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Cita bibliográfica:
Título original del documento en inglés: "Manual supporting the Encofor Environmental Impact
Assessment tool"
Resumen . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .7
2. Módulo de Pre-evaluación/Alcance . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .8
Referencias . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .22
Resumen
Este manual ofrece orientaciones prácticas para la recolección y procesamiento de datos y el reporte de
la evaluación de los impactos negativos potenciales de una actividad de proyecto MDL de tipo A/R.
Contiene los antecedentes necesarios para la Herramienta de Evaluación de Impacto Ambiental de
Encofor, la cual es una aplicación de fácil manejo en MS Excel, en la forma de listas de control.
Las modalidades y procedimientos para los proyectos MDL de tipo A/R de la Junta Ejecutiva del MDL
establece que cuando son identificados los impactos negativos potenciales, debe realizarse una
evaluación de impacto ambiental y socioeconómico de acuerdo con las normas y procedimientos
señalados por la Autoridad Nacional Designada (AND) del país anfitrión de la actividad de proyecto
MDL de tipo A/R. En consecuencia, la herramienta y el manual sólo pueden dar orientaciones
detalladas sobre los primeros pasos de una evaluación de impacto ambiental, es decir, la evaluación
rápida y la determinación del alcance durante la etapa de prefactibilidad. En el caso de una evaluación
de impacto ambiental durante la etapa de factibilidad, la herramienta y el manual ofrecen una guía en
forma de una lista de control que sirve para preparar la Declaración de Impactos Ambientales. Para una
evaluación más avanzada de los beneficios e impactos ambientales, se dispone del Módulo Encofor
Plus, cuya metodología cuenta con 17 indicadores cuantitativos distribuidos entre cuatro temas: suelo,
agua, vegetación y biodiversidad.
La lista de control de evaluación rápida ha sido adaptada de la de preselección general para todo tipo
de proyectos y actividades en los diferentes sectores recomendados por la Comisión Europea, así como
también, de la lista referencial de principios, criterios e indicadores para el manejo sostenible de
bosques, de Holvoet & Muys (2004). Las preguntas más aplicables a los A/R proyectos fueron
seleccionadas.
Estas preguntas son estructuradas como criterios que corresponden a los principios ambientales. Se
encuentran en el primer módulo de la Herramienta Ambiental de Encofor denominada Evaluación
Rápida. En este momento, cada una de las preguntas puede ser respondida en base a la Nota de Idea
de Proyecto, en combinación con mapas y documentos disponibles a nivel local (conocimientos de
expertos locales, datos de institutos de investigación y ONGs, e información que surge a raíz de la
participación de los actores). Se debe prestar especial atención a la opinión de las ONGs locales y los
representantes de los diferentes grupos sociales. A la hora de responder a estas preguntas, se debe
consultar a los actores y documentar sus opiniones, lo cual forma parte de la Declaración de Impactos
Ambientales definitiva y del capítulo sobre los comentarios de los actores en el Documento de Diseño
del Proyecto.
En este punto, las respuestas a las preguntas son cualitativas (de tipo "sí / no"), seguidas por una breve
descripción del impacto y/o problema probable o esperado. Cuando se responde afirmativamente a
algún criterio, implica que se ha detectado un impacto ambiental inaceptable, lo cual resulta en serias
dudas sobre la factibilidad de un proyecto sostenible en línea con las normas de la CMNUCC. Luego
de revisar nuevamente el problema y la información en la cual se ha basado, si permanece el problema
y un rediseño del proyecto no lo resolvería, se debe descalificar el proyecto.
2. Módulo de Pre-evaluación/Alcance
Después de identificar impactos negativos inaceptables en una o más de las categorías ambientales
antes enumeradas, el siguiente paso es el de determinar si existe algún impacto negativo potencial
significativo. Hacia este fin, el Módulo de Alcance ofrece una lista de control semi-cuantitativo y más
detallado, con la que se verifica si los supuestos impactos negativos son significativos y si requerirían
de mayor atención y la elaboración de una estrategia de mitigación en el estudio de factibilidad.
