarios básicos derivados
coherentemente de la noción sustentada de dicha magnitud. Si en algo de lo contable hay que
disciplinar el comportamiento es en materia del cálculo del resultado, evitando en lo posible la
regulación con criterios expresos muy claros, la frecuente inclinación de muchos dirigentes
empresariales a forzar medidas contables de conveniencia para sus cifras de resultados.
Quizás por esta ausencia en el MC de una noción clara de lo que debería ser el resultado
contable y sus ingredientes o componentes es por lo que vemos, por ejemplo, en la NIC 1.
Presentación de los estados contables, cosas tan sorprendentes como la exclusión de ciertas
partidas o conceptos que, en buena lógica, deberían pasar –antes o después– por la cuenta o
estado de resultados, diciendo con toda naturalidad que podrían ir directamente al estado de
variación del patrimonio neto, por ejemplo, las diferencias surgidas por cambios en las prácti-
cas contables o por corrección de errores.
Se limita, pues, a una noción implícita e indirecta del resultado a través de las definiciones
(con mayor o menor fortuna) de sus elementos constitutivos (ingresos y gastos), así como
unas nociones bastante imprecisas de los dos subconceptos asociados a éstos, es decir, ga-
nancias y pérdidas respectivamente.
Para el MC, ingresos son incrementos producidos en los beneficios económicos, producidos
a lo largo del periodo, en forma de entradas o incrementos de valor de los activos, o bien
como decrementos de las obligaciones, que dan como resultado aumentos del patrimonio
neto, no estando relacionados con las aportaciones de los propietarios a este patrimonio.
Luego asocia y equipara a los ingresos el concepto de ganancias, sin una definición distintiva
de éstas, pues se limita a decir poco más o menos que “las ganancias suponen incrementos
en los beneficios económicos y, como tales, no son diferentes en su naturaleza de los ingre-
sos” (párrafo 75).
6En la versión traducida al castellano se utiliza con escasa fortuna el término “desempeño”, que se aparta de nuestro léxico
contable habitual. Aquí hemos preferido emplear la expresión más elocuente de “resultados de la actividad”.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 429
429 ❚ CAPÍTULO 15
por cierto ha coincidido después el Informe Aldama), y ésa sería nuestra recomendación
con vistas a nuestra reforma contable.
Los gastos, para el MC, son decrementos en los beneficios económicos, producidos a lo largo
del periodo en forma de salidas o disminuciones en el valor de los activos, o bien como surgi-
miento de obligaciones, que dan como resultado decrementos en el patrimonio neto, no es-
tando relacionados con las distribuciones o reintegros realizados a los propietarios de este pa-
trimonio. Al igual que hizo en el caso de los ingresos, asocia después a los gastos el concepto
(tampoco bien explicitado) de pérdidas, limitándose a decir lo mismo, sólo que en sentido
opuesto, de lo que hemos consignado antes, es decir, que no son diferentes por su natura-
leza a los gastos.
Hay, sin embargo, una importante cuestión que no parece claramente despejada en el MC, y
es si el destino de las ganancias potenciales detectadas al cierre (plusvalías de activos y mi-
nusvalías de pasivos exigibles) y el de las pérdidas potenciales (minusvalías de activos y plus-
valías de pasivos exigibles) debería tener un tratamiento simétrico o si, por el contrario, habría
7Armonización contable internacional y reforma de la contabilidad española. Ministerio de Economía. Madrid, 2001, páginas
71-78, y en el Umbral de la reforma de la regulación contable española… Op. cit. páginas 172-179.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 430
alguna asimetría derivada del signo de la prudencia que ha regido siempre en el modelo con-
vencional del resultado contable.
