You are on page 1of 39

El proceso de hominización de la Península Ibérica: Nuevos hallazgos.

Los primeros Homínidos que poblaron la Península Ibérica hace 800.000 años, fueron
los Homo antecesor y sus restos han sido encontrados en la Sierra de Atapuerca
(Burgos). Son los restos humanos más antiguos de Europa Occidental. En ese mismo
lugar se han localizado restos de 32 individuos De Homo Heidelbergensis, de hace
350.000 años. Los restos de Homo Neardenthalensis (45.000 años de antigüedad) son
más abundantes. El Homo Sapiens llegó a Europa hace 40.000 años y quedó como
única especie de homínido tras la desaparición de los neardenthales hace 15.000 años.
Todos estos primeros pobladores de la Península eran nómadas y se dedicaban a la caza,
la pesca y la recolección, tenían una organización social colectiva.

Los pueblos prerromanos

Desde el s.V la Península Ibérica queda dividida en dos zonas culturales, donde vivían
pueblos indígenas. Estos tenían una organización tribal, en ocasiones las tribus estaban
enfrentadas, predomina la economía pastoril y se practica la exvotio ibérica. Estos
pueblos son:
Los celtas que ocupaban el norte, centro y oeste peninsulares, introdujeron el hierro y la
incineración.
Los iberos, situados al sur y oeste peninsular, hablan una variante de lengua
preindoeuropea.
Los griegos dejaron constancia en sus escritos de un pueblo, que se extendía desde
Huelva a Cartagena, llamado Tartessos(s.VII-VI a.C.) con una cultura muy rica y
desarrollada. Se relacionaron con griegos y fenicios.

Las colonizaciones históricas de la Península Ibérica.

Por la costa mediterránea llegan unos pueblos que crean colonias y factorías al este y
sur peninsular, tienen intereses comerciales. Estos pueblos aportan escritura, moneda,
avances en la agricultura y en el arte, y gastronomía.
Los fenicios(s.X-VIII a.C.), provenientes del actual Líbano, ocupan el Mediodía
peninsular y fundan Gadir (Cádiz).
Los griegos(s.VII-VI a.C.) se extienden por la costa oriental, al llegar los cartagineses se
van al norte mediterráneo. Comercian con los Tartessos.
Los cartagineses o púnicos(s.VI-218 a.C.) controlan el sur mediterráneo tras echar a los
griegos. Fundan Ebussum(Ibiza) y Cartago Nova(Cartagena). Expulsados por los
romanos.
Etapas de la conquista de la Península por Roma

La conquista(218-19a.C.) se debe a la guerra contra los cartagineses y se caracterizó por


el desarrollo de la 2ª Guerra Púnica. Tardaron tanto tiempo porque debían ir
conquistando tribu por tribu y hubo periodos de paz. La conquista tuvo dos facetas
distintas, la romanización y la ocupación militar. La conquista se puede dividir en tres
etapas:
En la primera etapa(218-202a.C.) los romanos desembarcan en Ampurias y dominan la
costa mediterránea y los valles del Ebro y del Guadalquivir.
En la segunda etapa(154-133a.C.) se desarrollan las guerras contra los pueblos de la
meseta, lusitanos y celtibéricos. Termina con la ocupación de Numancia en 133a.C.
Por último la tercera etapa(23-19a.C.) se desarrolló en la época de Octavio Augusto se
dominó a las tribus belicosas de cántabros y astures.

El proceso de la romanización: el legado cultural.

La romanización es el proceso por el cual son impuestas las costumbres sociales,


políticos y culturales romanos a los pueblos sometidos a Roma. La Península Ibérica se
integra en el vasto Imperio Romano una vez culminado este proceso. La romanización
es distinta dependiendo de la zona de la Península, en el levante y sur peninsular fue
más intensa que en el resto. Gracias al largo periodo de tiempo que los romanos
estuvieron en la Península, dejaron numerosos restos de su cultura. La lengua, la
religión, el derecho romano, la cultura y el arte forman el legado cultural dejado por los
romanos.

El proceso de la romanización: las obras públicas.

La romanización es el proceso por el cual son impuestas las costumbres sociales,


políticos y culturales romanos a los pueblos sometidos a Roma. La Península Ibérica se
integra en el vasto Imperio Romano una vez culminado este proceso. La romanización
es distinta dependiendo de la zona de la Península, en el levante y sur peninsular fue
más intensa que en el resto. Los romanos eran magníficos ingenieros y sus obras tenían
diferentes usos: espectáculos(teatro de Mérida), equipamiento de las
ciudades(acueducto de Segovia), edificios públicos(senado), calzadas(Vía de la Plata),
monumentos conmemorativos(arco de Medinaceli)...
La monarquía visigoda: las instituciones.

La monarquía visigoda abarca desde el año 507 al 711, con la invasión musulmana y
concibe la Península Ibérica como unidad política por primera vez. La sucesión al trono
se realiza por vía electiva, debido a esto los reyes, aunque tienen poder absoluto, suelen
ser muy débiles, pero hay algunos que hacen notar su poder y son más
fuertes(Leovigildo, Recadero, Chindasvinto, Wamba). El Estado es patrimonio personal
del rey y puede hacer lo que le plazca con las tierras. El ejército no es permanente, cada
noble tiene sus caballeros y el rey los convoca cuando le hace falta. La Iglesia tiene un
gran poder.
La Península Ibérica en la Edad Media: la conquista musulmana y los
pueblos invasores.

La conquista musulmana (711-732) fue tan veloz gracias a las vías romanas, la
tolerancia religiosa, los pactos con los reyes godos y a que solo conquistan las ciudades.
Sin embargo les limita el clima húmedo, la reducción de los conquistadores y el
despoblamiento de las montañas. La Península Ibérica era una zona más de expansión,
venían buscando el botín. Primero entra Tariq, con un contingente y posteriormente
Muza con otro contingente. Los distintos grupos conquistadores son: árabes, sirios y
egipcios, en minoría, y un grupo grande de bereberes con Tariq. Estos últimos se
asientan en la Meseta, mientras que las minorías se quedan con el valle de Ebro y el sur
mediterráneo. Este reparto será elemento de conflictos internos.

La Península Ibérica en la Edad Media: el Emirato y el Califato de


Córdoba.

En sus inicios, Al-Andalus es un emirato independiente de Damasco; hasta que


Abderrahmán I Omeya escapa del asesinato de su familia y crea el Emirato
independiente de Córdoba. Sus objetivos son legitimizar y consolidar el poder, por lo
que crea un ejército. Hay revueltas internas de muladíes(antiguos cristianos) y
mozárabes(cristianos en territorio musulmán); y peligros externos como los normandos,
el Reino de León o los fatimíes del norte de África. Abderrahmán III se proclama
Califa( representante de Alá) para legitimizar su poder frente a los fatimíes, y crea el
Califato de Córdoba. Consigue la pacificación interna y derrota a los cristianos. En la
última etapa Almanzor crea una dictadura militar que tiene en jaque al mundo cristiano.

La crisis del s.XI: los reinos de Taifas.

Los reinos de Taifas son el resultado de la disgregación del Califato, son de extensión
variable y pueden ser de bereberes, muladíes o árabes. Caben destacar Toledo, Málaga y
Sevilla. Tienen relación con los cristianos del norte, a los que pagan parias para evitar
ataques y tener su protección frente a los otros reinos. Se apoyan en los impuestos para
pagar las parias, lo que les debilita más, ya que el pueblo se levanta. Cuando los
cristianos avanzan demasiado, llaman a los pueblos norteafricanos para contenerlos.
Con lo cual habrá invasiones amorávides y almohades alternando con los reinos de
Taifas.
La crisis del s.XI: los imperios norteafricanos.

Los imperios norteafricanos son aquellos a los que acuden los reinos de Taifas cuando
los cristianos avanzan demasiado. Estos pueblos organizan el territorio aunque de forma
efímera. Cuando Alfonso VI DE Castilla ocupa Toledo, los Taifas llaman a los
almorávides hasta la conquista de Zaragoza, cuando se retiran. Tras unas segundas
Taifas, llega la invasión almohade, después de los nuevos avances cristianos. Los
almohades son derrotados en Las Navas de Tolosa en 1212. El territorio musulmán
queda dividido en tres reinos: Murcia, Valencia y Granada.

Al-Andalus: organización económica y social.

El crecimiento demográfico en Al-Andalus fue enorme. La economía era muy


desarrollada basada en una agricultura muy productiva gracias al regadío y a las buenas
tierras, y en un mercado que destaca por el uso de la moneda, el comercio con artículos
de lujo... La sociedad estaba dividida en: clase alta o jassa, grandes comerciantes, amma
o clase trabajadora (burguesía urbana, campesinos, maulas o esclavos liberados) y
siervos. Según las diferencias religiosas, la sociedad podría dividirse en: musulmanes
(árabes, beréberes, muladíes o cristianos convertidos al Islam y esclavos), que tenían
beneficios sociales y políticos; y judíos y mozárabes (cristianos en territorio árabe), que
debían pagar impuestos.
La Península Ibérica en la Edad Media: los primeros núcleos de
resistencia cristiana.

La resistencia cristiana frente al Islam se organiza en dos núcleos: oriental y occidental.


El núcleo occidental se desarrolla más, surge el Reino Astur que se convierte en León al
llegar al Duero. En el s.IX surge el condado de Castilla, dependiente de León y con una
posición defensiva importante. En el s.X Castilla se hace independiente con Fernán
González. Hasta el s.IX no se organiza el núcleo oriental, que estaba bajo dominio
islámico y franco. Al ser expulsados ambos, se forman el Reino de Navarra y el
condado de Aragón. En la parte oriental continúa bajo el dominio franco y Carlomagno
crea la Marca Hispánica. La gran figura de este periodo es Sancho I el Mayor, rey de
Navarra, Aragón, Castilla, Sobrarbe y Ribagorza.

Principales etapas de la reconquista.

La reconquista es el proceso por el cual los cristianos recuperan las tierras perdidas y
restablecen el cristianismo. Las etapas siguen un proceso lento e irregular:
1ª SiglosVIII-X. Es de predominio islámico y se organizan los núcleos de resistencia
cristianos.
2ª Siglos XI-XIII. El avance cristiano es arrollador (Reinos de Taifas, aumento de la
población y el espíritu de Cruzada). Castilla ocupa el valle del Tajo y, junto con
Aragón, los altos ríos del Guadiana, el Turia y el Júcar. El núcleo oriental llega al valle
del Ebro y Cataluña a su desembocadura. En el 1212 los cristianos derrotan a los
almohades en Las Navas de Tolosa y se ocupan dos tercios más dela Península.
3ª Siglos XIV-XV. Fin de la reconquista para Aragón y Portugal. A Castilla le queda
Granada.

La Península Ibérica en la Edad Media: Modelos de repoblación y


organización social de los reinos cristianos.

La repoblación es el asentamiento, defensa militar, puesta en cultivo e integración de la


vida cristiana en las zonas ocupadas. Hasta el s.XI es de forma espontánea, los
campesinos ocupan y roturan la tierra (presura o aprisio). Entre los s.XI y XII los reyes
conceden las Cartas Puebla y se forma ciudades con amplios territorios o alfoces
(repoblación concejil). La población musulmana se va al campo y los cristianos se
quedan en las ciudades. Entre los s.XII y XIII se entregan grandes extensiones de tierra
a las Ordenes Militares y a la nobleza (donadíos). Es el origen de los señoríos que
después serán latifundios. La sociedad se feudaliza y la gran mayoría de hombres entran
al vasallaje ante la nobleza, el alto clero o el monarca. El rey tenía un gran poder por la
necesidad de combatir el Islam.
La Península Ibérica en la Edad Media. Una cultura plural (cristianos,
musulmanes y judíos)

Desde la invasión musulmana (711) hasta la monarquía de los RRCC (s.XV) conviven
en la Península tres culturas distintas: musulmanes, cristianos y judíos. Las tres son
religiones monoteístas y de libro. Los cristiano tienen la mayor pretensión de
universalidad, seguidos por los musulmanes y, por último, los judíos no tienen este
sentimiento. Hay enfrentamientos bélicos fluctuantes entre culturas que alternan con
periodos de convivencia. En el mundo árabe conviven musulmanes, mozárabes y judíos
(en ocasiones perseguidos). En el mundo cristiano conviven mudéjares, cristianos y
judíos, que son perseguidos en el s.XIV como resultado de la crisis.
El mundo musulmán estaba más avanzado, pero en el s.XI se estanca y en los s.XIV y
XV empieza a predominar la España cristiana. Cabe destacarla Escuela de Traductores
de Toledo (Alfonso X).
Organización política e instituciones en la Baja Edad Media: El Reino
de Castilla.

