Para quererte cmo debo quererte, que salga abriendo puertas y ventanas y tenga un soplo de violencia y suene,
Logrando as que las hojas cansadas
no nos cubran por siempre con sus redes. Te llenar de lgrimas y dudas para quererte cmo debo quererte, prender un fuego torvo junto al lecho por donde al amor reposa y donde duermes, Y all entrar con pasos de guerrero Envuelto siempre por su propia fiebre. Llevar en la cintura ese cuchillo que pueda herir en el minuto hiriente; confundir la rosa y sus espinas de modo que de pronto no me encuentres, y me encuentres de pronto con un rostro que ya no sea el mismo que te bese.
Hoy voy a endurecer mi corazn
como si nunca fuera a conocerte, y as ajustar las huellas a un camino
de rectos bordes, frutos y deberes,
como si fuese a enderezar el hierro en una fragua de calor ardiente.
Har que todo se te vuelva oscuro
y confundas los pasos siete veces, y buscando la luz toques la puerta cerrada cuyas llaves me reserve, y slo yo, como un guardin severo, sepa darte las claves para siempre.