Pues bien, aunque según el texto del MC podría haber dudas de si se ampara o no una cierta
asimetría en cuanto a la incidencia de una cosa u otra, parece que el modelo IASB sí la esta-
blece, es decir, sigue en el esquema clásico de la prudencia respecto a la mencionada cuestión,
más allá de que pudieran encontrarse ciertas fisuras o sesgos sobre el particular en sus distintos
textos normativos. Puede verse, por ejemplo, la NIC 16 sobre Inmovilizado Material8, en donde
se observa esta asimetría al señalar que el incremento de valor en libros de estos activos por
una revalorización de éstos iría directamente a una cuenta de patrimonio neto y no al resultado
contable, mientras que si se tratase de una reducción de dicho valor se imputaría directamente
a resultados, salvo que fuese de una revalorización previa de dicho activo, como es natural.
Por último, quisiéramos señalar también que el texto del MC comenta en su párrafo 72 la pre-
sentación en estado de resultados y parece mostrarse favorable con “la práctica común de
distinguir o separar las partidas de ingresos y gastos que surgen de las actividades ordinarias
de las que no proceden de éstas”. En otras palabras, está apoyando la separación de los re-
430 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
sultados ordinarios y de los extraordinarios, sin entrar en detalles de lo que serían concreta-
mente partidas u operaciones de un bloque u otro. Pues bien, parece observarse un cambio
de postura –con lo que dice el MC– en la NIC 1, donde se dice textualmente que “una enti-
dad no deberá presentar ninguna partida de ingresos y gastos como partidas extraordinarias,
ni dentro del propio estado de resultados ni en las notas de la memoria” (párrafo 85). Decla-
ración un tanto sorprendente que entendemos no debería asumir nuestra reforma contable,
con independencia de la necesidad de tener que revisar el encaje actual que hace el PGC en
resultados extraordinarios de determinadas partidas.
Lo primero que hay que decir es que el MC, en verdad, ya se pronunció sobre el reconoci-
miento contable de los efectos de las transacciones y sucesos empresariales a través de su
hipótesis fundamental del devengo, por lo que ya se estarían reconociendo implícitamente los
elementos y su respectiva condición específica por la que habrían de figurar, en su caso, en
los EF, pues serían todos aquellos surgidos como consecuencia de las operaciones reconoci-
das en los registros contables. Ahora, señala las condiciones suficientes que han de reunir los
elementos registrados contablemente para poder figurar de una manera o de otra como ele-
mentos de los EF a presentar en un momento dado (por ejemplo, puede que un activo legí-
Pero, en verdad, se añade una condición más, si se quiere ver así, para el reconocimiento en
los EF, pues se dice que al evaluar tales condiciones se deben tener en cuenta las condicio-
nes de importancia relativa de que habló el MC en las características cualitativas.
431 ❚ CAPÍTULO 15
ral de reconocimiento a partir del devengo, es decir, se estaría dando entrada al reconoci-
miento de efectos o de elementos probables de transacciones también probables y no sólo de
las plenamente devengadas.
En verdad, esto ya se hace así en cualquier modelo contable, donde la información de los EF
es una yuxtaposición de los efectos de las transacciones devengadas más los de determinadas
latencias (diferencias valorativas al cierre de los activos y pasivos exigibles poseídos, más la in-
corporación de los previsibles efectos de ciertas incidencias potenciales de naturaleza aleato-
ria), con arreglo a unos criterios más estrictos o exigentes que los que, en principio, hemos di-
cho que fija el MC (probables y cuantificables de modo fiable), esto es, que estuviesen inicia-
dos en su gestación, que fuera altamente o suficientemente probable su ocurrencia definitiva y
que su cuantificación fuera objetivable y por tanto fiable y naturalmente bajo el principio asi-
métrico de prudencia (reconocimiento de los portadores de pérdidas potenciales en el balance
y estado de resultados y los de ganancias como descripción, en su caso, en la memoria).
Pues bien, las condiciones de reconocimiento que exige el MC, en una interpretación estricta
de sus términos, podrían ir mucho más allá que lo que marca el contorno clásico de la pru-
dencia, pudiendo dar lugar al reconocimiento de beneficios probables, con una cuantifica-
ción suficientemente fiable, como activos y contrapartida en el estado de resultados, aunque
su grado de probabilidad fuese escaso.
o partida del balance y del estado de resultados de un momento determinado, lo que explica
por tanto la línea errática que puede apreciarse dentro de las distintas normas contables de
este modelo cuyo beneficio económico esperado de entrada o de salida para la empresa
fuese probable y cuantificable de modo fiable, pues esto deja numerosos flecos sujetos a in-
terpretación.