La estructura política de Castilla estaba basada en tres instituciones. La monarquía tenía


carácter autoritario (lucha para que los campesinos dependan de ella). Al unificar
Castilla y León se centró la administración y se creo un derecho general, el Código de
las Partidas con lo que busca una centralización del poder. Alfonso X reforzó la
jurisprudencia real ante los fueros antiguos. Con las Partidas la monarquía podía legislar
sin las Cortes que nacieron porque la burguesía quiso participar en los órganos de
gobierno, era una asamblea formada por nobleza, clero y burguesía. En Castilla tuvieron
carácter consultivo, en ellas se aprobaban los subsidios. Los municipios gozaban de
cierta autonomía y jurisdicción propia. Estaban regidos por cabildos abiertos. Surge la
figura del corregidor (representante real en los municipios).

Organización política e instituciones en la Baja Edad Media: La


corona de Aragón.

La estructura política de Aragón (formado por los Reinos de Valencia, Cataluña y


Aragón), estaba basada en tres instituciones. La monarquía que emana del pactismo, los
nobles sometía al monarca a través de las Cortes, una para cada reino, votaban los
impuestos. Pedro III dotó a la Cortes de función legislativa(las leyes son de común
acuerdo). El derecho y las costumbres se fijan en un código(Ustages), las normas
tradicionales medievales se recogen en los fueros(interior de Valencia) o furs(levante).
Los municipios gozaban de cierta autonomía y jurisdicción propia, estaban regidos por
cabildos abiertos. El Consejo de los Ciento en Barcelona fue un ejemplo de
institucionalización.

La Baja Edad Media: Crisis demográfica, económica y política.

La primera mitad del s.XIV se caracterizó por una sucesión de malas cosechas, por los
métodos agrícolas rudimentarios y la mala climatología, que provocó un periodo de
hambre. Esto unido a la Peste Negra haría descender vertiginosamente la demografía de
los reinos cristianos, sobretodo de Cataluña, dejando casa y terrenos despoblados. Todo
esto creó un malestar social que provocó revueltas por el fin de los señoríos. En
Cataluña hubo una movilización general(conflicto remensa) y en Castilla se orinaron
pequeños levantamientos(irmandiños). El malestar social llegó a las ciudades dónde se
culpaba alas minorías u oligarquías municipales(judíos) de los males que les acechaban.
La baja Edad Media: La expansión de la corona de Aragón en el
Mediterráneo.

A mediados del s.XIII la Corona de Aragón ha terminado la reconquista, tenía un gran


desarrollo económico y comercial que se culmina con una ocupación política por el
Mediterráneo. Pedro III conquista Sicilia(s.XIII) en las vísperas
sicilianas(levantamiento siciliano contra los franceses) alegando la defensa de Sicilia.
Así Aragón se busca la enemistad de Francia(intenta ocupar Cataluña) y el Papado
excomulga a Pedro III. Cataluña consigue que el Papado le reconozca la soberanía sobre
Córcega y Cerdeña(s.XIV). En este mismo siglo hacen una expedición(almogárabes
dirigidos por Roger de la Flor) para ayudar a los bizantinos contra los turcos y ocupan
los ducados de Atenas y Neopatria. Nápoles es ocupada a principios del s.XV, con lo
que se culmina la expansión de Aragón en el Mediterráneo.
Los Reyes Católicos: La unión dinástica.

El matrimonoio entre Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón(1469) supone una


nueva entidad política: la monarquía hispánica. Sólo fue una unión personal. Cada uno
era rey en su reino, esto recibe el nombre de doble monarquía. A la muerte de Isabel,
Fernando se convierte en regente de Castilla. Fue una unión muy desigual, ya que
Castilla era muy poderosa y Aragón estaba en decadencia por el avance otomano y la
Peste Negra. Los RRCC se propusieron crear una unidad peninsular alrededor de
Castilla, por eso se anexiona Navarra y Granada. Se tomó la monarquía autoritaria( de
Castilla) como política interna y la política de Aragón en el Mediterráneo.

Los Reyes Católicos: la conquista del Reino Nazarí.

Desde su matrimonio una de las metas de los RRCC había sido la conquista de Ganada,
para completar la reconquista de Castilla. Se ofrecieron gracias a los que participaran en
este proyecto, que duró 10 años. Fue presentada por Fernando como una cruzada contra
los infieles islámicos que fue apoyada por la nobleza y el clero. En 1492 se consigue la
Capitulación de Granada y se les promete la conservación de su religión, con la
esperanza de que con el contacto acaben convirtiéndose. Ante los escasos resultados,
obligan a los musulmanes a bautizarse apareciendo los moriscos(árabes bautizados).
Finalmente fueron expulsados en 1502.

La organización del estado bajo los RRCC: instituciones de gobierno.

Los RRCC pretendieron crear una monarquía autoritaria que se impusiera sobre las
fuerzas que habían hecho disminuir su poder en la Edad Media(clero y nobleza). Una
figura importante es la del corregidor en Castilla y el virrey en Aragón( uno en cada
reino), representantes locales del rey. Estas funciones se complementaban con el
Consejo Real de Castilla (asesoría), los secretarios y otros Consejos como el de Aragón,
el de Navarra, el de la Inquisición y el de las Ordenes Militares. En 1480 se crean la
Administración de Justicia y la Chancillería y se reorganizan las Audiencias.
La proyección exterior bajo los RRCC: Política italiana y
norteafricana.

Durante el reinado de los RRCC se consolidaron las bases del vasto imperio español del
s XVI. En el mediterráneo se toma la política de Aragón y destaca la habilidad de
Fernando. En Italia se continúa con la misma línea que en el s XIII. Aprovechan un
momento bajo para entrar y enfrentarse allí con Francia, enemigo secular de Aragón.
La política en el norte de África es más castellana, Isabel se dedica a intentar evitar que
los musulmanes entren de nuevo por Gibraltar. Para ello se crean plazas fuertes de
defensa contra los turcos en el norte de África, como Trípoli, Argel, Túnez, Melilla...

El descubrimiento de América.

Cristóbal Colón estaba buscando una nueva ruta para llegar a la India. Tras la negativa
de la monarquía portuguesa, los RRCC Se interesaron por este proyecto. Después de
firmar las Capitulaciones de Santa Fe, entre los RRCC y Colón, y conseguir la
financiación, salieron tres barcos de Palos(Huelva). Tocaron tierra el 12 de octubre de
1492 y se dieron cuenta de que no era la India, sino unas nuevas tierras. Se hicieron
diversas expediciones para conquistar este Nuevo Mundo. Destacan los conquistadores
Hernán Cortés(conquista la civilización azteca) y Francisco Pizarro(conquista el
Imperio Inca).
El Imperio de Carlos V: Conflictos internos. Comunidades y
Germanías.

Las Comunidades son revueltas, situadas en Castilla, de hidalgos y clases medias


urbanas(ciudades) contra la política imperial de Carlos V. Los comuneros reclamaban
protección de la industria nacional, respeto a las leyes de reino y mayor participación
política. Se produjeron también revueltas campesinas antiseñoriales. Adriano de
Utrecht(regente) con ayuda de la monarquía y de la nobleza terrateniente los derrota en
Villalar en 1521.Las Germanías eran revueltas de artesanos, pequeños burgueses y
campesinos(movimiento social) contra la oligarquía ciudadana, la nobleza y el alto clero
en la Corona de Aragón. Pedían democratización de los cargos municipales y mejora de
los arrendamientos campesinos. Llegaron a tomar Valencia, pero Carlos V, aliado con la
nobleza, los vence en 1521.

La monarquía hispánica de Felipe II.


Cuando el emperador Carlos V abdica, Felipe II, su hijo, hereda la parte española y
borgoñona del Imperio. Ya no recibe el título de emperador, aunque España seguía
siendo la primera potencia europea. A Europa ha legado una nueva oleada de
protestantismo y Felipe II lucha contra ella en Inglaterra, donde es derrotado; y en
Francia donde vence. Los Países Bajos no querían ser gobernados por España, además
hay una división entre el norte protestante y el sur católico. El norte continúa en
conflicto tras la muerte de Felipe II. En el interior del país había problemas con los
moriscos, que protagonizaron una insurrección en las Alpujarras. Antonio Pérez,
secretario de Felipe II, fue acusado de asesinato y se refugió en Aragón, donde provoca
disturbios hasta que Felipe manda su ejército.

La España del siglo XVI: La unidad ibérica.

Durante el reinado de Felipe II la monarquía española pasa por un momento de


esplendor, es la primera potencia europea. Esta situación mejora con la anexión de
Portugal. En 1580 el rey Sebastián de Portugal muere sin descendencia, habiendo dos
aspirantes al trono. Estos son Antonio, prior de Crato, hijo bastardo; y Felipe II por su
madre, Isabel de Portugal. Tras una pequeña guerra civil, ganada por el duque de Alba,
Felipe es coronado como rey de Portugal en las cortes de Thomar, prometiendo respetar
las leyes portuguesas. A la par que Portugal se anexiona al reino español, Brasil, las
Molucas, y parte de la India y África. Dado que Portugal ya estaba consolidada como
nación independiente, esta unión solo dura hasta 1640.
La España del siglo XVI: El modelo político de los Austrias.

La etapa de los Austrias Mayores es la época de mayor esplendor de España. Es iniciada


por Carlos V, su hijo, Felipe II hereda todo el territorio a excepción de Alemania. El
único punto en común que tienen todos los estados del Imperio es el monarca, cada uno
tiene sus propias normas y costumbres. El centro del Imperio está en Castilla. Felipe II
traslada la capital de Valladolid a Madrid, donde se hace permanente. Esta
centralización da una gran estabilidad al Imperio. Este tipo de estado, llamado
polisinovial, se apoya en los virreyes, delegados que el monarca tiene en cada reino; y
en los consejos, que eran unidades administrativas de carácter consultivo. Destacan el
Consejo de Castilla y el Consejo de la Inquisición(común para todo el Imperio).

El Renacimiento en España.
El Renacimiento es una consecuencia de l humanismo, con él, las culturas griega y
latina se transforman en referencias obligadas. Se desarrollan ampliamente el
pensamiento y las artes, favorecidas por las clases privilegiadas. Entre los humanistas
cabe destacar a Luis Vives, Antonio de Nebrija y el cardenal Cisneros(Biblia políglota y
Universidad de Alcalá) Se realizaron importantes estudios sobre geografía, cartografía y
navegación. En literatura se inicia una época dorada(Lazarillo de Tormes y la poesía de
Garcilaso). En arquitectura destaca el estilo herreriano(El Escorial), que ha sido
precedido por otros estilos como el plateresco y el renacentista purista. En escultura se
impone la influencia italiana; y en pintura hay que destacar a El Greco.
La España de los Austrias menores: Los validos.

Con los Austrias menores(s. XVII), Felipe III, Felipe IV y Carlos II, llega la decadencia
de España debido a la falta de personalidad de los reyes y a que todo el dinero de
América iba destinado al Imperio. La falta de personalidad de los reyes se refleja en la
figura de los validos, que son quienes toman las decisiones del gobierno aunque no son
figuras institucionales. Pertenecen a la nobleza y son amigos personales del rey. El
pueblo y la mayoría de la nobleza no les soportaba, pero tenían sus apoyos entre amigos
y familia. Los validos más destacados son El duque de Lerma(Felipe III) y el conde-
duque de Olivares que intentó formar la Unión de Armas e hizo frente a la guerra de los
Treinta Años.

La España de los Austrias menores: Conflictos internos.

