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Epidemiología
de la neumonía asociada
a ventilación mecánica
Bernabé Álvarez Sánchez, Manuel Solera Suárez, Miguel Ángel García Martínez

INTRODUCCIÓN
En el estudio sobre neumonía asociada a ven- de los resultados, con poca claridad en los mé-
tilación mecánica (NAVM) hay trabajos que todos empleados. Para evitar estos problemas
publican resultados diferentes. Estas divergen- se debe definir con claridad la NAVM, explicar
cias posiblemente se deben a la ausencia de los parámetros utilizados para los cálculos epi-
un método de referencia de comparación a di- demiológicos y revisar los diversos trabajos pu-
ferentes aproximaciones al problema por parte blicados valorando su grado de evidencia para
de los autores y a una falta de estandarización finalmente exponer las conclusiones obtenidas.

DEFINICIONES
Neumonía en los alvéolos adyacentes. Este líquido, que
llena los alvéolos, muestra densidad agua en
Se trata de la inflamación producida por mi- la radiografía de tórax, signo característico de
croorganismos del parénquima pulmonar si- consolidación pulmonar.
tuado por detrás de la porción distal de los
bronquiolos terminales, que comprende bron-
quiolos respiratorios, conductos alveolares, sa- Neumonía nosocomial (NN)
cos alveolares y alvéolos. Histológicamente se
observa una reacción inflamatoria con apari- Es la que aparece en el medio hospitalario.
ción de exudado intraalveolar y presencia de Como norma general, se manifiesta después
leucocitos polinucleares en los bronquios y de las 48 horas de su ingreso, o antes de las
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12 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

72 horas de que el paciente haya sido dado llecimientos que ocurren en una determinada
de alta. serie.

Neumonía asociada Mortalidad asociada


a ventilación mecánica
Es el número de muertes por 100 casos de los
(NAVM) enfermos que fallecen teniendo una neumonía
en el momento de la muerte. Es un factor que
Es un tipo especial de la NN. Se trata de la in-
puede confundir y es muy poco empleado.
flamación del parénquima pulmonar causada
por un microorganismo patógeno no presente
al comenzar la ventilación mecánica (VM) (1)
o que se diagnostica en las 72 horas siguien-
Mortalidad atribuible (3)
tes a la extubación y retirada de la VM. A pe-
Se trata de la mortalidad secundaria a la ex-
sar de la claridad de este concepto, durante
posición a la NAVM. Para su cálculo hay que
las tres ultimas décadas se han discutido sus
disponer siempre de un grupo de controles.
numerosas definiciones, ninguna de las cua-
les se ha aceptado de forma universal. In-
Mortalidad atribuible: mortalidad en
cluso las que se basan en hallazgos histopa-
pacientes con NAVM menos mortalidad
tológicos en la autopsia puede que no sean
en pacientes controles sin NAVM (calculadas
uniformemente aceptadas. Es difícil encon-
como número de muertes por 100 casos)
trar la presencia de neumonía en áreas foca-
les de un solo lóbulo pulmonar, los hallazgos
microbiológicos pueden ser negativos a pesar
de la presencia de inflamación en el pulmón
Riesgo relativo
y los anatomopatólogos pueden no estar de de mortalidad (3)
acuerdo en la interpretación de los hallazgos
histológicos (2). Aunque el tiempo límite de Se trata de cuántas veces es más frecuente la
aparición de la NN se ha fijado en 48 horas, mortalidad en los pacientes que padecen NAVM
la NAVM puede presentarse antes de este que en el resto de la población estudiada. Para
periodo. La ausencia de un método de refe- su cálculo debe disponerse siempre de un grupo
rencia al que referirnos con seguridad conti- de controles.
núa añadiendo leña al fuego acerca de la re-
levancia y de la importancia de muchos estudios Riesgo relativo de mortalidad: mortalidad
en este campo. Otro factor importante es la en pacientes con NAVM dividido por
división entre NAVM precoces y tardías con mortalidad en pacientes sin NAVM
microorganismos y pronósticos diferentes, que (calculadas como número de muertes
hacen que las diversas series publicadas ob- por 100 casos)
tengan resultados dispares.

