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La alegra inundaba el nido de Mam Pata mientras ella, y los cinco lindos
patitos que ya haban nacido, miraban cmo se abra el ltimo huevo, el
ms grande de todos. Por fin ocurri el acontecimiento, pero... este pato no
se pareca en nada a los dems: era espantoso, muy grande, tena el pico
muy feo y las patas enormes.
- Cua, cua - Dijeron los patitos, - es un pato muy raro. - Mec, mec - Dijo el
Patito Feo - Hola mam, hola hermanitos! Pero ellos se asustaron ante tal
graznido y se escondieron bajo las alas de Mam Pato, que no poda creer
que un hijo tan feo fuera suyo. - Vayamos a nadar al estanque - Dijo Mam
Pato.
Desde la orilla, el Patito Feo se inclin para verse reflejado, y el ro le
devolvi la imagen distorsionada por las ondas del agua. - Cielos, es verdad
que no soy como ellos. - No queremos que vengas con nosotros, eres muy
grande y nos das miedo! - decan desde el agua los cinco patitos y Mam
Pata.
Llorando desconsolado se encamin hacia el bosque, donde unos trinos le
hicieron mirar hacia arriba: en una de las ramas haba un nido. Se
encaram por el rbol y se coloc junto a los pajaritos. - Pio, pio - dijeron
los polluelos hambrientos. - Mec, mec - dijo el Patito Feo. La Seora Grulla
traa comida para sus hijitos: - Qu haces tu aqu? - dijo - Tu no eres mi
hijo, debes irte ahora mismo.
De nuevo solo y triste, caminando, lleg hasta una granja donde haba
pavos y gallinas: - Aqu son todos diferentes, a lo mejor es aqu donde
pertenezco. Y entr con paso dubitativo para picar un poco de comida. Quin eres t? No eres como nosotros, vete, vete de aqu - dijeron los
animales.
El pobre patito o saba qu hacer ni a dnde ir, tena fro y hambre, estaba
cansado y deseaba compaa. Pero la noche se acercaba y resultaba
peligroso seguir caminando. Se acurruc entre unos juncos a la orilla de la
laguna, y all, derrotado por el sueo, se durmi suspirando: - Qu voy a
hacer? Adnde ir? Soy tan feo, que nadie me quiere.
El sol asom por el horizonte, iluminando la bruma sobre el agua. Sus rayos
despertaron al patito, que abri los ojos para ver el espectculo ms
impresionante: Dos magnficas aves, con plumas blancas como la nieve,
nadando majestuosamente, se acercaban hacia l. Abrumado por tanta
belleza, se escondi un poco ms, para que no le vieran.