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I In ‘oduetion, LAvehe, Paris, segunda edicién can un asevo prefacio, 1958; vol, Th Fondemenis dune socilogie de la ‘quotdienncté,VArche, Parts, 1961 (Cm Guy Debord, Comentarios sobre la sociedad de expect, ‘wad. cast. de Carme Lépes y JR. Capella, Anagrama, Bar celona, 199, HCC: Gyorgy Laikics, Historia y consciencia de clase, tr east, de Manuel Sacristan, reed. en 2 vols, Sarpe, Madrid, 1984, 1S: Revista Intemational Situationniste, reed, Librairie Ae sme Fayard, Parts, 1997 (la primera cifra indica el némero se a revista, la segunda la pagina). (OCC: Guy Debord, Oewores cinématographiques comptes, Gi limard, Pars, 1994 (OME: Karl MarvFriedrich Engels, Obras. Edicion dirgida por Manuel Sacristin Luzon, Critica Grijalbo, Barcelona Buc nos Aires Mexico (ln primera cffa indica el volume la se sunda la pagina) Pan: Guy Debord, Pandgvrigue, Gallimard, Pacis, 1993. Pott: Potlatch 1954-1957, Gallimard, Parts, 1993 Rapp.: Guy Debord, Rapport sur le construction des situations ‘sur les conditions de organisation et de faction dela ten= asic situationsste satemational, en Intemvationale Sita- tionmist, reed. op. eit, apendiee. ‘aE: Guy Debord, La sociedad del espectéculo, wad. east. de Jonge Diamant, Ediciones de la Flr, Buenos Aires, 1974, VS: Debord y Sanguinetti, La writable scission dans Unter: tiomale,Fayard, Parts, 1998, 1S, designa también la onganizacién del mismo nombre, TLE design la Internacional Letts La editorial Champ Libre cambié su nombre, en otoia de 1984, por el de Editions Gerard Leboviei, bajo el cual Foeron reediiads tambien las obras publicadas anteriormente, (Al final del voluoen se halla na bibliograiadetallada dels ceseritos de Debord)” * Las referencias a versiones casellans haa sido itrodcidas por sl watlucto de a presente dion as itd las traduccones caste lanas de Debord asta donde nos fae posible, de xt todos los de ‘mis autores han sido cota con lfeno oignl yen sco Aebidamente corridors (8 ae) 5 PROLOGO ALA EDICION ESPANOLA Si este libro lograsusetaralggin interés, se debe evidente mente al hecho de que habla de Guy Debord. Si Espata eel primer pais en donde este libro se publica en wna editorial de Ampla difusia, en una traduccion confiada desde el inicio a tun traductorexperto y conocedor de la materia, caso se pue= 4a deducir de ello que Espana ests hoy més dispuesta ue ‘otros paises a reconocer el valor de una persona como Debord, fquea su vez profes un profando amora Espata. En la epope- ya personal de Debord, Espa constituyé una etapa funda mental: dice de sf mismo que tu sla dicha de conocer Ia Es. pata verdadera»,” y le dedica pequenas pero. sgnificativas alusiones en diversos textos (Panégyvigue, Des covtrats). De- tora hace referencia muchas veces ala revoluckin de 1936, sea porgiue la consideraba wel esbozo mas avanzada que jamés Inubo de un poder proletaris (SAE § 94), sa porque la colabo racién de las diversas fuereas contramevelucionarias que 5¢ dio en esa ocasion tuo un significado paradigmastico y revelo plenamente el earécter dl estalinism. Debord, ila x doble haturaleza sclisica»y erevolucionariay que en verdad no soa Sino dos aspectos del mismo juego com el tempo, con la histo "ia, publicé en 1980 una traduccion francesa de las Coplas por Ta muerte de su padre de Yorge Manriquc y, aquel mismo x80, un apasionado llamamiento en apoyo de los presos «autone: moss de la prisién de Segovia? ¥'si muchos han subravado lo ue el estilo de Debord debe a los moralistas frances dels 1. Jorge Manrigue, Stance su la mort de som pire tradi y epilogo de Guy Debord, Champ Lie, Pris, 1980, 2 Coordination des gmupes autonnmnes WEsfgne, Appel de ka prvon de Sigs, Champ Libre Pars, 1980 Por que decir que Debord todavia ingusta? -No se corre al deciro el riesgo de contbuir a In mitficacin? cAcaso no se lee ahora a Debord en las universades? :No ae ha converte fen un autor come ctalqier otra? No es casual, de tslos mo dos, que ahora se exalte ante todo su calidad de sescitors en detrimento de su ertica social. En in momento histrico en ‘que no falta el descontento provocada por la demencia dela ‘economia mundializada, se concede sobrad espacio a quienes * En castellano en loge (Nel 7) * Alusion a Abimall Guzman