Índice de intervención (3)


Mortalidad bruta o total
Número de enfermos en los que hay que im-
Es el número de muertes por 100 casos de pedir la NAVM para evitar una muerte.
los enfermos que han presentado NAVM a lo
largo de su evolución, independientemente de Índice de intervención: 100 dividido por la
la causa del fallecimiento. Es una medida muy mortalidad atribuible, expresada como
fácil, pues solamente hay que contar los fa- número de muertes por 100 casos
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EPIDEMIOLOGIA DE LA NEUMONÍA ASOCIADA A VENTILACIÓN MECÁNICA 13

NIVELES DE EVIDENCIA CIENTÍFICA


En noviembre de 1992, el Evidence-Based Me- grado de evidencia, que ayuda a valorar la
dicine Working Group (EBMWG) publicó las ba- fortaleza o solidez de los resultados obtenidos
ses de un nuevo enfoque para la práctica de a partir de una estrategia (5, 6). Las recomen-
la medicina (4). Este trabajo proponía un cam- daciones que se hacen a lo largo del presente
bio en el modelo del aprendizaje y la práctica documento se han graduado en tres niveles
de la medicina, y formulaba el ideario de la de evidencia, de acuerdo con lo publicado en
llamada medicina basada en la evidencia (MBE, las guías de la American Thoracic Society (6):
(evidence based medicine, EBM). Su objetivo
primordial es lograr que la actividad médica se — Nivel I. Trabajos prospectivos controlados,
asiente sobre bases científicas contrastadas con aleatorizados, bien diseñados y con meto-
estudios de la mejor calidad posible, en los dología correcta.
que se refleje de forma fidedigna el estado — Nivel II. Trabajos prospectivos, controlados,
actual de los conocimientos. La principal he- bien diseñados, pero sin aleatorizar, que in-
rramienta sobre la que se asienta esta meto- cluyen cohortes de pacientes, estudios caso-
dología la constituye la revisión sistemática de control y series de pacientes.
los estudios de investigación publicados en re- — Nivel III. Casos retrospectivos y opinión de
vistas médicas con la asignación de un nivel o expertos.

INCIDENCIA DE LA NAVM
En 1992 se realiza el estudio EPIC, un corte ferentes las series. Así, en un estudio pros-
transversal sobre la presencia de infecciones pectivo realizado en 23 UMI italianas, con 724
en un total de 1.417 unidades de medicina pacientes que recibieron VM durante más de
intensiva (UMI) con 10.038 pacientes evalua- 24 horas, se encuentra una frecuencia media
dos (7). En este estudio se encuentra una pre- del 23 %, con cifras del 5 % en las primeras
valencia del 9,6 % de NN adquiridas en UMI, 48 horas de VM, que se eleva hasta el 69 %
y el análisis de regresión logística de sus ca- en los que recibieron VM durante más de 30
sos pone de manifiesto que la VM aumenta días (9). Prod'hom (13) observa que el 45 %
3 veces la posibilidad de presentar neumonía. del total de NAVM aparecen en los primeros
Otros estudios ponen de manifiesto frecuen- 4 días. Cook (14), en una serie de 1.014 pa-
cias aún superiores (8-10). La constatación de cientes con NAVM encuentra que, aunque la
estos datos induce a crear una nueva entidad posibilidad de desarrollar NAVM aumenta con
dentro de la NN, que se denomina neumonía el tiempo, el riesgo diario crece hasta el quinto
asociada a ventilación mecánica o NAVM. día y disminuye posteriormente. En su serie
calcula que la posibilidad de desarrollar NAVM
Si se agrupan los datos de diversas series es del 3 % en los 5 primeros días, del 2 %
publicadas (tabla 1), que miden la frecuencia del día 6 al 10 y del 1 % a partir del día 15;
de aparición de NAVM (10-12), se observan por tanto, una diferencia en el número de días
1.189 casos en un total de 6.572 pacientes que los pacientes estén sometidos a la VM
tratados con VM, que equivale a una fre- puede hacer variar la frecuencia de neumo-
cuencia de 18,1 por cada 100 pacientes ven- nías en las distintas series.
tilados; pero la frecuencia de aparición de
NAVM en las diversas series oscila entre el 5 Los valores predictivos de NAVM en la serie
y 67 %. Para explicar esta diferencia debe de Cook (14) eran: presencia de quemadu-
pensarse que existen factores que hacen di- ras, enfermedades neurológica, respiratorias
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14 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

