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PROBLEMATICA CONCURSAL EN EL DELITO DE ALTERACION DE PRECIOS DEL ART. 284 CP A PROPOSITO DE LA SENTENCIA DE LA SECCION SEXTA DE LA AUDIENCIA PROVINCIAL DE A CORUNA N° 23/2002 DE 12 DE FEBRERO Santiago B. Brage Cendan Profesor de Derecho penal ‘Universidade de Santiago de Compostela El comentario de esta sentencia n° 23/2002, de 12 de febrero (UR 2002/135555), de In Audiencia Provincial de A Corufa, cen relacidn con el delito de alteraci6n de precios que habrian de resultar de la libre concurrencia (art. 284 Cédigo penal), requiere, cn primer lugar, de una aproximacién a dicha figura delictiva, aproximacién que ineludiblemente pasa por acercarse a los co ‘mentarios doctrinales efectuados sobve este ilfeito penal, asf como por el andlisis de la escasfsima jurisprudencia recafda respecto al mismo, Precisamente, una de las razones que he tenido en cuenta 4 la horade seleccionar esta sentencia ha sido el exiguo nimero de resolvciones que han aplicado el art, 284 del Cédigo penal Festi: cl 2007. Acepod ilo 2007 435- No obstante, antes de adentrarnos en el andlisis de ls dis- tintos elementos que integran la mencionada infraccién delistiva, ¢s preciso, siquiera de forma muy sucinta, poner de manifiesto el relato de hechos probados, segiin el cual el dia 16 de enero de 1996 Ia Asociacién de Mejilloneros de Cabo de Cruz, en Boiro, tenia la intencién de descargar mejillén para procurar su dist bucidn en el mercado, lo que motivé que mejilloneros de otras zonas de Pontevedra se organizaran en un grupo muy numeroso de personas con el fin de impediria, Sobre las 8:25 hores de se dia, un grupo de unas treinta personas encabezadas por ef acusado Manuel C. O. impidié la entrada del camién propiedad de Mariscos Arcade S.L., que se dirigia a cargar mejillén. Una vez apeado el conductor, el propio Manuel C. O. trat6 de quitar 2 freno de mano del vehfculo a la vez que el grupo comenzé a ‘empyjarlo con la intenci6n de arrojarlo al mar, lo que fue evitado por miembros de la Guardia Civil, que no evité que desde ese grupo se lanzaran piedras, habiendo alcanzado una de ellas al citado camin,eausindole desperfectos valorados en 60.000 pts. BI acusado Manuel C. O, durante la mafiana de ese dia estuvo haciendo acopio de piedras y amontondndolas con el pie, para ‘acilitar al grupo la tarea de lanzarlas para impedir la descarga de imgjillén, Sobre las 20:30 horas se eprodujeron los ineidentes por parte del grupo, entre los que se encontraban los acusados José L. L. y Manuel C.[,,capitaneado por Manuel C. O., mediante el lanzamiento de piedras, hbiéndose llegado a rajar la rueda de un segundo cami6n para impedir su maniobrabilidad, ‘Tras este relato de hechos, el Tribunal, mostrando su isconformidad con la sentencia absolutoria apelada, estima en su Fundamento Juridico tercero que, aun teniendo encaje estos hhechos en el delito de coacciones del art. 172.1 del Cédigo penal, y de acuerdo con la tesis sostenida por el Ministero Fisca,, los actos de violencia se levaron a cabo con la finalidad palmaria de alerar los precios que habrfan de resultar de la libre concurrencia, ya que al obstaculizar la descarga y distribucién del mejillin se retendia alterar su precio que era muy bajo, por Io cual procede calficar los hechos por este tipo especifico del art. 284 del Cédizo -436- penal. Por ello, el Tribunal condené a los acusados como autores ‘de un delito de alteracién de precios del art. 284 Cp. alas penas de diez, siete y seis meses de prisiGn, accesorias y al pago de costas ccausadas en la instancia. Una vez relatados los hechos y visto el pronunciamiento del Tribunal, se hace necesario un breve andlisis de los elementos ‘mas importantes de este delito, para, a continuacién, detenernos cen los problemas concursales que se