Con los Austrias menores(s. XVII), Felipe III, Felipe IV y Carlos II, llega la decadencia
de España debido a la falta de personalidad de los reyes y a que todo el dinero de
América iba destinado al Imperio. En esta época los moriscos no eran demasiado
aceptados a causa de sus costumbres y como se temía que estuvieran en contacto con los
turcos, el duque de Lerma(Felipe III) decretó su expulsión en 1609. El hecho de que
Castilla soporte el peso del Imperio, supone la sangría de hombres y dinero, se inicia la
decadencia. Se manifiesta en la organización de Estado polisinovial, que presupone la
desconexión de los distintos reinos que lo forman. El conde-duque de Olivares pretende
reformarlo, de sus proyectos destaca la Unión de Armas(ejército permanente), que
fracasará y será el mayor exponente de la crisis de 1640.

La crisis de 1640

El conde-duque de Olivares fue una figura política muy relacionada con la crisis. Este
valido de Felipe IV, pretendió regresar al esplendor de Felipe II. Para ello puso en
marcha la Unión de Armas, en la que todos los reinos debían aportar hombres y dinero,
sin valorar la riqueza o población. Esto creó un gran descontento en Cataluña que
desembocó en una rebelión. Esta culmina con el Corpus de Sangre de Barcelona en
1640. Cataluña buscó el apoyo de Francia. Finalmente, Barcelona se rinde al ejército
real en 1652. También en 1640, Portugal proclamó rey al duque de Braganza, ya que
Castilla tenía el propósito de asimilarlo a ella. La situación de guerra dura hasta 1652,
cuando Portugal es declarada independiente. Por esas mismas fechas hubo alteraciones
en Andalucía y el País Vasco.
La España de los Austrias menores: La política exterior. El ocaso de la
hegemonía de los Habsburgo.

Con los Austrias menores(s.XVII) llega la decadencia de España, a causa de la falta de


personalidad de los reyes y a que todo el dinero de América iba destinado al
mantenimiento del Imperio. El siglo se inicia con un periodo pacifista ya que no hay
recursos para la guerra. Felipe III firma la paz de los Doce Años con Holanda. Con
Felipe IV, España se mete de lleno en la guerra de los Treinta Años en defensa de los
Habsburgo contra Francia y Alemania. Además España tiene otros dos frentes, uno en
Holanda y otro en Flandes, en ambos el enemigo es Francia. Este periodo de guerras
acaba con la paz de Westfalia, España pierde Holanda. Se prolonga la guerra con
Francia, que tiene problemas internos, hasta 1659(paz de los Pirineos) cuando se pierde
el Rosellón y la Cerdaña. El ocaso llega con Carlos II, al perderse territorios en Francia.

Evolución económica y social en el siglo XVII

El siglo XVII se caracterizó por una crisis demográfica, que disminuyó la población de
los reinos hispánicos. Esto fue causado por la migración a América, las guerras, la
expulsión de los moriscos, las epidemias y las malas cosechas(cambios climáticos). A
todo esto hay que unirle una decadencia económica. La agricultura empeoró,
quedándose despoblados los núcleos rurales, la ganadería se vió afectada(problemas de
exportación de lana), se redujo la actividad artesanal y desciende la llegada de plata
americana. Como consecuencia se produjo la bancarrota de las finanzas estatales. Como
último recurso se comenzó a emitir masiva y continuamente una moneda de mala
calidad, el vellón. La sociedad es estamental, habiendo tres clases sociales cerradas:
nobleza, clero(alto y bajo) y pueblo o tercer estado, que era el más numeroso.

Mentalidad y cultura en el Siglo de Oro.

La cultura española del Siglo de Oro tuvo unos rasgos muy acusados: estaba
íntimamente ligada a la defensa del catolicismo(buena parte de los escritores y
pensadores pertenecen al clero); y el esplendor cultural coincidió con la decadencia
política y socioeconómica. Los teólogos españoles(Francisco Suárez y Melchor Cano)
fueron los artífices del pensamiento de la Contrarreforma. En este siglo destaca la
ausencia de la ciencia española. Respecto a la literatura; la novela está representada por
Cervantes y la novela picaresca, la poesía por Góngora, Quevedo y Gracián; y el teatro
por Lope de Vega, Tirso de Molina y Calderón de la Barca.
La guerra de Sucesión y el sistema de Utrecht.

En 1700 muere Carlos II, último Austria, sin descendencia directa. Los candidatos a
ocupar el trono eran Felipe d’Anjou nieto de Maria Teresa de Austria, designado por
testamento y proclamado rey en 1701; y el archiduque Carlos de Habsburgo. En Europa
se temía la unión de España y Francia. Todo esto provoca una guerra civil en España, ya
que Castilla apoya a Felipe V y Cataluña al candidato austriaco. La guerra se desarrolló
en Italia, Alemania, Flandes y España. Dentro de España, al principio, la guerra es
desfavorable a los Borbones, mientras el archiduque se proclama rey de Valencia y
Gran Bretaña ocupa Gibraltar y Menorca. Con la muerte de José I de Austria, Carlos se
convierte en emperador, y las derrotas borbónicas en Europa, hacen que se firma la paz.
Los tratados de Utrecht reconocen a Felipe V como rey, además se liquida el Imperio
español de Europa y Gran Bretaña obtiene grandes ventajas en el comercio americano.

El cambio dinástico del siglo XVIII: Las reformas internas.

España entra en el siglo XVIII despojada de su Imperio, pero realiza grandes esfuerzos
por adecuarse al progreso general de Europa. Aunque las reformas no llegaron a
transformar sustancialmente el sistema productivo ni cambiar las viejas estructuras
estamentales, España consigue una recuperación general de la crisis del s. XVII. Los
Borbones y sus ministros se afanaron por fortalecer el poder real. Algunos de los
cambios llevados a cabo fueron: los Decretos de Nueva Planta(abolición de los Fueros
de Aragón, para conseguir la centralización); la reforma de la Hacienda, creando el
Banco de San Carlos(futuro Banco de España); en la Administración Central aparecen
cuatro Secretarías con la función de los antiguos Consejos(Guerra; Marina e Indias;
Estado; y Justicia), se crea la Junta Suprema de Estado(Consejo de Estado) y se
establece la ley sálica( las mujeres no podían heredar el trono).

La práctica del despotismo ilustrado: Carlos III.

El despotismo ilustrado es la concepción política de los monarcas absolutistas por la


cual dan al pueblo felicidad y progreso sin contar con él. El mayor representante en
España fue Carlos II que se apoyaba en los ministros Campomanes, Floridablanca,
Jovellanos... Se realizaron reformas económicas en agricultura, en industria y en el
comercio. Carlos III refuerza el poder real frente al de la Iglesia, según esta política se
lleva a cabo la expulsión de los jesuitas(se les hacía responsables del motín de
Esquilache) y el control de la Inquisición. La educación se concibe como un servicio
público y, de esta manera, los ilustrados intentan arrebatarla de las manos de los
jesuitas; se funda los Reales Estudios de San Isidro de Madrid, se reforma la
universidad y los Estudios Mayores. La cultura se impulsa fundando Academias y
propagando el periodismo; además se fundan las Sociedades Económicas de Amigos del
País. Las elites conservadoras y las masas populares reaccionan
contrariamente(dirigidas por el púlpito); demostración de ello fue El motín de
Esquilache.

La evolución de política exterior española en Europa durante el siglo


XVIII

Durante el siglo XVIII en Europa se busca el equilibrio. Francia e Inglaterra(en el mar)


son las dos máximas potencias europeas y se encuentran enfrentadas. España ha perdido
primacía, aunque sigue siendo importante a causa de su imperio americano. Durante la
época de Felipe V se intenta recuperar los territorios en Italia, y más tarde se alía con
Francia(Pactos de Familia) para defender su flota frente a los ingleses. Con Fernando VI
se lleva una política de neutralidad, que favoreció el predominio ingles en el Atlántico;
el marqués de la Ensenada reestructura la flota. Durante el reinado de Carlos III España
entra en la Guerra de los Siete Años e interviene en la independencia de EEUU a favor
de los insurrectos. La época de Carlos IV coincide con el estallido de la Revolución
Francesa. En principio se lucha contra la Francia revolucionaria, hasta la paz de Basilea
que se alían Francia y España contra Inglaterra.

La Ilustración en España

La Ilustración es una corriente de pensamiento nacida en Francia durante el siglo XVIII


que critica el modelo económico-político y económico del antiguo Régimen.. Llega a
España con varios decenios de retraso, a su llegada se compatibiliza con la tradición
española cristiana. Los pensadores ilustrados españoles son: Feijoo(Felipe V),
Mayano(Fernando VI); la plenitud llega con Carlos III, mientras que en la época de
Carlos IV se le pone freno. Las tendencias antiilustradas se encuentran entre las elites
conservadoras y las masas populares, guiadas por el púlpito y la Inquisición. Bajo
Carlos III se consolidan dos tendencias, los reformistas(borbónicos) y los
tradicionalistas(austracistas). Al final la gran masa del país triunfó sobre la minoría
reformista, el choque se producirá por la invasión napoleónica.
La crisis de 1808: Guerra de Independencia y revolución
política.

En 1808, en Francia se ha producido la revolución Francesa y en este año Napoleón


Bonaparte ya se ha autoproclamado emperador. Este hecho tendrá gran importancia para
la historia de España.
En 1807, con Godoy al frente, se había firmado el tratado de Fontainebleau con Francia;
mediante el cual los dos países se unían para apoderarse de Portugal y hacer efectivo el
bloqueo continental contra Inglaterra. En febrero de 1808 entran las tropas francesas en
España.
Mientras, el príncipe Fernando planea una conspiración contra Carlos IV y Godoy, esta
prosigue con éxito en el motín de Aranjuez en marzo de 1808. Como consecuencia de
este motín Carlos IV abdica y Napoleón convence a Fernando VI de que devuelva el
trono a su padre y que este se lo entregue a él. José I Bonaparte, hermano de Napoleón,
se pone al frente de España.
Napoleón quiere redactar una Carta Otorgada en Bayona, pero inesperadamente el
pueblo español se levanta en Madrid el 2 de mayo. El levantamiento se extiende por
todo el país. Debido al vacío de poder dejado por la familia real al marcharse a Bayona,
el pueblo ha de organizarse política y militarmente. Para dirigir el país se forman las
Juntas.
Se produce en España un levantamiento antifrancés nacional, una revolución y una
guerra contra la invasión. La guerra es nacional y popular en defensa de su Dios, su
patria y su rey; entre afrancesados (aceptan las abdicaciones de Bayona y a José I por
cuestiones ideológicas) y patriotas (son la mayoría, no admiten los hechos ya citados); y
la europea en la que España es el escenario. España como nación intentará hacer un
ensayo de régimen liberal (por una minoría ilustrada sin apoyo popular) para llenar el
vacío de poder; esto se realiza mediante una revolución.
Napoleón tiene tres puntos de ocupación vitales: Vitoria, para entrar; Madrid, para
ocupar Andalucía; y Barcelona, por el valle del Ebro. Abandona la ocupación de los
campos y sólo controlará las ciudades. Parte las tropas en divisiones con gran acción
ofensiva, gran movilidad y muy organizado. Envía distintos generales para cada zona de
ocupación como Murat, Suchet, Massena y Junot, Soult…, pero el levantamiento del
pueblo español desbarata los planes de Napoleón.
Existen tres formas de guerra en España: el ejército regular, urbana(los lugares sitiados
luchan hasta la muerte) y rural (mediante guerrillas).
La derrota francesa es provocada por la resistencia de los españoles, el apoyo inglés, la
geografía peninsular que permite la guerrilla y la no ocupación total, y la campaña de
Napoleón en Rusia.
Además se produce una revolución política. Las Juntas se van formando a nivel
provincial y van tomando decisiones políticas; en el verano de 1808 se organizan en una
Junta Suprema Central, que coordina alas demás. Esta se transformará mas tarde en un
Consejo de Regencia (1810) que convoca las Cortes de Cádiz.
Al finalizar la guerra España vive una situación de crisis. La población se ha diezmado a
causa de las epidemias, el hambre y la guerra. Hay un gran desastre económico, en
agricultura, en industria, la Hacienda está endeudada y se cierra el mercado colonial.
España pierde poder en Europa y se inicia el proceso de Independencia de América.

Las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812.