Nuevamente, la lista de control es estructurado en forma de principios y criterios. El módulo se
encuentra en la Herramienta Ambiental de Encofor como Evaluación de Prefactibilidad.
Ahora las respuestas a las preguntas son de naturaleza semi-cuantitativa (puntajes de 0 para "ningún
impacto" hasta 3 para "impactos significativos") y siguen basándose en la Nota de Idea del
Proyecto, conjuntamente con las fuentes de información local descritas en el Módulo de
Preselección. Sin embargo, esta vez se requiere de un análisis sobre cuáles factores o actividades
del proyecto han de incidir en determinados procesos o aspectos del medio ambiente. Este análisis
incluye una sencilla estimación del alcance de los impactos esperados, en términos del área afectada
y de la intensidad del efecto.
Según las modalidades y los procedimientos para las actividades de un proyecto MDL de forestación /
reforestación, para el primer período de compromiso en el Protocolo de Kyoto (Decisión 5 / CMP.1,
Apéndice B; Documento de Diseño de Proyecto para las actividades de proyectos MDL de forestación
/ reforestación), el análisis de la evaluación de impacto ambiental debe incluir los efectos negativos en
cuatro ejes temáticos: suelo, hidrología (agua), biodiversidad y vegetación, entre otros como el riesgo
de incendios, plagas, y enfermedades. Las evaluaciones de impacto en estos temas deben ser realizadas
según las normas, los métodos y procedimientos aprobados por la Autoridad Nacional Designada
(AND) del país anfitrión. Sin embargo, en muchos países la AND aún no ha sido creada o no cuenta
con normas, métodos y/o procedimientos aprobados. En ese caso, los temas (principios y criterios)
planteados en la evaluación de prefactibilidad de la Herramienta para el Análisis de Impactos
Ambientales de Encofor, podrán servir de fuente de inspiración, aunque ahora se requerirá de un
enfoque más cuantitativo, basado en fuentes científicas, conocimientos de expertos y los aportes de los
actores locales.
Una vez completada la evaluación de impacto, la herramienta brinda una guía para verificar si esta
evaluación es completa (Módulo de Evaluación de Factibilidad) y para mejorar la calidad de la
Declaración de Impactos Ambientales (DIA) (Módulo de DIA de Factibilidad). La Declaración de
Impactos Ambientales es un documento en el cual se va reportando cada paso del análisis y sus
resultados. No existe formato alguno que sea universalmente aceptado y recomendado. Esta guía se
basa en la versión de la Declaración de Impactos Ambientales de la Comisión Europea, puesto que no
se puede reflejar todos los requerimientos y las prácticas especificados en las evaluaciones de impacto
ambiental de los distintos países. Los resultados de esta declaración siempre deben leerse en conjunto
con las directrices y leyes nacionales o locales respecto a las evaluaciones de impacto ambiental. La
Declaración de Impactos Ambientales será agregada al Documento de Diseño del Proyecto.
El método multiplica el área relativa de la actividad (es decir, el área de la actividad evaluada para el
área total del sitio del proyecto) por la diferencia normalizada entre el valor observado del indicador y
el valor del indicador según el sistema de referencia. Para expresar el producto como porcentaje, se
multiplica por 100 (véase la Ecuación 1 a continuación). El valor mínimo será alcanzado cuando el
valor observado corresponde al del sistema de referencia elegido.