de Sender Latinas, (de) I. Bnel progr »Nolts nsgnctigues. Pnternatonale Sato ists emi 10 de mayo de 1998 por Radio France Cure 10 venden eriticas parciales, 2 un falso anticapitalismo que de hhuneia la especulacisn financiera, la contaminacion del medio ambiente ola corrupelén, y que propone remedios moralistas mtervenciones keynesianas. La ertica total de las bases del Sistema capitalist, del dinero, de la mercancia, del Estado y el trabajo, en cambio, debe ser exorcirada mas que mance, porque tal vez nunca haya exstido tanta gente que podria estar Interesada en poneria en prctica, ‘Acaso Debord muriera antes de haber acabado st: obra Pero no pertencce la clase de autores de los que se deja de hablar cuando no pueden va participar en lox debates telovis ‘os, Debord ha entrado ya en el reducido efteulo de las perso zhas que eonversan entre, j'eon quienes se conversa, a raves de los tiempos, con lox gue sen misicos callados contrapuntos Jal sueto de la vida hablan despicrtose.* Roma, junio de 1998 * Bn castellano ene orginal (N. delT) See nee eee eee eee eee ae eae EL CONCEPTO DE ESPECTACULO, etlay que quemara Dsbord? CCertas épocas dieron muestras de una fuerte creencia en el poder del pensamientoertico, Ast, la del emperador chino Shi Huang Ti, quien organiz6 la primera quema de libres, la que condené a Anaxagoras y a Séerates,o aquela que mand & la hhoguera a Bruno ¥ a Vanini. Have tan solo velnteafios gue en Tra, bajo el résimen dal sha, una maestra fue sentenciada cadena perpetua por poseer un ejemplar dela Ciencia de a 1 sce de Hegel. ‘Nuestra epoca, pore contrario nos referimos alos dtimos ddecenios de ls Europa occidental, ha tenido a sus pensadores, ¥ generalmente no sin razon, por gente totalmente inofensiva, Mas de uno que se declaraba enemigo jurado de lo existente fe acogido con los brazos ableros en la universidades a en Jn television, y las mas de las veces el amor fue reciproce. Entre las pocas personas consideradas de todo punto inaceptables se halla sin duds Guy Debord, Durante mucho tiempo se interes por él mas Ia polici que los Grganos normalmenteencargados tela difusidn del pensamiento, Pero Finalmente al aettid ya ho bastaba, pueste que las teoras elaboradas por él y sus ami gos los situacionistas habian comenzado, a pesar de todo, & dlespertar la atencion de la epoca. Desde entonces se observa ‘ira teniea de acultacion: la banalizacion. Hay pacos stores ‘contemporineos cuyas ideas havan sido utlizadas dé manera tan deformada como las de Debord, y por lo general sin men: (Sd § 3 La scconomias ac ha de enlende fh portato, como una parte de la actividad humana slobel que donna todo ef resto Elespectécilo no es otra casa que ete dominio autoctatico de Incconomia mercantile) Chr 12) La economia autonomt 2a ex yu de por at una allenacon a produecion coundmlca se basa en la allenacién ln allenacon se ha converte en 5 roducto principal el dominio det economia sobre la soci Cael enter entra esa difsion main del lennon que onsite precismente el epectacuo.sL economia tans forma el mundo, pero To ator solamente en mundo dela conomian (Sd £30) Se habré comprendido que agus no se habla de economia en el sentido dela «production materi, sin a coal ova: ‘mente nnguna sociedad podria exist. Agu se habla de na conania que se a indeendiado gue somete tI vida Mit tana To cual ex consecvencin del nfo de a meeanct ne interior del moda de produccion, Bin el segundo capitulo de La sociedad det espectdeulo se 25 analiza el proceso por el eual da economia entera se transfor znd entonees en lo que la mercanca habla demostrado que era durante esa conquista: un proceso de desarrollo cuautitativs {aE § 40). La explicacion del predominio del valor de cambio sobre el valor de uso no se aparta dela que diera Marx, ni aun cuando recurre a formulacionesfiguradas como éta: al valor de cambio es el condotiero del valor de uso. que tering li brando la guerra por su propia cuenta» (SUE § 46)" Si Marx haba hablado dela le de la ead tendencial de fa tase de be neficio, Debord habla de uns «caida tendencial del valor de uso» como econstante de Ia economia capitalist (SAE § 47), decir, de Ia subordinacién progresiva de cualquier uso, in | cdo cf ms trivial alas exigencias del desarrollo dela econor ‘mia y, por tanto, ala pura eantidad. Aungue el progreso de la economia haya resuelto en una parte del planeta el problema de la supervivencia inmediata, la euestiin dela supervivencia | on sentido lato se vuelve a plantear una y otra vex, pucsto ae Js abundancia de la mereancia no es mas que careniia provista de equipos materiales, Cuando Debord coneibe I alienackén el espectéculo | como un proceso de abstraccién cuya origen esté en la met= cancia y su estructura, esta desarollando ciertas Meas que ran fundamentales en Marx pero que no por azar han gozado Ade escasa fortuna en la historia del marxisno, Para Hegel a alienacion esti consituida por el mundo ob- Jetivo y sensible, hasta que el sujeto ega a reconocer en este ‘mundo s propio producto. También para ls sjoveneshetel nos, Ludwig Feuerbach, Moses Hessel primer Mar la ale: hacidn es una inversion de sujeto y predicado, de lo concrete § lo abstracto. Elles la conciben, si embargo, de una Manet ‘exactamente opuesta a Hegel el verdadero sujto es par ellos cl hombre en su exstencia sensible y conereta, Este hombre se vucliealienado cuando se convirte en predicado de una abs. tnaccion que él mismo ha puesto, pera que no reconoce ya com tal y que se le aparece, por tanto, como un sijelo. Asie hhombre acaba dependiendo de su propio producto que se ha independizado. Feverbach descubre I slienacion en la prosee- cin de Ia potencia humana al ello de la relign que deja im potente al hombre terrenal; pero la vuelve a encontrar ass: mo en las abstracciones de Ia filosofiaklealsta, pars a cual el hhombre en su exstencia conereta no es mis que una forma fe- 26 noménica del Espiritu de lo universal. Hess y el joven Mar ‘entiican otras dos aenaciones fandamentales en el Estado y cen el dinero, dos abstracciones en las que el hombre se aliena fen calidad cle mimbro de una comunidad y de tabador Eso Siguiica tambien que ol Fendmeno no afecta de igual modo = tera la shumanidade, sino que una alienacién particular pesa sobre aquella parte dela humanidad que debe trabajar sn po ‘cer los medios ce produccién. Su propio producto no les pete rece y se les aparece, portant, como una potencia extras ¥ hos En todas las formas de allenacin, el indviduo concreto posee valor sdlo en cuanto participa dela absiracto, es decin en fuanto posee dinero, es ciudadano del Estado, os un hombre | ante Dies un «s-mismos en sentido filoséia, Las actividades. | 41 hombre no tienen ningin fin en st mismas, sino ue sirven exclushamente para que pueda aleanzar lo que él mismo ha ‘creado y que, an sienda conoshide como mero medio. se ha trunslormade en un fin, El dinero es el ejemplo ms evident, Fl espectéculo es, en efecto, el desarolio mas extremo de cesta tendencia a la abstraccién, y Debort pede decir del es pectdculo que su emodo de ser conereta es justainente la abs- traceione (SAE § 29). La desvalorizecén de la vida a favor de las abstracciones hipostasindas involucra entonces a todos los aspectos de la exisenela las mismas abstracciones convertidas en sujeto no se presentan va como cosss, sno que se han wie to mas abstractas todavia, transformandose en sindgenes. Se puede decir que el espectéculo incorpora todas las vies alle haciones el espectactlo es «la reconstruccién material de Is ‘usin religiosan (SAE § 20), el edinero que se mira solamente (Gd § 49), inseparable del Estado modemor (SdE § 24), es sla ideologia materalizadae(xtulo dl ultimo capitulo de La Sociedad del espetdculo)? ?Pocos aos despus, Marx supera esta concepsién, atin de- ‘masiado flosfica, de laalienacién como inversion de suieto y predicado y como subordinacin de la eesencla humana ss proplos productos, Enel Manifesto del Partido Comunista io niza contra aquellos slterats alemaness que =a continascion de Ia erttica francesa de las relaciones dinerarias eseribian, “enajenacion de la esencia humans’. Pero 1 concepto, de 5 allenacién, entendida como abstraccién,retorn en los eertos Gel Marx madiro sobre In eritica de In economia politics dom Ge se revela, por otra parte, el orig histrico del proceso de abstraccion. En el primer capitulo del primer volumen de El 2 Capital, Marx analiza la forma de la mercancia en cuanto nt tleo’de toda la produccidn capitalista y demuestra que el pro ‘exo de