El ejemplo que pone el párrafo 86 del MC de las indemnizaciones esperadas a favor de la em-
presa ante un litigio en los tribunales, pero rechazado su reconocimiento como activo y como
ingreso en el balance y en resultados por falta de fiabilidad en la cuantificación de su importe
esperado, abre la puerta para pensar que sí podrían ser reconocidas aquellas que fuesen me-
ramente probables o no consumadas aún (al no haberse producido todavía el fallo judicial fa-
vorable para la empresa) siempre que se conociera con fiabilidad su importe. De ser así la in-
terpretación que parecería desprenderse del texto del MC, ello rebasaría o iría más allá de la
posición conservadora o de prudencia que suscribe nuestro PGC. Nosotros pensamos que
cualquier hecho aleatorio o no definitivamente consumado, portador de ganancias probables,
incluso con probabilidad razonablemente alta de que pudieran consumarse en el futuro e in-
cluso también con una estimación de cierta fiabilidad, sería mejor relegarlo a la correspon-
432 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
No hay en el MC un posicionamiento rígido con respecto a cómo habrían de ser valorados los
distintos elementos de los EF (por ejemplo, cómo habrían de valorarse en general todos los
activos o pasivos exigibles con las soluciones de excepción para determinados activos o pasi-
vos exigibles particulares), sino que prevalece en el texto la idea de flexibilidad, o sea, que la
aplicación plural de varias de las bases o métodos de valoración que enuncia y en distintos
grados de combinación entre ellos dan como resultado los EF propugnados.
9La versión a nuestra lengua del texto utiliza el término “medición” en vez de valoración. Asimismo utiliza los términos “bases o
métodos de valoración” en vez de criterios de valoración. Evidentemente, éste es un asunto menor.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 433
Sin embargo, la cuestión más destacable de esta sección del MC es que dentro de los cuatros
grandes criterios generales enunciados no se encuentra, para gran sorpresa, el criterio del
fair value (traducido a nuestra lengua como valor razonable), cuando sabemos que este crite-
rio ha adquirido, por así decirlo, la categoría de “buque insignia” del modelo IASB, o sea,
punto de distinción principal en esta materia clave para la información financiera con res-
pecto a los llamados modelos tradicionales basados sustancialmente en los costes históricos,
como podría ser el nuestro, entre otros muchos más. La razón seguramente está en que en
1989, cuando se aprobó el MC, no existía esa sensibilidad informativa hacia el fair value que
fue surgiendo después en distintas normas IASB, sin que se haya corregido el texto original
del MC, con lo cual choca sobremanera que no se haya rectificado esta importante anomalía.
También hay que señalar que cuando se describe sucintamente el criterio del coste histórico,
sólo se habla de precio de adquisición de los activos y no existe ninguna referencia al coste
histórico de producción para los activos producidos internamente.
433 ❚ CAPÍTULO 15
vos en el momento presente.
c) Valor realizable o de liquidación: los activos se llevarán por el equivalente en dinero que
podría obtenerse en el momento presente por su venta natural o no forzada, y los pasivos
exigibles, por su valor de liquidación o importe sin descontar de dinero u otros equivalen-
tes a éste que se espera puedan cancelar aquéllos por su vencimiento normal.
d) Valor presente: los activos se llevarán por el valor actual de sus flujos de caja esperados
para ellos a través de su utilización en el curso normal del negocio, y los pasivos exigibles,
según su valor actual descontado de los flujos de caja a pagar por ellos en su curso normal.
Naturalmente que habría numerosos aspectos concretos que analizar sobre esta área crucial
del modelo informativo, imposible de hacer en una descripción meramente epidérmica de los
contenidos básicos del MC.IASB.
Simplemente significar que el aspecto más importante que no parece del todo despejado en
el texto del MC es cómo aplicar o combinar todos esos métodos o bases admitidas a las dis-
tintas piezas del modelo de los EF suscrito por IASB.