TABLA 1. Incidencia de NAVM de Chastre

Autor Diagnóstico Año N.º de pacientes Incidencia (%) Total

Salata Clínica, autopsia 1987 51 41 21


Craven Clínica 1986 233 21 49
Langer Clínica 1989 724 23 167
Fagon PSB 1989 567 9 51
Kerver Clínica 1987 39 67 26
Driks Clínica 1987 130 18 24
Torres Clínica, PSB 1990 322 24 77
Baker PSB/LBA 1996 514 5 14
Kollef Clínica 1993 277 16 72
Fagon PSB/LBA 1996 1.118 28 313
Timsit PSB/LBA 1996 387 15 58
Cook Clínica, PSB/BAL 1998 1.014 18 183
Tejada Artigas PSB 2001 103 22 23
Ibrahim Clínico 2001 880 15 132
Rosenthal Clínica 2003 213 15 32
Suma de series 6.572 18,1 1.189

Modificada de referencias 10-12.

y cardiacas, posible aspiración y uso de blo- que la diferencia de aparición de NAVM varía
queantes neuromusculares, con índices de según la gravedad del paciente medida con
riesgo decreciente. Álvarez Lerma (15) encontró APACHE II (fig. 1).

20

15
Puntuación APACHE II

10

0
0-5 6-10 11-15 16-20 21-25 26-30 > 30
Incidencias

1998 1999 2000 2001 2002 Tasa media

Fig. 1. Tasas de NAVM según el nivel de APACHE II. ENVIN 1998-2002 (1.000 días de estancia).
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EPIDEMIOLOGIA DE LA NEUMONÍA ASOCIADA A VENTILACIÓN MECÁNICA 15

20

18
16,61 16,69
15,61 16,01
16
15,25 14,97 15,48
14
14,13
12
Neumonías

10

0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Años

Fig. 2. Neumonías por 100 enfermos ventilados. ENVIN NAVM 1998-2005.

Por tanto, el riesgo de presentar NAVM de- por 1.000 días de VM en los que su ingreso
pende del día de ventilación,
1998 de la enferme-
1999 2000
en la UMI2002
2001 fue secundario
Tasa media a traumatismo (16).
dad que motiva el ingreso en la UMI, de la
gravedad del paciente y de la medicación em- En España, los datos epidemiológicos que se
pleada. Estas circunstancias pueden explicar aproximan con mayor rigurosidad a la realidad
las diferencias encontradas en las diversas se- se han obtenido con el programa ENVIN (15).
ries estudiadas. Para el diagnóstico de NAVM en la serie de
pacientes estudiados, se han empleado los cri-
Ya que la aparición de NAVM se relaciona terios de Garner (17), que son predominan-
con el número de días que el paciente está temente clínicos y radiológicos. La tasa media
en riesgo, la mejor forma de comparar la fre- de NAVM fluctúa entre 14,13 y 16,69 neu-
cuencia de las diversas series es por número monías por cada 100 pacientes ventilados
de NAVM por 1.000 días de ventilación me- (fig. 2). Si se expresan los datos como neu-
cánica. De acuerdo con los datos publicados monías por 1.000 días de VM, la frecuencia
por el National Nosocomial Infections Survei- oscila entre 16,1 y 18,4 (fig. 3). Estas tasas
llance (NNIS), que basa el diagnóstico de neu- varían, cuando se estratifica al paciente en fun-
monía en criterios clínicos, las tasas de NAVM ción de la patología de base, según sea se-
correspondientes al periodo 1992-2000 va- cundaria a enfermedad coronaria, pacientes
riaron, según las características de la pobla- posquirúrgicos, patología médica o lesiones
ción analizada, de 5,2 casos por 1.000 días postraumáticas (fig. 4) y de la gravedad esti-
de VM en pacientes pediátricos a 15,9 casos mada por grados de APACHE II (fig. 1).

MORBILIDAD
Es prácticamente imposible precisar la morbi- rectos, que, a partir de la prolongación de es-
lidad de la NAVM. Sólo existen estudios indi- tancia de la NAVM, permiten hacernos una
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16 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

20
18,4
17,9 17,5 17,2
18 17,1

16
16,8 16,1
15,5
14

12
Neumonías

10

0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Años

Fig. 3. Neumonías1998
por 1.000 días1999
de ventilación2000
mecánica.ENVIN NAVM 1998-2005.
2001 2002 Tasa media

idea. Sin embargo, son trabajos heterogéneos: en los pacientes con NAVM (18-20), puede
unos miden la duración de la VM, mientras encontrarse una prolongación media de VM
que otros informan únicamente del aumento de 6,5 días (tabla 2). Las frecuencias oscilan
de días de estancia en el hospital o en la entre 4,3 en el trabajo de Heyland (19) a 17,8
UMI. Si se analiza el aumento de días de VM en el de Cunnion (20).

