TODAS LAS TESIS sobre el problema indígena, que ignoran o eluden a
éste como problema económico-social, son otros tantos estériles ejercicios
teoréticos –y a veces sólo verbales–, condenados a un absoluto descrédito.
No las salva a algunas su buena fe. Prácticamente, todas no han
servido sino para ocultar o desfigurar la realidad del problema. La crítica
socialista lo descubre y esclarece, porque busca sus causas en la economía
del país y no en su mecanismo administrativo, jurídico o eclesiástico, ni en
su dualidad o pluralidad de razas, ni en sus condiciones culturales y morales.
La cuestión indígena arranca de nuestra economía. Tiene sus raíces en
el régimen de propiedad de la tierra. Cualquier intento de resolverla con
medidas de administración o policía, con métodos de enseñanza o con
obras de vialidad, constituye un trabajo superficial o adjetivo, mientras
subsista la feudalidad de los “gamonales”*44
TODAS LAS TESIS sobre el problema indígena, que ignoran o eluden a
éste como problema económico-social, son otros tantos estériles ejercicios
teoréticos –y a veces sólo verbales–, condenados a un absoluto descrédito.
No las salva a algunas su buena fe. Prácticamente, todas no han
servido sino para ocultar o desfigurar la realidad del problema. La crítica
socialista lo descubre y esclarece, porque busca sus causas en la economía
del país y no en su mecanismo administrativo, jurídico o eclesiástico, ni en
su dualidad o pluralidad de razas, ni en sus condiciones culturales y morales.
La cuestión indígena arranca de nuestra economía. Tiene sus raíces en
el régimen de propiedad de la tierra. Cualquier intento de resolverla con
medidas de administración o policía, con métodos de enseñanza o con
obras de vialidad, constituye un trabajo superficial o adjetivo, mientras
subsista la feudalidad de los “gamonales”*44
TODAS LAS TESIS sobre el problema indígena, que ignoran o eluden a
éste como problema económico-social, son otros tantos estériles ejercicios
teoréticos –y a veces sólo verbales–, condenados a un absoluto descrédito.
No las salva a algunas su buena fe. Prácticamente, todas no han
servido sino para ocultar o desfigurar la realidad del problema. La crítica
socialista lo descubre y esclarece, porque busca sus causas en la economía
del país y no en su mecanismo administrativo, jurídico o eclesiástico, ni en
su dualidad o pluralidad de razas, ni en sus condiciones culturales y morales.
La cuestión indígena arranca de nuestra economía. Tiene sus raíces en
el régimen de propiedad de la tierra. Cualquier intento de resolverla con
medidas de administración o policía, con métodos de enseñanza o con
obras de vialidad, constituye un trabajo superficial o adjetivo, mientras
subsista la feudalidad de los “gamonales”*44
EL PROBLEMA DEL INDIO
SU NUEVO PLANTEAMIENTO
TODAS LAS TESIS sobre el problema indigena, que gnorano cluden a
ste como problema econ
ios teoréticos ~y a veces
sdad de a tierra. Cualquier intento de resolverla con
medidas de administracin o policia, con métados de ensefanza 0 con
%
ra su autoridad, sufragada por el ambiente yl habito, es impotenteapap paso my onsonponi
spontauanp o> ofp
end oy etogee nto
oDrONd
sy usonpazanb so] 9p 9 wpap uss aru9piaa sons
9 euoyseanpo:
-ooguiouoaa euzeaSord
_eunop np opened so aed ne ane ab Kop 989
wa VL 70 PP
pnb.
