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Ediciones MI REVISTA
Plaza de Cataluña, 21 . Teléfono 13892 . BARCELONA

LOS DOS ÉXITOS:

La vida novelesca de
JEAN HARLOW
por Emilio Calvo
Precio: 2 P t a s .

CARLOS GARDEL
EL ÍDOLO ROTO
S U S T A N G O S
SUS CANCIONES
3.» e d i c i ó n 2 PtOS.

El libro de la guerra en el frente de Aragón


JUNTO A LA LÍNEA DE FUEGO
Por Juan M. Soler
Prólogo de
E. Rubio Fernández
P r e c i o : 3 pesetas

PRÓXIMAMENTE un libro-fichero sensacional

Los negocios del Gabinete Lerroux


Los famosos radicales Rocha, Emiliano Iglesias,
Samper, Guerra del Río y otros.
Por Fernando López Pinto
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S.I.E.M.D.Modeixi.
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F BARCELOMA
ILUSTRACIÓN
DE ACTUALIDADES
D i r e c t o r : E. R u b i o F e r n á n o e z
Administrador gerente: M. IVIárquez del Castillo
DIRECCIÓN Y ADMINISTRACIÓN:
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ADMINISTRACIÓN: TEL. NÚM. 13892
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ANO III 1 DE ENERO DE 1938 NUM. 30

SP^EHSAM A I . T O , SEKTIM eOHDO Y MABLAM CEAMO

{Foto "El
Nacional" )
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aí^warg^
Especial para
i m pa^Kaaon*
El paredón del cementerio es el cadalso de la justicia fascista. Es su tétrico sim-
boio también. El símbolo de una justicia que no es vacia y palabreramente simbólica,
sino terriblemente substancial.
En iodos los países civilizados, el cementerio es una especie de huerto o jardin.
MI REVISTA Huerto de los olivos, es decir, del tránsito y de los sudores y estertores agoniosos;
pero, huerto, al fin y al cabo. Jardín de cruces, de jacintos y crisantemos, de pasiona-
rias y siemprevivas y demás llora fúnebre; pero, jardin.
En España sólo se ha enterrado a los cristianos como a perros, como a perros
reventador por un auto en pleno ar!X)yo. Los católicos hablan mucho del perro moro,
Por Ángel SAMBLANCAT del perro judío, del perro infiel. Pero, a quien verdaderamente apalean como a un
M a g i s t r a d o d e l Tribunal can, tatigan como a un azacán, hacen pasar hambre perruna y tiran al muladar
de Casación d e C o t o l u ñ a
como a un carnuz, a que se pudra y se lo merienden las alimaiias, es a su criado,
a su dependiente, a su pinche de cocina, a su mozo de labor.
A este último, especialmente, distinguió en los modernos tiempos la piedad cristiana
con redupiicaüo odio. "¿No Queríais tierra? 'lomad." Y tiraban muertos a los cam-
pesinos a montones en un hoyo, que se les había hecho cavar a ellos mismos
previamente.
El cementerio en los pueblos rurales es un campillo mal cercado, adonde los
patos van a escarbar y a lornicar, atraídos por el tuiazo de la carroña. Las piedras
apiladas que loaean los dominios de toáronte, sólo a los flancos de la puerta de
acceso logran a veces la jerarquía de pared.
Ueneralmente ésta se queua en algo menos y no pasa de ruinoso y desconchado
paredón.
V bien; ése ha sido el patíbulo ruin, al que se ha llevado en tierras de Franco,
desde el 19 de mlio, a los republicanos españoles.
El muro ue ios teaerados de la Commune lué su precedente necesario. El palo,
la picota y el garrote vil son antecedentes dignos de ser tenidos en cuenta.
En mi niñez las ejecuciones capitales se consumaban en la plaza publica. Las
madrts humanas—más romas y tochas que el vacuno—llevaban a sus pequenuelos
a presenciar el espectáculo y, cuando el reo sacaba dos paimos de lengua lívida, les
pegaban a los chicos un bofetón, para que no echasen en olvido la macaora y
ejemplar escena.
t n París las altas obras de M. Dcibler han tenido siempre muchos adeptos en
clase üe tspectaaores. Las damas aristocráticas y las primeras estrellas ae la galantería,
las beldades cabareteras y las ceiebriaaües ouievartleras, empapan su pañuelo en
la sangre ae los guillotinados.
Eaiange de bevuia empezó sus masacres a la puerta de las casas de los aseninados
y dejanuc el cadáver tenaido en medio de la calle hasta que heüía.
Cuando había resistencia de parte del luturo interiecto o de su parentio,
asaban a la llama de cien tiros a la victima en los mismos brazos de su
esposa o de su madre, en medio del racimo de los hijos petrilicados
,„„„„ ,^ de horror. Del fiambre no se preocupaban. Si pataleaba todavía, dábale
I la puntilla el Algabeño. I )íaz Criado hacia recoger los restos por el carro
I de la basura.
Aumentó pronto la lista negra de las liquidaciones, la clientela de
Ediciones MI REVISTA candidatos a la eliminatoria, y la San Bartolomé se llevaba a cabo en
masa en toda Andalucía y en todo el ruedo ibérico a la puerta del cementerio.
A eso se llamaba Levarle a uno al paredón, ponerle de cara a la
tiene en preparación pared. Al murallón rabiosa y repetidamente mordido por el plomo, habia
que curarle ¡as cicatrices, revocándolo con yeso, todos los días.
dos libros sensacionales La tragedia de la hecatombe, no por ser continua y monótona, de-
jaba de ser crispante.
Llegaba entre patrulleros la cuerda de sentenciados sin juicio y sin
Rosita Díaz, la perseguida formación de causa siquiera en una camioneta, a las doce de la noche,
a b puerta del camposanto.
Los presos venían vomitando el corazón, librando el alma en un
del lascismo jadeo de reses rejoneadas, forcejeando para romper las ataduras y
tirarse de cabeza por la ventanilla del coche de conducción.
por Manuel P. de SOMACARRERA Los cobardes esbirros reducían a culatazos a los que más gañían, a
los que cerdeaban, a quienes pugnaban por desasirse.
I odas las emociones A punti'lazos alineábanlos contra la pared. Les encaraban los focos
sufridas por la hella de la camioneta y los victimarios segaban el manojo exánime de semi-
muertas vidas a golpe de ladrido de ametralladora.
actriz cinematográfica
Los tiros de gracia metidos por la oreja o por el ojo y contados por
los vecinos de las barracas próximas, tacilitahan a los curiosos la cifra
de los facturados para el otro mundo.
JE AN HAR LOW De tanto acribillarlas a balazos, las paredes de la necrópolis se vinie-
ron al .suelo y entonces los revolucionarios eran despenados en las
cunetas de las carreteras, en los caminos soledosos, en el misterio de los
SUZY
en
bosques, en las orillas de los ríos o del mar, a cuyo fondo en ocasiones
erín precipitados en paquetes atados con alambres.
Cuando la justicia levantaba un cadáver arrumbado al borde del agua
por E m i l i o C A L V O o que bajaba arrastrado por !a corriente fluvial, la gente de iglesia decía
guiñando el ojo, a! salir d t comulgar:
'aDitiiuii iifiiiiiDiiiiniiiiiinlxiiiniuMiiHDHiiifiMiipiiiiuinMtfMiiiiiriiitiiiniitiiiiiiHiiiiDiiiiiiiiiiiii iiiiiitii
—Debajo del puente ha sido pescada hoy una sardina.
Leonés como Durruti, compenetró su vida con la personalidad de Cata-
luña y fué un perfecto proletario catalán: libertario de puro liberal, realista,
no obstante la magnitud de sus idealismos, sin menoscabo de los cuales orga-
nizó paciente y tenaz los sindicatos de la Confederación Nacional del Trabajo.
A la vida de la Confederación consagró la suya. Trabajó en las organi-
zaciones federadas, relacionó unas con otras en toda España y propagó su
ideal anarquista y el magnífico bloque obrero que forma la Confederación
Nacional del Trabajo en mítinc.'í y en conferencias; en la Prensa adicta
y en la afín (en Solidaridad Obrera y en El Diluvio, de Barcelona y en La
Libertad, de Madrid).
Llegó ccn la guerra de los cuatro años, con la corrosiva influencia ale-
mana y con la concupiscencia y crueldad patronal secundada por autoridades
indignas, el momento heroico de la Confederación Nacional del Trabajo que
encontró en muchos de sus hombres, Ángel Pestaña uno de ellos, espíritu
b'.en templado, corazón firme, nervios de acero.
Ángel Pestaña cooperó a la dirección y defensa de huelgas famosas,
sufrió encarcelamientos, destierros, persecuciones; supo resistir y logró vencer
a costa de su salud, que perdió en Manresa, si bien conservó la vida.
A Madrid fué en un momento no de tregua, sino de respiro, y en el Ateneo
y en el teatro de la Comedia expuso clara, metódicamente, con sencillez no
privada de emoción, el verdadero estado del problema proletario en Cataluña.
Narró la historia de la huelga general de la Canadiense y de otros paros
célebres y relató punto por punto, esclareciendo su origen, la lucha violenta
de los bandos proletarios. Pestaña obtuvo en Madrid un señalado triunfo. No
u$ftK».M\'SDÍi era un gran orador como lo fué su compañero Salvador Seguí, "el Noy del
Sucre", pero sí era un gran razonador persuasivo, convincente, claro y lógico.
Iluminaba las cuestiones de que trataba; convencía, no arrebataba los ánimos
ni ofuscaba la razón. Brillaba por las cualidades que poseía ^ hasta por las
que le faltaban más en las conferencias que en los discursos de mitin.
Vuelto a Cataluña continuó su labor de organizador y de propagandista

ÁNGEL y, encrespada la lucha, tornó a sufrir prisiones y procesos.


Por esta época los generales Arlegui y Alartínez Anido pagaron, utiliza-
ron y encubrieron bandas de asesinos que mataban impunemente a ios obreros
de la Confederación y a simpatizantes y afines con ellos, como el insigne
#>/ republicano Hranciíico Layret.

PESTAÑA A Manresa se envió para asesinar a Pestaña una turba de asesinos. A la


espera cazaron al destacado propagandista. Le hirieron gravísimamente, peí o
ro le mataron. Recogido el herido, fué llevado al hospital, donde preienüieron
entrar los asesinos flustrados para rematarle.
Hubieran logrado su infame propósito a no ser por Indalecio Prieto que,
conocedor de la idea de los viles asesinos y de los todavía más viles induc-
tores, acudió, generoso y noble, al ministerio de la Gobernación y logró
persuadir al ministro, que lo era entonces D. José Sánchez Guerra, de lo que
tramaban los pistoleros de Manresa y las autoridades de Barcelona.
Gracias a Prieto y a Sánchez Guerra sobrevivió Pestaña al criminal
atentado de Manresa.
Y pudo, después de la protesta llamada de los treinta, crear el Partido
Sindicalista, separado del Anarquista y de la Confederación Nacional del
Trabajo.
bl nuevo partido conservaba de aquel de que formó parte y de la Conte^
deración a que perteneció la acción sindical y el principio liberal llevado a
sus últimas consecuencias, y se apartaba o distinguía de ellos por querer el
ejercicio del sufragio universal, oponiéndose a la consigna ¡no votar! que los
anarquistas sacaban a relucir en todas las elecciones y por desear que los
proletarios de la F. A. I. ocuparan puestos en la dirección y en la adminis-
tración del Estado nacional y de los Estados regionales y municipales.
La rebelión de 1936 y, sobre iodo, la guerra de invasión que nos hace
el fascismo internacional, y la barbarie de los marroquíes, y la estolidez de
las cabilas clericales y militaristas del lado europeo del Estrecho, dio y quitó
la victoria a .A.:igel Pestaña: se la dio en cuanto los que fueron sus correli-
gionarios eran concejales, alcaldes, diputados provinciales y ministros, admi-
tían la disciplina militar y el mando único del Ejército, y se la quitó al no
llegar a hacer uso del voto de la democracia burguesa. Pestaña y su partido
se condujeron irreprochablemente en la guerra, detendieron la disciplina, abo-
garon por la unión del proletariado, mantuvieron su adhesión al Gobierno y
no disimularon la veidad al abominar de las ejecuciones sin sentencias dic-
tadas por los Tribunales competentes y al esclarecer la diferencia que hay
entre socialización revolucionaria y apoderamiento de los bienes de la bur-
guesía para substituirla.
Con noble entereza se expresó siempre Pestaña en defensa de la revolu-
Por ROBERTO CASTROVIDO
ción antifascista, a'nheloso, cual el que más lo fuera, de ganar la guerra, y con
Especial pora perfecta abnegación procedió siempre: colaboró con los Gobiernos, les apoyó
MI REVISTA y no fué ministro.
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La evolución mexicana

©a lííj^íDstíi®
El democrático Uruguay de Batlle Ordóñez es hoy el fascistoide
Uruguay de Gabriel Terra. El Brasil que tuvo un Joao Cándido y un
Julio Prestes es hoy el Brasil dictatorial de Getulio Vargas y su partido
de los tenentes. Cuba es feudo del sargento Batista, luego coronel y gene-
ralísimo. En la Argentina, los conservadores vencieron al radicalismo con
camisa limpia de Alvear, apoyados en la terratenencia y en las divisiones
de la democracia, que no supo crear Frentes Populares. Santo Domingo
es patrimonio de Trujillo, el megalómano que se impuso con sus quince
mil pretorianos y sus veinticinco aviones de bombardeo a las viejas fac-
ciones históricas y al pueblo desengañado y hambriento. ¿Qué es del Pe-
rú, y de Bolivia, y del Ecuador, y de Chile, otras veces llamado la Prusia
de América, que tuvo un César rojo apellidado Balmaceda y que no supo
comprender a un Alessandri? ¿Qué de Nicaragua y de Honduras y del
Salvador y de Costa Rica? ¿Qué del ensangrentado Paraguay, exhausto
por su mortal victoria? ¿Qué de Venezuela, donde López Contreras sigue
las huellas de Juan Bisonte Gómez? Sólo Colombia, en la América me-
ridional y México, en la septentrional hispana, permiten abrir el pecho a
la esperanza.
* * *
Sobre todo México. He aquí un país que ha encontrado la fórmula de
la Revolución Permanente. Pero de una Revolución Permanente que se
desarrolla dentro de un ritmo regulado por la juridicidad y controlado
por la Ley. Al principio, encarnó en la figura simbólica de aquel soñador,
Madero, millonario, espiritista, que encontró en el fondo de sus quimeras
generosas valor suficiente par afrontar la cólera de D. Porfirio, de sus
«científicos» y de sus cuarenta mil rurales. Pero Francisco I. Madero no
pudo llegar al fondo del problema. Y el fondo del problema era los pue-
blos sin ejidos comunales y los peones sin tierra y Terrazas dueño de ha-
ciendas vastas como provincias de España. Fué un campesino de Jalisco,
Emiliano Zapata, el que vio, desde la hondonada de su dolor humano de
desheredado, lo que no había visto el rival heroico de la Tiranía. El cuar-
telazo de la Ciudadela; el asesinato de Madero y de Pino Suárez, su se-
gundo; la exaltación del militarismo en la persona de un borracho, como
Victoriano Huerta, que ganaba las batallas durmiendo sus tragos largos
de coñac en la hamaca de su tienda de campaña, eran episodios, simple-
mente. El nudo de la cuestión estaba en los campos que labraban y defen-
dían, conjuntamente, los campesinos zapatistas.
* * *
Yo recuerdo que en tiempos de Victoriano Huerta escribí en un dia-
rio de Madrid un artículo sobre la Revolución mexicana. Algunos meses
más tarde, estando en Granada, me reexpidieron desde Madrid un mu-
griento y casi destrozado paquete de periódicos y una carta escrita a
máquina. Ambos habían llegado de México a mi nombre. El paquete era
una colección de «boletines del Partido Revolucionario» de Jalisco. La
carta había sido dictada por Emiliano Zapata. Decíame en ella que casual-
mente había llegado a su poder el número del periódico madrileño que

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M'í'fmsia
Por F A B I Á N VIDAL
Especial para «Mi revista»

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publicaba mi articulo, que se congratulaba de que un español hiciera
justicia a los revolucionarios mexicanos auténticos y que por desgracia
la casi totalidad de la colonia española, empezando por el ministro, apo-
yaba a Huerta como antes había apoyado a Porfirio Díaz. Terminaba con
el ruego de que siguiera defendiendo con mi pluma la verdad y la razón.
Conservé mucho tiempo la carta de Emiliano Zapata. Y siempre de-
fendí la Revolución mexicana contra sus calumniadores y enemigos. Cuan-
do murió el gran apóstol agrario, Espartaco del Analrrloc, víctima de una
infame traición organizada por el turbio e hipócrita general Pablo Gon-
zález, tuve la intuición de que la causa de los mexicanos pobres, es decir,
del noventa y cinco por ciento de los mexicanos, había sufrido un golpe
terrible.
s
Por fortuna, México ha ido encontrando, en cada momento de su
evolución hacia formas superiores de democracia y justicia social, el hom-
bre necesario. Se dijo de Castilla: «Ésta es Castilla, que hace a los hom-
bres y los gasta.» Lo mismo puede decirse de México. Hace los hombres,
los utiliza y los substituye. Cada etapa de su trayectoria política e insti-
tucional puede simbolizarse en un nombre.
No los enumeremos. Murieron unos. Desaparecieron otros de la ac-
tualidad. Pero vese que no hay decadencia. El nuevo triunfador—y ser-
vidor—vale siempre más que el antiguo. Existe y se acentúa una supera-
ción. Así como el Estado se perfecciona y se decanta, así como la máquina
gubernamental funciona con menos rechinamientos que al comenzar su
trabajo mecánico, así las figuras representativas y directoras van ganan-
do en modos y en fondo. Al caudillo reemplaza el estadista. Al impulsivo
generoso, fácil al error y a la violencia, el ideólogo sereno que sabe ser
a sus horas pragmatista hábil.

¡Cuánto camino recorrido desde que Madero entró victorioso en San


Luis de Potosí!... México es ya una gran nación, orgullo de América. La
fusión étnica que Reclus vaticinaba para la Amazonia se está haciendo ^
rápidamente al pie de la Sierra Madre. Escribió Blanco Fombona, refi-
riéndose a Venezuela: «Necesitamos apartarnos de la selva.» México va
creando un nuevo tipo humano. Con dolor, con lágrimas y con sangre
antes, con alegría ahora. Y ese nuevo tipo humano reinará en uno de los
más bellos paraísos de la Tierra... '
%

S^^S2S3^?»SKSSSSS55Z5SS5SZSS53S5Z^^
L o aue sembrasteis en mi
os lo torno mejorado
Fué en 1862. Ciertos incidentes ocurridos en México bajo el Gobierno de Juárez
movieron a las grandes potencias occidentales de entonces, España, Francia e Ingla-
terra, a intervenir en la República mexicana. Pero si para Inglaterra y España la
intervención era meramente cuestión de intereses, para la Francia de Napoleón ili
era una complicada aventura política que debía tener por tinal instaurar en México
ei Imperio de Maximiliano.
El general Prim mandaba ias tropas españolas que desembarcaron en Veracruz
en 7 de enero de 1862, y en México se dio cuenta el general español del objetivo incon-
fesado que la expedición tenía para los franceses. Prim, en vista de ello, concertó con
el general inglés y, sin esperar siquiera instrucciones de la Península, reembarcó su
Cuerpo de Ejército y dejó las tropas francesas ante sus responsabilidades y ante LI
pueblo mexicano.
Prim tuvo que responder de su gestión ante el Senado español y pronunció un
gran discurso que llenó las sesiones de los días 9, 10 y 11 de diciembre de 1862.
Discurso que le confirma como un gran político y como un gran estadista.
"¿Podía creer el Gobierno de la reina—dijo Prim en aquel discurso—que los
ministros del emperador de los franceses quisieran imponer a cañonazos a México
la monarquía y e! monarca?... Inglaterra, Francia y España se comprometieron en un
pacto solemne... a no intervenir en los negocios interiores de aquel país. Esto bastaba
pava marchar con confianza..."
"Los aliados iban a México a pedir reparación de agravios, mas no a intervenir K
en los asuntos de aquel país... La acción colectiva de las tres potencias sólo tenia por
objeto dar la m.ano a los mexicanos para que terminara cuanto antes la guerra civil."
"Los aliados, ya en Veracruz, "hicieron lo que tenían que hacer. Dar una alo-
cución asegurando a los habitantes de la República que no tenían que temer por la
integridad de su territorio, que no tenían que temer por su nacionalidad, que no tenían
que temer por su libertad política.
¿Y con quién habían de tratar? "Forzosamente—dice Prim—con el Gobierno
de Juárez, porque de no hacerlo asi se faltaba a todo lo pactado. Y si se destruía el
Gobierno existente, creándose otro, ¿qué más intervención? Y ésta no nos estaba
permitida."
Entonces dijo Prim al Gobierno de México (14 enero 1862): "Tomando en
consideración el estaoo actual de México, los plenipotenciarios de las tres naciones
han creído que podían aspirar a fines más elevados y generosos. I r t s t;randes
naciones no forman una alianza sólo para reclamar de un pueblo a quien afligen
tan terribles niales !a satisfacción de los agravios que se les hayan inferido; tres
grandes naciones se unen. . para tender a ese pueblo una mano amiga y generosa
que lo levante, sin humillarle, de la lamentable posición en que se encuentra... El
pueblo mexicano tiene su vida propia, tiene su historia y su nacionalidad... Venimos
a ser testigos y si necesario fuese protectores de la regeneración de México... sin
intervención alguna en 'a forma de su fjobierno ni en la administración interior. A la
República, sólo a ella corresponde juzgar cuáles son las instituciones que más se
acomodan a su bienestar y a ios progresos de la civilización en el siglo xix."

Han pasado los años. Los Gobiernos se han sucedido en España como en México.
Pero no se ha perdido la simiente liberal que sembrara en el Nuevo Continente ese
gran liberal catalán que fuá el general Juan Prim y Prats.
Y cuando nuestra patria atraviesa los horrores de la más terrible de las guerras
civiles, cuando potencias diversas con su acción o con su omisión tratan de escla-
vizarnos, México, como si recordase el gesto del general Prim, dice: ¡Alto!
Porque México conserva toda la tradición noble del alma española y es un pueblo
.gobernado por la Libertad.
^ Porque México as buena tierra en la que sembró España, la España liberal del
^ general Prim.
9 Y porque México puede decirnos v nos dice como el Montañés a Juan II, aquellos
Por p versos del Romancero castellano, que son una lección de lealtad:
Mariano >j "Lo que sembrasteis en mí, os lo torno mejorado,
y que nunca la buena tierra negó el fruto ningún año."
Exclusivo
Rubio para
Tudurí M I REVISTA
MÉXICO
NUESTRO HERMANO MAYOR
Especiol para <Mi revista» Por Enrique DIEZ-CANEDO

No hablemos ya de Madre Patria. Lo que tuvo un sentido, desvirtua-


do muy pronto, hasta convertirse de verdad esencial, en manido tropo de
retórica, debemos arrumbarlo ya en el montón de las cosas inservibles,
Pero sigamos diciendo, y aspiremos a que no se vuelva también lugar
común, o a que deje de serlo: nuestros hermanos de América.
Cuando la República española entró, pacífica y confiada, por su arco
de triunfo, vino a ser, aun conservando la primacía de los años, la más
joven de todas las repúblicas de nuestra habla y de nuestra civilización.
Juventud quizá con todos los privilegios, pero, de seguro, con todas las
inexperiencias juveniles que la vida no enseña a los hombres ni la histo-
ria a los pueblos.
Creo recordar que el segundo en reconocer la nueva forma política
que España se había dado a sí propia fué, cabalmente, México. El segundo,
y no el primero, por obra de minutos. Cuando el representante mexicano,
cumpliendo órdenes de su Gobierno, iba a prestar acatamiento a la mani-
festación de la voluntad popular española, se cruzó en el umbral del de-
partamento de Estado con el representante de otro país de América que
había andado más de prisa; del país que entonces marchaba a la cabeza
de todos por el sentido ampliamente liberal de sus instituciones, y que
poco más tarde había de seguir rutas muy opuestas.
Representante de México en España era entonces un alto poeta, que
continuaba una tradición no interrumpida después: la de los jefes de
misión que eran, al mismo tiempo, exponentes de la más pura intelectua-
lidad mexicana. No el hombre que cultiva por deporte las musas y a quien
el cargo sirve de pedestal y de altavoz el dosel de su sitial diplomático,
sino un verdadero hombre de letras, formado en cabales disciplinas, con
personalidad propia y cuajada. Personalidad la de aquel hombre, tan
viva, fuera de lo puramente literario, que aun se recuerda alguna contes-
tación suya, proferida en tono seguro y rápido, durante la breve conversa-
ción de una solemnidad palatina, como si en ella resucitara de pronto la
altivez sin exhibición de todo un linaje de embajadores cuya estirpe
había florecido orgullosa, tiempo atrás, en el tronco hispánico.
No fué, cronológicamente, México, el primer país de América que
reconoció, pues, la República española. Pero llegada ésta a su mayor
edad, harto tempranamente, por obra de las circunstancias, que se le
han mostrado después tanto más duras cuanto más propicias le fueron
en un principio, México ha sido, entre todos aquellos pueblos, el primero
en dar ejemplo vivo de fraternidad verdadera, así en la expresión de su
doctrina como en la prestación de su ayuda. México también, atravesando
luchas y vicisitudes, había llegado, en pleno, a su mayor edad, resolviendo
para sí los problemas que aun están planteados en otras partes, y que
ante la nueva España venían a alzarse con toda su amenazadora magni-
tud, poniendo máscaras nuevas a los fantasmas tétricos del pasado.

Un español que llega a México se sorprende al pasar de las costas


calientes de Veracruz, con aquel bravo cielo surcado por los siniestros
zopilotes, que desempeñan con raro celo un humilde y beneficioso me-
nester municipal, a la alta meseta en donde se levanta la ciudad de México.
El paso es una constante maravilla. Salva el tren, por entre paisajes de
pasmo, los dos mil metros de altura que convierten un país tropical en
una comarca templada y luminosa sobre la que vigilan crestas nevadas
de volcanes. La ciudad reposa en un amplio cerco que un viajero español
ha comparado al anillo gigantesco que se escapó del dedo de una de
aquellas divinidades! mitológicas cuyos nombres tienen para nosotros
extraña sonoridad. Los cráteres, a veces activos, son como las piedras
preciosas de la ingente sortija. En la edificación metropolitana, en su aire
propio, un lejano parecido con los pueblos originarios de los primeros
colonos hispanos; pero el barroco no ha permanecido, como en las tierras
andaluzas, parco y modoso, sino que se ha desenvuelto según el genio
peculiar de los constructores nativos, complicado como sus exóticas mi-
tologías, en líneas lujosas e intrincadas, como vegetación arquitectónica
que llevara a la naturaleza simple los alardes más desenfrenados de una
imaginación que no se resigna a sus dos mil metros de altitud y busca la
competencia que árboles y plantas no pretenden con el fuego de las zonas
tropicales.
Así, quizá, su política. Florecimiento, a ratos de complejidad exce-
siva, en una atmósfera de rara limpidez; en el dominio espiritual de una
inteligencia vigilante, y, por serlo, jamás impresionable ni asustadiza.
Se han señalado como características del genio mexicano, en las letras,
una afilada percepción y una expresión moderada y comedida en extre-
mo. Y, a la vez, en la manifestación humana, así del hombre culto de
ciudad como del indio en el campo, una refinada, cauta, puntillosa cor-
tesía. No son faces contradictorias, ni máscara lo uno de lo otro. Son
cualidades que se complementan, y por México anduvo, si no era mexi-
cano, el primero que formuló en nuestro idioma el parangón de lo cortés
y lo valiente.
Ello se nos ha manifestado ahora en el ademán que no es de reto a
nadie sino de pura y simple afirmación con que México ha trazado su
línea de conducta en el conflicto de España. Afirmación de la voluntad
de los pueblos para regirse a sí propios; respeto a las instituciones legí-
timamente establecidas. Y, con ello, no un desdén de la tradición, que
para tantos otros pueblos parece ser lo único valioso de España, y que,
más tradicionalistas que los españoles mismos, ponen como razón, aparen-
temente, pero en realidad como excusa, de su momentáneo desvío. No es
la tradición española; son las fuerzas del pasado, aplicadas a las realida-
des presentes, lo que ellos preconizan. México fué de los primeros países
que recogieron en vivo la tradición española, y así lo demuestra su arte;
es de los que más vivaz la conservan, como se ve en determinadas for-
mas características de su legislación y se mantiene en su más certera
expresión literaria: pero no confunde la supervivencia tradicional con
la «vivencia», con el existir que requiere la afirmación de cada día, que
no es, en último término, cuando responde a la sinceridad de los senti-
mientos y las clarividentes aspiraciones a lo futuro, más que tradición
en el momento de elaborarse. No tradición muerta: genio vivo.
¡Y qué no ha hecho, además, México, por la más pura tradición espa-
ñola, no por la que es broquel de emboscados, sino por la verdadera, por'
la que tiene peso y razón de ser en el mundo! Colocado geográficamente
en posición fronteriza junto a un pueblo grande, ambicioso y dotado de
violenta fuerza expansiva, otro país menos recio hubiera sucumbido,
dejando el paso libre. México, más que dejarse penetrar, penetra él mismo
en las tierras del vecino poderoso; y al defenderse, no de otra manera
que afirmando a cada momento su genuina personalidad, defiende a todo
^xn continente, más accesible a la penetración, más dúctil a la influencia
extraña. Los pueblos de América más apegados a las exterioridades de
una tradición en nombre de la cual temen para sí reformas como las
que han convertido al México de ayer en el México progresivo de hoy,
pueden mantener aquellas virtudes que tanto precian gracias a la firme
voluntad de ese pueblo en que se dan la mano, además del viejo europeo
y el nuevo peón continental americano, la vieja Europa y el Asia más
vieja todavía.
México es hoy una de las mayores encrucijadas del mundo, como en
un tiempo lo fué España, a la que correspondió igualmente un papel
fronterizo en el desempeño del cual puso en juego, extremándolas, sus
más finas calidades nativas. A esta luz, el ademán con que hoy México
ha.sabido acercarse a España, acometida en las posiciones que supo ganar
por la fuerza misma de los hechos, alcanzando como fruta llegada a ma-
durez los principios de libertad que hoy ha de reconquistar por las armas,
tiene un carácter honda y conscientemente fraternal; y no con el ímpetu
que lleva al hermano en defensa del hermano, sin calcular posibilidades
y riesgos, sino en concordancia con las cualidades más profundas del es-
píritu mexicano, robustecido por la experiencia e iluminado por el amor
a las que se sienten como aspiraciones comunes: ademán, en suma, de
hermano mayor. /C? ,
Especial para MI REVISTA

Por Diego SAN lOSfi

Las gesias del Pueblo


Aunque Madrid, por los bravos y heroicos hechos que Tan infame agravio ha causado a los sensibles madrile-
le dieron entrada triunfal en las páginas de la Historia, ños el efecto de una bofetada en pleno rostro y ha tenido
merecía que se le considerara en la medida de su justo va- la virtud de poner su sangre al rojo blanco.
lor, sin embargo, por el carácter expansivo y bullanguero Ni un solo hijo legítimo del pueblo, de los que por espa-
de sus hijos y el espíritu acogedor que para todo el mundo cio de tantos siglos han sufrido rencorosamente el yugo
tiene, no acababa de ser considerado por los que solamente de los que eran bastardos de reyes, y por el hecho de serlo
desde lejos le conocen, digno de la formalidad que se me- formaban la mal llamada nobleza española, ha dejado de
rece, llegándose a creer la exacta personificación de «la responder con valentía al insulto pidiendo un arma para
ciudad alegre y confiada» de que nos habló el exquisito hacer frente a la cáfila de traidores que, bien persuadida
ingenio de Benavente. de su inferioridad moral y combativa, ha tenido la desver-
Quien más, quien menos, pensaba que la cascabelera vi- güenza de buscar «cirineos» que les ayuden a llevar la
lla del oso y del rnadroño era buena para holgarse en ella pesada carga de su perfidia.
durante una breve temporada y hacer luego la deshecha tan Es tópico muy manoseado el de traer a cuento en estas
presto como se acabaran el humor y el dinero que habían circunstancias la gloriosa epopeya del Dos de Mayo, que
venido a gastarse, conservando allá en el ten-eno de su cubrió de laureles a nuestros antepasados; yo entiendo que
origen el amable recuerdo de todas las cosas que hubieron en estos críticos momentos superamos nosotros con ventaja
de serle gratas; pero en conciencia nadie pensaba que Ma- aquella magnífica página de la crónica matritense.
drid fuese capaz de ponerse a tono con las circunstancias
trágicas que le han obligado a fruncir el ceño y a crispar El pueblo de ahora tiene más razón que el de entonces
los puños, haciendo que el mundo entero tenga suspensa la para poner sobre el pavés de su heroísmo el tesoro inapre-
ciable de su independencia.
atención en su asombrosa resistencia.
Nuestros abuelos de hace siglo y pico luchaban por man-
Ha sido menester que una partida de traidores, crirhi-
tener en el trono a un rey infame y traidor y a toda la com-
nalmente auxiliados por unas hordas rapaces que en los
parsa servil y parasitaria que componía su corte; el pueblo
pasados tiempos fueron feudatarias de España, y ahora sin
de ahora lucha precisamente por sacudirse el yugo del nieto
duda quisieron cobrarse sus tiempos de servidumbre par-
de aquel gran sinvergüenza coronado, asistido por los des-
tiéndola en pedazos y repartiéndoselos como los sayones del
cendientes de aquellos cortesanos retrógrados que le ayu-
Calvario se repartieron la túnica de Jesús, ha sido menester
daban a cubrir el hermoso cielo hispano con las nubes más
tamaña infamia para que esta hidalga tierra borrase de su
negras del fanatismo.
rostro la continua sonrisa, encendiera sus ojos con la llama
del odio y, plantándose retadora y bravia, como cuando El pueblo de 1808 fué héroe por inconsciencia política y
Napoleón quiso hacer de ella una provincia francesa, dijese: por atavismo religioso; se resistía a romper las cadenas de
—¡Aquí estoy yo! jEl que se atreva conmigo que venga! la esclavitud y a perder la férula de la Iglesia, porque
ciego con la constante influencia que sobre él ejercía la
Y los que osaron llegar hasta sus puertas, manchados
clerigalla, no veía que la institución que Cristo fundó para
por la traición amparada del latrocinio extranjero, en los
redimir al hombre de las injusticias humanas había caído
mismos umbrales se quedaron clavados, pero ladrando, co-
en todas las infamias y delitos para cuyo exterminio fué
mo hacen los perros a la Luna, que está fuera del alcance de
creada; el pueblo de hoy ha visto que el Dios de la gente
sus colmillos.
de sotana y cogulla es un monstruo cruel y espantable,
Claro es que desde lejos, auxiliados por la ciencia des- com.o cualquiera de las divinidades que adoran las tribus
tructora, han podido convertir en informes ruinas algunos salvajes de África y Asia, que consiente al pie de los alta-
de los barrios más populosos de la heroica ciudad y abrir res todas las perversiones, .y sus sacerdotes realizan como
arroyos de sangre inocente en muchas calles; pero cara a aquéllos los sacrificios humanos para tenerles propicios
cara, de hombre a hombre, con el valor en el pecho y el pro- mientras que ellos practican muy bien todos los pecados
• pió brío puesto en tensión, no han adelantado un solo paso capitales y todas las deslealtades contra el prójimo que con-
que les conduzca a la victoria final. denan los mandamientos dictados por Jehová a Moisés en la
La fanfarronería de los generales sacristanescos y el cumbre del Sinaí.
odio fanático de los curas trabucaires han mordido el polvo
El pueblo ha visto llegada la hora en que el absurdo
de la derrota en las mismas márgenes de nuestro «arroyo
tablado de la farsa autocrática y fanática se venga al suelo,
aprendiz de río».
y lucha con cuantas armas están al alcance de su mano
Y todo ello lo ha hecho este pueblo alegre y burlón que
para que no torne a levantarse jamás, porque si el espantoso
todo lo toma a chacota y que lleva siempre el corazón en la monstruo consiguiera alzarse, renacería mucho más feroz,
mano. espantoso y vengativo de lo que lo fué hasta ahora.
El pueblo que con su peculiar donaire ha servido de
modelo a Goya, a Cruz, a Ricardo de la Vega, a López Silva Por demasiada confianza, otra tanta negligencia .y bas-
y Chueca, ha demostrado que también pudo hacer que vi- tante traición emboscada, ha llegado hasta las mismas puer-
brasen las liras de los grandes poetas épicos que pusieron tas de Madrid; pero los madrileños, que son la concreción
en verso las más asombrosas páginas de nuestra historia. del pueblo hispano, porque la población de Madrid está for-
mada con hijos de todos los pueblos de España, se hallan
Una vez más este pueblo, el mío, ha recobrado el coraje,
dispuestos a cerrar el camino a la avalancha fascista o a
no por la proximidad del enemigo, sino porque parece que
perecer en la demanda.
éste, en sus acostumbradas «bernardinas» de valentón de
espátula y gregüescos, ha dicho que si hasta ahora no se En este decidido empeño sí continúa siendo el Madrid
había decidido a tomar la capital de la República, era por- del 18 de julio de 1936 el mismo del Dos de Mayo de 1808.
que tenía la seguridad de que dentro de su recinto no había <
defensores dignos de medir sus armas con él. Madrid, diciembre 1937.
üiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiitiititiiiintiiiiiiniiiiiiMiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiHiiiiiititiiiiiiiiHiiiiiiiiiiiiniiiiiiu
Corazón adentro

Para el bien no hay lejanía


5 Tierras mexicanas de sol, de vigor campero, de heroísmo libertador, de ubérrimos
s predios, de sabios y de educadores y de valerosos centauros sobre potros piafantes:
s ¡cuan bellas perecéis a los espíritus sonadores de la Nación que fundió su sangre
2 ("on la de vuestros hijos! ¡Y qué triste/a al pensar en el apartamiento secular de ideas
s a que nos llevaron a los de aquende y allende los mares la incomprensión cerril de los
5 déspotas y el egoísmo y la pávida ferocidad de los explotadores de pueblos y de
Por S razas! Y, ahora, cuando los hijos emancipados de la Patria nos abandonan y los
A n t ó n i o s nacidos en vuestras comarcas rientes nos prestan ayuda, afecto y consuelo ¡qué honda,
5 qué sincera, qué perdurable tiene que ser nuestra gratitud! Con ser tan fuertes los
Z O Z A Y A S cálidos vínculos de la sangre, lo snn más los del pensamiento, cuando se eleva a las
5 puras regiones del ideal Y vosotros mexicanos y nosotros, los redentos hijos de
= iberia, comulgamos en las mismas aspiraciones excelsas humanas. Somos más que
= camaradas fraternos: somos seres unidos inseparablemente por el cerebro y por el
5 corazón, como hermanos siameses del espíritu. Nada podrá ya hacer revivir los
= antiguos recelos. Nos acerca lo que hay de común en todos los hijos de madre; el
5 culto a lo impersonal abstracto y las causas mismas del vivir.
Escrito expresameníe 5 Pero el resto de América parece olvidarnos. También llegará un día en que
E sentirá, como vosotros, hacia los españoles simpatía; porque la etimoloeia de esta
para MI REVISTA — pa'ab'a es semeianza de do'or. Sini Pathos, de dolencia de aflicción, de ansias de enal-
S tecimiento y de libertad no satisfechas y los hombres de dolor y labor sufrimos todavía
E las penas amargas de los siervos v-lm.ente ultrajados.

SP ha dicho repetidas veces que España nada tiene ya que hacer en América. F.n
el orden político, no; pero en el afectivo, que se traduce en adelanto v proereso ma-
tf'ial, sí. Y América tiene, también, mucho que hacer en esta tierra prop^enitora. Por
esta vez acepto el consabido tónico de la madre y los hijos aplicado a España y a las
naciones que hablan su idioma. La madre tiene el deber de protesrer y ayudar a los
hijos y de mantener entre e'los los elementos de paz y de concordia. Los hijos, por
su parte, deben amparar a la madre cuando lo ha menester y aconsejarla en los tran-
ces difíciles. Todo esto, que parece una vana palabrería, pudiera ser una realidad si
en los dos extremos del Océano Atlántico los gobernantes se diesen clara cuenta de
la conveniencia de una bien orientada política hispanoamericana.
Y ahora he de hablar claramente v sin eufemismos. España bajo los regímenes
monárquicos reaccionarios no ha cumplido con este deber. ;.Qué madre ha sido la
que ha cerrado sus puertos marítimos a los productos de los descendientes de su raza,
qne no los ha llamado a sus conseios y les ha negado la ciudadanía? Por un solo
motivo he sentido no aceptar una representación en las Cortes de la República: por
nr haber presentado alsrunos proyectos de ley. Hubiera comenzado ñor pedir que
en la Constitución se declarase españoles con todos los derechos civiles y políticos
a los americanos de habla castellana, por el solo hecho de pisar nuestro suelo, sin
más documentación, ni exigencia de otros deberes que los que ahora cumplen. Hubiera
propuesto que se otorírase franquicia aduanera a sus productos sin reciprocidad. Y
aun iiubiera ido más lejos: habría pedido que cada nación de las citadas nombrase
un diputado en las Cortes de España, con voz v voto. Ello parecerá utópico y desca-
bellado a quienes han celebrado la "Fiesta de la Raza" con elogios inoportunos
a Esoaña y recuerdos a los Reyes llamados Católicos, alabándose a si mismos y olvi-
dando las aspiraciones y derechos de América; pero hubiera sido un grande e innegable
progreso.
España hubiera visto aorecentado su comercio, al par que América su riqueza.
En la lucha de las pasiones hubiera contado mi Patria en su Parlamento con un gru-
po imoarcial, que hubiera influido en el progreso de la Nación, colocado sobre los
intereses de partido y, así, evitado no pocas catástrofes; y, sobre todo: se hubiera
hecho amar, en vez de odiar, demostrando que el tópico de maternidad no es un vocablo
sin significación ni sentido práctico, un simple flafus vods.
Por su parte, las naciones llamadas hispanoamericanas debieran, a toda costa,
mantener íntegro y sin adulteraciones el idioma español, no ya por rendir tributo
a un.i literatura oue ha dado a la Humanidad muchos días de gloria, sino por propia
conveniencia. Si llegase un día en que cada pueblo de la Nueva América hablase un
idioma distinto, la separación entre ellos '?ería tan funesta que acabaría por hacer-
los caer, uno a uno. baio las garras de otras naciones codiciosas de sus territorios.
No se olvide que el idioma es el lazo de unión más poderoso entre los pueblos. Si,
por arte mágica. Francia y Alemania hablasen el mismo idioma, las guerras que se
avecinan serían imposibles; porque la causa fundamental de las contiendas es la incom-
prensión. Errado llevará el camino la nación que reniegue de su idioma y lo sofistique
con palabras v giros extraños o rústicos indígenas; su prosperidad dejará de ser tal
cuando se halle separada de sus propias hermanas. No hay barreras para el error,
como no existen distancias, ri mares turbulentos, interpuestos entre fronteras para
el acercamiento ideal.
México es la primera nación del Nuevo Continente que se ha hecho cargo y se
ha dado cuenta de la importancia de sus relaciones espirituales v materiales con
España. Ha comprendido que hay algo que se halla por encima de los falsos patrio-
tismos y de los intereses de campanario y es el culto de los ideales humanos de Liber-
tad, de Fraternidad y de justicia. Por ello en nuestros pechos se ha encendido para
México uii amo' entrañ?,ble. Sean cualesquiera nuestra suerte y la suya, en el porve-
nir, los dos pueblos se habrán hecho merecedores de bienestar y de progreso y del
respeto y glorifcación de las generaciones futuras.

siiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiitiiiiiiiiiniiiniiiiiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiiiT'
Una mujer mexicana define a su Presidente
P o r B I a n c(
L Y D I A TREJ(
C a n c i l l e r del Consuk
d o g e n e r a l d e Móxic
en Espoña
Lázaro Cárdenas
Lo compañera del F! 6 de octubre de 1936 dictó un acuerdo trascendental
general C á r d e - para la Reforma Agraria. Tratábase nada menos que de la
n a s en uno fies- fecunda región de La Laguna, casi toda en manos de señores
ta de beneficen- de apolillados pergaminos.
cia. Pueblos enteros arrebatados a los indios, a quienes se des-
Cárdenas, un símbolo. El cardenismo, una doctrina. Doc- pojó hasta de sus míseras chozas. Los regímenes anteriores,
trina de realidad mexicana con car.-icteristicas especiales y de marcados ya por el índice negro de la opinión publica, habían
pasado histórico. Poco seria todo lo que yo dijera de sus re- permanecido sordos al clamor de millones de indios que yacían
levantes prendas personales; pero describirlo a través de su en situación tristísima parecida a la esclavitud.
obra enorme, es empeño aun más difícil en un simple articu- Fué preciso que surgiera un Cárdenas con el ideal zapa-
lo periodístico. tista en la frente ¡Cárdenas! Promesa y esperanza de las
Su figura es más grande que la de Juárez, porque Cárde- masas.
nas es ei vidente de la redención del indio y el que ha con- Un vastísimo plan de Economía Agraria dio como fruto
solidado la jiolitica constructiva de Frente Popular. cooperativas de producción y de consumo; Bancos de Socie-
Alienas ocupó la Presidencia comenzó su acción de apli- dades de Crédito Ejidal; salubridad; irrigación; procedimien-
caciones inmediatas. Abriéronse las cárceles en donde yacían tos científicos ios más modernos en la siembra y la cosecha.
aherrojados los comunistas por su posición viril ante los Aquel cuarto de millón de hectáreas de tierra fértilísima ba-
primeros brotes fascistoides de las administraciones pasadas. ñada oor el río Nazas pertenece hoy a miles y miles de cam-
¡Tierra y escuelas! He ahí el punto céntrico de su pro- pesinos.
grama Como nunca, ha intensificado los planteles "Hijos del Y, como la región lagunera, todo México de norte a sur,
Ejército" que ¿I crear.i en época ya lejana, en 1925. Siempre lun los pueblecillos enclavados en lo más hondo y abrupto
hp. sido su obsesión que los hijos de los soldades tengan ins- de las sierras, han recibido la visita del Presidente, que ha
trucción ininterrumpida. Estímulo digno que el general Lá- dejado a su paso escuelas, sanidad, carreteras, y la solución
zaro Cárdenas, como jefe del Ejército, da al cuerpo armado inmediata de todos los problemas.
de la República. Retribución honrosa por su abnegación, por Kunc?. nuestra Carta Magna y el Código Federal del
r,er, nr ei militarismo contra los derechos del pueblo, sino su Trabajo se vieron enriquecidos con reformas y leyes tan
fucrr.a para cnneiitar y defender la democracia. avanzadas como las que hoy hacen del país azteca el ata-
En México se ha implantado la escuela socialista. Com- laya y el pendón de la América hispana.
prende la intensificación más grande de la cultura que regis- P a ' a Cárdenas no hay asperezas, cansancio ni tregua Sólo
tran los anales de la enseñanza. Millones de textos escolares hay trabajo. Yo hubiera querido ir tras él en todas sus jiras,
para el proletariado infantil, programas modernísimos,' tecni- seguirlo siempre con un lápiz en la mano para copiar sus
cismo de la pedagogía es ei resultado del impulso del señor pala'~ras, trazar sus ejemplos y dejar a la Historia detalles
Presidente. sublimes del hombre que es toda una fuerza, una voluntad.
Ninguna agrupación religiosa proyecta su influencia en No podríamos terminar este bosquejo tan pálido sin hablar
!a educacióii, 'a que está debidamente controlada por el Es- de la importancia que el señor Presidente concede a un factor
tado, alerta siemiire al caos ideológico que pudieran provo- esenci?l: la mujer.
car los defensores del pasado y enemigos sistemáticos de la El Ejecutivo le ha venido dando personalidad en puestos
revolución. Está, pues, garantizada por las atinadas previsio- y misiones que entrañan responsabilidad. Mujeres en la diplo-
nes n'.ctodologicas del Pian Sexenal, ¡levado a cabo y superado macia, cargo a propósito para la inteligencia y sagacidad
en sólo tres años que lleva de gestión administrativa el se- femeninas; en los Consulados; al frente de departamentos,
ñor general Cárdenas. de escuelas, de brigadas de salubridad; en el periodismo. No
* * • hay en México actividad en que no tome parte la mujer. Lo
Con frecuencia deja las comodidades palaciegas para des- único oue falta como corolario a esta bella realidad es obtener
cender hacia los campesinos, a quienes dedica paternal cariño; el voto femenino, para lo que hay preocupación nacional en
come con ellos y ausculta sus tragedias y necesidades. fomentar por cuantos medios sea posible su cultura, capa-
Su interés casi apostólico le hace instar a los maestros citación, y organización en sindicatos y entidades económi-
rurales a que cumplan su misión de orientar a los trabajadores cas, H. fin de que tenga en sus manos el eje de su liberación,
del campo con quienes han de convivir. Conoce los problemas la orientación imprescindible en la defensa de sus derechos
de cada región. Su altruismo único le ha llevado a efectuar en la protección que, como trabajadora, le imparten las leyes
la unificación del proletariado. Sus palabras incrustan la con- de la República.
vicción del resurgimiento de un México nuevo. Las palabras del general Cárdenas son una garantía cuan-
Una de sus principales preocupaciones es el cumplimiento do dice: "La organización en tal sentido acelera forzosamente
de la ley de dotaciones y restitución de tierra, en vigor, que el desarrollo de la personalidad social y económica de las
entraña el respeto a la pequeña propiedad, asi como el frac- írahajadoras, dándoles una fuerza que obligue el apoyo del
cionamiento de los latifundios, cuyos beneficios van directa- elemento masculino y de las leyes a sus peticiones."
mente a los campesinos. Porque fueron ellos especialmente Y, ante esta clarinada de justicia y de verdad, la voz
quienes, por haber estado luengos siglos en situación pau- de! señor Presidente no sólo unifica, sino que ensancha las
pérrima, siguieron a Emiliano Zapata, el mártir de la Revo- aspiraciones de la mujer, quien, con alma de sacrificio, se
lución .agraria, y azuzados por el imperativo del hambre apresura a forjar su programa de trabajo y de cooperación
m.nterial y espiritual forjaron la revolución armada que se social.
tradujo en Justicia. Cárdenas eo todo un carácter. Una potencia moral. El
Los contratos de arrendamiento de tierra en donde se proletariado va pleno de fe tras él porque hasta hoy no ha
estipulaba oue el campesino pagaría al terrateniente no por la defraudado la revolución. Ha sellado los cánones internacio-
corecha que produjera, sino por la cantidad fija de tierra, nales con las consignas del Derecho. España, en donde el
fuera ésta buena o mala, viniéronse abajo por las leyes hu- pueblo vierte a raudales su sangre por la conquista de la
manas de la revolución. libertad, es el ejemplo más patético. En este caso, como en
Cárdenas, con visión política, fué a lo hondo de esa ne- otros muchos, México, plenitud de auroras, se ha anotado
cesidad nacional. Porque la renta que el campesino pagaba victorias excelsas impulsando con la palabra y el ejemplo a
al propietario territorial repercutía en la sociedad, ya que los vilipendiados que llevan sobre sus hombros la carga de
# ésta se resentí.! del aumento de los precios de primera nece- todas las injusticias.
sidad, consecuencia de la diferencia enorme entre los precios Por CSC las pupilas de los Continentes se posan, fijas,
a que vende el campesino su producción y al que vende el sobre Anahuac, admirando sus gestas.
monopolio o trust. Al caer !a cabeza de Maximiliano de Austria, en el Cerro
Si los trabajadores están al arbitrio de los capitalistas, si de las Campanas. México mostró al mundo el rubor de su
han de estar forzcsnir.ente bajo la dependencia de sus ene- dignidad y dio a las corte-s de Europa una lección de acero.
migos niic mueven a volutad la industria y la balanza de la Su cielo de alba claridad cobija los anhelos de un pueblo
economía, ¿cuál puede ser su situación, careciendo de liber- fecundo en ^'a!ores.
tad económicnV El nombre de Lázaro Cárdenas llena el mundo.
En vista de eso Cárdenas plasmó en realidad una de las Millones de inifíos morenos se alzan aclamando al hombre,
cláusulas más importantes del Plan Sexenal: comenzar a es- en tanto que consagran en las páginas infinitas de la Histo-
tablecer, como base, al par que la escuela, la economía so- ria un pensamiento colectivo pleno de fe, de gratitud y amor.
cialista. Barcelona, diciembre de 1937.
Lo que allende las íroni eras
Para MI REVISTA
no se comprende...
Por M a r i a n o R. VÁZQUEZ
Secretorio del C o m i t é N a c i o n a l C. N . T.