Hay una clave parcial de este asunto en el párrafo 101: el coste histórico es la base más co-
múnmente utilizada por las empresas para preparar sus EF, aunque éste suele combinarse
con otras de las bases de valoración mencionadas, añadiéndose que el coste corriente ade-
más es utilizado por ciertas empresas como solución frente a la incapacidad del coste histó-
rico para incorporar las variaciones de precios experimentadas por sus activos no monetarios.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 434
Pero, en realidad, no hay una prescripción concreta de valoración, sino que se dice que la
habitualmente practicada es un modelo mixto o combinación no precisada de todos esos cri-
terios valorativos, limitándose a apuntar por encima algunos ejemplos para ayudar a situar las
cuestiones concretas.
Frente a la indeterminación o ambigüedad que resulta del texto MC sobre la fórmula de gene-
ral aplicación para la valoración de los activos y pasivos exigibles en los EF, junto con una
identificación clara de aquellas otras especies sometidas a algún criterio distinto del general,
entendemos que ésta es una asignatura a superar por parte de nuestra reforma contable
desde los planteamientos aproximados que hoy encontramos en el texto actual.
de mantenimiento de la cifra de capital asumida por el modelo, por ser la cifra a conservar o ci-
fra umbral a partir de la cual debe calcularse el resultado periódico que debe defenderse en co-
herencia, es decir, el resultado como variación de la cifra de capital-propiedad experimentada
en el periodo transcurrido, procedente de las operaciones del negocio y que no supongan ni
nuevas aportaciones ni reintegros de capital entre la empresa y sus socios o propietarios.
De igual forma habla de dos conceptos correlativos de mantenimiento del capital empresarial
(financiero o físico) para definir el resultado contable periódico como variación de la cifra de
dicho capital por las operaciones del negocio, con lo que según el MC podrían existir dos ver-
siones o cálculos distintos del resultado, lo que excediera o minorase el capital financiero pre-
existente o lo que variase en más o en menos la capacidad productiva o física de las inversio-
nes en que se encontraba materializado el capital de la empresa.
Esta alternativa en la elección entre un concepto u otro de capital y del resultado contable por
parte de la empresa para sus EF es puro idealismo –el MC incluso llega a decir, de una ma-
nera más teórica que real o posible, que la empresa debe optar por una visión u otra basada
en las necesidades de los usuarios de sus EF.
pital–propiedad debido a las operaciones del negocio en el ejercicio transcurrido que no co-
rrespondiesen a nuevas aportaciones o reintegros de capital con relación a la propiedad. So-
braría, por tanto, a nuestro juicio, la invocación al capital físico y al concepto de resultado ba-
sado en la variación de la capacidad productiva de éste. Esto tiene sentido probablemente
para una discusión académica, pero no para un documento de regulación contable positiva.
En rigor teórico, es claro que el capital financiero a preservar tendría que ser en su capacidad
adquisitiva constante, y, por lo tanto, el cálculo del resultado contable periódico tendría que
ser consecuente con esta lógica de la incorporación de los efectos inflacionistas10. Sin em-
bargo, sabemos que en la práctica real suele utilizarse un cálculo meramente nominalista del
capital financiero y del resultado contable, situación que es difícil que pueda cambiar, ante el
enorme arraigo de esta versión en los principales países. Nuestra regulación contable se basa
en la expresión nominalista del capital financiero para calcular el resultado contable como va-
riación de éste en las condiciones apuntadas, aunque, como sabemos, en España se ha ve-
nido practicando un ajuste indirecto con carácter esporádico a través de la fórmula legal al
uso de las actualizaciones de valor de los inmovilizados.
