You are on page 1of 12
Estas no son palabras. Esta no es gramitica ni ortograffia ni semdntica; es mi voz que se transmuta en el papel; son mis gritos que al rebotar en la hoja se imprimen; es el rastro de mi sombra; sonido que sale desde lo hondo de todas mis hendiduras; es vaho expulsado por todos mis poros; es mi pelo que tiembla y mis ufias que palpitan, carne tensa; mis sexos se arquean; es luz bafando ff intestinos y garganta; mi (J piel, la mas obscura, expeliendo violentamente [J deseo; es mi rectof repleto de injurias; SS er ACTIVO BUSCA PASIVO NO obVl0 contraste alguno, imagenes diagramticas de cémo nuestro organismo estaé constituido; cuerpos abducidos mostrandonos supuestas verdades cientificas. Entramos en trance y comenzamos a repetir sagradas letanias: “estoy hecho de 6rganos, células y tejidos”. La miltiplicidad de voces se funde en un abismal soliloquio. sialorrea. La (sin)razén es inexistente, nuestra sangre ha sido hendida: huesos hora- | dados, piel flechada por diserta- ciones cientificas. Me han mentido. He vivido engafiado ff por mi profesor de biologia; por la doctora que siempre me mete un palo \\ y, como maquina irascible, instan- tdneamente respondo sacando la lengua; por mi madre que me regafiaba temerosa a que jugara demasiado con mi pilin; por documentales que, con sus imagenes y cadencia, han lograron producinme 4 mayores trances que cualquier droga que he experimentado. > Nadie, ningunx de ellxs, me dijo que mi cuerpo no era misculos ni venas, ni epidermis ni ganglios, ni pulmones; ni ciencia ni medicina ni biologia. Este son partes que hablan y significan; geografias de los anhelos, cartografias de las pasiones; es un territorio colonizado y liberado por desobediencia y resistencia. Por motivos que escapan de mi entendimiento. Habito un espacio y estoy construido desde un territorio que a muchxs molesta.| exhaustivamente reitel an _hechos de falan Siren er risteneeeemeneenes. i profana boca es un suave vano, que al rosarlo me comunica con otrxs. Ojos, apoteosis de occidente, siempre agitados y vigilantes esperando ser silentes. Rugosa piel, planicie y cordillera. De toda mi geo- grafia hay un lugar inexplorado y miste- rioso. Al nombrarlo un sonoro escarmiento agita los timpanos. Cuando se toca, un macho cabrio se ahuyenta; repleto de sucu- lentos pliegues; abismo; desbordante negrura; paraiso donde las serpientes moran y Adan sin remordimientos devora el fruto prohibido. (ee eee ee eee eee ee eed TERE SM nee rst etme ie oe Tamer nt ane Ce) cuestion su sexualidad EIeou ence Por eso insisto que el cuerpo no es algo neutro sino algo que canta, habla y sig- nifica, pero este miedo que padece el macho no es algo que se calla, sino algo que esté en una constante ten- sion, que siempre esta presente. Como si hablar constantemente de él y rechazarlo hiciera que, por arte de magia y divinos procesos que no com- prendo, su hombria se reivindicara. Estas dindémicas las vemos en el len- guaje cotidiano como es el albur, donde aquel que es penetrado, aquel que su ano transgrede, el que come el chile, le echan blanco, le dan, es el que pierde el juego, es el puto, Ja jotita o la vieja, y aquel que penetra es el hombre, el macho, el ganador. Ser “hombre” es hablar con voz varonil, no moverse gracilmente, no mostrar sus sen- timientos, no mover la cadera al caminar, no usar ropa llamativa, etcétera. Ser hombre es no ser puto, ser hombre es no ser femenino. SER ROMBRE ES NO SER PUTO, SER KOMBRE ES NO SER FEMENINO éQué es lo masculino y lo femenino? gAcaso no existen otros cuerpos que se escapan de estas construcciones? FREaMenGl (ERs eet eC eet eee eet Los valores de la masculinidad y la feminidad no son estéticos y rigidos, sino plasticos y etéreos. Pero parece ser que en el ambiente, mundo, comunidad homosexual (que el lector decida nombrarlo, ya que al que escribe las palabras ‘comunidad’, ‘gay’, ‘mundo’, ‘homosexual’ y ‘ambiente’ lo problemati- zan) se afanan en perpetrar la imagen de Ja masculinidad hegemonica. Activo busca pasivo no obvio. Esté guapo, pero es una loca. No me gustan tan maricones. @Por qué nos cuesta trabajo aceptar corporalidades diferentes? Qué nos mueve, asusta, aterroriza o causa repulsion? 