En 1808, en Francia se ha producido la revolución Francesa y en este año Napoleón
Bonaparte ya se ha autoproclamado emperador. Este hecho tendrá gran importancia para
la historia de España.
Se produce en España un levantamiento antifrancés nacional, una revolución y una
guerra contra la invasión. La guerra es nacional y popular en defensa de su Dios, su
patria y su rey; entre afrancesados (aceptan las abdicaciones de Bayona y a José I por
cuestiones ideológicas) y patriotas (son la mayoría, no admiten los hechos ya citados); y
la europea en la que España es el escenario. España como nación intentará hacer un
ensayo de régimen liberal (por una minoría ilustrada sin apoyo popular) para llenar el
vacío de poder; esto se realiza mediante una revolución.
Además se produce una revolución política. Las Juntas se van formando a nivel
provincial y van tomando decisiones políticas; en el verano de 1808 se organizan en una
Junta Suprema Central, que coordina alas demás. Esta se transformará mas tarde en un
Consejo de Regencia (1810) que convoca las Cortes de Cádiz. Se realiza en esta ciudad
porque estaba defendida por los ingleses y no dominada por los franceses.
En Cádiz surgen diversas posturas de los diputados: los liberales que representaban a la
revolución y pretendían eliminar el Antiguo Régimen (Argüelles, Toreno, Muñoz
Torreno…); los conservadores (formado principalmente por el clero); y reformistas. Las
cortes se formaron para formar una Constitución y el diseño de un nuevo modelo de
Estado.
Las Cortes de Cádiz redactan numerosos decretos en defensa de la libertad, destinados a
eliminar las trabas de Antiguo Régimen como la desamortización (abolición de los
señoríos), la abolición de la Inquisición, supresión de las diferencias jurídicas
territoriales (abolición de Fueros en Navarra, el País Vasco...). La situación de guerra
impidió la efectiva aplicación de lo legislado en Cádiz.
Muchos diputados no pueden acudir a las Cortes y los suplentes son de Cádiz. Todos los
diputados se ponen de acuerdo en representar a la nación, esto es una novedad,
anteriormente representaban a los estamentos. Se establece un estado liberal-burgués.
Los rasgos de la Constitución de 1812 son: el hecho de ser progresista supone el
asentamiento jurídico e histórico de los principios de la Revolución Francesa como la
división de poderes, el mandato representativo y la soberanía nacional, se adapta a la
situación peninsular del momento. De esta manera se conservan varios rasgos
tradicionales como el Estado confesional. Además era muy rígida, es decir, de difícil
modificación; y la más extensa de la historia española, ya que debía comenzar el Estado
liberal desde cero.
Fue una constitución modélica, tanto para España como para Europa en general. Todas
las demás Constituciones españolas posteriores están construidas sobre esta primera. En
Europa, sobre todo en Italia, fue modelo liberal de otras Constituciones, principalmente
en los años 20.
Fernando VII: Absolutismo y liberalismo. La emancipación
de la América española.
En el año 1812, tras la gran derrota de Arapiles, Napoleón devuelve el trono a Fernando
VII. El reinado de este, que dura hasta su muerte en 1833, se divide en tres etapas, que
son:
-Una primera etapa en la que se regresa al absolutismo. Al llegar Fernando VII a España
los liberales le hacen un recorrido para que llegue cuanto antes a Madrid y firme la
Constitución de 1812. Pero el rey se da cuenta de que tiene apoyos suficientes para
restaurar el absolutismo borbónico. Estos apoyos eran de los diputados, mediante el
Manifiesto de los Persas, y de los militares. Este hecho le lleva firmar el Decreto de
Valencia, por el cual anula la Constitución y restaura el Antiguo Régimen. Todos los
gobiernos de esta época fracasan, ya que hay que reconstruir un país devastado por la
guerra. La oposición a este sistema se manifestó en la burguesía liberal, en las clases
medias urbanas y parte del campesinado. El coronel Rafael Riego se subleva en 1820
hasta que consigue que Fernando VII se convierta en un monarca constitucional,
comenzando la segunda etapa.
-Trienio liberal: mediante un decreto, Fernando VII transforma el Estado en liberal,
restaurando la Constitución de 1812. Se pretendía acabar con el feudalismo del campo,
liberalizar la industria y el comercio, modernizar la política y la administración, se creó
la Milicia Nacional para garantizar el orden y defender las reformas constitucionales.
Pronto se vio la oposición de la monarquía, apoyada por el clero, la nobleza tradicional
y los campesinos (que querían conservar la protección de los señores). Todo esto dio
lugar a la división de los liberales en moderados y exaltados. Fernando VII hace uso del
derecho a veto que le proporciona la Constitución en numerosas ocasiones. Hasta que
en 1823 entran en España los Cien Mil Hijos de San Luís enviados por la Santa Alianza
que reponen a Fernando VII como monarca absolutista. Así comienza la tercera etapa.
-Década ominosa: una vez repuesto como monarca absolutista, Fernando VII hará una
feroz represión contra los liberales. Pero tendrá que ir acercándose a los burgueses
moderados de Madrid debido a los problemas económicos. De esta forma este
absolutismo, tenderá más hacia los sectores moderados que el de la primera etapa.
Tras al muerte de Fernando VII habrá grandes problemas por la sucesión al trono. Por
herencia debería ser para su hija Isabel, pero los conservadores querían que el nuevo
monarca fuera Carlos María Isidro. El problema era que Fernando VII había derogado
la Ley Salica antes de morir.
Durante el reinado de Fernando VII aparece otro problema: la Independencia de
América. Los criollos (españoles nacidos en América) tuvieron las primeras ideas de
emancipación. No querían continuar con el pacto colonial, ya que no tenían libertad de
comercio. Estas ideas fueron extendiéndose por todos los territorios americanos,
azuzadas por Gran Bretaña. La derrota de Ayacucho fue el hecho que marcó el fin de la
presencia española en América. Dos personajes importantes que propiciaron la
independencia americana fueron Simón Bolívar y José San Martín.
La oposición al sistema liberal: Las guerras carlistas. La
cuestión foral.
Tras al muerte de Fernando VII habrá grandes problemas por la sucesión al trono. Por
herencia debería ser para su hija Isabel, pero los conservadores querían que el nuevo
monarca fuera Carlos María Isidro. El problema era que Fernando VII había derogado
la Ley Sálica antes de morir. Los absolutistas que apoyan a Carlos se llamarán carlistas.
Dado que Isabel es una niña de tres años comienza un periodo de regencias, primero su
madre, María Cristina; y, posteriormente, Espartero. La reina María Cristina se ve
obligada a aliarse con los liberales, para ello firma un Estatuto Real.
En este momento, surge la primera guerra carlista, entre carlistas e isabelinos (liberales).
Los carlistas alegan una cuestión dinástica que encierra una cuestión ideológica.
Defienden el catolicismo inquisitorial y atacan a la monarquía constitucional y los
cambios de la revolución liberal. Eran apoyados por las zonas de campo del norte
peninsular (aún conservaban fueron que el liberalismo pretendía abolir), parte de la
aristocracia y el bajo clero. Algunos de sus militares son Zumalacarregui, Cabrera,
Maroto…
Todas las ciudades eran liberales, ya que los burgueses lo eran, al igual que las clases
medias ilustradas. Su militar más importante fue Espartero.
El conflicto estuvo caracterizado por la violencia y la crueldad. La gente que va a la
guerra son pobres, por el sistema de Quintas. El ejército estaba dividido y la gran
mayoría era liberal, aunque se forman partidas carlistas muy grandes. La guerra termina
con el abrazo de Vergara entre Maroto y Espartero. Los carlistas entregan las armas y
sus militares son aceptados en el ejército liberal conservando su graduación.
Además de esta hay otras dos guerras carlistas, pero no tienen tanta importancia como
esta.
La diferencia entre derecho común y foral proviene, en sus orígenes históricos más
remotos, de la inicial distinción entre el derecho romano y los fueros municipales y usos
de cada comarca, que tenían preferencia sobre el derecho romano.
Esta situación disgregadora en el campo del derecho, sólo será remediada y no de una
manera total en Castilla cuyo derecho había evolucionado mejor que el resto de los
derechos peninsulares. Así la aplicación de los derechos forales se mantendrá en Aragón
(1711), en Baleares (1715) en Cataluña (1716), no así en Valencia, donde fueron
derogados. Los casos vasco y navarro son distintos, ya que no es hasta el Convenio de
Vergara, en 1839, por el que finaliza la primera guerra carlista, cuando pierden su
potestad legislativa propia, manteniendo únicamente Navarra y el País Vasco sus leyes
forales.
Cuando en 1851 se vislumbra la posibilidad de promulgar un único Código Civil en
España, dicho proyecto fracasa por que las propuestas del proyecto isabelino no hacían
más que exacerbar a los foralistas al pretender hacer tabla rasa de sus derechos.
Este problema permanecerá hasta final de siglo, ya que la burguesía industrial pretendía
abrir el mercado interior de España y un cierre proteccionista respecto a los grandes
Estados industriales, esto se enfrentaba con la defensa foral. Ya en 1889 se parte de la
persistencia de esos derechos forales y de su mantenimiento. Una vez aprobado el
Código Civil éste se aplicará a la mayor parte del territorio nacional mientras que, en los
territorios forales, regirán las disposiciones civiles propias.

Isabel II: La organización del régimen liberal.


El régimen isabelino supone en España el triunfo del liberalismo, que se afianza en lo
social, lo económico y lo político. Es un periodo de grandes transformaciones.
El régimen liberal está basado en tres instituciones: la Corona, los partidos políticos y el
ejército. En ocasiones estas tres instituciones están enfrentadas, pero se unen ante
peligros externos.
La corona está limitada en sus funciones por la Constitución. Su papel es de moderador
entre el poder legislativo y el ejecutivo, ya que tiene capacidad para disolver las Cortes
para que concuerde con el gobierno de se momento. Tiene derecho a veto, a la elección
de ministros y, por tanto, a los partidos políticos que gobiernan. Esto debilita mucho a la
Corona ya que si las cosas van mal la culpa será suya. Isabel II se dejará llevar mucho
por las camarillas y en el poder estarán casi siempre los moderados.
Como la monarquía no es absoluta, nacen los partidos políticos. Parte de estos partidos
son los que están con la reina, son los llamados partidos dinásticos. Estos son los
liberales que se dividen en moderados (Narváez) y progresistas (Espartero y Prim).
Estos liberales que apoyan a la reina divergen en la interpretación de los postulados
liberales.
A la izquierda del poder se encuentran los demócratas, que son una evolución de los
demócratas, y los republicanos con Pi y Margall y Castelar. A la derecha del poder están
los carlistas.
El ejército había tomado protagonismo a partir de la Guerra de la Independencia y las
guerras carlistas. Los militares cambian los gobiernos por medio de los
pronunciamientos y, además eran los jefes de los partidos. Se establece el régimen de
los generales: Narváez, Espartero, O´Donnell, Prim,….
Las constituciones cambian con cada partido. Las moderadas son el Estatuto Real de
1834 y la de 1845; las progresistas son la de 1837 y la d e1856 que no llegó a
publicarse. El constitucionalismo español tenía un fuerte peso ideológico, se remite a las
constituciones anteriores, basándose en el pasado para justificar el presente, todo esto
hace que existan constituciones de partido.
Existen otros elementos de la vida política como son las jornadas revolucionarias, las
tertulias en cafés, los exiliados, los cesantes, las juntas y las milicias.
Los factores que impiden el buen funcionamiento del régimen son el escaso cuerpo
electoral, el manejo de las elecciones y el dominio del partido moderado, esto ocurre
por el apoyo de la reina y por los pronunciamientos que protagonizarán.
Se pretendió crear un estado centralizado que tenía sus antecedentes en la abolición de
los fueros de Felipe V. Se controla todo el estado desde Madrid, con un delegado en
cada provincia. Se abolen los fueros, se divide el país en provincias, aparecen los
funcionarios y los ministerios, mejoran las comunicaciones (carreteras y ferrocarriles),
se unifican las leyes. Esto tiene sus ventajas como la igualdad territorial y que todo se
dirige desde el mismo lugar, pero también sus inconvenientes como el hecho de que el
centro está muy lejos del lugar donde se van a aplicar las decisiones.
Socialmente ha triunfado la burguesía en la que se defiende la libertad, la igualdad y la
propiedad (desamortizaciones).
En economía hay una España dual, por una parte hay factores de progreso como el
mundo financiero, el ferrocarril, la industria textil y las desamortizaciones; los factores
de atraso eran la España agraria y preindustrial.

