contrapuestas, de admiración y condena, entusiasmo y repulsa. En su obra se refleja con claros tintes estilísticos su afán de combatir los valores anquilosados de Occidente y de transitar por los senderos más ocultos de la psicología, de la moral y de la metafísica del pensamiento occidental.
Desde 1879 fue catedrático de a “filosofar a martillazos”. Su obra
Filología Clásica en la universidad es la respuesta a la crisis del de Basilea. No se adaptó a las idealismo que se había confabulado exigencias de la academia y se para consolidar su odio contra la jubiló por problemas de salud, vida, hasta el punto de invertir la mareos y dolores de cabeza que verdadera perspectiva del hombre. llegaban a impedirle leer. La enfermedad lo separó del trabajo y lo liberó asó del yugo académico y de la pesadez del espíritu en Alemania. El ser queda Fragmento 1 petrificado y La enfermedad le aportó una desprovisto de perspectiva absolutamente distinta dinamismo para captar la decadencia y Admiración por comprender la situación en la que Fragmento 2 Heráclito se encontraba la cultura europea. La fragilidad de su salud lo situó en Conocimiento y una situación privilegiada para Fragmento 3 ciencia conocer la pasión de los hombres dependen de los débiles, de los transmundanos, de sentidos los principios de la moral Dios no centro decadente y del idealismo. Fragmento 4 del universo Denuncia el Sus críticas a la cultura no Fragmento 5 fetichismo del provienen de un simple análisis lenguaje objetivo, sino que son más bien el Fragmento 6 Aniquila efecto de un combate, la crítica fundamentos corrosiva de alguien que se dedica platonismo