Este indicador da una idea de los cambios en la calidad del sitio. Las plantas deben ser
hidráulicamente compatibles con sus suelos (Sperry et al., 1998). Se desarrolla esta compatibilidad
con el tiempo mediante la adaptación, por lo que toda perturbación en las características hidráulicas
del suelo afectará dicha compatibilidad. Este indicador se refiere a los efectos sobre la densidad
aparente del suelo en el área bajo manejo y/o explotación. La compactación del suelo, cuando es
moderada y su textura no es excesivamente arenosa, aumentará el tiempo de permanencia del agua en
la capa superior del suelo, sin comprometer la relación ideal agua/aire, que es necesaria para el buen
desarrollo de la planta. No obstante, rara vez se da este caso específico. Si la compactación es tal que
se reduce el volumen del aire en el suelo por debajo de los valores mínimos aceptables para el
desarrollo de la planta y cae drásticamente la tasa de infiltración, entonces los impactos negativos
serán observados en términos de desarrollo de raíces y producción de biomasa (Munkholm et al.,
2005) y un aumento en la escorrentía superficial (Green et al., 2003, Johnson–Maynard, et al., 2002).
Por lo tanto, este indicador resalta cambios en la capacidad del ecosistema para amortiguar los flujos
hídricos y de sedimentos. Se tiene un máximo impacto cuando el 100 % del área se encuentra
completamente sellada y el número de unidades funcionales es el mínimo posible.
Ai I ref I i
S1 * *100 (2)
i At I ref
donde Ai : el área de la agrupación (cluster) i bajo explotación o utilización (ha); At : el área total del
proyecto (ha); I ref : la velocidad de infiltración del suelo bajo condiciones naturales (mm día–1); I i : la
velocidad de infiltración de la agrupación i bajo un determinado tratamiento o explotación (mm día–1).
Referencia: 100 % del suelo no afectado en I ref (S1 = 0).
El indicador es calculado dividiendo el área total en secciones con diferentes grados de compactación
del suelo (por ejemplo, caminos, trochas para transportar la madera, y plantaciones). Para cada sección
se pesa el área relativa con una baja permeabilidad comparada con el sistema de referencia. El puntaje
final se obtiene sumando los valores de todas las secciones. La compactación debido al uso de
maquinarias pesadas reduce la tasa de infiltración del suelo o la conductividad hidráulica saturada
(mm / día–1).
Este indicador nos da una idea de los cambios en la calidad del sitio. El indicador S2 toma como
referencia el perfil natural del suelo desarrollado durante siglos o milenios. El ecosistema altera o
influye en el desarrollo de la estructura y textura del suelo, entre otros procesos: mediante la
intercepción y redistribución de las aguas lluvias, reduciendo la erosión del suelo mediante el
desarrollo de nuevos sistemas radiculares en cada etapa del desarrollo del ecosistema. La modificación
en las características del suelo por acción de la biota tiene como propósito obtener el agua y los
nutrientes necesarios para convertir la energía solar captada por el follaje en la producción de biomasa
y semillas. El ciclo de nutrientes se mantendrá por el depósito de materia vegetal (principalmente
follaje) en la superficie del suelo (Johnson–Maynard et al., 2002; Mohr et al., 2005; O’Brien et al.,
2004; Phillips et al., 2004; Rutiglioni et al., 2004).
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación o utilización (ha); At : el área total del proyecto
(ha); d di : la profundidad de perturbación del suelo en la agrupación i (m); d soil : la profundidad total
del suelo útil para la actividad especifica en la agrupación i (m). Se considera que el máximo debe ser
un metro de profundidad, ya que la mayoría de prácticas forestales y agrícolas tiene lugar en esa capa.
Referencia: 100 % en estado natural (S2 = 0).
La estructura del suelo puede ser perturbado por el trabajo (arado, labranza, etc.), por lo que se incluye
la profundidad (m) del impacto. Una diferencia de cero en la calidad significa que no ha sido
perturbado ni utilizado el suelo. Se alcanza el mayor impacto cuando toda el área es manipulada
continuamente (cada año) hasta una profundidad de un metro o más.