El MC, probablemente por su proyección internacional también hacia países que han utili-
435 ❚ CAPÍTULO 15
zado como un hecho regular el ajuste inflacionista de las cifras contables (por su elevada tasa
de inflación), explica no sólo la versión nominalista o más extendida en las prácticas de regu-
lación contable internacional, sino que también apunta grosso modo el mecanismo de cál-
culo a introducir como ajuste por mantenimiento del capital-propiedad, pormenores éstos
que evidentemente no vienen al caso en cuanto al objetivo de este trabajo y asimismo porque
nuestro modelo de regulación contable, como la mayoría de los países similares, seguirá
adoptando con toda seguridad la versión nominalista del mantenimiento del capital-propie-
dad y del cálculo del resultado contable periódico.
10 Existen distintas propuestas sobre el ajuste inflacionista de las cifras contables. Puede verse J. L. Cea. Revisión crítica de las
principales propuestas de ajuste de cifras contables nominales en ambiente inflacionista. Ponencias y Comunicaciones II Con-
greso AECA. Ministerio de Economía y Hacienda. Madrid, 1986, páginas 103-174.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 436
bles, como gran nervio central de las bases conceptuales de nuestra regulación, frente a la
dispersión y menor claridad que representan las dos hipótesis fundamentales por un lado
(devengo y empresa en funcionamiento), más otras cosas como la prudencia, la correla-
ción de ingresos y gastos, la importancia relativa, etcétera, desperdigadas en otras partes
del MC.IASB, aunque aquí no se llamen principios contables, pero con un significado prác-
tico muy similar. Ahora bien, esto no es óbice para que consideremos que deba admitirse
en el cuadro de principios contables de nuestro PGC el de prioridad del fondo económico
sobre la forma, o para que haya que modificar parcialmente alguno de ellos como rebajar la
prevalencia excesiva de la prudencia sobre los demás, pero en modo alguno para tener que
mandar a la almoneda el apartado de principios contables dispersándolos y enmascarán-
dolos de otra cosa, como hace el MC.IASB.
• Existen definiciones parcas, excesivamente insuficientes en este caso, de los diferentes ele-
mentos de las CA o EF (lo que son activos, fondos ajenos, fondos propios, ingresos-ganan-
cias, gastos-pérdidas), por lo que habrá que desarrollar convenientemente estos conceptos
con aproximación hacia los rasgos para ellos en el MC.IASB, pero con las consiguientes
matizaciones de contenido y terminológicas (sobre todo en materia de definición sustantiva
de lo que son fondos propios y su diferenciación con los fondos ajenos, que debería ba-
sarse en lo que fueran en cada momento los respectivos instrumentos financieros con arre-
glo a legislación mercantil española).
Además, entendemos que deberían aparecer subsumidas en un mismo espacio de esta
parte de bases conceptuales de nuestro PGC, tanto las condiciones necesarias (lo que son
los elementos de las CA) como las condiciones suficientes para su reconocimiento como ta-
les en el balance o en el estado de resultados, frente a la separación artificiosa e innecesa-
ria de ambas cuestiones que hace el MC.IASB, debiendo enunciarse lisa y llanamente los
términos estrictos de las condiciones a cumplir.
• Existe enunciación de los criterios generales de valoración aplicables a los diferentes ele-
mentos de las CA, si bien éstos aparecen desparramados entre las reglas de valoración de
los distintos elementos en la quinta parte del PGC 1990, con semejanzas en buena parte
cercanas a lo que sobre el particular contiene el MC.IASB. Hay aquí un asunto crucial
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 437
3. 8.
como es el criterio del valor razonable que, aun no estando reconocido expresamente den-
tro del MC.IASB, tiene un protagonismo importante en bastantes de las normas IASB y que
incluso ya ha sido parcialmente incorporado en nuestra regulación legal11, sobre el cual ha-
brá de sopesarse meticulosamente su incidencia dentro de nuestra regulación contable
que, en principio, no tiene por qué ser asumiendo exactamente lo que establece al res-
pecto el modelo IASB. La explicitación de los criterios generales de valoración a que ha de
obedecer nuestra regulación contable es una importante parcela a precisar e incorporar a
la parte declarativa de las bases conceptuales a que obedece nuestro modelo de regulación
contable reformado.