De España siempre se tuvo en el exterior un concepto desastroso y equi-


vocado. Salvo raras excepciones, los literatos de lejanos confines sólo ha-
blaban, al referirse a la Península, de la manzanilla, el torero, la bailarina
y el flamenco.
Los temperamentos fríos del norte y centroeuropa vieron en el español
e! elemento bullicioso e inconsciente, incapaz de grandes empresas.
De nada sirvieron los ejemplos que se encuentran a través de la Histo-
ria. Pocos recuerdan el arrojo y virilidad del pueblo español—pueblo macho
por excelencia, aunque no siempre lo dirijan hombres viriles—cuando des-
trozó los ejércitos invasores.
Llegó el 19 de ;ulio y la incomprensión no disminuyó.
Todos se admiraron de la gesta del pueblo español; pero, después de
mucho pensar, no comprendieron el verdadero alcance de nuestro valor y
lo catalogaron poco menos que en el archivo de los "milagros".
Tres cosas descuellan, entre todas, que ni comprenden en el extranjero
ni tal vez lleguen a comprender:
i.* El triunfo aplastante del proletariado español el 19 de julio.
2." Que a pesar de las divisiones y discrepancias entre partidos y
organizaciones antifascistas, seamos capaces de sostener la guerra, y
3.* El trabajo constructivo, edificante, que, al compás de la guerra,
se realiza en retaguardia.
Los matemáticos, los calculistas, los "hombres fríos" jamás podrán
explicarse que un pueblo sin armas dé cara a un ejército bien organizado,
con material de guerra y disciplina, asalte sus fortalezas y lo aplaste, como
ocurrió en Barcelona y Madrid.
Tampoco podrán nunca comprender que a los ejércitos invasores, dota-
dos del más modernísimo material bélico, los pueda sostener un ejército
improvisado al calor del combate, con muy escaso material bélico.
. ¡Ali! Pero el colmo de la admiración alcanza cuando observan que, a
pesar de la difícil situación del antifascismo español, a pesar de los avances
del enemigo, a pesar de que todos los síntomas podrían hacer prever la
derrota, el pueblo, optimista, seguro de su triunfo, sigue trabajando y cons-
truyendo.
En todas las épocas, en todas las etapas de guerras y revoluciones que
registra la Historia aparece un plazo prolongadísimo, durante el cual no
se trabaja, los lugares de producción están abandonados o rinden escasísimo
producto. Y en España, contrariamente a eso, ha aumentado la producción
desde el 19 de julio cíe forma considerable.
El día 21 de julio, cuando aun estaban calientes los fusiles, conquistados
en las batallas de la víspera, el proletariado iba a ocupar, con el fusil al
hombro, su lugar junto a la máquina. ^• al encontrarse sin los patronos puso
en marcha la producción, bajo su dirección, suplantando con creces la direc-
ción anterior. Y al poco tiempo las fábricas y talleres superaban la producción.
Y esto ;a quién se debe?
A la psicología, al temperamento, al dinamismo y a las condiciones
sociales de un pueblo indómito, capaz de luchar, vencer, trabajar y regirse a
sí mismo.
Y a la existencia de un movimiento y una organización que, siendo aglu-
tinante de estas condiciones y características, las condensa y dirige por los
senderos de la eficacia.
Hemos nombrado a la C. N. T.
JJ/irevÜitl

PRESIDENTE DE LA R E P Ú B L I C A ESPAÑOLA
o El director general de Seguridad con el
redoctor de «Mi revisto Juan M. Soler.

LA REPÚBLICA
EN MARCHA
El director general de Seguridad
nos dice lo que es la Policía re-
publicana Y ensalza el
espíritu humanitario de p^^ j„^„
la Justicia antifascista M. SOLER

Elfos y nosotros —¿Cómo va a reorganizar a la Policía?


Mientras en la España insurrecta toda la taifa de milita- —En la reorganización de nuestra Policía se dispondrá la
res traidores, obispos enjoyados, banqueros contrabandistas, creación de Comisarías generales territoriales y otras de tipo
terratenientes, latifundistas y aristócratas avariósicos que ro- central. Comisarías generales de especialidades con el corres-
dean a von Franco sólo se han preocupado en destruir, sin pondiente nexo y coordinación con las demás, al efecto de no
crear nada nuevo y sí tan sólo unos tribunales inquisitoriales entorpecer las funciones privativas de cada una de ellas.
que condenan a muerte a millares de hombres de izquierda, —Y el nuevo Reglamento orgánico de la Policía...
en la España leal, en la España democrática y republicana, se —Estoy preparando con la mayos urgencia el Reglamento
ha hecho todo lo contrario. orgánico de nuestra Policía, que ahora no lo tiene; Regla-
Pasado aquel ímpetu popular de las primeras semanas' mento que organice todos los servicios y defina de una ma-
que siguieron a la sublevación, ímpetu fiero justificado por el nera clara las atribuciones y derechos de todos los funciona-
nerviosismo de los primeros momentos y por la indignación rios, desde el director general hasta el último agente; Regla-
de un pueblo consciente que después de haber vivido ahe- mento en el cual figurarán la organización de todas las de-
rrojado durante el bienio negro veía resurgir la República pendencias, la manera de hacer los nombramientos, ascensos,
que romo una tiesta jubilosa fué proclamada el 14 de abril, traslados, premios, sanciones y correcciones de todos los que
se calmaron los espíritus más inquietos y volvieron las aguaí:^ formen parte de! Cuerpo.
a su cauce natural "De todo esto ni se tenía nada organizado ni había nin-
Y, desde entonces, en lugar de destruir como siguen ha- gún Reglamento en vigor. El que se redactó y aprobó en los
ciendo los otros, en la España leal todos, absolutamente últimos tiempos de la monarquía quedó derogado al implan-
todos, gobernantes y gobernados, tan sólo se preocupan en tarse la República, dejando al arbitrio del director el aplicar
construir, en realizar una obra que sea el exponenle ante todo los artículos que de aquél le convenía aplicar, pudiendo de-
el mundo del espíritu liberal, recto, justiciero y civilizado de cirse que sólo estaban en vigor los que se referían a los
nuestra? masas populares. castigos.
—¿Está usted satisfecho de la actuación de la Policía?
La Policía republicana
—Sí, muy satisfecho de su actuación. Trabaja bien y con
Uno de los organismos que más importantes transforma- gran entusiasmo. Además, me he dado cuenta de que entre
ciones está sufriendo es nuestra Policía. ¿Cómo debe ser la el Cuerpo reina una íntima satisfacción por las nuevas planti-
Policía? f sta es la pregunta que hemos hecho al director llas, para cuya confección se ha buscado en primer lugar la
ge'ncral de Seguridad, D. Carlos de Juan, cuando le sorpren- antigüedad, dejando un 25 % de plazas para turno de méritos,
demos en unos momentos en que el agobiante visiteo de tod •& para los puestos de mando y de responsabilidad, reglamentan-
los días le deja algo tranquilo, en esta mañana de domingo. do lodo esto de tal forma, que queda muy cercenado el libre
—La PoIicía--nos dice el Sr. De Juan—es un Cuerpo téc- arbitrio del director general.
nico, porque sus delicadas funciones exigen necesariamente
un tecnicismo y una especialización sin los cuales no daría el
—Se funda la nueva organización en un sistema de auto-
rendimiento imprescindible.
matismo bien contrario al favoritismo o partidismo que en
—¿Cómo ha ido usted formando la nueva Policía?
otras ocasiones ha dominado.
—Para la formación de la nueva Policía se ha ido a la
depuración de los funcionarios antiguos, quedando ahora los "Además, con las nuevas plantillas se ha logrado con-
que, además de su probada lealtad al régimen, están capacita- solidar la situación de todos los funcionarios, tanto los que
dos y preparados para sus funciones. También hay que reco- quedan de la escala técnica como los que ingresaron en el
nocer que entre los funcionarios que fueron nombrados pro- Cuerpo después del movimiento insurreccional. En fin, que
visionales hay una cantidad considerable de gente preparada, con aquéllas se ha logrado satisfacer la mayor parte de las
y aquellos que aun no tienen esa prejiaración la obtendrán en aspiraciones de los funcionarios.
la Escuela de Policía que se está creando. Por ella pasarán
todos los agentes por un curso de capacitación profesional, al Quién es el director g e n e r a l de Seguridad
que seguirán cursos superiores para ejercer con acierto y Don Carlos de Juan es un hombre afable, cordialísímo, un
responsabilidad cargos de inaiKlo. hombre que siente férvidamente el ideal republicano y que
sabe hacer compatibles todos los rigorismos de las leyes con constatar que el Gobierno de la República había dictado un
la más firme democracia. Tiene para Cataluña una gran ad- Decreto humanizando la Justicia.
miración y '.m gran afecto. Aqui, en Barcelona, inició sus es- -¿...?
tudios del bachillerato, y aqui, en Cataluña, nacieron cinco —Me explicaré. Todos aquellos que eran contrarios al
hermanos suyos. Además, en varias poblaciones de nuestra Frente Popular, a raíz de la sublevación podía considerarse que
región ha desempeñado cargos de responsabilidad a raíz de espivitualmente estaban adheridos al movimiento rebelde y,
su ingreso pot oposición y en brillantes ejercicios, en la ca- por lo tanto, podía serles aplicado el articulo 238 del Código
rrera iudicia!. de Justicia Militar que sanciona la adhesión a la rebelión, en
juez de primera instancia en 1915, desempeñó varios Juz- cualquier tornea que aquélla tenga efecto, con la pena de
gados, entre ellos los de Cifuentes, Brihuega y uno de los treinta años de reclusión a muerte.
municipales de Madrid. Al desglosarse las carreras de la ma- "Ésta es la justicia que están aplicando en el territorio re-
gistratura y fiscal, optó por esta última y fué nombrado tenien- belde unos tribunales militares que se han creado reciente-
te fiscal de la Audiencia de Ouadalajara y después abogado mente y que ju7gaii y condenan a todos aquellos ciudadanos
fiscal de la de Madrid hasta que pasó a ocupar la Sub- que no sienten entusiasmo por la causa de los sublevados,
dirección general de Seguridad cuando se creó este cargo y mientras nosotros, en la España leal, hemos creado los Jura-
desempeñaba la Dirección general el Sr. Alonso Mallol. En dos de Urgencia, que castigan como desafectos ai régimen a
octubre del pasado año fué nombrado magistrado del Su- los adheridos espiritualmente a los rebeldes por ser enemigos
premo y, poco después, teniente fiscal del propio tribunal. de' Frente Popular, con sanciones que oscilan entre cuatro
El Sr. De Juan es, pues, un hombre de leyes, que sabe mese.5 y un día y cuatro años de internamiento en un campo de
aquilatar la responsabilidad de todos sus aspectos, y que sabe trabajo.
cuáles son los deberes de todo ciudadano elevado a una alta —¿...?
jerarauía para el cumplimiento de su deber. —Que comparen nuestra justicia tan humanizada con la
de los rebeldes todos aquellos hombres que se permiten dudar
Una emoción de nuestro espíritu democrático y justiciero.
—¿Cuál ha sido la mayor emoción que ha sentido usted "Como hombre de leyes, como republicano y como espa-
desempeñando la Dirección general de Seguridad? ñol, esta disposición de nuestro Gobierno me enorgullece.
—^Cuando el asalto y conquista del cuartel de la Montaña, Después, tras de una breve pausa, el Sr. De Juan nos dice
de Madrid, a raíz de la sublevación y siendo yo subdirector sonriendo:
general de Seguridad. Fué aquello una cosa épica. Las Mili- —Vea usted lo que me espera para pasar el domingo.
cias formadas rápidamente y los guardias de Asalto se por- Y señala un enorme montón de expedientes que acaba de
taron bravamente. Aquello es difícil de olvidar. depositar en la mesa el jefe de personal de la Dirección general,
expedientes que exigen cinco firmas cada uno. En el montón
La Justicia humanizada tal vez habremos visto, mal contados, más de un centenar. Es
—Otra emoción-—sigue diciéndonos el Sr. De Juan—sentí decir, más de quinientas firmas.
cuando, siendo teniente fiscal del Tribunal Supremo, pude ¡Buena tarde de domingo!

Cuartilla autógrafa para "MI ravl<ta", del Sr. Da Juan, en la que enaltece o México, la nación hermana.

m¡f E L D I R E C T O R G E N E R A L OE SEGURIDAD

^AftllCULAR

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EUZKADI
Nuestra patria está llamada
a los más altos destinos

Emocionante escena detniños vascos acogidos en la U. R. S. S.

Un pasado vanturoso
En estos momentos de honda tragedia para nuestro pueblo es
int'-.resante considerar lo que ha sido la vida de Euzkadi, lo que es
ahora y presentar una visión del futuro.
El de nuestra patria es un pasado venturoso.
Porque Euzkadi. raza isla, pueblo cuyos orígenes se pierden en
la noche de los tiempos, vivió, durante el transcurso de siglos, inde-
pendiente y feliz. Entonces regia libremente sus destinos y sus Juntas
generales dictaban leyes que, por el hondo sentido democrático en
que estaban in.spiradas, se avanzaban en centenas de años a las con-
quistas constitucionales de otros países. Entonces en Euzkadi no
existían fabulosas fortunas amasadas con sudor y sangre del pueblo,
pero no existían pobres. Cada vecino tenía su casa, los montes eran
comunales, y la explotación de las minas, una de las principales
fuentes de riqueza del país, sólo podían practicarla, mancomunada-
mente, los vecinos de los pueblos en cuyo término municipal radi-
caban aquéllas.
A este pf.sado de gozo y ventura puso un paréntesis—que en la vida
de los pueblos un siglo no tiene más valor que el de un paréntesis—
el espíritu de conquista y el afán de rapiña de la monarquía espa-
ñola. Lo que ésta no pudo lograr con las armas, lo obtuvo por la
Un magnifico cuadro de «Hilanderas y Espatadant- traición. Euzkadi fué viendo, progresivamente, arrebatadas sus liber-
2aris> en un festival celebrado en Barcelona. tades: las minas fueron ceaidas en cotos a figuras de relieve en el
sector monárquico o, simplemente, al mejor postor; y así se iniciaba
en nuestra patria la explotación del hombre por el hombre, cosa
que en ella jamás se había conocido.
Próximo a cumplirse el centenario de la fecha en que fué pro-
mulgada la inf.3usta Ley de 1839, la República reconocía a Euskadi
un estatuto autonómico que, si bien no le devolvía la totalidad de
las libertades que la monarquía le arrebatara, permitía encauzar sus
actividades por la ruta de su consecución.
Un presente d e dolor profundo
¡Honda tragedia la que vive nuestra patria en los momentos
actuales! Doscientos mil hijos de Euzkadi han tenido que abandonar
sus hogares huyendo de la persecución sañuda de quienes nos de-
clararon una guerra de horror y de exterminio. Miles y miles de
hermanos nuestros han caído para no levantarse más. Unos con
las armas en la mano, defendiendo bravamente, palmo a palmo,
la tierra nacional; otros, vilmente asesinados por el fascismo, víc-
timas de bombardeos de ciudades abiertas, que son baldón y ver-
güenza para la civilización. Miles de hogares destruidos por las
explosiones de trilita o por las bombas incendiarias; miles y más
miles de casas en las que del espíritu de rapiña de los fascistas
españoles y sus congéneres del fascismo internacional han quedado
exponentes de irrefutable elocuencia.
Esto y mucho más es lo que nuestra patria debe al fascismo.
Una misa de cam-
Un futuro de esplendor y gloria
paña en pleno Pero la tragedia actual tendrá su fin. El fascismo criminal e
frente de Otxan- infrahumano obtendrá la más rotunda y definitiva de las derrotas
sobre el territorio del Estado español y, por extensión, sobre la tierra
diano ( E u z k a d i . ) nacional vasca. La zona urbana será reconstruida. Los caseríos—ho-
gares en que se han mantenido más puros los valores de nuestra
raza—volverán .1 si; paz idílica. Euzkadi, regida por su Gobierno na-
cional, reedificará su vida bajo el signo de la fraternidad, como en
sus mejores tiempos. Una era de paz y de justicia será reimplan-
tada. Los vascos tendremos entonces muy presente el nombre de los
pueblos que en los dolorosos momentos de nuestra tragedia se
hubieran solidarizado con nuestra justa causa y nos hubieran pres-
tado asistencia.
Algo, empero, vo habrá podido reconstruirse: los miles de vidas
Policía militar y vascas segadas en flor por ¡a hoz criminal de la Internacional fas-
cista. Pero esa sangre, generosamente vertida, hará fructificar aún
voluntarios regis- más nuestra tierra, de suyo fértil en libertades.
trando escom- Y Euzk'idi vivirá el futuro de esplendor y gloria a que su pasado
glorioso y el valor de sus hijos le habrá hecho acreedor.
bros.
M . de A. M .
"Mi tQ\tÍ5ta** en Jlonelteí

POCKER DE ASES
j?WVV^v-9V<7VVVVVVVVVVVVVVV^

¿Qué nuevas trajo de Berlín el seráfico lord Halifax? Su viaje


tuvo carácter particular, según cuidaron de reiterar los voceros del
Foreing Office, pero las repercusiones de su excursión no tardaron en
llegar a París, en forma tle excitaciones amistosas.
—Venga aquí, raro monsieur Chauteinps, venga en compañía de
ese archirrojo monsieur Delbos, que necesitamos conversar de cosas muy
interesantes. Sepan que el Führer quiere...
Y, ¡claro está!, Chautemps y Delbos emprendieron el viaje y llega-
Hev»»e <-" británico. ron a los salones de! caserón de Downing Street con la curiosidad muy
despierta, inquietos ante las demandas que aun no conocían.
El Times, con sus columnas de prosa amazacotada, cuidó de alertar
a los dos políticos ingleses.
"Nada de intransigencias inoportunas, señores galos; cuiden de
poner freno a sus lirismos democráticos; vean de cohonestar su posi-
ción republicana con los métodos nazis; prescindan de ideas generosas
de cooperación y de defensa del Derecho internacional. Lo que importa
en estos momentos es: que no se vea en peligro el equilibrio europeo.
Francia e Inglaterra unidas pueden hacer grandes cosas. Entre ellas
dar oídos a l.?.s apetencias del Führer, porque ¿en nombre de qué dere-
cho puede ser contenida la marcha de setenta millones de alemanes hacia
el Este? ¿En el que pueda invocar Checoslovaquia? ¡P>ah! El derecho
de los pueblos débiles ha de quedar subordinado a las razones imperia-
listas de las grandes potencias."
Así o en términos parecidos habló el más sesudo de los diarios
ingleses.

El Tratado de Versalles
Los "cuatro grandes'' que cuidaron de reorganizar Europa: Clemen-
ceau, Lloyd George, Sonnino y Wilson, el visionario, debieron respirar
satisfechos al ver concluida su misión. Sobre una herida purulenta pro-
picia a la infección, dejaron muchos fermentos imperialistas. Al desarro-
llarse, más tarde, tomaron forma tangible en Hitler, convirticndole en
paladín del irredentismo germano. De ahí sus grandes éxitos políticos
que le llevaron de audacia en audacia a prescindir de muchas de las
obligaciones impuestas a Alemania: evacuado el territorio germano por
las tropas de control, se procedió al rearme de las fuerzas de choque
nazis, se fueron creando los cuadros completos de mando del ejército y
se intensificó la recluta de pilotos de aviación. La Lufthansa, cuyos avio-
nes comerciales cubren todas las rutas de Europa, ofrecíales grandes
posibilidades de entrenamiento. Se concedió a la fotografía aérea la im-
portancia real que tiene en estos tiempos en que el espionaje es un
deporte peligroso y se cuidó de intensificar las propagandas en formas
aparatosas.
El 14 de octubre del año 1933 expuso Alemania ante la Conferencia
de! Desarme reunida en Genova sus aspiraciones igualitarias sobre
armamentos, y, como no se le diese satisfacción, el día 21 del mismo mes
y año abandonó la Sociedad de Naciones, dispuesta a tomarse la jus-

.aen definidor d - «o po>íf.co I,


CHAMBERLAIN, EDÉN, CHAUTEMPS
y DELBOS estudian las peticiones
del Führer ...
Willy J. ANDERSON

ticia^—-SU j u s t i c i a , Le digo a usted en con-


naturalmente—por su fianza, amigo Halifax.
mano.
Tomó la palabra el Führer y dijo a su huésped
Desde entonces la
de honor-
paz de Europa ha esta-
do a merced de sus —Bien ¿é que viene en viaje informativc particu-
ChQutemps, jefe del Go- exigencias. Inglate r r a lar. Pero como yo soy amigo de no andarme por las
bierno francés. y Francia han condes- ramas, voy a sugerirle cosas que pueden ser abordadas
cendido en tantas oca- por e? Gobierno inglés, al que usted pertenece. ¿No le
siones, que Alemania parece bien, mi querido amigo Halifax?
ha visto acrecida su Y como asintiera ei lord, abundó en sus razones
fuerza en la misma el Führer:
proporción que ha ido —Bien sé que en el artículo 231 del Tratado de
mermando la del De- Paz se dice que "los Gobiernos aliados afirman, y
recho internacional. .A.lemania acepta, la responsabilidad de Alemania y de
El viaje de l o r d los países que a ella se unieron, de todos los daños
Halifax fué una clau- y pérdidas a que los Gobiernos aliados y sus naciona-
dicación más, Y el ar- les iian estado sometidos como consecuencia de la
ticulo aparecido en guerra impuesta por Alemania y Austria-Hungría";
The Times el mismo
día de la llegada de
pero se me ocurre a mí pensar que es pueril que se
ahonde en ese texto para poder deducir consecuencias
adversas para nosotros. Si lo que importa es que se
i
Chautemps y Delbos a
Londres, la apostilla reincorpore Alemania a las actividades de la Sociedad
adecuada a la última de Naciones, ¿por qué no se modifica el Covenant? Creo
maniobra política del yo que procedería separar el Covenant del Tratado de
^
Führer. Paz, suprimiéndose la cláusula llamada de "responsa-
Ivon Delbos, ministro de Nego- Todo lo que pueda bilidad de guerra" referenciada antes.
cios extranjeros de Franco. "Además, ¿por qué ha de persistir en su redacción
molestar a las grandes
potencias no es hones- primitiva el artículo 26 del Covenant? Si no recuerdo
to, vino a decir el ro- mal. se dice en él que "las enmiendas a este Covenant
tativo londinense. "N' como no fué honesto el Tratado tendrán efecto cuando sean ratificadas por los miem-
de Versalles, ¿por qué han de subsistir las cláusulas que bros de la S. de N., cuyos representantes componen el
aun no han sido anuladas por Alemania? Consejo, y por la mayoría de los miembros de la
David Lloyd George, el agudo político liberal bri- S. de N., cuyos miembros componen la Asamblea. Tal
tánico, afirmó una vez que al ser llegado el armisti- enmienda no obligará a ningún miembro de la S. de N.
cio tuvo que luchar contra las fantasías místicas de que muestre su disentimiento, pero en este caso dejará
Wilson y los afanes de venganza de Clemenceau, que de pertenecer a la S. de N.".
tomaron cuerpo legal en la letra del Tratado de Ver- "Todo esto es muy pueril, querido Amigo Halifax.
salles. "¿Sabe que yo busqué una solución muy otra ¿No le parece a usted? Hablar de sanciones es una
que la de Versalles, con la visión de la guerra futura, cosa que se presta a equívocos muy peligrosos. Y, ad-
inevitable en el caso de que un espíritu de sana tole- mitida la buena fe en que nos inspiramos, ¿por qué ha
rancia no rigiera las negociaciones de paz? ¿Sabe us- de permitirse que sea mantenida esa amenaza? í
ted que esta Europa de hoy, erizada de armas, esta- "Se impone, además, la revisión de los tratados
llante, fué prevista por mí en los discursos de 1919?" "sobre las minorías". Cierto es que Alemania no está
Est^s dos preguntas formuladas por David Lloyd Geor- ligada por ninguno de los ocho tratados que firmaron
ge a Bruno Lipari, encajan perfectamente en la hora Polonia, Bulgaria, Checoslovaquia, Yugoslavia, Aus-
presenté, en que parece que se tiende a la revisión tria, Rumania, Hungría y Grecia; pero, ¿qué importa
de las aspiraciones alemanas. eso? Lo esencial es que puedan ser estudiados con es-

^^^^^S?.2SS5;i3,^;532;3552j355555555522SS553S35S3ro?S3S5SSS55J5^í3ZS33S?CÍS5SJ3S3aZ:32;^^
píritu tolerante y bien dispuesto a las soluciones que tivamente la unión de Alemania y Austria, ¿quién podrá
tiendan a beneficiar a Alemania. Por ejemplo, ¿qué se oponerse a las exigencias de la realidad? Alemania de-
opone a nuestras pretensiones sobre la Sudetenland che- fiende en esto, como en todo, su derecho, asistido por la
coslovaca? A nosotros nos importa más la razón funda- firme voluntad de los hombres que viven dispuestos a
mental que nos mueve a aspirar a la Alemania Grande, sacrificarse por la patria.
que los pretendidos derechos invocados por el Presidente "Y puestos en plan de reivindicaciones, caro amigo
Benes y sus justificaciones en la "Memoria 3" presentada Halifax—debió terminar diciéndole el Führer—-no olvide,
a la Conferencia de la Paz, en la que se afirmaba que que Alemania necesita colonias, muchas colonias para nu-
'las intenciones del Gobierno de Checoslovaquia son trirse de las primeras materias que son indispensables a
crear una organización estatal aceptando como base de los nuestro pueblo. Togo y el Kamerún han de ser nuestros.
derechos nacionales los principios aplicados en la Cons- Y se nos ha de permitir que intervengamos en la geren-
titución de la República suiza, es decir, hacer de Che- cia del Congo belga y de Angola, por no citar más, sobre
coslovaquia una especie de Suiza, teniendo en cuenta, la base de la organización de una Compañía con régimen
naturalmente, las condiciones especiales de Bohemia". de carta, cuya mayoría de acciones tendrá que radicar en
"No es eso precisamente lo que importa, querido ami- Alemania...
go Halifax. Bien sabe usted que Henlein es el verdadero
definidor de las aspiraciones de los alemanes que habitan Pocker de ases
en los Sudeten y yo y los elementos que colaboran en mi
Chamberiain, Edén, Delbos y Chautemps, definidores
obra gigantesca de reconstruir el Imperio somos quienes
supremos de la política europea, han estudiado en Londres
podemos considerarnos valedores de la razón. Iremos fa-
las peticiones alemanas. La nota oficiosa facilitada por
talmente hacia el Este en cumplimiento de impcrativus
los Gobiernos anglofrancés es inocua, gris y ambigua a
patrióticos, de igual manera que nos será forzoso ir al
más no poder.
"Anschluss'', toda vtz que la unión de Alemania y Aus-
¿Subsistirá en toda su importancia el eje Londres-Pa-
tria es una necesidad vital para nosotros.
rís? Si se mantiene el /a/r play—el juego limpio—ven-
"No ignoro—¿cómo iba a ser posible?—que su com-
cerán ios derechos de las pequeñas potencias del centra
pañero lord Simón dijo en la Cámara de los Comunes que
de Europa, aunque el Führer quiera actuar de comodín,
"la integridad y la independencia de Austria son uno
para decidir a su favor una partida que está indecisa.
de los objetivos de la política británica, y aunque e! Go-
bierno de Su Majestad no tiene intención de intervenir en Mucho temo, sin embargo, que suceda allí como ha
los asuntos de otro pais, reconoce plenamente el derecho ocurrido con España. Si actúa el Führer, se pensará en
de Austria a exigir que nadie se inmiscuya en sus cues- la "no intervención" como medida salvadora de los egoís-
tiones internas". ¡Boberías! ¡Simples boberias! Porque mos de las grandes potencias, cerrándose la jugada con
aunque el artículo 80 del Tratado de Paz prohiba taxa- un fallo de ases.

imiiiiitiMiiiiiiiiiiniiiiniiiiiiiii<niii<iii>iLiiiiiiiu llItlIllllllllllllllllMIIIIIIMIIIIIIII til tlllllltIHIKIlllllllllllllllllItlIlllMIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII

L'HOSTALET

COCKTAIL,
B AM

Conseit de Cent, 335


íxomfró Rambla d e C o l a l u n y o l

TE L É FO N 22259 - BARCELONA

IIIIIMIII1MIII1 nii iiini HmiiiPTi

*-';
EL PRESIDENTE
Carta abierta a quien me pide datos acerca del general Lázaro Cárdenas,
Presidente de la República mexicana

Mi querido amigo: No eres tú solo quien sabiendo mi rela- pre, los nuevos ricos de ahora mismo, generalitos o politiquillos,
ción con México, mi conocimiento por relación directa del modo habían querido substraer a la aspiración y a la conquista po-
de ser, vivir y servir a su pueblo, del Presidente Cárdenas, me pulares.
pide algunas "referencias" que no sean "periodísticas", que hayan Tiripitio, con la primera Universidad de América; Morelia,
nacido de viva fuente, que, en lo posible, no estén deformadas que se llamó Valladolid; Vasco de Quiroga, que sirvió a los
por la política de partido, que reflejen con la más exacta clari- indios tarascos en lo que había de perdurar con una mayor
dad la personalidad del michoacano que rige con sensibilidad dignidad: las artes populares, que en Michoacán florecen con
extraordinariamente humana los destinos de su país. gracia esencial, inigualable.
Para contarles a otros, a la vez que a ti, lo que aqui puedo Y en el Estado de Michoacán, que tiene a Pátzcuaro por su
y debo decir acerca de Lázaro Cárdenco, escribo esta carta, joya más reí avante, donde nosotros trabajamos, gozamos, pusi-
abundante en matices, que me gustará satisfaga tu natiural mos en orden activo la volutad tensa de servicio social, un pueblo
curiosidad que el agradecimiento aviva, que estimula la admi- limpio, con su zócalo grande, florido, que centra un templete
ración. para la música, que ha convertido su mejor iglesia en casa
de los trabajadores, que tiene próximas unas altas lomas tes-
La tierra tigos firmes de luchas bravas contra el extranjero invasor,
Jiquilpán, Jiquilpán de Juárez desde hace pocos años, desde
Cuando e^ cansancio nos domina, cuando se estrechan nuestros que hace unos cinco años el general Lázaro Cárdenas, por en-
horizontes y el tedio cerca nuestro anhelo, cuando "ya no po- tonces gobernador de su Estado natal, la denominó de este modo,
demos más", según el dicho popular, siempre nos queda una haciendo levantar una estatua al oaxaqueño austero, al "don
esperanza que es tranquilidad y tarea, que es remanso y camino Benito benemérito", según rezan los testimonios públicos en la
abierto, que es Kspaña aun no siendo España, pues que el recuer- mayoría de las poblaciones mexicanas.
'ío de una noble vida española entregada al indio oprimido nos
En Jiquilpán de Juárez, pueblecito limpio del Estado de Mi-
!'8a a través de la historia con hombres, oficios y ejemplos.
choacán, de no más de seis mil habitantes, y cuyos términos quie-
Tierras rosas, montañas azules, lagos que el viento amable
ren llegar sin conseguirlo hasta el pequeño mar interior que
•"iza, músicas que tejen guirnaldas melódicas en torno a las
fiestas menores... Y caminos, caminos cruzados y retrecruzados enriquece notablemente al Jalisco que "nunca pierde y que
por un hombre de allí, de la propia tierra, que sabe toda la cuando pierde arrebata", nació Lázaro Cárdenas, de padres hu-
necesidad de sus gentes, que la sufre y la goza en su esperanza mildes, aunque no resueltamente pobres, que tenían su muy buena
de superarla, que supo dedicar su vida, entregar su vida, a co- casa, que los hijos han mejorado, pero manteniendo con amoror
nocer, estimular, satisfacer las ansias de "echar hacia arriba", sa devoción sus primitivos límites, y en la cual hemos descan-
buscando unos pianos sociales que los encomenderos de siem- sado nosotros de caminatas apresuradas realizadas a la busca
aquella hora en que para atacar al dipsómano y asesino Vic-
toriano Huerta dejó su Jiquilpán sonoro, que aun no estaba
cediendo a Juárez, en el Michoacán recordado por nuestro goce.

IMüicia
Descae los dieciséis años, soldado. Soldado en armas siempre,
dispuesto en todo instante a tomar las armas para defender
a su pueblo de los ataques de la reacción, del capitalismo, de
la agresión difusa o directa de una apretada burguesía civil o
con galones, con entoriihados, con aguilitas en la gorra de plato
de unos militares que tí pueblo elevó a millonarios, a caudillos
enemigos de la voluntad popular.
Siempre a caballo, aunque estuviese en -su despacho del
Gobierno de Michoacán, en el ministerio de la Gobernación, o
en la presidencia del Partido Nacional Revolucionario.
Militante de la dignidad, de la dignificación de su pueblo,
siempre. A punto siempre de partir hacia los frentes que la
reacción capitalista quisiera o pudiera imponer apoyándose en el
fanatismo religioso, en una demagogia turbia, obscurecedora de
la conciencia nacional.
Militar sin jactancia, poco amigo del uniforme, ansioso de
ver a su pueblo desmilitarizado, reducido a términos que la ley,
mucho más que la dura fuerza, pudiera prever, acotar, resu-
mir en acorde activo.
De su valor sereno frente al enemigo, junto al compañero en
peligro, hablan mucho los que le vieron sonreír, bromear, mien-
V*. tras las halas entonaban su "corrido" mortífero. Y de sus res-
puestas serenas, ejemplarizadoras, cuando herido y vencido por
la mala suerte del combate famoso, tenía que replicar al jefe
de la necesidad campesina, de justicia que realizar,, de esperan- vencedor, también se cuenta en México, han sabido aprender los
zas que compartir. mexicaiioG que anteponen a todo anhelo personal el servicio al
Allí, en el pueolo del Presidente, escuchamos por primera pueblo en ascenso.
vez. cantado por los "mariatl is" del rumbo de Chápala, el corri- A los cuarenta y pocos años, en treinta de acción popular,
do reavivador que empieza: puesto que casi niño sentía ya la necesidad de hacer camino
—"Vengo en busca—De una blanca palomita, por señas traigo fácil al proletariado de su pais, ha cubierto todos los planos de
—Un dolor dentro del alma, dolor ingrato..." acción social: campesino, tipógrafo, soldado, general, ministro,
Presidente, y en cada etapa de sus intervenciones ha sabido ir
dejando, como poso que se desprende, lo que el militar tiene
La infancia
de primario y devastador, de arrebatado e irrefrenable.
La tierra, la escuela, la familia humilde y honesta, la oficina Militante de una milicia que sólo recurre a la fuerza bélica
de recaudación en la que comienza a rasguear con aire decidido cuando las fórmulas conciliadoras, razonadoras, han apurado
su exuberante caligrafía, y la imprenta, la imprenta local, pobre,
escasa de material y de trabajo, que sin embargo atrae profun-
damente al mocito grave, de labios gruesos, de torso recio, de
palabras escasas y de voluntad decidida.
En un iibro español aparecido recientemente, y que recoge
le más saliente de la historia de las artes gráficas en todo el
mundo, entre la biografía sucinta del famoso tipógrafo inglés
Guillermo Bulmer, y una nota acerca de María de Casa, consi-
derada como la primera mujer cajista conocida, se dice: "Lázaro
Cárdenas, tipógrafo. El general Lázaro Cárdenas, elegido Pre-
sidente de la República de México en 1934, hizo su aprendizaje
como obrero en un taller de artes gráficas. En 1913 dejaba la
tipografía para luchar contra el Gobierno de Porfirio Díaz (V).
Después al correr de los años, el modesto tipógrafo de otros tiem-
pcc ha sido gobernador, ministro del Interior y de la Guerra,
comandante militar de diversos Estados de México, y, finalmen-
te, elevado a !a más alta magistratura de la gran República
mexicana".
Aquí está, pues, en libros nuestros, que tratan de la imprenta
a través de los tiempos, el dicho cierto del gran Presidente im-
presor, que si no dejó el modesto taller de Jiquilpán de Juárez
en el 1913 para luchar contra Porfirio Díaz, si lo hizo para
luchar contra el general Huerta, asesino del mártir Madero y
de! vicepresidente Pino Juárez.
Casi un niño monta a caballo Cárdenas en su tierra de Mi-
choacán para defender a la justicia escarnecida, a la humildad
asesinada, a la mancillada decencia.
Lo recuerdan bien los mexicanos cjue coincidieron con el que
pronto, por méritos de guerra, había de ser divisionario, el
divisionario más joven del Ejército de la República. Como un
centauro en los combates. Serio. Comprensivo. Decidido en las
horas de riesgo. Y como ningún jefe, inspirador de confianza,
aleccionador con la palabra corta y el hacer constante y seguro.
Esto, desde su infancia, desde su juventud lanzada, desde
—Ajusfar la palabra a la obra es misión central de todo
gobernante.
—De todo gobernante mexicano sobre todo—recibió por jus-
ta respuesta. Y el que había de ser Presidente:
—Si yo, como castigo o como premio, recibiese el peso gus-
toso dñ servir a mi pueblo desde el más alto cargo, no tendría
otra ley que la de atender la voz, y no el eco, de los que por
campos y poblados sufren de ancestral injusticia.
—Y hermanar la palabra al hecho. Considerar que lo pri-
mero es restablecer la fe en la capacidad de interpretación ge-
nerosa de las necesidades del pueblo, que tantos políticos se han
cuidado bien de cegar, de trocar en resentimiento.
•—Exacto—supo afirmar con convicción el que acabaría en
Presidente. V se complació en atender el dicho del amigo honesto.
—Y enderezar, si está torcida, la vida personal; y aislar al
ladrón, v al truhán de honras; y atender, cuidando mucho de
entresacar los nuevos brotes, siembra de futuro, marcando unos
nuevos caminos que saquen a México del sucio oprobio en que
los siglos le han tenido.

fu eficacia, Cárdenas, pensamos nosotros, quisiera ser tránsito,


en sí y en el que pueda sucederle en el Gobierno de su pais,
del militarismo apremiante, áspero, injusto, pagado de la espada,
que suele apoyarse en la espada para perseguir la injusticia
y..- para mantener lo injusto frente al silencio reflexivo, defen-
sivo, de unos pueblos pobres, empobrecidos por la poca fortuna.

Política
Alguna vez alguien que quiere y admira al Presidente Cár-
denas, cuando éí,te no podía pensar con apoyo de la razón
er¡ la posibilidad de un mandato presidencial, pero cuando ya
se decía asimismo con cierta insistencia "que en cada mexicano
existe un posible ocupante de la silla del benemérito", hablaba
con él do la remota sucesión, supo decir quien pronto perfilaría
su fuerza, la seguridad de su triunfo:

Y esta sencilla trayectoria marca su hacer político, su rea-


lización presidencial, su artesanado consecuente, paciente, se-
guro de entrar en la entraña de la realidad y la necesidad de su
magnífico país.
Y sus discursos, sencillos, con elocuencia que llega por cauce
sereno, que tienen en todo momento confirmación exacta, se re-
ducen en pura esencia a eso: ligar la promesa a la obra; inten-
tai servir, sobre todo, contra todo, al proletariado campesino;
intentar unir a su obra, con mayor o menor fortuna, a los me-
jores, que no más sabios, que su conocer diferencia.

Honradez
Sobre todo en este problema tan resbaladizo, tan propenso
a la prueba fallida, del trato con los dineros del erario público,
que en America y fuera de América tiene tantos golosos, tantos
y tantos consideran como un bien común... para algunos.
El mandato del Presidente Cárdenas se caracteriza por la
pulcritud personal, por el prurito de que el ejemplo se multipli-
que, en lo que al desprecio por el forjar fortuna pronto, pronto
y mal, se refiere.
Y cuidado que el mal tiene raíces hondas; y la sensualidad
que necesita del auxilio de la codicia encuentra almohada pronto;
y está la semilla extendida; y los climas son favorables al cre-
cimiento de la planta.
Sin embargo, aunque la maledicencia quiera tejer juicios des-
favorables en torno a algunos hombres que en más o en menos
puedan moverse dentro de la muy limpia zona en que el Presi-
dente se afirma, nadie se atreverá a pensar y menos se atreverá
a decir que el general Lázaro Cárdenas sabe en verdad de estos
ataques, ayudó de modo voluntario a desviar a la justicia, poco
ni mucho, de su camino natural, buscando el modo de regar el
huerto del allegado próximo, del amigo que exige el pago de
un favor añejo, que con reiteración presenta la factura crecida
de un esfuerzo que acaso hiciera, que fingió realizar un día...
Vivir cerca del Presidente Cárdenas és, en lo que a su volun-
tad se refiere, vivir en constante exigencia, en pura prueba y
contraprueba, sometido a temperaturas de constante renuncia-
miento que no todos, lo suponemos, son capaces de resistir. Y
esto, en América y fuera de América es condición sobresaliente,
es mérito de noble estirpe, flor de sorprendentes matices.

Con el pueblo
Con el pueblo siempre, entrególe todo al pueblo, diciéndole
con el ejemplo al pueblo los deberes y los derechos, la obliga-
ción común de esforzarse por hacer pie seguro en el trabajo
productivo, en la justicia responsable, en el impedir por la coor-
dinación segura la vuelta de un pasado que se traba con insis-
tencia a los pies de nuestro presente.
En la capital de la República, en los salones presidenciales,
lo indispensable para que la vida constitucional siga su curso
fijo, siga su trámite legal; el resto del tiempo, casi todo el tiem-
po, el Presidente se lo entrega a los campesinos, que él sabe
m.ás abandonados, que él conoce más merecedores de atención,
de conocimiento y estímulo.
tiempo de jugar al adjetivar. A nosotros no nos preocupa hoy,
A pie, a caballo, bajo los ardores de un clima agobiador; al trazar esta semblanza apresurada, de rasgos firmes y prima-
sometid» reiteradamente a las rudezas de un vivir que es milicia rios, más que dejar ver, o entrever tan sólo, a un hombre ame-
constante, luchando contra dificultades de muy penosa supera- ricano que se destaca con intenciones limpias, con voluntad su-
ción, el Presidente Cárdenas recorre la República mostrando a peradora, entre unos hombres y unos pueblos que se esfuerzan
todos, sobre todo a ios más humildes, una vida entregada a ellos, con mucho éxito en contener y deshacer la justísima aspiración
forjada de hora en hora en un correr la misma suerte, en un de crecimiento y de afirmación populares.
saber y en un querer saber seguro, la necesidad verdadera del
pueblo perdido o postrado. España y México
De como sabe hallar camino claro y justo el Presidente Cár-
denas lo dice su actiud segura, coherente, tensa y serena ante
todo grave peligro, que ha sabido trazarse y que ha sabido
mantener, frente a la lucha que sostenemos en España frente
al fascio internacional.
Sus directrices proyectadas sobre la torpeza, la confusión, la
desvergüenza de unas cobardes democracias, de unas naciones
envilecidas por la dictadura agresora, son y serán ejemplo de
noble claridad, de insuperable dignidad compartiblc con los
mejores.
Por fin los pueblos—pueblo de España y México—, por la vir-
tud de una prueba terrible que es amargor y es gloria, con la
ayuda sencilla y honda de un hombre que supo escuchar el latido
exacto del pueblo de que nació y a quien sirve, se han unido,
se han entendido, han hermanado de manera visible sus destinos
históricos.
Será vencido el fascio. Los pueblos hallarán, con esfuerzo
purificador, sus más certeras rutas; los enemigos de la justicia
serán barridos por la voluntad popular; experiencias inapre-
ciables podrán venir a nuestras manos; España, campo de ex-
perimentación, podrá agradecer plenamente; y será entonces
cuando México, en sí, y a través de su Presidente, recibirá un
muy justo pago que hoy acariciamos, que de hora en hora acre-
centamos, que en estas lineas, con tanta pobreza como buena
intención, pretendemos anticipar.

Final
.Amigo mío: Me gustaría mucho haber acertado a complacerte,
¿Qué línea política, qué credo político sigue el Presidente a la vez que complacer a otros camaradas curiosos, noblemente
de la República de México? curiosos, que como tú querían saber, por información objetiva,
¿Podría encuadrarse con justicia su modo de servir al pue- desinteresada, leal, algunos datos que sumados pudiesen crear
blo en esta o en otra doctrina de tendencia extrema, no extre- una semblanza más o menos exacta de ese hombre realmente
mista, a que tan dados son, para execrarlas, los dictadores ame- extraordinario que se llama Lázaro Cárdenas.
ricanos? Otra vez, cuando la vida nos autorice, podremos volver sobre
¿Seriamos justos al hablar de un comunismo más o menos un tema que le es tan verdaderamente grato a tu camarada
larvado, de un socialismo intencional, de perfiles poco resueltos? y amigo
Quédese este intento definidor para quien tenga deseo y Gabriel GARCÍA MAROTO
HIUIIIIIIIIIIMIIIIIIIIIHIS

El consejero de lo Generalidad y rector de la Universidad de Barcelona, P. Bosch Gimpera,


con Magda Donato, redactora de cMi revista», celebrando este reportaje.

El Dr. Bosch Gimpera, rector de la Universidad


autónoma de Barcelona y consejero de Justicia
de la Generalidad, nos habla de p^j. j^agda
México, de la cultura y de la libertad DONATO
íiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii?