La profundidad de la capa del suelo capaz de sostener la vegetación es desarrollada a lo largo de siglos
y/o milenios por factores abióticos (tipo de roca madre, viento, precipitación, temperatura, etc.) y
factores bióticos (por ejemplo, árboles, animales e insectos) (Johnson–Maynard et al., 2005, Rutiglioni
et al., 2004). Esta capa del suelo es crítica para sostener la vida, y su pérdida compromete gravemente
la provisión de agua y nutrientes para la vegetación. El suelo es un componente importante en todo el
ecosistema, especialmente para amortiguar tales flujos materiales como el agua, a través de la
infiltración y retención, el ciclo de nutrientes que pierden carbono (C), fósforo (P) y nitrógeno (N), y
otros elementos importantes (Al–Sheikh et al., 2005, Bakker et al., 2005, Cohen et al., 2005,
Haileselassie et al., 2005). Este indicador es calculado mediante la Ecuación 4.
Ai soil er i
S3 * d RS *100 (4)
i At bulk i
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación o utilización (ha); At : el área total del proyecto
(ha), soil er i : el cálculo de la perdida del suelo en la agrupación i con la pérdida universal de suelo
por erosión (tonelada ha–1 año–1 o para su aplicación kg m–2 año–1). Cualquier variante de USLE
puede ser utilizada según las circunstancias. bulk i : la densidad absoluta del suelo de la agrupación i
(kg m–3); d RS : la profundidad de las raíces en el suelo del sitio del proyecto (m). Referencia: ninguna
erosión del suelo ( USLE = 0).
En su forma general, la formula solamente toma en cuenta la erosión por acción del agua. Se calcula
utilizando la bien conocida Ecuación Universal de Pérdida del Suelo ( USLE por sus siglas en inglés;
USDA–ARS, 1961). En casos pertinentes, la erosión por acción del viento (Schwab et al., 1993) y la
erosión por acción de la labranza, deben ser agregadas a la ecuación. Entonces una pérdida de masa en
el suelo (kg / m–2 / año–1) es transformada en pérdida de la profundidad del suelo (m) utilizando la
densidad aparente (kg / m–3). Finalmente, la pérdida de profundidad del suelo durante un período de
100 años es comparada con la profundidad efectiva del suelo, hasta un metro. Una pérdida total de
suelo dentro de un período de menos de 100 años resulta en un máximo puntaje de impacto.
Este indicador da una idea de los cambios en la calidad del sitio. La Capacidad de Intercambio de
Cationes (CEC por sus siglas en inglés) es la cantidad de cationes (bases) intercambiables que pueden
ser absorbidos por el suelo, a un pH de 7.0, o sostenida en la superficie de arcilla o materia orgánica.
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación o utilización (ha); At : el área total del proyecto
(ha); CEC act i : la Capacidad de Intercambio de Cationes del uso actual del suelo en la agrupación i
(meq 100 gr.–1); CEC ref : la Capacidad de Intercambio de Cationes del uso referencial del suelo (meq
/100 gr.–1). Para suelos ácidos se puede utilizar la CEC efectiva ( CEC e ). Referencia: S4 = CEC ref .
Ai BS ref Bact i
S5 * *100 (6)
i At BS ref
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación o utilización (ha); At : el área total del proyecto
(ha);
BSact i : el porcentaje de la saturación de bases con el uso actual del suelo en la agrupación i
(%); BS ref : el porcentaje de saturación de bases según el uso referencial del suelo (%).
Referencia: S5 = BS ref .
El porcentaje de saturación de bases real se compara con el del sistema de referencia. Mientras mayor
sea la saturación de bases, menor será la capacidad del ecosistema para amortiguar y disipar energía.
Una mayor saturación de bases, significa menos lugares en el suelo donde puede darse el intercambio
de minerales entre el suelo y el sistema radicular.