suscitan respecto a esta in- fraccién penal a propésito de la sentencia ahora en comentario. La primera de las cuestiones a analizar, dado su interés para la correcta interpretacién de este tipo delictivo, es la relati- ‘va al bien juridico protegido. En este punto, entiendo con otros autores que el mismo se cifra en la libre concurrencia en cuanto {que mecanismo para la fijaciGn de los precios en nuestra econo- rial. Se trata, por tanto, de un interés jurfdico supraindividual de carécter colectivo, referido a un aspecto importante del orden socioeecnémico como lo son los mecanismos destinados a la formacién de los precios en nuestro sistema econémico. En cuanto alos aspectos del tipo objetivo, en primer lugar, desde Ia perspectiva del sujeto activo, estamos ante un delito comin, ya que tanto Ta configuraciOn dela conduct tipiea como el empleo de la formula “a los que” expresa la no exigencia de ninguna suerte de especialidad en el autor de este deli. Por lo ‘que respect al sujeto pasivo, yen coherencia con nuestro entendi- miento del objeto jurdico protegido por esta norma, entendemos que el mismo es Ta colectividad, dado que sélo la colectividad podré ser el titular de un bien juridico que hemos calificado de 1 Vid, BRAGE CENDAN, S. Lo dei deulenacin de precios Expectat referencia als artcuon 262. 281 y 284 CP. Comares, Granada, 200, 9p. 5031; MORENO CANOVES, A./RUIZ MARCO, F., Deltas socio: rimices. Comentarios alos arts, 262,270 a 310 del nuevo Codigo penal {concordadosy con jrispradencia), Zaragoza, 1996, pp. 187 y 190. Ea ‘sts miss trmings se expesaba la STS de 36 de octubre de 1988 (Ar 8397, -437- supraindividual o colectivo y que con mayor precisién pocemos catalogar como bien juridieo general. Por otro lado, el objeto material del ilfeito penal contenido nel art. 284 Cp. viene integrado por los precios que habrian de resultar de la libre concurrencia, entendiendo que en tal concepto s6lo deben estar comprendidos los denominados “precios libres”, es decir, aquellos precios cuya determinacisn se realiza através de la confrontacién de la oferta y la demanda en el mercado en relacién aun concreto bien o servicio, y que la mencionada “libre concurrencia” debe ser entendida en el marco de un sistemaen el que se deja margen a a iniciativa privada junto con la intervencién de] Estado o de los grupos econémicos de presién y en el que existe un espacio para el compromiso en lafjacidn de los precios, Sistema que, por lo demés, tiene perfecto encaje en el marzo de nuestro orden econémico constitucional, en donde se consagra ‘un modelo de economia social de mercado en el que se combinan liberalismo y planificacién*. Finalmente, los mencionados precios deben ir referidos a unos bienes, que el art. 284 Cp. conereta en ‘productos, mercanefas, tiulos valores, servicios o cualesquiera otras cosas muebles o inmuebles que sean objeto de contratacién”, selacién que segén la doctrina cientifica es meramente ejemplifi- cativa, como se desprende de la formula abierta colocada al final dle Ia misma, siendo suficiente para integrar el delito con que se trate de una cosa mueble o inmueble susceptible de contratacién, quedando tan sélo excluidas las res exiracommercium, esto es, aquellas cosas que estando fuera del comercio no son susceptibles de contratacién*, Vid. MARTINEZ-BUJAN PEREZ, C., Derecho penal econémico y de la empresa, Porte general Tuas lo Blanch, Valens, 2007, pp. 164 ys. Aluiendo al eariter social de este bien jurico, vid, STS de 14 de mayo. te 1975 Ar. 2138), Vid. BRAGE CENDAN, S, Los delitos de alteracion de precas. op. cit pp. 157 ys; y STS de 21 de octubre de 1988 (Ar 837). © Vid. MARTINEZ-DUIAN PEREZ, C. Derecho penal econdmico ydeia en esa. Parte especial, Tiranto Blanch, Valencia, 2005p. 283; y MORENO CCANOVES, AJRUIZ MARCO, F,, Delt socioecondmicos.