El cumpleaos de la Infanta de Oscar Wilde nos traslada a la corte de Espaa, en la poca del esplendor de los Austrias, cuando el oro

de Amrica cargaba los barcos. La joven Infanta cumple doce aos, tiene un corazn que est lleno de egosmo y es tan duro y fro como el rubio metal. Los enanos tienen que entretenerla, y uno de ellos mostrar una trgica grandeza que no tiene la hija del ms poderoso soberano. Se trata de un enano jorobado, que se encuentra en el bosque con los cortesanos del rey de Espaa. El padre del jorobado lo vende al palacio para la diversin de la hija del rey, la Infanta, que cumple doce aos. Su cumpleaos es el nico momento en que se le permite mezclarse con otros nios, y ella disfruta mucho de los nmeros preparados para celebrarlo, sobre todo el nmero del Enano. Baila, como lo haca en el bosque, completamente inconsciente de que su audiencia se re de l. Ella insiste en que haga su nmero una segunda vez para ella despus de cenar. Adems, por imitar lo que las grandes damas de la Corte hacan con los artistas, le arroja al Enano una rosa blanca. l la guarda consigo creyendo errneamente que es una prueba de que la Infanta lo ama. Entonces se nos relata de una forma potica y conmovedora cmo l imagina que ser su vida con ella. Trata de encontrarla, pasando por un jardn donde las flores, el reloj de sol, y el pescado se burlan de l, pero los pjaros y los lagartos no. Encuentra su camino dentro del palacio, y busca a travs de las salas con la esperanza de encontrar la Infanta, pero las encuentra a todas vacas. Finalmente, se topa con un monstruo grotesco que imita todos sus movimientos en una de las habitaciones; pronto descubre que es un espejo que le devuelve su propio reflejo. l nunca se haba visto en un espejo, y al verse tan horrible se da cuenta de que la Infanta no lo ama, sino que slo se estaba riendo de burla. Cae al suelo, pataleando y gritando. La Infanta y otros nios llegan casualmente, e imaginando que es un acto ms, se ren y aplauden mientras que la agitacin del Enano se hace ms y ms dbil hasta que se detiene por completo. Cuando la Infanta le exige ms entretenimiento, un sirviente trata de despertarlo, slo para descubrir que est muerto, con el corazn roto. Cuando le dice esto a la Infanta, ella se va del recinto dando una orden que es la ltima lnea de la historia: "De aqu en adelante, que los que vengan a jugar conmigo no tengan corazn".