No existe, por el contrario, en nuestro PGC 1990 una enunciación expresa del concepto de
resultado contable periódico y de su idea asociada de mantenimiento del capital-propiedad
como umbral de cálculo de dicha magnitud que asume nuestro modelo, lo cual debería ser
desarrollado e incorporado de una forma clara y con un conjunto de reglas auxiliares que
eviten en lo posible un cálculo sesgado e interesado de dicha magnitud12. La idea de man-
tenimiento del capital en términos nominales seguramente es la solución viable que habrá
que declarar dentro de las bases conceptuales del PGC reformado.
2. Es conveniente reforzar o extender las bases conceptuales de nuestra regulación contable
actual a semejanza (en lo que resulte oportuno) de los contenidos declarativos que figuran
en el MC. IASB. Con carácter general, este refuerzo o extensión en materia de marco con-
ceptual debe plasmarse de manera escueta y concisa (ni mucho menos con el nivel de
detalle explicativo que encontramos en el MC.IASB) bajo los rasgos que parezcan apropia-
dos para nuestro modelo, coincidan o no siempre con los que señala el referido docu-
mento IASB y desde luego preservando buena parte de la nomenclatura contable normali-
zada de nuestra regulación, fuertemente arraigada y congruente con nuestro ordena-
437 ❚ CAPÍTULO 15
miento mercantil (por ejemplo, fondos ajenos, fondos propios, etcétera). La clave estaría,
pues, en decidir lo que hay que reformar o incorporar al armazón conceptual incompleto
que hoy encontramos en el PGC 1990. En todo caso, se debe conservar el apartado y de-
nominación enormemente elocuente de Principios Contables, modificado en lo que co-
rresponda (por ejemplo, incorporar el principio de prioridad del fondo económico sobre la
forma jurídica, rebajar la prevalencia del principio de prudencia, etcétera).
3. La reforma a introducir en materia de armazón o marco conceptual de nuestro modelo de
regulación contable, al ser un asunto eminentemente técnico, debería figurar dentro del
PGC en una primera parte declarativa de las grandes bases conceptuales a que obedece
nuestro modelo de regulación contable (si se considera más adecuado bajo la denomina-
ción genérica de marco conceptual) con los siguientes apartados temáticos:
• Usuarios de las CA o EF.
• Características cualitativas de la información de los EF.
• Principios contables básicos.
• Definiciones sintéticas de los distintos EF de presentación obligatoria, con especial des-
11 En la Ley 62/2003 de 30 de diciembre de medidas fiscales, administrativas y de orden social, artículos 106 y 107, modifi-
cando contenidos contables del C. de C. o del TRLSA, o en la Ley 44/2002 de 22 de noviembre de Medidas de Reforma del Sis-
tema Financiero (disposición adicional novena), donde se introduce el criterio de valor razonable para ciertas incidencias socie-
tarias de valoración.
12 Lo que se ha dado en llamar prácticas de contabilidad creativa o de manipulación o gestión de los resultados.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 438
arrollo y concisión del concepto, componentes y reglas operativas básicas del cálculo
del resultado contable periódico.
• Definiciones de los distintos elementos de las CA o EF: activos, pasivos exigibles (fondos aje-
nos y provisiones para riesgos y gastos) y fondos propios; ingresos-ganancias y gastos-pér-
didas, enumerando de modo conjunto tanto los rasgos distintos de cada uno de ellos o con-
diciones necesarias de su naturaleza respectiva como las condiciones suficientes para poder
ser reconocidos en los EF del SCP correspondientes a un momento dado.
• Declaración de los criterios generales de valoración que habrían de regir para el modelo de
CA regulado por el PGC, es decir, regla general de valoración de los activos, de las deudas
y de las provisiones por riesgos y gastos en el balance, más las excepciones más significati-
vas de aplicación de otras reglas alternativas (por ejemplo, valor de mercado continuo o va-
lor razonable) y su consecuencia respectiva a efectos del cálculo de la magnitud del resul-
tado contable.