Como se ha dicho ya, el ecosistema intenta amortiguar y disipar todos los flujos energéticos y
materiales que ingresan (Jørgensen et al., 1995). El agua en forma de precipitación es el flujo material
más importante que entra al ecosistema. Varios estudios demuestran cómo se distribuye este flujo
entre los distintos procesos, los cuales son característicos de cada tipo de ecosistema (por ejemplo,
Fisher et al., 2005, Obrist et al., 2003). Recientemente, Heuvelmas et al., (2004) propuso indicadores
hídricos sólidos para una nueva categoría en la evaluación de impactos para el uso del suelo,
denominada el ‘balance regional del agua’, como parte de la metodología de Evaluación de Ciclo de
Vida (LCA por sus siglas en inglés). Estos indicadores se fundamentan en probabilidades excesivas de
las variaciones temporales en los caudales. Sin embargo, aunque tales indicadores serían criterios
poderosos para evaluar los impactos en los ecosistemas, su estimación exige montar datos (es decir,
series de tiempo) que por lo general no están disponibles en los países en desarrollo o las áreas
tropicales. Tomando en cuenta la disponibilidad de datos, se ha propuesto los siguientes tres
indicadores para la evaluación de los impactos en el funcionamiento del ecosistema.
Este indicador da una idea de la disipación de energía. Este proceso abarca los efectos de la radiación
neta y transferencia de masa en un ecosistema. Ambas variables surten un efecto directo sobre la
energía del ecosistema. Penman (1948) ha desarrollado una ecuación física que demuestra con
precisión esa interacción. Monteith (1965) modificó la ecuación de Penman en términos de la
transferencia atmosférica, incluyendo la conductividad del dosel, por lo que esta ecuación se conoce
ahora como la “Ecuación Penman–Monteith”. El grado de pérdida por evapotranspiración indica una
disminución en la salud y productividad del ecosistema y una pérdida de control sobre los flujos
energéticos, hídricos y materiales (Goyal 2004, Obrist et al., 2003, Scott et al., 2004)
Ai E ref E act 1
W1 * *100 (7)
i At E ref
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación o utilización (ha); At : el área total del proyecto
(ha); E act i : la evapotranspiración con el uso actual del suelo en la agrupación i (mm año–1); E ref : la
evapotranspiración con el uso referencial del suelo (mm año–1). Referencia: W1 = E ref .
Este indicador da una idea del índice de disipación. Aquella porción de la precipitación efectiva que
no es ocupada en la evapotranspiración ni es absorbida por el suelo, es el componente rápido del
rendimiento hídrico total de una cuenca hidrográfica. La probabilidad de superar la capacidad de
amortiguamiento del ecosistema para minimizar el poder erosivo de la escorrentía superficial aumenta
con la reducción de la evapotranspiración, la intensidad y frecuencia de la precipitación y, desde luego,
la magnitud de la escorrentía en sí (Biemelt et al., 2005, van de Giesen et al., 2005, Zhang y Jørgensen,
Q
W2 * 100 (8)
Pe E avg act
donde Q : el total de la escorrentía superficial (m3 año–1); Pe : la precipitación efectiva (m3 año–1 / el
total de precipitación menos la intercepción); E avg act : el promedio del índice actual de
evapotranspiración sobre las diferentes agrupaciones del proyecto (m 3 año–1). Usualmente Pe y
E avg act se expresan en unidades de mm año–1, pero a fin de hacerlos congruentes con las unidades Q ,
deben ser promediadas entre todos los sitios dentro del área del proyecto. Referencia: ninguna
escorrentía superficial, W2 = 0.
Este indicador no es promediado por el área de la agrupación, sino por toda el área del proyecto, pues
generalmente la escorrentía es calculada o modelada para áreas mayores a las comprometidas en los
proyectos. Se alcanza el máximo impacto cuando toda la precipitación efectiva es evacuada en forma
de escorrentía superficial.
Este indicador da una idea de los cambios en la calidad del sitio. Se refiere a la adición o extracción de
agua, es decir el riego y drenaje. Este cambio en el balance hídrico tiene profundas consecuencias
sobre la calidad del sitio y puede resultar en una grave simplificación de las redes tróficas. Un
aumento en los aportes hídricos mediante el riego o una reducción de los aportes hídricos mediante el
drenaje, afectará a las especies animales y vegetales que evolucionaron para sobrevivir bajo las
condiciones hídricas naturales en el sistema de referencia (Rhoades et al., 1997, Sharma y Rao, 1998,
Wen y Recknagel, 2002). Bajo condiciones normales, estas actividades son realizadas para aumentar
la productividad biológica del área para el consumo humano, es decir, la agricultura.