“nu ednaodud os ots od ‘wuapureuaygond ap uous ose fy
ppg Pam 9 0 wan 20d on
-aed pp spaen vo ruaumoaup uepive ai ‘ounystoure pp seman
sep soxonodsnaodaoys oxen pesto ent29 9poM p04 OPINED
-ws Copewopimqe m9 ‘youd uo sxbunsqo aonb osm 5,
“oui sss naan apand ou [7 peposdond cesta pep
-noyie ums opeparooip ‘onovurp‘oxestve> jp oboperdgns, desde las omnadas de
‘encaminadas a ampa
yyelabuso, noes delas menos considera
ayer tienesin embar-
va, Sabe quela précticaes
no tienemés valor pr
dalisme incacto en su es
parte de la propiedad comunale individual indigena esti ya cumpl
quela reforma administrativa, frente a un feu-
tetra econémica. La apropiacién de la mayor
suobradeexpansiény
ndigena de un active cruzamiento de
‘blancos, es una ingenuidad antisociol6
ica, concebible slo en la mente rudimentaria de un importador de car
merinos. Los pueblos asiitices, «los cuales no es inferior en un
cl pucblo indio, han
que tienede'
ez. La degeneracién del indo peruano es una barat
eguleyos de la mesa feu
La tendencia a conside
|, encarna una concep
‘queen el orden ps
res de los colonizadores, nacen de esta tendencia, que ha confiado siem-
pre con exceso en sus lamamientos al sentido moral de la civiliaacin,
Gonzilez Prada no se encontraba exenta de su esperanza” cuando escri
bia que la *condicién del indigena puede mejorar de dos manetas: 0 el
Ja misma esperanza, aunque su verda
1esconcretos inmediatos de defensa del
sntacién que debe mucho, segu-
mente sajén, de Dora Ma:
ampliamente cumplido, ene! Perdiyen el mun-
des
Indio quelle asignaron sus.
zamente, al idealismo
les. ste conceptopresideena Europa
‘ontempordnea una accién antimperialista, a cual seadhieren espi
land, y que por tantono pue-
3«
‘pgesuodisu a3ey aseumnsop sun Kodsono unum anb esp susroye>
‘wea uonsans wan ouso> outs ‘pepyqearse vf ua sand aIsx9 ON ePO8-09
onb euadipu
j9 uo Buopkoyau a8 seuade wppuapyna ns
‘por uo enisonw 95 w[nUi9)wIs9 9p BSOIOWIE BIoUD|DgNsUr v| Su ‘Seu
spuysopeussiu so uo uopeaye | a1qaosop 2s paps eiso Sep
‘5ur eapuazeluio> 38 opuren) $0809 SH] FIsTuOFI|OAR
ano jrauotnay sp woo 2fqpyoUo>Ut Jopnay auarguAe [9p Wo
congas un sod ‘eusyu
‘anquinpiaaas wap woquynown ey “eppn2y oxpuny
59 “vupsoduno s9}02s9 uppeigod Bj v
sod exony ‘so1uo8a sesumsuno4p sey ap onvap ‘anb ap orsondns 2 ua
‘surspout v[anos9 67 “,owsfoyoo[e ns ap aaryn> [p> anb spzozuy oust
|Porpuyjap vows0U 9p 0100
1g soaneprp soporpur&e
‘nb uous 29104 oqes ousopous o8o8epod fy so>mWoUODD Ks
-uounewougine &e191s9 ovo un sod une wopedesjnsa9a1ed¥ OUWO!D
-eonpo 9p eurjqaud un s9 o1put [ap ewojqoud panb ap oxdsou0>
‘up>eapuvs9 ap s9u0}2eD08 9p Pus IOUDW B}
tussoauos sonsnepp sof ‘oayjo1e> exp fe BIaIUEFP F] opeut
soyuoursj2 gb woo? ‘sose7 se"| =p auped jp owon s3pesj sod assipaurwspod
pnsajur 9 jonauidss peprsedeo ns opuena ‘essoxpous uopuo un 9 02
_qpax opnd ou sso nb mqo v7", ,[PUoUrN [9S oxpor [> amU9 JHIPSUE
2p woouny e] O:BUONSUr e JeRre>uD 2p ous “sezuEUOpIO k sspepHOME
-zprope oso‘ apur pp sop =p wtnepap ana SIGS
p wril= 1 0109 "9
pou In spe ue & wpeezas sp 31
jostun uoszuesodsoH fo
-toqus youedss ousjqore9 stutrode & operfex9 [F Bae
eoippud vopor wo>‘eyuorfesoqy >
‘wopIn9 SFYY ,,JOUBdSD 020501 Pp sos
ompur fap seuaey sy mg eruojo9 uoUp
guedar So oq
1g an espuatasd 2s Sa
10 9p 19p29n¢ wypod oy
cuonsono #[ 9p RHO
jds3 | sang “eisyePoos uN
woo s0s09 ssp eqpuaptsd9 Ou sowinqes owo9 anb
‘peg z2[pzuog snuoueueisns oxen ou soxpuy So] 3p auDNS ET sep