El rectorado de la Universidad de Barcelona es una estan- "nuevo"; es decir, es un hombre tal como debían ser todos
cia amplia, suntuosamente entonada en rojo y oro, de aspec- los que en la actualidad tienen misión de conservar el teso-
to severo y confortable, con su artesonado magnífico, su mesa ro espiritual de nuestro pasado, con procedimientos de hoy,
de mármol, sus cuadros, entre ellos un "Giordano" de impre- y mirando hacia el porvenir.
sionantes dimensiones, su sillería de terciopelo encarnado y su Correcto, sencillo, complaciente, amabilísimo—ya sé que
ventanal. a todc el rr.iindo recibe y acoge igual; no me alabo de su
Junto a la chimenea en que arde un fuego de leña es- exquisita afabilidad para conmigo, pero la celebro, por lo
pléndido (sí, en el frío de estos días, éste es un dulce oasis mismo, doblemente—, por su aspecto podría parecer un ac-
de temperatura, ¡Ahí Aun hay privilegios...: el de la única tor; por su actividad, un hombre de negocios; y, sin embargo,
aristocracia admisible, la única que puede y debe subsistir, hablando con él, se comprende en todo momento que sea uno
la de la inteligencia) pone una nota de actualidad un retrato de los máximos prestigios de la cultura catalana.
del Presidente de la República, con su dedicatoria ("Al rector El Dr. Bosch Gimpera tiene el buen gusto de no afectar
de la Universidad de Barcelona, D. Pedro Bosch Gimpera, hacia la Prensa y sus fotógrafos un horror de "estrella de
mi buen amigo") de letra menuda y nerviosa, la letra carac- cine" asediada; se deja interviuvar y retratar con toda natu-
terística de nuestro "Primero", ese gran sensible que por ralidad, sin hacer aspavientos ni dar largas; accede a ello
un prodigio de voluntad logra aparentar una serenidad in- porque sabe respetar el trabajo ajeno; y cumple puntualmen-
mutable, rayana en la frialdad. te lo prometido porque también sabe respetar el tiempo de
En este marco austero, imponente y vetusto, de ambiente los demás. Hasta encuentra la manera de complacer sin pa-
adecuado para algún anciano venerable de luengas barbas recer causarse a sí mismo una molestia excesiva, simplemen-
blancas, o para algún vejete encogido, con lentes de oro, he te porque es un perfecto "distribuidor y metodizador de mi-
visto aparecer al Dr. Bosch Gimpera, y ha acudido a mi nutos".
memoria, en el acto, el famoso verso de Andrés Chenier que A la una, el Dr. Bosch Gin^pera ha abandonado su tra-
pretende resumir toda una teoría de arte: "Sur des penscrs bajo; a la una y media ha de ir a visitar al Sr. Companys;
nouveaux. jaisons des vers antiques" ("Sobre pensamientos a las dos almuerza con un ministro. Pero esto no le ha im-
nuevos, hagamos versos antiguos"). Y he pensado: "Sobre pedido citarme para la una y cuarto; telefonea al rectorado
tradiciones antiguas, coloquemos hombres nuevos." donde le espero, a la una y diez, para avisarme de que se retra-
Don Pedro Bosch es un hombre joven, y es un hombre sará media hora; y llega exactamente a las dos menos veinte.

iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, iiiiiiiiiii III II iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiimi II miiiimiiiiiiiiiiiiiiiii.iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiirii'in iiiiiiiiiiiiiiiiiiiimniiiiiiiiiim iiiiiiuiiiiiiiiuiiiimiiiiiuiiimiiiinuiiiimiimiiiraiiiiiuiiiiiiiiiiiiiiiiiuiiiiiiiimiiii iiiuiiiiiiiiiiiiii i n-


::niiiiiiiii i)iMiiritiiiitiuiiitiiiitiiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiuiiHiiiiu(iiitiiiiitmiiiiiiiiiiiiii[iitiiiniiiiii'ntiiiMtiiiiiiiiiiriniittiiii

¡Pero es tan natural que sea "así" un personaje oficial! libertad y, al hacerlo, ha llegado a la vez a un alto nivel cul-
¡Es tan necesario ser "así" para desempeñar un alto cargo! tural y humano.
Entonces, ¿a qué me asombro? Pues me asombro porque Porque para el Dr. Bosch Gimpera, como para toda men-
ésta es, en mi vida de periodista, la primera vez que me topo talidad sinceramente antifascista, la cultura auténtica no puede
con un personaje oficial que sea "así". existir sin la lioertad.
Verdad es también que, por primera vez, tengo trato pe- —La libertad no puede morir—afirma con apasionada ener-
riodístico con un personaje oficial, catalán, que debe servir de gía—y con ella vivirá la cultura, que no es, no debe, no puede
ejemplo. ser nunca una mera técnica al servicio del poder despótico; por
¡Dolorosa, pero sincera reflexión de una madrileña! el contrario, vive tan sólo con la libertad del espíritu,
(Así, mientras nuestro Ejército Popular al luchar por la
libertad de España defiende a la vez su cultura, los represen-
tantes de la intelectualidad española, al trabajar por la cultura,
—En esta lucha terrible por nuestra libertad como pueblo defienden la libertad del pueblo.)
y por nuestra dignidad como ciudadanos de la República es- —Nosotros—añade el rector de la "Barcinonensis Universi-
pañola contra la invasión extranjera y contra las castas pri- tas"—no interrumpimos la vida de la cultura; preparamos ele-
vilegiadas que han detentado históricamente la representación mentos de trabajo para las generaciones venideras. Si nos los
de España hemos visto tenderse hacia nosotros pocas manos destruyesen, nuestros hijos sabrían que sus padres ni en me-
amigas—me dice el Dr. Bosch Oimpera—. Por ello sentimos dio de la lucha más cruel renunciaron a sus ideales.
más profundo agradecimiento por quienes, sin reservas de Y cierra nuestra entrevista con estas palabras que trans-
ninguna clase y con afecto cordial, han estado a nuestro lado cribo textualmente:
y no? han animado a no desfallecer en los momentos más —Tenemos fe en e! porvenir, por doloroso que sea el pre-
difíciles. sente. Post ienebras lux.
Y me habla de México y de su pueblo con entusiasmo y Sí, pienso yo, esa luz de nuestra vida espiritual no puede
cariño: apagarse nunca; y aun cuando en las tinieblas de la gran tra-
—Siempre nos unieron al pueblo mexicano—dice—lazos gedia actual se reduzca a una tenue chispa, volverá a res-
espirituales, y han de estrecharse aún mucho más después de plandecer, puesto que la velan celosamente hombres como
la guerra. ¡Ahí ¡Es un gran pueblo! Ha sabido defender su D. Pedro Bosch Oimpera.

Autógrafo del consejero de la Generalidad y rector de la


Universidad, Dr. Bosch Gimpera, hecho p a r a €M¡ revista»

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M i revista» en París

OS
crímenes

ledmann
E' equipaje del asesino alemán, sacado
de su domicilio por la Policía Un monstruo alemán
que c u l t i v a b a los
Eugenio Wiedmann nació en Franckfurt del Mein
el día 2 de junio de 1908. Esto, en realidad, tiene poco anuncios de última
de particular, porque en esa misma fecha nacieron cen-
tenales de personas perfectamente honorables, algunas página de los perió-
de ellas quizás merecedoras de que sus nombres ocu-
pen lugares destacados en las gacetas diarias, con todos dicos.
los honores que pueden corresponder a- los sabios, a
los abnegados defensores de la paz, a los héroes que
consagran su vida a las investigaciones en las bibliote-
Por Camil RIVIERE
cas doctas o en los laboratorios donde pueden ser
realizados análisis complicadísimos, definidores de las
grandes verdades del microcosmos, a los astros de la 55SS3SS5SZ2á
pantalla o a los diestros realizadores de obras maestras
de la pintura, la escultura o la música. La Policía extrayendo los
cadáveres de las per-
Lo cierto, de todos modos, es que Eugenio Wied- sonas esesinadES
mann pasará a la posteridad aureolado con la fama
que le han dado sus crímenes, ejecutados con una
maestría pregonera dé la escuela en que pudo ins-
pirarse. No en vano es Wiedmann un nazi de ejecu-
toria, digno de codearse con cualquiera de los sayones
de Hitler, pongamos por caso.
Por de pronto ha logrado Wiedmann una de las
cosas más difíciles de lograr en París: que se concentre
toda la atención de la capital francesa en él, que su
nombre sirva de comidilla comadrera a las porteras
de todas las edades, que murmuren sus terrores las
m'dinP-ttes y que se avive el celo de los agentes en-
cargados de velar por la seguridad de los franceses y
de los que, sin serio, gustan de vivir los placeres y las
turbulencias urbanas de París. Y, sobre todo, ha visto
alternar su nombre con gruesos caracteres en todos
los diarios, con las informaciones en que se comenta-
ban las andanzas de Deibos por centroeuropa, los
avances de los japoneses hacia Nankín y los anuncios A Eugenio Wiedmann le gustaba darse la gran
de la tantas veces aplazada ofensiva de Franco. Por vida y eso es cosa que, si en todas partes cuesta mucho
cierto que existen analogías entre el generalito chiqui- dinero, en París supone una profesión muy gravosa.
tín y el matador alemán: son dos criminales natos, Retener una mesa en cualquiera de las bottes de nuit,
atacados de manía de grandezas. mandar flores bellas, invitar a una buena cena a los

'HiuirriiMii[MniiMniiininnniiiiiMinininiiMuiiniiuMniltini!i|iiMiilinlMinnlllliinMniininiillliniiiiiiinllinMlilMiniinilHinilliuilinliniiniMlNiiiliMlHrniiHl(ninirniMMiiiitiiininlinUiHiiiii^
^'Ui •i>iiMiiiliinMiii'!iiltiuiiiriiiiiiriiiMiiiiiiiMi 'iiiiuiitiiiiiiiiiiiii'itiiiiii'iMM

a un ilusionado que a cualquiera de los pesimistas que


van paseando por el mundo sus desesperanzas. París
ofrece todos los días ocasiones soberbias para cuantos
saben nadar entre dos aguas, siendo personas gratas a
la Policía so capa de su condición de figuras honorables
que viven bien, pagando todas las cuentas y arriesgando
buenas propinas. El joven teutón se sabía dar buena ma-
ña para engañar a las gentes y nada de particular tiene
que ha)'a podido seguir su camino tenebroso sin dar
tropiezos prematuros.
Wiedmann era uno de los lectores asiduos de la sec-
ción de demandas de los diarios de París y Londres. Su
lápiz sagaz iba jalonando cuanto podía interesarle. Lue-
go, dispuesto a contentar a ios peticionarios, les dirigía
ofertas tentadoras de mediación o soluciones concretas.
El asesi-
Sería curioso conocer el número exacto de personas que
no Wied-
han recibido misivas firmadas por Hart, Brown, Tonker
mann y Karrer, que eran los nombres utilizados por Wiedmann
para sus maquinaciones.
Lo que sí se sabe de cierto es que algunas personas
de buena fe que siguieron las indicaciones de Wiedmann
se pusieron en camino hacia París dispuestas a dar con
la felicidad anhelada y de paso darse una vueltecita
por la Exposición. ¡Tardaban, tardaban luego en vol-
amigos o frecuentar las salas de espectáculos equivale ver! Y, claro está, la cosa empezó a escamar un poco.
a efectuar dispendios que no están ai alcance de la No era para menos. Entre las desaparecidas miste-
bolsa de todos los mortales. Si se hace rico, la cosa es riosamente figuraban miss Jean de Kovern, bailarina nor-
fácil, porque los dineros de papá allanan todas las teamericana llegada a París para visitar la Exposición y
barreras; pero si no es así, si es preciso ingeniárselas cuyo rastro desapareció el día 6 de agosto; el chofer
para hacer frente a lo que venga, la cuestión ya es más Ccuffy, asesinado en la carretera cerca de Orleans el 7
difícil y exige, a veces, que se tenga que recurrir a de septiembre; dos choferes más, Markoff y Douillard,
procedimientos un tanto m.añosos. Wiedmann estaba
asesinados en condiciones idénticas al primero citado;
en este último caso y tuvo que recurrir a su truco.
el bolsista Rene Le Blond, cuyo cadáver fué hallado en
Neuiliy, dando origen a la iniciación de las pesquisas que
LA CANDIDEZ AL SERVICIO DE WIEDMANN determinaron la detención de Wiedmann; Fritz Frommer,
El número de las personas candidas que pueblan el joven alemán; el agente de ventas de fincas Lesobre,
mundo es infinitamente superior al de quienes se deci- cuyo cadáver fué encontrado en la villa "Mon Plaisir",
den a explotar aquella sublime condición humana. Des- Mme. Siberstcin, esposa del jefe de estación de Hague-
de los tímidos que necesitan recurrir a los anuncios nau, la alsaciana janine Kelier e infinitas personas
de últim.a plana para buscar mujer con fines matrimo- más...
niales, las jam.onas desesperanzadas que se deciden a Las indagaciones de la Policía afecta a los servi-
buscar una plaza de gouvernante, los que aspiran a cios de la "Sureté Genérale" acabaron por localizar a
colocar su dinero sobre seguro y sin intermediarios mo- Wiedmann y éste ha confesado sus crímenes. Sus cóm-
lestos, las jovcncitas que quieren hallar el papá Gerard plices Rene Tricot, Million y Jean Blanc se hallan tam-
que las empuje y las haga subir como la espuma, los bién detenidos y, en parte, han dicho cuáles eran las
que aspiran a hallar el aparato de radio que excluya las actividades a que se venían entregando. Sintetizan el
audiciones de Queipo Tonel y las "verdades de Salaman- procedimiento seguido por Wiedmann para inmolar a sus
ca", hasta los que suponen que existen hombres capaces víctimas, repitiendo las palabras dichas por el monstruo
de interesarse en negocios por el solo afán de cooperar en m.-\s de una ocasión:
en las empresas interesantes, se desarrolla una gama de —Un tiro en la nuca nu falla jamás...
personas de buena fe que son, para los audaces que Afí, precisamente, han muerto la mayoría de las per-
se deciden a explotarlas, el más rico de los filones sonas cuya muerte se atribuye a Wiedmann. El síntoma
que puede tentar a los amigos de arriesgarse un poco, acusador es aplastante. La justicia actúa y cuando ter-
bordeando el código, ciñéndose a él con más coraje que mine sus investigaciones vivirá París las emociones de
Belmonte en sus buenos tiempos de novillero. un proceso que dejará tamañito al del vampiro de Dus-
Eugenio Wiedmann figuraba entre esas gentes ad- seldorf o al de Violette Nozieres, la envenenadora de su
vertidas que saben de sobra que es más fácil engañar oadrc ..

•iiiniiniiiiiiniinMiiiitiifiinNiNliniintirilMrnHitiinMiNiiMiMiiinMiuniMiiiiiiiuiiiHiMiiiiitiiiiiiiiiitiunuiiHjiiHinniintiiuitiiiiiiMiiiilMiiiHMiMiriiiMMiiMliiitinrniiiiMninitiiiiiitiiMMiiMiiitiitiMUiHiiiiiitni^
MUSSOLINI,
EL APÓSTATA
De los catorce puntos £unda=
mentales del fascismo ideado
por el duce, ¿qué queda?
Por Exclusivo paro
Manuel NOGAREDA MI REVISTA

El primer nacionalista italiano fué Rocco De


Zerbi, diputado a Cortes, defensor de una teoría
muy peregrina: que Italia necesitaba "un baño
de sangre" para fortalecerse. Por lo que se ve, le
atraía el curanderismo.
Murió prematuramente. Sus exaltaciones le lle-
varon a intervenir en un negocio feo y acabó por
apelar al suicidio como medida salvadora perso-
nal, legando a sus conterráneos la misión de rege- Mussolini, el apostato, cuyo declive en su vida político está
nerar al país. próximo o iniciarse.
D'Annunzio, el poeta guerrillero, ofreció a la
juventud italiana su doctrina epicúrea:
de Fiume, en la que incubaron todos los gérmenes del fas-
"Moriré o gioire cismo italiano.
Oioire o moriré...'" (1) Sin la traición de Facta, el pobre abogadillo provinciano
Para lograrlo cumplidamente ideó su quadiga que escaló las cimas del Poder, desempeñando funciones
imperiale: voluntad, sensualidad, orgullo e instinto, de presidente del Consejo de ministros al producirse, en
amalgamados en cocktail embriagador propicio a octubre de 1922, la marcha sobre Roma, ¿qué hubiese sido
las mayores audacias. de Mussolini y de sus camise aeres?
La guerra "hermosa y feliz", cantada por el Gioütti ha dicho que Facta obró deslumhrado por los
poeta, tuvo para él su concreción en la aventura fascistas, quienes le habían asegurado que continuaría des-
empeñando funciones de presidente del Consejo, del que
(1) Morir o gozar
Oozor o morir. serian ministros Mussolini y otros significados camisas ne-
gras.
Una parado militar con motivo del , Amendola, Alessio y Taddei, de-
oniversorio.
fensores de la legalidad consti-
tucional, lograron decidir que el
Consejo de ministros acordase de-
clarar la ley marcial Al día si-
guiente, el presidente Facta llevó
por dos veces el decreto a Víctor
Manuel—el homúnculo coronado
con bigote borgoñón—y cuando
cundió la noticia de que el rey
se había negado a firmar el do-
cumento histórico, crecieron como
los hongos los fascistas, multipli-
cándose en proporción aterradora
el día 29 de octubre, cuando fué
llamado al Poder Benito Musso-
lini.
Tránsfuga del socialismo, Mus-
solini había dado a conocer en
£<iiniiniiiinitiiri.-iiiiii!rtiiiiiiiitiiiiiiiiitiii:iiiliiiiiiiiitti:iiirnrr= =iiiriiiiiiiliitiiiiiiiiitiiliitrMltiiiriiitniiitiilllMiiiilii[lititiiniitliMrtiiiiitiit[iiiiiniHMniiiiiiitiitn

I el año 1912 un pro- Todo esto fué redactado por AAussoJini, con la
i grama de gobierno m.isma mano con que escribió en // Popólo d'ltalia,
I fascista que merece más tarde, durante la ocupación de las fábricas ita-
I ser divulgado pa- lianas: "Les trabajadores no deben rendirse sin obte-
I ra que queden de ner garantías.'"
I manifiesto las apos- Después... De sabios es mudar de opinfón. Benito
I tasías del tirano. Mussolini derivó hacia la tiranía, ensoberbecido, infa-
i El conde C a r i o tuado, sintiéndose más César que el propio César.
I Sforza, ex ministro Soñó con reconstituir el Imperio romano y se lanzó
I de Negocios ex- a la aventura etiope. Sus aviones, lanzando la lluvia
I tranjeros de Italia, mortal sobre las tierras de África, decidieron la derro-
I lo ha recogido en ta y el exilio de Haile Selassie. ¡Pobre y triste Negus,
I uno de sus libros, descendiente del Rey de los Reyes y de ia apasionada
I de donde lo repro- ~iiiiiiirititiitniitiiriii)iiiiiifiiiiiiiiiiiiiiiiitiiitiiiiiliiiiiiiiirillilltriiiiiiiiliiiiiriiti: Reina de Saba!
I ducimos. Gabriel d'Annunzio, el verdadero Y no contento con eso, logrado que fué el alzamien-
I Los catorce pun- creador del fascismo que luego to de los generales felones que medraron a costa de
I tos de Mussolini se explotó el duce. España, les mandó sus legiones, sus tanques, sus divi-
I concretan así: siones motorizadas.
I 1."—Una Asamblea Constituyente, nacional, como "Cuando el fascismo subió al Poder—ha escrito
I sección de la Asamblea Constituyente Internacional de el conde Sforza—los acontecimientos, más bien que
I Pueblos, paia proceder a la transformación radical de lo preconcebido, hicieron que el fascio se pareciera a
I las bases económicas y políticas de ia vida común. un ejército acampado en medio de una nación desarma-
I 2°—Proclamación de la República italiana. Des- da y hostil (la supresión del sufragio libre fué prueba
I centralización del poder ejecutivo, administración au- de esto), y la evolución se produjo con mayor rapidez,
I tónoma de las regiones y municipios, por medio de sus y de una política de violencia se pasó a una política de
I órganos legislativos propios. Soberanía del pueblo, Estado.
I ejercida a través de otra universal, derechos iguales de "En el momento en que los odios y las pasiones
I los ciudadanos de ambos sexos, reservándose ei pueblo hayan muerto, habrá de reconocerse que esta bruta-
I la iniciativa de referéndum y voto. lidad sanguinaria se produjo, no por una manía de
i 3.°—Abolición del Senado. Abolición de la policía dominio, como ocurrió con Bonaparte, sino como una
I política. Magistratura elegida independientemente del consecuencia lógica y patética de la desproporción ae
I poder ejecutivo. ia leyenda forjada alrededor de un hombre elevado
i A°—Abolición de todos los títulos nobiliarios y a la categoría de mito y la misma capacidad de la
I toda clase de privilegios de casta. misma persona.'"
I 5.°—Abolición del servicio obligatorio. La gran verdad es que en lo más hondo de la sima
I 6.°—Libertad de pensamiento y de conciencia, de fascista predomina una sola razón: el miedo engendra-
I religión, de asociación y de Prensa. do por el instinto de conservación. Todos los planes
I 1."—Un sistema de educación, por medio de escue- imperialistas y las declaraciones autárquicas y las bra-
I las, generales y profesionales, abiertas a todo el mundo. vuconerías contra la Sociedad de Naciones son el dis-
I 8.°—El máximum de atención a ia higiene social. fraz que importa conservar a toda costa para evitar
I 9.°—Disolución de las sociedades industriales y que vuelvan los itahanos la vista hacia el pasado y pue-
I financieras de carácter limitado. Supresión de toda clase dan recordar la máxima de Mazzini: "Amo a mi pa-
I de especulaciones, de Bancos y Bolsas. tria, porque amo las patrias".
i 10.*'—Censos de tasación de la rique-
I za privada. Confiscación de la renta im-
I productiva.
I 11.°—Prohibición del trabajo de los
i niños menores de dieciséis años. Jornada
I de ocho horas.
I 12."—Reorganización de la producción
i sobre bases cooperativas y participación
i de los trabajadores en las utilidades.
I 13."—Abolición de la diplomacia se-
I creta.
I 14.°—Política internacional encauzada
I e inspirada en una solidaridad de nacio-
I nes independientes a través de una Fede-
1 ración de Estados."
i
;,,i„„u HiiiiiiiiiiiiiiiiiiitiiniiiiiiriiiiiiiiniiuiiiiiiiiniimnmnMiiiii!i[iiiiiiiimiimmii"íMiiiiiiiiiiiiiiiíii; iiiiiiiiiiiiiii
i \^^

Aniversario de la mayor mascarada


mundial: la marcha sobre Roma.
^:

El consejero de Cultura Sr. Pi Sunyer, con nuestro compañero Rubio Fernández, director de «Mi revista»,
después de este reportaje.

LA CULTURA CATALANA VISTA DESDE


LA CONSEJERÍA DE LA GENERALIDAD
Por E. RUBIO FERNÁNDEZ

^AMMAAMSS53¿SMMM¿;M¿AAA¿555ZS>AAA^

La característica de I). Carlos Pi Sunyer es la modestia cretarios, todos por igual entregados a sus tareas, aten-
y la .simpatía. Trabajador infatigable, .sea cual sea el diendo al público con una cordialidad y una corrección
cargo cuie desempeña vive entregado a él, al acertar, no que creemos muy digna de hacer resaltar.
le da demasiada importancia, y cuando nota que es elo- Cualquier gestión que lleve el visitante tiene la aco-
giada sil gestión achaca el triunfo a los que le rodean. gida y la simplificación insospechada. ¡Como en los mi-
Su mano se tiende siempre acogedora y sonriente; dijérase nisterios!
que quiere hacerse perdonar lo que vale... En la sala de espera, maestros, escritores, catedráticos
Conocíamos a Pi Sunyer antes de que fuera designado esperan ser recibidos por Pi Sunyer, atendidos por la bella
para la Consejería de Cultura, cuya elección—dicho sea <-le hija del consejero y otra secretaria. Todo normalmente,
paso—ha sido uno de los grandes aciertos del Presidente sin dif'cultades insuperables de personajillo improvisado
de la Generalidad de Cataluña. Su actuación de republi- defendido por secretarios imponderables que casi siempre
cano de izquierdas, su gestión municipal como alcalde de suelen ser reflejo de sus amos...
Barcelona, ya fueron exponentes de su valer; ahora en la Nada desentona.
Consejería de Cultura su labor es formidable en estos Nos toca el turno y entramos en el despacho donde nos
nionicnfos en que tan corriente es fracasar—bueno, fraca- espera el consejero de Cultura del Gobierno de la Genera-
sar no se dice ahora—, perder el tiempo, ¡no es lo mismo! lidad de Cataluña.
El palacio tn que est.i instalada la Consejería diríase —A. su disposición.
que fué hecho para ella, y el ambiente que se nota desdo — Puede usted suponer, amigo Pi Sunyer, a lo que
la antesala da la sensación del trabajo intenso de aquella vengo. Quisiera que en el número de Mi REVISTA dedicado
casa: directores generales, jefes de Departamentos, se- a .\'\é.xico constara algo de lo que ha hecho Cataluña por

=<í=^^s'
i^?>=«í^-'S>' >S-^i^. í^'»>=í>'«>í .-=S>t5C4.-= > ^ »>'S.-?>'«Lt •"-'»' ?>e- ••-«.- •:•» ••-«. r--». r-«. r.-v »"--<». e'».-»-'»^- r-

su cultura. f^Quiere usted decirme cucál es el desenvolvi- cerlo en estos momentos. Estimándolo así, destina a su
miento de la instrucción en Cataluña desde el 19 do julio? mantenimiento una importante subvención, en lo que le
—Sería imposible reducir a los estrechos límites de la acompaña el .Ayuntamiento de Barcelona. En el Teatro
contestación a una pregunta el esfuerzo realizado en Ca- Catalán de la Comedia—antes Poliorama—-se ha organi-
taluña desde el 19 de julio en el sector de la cultura. Kl zado, de acuerdo con el Sindicato de Espectáculos F-'ú-
volumen de dicha obra se evidencia con un solo dato: blicos, una excelente compañía que es garantía de una
desde dicha fecha se han creado en la ciudad de Barce- buena temporada. El apoyo del público que concurre en
lona escuelas de enseñanza primaria para más de cincuenta gran n 'mero al teatro demuestra lo acertado del propósito
mil niños. La cifra es fácil de decir y tal vez no impresione y las posibilidades que ofrece la campaña eniprendidn,
al leerla, pero en la realidad representa una cantidad cuan- que esperamos sea de alto valor artístico para el des-
tiosísima de dificultades a vencer: locales, material es- envolvimiento de nuestro teatro.
colar, maestros, organización. En las otras poblaciones —¿Que opina de la gestión a favor del teatro catalán
de Cataluña ascienden también a gran número las escue- hecha por Mi REVÍ.STA?

las creadas. Especial mención merecen los centros docen- —Que acierta siempre y revela por parte de la misma
tes ampliados o de nueva creacción dedicados a la ense- el interés que siente por esta manifestación de la espirilua-
ñanza técnica, profesional y obrera, asi como la preocu- lidad catalana, y que merece el reconocimiento de todos
pación sentida por la enseñanza secundaria y la superior. aquellos que tan amantes somos del teatro catalán.
En resumen, el desenvolvimiento de la enseñanza en Ca- —Una pregunta más y lo dejamos a usted. ¿Qué
taluña en este período ha sido en su varia complejidad opinión It merece el último triunfo del Ejército í^opular?
a la vez intenso y vasto. —Las palabras resultarían banales para comentar el
—-;Qué proyectos personales tiene usted en los momen- magnífico e.sfueizo realizado por nuestro Ejército. Basta
tos actuales? decir que ha sido un hecho histórico. Él nos sirve de ejem-
—Fuera vanidad de mi parte exponer un programa de plo y lección que es necesario sean comprendidos y segui-
carácter personal. Aunque, como es lógico, me corresponda dos en la retaguardia. La necesidad de intensificar hasta el
come consejen) la iniciativa, dirección y responsabilidad límite máximo el esfuerzo propio y acoplarlo fraternal-
de la obra de! Depa'tamento, he procurado sin embargo mente con el de todos los que luchamos en el frente de la
acopla'- a la misma el mayor número de concursos y cola- Libertad. V cada uno en su lugar y en su función. Por ello,
boraciones competenles y eficaces que la matizan y ensan- el esfuerzo y el triunfo de nuestros soldados es para nos-
chan su base. No, por lo tanto, como plan propio, sino otros el mejor estímulo y acicate para continuar creando
solamente como aspecto que es especialmente agradable escuelas y proseguir en la empresa ardua, pero noble y
destacar, subrayo el hecho de que, dando a las cuestio- bella, 'ie trabajar por la cultura.
nes de la enseñanza en todos sus grados y modalidades
El entusiasmo ilumina el rostro de Pi Sunyer. Salimos.
la imipoitancia primordial que tienen, la Consejería ha mos-
Ésta es !a verdadera posición: ganar la guerra, sin política
trado particular interés en estimular y fomentar todas las
de partido, sin capillita, ya imposibles de subsistir, y a lo
manifestaciones de la cultura catalana de carácter litera-
(jue hay que acostumbrarse. Ganar la guerra en las trin-
rio, histórico, arqueológico, artístico y científico.
cheras, pero ganarla también en las escuelas, en el taller,
—Vamos a hablar de otra cosa: ¿Qué me dice de tea-
en el escen nio, en todas partes, porque la victoria contra
tro catalán en estas circunstancias?
el fascisnin siria mezquina si sólo se tratase de vencer
—Entre las manifestaciones artísticas mencionadas en
a !os facciosos. La victoria tiene que traer consigo la nueva
la pregunta anterior, una de las que merecen mayor aten-
ción por parte del Departamento es la que hace referen- estructii!ación de España en todas las manifestaciones
cia al teatro catalán. Si en temporadas anteriores la Ge- nacionales, de Ir.-.bajo, de cultura, de derecho social... y
neralidad le había dado su apoyo, no podía dejar de ha- de cordialidad aosoluta entre todos los antifascistas...
La obra de cultura de
la Generalidad
ücsde la restauración de la (jeneralidnd de 60.000 niños reciben educación en los grupos de la Generalidad
Cataluña con el advenimiento de la República de Cataluña, y entre todo Cataluña suman más de 100.000.
del 14 de abril nuestro pueblo se ha sisíniíicado Las escuelas especializadas: escuelas de bellas artes y oficios,
por su afán de renovación cultural. Los hom- escuelas de' trabajo, especializada de tejidos de punto de Canet
bres que han pasado por 'a Consejería de de Mar v las diversas de agricultura se han ido ampliando,
Cultura, desde el año 31 hasta el octubre del creándos»-^ de nuevas por todas las comarcas catalanas. Son una
36 y del febrero del 37 hasta la fecha han rea- especie de Universidad Técnicoindustrial con ramificaciones por
lizado de una n:aiiera progresiva una obra todo el país que facilita a la juventud catalana, formarse en
fecunda, renovando y creando instituciones que el campo de la industria y la agricultura al mismo tiempo que
hoy después de un año y medio de guerra se
han desenvuelto de tal manera, llegando a
crear en el orden de la enseñanza primaria,
escuelas que han permitido dar cabida a miles
de niños que hasta hace unos meses no tenían
donde ir a. aprender las primeras letras.
Los hombres de la (jeneralidad de Cataluña al mismo
tiempo que ponían su esfuerzo para reconstruir la vitla (.leí
país, deshecha por la revolución militar, no han olvidado,
antes al contrario, se han superado canalizando la glorio-
^•a tradici(in cultural de nue.-itro pueblo.
Murante este año y medio de guerra, mientras en el fren-
te se ha venido luchando por la libertad, y todo Cataluña se
ha moviii'.ado y ha puesto '.ui gran esfuerzo de trabajo
parp x'encer al invasor, la obra cultural se ha engrandecido,
V hoy ruestras inctitueiones son una de:iiostración bien clara
de las altas aspiraciones que se sienten en todas las lineas
de la cultura.
Se han creado escuelas primarias; en Barcelona sólo.

Un aspecto de la Escuela d e l T r a b a j o .
A

.\ '/'^'**'

I y-S^
^ '" <€'
.^fe«^^.
Escuela Náutica del M e d i t e r r á n e o .

presentadas por la
otros van formando su cultura en la Universidad Autóno-
Escuela de Biblio-
ma de Barcelona.
tecarias, la Escuela
Las bellas artes, la pintura y la escultura son profe-
de Enfermeras, la
sadas en las escuelas de.Olot y Tarragona además de
Escuela Profesio-
las instituciones existentes en Barcelona.
nal para la Mujer y
l-.as instituciones de cultura para la mujer están re-
el Instituto de la
Mujer que Trabaja;
además existe la
Residencia Profe-
s i o n n 1 Femenina,
para ofrecer a las
mujeres que ejer-
cen una profesión
Do5 aspectos del Instituto-Escuela del Parque.
IdS medios p a r a
perfeccionarla y para mejorar su cultura mejorando también sn
vida social y material.
L.a üineralidad durante estos últimos meses lia reorgani-
La red de bibliote-
zado, ampliando 1 a s cas que ya se ha ido
instituciones especiali-
extendiendo por todo
zadas tales como la d^'
Cataluña hasta llegar
Estudios Comerciales,
a los frentes de com-
la Escuela de Admi-
bate por medio de un
nistración Pública, la
servicio postal q u e
Escuela de la Marina
consigue que nuestros
Mercante de la Medi-
soldados en sus horas
terránea, la Escuela de
de reposo tengan en
Altos Estudios Mer-
sus manos este com-
cantiles, el Instituto
Psicotécnico, etc. F.l pañero que se llama
Departamento de Cul- libro.
tura que con tanto ce-
instituciones como el
lo venia cuidando la
Con el Departamen-
restauración de nues-
to de Cultura hay to-
tros monumentos an-
davía una serie de
tiguos ha dado un
Instituto de Estudios
nuevo impulso a esta
Catalanes, Institución
obra de construcción
de las Letras Catala-
del patrimonio artísti-
nas, la del Teatro, la
co poniendo en salva-
del Conservatorio del
Liceo, el Ateneo Bar-
celonés, la Oficina de
Relaciones Meridiona-
les, la Junta de Rela-
ciones Culturales, et-
cétera, etc., que es
Escuelo de Agricultura en Caldas
de Montbuy. donde se forja la al-
ta cultura catalana.
La Generalidad por medio de la Institución de Acción Social Uni-
versitaria y Escolar de Cataluña cede un número considerable de becas
a todos aquellos que faltos de medios económicos no podrían ingresar
en los Centros de Enseñanza Superior. Es asi como entre los ciudadanos
de Cataluña no existen en el orden de formación intelectual diferencias.
La literatura catalana en sus diversos aspectos es estimulada por la
concesión de diversos premios: existe el premio de la novela, poesía,
teatro, y ahora se han creado dos de nuevos, uno para el mejor artículo
o cualquier trabajo periodístico y otro para un cuento literario. Las bellas
artes, la pintura, la escultura cuentan también con un premio an'ual
para valorar el trabajo de nuestros artistas.
La obra cultural que viene realizando la Generalidad es una aporta-
ción de los catalanes dentro del marco de la República a la civilización y
al progreso humano. Es la obra de este pueblo que se ha querido superar
siempre a través de los siglos por encima de todos los obstáculos de la
Otro aspecto de la magnífica Escuela del Trabajo de historia.
la Generalidad de Cataluña.

^ruarda todo lo que significa la Historia tradicional y


espiritual de r.uestro bello patrimonio sintetizado en los
m.im.mentos de piedra, en los viejos retallos, en los Cosmos Fotográüco FOTO
archivos, en las bibliotecas, Nuestros museos se han
eniiquecido con millares de objetos hasta ahora guar- Fernandez, S. A. Stuaio Alemán
dados sin ninguna clase do cuidado o bien olvidados
en un rincón de un viejo edificio. MATERIAL COMPLETO FOTÓGRAFO
El mundo ha podido comprobar de una manera efec- PARA FOTOGRAFÍA DE LOS NIÑOS
tiva esta obra de protección del patrimonio antiguo, con
Y CINEMATOGRAFÍA
la magnifica exposición celebrada en Paris en el Museo
del Jeu de Paume, en donde las bellas pinturas del Rambla Canaletas, 1 - Teléfono 13943
siglo X al XV han demostrado que nuestro pueblo
BARCELONA Fontanella, i 8 tajos - B A R C E L O N A
tiene una historia.
El Presidente de la G e n e r a l i d a d , Sr. C o m p a n y s , con el pre-
sidente del P a r l a m e n t o catalán, Sr. C a s a n o v a s ; el Sr. A g u i -
rre; el c o n s e j e r o de C u l t u r a , Sr. Pi S u n y e r ; el m i n i s t r o de
I n s t r u c c i ó n p ú b l i c a , Sr. Hernández y el rector de la Univer-
sidad en el acto c o n m e m o r a t i v o del centenario de la reins-
tauraaión de la U n i v e r s i d a d b a r c e l o n e s a .

El n u e v o Gabinete belga
De ¡zquieroa a d e r e c h a . —
S e n t a d o s : M. O. D i e r c k x , I n t e -
r i o r ; Pierlot, A g r i c u l t u r a ; De
Man, Finanzas; P. E. J a n s o n ,
p r e s i d e n t e del C o n s e j o ; D u
Bus de W a r n a f f e , J u s t i c i a ;
g e n e r a l Denis, D e f e n s a na-
c i o n a l ; Van Isacker, A s u n t o s
e c o n ó m i c o s . — De p i e : W a u -
ters, H i g i e n e ; Marck, T r a n s -
p o r t e s ; Merlot, T r a b a j o s p ú -
bücos; D e l a t t r e , Trabajo;
Spaak, N e g o c i o s e x t r a n j e r o s ;
R u b b e n s , C o l o n i a s ; Hoste,
Instrucción p ú b l i c a .

Uno de los ú l t i m o s
rf^atos de Ángel
F«staña.
Entierro de
Á N 6E L
PESTAÑA

La presidencia oficial
del duelo, en la que
f i g u r a b a n el P r e s i d e n t e
Companys, Martínez
Barrio, I n d a l e c i o P r i e t o ,
Aiguadó, 6iner de los
Ríos y otras p e r s o n a l i -
d a d e s q u e r i n d i e r o n el
último tributo de cor- El Presidente C o m p a n y s acompañado del c a m a -
d i a l i d a d y afecto al líder rada A g u i r r e , Presidente de Euzkadi, en la t u m b a
de Macla.
sindicalista.
^sí./,

te»»*!! \%^

S ^ M . ''^-^- • • ' ^ ^ » - ^
^

V a r i a s f a s e s de la
ocupación de Teruel
por n u e s t r o Ejército

Pc^ Mi P

7) Subsecretario de Propaé^
da del ministerio de Esto

El Presidente C o m p a n y s y las autoridades e invitados


entre los que se encuentran Federica M o n t s e n y y otros

LA MANIFESTACIÓN DE HOMENAJE
AL GLORIOSO EJÉRCITO POPULAR
Doménech, García Oliver, Isgleas, Eróles y otros dirigentes de la C. N. T

Los delegados
españoles a su
regreso de su
viaje a Rusia.
Al decir Cárdenas, se
dice Demócrata. Y al
nombrar México, uno no
puede menos que recor- K^ííi^cL aiva.s
dar al primer ciudadano
del gran país hispano-
americano : Cárdenas.
trabajo, hasta que Cárdenas no llegara a la Presidencia
D e s d e la caída de
Porfirio Díaz, M é x i c o de la República, que es una República auténtica, en el
hubo de vivir en peren- alto sentido de la palabra, porque en ella reina como
ne conmoción, unas ve- en país alguno la legítima democracia.
ces sangrando y o t r a s Y Cárdenas es el alma de aquel gran pueblo que
viendo brillar una auro- sabe practicar con elevación los principios de la liber-
ra de esperanza. En Mé- tad de nuestro siglo, y si allí hay capitalismo, no goza
xico, como en España, el de privilegios inhumanos, y si la Iglesia es, sus funcio-
terrateniente, el amo ne- nes espirituales están rigurosamente sometidas a la
grero, andaba del brazo Ley única para todos los ciudadanos.
del cura, que bendecía la Bajo la égida de Cárdenas, el campesino y el obrero
explotación a que aquél dejaron de ser cosa para ser hombres, y para ellos ya
condenaba a los indios. no hay obstáculos para la conquista del pan y de la
México había de pa- cultura, para alcanzar el alimento físico y espiritual.
recerse en todo a su ma- Ved a! pueblo mexicano puesto al lado de sus her-
dre adoptiva: "conquis- manos españoles que luchan por la libertad y por un
tado por aventureros tro- mundo mejor. Es ello la mejor prueba del proceso de
cados en bandidos, ellos
evolución cívica seguido por un pueblo que sabe sentir
d e j a r o n una herencia
con intensidad suma la emoción de las horas graves
moral y política que había de encadenar al pueblo, du-
vividas en tierras lejanas por unas legiones de hombres
rante siglos, a aquella esclavitud espiritual, económica,
que, como sus hermanos de .México, mantienen enhiesta
política y social de que nos hablan, con su mudo cantar,
la bandera de su regeneración como ciudadanos y como
las tierras de Castilla, y las de Extremadura, y las de
proletarios, como clase irredenta que aspira al rango
Andalucía.
de hombres libres. Y ese proceso evolutivo que ha des-
Hasta la caída de aquel gran déspota, el último ca- pertado ia fina sensibilidad de to9o un pueblo, obra de
chorro espiritual de los conquistadores hispanos, el Cárdenas es, de ese gran hombre que pasa por encima
campesino no era un hombre: era, sin hipérbole, la de todos los prejuicios de casta y de clase para hacer
verdadera bestia de carga revolcándose en el cenagal de México la más grande de las democracias del Nuevo
de su miseiia y de su incultura. .Mundo.
Los sátrapas cayeron bajo el empuje de las legio- AI decir Cárdenas, nosotros nos descubrimos ante
nes que marchaban al grito de: ¡Tierra y Libertad!, y el Demócrata por antonomasia, y olvidamos por un
los nuevos tiranos, los generales improvisados que min- instante lo que ideológicamente somos para recordar
tieran la liberación del pueblo como escabel de sus con gratitud, con esa gratitud que nace de lo más re-
ambiciones o para servir afanes imperialistas del ex- cóndito del alma, su generosa amistad hacia esta España
tranjero, fueron sucumbiendo por la execración del nuestra que, con tanto dolor y prodigando sangre, teje
pueblo, unes, y otros pagaron con su vida la traición un porvenir que la hará digna de la solidaridad de un
a la sagrada causa de un pueblo que operaba su rege- pueblo que siente como vividas y como propias las an-
neración. gustias y las ansias de la España antifascista.
Y México no alcanzó el rango de verdadera demo-
Juan PEIRÓ
cracia, de país entregado completamente a la paz y al Ex ministro de la C. N. T.
A N E C D O T A R I O DEL GENERAL MIAJA

DE SOBREMESA CON EL
DEFENSOR DE MADRID
Por F E R N A N D E Z ALDANA P a r a M I REVISTA

tono humorístico a los invitados la prohibición de conversaciones atrevidos.


A los postres de una comida en honor del general Ruiz, encargado de Nego-
cios de México, se habla de la guerra y se recuerdan los primeros días de la
rebelión. Algunos comensales recuerdan episodios heroicos que tuvieron como
actor principal al jefe del Ejército del Centro, Son hechos que probaron sobra-
damente su capacidad y su valentía y que exalten sus virtudes de soldado.
El generol Miaja pone fin a los elogios con un relato ingenuo.
— ¿Recuerda usted — dice dirigiéndose o uno de sus ayudantes — aquella
pequeña tartana en la que fuimos a tomar posesión de la Comandancia militar
de Valencia ?...
Los comensales sonríen y el reportero piensa en la sencillez del general que
ha destrozado todos los mitos del fascismo internacional.

El h e r o i c o y l a u r e a d o g e n e r a l M i o j a h a b l a n d o
* **
con nue$tro r e d a c t o r y d e l e g a d o de «El N o - En una tertulia de amigos se habla de las figuras que ha hecho nuestra gue-
c i o n a l * , d e México, c o m p a ñ e r o Fernández rra. Se citan casos de obreros que se han revelado como grandes jefes militares,
Aldona. de obscuros empleados que han pasado a puestos de responsabilidad, de estu-
diantes que han constituido potentes organizaciones al servicio de la victoria.
— Yo soy el único que he perdido grados en la guerra. Unos son hoy coman-
I El enemigo estaba a las puertas de M a d r i d . dantes, coroneles, generales. Yo soy sólo Miaja. Así me llama el pueblo, y yo
I Brotaban las barricadas en las calles y se for- estoy satisfecho de este descenso en el escalafón.
1 maban espontáneamente grupos armados que « * *
i marchaban jubilosos a los frentes próximos. La
Cuando alguien quiere hacer un elogio del general Miaja, siempre dice con
i nerviosidad que se observaba reflejaba la gra-
admiración: c Es el defensor de M a d r i d . >
I vedad del momento que Madrid vivía.
A este elogio responde siempre el general con un rasgo emotivo. Saca su
I El general Miaja estaba en su despacho reci-
cartera y extrae un retrato. Es el de un niño de unos cinco años, que alza con
I • biendo noticias y dando órdenes. Cada avance
energía infantil su bracito para hacer el saludo antifascista.
I del enemigo lo disimulaba con un dicho gra-
— Este es el auténtico defensor de Madrid — dice con alegría - . A e l l e
1 cioso y en sus palabras encontraban todos un-
debo yo estos momentos que estoy viviendo.
1 consuelo. N o perdió un momento su buen humor,
Y después de enseñarlo a todos lo vuelve cuidadosamente a su cartera. Es el
I que expresaba su seguridad en la fuerza defen-
retrato de su nietecito. Del nieto que ha sabido dar la confianza en el triunfo al
I siva de su pueb'o.
soldado ejemplar.
i Un aviso telefónico hablaba de la posibili- É * •
i dad de que los fascistas llegasen hasta el centro
Queremos conseguir unas palabras suyas para este número extraordinario.
I de la ciudad. Los ataques eran violentísimos y
El general Miaja no quiere declaraciones. Solamente la presión de una amistad
i con grandes masas de infantería y de aviación.
cordial hace que nos diga estas frases: f México ha d a d o la p a u t a en t o d o
i El general Miaja estaba en su puesto como
momento de lo que d e b e ser la a y u d a eficoz al p u e b l o español. M é x i c o , a
i desde el primer día de la guerra, y no ofrecía
quien el p u e b l o e s p a ñ o l a g r a d e c e t o d o lo que por él ha hecho, d e b e con-
I ninguna muestra de desconfianza. Se oían en la
t i n u a r su a y u d o en t o d o m o m e n t o
I habitación fuertes cañonazos y los zumbidos de
Y el general piensa íntimamente en el gran pueblo que todo lo da para que
i los motores de aviación.
nosotros vivamos con libertad.
i — M i general — d i j o un enlace —, acaban
i de llegar más de cincuenta aviones enemigos M a d r i d , 20 de noviembre de 1937.
I que van a bombardear Madrid.
I — N o se preocupe — contestó sonriendo —. En el t e a t r o d e la Z a r z u e l a , de M a d r i d , el público ovaciona ol heroico g e -
I Antes he llegado yo. neral M i o j a , al e n c a r g a d o de Negocios de M é x i c o , g e n e r a l Ruiz, el g r a n
I Y el defensor de Madrid continuó trabajando, a m i g o de lo causo e s p a ñ o l a , y ol presidente de los Amigos de México,
I El enemigo quedó parado ante las puertas de C a r r e ñ o España.
i la ciudad corazón del mundo.
i Aquel día triunfó una vez más
i lo serenidad y la confianza de
I un hombre.
f * **
I En el comedor de su residen-
i cia el general pasa todos los
I días una hora agradabilísima en
I unión de sus invitados y de sus
E ayudantes. Un original bando
I advierte cariñosamente y en

riMiiitiiiiiriiiiiiiiitiiitiMiiiiiitiitiiniitiiiiiitiiiiiiiiKiitiiMiiiiiMiiiiitiiiiiiiiHinigiiiiii
a los soldados t e m b l o n e s
c|ue hacen (jintoresca ¿uardia.
— i Mariana m e lo tusilan!
— dice una voz de venganza — .
P e r o , |)or rumbos del S u r ,
o r d e n d e i n d u l t o llegaba,
V el P r e s i d e n t e M a d ero
dejó una deuda saldada.

E l generalito H u e r t a ,
mala estamj^a mexicana,
al guerrillero d e l N o r t e
tiembla d e [plantarle cara,
¡)orq[ue tiene P a n c h o V i l l a
sus buenas n o v e n t a balas.

P e r o , negro d e v e n e n o
y c o n bilis d e venganza,
Pancho Villa y sus JDiensa e n Francisco ^ 4 a d e r o
famosos " d o r a d o s "
con P a n clio Villa y (Quiere sembrar iniamia.

l^or los jía^os de C n i n u a n u a O r a d a s aunosjjobresyaní^uis,

el áeneralito I"Tuerta, soldados d e la ignorancia,

mala estamJDa mexicana. acecha el mal general


al a¡>óstol de la raza
Estalla con Paneleo Villa, Y le arre hata la vida

de en enrevesada enana,
cuando e l t ravo de D u r a n d o
a t r u e n o d e una descarga.

le marcó una boietada. ¡ O h , dolor de Pancho Villa!


J^anckol/ílla E l generalito H u e r t a ,
Brilla su (fistola charra
y escufie contra los cielos
mala e8tamf)a mexicana, todas sus n o v e n t a bal as,
vino al suelo c o n sonido y desjjués... lloran sus ojos,
Romance de armatoste d e nojalata. cjue antes el llanto ignoraban.
popular
Nod evolvió a Pancno Villa S e a|)agaron los luceros;
oiensa tan señalada, (ílomo es la luna d e ¡jlata...;
Por MURO (3orc|ue salió ¿aza|3ero, treJDÍda el e c o en los m o n t e s
sin ¿anas de dar la cara. y las locuras cabalgan.

— ¿Q¡)ué ñas n e c n o , P a n c n o ? ¡ O h , dolor de P a n c h o Villa!