Airr i Adrain i
W3 * 100 (9)
i At
donde Airr : el área bajo riego (ha); Adrain : el área bajo drenaje (ha) y At: el área total del proyecto (ha).
Referencia: Airr Adrain = 0.
Ya que es extremadamente difícil cuantificar la cantidad de agua extraída del área o agregada a ella,
solamente se toma en cuenta el área afectada. Se alcanza el mayor impacto cuando el balance hídrico
de toda el área ha sido manipulado.
La biomasa es la forma más obvia de almacenamiento de energía. Toda disminución en la biomasa por la
cosecha en cualquiera de sus formas o por cambios en la calidad del sitio, se asume que ocasiona una baja en el
control del ecosistema sobre los flujos energéticos, hídricos y de nutrientes (Houghton y Hackler, 1999, Kettunen
et al., 2005, Mortimore et al., 1999, Scheller y Mladenoff, 2005, Son et al., 2004).
Ai TABref TABact i
V1 * * 100 (10)
i At TABref
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación (ha); At : el área total del sitio del proyecto
(ha); TABact i : la biomasa total aérea actual en la agrupación i (tonelada ha–1); TABref : la biomasa
total aérea en el sistema de referencia (tonelada ha–1). Referencia: V1 = TABref
Es el área total del follaje por unidad de superficie de la tierra (sin dimensiones), que guarda relación
directa con la producción primaria neta del ecosistema (Hymus et al., 2002, Luo et al., 2005). Se trata
de un indicador confiable de la capacidad para absorber la radiación solar, la principal fuente de
energía (Dungan et al., 2004, Rascher et al., 2004), del potencial para reducir la energía cinética
proveniente de la caída de gotas de lluvia (Anzhi et al., 2005, Gomez et al., 2001, Pañuelos et al.,
2003 y van Dijk y Bruijnzeel, 2001) y, por tanto, la erosión del suelo, entre otras interacciones y
relaciones bien conocidas.
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación (ha); At : el área total del sitio del proyecto
(ha); LAI act i : el Índice de área foliar actual para la agrupación i ; LAI ref : el Índice de área foliar
para el sistema de referencia. Referencia: V2 = LAI ref .
El indicador se calcula en base al promedio del LAI durante un período de rotación. Los períodos sin
follaje (por ejemplo, la estación invernal) deben ser tomados en cuenta. La ausencia de área de follaje
resultará en el máximo impacto de 100.
Da una idea de la estructura vertical del interfaz vegetativo que amortigua la radiación solar, la lluvia,
el viento y otros flujos. Para una misma altura en la capa dominante de la estructura vertical, un menor
número de capas disminuiría la óptima o máxima capacidad de amortiguamiento del ecosistema
(Onaindia et al., 2004, Stephens y Gill, 2005, Wehrli et al., 2005, Will et al., 2005)
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación (ha); At : el área total del sitio del proyecto
(ha); H act i : la altura del dosel en el estrato dominante con el uso actual del suelo en la agrupación i
(m); St act i : el número de estratos con el uso actual del suelo en la agrupación i ; H ref : la altura del
dosel en los estratos dominantes del sistema de referencia (m); St ref : el número de estratos en el
sistema de referencia. Referencia: V3 = H ref St ref .
Por motivos prácticos se propone el uso de la altura dominante, es decir, la altura promedio de la capa
de vegetación dominante durante un período completo de rotación, tomando en cuenta los períodos de
suelo desnudo.