20

15
Neumonías

10

0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Años
Coronario Médico Quirúrgico Trauma

Fig. 4. Tasas de NAVM por patologías (1998-2005) (1.000 días de estancia en la UMI).
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EPIDEMIOLOGIA DE LA NEUMONÍA ASOCIADA A VENTILACIÓN MECÁNICA 17

TABLA 2. Prolongación de estancia por NAVM de Safdar

Autor Año N.º de NAVM Prolongación de estancia N.º total de días

Craig 1984 43 7,7 331,1


Kapstein 1992 34 10,1 343.4
Fagon 1993 48 13 624
Baker 1996 29 5,5 159,5
Cunnion (PM) 1996 20 7,7 154
Cunnion (PQ) 1996 20 17,8 356
Papazian 1996 85 8,4 714
Heyland 1999 164 4,3 705,2
Bercault 2001 135 5 675
Rello 2002 816 6,1 4.977,6
Suma de series 1.394 6,5 9.038

PM: enfermos con patología médica. PQ: pacientes con patología quirúrgica. Modificada de Safdar (18).

COSTE
Es, así mismo, muy difícil de precisar. Si nos tes con patología postraumática. De todas for-
fijamos únicamente en el aumento de días de mas, en el trabajo de Erbay el coste de un
hospitalización, el gasto puede ser infravalo- paciente con NAVM era 5 veces superior a
rado. Al coste diario de la estancia en UMI hay los pacientes en los que no se desarrollaba.
que añadir los estudios hematológicos, bio- Asimismo, por la fecha de publicación de es-
químicos, microbiológicos y radiológicos, los tos trabajos, puede verse que los gastos po-
antibióticos utilizados, así como el resto de siblemente estén infravalorados en el mo-
medicación empleada, el material fungible, los mento actual.
catéteres venosos y las sondas que hay que
emplear, los productos de nutrición enteral y
parenteral, las horas de trabajo de médicos, Mortalidad
enfermeras y técnicos sanitarios, la amortiza-
ción de los aparatos y de los respiradores. Los La influencia de la NAVM sobre la mortalidad
estudios de CDC (Centres for Disease Con- de los pacientes ingresados en medicina in-
trol) (21) estiman que un episodio de NAVM tensiva es un problema todavía no resuelto.
añade 5.683 dólares en recursos empleados. Han corrido ríos de tinta, con comunicación
Jarvis (22) estima un coste de 4.947 dólares. de diferentes resultados, y su estudio se ha ca-
Boyce (23), en una serie de 33 pacientes con lificado recientemente como «una historia in-
seguro Medicare que desarrollan NAVM, con- terminable» (28); su contribución a la morta-
cluye que los gastos del hospital exceden a los lidad sigue siendo controvertida (29-31). El
reembolsos, con una pérdida neta de 5.800 dó- principal problema es la duda sobre la causa
lares por caso. Dietrich (24) publica un aumento de la muerte. Cuando el paciente crítico evo-
del costo de 14.600 dólares y Warren (25) de luciona desfavorablemente y presenta un cua-
11.867 dólares. Las cifras más bajas las des- dro clínico sugestivo de NAVM, la duda es si
cribe Erbay (26) en Turquía, con 1.964 dólares ha fallecido de neumonía o con neumonía,
y las más elevadas corresponden a Baker (27) ya que los enfermos presentan niveles de gra-
con 44.000 dólares en una serie de pacien- vedad elevada, edad avanzada o comorbili-
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18 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