— ledice eloiicialdelaguardia. Críelo y tierra n o son nada.
— ¡ J N O se ajiüite, cafíitán, Los "dorados de D u r a n g o
c(ue a mí n o m e asusta nada! bajaron a la llamada
C u a n d o me cruzo el saraj^e y t u v o rutas d e sangre
y ecno el alón a la cara, el ma¡3a d e su venganza.
no nay halas (lara mi (leclio,
ni c|uien resista mis balas. Escaf)ó el cobarde H u e r t a .
E l /Líócalo se engalana
m
P r e s o estaba 1 ancho V i l l a . y recibe a P a n c h o V i l l a ,
ISayoneta.s asustadas c¡ue llega c o n la alb orada...,
nacen encaje de acero y d o n d e cayó Mad ero,
y trenzado" de amenazas, deja su e n o r m e canana,
mientras él, con su cigarro, sin el m e t a l deslumbrante
a tiros de n u m o ametralla de sus justicieras balas.
TEATRO NEGRO EN LA
CIUDAD DE LOS BLANCOS
iiriiiiiiiítiiiiiUMnMMMiiiiMtiiiHtiiiiuiiniMijiiiiitiniitiiiÉiiiiiiuinHtiNiiiJtiiJiiiitiNlJiJiimHliüituiiHHniitiumiMiiiiMMiiiiimmuiimnt

Leyendas falsas sobre el alma

Por
del negro = U n gesto revolucio=
Vicente Carreras nario de Roosevelt = P o r el

P a r a Mi REVISTA
mundo del jazz = Poesía negra

MV¿a
\a
^
íoi^^r.ó ^t-^
^^^'ií?'«.-'5- es9^^1p0íO'

S\w
DUKE
célebre
ELLYNGTON
pianista y
.. se-^ s;- e * V *°f"v^:, ,»^íf ".e^--"' \os
compositor negro.

z^'^fl

-«?;^í^i^.íro^:Vf
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vo, lejos de coartar las libertades del pueblo, las siguen amplificando, única
manera en que los hombres pueden llegar a alcanzar sus derechos, tanto
social como espiritualmente. Por eso el negro, a la sombra de esa verdad,
empieza a vivir olvidándose de su color, de su humiriación de toda la vida.
Su misma música sensual no ha influido poco para unir a las dos razas,
aunque por diferentes derroteros. El gran entusiasmo que demuestra el mundo
por ella no tiene mejor explicación; música que ha sido, por otra parte, uno
de los principales factores para que músicos y poetas negros del nuevo Con-
tinente continúen abriéndose paso por las puertas de la gloria. Duke EUyng-
ton, el más famoso de los pianistas y compositores de color, bien ganada la
tiene al revolucionar el mundo del jazz, porque aquella música estruendosa e
ineducada, nacida en un ambiente pobre y miserable, necesitaba de pre-
ceptor inteligente que se encargase de pulirla y apartarla de aquel aire chillón
y enrarecido en que respiraba. Mientras tanto, jóvenes poetas negros con
ansias de trabajar se iban incorporando a esa música norteamericana, áspera
y seductora, que igual nos hace llorar que reir.
Asi tenemos que, desde Phyllis Wheatley, primer negro que escribió
poesia en los Estados Unidos, hasta llegar a Paul Laurence, tanto en Norte-
américa como Cuba, México y otros países del nuevo Continente, han ido
apareciendo poetas de color de buena calidad como son, por citar algunos,
Waring Cuney, Richard Bruce y l-angston Hughes, a quien se señala como
de ios más interesantes.
Pero el hombre de color, con su manifiesta sensibilidad pretende ir más
allá de la poesia y de la música negra. Quiere su teatro, un teatro sencillo,
familiar, sin complicaciones ni galas, donde puedan reir y gozar con ese arte,
que es escuela a la vez. En parte ya lo han conseguido en Nueva York. Aquí,
en esta ciudad cosmopolita, de barrios enteros de españoles, franceses, ita-
lianos y de hijos de todas las partes del mundo que, aunque lejos, no pierden
su? usos ni costumbres, se ha abierto al público un local simplemente llamado
"Teatro negro", en el mismo corazón de Harllew, el barrio sucio, de casas
apretadas; barrio habitado por negros y tan despreciado por los blancos, lo
que no implica para que los millonarios neoyorquinos acudan de vez en cuando
a divertirse acompañados de sus amiguitas en alguno que otro "Club" de
dudosa reputación.
Desde luego, el actor negro ya venía siendo una realidad representando
obras escritas por blancos, pero precisaba de un poeta que supiera expresar
los sentimientos "nacionales". Es decir, de su misma raza, de esa raza errante
y sufrida ciue, como a los judíos en los Estados fascistas de Europa, se la
quiere despojar hasta de lo más íntimo de su ser. Hoy, a la larga lista
de poetas, músicos y pintores negros, habrá que incluir desde ahora al joven
dramaturgo Frank Wilson, quien acaba de estrenar en Harlen su primera
obra teatral, en la cual, a juzgar por los pocos críticos que la conocen, deja
entrever la fuerza social e intelectual d¿ sus ideas, llenas de pasión hacia
su pueblo, al que pretende unir y enseñar a que se amen los unos a los otros.
S'^>^>'i>f>'i>^>'i>^^'^yf>^~

Francisco 1. Madero, ini- dente de los Estados Unidos


ciador de la Revolución de América. — Washington.
mexicana en 1910, es una —He sido informado que el
de las figuras históricas que Gobierno que Su Excelencia
ha alcanzado mayor relieve. dignamente preside ha dis-
El mejor servicio que pudo puesto salgan rumbo a las
prestar a su patria fué al- costas de México buques de
zarse contra los que pre- guerra con tropas de desem-
tendían entregar todas las barque para venir a estn
fabulosas riquezas del pais ca'pifal a dar garantías a los
mexicano a los mercaderes americanos. Indudablemente
extranjeros que pretendían los informes que usted tiene
entronizarse allí, apropián- y que le han movido a to-
dose los caudales que ne- mar tal determinación son
cesitaba la nación para vita- inexactos y exage r a d o s,
lizar su economía. pues las vidas de los ame-
De la protesta fecunda ricanos en esta capital no
del Presidente Madero nace corren ningún peligro, si
la prosperidad que ha po- abandonan la zona de fue-
dido alcanzar México al po- go y se concentran en de-
ner en rendimiento sus tie- terminados puntos de la ciu-
rras fértiles, al crear me-
dad o en los suburbios, en
dios de comunicación y de
donde la tranquilidad es ab-
transporte, al intensificar el
aprovechamiento d e s u s Una página de la soluta y en donde el Go-
bierno puede darles t o d a
fabulosas r e s e r v a s hidro- Historia de México clase de garantías. Si usted
eléctricas que h a b í a n de
dispone que asi lo hagan los
constituir en un porvenir
residentes americanos en es-
inmediato la base de las
grandes industrias siderúrgi- I La traición del general | ta capital, según ia prácti-
ca establecida en un mensa-
cas y químicas, anexas a
las explotaciones mineras,
y, sobre todo, al hacer de
I Huerta d e t e r m i n ó | je anterior de usted, se evi-
taría todo daño a las vidas
de los residentes americanos
los mexicanos hombres li-
bres, forjadores de sus pro-
pios destinos y elementos fe-
i la r e n u n c i a del | y
los
extranjeros.
daños
En cuanto a
materiales de las
cundos creadores de rique-
za.
i Presidente Madero I propiedades, el Gobierno
vacila en aceptar todas las
no

X)estacar en estas cir- responsabilidades que le co-


cunstancias, cuando acaba
CÓMO TUVO LUGAR rresponden Según Derecho
de celebrarse el XXVll ani- LA M U E R T E DEL internacional. Ruego, pues, a
versario de la Revolución Su Excelencia ordene a sui
FELÓN RIVEROLL buques no vayan a desem-
mexicana, el gesto patrióti-
co del Presidente Madero, rüllMlllllllillllllllllllllllllllllllllllllilllllllllilllllllllllllllilllllllllllllllh~ barcar tropas, pues esto
obliga a algo más. Por eso causará una conflagración
? pasamos a reseñar algunos de los actos culminantes de su
mandato. Hemos elegido el episodio de la renuncia de Madero,
de consecuencias inconcebiblemente más vastas que las que
.=e trata de remediar. Aseguro a Su Excelencia que el Go-
cuando el general Huerta se prevalió de las amenazas norte- bierno está tomando todas las medidas a fin de que los
americanas para alejar del Poder al gran patriota, alma de la rebeldes de la Ciudadela hagan el menor daño posible y
Revolución liberadora de los mexicanos. tengo esperanzas de que pronto quede todo arreglado. Es cier-
En la Memoria de la Secretaria de Gobernación corres- to que mi patria pasa en estos momentos por una prueba terri-
pondiente al período revolucionario comprendido entre el 10 de ble, y el desembarque de fuerzas americanas no haría sino
febrero de 1913 y 3 de noviembre de 1916, presentada por ci empeorar la situación, y por error lamentable, los Estados
licenciado jesús Acuña, puede leerse lo siguiente: Unidos harían un mal terrible a una nación que siempre ha sido
"En la casa del señor ingeniero D. Sebastián Camacho se leal y amiga, y contribuirían a dificultar en México el estable-
había verificado una reunión a la que asistieron invitados por cimiento de un Gobierno democrático seniejante al de la gran
el Sr. Juan C. Hernández, vicepresidente del Senado, los señores nación americana. Hago un llamamiento a los sentimientos de
senadores Ricardo Guznián, Jesús Flores Magón, Guillermo equidad y justicia que han sido la norma de su Gobierno, y
Obregón, Víctor Manuel Castillo, Luis C. Curiel, Carlos Aguirre, que indudablemente representa el sentimiento del gran pueblo
Lie Francisco I.eón de la Barra, Sebastián Camacho, Juan C. americano, cuyos destinos ha regido con tanto acierto. — Fran-
Hernández, Emilio Rabasa, Rafael Pimentel y Tomás Macama- cisco I. Madero."
nus. En esta reunión, a la que asistió el señor ministro
de Relaciones, se discutió la situación, habiéndose acor-
La no Intervención yanqui.
dado citar pa'-a el día siguiente a todos los senadores en -1
Salón Verde de la Cámara de Diputados, con objeto de discu- El cónsul americano en Mazatlán, por telegrafía inalámbrica
tir la conveniencia de pedir su renuncia al Presidente y vicepre- de los buques de guerra americanos, recibió el siguiente marco-
sidente de la República y al Gabinete. nigrama:
"F^n este día el Presidente Madero envió el siguiente cable- "Sesión del Senado Americano duró toda la noche. Terminó
grama a Mr. Taft: a las dos de la mañana, acordándose la no intervención de los
"Palacio Nacional, 14 febrero 1913.—Sr. W. H. Taft, Presi- Estados Unidos en los asuntos de México."
Sirve de confirmación al anterior mensaje el siguiente, sus-
crito por el Jefe del Poder Ejecutivo de la Casa Blanca:
"Por e! texto del mensaje de Vuestra Excelencia que recibí
el dia 14 se desprende que ha sido mal informado respecto a
la política de los Estados Unidos hacia México, la que por dos
años ha sido uniforme, así como también respecto a las me-
didas navales o de cualquier otra índole que hasta aquí se han
tomado, medidas que son de precaución natural, y ya el emba-
jador me telegrafió que cuando Vuestra Excelencia fué bas-
tante bondadoso de mostrarle su telegrama dirigido a mí le
hizo notar este hecho.
"En consecuencia, Vuestra Excelencia debe estar advertido
de que los informes que parece le han llegado, relativos a que
ya se han dado órdenes para desembarcar fuerzas, han sido in-
exactos. Sin embargo el embajador, que está plenamente
informado, ha recibido de nuevo instrucciones para proporcionar
a Vuestra Excelencia la sinformaciones que desee.
"Juzgo innecesarias nuevas seguridades de amistad a México,
después de dos años de pruebas de paciencia y buena voluntad.
(4
"En consideración a la especial amistad y a las relaciones
existentes entre ambos países no puedo llamar la atención de
Vuestra Excelencia sobre la vital importancia del pronto res-
tablecimiento de esa paz real y orden que este Gobierno tanto
ha esperado ver restablecidos, ya porque los ciudadanos ame-
ricanos y sus propiedades deben ser protegidos y respetados,
cuanto porque esta nación simpatiza profundamente con las
aflicciones del pueblo mexicano.
"Recíprocamente a la ansiedad manifiesta en el mensaje de
Vuestra Excelencia, creo de mi deber añadir sinceramente y
sin reserva, que el curso de los acontecimientos durante los dos
últimos aros y que hoy culminan en una situación muy peli- la Peña y Gurza. Se hallaban también uno o dos de sus ayu-
grosa, crea en este país un pesimismo extremo y la convicción dantes de su Estado Mayor y yo."
de que el deber imperioso de estos momentos está en aliviar Noticia urgente
pronto la actual situación. — William H. Taft."
"Se trataba de aumentar la cantidad que se había desti-
Sábado, 15. - Se pide la renuncia al Presidente nado para proporcionar alimentos a la clase pobre mientras
"Hasta las once de la mañana estuvieron reunidos veinti- durase la lucha en la capital, cuando intempestivamente pe-
cinco «cenadores que nombraron una Comisión, encabezada por netró en la pequeña estancia el coronel Jiménez Riveroll, ha-
los Sres. D. (Gumersindo Enríquez y D. Guillermo übregón, ciéndose acompañar en seguida por el señor Presidente a un
para ene se acercara al Presidente de la República a exponer- pasillo, donde le comunicó como una cosa urgentísima y de
le que. en vista de la situación angustiosa de la capital y del parte de Huerta, que se acababa de recibir la noticia de que
amago de la intervención americana, él, el señor vicepresidente el general Rivera, que se acercaba a la capital, procedente de
y el Gabinete debían presentar sus renuncias. Los veinticinco se- Oaxaca, venia rebelado y dispuesto a unirse a los alzados de
nadores se dirigieron a Palacio, en donde fueron recibidos por la Cindadela, y que para colocar al Presidente en un lugar
O. Ernesto Madero, ministro de Hacienda, quien les manifestó completamente seguro y fuera de todo peligro, era necesario
que el Presidente no podía recibirlos porque había salido, acom- que en seguida lo acompañara para que fuera protegido de-
pañado del general Huerta, a la línea de fuego; que el Sr. Ma- bidamente. Simultáneamente a esta escena observé que detrás
dero no estaba dispuesto a renunciar y que lo de la interven- de! coronel Riveroll comenzaba a penetrar en el Salón de
ción eran patrañas." Acuerdos un pelotón de más o menos veinticinco soldados ra-
sos bien armados."
Cómo se consumó la traición Brota una sospecha terrible
El gobernador del Distrito Federal, testigo presencial de "Como un relámpago cruzó por mi mente la idea de que
los sucesos desarrollados en los momentos supremos en que, en esos momentos comenzaba a desarrollarse una escena de
víctimas de horrenda traición, fueron aprehendidos los señores traición y de sangre, y lancé este grito:
Presidente D. Francisco I. Madero y vicepresidente D. José Mana "Señores, están penetrando soldados y vienen a aprehen-
Pino Suárez, narra aquéllos en los términos siguientes, que der al Sr. Madero!"
copiamos de la obra citada: "'lodos se levantaron instantáneamente a la vez que el
Sr. Madero regresaba, viniendo a su lado Riveroll, quien daba
Un consejo de ministros muest'-as del mayor afán de convencer al Primer Magistrado
"Era la una y media de la tarde del día 18 de febrero; el de que debía acompañarle, llegando hasta a ponerle una de
señor Presidente acababa de obtener una victoria moral sobre sus manos sobre las espaldas, como empujándolo insinuan-
un grupo de senadores que había ido a manifestarle la con- temente.
v>;niencia de que faltara a su deber, entregando las riendas "Penetró el Sr. Madero en el umbral del Salón de Acuer-
dos con paso acelerado, seguido de Riveroll, Marcos Hernán-
t del (\jbierno a sus enemigos.
"Hn estos momentos se hallaba en un saloncito contiguo al dez, hermano del ministro Hernández; de varios ayudantes y
gran Salón de Acuerdos de la Presidencia, acompañado de sus de su Estado Mayor, y de algunos de los que estábamos en
ministros Pino Suárez, Lascuráin, Hernández, Vázquez Tagle, e! saloncito; se encuentra frente a frente de aquel pelotón de
Bonilla y Ernesto Madero. Estaban ausentes los ministros De soldados que ya empezaba a evacuar el Salón, obedeciendo las

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Órdenes de un fiel ayudante, y comprendiendo que Huerta le para la defensa del señor Presidente. Al llegar a su presencia,
ha tendido una celada, se detiene y le dice todavía sonriendo con sorpresa que es fácil imaginar, en lugar de cumplir con
a Riveroll, que no lo acompañaría y que le diga a Huerta que
pase a su presencia para que inform^e de los acontecimientos."
su deber, ordenó nuestro arresto inmediato, desarmándonos y
recluyéndonos en el garitón de la derecha de la puerta central
mencionada, poniéndonos incomunicados entre nosotros, con
centinelas de vista, quienes recibieron órdenes estrictas."
I
LQ muerte del coronel Riveroll

"Se inicia un diálogo rapidísimo, seguido de un violento La última a r e n g a de M a d e r o


forcejeo y, comprendiendo el ejecutor de las órdenes de Huerta
que su víctima está por escapársele, detiene n los soldados "El Sr. Madero, entretanto, junto con tres o cuatro de
exclamando con voz estentórea: "¡Alto! Media vuelta a la sus ayudantes y de varios amigos de los más fieles, descen-
t derecha: levanten armas, apunten..." y antes de (¡ue pudiera
dar a los soldados, cuyas armas estaban ya ding'das hacia
dió por el elevador hasta el patio, en busca de apoyo en algún
cuerpo de ejército que estuviera cercano, y encontrándose alli í
nosotros, la terrible orden de hacer fuego, advierto yo en un formada una parte del 29." Batallón, que él siempre había re-
i. bravo ayudante—Gustavo üarmendia—que se hallaba inmedia putado como de los más fieles, y por haber llenado de consi-
tamente delante de' mí, un vivo movimiento del brazo derecho, deraciones a su jefe, Aureliano Blanquet, a quien había as-
veo brillar en sus manos el pavonado cañón de una pistola, cendido al grado de general de brigada, por todo lo cual el
lo dinge inmediatamente en dirección de la sien izquierda del mismo Presidente había dispuesto que este jefe se encargara
coronal Riveroü, se escucha una tremenda detonación y el de la custodia de Palacio, con entereza se adelantó hasta las
infidente militar recibe su castigo, desplomándose en tierra filas, las que, al reconocerle, le presentaron respetuosamente
con el cráneo atravesado por la certera bala de un leal." las armas, y en vibrantes palabras les dijo:
"Soldados, sé que quieren aprehender al Presidente de la
República, perr- ustedes sabrán defenderme, pues si estoy aquí,
Momentos de confusión es por voluntad del pueblo mexicano."

"No concluye allí la tragedia: los soldados, quizás por


haber creído la orden de fuego o por haber advertido orden Blanquet consuma la a p r e h e n s i ó n
de fuego o por ia simple inercia del que está acostumbrado a
obedecer órdenes semejantes, dispararon también sus armas, "Al mismo tiempo, desde el Centro de Palacio, y seguido
haciendo retemblar con su múltiple detonación los cristales de por varias compañías del mismo batallón, Blanquet se había
las ventanas, agitando los cortinajes y llenando el ambiente desprendido a paso largo para venir al encuentro del Sr. Ma-
de una nube espesa de humo, fuertemente saturado con el olor dero, y empuñando aquél en su mano un revólver, avanzó has-
V)
acre de la pólvora, y entonces el salón, que antes fuera el ta él, colocándose a pocos pasos de su persona, y le intimó
asiento de las deliberaciones serenas, y en el que el Presi- rendiiión en estos términos:
dente y sus ministros celebraban sus consejos sobre graves "Señor Madero, es usted mi prisionero."
W) cuestiones nacionales, se convirtió en teatro de una espantosa "Entonces el Presidente, con ademán de indignación profun-
fy confusión; sobre un charco de sangre yacían juntos los ca- da y revistiéndose con toda la dignidad que su puesto y sus
dáveres de Riveroll y Marcos Hernández, y en el extremo opues- convicciones le imponían, le contestó con este apostrofe:
to, el del may >r Izquierdo, segundo jefe del pelotón, que tan?- "¡Es usted un traidor!"
bién encontró la muerte en manos de otro leal ayudante—se "Blanquet repitió:
*' asegura que este ayudante fué el hoy general S. Fede- "Es ustel mi prisionero."
rico Montes—y sobre aquella escena de horror se destacaba, "El Presidente responde con más virilidad:
com.o producto de milagrosas contingencias, la serena y noble "¡Es usted un traidor!"
figura del señor Presidente que, con los brazos en cruz, avan- "Pero viendo va que toda resistencia era inútil, se dejó con-
zaba majestuosamente de cara al peligro, hacia los soldados, ducir a la Comandancia Militar, cuyas oficinas están situadas
a quienes les decía- "¡Calma, muchachos, no tiren!" Hasta en el mismo patio de Palacio, y en una de las cuales fueron
llegar a ellos y parapetarse tras de sus propios cuerpos.' internados el señor Presidente y los ministros, con excepción
del Sr. Bonilla, que logró escaparse, y del Sr. Pino Suárez,
que, como antes dije, se hallaba preso conmigo en otro lugar.'
Intento de salvación

"De este modo, él pudo ganar la puerta que conducía a Aparece el g e n e r a l H u e r t a


la antesala y dirigirse a los Salones que dan frente a la plaza
de la Constitución: entretanto, los soldados, desconcertados por "A las cinco p. m. del mismo 18, después de una escena
la muerte de sus jefes, se desbandaron, buscando, como pu- dramática desarrollada entre Huerta y sus prisioneros, fueron
dieron, una salida. puestos en completa Hbertad los ministros del Sr. Madero y
"El Sr. Aladero no perdió tiempo; se asomó a uno de los a éste se le trasladó a las habitaciones del Intendente de
balcones y arengó a las tropas rurales que rodeaban Palacio, Palacio, bajo rigurtjsa inc(jmunicación, mientras se decidía
participándoles la asechanza de que estaba siendo víctima. Ellos sobre su suerte. Sin duda para cerciorarse por sí mismo de
le contestaron con entusiasmo delirante estar prontos para su que el vicepresidente también estaba bien preso, a esa misma
'i defensa y que aguardaban sus órdenes. Mientras, todos sus
ministros habían abandonado el lugar en que se encontraban,
hora se presentó Huerta en nuestra prisión. Su llegada la
anunciaron sus acicates que resonaban en el pavimento de
bajando al primer patio por la escalera de honor y dirigién- asfalto con la pesadez propia de una persona que va arras-
dose a la Comandancia Militar, en busca de Huerta, imagi- trando los pies porque el alcohol que ha ingerido en su orga-
nándose que no fuera cosa de éste todo lo que ocurría. Yo nismo ha privado a sus músculos de la energía suficiente para
bajé por la misma escalera, y acompañado por el vicepresiden- levantarlos. Llega al umbral de nuestra prisión, escudriña con
te nos dirigimos con rapidez hasta la puerta central de Palacio la mirada todos los rincones, descubre a Pino Suárez de pie
en busca del general Blanquet, de cuya fidelidad hasta esos en el garitón del centinela que da para la plaza de la Cons-
momentos, nadie dudaba, para pedirle el auxilio necesario titución, se informa de que yo también estoy alli en apartado

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>-e's>=íJ-%Ní^^--«'íc^ff'*>=s>*>í

adyacente, queda satisfecho, y ya para alejarse, pronuncia con El ministro Lascuróin


voz aifuardentosa y bronca, y poco inteligible, estas simples y una triste noticia
palabras, que en sus labios y en aquellos momentos resonaron
en el fondo de nuestras conciencias como una blasfemia: "Poco tiempo después se presentó el Sr. Lascuráin, a
"Viva la República." quien el Presidente impuso de lo anterior, manifestándose el
primero lleno de satisfacción al saber que por fin se había

El general Robles pide la


encontrado una forma decorosa de conciliar el conflicto, re- f.
tirándose en seguida para encargarse de arreglar toao lo con-
renuncia del Sr. Madero ducente.
"Llegó el mediodía y se nos dijo que la mesa estaba ser-
"El señor F'residente quiso hacer alguna observación pero
vida, V cuando empezábamos a comer se presentó de nuevo
era inútil y fué en estas condiciones que se presentó a las
ocho lie la noche del dia 18 de febrero, como comisionado de el Sr. Lascuráin, pero ya no satisfecho como antes; y acom-
Huerta, el general Juvencio Robles, para exigir de los señores paiiadoo del Sr. Ernesto Aladero y de un cuñado de éste,
Madero y Pino Suárez la inmediata renuncia de sus respecti- los tres con sus semblantes sombríos, y el último de ellos
vos puestos de Presidente y vicepresidente de la República. me llamó aparte con disimulo, para decirme que la noche an-
"Para tratar sobre este asunto, el Sr. Madero y dicho ge- terior habían matado a Gustavo Madero en las circunstan-
neral pasaron a la pieza contigua y fué tal el tono y la forma cias que antes indiqué. Disimulé mi emoción y entonces com-
en que este último cumplió su misión, que equivalía a plantear prendí por qué los recién llegados traían en sus rostros hue-
al Sr. Madero este dilema: llas de una honda pena; pero los Sres. Madero y Pino Suá-
"Es usted vencido: el ejército, que todavía anteayer era el rez no se dieron cuenta de ello y todos procuramos ocultarles
primero y principal apoyo de usted y su Gobierno, lo ha aban- la terrible verdad."
donado; está usted rodeado de enemigos y ni hay tiempo ni
manera de que alguien intente rescatarlo; su vida, en estos
Obligados por las circunstancias
instarles, depende en lo absoluto de la voluntad de Huerta y
Félix Díaz... Vengo a participar a ustedes que, o renuncian "El ministro Lascuráin manifestó "piadosamente" que to-
a sus respectivas Magistraturas, en cuyo caso tendrán la ga- do cstpha ya arreglado; que Huerta aceptaba todas las pro-

I rantía de la vida, o de lo contrario quedarán expuestos a


todas las í.ünsecuencias."
posiciones del Sr. Madero, en las que estaba incluida la liber-
tad d.; su hermano Gustavo, quien desde una noche antes ha-
bía pasado a la eternidad. Sólo faltaba ahora formular la re-
El optimismo del Sr. Madero
"El Sr Madero, con aquel optimismo que jamás le_aban-
nuncia, lo que en calidad de borrador, verificó en el acto el
Sr. M.adero, al mismo tiempo que con tranquilidad comía,
escribiendo con lápiz en una hoja de papel que colocó al lado
¡
donó, creyó que de buena fe Huerta le mandaba hacer aque- de su platillo. Concluida la operación, Pino Suárez manifestó
lla prooosición, puesto que habiéndosele reducdo a la -mp - con a'tivez no estar conforme con la razón que se daba como
tencía y despojauo de toaa probabilidad de volver a ganar o causa de las renuncias, y que pretendía que se hiciera cons-
perdido, a lo mo.os por el momento, no necesitaban sus e e - tar q'.ie lo hacían obligados por la fuerza de las armas. Los
migor arrebatarle también la vida; y bajo esa cons.deraco .
intermediarios, que se daban cuenta exacta del verdadero
se resolvió a investigar en qué condiciones, ademas de la
¡ninintnte peligro que estaban corriendo las vidas de ambcs
renuncia, se le dejaría en libertad, y al efecto manifestó a,
Magistrados, lo persuadieron con tacto de lo conveniente que
comisionado que como el asunto de que se trataba cía de
sería redactar ese documento en los términos en que deseaba
suma gravedad, deseaba interviniesen en el arreglo altas
Pino Suárez, y al f.n se puso como causa la idea general que
personalidades diplomáticas, para que as. revistiese toda la
solemnidad debida y para mejor garantía de su cump .miento contiene esta frase: "Obligados por las circunstancias."
Los diplomáticos que propuso al principio fueron los minis-
tros del Japón v Chile." El papel de Lascuráin

"Los ministros presentes pasaron en limpio el borrador,


Condiciones para la renuncia, y una vez examinado de nuevo y aprobado, salieron presu-
rosos para ir a mostrarlo a Huerta, guardándose el borrador
"Luego que se retiró el general Robles, el señor Presidente
origiml el Sr. Lascuráin.
discutió con nosotros el asunto y al fin fijó sus ideas e.i el sen-
"La diligencia empleada por este señor en todo este asunto
tido de exigir a su vez a Huerta que la renuncia se har.a
obedecía a que más que ninguno estaba presenciando y sufrien-
bajo estas condiciones: 1.", que se respetaría el orden cons-
do a toda hora la terrible presión de los enemigos, siendo él
titucional de los Estados, debiendo permanecer en sus pues-
el verdadero intermediario entre ellos y el Sr. Madero, y te-
tos los gobernadores existentes; 2.% no se molestaría a los
niendo la convicción de que si no obtenía la renuncia de éste
amibos del Sr. Madero por motivos políticos; 3.", el mismo
en un término perentorio, le arrebatarían la vida al Presidente,
Sr. Madero, junto con su hermano Gustavo, el hcencado
como se la habían arrebatado ya a Gustavo Madero y otras
Pino Suárez y el general Angeles, todos con sus respectivas
personas adictas a su administración. De allí que pronto re-
familias, serian conducidos esa misma noche del día lü y con
gresara nuevamente para llevarse aquel anhelado documento,
condición de seguridad, en un tren especial que los llevaría
modificando así el propósito del Sr. Madero. En cambio, trajo
a Ve.acruz, para embarcarse, en seguida para el extranjero;
la novedad de que, como prueba de la buena fe con que se
V 4.', los acompañarían en 'su viaje los señores ministros del
quería conducir. Huerta, comenzaba a cumplir con una de las
"lapon, Chile y Cuba, quienes recibirían el pliego conteniendo
condiciones estipuladas, poniéndome a mí y a los cuñados de
-a renuncia de! Presidente y vicepresidente,, a cambio de una
Pino Suárez, según orden por escrito que nos mostró el
cart.-, en que Huerta debería aceptar todas estas proposiciones
Sr. Lascuráin, en absoluta libertad."
y ofrece, cumplirlas."

;,:5,<¿>:s,<*-~'S.-^'*-*'*'*'*^*^
JUhUrMiMi>:iini:iUKiniuiiiiMi[iiiii(iMMHiiurH>iMiiiiiniinMMiMiiMiiiinMUiHiiiMiniriirMiiniiiuiiiinuiiitiirimiiiiiiinHiiiMiiiiuiininiiiiiiiirniiMi(ittM fiiiitiiitittiHiriiiiiiitiiiiiiii iiiii)irinitiiiiitii:iiiiitii)iiiiirtiiiiiiriiiniii!iniiiiMiiMntiiiini:ntiiiiitiiiiiiiiiiiiitiiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiin

I LA AYUDA DE MÉXICO A ESPAÑA


I El gesto noble del Presidente Cárdenas, definidor de lo voluntad
I del pueblo mexicano, redime a las naciones de América del pe-
¡ codo de ingratitud en que fueron a caer al desasistir o España.

"España, Fecunda, Civilizadora, Eterna." En este lema, grabado de los siglos. Si nuestra patria hubiera concentrado en un mismo
en el pedestal de! monumento a España erigido en Buenos Aires, punto su extraordinaria pujanza, que era a un tiempo nusnio
se ha encerrado con certera y sobria palabra la esencia espiri- impulso espiritual y potencia física, hubiera podido cimentar defi-
tual de nuestra patria. Por eso queremos destacar aquí la frase nitivamente su preeminencia en Europa y extender, después, su
lapidaria, elocuente, aserto de mano maestra, que lleva en su hegemonía en el planeta. No lo quiso cuando lo pudo, porque
sonoridad y en su ritmo la e.xpresión noble y justa del amoroso otro fué su anhelo, que eran para ella trazos mezquinos las fron-
afecto de los argentinos por España. teras teirenas y, en cambio, quería hacer universal el imperio
España, fecunda porque nunca midió sus empresas con la de la fe. Por ese desinterés pudo ser España verdaderamente
vara de sus intereses. Inspirada por los más altos ideales, cerrada fecunda.
a toda mezquina acción que sólo consultara las conveniencias España, civilizadora, porque ésa fué su misión en América.
materiales, España dio al mundo un admirable ejemplo a través Pasada la época heroica, disipados los primeros y afiebrados
sueños de los conquistadores, revelado el fascinante misterio, sentación nacional, que ha juzgado con serenidad y con altura la
no quedó por hacer sino la obra civilizadora, que, por otra parte, política exterior del régimen, cuando afirmo que en todos los
estuvo siempre presente en los momentos iniciales de la conquis- casos, pero muy especialmente en el de la República española,
ta. Pero era ya una labor paciente y lenta, sin el brillo de las el ejecutivo ha obrado de modo irreprochable, determinando su
glorias guerreras, sin ardores ni deslumbramientos. Y esa labor actitud en perfecta concordancia con los imperativos de su deber.
fué realizada con tesón a través de las horas, de los días, de "Vender pertrechos de guerra y prestar ayuda moral e inclu-
los años, de los siglos. Por eso España fué civilizadora. sive material a un Gobierno amigo, legítimamente constituido,
España, eterna por ser civilizadora y por ser fecunda. Eternos está perfectamente ajustado a las normas de ética que presiden
sólo son los pueblos que construyen sobre las bases más recias, la vida de relación internacional. Obrar de otro modo equival-
que son las bases espirituales. Nunca los que destruyen con un dría a conceder implícita beligerancia a una insurrección mili-
fin egoísta y tampoco los que labran su obra apresuradamente, tar a todas luces contraria al sentir del pueblo de México.
mirando únicamente la utilidad próxima, el mañana inmediato. "El origen revolucionario de nuestro Gobierno, la política
España, lanzada exaltadamente sobre el haz del mundo, nunca tradicional de la República en sus relaciones con otros Estados
deió de verse a sí misma y por ello pudo construir en las tierras y !a voluntad expresa de las colectividades, que da el norte a la
nuevas, no unas factorías fenicias sin alma, sino otras Espanas marcha de la vida pública mexicana, han coincidido en la línea
semejantes a ella misma. de conducta que usted se ha impuesto en el tratamiento otor-
El lema inscrilo en el mármol del monumento a España en gado al Gobierno legitimo de España, principalmente a partir
Buenos Aires es un gran acierto y mueve a gratitud a cuantos de la lucha armada que se libra en suelo español."
españoles lo leen en estos dias. Más todavía habrán de conmo- Gordón Ordás, embajador de España en México, apostilló
verse nuestros compatriotas en lo futuro. esas declaraciones, glosándolas en estos términos:
Ésta es la España contra la que atentan los bárbaros fascis- "Desde mi asiento de la tribuna diplomática oí con honda
tas, animados por el afán abominable de aniquilar sus valores e irreprimible emoción estas declaraciones de ambos señores pre-
artísticos, que defienden las milicias del pueblo, continuadoras sidentes—acogidas con triple ovación por los señores diputados y
de la tradicción liberal de España, fecunda, civilizadora y eterna. senadores y por el público—, emoción que subió de punto cuando
Ante esa realidad desnuda de artificios ¿qué han hecho las el buen pueblo mexicano recibió mi salida a la calle con mani-
naciones americanas que deben su civilización a la España fecun- festaciones de calurosa simpatía para España. Tenía el honor
da que nunca midió sus empresas con la vara de sus interesesí- de que el Gobierno ante el cual estoy .acreditado, en vez de re-
La respuesta es fácil y encierra una acusación categórica huirla, planteaba con nítida claridad la cuestión de la rebelión
contra las potencias de ultramar que prestaron asistencia espi- militar española en el verdadero terreno del Derecho interna-
ritual al cabecilla de la facción, pretendiendo ungirle como de- cional. Y a este honor se añadía la reiteración de los ciudadanos
finidor de ejecutorias raciales. Sólo una nación queda a cubierto de México en sus manifestaciones de solidaridad con la causa
de ese estigma de desafecto incomprensivo: México, que ha sido, que defienden heroicamente el Gobierno y el pueblo de mi patria.
con la U. R. S. S., el país que ha sabido cohonestar su ideario No era por eso nú emoción de ese día una vana reacción sen-
democrático con las obligaciones derivadas del Derecho inter- timental, sino que era el encaje de un pensamiento muy querido
nacional, colocándose decididamente al lado del Gobiferno de dentro de su propio molde.
la República española, en el trance difícil en que la abocaron los "Las viejas naciones de Eluropa, en parte porque llevan
generales africanos, duchos en traiciones. mucho tiempo sin padecer los horjores de la guerra civil y en
Si er. Europa hicieron escudo de la no intervención para res- parte porque se aterran ante la perspectiva trágica de una nueva
guardarse contra los riesgos de la gran conflagración bélica contienda universal, han adoptado una posición falsa ante el
tan temida como hipotética, México supo anticiparse dando al drama español. Todos los afanes de estos países se dirigen a
mundo e! ejemolo de su civismo, de su cordura, de su buen conseguir una declaración conjunta de neutralidad. Y, sin em-
sentido internacional v de su afecto recíproco hacia los verda- bargo, ninguno de ellos ha reconocido la beligerancia de los
deros españoles, porque los que se alzaran en armas contra militares rebeldes ¿En qué pueden fundamentar, entonces, su
la República, para hacer almoneda más tarde del solar español, anhelada declaración?"
ésos dejaron de ser españoles en el mismo momento en que, nuc- Y no paró en esto el apoyo prestado por México a la causa
"os caines históricos, hicieron verter la sangre de sus herma- española.
nos, movidos por el afán egoísta de encumbrarse, pretendiendo El 19 de enero de 1937 reiteró el Presidente Cárdenas sus
apoderarse del gobierno que no recibieron por mandato popular, manifestaciones de asistencia a España, declarando que México
sino como fruto de sus rapacidades. seguiría proporcionando armas y demás material de guerra para
ayudar al Gobierno en su ingrata tarea de sofocar la rebelión
facciosa.
¡Armas, armas para Es- "La ayuda de México hacia España—ha dicho una relevante
paña Y viva Cárdenas! personalidad consular mexicana—es diáfana como su propio
origen, que se sustenta en los más puros mandamientos
Le debemos a México asistencia moral. Sómosle deudores del Derecho de gentes y del Derecho internacional." Se fun-
también de prendas materiales, recibidas en los momentos mas damenta esta afirmación sobre la plataforma de las definiciones
diíiciles por que atravesó la causa popular. emanadas de la VI Conferencia Internacional Americana, reunida
En una de las memorables sesiones celebraaas por la Cá- en Cuba en enero de 1928, en las que se dice categóricamente
mara popular mexicara se oyeron en un buen día los clamores al expresar los deberes comunes a las potencias en los casos do
ílel pueblo, expresados en estas palabras: guerra civil:
- ¡ A r m a s , armas para España y viva Cárdenas! "Primera.—No consentir que los habitantes de su territorio,
Era el grito de un pueblo libre que sabia hermanar sus ilusio- nacionales o extranjeros, tomen parte en preparativos bélicos,
nes con las de los liberadores españoles, empeñados en una de reúnan elementos o pasen la frontera para iniciar o alimentar
las más bravas gestas que registra la historia. Laian como u insurrección o guerra civil.
alud las afirmaciones de la ayuda mexicana, concretándose en Segunda—internar o desarmar toda fuerza rebelde que tras-
i-'l mensaje presidencial en cifras: ponga la frontera o toda tripulación de embarcación armada
"El Gobierno de España-afirmó el general > a r d e n a s - s o - al servicio de 'os rebeldes que se encuentren en su jurisdicción.
Hcitó de nuestro Gobierno por el excelentísimo señor embajador, Tercera.-—Prohibir el tráfico de armas o municiones de gue-
^ Eélix (iordón Ordás, la venta de pertrechos de guerra, soli- rra, material de transporte o de comunicaciones terrestres, aéreas,
marítimas o fluviales, salvo cuando pertenezcan al Gobierno.
citud que fué atendida. . „
Cuarta.—Impedir que sus líneas o estaciones telegráficas o
El presidente del Congreso, diputado Luis Enrique ^'"o.^on-
telefónicas, radiotelegráficas o radiotelefónicas sean utilizadas en
testó a esta parte del discurso del Presidente de la República
beneficio de los insurgentes.
^on las siguientes frases:
"Estoy se.üuro de interpretar los sentimientos de la repre-
Quinta.—Evitar que en su jurisdicción se equipe, arme o temor a la guerra y la fuerte supervivencia del espíritu timorato
adapte al uso bélico cualquier embarcación destinada a obrar de la socialdcmocracia tenga paralizada la acción de los Go-
en interép de la rebelión." biernos de Francia y de Inglaterra ante la lucha epopéyica del
México obró digna y lealmente suministrándole armas a Es- pueblo español contra la canalla doméstica y la barbarie inter-
paña. nacional. España triunfará de sus verdugos seculares; limpiará su
En los momentos angustiosos en que Eugenio Vallejo, José hogar de seres envilecidos, de instituciones caducas y de castas
Terradellas y Marti hacían esfuerzos desesperados por coordinar podiidas. Su victoria será plena e irradiará sobre todo el planeta
las industrias de guerra en Cataluña, con el fin de dar solución con luz que alumbrará el camino que han de recorrer bien pron-
a las exigencias de los trentes, llegaron las primeras cajas de to los pueblos que sufren.
munición mexicana. "Mi! cartuchos 7 mm.", decían ¡as inscrip- En México estamos de pie. Vivimos con pasión la gloriosa
ciones grabadas a fuego en los lados de las cajas de madera. jornada Je Irspaña en favor de un mundo mejor. Nos hemos vin-
"Lote número 22.—Pólvora Dupont", expresaban otras de las culado a España para la eternidad, en una liga creadora que lia
contramarcas. de florecer en un nuevo tipo de hombre, honra y prez de la
Los que nos hallábamos por entonces en las inmediaciones especie, con el concurso del proletariado universal."
de Huesca haciendo frente a los facciosos, ¡con qué júbilo re- José Rubén Romero, gran amigo de España, concretó la ayu-
cibimos aquellos cartuchos perfectos, magníficos, salidos de la de mexicana en estos términos:
Fábrica Nacional de Armas de México! Nos faltó tiempo para "En México no existen más que dos partidos proletarios, que
desfondar las cajas y para recortar su doble envoltorio de hoja- son el socialista y el agrario; y a los socialistas y a los agrarios
lata. Se municionó a la gente y no tardó en llegar hasta las nunca se les podrán arrebatar sus conquistas, pues están per-
trincheras enemigas la granizada de balas. ¡Eran las prime- fectamente armados y dispuestos a defenderlas.
ras salvas hechas en honor a México! Coincidió con ellas la Cada obrero mexicano ha aumentado en dos horas la jornada
visita que hizo a aquellos sectores Antonia Fustaguera, que de trabajo, para que sea enviado su importe a sus hermanos
ejercía por aquel tiempo las funciones de secretaria particular de España.
del cónsul general de México, J. Rubén Romero. En el molino México ayuda y ayudará a los heroicos luchadores antifas-
de Luna, bañado por las aguas del Flumen, fuimos testigos de cistas sin pedir permiso a nadie; y esto lo hace solamente porque
una escena que hizo mucho más em.ocíonante su propia senci- le duele la suerte de España, sin ningún otro interés..."
llez. El jefe de aquel sector, después de agasajar a ios arries- Así, con hech{,s concretos, han evidenciado los mexicanos su
gados visitantes, dijo a id gentil delegada consular: apoyo a la causa española. Marcelino Domingo llegó a la capital
—Exprese al señor cónsul la gratitud de todos los comba- mexicana en embajada de cordialidad, con ánimo de intensificar
tienteo de la libertad y afírmele que gracias al gesto noble de la !a ayuda a España. Halló todas las bolsas abiertas y los espíri-
nación mexicana hemos podido resistir los ataques de! enemigo, tus propensos a los mayores sacrificios.
porque llegaron las municiones en el momento más difícil, cuando En junio de 1Ü37 llegaron a México los niños refugiados es-
empezábamos a pensar en utilizar la culata de los fusiles, ya pañoles. Se hicieron cargo de ellos, en representación del Go-
que otra cosa no nos era posible... bierno mexicano, el oficial mayor de la Secretaria de Relaciones
Ocurría esto en los días lluviosos y fríos de noviembre del e>teriores y el subsecretario de F.ducación pública.
año pasado. El recibimiento que el público mexicano dispensó a los eva-
cuados a su llegada al puerto, fué indescriptible. Se desarrollaron
escenas conmovedoras y se vitoreó entusiásticamente al pueblo
Después. español
México n(» ha regateado esfuerzos para ayudar a España. A su paso por Orizaba, Esperanza, Córdoba y Apizaco, en
Del conciertf; de voces afines queremos entresacar unas opinio- dirección a .México, las agrupaciones obreras y todo el pueblo en
nes para que sirvan de muestra: general jirodigó .T los pequeños cariñosas atenciones.
En un mensaje enviado a los trabajadores españoles por Vi- El día 8 llegó la expedición a la capital de la República me-
cente Lombardo Toledano se decía: xicana. La estación y calles adyacentes estaban completamente
"En nombre de los 600.000 hombres y mujeres de la Confe- llenas de personas, representaciones obreras y pueblo en gene-
deración de Trabajadores de México reitero mi saludo fraternal ral, que aclamó a los niños españoles con delirante entusiasmo.
y mi admiración sincera al heroico pueblo español, asi como Éstos fueron recibidos en la estación por el secretario de Edu-
la expresión de mi fe inquebrantable en la victoria final de su cación pública.
noble causa. Al desembarcar fueron conducidos a la Escuela de Hijos del
Toca a España ahora romper el segundo eslabón de la Ejército donde los niños pasaron el día entre fiestas organizad.'is
cadena del régimer» capitalista que agobia a los trabajadores de en su honor y que presidió la esposa del Presidente de la Re-
casi todo el mundo. La historia demuestra que no son los países pública. El Jefe del Estado, después de la comida, visitó a los
de mayor desarrollo económico los que han de ocupar la van- muchachos españoles, acompañado del secretario de Comunica-
guardia en esta hcra decisiva en que el ciclo burgués se cierra ciones v del jefe del Departamento de Prensa. El Sr. Cárdenas
para siempre y principia, al fin, la etapa de la libertad y de la tuvo palabras de verdadero cariño para las inocentes víctimas
justicia. de la agresión fascista internacional a España.
Salta España, venturosamente, del Gobierno latifundista y El día 10 salió la expedición para Michoacán, lugar designado
clerical en que vivió hasta ayer, a un Gobierno popular revolu- por las rutoridades mexicanas para estancia de los evacuados,
cionario, que es garantía firme de la emancipación definitiva de acompañada por el secretario de Educación y otras represen-
sus masas oprimidas, lección brillante para el proletariado euro- taciones oficiales y la señora de Gordón ürdás, Marcelino Do-
peo y ejemplo directo para las veinte naciones latinas de América. m'ngo y el canciller de nuestro país, en representación de la
No importa que el fascismo haya prohijado y ayude la rebe- Embajada españo'a.
lión de los militares traidores a su pueblo. No importa que el Después. . Enihajadores del arte mexicano llegados a España

jtiniiiMiiiitiitiininiiiiiilltiiniiiiiniiiiiniiiiiniiHiiiiiiiMiiwtiiuuiuiuMiiiiunM(iiiiniHiuiiuiiiiMtiiiiiiiiiitini,uitnuiiuiMiiniiiiiiiuiMiiniioiiiniMiiiiMii<'hiiiHiniMiniMiHnMiiiii^

DEMANEU-LO
Conyac Gran Parrai S E M P RE
que durante siglos ha enriquecido la historia de la humanidad
nos trajeron nuevos alientos, insuflaron mayor fe en nuestros
y ha aportado hechos tan gloriosos que sería inútil enumerarlos,
pi opios destinos y vigorizaron nuestras ilusiones. En el Madrid
no puede ser aplastado por la brutalidad de quienes creen do-
ultrajado por las bombas de la aviación pirata y por las gra- minar a todo un pueblo con cañones y ametralladoras; hay algo
nadas de los ca-iones al servicio de Franco el africano, se ce- más todavía que eso, hay algo más elevado, más noble y más
lebró la exposición, magnífico; y es e! deseo, el anhelo de un pueblo por ser libre
"Cien años de grabado político mexicano". Alternaron, en y por vivir libre, y por esa libertad que nosotros estamos per-
un ciclo memorable de arte, como expositores conferenciantes fectamente seguros de que alcanzará el pueblo español. Nos-
Fernando Gamboa, Octavio Paz, José Mancisidor, María Luisa otros nos retiramos de estos lugares alegres, optimistas, satis-
Vera, Juan de la Cabada, David Siquciros, , Máximo Pacheco, fechos de lo que hemos visto, de lo que hemos encontrado. Y
ürozco, lulio Castellanos, Ángel Bracho... tristes porque no podemos compartir con ustedes los momen-
Mancisidor, bello definidor de situaciones paralelas, nos lego tos dolorosos que quisiéramos vivir a vuestro lado; pero lejos
como regalo do ilusión sus palabras confortadoras: o cerca, en cualquier rincón de la tierra, en cualquier lugar del
"Nosotros hemos sufrido el mismo proceso histórico con dife- mundo, en cualquier situación que nos encontremos, sabed que el
rencias de época, pero, de todos modos, el mismo proceso histó- pueblo de México está con vosotros, que el pueblo de México
rico. Nuestro pueblo ha habido instantes que no ha sido dueño tiene la absoluta seguridad de que en fecha más lejana o más
más qu.. de pequeños pedazos de tierra en donde habia refle- próxima habremos de festejar la victoria."
jado su rebeldía, v nosotros hemos visto cómo, a través de esas Porque ésa es la gran verdad que importa destacar en estos
derrotas aparentes, sobre nuestro enemigo, el imperialismo de momentos: El México que ha sabido prestarnos asistencia cor-
los países que han tratado de dominarnos sin conseguirlo, he- dial en los momentos más difíciles será el primero entre todos
mos logrado edificar nuestra nacionalidad y crear una perso- los pueblos del mundo en acudir a felicitar a los defensores de
nalidad propia que, quiérase o no, ha comprendido en este ins- la Libertad cuando las trompetas de la fama pregonen a todos
tante la de todos los pueblos libres de la tierra. Por eso es por los vientes la gran victoria de las democracias lograda por los
lo que la Delegación Mexicana tiene una fe inmensa en los des- combatientes españoles, en gran parte con armas mexicanas.
tinos del pueblo español. Nosotros sabemos que este pueblo.

