Cuando se habla de destruccin debera entenderse en trminos de races. De nada sirve
para la cosecha quemar el follaje si el espacio de plantacin lo abarcan las malas races. Entonces es necesario comenzar con la destruccin para poder crear. Uno pudiera hablar de destruccin de las personas fcil no?, fcil tomar un arma y apuntar al impedimento de todo aquello que "est daando" pero no, porque el cuerpo tambin es follaje. Entonces uno tendra que ir a las races escarbar y buscar todo aquello que est impidiendo que la planta pueda crecer en la luz. En las personas no hay mala yerba, no hay buena yerba, hay humanos que han vivido en la sombra de la ignorancia, en la inhumanizacin de no saberse mquinas reproductoras de actos, que todo tiene un porqu y que la condicin de humanidad puede ser devuelta cuando lo que se busque sea el valor personal hallado en la capacidad para cambiar los viejos paradigmas y abrir por primera vez los ojos a la chispa divina de poder personal en donde las cosas , las personas, las tradiciones ya no atan y se puede ser libre, de nuevo, se puede ser humano de nuevo, se puede llegar a ser un productivo rbol de cosecha.