You are on page 1of 1

At. Madrid-3; Levante-1.

El caso es que no despach un mal


primer tiempo el Atleti. La movi, toc
y se gust con mucho criterio, ritmo y
agilidad. Un buen rato de ftbol entre la
placidez del duelo. El nico pero, lo
exiguo del marcador. Slo el tanto de
cabeza de Griezmann, al descanso.

Fernando Torres ha vuelto al Atltico.


Siete aos despus, regresa el hijo
prdigo, la bandera, el dolo al que
agarrarse cual naufrago a un flotador
cuando vivamos en poca de penurias.
Aquellos aos en segunda, con el
estadio a reventar, aquel regreso a
primera y aquella travesa por el
desierto de la media tabla. All rein en
exclusiva El Nio, slo entre medianas,
tuercebotas y estafas compradas a
precio de oro. No gan nada por
entonces, menudo milagro hubiera sido,
ms el retorno de Torres es el de uno de
los nuestros. Quien no lo entienda,
quien dude, quien opine acerca de
acabados o no, realmente no entiende ni
papa. Ni ha sentido pasin y fervor por
algo en la vida. All ellos.
Con Fernando en el palco despach el
Atltico un partido ms de los de
funcionariado. Vamos, uno de esos de
ganar s o s, porque otra cosa hubiera
resultado digna de orculos o hazaas
hercleas. Otro de esos equipos enfrente
ms dignos de la segunda que de la
primera, ms salvarn la categora
porque hacia abajo slo caen tres
plazas. El Levante, cortito, cortito con
sifn.

Nada presuma una variacin en el


guin del duelo. Los rojiblancos eran
dueos absolutos del juego y el segundo
tanto del francs del pelo rubio,
conduca a una optimista reflexin:
estos se van a llevar cuatro! Luego, tras
las ocasiones falladas, y un tanto
visitante a resultas de rebotes varios,
aquello deriv en un sinsentido. Se vino
arriba el equipo de Mendilibar, le entr
el nervio al del Cholo y pareci, por un
momento, que poda haber lo.
Con el Atltico instalado en un extrao
tembleque para un partido tan
controlado, llegara Godn al rescate.
Otro tanto de cabeza y fin al misterio.
Fiesta en el Caldern y fiesta en el
palco. Por all andaba El Nio
repartiendo sonrisas y autgrafos. Lo
mejor, y no contamos la presentacin,
est por venir. Hete aqu, uno de los
nuestros.

You might also like