Professional Documents
Culture Documents
Modificar hábitos de alimentación puede ser un desafío. Pero los beneficios de mantener el equilibrio en
cuanto a la alimentación hacen que valga la pena sus esfuerzos de planificación alimenticia.
Siempre que hay necesidad de alterar estilos de vida, se enfrentan algunos obstáculos o barreras. Esto es
perfectamente normal. Sin embargo, si se está preparado para enfrentar los obstáculos que puedan surgir,
se tendrán menos probabilidades de sentirse desanimado. Así que a continuación están algunos consejos
para triunfar en el cambio de sus hábitos alimenticios.
Comience poco a poco. No trate de cambiar todo de una sola vez. Alimentarse con regularidad y equilibrar
la cantidad de alimentos que consume durante el día debe ser su mayor prioridad. Luego, deberá tratar de
cortar la cantidad de grasa que consume, analizar el tamaño de las porciones, y utilizar menos sal. Pero no
tendrá que hacer todas estas alteraciones en el primer momento. Enfoque uno o dos cambios a la vez.
Después que las primeras alteraciones se hayan vuelto una rutina en su plan de alimentación será el
momento de pasar a la próxima etapa.
Busque apoyo. Todos se benefician de una alimentación sana, no solamente las personas que padecen
alguna enfermedad como diabetes o hipertensión. Por eso, si vive con otras personas, trate de hacer que su
familia o personas que comparten su hogar, también adopten sus cambios. Cuando todos se alimenten
sanamente, podrán apoyarse entre sí y las tentaciones serán menores.
En los momentos en que abandone su plan, trate de volver rápidamente a su rutina. Adopte un plan realista
de alimentación sana. Nadie (ni usted) logra comer correctamente todo el tiempo. Por eso, no espere ser
perfecto. Tenga claro que podrá caer en tentación de vez en cuando. Pero en esas ocasiones, vuelva a su
rutina lo antes posible.
Anote los beneficios. Propóngase prestar atención cuando comience a ver los beneficios de seguir su plan
de alimentación. Observe los cambios en su peso y tallas y la respuesta a lo que consume cada día. A
medida que comience a ver los resultados de alimentarse de manera sana, se sentirá estimulado a seguir su
plan de alimentación.
A continuación se describen algunas de las barreras que las personas que inician un plan de alimentación
pueden encontrar al tratar de alterar sus hábitos de alimentación. También se incluyen sugerencias sobre
formas de superar estas barreras. Usted podrá usarlo como una guía durante su esfuerzo para alterar sus
hábitos de alimentación.
3. Siente que la planificación de alimentos sería demasiado difícil para su familia o personas con
quien vive.
La comida puede ser muy importante para la vida familiar. Y sus seres queridos no siempre estarán
dispuestos a cambiar sus hábitos de alimentación y de cocina para adaptarse a sus necesidades.
Converse con sus familiares sobre las alteraciones que está tratando de introducir en sus hábitos
alimenticios y cómo esas alteraciones lo ayudarán a tener una vida más saludable. Solicite su apoyo
y paciencia durante este período en que se dedica a hacer estas alteraciones.
6. Usted no quiere tener que dejar de comer todas sus comidas preferidas.
No es necesario excluir ninguna comida de su planificación alimenticia, pero tendrá que ajustar
cuánto y cuándo las consumirá dependiendo del efecto que producen sobre su salud. Entonces, si
le encantan las galletitas caseras, por ejemplo, converse con su nutriólogo. Él o ella podrán darle
ideas de cómo incorporar sus alimentos preferidos a su plan de alimentación.
Un plan de alimentación adecuado y las dietas extremadamente restrictivas son cosas muy diferentes. Las
dietas restrictivas son una práctica a corto plazo para alcanzar un objetivo a corto plazo: una rápida pérdida
de peso. El “éxito” de una dieta restrictiva se mide en kilos perdidos. En cambio, un plan alimenticio
correctamente planificado, equilibrado y calculado es una forma de vida con un objetivo a largo plazo:
mantenerse saludable. Seguir un plan de alimentación saludable es un desafío diario para cada persona.
Así que no desespere, los cambios en sus hábitos alimenticios son un trabajo constante y permanente. En un
futuro no muy lejano verá los resultados: ¡Una mejor calidad de vida por su buen estado de salud!