2Qué hay en esos cuerpos “feminizados” que nos problematiza? Si como diria un sabio amigo: si jotas somos todas. Si él ser hombre hétero se construye no siendo putito, gpor qué discriminamos a quién se escapa de estas coordenadas? El hecho de ser penetrador o de usar el pene para atravesar por donde se caga ya es algo que pone en cuestion la manera en la que el cuerpo se resignifica. Parece que tenemos una misoginia internalizada, ya que F rechazamos aquello que es femenino, — aquello que tiene algunos valores de la construccién de la mujer. No nos damos cuenta de la valia de estas corporalidades que dinamitan y ponen en cuestién la dico- tomia del género, lo problematizan. Son nuestras aliadas, ya que ellas, tronando los dedos y moviendo el culo, nos ensefian que portar un pito y penetrar puchas no te hace ser hombre. Cuestionamos que ser mujer es ser maquillada y tener una bolsa, porque nosotras las obvias pasivas cargamos bolsos y nos depilamos la ceja. Nos han dicho que los machirulos no deben tocarse el ano, ni meterse el dedo porque nosotros vemos machos sudcrosos y bigotones lamerse el Seen Invito a empezar a reconstruir nues- tres concepciones sobre las corporali- aces, a aceptarnos diversos, cual somos: mujeres machorras, sementales torcidos, jotitas obvias, vestidas, con biovaginas y biopenes 0 sin ellxs; un compromiso que implica reconstruir y cambiar muchos de los valores con los que hemos crecido; un cuestionamiento cotidiano de cémo las categorias se establecen y juegos sim- ples, para dinamiterlos. Por Tadeo Cervantes tadeowars@hotmail.com Nosotros los putos, ustedes los gais Una mancha negra en apariencia ilegible adorna las paredes de un baito piiblico. Detenidamente la observo, por la geometria de sus lineas y la intensidad de sus trazos deduzco que intenta transmitirme un mensaje. Hago un esfuerzo sobrehumano y logro descifrar su contenido. “Pu”, se puede ver al decodificar la primera silaba. Con facilidad deduzco la siguiente parte del mensaje, es una “t” seguida por una “o”. La complejidad aumenta, pero los jerogtificos sanitarios no pueden vencer a mi intelecto. “El que lo lea”, con esa frase finaliza el mensaje. La sentencia me golpea; cimbra mis oidos y pone a trabajar mi mente. Una palabra irreconocible acompaiia al mensaje. Decido acudir al instrumento que resuetve mis dudas lingiiisticas, el diccionario de la Real Academia Espanola. Paso hoja a hoja y la tinta va recorriendo mi mirada: “pata”, “perro”, “pena”, “pene”, “poro”, “pufio”. Hasta que por fin la encuentro. “PUTO. adj. U. como calificacion denigratoria. m. Hombre que tiene conciibito con persona de su sexo.” —,Qué me queria transmitir aquel sabio del pasado al cincelar en la puerta del wc. este mensaje? {Por qué una practica sexual se vuelve tan injuriosa, tan ofensiva? Serd casual que en los templos de la analidad encontremos este tipo de conjures? Pero sobretodo, cémo desactivar esos conjures para no convertirse en la denigracion que intentan asignarnos? Apartir de hoy he decidido denominarme con todas las palabras que utilizan para ofender mi preferencia sexual. A partir de hoy dejo de ser gay y me transformo en un putito, una jota, un desviado. Me convierto en el jNo seas maricén! que ladran PUTO los padres cuando un nino Ulora al caerse. Ahora cuando duden mi orientacién, no me pregunten si soy homosexual, digan: {Eres un mayate? Soy un subversivo muerde-almohadas. Empujaré alegre todas las cacas que se me pongan enfrente. Saldré en plena luvia, extenderé mis brazos y cacheré el granizo. Soy la pesadilla de los psiquiatricos; una loca. Plancharé arrugas y perseguiré solitarias. Si, soy todo eso y mas lo que se les ocurra. Algunxs piensan que esta manera de denominarme es una forma de normatizar la violencia. Pero si rastreamos el término “homosexual” resulta también violento, ya que su origen nos lleva hasta la medicina. “Homosexual” es un término médico para denominar una enfermedad, para crear también la ficcién opuesta del heterosexual, el sano. Asi que renuncio a ese término que quiere entenderme como sujeto de estudio de la psiquiatria. No soy homosexual, porque no soy un enfermo. ;Qué es lo que me molesta de gay? Por qué cambiar este término?, si gay quiere decir “alegre”. Volteo mi mirada a la crisis del sida, a los grupos que decidieron renunciar a la categoria de feliz. Me sumo ¢ inspecciono lo mas hondo de su encono. De nuevo somos entendidos como sujetos enfermos, ahora no mentales, nuestra existencia conileva una huella que hasta el dia de hoy palpita en nuestras pieles. “Puto sidoso”, decian. Eso no nos pone alegres, nos emputa. Not gay as in happy but queer as in fuck you, coreaba el queer nation y el act up. Denominémos puto a una manera de crear lazos con nuestra historia. Denominémos puto porque estamos cansadxs de ser el cliché que los medios de comunicacion nos quieren imponer. Denominémos puto como una provocacién politica. Somos los putos, quienes salimos a la calle a combatir la homofobia, la transfobia, la interfobia, la misoginia, el racismo y todo los miedos que salgan por la creacién 0 el descubrimiento de nuevas diversidades e identidades sexuales. Gay también es entendido como la “dolcegabanizacién de la homosexualidad”. Un jotito fagocitado por las leyes del mercado rosa, un exacerbado consumidor de mercancia para maricones, un sujeto desdibujado politicamente, un blanco burgués que habita en el dltimo piso del edificio de moda. No soy gay, porque no represento esos valores culturales y porque tampoco