-- op. p. wr 438. Respecto al comportamiento tipico sancionado en el ar 284 Cp, ste consiste en intentaralterar los precios que habrian de resultar dela libre concurrencia, siempre que tal intento se reatice através del empleo de uno de los siguientes medios comisivos: difundiendo noticias falsas, empleando violencia, amenaza 0 en- gallo, o uilizando informacién privilegiada. El empleo del término “ntentaren alterar” —que delimita el nécleo del tipo penal— por parte del legislador penal, convierte a esta infraceién en un delito de consumacién anticipada, entendiendo por tal aque! ilicito en cl que Ia punibilidad se retrotrae al momento en el que se lleva a cabo el comportamiento contemplado en la norma dirigido @ Ja realizacién del resultado indicado, sin que sea necesaria su cfectiva verificacidn, Por otra parte, entiendo que en el término “alterar” debe comprenderse no s6lo el aumento ola disminucién de los precios que habrian de resultar de la libre concurrencia, sino también el mantenimiento artificial de los precios existentes, Girigido a impedir el alza o la baja de los precios a la que el mer- ceado de forma natural tenderfa’. Por lo demas, el comportamiento aludido silo podri ser objeto de punicién cuando selleve a efecto ‘através de los medios comisivos que de forma taxativa se expre- san en el art, 284 Cp., requerimiento legal de necesario empleo de ciertos medios comisivos que es una clara manifestacién de arelevancia del desvalor de accién en este delito*. Asf pucs, los intentos de alterar los precios que habrian de resultar de la libre concurrencia valiéndose de otros medios comisivos, diferentes {de los mencionados en el art. 284 Cp., no integrarin este delito, si bien podrdn encontrar acomodo entre un grupo més amplio de infracciones Gnicamente susceptibles de sancién en Ia via admi- nistrativa como contrarias ala libre competencia. Centrdndonos en la sentencia ahora comentada, vemos como el medio comisivo empleado para intentar alterarlos precios 5) Vid. BRAGE CENDAN, S,, Los deltas dealeracién de precios... 0. pp. 166197 6 Vid GARCIA-PABLOS. A. “Sobre ln fgura del delito de maguinaciones par alterar Tos precios nares de ls cosas". en Cuademos de Potics Criminal, 1981, Hp. 233, -439- ha sido la violencia, medio comisivo respecto al cual la doctrina y la jurisprudencia son undnimes a la hora de decantarse por una concepeién amplia del mismo. Asi, ya la STS de 23 de enero de 1978 entendia: “...1a dindmica comisiva tipica, la que ya no queda circunscrita a medios astutos, engafiosos o falaces, siro que comprende también los modus operandi violentos, ejercitados sobre las personas o sobre las cosas, asf como los coactivos o inti midantes”, y la STS de 2 de octubre de 1979 que ya manifestaba’ “...sino que se logré por los procesados una alteracién del precio dl pan en la gencralidad del territorio nacional, no conforme a derecho, utilizando como medio comisivo uno de los expresa- ‘mente previstos...como es el de Ia violencia, pues este término hha de ser interpretado comprendiendo la doble acepcién que en Derecho tiene como traduccidn de las vis absoluta y vis compul- siva”, En similar sentido se pronunciaba GONZALEZ RUS que procede a reconducir el concepto de “violencia” ala utilizacién {de fuerza fisica sobre personas o cosas, haciendo equivaleate la violencia ala vis physica y la amenaza ala vis compulsiva’. Como puede apreciarse, Ia sentencia que ahora analizamos sigue esta interpretacién amplia del concepto de “violencia” comprensiva de lautilizacién de fuerza fisica proyectada sobre personas 0 cosas, y que se plasma en el reconocimiento de este medio comisivo violento por el hecho del Ianzamiento de piedras a un camién sausindole desperfectos 0 por el hecho de rajar la rueda a un segundo camién para impedir su