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LA EXPERIENCIA ESCOLAR COTIDIANA.

Apuntes del texto:


ROCKWELL, Elsie (1995) “De Huellas, bardas y veredas:
una historia cotidiana en la escuela” en La escuela como
portadora de sentidos y orientadora de prácticas y
acciones. En Antología “Un acercamiento al análisis de
la práctica educativa” (2009).

Comienzo con la idea satírica sobre el uso del tiempo en las escuelas. De 200 días
hábiles se reduce considerablemente a menos de 150 días por una serie de
actividades encimadas a las ya programadas: encuentros deportivos, influenza,
cursos de formación o talleres no previstos, juntas sindicales, juntas ordinarias
de preparación festiva, cívica o cultural, campañas ordenadas desde la SEP, IMSS,
otros, etc., etc.
Es tal el trabajo escolar, que lo más acertado es caminar entre el programa y el
aula escolar de forma individual, desarticulada y sin coherencia entre los
subniveles que subyacen en el nivel primario. Aunque existe cierta complementación
entre el 1º y 2º; entre 3º y 4º; y entre el 5º y 6º. No ha bastado.
La enseñanza merece una atención desde un posicionamiento de grupo o trabajo de
equipo de la planta docente y directivos en cada una de escuela primaria.
(Programa de Gestión escolar; 2004).
Por ello considero importante esta lectura pues busca sensibilizar la búsqueda
significativa del quehacer cotidiano: transmisión de contenidos, actividades de
enseñanza y las relaciones sociales de la propia escuela. De hecho el texto nos
lleva a mirar aspectos del proceso escolar interno:
El currículum. Norma la vida académica con carácter oficial, sin embargo solo es
un nivel normativo que se puede adecuar, pues no es inmutable. Tiene la cualidad
de ser flexible y re-interpretada. Y es quizás lo peligroso de dicha orientación,
pues si recordamos a Heller (1985) sobre sus apuntes de imitación o analogías se
estaría en una conducta de ultrageneralización.
“… una acción correspondiente a los intereses de una clase o de una capa se puede
elevar hasta el plano de la práctica, pero en este caso rebasará la cotidianidad
se convierte entonces en ideología, la cual se independiza relativamente de la
práctica cotidiana”.
Una de las características de la escuela es que las normas educativas oficiales se
incorporan a la escuela de manera explícita pero esta es reinterpretada por un
orden institucional existente, esto es imponer la tradición pedagógica de la
propia escuela pues su dinámica parte de su realidad cotidiana y es en esta
practica donde el contexto informativo impulsa maestros y alumnos para favorecer
conocimientos, valores y actitudes. La mejor tarea es buscar la correspondencia
del docente y su perfil; generalmente la practica de un docente se contradice
entre lo que aprendieron en la escuela normal y la realidad del centro de trabajo,
así como esta situación, estaríamos hablando de dos currículum: el currículum
explicito y el currículum oculto.

Este tema es motivo de estudio pues observar lo que sucede en las escuelas es
entender sus interacciones a veces incoherentes entre lo oficial y la dinámica de
la escuela. Son situaciones no previstas pero que exigen decisiones inmediatas por
ello es importante hacer análisis de la experiencia escolar, a partir de estancias
o jornadas de observación y practicas para los maestros en formación así como
indagación para maestros titulares de aula.

Estas situaciones vividas en la escuela son complejas porque el currículum


explicito esta basado para una enseñanza desde la perspectiva teórica sin embargo
la realidad de la escuela viene a entregar otros resultados reales, porque es la
dinámica de la escuela la que ejerce presión o habitualidad para los aprendizajes
en otras palabras hay una gran distancia entre la transmisión y la apropiación. De
ahí que no se pueden obtener conclusiones sobre que tipos de sujetos egresan de la
escuela sin embargo dichos resultados se miran en función del tiempo de estancia
en la escuela que a la vez proporciona experiencia formativa para el niño en edad
escolar.

Cabe señalar que el texto habla de experiencias formativas en la escuela pero a la


vez señala que esta situación coarta otras experiencias por ejemplo los contextos
de trabajo, los contextos de desplazamiento sin embargo la experiencia escolar es
selectiva y significativa.

Existe una critica a la escuela mexicana, al señalársele que solo tiende a


reproducir contenidos ordenadas por la burguesía histórica por ejemplo la negación
de su propia historicidad y la división del trabajo manual y el trabajo
intelectual; dicen los que saben que este tipo de proceso escolar es una visión de
los intereses de la clase dominante.

Las escuelas viven sus propias tradiciones, se supeditan a sus ordenamientos


institucionales, además coexisten entre federales, estatales, particulares,
bidocentes unitarias, rurales, urbanas, nocturnas pero cada una con su
normatividad propia. Al tratar de entender algunas dimensiones de la cotidianidad
de las escuelas en México encontramos una diversidad e historicidad:

Dimensiones de la experiencia escolar. Tiene que ver con la organización de la


escuela, sus acciones, sus situaciones u objetos de experiencia que para su
estudio hace falta analizarlo en dimensiones delimitadas por ejemplo la dimensión
de la estructura de la experiencia escolar incide en el uso del tiempo, el
espacio, las reglas, la agrupación de sujetos, estrategias de participación,
formas de comunicación todas ellas hacen una red de relaciones y costumbres del
centro escolar.