Reiteramos que todos estos aspectos configuradores del armazón conceptual básico de
nuestra regulación contable deberían ser expuestos de la manera más sintética posible y,
438 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
por tanto, ni mucho menos al modo de desarrollo excesivamente pormenorizado que en-
contramos en el MC.IASB. Entendemos que todo esto debe tener cabida en la primera
parte del PGC, formando un bloque integral, bajo una denominación apropiada, aunque no
habría inconveniente en que pudiera utilizarse la denominación de marco conceptual, con-
teniendo los apartados señalados.
4. No es conveniente incorporar explícitamente las alusiones de armazón conceptual del mo-
delo de las CA dentro del Título III Sección 2ª. De las Cuentas Anuales del C. de C. (actua-
les artículos 34 al 42), por tratarse de un aspecto eminentemente técnico contable cuyo
desarrollo ha de corresponder al PGC, por lo que podría valer buena parte de lo que ahora
existe, salvo las rectificaciones escuetas que procedan en cuanto a principios contables,
quizá algo sobre las CA a presentar y poco más. Es posible que incluso conviniese aligerar
o eliminar parte de lo que ahora se dice, sobre todo, en cuestiones de detalle sobre valora-
ción de ciertos elementos (artículo 39). En definitiva, en el C. de C. debería decirse lo
esencial, o sea, muy poco detalle de las cuestiones de técnica contable, remitiendo a las
bases conceptuales desarrolladas reglamentariamente en la primera parte del PGC. No
participamos, por tanto, del excesivo deseo mostrado en el Libro Blanco de la reforma de
la contabilidad española13 de explicitar en el C. de C. aspectos de marco conceptual como
objetivos de las CA, características cualitativas, definiciones de elementos básicos de las
CA, referencias concretas a criterios de valoración, etcétera, sino que debe remitirse a lo
que se diga al respecto por vía reglamentaria. Sin embargo, nos consta que el grupo de
expertos formado dentro del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) para
proponer la reforma de la parte contable del C. de C. en su borrador se mostraba partida-
rio de incorporar partes técnicas del marco conceptual ya en el C. de C., aunque todavía
no se ha producido formalmente este hecho en la reforma parcial de aspectos relativos a
CAC, introducida a través de la Ley 62/2003, de 30 de diciembre, de medidas fiscales, ad-
ministrativas y de orden fiscal, pero que todo estaba preparado para que así fuera lo de-
nota la pifia legal incurrida por la susodicha Ley en su artículo 104, por el que se reestruc-
tura la organización funcional del ICAC, donde llega a decirse en cuanto a competencias
del Consejo de Contabilidad: “Valorar la idoneidad y adecuación de cualquier propuesta
13 Capítulos 5 y 10.
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 439
439 ❚ CAPÍTULO 15
FASCiCULO 15 4/10/04 13:32 Página 440
C A P Í T
11
U L O
Glosario de
Términos
Activo es un recurso controlado por la empresa como re- Activo por impuesto diferido son importes de impues-
440 ❚ Normas Internacionales de Contabilidad
sultado de sucesos pasados, del que se esperan recibir tos sobre beneficios recuperables en periodos futuros
beneficios económicos en el futuro. en relación con diferencias temporarias deducibles, la
compensación de pérdidas fiscales no utilizadas, o la
Activo corriente es un activo que cumple alguno de los compensación de créditos fiscales no utilizados.
criterios siguientes:
Arrendamiento es un contrato en cuya virtud el arrenda-
a) Se espera que sea realizado o se pretende su venta
dor concede al arrendatario el derecho a usar un activo
o consumo dentro del ciclo normal de operaciones
durante un plazo pactado, a cambio de uno o más pagos.
de la entidad.
b) Se posee para ser vendido, principalmente. Arrendamiento financiero es un arrendamiento que
c) Se espera sea realizado dentro de los doce meses transfiere sustancialmente todos los riesgos y beneficios
siguientes a la fecha del balance. relacionados con la propiedad del activo. La titularidad
puede o no ser eventualmente transferida.
d) Se trata de efectivo o equivalentes (como se define
en IAS 7 “Estados de flujo de efectivo”) salvo que
existan restricciones a su intercambio o uso en la Arrendamiento operativo es un arrendamiento que no
cancelación de una deuda. se considera arrendamiento financiero.