CAMISERÍA GENERES
SASTRERÍA DE P U N T

Vehils Vidal
E. C.

ARTICLES DE QUALITAT

PREUS REDUITS

PLACA UNIVERSITAT, N . " 7


Avinguda Dr. Paulov, 32 i 34 B A R C E L O N A
(Qbans A v i n g u d a Porta de TAngell
^ •
/ .
a iLuimica (félu
como atma (reuca.

.Qué i^tlZ
do se oye decir, como modernamente de Rusia, que ha descu-
bierto un gas terrible, de doble acción como la iperita, pero más
penetrante, más persistente y de mucha más difícil neutralización.
Pero poco se sabe en la realidad e incluso no sabemos hasta
qué punto son ciertas estas afirmaciones, pues también se decía
lo mismo de la lewisita—gas que no se usó en la pasada guerra
debido a la firmación del armisticio—y no obstante después se
comprobó que su neutralización era mucho más fácil que la
de! sulfuro de etilo biclorado. Fué debido a estas noticias exa-
geradas que se tenían de la lewisita que lo llamaron "Rocío de
la muerte", y como que tiene un olor agradable de geranio, el
general Fries lo llamó ampulosamente "misterioso rocío de la
Patrulla de soldados equipados con
muerte, perfumado de geranio". Pero lo cierto es, como dijo
caretas protectoras contra
el comandante alemán Endres, que "la guerra técnica que co-
ios gases.
nocimos en 1914-18 no fué más que un pequeño ensayo, com-
parada con las posibilidades futuras".
Desde que se incorporó la Ciencia, y especial-
m.ente la Química, al servicio de la destrucción y de * * *
la muerte, con gran frecuencia hemos leído y comen-
tado esta pregunta que sirve de título al artículo. La química se incorporó de una manera práctica y defini-
Mucho se ha dicho en favor y en contra de la tiva en la guerra cuando en la noche del 11 de julio de 1917 los
quím.ica como arma bélica. alemanes atacaron con un nuevo gas el frente de Ypres—de
Los primeros comentarios que se hicieron de esta ahí el nombre de iperita—, causando a los aliados tanta des-
nueva arma—nueva, aplicada de un modo eficaz y moralización y estrago, que el mundo se preguntó, asustado:
definitivo, ya que se conocen ensayos muy anti- ¿Qué será .TJiora una guerra?
guos—fueron muy exagerados. Aparecieron muchos Entonces empezó una nueva lucha, una lucha fría, pero
libros y artículos que parecían querer deprimir el terrible, una lucha de laboratorio, que no terminó en 1918, sino
ánimo de los lectores, fantaseando y dejando entre- que secretamente continúa en cada Estado. La lucha entre la
ver posibilidades que actualmente la ciencia rccl.aza. agresión y la defensa.
Pero luego se inició una reacción más errónti que la
Casi todo? los críticos aseguran que la antigua división en-
primera, que consistía en creer que la química con
tre combatientes y no combatientes desaparecerá y que serán
el fosgeno (con su índice de toxicidad ct=450) y la
precisamente los centros industriales y las grandes ciudades
iperita (con su gran poder vesicante y c t " ' .500) y 'a
los más castigados por la agresión. Hoy día sabemos que
había dado todo cuanto de ella podía esperarse. De-
cuando llegó ei armisticio los americanos preparaban un ata-
bido a esa gran facilidad con que la ignorancia
que de gran envergadura sobre Berlín con su mencionado nuevo
dice: "Ya está descubierto todo", quiero dar en este
gas, la lewisita. Pero... ¡qué terrible y difícil será la defensa
corto artículo una ligera idea de las posibilidades
química de la población civil! ¡Cuántas dificultades de orden
que tiene la química como arma de guerra. Me di-
moral y técnico habrá que vencer!...
rijo a toda la opinión, pero especialmente a los
com.pañeros que tienen una carrera química, pues a Si !a agresión inventó gases terribles, como el fosgeno y la
nosotros correspondería en caso de ataque prepa- iperita, la defensa—aunque no llegó, ni llega en la actualidad
rar la defensa. Y también prepararnos para el ata- al grado de perfección que todos desearíamos—les opuso la
que, pues nunca han sido más verdad las palabras urotropina, el hipoclorito, los permanganatos, etc., que dieron
de si vis paceni para bellum. a los soldades la suficiente moral de verse protegidos contra
Nadie sabe lo que las grandes potencias tienen ?que! terrible enemigo. La agresión inventó entonces los "rom-
preparado en sus archivos secretos. De vez en cuan- pemáscaras" o mal llamados "gases estornutatorios", ya que
ÍÍLQX*^^
nvia\r(í (j
Quan ¿áieira Vílattaia
ESPECIAL PARA «MI REVISTA»

no son gafes, sino suspensiones coloidales en las que la masa


dispersa es un sólido y el medio de dispersión el aire. Por el
calor de la explosión el sólido se volatilizaba y al enfriarse se
condensaba en partículas tan diminutas que formaban "la nube
gaseosa" que atravesaba los mejores filtros usados hasta entonces.
Llegr.do el gra a las vías respiratorias provocaba gran cantidad
de estornudos y accesos de tos, acompañados muchas veces de
vómitos que obligaban a los soldados a quitarse las caretas.
Era en este instante crítico cuando el indefenso soldado era
atacado por e! terrible fosgeno.
La defensa se protegió entonces con los filtros de celulosa,
que logran retener a estas suspensiones coloidales, si bien difi-
cultando mucho la respiración. Pero con los estornutatorios no Una madre previsora. Tanto ella como sus hijos se pre-
se ha dicho aún la última palabra, pues en el mundo.químico son vienen contra los gases ponzoñosos.
conocidos los trabajos de substituir los compuestos arsenicales
por los de antimonio, que, si bien son menos tóxicos, tienen el
llamado "poder acumulativo"—poder que ya poseía la difenil- nuyendo entonces su efecto útil, pues ya sabemos
cloroarsina, usada en la Oran Guerra—, que convierte a las que con la careta puesta, y especialmente con las
mejores caretas conocidas sólo en defensas temporales. que contienen filtros de celulosa, la respiración se
Retenidos los "lompemáscaras" con ios filtros de celulosa, hace difícil y provoca gran cansancio. Cuando la
se iniciaron las falsas agresiones con nitrobenceno, que con su respiración era fatigosa y se daban cuenta de que
fuerte olor a almendras amargas desorientaba al enemigo. Éste, la agresión no era tóxica, se quitaban las caretas,
creyéndose atacado, se ponía inmediatamente la careta, dismi- y entonces sucedía lo terrible: habían caído en la
trampa, ya que la verdadera agre-
Igual en el trabajo que en el frente de batalla, estas mecanógrafas
sión empezaba entonces mezclan-
usan sendas caretas antigás. do el fosgeno al nitrobenceno y
debido al olor penetrante de éste
pasaba el tóxico inadvertido.
Algunos comentaristas se indig-
naron contra esos que llamaron
"innobles ardides"; pero de poco
sirve la indignación en la guerra
y mucho cuenta, en cambio, el
saberse preparar y saber corres-
ponder adecuadamente, pues será
siempre la mejor defensa el pre-
pararse para el ataque.
Pero creo que nada nos dará
una idea más clara de las posibi-
lidades de la química al servicio
de la guerra como este descubri-
miento, relativamente nuevo, de
bombas incendiarias. Consiste en
alojar cantidades del inofensivo
fosfato tricálcico en las bombas
incendiarias corrientes a base de
aluminio, magnesio, óxido de hierro, etc. Durante
IflNAIN2A5
la combustión el fosfato tricálcico se reduce a fos-
furo, el cual queda, al parecer, inactivo y del que
nada teinen los confiados soldados. Pero este fosfuro
calcico en contacto con el agua que se ha empleado
para apagar el fuego, o con el agua de una posterior
lluvia o simplemente con la humedad atmosférica,
MUNDIALMENTE LA i
forma la terrible fosfamina según el siguiente proceso: ECONOMÍA SE HUNDE i
El estado bclicc del mundo con su carrera loca de arma- |
( P O 4)2 Ca 3 = P., Cas + 40, mentos produce el desequilibrio económico. Sir Arthur Salter, I
Pí Cas + 6 H2O = 3 Ca (OH)s + 2PHa gran economista, profesor de la Universidad de Oxford, ha |
larizado un nuevo S. O. S. i
La fosfamina es un gas inflamable en contacto del Dijimos que España puede ser el fiel de la balanza econó- |
aire y provoca inmediatamente un nuevo incendio, mica, siempre y cuando la reorganización económica sea reco- |
nocid;' potestad de la organización sindical. El eminente eco- |
que junto con sus vapores tóxicos ocasiona nuevas nomista inglés, con una visión clara de la situación mundial. |
y numerosas desgracias. Aqui pueden reflexionar ios afirma que estamos en el mismo estado, en economía, al que |
atravesó el mundo en el año 1929. La carrera loca de los |
que opinan de buena fe que ya no queda nada por armamentos produce estragos; si no apelamos radicalmente |
descubrir en química de guerra. al remedio, nos Inmdiremos estrepitosamente. Por eso insis- |
timos en la necesidad de buscar la base de la estabilización |
* * * en los sindicatos. En la vida orgánica de los pueblos no hay I
nada positivo, exceptuando el trabajo. Son los productores |
Antes de terminar, sólo dos palabras sobre otra
el alma de todo lo que se relaciona con la existencia de los |
ciencia de la que algunos temen que pueda desem- sereF. I
peñar un popel decisivo en una nueva guerra. Me No se trata actualmente de exceso de producción en lo |
que afecta a España. Se trata mayormente de falta de prime- |
re%ro a la Bacteriología. Pero, por ahora, esta ras materias. Pues bien; hay que buscar esas materias donde |
arma (?) no es lo temible que muchos se creen. Los estén y como sean. El problema, pues, no es de producción; |
es de regularización de la economía en su distribución. Para |
verdaderos conocimientos que de esta ciencia tene-
esto no hay más que un camino. Los sindicatos son y deben |
mos nos hacen creer que en una próxima guerra no ser los que forjen el vehículo de la distribución. Asi veremos |
sería usada de una manera eficaz. Junto con muchas que todos los que viven en nuestro país percibirán equitati- |
vamente lo que de si puede rendir la nación puesta en marcha i
otras dificultades debería resolverse el problema del de producir el máximo con el mínimo de esfuerzos. Si la eco- |
lanzamiento, pues, como se comprenderá, no puede nomía mundialmente se pierde en el caos del sistema capita- |
i lista, ¿por qué no realizar rápidamente ¡o que es aspiración |
hacerse con proyectiles, como en los gases, debido a
i de los productores, puesto que éstos han probado ya en lo |
que el calor de la explosión mataría los gérmenes. que va de movimiento su capacidad? I
Además se necesitarían cantidades enormes de i La economía requiere la inteligencia del técnico, el con- |
curso de! laboratorio y la colaboración del músculo. Estas tres |
piojos apropiados para propagar el tifus, pulgas i facetas de la producción sólo pueden unificarse con la organi- |
para la peste, mosquitos para el paludismo y fiebre i zacióii sindical. tJiferenciar una de la otra es crear dificulta- |
i des al desenvolvimiento del engranaje econÓTi-co Muere de |
amarilla, pues experiencias hechas por Nicolle y
i vetustez el orden económico de la burguesía; inútiles son los |
Conseil en el caso del tifus exantemático han de- i esfuerzos que la terapéutica de la economía burguesa intenta |
mostrado que la transmisión del tifus sin piojos no I llevar a ese cadáver. Estamos a tiempo de salvar a España y |
I ai mundo si decididamente incorporamos todas las actividades |
existe (exceptuando, claro está, el caso de inocula- I obreras al ritmo de una producción coordinada basada en los |
ción experimental con inyecciones virulentas). Die- 1 principios federalistas que unen a los pueblos. Y hay que es- |
I tudiar a fondo este problema mirando hacia el porvenir de |
ron resultado negativo los contactos con ropa, ex-
i la humanidad, si no queremos como españoles, como antifas- |
creciones y lechos sucios, pero despiojados, de los I cistas y como revolucionarios, perecer en el marasmo que nos |
enfermos, si el experimentador tenía la piel sana. i ha legado el sistema económico, que falla por su base ante |
i la pujanza del progreso. |
También demostraron que otros insectos epiparási- i Sobre privilegios de clase, sobre intereses individuales, |
tos y hematófogos como chinches, pulgas, etc., no I nada positivo puede, establecerse ni crearse. Para cimentar |
I algo duradero, para afianzar la paz soñada y anhelada por |
poseían la facultad de transmitir la enfermedad.
I todos los pueblos, tenemos un camino allanado ya por el es- i
Otros experimentadores, como Petenkofer, Roche- 1 fuerzo y el sacrificio de la clase trabajadora. Son los sindi- |
foratine, etc., dedujeron resultados análogos en otras i catos los que lian apartado los abrojos de ese camino glorioso |
i que siguen los pueblos conscientes en busca de un amor fra- i
enfermedades infecciosas. 1 ternal y de un bienestar colectivo. A ellos les incumbe en esta \
Finalmente, si tenemos en cuenta lo adelantadas i hora histórica asumir esa responsabilidad que señalamos. Y |
i quien se oponga a las realizaciones sindicales caerá en los |
que están hoy día las vacunas preventivas y curati- i. mismos defectos que han caído los que en el transcurso de |
vas, creo poder afirmar como el célebre profesor de y los siglos han negado capacidad creadora a la clase trabaja- |
p dora. Por una España grande y triunfante del fascismo, por [
Bacteriología, Puntoni: "Temeré siempre más a una
un mundo libre, la economía debe recaer en el organismo \
bomba explosiva que a un bote de cultivos del cólera, sindical. j
arrojados sobre una ciudad moderna. ^'iitiiiiillllliuiiitiillll(iilllil>l)llill>lll)llMlllllMli)nttlitiiiMiifii)i(li)itllllMiiitiiitiiii>liiiin.Miiinuiiitiiiriiiiiiiiiiiiili(lliiitiiiiiiitii(iiM inMiiilillilllliiiilili?
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/ Madrid I... El de los chisperos y las manólas, el


: ^ Madrid del 2 de Mayo, pueblo glorioso en su his=
loria y en su presente, cordial para iodos, y que al
defender hasía más allá del heroísmo su suelo sa=
grado defiende a España y es un ejemplo para el
Mundo por su valor y por su
eníereza • Alemanes e iíalia=
nos, fascisías y miliíares íraido^
res se estrellaron en su avalan^
cha contra el Madrid de siempre,
y aníe iodos los aíropellos y
iodos los bombardeos hay en los
^ pechos madrileños un valladar
insuperable • "Mi revista rin-
de hoy el tribuía que merece al
/^ pueblo de Madrid, gloria de Es==
paña, y al dedicar esíe número
de homenaje a México, la nación hermana, vienen a nuesíra
- ^ memoria los nombres presíigiosos de Miaja, de Cipriano
Mera, del íenieníe coronel Rojo y de laníos oíros, asi como
\ ^ los de los gue murieron ennobleciendo el solor hispano, eníre
' * • los que sobresale el del inmortal Durruíi, el guerrillero
- 4 ^ auténtico de la libertad de sus hermanos, por la que peleó
siempre en paz y en guerra.

5/)4^-A
TEMAS DOCENTES

• •

\^-/
na visita al instituto
de Adaptación
Por nuestra c o m p a ñ e r a
ENRIQUETA G A L L I N A T

No podemos negar que las mujeres repu'jlicanas, socialistas o anarquistas de la


España ieal, se dieron en sepuida cuenta de la íjrave responsabilidad que pesaba sobre
ellas desde el instante mismo en que nuestros hombres abandonaban el trabajo para
poner sus brazos al bcrvício del Gobierno de la República.
Hemos visto casos de arriesgado heroísmo: mujeres jóvenes han empuñado el
fusii y han regado ton su sangre generosa las tierras de Granada, ríe ívuzkadi, de
ívíadrid y de Aragón. Un nombre: Lina Odena.
Y hemos presenciado también el gesto heroico de las madres españolas que \n>f,
recuerda el gesto espartano de aquella madre de la Grecia inmortal que al salir al
encuentro del correo pregunta: —¿Qué noticias traes? —Vuestros cinco hijos han
muerto. —No es eso lo que pregunto: ¿Ha salido Esparta victoriosa? —Sí. —Pues
corramos a dar gracias a los dioses.
¡Loor a las madres de nuestros heroicos soldados! A estas madres que por ser
más humanas y menos indiferentes que las madres espartanas, el sacrificio de su dolor
k s ha costado lágrimas de sangre.
Pero todo y siendo mucho, no bastaba el heroísmo de unas ni el sacrificio de otras.
Había que superarse y para ello era necesario que la mujer se capacitara para el tra-
bajo, era indispensable que aquellos bra^.os que marchaban al frente fueran substituid<:.;i
inmediatamente. Las fábricas c!e materia! de guerra, los campos de labranza, los talle-
res, las industrias mil no podían quedar paralizadíjs. Y surgió una consigna: Crear
i'na retaguardia fuerte para hpcer fn.nte a las necesidades de la guerra.
Y asi fué como las mujeres que en la mayoría de los casos habíamos permanecido
en un segundo plano de la vida activa española, hemos pasado a ser el eje principal
que hace mover el engranaje de nu'^strn retaguardia.
Para ello era necesaria una preparación y, entendiéndolo asi el Gobierno de la
Generalidad de Cataluña, per mediación del consejero de Trabajo, Rafael Vídiella,
creó por decreto del 10 de julio de 1937 el "Institut d'Adaptació Profesional de la
Dona".

El "Instituí d'Adaptació Profesional de la Dona" está instalado en la casa número


325 de la calle de Córcega,
Su finalidad es canalizar las actividades profesionales de las mujeres antifascistas
para substituir a los irabajadores que han de ser movilizados por el servicio militar.
Las especialidades que se cursan en el Instituto son:
Frontón Primera: Industria.—Trabajos industriales de guerra, industrias gastronómicas,
industrias sanitarias, industrias químicas.
Novedades Segunda: Agricultura.—Trabajos del campo, industrias agrícolas.
Tercera: Comercio y Administración.—Trabajos comerciales y venta; adminis-
PALACIO DEL DEPORTE tración.
Pero ia parte que creemos más inte-esante para el lector es conocer los resultados
VASCO
que hasta el día de hoy ha dado el Instituto, y en este sentido iniciamos nuestra con-
• versación con ei Dr. Mira, presidente del Comité Ejecutivo.
—¿Para cuáles trabajos cree usted que demuestra la mujer más aptitia!(.'s?
Todos los días tarde
—Para todos aquellos que la llevan a estar en contacto directo con los niños y
y noche grandes además para aquellos otro? que requieren cierta habilidad de dedos, es decir, sensi-
partidos bilidad digital,
—¿La aptitud profesional de !a rr.ujer está de acuerdo con el trabajo que merece
Cortes, 638 - Teléf. 21047 su preferencia?
—Generalmente—nos dice el Dr, .Mira— la mujer no tiene preferencias profesionales,

riiiiiiiiiiitiuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii:iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiiii)7.
•"^rofesional de la
Mujer

pues su deseo estriba solamente en ganar dinero, tanto más en estos momentos en que la
ausencia de! marido o del hermano la obliga a ello. Somos nosotros los que después de
ui- examen médico y otro examen de aptitudes y de capacidad profesional las clasifica-
mos y adaptamos donde pueden dar un máximo de rendimiento.
—¿Qué orden siguen ustedes pí<ra colocarlas?
— Un orden correlativo que corresponde a la puntuación señalada en los exámenes
antedichos, a su situación económica, y en cuya puntuación concurre como factor
importante el tratarse de persona marcadamente antifascista.
—¿A qué industria,'- han creido más urgente adaptar el trabajo femenino?
T—Se han tenido en cuenta aquellos ramos de la industria no afectados por el paro
forzoso y siempre estamos dispuestos a organizar nuevos cursillos de preparación se-
gún las necesidades del momento. Sin ir más lejos, en estos dias hemos llegado a la
ccnclusión de que es necesario adaptar en seguida la mujer a los trabajos de relojería,
industria que sufre en ia actualidad crisis de manos. Por otra parte, el Instituto pre-
sentará en oreve una convocatoria para que las mujeres que hayan cursado estudios
de bachillerato o magisterio nuedan inc()rporarse a los cursos de técnicas industriales
c ingenieros.
Aventuramos aún una última pregunta:
—¿Así la creación del Instituto ha sido un éxito?
—Verdadei,iiiKiilc. Hoy son ya muchas las mujeres que asisten a los cursillos de
la Escueza Industrial, del Cadci, Sindicato de la Industria Oastronómica y talleres de
industrias de guerra que trabajan bajo el control del (jobierno.
Agradecemos las explicaciones del l)r. Mira y desde allí nos trasladamos a la
liscuela Industrial.
En los talleres di' fundición doiuic hasta ahora sólo tenían entrada los muchachos, las
nuevas aprendí'ías están encantadas de su JrnlTajo. Las hay catalanas, vascas, aragone-
sas,, etc., ly, según informes del profesor encargado de esta sala, las mujeres en los
trabajos de manipulacicn de moldes dan un rendimiento de un 30 % superior al hombre.
Nos acercamos a una de las mesas de trabajo. Seguimos la destreza de sus manos
al rellenar el ¡lueco de los moldes y les preguntamos:
—¿A/iteriormente a qué dedicaban ustedes sus actividades?
•—Yo era carbonera—nos dice una.
•—¿Cómo?
—Sí, teníamos una carbonería; pero ahora, claro, con la falta de carbón...
—Yo trabajaba en una fábrica de perfumería—añade otra.
—Y liara ganar !a gi'erra son más necesarias las bombas que los perfumes—sugie- SASTRERÍA
re una ruDia que nos haría decir con el poeta "digna de ser morena y sevillana".
TaniDién entre estas murhcahas se encuentra una polaca. Una chica muy inteligen-
te. Tiene veintitrés años. Vino con su compañero para alistarse en las Brigadas Inter-
nacionales, pero como con gran descontento de su parte la mujer no es admitida en
Uanubio
COLECTIVIZADA
los frentes de batalla, aquí escá ensayándose en la fabricación de granadas.
Dos jovencitas cuie llevan ya quince días en el taller y que el profesor nos presenta
como de las más adelantadas me dicen: ELsIjecialiaaa
— Nosotras trabajábamos en un taller de modistas.
Me extraña el cambio de oficio v formulo una pregunta: en u n i i o r m e s
—Entonces, ¿(|uc trab.-ijo os .;;iisl,-i in;'is, éste o,..?
I^.sU\ rs1r iiK (liten sin dejarme concluir la frase—. Y aunque no nos gustara, militares
hem(>s (le .ipninki Ids trabajos (lue hacían los hombres para que ellos puedan mar-
charse .ll tlt'llC. Salmerón, lO - Teléí. 77120
— Si, sí rubrican las demás . Digalo usted en Mi REVISTA. Los hombres al frente. B A R C E I. C-) N A

e=^¿^
\

.Y esto ¿por qué?


i Dibujo de Bartolozzí.)
s S NOKMANDIE

"Noraandie ", rae maravi 11*


tu f á b r i c a hecha de primorea
en donde e l oro, a l t i v o , b r i l l a
y e l mármol se deshace en f l o r e s ,
Pero en las parvas de C a s t i l l a
han muerto todos loe p a s t o r e s . . . .

Bajo tu c l a r a luz fee'rica


surgen loa r o s t r o s h e c h i c e r o s ,
b a i l a una "miss" su danza h i s t é r i c a
y beben a h i t o s los v i a j e r o s .
Pero en los montes de mi América
se mueren de hambre mis r a n c h e r o s . . .

Desde tu proa h a s t a tu popa


todo, cantando, nos d i v i e r t e .
El mar semeja una ancha copa
donde e l champán su espuma v i e r t e .
Pero en las playas de tu Europa
a á l l a n los perros de la M u e r t e . . . ,

¡Huye, Palacio de Aladino,


mira que Dios e s t á iracundo
a l ver tu loco d e s a t i n o ,
y en e s t e piélago profundo
van persiguiendo tu Destino
todas l a s lágrinBS d e l mundo!.
/\ CÑtyiAeí-t^
n
A bordo del "Normandie" 23 de agosto de 1936.

Portadilla del notable libro en prensa de nuestro amigo


y colaborador de "Mi revista" J. Rubén Romero.

I LEGISLADORES OBRERISTAS |

I ERNESTO i
I SOTO REYES |
i i
I Senador y coronel, Soto Reyes es uno de los pres- |
i tigios que enorgullecen con razón a México. |
I Amigo del Presidente Cárdenas — masque amistad |
I identificación en su obra social y revolucionaria—, |
I Soto Reyes fué siempre el valladar insuperable donde |
I hubo de estrellarse la reacción mexicana, |
I Por su talento, por su democracia y por su leal- I
i tad, disfruta de la admiración y cariño de todos. |
I Joven aún, en su cara brilla la simpatía y el ta- |
I lento que atrae y cautiva. i
i Trabajador insuperable, su labor está unida a |
I todo el progreso social de México. |
I «Mi revista», en este número de homenaje a la Re- |
I pública hermana, envía un cordial saludo al presti- |
J. Rubén Romero, ilustre novelista mexicano, cuyos acti-
vidades diplomáticas en Barcelona prestigian la repre- \ gioso político mexicano. I
sentación que hoy ostenta como ministro de México en i E. R. F. i
el Brasil. E i
RNiiHiitahiniiiHiiiiiiiMiMihiiuiiniinuiiuiiiuuitiiMiiiiiuiinitiuninittiiiiiniitiiiiMiiiiiMiHiiiUHiiiiriMiiiiMiiMUiMiiiiininirtiiMJniiiiiiiiiuniiiiá
I:L P R E S I D E N T
bl'.l,
PARLAMENT DE CATALUNYA

Para "Mi revista"

Entre los esfuerzos más rele-


vantes de estos últimos tiempos
en la historia de los pueblos
que han luchado por sus liberta-

J. Casanovas, presidente del Par-


des, México ocupa un lugar de
lamento catalán y prestigiosa
figura política barcelonesa.
honor. Hace más de un siglo que
nosotros venimos sufriendo los
contratiempos cruentos de esta
suerte de luchas. He aquí por
qué hoy, en esta hora decisiva,
estimamos más que nunca la ayuda
de los pueblos que nos acompa-
ñan. Y si admiramos la paz que
con su libertad ha sabido con-
quistar el pueblo de México,
confiamos en nuestra paz que ha
de florecer de nuestro sacri-
ficio .

Palacio del Parlamento, 10-12-37.


Carlos Pi Sunyer, ex alcalde
de Barcelona y consejero de
Cultura del G o b i e r n o de la
Generalidad de Cataluña.

j^— / v ^

^r

/ - ^ /W-^ ^^-^
GENERALITAT DE CATALUNYA
E L CONSELLER OE GOVERNACIÓ
ASSISTENCIA SOCIAL

Llegué a Veracruz el 15 de diciembre de 1930. Los cablegramas nos habían anunciado


el levantamiento republicano de Jaca. Los amigos de Veracruz nos esperaban emocionados
y nerviosos. La "Nueva España" abrazaba a la "España nueva", a la España republicana,
progresiva, plurinacional, federadora de pueblos, guión de un nuevo imperio del espíritu contra
el imperialismo materialista al servicio de intereses de mercaderes del dinero y de la libertad.
De Veracruz, semejante a una ciudad andaluza costeña, nos remontarnos a la ciudad
de México atravesando los puertos que a tres mil metros dan acceso al llano de la capital,
I
como un anfiteatro de montañas y volcanes con sus cimas coronados de nieve recortando las
nubes a unos 5.000 metros.
México nos acogió como hermanos. Los mexicanos saben que la vieja España de los
"encomenderos" no es la nuestra, puesto que es la misma que les negó a ellos la "iguala",
la que no les quiso reconocer nunca su personalidad nacional y su autonomía, la que les
quería gobernar por medio de un general extranjero. Por esto se alzaron contra aquel Estado
absolutista de clérigos, militares y terratenientes. Por eso nos comprendieron como hermanos,
y supieron distinguir cuál de las dos era nuestra España y qué es lo que quería nuestra
Cataluña para poder continuar siendo española sin dejar de ser bien catalana.
Son ahora los mezquinos despojos de aquel mismo Estado español los que sirven de
trinchera a los facciosos, clérigos, militares y terratenientes. Es el mismo su programa. Es
idéntico el significado de nuestra lucha, por la independencia, por la justicia, por la libertad
de los pueblos y de los hombres.
Y en esta lucha de hoy, el pueblo mexicano, dignamente representado por su Presidente
Cárdenas, está cordialmente a nuestro lado, con la adhesión sincera, con la solidaridad
fraterna que un pueblo como México, de profunda experiencia revolucionaria, sabe y
puede sentir.

ypí. Sut
'mmmmmmmmmmmmmí

A N T O N I O M . SBERT
Consejero de Gobernación
del Gobierno de la Gene-
r a l i d a d de C a t a l u ñ a .
¿llllllllllllllllillllllllilllllllllllllllllllllllllllllllllllilllllllIlllllllllillllllllllllllllllllllllilllVIIIIIIIIIIII

I Para MI REVISTA

= México, el gran país centro-americano,


I henchido de vitalidad, ha seguido en irrepro-
= chable comunión de sentimientos — que vale
5 aún más que su generosoy desinteresado apoyo,
i con ser éste inapreciable — nuestro amargo
= calvario. Con esta vinculación cordial y
I constante a través del curso patético de la
= contienda y crisis enquenos debatimos, se ha
'= hecho acreedor a considerarse un día luminoso
i copartícipe de nuestro triunfo.

= A nombre de México, indisociable en esta


I hora del de Lázaro Cárdenas , su gran Presiden-
I te, hombre íntegro y acendrado'demócrata, se ha labrado una
5 estela de gratitud indeleble en la historia en gestación
S de la República española.

= No quiero, como vasco, dejar pasar esta coyuntura sin


5 hacerme eco de nuestro reconocimiento colectivo a la ofer-
= ta mexicana de trabajo para mis compatriotas en exilio
= forzoso. Ya de data secular, anchas venas de sangre de
i Euzkadi fundidas con sangre azteca, sellan una perdurable
= confraternidad.

I Me complace proclamarlo así a la faz del mundo.

= Viernes, lOde diciembre.

Ministro de Justicia.

?iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii|iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii7
¿.Miiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii:

M I N I S T R O OS T R A B A
JO Y ASISTENCIA SOC

Paro « Mi revista »

El mejor homenaje a México es el agradecimiento de nuestro pueblo.


México y Rusia son las dos manos que han venido a estrechar las nuestras
proclamando con orgullo su devoción.
Nosotros representarnos en este momento el espíritu del mundo que ama
la libertad, que sostiene que sin libertad desaparece el sentido noble de la
vida. En todas partes tenemos amigos, gentes que siguen con angustia nues-
tras desdichas y padecen con nuestra tragedia; pero éstos se mueven entre
multitudes más o menos densas indiferentes u hostiles a nosotros. Solamente
en masa estos dos pueblos se han declarado francamente en favor nuestro y
han hecho de su solidaridad argumento para acusar a los demás.
Y es que son las dos únicas naciones que dan a su misión nacional un
sentido trascendente: no limitan entre fronteras la obra de reivindicación,
sino que pugnan por hacerla imperio de justicia. Son pueblos creadores de
civilizaciones nuevas. Tras ellos el mundo se rejuvenece.
En estas horas trágicas que vivimos; cuando el dolor moral y el dolor
físico agarrotan lo mismo al combatiente que al pacifico ciudadano de la
retaguardia; cuando la muerte ronda por igual al soldado que como un tupo
se acurruca en la trinchera que al niño que juega a pleno sol en mitad de una
calle a centenares de kilómetros de las líneas de fuego, sentimos mus pia-
dosas estas manos que nos estrechan y estos corazones que se avecinan tanto
a los nuestros que confunden su ritmo.

«^^^^.^-^fo^

ríllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllUlllllllllllllllllllllllllllllllllllllllMlllllllllllililllllllllllllllllllllllllllllllllUIIIIIIIIIII?
El g e n e r a l ¡efe del Ejército
del Este, Sebastián Pozos.
C^^*^ -'^^^^^Jk'l'B' óaludan ai:l pueitLo
lauebU mexicano
^^^ ' deide "Mi tetflsta

I ^n c u a r t o de sig
I El q-e ^ ^ ° ^ "" , valien^^ ^ -
I era colaborador ,i,,
I ,io mexicano t. ^. , •' al «^^
I manarlo m . . M Í revista

I =c r^s i--^ ^''''''


I ^e- llléxico. lie Le
I T - i c a n o s . i* , íno pueblo H
I íHéxico. e l ^^ g e r m a n a q
í . a España, a ^^ i »
I dice * ^ libertad Y
I l i b e r t a d del
I din daca.••
I Barcelona. « : - : : : - — ^"

I
Todos los antifascistas españoles nos sentimos deudores del I
gran pueblo mexicano, que nos prestó ayuda generosa y desinte- |
resada cuando las democracias europeas nos abandonaban a nuestra |
suerte, sacrificándonos en aras de intereses bastar- |
dos y de vacilaciones suicidas. |
¡Salud, noble pueblo mexicano, |
en el que revive la sangre he- |
roica de Moctezuma, el genio re- |
volucionario de Flores Magón y |
el alma angélica de Madero! La I
España proletaria y antifascista |
se siente orgullosa de continuar |
tu historia . I

E J ministro de Sanidad. |

Barcelona, 11 diciembre 1937. |


i)iliiitiiilliillllliMiiiiililMiililiiirMlt<itiiiiiitiiiiiiiiniiiiiiiMir<iiiiit.u!iiiiiiiniiiiriniiiiHMiiiiiii] iiinMiiiniimiiiiiiiniitiiii'iiimiiiii?
::uiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii:niiiiiiiiii

I MÉXICO
1 CUNA DE UNA NUEVA
I CIVILIZACIÓN
México es un pueblo digno de simpatia
y admiración.
Nos ganan la simpatia sus cactus, que
dan fisonomía al paisaje, y sus hombres y
mujeres de rasgos achinados, hermanos nues-
tros en exotismo, que llevamos en la sangre
JUAN G A R C Í A O L I V E I Í
y en la fisonomía las herencias de Israel
Ex ministro de Justicia.
y del Mogreb.
Así como nosotros en la caduca civilización europea representamos
ser el número más importante de un nuevo concepto de la civilización
—derecho de las masas proletarias, ocaso del capitalismo y majeza hom-
bruna frente al f a s c i s m o — l o s mexicanos, en la decadente civilización
iberoamericana resultan ser el pueblo seguro de sí mismo, justo, so-
brio, trabajador, amante de la paz y de la libertad, que desde el Norte
señala la ruta de una nueva civilización al polvo de naciones herma-
nas que en Centro y Sud América se empeñan en ser cabeza de ratón antes
que miembros de un solo pueblo, de una sola cultura y de una nueva civi-
lización .
Así como por nuestra posición geográfica — apéndice de Europa — la
expansión de nuestro concepto de la civilización encontrará dificulta-
des enormes en su remontamiento, México, cabeza de Iberoamérica casi
aislada de su cuerpo por el cordón umbilical de Panamá, tardará mucho
tiempo en lograr que las naciones hermanas comprendan que México es el
núcleo de la nueva civilización que ha de salvarlas a todas.
No se puede admirar a México solamente por lo que haya hecho en
nuestro favor. Es preciso admirar a México por lo que sufrió sometido
a sus dictadores y por los duros trabajos en defensa de la Libertad y
del Derecho que en todo tiempo han llevado a cabo sus ciudadanos y sus
conductores; que su esplendor de hoy sólo puede ser la resultante de
sus trabajos de ayer.
Por eso admiramos a México.

'iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiuiiiiMiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiuiiiiiiiiiiiniiiiiuiiiiiiiiiiniiiiiiiiMiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii^
^iimá^

¡MI REVISTA!
Carne del pensamiento y del sentir del pueblo, en tus páginas vuelca su alma
España, y la sangre hirviente de sus mártires impresiona auroras de vida nueva.
•MI REVISTA!
Tu voz de oro exalta la grandeza de mi México, el de la raza de bronce que
dejó, con sus puños crispados, las protestas en las piedras talladas.
¡MI REVISTA!
Tesoro de intelectualidad obrera que interpretas el sueño perdido de la
Malinche enamorada de un Cortés, simbolizado en la bella durmiente del
Istaccíhualt y su celoso guardián, el Popocatepetl.
¡MI REVISTA!
Fecunda en trabajo internacional, en poesía de fraternidad, nosotros recoge' ^(M
mos el pensamiento que dedicas a México, para devolvéroslo hecho espíritu en
una canción morena olorosa a milpa y a ejido, exal-
^.•-,-.; tando la potencialidad única y la lucha infinita del
,,f^' pueblo de España. C .^B;ÍÍ^^
óe Wvé»''

Eduardo Luquín pertenece a la generación de escritores mexicanos de 1920.


A partir de esta fecha ha escrito y publicado varios libros, entre los que descuellan
por su xmexicanismo» y dimensiones humanas Triángulo, Tumulto y Agua do
Sombra.
Luquín es ampliamente conocido en su país i¡ cu otros de la América del
Sur. Desempeña en la actualidad el cargo de secretario de la Embajada de México,
intencionalmente alejado de toda actividad literaria para vivir el drama español
de estos momentos y dedicar sus energías al servicio de su país.
Luquín conoce a España y la ama; es un sincero amigo y admirador del
pueblo español; por ello, según confesión de él mismo, se siente satisfecho y
EDUARDO LUQUÍN orgulloso de que el Gobierno de México le haya designado para formar parte de la
representación diplomática del país hermano en España.
Primer secretario de la
Embajada de México
en España. T*>^xe>i^í>*;.*>t* -:-?>^vff->ÍL--?>*.-=C^«>*^-*>».- f >
AMIGOS DE ESPAÑA
lltlIllllllllllllllllllllllllllMIIIIMMIIIIMIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIMMIl Illllli

El ciudadano

Lázaro Cárdenas Por B. F E R N A N D E Z RUIZ

Se estaba gestando en la España republicana el arma po-


tente de su nuevo Ejército. Los milicianos agrupados en los pri-
meros momentos con la autodisciplina de su entusiasnio piensan
en la necesidad de constituir unidades regulares y brotan los pri-
meros batallones. Los entusiastas piensan en aumentar la com-
batividad de los nuevos batallones designándoles con nombres
que representan un ejemplo en la lucha que sostienen. Y asi
nacen los "Pasionaria", "Azaña", "Martínez Barrio", "Durruti",
"Anselmo Lorenzo", "Maciá", "Companys".
La representación de un batallón de choque que había es-
crito con la sangre de sus soldados páginas gloriosas quiere
rendir un homenaje al Presidente de México y escribe una carta al
estadista americano en la que le expresan su admiración y dan
cuenta de haber constituido esa unidad que llevará su nombre.
Lázaro Cárdenas va leyendo en el modesto despacho de su resi-
dencia la caria de los combatientes, y su emoción se refleja en
unas lágrimas que corren por sus mejillas. El gesto de los solda-
dos de lo República es para él de un gran valor emotivo. Guarda
la carta cerca de su corazón y sobre una cuartilla escribe:
"No sé cómo expresaros vuestra atención de designar ese
batallón con mi nombre. Sé lo que para vosotros quiere repre-
sentar este ofrecimiento. Pero el mayor homenaje que podéis ha-
cerme es substituir mi nombre por el de cualquiera de esos mi-
llares de héroes anónimos, hermanos vuestros que han caído c David A. Siqueiros, teniente coronel mexi-
esa tierra de España. Cualquiera de ellos vale más que el nombre- cano que ha traído los obsequios del g e .
de "Lázaro Cárdenas".
^i 'jf -^ nerol Cárdenas, acompañado del coronel
mexicano Juan B. Gómez, dos héroes de
El Presidente de México visita con frecuencia la Escuela
Mé.yico-España, donde están alojados los niños españoles aco- nuestra lucha.
gidos a la protección del país hermano. El general Cárdenas no
hace de estas visitas un motivo publicitario, sino que va a con- Nueva York para convencer a los amigos
vivir con los pequeños que han sido separados de los horrores aun indiferentes de la justicia de la causa
de la guerra. Los obsequia con chucherías, conversa separada- del pueblo español, conferencias de pro-
mente con ello3 y a veces los monta sobre sus hombros. Estas paganda, unos minutos de charla sobre cosas
atenciones le han valido algunos ataques de la Prensa fascista, de arte y otra vez al aeródromo para coger
qiie le acusa de que el Gobierno de México tiene más preferen- un puesto para México.
cias por los niños españoles que por los mexicanos. En la capital de los Estados, abrazos de
En lira de estas frecuentes visitas a la Escuela de Morelia, el amigos y compañeros, saludos familiares,
general Cárdenas se vio sorprendido por un niño que arrastrando interviús periodísticas; todo ello sazonado
una de sus piernecitas llegó hasta él para entregarle una carta. con la única preocupación de Siqueiros: la
El niño, con gran energía al mismo tiempo que le daba su es- guerra y la República. Al fin consigue rom-
i crito, le dijo:
—Quiero entregarle esta carta, pero para que se entere de
ella. No se la dov si no la lee en mi presencia, y, para no moles-
per los compromisos obligados del revolucio-
nario que llega de España y es recibido por
el Presidente de la República. Una conversa-
tarle, mejor es que se la lea yo mismo. ción interesantísima sobre la marcha de la
Y el much.nch'-' fué deletreando su cartita con gran dificultad. gueira, en la que el general Cárdenas va
Primero, letra por letra; después, leyendo de corrido cada línea. haciendo preguntas sobre lo más hetero-
El Presidente Cárdenas lo escuchaba atentamente entre la curio- géneo de la lucha: situación de los frentes,
sidad de los testigos de la sencilla escena. actividad de los líderes obreros, actuación
La carta no podía ser más ingenua. Fernandito Lancha—éste de los jefes militares, a los que conoce por
es el nombre del pequeño^—le decía al Presidente de México que sus nombres como si estuviera viviendo en
escribiese a un tío suyo que luchaba con el grado de capitán, el mismo terreno de la contienda. El Pre-
para dec'rle que se encontraba bien. sidente oye después con gran atención el
Fernandito Lancha, que ha vivido la tragedia de Madrid y relato de Siqueiros y, finalmente, le expresa
que ha visto morir por la metralla fascista a sus padres, y con- su seguridad en la victoria del pueblo.
serva como recuerdo del salvajismo una de sus piernas destro- El general y el teniente coronel comen
zada, quería que su tío supiese el agradecimiento que le debía al juntos para seguir hablando de nuestra gue-
pueblo de México. rra y pasean después por los jardines de la
El general Cáidenas leyó personalmente la carta y se la residencia presidencial—entre los niños aco-
guardó en uno ¡le sus bolsillos, besando finalmente al niño gidos a la protección del Jefe de Estado,
español. que entonan canciones de paz y de solida-
Pocos días después un auto oficial llegaba a la Escuela de ridad—y hablan por última vez sobre Es-
Morelia y recogía a Fernandito para trasladarlo a la residencia paña. El general se despide de Siqueiros y
del Presidente de la República. Desde entonces es un hijo más le entrega su pistola, la pistola que fué
del general Cárdenas, llusiies médicos cuidan de su pierna, qu.- compañera inseparable en los días de la re-
muy pronto tendrá la agilidad precisa. Fernandito Lancha ha co- volución y que es uno de sus afectos más
menzado a vivir en el bello paraje de los Pinos, residencia del intensos.
Presidente Cárdenas, un bonito cuento de hadas. Un cuento de —Es el mejor regalo que puedo hacerle
hadas, ciivo personaje principal es un hombre de carne y hueso: —le dice—. Ha sido mi compañera en los
l.ávaro Cárdenas. combates, ha vivido a mi lado en estos días
* * * de gobernante. Se la entrego como si se la
David A. Siqueiros, el artista mexicano que manda una bri- entregase al propio pueblo de España.
gada en los frentes del Sur, ha estado en México. Un viaje que David Siqueiros ya está en su puesto de
refleja su dinamismo; un avión hasta el puerto, unos días de mando. Sus soldados miran con curiosidad
travesía en un moderno transatlántico, un descanso inquieto en el carcax donde su jefe lleva la pistola y
cuando entran en combate se entusiasman
ante la voz de mando deL teniente coronel
mexicano, porque saben que en aquellos
momentos les está* arengando el propio
<¿¿SS5SSS5SSSSSSS£ESSS5SS5ESESSSSSS5SSESS5SSSSSESSSSSSS. Presidente de México.
¡El ciudadano Lázaro Cárdenas!
Barcelona, diciembre de 1937.
ntMiiintiiniitinuiiniiMMiiuiitMHiniiiitiHiiiniM-MiMiiniuiriMiiiuniMitiiiiUMnr:iitnriiiininninii)noiMUttiiiniMiuiiiiHiiiiiifiiiiiuiniiiiMttirrMnMniiM^

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:'iinifiiiiiiiiii:tiitniiiiininiiiitiiiiiiiniii'= •fíttíóiaó mexicano5 en ^ipaña


iiiMiiiiiimiiMiiiiiirituiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiiiiiiiiiii

S\\ñ^
El notable pintor y tenor mexicano Ángel Soto llevo ya entre nosotros

algunos años. Su labor de lucha por el triunfo artístico en sus dos activi-

dades ha demostrado su entusiasmo y su capacidad, pues tonto en el arte

musical como en la pintura puede decirse que ha triunfado cumplidamente.

Hay otro aspecto que entre nosotros es motivo también de admira-

ción y cariño para Ángel Soto, y es su espíritu revolucionario y su amor a

nuestra causa, a la que ayuda constantemente con el producto de sus con-

ciertos y de sus exposiciones, que dedica a hospitales y otros fines

de guerra.

MI REVISTA se complace en este número de homenaje a México en

hacer resaltar la altruista actitud de este mexicano amigo de España.

E. RUBIO

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Tañera temerosa, a ^ ^ ' yicana, P " « ^ ' ° ^ ' l a n c h a invencible
r/1 a< ^ G u a r d i a N - " ° " t b , o v ^ d o s a una «" f ^'^^^e se lo q«iten
se deciden por el P " ¿ ^ ° ; Contra el P^^Jí^ ^.'^Ites ni mañana!

7 g,^e todos lo sepan y n


^ l i o de 1936.

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GENERALITAT DE CATALUNYA
PRESIDENCIA

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KL PRESIDENTE

CONGRESO OE LOS DIPUI-ADOS

UNr

Excmo.Sr. D.Diego Mar-


tínez B a r r i o , ex presi-
dente de la República
española y presidente
del Congreso de los Di-
putados, verdadero
prestigio d e lo Repú-
blica.

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El ministro de C o m u -
nicaciones, Transpor-
tes y O b r a s públicas,
Giner de los Ríos,
con el ilustre d e f e n -
sor de M a d r i d gene-
ral M i o j a .
Como complemento de las Industrias de Guerra en la Comisión
de la Generalidad funciona la sección Industrias Químicas.
Desde el primer momento, a poco de iniciarse la sublevación fas-
cista, a! lado de Eugenio Vallejo surgió el compañero Manuel Martín
Pallares, este obrero cuya capacidad, entusiasmo y esfuerzo no han
sido superados por nadie; con Vallejo y Martín puede decirse se edificó
la Industria de Guerra de los primeros momentos que hoy se ve con-
vertida en la Comisión que preside el consejero Tarradellas. Comisión
que es el orgullo de Cataluña y de España y la admiración de los
extranjeros.
Porque la labor de Martin Pallares no se redujo a una simple
manipulación de productos químicos, sino que, secundado por Bien-
venido Martínez, la fabricación de la pólvora llegó a la perfección, y
con Enrique Cota, este admirable técnico, se consigue la substitución
de explosivos fabricando productos insospechados en España.
La producción gradual y técnica supera a todo lo esperado, y
su perfeccionamiento, cada día más notable, coloca a Cataluña en un
estado de capacidad para la fabricación de explosivos que no pudo
suponerse antes de la guerra. Y es el constante ejemplo de la capacidad
y entusiasmo del obrero catalán apto para todo lo que signifique lucha
por su emancipación social, porque es ahora este entusiasmo en su pro-
ducción lucha liberadora ai fin, en la lucha contra el fascismo.
La producción conseguida de dimitronestalina para substituir a la
dinamita contra canteras y tortificaciones; la organización de labora-
torios para producir fulminante de mercurio, poderosa materia impres-
cindible para carga de proyectiles de fusil, granadas, morteros, etc.
Martín se exalta entusiasmado y nos cuenta con elogio la colaboración
tan eficaz que ie han prestado los técnicos y volvemos a oír los nom-
bres de Mariano Moreno, Bienvenido Martínez y Enrique Cota, espe-
cializados en esta materia y cuya aportación es importantísima, y a
los que se debe la organización de las fábricas de cargamento de ar-
tificios de espoleta, sebo paia artillería, espoletas de morteros, sebo
para granadas de mano, minas,etc. Nos habla también Martín, de Petit
y Balcells, los notables químicos que han conseguido producir el bromo
y mono-cloro naftelino, sodio metálico y otros productos, todo debido
ai esfuerzo de los obreros, al incansable deseo del triunfo netamente
catalán, netamente español, lo que hace cada día más lógica e inevi-
table nuestra victoria, pues la lucha que bravamente empieza en las
trincheras termina en la fábrica, en el laboratorio, en la biblioteca, y
es el soldado y el estudioso obrero a una en la vanguardia y en la
retaguardia de esta España invencible donde cada día se acaba de
cincelar, la victoria por las manos imponderables del obrero español,
del pueblo español invencible.

