Professional Documents
Culture Documents
gustos slo se puede dialogar, pero no discutir. Aunque el gusto se va volviendo ms caprichoso y
puede exigir ms calidad de aquella basura que el nico fin reside en la fama y no en la
reproduccin ms amable para la captacin de nuestros sentidos, al menos hay que hacerlos un poco
ms exigentes y melindrosos (as como algunos son melindrosos para comer, que el odo sea para
escuchar y los ojos para ver).
Josue Vidal Estevez Ramos