abstraccén, lejos de ser so un deplorable revs dela svonomia madera, se halla ens corazén mismo. No hay gue olsidar que en este andlisis de la forma-mercancta Mats no he | bla aun ni dela plusvala, nl dela venta de la fuerea de abajo, ni del capital. Todas las formas més desarrolladas dela coon ‘nia capitalista se derivan, en el analiss marniano, de esac tmuctura ofiginaria de la mercaneia -que es com la seh del ‘cuerpor-"" y de la contraposicign entre lo concrete lo abe- tracto, entre cantidad y cualidad, entre produeci¢n y consumo, entre la relaciin social y Ta casa que esta protuce Marx subrava el dobie cardcver de la mercancia: ademés de su utlidad -es decir su valor de uso, ésta posee un valor ue determina la relacin por la cual se intereambia con otras es éancias (valor de cambio). La evaded concreta de cada mers canefa es necesariamente distinta de las de tolas las detnda ‘mereancias, ue resultan en este plano inconmensurables en tac sf. Pero todas las mercanciss tienen una sustancia cont «gue permite intercambiaras, en la medida en que representa diferentes cuantias de dicha sustancia, Mary identifica esta “sustancia del valor» con la cantidad de tiempo de tabs abe | tacto que se necesita para predict la mercancta en cuestion, En cuanto valog, In mercancla no pose, por tanto, ningua ‘cualidad expect; las diversas mercanciss se diferencia et tre sf solamente desele un punto de vista cuantitativo, Lo que constiuye el valor del producto no es, sin embargo, el bajo cconcretoy especifico que lo ha ereado, sino cl trabajo abate fo, sGon el earacter di de los productos del trabajo desapare- cx el earicter itil de los trabajos representa en ellos, dose Parecen, pues, también las diferentes lormas concretas de aoe trabajos, que dejan de diferenciarse y se reducentedon juntos trabajo humano igual, a trabajo human abstracto.s” Se pier de el carécter cualitativa de los diversos trabajos que prodcen productos dstinios. El valor de una mereancia es sol tna scristalizacions de aquella«gelatinas que es el strabajo hums to diferenciado, en el sentido de un mero sgasto prodiclive del cerebro, los musculos, los nervies, la mane, ete, del hon bres" euya nlea media ex el iempo que se hayn gastado, Se trata siempre del tempo necesstio, por tminio media, para broducir un determinado producto en una sociedad dada y con unas condiciones de produceién dads los trabajos més cons 28 plicados tienen el valor de un trabajo siempre multiplicado, es fleet, de una mayor cantidad de trabajo simple: En la formal sparentemente trivial «veinte metros de tela valen lo misino fue cinco kilos de ts, Marx descubre la forma ms general de toda Ja peoduccion capitalist: dos cosas concretas adquieten Ja forma de algo dstinto que las une, el trabajo abstract, cua Forma final es el dinero, ‘Toda mereancia debe tene, sin embaryo, un valor de uso y satisfacer alguna demands, sea éstareal o inducida El valor de tuna mereaneia se presenta siempre bajo Ia forma de un valor de uso que en el proceso de intercamblo sélo cuenta como ‘portador» dal valor de cambio. El valor de uso, para realizar Se, debe converte en slorma de manifestacin de su opuesto, alors. El proceso mediante el cual lo concreto se converte en un predicado de lo abstracto es entendido aqui por Marx no yen un sentido antropoldgico, sino como consectencia de wn Fenémeno histdricy determinado, Ua difesion de la mersancia «s, efectivamente, un fendmeno de la época moderna. La bordinacin de la calidad a la eantdad y de lo conereto a lo abstracto ests insert en In estructura de la mercancta, pero no toda produccion humana se basa en el intercambio ni por tanto, ena mereancta “Mientras las diversas comunidades hnmanas, como las al- leas, producenellas mismas lo que necesitan y se limita al in tercambio ocasional de los excedentes, la producsin est de- terminada por el valor de uso. Cada trabajo particular forma parte de tuna division de tareas en el interior de la comunidad, 2 la cual se halla dtectamente vinculado, y conserva tn carte ter cualtative. Marx dice, por consiguiente, que el vnctlo so sial se produce ai ve que la producién material Las relacio nes entre los hombres pueden ser brutales pera siguen siendo

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