EL NACIONAL - Domingo 11 de Abril de 2010 Economía/8

Economía

LABORAL El organismo escuchará a las partes en junio de este año

OIT admitió queja contra el Estado por acoso sindical en Guayana

Es la tercera vez que la OIT acepta investigar hechos relacionados con el mundo
sindical de las empresas básicas

FABIOLA ZERPA
fzerpa@el-nacional.com

La Organización Internacional del Trabajo aceptó estudiar la queja interpuesta por el

sindicato de empleados de la Corporación Venezolana de Guayana contra el Gobierno
venezolano, por graves violaciones a la libertad sindical, sobre la base de experiencias
de trabajadores de CVG, Sidor y Ferrominera del Orinoco.

El caso fue admitido por el Comité de Libertad Sindical de la OIT el 22 de marzo,

luego de que Juan Gómez, secretario general del Sindicato Único Nacional de
Empleados Públicos de la CVG, y el asesor jurídico, Eleuterio Benítez, recopilaran
información sobre cuatro experiencias en las que se evidencia una política estatal dirigida
a obstaculizar el derecho a la huelga y a criminalizar la protesta laboral.

Benítez dijo que la queja en contra del Gobierno se plantea "por el desconocimiento
deliberado de los procedimientos legales para la tramitación de los conflictos colectivos
del trabajo y persecución penal de trabajadores y dirigentes sindicales de las empresas
básicas de Guayana, tuteladas por la CVG, en franca violación de la libertad sindical".

Juan Gómez señaló que introdujeron el caso en noviembre e hicieron una actualización
en enero. "En junio asistiremos a la reunión anual de la OIT en Ginebra para pedir la
visita de una comisión a Guayana, que observe las irregularidades del Gobierno y medie
en la liberación de los sindicalistas privados de libertad ilegalmente", indicó. Benítez
apuntó que es el tercer caso que admite el organismo que involucra a las empresas de
Guayana en contra del Estado.

El primero lo introdujo en 1969 la Federación de Trabajadores de la Metalurgia. "El

segundo fue en 1982, cuando el Gobierno intervino el sindicato de Sidor con la
complacencia de la CTV", recordó Benítez, para entonces era dirigente obrero de la
acería.

En los momentos existen siete casos abiertos ante el Comité de Libertad Sindical de la
OIT, lo que convierte a Venezuela en el quinto país de la región con este tipo de querellas
interpuestas.

El primer caso que se expone es el retraso de casi tres años y medio en la aceptación, por
parte del Ministerio del Trabajo, de un reclamo para discutir el cumplimiento del contrato
colectivo de Sunep. Sin este primer aval, el sindicato no ha podido realizar la huelga que
se han propuesto para insistir en sus derechos. También denuncian que por una protesta
hecha en octubre se les abrió procesos penales a cinco trabajadores que se encuentran
bajo régimen de presentación.

Arrestos y acusaciones. El segundo caso tiene que ver con dos acontecimientos
protagonizados por trabajadores y líderes sindicales de Sidor. Uno fue la protesta por
mejoras de condiciones de trabajo de la contratista Camila, en septiembre de 2006, lo que
condujo al arresto y acusación de 10 empleados por varios delitos.

Luego, en marzo de 2008, 52 trabajadores fueron sometidos a juicio. El juez les otorgó
libertad plena, pero la Fiscalía General apeló la decisión. Todavía esperan un segundo
juicio.

El cuarto caso se refiere a la detención de Rubén González, secretario general del

sindicato de trabajadores de Ferrominera del Orinoco, quien fue detenido en septiembre
de 2009 por encabezar una protesta a favor del cumplimiento de la convención colectiva.
Fue sentenciado a arresto domiciliario, pero el pasado 20 de enero fue trasladado a una
sede de la policía de Ciudad Bolívar.

Los casos son admitidos en la Organización Internacional del Trabajo porque están
relacionados con dos instrumentos muy importantes del organismo: el Convenio 87,
sobre la libertad sindical, y el Convenio 98, sobre el derecho de sindicalización y
contratación colectiva. "Ambos han sido ratificados por Venezuela y por tanto son ley",
recuerda el experto laboral Carlos Sainz Muñoz. "Además, están reforzados por artículos
95, 96 y 97 de la Constitución, que contemplan el derecho a la sindicalización, la
negociación colectiva y a la huelga".

"Lo que está sucediendo", explica, "es que las inspectorías del trabajo impiden la
tramitación de los pliegos de reclamos y de conciliación. Restringen el derecho a la
huelga e inducen a los sindicatos a ir a un paro ilegal; luego vienen las sanciones.

Eso es inconstitucional".

Agrega que en la próxima reforma a la ley del trabajo se estudia establecer que los
trabajadores y dirigentes sindicales no podrán ser imputados por ejercer el derecho al
trabajo, garantizado en el artículo 87 de la Constitución.

Hacia Un Nuevo Poder Sindical