maniobrabilidad. No obstante, pese a que la violencia no se muestra como el medio comisive nds idéneo para intentar alterar los precios del mercado, como podemos ver en la sentencia objeto de comentario, dicho medio puede resultar relevante para articular la condueta delictivat, En relacién al tipo subjetivo del art. 284 Cp., se discute en Ta doctrina y en la jurisprudencia sila finalidad de alterar los 1 Vid GONZALEZ RUS, J.J, Curso de Derecho penal espaol Parte espe: lal (obra coletva dirsida por M, Cobo del Rosa), val 1, Madi 1996, p.8is, neste mismo sentio, vd. STS de2de octubre de 1979 (Ar. 3315). Cons precios que habrian de resulta de Ia libre concurrencia consti tuye un elemento subjetivo del injusto’, 0, por el contraro, tal finalidad se identifica con el dolo tipico, sin necesidad de que se constate un énimo especifico". En este punto, estimo que el delito que anaizamos no contiene ningin elemento subjetivo del injusto, ya que al configurarse como un delito de consumacién antieipada se ha renunciado a la idea de construi el injusto en tomo al elzmento puramente subjetivo anmico de obrar eon la intenciOn de alterar los precios. De este modo, la postura de la octrina y la jurisprudencia mayoritara de entender que en este {elito de ateracién de precios se comtiene un elemento subjetivo de injusto encuentra su explicacisn ene seno de una concepeién ceausalista del delito por el deseo de acomodar el nim de alterar Jos precios en el 4mbito de la antijuricidad y no en el de laculpa- bilidad. Pero si se incluye el dolo en el tipo de injusto carece de sentido exigirun especial elemento subjtivo del injusto diferente del dolo pira caracterizar Ia figura del art, 284 Cp., dado que el fnimo de alterar los precios de las cosas se identifica plenamente con el dol tipico*. ‘9 Ensendiendo que ta fnalidad consituye un elemento subetvo dl sid. LAXDECHO VELASCO, C. M/MOLINA BLAZQUEZ, C, Derecho penal esol Pat expec, Madsd, 1996p. 259; MORENO CANOVES, 'RIRUIZ MARCO, F Deltos socioecondmicos... op. cit, pp. 197 y 198 ROBLEDO VILLAR. A. Delltosconirael patrimono y el orden socoeco- némico, Comentarios alae arteulos 234 a 289 del nuevo Cid penal, Barcelona, 1997, p. 396; GONZALEZ RUS, J. Cerso de Derecho pec espanol... op. cit, p. 816; y SSTS de 4 de noviembre de 1965 (Ar 4974) 1Tde junio de 1970 Ar. 2603); 14 de mayo de 1975 (Ar. 2138); 3 de marzo de 1977 936; y 23 de ener de 1978 (Ar. 56). 10 Be este parecer, vd, SUAREZ GONZALEZ, C., Comentarios al Cio penal (obra colectvnalriida por G. Rodriguez Mourulo), Madsi, 1997, Pp. £20y 821; QUERALT JIMENF7, 11 Derecho penal espaol Parte ipeia, Barcelona, 1996, p. 593; VAZQUEZ TRUZUBIETA, C., Nuevo (Ciigo penal comentado, Madrid, 1996, p. 432; y STS de 2 de octobre de 1979 (3319) 11 Vid, BRAGE CENDAN, S, Los deitosdealteracin de precios. op. it. pp.242)243;y MARTINEZ-BUIAN PEREZ, C., Derecho penal econdmico de la mpresa Parte especial... op. et pp 288 y 289. “4d Por lo demas, la conducta contenida en esta infraccién penal es eminentemente dolosa, requiriendo el dolo el conoci- ‘miento y la voluntad referidos al uso de los medios tipicos y que los mismos permiten legar a alterar los precios que habrian de resultar de la libre concurrencia, y todo ello aconciencia de que es ilicito el indicado comportamiento. Asimismo, creo que, teriendo ‘en cuenta la estructura tipica de consumacién anticipada de este delito, sélo admite el dolo directo siendo incompatible con el dolo eventual”, sin perjuicio de admitir que la finalidad de alterar los precios puede ser compatible con otros propésitos que el autor pueda albergar, v. gr. el énimo de lucro. Volviendo a a sentencia en comentario, en el Fandamento Juridico tercero el Tribunal analiza los elementos comunes y di tintivos de los delitos de coacciones (art, 172.1 Cp.)y de alteracién