dades que motivaron su ingreso en la UMI. babilidad [CP] 0,35; intervalo de confianza [IC];
En estos casos, la mala evolución y el posible 0,29 a 0,41) y el de mortalidad (CP 0,80; IC
desenlace fatal eran previsibles, aunque no hu- 0,69 a 0,93). Nathans (36), en 1999, docu-
biera desarrollado neumonía. Esta duda puede menta asimismo este fenómeno estudiando
que no se resuelva nunca en un enfermo ais- trabajos realizados en pacientes quirúrgicos in-
lado, pero para el estudio del problema que gresados en la UMI.
nos plantea deben emplearse las herramien-
tas que proporciona la MBE. Es obvio que no Los estudios realizados sobre la influencia de
puede realizarse un ensayo aleatorizado en el un tratamiento antibiótico adecuado en la evo-
que se haga enfermar de neumonía a un grupo lución de los pacientes son otra fuente para
de pacientes y a otros no (con el mismo mi- estudiar la mortalidad asociada a la NAVM.
croorganismo y empleando el mismo tipo de Puesto que los casos se incluyen en la misma
antibiótico, ya que los microorganismos cau- serie y se tratan de forma similar, con excep-
santes de la enfermedad y los antibióticos em- ción de los antibióticos empleados, la morta-
pleados pueden modificar la mortalidad de los lidad —si existiera— se debería únicamente
pacientes con NAVM). Por tanto, se han de al microorganismo causante de la neumonía.
utilizar diversos métodos para inferir la in- Esta diferencia fue publicada por primera vez
fluencia de la mortalidad de NAVM en los por Álvarez Lerma (37) en 1996 y posterior-
enfermos. Una línea de evidencia son los aná- mente confirmada en diversas series (38- 42).
lisis de regresión múltiple en estudios de co- La mortalidad atribuible a un tratamiento an-
hortes con un número elevado de casos. En tibiótico erróneo ha oscilado entre el 9 %
una serie de casi 2.000 pacientes, Fagon (32) (tabla 3) en el primer trabajo de Álvarez Lerma
identificaba NAVN como riesgo independiente (37) al 53 % en el de Luna (38).
para la mortalidad. Estos hallazgos fueron con-
firmados por otros investigadores (33, 34), Finalmente, puede valorarse la diferencia de
quienes demostraron que la NAVM tardía in- mortalidad en pacientes con y sin NAVM en
crementa el riesgo de mortalidad, aunque los diferentes estudios publicados. En la lite-
otros autores no han encontrado resultados ratura médica existen múltiples series sobre
similares. NN, pero los que estudian de forma exclusiva
la NAVM son más raros. En una revisión so-
Otra forma de evaluar si la NAVM aumenta el bre trabajos incluidos en Pub-Med publicados
riesgo de mortalidad es mediante estudios alea- desde 1991 hasta la actualidad hemos en-
torizados de prevención, en los cuales una contrado un total de 14 estudios referidos
determinada estrategia se emplea para pre- exclusivamente a NAVM con nivel de eviden-
venir la aparición de NAVM y se controlan el cia II y III con un diseño metodológico ade-
resto de los factores. Si se observa una dis- cuado realizados en UMI polivalentes (tabla 4).
minución de la frecuencia de NAVM y de la Si se suman los pacientes incluidos en estas
mortalidad del grupo en el que se ha em- series (11, 19, 43-52) se obtienen un total de
pleado la prevención, puede inferirse que la 7.778 casos, número suficiente para poder sa-
NAVM contribuye en el riego de muerte del car conclusiones.
grupo total. Para realizar esta aproximación
es necesario llevar a cabo trabajos aleatoriza- La mortalidad bruta de las series oscila entre
dos con un alto número de pacientes, que el 71,4 % de Roshenthal (11) y el 23,7 % de
generen fuerza suficiente para demostrar la Heyland (19). La mortalidad relacionada os-
influencia de esta estrategia. Estas circuns- cila entre el 0,1 % en el trabajo de Rello en
tancias se cumplen en el metaanálisis sobre 2002 (46) hasta el 35,3 % en el de Erbay
la influencia de descontaminación intestinal (26) (tabla 4). Esta diferencia de mortalidad
selectiva, realizado por el SDD Trialists Colla- se debe a los diferentes pacientes incluidos
borative Group (35) en 1998, en el que se re- en las diversas series, a los métodos diagnós-
ducen el riesgo de neumonía (cociente de pro- ticos y a las distintas estrategias empleadas
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EPIDEMIOLOGIA DE LA NEUMONÍA ASOCIADA A VENTILACIÓN MECÁNICA 19

TABLA 3. Mortalidad según tratamiento empírico de la NAVM (37-42)

TEI TEA Mortalidad


Autor Año
Mortalidad bruta (%) Mortalidad bruta (%) relacionada (%)

Álvarez Lerma (37) 1996 25 16 9


Rello (38) 1997 37 16 21
Luna (39) 1997 91 38 53
Kollef (40) 1998 24 8 16
Kollef (41) 1999 42 18 24
Álvarez Lerma (42) 2006 33,3 18,5 14,8

TEI: tratamiento empírico inadecuado. TEA: tratamiento empírico adecuado.