E. R. F.
OMI/I
Eugenio Vallejo, iniciador en los primeros días de lo
que es hou Comisión de industrias de Guerra de la
Generalidad de Cataluña, y a cuyo esfuerzo, capaci-
dad y entusiasmo se debe la fundación y desarrollo
de muchas fábricas y organización de las demás-

i'iltlilill)liiilitUilllliriliriiiilliit;iiil.iilltlittilliiiil(!iiiiiiii[llllliiiiltilltliillliililiiiililiiiii!iuiuiiiiiu iiniii iiiiiiuiiiiniitiiitiitiiliiiiiiriiin iiniiiiiitiiiiiiimiiiiiriiiiiiiiiiniiiiiiiiii iiiiiNiitiiiiii

eOVERN DE LA 6ENERALITAT
DE CATALUNYA

COMISSIÓ DINOÜSTRIES DE GUERRA


SIOERO-METAL LÚRQIQUES

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iQxx

Manuel Martín Pa-


llares, organizador y
verdadero impulsor
de las Industrias Quí-
micas en la Comi-
sión de Industrias de
Guerra.

José T a r r a d e l l a s ,
presidente de la Co-
misión de Industrias
de Guerra de la Ge-
neralidad de Cata
luna.

1¡\jír¡¡^

Martin Izquierdo,
delegado de la
Comisión.

GENERALIDAD DE CATALUÑA
"^í^

Tí ^.i Uno de lot pilotoi de


la <Glorlo>a> al lallr a
bombordear la> po>l-
cionei encmigat.

El Presidente Companys con Eugenio Vallejo y un director


técnico de una fábrica,

Vagón blindado
Frente al prusianismo, el soldado del pue-
b l o ; soldado coronel, soldado capitán,
soldado soldado ¿qué más da? • Sacha
y su compañero han recogido estos apun-
tes en el cuartel. Son líneas inquietas como
sus autores, para en esta página de «Sol-
dados del pueblo», de «Mi revista», dar la
sensación del Ejército que nace al calor de
a democracia auténtica y austera. Solda-
dos antimilitaristas, soldados del pueblo.
IIIIIIIIIIIIIIIIII1II111IIIIIIII MiiiiHiiiDiiiiiixiiniiiiiiiiiitiiriiiriiMiKiii iliiniiiiinii(ii(ii:iiii!Miiiiiiiiiii •liiii-ni?iiiiiiiliiiMiiiiniiiiiiiiillliil) Nlli

''i
IMIMKIMIMUIIIMlllllllllllDIIHlItlIltlItlIlllllllnllllllllllllll'

De nuestra redactora
MQpottajeó Teresa SANTIAGO
O P P E N H E I MER

da R. K. O. Al salir del restaurante le pe-


dimos su autógrafo, el cual muy ama-
blemente nos dio, y además consegui-
mos que posara para tomarle un
snapshot.
En contraste con üinger Rogers, la
"Bueno, ¿y cómo son las artistas excéntrica Katharine Hepburn, a la
en persona? ¿Son tan bonitas y su- cual vimos en el mismo café, nos cho-
gestivas como aparecen en la panta- có por su arrogancia.
lla?" N o p u d o , como Ginger Rogers,
Ésta es una de las muchas pregun- sentarse a almorzar en el comedor
tas que nos hacemos cuando llega- regular, sino que pidió un salón pri-
mos a Hollywood, y, naturalmente, vado y en compañía de dos body-
nuestro objeto principal al visitar la guards y otros satélites se retiró al
Meca del cine parlante es ver a nues- comedor especial. Lucia la Hepburn
tras estrellas favoritas de cerca. uno de los trajes que saca en su
Los que afortunadamente tenemos última película Porirait of a Rebel y
la oportunidad de visitar los estudios llevaba en la cara el make itp especial
podemos observarlas, no solamente que usan las artistas cuando están tra-
cuando están haciendo películas, sino bajando ante la cámara: una crema
también en sus momentos libres, de-
trás de las cámaras. Teresa Santiago Oppenheimer, corres-
A muchas de ellas tuvimos la gran- ponsal de €Mi revista> en Norteamérica.
dísima suerte de verlas y conocerlas
personalmente en los sets, pero a un
gran número en distintos restaurantes,
como el famoso "Cocoanut Qrove",
"Trocadero", "Brown Derby", "Ven-
dóme", "Lucey's" y "The Tropics".
Aparte de estos sitios, en los teatros,
tiendas y hasta en la calle.
Frente a los estudios R. K. Ü. hav
un café italiano, de arquitectura me-
dieval, "Lucey's", muy popular entre
la gente de cine.
Equipadas de nuestros libros de
autógrafos y cámaras fotográficas en-
tramos en el pintoresco restaurante,
en la completa seguridad de que allí
veríamos a alguna artista. Y, efecti-
vamente, no hacía quince minutos que
habíamos entrado, cuando vimos apa-
recer nada menos que a la popular
estrella de la R. K. ü., Ginger Ko-
gers. Ya se podrán imaginar nuestros
lectores lo excitadas que estábamos
de ver tan de cerca a una de nues-
tras artistas favoritas.
En persona, Qinger Rogers es muy
atractiva, aunque no tan bonita co-
mo aparece en la pantalla. Sin em-
bargo, es simpatiquísima y muy llana;
para todos tiene una sonrisa en los
labios. Iba vestida en pijama—slacks—
color tan y blusa de crepé del mismo
color. La acompañaba un joven, in-
dudablemente algún oficial de la

iiiiitiiiuiiti iiitiiiiiiiii((iHtitiiitiittiitii- iMiillliiiliiiiiiiil-iiKiiiniiiiiiiiniiiiiHiiiiiiiiKiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiritiiiiiifiitiillii- "'" tuniiuiKH.-.lmilt rtii.niiiHUMiiKiiiiiiun IHiliiilttIIMIIIIIli.illillItlIltlItlIllllM'K"'

iunii!iiiiiiiiiiiii(titiiiiiitiiuiiiitiiiiiiiitiiiiiiiiiii)lliltlliiiiiiiiiHiiini<iuiiiiiiinl(r<iiilliuHiiiHiii:iiiiiiiiiitiniii'iniiiiii 'MininiiiiniiiniiiiiiiiiiiniMiKiiiDiiM
"" MiiiiiliiiM iiiitlltlMilllllini) tilii iiiiiuiitilililii KilltlllllDminii lililí iilllllitillliiri lili iiiiiiiiiiiiiiii iiiiiiiiiiii iiiiMii iiiliriiiiniiiMi
IIIIMIIIIIMIIIIIIIIIIJIIIIIIIIIIlItlII

""" liiiiiiiiiii MI II iiiiin , iiiimiiiiiiit ,1 ,11 iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii I I ,11, „,„ ,„ |„|,. ,111,111111111,, lililí,, I „,|||||„,.||.|,

Clark Gable. Nos sorprendió favorablemen- tando la bandera americana. Aquella noche
te, pues es más guapo de lo que aparece en el "Cocoanut Grove" era "International
en el cine y se ve mucho más joven. Night" y en la representación teatral figu-
En los estudios Fox conocimos personal- raban escenas de distintas naciones.
mente al prota,gonista de la inolvidable co- En la oficina del dentista Wílliam D. Wa-
media musical Rio Rila: John Boles. Es llace, de Les Ángeles, conocimos al héroe
¡impatiquísimo y muy gua|io. Nos contó y protagonista de la película El capitán
de sus experiencias en el cine (entonces es- íílood. Erroi Ft\'nn, el cual ha hecho tanto
taba filmando la producción Un mensaje furor en el cine. El Sr. FIynn es muy alto,
a Garda) y las largas horas de trabajo que mide unos ñ'3", y es guapísimo. Se mostró
tenia. Nos contó de sus dos hijas (la mayor muy amable con nosotras e interesado en
tiene unos dieciséis años y la menor nueve), saber de dónde éramos. Al decirle que
de sus deseos de que algún dia se casen de Puerto Rico nos preguntó cuánto tiempo
y sean felices. se tardaba en vapor y aeroplano para
—No, no deseo que mis hijas trabajen en llegar a la pintoresca isla. No nos extra-
la pantalla—nos dijo—. Mi mayor placer ñaría que algún dia Errol Flynn se pre-
será que se casen y tengan hijos. sentara por allá, pues el popular artista
Sentada frente a nosotras durante el con- de la Warner Bros es muy aficionado a
cierto del famoso violinista Fritz Kreisler viajar y particularmente por tierras pin-
estaba la popular y bonita Jeanette MacDo- torescas como las de nuestra bella islita.
nald en compañía de su novio (actualmente A la exótica Dolores del Río tuvimos la
su esposo) Gene Raymond. La simpática oportunidad de verla durante una exhibi-
Jeanette muy amablemente firmó nuestro ción de tenis en el Auditorio del "Hotel
autógrafo, igualmente üene Raymond. Ambassador". Nos sorprendió muy favora-
Saliendo del restaurante "Brown Derby" blemente, pues en persona Dolores del Río
vimos a la bella artista !,oretta Young. Lu- es mucho más bonita de lo que aparece en
cia un bonito vestido sjiorl color azul y el cine. Aunque en la pantalla se ve trigueña,
sombrero y bolso del mismo color. La vista de cerca notamos que no lo es. Lucia
acompañaba el director Eddie Sutherland, un bonito enscmble negro y rojo.
(|uien se dice es el novio de Loretta. Otro También en el Auditorio vimos a Carole
día la observaliios en uno de los seis de la Lombard, popular estrella de la Paramount.
Fox. Estaba impresionando una escena para En contraste con Dolores del Rio, Carole
su última pcli ;;ula, l.ove is News. Lombard no es tan bonita. Aquella noche no
De todas las estrellas que hemos visto usaba make up y, naturalmente, se veía muy
la que más nos ha llamado la atenciiin por pálida. Además, es muy delgada y de aspec-
su belleza es sin duda alguna la dulce y to enfermizo. En la cara tenia varias cica-
espiritual Anita l.ouise. Nos encontramos trices a consecuencia de un accidente auto-
con ella en la apertura de la casa de cos- movilístico; sin embargo, gracias al maqui-
méticos de Max Factor, en Hollywood, y
más tarde durante el concierto del violinis- G/,
ta Kreisler. Llevaba un elegante vestido es- "Ser;?,
°9»'-s o/
tilo princesa, de terciopelo verde, y un som-
Dolores d e l Rio en un caprichoso '•esí,0(/n
brero del mismo color. La escoltaba el joven
t r o j e de boíio. oníe
Thomas Beck, actor del Twentieth-Centuiy
muy espesa color de liarro Invidentemente, Fox.
aquel dia estaba tr;;haiaiido en los estudios. En el foyer del Auditorio Filarmónico de
Al gracioso Hermán Bing, cómico cpie Los Angeles tuvimos la oportunidad de ver
arrastra las erres, lo vimos al salir del res- a Claudette Colbert. Claudette
taurante de los estudios Paramount. Cuando es pelirroja, pero bonita. Aque-
le ^ledinios su autógrafo nos |ireguntó de lla noche iba vestida de rojo,
di'inde éramos y al decirle que de Puerto color que le sentaba muy bien.
Pico exclamó: Durante una c(nnida-baile en
—¡Ali, de Porrrrto RRRRico! ¿Hablan el pintoresco salón del "Hotel
ustedes el italiann? IIDS preguntó, y al de- Ambassador: Cocoanut Grove"
liilc que entendi.iiiiiis algo, empezó a ¡lar- nos encontramos con "El Chi-
¡(inios en el idioma de Mussolini...: Mí ¡na- ciielo", Jackie Coogan. hecho to-
ce la Italia. /•.' iiiollo Iwlla. do un hombre y acompañando
Según nos inlurnin el Sr. Bini;, él estu- a su novia, Betly Grable, es-
\o estudiando el canto en Italia y Irabaió trellita de la Paramount. Alli
en !a Ópera antes de entrar en el cine. vimos también a la insigne ar-
También \'inios alli al simpático gal.in joven tista dr.'imática Bette Davis.
Tred Mac Murray. Es tan miapo en per- .^unque no bonita, parecía muy
sona como aparece en la pantalla. simpática y atractiva. Apenas
Durante una funcii'in teatral a beneíicio tenia make np; nada de colore-
de los niños pobres de Los Aniveles tuvi- te y poca pintura a los labios.
mos la oporlinijdad de \vv a iniestro ídolo I levaba un vestido represen-

iiiil t liiininii iiiiiiiiiiniiiii iiiiiiiriiiiiitiHiiTiiitlltlitiiitin'iiiiiiiiliiininiiil iiiiiiiiiiitilillllliillllliilililllilllilliiiniininiililillillllllllllllllllimiililillllllltllilitiiiiiiii

"""lili, tlllllllllMllllllllllItlIltnil I> 1 MIIIIMMII Mil MIIIIIMIIIUIIMMIIIIMlllllMllllllllllllhlllMlllllItlIllllllllMiMItlI I MIIMIIIiniItlIMIUMMIIIIIMIMtlIllllMIIIIII ""MtlIllHHIlNriHt

k
llajs especial que usan las artistas cuando
están trabajando ante la cámara, dichas ci-
catrices son imperceptibles.
Hace precisamente un año, antes del fa-
moso escándalo del divorcio de Mary Astor,
conocimos a la popular estrella en casa de
su ex esposo el Dr. Franklyn Thorpe. Cuan-
do vemos a Mary Astor en alguna película
nos atrae su belleza y dulzura, y nuestra
imaginación nos hace creer que en realidad
es asi, pero cuando tenemos la oportunidad
de verla de cerca y conocerla personalmente,
nos llevamos una gran desilusión, pues Ma-
ry Astor no es bonita: es una pelirroja
común y pecosa.
A la famosa rubia platino, la recién fa-
llecida Jean Harlow, la vimos en la apertura
del nuevo edificio de cosméticos de Max
Factor, en Hollvwood. Entonces tenia los

Chalet d o n d e reside en
H o l l y w o o d la actriz
Dolores del Río.

Dormitorio d e l a estrella
mexicana Dolores del Río.

Un «hall» de la casa
de Dolores del Río.

cabellos teñidos de color hrownette; así es


que su apariencia no era tan llamativa y
atractiva como en las películas.
Siempre nos quedamos con el deseo de
ver a üreta Garbo, pero la artista sueca es
"La mujer invisible de Hollywood". Aparen-
temente nadie la ve, pues ella no sale a
ningún sitio, y si a veces lo hace se vale de
tantos disfraces que logra pasar entre la
gente de incógnito.
Según pudimos observar al ver a tantas
artistas la mayoría de ellas no son tan bo-
nitas y sugestivas en persona como apa-
recen en la pantalla; pero la mayor parte
de los hombres—los del sexo feo (?)—vis-
tos de cerca son hasta más guapos de lo
que aparecen en el cinematógrafo.

Los Ángeles, California.


LOS DE CASA HERNÁNDEZ SARABIA
Vino la República y al lado del ministro de la Gutrrá—hoy pres-
tigioso Presidente de la República española-^se Colocó un tetiienté co*
ronel de artillería, que aportó todo lo que pudo para hacer com-
prender al Ejército la cordialidad, la comprensión y la generosidad de
la República.
Su modestia apenas permitió que sonara su nombré, Hernández
Sarabia. Cuando las derechas cerriles e intransigentes asaltaron el
Poder con Lerroux y Gil Robles, aquel teniente coronel de artillería
quedó desplazado y con la nueva combinación de mandos sé hizo
posible el alzamiento fascista.
En los momentos de reorganización de nuestro Ejército vuelve a
aparecer el famoso teniente coronel, amigo de Azaña y amigo y defen-
sor de la República, y de la obscuridad de su modestia surge ahora
nada menos que para tomar Teruel para la República. ¡Teruel! El
sueño dorado de los facciosos; lo que nunca se iban a dejar arrebatar
por los rojos; la base de todas sus operaciones para aislar Cataluña
de España; y aun hoy, a pesar de ondear la gloriosa bandera tricolor
de la República en sus muros y edificios, con pertinaz decrepitez el
iluso Queipo de Llano asegura por la radio que Teruel no se ha
tomado...
Ante el general Hernández Sarabia hoy es obligada la gratitud
y la pleitesía de todos los republicanos.
Y que aprendan de paso a servir a España los generalitos de
todas !así fechas, los de patriotismo de cajetilla y escapulario, los de
El ilustre escritor Enrique
los pronunciamientos incalificables y los que perturbaron en todas
!as fechas la tranquilidad y progreso de nuestra pobre patria.
Diez - C a ñ e d o , ex e m b a j a -
d o r de España en la A r g e n -
t i n a , que hoy e m p i e z a su
c o l a b o r a c i ó n en <Mi revista» C A M B I O DE FRENTE
EN EUROPA
Siguiendo el movimiento político internacionaf, después de la ofen-
siva imperiosa del Ejército Popular de la España leal, nótase un silen-
cio que indica claramente que la posición del fas<:ismo pierde terreno.
Van convenciéndosie, los que creían que España era un montón in-
coherente y caótico, de que es hoy un baluarte inexpugnable para
el fascismo. España juega el papel que le corresponde como nación
europea. Sabe defenderse y se defenderá de las hordas invasoras
hasta desterrarlas del territorio. Y es más; irá demostrando a la faz
del mundo que es digna de su historia.
Es España por esencia y excelencia un país pacífico que siempre
ha aborrecido la guerra, pero nunca ha olvidado ló que representa en
si la cultura. Y al verse precisada a tomar las armas para defenderse
contra la agresión de los traidores a la patria y de los que creyeron
poder servirse de esos elementos para crear en el corazón de nuestra
dolorida España un foco de infección facciosa y. fascista, lo ha hecho
con el elevado propósito de prestigiar la raza y la cultura. Las armas
del Ejército Popular son el exponente brillante de lo que ha sido en
el progreso España. Y los valientes soldados de este Ejército saben
que las armas en sus manos hacen blanco en el corazón de la reacción
para facilitar el acceso de la humanidad toda al bienestar que la ley
natural le concede.
Siempre fué España un país desconocido en el aspecto cultural y
social; lo fué precisamente por el dominio que ejercían los llamados
representantes de la Iglesia y ministros de Dios y los generalitos trai-
dores. Estos elementos, como enemigos dei progreso y de la cultura,
eran los que mediatizaban España, presentándola al mundo como na-
ción carente de cultura y de civismo. Hoy, para gloria de los obreros
españoles, ya no es así. En las canciUerias europeas han visto clara-
mente que España era diferente de lo que se decía. Si bien los diplo-
máticos trabajaban en la sombra de los ncápachos oficiales para yugular
el espíritu creador de las masas, no por eso dejan de reconocer
que en Espara surge algo nuevo, algo que transformará en un porve-
nir próximo I.T estructuración política y económicosocial del mundo.
V la transformará precisamente por lo que fa historia comenta de
la raza española.
La tenacidad de nuestro pueblo, lo mismo que en otros tiempos,
llevará a todos los ámbitos del mundo sus nuevas realizaciones, y
este mundo las aceptará porque son obra propia de todos los produc-
tores. Una sociedad basada en éste sentido forzosamente tiene que
imponerse, porque tras ella sigue la estela del progreso al lado de!
cual están todos los hombres de ciencia. Estos son el nervio vital de
la vida, y no lo son ni lo serán jamás aquellos que pretenden salvat
la evolución apoyados en la fuerza de las armas.
De ía victoria sobre el fascismo surgirá una nueva civilización, cuya
madre será la España ¡mártir de hoy.
Celebramos de todo corazón que el empuje vigoroso dfe nuestro*
valientes soldados para liberar a España de elementos fascistas haya
producido un cambio general en la política internacional; lo que prueba
hasta la saciedad que España anda por caminos firmes y que al lado
de su obra está la conciencia universal de todos los hombres que
piensan y sienten como seres humanos.
mm^z
^ * • - t

Una producción trepidante, optimis-


ta, deliciosa. El humorismo america-
no en su forma más dinámica y más
pura, llevado a la pantalla con un
insuperable e irresistible encanto.

Cuando la tierra se empieza a hacer


inhabitable, ¿no sería una maravilla
vivir en la luna? Este film humo-
rístico y delicioso nos muestra las
infinitas ventajas de esta solución.
•V <^ ,- \ q í f

Viven e n ' l a luna los recién


casados, los distraídos, los
chiflados... y los protago-
nistas de esta película que
nos relata la lucha entre
dos celebridades — hombre
y mujer —, entre los más
curiosos incidentes y las más
g r a c i o s a s complicaciones.

Paramount con
cQtne'día j Chañes
lina aelictosa ^^'-^rtenry í^^^^^' Selter

dfe^vér;
FRED ASTAIRE y GINGER ROGERS
Dos vidas paralelas que se han separado... para volver a unirse
llllllrlMIIMIIIIIIIIIII<lllllllllll>llllll)MI1lltll1llllllllllllltlllll>IIIM)lllll iiiMiitiiiiiiiiiMiiiitiririKiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiMiiriMiiriiiiiiiiii

Como si fuera su abrazo una manifestn- sonrisas, su estética, su dibujo de pareja bes en Slage Door: se convierte en una ac-
eióii de amor lirieo-musieal, se unieron perfecta que sabe imponerse, que Ic' consi- triz, que entusiasma al público. Se lanza la
l-'red Astaire y Ginger Rogers enlazadns gue, sin vacilaciones, tan sólo con la reali- estrella ex bailarina por las nuevas rutas del
por la ardiente música de "La Carioca", acpie- dad y la expresión de su gesto. arte y triunfa.
lla danza candente y tropical c|ue surgió De "El Piccolino" les vemos lanzarse a la Ya Ginger Rogers no necesita el comple-
como una sorpresa de entre los rutilantes conquista de un océano de quimeras en mento amoroso-coreográfico de Fred Astai-
ritmos de Volando hacia Rio Janeiro. Se Sigamos la flota; Fred Astaire, el marinen) re. Ya es la estrella única, la estrella sola
.abrazaron en "1.a Carioca" y siguieron siem- arriesgado; (jinger Ro.gers, la novia de la que se basta para protagonizar un film de
pre unítios, siempre en ágiles c.-ilir¡(ilas, en marina; y vuelven a bailar, sobre la cubierta una manera perfecta: y Fred .Astaire, des-
sonrisas niaravilli sas, en escenas admir.'i- ciel crucero, ella con sus jersey azul (esta ve.', pués del divorcio artístico toma en A dam-
bles; pasaron de esa danza apasionada a la en lugar de su traje de gasas o plumas), con sel in distress (Una doncella en peligro) el
ultramoderna sensación de "E\ Continental", su ,s'ii'('/t'r en el escote orlado de banderitas peso por sí solo de una protagonización,
tirándose galantemente el pañeelo a los pies, de todos los países. Siguen bailando. Sigue llevándose Joan Fontaine, la rubia nueva
y, recogiéndolo entre pasos armoniosos, caii- su amor danzante, produciendo nuevas ga- de Hollywood, los honores estelares de opo-
tíiron y bailaron el "Night aiul ilay" (No- lanterías de la imagen, y No quiero bailar nente.
che y día), esa delicosa melodía de Colé contigo nos devuelve a ¡a pareja más apa- Pero los dos artistas no pueden permane-
Poler (¡ue lia marcado el primer paso en el sionada que nunca, entre un desbordamiento cer mucho tiempo separados. El imán hecho
bine lento, oue lia llegado a la cúspide del tic tules y tic escenografía deslumbradora. de valores prodigiosos que poseen, les une de
ciasicisniíi fi!\olo del jazz y del cinema. Más belleza, más ritmo, más sugestión de nuevo, y Chonge paríners (Cambio de opo-
Y de ai|iicll,i L'alanteria hecha de danzas esos dos arlist.as que parecían no tener que nentes) sirve p,ua (,|ue Marck Sandrich, el
pasaron a los 'alses, :\ los bailes rápidos de separarse jamás; Shall wc dance culmina en director que les ha dirigido siempre, les
h'ohcrla. a sus incit.iciones coreográficas, a l;i vida paralela de Fred Astaire y Ginger vuelva a tomar bajo su autoridad. FIsra cinta
sus nuiínenliis festivos y amenos, siempre Rogers, como el definitivo triunfo de su ca- —todavía en estudio- -es la reconciliación
b;iil;indo, siempre bailando..,, como si su I rcra artística. profesional de dos eminencias del arte cuyc
y'n\;\ i'.aralela liiese un ritmo constante. De Y a partir de este momento se separan historial tiene la Radio, en el seno de su
ko'wrto vobieroii de nuevo a los ojos del los (ios luminares; se lanza Ginger Rogers, gloriosa marca. Radio Films, la marca
público con la fantasía ''eneciana "V.\ Ficco- la hechicera rubia, la chispeante actriz, a la del éxito, es la poseedora de estas cin-
lino", y entre flmes, entre un deslumbramien- conquista de laureles nuevos, de laureles sin tas excepcionalisinias y quien lleva la orien-
to '.'spect.",ciilar como pucos sr han visto en danza, y se revela como una buena estrella tación de esas dos vidas paralelas que se
la pantalla, repitieron su c)il¡sea galante y de comedia con George Brent en UM persona, llaman Fred Astaire y Ginger Rogers, los
anu'na, sn etcni.'i (lanza amorusa, sus tren- y cosecha triunfos con Katharine Hepburn, colosos de la danza y del film.
zados ccni liis pies, sus promesas con las Adolphe Menjon, Gail Patrick y Ralph For- C. CÁMARA
Quién y cómo es Luchy Soto,
la n u e v a "estrella" española
Aquella chiquita rubia que habíamos visto en algunos films es-
pañoles interpretiñdo segundos papeles acaba de recibir el espal-
darazo profesional, adquiriendo categoría de estrella al interpretar
la película de Roptence En busca de una canción.
El talento de Luchy Soto se distinguió en el film de Cifesa
Rumbo al Cairo, en el cual jugaba el rol de amiga de la estrella.
Más tarde, en otras películas españolas e interpretando papeles
de segundo plano, fué acusándose la personalidad de Luchy.
Luchy Soto, con su distinción y su belleza, establece un nuevo
tipo de estrella en el cinema español. Ciertamente, no es el tipo
standard de la estrella americana, ni tiene la fisonomía clásica de
las artistas de la pantalla española. El tipo de Luchy Soto señala Luchy Sofo, la última revelación c^fc/ar
el término medie entre el americano y el español. Tiene la ductilidad de Ja pantalla española.
que les falta a muchas de nuestras artistas y la feminidad sin
excentricism.cs de que carece el modelo más corriente de star yanqui.
Es el tipo de ingenua que tantas veces ha intentado encontrar
nuestra cinematografía; su temperamento estudioso la ha traído • ^ ^

ahora al primer plano de un film, demostrando desde él cualidades


estimables y notables intuiciones.
El personaje que encarna en el film de Roptence que nos pre-
senta CifesH, En busca de una canción, tiene la variedad que pone
a prueba la intuición de una artista. Las frecuentes transiciones
que exige el papel obligan a Luchy a que nos ofrezca en este
primer film que interpreta con categoría de estrella su variada fiso-
nomía artística, presentándosenos como cantante, actriz dramática
y cómica, y especialmente como la más singular oponente que ha
tenido el galán Ricardo Núñez en sus reiteradas interpretaciones
de películas color de rosa.
Cifesa ha escrito en su larga lista de estrellas el nombre de
Luchy Soto con letras de oro. Corresponde al público refrendar su
categoría, viéndola en el film En busca de una canción.

RADIO GRAMOLAS DISCOS


CESAR Llnii graciosa caracíiTi/at ion Je Luchy Soío

P.° Pi y M a r g a l l , 4 VICENTE BARCELONA


y Valeriano liui/, l'urís en el film
- On busca de una canción.»
^irevj^

Nuestra
Natacha
Cima del
film español;
profunda en
c o n t e n ¡do
social y am-
plísima en
El pensamiento de
aliento
Alejandro Casona esto
fielmente reproducido humano
en esta película de C¡-
fesa, honra de la cine-
iiatografía patria

>''-#5^-
José Baviera, uno de los
intérpretes d e esto película. iiuminado por las candilejas arrancadas a la vida por el
prodigio de la poesía. La figura representativa de nuestro
El cinema español en manos de
los trabajadores acusa una supe- teatro actual ha sido y sigue siéndolo D. Jacinto Bena-
ración que ha sorprendido incluso vente. . Calderón, Lope, Tirso, Zorrilla, Echegaray en unas
a los más severos críticos de la épocas, y Benavente en la nuestra, pese a sus detractores,
Prensa especializada internacio- que indudablemente los tiene, y muchos.
nal. En efecto, centenares de films El teatro de Benavente obró el milagro de airear nues-
cortos, reportajes de guerra, do-
cumentales y culturales han alcan- tra escena, de abrirle a los vientos de la nueva Europa,
zado un éxito merecido en todos de renovarle para que no muriese encerrado en los muros
los países en que han sido proyec- de un españolismo mal comprendido. Benavente se asomó
tados. 1.a técnica cinematográfica a todas las preocupaciones nacionales, bebió en las fuentes
no tiene secretos para el obrero de nuestro presente, fustigó nuestros vicios, hizo resaltar
español y los films que salen de
raiestras virtudes y, sobre todo, lo hizo con gracejo, con
nuestros estudios están de sonido,
fotografía y montaje, como cual- picardía, con socarronería a veces, esa socarronería tan
quier otro de la famosa Meca del española y tan llena de agudezas que hay que buscarla en
cine californiano. lo más puro de nuestra casa, en lo más esencial de nuestro
La necesidad imperiosa de crear pueblo. Por eso Benavente llegó a tanto y por eso en Be- ,
una industria potente, capaz de
abastecer nuestro mercado inter-
nacional—15.000 salas de proyec-
ción y 150.000.000 de habitantes
de habla hispana—, nos hace se-
leccionar cuidadosamente las obras
que han de ser llevadas a la pan-
talla. Actualmente se está terminando el ro-
daje de ¡No quiero, no quiero!, una de las
comedias más dinámicas del glorioso autor
D. Jacinto Benavente. La elección de esta
obra la consideramos un verdadero acierto.
Todas las épocas de nuestro teatro han
tenido una figura representativa, un nombre
en torno al cual, por lo que de genial hubo
en él, han girado con luz propia, a veces, y
otras, por desgracia, con luz reflejada, las
estrellas menores, los planetoides de este
sistema solar que constituyen las pasiones,
los pensamientos y las reacciones psicológi-
cas de la humanidad que vive en el marco
m.
^tñem

V a r i a s escenas de
a m b i e n t e frivolo y
señorial de la i n -
c o m p a r a b l e come-
dia de Benavente
«¡No quiero, no
quiero! >

navente los espa-


ñoles lo admiti-
mos t o d o ; lo
bueno y lo malo.
La comedia que
S. 1. E. Films lle-
va a la pantalla
no es la mejor,
pero fs una de
las H'ás caracte-
rísticas del t^ran
comedi r') g r a f o.
I£n esta comedia
se asoma el ge-
nio de Benavente
a un mundo lleno
de prejuicios y de aiiejas preocupaciones, fustigando sus hispanoamericano, es el protagonista que con la bellísima
modof. y el proceso de sus proceilimientos con las claras Enriqueta Soler y el niño Fred Galiana forman el trío
luces de sus ideas, atrevidas en el tiempo en que fueron principal.
expuestas, aunque ese tiempo no está muy lejano, si bien El director es Francisco Elias, y el notable músico
1Í; desaparecido en el momento español que estamos vi- catalán iuan Dotras Vila, autor feliz de Romanza Húngara,
viendo. ha conipuesto la música, cuya adaptación dirige actual-
José Baviera, el galán l;in conocido del pueblo mente.
PAQUET
A través de u n megáfono son lanzadas las órdenes
dinámicas de Iquir.o, el joven e i n q u i e t o director q u e
por t e m p e r a m e n t o ha llegado al cine, alcanzando un
p u e s t o p r e f e r e n t e en la producción nacional.
T o d o un enjambre de electricistas, carpinteros, deco»
r a d o r e s y d e m á s personal técnico se p o n e en movi,=
miento.
C a d a uno está en su puesto, a t e n t o a la voz del direc-
tor para prestarle su colaboración en el momento
oportuno.
L o s artistas realizan sus respectivos « p a p e l e s » p r o
f u n d a m e n t e c o m p e n e t r a d o s con Iquino, que logrará d e
ellos todos los
efectos apeteci =
dos...
— ¡Silencio!
— ¡Motooor.. !
— « ¡ Canalla !
i Sinvergüenza !
¿ E s q u e quieres
b u r l a r t e d e nos»
otros ? ¡ Dejad-
me, q u e lo m a t o !
¡Soltadme, que
soy el jefe!...
¡Maldito P a q u e -
t e ! ¡Como le co-
ja, lo hago mi-
gas... ! »
L a escena ha
comenzado.
E l jefe d e P o -
licía (Lepe), irri-
t a d o hasta la
Paquete, protagonista de este
film editado por S. I. E.

congestión, d e s p i d e con «diplo-


macia y cortesía» a su nuevo
agente. P a q u e t e , por h a b e r apa-
leado a u n compañero confun-
diéndole con u n terrible criminal.
— ¡Ha sido u n a plancha ma-
yúscula para la Policía de aquel
país!
1^ ¡Hasta el ministro ha tomado
cartas en el a s u n t o !
P a q u e t e , que logró aquella
plaza para estar al lado de A n i t a
(Carmen S e b a s t i á n ) , hija del ira-
c u n d o jefe, y para p o d e r captarse
la simpatía de su futuro suegro,
n o se da por v e n c i d o :
" ¡ N o me importa!... Saldré
t r i u n f a n t e d e todo. S e g u i r é el
camino glorioso de mis antepa=
sados... S e r é artista famoso, y
seré rico... ¡Voy a r o m p e r la mo-
notonía de mi existencia! ¡Voy a
romper los vie'os moldes de mi
vida...! ¡Adiós, A n i t a ! ¡Voy a
destrozar toda clase de prejui-
cios!»
P a q u e t e destroza todos los
cristales de la puerta al cerrarla
violentamente.
El jefe se desmaya de cólera.
P a q u e t e también se desmaya,
pero diez m i n u t o s más t a r d e y
s o b r e todo a u n kilómetro l e o s
de Jefatura y del alcance de la
Policía... Iquino, bajo cuya dirección se ha rodado
P e r o A n i t a le quiere... esta película.
F U N D I D O
N u e s t r o héroe, j u n t o a su cámara, sus pancartas y otros
a b s u r d o s utensilios, acredita su calidad de fotógrafo am-
bulante.
¿ S e ha olvidado de los a n t e p a s a d o s ?
No. E l p a d r e de P a q u e t e fué fotógrafo.
CARMEN
S u abuelo t a m b i é n . SEBASTIÁN
S u bisabuelo. la simpática
S u tataraídem... «ingenua»
¡Y ahora en su nueva profesión. P a q u e t e arma cada
española.
. •jns-^;:^^

Para

La notable cuple-
tista y bailarina
que obtiene cons-
. tantes éxitos.
oLras que en su primera época de autores, cuando todavía
vivlsn en el ambiente del teatro lírico español, más nombradla
les dio, y esa popularidad fué lograda por la amena observa-
ción que habían hecho de cada uno de los tipos presentados.
Tipos esencialmente sevillanos, de un color y sabor lo-
cales de intachable autenticidad, y ante todo, y como lodo
lo de los Quintero, cierto, verídico, sin españolada ni fan-
tasía.
En el ambiente de la obra fluye una superstición; "La
reina mora", una mujer de la que sólo se conoce la casa
donde vivió. Un día aquella mansión—que ha permanecido
largos añcR sin albergar a morador alguno—vuelve a ser
habitad.i y en todo el barrio se comenta que aquel personaje
legendario nacido de la fantasía popular ha vueitíj a su an-
tigua morada.
En torno a la reja de La reina inora pasa todo el ba-

El g l o r i o s o c o m p o s i t o r
m a e s t r o S e r r a n o , que María A r i a s , la e s t r e l l a
ha dado al cine e s p a ñ o l española que sabe s e r
otra de s u s j o y a s líricas. " m u j e r " ante el objetivo.
Wf^^mmsmams

El último éxito del cinema


español en Madrid

Dos palabras sobre


^'LA REINA MORA"
Sevilla, la dulce ciudad de
Andalucía, hoy aherrojada, ha
íW¿ hecho de la tradición uno de sus
encantos más sublimes. Y de esa
tradición forma parte la misma
superstición en multitud de for-
mas y objetos.
Los comediógrafos contempo-
ráneos más representativos de la
Andalucía típica—los hermanos
Alvarez Quintero—han observa-
do en casi todas sus obras ese
carácter deliciosa y graciosamen-
te supersticioso de la gente sevi-
llana, y en cada una de ellas re-
flejan, por lo menos, un aspecto de
iesa superstición.
Es La reina mora una de los
nio, ávido de curiosidad, y allí se producen los más cho- ducción para Cifesa buscó entre la constelación de estrellas
cantes ¡ncideníes con una gracia fresca y jugosa, por el cinematográficas españolas a la que por sus cualidades
simpático desenfado con que ios intérpretes juegan la artísticas y estéticas podía crear ante el objetivo el tipo
acción, y, como emotivo contraste, tiene la pena oculta j)0pular. vibrante y sublime de la muchacha sevillana a
de la protagonista, que tan bien supo describir en el la que el vulgo atribuyó el título de "Reina mora", por una
pentagrama el más glorioso de ios compositores espa- antigua leyenda del pueblo.
ñoles coníemjioráneos, José Serrano. Era este tipo, nacido en lo más profundo de las su-
Ensebio F. Ardavín, al escoger el reparto de su pro- persticiones de la hermosa ciudad andaluza y cantado en
bellas estrofas poéticas por los Quintero y José Serrano,
algo clásicamente popular, de una soberanía del pueblo,
Una escena de ambiente típico de <La reina mora>; con
María Arlas y Pedro Tero!. y, por tanto, se precisaba para su encarnación una mu-
jer que, sin perder su aliento típico, pudiera adornarlo
con el gentil embrujo de la fantasía, de la irreal.
No es, ciertamente, éste, el tema de la obra que ha
vertido en imágenes cinematográficas el competente rea-
lizador español, pero fluye en muchas de sus escenas
la evocación de aquella mujer legendaria, siendo asi que
no podía substaerse a la influencia del tipo.
He aquí que Ardavín puso sus ojos en una actriz
cuyo temperamento sabe expresar los sentimientos más
emotivos: María Arias.
María Arias hace su segunda aparición cinemato-
gráfica en La reina mora, la cual ni viene a refrendar,
precisamente, la impresión que causara en su primer film,
sino a üuscar nuevo.? rasgos de una personalidad auténti-
ca de actriz.
María Arias llegó a revelarse en su primera película;
pero en La reina mora, filmada bajo los auspicios de una
productora bien organizada, aquella revelación primitiva
adquiere más consistencia y más temple artístico y dra-
mático.
Por esto podemos decir, sin temor a decepcionar a
los lectores, que la labor de esta notable actriz cantante
en La reina mora habrá de colmar todas las exigencias
y complacer todos los gustos, a través de un prisma
racialmente cinematográfico.
Pocas son dos palabras para encomiar La reina mora,
pero queden aquí como nuestro tributo de admiración a
esta nueva obra del cine español.

i^<<>riitiiiiiitM(iMnirtiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiii(iiitiiniitirtiiMiiitiiilitiiMiiiitiittiitiiiiiiiirt<iriiiitiriiiiiiiiirttitiitMittiiilitliiiirliiiMiiiiiiiitiiiiiiiititiiiiiiiti

EL A N C O R A e ^ . ^ . ^ iv ]B Iv 13 iiiniíiiMMimiiiiinmMiiriiitiMiimiDiiiiiiiiiiililiiiiil iirliiMlltiriMnliilMiliiiitiii

DE ORO
Calle Cortes, n,° 642
JUGUETES
B A R C E L O N A ESPECIALIDAD TRENES ELÉCTRICOS
''''iiiHiNiMiiiMiMMiiHiiMMtirniinitiiiiinMiiiniHiiiiiniiniitiMiiMiHiitMirirnitiitMiiiiitiiiiiMiiiiiniHiiiiiriiiniiMiMitiiiiti(intniiitninit(ii MiiiiinuM
Una de las películas que mejor han refle-
rii.riiiiiiriiiiMiiiait'i:tiiniitriiiiMiiitii>ttiiiiiiifiiitiiiiiiittiriiii-iiiiiriiiriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiitiliMr
jado el carácter y los sentimientos mexica-
nos es Cielito lindo, basada en una can- i '• • I
ción popular que exalta el valor íieroico
y la potencialidad artística de una raza.
Por ella desfila México con sus típicos
I Sus principios datan de i
paisajes, tan variados y opuestos en sus
diferentes latitudes; por sus trajes tan in- I nace veinte años, nabién- |
fluenciados por la región y las costumbres
que sólo el cine puede dar a conocer, con
su carácter claro y definido, entre todas las I dose r e a l i z a d o m á s de |
naciones de la tierra.
Pero México, a pesar de su peculiar y
potente expresión artística y el rico ba-
I cien películas i
gaje de su historia, intensamente dramá-
tica, profundamente humana, no puede I durante el año I
substraerse a su tradición triste y sombría,
llevando casi siempre a la pantalla temas
donde el romanticismo se funde con la
i pasado. |
tragedia en una sucesión de aventuras es- i i
Medea de Novato, bellísima ac- calofriantes. Otras veces son los elementos
triz vienesa que trabaja en Méxi- históricos, folklóricos o etnográficos, los
co y fué descubierta por el ani- que definen el carácter del pueblo noble y I El dinero invertido pasa |
mador Miguel Contreras Torres. generoso sobre el fondo siniestro de las
convulsiones revolucionarias, dentro de un
ambiente de lucha y exaltación patriótica.
I de 55().0(X) pesos, ya cjiue |
Los cineístas mexicanos creen que el público gusta de sumergirse en su
pasado, que la época virreinal lo seduce, y trasladan al lienzo de plata obras I el coste de cada película |
recargadas de literatura que llegan fácilmente al corazón de la masa ingenua,
desprovista del verdadero sentido social y evolutivo que debe animar a su pueblo.
obras de amor y aventuras, envueltas en misterio y emociones. Interminables i l a r ^ a es d e |
folletines con su cortejo de fúnebres acontecimientos, que van desde el hospital
hasta el manicomio, desde el adulterio hasta la traición, pasando por el crimen I 50.000 por tér- |
y el incesto.
De ahi que se haya dicho repetidas veces que el pesimismo es ingénito en
los mexicanos—'tristeza ancestral del indio"—, que padecen de una incurable i mino medio. I
melancolía racial, puesta de manifiesto en todo lo que hacen, especialmente en
las diversas manifestaciones del arte.
¿Por qué no intentan librar al cinema de su trágica naturaleza? Aunque
Miguel Contreras Torres, uno de lo3
ios mexicanos desciendan directamente de los chichímecas, pueden muy bien dejar animadores más famosos d e l c i n e
a un lado ei aspecto malo de la vida y acordarse de que también hay otro bueno mexicano.
que puede cultivarse, sacudiendo un poco esa pereza mental que les caracteriza.
A este respecto decía c! malogrado Alejandro Aragón en un artículo publicado
el años pasado en Mundo Cine mal o gráfico, de México: "En cambio, ¡qué pocos
esfuerzos se han hecho en pro de 1P risa! Tres películas recordamos a duras penas:
Tiburón, Doña Malinche y ¿Qué hago con la criatura?, que, pese a todos sus de-
fectos técnicos, les vivimos agradecidos porque intentaron la noble tarea de
hacernos olvidar nuestras arraigadas preocupaciones."
Por otra parte, en un editorial de la misma revista, leímos: "Una imagen en
movimiento es o puede ser la síntesis de un país. Veamos las películas rusas y
las películas alemanas: desprendám.onos de toda clase de consideraciones políticas,
para sólo considerar el valor plástico de una obra superior puesta al servicio de
una causa. En México, el cine—aun en su infancia—, debe servir desde ahora
a la causa de México y, por lo tanto, debe ser de esencia mexicana. Esto no limitará
sino que ampliará las posibilidades de la industria, ya que el espíritu mexicano
se extiende no sólo sobre nuestro territorio, sino taiiibiéii
sobre el de otros países."
Por no ser menos, Alejandro Alonso, en un trabajo
suyo aparecido en la revista Eurindia, venia a solidificar
en cierto modo al<;unos de los juicios anteriores con las
siguientes apreciaciones:
"La industria ciiiematográfica es nueva entre nos-
otros. Si ahora se inicia una labor intensa y estudiada,
ayer sólo tuvimos ensayos aislados, empresas provisio-
iii^jes, improvisados artisiii:i. liaMa recordar Ins prime-
ras muestras de un arte que casi no lo era, para llegar
a la conclusión de que en México se inicia ahora una era
en que el cinematógrafo tendrá preponderancias sobre
Otras cxjircsioncr artísticas: el teatro, por ejemplo.
Mientras en las compañías mexicanas de arte dramático
se acentúa una crisis de material humano, de directores
y escenógrafos, crisis que sólo terminará después de una
completa transformación de los elementos que las com-
ponen, después de la invasión de nuevos actores, autores,
directores y escenógrafos, el cinematógrafo es un campo
más viviente y más lleno de posibilidades."
Luego, al referirse a las películas realizadas en Méxi-
co, añade: "Su técnica es todavía inferior a la técnica de
las producciones extranjeras; pero de cualquier modo, el
espectador va apreciando el lento pero seguro camino
que recorren hacia una técnica mejor. La fotografía bo-
rrosa de los primeros ensayos ha cedido el lugar a una
fotografía clara; el sonido ha ido perfeccionándose; la
continuidad que da un corte preciso es, aunque lenta-
mente, cada vez mejor. Los directores van hallando en la
experiencia los frutos que no obtuvieron en una tradición
que entre nosotros no existe. Los actores mismos, salidos
en su mayoría de las filas del teatro, van respirando
mejor la atmósfera totalmente diversa del cine, olvidando
sus movimientos y gestos teatrales, atenuando y mati-
zando las voces; comprendiendo, en una palabra, que
entre el teatro y el cine media un abismo."
Por todo lo expuesto se da uno cuenta de que México
va creando un cinema propio que refleje su verdadera
psicología a través de sus incomparables bellezas natu-
rales, de su rico folklore y sus típicas costumbres, sin
necesidad de recurrir a esa literatura dolorosa y sombría
de que hablábamos antes. En cuanto a la función social
del cinema, éste ha de tener un poder expresivo, ideo-
lógico y sentimental que sirva para establecer su dife-
•••encia especifica con relación al cine americano y europeo.