01d & sofa] ours “oBsequD USSUMARIA REVISION HISTORICA*
La poblacin del imperioinkaico, conforme aeéleulos prudentes, no era
doce yauna quince
fue, ante todo, una teemenda carniceria, Los con-
or su eseaso niimero, no podi
imponer su do-
a4
de Indias? seinspiraron ea pro}
nociendo su orpanizacir
indios continuaron a merced de una feudalidad despiadada que
sociedad y la economia inkaicas, sin su
capaz de organizar progresivamente la produc
cspatioles a establecerse ct
esa tal punto quese cares
ero, pricticamen-
Ja despoblacién indigena, se habria sentido de otro mode demogrifica
‘mente demasiado débil frente al indio, aunque somerido, hostil y enemi-
0. El negro fue dedicado al servicio domésticoy alos of
iimente con el negro, produciendo este m:
costefia con caracteristicas de mayor adhesién alo espa
aloindigens
ron los crollosy aun
su gestacién parte importante, El progeama liberal de a revol
prendia lGgicamente la redencién del indio, consecuencia automitiea de
Seordens el reparto de
pero no representando
nueva clase dirigente, todas
faltas de gobernantes capaces de actuarlas La avistocraci
JaColonia, duefa del poder, conserv6 intacto sus derechos feud
la tictra y, por consiguiente, sobre
rentemente enderezadas a protegerla, no hen podido nada concra la feu-
dalidad subsistente hasta hoy.
33ue
|p upiquie 298 exourd tog ssoe2qour 0189 1od urynsor onb & ousyeuoU!
8 [9p sosoroyu So] e301 ou ab sepipour sense opuep ‘seisTuasIpUT
eso pup uDp09 | SoD
Ksopezueae so1uous3p9 $0] 2p
ImPUsDp any ‘o}sPUOFBNIOsAS o1toxd zy 35 S9U0!>8
spurt sns 9p s919g109[p ow ox>d‘ous21goo [210d epeupon
2p sosertuoo ap rorporiad uorunaso‘uppeTRoUrA vs 9 TET SEAT
fod sopesqunesoour soy seuaBypun So2]>nt sOstasIp Soy
yo
ssuopenssaidas 9p 6
nupurearusad nur epeleqen
9p & upisazdop ap ournsx9 open un u2
uous to] ap sours 9 #20}09
ns Sompuyso] sod anuoupedioutsd epeiqey uo Boy eaz018e] Ug,
9
souo}2e>ypuysyau sus s0d sey>ny ap pevnjoa | sorpur so]
up }se uoxoKnunascy"euesond ns uD uos9}q 19501] So}JoH9 sopzedSO-]
sojypnes sountpe ap eaidoBewop
gzuauo> 9s oxpur [pp uoPuRpan
aneisor ey eoqjqndoy ey seisondsauses0 9p 0101905 024
-ppsend oq band op OPUDTS TT
4 $9] oxput fap seperadsosop souo}Deo;puIsiy Sey “xuvs Uo sepOGe
‘pss ary ‘ompar jap sopersoduray sey sepos ‘seypnaar set sepoy, "aqqad
enxo &soopous UDUsp1 un B19 OW
toge #281 P| 9p opeyiod ues A zea ue xesUDyOp
989 u9 ‘019g ‘SOIPUT 80] 3p UpIsaIdap
A euros» ap pepyqesuodsos ej epor ‘quoueut8}10 ‘spuodsosi09 3
‘onus, [y vonqaday|v[sab 9]qegyn> sounurspaxede oWwUIDEMA Typroblema indigena, escamoteado antes por.
¢s planteado en sus té:minos sociales y econdmicos,identificén-
todo con el problema dela tetra, Cada dia seimpone, con més
cvidencia, la conviceién de que este problema no puede encontrar su s0-
lucién en una férmula humanitaria. No puede ser a consecuencia de un
‘movimiento filantrépico. Los patronatos decaciquesy de rabulas som una
ProsIndigena son
én generosa, abnegada, nobilisima, personal de Pedro S,
Zulen y Dora Mayer. Como experimento, el dela Asociacién Pro-Indige-
para contratar, para medi, la insensibilidad moral de una gene
scion y de un
Lasolucién del problema del indio tiene que ser una sl
Sus sealizadores deben ser los propios indios,
estas han sido siempre regio:
rales. Esto ha contribuido, en gran parte, asuabatimiento, Un pueblo de
cuatro millones de hombres, consciente des nimero,
cade su porver