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Epistola VII DIDO INFLEXIBLE ANTE EL 1ADO Sinopsis 1Los mis incisivos recursos de las suasoriae son esgrimidos por Dido, al mismo tiempo que teie una fluida narracién. La primera ‘mitad del texto establece los hechos recientes. Luego, Dido se ‘remonta al tiempo de la llegada de Eneas y a sus propios reeuer- dos anteriores. (wv. 87-132). En seguida, el futuro: ; Preiiez? aAbandono? 2Retardo de la partida” 2 Suicidio? Y las impresio- hnes brotadas de tales posibles sucesos El libro TV de la Encida es la fuente continua para esta apo- logia de la esposa relegada, a cuya imagen volveré. Ovidio en el Ars amondi (II, 39'y 8), extrafiando que Eneas tenga fama de piadoso, siendo que dio a Elisa Dido la causa de la muerte y In espada ejecutora, sta es la t6nica de Jos ayes de Dido: Recibe, Eneas, las iltimas palabras de Dido, Sé que son indti= Jes mis Tuegos, pero debo censurarte que, al desatar tas naves, desatas tus promesas. Y todo para buscar un reing que 10 conoces y fragusr nuevos perjurios (1-22). Aun sabiendo tw ‘raicin, te sigo amando, pero con més dolor. Perdona, Venus, atu muera; Amor, atu hermana! (23-34). Eneas: que el oleaje fe haga detenerte, si tu Animo no lo hace (35-44), Dafiada, atin temo dafarte: no vayas a fa tormenta a maura gar. Prefieto perderte vivo 45-74). Vas a hundir contigo a ft hijo Ascanio? No taviste piedad hacia tw padre. A tu esposa, ddebes de haberla abandonado como 2 mi (75-86). iQué mal hice en acogerte y darte mis reinos! Durante la tempestad que me forz6 a refugiarme en un antro eontizo, quie~ nes pululaban eran las Fuménides, no las Ninfas (87-85). Oh Siqueo, difunto marido mio: castiga tt al perjuro, pues yo lo ‘rela fiel (97-110), conv SINOPSIS Mi destino siempre ha sido adverso: muerto mi esposo, his de mi hermano, hago canstruir una ciudad, y acabo stendo vieti- ma tuya (111-132). Y, si Dido queda grivida, con la madre mataras a un nozato, ¥ todo por buscar una fierra que se te cculta obstinada. Si deseas proveer de guerras a Julo, aqui mismo puedes tenerlas (133-156), Asi me castigas por haberte amado? Si te avergiienzo como mujer, Tlimame huésped, pero reténme (157-168). Espera, y yo te indicaré el tiempo en que el mar te dejard ir vivo. Entretanto, se calmari el oleaje y mi pasién (169-180). De otro modo, me arrancaré la vida: ya tengo desenvainada tu espada; In tefiré con mi sangre, No serd la primera herida, Ye tt amor me habia Berio antes (181-19), ee ‘Ana, hermana mia: ti sepriltame con honor y manda ¢ soi epilatio 91196). 2 5 coxxv va DIDO AENEAE, [Accipe, Dardanide, moriturae carmen Elissae; ‘quae legis, a nobis ultima verba legis]. Sic ubi fata vocant, udis abieetus in hexbis ad vada Maeandri coneinit albus olor. Nec quia te nostra sperem prece posse mover, adloquor (adverso movimus ista deo), sed merila et famam corpusque animumque pudicum cum male perdiderim, perdere verba leve est Certus es ire tamen miseramque relinquere Didon, atque idem venti vela fidemgue ferent? Certus es, Aenea, cum foedere solvere naves ‘quaeque ubi sint nescis, Ttala regna sequi? Nec nova Carthago, nec te crescentia tangant moenia nee sceptro tradita summa tuo? Facia fugis, facienda petis; quaerenda per orbem altera, quaesita est altera terra tibi. Ut terram invenias, quis eam tibi tradet habendam? Quis sua non notis arva tenenda dabit? ‘Alter amor tbi estat? habenda est altera Dido? Quamque iterum fallas, altera danda fides? Quando erit ut condas instar Carthaginis urbe ct videas populos altus ab arce 1498? Omnia si veniant nec di tua vota morentur, unde tibi, quae te sic