Sexenio democrático (1868-1874): El reinado de Amadeo I y


la Primera República.
La revolución de 1868 supuso la ruptura de un esquema político estructurado en base a
la monarquía borbónica. Tras la caída de esta, fue necesario buscar una alternativa
política que se encontró primeramente en una nueva dinastía de Saboya, y después, al
quedarse ésta sin apoyos, terminará en la única vía posible, la República.
En ese momento comienza un periodo de inestabilidad, había muchos cambios y
gobiernos distintos que pretendían cambios radicales en muy poco tiempo.
Tras el golpe militar se forma un gobierno provisional encabezado por Serrano y Prim,
cuyo principal objetivo fue la elaboración de una Constitución, para lo cual se convoca
a Cortes, con sufragio universal para varones mayores de 25 años. Se elabora la
Constitución de 1869 y establece un Monarquía democrática, debe elegirse a un rey que
sustituya a los Borbones. Mientras se hace la elección hay un periodo de regencia de
Serrano.
En este periodo comienza la insurrección de Cuba.
En 1870, el candidato a la corona de Prim, Amadeo de Saboya es elegido rey de España.
El año siguiente Amadeo jura la Constitución. Recibe escaso apoyo de los españoles. Su
reinado dura tres años, muy conflictivos. En 1872 estalla la tercera guerra carlista, hay
una insurrección de carácter federalista en Cuba y se desintegra la coalición
gubernamental. Todos estos problemas unidos a la pérdida de apoyos de Amadeo a
causa del asesinato de Prim de la falta de acuerdos entre unionistas y progresistas, hacen
que Amadeo I renuncié al trono español.
Durante el reinado de Amadeo I comienza a aparecer el movimiento obrero y se crea la
Primera Internacional española
Sus jefes de gobierno fueron, al principio Sagasta, pero cae en 1872 y es sustituido por
Serrano. El nuevo gobierno pretende que Amadeo disuelva las Cortes, pero se opone.
Esto obliga a Serrano a dimitir, quedando Ruiz Zorrilla en el poder.
La renuncia de Amadeo fue aprobada y Pi y Margall defendió la solución republicana.
La Asamblea Nacional proclama una República federal, primeramente está en el poder
Figueras, apoyado por los unitarios. Unos meses después las Cortes Constituyentes
hacen un proyecto de Constitución y ponen a Pi y Margall en el poder. Entonces se
produce el levantamiento cantonal en España, lo que lleva al presidente republicano a
dimitir de su puesto. Es sustituido por Salmerón que, incapaz de firmar las penas de
muerte es sustituido por Castelar. Este gobierna con el apoyo minoritario de los
monárquicos y termina por dar el gobierno a los federales. Para evitarlo el general Pavía
da un golpe de Estado penetrando a caballo en las Cortes. La República queda entonces
en manos del general Serrano, se inicia un periodo dictatorial. El gobierno intenta
resolver los dos problemas más importantes de momento: el cantonalismo y la cuestión
carlista.
Todos los desordenes favorecieron el crecimiento del partido alfonsino hábilmente
dirigido por Cánovas. Cánovas quería que Alfonso XII llegase a España por elección de
los españoles, pero el general Martínez Campos da un golpe de Estado y Alfonso XII
entra en España a principios de 1875.

Evolución económica y cambio social. El arranque del


movimiento obrero (1833-1875).

La evolución de la economía española esta caracterizada por su posición, al margen de


la industrialización de los demás países europeos.
Esto se explica por el subdesarrollo de la agricultura española debido a la mala calidad
de las tierras y las condiciones climatológicas adversas. Además, mediante la reforma
agraria liberal (desamortizaciones, desvinculaciones) se consolidó la propiedad privada.
Si bien esto ayudó a paliar la deuda de la Hacienda Pública española y a que la
producción agrícola aumentase, la productividad no aumentó, las técnicas continuaron
atrasadas.
Por otra parte también existen varios factores de progreso como son: el mundo
financiero (la bolsa), la industria textil (se inicia en Cataluña), pero sobre todo el
ferrocarril. Aunque un poco tardío con respecto a Europa, el ferrocarril fue un gran
impulso para España. A mediados de siglo, con la Ley General de Ferrocarriles, se abrió
una etapa de intensa construcción.
El afianciamiento del liberalismo durante el reinado de Isabel II supuso la desaparición
de los estamentos y la igualdad de los ciudadanos ante la ley, aparece la sociedad
clasista (basada en la riqueza).
Gracias a las desamortizaciones, la burguesía prospera ya que son quienes compran los
terrenos. La alta nobleza no pierde su importancia, sus tierras pasan a ser propiedades.
Las clases medias comparten con los grupos poderosos la forma de vida, pero su riqueza
es mucho menor. Las clases populares, los artesanos y grupos urbanos, son menos
favorecidos. Los campesinos podían tener pequeñas cantidades de tierra (pequeños
propietarios), ser arrendatarios, mozos (empleado permanentemente en una explotación
agraria) o jornaleros sin tierras. Los patrones pagaban a los proletariados por la
realización de un trabajo.
Aunque la ciudad va creciendo la ciudad, España sigue siendo fundamentalmente
agraria.
El movimiento obrero surge con la industrialización. En su inicio fueron
manifestaciones espontáneas de rebeldía que tomaron forma de hechos luditas
(destrucción de maquinas)
En 1840 aparece el primer sindicato en Barcelona. Estos sindicatos intentaban mejorar
las condiciones laborales y salariales de los trabajadores. El sindicalismo tuvo un gran
desarrollo en esta década.
El movimiento obrero se desarrolla más en el Sexenio Revolucionario ya que se ponen
en contacto con Europa; Marx y Bakunin han fundado la AIT (socialistas y anarquistas)
en Londres. Además el momento revolucionario es propicio para buscar adeptos que se
unan la AIT, para ello vienen dos delegados, Fanelli y Lafargue. Posteriormente la AIT
se divide en socialistas y anarquistas. Poco después Sagasta la disuelve y estos tienen
que pasar a la clandestinidad.
El cantonalismo también tuvo un carácter de cambio social. El primer anarquismo
estuvo situado en las mismas zonas que el movimiento cantonal de 1873.
Tras el periodo revolucionario se produce el apolitismo de las masas obreras que, en su
gran mayoría, pasan a ser anarquistas.

El sistema canovista: La Constitución de 1876 y el turno de


partidos. La oposición al sistema. Regionalismo y
nacionalismo
La Restauración en sentido amplio es la vuelta a instaurar en España la monarquía
borbónica en la persona de Alfonso XII y abarcaría los reinados de este y de Alfonso
XIII; sin embargo en sentido estricto la Restauración hace referencia al funcionamiento
del sistema canovista, que abarca el reinado de Alfonso XII. Supone la vuelta al poder
de la oligarquía burguesa.
El sistema canovista se asienta en cuatro pilares: la “constitución interna”, formada por
el Rey (tiene un papel moderador entre el poder legislativo y el ejecutivo) y las Cortes
(no representan la realidad del país a causa del caciquismo); la Constitución de 1876 y
el turno de partidos.
La Constitución de 1876 es la más duradera de la historia de España, flexible y abierta
para dar cabida a los pensamientos moderado y progresista. Se inspira en el sistema
parlamentario inglés, incluye una declaración de derechos individuales, el principio
básico sería la soberanía nacional, la división de poderes del Estado es total, le da la
capacidad al rey para diluir las cortes y España es un Estado confesional católico.
Existían dos partidos políticos, el conservador liderado por Cánovas y el liberal liderado
por Sagasta. Estos partidos debían abarcar la mayor cantidad de ciudadanos posibles, e
irse turnando en el poder; de esta manera son pocos los que no aceptan la monarquía
(los carlistas, parte de la Unión Católica, de los republicanos y el proletariado). Cuando
el partido que está en el poder se desgasta, el rey convoca elecciones y gana el partido
que sea necesario mediante el pucherazo, es decir, que las elecciones se amañan. Este
sistema confiere estabilidad política a l país y de4stierra al ejército de la vida política
que pasará a ser una fuerza de orden público; aunque el sistema también tiene fallos, los
partidos en el poder se desgastan, el caciquismo vicia el sistema y se desajusta la España
oficial de la vital.
La oposición al sistema fue leve. Las fuerzas opositoras fueron: republicanos, carlistas y
los movimientos obreros(socialistas y anarquistas) que ya habían aparecido en el
sexenio, que en este momento van cobrando más fuerza, sobre todo el anarquista que
acudirá a la acción directa con sabotajes y revueltas. Además existía el problema del
campo español que venía desde las desamortizaciones y el problema colonial que
desencadenó la guerra de Cuba.
Durante este periodo los regionalismos se transforman en nacionalismos, Cataluña, el
País Vasco y Galicia defendían y afirmaban que había distintas nacionalidades dentro
de España.
En Cataluña había surgido un amplio movimiento cultural, la Renaixença (1830), sin
aspiraciones políticas. Pero en 1882 surge el primer partido catalanista, el Centre Català,
que pretendía la autonomía. En 1891 un grupo de intelectuales fundaron la Unió
Catalanista de tendencia conservadora, cuyo programa quedó fijado en las Bases de
Manresa. Tras la crisis del 98 el catalanismo maduró y se fundó la Lliga Regionalista,
con un programa conservador que perseguía la autonomía de Cataluña.
El origen del problema en el País Vasco fue la abolición de los fueros, así comenzó a
surgir una corriente de defensores de la cultura y la lengua vasca. Ya en 1894 Sabino
Arana funda el Partido Nacionalista Vasco.
En Galicia fue débil y tardío, pero el Rexurdimento llegó, aunque se mantuvo muy
minoritario.

La liquidación del Imperio colonial: Cuba y Filipinas. El 98 y


sus repercusiones.
A finales del siglo XIX aún le quedaban a España dos colonias americanas, Cuba y
Filipinas.
En Cuba se abolió la esclavitud y los cubanos tuvieron representación propia en las
Cortes. España ponía fuertes aranceles para dificultar el comercio de la isla con Estados
Unidos que amenazaba con cerrar sus puertas al mercado cubano.
En 1892 se formó el Partido Revolucionario Cubano, que comenzó una insurrección en
1895 que se fue extendiendo por la isla. El gobierno, presidido por Canovas envió un
ejército mandado por Martínez Campos, pero hubo que sustituirlo ante la falta de
resultados. El general Valeriano Weyler llegó a la isla con la idea de terminar con la
insurrección por la fuerza, pero lo único que se consiguió fue una elevada mortandad
entre soldados y civiles, y una caída de la economía cubana debido a la guerra. Tras el
asesinato de Cánovas, el nuevo gobierno concedió autonomía a Cuba, pero ya era tarde,
los independentistas contaban con el apoyo estadounidense.
Además también se produjo la insurrección de Filipinas, aunque la presencia española
era más débil. El levantamiento filipino fue duramente reprimido.
En 1898 Estados Unidos declaró la guerra a España responsabilizándola del
hundimiento de uno de sus buques. La guerra terminó con la derrota española y la Paz
de Paris por la cual España abandona Cuba, Filipinas y Puerto Rico que quedan bajo
dominio estadounidense.
La derrota española de 1898 tuvo repercusiones en la sociedad, la economía y la
política.
No hubo una crisis económica, aunque se habían perdido los mercados coloniales y la
guerra había producido una deuda. Al comenzar el nuevo siglo se produjo una inflación
baja, una reducción de la Deuda Pública y una gran inversión proveniente de capitales
repatriados.
Tampoco hubo una gran crisis política. Los viejos políticos conservadores y liberales se
adaptaron a los nuevos tiempos y al regeneracionismo. Los movimientos
regeneracionistas eran respaldados por las clases medias, pretendían olvidar el antiguo
esplendor del Imperio y centrarse en la modernización del país.
Tras el desastre surge un grupo de intelectuales caracterizados por un profundo
pesimismo frente al atraso español, la Generación del 98.
También hay un cambio en la mentalidad de los militares que se inclinaron a posturas
autoritarias e intransigentes frente a las olas de antimilitarismo, esto comportó el regreso
del ejército a la vida política.
La Reina Regente sustituyó el gobierno desgastado y desprestigiado de Sagasti, por el
de Silvela, quien convocó elecciones. El nuevo gobierno se mostró voluntarioso frente a
la renovación, se inicia una política reformista. Como consecuencia aumentó el precio
de los artículos de primera necesidad y se crearon nuevos impuestos para pagar la deuda
de la guerra. Esto impulso a los contribuyentes a la huelga. Varios ministros dimitieron,
el espíritu de regeneración duró apenas un año. El gobierno se mantuvo en el poder
hasta 1901, cuando María Cristina ponía en el poder a los liberales. El sistema de la
Restauración había quedado casi intacto ante desastre.
La crisis fue fundamentalmente moral e ideológica, la sociedad española estaba en un
estado de desencanto y frustración. España era vista como una nación con un ejército
ineficaz, un sistema político corrupto y unos políticos incompetentes.