UN POCO DE HISTORIA
• 1-os principios del arte cinematográfico en México
datan de 1917, año en que la actriz de carácter Natalia
^•*rtiz debutó en la pantalla. Esta artista, que ha sido La actriz María Luisa Zea
Una figura muy querida en el teatro, colaboró con la
«"•tista Mimí Derba en las primeras producciones serias
*^|ue se rodaron por aquel tiempo.
Entre los pioner.s del cine mexicano también figura en el quebranto de sus fuerzas cconómicap y en lo que suponía reclutar los
Enrique Tovar Avalos, viejo director y actor de películas valores artístic()s necesarios para hacerlo acreedor de estimulo y simpa-
'lue llevó a cabo algunos trabajos encaminados a dar tía fuera de sus f-onteras.
realce al séptimo arte en su país, realizando obras filmi- En 1930 se fundó la Empire Production Inc., que compró 250 acres
'^ss que adquirieron gran relieve en la época del cine |)ara levantar IIUÍÍS estudios sonoros cerca de la capital. Esta entidad des-
mudo. Pero tras largos años de lucha, su buena estrella de su huul.Kíiin sólo ha producido películas españolas.
^'e obscureció, marchando a Los Angeles (California),
Tres a'ios m;!s larde se constituyó la Compañía Nacional Productora
donde murió en diciembre de 1936.
de Películas, que hasta la fecha lleva realizadas un buen número de pro-
Pero aimque el cine mexicano haya y;i cumplido veinte
ducciones y fué de las )irimeras en lanzarlas al mercado. Por esa misma
''nos de ev.istencia, en realidad fue conocido en el mundo
^ partir de 1929. En esa fecha fué cuando México se fecha las adurnas me\icanas dejaron de aforar todas aquellas películas
dispuso a emprender la enifiresa generosa de construir en las'cuales aparecían tipos del país con sombreros de punta y mane-
estudios, procurándose el malerial necesario para comen- jando dieslramenlf el rcxi')lver. También la censura recibió órdenes para
tar seriamente a producir |ieliculas esencialmente iiacio- no aprobar ninguna película de esta índole. Y puesto que hablamos de
"alcs. Y comenzó a crear un cinema propio, sin reparar films sanciónanos por el Gobierno, bueno es recordar que a finales de
1936 el secretario del Interior apro- grandes mejoras que por ese tiempo
bó los reglamentos relativos a la cen- se hicieron en el cine ülympia, consi-
sura cinematográfica, que prohiben la derado como uno de los más admira-
exhibición de películas que exalten la bles de México, dado el lugar magní-
obra social y educativa de los Go- fico que ocupa.
biernos de ideología contraria a Mé- En el interior de la República tam-
xico. Esta medida fué tomada para bién se construyeron nuevas salas y
evitar la propaganda en favor, de los empresarios modernizaron las su-
movimientos revolucionarios como el yas; los equipos de sonido fueron
de España. Desde entonces está pro- mejorando notablemente y la exporta-
hibida toda aparición en la pantalla ción de películas también comenzó a
de Hitler y Mussolini. hacerse con mucha mayor habilidad
Por otra parte, los aranceles de a partir de entonces.
México hace años que vienen favore- En cuanto a la producción, duran-
ciendo la entrada de películas en es- te los cuatro primeros meses de 1935
pañol. Desde 1934, en que se estable- se filmaron doce películas, siendo en
ció este régimen de preferencia para total veinte las que se rodaron en todo
las películas filmadas en castellano, ese año. No obstante haber aumen-
son muchas las procedentes de Espa- tado después la producción cinema-
ña que han obtenido gran aceptación en México. tográfica, en la fecha mencionada hubo mayor entusiasmo que
El programa legislativo es el siguiente: otros años para producir por parte de los productores.
1.° Favorecer la producción nacional que se trata de des- La cantidad de films rodados, en su mayoría correspondió en
ar'-ollar. calidad y resultados de taquilla, habiendo algunos que señalaron
2.° Cerrar el camino al film norteamericano y a su influencia un lamentable retroceso, luego recuperado por otros mejores.
desnacíonalizadora. La mayoría de los presentados obtuvieron favorable acogida por
Los nuevos derechos mexicanos se han aplicado como sigue: e; público y la crítica local.
A) Films sonoros españoles según el caso (ver más abajo), Entre el número considerable de películas exhibidas figura-
12, 17 ó 20 pesos por K. B. ban El primo Basilio, Monja y casada, virgen y mártir; Madre
B) Films no españoles, según el caso, 35, 45 ó 75 pesos querida, Sueño de amor. Silencio sublime. Sanitario, Luponini,
por K. B. el terror de Chicago; Clemencia, Bohemios y Tierra, amor y
C) Discos para films sonoros españoles, 5 pesos por K. B. dolor. Hubo otras, como Una mujer en venta. La isla maldita y
Fuera de esta protección al idioma español, el decreto en Tribu, que por su inferioridad no alcanzaron el éxito apetecido.
cuestión establece otras diferencias con respecto al importador y También salieron de los estudios algunos noticiarios y otros films
productor cinematográfico. de carácter documental, destacándose Pátzcuaro, lago de ensue-
ño; U rúapan. Puebla y El relicario de América.
DESENVOLVIMIENTO ARTÍSTICO Y ECONÓMICO De 'os films de largo metraje, el que se colocó en primer lugar
fué La familia Dressel, dirigido por Fernando de Fuentes. Le
México contaba en 1932 con 750 cines, y sólo disponía de siguieron en méritos Los muertos hablan, cuyo realizador fué Ga-
160 para la exhibición de material sonoro. Tres años después se briel Soria, y Rosario, que dirigió Miguel Zacarías. Como éxitos
redujo el número de salas hasta 701 y se aumentó hasta 200 las de taquilla resultaron vencedores los titulados Madre querida,
provistas de aparatos sonoros. Sin embargo, una año antes, o sea Rosario, Monja y ca.sada, virgen y mártir; El tesoro de Pancho
en 1934, poseía igual cantidad de locales; pero 350 habilitados Villa y Luponini, ni terror de Chicago.
para el sonoro. Durante los primeros meses de 1936 apenas si se hicieron
El año pasado se estaban construyendo y fueron inaugurados cuatro películas, por lo que se llegó a temer que no se hicieran más
algunos salones que por su capacidad y estructura modernísima de veinte en todo el año. Lo que en principio se crsyó un sensible
son dignos de compararse con los mejores del mundo. Hablamos descenso en la producción era debido principalmente a la descon-
de cines como el Colonial, Alameda, Encanto y Rex, y de las fianza de los productores en obtener de México los rendimientos
indispensables que aseguraran cuando menos la recuperación del
capital invertido, en proporción con los productos que se obtienen
„ Guerfero en
.„ V Corroen ^^ . r 5. A de todo e! mundo. El temor se justificaba ante la extraña e increí-
ble actitud tomada por la mayoría de los exhibidores al contratar
todas sus fechas del año con producción extranjera, ig-
norando la nacional y contribuyendo a su desaparición.
No obstante, las cosas cambiaron de aspecto rápi-
damente, intensificándose la producción nacional en pro-
porciones tales que al finalizar el año el número de
películas salidas de los estudios mexicanos sobrepasaba
la cifra de cien. Es decir que en 1936 se invirtieron en
la realización de películas más de 550.000 pesos, ya que
el coste de cada película larga es de 50.000 por término
medio.

LABOR DE PROPAGANDA SOCIAL Y EDUCATIVA


Lo más admirable de la labor cinematográfica rea-
lizada por el país hermano es cuanto se refiere a la
propaganda de la cultura y difusión de las ¡deas. En
este aspecto se han llevado a cabo obras magnificas
que dicen mucho en favor de la economía, del arte, de la
ciencia y de los sentimientos humanos en sus diversas
modalidades. Todo debido al esfuerzo de algunos pro-
ductores independientes o por iniciativa del propio Go-
bierno presidido por el general Cárdenas, que apoya
económicamente cuanto se hace por dar a conocer la
belleza de los grandes va- Otros documentos fílmicos no menos interesantes, realizados
lores arquitectónicos del co- por diversas Empresas independientes, responden a los nombres
loniaje, o bien su riquísimo de Monte Albán, Las ruinas de Mitla, El santo desierto de Cuaji-
folklore e inigualables pano- malpa y Tehuantepec. Este último film, de la Cinematográfica
ramas que son orgullo del Mexicana, fué fotografiado por Luis Marqués y dirigido por Car-
suelo patrio. los Navarro, los mismos que realizaron janitzio.
En 1930 el Gobierno fe- Sin alardes de técnica y con un sencillo asunto se realizó Re-
deral votó su primer crédito belión, debido a los viejo? cinematografistas e infatigables lucha-
de 7.(X)0 pesos oro para pro- dores Manuel y Efraín Gómez, que describe en bellas imágenes,
ducir películas de propagan- plenas de color y luminosidad, el valle de Teotihuacán, antigua
da del país. Cuatro años sede azteca. Todo el film es una gama de cuadros naturales, en-
después el mismo Gobierno, marcados en un drama aborigen que prolonga el grito de rebeldía
por conducto de la represen- de un pueblo sojuzgado y entristecido.
tación de su partido político, Últimamente, y debido a los esfuerzos realizados por los mé-
entregó una fuerte suma pa- dicos cirujanos Alvarez y Mañero, que prestan sus servicios en el
ra dar más impulso a la ci- Hospital Juárez, se consiguió filmar con absoluta perfección, en
nematografía. Asimismo, el cintas de seis milímetros, las primeras obras de índole científica
Departamento Agrario, de- que sirven para la enseñanza e ilustración de la cátedra de me-
seando colaborar en t a n dicina.
magnífica labor, dispuso que En dichas obras se ponen de manifiesto algunas de las opera-
se diera principio a la fil- ciones más complicadas, como la úlcera duodenal o bien cortes
mación de una serie de pe- vaginales, que sirven para que desde la pantalla los estudiantes
lículas que correspondieran tengan una visión más exacta de lo que leen en los libros de
a las doctrinas agrarias que texto. Ta! iniciativa ha sido tomada en consideración, ya que
el Estado sustenta, con el hasta el presente nunca había existido en México la menor pre-
fin de ilustrar al público que ocupación por servirse de la cámara como un medio de propaganda
todavía no se hallaba per- científica, quedando de esta suerte México a la misma altura que
fectamente compenetrado de
América del Norte y algunos
tales formas.
países de E u r o p a — c a b e el
El film Tierra inició esta
ejemplo—en donde hace ya mu-
cho tiempo que llevan a cabo
esa clase de trabajos cinema-
tográficos.
Como es fácil imaginarse,
Antonio Serrano Liceaga, primer intér-
prete de la película " M a d r e querida". todas estas películas de carác-
/ ter cultural, social y científico
serie de obras documentales, que lue- significan un esfuerzo y adelan-
go fué seguida de otras del mismo to en abarcar todos los medios
género que exaltan los valores del de expresión cinematográfica
agro y ponen de manifiesto el espíri- que lleguen a las masas.
tu y el carácter de los campesinos me-
xicanos. Como muestra citemos pri- FILMS EN TECNICOLOR
meramente La irrigación de México, Y FILMS DE DIBUJOS
que fué fotografiado por Agustín Ji- ANIMADOS
ménez. Obtuvo gran aceptación, pues En casi todos los países del
en él se reflejan con toda clase de mundo en donde la industria
detalles los trabajos que en sistemas cinematográfica se halla arrai-
de riegos lia realizado el Gobierno. gada y protegida oficialmente
Luego México progresa, donde se pre- se han llevado a cabo con
senta el adelanto alcanzado por los
trabajadores que se han unido en coo- El popular Leopoldo Ortln que con
perativas y las ventajas obtenidas en Luis 6 . Barreiro y Carlos López (Clia-
' ' í « m"EÍba01-macabro", de P flán) forman la mejor trilogía de ac-
comparación con el viejo sistema de labor individual y mal retri- en eltilm '^^" tores cómicos del cine mexicano'
Iiuída. l a película en general resulta buena, tanto por lo que
se refiere a su presentación como a su tendencia. mayor o menor éxito
Entre las películas ilustrativas figura la editada por la Direc- una serie de ensayos
ción general de Tránsito, destinada a educar a los peatones prin- que no dejan de ser
cipalmente, pero también conteniendo enseñanzas muy útiles para interesantes, para lle-
los conductores de vehículos. Su proyección fué presenciada ma- var al celuloide los co-
yormente por el personal de oficinas, en el cine México, a me- lores naturales por el
diados de noviembre de 1934. sistema llamado tecni-
i;n cuanto a la Secretaría de Educación pública, que cuenta color.
con un laboratorio cinematográfico, digamos que el año pasado Desde hace algunos
dio a conocer el film Redes, una exposición realista de la vida años, en Francia, In-
de los pescadores indígenas en los litorales del Pacífico. Su foto- glaterra y R u s i a se
grafía bellísima fué obra del cameraman Paul Strand, y la música, preocupan d e e s t a s
del maestro Silvestre Revueltas, fué interpretada por la Orquesta cuestiones técnicas que
Sinfónica Nacional. Esta película ha servido para cimentar en el en un futuro no muy
extranjero el atractivo turístico y las bellezas incomparables de lejano revolucionarán
que goza México. el arte de las imáge-
Tampoco se queda atrás la Secretaria de Comunicaciones, nes. Sin embargo, el
que ha hecho varias películas documentales, en las que se encuen- impulso mayor lo han
tran atisbos y sugerencias valiosas. dado los norteameri-
Frausto—el mejor creador de tipos mexicanos, según juicio de un
escritor —, Joaquín Busquets y Leopoldo Ortín. Este último, con
Luis G. Barreiro y Carlos López (Chaflán), forman la mejor
trilogía de actores cómicos con que cuenta la pantalla mexicana.
En lo que atañe a las actrices, Andrea Palma ocupa el lugar
preferente poi su btUeza física y su temperamento dramático.
Le sigue en méritos artísticos y cualidades personales Consuelo
Frank, que 'lebutó en !a pantalla con el film Tierra, amor y dolor,
e; primero realizado por la Atlas Films, en 1934; luego Joseiina
Escobedc, (¡ue salió de las filas del único teatro experimental
habido en .México. Tampoco hay que olvidar a Carmen Guerrero
y Lupita Tovar, que son ya veteranas dentro de la cinematogra-
fía por haber actuado dentro y fuera de .México.

Ramón Pereda y A n d r e a Pa-


checo en un film mexicano.
Donüingo Ser y A n d r e a Pacheco en uno de
sus mejores p r o d u c c i o n e s .

canos, produciendo algunas películas que,


si no perfectas del todo por los procedi-
mientos empleados, han sido bien acogidas
en el mercado y admiradas por el público.
La competencia establecida entre diversas
compañías y aun de varios países ha regis-
trado en estos últimos tiempos un progreso
desconcertante.
México, que no ha querido quedarse atrás
en lo que significa evolución y progreso
dentro de la cinematografía, también intentó
realizar films en color hace un par de años.
Fruto de su voluntad y esfuerzo fué Novi-
llero, el primer film corto en tecnicolor que
lia realizado y cuyas pruebas de revelado
se mandaron a Hollywood. La realización de
la película—basada en una pieza musical de
Agustín Lara—estuvo a cargo del animador
ruso Boris Maicon y del cameraman Ross
Fisher, siendo sus principales intérpretes el
diestro Lorenzo Garza y la cantante Lucha
María. Más tarde, el dibujante y director
Carlos Béjar Jr., alentado por el éxito de su
primera producción, Alegría mexicana, filmó
Fandanga, ambas en colores.
Otras películas cortas del mismo género
son Sandunga, Sacrificio y Mexlcan Curtos,
que fueron lambién dirigidas por Boris Maicon y musicadas por Los artistas precoces Antonio S. Liceaga y Saúl Zamora
Chucho Monje. ("Gordito"), son asimismo dignos de figurar en esta selección de
Dentro de los f'lms de carácter documental destaca el reali- valores cinemalográficos. El primero se reveló como actor de
zado por el fotógrafo Ross Fisher y su ayudante José Gutiérrez gr.in ti'mperamento histriónico en el film Madre querida, que
Zamora, sobre la Exposición Agrícola y Ganadera celebrada en coiisti!uy<'- un íxito grande de taquilla. En cuanto al segundo, que
el distrivo federal de San Jacinto a finales de 1936. tiene una gran simpatía y pesa cincuenta kilos, su interpretación
La producción nacional mexicana, al extender su radio de en l.os desheredados le valió muchos elogios por su comicidad
acción, abarcó también la elaboración de films de dibujos anima-
innata.
dos, siendo la Empresa denominada Producciones Ava la que se
viene dedicando desde hace ya bastante tiempo a este género Por último, mencionemos los nombres de Ramón Pereda, Ma-
de películas. Entre las que iia producido figuran IMS aventuras nolo Noriega, Rene Cardona, Juan José Martínez Casado, Al-
de Paco Perico y Prcmlerc. fredo del Diestro, Julio Viilarreal, José Bohr, Ramón Peón, Mi-
guel Zacarías, .\driana Lámar. Victoria Blanco, Rafael J. Sevilla,
ELEMENTOS TÉCNICOS Y ARTÍSTICOS Juan Orol, Jorge M. Dada y tantos otros artistas hispanoameri-
»anos que bien como actdres. directores o argumentistas destacan
Con el resurgimiento del cine mexicano, iniciado hace esca-
en la cinemalografia mexicana, cada vez más floreciente y digna
samente tres años, comenzaron a destacarse algunos nombres
de artistas mexicanos. Como directores, Cjabriel Soria—el más de los n'ayores elogios.
joven de todos—, Fernando de Fuentes y Juan Bustillo Oro. De Si algunas de sus obras adolecen de los defectos al principio
los animadores ertranjeros sobresalen Arcady Boytler y Boris apuntados, no por eso dejan de ser una enseñanza y un ejemplo
Maicon, ambos rusos. que los españoles, por falta de iniciativas unas veces y otras p<ir
Entre los actores que merecen especial mención se cuentan inconvenientes ecoiiómicos, aun estamos lejos de imitar.
Julián Soler-—e! más joven de la dinastía de actores de pura
sangre—, Fernando y Domingo; Víctor Urruchúa, Antonio K Manuel P. DE SOMACARRERA
^^Ü^^^^'^^^P^^^ÜS^^T^

.^9^^-

Vi'A

r^ARLiTOS Chaplin no se ha resuelto aún a hacer tabla rasa de su posición con tal de Q R A C E Bradley y William Boyd acaban de
^^ confesar públicamente que Paulette Go- materializar su flamante idilio. ^-* contraer enlace en su residencia de Bever-
dard, la delicada francesita compañera suya en No cabe duda de que la hermosa corista ly Hills. Hay quienes piensan ya en su sepa-
Tiempos modernos—que mejor podría ha- ha tenido una suerte que seguramente en- ración...
ber titulado Tiempo perdido por el fracaso vidiarán muchísimas de sus compañeras de
económico que le representó—, es legal- estudio.
mente su esposa. r^RETA Garbo está triste. Siguiendo su cos-
Como la inquieta Paulette no se resigna DATRICIA Ellis está viajando por Europa y ^-* tumbre de enamorarse platónicamente de
a su papel de mujer ignorada. Garlitos no los galanes que con ella actúan, había di-
tendrá más remedio que preparar otra pe- * _ por primera vez. Sin embargo, a la sim-
pática estrellita siempre le colgaron los pro- fundido el rumor de una suerte de roman-
lícula para su consorte, aunque él está re- ce con George Brent, pero el actor, que
suelto a no integrar el reparto. ductores papeles de jovencita desenfadada
que conoce los viajes y transatlánticos me- parece avisado con respecto a estas pasio-
jor que su casa. Lo bonito sería que ahora, nes súbitas, dio la negativa más rotunda
I os productores yanquis están gastando
"-^ inconmensurables cantidades de fósforo como epílogo de la jira europea, le asigna- a las murmuraciones, contrayendo enlace
para planear argumentos en que ubicar a la ran papeles de colegiala tímida. inesperadamente con una jovencita llamada
patinadora Sonja Henie, que si como actriz Constance Worth, a la que presentó a la
resulta una cosa sin importancia, como de- estrella sueca apenas tuvo oportunidad. Se
portista es formidable. De ahí los climas de F7RANK Forest es un joven tenor de ópera
yanqui, que el cine ha ganado para sus dice que Greta recurrió a su dominio del
nieve y hielo en que desean ubicar la agi- elencos. Actuará ahora al lado de la espo- gesto para que no se alterasen las faccio-
lidad de la bella escandinava, que se en- sa de Valentín Parera, Grace Moore, la so- nes de su rostro al ver rodar por tierra
cuentra actualmente de vacaciones, aunque una propaganda hábilmente combinada. Aho-
se las ha arreglado para ubicar a su her- prano de la voz de oro. Con tantas voces
mana Leif, aprovechando su cuarto de hora que suenan a metal precioso corre grave ra buscará compañeros sin novia.
de éxito. peligro la existencia de metales, si es que
todavía queda alguno disponible.
D ICHARD Tauber ha sido contratado por
los yanquis para rodar una cinta. Es pro- í RENi; Duniie se muestra muy apesadum-
bable que veamos al célebre tenor en al-
gún deplorable personaje.

JV/ÍYRNA Loy, a la que muchas lectoras tienen


^ *• por soltera o acerca de cuya vida pri-
brada porque los directores la están obli-
gando a pesar los alimentos con balanza
de farmacia, con objeto de que no pierda
la línea de su silueta.
yj/irevÜta.
¡Pensar que aquí lo hacen sin necesidad
vada se sabe poco, ignorándose mucho, es-
tá casada con el productor Arthur Hornblow. quienes nada pueden perder con ser un po-
co más mujeres y menos figurines estili-
APARTA Eggerth ha conseguido la dicha zados! decenal
•^ *• más grande de su vida, pues participará
con su esposo, Jan Kiepura, en la versión
de El país de las sonrisas, a realizarse en
estudios vieneses. Es la primera vez que
J EAN Acker, primera esposa de Rodolfo
Valentino, trabaja ahtualmente de simple
extra después de haber gozado de fama al
Desde el próximo número «Mi
trabajarán juntos después de casados. lado del ídolo desaparecido. revista» aparecerá decenalmente

J UNE Lang ha sido proclamada unánime-


mente la chica con rostro más travieso de
Hollywood, y Cintia Westiake la corista
r^)»0 le han dicho a Ramón Novarro más de
^-^ una vez qne le quedan maravillosamen-
en lugar de cada quince días como

mejor vestida. te los atavíos de mahometano, está rodan- había aparecido hasta ahora.
Con esta propaganda la simpática June do una cinta en la que encarna a un "sheik".
ha conseguido un aumento de sueldo y Cin- Esta producción se desarrolla en el Sahara,
tia un pretendiente millonario que pretende pero, como dicho desierto está un poco le- Los d í a s de
jos de Yanquilandia, han preferido llevar la
troupe cinematográfica a las dunas de Ari- aparición de
ARTiCU LOS zona. Acompaña a Ramón Novarro una jo-
AUTOMÓVIL ven estrella: Lola Lañe, de hermosa figura.

RECAMBIOS Y
ACCESORIOS Q I N ( Í I : R Rogers y Katharine Hepburn han
^-* roto las hostilidades. La rubia dinámica y serón e l l o , 20 y
RASA. bailarina se siente disminuida al compartir
E. C. honores con la estrella fea, como denomina 30 de cada mes
Corle», n.° 611 bis
a la Hepburn, y ésta "afirma seriecita que su
Teléfono 20626 arte no está en los pies sino en el tempera- Precio:
BARCELONA mento. Pero fuera del "set" se niegan el
saludo. 2 ptas.
1¡j¡jirmé^

2L ieatto catalán en la auQtta u anta la tei/olución


BARCELONA, ANTENA LITERARIA y Fernando Accame, con un ciclo de teatro ruso, a base de
Andreiev y Antón Chejov.
Barcelona ha ocupado siempre la vanguardia literaria Se observará que no todos los tanteos han sido hechos
de España. Es la antena hispana que, por más sensible por catalanes; hay entre los audaces—llamémosles así—no
que las demás, percibe antes las vibraciones de la cultura pocos castellanos. Pero no se trata de establecer diferen-
y de la política europea. cias. Lo que realmente importa es que esos ensayos han
Esta suprasensible antena de Cataluña recoge en se- tenido el marco de Barcelona, como ciudad más propicia a
guida todas las novedades literarias y artísticas que se adoptar lo nuevo, por audaz que sea o parezca.
esbozan y concretan en el mundo, y luego las esparce por Estas ligeras anotaciones sirven únicamente a nuestro
el resto de España. Pero no siempre esas otras antenas propósito actual, para reforzar la afirmación de que Bar-
registran el mensaje con la debida premura. celona es la vanguardia y la antena literaria de España.
Mucho antes de que el equipo—usemos los mismos tér-
minos bárbaros deportivos—de aquella generación de IM EL TEATRO CATALÁN EN EL PERIODO REVOLUCIONARIO
Gaceta Literaria entrara en la red el balón vanguardista,
Salvat-Papasseit y José María Junoy, en Cataluña, se aden- El teatro catalán ha tenido varias épocas de esplendor.
traban, henchidos de avidez e inquietud, por el laberinto Se ha distinguido siempre, a través de sus distintas etapas,
del Uultra, para buscar en él nuevas formas, imagines re- por sus características dramáticas, bien definidas. Pero
cientes a la lírica y a la literatura catalana y, por extensión, siendo muy catalán por el espíritu, por el nervio que alienta
a la española. en él, ha sido, a la vez, por la orientación y por la técnica,
La fina percepción de Fernández Almagro observó ya muy europeo.
estos hechos en un periódico del Madrid de la postguerra L'n?. de esas etapas del teatro catalán la cubrieron glo-
europea, apuntándolos con estas inteligentes y ponderadas riosamente estos tres nombres preclaros: Ángel Quimera,
palabras: Santiago Rusiñol e Ignacio Iglesias.
"No obstante el corto radio geográfico, Cataluña se ha De otra etapa posterior hay que destacar los nombres,
distinguido siempre por su vuelo ideal, por su vocación de recio sabor popular, de Puig y Ferrater, Amichatis y
universalista, por la amplitud de sus curiosidades, por un Sagarra.
simpático prurito de ansiedad e impaciencia, que la lleva Kay otros, que no por olvido y menos aún por restarles
a '.o reciente, a lo nuevo y europeo." importancia, sino porque en estos tres creemos recoger las
Es cierta y aguda la observación del crítico madrileño.
Barcelona no ha sido hermética como Madrid a las co-
rrientes de fuera. Su ancha puerta mediterránea le ha dado
más facilidad que a la meseta castellana para comunicarse
con el extranjero y recibir su influencia más directa y rápi- MARÍA VILA, la no-
damente. table primera actriz
El periodismo revolucionario y, en consecuencia, ro- del teatro c a t a l á n
mántico y bohemio, se ha producido más fácilmente en que actúa en el teatro
esta tierra de mercaderes fenicios—¡oh, la paradoja!—que Pollorama.
en !a Castilla de los grandes aventureros y guerrilleros, con
nuestro Don Quijote a la cabeza.
Un periódico de la violencia, del desgarro y la gracia
popular, agresiva y picaresca, de aquellos Miserables en
que formábamos Fernando Pintado, Ángel Samblancat,
Ámíchatis, Luis Capdevila, Platón Peig, Santos Muñoz y
yo, tenía que aparecer en un ambiente tan asequible a la
revuelta y el motín como Barcelona, no en la atmósfera
cortesana y ministerial de Madrid, del Madrid de entonces.
Los primeros que se atrevieron a traducir y estrenar en
España una obra de Lenormand fueron unos escritores y
un empresario catalanes. El dramaturgo francés rompía los
moldes apacibles del teatro isabelino, la trama sentimental
y a flor de sentimiento de la comedia burguesa, para agitar
a sus personajes en las contradictorias y complicadas al-
quimias psicológicas y pasionales del psicoanálisis freu-
diano.
Fueron Les Ratés (Los fracasados) la primera obra de
Lenormand que se conoció en España. Se estrenó en el
teatro Novedades por la compañía de Ramón Martori. Sus
traductores fueron J. Pous y Pagés y Carlos Soldevila.
Otro ensayo audaz de teatro de vanguardia—o por lo
menos audaz dentro del limitado cerco dramático español—
lo realizaron en el mismo teatro Novedades Ricardo Lahoz
distintas tendencias populares dentro de la dramática cata-
lana, no los citamos en este breve trabajo, sin pretensión
de ensayo y menos todavía de historia crítica.
Entre los interpretes que mejor han perfilado su persona-
lidad sobre los tabladillos de la farándula catalana, abarcan-
de sus mejores épocas, de Ouimerá a la hora presente, figuran
el eminente trágico de la escena nacional—no sólo cata- 'freí^cOk
lana--Enrique Borras, María Vila, actriz de recia figura
dramática, y el popular y ruidoso cómico José Santpere.
He aquí también, en esta famosa trilogía, resumido, en
cieito modo, el teatro catalán.
El drama y la tragedia—clásico y contemporáneo--
Con motivo de haber dado nuestro voto para que se le
están representados por el gran Enrique Borras, el mejor abonaran cien pesetas de sueldo diario a María Fernanda
intérprete, sin duda, de Quimera y de Galdós, y uno de los Ladrón de Guevara hemos recibido muchas cartas—casi
más notables, entre todos los actores europeos, de Moliere todas de protesta—por el susodicho voto, y claro, "va-
y Shakespeare. mos a explicarlo", como se dice en lene;uaje parlamen-
tario.
La comedia--y el drama también—moderna y racial- Para nosotros la referida artista, sin ser ninguna emi-
mente catalana tiene su intérprete más genial, de sensibi- nencia ni muchísimo menos—¿para qué vamos a engañar
lidad artística más aguda y exquisita, en María Vila. a nadie"?—, es una actriz que como otras muchas merecía
y. finalmente, el vodevil, la comedia de color—verde, una retribución decente. Desde luego con más razón, ar-
tísticamente considerado, las merecen María Gámez, Bo-
naturalmente—, el saínete, tiene su cómico más genuino en nafé, Somoza, etc., etc., etc. En estos tres etcéteras co-
Pepe Santpere, que tuvo su trono en pleno Paralelo. loquen ustedes a sus favoritos, porque Mi REVISTA está
Hace uno:-; días que se inauguró oficialmente el Teatro por justicia siempre a favor de los actores y actri-
Catalán de la Comedia. ces, para ios que la revolución ha sido una injusticia tre-
menda y, además de una injusticia, un abuso.
En el orden dramático, es éste el primer avance seno Conste, pues, volviendo a lo de las cien pesetas de
que se efectúa dentro del período revolucionario. María Fernanda Ladrón de Guevara, que Mi REVISTA no
Ha sido el Sindicato del Espectáculo C. N. T., junta- la presentó como excepción ni muchísimo menos.
mente con el Ayuntamiento de la ciudad, quien le da im- Nada de eso... pero en fín, desaparecida del cartel
pu'so. del teatro Romea no hay caso.
¿Consta?
Y sen, precisamente, María Vila y Enrique Borras, las Pues si consta, ni media palabra más sobre las suso-
dos figuras cumbres de la escena catalana, quienes figuran dichas cien pesetas...
al frente del elenco. * «*
Es ahora cuando el teatro catalán, sin perder sus carac- Ln el Barcelona sigue la compañía de Bonafé actuando
terísticas, puede adquirir un tono, un matiz social e. insu- con el favor del público, y con frío y todo va mucha
gente. Por cierto que se rumorea que la gran actriz
flarse de la moral de guerra. Ma''ia Gámez va a este teatro. Desde luego no hay que
M a t e o SANTOS decir que María Gámez en el Barcelona o donde esté ha
iiiiiiitiiiiiiitiNiiiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiliiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiititiiiiiiiiiiitiiiNiiiiiiiiiiiiiiiiiiiNiíiiiiiiiitiiiiintiiiiiiiiiiiHiiiiiiiiii de hacer una labor artística de primera fuerza, como la
llMIlillniliiiilllllilllllltlilllllMHtwmiiUlllltlDltlliiilll'iliK ii!tiiniillililitiiifiil{lilliilll{lllllllllilllllilillllllllíllllllltllillllllillllllll1lllllllllllillllllltlllllllllMllillllílllll<llltlllllllllllllllMlllllllllllli<
ha hecho siempre.
En el Palace
El gran actor Juan Bonafé, En el estreno de la última obra por la com-
verdadero prestigio del tea- pañía de Somoza en el Principal Palace vemos más
tro antes y después de la destacados a Elia Romero. En este papel puede la bella
revolución, c u y o s é x i t o s actriz lucirse un poco. Que nos perdone Somoza, pero
en el Barcelona confirma que de cuando en cuando se haga alguna obra para la
el público con primera actriz es algo que agradecerá mucho el público,
su asistencia. porque tod" para el director de la compañía va a dar
lugar a que le llamen ansioso y además, y aquí está lo
malo, a que el público se canse un poco. Que se luzcan
todas; que haiga un poco de democracia al escoger las
obras.
Apolo. - Esperanza Barrero
En lugar aparte damos una referencia más extensa
de El Paraíso Fascista, el gran acierto del luchador y
simpatiquísimo actor Benito Cibrián, que por cierto lo
han retirado del cartel de una manera despiadada.
Sirvan estas líneas solamente de tributo, de justo tri-
buto a la meritoria labor de la actriz Srta. Esperanza
Barrero. Estudiosa, trabajadora y con gran talento,
lleva en .el teatro Apolo una temporada muy lucida por
su esfuerzo, pero no es su teatro. El desastroso descon-
cierto que preside el reparto de actores y actrices por
los teatros de Barcelona da lugar a paradojas como
esta de Esperanza Barrero en el Apolo y otras actrices
de mucho menos mérito en teatros donde no pueden
scistener sus puestos.
Hay que presidir con gusto artístico y con justicia
limpia de prejuicios la ubicación de las actrices en
donde las obras que se representen den realce a las que
las interpretan, para que las actrices puedan darla de
paso a las obras que les toca representar.
Policroma y Español. - Teatro catalán
En nuestro próximo número nos ocuparemos exten-
samente de las compañías de teatro catalán que actúan
en el Español y en el Poliorama. Su meritisima labor
bien lo merece. Borras y la Vila cuentan—ellos lo sa-
ben—con toda nuestra simpatía y toda merecida admi-
ración.
Estreno de El Paraíso Fascista"
•/• en el teatro APOLO

Benito Cibrián, el no-


table actor, autor de
«El Paraíso Fascista».

El estreno en el teatro A p o l o d e «El Paraíso Fascista> funestos efectos empiezan ya a sentir los mismos subleva-

ha t e n i d o el éxito que el esfuerzo y el entusiasmo de su dos. C o m o obra d e p r o p a g a n d a , «El Paraíso Fascista»

autor Benito C i b r i á n merecían, p o r q u e esta o b r a , a d e - merece especial mención, pues la verdad, hasta hoy

más de la teatralidad fácilmente obtenida por Cibrián, nada se había hecho en la escena más eficaz y con más

muy práctico en estos cosas, contiene un fondo de reali- acierto.

d a d , de ironía y de retrato tan vivo, que sus cuadros son Toda lo compañía del A p o l o merece una felicitación

verdaderos aguafuertes del salvajismo fascista, cuyos cordial por su trabajo,- pero séonos permitido señalar

con relieve, porque es de justicia, la labor de Esperanza


On cuadro interesantísimo de «El Paraíso Fascista >, la obra de
Benito Cibrián que en el teatro Apolo ha obtenido un merecido Barrero, la gentil actriz que de una manera modesta,
éxito.
arrinconada en un teatro de borrjo, hace teatro digno

de escenarios de más importancia, por su talento y

por su cultura.

Al S. I. E., al que ha c a b i d o la satisfacción de

estrenar esta o b r a , también nuestra felicitación, aunque

los compañeros que lo componen ya tienen demos-

trado cumplidamente que saben hacer justicia y dar

preferencia a las obras que lo merecen.

XIP
l-a labor constructiva del dejarlo establecido, y a pesar de ello y de
las dificultades de los tiempos anorma-
Comité Económico de les de guerra que vivimos, no solo ha
conseguido esta organización las justas e
Cines C. N. T. inaplazables mejoras de orden social, que
representan una inversión notable de nume-
rario, sino que se ha llegado a más, se ha
llegado a crear un activo, o fondo de Co-
lectivización que, si bien no iodo él es
Un balance elo- realizable en el acto, ni interesa lo sea, cons-
tituye una realidad tangible para el futuro,
y un apoyo notable de momento y robusto
cuente que nos después a la economía nacional.
El activo que ofrecemos a estudio es sano,
claro y concreto.
facilita su presi- Figura sólo en él: Lo que tenemos de
numerario en Caja. El saldo de nuestra
cuenta en el Banco de España. La cantidad
dente compa- en metálico que tenemos puesta para cam-
bios de taquilla, las sumas de que somos
acreedores, y, finalmente, las mejoras va-
nero Espinal luables hechas en los locales, con dinero
,j recaudado de nuestra gestión, y los mue-
I bles y utensilios adquiridos. La partida re-
lativa a vales emitidos, para subsanar el
defecto de calderilla, tiene sólo una finalidad
contable sin repercusión en el saldo, ya que
se compensa con análiga partida en el pa-
sivo.
Si para terminar en el estudio completo
del balance que se presenta pasamos del
activo al pasivo, forzoso nos será recono-
cer que no existe pasivo propiamente dicho.
En efecto: Si por pasivo ha de entenderse aquellas deudas
que una entidad ha contraído, y que no salda en el diario
El cine Ascaso, exponente de la actividad V normal funcionamiento de su caja, que tienen cierto ca-
y adminisfración del Comité Económico que rácter si no permanente ai inehos de alguna duración, para
lo ha construfdo o sus expensas. ser extinguidas, forzoso nos será reconocer que este pasivo
propiamente tal no existe en el Comité Económico de Cines.
Sabíamos que en la colmena del Las únicas partidas que por imperio de la inflexibilidad de
Comité Económico de Cines se tra- las normas contables aparecen e integran por entero el pasivo
bajaba intensamente para dar un del Balance presentado son los vafes de cambios, que tienen
estudio detallado de todas las ac- en el acti\o su obligada contrapartida que los cancela, y los
tividades económicas que durante el impuestos y arbitrios pendientes de pago en el momento de
año han cubierto con 'una regula- cerrar el Balance, que como toda obligación de tracto suce-
ridad y superación verdaderamen- sivo, si fué hallada casualmente pendiente el día del cierre, si
te notable. éste se hubiera demorado por alteración del calendario sólo
Es sabido que cuando se ha que- unos días más no hubiese tan siquiera aparecido.
rido atacar al Comité Económico de En resumen, pues: Frente a un activo veraz, de haberes
Cines de la C. N. T. se ha recurrido, reales que participa de este carácter de fijeza de que parti-
por ser la parte más vulnerable, cipan las partidas de los balances propiamente dichos, sólo
al aspecto económico, y quizás por aparece un pasivo de obligación momentánea pendiente, de
existir la falsa creencia de que el las que sin esfuerzo zanja periódicamente el libro de caja. El
Comité de Cines no tenía en for- saldo como consecuencia de ello no sólo es favorable, sino
ma bastante clara la demostración optim sta y alentador.
de su gestión. Pero he aquí que Examinado el saldo que se produce de restar de los in-
Espinal, al que sorprendemos co- gresos las salidas, se obtiene la existencia en numerario a
mo siempre en su despacho traba- disposición del Comité, y ratifica el optimismo y aliento que
jando, con su cara sonriente en la produce el examen del Balance.
que siempre luce el optimismo del Éata es nuestra información, que nos sugieren las partidas
que sabe lo firme que pisa, nos alarga una serie de datos que publica- inalterables que las cuentas arrojan, y con ella ofrecemos a
mos para satisfacción de unos, para orgullo de la Organización y para todos la suprema elocuencia de Tas propias cuentas origina-
fracaso de los que ahora tendrán que variar de táctica al atacar, porque les, que ellas mismas tal vez os digan con su elocuencia pa-
el aspecto económico está sobradamente demostrado. siva mucho más de cuanto queda expuesto. Por su parte a!
Comité le basta con lo dicho para que podáis enjuciar la
Un somero examen del Balance que se presenta ha de reflejar for- vida económica de su Empresa, seguros de que la veracidad
zosamente en quien desapasionadamente lo haga, un indiscutible op- más absoluta es la que se refleja, porque como sabéis es
tiniisniL y simpatía hacia la gestión del Comité, ya que no debe olvi- axiomático el decir "que los números no mienten".
darse que éste, a diferencia de los demás Consejos de Empresa de
todas las colectivizaciones industriales llevadas a cabo en Cataluña, Publicamos en esta información las fotos de los cines As-
ele acuerdo con la legislación general Tipo, no ha recibido el activo caso y Durruti, construidos totalmente por el Comité de Cines,
de cada Empresa y si meramente los locales de proyección cinema- que también son una demostración creadora de lo que es la
tográfica, los cuales por hallarse instalados en inmuebles de ajena obra de que nos venimos ocupando con tanto interés en Mi interior del C
perte-^eiiecia, devengan alquiler a favor de la Oficina de Administración REViñT.A y nos reservamos para el .próximo las cifras definí- Durruti en ce
y Control de la Propiedad Urbana con la que ha sido preciso tivas v elocuentes en 31 de diciembre. trucción.i
Interior del cine Asease, construido por el Comité Económico de Cines.
Marcos Alcón y demás compañeros del Comité Económico de lo Industrio del Espec'óculo.

COMITÉ ECONÓMICO DEL TEATRO


Datos muy importantes de su desarrollo

La labor constructiva del Comité Económico del


Teatro podríamos señalarla con la marcha y funciona- Cantidades invertidas en 1os pagos de un
miento de compañías que nunca hubieran supuesto mes en la explotación de los teatros de E ar-
poder actuar en plena guerra con un ritmo de nor-
celona:
malidad que sensaciona el orden en la retoguardio;
Nómina de personal a 1.536
y el funcionamiento de estas compañías y de los obre-
obreros 854.370 Ptas.
ros que viven del teatro hoy con más ventaja que nunca
Industrias de Teatro (Servicios
se debe precisamente — hay que reconocerlo — al es- »
fuerzo constante del Comité, cuyos compañeros se Imprentas (Artes gráficas) 7.000 y>

desviven por mantener el teatro en su apogeo, con Impuestos Estcdo . . . . 25.000 •»

todos los sacrificios que requiere este esfuerzo. Puede Arbitrios Ayuntar, iento . 10.000 »
enjuiciarse esta labor de justicia, por ejemplo, con el Generalidad de Cotaluña . 24.000 »
artículo 4.° de los Estatutos que lo rigen y que dice: Fluido eléctrico 22.000 »
«Los beneficios obtenidos en la semana se dividi- 1.400 »
rán entre el total de tantos por cientos correspondien- Anuncios por Radio . . . 10.000 »
tes a todos los trabajadores encuadrados en los luga- Anuncios por Prensa . , . 13.000 »
res de trabajo y el coeficiente que resulte, se multipli- Alquiler locales 15.300 »
cará por cada un tanto por ciento y el resultado de 40.000 »
esta operación, será el semanal que ha correspondido Gastos de montaje de obras i
a cada trabajador.» escenografía, sastrería, ar
mería, atrezos, etc. etc. . 90.000
El artículo 8.° refiriéndose a categorías, es como
sigue: . 1.147.725 Pías.
Total .
«Las diferentes características de trabajo clasifica-
das por categorías cobrarán los emolumentos que a ceden un 2 y 1/2
Los trabajadores del Teatro
continuación se señalan: por 100 de su nómina para los viejos jubilados
Extras, 100 pesetas por intervención; ].° categoría y parados, que importa unas 22.000 pesetas
lírica, 50; Vedettes de revistas, 35.» mensuales.
Y el 21, m'jy importante: También se han satisfecho a los ex emp re-
«Los artistas clasificados en la categoría de «Extras» serios de los teatros los dietas desde que em-
cobrarán 100 pesetas por intervención, con un seguro pezó la explotación de los teatros por os
fijo de 700 pesetas semanales.» obreros, en 15 de agosto de 1936, que impor-
Pero como este número no es el más indicado, en tan 50.000 pesetas y en la actualidad el coe-
ef próximo nos extenderemos cumplidamente. ficiente al 100 °/o que cobran os obreros.

M. del C.
IjjjjimiM

México. - Claustro del ex convento de la Merced.

Las elacciones en la U. R. S. S.
Propaganda electoral

Del homenaje a nuestro


Ejército Popular. ~ La
manifestación a su paso
por la plaza Cataluña.

Fachada del domicilio social


de los Amigos de México en
Barcelona, c u y a l a b o r de
constante propaganda y cor-
dialidad a favor de IVéxico es
bien conocida. «Mi revista» se
ocupará en próximos números
de dicha labor.
Nuestra compañera María Batlie, la
gentil dibujante que con su lápiz
pone notas de arte en «MI revista».

Un e s c u a -
drón de ca-
ballería típi-
ca mexicana

minnMTi
que sin igualdad económica era imposible la libertad política. A
Las luchas partir de este momento puede decirse y afirmarse que en el mun-
do, en el fondo de las desavenencias humanas, y aunque s* dis-
frazaran de las más diversas formas, sólo quedaban dos fuerzas
humanas a enfrentadas y una sola lucha: las dos clases opuestas e irrecon-
ciliables: lad e los opresores y la de los oprimidos, la de los que
se obstinan en que persista la desigualdad con ropajes auto-
través de cráticos o democráticos y la de los que luchamos denodada-
mente por que ia igualdad económica, en lugar de un derecho pro-
metido, sea un hecho real como base de nuestra libertad.

la Historia Éste es en el fondo el verdadero y único motivo de la desar-


ni()nía, y ésta es la causa por que se desangra España. El pueblo
quiere una verdadera justicia social, basada en un innegable e
indiscutible derecho a vivir. Por eso lucha y por eso muere; por
El servilismo de eso seguirá luchando y seguirá muriendo por vivir digna y libre-
mente. - -
ayer y la concien- Si alguien pretendiera olvidarlo y escamotear ese derecho
conquistado cumpiidamenfe y a costa de tanta sangre vertida y
cia de hoy tantas vidas inmoladas, peor para todos. Los que cayeron bajo
el plomo o la metralla pesarían como fantasmas acusadores sobre
la conciencia de los escamoteadores, y los familiares, amigos y
Por6alo Diez, vicesecretario del Comité Nacional de la C. N. T compañeros de los caídos, que con ellos se juramentaron a luchar
y vencer hasta que no quedara en pie ni una de las causas que
La liümanidad viene debatiéndose a través de los siglos en obstaculizaron hasta hoy el derecho a vivir con dignidad, con
una lucha canibalesca, borreguil, fratricida. Las páginas de su todas las necesidades satisfechas y a gozar de la libertad, se
tiistoria chorrean sangre en cualquiera de sus épocas por donde erguirían para impedirlo.
intentemos abrirlas. El mundo es inmenso cementerio pasado El proletariado de hoy lucha y muere consciente de lo que
o presente, un sangriento matadero donde se degolló o sacri- quiere y dónde va. Quien trate de torcer sus humanos propó-
ficó a millares de millones de seres humanos. La tierra entera sitos sólo puede ser un traidor y como tal será considerado y
ha sido abonada con substancias de la carne muerta enterrada pasará a la Historia.
en sur. entraras. Seria imposible encontrar un l<ilómetro cuadrado
de su superficie donde, al removerla, no se tropezase con tibias, Valencia, 2 de noviembre de 1937.
costillas, peronés o calaveras de quienes, al final de una luch9,
fueron enterrados en la gran fosa común, sobre la marcha.
Los hombres se han asesinado en nombre de un señor, lic
un emperador, de un rey, de un amo, de un general, de un pre-
sente; por Dios, por Mahoma, por Confucio, por Buda; por
la Cruz, por la media luna, por el turbante, por un escudo; en
nombre de la religión, de la patria, de la independencia, de la
emancipación, de la libertad.
Se han matado en nombre de todos y de todo, disfrazados
con tjda clase de trajes y colores, armados por las más diversas
armas y por los más variados procedimientos que su imaginct.-
ción fratricida pudo concebir. El caso era matarse, destrozarse,
destruirse, aniquilarse.
Teóricamente, el hombre ha sido y es el hermano del hombre;
prácticamente, el hombre sólo ha demostrado ser el lobo, el tigre,
el carnicero, el tirano, el opresor, el sátrapa y el exterminador
de su hermano (es un decir) el hombre. Si las víctimas de toda
esta voracidad insaciable y monstruosa, incubada por la ambi-
ción, el egoísmo y la soberbia humana, pudieran apilarse en
montones, como fardos de bacalao, sus pilas alcanzarían una altu-
ra inmensa, que GC perdería a través del espacio para confun-
dirse en trágico beso con las nubes.
Ei rebaño humano de los harapientos, de los desheredados, de
los desposeídos, ha ido a través de ios siglos al matadero, como RDA.S. ANTONIO, LUIS ANTONEZ. 8
los bueyes, los carneros o los cerdos, sumisa y hasta alegremente.
Se ha dejado matar o ha matado, no sólo sin provecho, sino
con grave perjuicio para sí mismo. Sólo su ignorancia puede
nfims. 6 8 V 7 0
TELEFONO 1S4S2 EL ALUMINIO Esquina Saimtrcn, 43
TELÉFONO 8 3 1 4 0

explicar tanta estupidez: ser carne de cañón para beneficio ajeno. ALUMINIO, CRISrAL, LOZA, PORCELANA, AUXILIARES COCINA,
Corrientemente ha ido a la pelea y a la muerte guiado o man-
dado. No obstante, en las páginas de la Historia encontramos de OBJETOS METAL, BAÑOS, DUCHAS, NEVERAS, HELADORAS, ES-
vez en cuando bellas gestas del pueblo oprimido, que, arrogan-
te, fué a la muerte a impulsos Je su rebeldía más o menos cons- TUFAS, JUGUETERÍA Y OBJETOS REGALO
ciente, pero siempre sublime y santa, para suprimir algo de lo
mucho que le oprimía, a conquistar algo para él. A impulsos de Especialidad en artículos para el Comercio de Lecherías, Granjas,
esas gestas aisladas ha ido pasando de la esclavitud a la ser- Legumbres cocidas - Servicios de mesa y cocina para Bares, Restau-
vidumbre, después al asalariado, y se esfuerza por llegar al hom-
bre ubre poh'tica y económicamente. rantes, Comunidades, Hoteles, etc., etc.
Todo esto es muy cierto; pero no lo es menos que el asa-
lariado consciente, el oprimido con ansias de liberación, sólo
lucha voluntariamente, llevando en sus aspiraciones como finali-
dad la conquista de su libertad y de su pan. C A M I S E R Í A S
Por la conquista de su libertad aun le hemos visto ir estos
dos siglos alucinado cual alondra bajo el brillo del espejuelo por
las promesas de otros hombres que se la ofrecían como un de- E, M O C A S O L B E V I I L A
recho, que hasta se la concedían como ley, pero que a la postre F O N T A N E L L A , 16 - T E L É F O N O 1 2 211
resultaba una ificción, ya que, cimentada en una legislación
burguesa aunque democrática, de hecho sólo le quedaba el de- P U E R T A F E R R I S A , 2 4 - 2 6 - TEL. 1 7 6 4 2
recho de morirse de hambre muy libremente. i^ B A R C E L O N A
.Así, después de infinidad de ensayos, ficciones y engaños, fui-
mos muchos los que llegamos a la conclusión y convicción de

«LA <«'
S e n y o r a : Recordi q u e «La P r o v i d e n c i a "
li ofereix p e r a tardor i hivern les ultimes
PISRL

Cucurulla, 2 i 4
SERRA

lUütiiutiiiKtiNniiW^^
PRO VIDENCIA » ^'""'''"'" '-"J^'^^'' MODELS TELÉFON
BARCELON
18434
A
LOS JUGUETES DE
MADERA SOCIALIZADA
Han transcurrido dieciséis meses de la traición de unos mili-
tares 4ue, secundados por la clerigalla y la alta burguesia, se pro-
pusieron arruinar a un pueblo, llevando la muerte y la desolación
a miles de hogares además del hambre y la miseria... • Los traba-
jadores de la Madera, (jue fueron tachados de ilusos, de utópicos,
hoy demuestran prácticamente su realismo • Lo demostraron al
mantenerse trabajando sin descanso los meses transcurridos desde

el 19 de julio,del año 36. Lo demuestran al sortear todos los incon-


venientes de la guerra para proseguir la producción • Demostra-
ron su capacidad productiva al celebrarse la Exposición del
Mueble del mes de agosto y también al proyectarse la Documental
«Madera» en el Coliseum, y hoy la demuestran al presentar estos
días la Exposición de Juguetes, terminando con el intermediario,
<íue hacia aumentar los precios de venta • Hoy Madera Sociali-
zada puede ofrecer sus juguetes directamente al público y éste

corresponde de forma espontánea haciendo sus compras, por


encontrar en ello una economía muy aprovechable en estos momen-
tos de desbordamiento comercial, en (¡ue los productos adquieren
precios fabulosos • Madera Socializada ofrece al público en gene-
ral juguetes instructivos, construidos con esmero, adaptados a las
nuevas corrientes humanitarias • He a^ui unas vistas de algunas
dependencias en donde se expenden juguetes.
Ahora (Jue callen los (jue niegan la ca-
pacidad productiva de los trabajadores.