Otra dimensión es la selectividad y la agrupación escolar. Si viene cierto que


existe un sistema escolar bajo un reglamento, este organiza escuelas completas,
incompletas, matutinas, vespertinas, y otras categorías de escuelas pero todas con
el objetivo de hacer que los educandos aprueben el nivel educativo u la deserción.
Otra situación que se vive en la escuela son los paramentaros de clasificación que
tiene que ver con el color de la piel principalmente situación que se internaliza
en el educando y repercutiendo en su auto estima.

En algunas aulas la discriminación social “implícita” la enseñanza es desigual


pero a funcionado no así en otras escuelas del mundo quizás es la actitud
igualatoria o compensatoria que manifiestan los maestros para atender a los
alumnos mas necesitados. La tercera dimensión tiene que ver con los tiempos
escolares. El uso del tiempo en la escuela incide en una práctica disciplinaria
respecto a enseñar puntualidad de forma radical y para toda la vida.

Otra dimensión son las formas de participación que se dan a partir de


interacciones generalmente asimétricas pues el docente inicia su sesión, dirige,
controla, comenta, sede la palabra, exige y aprueba y el alumno solo obedece y el
maestro transmite. La propuesta es atención individual, trabajar en equipo pero
siempre cuidando favorecer la equidad de genero. La siguiente dimensión tiene que
ver con el efecto extraescolar de la escolarización. Tiene que ver con la
influencia del contexto social respecto de la cotidianidad (Heller, 1985) que
tiene que ver con la influencia de la familia, la comunidad respecto a hábitos de
salud, de alimentación, de vestido. Procesos que interactúan con las actividades
formales del aula. Otro espacio es la definición escolar del trabajo docente.
Generalmente el docente se apropia de tradiciones pedagógicas que imperan el en
centro de trabajo donde realiza sus actividades pedagógicas pues es mas fácil
integrarse a la conformación institucional aceptando sugerencias, presiones,
consejos de sus colegas como parte de la cotidianidad.
La delimitación del trabajo del maestro es una dimensión que abarca el trabajo en
el aula y la organización de la escuela. Generalmente se impone el trabajo de tipo
administrativo, el trabajo de actividades socioculturales, relegando las
actividades pedagógicas. Rockwell, también habla de las concepciones sobre el
trabajo docente señalando que la comunicación es un punto para reflexionar sobre
las condiciones de trabajo en el aula, la comunicación con los padres de familia y
los propios colegas. Pero evitan hablar de problemas propios del trabajo,
generalmente atribuyen el fracaso escolar a factores externos sin considerar la
evaluación de sus competencias.

La dimensión sobre las formas de enseñanza muchas veces tiene que ver con lo que
explica Heller, (1985) al señalar que la imitación es una practica común de los
docentes para la realización de su trabajo pues parten de lo observado en sus
mentores. Pues es muy común que la influencia de sus maestros sea un determinante
para enseñar contenidos. La presentación del conocimiento escolar es una dimensión
que se mide generalmente por la posesión y atributo individual de docentes y
alumnos como una capacidad personal, no se cuestiona si el proceso de enseñanza
aprendizaje pudiera tener alternativas de estrategias significativas; además la
dimensión de organización temática lleva a una didáctica de transmisión de
conocimientos. Teniendo como recurso, muchas veces único, el libro de texto. Este
a la vez sirve de referencia para el trabajo del docente y para tener una
valoración de avances respecto a los juicios indirectos de los padres de familia.
Por otra parte estos libros de texto tienen una flexibilidad en donde el maestro
decide que temas profundiza o solo los aborda de manera superficial. Poniendo
énfasis en la memorización de conceptos, fechas, nombres, el dominio de ciertas
operaciones básicas.

Rockwell también resalta sobre la presentación formal de los conocimientos


señalando que en la escuela dichos conocimientos se presentan de diferentes formas
según el maestro y su visión de enseñanza, grado de conocimiento e interés por la
materia además la evaluación de estos es otro aspecto también con marcada
diferencia. Los limites entre el conocimiento escolar y el cotidiano. Se toma como
referencia el contexto físico y social pero en ocasiones se da por hecho que
algunos conocimientos son dominados por los alumnos pues se los proporciona el
propio contexto y se deja a un lado la observación y el análisis de situaciones
que proporciona su medio en el medio en que conviven evitando la relación entre
contenidos teóricos y la realidad; de ahí que la dimensión sobre la definición
escolar del aprendizaje según Rockwell sea un aprendizaje impuesto, ajeno a los
intereses y motivaciones de los niños.