La dictadura de Primo de Rivera. De la monarquía alfonsina


a la Segunda República.
En Barcelona, el 13 de septiembre de 1923, el capitán general de Cataluña, Miguel
Primo de Rivera, dio un golpe de Estado, proclamando, inicialmente un sistema de
gobierno personal, sin Constitución ni partidos políticos, gobernando con un Directorio
militar y manteniendo la Monarquía.
El golpe se produce con el apoyo de Alfonso XIII que confió la tarea de formar
Gobierno al general sublevado. La implantación del Directorio Militar fue aceptada con
satisfacción por la población del que esperaba el restablecimiento del orden y, también,
por la burguesía y el movimiento obrero. Los partidos políticos, embargo, recibieron el
golpe con recelo y vacilación.
L dictadura triunfa a causa de la crisis del sistema parlamentario del turno de partidos y
a todos los problemas sociales de fondo como son las huelgas constantes.
La evolución política de la Dictadura pasa por dos períodos: el Directorio Militar, y el
Directorio Civil.
La dictadura se inicia con un directorio militar con la finalidad de acabar con la guerra
de Marruecos. Se desmantela las instituciones parlamentarias, excepto el rey, se crea
una especie de partido único, “Unión patriótica”; se crea una administración central y
municipal para terminar con el caciquismo; se restablece la paz social y el orden
público.
Una vez finalizada la guerra se intenta institucionalizar el régimen creando un directorio
civil, se constituye una Asamblea Nacional consultiva y funciona más la unión
patriótica.
Los grandes logros de la dictadura son: el fin de la guerra de Marruecos, el gran
desarrollo económico y la pacificación social. Por otra parte el gran coste económico
acarrea una deuda pública, es muy represivo con el régimen con el anarquismo y hay un
excesivo intervencionismo.
A partir de 1929 comienza la agonía de la dictadura. La oposición se reagrupa y se
organiza bajo el lema de la independencia judicial y el estado de derecho. Son,
fundamentalmente, los intelectuales, el movimiento obrero y las clases liberales. Pero
quien realmente le va a fallar van a ser sus puntos de apoyo: el ejercito le quita su apoyo
ya que Primo de Rivera es quien controla los ascensos y además estaba dividido entre
los peninsulares y los militares de Marruecos; la Iglesia comienza a desconfiar por su
falta de independencia; y las clases conservadoras se sentían amenazadas por el
corporativismo.
La dictadura no cae por la presión exterior sino por la falta de apoyos, tras la negativa
de apoyo de los militares ofrece su dimisión a l monarca quien lo acepta.
El rey, Alfonso XIII, quiere volver a la constitución, para lo cual pide ayuda a
Berenguer.
Por su parte la oposición, socialistas, nacionalistas y republicanos, se reunía elaborando
el “Pacto de San Sebastián”, que llevó a la formación de un Comité revolucionario
compuesto por: Alcalá Zamora, Maura, Domingo Prieto, Azaña, Albornoz y De los
Ríos. Este Comité difundió en diciembre de 1930 un manifiesto en el que se llamaba a
la población a derribar la Monarquía.
El gobierno de Aznar y Berenguer convoca elecciones municipales el 12 de abril de
1931. Estas elecciones fueron un plebiscito contra Alfonso XIII, quien dimite. El
pueblo, con gran entusiasmo sale a la calle en las grandes ciudades y se proclama la
República el 14 de abril.

Sociedad y mentalidad. La educación (1875-1902)

La estratificación social en este periodo seguía siendo desigual. Había una clase alta
formada por latifundistas, grandes propietarios y la alta burguesía. Las clases medias se
habían incrementado con los profesionales liberales, los funcionarios de la
Administración, los comerciantes medios de las ciudades y los propietarios medios de
ciudad y campo; también podríamos añadir a la clase media baja (oficiales del Ejército,
el clero…). El resto formaba las clases bajas, que seguían manteniendo condiciones y
modos de vida inhumanos. Entre las clases más pobres estaban los obreros industriales
y de servicios, pequeños agricultores y jornaleros…
En este periodo comienza la edad de plata de la cultura española con la Generación del
98. Este conjunto de intelectuales poseían una actitud muy crítica ante los problemas
sociales de España. Denunciaban la mediocridad y la corrupción existentes. Se
ocupaban, además de la cuestión social, denunciando la miseria y la explotación. Ya a
principios del siglo XX las elites intelectuales, formadas por Gregorio Marañón,
Unamuno, Manuel Azaña, Ortega y Gasset entre otros, buscaban ante todo la
modernización y europeización de España.
En esta época hay notables investigadores españoles. En medicina Jaume Ferrán obtuvo
la vacuna contra el cólera, Ramón y Cajal con sus descubrimientos sobre el sistema
nervioso recibió el Premio Nóbel en 1906… Julio Rey Pastor y Puig Adam fueron
matemáticos reconocidos. Blas Cabrera y Arturo Duperier destacan en Física y
Química.
La Ley de Instrucción Pública promovida en época de Isabel II por Claudio Moyano
dividía la enseñanza en tres niveles: enseñanza primario, enseñanza secundaria y
enseñanza superior. El sistema educativo era dual, en parte estatal (enseñanza
universitaria) y en parte privado (enseñanza primaria y secundaria). El sistema
educativo chocó en el siglo XIX con las limitaciones presupuestarias, la mayor parte de
los recursos para educación se destinaban a universidades, a la cuales acudía una
minoría.
La deficiencia de la educación primaria fue paliada por asociaciones privadas, los
maestros recibían sueldos muy bajos y, aunque el número de analfabetos disminuyó, el
50% de la población lo seguía siendo sobre todo las niñas y las áreas rurales.
Se creó del Ministerio de Instrucción Pública en 1900 que se responsabilizaba de los
pagos a profesores y del control de la red de escuelas primarias.
En la universidad el sistema era uniforme y centralista, los profesores no tenían libertad
de cátedra lo que provocó diversos conflictos; el gobierno retiró de sus cátedras a
Cautelar, Salmerón y algunos más. Esto encubría una persecución política religiosa
contra los catedráticos más liberales y partidarios del krausismo.
En 1876 se funda la Institución Libre de Enseñanza (ILE), dónde primaba el libre
pensamiento, el debate científico y la formación integral del individuo. Con el tiempo
obtuvieron gran número de cátedras por toda España. Adquiere su máxima importancia
a principios del siglo XX, cuando dio rango oficial a algunos de sus proyectos.

Regeneracionismo y revisionismo político. La crisis de 1909 y


1917. La guerra colonial en Marruecos. El desastre de
Annual.

El reinado de Alfonso XIII llega con la sombra del desastre del 98. Aparece el
regeneracionismo. Los regeneracionistas pretendían purificar el sistema político del
turno de partidos que estaba viciado a causa del caciquismo. El más influyente de este
pensamiento fue Costa quien pretendía reformar el sistema electoral, mediante reformas
locales, que no se llevaron a cabo, ya que Maura (conservador) prefería la revolución
desde el poder. Por su parte Canalejas (liberal) estaba de acuerdo con Costa
El deterioro del turno de partidos viene dado por dos fechas 1909 y 1917. Los partidos
dinásticos comienzan a deteriorarse al desaparecer los líderes originales, pero esta
situación se agrava después de la “Semana Trágica” de Barcelona en 1909. Este hecho
estuvo provocado por el embarco de reservistas (padres de familia) hacia Marruecos.
Los revolucionarios (proletariado) tomaron la ciudad, quemaron conventos y tuvieron
conflictos con el ejército. La represión culminó con la condena a muerte del anarquista
Ferrer, acusado de promover los desórdenes. Todos estos acontecimientos obligaron a
Maura a presentar su dimisión.
El golpe definitivo al turno de partidos ocurre en 1917, cuando una profunda triple
(Juntas de Defensa, la Asamblea de Parlamentarios y la huelga general) crisis hace que
crezcan los partidos no dinásticos y entren en el Parlamento. Además aparecen los
gobiernos de Concentración y Gestión, se cuestiona el sistema de la Restauración y
empieza a haber disyuntiva entre partidos; todo esto es una muestra de la quiebra de los
dos partidos dinásticos.
España entra en Marruecos por una cuestión interna y otra externa. Pretendía renovar su
prestigio en Europa, había salido aislada y con desprestigio de los militares del 98, y
además había intereses económicos de la oligarquía financiera (minería de hierro y
ferrocarril). A partir de 1904 Francia e Inglaterra se habían aliado Alemania comenzaba
a ser un peligro... Los tres se estaban extendiendo por el norte de África y, por intereses
de estos, entra España con una opinión pública mayoritaria en contra
Desde 1904 la penetración española en Marruecos fue pacífica, basada en pactos con
Francia que lo dominaba. Esta política fracasó en 1909, ya que el pueblo marroquí no lo
aceptaba, iniciándose la Guerra de Melilla. En este periodo hay una gran división entre
los oficiales africanistas, que ascendían por méritos de guerra y los peninsulares, que lo
hacían por antigüedad. Además el pueblo no lo acepta ya que no es una guerra que les
interese y seguía estando vigente el sistema de Quintas.
El desastre de Annual (1921) fue el resultado trágico de un esfuerzo por establecer un
protectorado, provocando efectos negativos en la economía, la sociedad y la política.
Las consecuencias de Annual fueron dilatadas y profundas:
En el mismo mes de agosto de 1921 se abrió un Expediente(Picasso) Gubernativo sobre
las responsabilidades de los mandos militares y el propio Rey en la derrota. Aunque el
expediente no aclaró demasiado el asunto, parece que la acción de Fernández Silvestre
en Alhucemas contó con la aquiescencia del Gobierno y con el asentimiento del general
Dámaso Berenguer. Pero cuando iba a salir a la luz, ocurrió el golpe de Estado.
Otra consecuencia fue el descrédito de las Juntas Militares de Defensa, que
desaparecieron en 1922, y de los políticos.