TABLA 4 Mortalidad de la NAVM de las diversas series (11, 12, 26, 43-52)

Mortalidad Mortalidad Mortalidad


Autor Año
con NAVM (%) sin NAVM (%) relacionada (%)

Tejerina (43) 2006 38,1 37,9 0,2


Hugonnet (44) 2004 32 24,7 7,3
Rosenthal (11) 2004 71,4 37,2 34,2
Erbay (26) 2004 70,3 35 35,3
Shukla (45) 2003 50 34 16
Rello (46) 2002 30,5 30,4 0,2
Ibrahim (12) 2001 45,5 32,2 13,3
Bercault (47) 2001 40,7 14,1 26,6
Heyland (19) 1999 23,7 17,9 5,8
Solé Violán (48) 1998 34 17 17
Papazian (49) 1996 40 38,8 1,2
Kollef (50) 1995 39,1 37,4 1,7
Fagon (51) 1993 54,2 27,1 27,1
Rello (52) 1991 42 38 2
Suma de series 2007 36,6 31,2 5,4

para estudiar los casos de NAVM. Si se estu- RR de 1,16 con IC del 95 % entre 1,08 y
dian las diversas series (fig. 5), se encuentra 1,24 con χ2 de 17,74 y p < 0,0001. Por tanto,
que los riesgos relativos (RR) oscilan entre 1,01 se puede inferir con seguridad el efecto ne-
en el trabajo de Rello de 2002 (46) y el 2,89 gativo de la NAVM en la supervivencia de los
en el estudio de Bercault (47), pero sin que pacientes con un aumento de mortalidad y
en ningún caso sean inferiores o iguales a 1, grado de evidencia I. La mortalidad atribuible
lo que habla de la homogeneidad de las se- a NAVM sería la frecuencia de la mortalidad
ries y de la influencia negativa de la NAVM en el conjunto de los pacientes con neumo-
en la mortalidad de los enfermos. En el estu- nía (36,6 %) menos la mortalidad en los pa-
dio conjunto de las diversas series, con un to- cientes sin neumonía (31,2 %), lo que equi-
tal de 7.778 pacientes, se puede calcular un valdría a una mortalidad atribuible del 5,4 %
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20 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

Tejerina 2006 RR 1,01 1,85-1,19

Erbay 2004 RR 2,01 1,34-3,01

Hugonet 2004 RR 1,29 0,82-2,03

Rosenthal 2003 RR 1,92 1,15-3,2

Shukla 2003 RR 1,47 1,2-1,8

Rello 2002 RR 1,01 0,89-1,13

Ibrahim 2001 RR 1,41 1,21-1,75

Bercault 2001 RR 2,9 1,8-4,6

Heyland 1999 RR 1,32 0,87-2,01

Solé Violán 1998 RR 1,6 1,1-2,3

Papazian 1996 RR 1,15 0,85-1,6

Kollef 1995 RR 1,04 0,8-1,4

Fagon 1993 RR 2 1,6-2,5

Rello 1991 RR 1,10 0,75-1,60

TOTAL RR 1,16 1,08-1,24

RR 0,5 1 1,5 2 2,5 3 3,5

Fig. 5 Mortalidad de NAVM. Riesgo relativo (RR) e intervalo de confianza (IC) del 95 %.