También encontramos la dimensión de rituales y usos generalmente la habitualidad


de los maestros se lleva acabo por precedentes y analogías (Heller, 1985) pues
esta orientado a realizar actividades como un guion cinematográfico de rutinas:
pase de lista, escribe la fecha, el tono de voz, ejercicios de caligrafía,
concursos de lectura rápida; es un aprendizaje conductivo que difícilmente pueden
ser utilizados en otros contextos. Rockwell también destaca la dimensión del uso
del leguaje, aunque es una habilidad fundamental para favorecer en los educandos,
generalmente se vuelve una practica tradicionalista monótona y sin significancia
(reproducción de texto, cuestionario cerradas). Es una didáctica de instrucción
pero se evita interpretar el texto y jamás se cuestiona el propio quehacer del
docente de las actividades que plantea para favorecer el lenguaje; en muchas
escuelas se practica la disciplina de prohibir arcaísmos, monosílabos y groserías
sin cuestionar la comprensión de significados y aplicación en otros contextos.
Otra dimensión respecto al razonamiento implícito tiene que ver con la observación
de cómo razonan y piensan los niños dice Rockwell que muchas veces el maestro
espera que razonen como adultos esperando obtener respuestas como las del propio
profesor. Evitando el cuestionamiento. Hace falta partir de los intereses,
motivaciones, y grado de desarrollo de los alumnos pues como dice Rockwell los
niños muestran procesos mentales que se basan en supuestos lógicos e hipótesis
diferentes a los de los adultos.

La dimensión del aprendizaje autónomo. Generalmente los niños aprenden sin que los
adultos organicen actividades especiales para enseñárseles. Es frecuente observar
alumnos elaborando y formulando problemas hipótesis y textos propios. Sin embargo
Rockwell señala que es necesario el apoyo con materiales y situaciones que les
permitan experimentar a partir de su realidad. Por ello recomienda partir de los
conocimientos previos y favorecer la autonomía; autonomía que muchas veces las
maneja en vivencias no escolares otra, característica a favor de la autonomía es
la disposición innata de los niños para aprender. Ellos por iniciativa propia
ojean, observan, leen sus libros de texto gratuito sin que se lo indique el
maestro.

La dimensión de la transmisión de concepciones del mundo. La escuela es un espacio


escolar que formaliza la interpretación de la realidad y orienta la parte
valorativa en relación con el programa de estudios. En este espacio interactúa el
sentido común y los contenidos académicos poniendo especial énfasis en la
formación moral y cívica de los niños pues la escuela se presenta como transmisora
de valores o hábitos superiores que la sociedad espera se fomenten; Rockwell
apunta la existencia de la dimensión de la transmisión de valores, donde la
escuela juega el papel principal pues fomenta actividades de liturgia patriótica
cuyos efectos en los comienzos del siglo XX fueron positivos pero que en tiempos
actuales, Rockwell dice que tiene pocos efectos; e inclusive hay una
diferenciación de practicas de valores entre la escuela rural y la escuela urbana.
Dimensión: la iniciación de las reglas del juego. Tiene que ver sobre la
interacción de las normas en la escuela y su aplicación en otros ámbitos
institucionales, por lo que el alumno interactúa en un proceso de entrenamiento a
la práctica de reglas. Resaltando la autoridad del maestro y la participación en
el trabajo cuya legitimación de autoridad es incuestionable de ahí que los alumnos
aprenden a diferenciar lo que se logra con autoridad contraviniendo una practica
de la tolerancia y la negociación. Rockwell señala que no todo lo que sucede en la
escuela obedece obligatoriamente a la lógica la organización del proceso de
trabajo en el capitalismo, ni a la lógica de la conformación política. Dimensión
sobre las concepciones del mundo social. Tiene que ver con las experiencias con
las que interactúa el alumno acerca del mundo social en el que esta inmerso.
Rockwell dice que estas concepciones del mundo social son heterogéneas y que de
alguna forma las ciencias sociales buscan dar sentido a modos de vestir de
comportamiento, etc. Otro tema que resalta es la exploración conceptual de los
niños respecto a los ricos y a los pobres. También se rescata el laicismo que en
teoría se practica en las escuelas mexicanas sin embargo las concepciones del
grupo social y muchas veces del propio maestro chocan con tal doctrina. Aunque a
través de la enseñanza se favorece la tolerancia a la diversidad de creencias, por
ello es importante, dice Rockwell un análisis ideológico que implica no solo leer
contenidos desde una posición critica si no también conocer los nexos históricos
reales.

Finalmente la dimisión sobre la transformación de la experiencia escolar, Rockwell


enfatiza la realidad en la cual rescata que algunas estructuras como la escolar se
transforma con el tiempo pero que a la vez interactúa con el contexto social en
donde esta ubicada la escuela por ejemplo los tequios. Situaciones que influyen en
la vida escolar sin embargo Rockwell dice que la historia oficial tiende a negar
la transformación real que ocurre en las escuelas pues parece que la propia
escuela se resiste al cambio pues sus actores han adoptado una terquedad
burocrática incrustada en un tradicionalismo educativo.

Sin embargo se rescata que históricamente al inicio del siglo XX la escuela rural
mexicana fomento el cambio social y político, luego entonces la escuela puede ser
un factor de transformación para el país que querremos.

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