Activo financiero es un activo que consiste en: Cartera a vencimiento son activos financieros no deri-
vados con pagos fijos o determinables y vencimiento fijo
a) Efectivo. respecto a los cuales la entidad tiene la intención con-
b) En un instrumento de capital de otra entidad. cluyente, y la capacidad, de mantenerlos hasta el ven-
cimiento. (con algunas excepciones).
c) En un derecho contractual a recibir efectivo u otro
activo financiero de otra entidad o a intercambiar
Cartera de negociación son activos financieros no deri-
activos financieros con otra entidad en condiciones
vados que han sido designados como disponibles para
potencialmente favorables.
venta o no han sido clasificados como a) préstamos o
d) En un contrato que podrá ser cancelado con instru- cuentas a cobrar, b) inversiones a vencimiento, o c) ac-
mentos de capital de la propia entidad con ciertas tivos financieros a valor razonable a través de pérdidas
condiciones. y ganancias.
Control es el poder de dirigir las políticas operativas y Deterioro de valor es el importe en el que el valor en li-
de financiación de una entidad, en orden a obtener bros de un activo excede de su valor recuperable.
beneficios de sus actividades.
Diferencia temporaria es la que se da entre el valor en
Control conjunto es el control compartido sobre una libros de un activo o pasivo en el balance y su base fis-
entidad económica pactado en un contrato, y existe cal. Pueden ser imponibles o deducibles.
sólo cuando las decisiones estratégicas y operativas re-
lacionadas con la actividad requieren el consenti- Dilución es una reducción de las ganancias por ac-
miento unánime de las partes que comparten el con- ción, o un incremento de las pérdidas por acción que
trol (los partícipes). resulta de suponer la conversión de los instrumentos
convertibles, el ejercicio de las opciones o warrants, o
Coste es el importe de efectivo o equivalentes paga- la emisión de las acciones ordinarias en el momento
dos, o el valor razonable de cualquier otra contrapres- en que se cumplen las condiciones especificadas.
tación entregada para adquirir un activo en el mo-
mento de su adquisición o construcción, o, cuando Dominante es una entidad con una o más dependientes.
sea aplicable, el importe atribuido a tal activo en el mo-
mento de su reconocimiento inicial, conforme a los re-
Elemento cobertor es un derivado designado o (exclu-
querimientos específicos de otro IFRS (por ejemplo, el
sivamente para cobertura del riesgo de cambio) un ac-
IFRS 2 Share-based Payment).
tivo financiero no derivado designado o un pasivo fi-
nanciero no derivado cuyo valor razonable o flujos de
Coste amortizado de un activo financiero o de un pa- efectivo se espera compensen los cambios en el valor
sivo financiero es el importe por el que el activo o el razonable o flujos de efectivo de una partida desig-
pasivo financiero se valora en el momento del recono- nada como cubierta.
cimiento inicial, menos los reembolsos de principal,
más o menos la amortización acumulada (determinada
Elemento cubierto es un activo, pasivo, compromiso
mediante el uso de la tasa de interés efectiva) de cual-
en firme, una transacción altamente probable o la in-
quier diferencia entre el importe inicial y el importe a
versión neta en una operación en el extranjero que a)
vencimiento, y menos las reducciones (registradas di-
441 ❚ GLOSARIO
expone a la entidad al riesgo de cambios en valor razo-
rectamente o a través de una cuenta compensadora)
nable o flujos de efectivo futuros y b) se designa como
por deterioro o incobrabilidad.
cubierto.
Instrumento financiero es un contrato que da lugar a Pasivo por impuesto diferido son cantidades de im-
un activo financiero para una entidad, y a un pasivo fi- puestos sobre beneficios a pagar en periodos futuros,
nanciero o un instrumento de capital para otra. como consecuencia de diferencias temporarias impo-
nibles.
Instrumento de capital es un contrato que pone de re-
lieve un interés en los activos de una entidad, una vez SIC: Interpretaciones de las Normas emitidas por el
deducidos todos sus pasivos. IFRIC.