(tabla 4) y un índice de intervención de 1 di- Con respecto a las series focalizadas en pa-
vidido entre 0,054, que nos llevaría a la posi- cientes con la misma patología de ingreso en
bilidad de salvar una vida por cada 18,5 neu- la unidad (tabla 5), se observa que la NAVM
monías evitadas con grado de evidencia entre aumenta la mortalidad en pacientes con trau-
I y II. matismo craneoencefálico (53), broncopatía

TABLA 5. Mortalidad relacionada con la NAVM según la patología de base (53-57)

Mortalidad
Con NAVM Sin NAVM
Patología Autor Año relacionada
(%) (%)
(%)
Traumatismo craneal Kallel (53) 2005 29,8 12,3 17,5
EPOC Nseir (54) 2005 64 28 36
Cirugía cardiaca Kollef (55) 1997 23,7 3,2 20,5
SDRA Markowick (56) 2000 57 59 2
Politraumatismo Cavalcanti (57) 2006 23 23 0

EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva crónica. SDRA: síndrome de distrés respiratorio del adulto.
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EPIDEMIOLOGIA DE LA NEUMONÍA ASOCIADA A VENTILACIÓN MECÁNICA 21

crónica obstructiva (54) y en el posoperato- bre pacientes politraumatizados, aunque en


rio de cirugía cardiovascular (55), mientras este último se señala como factor de riesgo
que no tiene efecto en las series con el sín- la falta de respuesta al tratamiento antibió-
drome de distrés respiratorio agudo (SDRA) tico que se emplea para el tratamiento de
(56) o en el estudio de Cavalcanti (57) so- la NAVM.

BROTES EPIDÉMICOS
Se habla de epidemia cuando existen más ca- frecuencia siga estacionaria. El hallazgo de un
sos de una infección determinada de los que agente patógeno que no se encontraba pre-
se habían previsto con los datos anteriores, para viamente en la UMI, como Staphylococcus au-
el mismo lugar y población. Pero para poder reus resistente a la meticilina, Pseudomonas ae-
definir el aumento de casos como secundario ruginosa o Acinetobacter multirresistente, puede
a un brote epidémico es necesario haber defi- ser considerado como un tipo especial de brote
nido la frecuencia de aparición previa, por lo epidémico. La mayoría de las infecciones no-
que una vigilancia continua y constante de la socomiales son endémicas, y sólo se atribuyen
infección es esencial para valorar la presencia a un origen epidémico en el 3,7 % de todos
de dicho brote. De ahí la necesidad de estu- los pacientes que desarrollan infecciones no-
diar siempre nuestras tasas de infecciones y la socomiales (58). Aunque este número es pe-
importancia en nuestro medio del estudio EN- queño, la importancia de los brotes epidémi-
VIN (15). Los brotes epidémicos pueden pre- cos es enorme, ya que suponen casos que
sentarse por una frecuencia inesperadamente podrían haberse evitado que retrasan la recu-
elevada de neumonías o por la presencia de peración de los enfermos y aumentan la mor-
un mismo microorganismo en ellas, aunque la talidad y los costes hospitalarios.

INVESTIGACIÓN DE UN BROTE EPIDÉMICO


La base de la investigación es la comparación datos extraídos deben incluir características
de las características de la población afectada de los enfermos, de la medicación y de los
(casos) con un grupo similar de población no procedimientos que se realizaron, las per-
afectada (controles). Del estudio de los facto- sonas con las que tuvieron contacto, el lu-
res que diferencian estas dos poblaciones, y gar donde estuvieron ingresados, los posi-
mediante una búsqueda casi detectivesca, bles traslados dentro del hospital y el tiempo
puede determinarse el origen del brote. Pero de la infección, que permitirá la realización
este estudio debe realizarse de una forma sis- de una curva epidemiológica.
temática, siguiendo con orden una serie de- 2. Construcción de una hipótesis de trabajo
terminada de pasos: sobre el origen de la infección. Se basa en
la comparación de las características co-
1. Identificación de los casos. Hay que realizar munes y diferenciales de estos dos grupos
una lista de los casos observados. Se debe de población. Los aspectos diferenciales de-
revisar un número suficiente de historias para ben llevar a la formulación de una teoría
conocer las características clinico-epidemio- sobre el origen de la epidemia, que se debe
lógicas y formular una definición de caso fundamentar en la mayor frecuencia de
típico. Posteriormente hay que estudiar un neumonía en los pacientes que han sido
número similar de casos no infectados, para expuestos al factor causante que entre la
poderlos comparar con los anteriores. Los población no expuesta.
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22 NEUMONÍA NOSOCOMIAL EN PACIENTES CRÍTICOS

