EL HOMBRE Y LA MUJER
Si hemos de creer a la Biblia, Dios creé al hombre
el sexto dia del mundo. Lo hizo macho y hembra a
la vez, es decir andrégino, dotado de todo lo nece-
serio para reproducirse solo. Entonces la tierra no
era més que un desierto y con el polvo del suelo fue
modelado el hombre.
Mas tarde, Dios creé el paraiso, y colocé en él al
hombre para que lo cultivara y guardara. Entonces
se percaté de que la soledad del hombre no eta bue-
na. Hizo desfilar ante él a todos los animales—ma-
miferos y pajaros—para que el hombre los nom-
brara y escogiera una compafiera. El hombre los
nombré, pero no encontré compaiiera entre los ani-
males. Entonces Dios hizo que el hombre cayera en
un profundo suefio y extrajo de él todos los érganos
femeninos, Alrededor de estos 6tganos creé un nue-
vo hombre, que Hamé mujer. Habia nacido Eva.
Toda la psicologia de ambos sexos se desprende
de estos origenes, Vemos primero que el andrégino
soporta mal la soledad de sus amores consigo mis-
mo. Asi el erizo de mar, visiblemente concebido pa-
rareproducirse solo, se entrega a una gimnasia inco-
modisima para acoplarse con una compafiera
13EL ESPEJO DE LAS IDEAS
La ablacién de sus «partes» femeninas dejé al
hombre con una herida moral mal cicatrizada, Para
muchos hombres, la nostalgia de la maternidad no
se cura con las flacas satisfacciones de la paterni-
dad.
De los orfgenes de la mujer hay que recordar,
ante todo, que se sitdan en el paraiso. Mientras que
el hombre fue formado en el polvo del desierto, la
mujer nacié bajo las flores y las plantas grasas del
paraiso. De ah{ proceden muchos rasgos de su ca-
récter. Por otra parte, fue formada alrededor de su
propio sexo, Ella esté mas sustancialmente someti-
daa la feminidad de lo que el hombre lo esté a la vi-
tilidad, Es lo que los escolasticos expresaban con la
formula: tota mulier in utero (Ia mujer entera esta
en su titero)
El hombre se ha aprovechado ampliamente de
Jas ventajas que la naturaleza le dio sobre la mujer
para reducirla a la esclavitud. Es lo que Karl Marx
expresaba diciéndo que la mujer es el proletario del
hombre. Pero siglo tras siglo, la mujer ha ido ga-
nando en fuerza fisica y en independencia econémi-
ca, La carga de la maternidad se aligera de afio en
afio. Podriamos prever el advenimiento de una so-
ciedad puramente matriarcal, donde los hombres
quedarian reducidos a juguetes destinados tinica-
mente al placer de las mujeres.
La Ilegada de esta sociedad feminista tal vez se
veré acelerada por una progresiva escasez del sexo
4
EL HOMBRE Y LA MUJER
femenino, provocada por las mismas mujeres. En
efecto, cada vez con mayor frecuencia, las mujeres
embarazadas tienen la posibilidad de abortar cono-
ciendo el sexo del hijo que llevan en ellas. Y casi
siempre optan por el aborto si se trata de una nifia.
En la India, la nueva generacién presenta ya un
grave desequilibrio a favor de los nifios. De ello re-
sultaré primero una escasez de mujeres y una im-
previsible valorizacién de las supervivientes del ge-
nocidio abortivo. La segunda consecuencia ser la
extincién del género humano, puesto que son las
mujeres—y novlos hombres—las que aseguran su
perpetuacién,
Cita:
Los hombres son mujeres como las demés,
GROUCHO MARX
15EL AMOR Y LA AMISTAD
La comparacién entre amor y amistad se inclina
primero a favor del amor. Frente a la pasion amoro.
sa, el vinculo amistoso parece ligero, insulso y poco
serio. Y el amor se beneficia de varios milenios de
celebracién teatral, poética y novelesca. ¢Cémo po-
dria la amistad evitar quedar mal en la compara-
cién?
Pero cuando uno mira mas de cerca, las ventajas
del amor frente a la amistad son de una cualidad
mas que discutible, Una de las grandes diferencias
entre ambos es que no puede haber amistad sin reci-
ptocidad. No se puede sentir amistad por alguien
que no siente amistad por uno. O es compartida 0
no es. Mientras que el amor, por el contrario, pare-
ce alimentarse de la desdicha de no ser compartido.
| Elamor desgraciado es el principal resorte de la tra-
gedia y la novela. «Amo y soy amado—decta el poe-
| ta, Serfa la felicidad si se tratara de la misma per-
sona.» Por desgracia, raramente se trata de la misma
persona,
Hay otra diferencia mas grave avin entre amor
y amistad, Es que no puede haber amistad sin esti-
ma, Si nuestro amigo comete un acto que conside-
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