La Producción Primaria Neta (NPP por sus siglas en inglés – la fotosíntesis gruesa menos la
respiración autotrófica) es controlada por factores físicos, ambientales y bióticos (Garcia–Quijano y
Barros, 2005, Loescher et al., 2003). La Producción Primaria Neta libre (fNPP por sus siglas en
inglés) es aquella porción de la NPP que no se cosecha sino que permanece dentro del ecosistema
para desempeñar funciones de apoyo vital. En el sistema de climax natural, no hay cosecha y toda la
NPP se mantiene a disposición del ecosistema para sostener la red trófica. Sin embargo, el uso del
suelo, los cambios en el uso del suelo y el cambio climático, pueden alterar la disponibilidad de la
fNPP, disminuyendo así la capacidad del ecosistema para amortiguar los flujos energéticos y
materiales (Grant y Nalder, 2000, Howard et al., 2004, Houghton 2003, Williams et al., 2005).
Ai NPPref NPPact i Ht i
V4 * * 100 (13)
i At NPPref
donde Ai : el área de la agrupación i bajo explotación (ha); At : el área total del sitio del proyecto
(ha); NPPact i : la producción primaria neta con el uso actual del suelo en la agrupación i (toneladas
ha–1); Ht i : la biomasa cosechada en la agrupación i (toneladas ha –1); NPPref : la producción primaria
neta del sistema de referencia (tonelada ha–1). Referencia: V4 = NPPref .
Se compara lo que permanece en el uso real del suelo con la NPP del sistema de referencia.
Ai Dref Dact i
B1 * *100 (14)
i At Dref
donde Ai : el área de la agrupación i (ha); At : el área total del sitio del proyecto (ha); Dact i : el
Índice de Biodiversidad de Simpson para el uso actual del suelo (véase la Ecuación 14.1) en la
agrupación i ; Dref : el Índice de Biodiversidad de Simpson para el sistema de referencia (véase la
Ecuación 14.1). Referencia: Dref
nj nj 1
D (14.1)
j N N 1
Diferentes índices de biodiversidad como por ejemplo la riqueza de especies como número de especies
registradas en el área de muestra (Magurran, 1988), el índice de biodiversidad de Shannon (Shannon,
1949) y el índice de biodiversidad de Simpson (Simpson, 1949), fueron evaluados en lotes con
diferentes niveles de perturbación, para determinar cuál reflejaba de manera más confiable el efecto
que surte dicha perturbación en la biodiversidad. Onaindia et al., (2004) establecieron como mejor
índice el de Simpson, por lo que se ha adoptado aquí para estimar el cambio en la calidad de la
biodiversidad con el presente método. El índice de Simpson puede ser utilizado en dirección
horizontal o vertical y por vegetaciones de tipo funcional. En el presente método, D se aplica para
cada capa en la estratificación vertical del uso actual del suelo y el sistema de referencia.
donde Ai : el área de la agrupación i (ha); At : el área total del sitio del proyecto (ha); E act i : el
Índice de Homogeneidad de Simpson del tipo actual de uso del suelo en la agrupación i (véase la
Ecuación 15.1); E ref : el Índice de Homogeneidad de Simpson en el sistema de referencia (véase la
Ecuación 15.1). Referencia: E ref
D
E (15.1)
Dmax
S 1 N
Dmax * (15.2)
S N 1
Este indicador da una idea de los cambios en la calidad del sitio. Se refiere a la acción y/o las
sustancias benéficas / dañinas aplicadas al área a fin de aumentar la vitalidad y productividad del
cultivo o suprimir las plagas, enfermedades y plantas competitivas. Conlleva el riesgo de la
simplificación de las redes tróficas (Odum & Odum, 2003), pérdida de la fNPP (Demchik y Shape,
2001, Frank y Stuanes, 2003, Huber et al., 2004) y de la biodiversidad (Van Dobben et al., 1999).