3. Verificación de la hipótesis. Se fundamenta sibles portadores y, mediante una adecuada


en la toma de muestras. Debe realizarse educación sanitaria, lograr un cuidadoso
siempre después del estudio de los casos lavado de manos y la utilización de me-
y de la formulación de la teoría. Dada la dios de barrera, evitando siempre la reuti-
ausencia de esterilidad en el ambiente de lización de material desechable.
la UMI, la interpretación de los resultados 5. Verificación de la interrupción del brote.
es muy difícil. Se tienen que estudiar los La ausencia de nuevos casos una vez apli-
posibles reservorios y los elementos de la cadas las medidas de control confirma la
cadena de transmisión, incluyendo a los hipótesis del origen del brote. Si a pesar
trabajadores sanitarios que puedan actuar de las medidas de control, continuaran apa-
como portadores. Una vez que se ha iden- reciendo nuevos casos, sería necesario re-
tificado un determinado microorganismo, correr de nuevo los pasos anteriores, en
debe investigarse si se trata de una misma busca de circunstancias y factores que po-
cepa o existen varias implicadas en la in- drían haber escapado al primer análisis. So-
fección. Los métodos tradicionales se ba- lamente la ausencia de nuevos casos per-
san en la caracterización por propiedades mite que se pueda suspender el control
bioquímicas o antibiograma, pero en la epidemiológico y dar por cerrado el brote.
actualidad se deben emplear técnicas de
proteína C reactiva (PCR) para saber si se En la UMI, los orígenes más frecuentes del
trata de la misma cepa. Una vez tomadas brote son:
las muestras, y sin esperar la confirmación
de la hipótesis, hay que revisar cuidadosa- — Presencia de portadores.
mente los procedimientos de limpieza y es- — Material de respiradores contaminado (hu-
terilización de la unidad. midificadores, filtros de los respiradores).
4. Medidas de control. Deben basarse en el — Otros instrumentos habituales (broncosco-
origen y la gravedad de la infección, así pios, fonendoscopios, electrocardiógrafos
como en la experiencia previa de anterio- y aparatos portátiles de radiología).
res brotes epidémicos. Las más eficaces son: — Es raro el origen del foco infeccioso en el
la rigurosa revisión de las medidas de es- agua (Legionella pneumoniae) o transmi-
terilización, la cuidadosa vigilancia del per- tido por el aire acondicionado (Aspergillus
sonal sanitario para el aislamiento de po- sp).

CONCLUSIONES
1. La incidencia de NAVM se sitúa en alrede- 4. En España, la incidencia de NAVM oscila
dor de 18 casos por 100 pacientes venti- entre 14,1 y 16,7 por 100 pacientes intu-
lados (nivel de evidencia I-II). bados (nivel de evidencia I). Si las NAVM
2. Esta frecuencia se ve influida por la pato- se asocian a los días de VM, la tasa oscila
logía del paciente (médica, quirúrgica, co- entre 15,5 y 18,4 casos (nivel de eviden-
ronaria, postraumática o gran quemado), cia I).
por la gravedad inicial del paciente me- 5. Su contribución al aumento de estancia
dida con APACHE II y por la administra- de los enfermos está fuera de duda (nivel
ción de bloqueantes musculares (nivel de de evidencia I).
evidencia II). 6. La prolongación de la VM debida a la apa-
3. La mejor forma de medir la incidencia es rición de neumonía es al menos de 6 días
considerar el número de casos por 1.000 (nivel de evidencia II).
días de ventilación mecánica (nivel de evi- 7. Al prolongar la VM aumenta asimismo el
dencia III). coste sanitario (nivel de evidencia I).
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EPIDEMIOLOGIA DE LA NEUMONÍA ASOCIADA A VENTILACIÓN MECÁNICA 23

8. La NAVM es una enfermedad que aumenta dencia I-II). Hay que esforzarse en prevenir
la mortalidad de los pacientes ingresados esta enfermedad, y el índice de interven-
en las UMI (nivel de evidencia I). ción se sitúa en una vida salvada por cada
9. La mortalidad atribuible a la NAVM varía 18,5 NAVM evitadas.
según la patología de base y puede osci- 11. La mortalidad ocurre de forma preferente
lar entre el 36 % en la EPOC hasta ser en las NAVM en que se emplea un trata-
nula en el SDRA (nivel de evidencia II). miento empírico inadecuado (nivel de evi-
10. Puede pensarse que la mortalidad de la dencia I).
NAVM es de cerca del 5 % (nivel de evi-

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