Libertad de Expresión vs Libertad de Información

Para muchos puede parecer lo mismo pero es como situarse en cada caso en
la acera de enfrente, mientras la libertad de expresión es el derecho que tu ejerces a
manifestar de viva voz, por escrito, mediante movimientos corporales, pintando,
esculpiendo, besando. Un sin forma y maneras que tenemos lo seres humanos para
expresarnos, sobre el cual tenemos un relativo control. En cambio la libertad de
Información, está sujeta a nuestra capacidad de acceder a la información, de
procesarla y de emplearla para cumplir con todo el proceso. De esto dependes de
muchos medios que pueden o no estar a tu alcance, como tampoco controlas lo que
te ofrecen, como en el caso de los medios de comunicación masivas: como La
Prensa, La Radio, La Televisión, el Teléfono, La internet, para situarnos en esta
época en especial.

El 10 de diciembre de 1948, la Asamblea General de las

Naciones Unidas aprobó y proclamó la Declaración Universal de
Derechos Humanos, cuyo texto completo figura en las páginas
siguientes. Tras este acto histórico, la Asamblea pidió a todos los Países
Miembros que publicaran el texto de la Declaración y dispusieran que
fuera "distribuido, expuesto, leído y comentado en las escuelas y otros
establecimientos de enseñanza, sin distinción fundada en la condición
política de los países o de los territorios".

Artículo 12.

Nadie será objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su

correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene derecho a la
protección de la ley contra tales injerencias o ataques.

Artículo 18.

Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de

religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así
como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y
colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica,
el culto y la observancia.

Artículo 19.

Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este

derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar
y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras,
por cualquier medio de expresión.

Está claro que para poder ejercer un derecho fundamental, lo primero que tiene
que hacer un individuo es tener conocimiento pleno de esos derechos, luego estar
en capacidad de poder ejercerlo y contar con los medios para ello.
Es fácil para muchos poder identificar en donde comienza nuestro aprendizaje con
respecto a lo que significa nuestros deberes y derechos. Ese lugar lo comparte
nuestro hogar y la escuela. Aprendemos primero cuales son nuestros deberes y poco
a poco vamos descubriendo nuestros derechos. Cuando esta formación es constante
y de calidad, se nos hace fácil integrarnos a la sociedad sin sufrir mayores
inconvenientes. Pero el aprendizaje no termina cuando salimos de la casa o cuando
abandonamos la Escuela, porque al cumplir la mayoría de edad, nos esperan nuevos
retos y responsabilidades: Formar una Familia, tener un empleo, continuar
estudiando, involucrarnos en los asuntos de nuestra comunidad, grupo de
amistades, partido o ideología, religión, profesión.

Ahora hablamos de la realidad, de lo que realmente sucede en la mayoría de los

casos:

1.) Un hogar mal constituido no es un buen lugar para aprender deberes y

derechos.
2.) Acudir a la escuela para programar peleas, fumar, hacer fiestas, divertirse
en lugar de estudiar.
3.) No involucrarse en los problemas de tu comunidad: No asistes a las
reuniones de condominio.
4.) NO asistes a las reuniones de Padres y Representantes. Si tus padres no lo
hicieron contigo, porque tú lo vas hacer por tus hijos.
5.) NO te sientas cada día con tus hijos al regreso de la escuela para ver que
tarea traen, ni te preocupas por verificar si las hacen.
6.) Te atrae más la programación deportiva, las noticias y las telenovelas, que
leer, escribir, estudiar.
7.) Cuando asistes a la Iglesia, si es lo haces, te basta con escuchar el sermón,
dar un pequeño donativo, sin preocuparte de las Obras comunitarias en la
que todas las Iglesias participan. NO estudias las escrituras, para eso ya
tienes al Pastor y Cura para que te hable de ellas.
8.) Si existe una propuesta política o un programa en tu comunidad, ni te
preocupas, para eso están los líderes de las organizaciones políticas para
que se ocupen de buscar una solución.
9.) No te preocupas, por el contrario, te sientes agradecido que no lo tengas
que hacer: Estar pendiente de quiénes son y que hacen los líderes políticos
de tu comunidad, ni como son electos o como llegan a esa posición. Dicen
que te representan, pero ni te enteras, ni te interesas en saber cómo es
que ellos son te representan. De dónde salió su mandato. Quienes son.
10.) Pero eso sí, cuando esos líderes ven peligrar sus posiciones de
inmediato de convocan a protestar porque están siendo amenazadas tus
derechos y no sus posiciones.