Evolución económica. La sociedad (1902-1931)


A principios del siglo XX la economía española continuaba siendo principalmente
agraria, sin embargo se desarrolla la siderurgia y se difunde la industria.
La siderurgia ya había tenido un gran desarrollo en los últimos años del siglo XIX,
principalmente en el norte peninsular. A principios del siglo XX se forma la Sociedad
Anónima Altos Hornos de Vizcaya como la fusión de tres altos hornos de esta zona de
España.
A partir del último tercio del siglo XIX, la industria española se diversificó y se
extendió a nuevas regiones, además del desarrollo de nuevas fuentes de energía como
la electricidad o el petróleo.
Además de las industrias tradicionales, de las que destacan la alimentación y el vestido,
surgen en España las primeras industrias metalúrgicas. El nuevo sector que alcanzó
notable expansión fue el químico.
El cambio más destacable en la economía de este periodo fue a causa de la difusión del
uso de la electricidad y el petróleo como fuentes de energía., lo que permitió vencer uno
de los principales obstáculos del crecimiento de España del siglo XIX, la carencia de
calidad del carbón autóctono. Entre 1880 y 1914 el uso de la electricidad estuvo
limitado a la iluminación, durante 1914 y 1930 su uso se extendió a la industria.
A esto se unieron otras dos grandes innovaciones el avance de la destilación del
petróleo y los progresos técnicos en la mecánica de motores. Ambas abrieron paso a la
revolución de los transportes como consecuencia de la aparición del automóvil.
Se avanzó, además, en la mejora de la transmisión de la información, la expansión del
telégrafo y, en los años veinte, la del teléfono y la radio.
Junto a los dos núcleos industriales tradicionales, Cataluña y el País Vasco, la industria
se difundió por zonas más amplias del territorio español. Madrid, gracias al hecho de ser
la capital y la sede de la Administración Central, se convirtió en la tercera región
industrial del país. Además el crecimiento demográfico favoreció la demanda de bienes
de consumo.
Los profundos desequilibrios regionales en la renta por habitante hicieron que solo en
tres zonas (Cataluña, el País Vasco y Madrid) el PIB por habitante se situaba muy por
encima de la media, durante los años veinte se le sumó la Comunidad Valenciana. Por el
contrario, otras regiones como Canarias, Galicia y Castilla La Mancha tenían un PIB
muy inferior a la media española.
La estratificación social en este periodo seguía siendo desigual. Había una clase alta
formada por latifundistas, grandes propietarios y la alta burguesía. Las clases medias se
habían incrementado con los profesionales liberales, los funcionarios de la
Administración, los comerciantes medios de las ciudades y los propietarios medios de
ciudad y campo; también podríamos añadir a la clase media baja (oficiales del Ejército,
el clero…). El resto formaba las clases bajas, que seguían manteniendo condiciones y
modos de vida inhumanos. Entre las clases más pobres estaban los obreros industriales
y de servicios, pequeños agricultores y jornaleros…

La Constitución de 1931 y el bienio reformista. El bienio


radical-cedista. Las elecciones de 1936 y el Frente Popular.
La Segunda República se instauró en España en el año 1931 tras haber caído la
monarquía de Alfonso XIII, después del fracaso de la dictadura de Primo de Rivera. El
régimen de la II República atravesó tres etapas con orientaciones políticas que
fluctuaron, tras un gobierno provisional, desde los gobiernos de centro-izquierda de los
primeros años, a la agrupación de partidos de derechas, para finalizar con la alianza de
partidos de izquierdas en el conocido como Frente Popular.
Apoyaron la República las clases medias y las masas populares. Entran en el panorama
político fuerzas hasta ahora marginadas como partidos obreros y nacionalistas.
Tradicionalmente se ha dividido a los grupos políticos en izquierdas y derechas.
El gobierno provisional está formado por los firmantes del pacto de San Sebastián, que
tras ganar las elecciones municipales y la dimisión del rey, toman el poder. Su objetivo
principal es convocar Cortes constituyentes para redactar una Constitución. Los
diputados de las Cortes son elegidos por sufragio universal masculino, saliendo la
mayoría de los diputados de centro-izquierda. Tuvo puntos muy conflictivos, como la
relación con la Iglesia (estado laico), por esta causa los fieles de la República se
despegaron. Era muy ambiciosa, quería terminar con los problemas sociales, educativos,
militares y regionalistas. Toma como modelo constituciones muy avanzadas. Se
proclama una República democrática, con autonomías, tiene una amplia declaración de
derechos y es unicameral.
Niceto Alcalá Zamora es elegido Presidente de la República y Manuel Azaña es
confirmado como jefe del gobierno. Se iniciaba, tras su triunfo electoral, un gobierno de
centro-izquierda, el bienio reformista, que intentó llevar a cabo reformas sociales y
administrativas con el objetivo de modernizar, democratizar y encontrar solución a los
principales problemas de España. El gobierno queda desprestigiado tras las huelgas y la
represión de Casas Viejas (septiembre de 1933) y se convocan nuevas elecciones, por
primera vez en España, las mujeres ejercían su derecho al voto.
El triunfo en éstas de la coalición de partidos de derechas –Confederación de Derechas
Autónomas (CEDA)- y del Partido Radical frenó los intentos reformistas del anterior
gobierno. Niceto Alcalá Zamora nombró jefe del gobierno a Alejandro Lerroux quien
contó para gobernar con el apoyo de la CEDA. Nuevamente la inestabilidad política,
vinculación de miembros del gobierno en escándalos económicos, la respuesta popular a
las medidas contrarreformistas del ejecutivo, muy especialmente la revolución de
octubre, así como los problemas a los que tuvo que hacer frente el gobierno
contribuyeron a debilitarlo y a provocar la convocatoria de nuevas elecciones para
febrero de 1936. Para esa fecha los partidos de izquierda decidieron concurrir juntos
constituyendo el Frente Popular, mientras que la derecha se presentaba de forma
independiente.
El triunfo del Frente Popular con el apoyo de la CNT tras las elecciones de febrero de
1936 llevó a la creación de un nuevo gobierno presidido por Manuel Azaña, quien más
tarde sería Presidente de la República. Pero en estas fechas el reloj avanza sin pausa
hacia los trágicos acontecimientos de julio de 1936. Las disidencias dentro del gobierno,
la violencia política manifestada en la calle, la agitación revolucionaria, la
radicalización de las posturas políticas, y la incapacidad de llevar a cabo de forma
pacífica una modernización necesaria en el país, conducirán lamentablemente de nuevo
en la Historia de España a la intervención del Ejército a través de un golpe de Estado.

La cultura española desde los inicios de la Edad de Plata


hasta 1936.
La sublevación militar. El desarrollo de la Guerra Civil.
Evolución política de las dos zonas durante la Guerra Civil.
Tras la victoria del Frente Popular en las elecciones de febrero de 1936 el descontento
entre los militares y políticos más conservadores fue creciendo. Comenzaron a preparar
una sublevación militar contra el gobierno de la II República. Entre los conspiradores
estaban un grupo de militares y algunos partidos de derechas, tradicionalistas,
falangistas y alfonsinos. En la cabeza se encontraban Mola, Goded y Franco con la
ayuda exterior de Sanjurjo.
Franco viaja en un avión ingles desde Canarias hasta Marruecos, el día 19 de julio tomó
el mando de las tropas españolas que se encontraban en África y cruzó el estrecho de
Gibraltar. Mola está en Navarra donde agrupa a las tropas carlistas. Por su parte Poded
estaba en Baleares tiene que ocupar Barcelona pero fracasa por la fuerza de la CNT.
A lo largo de los treinta y dos meses de duración (julio de 1936-abril de 1939), la guerra
civil española atravesó diversas fases militares.
Primero las batallas por los enlaces en el verano de 1936 para formar un continuo
espacial como el paso de Gibraltar y la toma de Badajoz.
Las tropas sublevadas se dirigieron hacia Madrid que permanecía leal a la República. La
toma de la capital de España, por su importancia política, su valor simbólico y
estratégico se convirtió en una prioridad para los insurgentes. Pero la estrategia fracasó.
Hubo dos nuevos intentos en noviembre de 1936 y en febrero de 1937. Ambos
fracasaron. Durante este periodo de tiempo las ciudades de San Sebastián, Irún y
Málaga fueron ocupadas por las tropas sublevadas.
Ante la imposibilidad de tomar Madrid, el objetivo del ejército franquista se centró en
controlar las regiones de Asturias, Cantabria y País Vasco. Se inició la ofensiva en
marzo de 1937 por el general Mola con la colaboración de la Legión Cóndor alemana.
En el mes de junio las tropas franquistas tomaron Bilbao y una de las primeras medidas
tomadas fue la supresión de la recién concedida autonomía vasca. Con el objetivo de
dispersar las fuerzas franquistas, el ejército republicano inició una contraofensiva en las
cercanías de Madrid y Aragón. En agosto de 1937 el ejército franquista junto con tropas
italianas tomó la ciudad de Santander, en octubre era ocupada Asturias.
A finales del año 1937 la zona republicana quedaba restringida a la franja oriental de
España. Tras la lucha por Teruel y su ocupación por las tropas franquistas, estas se
dirigieron al Mediterráneo y el Gobierno de la República se instaló en Barcelona. Se
inició entonces lo que se conoce como la Batalla del Ebro, uno de los episodios más
sangrientos de la contienda. A finales de enero de 1939 Barcelona era ocupada por las
tropas franquistas. El 28 de marzo de 1939 el ejército franquista entraba en Madrid y el
30 lo hacía en Alicante, la última ciudad republicana. El 1 de abril de 1939 la guerra
civil española finalizaba oficialmente.
El fracaso militar de los sublevados no impidió que la zona del país bajo su dominio se
estructurase política, económica, jurídica y socialmente. La unidad en el mando militar
y político, la creación de un estado totalitario y católico, así como la derogación de las
reformas llevadas a cabo por la II República son sus rasgos definitorios.
Por su parte, la zona leal al régimen democrático republicano siguió un desarrollo muy
distinto caracterizado por la falta de unidad militar y política, y el inicio de un proceso
de revolución social. Con los gobiernos de Largo Caballero y Negrín se crea el Ejército
Popular, se refuerza el poder del estado y hay un gran esfuerzo educativo y cultural.

La dimensión internacional del conflicto. Las consecuencias


de la Guerra Civil.
En un contexto internacional crítico como es el de la década de los años treinta del siglo
XX la guerra civil española cobró un especial interés y protagonismo, a la vez que
produjo una profunda división en la opinión pública internacional. Las democracias
estaban muy debilitadas frente a la expansión del fascismo, únicamente quedan dos
países democráticos: Reino Unido y Francia. Ambos pretendían una pacificación y por
ello fueron reconociendo la expansión nazi.
Al estallar la Guerra Civil las democracias no querían internacionalizarlo y ara ello
crearon el Comité de No Intervención que tuvo grandes dificultades para mantener su
neutralidad, que se inclinaba hacia el bando nacional.
Hubo participación activa militar y económica de Italia y Alemania a favor del bando
franquista, con la Legión Cóndor. Los franquistas también recibieron ciertas ayudas de
Portugal y ciertas compañías estadounidenses.
Los republicanos intentaron obtener la ayuda de Francia, y, aunque estaba muy vigilada
por Inglaterra ayudó en menor medida; como México. Recibieron un gran apoyo de la
URSS y de ciertos intelectuales europeos. Aunque, quizá, el más importante de sus
apoyos fuesen la Brigadas Internacionales (voluntarios de todos los lugares de Europa
en lucha contra el fascismo), que fueron de gran ayuda en la defensa de Madrid,
Es necesario puntualizar que la ayuda recibida por los respectivos bandos fue muy
desigual tanto en el número de efectivos militares, de armamento y de recursos
económicos. La recibida por el bando franquista fue superior y mucho más regular.
Podemos concretar las graves consecuencias de la Guerra Civil en: sociales,
económicas, políticas y culturales.
Hubo un gran desastre demográfico debido a la gran cantidad de muertos durante la
guerra y en la inmediata postguerra, se habla de un millón. Socialmente, la dureza de la
guerra y la represión franquista hizo difícil la convivencia entre los supervivientes de
ambos bandos, además todos los avances jurídicos y sociales para las mujeres fueron
derogados por el nuevo régimen.
Económicamente, a parte de los destrozos materiales, del desastre en el campo y de la
perdida de mano de obra, el Estado estaba endeudado con las potencias de las que había
recibido ayuda.
Tras la derrota de los fascismos en la II Guerra Mundial, España se vio aislada
internacionalmente. Esto agravará los problemas políticos y económicos de los años
cuarenta y cincuenta. La situación cambiará en los años cincuenta con el contexto de la
Guerra Fría.
Hay una gran desolación en el panorama cultural por la muerte o el exilio de destacadas
figuras culturales españolas como Lorca, Miguel Hernández, Cernuda, Luís Buñuel…