amet, uxor crit? Utor, ut inducto ceratae sulpure taerae; M vu [Recibe el canto de Elisa que esti por morir, oh Dardinida; las dkimas palabras que lees de mi, ests leyendo}, Asi, al Ilamario los hados, echado en las Iiimedas hierbas, 2 ofillas del Meandro el slbo cisne canta, Y,, no porque espere que ti puedas por mi ruego moverte, ‘hablo —un dios oponigudose, eso hemos emprendido— pero, habiendo méritos y fama y cuerpo y Anitio honesto malamente perdido, eve es perder palabras Mas, zestis decidido a irte y dejar a la misera Dido, y llevardn los mismos vientos tu fe y tus velas? Mas, zestis resuelto, Eneas, a soltar con tu pacto tus naves y buscar reinos ftalos que no sabes dénde estén? No te tienta ni Ja nueva Cartago, ni las murallas {que crecen, ni el poder entregado a tu ceiro? Huyes lo hecho, buscas lo por hacer; por el orbe otra tierra has de buscar; jbuscada por ti ya fue otra tiesral Para que encuentres la tierra, zquién te la dar a que la (tengas? gquign sus campos dari a unos extrafios a que ténganlos? ee resta otro amor? :Debes tener otra Dido? gPara otra ver destruirla debes dar otra fe? {Cuando seri que fundes a ejemplo de Cartago otra urbe Y, alto, desde tu alcdzar observes a tus pueblos? Si todo ello suceie y los dioses no retardan tus votos, ide dinde poseeris esposa que asi te ame? Ado como, al afladirles azure, las teas enceradas; 4 Ut pia fumosis addita tura focis Aeneas oculis semper vigilantis inhaeret, ‘Aenean animo noxque diesque refert. Mle quidem male gratus et ad mea munera surdas ef quo, si non sim stulta, carere velim. Non tamen Aenean, quanvis male cogitat, od, sed queror infidum questaque peius amo, Pace, Venus, nurui, durumque amplectere fratrem, frater Amor! Castris militt ile tuis atque cgo quem coepi (neque enim dedignor) amare, ‘materiam curae pracbeat ille meae, Fallor et ista mibi falso iactatur imago; ‘matris ab ingenio dissidet ille sune. ‘Te lapis et montes innataque rupibus altis robora, te saevae progenuere ferac, aut mare, quale vides agitari nunc quoque venti ‘que tamen adversis fluctibus ire paras. Quo fugis? obstat hiemps. Hiemis miki gratia pros Addspice ut eversas concitet Eurus aquas, Quod tibi mafueram, sine me debere procelis; iustior est animo ventus et unda two, Non ego sum tanti (quamvis merearis,inique) ut peteas, dum me per frta longa fugis. Eexerces pretiosa oda et constantia magna, 55, dumm me eareas, est ti vile mori Jam venti ponent strataque aequaliter mda cacrulels Triton per mare curset equis. ‘Tu quogue cum ventis utinam mutabilis esses! "Ey, nist duritia robora vines, exis, Quid, si nessires insana quid aequara possunt? Expertae totiens tam male eredis aquae! “Ue, pelago suadente etiam, retinacula solvas, 35 ‘HEROIDA VIL [cual pio incenso echado a hogueras humeantes. Eneas siempre esté adherido a mis ojos de insomme], as a mi énimo el diay la noche a Ens traen, Pero él es malagradesido y sordo a mis doncs Y, Sino fuera estulta, de él earecer queria Eimpero, no odio a Eneas, aunque mal reflexiona sino infel lo Iamento y to amo peor, tras quejarme, ao, 1Perdona, Venus, at avera; y, hermano Amor, atu hermano duro abraza! Milite él ea tus eampamentos, yal que yo comencé a amar (pues no me arrepiento) 2 mis cuidados &l materia proporcione. Soy engafiada y cn falso para mi se agita esa imagen; 5 diferente de Ia indole de su madre, A tila piedra y los montes y robles nacidos en altas rocas han engendrado; a ti, las erueles fieras, ol mar, como lo ves ser atin ahora agitado por vientos, a do, empero, te aprestas a ir con adversas las. o

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