En esto me viene a la mente las declaraciones del actual Gobernador del

Zulia, cuando manifestaba su protesta por el cierre de las 34 emisoras de Radio. El
decía: Han cerrado nuestra emisora, por donde se narraban las procesiones en
Semana Santa, ya no podremos escuchar nuestras querida gaita zuliana, ni nuestros
hermanos Colombianos escuchar sus vallenatos, como si alguna vez al pueblo le
consultaron que les gustaría escuchar por su Radio, o que programación prefiere ver
en la Televisión. Si lo llegan hacer, utilizarían el mismo procedimiento que emplean
los dueños de los partidos políticos para proponer sus candidatos a los votantes:
Primero se reúne los socios del partido y los patrocinadores del sector privado, los
que invierten en las campañas, para luego cobrar con contratos al llegar sus
candidatos a las posiciones que aspiraban. Luego estos deciden a quienes poner en
cada posición para ser electos, se lo proponen al pueblo, es algo así como jugar al
póker con las cartas marcadas.

Esas mismas personas que no se interesan en aportar su granito de arena en

la soluciones de los problemas de su comunidad, asistiendo a las reuniones de
Condominio de su edificio o en las asambleas de Vecinos o en los programas de
ayuda a la comunidad de su Iglesia o partido, es la que muchas veces sale a
protestar o apoyar a los medios de comunicación cuando estos se ven afectados en
sus intereses comerciales, porque no son complacientes con la corriente ideológica
en el gobierno y este los chantajea con reducir las pautas comercial, con
inspecciones de la oficina de impuestos, seguro social, bomberos, no renovación de
los permiso, trabas para importación de insumos, equipos, para que todo se eche al
olvido se llegan a un acuerdo, como lo hizo el Grupo Cisneros para salvar Venevision.

Esas mismas personas que dicen defender el derecho de los medios a mantenerlos
informados, son los mismos que no participan en la solución de sus problemas
comunitarios, a exigir su participación en la selección de sus representantes a los
cuerpos deliberantes y de gobierno en las alcaldías, gobernaciones y presidente de
la república, son los mismos que estacionan su vehículos en sitios prohibidos, se
saltan la luz roja de los semáforos, tiran papel en la calle, no saben que hacen o en
que gastan sus impuestos, les basta con protestar porque tienen que pagarlo
habiendo tanto petróleo. Son los mismos que se hacen de la vista gorda sabiendo
que la empresa donde trabaja están acaparando ciertos productos regulados para
presionar al gobierno a que suba los precios, para que por arte de magia se acaba el
desabastecimiento de ese producto. Son los mismos que saben de la estrategia
empleado por el comercio de reducir la oferta, para garantizar así la total colocación
de sus productos y presiona el mercado para que motivado a la poca oferta, cueste
más conseguirlo, como ocurre con la oferta de vehículos en el mercado Venezolano,
que siempre está por debajo de la demanda.

Esto me recuerda una conversación que tuve hace algunos años, poco después de la
nacionalización del petróleo, donde un empleado de las antiguas operadoras, antes
de 1974, contaba como el siendo empleado de una de esas empresas, burlaba las
inspecciones del gobierno de su país, contaba con lujo de detalles como se burlaban,
porque supuestamente no entendían los procedimientos para contabilizar la
cantidad de producto embarcado en los buques para su exportación, los cuales
siempre declaraban por debajo de lo que realmente estaba saliendo y de eso se
sentía orgullo el empleado Venezolano de la petrolera extranjera, que se estaba
llevando mas producto del que declaraba para el pago de los derechos de
Venezuela.

Es bueno recordar, cuando se formó la Junta Cívico Militar a la salida de Pérez

Jiménez, en la misma se encontraba que designado como ministro de Fomento el
empresario Eugenio Mendoza, que había contratado grandes obras con el gobierno
anterior, es decir, con la dictadura de Pérez Jiménez y lo primero que hizo fue
elaborar un Cheque para cobrarse o pagarse lo que le había quedado debiendo la
Dictadura a tener que salir tan apresuradamente del poder. A los pocos meses,
mucho antes de que Larrazabal entregara el poder al presidente electo: Rómulo
Betancourt, ya Mendoza se encontraba al frente de sus empresas. A los pocos
meses de nuevo gobierno, este hizo su primer decreto con relación a la economía,
rebajo en un 10% los salarios de todos los empleados públicos y el salario mínimo de
los trabajadores particulares., sello la muerte de las pocas líneas de ferrocarril que
habían en el país.

La emotividad hace que el Venezolano salga a la calle a defender los derechos de la

empresas de comunicación, a los líderes y partidos de la oposición, mientras ellos se
niegan a exigir sus propios derechos y asumir sus obligaciones para con el país,
porque han sido adoctrinados para aceptar la tutela de los líderes políticos y
empresarias, porque estos siempre les han ofrecido que al llegar al poder con su
ayuda, ellos serán los primeros en ser recompensados.

Sabes porque le tengo tanta rabia a Chávez, porque no para de hablar por la
televisión, no me interesa lo que dice o hace, quiero que nos dejen en paz, QUIERO
VER MIS PROGRAMAS DE TELEVISION sin interrupciones.

Felipe Torrealba