Carlos Monsivis: S, Bolao era un detective salvaje

21/06/2010 por: David Gonzlez Torres

Carlos Monsivis (Ciudad de Mxico, 1938) nos habl Roberto Bolao (Santiago de Chile, 1953-

Barcelona, 2003), de esa obsesin del escritor chileno por la literatura, por esa actitud salvaje que tena el detective nmada. Rescatamos aqu, en el blog de Aviondepapel.tv, tu televisin literaria, las palabras del intelectual mexicano sobre el autor de obras como, no slo Los detectives salvajes, sino Putas asesinas o la pstuma2666 . La influencia de Bolao al mismo tiempo resulta inevitable y sorprende. Es un autor que se ha ido destacando de forma acelerada. En los ltimos aos, se ha convertido a tal punto en una referencia y, por eso, me planteo la pregunta de qu hay despus de Bolao, dijo Monsivis. Supongo que los detectives salvajes continuarn circulando en un humanismo de libros y lectores. En esto siempre va incluida mi primera visin de Bolao en Mxico, como un joven salvaje al que yo no le atribua mayores habilidades detectivescas, pero que acab tenindolas y formidables. Era un detective extraordinario. Le recuerdo en actitudes de provocacin que, en ese momento, me parecieron slo provocaciones, pero que acabaron respondiendo a toda una estructura del pensamiento; siempre acompaado de otros jvenes que igualmente parecan ser slo irrupciones en el escenario, contina. Le recuerdo tambin, en conversaciones que tuve con l, como un hombre profundamente obsesionado con la literatura. Concretamente, con la idea de que no le iban a engaar; de que la literatura no era lo que le decan, sino lo que estaba ah en la pgina. O cmo logr entenderse a la perfeccin con un escritor mexicano notable que le llevaba bastantes aos, Efran Huerta. Y al mismo tiempo, me viene a la cabeza la relacin muy spera de Bolao con Octavio Paz, rememora el escritor mexicano. Finalmente, sobre Bolao, aade: Mi sntesis es la lectura entusiasta del libro Los detectives salvajes, donde aparezco fugazmente [Bolao lo menciona en una cita]. Realmente, esa obra me pareci rpida, iconoclasta y consolidadora, escrita con esa furia que ahora, injustamente, se considera tambin la buena literatura, sin respeto por lo que entonces era cannico y sin saber que se convertira en cannico.