Alfib
B3 * 100 (16)
i At
donde Alfib : el área de la agrupación sujeta a la aplicación de cal, fertilizantes, empobrecimiento y/o
biocidas (ha); At : el área total del proyecto (ha). Referencia: Alfib 0
Ya que no se dispone de suficientes datos por tipo de actividad, cantidad de sustancias y sus efectos,
solamente se toma en cuenta el área afectada. Se alcanza el mayor impacto donde toda el área es
manipulada continuamente (cada año). Reciben un menor impacto los sistemas de rotación multianual,
donde la manipulación solamente se produce en un número de años.
Este indicador señala el grado de dominancia de las especies exóticas en la vegetación (especies
cultivadas y otras). Se considera que las especies nativas aportan más a la capacidad de
amortiguamiento y almacenamiento del ecosistema debido a las características desarrolladas a lo largo
del tiempo para optimizar el nivel de exergía en el ecosistema (Lotka 1922). Las especies exóticas no
están adaptadas, por lo que se alcanza el máximo impacto cuando todas las especies son exóticas
(Koruss y Caraco, 2005, Norton y Miller, 2000, Strauss 2001, Webster et al., 2005, Wissman y
Beschta, 1998).
donde Aex sp : el área con cobertura de especies exóticas (ha); Aall sp : el área total del proyecto, que
contiene especies exóticas y nativas (ha). Referencia: Aex sp = 0 o 100 % especies nativas.
4.5 Agregación
Como ya se ha explicado, la tierra debe ser previamente clasificada en unidades homogéneas basadas
en la calidad del sitio y el uso del suelo. El evaluador es responsable del nivel de detalle utilizado para
este fin. Para cada unidad de tierra, se identifica el sistema de referencia vinculado con el tipo de sitio
prevaleciente. Luego, el puntaje del indicador es calculado para cada uso de suelo considerado dentro
de ese tipo de sitio. El siguiente paso es agregar los puntajes del indicador en los cuatro ejes temáticos:
suelo (S); agua (W); vegetación (V); y biodiversidad (B). Se considera poco deseable una mayor
agregación en un solo puntaje global, pues esto no permitiría la identificación de problemas bajo temas
específicos, e introduciría un paso extra de ponderación arbitraria.
n
Q Sn
i 1
QS where n 5 (18)
n
m
QWm
j 1
QW where m 3 (19)
m
x
Q Vx
k 1
QV where x 4 (20)
x
y
Q By
l 1
QB where y 4 (21)
y
De aquí en adelante, futuros cálculos dependerán del tipo específico de evaluación que se requiera, la
ocupación de la tierra y los cambios en el uso del suelo (Sección 4.5.2). Un ejemplo típico de ocupación
de la tierra es la agricultura tradicional.
Los cambios en el uso del suelo (por ejemplo, de tierras degradadas a bosques) pueden provocar
modificaciones en la calidad de la tierra (por ejemplo, la pérdida de biodiversidad, un aumento en la
fertilidad del suelo, etc.). Determinados cambios podrán producir un impacto positivo (es decir, un
valor Q negativo). Esto significa un aumento en el control exergético del ecosistema, como cuando
el chaparral, una planta para clímax, en casos de incendio, es transformado en un bosque nativo,
disminuyendo la erosión del suelo, aumentando la biomasa, etc.
Por definición, siempre se compara las diferencias de calidad entre la última rotación del uso anterior
del suelo y la primera rotación de su nuevo uso (Fig. 1). Sc mide la diferencia en calidad entre los dos
tipos de uso del suelo. Una degradación en la calidad de la tierra resultará en valores positivos en los
puntajes del indicador. Si un cambio en el uso del suelo conlleva una mejora en la calidad Q2 de la
tierra, S2 tendrá un valor negativo. Si el estado inicial es la vegetación climax natural, la diferencia en
la calidad Q1 será igual a cero. Si el uso anterior del suelo produjo una unidad funcional diferente,
entonces el puntaje del impacto se calcula así:
SC Q2 Q1 (24)
C Q referencia
a
l Q1
i Q2
d
a Q uso del suelo
d
n = rotaciones
Tiempo
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