de precios (art. 284 Cp.), concluyendo en el caso concreto que la finalidad del empleo de la violencia en el supuesto de las coaccio- nes no posee relevancia, mientras que en el delito de alteracién de precios la finalidad “ha de ser para alterar el precio de venta del ‘mejill6n, que a juicio del grupo de Ios acusados, era muy bajo” Dicha finalidad, que segiin el Ministerio Fiscal en su recurso es palmaria al no existit otra raz6n para las presiones y disturbios, la deduce el Tribunal tanto de la motivacién de tales actos como de la declaracién de uno de los acusados al manifestar que “dijo a la gente que no vendiera bajo”, Io que viene a corroborar la necesidad de un dolo directo y a imposibilidad de admitir en esta figura delictiva el dolo eventual. ‘Analizados los principales aspectos objetivos y subjetivos {el tipo penal contenido en el art. 284 Cp.,debemos ahora detener- ‘nos en Ios problemas concursales que se suscitan respecto a esta infraccién penal a propésito de Ia sentencia ahora en comentario, Eneste punto, el Tribunal, en los Fundamentos Juridicos segundo y tercero, viene a plantear una suerte de concurso aparente de normas penales entre los delitos de coacciones (art. 172.1 Cp.) 12 Vid, BRAGE CENDAN, S, Los delitos de alteracin de precios. ect pp. 289 250, 442 yy el delito de alteracién de precios (art. 284 Cp.), que entiendo resuelve aplicando el conocido como principio de especialidad regulado ea la regla 1° del art, 8 del Cp., segdin el cual el precepto mas especifico—en este caso el art. 284 Cp. al incluir a finalidad de alterar el precio— despalaza al més genérico —aqui el art. 172.1 Cp.—. Ademis, como reconoce de forma expresael Tribu- nal, uno de los motivos que inelina a la Sala acalificar los hechos ccon arreglo al tipo especifico del art. 284 Cp. es el de beneficiar ‘alos acusados, ya que la pena que dispone este precepto (prisién de seis meses a dos aflos 0 multa de doce a veiticuatro meses) es ‘mas leve que la que acompafia al art. 172.1 Cp. (prisién de seis meses a tes aos o multa de doce a veinticuatro meses). Para determinar si Ja sentencia en comentario ha dado tuna solucién acertada ala problemiitica concursal antes teferida, debemos ccupamos, aunque sea de forma parcial, de las relaciones cconcursales de Ia norma contenida en el art. 284 Cp. que, como ha legade a sostener algin sector de Ia doctrina, presentan una notable ccmplejidad”, En primer lugar, debemos constatar como novedad del mencionado precepto el expreso reconocimiento que en su inciso final hace al concurso de delitos, al decir “sin perjuicio de la pena que pudiera corresponderles por otros delitos cometidos”, reconocimiento que, por otto lado, no se efectuaba ‘en el anterior y derogado art, 540 Cp. No obstante, coincide con otros autores a la hora de reconocer Ia innecesariedad de semejante cldusula, aunque pueda ostentar una cierta funci¢n motivadora, dada la benignidad de las penas previstas por esta disposicisn’ Por lo dems, este genérico reconocimiento del concurso de de- litos resolvié una polémica cuestiGn que habia sido discutida por la doctrina durante la vigencia del anterior art. $40 Cp.,relativa al tratamiento de los medios comisivos mencionados por la norma 13. Gr MORENO CANOVES, AJRUIZ MARCO, F., Delt socioecondm 05. Pts P18, 14. Yacnscacin alosanterioresdalitos de maqunaciones dos ats. 39 y 540 Cp BOIX REIG, J, Derecho pena. Pare especial, Valencia, 1993p. 985, Aesacaba el carctersuperfun de serene liusua concurs presente en ‘primero de los mencionados presepts y auseneenel segundo de 443. cuando éstos son por si mismos constitutivos de otros delitos. En este sentido, respecto al atiguo art. 540 Cp., que como ya kemos {dicho no contemplaba cléusula concursal alguna, un sector de la

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