quiero ser un sujeto que sim- plemente consume lo que el capital le dicta. Eso es traicién, eso es olvidar nuestra memoria historica. Llamarnos putos, jotos o maricones es hermanarnos con las luchas que los movimientos transmaricaputabollo... estén gestando en otros lugares de nuestra realidad hispana. Seguir denominandonos gays probablemente no nos permita en- trar en dialogo con este movimiento. Por iiltimo, zc6mo subvertir el insulto? Butler a través de Austen nos explica que hay palabra, que las palabras hacen cosas, crean reacciones. Por ejemplo, cuando tii le pediste a alguien que fuera tu novio, esa persona, al nombrarse como novio, adquiere otro tipo de connotacién en tu vida. La palabra, en este caso “novio”, hace que la relacion entre ta y él cambie, que otras dinamicas sean posibles. Del mismo modo, cuando te insultan, cuando te llaman “pinche puto”, ese insulto te hace reaccionar, te vulnera, crea una relacién de poder donde se te inferioriza por tu condicién, de un otro entendido como “normal” que tiene el poder de realizar esta accién. Si nos denominamos como aquello que nos vulnera, si nos ttamamos putos la ofensa ya no se acciona, ya que para nosotros eso deja de representar un insulto y se convierte en una parte esencial de nosotrxs. Este no es sdlo un llamado a los putos, también lo es para las lenchas, las tortilleras, para las vestidas, las putas, los indios, para todo aquello que por su simple existencia representa una perjuria. Nosotros somos los putos estamos emputados y ustedes, reductos de supuesta felicidad, pedazos de célula servil al capital, habitantes de la burbuja “burguesa”, mufiecos carentes de historia, ustedes, ustedes son los gais. Por Tadeo Cervantes tadeowars@ hotmail.com E\ viernes es un ritual de ta vida contemporanea en la que los habitantes se pone sus mejores atavios. Desfrenados buscan la noche, los ruidos que torpemente ensordecen. Otros hombres con los cudles compartiran su deseo. Como buen habitante del mundo moderno me decido repetir este ritual. En lo que voy ornamentando mi cuerpo y preparandolo pata las danzas de Baco, reviso mi FB, observo que mis amigos likean y comparten fotos de Adonis con grandes pectorales y el abdomen marcado. Mis ojos absorben esos cuerpos, se los tragan. Ya es tarde, decido itme. Llego a la bacanal, danzamos todos, humo falso, sonidos bit, pieles que expelen libido. En las patedes del antro de nuevo veo esas Tepresentaciones monumentales, esas odas a las grandes vergas. Salgo exhausto, nos regalan condones, éstos contienen instrucciones sobre como deben usarse y una fotografia de un joven mamado acompafia la informacion. Ya los feminismos nos han advertido acerca de lo que loscanones de belleza implican. De todo el régimen de lo corporeo y las exigencias que existen. Cirugiaplasticas, senosoperados, reducir tallas, bulimia, blanquear la piel, moda son lo que constituyen. Me pregunto si acaso estas mismas demandas existen hacia el cuerpo de los homosexuales. La publicidad, internet, los antros, nuestros conocidos y amistades, ef arte, redes sociales, constantemente nos muestran estos sujetos de cuerpo y cara ‘pertecta”. la mayaoria de esas. corporalidades son sujetos que no nos representan 0 que representan a una minotia de la nuestra poblacién. Sujetos blancos, ocidentalizados. Rara vez podemos ver otros hombres con otras caracteristicas, otros colores de piel, mas delgados, gordos, morenos, ojos rasgados, etc; Qué acaso esos cuerpos no son deseables? Aparte de ser una coreogratia de como se de debe construir el cuerpo, musculos marcados, también es una pedagogia de cuales son los cuerpos que se desean. Muchos de mis conocidos y amigos, estan preocupados por alcanzar ese ideal de belleza, por tener estémago de lavadero, brazos de Max Steel. Estretegia de supervivencia hasta mundo gay que exige carne como tributo también, ruptura constante en @ construccion de su persona, ya que ellos no encajan en esas exigencias corporales. Endoracismo disfrazado de deseo, que nosotros mismos no somos deseables. SI lo somos entonces por que no nos representamos, con todas nuestras diversidades, de rasgos fisicos, de colores, de tamafos de penes, de clase, etc, De la publicidad entiendo su juego, lo sefialo y trato de combatirlo Pero el arte que supone deberia ser un espacio de critica hacia estas imagenes, jIndique la Clase de Cuerpo sigue siendo fabrica de esa tirania visual Artista gay les invito a ponerse al margen del discurso, comenzar criticar desde multiples espacios y expresiones el régimen del cuerpo. No somos esos cuerpos mamados y vergones, no somos esos sujetos blancos de ojos claros, somos otros cuerpos también deseables, también deseantes. No nos reduzcamos y nos autobjetivizemos, volviéndonos torsos y perdiendo el rostro, transtormandonos en brazos y perdiendo el habla. Tadeo Cervantes

You might also like