del ciudadano Antonio Camacho Rugeles. Algn da habamos -con Antonio y otros amigos- levantado la voz de protesta por los horrendos crmenes de la dictadura de Chile; despus vociferamos y escribimos palabras de alto calibre contra las desapariciones en Argentina bajo la atroz dictadura de Videla. Lo hacamos en un plegable de arte y literatura que se llamaba Piel y Sangre el cual muchas veces sala ilustrado con dibujos de Antonio y el plegable se llamaba as por la ternura de la piel en este continente donde se afila el plomo con los besos y sangre por las masacres que a diario se cometen por todos los rincones del planeta. Ahora la guerra sucia entr a nuestro patio y se fue llevando mucha gente, algunos torturados y el disparo seco con cadver a bordo, pero lo ms doloroso para los amigos y familiares es la desaparicin donde la vctima no aparece ni viva ni muerta. Entonces palpita la tenebrosa duda. La incertidumbre. Tal y
como sucedi en la pelcula
Desaparecido basada en un testimonio real de un hecho bajo la dictadura de Pinochet en Chile (ao 1972). Lo que ocurre en la desaparicin de Antonio Camacho, es que por ahora queda su obra artstica, en pintura y la experiencia teatral, su vitalidad cotidiana por enfrentar la vida. La forma de trasponer poticamente la realidad, el cario por los suyos, en especial por Don Daniel que se fue de este planeta pensando en su hijo; y en la alegra que le dio al Tigre como con respeto le decan a Don Daniel. Cuando ley El Magazn de El Espectador una nota que escrib reclamando por la suerte de Antonio. Antonio est presente donde est la rumba y el tropel contra la falsedad, la explotacin y la falta de pensar por s mismo. Carlos Castillo Julio 16, 1998