El franquismo: Evolución política, económica y social hasta


1959.
España termina la guerra en unas condiciones pésimas. Con el desarrollo económico de
los años sesenta sale de su atraso secular, crecen las clases medias que acceden a un
mejor nivel de vida.
Es una dictadura que se mantuvo hasta la muerte del general Franco. Esta figura
aglutinó alrededor de su poder distintos intereses que apoyaron y fueron la clave del
régimen: ejército, Iglesia, los terratenientes y la burocracia. España se declaró reino aún
sin rey. Es importante la figura de don Juan, finalmente de decide educar a don Juan
Carlos en España que será nombrado sucesor en 1969.
El régimen estará aislado hasta 1951, ya que no es admitido en la ONU y los Aliados
pretenden su derribo (Postdam). En 1946 se retiran los embajadores de todos los países
de la ONU, este boicot económico y político reforzó el aislamiento internacional. A
partir del inicio de la Guerra Fría (1947), el papel de Franco en contra del comunismo se
fue haciendo más interesante, España comenzaba a tener mayor interés para las fuerzas
anticomunistas. España recibe el apoyo de estados Unidos, es admitida en la FAO y la
UNESCO, vuelven los embajadores a Madrid y se firman el Concordato con la Santa
Sede y los tratados militares con Estados Unidos.
Uno de los primordiales objetivos del franquismo fue la autarquía, sistema económico
caracterizado por el intervencionismo económico y por cerrar al máximo los
intercambios con el exterior. Esta implantación se justifica por necesidad (aislamiento),
tradición (proteccionismo del siglo XIX) y la convicción, ya que se subordina la gestión
política de la Economía al poder político. Esta etapa corresponde a la escasez de la post
guerra de los años cuarenta y a los primeros cambios económicos de los años cincuenta.
Se toman diversas medidas económicas como un intenso dirigismo estatal (INI y el
Servicio Nacional del Trigo que controlan la producción y los precios), reglamentación
favorable a la concentración bancaria, contrarreforma agraria y las relaciones laborales
estaban controladas por el Estado. Esto tiene como consecuencias un estancamiento
económico, la reagrarización de la economía, la aparición de la especulación y el
mercado negro, e inflación. En 1950 se dan los máximos niveles de desequilibrios
territoriales.
Como hemos dicho anteriormente el estado de aislamiento termina en 1950 con la
admisión de España en algunos organismos internacionales. Por esto en 1951, Franco
decidió hacer un cambio en el gobierno. El nuevo gabinete era una combinación de
falangistas y católicos, con más peso estos últimos. Se introdujo un personaje clave para
la continuidad del régimen, Carrero Blanco. Con todo esto el régimen pretendía una
homologación internacional.
Pero la situación económica no mejoró por las ayudas recibidas y comenzaron a surgir
síntomas de descontento en la calle, esto unido alas nuevas relaciones internacionales,
obligaron a Franco a cambiar el gobierno de nuevo en 1957.Esta vez llegan al poder
otros grupos dirigentes, los tecnócratas del Opus Dei que inician el gran cambio en la
economía española, el Plan de Estabilización. Con esto cambió la sociedad, aunque el
régimen nunca cambió en lo político.

El franquismo: Evolución política, económica y social desde


1959 hasta 1975. La oposición al régimen.

Entre los años 1959 y 1969, la economía española entró en un rápido proceso de
modernización y transformación. En el año 1959, las ideas de los tecnócratas
permitieron a España unirse al proceso de crecimiento europeo. El Plan de
Estabilización de los tecnócratas en 1959 supone el despegue de la economía española.
Son una serie de medidas económicas y fiscales liberalizadoras que tienen como
objetivo lograr un desarrollo económico interior equilibrado y realizar la apertura hacia
el exterior. Se pretendía que España entrase en una economía de mercado. Ingresa en
organismos internacionales como el FMI, el Banco Mundial y la OCDE. Se fijó el dólar
en 60 pesetas y se concedieron préstamos. Comienza el desarrollismo de los años 60.
Los cambios económicos vinieron marcados por tres planes de desarrollo indicativos,
esto quiere decir que es orientativo para las empresas privadas y obligatorio para las
públicas. La industria despega, pero la agricultura cae, el campo se empobrece y se
abandona: éxodo rural.
Para todo esto era necesario un capital que se obtiene de las inversiones extranjeras, del
turismo y de la emigración a Europa. Se crean los polos de desarrollo, zonas
especialmente indicadas para la inversión, que si crecían económicamente serian los
centros motores del desarrollo hacia zonas de su alrededor. Los incentivos consistían en
desgravaciones fiscales, créditos cooficiales, ayudas para la formación profesional y
suelo industrial relativamente barato.
La sociedad española se moderniza y mejora su nivel de vida gracias al crecimiento de
la economía. El bienestar que ya llevaba tiempo instalándose en Europa viene dado por
en baby-boom, el éxodo rural, el despoblamiento del interior, el crecimiento urbano, el
inicio del consumo (el 600, los televisores, las salidas a Europa…) y un cambio de
mentalidad.
El régimen se vio en la necesidad de adecuar su aparato de estado a alas nuevas
reformas económicas y dar un maquillaje a la estructura política, produciéndose una
pequeña liberación, por ejemplo el nombramiento de don Juan Carlos como sucesor, la
ley de prensa o la ley de libertad religiosa. Sus últimos años (desde 1973) son de crisis,
el régimen termina con la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975.
La oposición al Régimen tras la II Guerra Mundial se produce en dos áreas: en el propio
Régimen y desde la legalidad republicana vulnerada. En el primer caso, cabe destacar la
que se produce ya en 1936 desde los grupos políticos que no se avienen a la
Unificación: Falange (Hedilla), Carlistas (Fal Conde) y Cedistas (Gil Robles). Desde la
legalidad republicana, la oposición se inicia en 1941 con representantes del PSOE y
partidos republicanos y catalanistas de izquierdas. Comunistas y anarquistas
propusieron una tercera vía: el maquis. Esta fuerza se enfrentó con la Guardia Civil y el
Ejército hasta el año 1952 en que esta experiencia es extinguida por la falta de apoyo
nacional e internacional y por el cambio de estrategia de los grupos de oposición. La
oposición monárquica en el exterior se organizó en torno a D. Juan, hijo de Alfonso
XIII. Este pacto provocó discrepancias entre las fuerzas de la oposición en el exilio
(socialistas, republicanos) y perdió su efectividad cuando Franco, después de reunirse
en el Azor con D. Juan, aceptó que Juan Carlos, hijo de éste, estudiase en España.
A partir de 1959 se fortalece una oposición de masas en torno al Congreso de Munich,
los partidos políticos, el PC, CCOO, el movimiento obrero, los nacionalismos, el clero y
las comunidades cristianas de base.

La transición política. La constitución de 1978 y el Estado de


Autonomías.
A la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975 una serie de circunstancias en el
ámbito nacional (cambio social y económico) e internacional (coexistencia pacífica tras
la guerra fría y la desaparición de las dictaduras de Grecia y Portugal) favorecen el
desarrollo de un régimen democrático en España.
El 22 de noviembre de 1975 Juan Carlos de Borbón asumía la jefatura del Estado a
título de rey. Daba comienzo el reinado de Juan Carlos I y un proceso político
trascendental que llevaría a España de un régimen dictatorial a una democracia
parlamentaria: la Transición política.
Esta es una reforma pactada que terminó en ruptura, se hizo mediante la legalidad
franquista existente. El punto de partida tuvo aspectos negativos como el miedo a otra
guerra civil y los problemas con el ejército (salida de un periodo dictatorial militar),
pero también positivos como la transformación económica, social y cultural, la figura
del rey como motor del cambio, la transformación desde el interior del régimen y el
recuerdo de la crueldad de la guerra civil.
Esta transición se desarrolla a lo largo de tres gobiernos (hasta octubre de 1982), será
durante el de Adolfo Suárez en el que tendrá un mayor impulso (Constitución, Pactos de
la Moncloa y Estatuto de Autonomías)
La redacción de un texto constitucional que fuera la base legal del nuevo régimen
democrático fue uno de los primeros objetivos del nuevo gobierno y el Congreso recién
formado. Para su redacción se creó una ponencia en el Congreso integrada por siete
representantes, uno de cada partido político (UCD, PSOE, AP, PCE y los nacionalistas
catalanes). Fue redactada por consenso de las distintas ideologías y partidos políticos,
define a España como un “Estado social y democrático de derecho”, la forma política
es una monarquía parlamentaria, siendo el rey moderador de sistemas, jefe de gobierno
y de las fuerzas armadas, el sistema parlamentario es bicameral, garantiza las libertades
democráticas, no reconoce religión estatal si bien concede cierto protagonismo a la
Iglesia Católica, derogó todas las Leyes Fundamentales anteriores, garantiza el derecho
a la autonomía de nacionalidades y regiones.
Antes de la aprobación de la Constitución y ante las demandas de los nacionalistas
catalanes y vascos se aprobaron los siguientes acuerdos. En el caso de Cataluña, se
restableció a través del Decreto de 29 de septiembre de 1977 la Generalitat, y su
presidente Josep Tarradellas regresó del exilio el día 23 de octubre. En el País Vasco el
proceso fue más largo y complejo debido fundamentalmente a la acción terrorista de
ETA. El día 30 de diciembre de 1977 se creó el Consejo General Vasco.
En el año 1978 se aprobaron a través de distintos decretos-ley, organismos
preautonómicos para Galicia, Asturias, Castilla-León, Aragón, Castilla- La Mancha,
País Valenciano, Extremadura, Andalucía, Murcia, Baleares y Canarias.
El 25 de octubre de 1979 se aprueban los Estatutos de Autonomía de Cataluña y el País
Vasco.

Los gobiernos democráticos y la integración en Europa.


El 22 de noviembre de 1975, dos días más tarde a la muerte de Franco, Juan Carlos de
Borbón asumía la jefatura del Estado a título de rey. Daba comienzo el reinado de Juan
Carlos I y un proceso político trascendental que llevaría a España de un régimen
dictatorial a una democracia parlamentaria.
Tras la dimisión de Carlos Arias Navarro en julio de 1976, el rey designa como nuevo
presidente del gobierno a Adolfo Suárez. La elección y apuesta personal del monarca no
fue muy bien recibida por algunos sectores de la sociedad española, debido a su
vinculación política con el régimen franquista.
El nuevo gobierno inició su mandato poniendo en marcha una serie de medidas
encaminadas a la reforma política del país. Los principales acontecimientos de esta
etapa son: la ley para la reforma política, las elecciones generales el 15 de junio de
1977, los Pactos de Moncloa, la Constitución de 1978, elecciones generales y
municipales en marzo de 1979 y la aprobación de los estatutos de autonomía de
Cataluña y el País Vasco. Con todos estos hechos se inicia la democracia española.
El año 1980 fue un año de crisis para Adolfo Suárez y la UCD. Los problemas
pendientes, el estancamiento de la vida política en algunos aspectos, la crisis
económica, la virulencia de ETA, entre otros, afectaron a la estabilidad del gobierno.
Las discrepancias en el seno de la UCD eran cada vez más graves. El Partido Socialista
presentó una moción de censura contra el gobierno en el Congreso de los Diputados. El
29 de enero de 1981 Adolfo Suárez dimitió como presidente del gobierno y renunció a
la dirección de la UCD.
En la sesión del día 23 de febrero de 1981 en el Congreso de los Diputados se votaba la
investidura de Leopoldo Calvo Sotelo, designado para sustituir a Adolfo Suárez, cuando
un grupo de guardias civiles al frente del teniente coronel Antonio Tejero irrumpió en el
hemiciclo. Por su parte, el capitán general de Valencia, Milans del Bosch sacó los
tanques a las calles de la ciudad del Turia. Se trataba de un intento de golpe de Estado
que finalmente fracasó.
La labor del nuevo ejecutivo estuvo marcada por este hecho. Entre sus realizaciones
cabe destacar: en política interior, el dialogo con la oposición, el juicio contra los
golpistas del 23F y la aprobación de la ley del divorcio(22-6-1981); y en política
exterior, la adhesión a la OTAN.
El resultado de las elecciones legislativas del 28 de octubre de 1982 otorgó la victoria al
Partido Socialista Obrero Español. Fue una victoria histórica al ganar por mayoría
absoluta. La llegada del PSOE al poder es entendida por muchos como un periodo de
estabilidad democrática y como el fin de la transición política española. Bajo la
presidencia de su líder, Felipe González, los socialistas permanecieron en el poder hasta
el año 1996, cuando Aznar (PP) toma la presidencia del gobierno, pudiendo establecer
las siguientes etapas dentro de su mandato:
De acuerdo al eslogan de la campaña electoral socialista para las elecciones de 1982,
“Por el cambio”, su gestión va a ser principalmente reformista.
Las consultas electorales de 1986 y 1989 nuevamente otorgaron la victoria al PSOE
aunque no con la rotundidad de 1982.
Una serie de factores –descontento social, presión de la oposición, casos de corrupción,
crisis en el PSOE- hacen que las elecciones generales se adelantaran al 6 de junio de
1993. El PSOE volvió a ganar pero está vez en minoría.

You might also like