Exposición V venta: CALL. 13 v 15 - Telé!. 20341


.^ItlilMlKllllliiliximiiiliiMiiiimiiillllllllliitiiillmiiitiiti ltMniiii(tiiillMiMiiilliliitnii)tiiiiiiiiiiiiii<tiiiiiiiiiiiiiiiitiiiiii(iiitiiiiiiiiii[(£ >«-«^í>«NÍ>'C««>-«NÍ>'fc.*<1
...deque es ne^ |
• •
5 cetario volver \
a insistir sO'
bre los abusos I
i
LJrasiL
rasiíena...
de los vales, I
que no estaría = Brasileña que trenzas la Carioca,
de más que el I dame un beso
Venus bruna,
de armiño y escarlata.
¡no seas tan ingrata!
?
simpático y \
equitativo di' j ¡Tengo sed!, y el amor me la provoca.
rector general \ Tengo sed de los besos de tu boca;
de Seguridad -. de tu carne sedeña de mulata;
Sr, De Juan \ de ese cuerpo gentil que, en danza loca,
pusiera fin a i con sus giros turgentes, arrebata...
que den a los \
ciudadanos \ Entonemos, divina chacarera,
barce loneses una ardiente canción a Primavera
por un duro, con el brío de un ansia sensual;
billetes de \
tranvía, vales \
que la Luna, la eterna celestina,
para limpia' \
en su manto de azur y purpurina,
botas, autobu'
prender quiere tu rosa virginal.
ses y sellos de \ Guillermo FRANQUESA
.., de que aquella película hecha correo, que es demasiado...,
en Barcelona a base de la co= paracambio de un duro mien=
media de Jardiel Poncela « Las tras viene la nueva moneda.
cinco advertencias de 5ata=
nás» no va a íener el éjdío que
La Cooperativa Integral Vaquera
... de los paquetes de «abisínios»
sueñan los editores. y cajetillas de flor de andamio Lechera de Barcelona
que se venden en algunos esta^ C. N. T. - U. G. T.
blecimientos como el más eX'
... de que el sindicaío cinema' Exceso de original nos impiden ocuparnos con la ex-
quisito habano.
íográfico de la U. G. T. iba a tensión que desearíamos de La Cooperativa Integral Va-
rodar LiA del manojo de rosas; quera Lechera de Barcelona, deseo que cumpliremos en
pero el maestro Sorozáhal, que ... de la nueva labor en circula' próximo número. Ni la intensa ofensiva que los antiguos
decía que sí..., luego dijo no, ¡y ción. vulgarmente llamada Fa» patronos pacientemente emboscados desplegaron contra
adiós película t ber, o sea los recortes de los esta organización, ni los inconvenientes inherentes a la
lápices que han puesto de moda anormal situación por que atraviesa el pais, tales como
los dibujantes. dificultades en el transporte, alza en los precios de fo-
... de la ocupación de Teruel, el
rraje y piensos, ma^'or demanda ante menor producción,
éxi(o de nuestro glorioso Ejér=
... del éxito cada día mayor de han sido suficientes para destrozar esta industria que re-
dio Popular.
Catalunya, el diario de la gentada por expertas manos proletarias sabe resistir to-
noche de la Confederación Nu' dos los embates, preparando un mañana mejor. Solu-
... ae la animación en el ataque eional del Trabajo, que cada ción del paro obrero, construccinó de cuadras modernas
de falangistas y requetés ante día tiene más lectores antifas- para el ganado, elevación cultural y social de todos los
el empuje de los republicanos- cistas. cooperativistas es parte de la labor realizada hasta hoy.
Vencida la sublevación fascista y serenada la situación,
... del centenario de la reinsíaw la férrea voluntad y la capacidad demostrada por los
... del desconcierto entre los fas-
ración de la Universidad de compareros responsables de *la Cooperativa Integral
cistoides de retaguardia, que
Barcelona. Vaquera y Lechera, fuertemente apoyada por una in-
empiezan a perder su última destructible unión smdical, harán que esta industria figu-
esperanza. re en primera linea para orgullo del proletariado español.
... de la impaciencia del público
por conocer la notable obra de i
... del viaje a América del fa- iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiiMiiMiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiii^
Benavente N o quiero, no quie» j
moso Cortés; bueno, famoso es
un decir: Cortés el de Patrullas
ro, esa película rodada por el
S. I. E., y cuyo estreno será un ;
¡ B a r E S T R U C H Í
de Control y ex artistadecine...
verdadero acontecimiento. \
de los de por aquí.
¡CAFÉS, VINS I LICORSI
... del próximo estreno en el I
... del próximo libro sobre Ro' teatro Principal Palace de la \
sita Díaz Gimeno, que editará obra de Iquino. i I PLACA NOVA, 10 . TEL. í 5838 . BARCELONA |
en breve 'Mi revista» con ca»
^IIIIIIIIIIIIIIIIIIIIMlilMIIIIIIlililílllllMIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIHli?.
rácíer sensacional.
... de la alegría de los periodis' [
tas madrileños que nos han vi' \
,.. de lo bonita que ha estado
Baacelona con la nieve de des=
sitado al ver lo bien colocados
que están aquí sus compañeros I
i
J, M A M T Í M A R T Í
I EMPRESA C O L E C T I V I Z A D A
pedida de año. salidos de Madrid. i
Sombreros - Tejidos - Confecciones
Marroquinerío - Géneros de punto
«Mi revista» ha sido visada por la censura Guantes - Medias - Perfumería
iiiiiiiKiiitrMrttitiiKiiiKiiiiiiin
PASEO Pl Y MARGALL, 25 - 27 BARCELONA
riM)iniiitiniMiiinMiiniiMHMiiiMiitíiiiii(ii)iii)iiiiiiiiiiiiiiiiiu)iiMiiiiiiiiniiiiriiiinii'niiiiiiiiiii!i<iiiiMi,iiiiiiiiniiii!iii.iiniiHiiiM. IIIMIMIMIIMI!IIII<:
"Aíl
tQ\rÍ5ta"

en

México

VENDEDORES
E n cualquier calle,
en cualquier esqui-
na, los vendedores
muestran su mer-
cancía, venden los
trabajos sutiles de
los indios artistas:
jicaras, bateas, gua-
raches diminutos...

H
VOCACIÓN DE MÉXICO
Nueve dibujos del niño José García Narezo
El niño tiene catorce años. N a c i ó sordo. H o y puede entenderse por la palabra hablada
gracias a una educación certera. Es extraordinariamente vital. Superdotado para percibir la
vida en torno, para resumir articuladamente las realidades que le cercan, p a r a transformar lo
que intuye, lo que a su sensibilidad compleja se le adelanta como activo, será, a su hora,
ejemplo señero entre los más ciertos ejemplos.
A los cinco años sus padres, como él españoles, lo llevaron a México, d o n d e estuvo hasta
bien cumplidos los diez. Hace más de tres años que retornó a España, trayéndose bien inte-
grada en su sensibilidad infantil la gracia plástica mexicana, lo popular visible del gran país
hermano.
Recientemente se le dijo si sería c a p a z de evocar, en dibujos, algunas escenas vividas,
g o z a d a s por él durante su vida mexicana, y pronto su fina memoria visual asoció y trajo a pri-
mer plano varios aspectos interesantes que se ofrecen en estas paginas, que reflejan muy viva-
mente la personalidad del pueblo que tan cercano está a nosotros en estas horas decisivas
para nuestra existencia libre. • -
Son notas agudas, esenciales, que al reflejar la realidad de M é x i c o acusan firmemente una
c a p a c i d a d de expresión artística de excepcionales perspectivas.
• - ©.:
^TTÍiCÍ*

1¡\jii<e0o^

Junto al lago
¿Será C h a p o l a ? ¿Será Pátzcuaro? Un lago mexi-
cano - este, el otro - con sus pescadores, con sus
redes, con sus primitivas embarcaciones, con su cerco
de montañas hermosa?, es el tema de este d i b u j o .

Familia
La familia india vuelve del mercado, va hacia e'
mercado, a vender, a comprar... Como siempre, cami^
na c a r g a d a , silenciosa, dolida por un pasado triste
que se p r o l o n g ó con exceso.
1¡\jire0a

El maguey
Hasta las laderas de la montaña que tiene su crá-
ter abierto, que José animó por su gusto, se extiende
el campo de magueyes, de d o n d e sale el rico pulque
que unos campesinos extraen.

El mere ado
Éste ya es un mercado en forma, con sus puestos
Organizados, con sus «sombras» reservadoras, con su
clientela fija a punto. Es en el pueblo pobre, a p a r t a d o ,
beneficiado sin embargo por la revolución popular.

k&¿M:;'
^íjmá^

El campo
En el c a m p o fértil los caballos pastan, corretean,
engordan. Junto al árbol amigo, los vigiladores des-
cansan. El indio y su perro saben que no hay peligro,
que ya pasó la é p o c a en que nada estaba seguro.

Campesinos y soldados
En cada campesino hay un defensor de las libertades,
del bienestar que se ganó con sangre, con dolor, con
injusticias y violencias imposibles de soslayar. El fusil, las
«carrilleras» y el vaso de pulque encuadran las horas de
espera.
1(\jire0^

^iSfis^
Los frutos

José recuerda bien, con fruición que acrecientan


las limitaciones que nuestra guerra implica, los envíos
de tierra caliente, la abundancia y la baratura de los
frutos del trópico que acaso no vuelva a gustar.

La escuela nueva

Muchas escuelas, muchas magníficas escuelas se han


levantado en México durante los últimos tiempos. Una de '
ellas recordó y anotó matizodamente el dibujante niño, pre-
cisando su aspecto funcional, la gracia eficaz de su trazo.
«El ionio de neíaíe
en Ano» J. Rubén Romero,
cantor de la gesta
Por

MANUEL DE C Ó R D O B A popular liberadora

Pasó por Barcelona J. Rubén Romero trazando una


estela de simpatía. En cada persona que se le acercó,
dejó un amigo. Prendidas en su afecto y en su caba-
llerosidad quedaban las luces vivas de la admiración y
del cariño.
El tránsito de J. Rubén Romero por el Consulado
de México en Barcelona quedará perennemente en el
recuerdo de quienes le trataron.
Dignificó con su gran espíritu caballeroso el cargo
que ejercía, oponiendo el ejemplo de su hombría de
bien, al que daban los que, al socaire de representa-
ciones semejantes, aprovecharon la revolución española
para comerciar descaradamente, exportando mercancías
no clasificadas en los aranceles de aduanas: hombres.
Conversando un día con un periodista español, dijo
j . Rubén Romero, refiriéndose a las alternativas poli-
ticas por que atravesó su país hasta llegar a la conso-
lidación de las esencias democráticas:
—Terminó la tiranía de Porfirio Díaz parigual a
la de Gómez en Venezuela. Fué aquél un largo pe-
ríodo sin voluntad nacional, sin sufragio, sin libertad.
Como en todas las dictaduras, quebranto en la hacien-
da, empresas nacionales en manos extranjeras y algu-
nas obras brillantes, edificios magníficos que se ofre-
cen al pueblo para disculparse y decirle: ¿Veis como
lo hago muy bien? Como si un montón de mármoles
pudiera ser en algún caso superior a la libertad del
hombre.
"Eliminado í->orfirio, Madero luchó para imponer la
voluntad del pueblo; pero como se trataba de un hom-
bre civil, tuvo enfrente la mala voluntad del elemento
militar. Se le preparó un cuartelazo de tipo español,
como el actual, y le asesinaron. Los campesinos hicie-
ron un levantamiento por los campos y los cerros hasta
conseguir la derrota de Huerta. En esta revolución
fué cuando cuajó el adelanto social de México, porque
al vencer se planearon las restricciones de una política
clerical terrible y se abrió camino al mejoramiento
obrero."
* * *

J. Rubén Romero, que es, por encima de todo, un


escritor de méritos relevantes, de cuya alta alcurnia
intelectual son pregoneros sus libros Rimas bohemias,
La musa 'oca. Sentimental, Tacámharo, Versos viejos.
Apuntes de un lugareño, Desbandada, El Pueblo ino-
guitarras y otros tantos violines. Pero había que en-
sayar el son que se toca en esos pasos y D. Ignacio nos
pudo comprobar, por la pericia con que sacó la tonada,
que ya era un ciego definitivo. Él sirvió de maestro a
los músicos improvisados, que, a decir verdad, apren-
dieron muy pronto los compases precisos para dar cima
a aquella empresa, harto arriesgada por cierto.
Don Ignacio estaba en sus glorias a la hora de los
ensayos, y nosotros parecíamos una banda de chiquillos
traviesos que preparan una diablura. Las cananas, bien
surtidas de parque, habían hecho que los ánimos reco-
braran su brío.
Para músicos se eligieron a individuos de rumbos
distantes, a fin de que no los conocieran al andar por
^ »',»«»* /viiíAA^lít 1
las calles del pueblo con las caras descubiertas, y el
Recuerdos d e la revolución m e x i c a n a : Tropas f e d e r a l e s d i r i -
papel de maringuias lo aceptamos Nazario y yo, con
giéndose a c o m b a t i r contra los patriotas defensores d e los otros dos mocetones valerosos y fornidos.
ideales democráticos. —No te pongas tanta 'nagua que a la hora de los
cocotazos te estorbarán hasta para correr — decíanos
cente y Mi caballo, mi perro y mi rifle, fué uno de los
Aurelio, quien hacia veces de director de escena—. Y
forjadores de la liberación de México.
tú, Nazario, quítate la pistola del cuadril, que parece
Su rifle, puesto al servicio de la causa popular, con-
que trais polizón.
tribuyó a abrir paso a la verdad. De sus andanzas
—Yo voy con ustedes—dijo resueltamente D. Ig-
como guerrillero popular ha escrito galanamente cró-
nacio.
nicas de una emotividad insuperable. En sus dos libros
—Quédese, viejo; mire que nos estorbará.
Desbandada y Mi caballo, mi perro y mi rifle, recoge
•—Déjenme ir siquiera hasta la orilla del pueblo. Me
estampas de la epopeya popular, glosándola con maes-
quedaré con los otros cuidando los caballos.
tría, de la que es buena prueba El torito de petate en
Nos emperifollamos con miles de desfiguros: faldas
Ario, que pasamos a reproducir:
rojas, amarillas, llenas de holanes y de cintas; blusas
"—Mi coronel, ¿nos deja ir a Ajuno, a cortar la de color solferino con la pechuga abullonada para dar
via? cabida a aquello que el hombre coge en la lactancia y
--No, porque el general dice que eso de asaltar viene a abandonar en la vejez. Nos rellenamos con las
trenes es de bandidos y no de revolucionarios. carrilleras para fingir morbideces que no existían...
—Entonces, ¿vamos a Jesús del Monte a quitar el Descendimos de la sierra y en un lugar espeso, que
agua a los de Morelia? llaman El PinaUto, se organizó la mascarada. Aurelio
—Somos pocos... revelóse allí como un buen capitán y como un férreo
—Ése es el chiste, jefe. Si no se hace algo 'hora atleta, pues, además de no olvidar detalle y de hacer-
que andamos bien parqueados, acabarán por decir que nos oportunas recomendaciones, cargó con nuestros
tenemos miedo. rifles acomodados dentro de la barriga del toro, sin
—¿Miedo yo? — repuso Aurelio, pelando tamaños que denotara torpeza alguna en los movimientos que
ojos y abriendo de par en par el portón de su boca, hacía para embestirnos.
para lucir los dientes orificados—. Me juego la vida
con cualquiera a que entro en un pueblo hasta la mera
plaza y le jinco su susto a los pelones.
—¿En un pueblo que tenga guarnición?
— En Ario, pongo por caso.
- ¿Y cómo?
—Ya les diré cómo a los que quieran acompañarme.
Días después Aurelio nos llamó para confiarnos su
secreto. El plan era bien sencillo: había que preparar
un torito de petate, y unos locando las guitarras, otros
los violincs y otros disfrazados de marin^^uias, caer en
Ario como una de tantas comparsas en los festejos del
Carnaval, va muy cercano. Aurelio iría metido dentro
del animal y llevaría las armas escondidas en la panza
del torito. Un indio de Opopeo encargóse de conseguir
vestidos de mujer y máscaras pintarrajadas para dis- ,
frazarnos; otro agente secreto compró en Paracho dos Tropas f e d e r a l e s r e g r e s a n d o de los frentes d e combate.
—De aquí no pasa usted—dijo Aurelio a D. Igna- a las criadas por entre los praditos del jardín, y aquella
cio—, y usiedes a Dallar y a caniar nasta que estemos a quien alcanzaban y le rompían un cascarón en la
en la piaza. cabeza tambaleábase como beoda o como si le dieran
Con el barullo y la emoción el pobre U. Ignacio un golpe con un martillo, que así de suaves suelen te-
parecía mas nervioso que otras veces. ner las manos los rancheros para sus inocentes cari-
t r a el inanes de Carnaval y, por seguir los pasos cias.
de nuestra comparsa, la tarde se revistió tamoien con E-1 toro pasó cerca de mí y .Aurelio me dijo:
todos sus coíormes. —Desde el portal de los Infantes, pero cuiden de
bajamos, tocando un son, por la calzada de Ca- no tirar a las gentes pacíficas.
nintzio, borueacla de árboles añosos que, al desplegar Los músicos herían con crueldad los pechos que-
su ramaje, parecían abanicos gigantescos. jumbrosos de las vihuelas:

¡Upa!, torito, ¿quién te toreaV ¡í:.pa, torito, bríncale las trancas,


Doña Juanna con su zalea... levántale a Lnuclia las enaguas blancas!
Baila de gusio, camina de prisa,
Precedíanos mi perro, saltando alegremente. Mi pa' que le rompas también lu camisa...
perro, que ya había conquistado dos timbres entre los
hombres de la revolución: su cariño y un nombre. Cen- imempesiivamenie el toro se introdujo en una tien-
tinela, porque velaba con amor nuestro sueño y, con da del portal y toaos nosotros le seguimos.
sus ladridos, nos daba siempre el toque de alerta. Aurelio tiro la armazón y los músicos los instru-
De los tendajones salían las gentes para vernos pa- mentos adonue ei rey David aventó el arpa.
sar, y los chiquillos nos rodeaban brincando y palmo- Como por encanto salieron las caraüinas y ios pri-
teando con regocijo. meros tiros rasgaron el aire.
— ¡Viva la revolución! ¡Mueran los asesinos de Ma-
¡Epa!, torito, ¿quién te agasaja? dero!
Doña Cliepita con su sonaja... Mientras las maringuias nos despojábamos de nues-
tras mujeriles vestimentas, los companeros se agrupa-
Dos soldados a medios cliiles se detuvieron en una ron en el portal, decididos a arremeter a cuantos se les
esquina y, con señas indecorosas y groseras palabras, enfrentaran. Los dependientes de la tienda quedáronse
comenzaron a azuzar al toro: ora, ca... bresto, ensarta inmóviles, paralizados por el susto, y al grito de ¡viva
una puta de esas. la revolución! la multitud que invadía la plaza se des-
.^J oírlos, Aurelio echóseles encima y nosotros creí- granó como una mazorca, dejando tal reguero de cas-
mos por un momento que allí terminaba la farsa, pero carones apachurrados, de frutas y de confeti, que aque-
contentóse con ponerles los cuernos en la barriga, si- llo parecía una patio de vecindad después de romperse
mulando un fiero derrote. la piñata.
En la plazuela de Jesús María hubimos de detener- Diez, en total, éramos aquellos chiflados que aco-
nos para bailar el son y cantarlo: metíamos ia locura de caer en la propia madriguera de
¡Alza, torito color de canela, sesenta pelones, armados hasta los dientes y provis-
sube a la cania y apaga la vela! tos de una ametralladora que nos podía hilvanar a tiros,
como una máquina de coser, a los diez juntos; pero
Pasamos frente a la cárcel. Los presos, apiñados éramos diez voluntarios entusiastas, exaltados por las
detrás de las rejas, reían al vernos brincar y sacudir ideas de la revolución, dispuestos a morir en la raya,
en los cuernos del toro las rojas frazadas, desteñidas y no sesenta cuerdeados, tibios instrumentos de un go-
por la lluvia y el polvo de todos los caminos. bierno de crimínales, sin convicciones y sin bandera.
Un hombre del pueblo preguntó con curiosidad al Sin convicción y sin bandera, pero, repuestos de la
de la bandurria: sorpresa, comenzaron a aparecer por las bocacalles y
—De 'onde viene la mojiganga? a disparar duro y macizo, no precisamente con casca-
—De la Chuparrosa—contesté apresuradamente, te- rones. Una bala dio sobre mi cabeza y el vidrio de un
meroso de que mi compañero, por ser del norte, se aparador saltó hecho añicos; otra vino a paralizar el
atrojara en la respuesta. brazo de uno de los guitarristas, el más distinguido en
Mi corazón latía sobresaltado a medida que nos su breve carrera musical. Un certero disparo tocó el
acercábamos a la plaza, y al desembocar en los por- corazón a uno de los nuestros, deshojándolo como si
tales paré de bailar sintiendo que las piernas rehusa- fuera una rosa.
ban sostenerme. ¡Malditas piernas de niño baldado! También nuestros proyectiles abrieron en las car-
En la plaza no cabía ni la punta de un alfiler. Por nes enemigas grifos de sangre y de dolor. Mi rifle no
las banquetas iban los catrines muy serios, echando se contentaba con herir o matar: insultaba iracundo y
paso volado, y las señoritas principales los seguían con sus estampidos parecían fuertes blasfemias que rebo-
el rabillo del ojo para que no las sorprendieran con taban en los progenitores de cada pelón.
algiín imprevisto cascaronazo. Los pelados perseguían Pero las carrilleras fueron quedando vacías.
—Hay que subir por la parroquia antes de que nos
corten la retirada—aconsejé a mis compañeros.
.'M doblar una esquina vimos a un hombre, único
en la calle desierta, que bajaba dando traspiés y blan-
diendo en el aire un garrote. Mi perro, al verlo, corrió
a él, agitando alegremente la cola. Aquel hombre era
D. Ignacio, el ciego que salía fatalmente al encuentro
de los tiros federales. Todos le gritamos a la deses-
perada:
—¡Tírese al suelo!
—¡Escóndase en el marco de una puerta!
—¡Estúpido!
—¡Loco'
En un denodado impulso plantóse Aurelio en mitad
de la calle, intentando desviar la atención de los fe-
derales.
- ¡Tiren aquí... collones! El Cuartel General de Huerta, instalado en un vagón
Los tiros agujereaban el traje blanco de las pare- ferroviario.
des, silbando a nuestro rededor con su trágica sirenita.
Don Ignacio descendía con lentitud, la cabeza des-
Como en su prosa, dominan en los versos de J. Rubén
cubierta, los ojos inmóviles, como los de las esculturas,
Romero el amor a los parias, el afán de servir a los
y un grito quebrado y ronco en la boca:
oprimidos. Esto fué, sin duda alguna, lo que le movió
—¡Abajo los ricos! ¡Vivan los pobres, los po...!
a escribir:
De pronto se detuvo, abrió los brazos y cayó de
espaldas sobre las piedras de la calle. Pasan las ovejas cubiertas de lana,
Al pasar corriendo junto a él, lo vi tendido en for- el pastor las sigue desgarrado y mudo.
ma de cruz, andrajoso, ensangrentado, sucio, corho el A ellas Dios las viste,
Cristo de todos los tiempos, clavado estérilmente so- al pastor el amo lo deja desnudo!
bre la inmunda costra de la tierra. * * *
Ganamos la orilla del pueblo y nos volvimos a per-
der entre las sombras del monte. Cuentan que cuando vino destinado como cónsul de
Llegó iadeante mi perro y me besó una mano. El México a Barcelona tuvo necesidad J. Rubén Romero
hocico del animal dejó en mi piel una humedad pas- de visitar, en Madrid, al último Borbón que ha pa-
tosa, coagulada, fría. ¡Sangre! Sangre de D. Ignacio, decido España.
el ciego, como un blasón lacrado en rojo sobre una — Bien venido, señor cónsul—díjole Alfonso el Afri-
carta de ultratumba..." cano-—. ¿Qué impresión le ha causado España? ¿Le
gusta?
—Mucho, señor.
J. Rubén Romero, escritor de relieve internacional, Luego de departir sobre tema« de carácter gene-
con personalidad bien definida, es el cantor del pue- ral, insinuó maliciosamente el jerarca:
blo mexicano. Sus libros tienen un vigor sorprendente, —Dígame, cónsul, ¿por qué son tan inquietos en
por la riqueza del léxico, por la belleza de las narra- su país?
ciones, por la perfección de las imágenes y, sobre todo, La respuesta de J. Rubén Romero fué rápida, grá-
por el hondo espíritu humano de sus personajes. fica y tajante:
Poeta de finísima sensibilidad, ha dejado escritos —Es, señor, la rebeldía lógica de los que no tie-
los libros admirables que cuidamos de reseñar antes. nen qué comer contra los que lo tienen de sobra...

jtiiiiiriiiiiitiiitiHiitiitiiiiiiiiiiiiiti tiitiiiMitiimitti-iiiiMiriiitiiiiirtiirMiiiiriiiMimitiiiiiiiMiiiiiriniimitiiriiitiiiMiriiiriiiniMiriiiiiiiiirNiiip:

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Desfile del Ejército ante e|
Palacio N o c i o n a l con motivo
del aniversario de la libera-
ción de México. 1[^i¡m^

M é x i c o : Palacio
de Bellas Artes.

México ocupa el tercer lugar entre las repúblicas


hispanoamericanas. Sus riquezas son incalculables.
Dice el profesor Galindo en su Geografía de México,
que el suelo de aquel país encierra positivas maravi-
llas en riquezas naturales para proveer abundante-
mente de materias primas a la industria y al comer-
cio: plata en sus entrañas, con la cual podría cubrir
toda el haz de la tierra; oro, hierro, cobre; vegeta-
les de diversas zonas climatéricas y de innumerables da, un escaso aprovechamiento de las riquezas del
especies útiles; llanuras inmensas propicias para apa- país, proporcionalmente a su enormísimo potencial.
centar copiosa ganadería; fauna riquísima de espe- La superficie del territorio mexicano es de un mi-
cies de no menor importancia; es decir, a primera llón 969.000 kilómetros cuadrados, con una pobla-
vista, un verdadero paraíso. ción de 16.552.722 habitantes. Por Estados se subdi-
Queda así magníficamente sintetizado lo que Mé- vide la población de México como sigue: Aguasca-
xico representa en la economía mundial. Y como in- lientes, 132.942 habitantes; Baja California (distrito
teresa que sea divulgado todo el valor que debe asig- Norte), 47.993; Baja California (distrito Sur), 46.476;
nársele, pasaremos a estudiar por grupos, concisa- Campeche, 84.971; Coahuila, 434.313: Colima, 60.845;
mente, algunos aspectos de la riqueza mexicana. Chiapas 521.318; Chihuahua, 491,893; Distrito Fe-
A México le falta una condición que es indispen- deral, 1.217.663; Durango, 395.807; Guanajuato,
sable para que puedan ser puestas en explotación 981.963; Guerrero, 637.530; Hidalgo, 674.674; Jalis-
sus fabulosas riquezas. Escasamente poblado el país, co, 1.239.484; México, 978.412: Michoacán, 1.014.020;
se halla a faltar el elemento que es indispensable Morclos, 132.582; Nayarit, 170.054; Nuevo León,
para producir riqueza útil: el hombre. 416.173; Oaxaca, 1.070.852; Puebla, 1.148.286; Que-
La densidad de población difiere en todos los Es- retaro, 234.386; Quintana Roa, 12.150; San Luis de
tados, alcanzando la máxima, 44,88 habitantes por Potosí, 559.106; Sinaloa, 385.512; Sonora, 315.312;
kilómetro cuadrado, en el de Tlaxcala, y la mínima Tobasco, 223.838; Tamaulipas, 343.677; Tlaxcala,
en el de Sonora, donde escasamente se llega a con- 204.424; Veracruz, 1.376.865; Yucatán, 384.790; Za-
tar con 1,33 habitantes por kilómetro cuadrado. catecas, 465.021, e Islas Marías, 1.148.
Plantea lo expuesto una serie de problemas de La descomposición de la población mexicana por
difícil solución, que determinan, como causa deriva- grupos de profesiones puede quedar referenciada por
U gestión del Presidente Cár-
denas, realizador del Plan Se-
xenal, marca el ápice del des-
envolvimiento de las fuentes
productoras del país
los porcentajes relacionados con la cifra total que
M é x i c o : Ministerio de Comunicaciones.
copiamos a continuación:
Agricultura y ganadería, 63.0; minas y cante- vo, constituido por el Presidente de la República,
ras, 0.5; industria, 11.4; comercio, 4.9; marina mer- cuyo mandato dura seis años, y Poder judicial, for-
cante, 0.1; comunicaciones y transportes, 1.3; Ejér- mado por la Suprema Corte de Justicia.
cito y Marina de guerra, 0.9; Administración pú-
El Presidente de la República designa diez se-
blica, 0.2; profesiones liberales, 1.5; servicio domés-
cretarios de Estado, para que le secunden en la obra
tico, 4.4; demás, no clasificados, 11.8.
de gobernar a la nación.
Como detalles demográficos complementarios ci- Para su régimen interior, la Constitución Fede-
taremos: Número de matrimonios, 81.715; nacimien- ral ordena que los Estados se rijan por un Gobierno
tos, 634.897; defunciones, 435.647; mortalidad infan- republicano, representativo, popular, y que su divi-
til, por cada mil nacidos vivos, 193; inmigración sión territorial y su organización políticoadminis-
transoceánica, 8.375; emigración transoceánica, 5.709. trativa tengan por base el municipio libre, adminis-
Las principales ciudades mexicanas son: México, trado por Ayuntamientos.
con 906.000 habitantes; Guadalajara, con 143.500; Los presupuestos del Estado mexicano correspon-
Puebla, con 96.000; Monterrey, con 88.000; Mérida, dientes al período 1929-1935 fueron:
con 80.000; San Luis de Potosi, con 57.000; Tampi-
co, con 55.000; Tucubaya, con 55.000; Veracruz, con Pesos oro
54.000; León, con 54.000, y Torreón, con 51.000.
Ingresos Gastos
Ano
La Constitución mexicana 1929 290.000.000 291.117.789
La organización del actual Estado político me- 1930 277.541.855 279.171.739
xicano ha sido laboriosa y difícil, como acontece en 1931 227.689.969 231.054.495
todo país joven que, sin experiencia, camina hacia 1932 213.074.000 233.771.971
su destino. Ensayando diversas formas de Gobier- 1933 236.000.000 233.771.971
no—Imperio, Centralismo, Federalismo—ha acabado 1934 244.000.000 243.061.594
por adoptar la forma de República representativa 1935 275.800.000 275.795.000
democrática federal, compuesta de veintiocho Esta-
dos libres, soberanos e independientes para su régi- El cifrado mayor de la partida de gastos en
men interior, pero unidos en una federación estable- la época prerrevolucionaria corresponde al ejercicio
cida de acuerdo con la Constitución de 5 de febrero 1910-11, con 100.913.924 pesos.
de 1917, que pasó a substituir a la del año 1857, has- El Banco de México, cuya actuación data de 1." de
ta entonces en vigor.
Los Estados son fracciones integrantes del terri- M é x i c o : Escuelo N o c i o n a l de ingenieros.
torio nacional, que poseen recursos suficientes para
llevar vida independiente dentro del pacto federal,
pero cuyas leyes y disposiciones soberanas no pueden
ser contrarias a los mandatos de la Constitución.
La capital de la República—México—radica en
el Distrito Federal, donde residen los Poderes su-
premos de la nación—Poder legislativo, compuesto
de dos Cámaras, la de diputados o representantes
populares, con ciento setenta miembros elegidos por
períodos de tres años, y la de senadores o represen-
tantes de los Estados, dos por cada Estado, elegí-'
dos para legislaturas de seis años—; Poder ejecuti-
México: Vista panorámica de la capital federal.

septiembre de 1925, se constituyó con un capital ini- cuyo signo monetario fué estabilizado el 27 de junio
cial de 100 millones de pesos, habiéndose reservado de 1934 sobre la base del peso plata.
el Estado el 51 % de las acciones. Goza de los privi- El general Lázaro Cárdenas — nacido el 30 de
legios de Banco emisor, habiendo puesto en circula- mayo del 1895 — desempeñó la Presidencia de la na-
ción billetes por valor de 104 millones de pesos, ga- ción. Fué elegido para el período 1934-1940, el día
rantizando su cubertura 24 millones de pesos oro. 1." de mayo de 1934, habiendo inaugurado su man-
Los efectos comerciales, y los préstamos y des- dato el día 1." de diciembre del mismo año. Obtuvo
cuentos realizados por el Banco de México ascendie- 2.185.000 votos más que su contrincante. Había des-
ron, en 1928, a: empeñado, antes de ser elevado a regir los destinos
Pesos de México, la Secretaría de Guerra y la del Partido
Nacional Revolucionario.
Fondos del Estado, préstamos y des-
cuentos al Estado 4.400.000 El 28 de agosto dei año 1931 fué promulgada la
Préstamos y descuentos en el país . . 65.500.000 nueva legislación social, en la que se reconoce el con-
trato colectivo de trabajo y el derecho a la huelga;
Total 69.900.000 se exige de los patronos que dispongan de instala-
Los depósitos en los Bancos comerciales mexi- ciones higiénicas para los obreros, obligándoseles a
que el ochenta por ciento de éstos sean mexicanos.
canos, al finalizar el ejercicio de 1928, eran:
La jornada de ocho horas fué implantada, cuidando
Pesos
de establecer ios jornales mínimos en cada Estado
Depósitos a la vista 188.000.000 las comisiones especiales designadas al efecto.
Depósitos a plazo . 43.000.000 La Federación de Sindicatos Obreros del Distrito
Total 231.000.000 Federal se ha dirigido al presidente de la Junta Cen-
tral de Conciliación y Arbitraje, requiriéndola para
La grave crisis económica que se produjo en Mé- que sean fijados los salarios para el año 1938 con
xico, en el decurso del año 1931, como consecuencia arreglo a los principios siguientes:
de la desvalorización de la plata, pudo ser remonta- I.—Hágase un estudio que permita conocer en
da gracias a las reservas excepcionales de la nación. qué proporción ha aumentado el costo de la vida dei
trabajador en la ciudad de México, y en la misma transportes, con 47.600 afiliados, y la de los obreros
cuantía acuérdese el incremento del salario mínimo portuarios, con 15.000 adheridos.
vital en esta jurisdicción del Distrito Federal. México cuenta con 16.714 millas de vía férrea, de
II.—Que la Secretaría de la Economía Nacional las que 13.670 se hallan bajo el control del Gobierno
y el Departamento del Distrito Federal tomen de con- Federal, estando en explotación 12.691.
suno medidas y resoluciones eficaces y enérgicas, Los principales puertos mexicanos son: Veracruz,
tendentes a impedir que bajo ningún pretexto con- Tampico, Puerto México, Salina Cruz, Manzanillo y
Acapulco. En 1933 recalaron en ellos 11.022 navios
mercantes.
Se ha dado gran celeridad a la apertura de nue-
vas carreteras, efectuándose inversiones que repre-
sentan más de 30 millones de pesos en un período de
siete años, iniciado el 1925. En enero de 1934 que-
daron abiertas a la circulación 2.300 millas de carre-
teras de las 5.700 proyectadas.
El número de automóviles registrados en México
asciende a 86.420.
México presta especial atención a las materias de
enseñanza, destinando sumas enormes a cubrir las
atenciones del profesorado y de los centros escolares.
En 1935 fueron asignados 48.000.000 de pesos
al presupuesto de Instrucción pública, con aumento
de nueve millones sobre el ejercicio anterior.
El censo escolar, en 1931, ascendió a 1.915.419
México: La Biblioteca Nacional,
alumnos, asistidos por 44.501 profesores, en 19.523
colegios.
tinúen elevándose los precios de las subsistencias, Se ha dado gran impulso a las escuelas de agri-
eliminando la amenaza de que al mismo tiempo que cultura y a los politécnicos.
aumenta el tipo de salario mínimo, suban los artícu- La Universidad Nacional de México, fundada el
los de mayor consumo. año 1553, es una de las más famosas entre las del
III.—Mientras por los procedimientos constitu- centro y sur de América.
cionales se procede a reformar la Ley Federal del
Trabajo, estableciendo las comisiones especiales para
fijar salarios mínimos para las diversas categorías
de trabajadores calificados, promuévase una acción
sindical, apoyada por las autoridades del trabajo,
con fundamento en la fracción I del artículo 260 de
la Ley Federal del Trabajo, que tienda a igualar y
mejorar en lo posible los salarios de los trabajadores
que no quedan comprendidos en las resoluciones re-
lacionadas con ei salario mínimo vital, único del que
por ahora se ocupa la Ley citada.
IV.—Promuévase con el apoyo y la ayuda de la
Secretaría de la Economía Nacional, por lo que hace
a la parte técnica y de organización, y de la Secreta-
ría de Hacienda o directamente de las instituciones
bancarias respectivas, del financiamiento necesario,
el fomento de cooperativas de consumo y de Cajas
de Crédito Popular, como medidas eficaces en defen-
sa del salario del trabajador,
V.—Como un recurso más para aliviar ¡a situa- México: Tolegas de oro destinadas al Banco Nacional de
ción del trabajador asalariado, sin tener que acudir México pora acrecentar la garantía de los billetes pues-
al aumento constante de salarios, inicíese ante el tos en circulación.
Congreso de la Unión una Ley Inquilinaria para el
Distrito Federal, desterrando los abusos y exaccio- El Plan Sexenal mex íes no
nes de los dueños de casas. México ha iniciado brillantemente el período de
En 1922 existían en el territorio mexicano 564 or- intensificación de sus riquezas, sometiéndolas a apro-
ganizaciones obreras, contando con 640.000 miem- vechamientos sistematizados. El Plan Sexenal ela-
bros. Destacan por su importancia la sindical de borado por el Partido Nacional Revolucionario tien-
co y Manzanillo; y realización de mejoras en la ca-
pital federal, comenzando por la terminación del Pa-
lacio de Bellas Artes, cuya construcción fué comen-
zada durante el mandato del Presidente Ortiz. Pudo
ser inaugurado ese soberbio edificio, valorado en
siete millones de pesos, el 29 de septiembre de 1934,
por el Presidente Rodríguez.
Las felices iniciativas y el gran espíritu creador
del Presidente Cárdenas acentuaron en tales térmi-
nos las realizaciones de las mejoras englobadas en
el Plan Sexenal, que se ha logrado verlas avanzar
a un ritmo mucho más acelerado del que fué pre-
C. g e n e r a l d e visto al ser preestablecido.
Brigada J. Félix El 28 de julio del año 1935 concertaron un con-
Bañuelos, g o b e r - venio el embajador norteamericano Josep Daniels y
n a d o r constitu-
cional del Estado
el ministro de Negocios extranjeros de México, Ce-
de Zacatecas, de niceros, fijándose la indemnización global que pasa-
un b r i l l a n t e his- ría a reconocer el Gobierno de México para dejar
t o r i a l revolucio- canceladas las reclamaciones que formularon, por
nario desde las perjuicios habidos durante el período revolucionario
primeras convul-
1910-1920, los subditos de los Estados Unidos. Se
siones revolucio-
narias de 1910.
convino en que los 5.448.000 dólares a que se hizo
ascender la cuantía de los perjuicios, serían pagados
en plazos anuales de 600.000 dólares. El día 2 de ene-
de a articular convenientemente todas las activida- ro de 1936 se efectuó un pago preliminar de 500.000
des generadoras de riqueza, desarrollando las vías dólares.
de comunicación, acrecentando los beneficios de la Siguiendo su obra de saneamiento financiero rea-
política hidráulica, metodizando las exportaciones y, lizó el Presidente Cárdenas la conversión de la Deu-
en suma, aprovechando las energías vitales del país da Exterior, quedando cifrada en 267.000.000 de dó-
en uso adecuado a las atenciones del mercado inte- lares, fijándose el tipo de interés en 5 %, garanti-
rior o de los centros consumidores del extranjero. zándose su pago con los ingresos de aduana. El 16
En diciembre del año 1933 otorgó el Congreso de agosto de 1935 quedó realizada la operación, ade-
poderes discrecionales al Presidente de la Federa- lantándose un año el pago de los intereses y amor-
ción Mexicana para que cuidase del desarrollo y pla- tizaciones.
nificación de las obras a realizar en el ciclo sexenal
1934-1940.
La primera parte del Plan Sexenal tendía a la
reorganización socializada de las escuelas.
Quedaban comprendidos en el Plan Sexenal la
mecanización de las industrias, la intervención fisca-
lizadora del Gobierno Federal en los asuntos extran-
jeros, creando una Comisión de control para las im-
portaciones y exportaciones, otorgándose créditos y
otras facilidades a los exportadores; designación de
agentes de compras para actuar en el extranjero;
reformar el régimen de las cooperativas y organi-
zación de nuevas líneas de transportes; moderniza-
ción de los servicios de telégrafos y teléfonos; crea-
ción de la casa-tipo higiénica y confortable para
obreros; fundación del organismo encargado de ex-
tender los beneficios de la reforma agraria referen-
ciada en el artículo 27 de la Constitución.
Está prevista en el Plan Sexenal la creación de
una Comisión federal encargada de planificar la pro-
ducción y distribución de luz y fuerza; adopción de
un plan intensivo de obras públicas, destinándose, C. Juan G. A l v a r a d o ,
en el período 1934-40, 50 millones de pesos para la g o b e r n a d o r constitu-
habilitación de obras hidráulicas y regadíos en el c i o n a l d e l Estado de
Distrito Federal y los Estados de Veracruz, Tampi- Aguascalientes.
Campos d e sisal, en
el Estado de Yucatán

La agricultura mexicana
El Estado d e Y u c a t á n p r o d u c e la mi-
tad de la fibra de sisal ^ h e n e q u é n —
q u e se c o n s u m e e n el m u n d o

En 1931 - 32 fueron e x p o r t a d o s a los Estados


U n i d o s 4.757.000 racimos d e p l á t a n o s

La feracidad de las tierras de México ha sido


reconocida por todos los que han estudiado la econo-
mía de aquel país, tan rico en materias naturales.
Y si bien es cierto que la carencia de brazos frena
las posibilidades productoras, no lo es menos que las 196.915.400 hectáreas integrantes del territorio
México ofrece cuantos elementos exige el mercado mexicano, de la forma siguiente;
indígena, quedando un importantísimo margen para Tierras laborables, 5.517.573 Ha.; c e r e a l e s ,
ser destinado a las necesidades de los grandes cen- 3.854.690 Ha.; prados artificiales y cultivos forraje-
tros consumidores del exterior. ros, 47.443 Ha.; otros cultivos, 1.615.440 Ha.; culti-
Intentaremos abocetar las características de la vos hortícolas, 1.151.043 Ha.; cultivos industriales,
agricultura mexicana, subordinándonos a las exigen- 464.397 Ha.; cultivos arborescentes y arbustivos,
cias de espacio y de tiempo. 97.120 Ha.
Sobre una superficie de 2.000.000 de kilómetros La producción agrícola mexicana ofrece las si-
cuadrados, han de ser distribuidas las tierras mexi- guientes variedades:
canas como sigue: Cereales.—Maíz, que forma la base de la alimen-
Kmts. tación del pueblo mexicano; trigo, centeno, cebada,
mijo, arroz y manioca.
30 '/( de terrenos montañosos 600.000
Leguminosas.—Habas, judías, patatas, garban-
5 % correspondiente a ríos y vías de co-
zos y lentejas.
municación 100.000
Frutos.—Bananas (de las que se exportaron en
9.5 9^ de terrenos cultivables no irri-
la temporada 1931-32, a los Estados Unidos, 4.757.000
gados 190.000
racimos), naranjas, limones, ananás, nueces de coco,
9.5 ''/( de terrenos cultivables aptos para
mangos, chirimoyas, papayas, anones, mameyes, me-
ser irrigados 190.000
lones, fresas, manzanas, peras, melocotones, nueces,
1 % de terrenos irrigados 20.000
membrillos, etc.
45 % de tierras cultivadas sin irrigar . . 900.000
Cultivos industriales.—Café, cacao, azúcar, algo-
Con sujeción a sus condiciones climatológicas,
dón, tabaco, etc. En Yucatán se produce el 50 %
debe ser subdividido México en tres zonas: La zona
de la producción mundial de fibra de henequén o sisa.l
templada, correspondiente a las altiplanicies, cuyas
En 1933 fué valorada esa sola producción en
tierras son asombrosamente fértiles, produciéndose
15.757.000 pesos oro. Se producen además las fibras
en ellas el maíz, trigo, patatas y toda clase de va-
industriales siguientes:
riedades hortícolas y frutos; la zona semitropical,
constituida por los Estados de Oaxaca, Chiapas, Gua- Fibra de Tampico (ixtle), pita, zapupe, raíz de
najuato. Jalisco, Michoacán, Queretaro y San Luis Zacatón; malvavisco, llamado con el tiempo a ser
de Potosí, en su mayor parte constituidas por tierras un gran competidor del yute; etc.
de aluvión, con una ligera capa arable, siendo los Oleaginosas. — Olivas, cacahuetes, sésamo, pal-
cultivos preferenciales el café, la caña de azúcar, el miste.
maíz, el mijo, el tabaco y el algodón, abundando tam- Viña.—Cuyo cultivo es anterior a la era de la
bién los bosques; y, por último, la zona tropical, que conquista.
presenta tres divisiones netamente delimitadas: la Plantas arbustivas.—Vainilla.
primera sobre el litoral del golfo de México, lluviosa, Plantas medicinales. — Zarzaparrilla, corteza de
con grandes extensiones de bosques, muy rica en tamarindo, jalapa, ricino, etc.
frutos; la segunda, recayente sobre la vertiente del Productos forestales.—La región que bordea el
Pacifico, más calurosa, de tierras mediocres, siendo Pacífico es rica en bosques. El censo forestal cata-
raras las lluvias; y, finalmente, la zona montañosa, loga más de doscientas variedades arbóreas, siendo
cuyo índice pluviométrico es muy elevado. las más importantes el aguacate, campeche, ciprés,
Con arreglo a su aprovechamiento, se subdividen "palo de Moral", fresno rojo, nogal, sauce blanco,
En 8 de mayo del año 1930 firmó un decreto el
Presidente Ortiz Rubio otorgando nuevos derechos
a los granjeros, con el ñn de ampliar la explotación
de las tierras del país. Eran entregadas las tierras
en arriendo por período de cinco años, con la
M é x i c o : Vende-
dor ambulante
condición precisa de que debían ser cultivadas por
d e calabozos. el recipientario o sus familiares.
Fué autorizada en abril del año 1927 la emisión
de cédulas agrarias por valor de 25 millones de pe-
caoba, ébano, palo rosa, pino, índigo, copal, lináloe, sos oro, destinados al pago de las tierras enajenadas.
ceiba, cedros, etc. Desde el año 1929 al 1933 la distribución de tie-
Las principales producciones agrícolas corres- rras alcanzó a 12.934.983 acres, beneficiándose de tal
ponden: Toneladas métricas mejora 592.544 familias, detalle que por sí solo es
pregonero de la enorme importancia que debe reco-
n . . 1931 1932 1933 1934
Producto nocerse a la reforma agraria mexicana.
Trigo 441.6 262.9 329.9 275.0 En abril de 1934 recibieron los beneficios deriva-
Maíz 2.138.7 1.973.5 1.923.9 —
dos de los regadíos 350.000 acres, correspondientes al
Arroz 72.2 73.0 — —
C a ñ a de a z ú c a r . . . . 228.0 187.5 188.0 240.0 plan de obras hidráulicas establecido en 1926, ha-
Café 32.9 43.7 35.3 39.7 biéndose invertido en su ejecución 80 millones de
Algodón 45.6 22.0 56.5 45.2 pesos.
Semilla de algodón . . 87.9 41.0 112.9 105.3 La llegada del Presidente Cárdenas al Poder tuvo,
Patatas 49.5 51.5 51.5 50.0
como correlación justificada en las medidas puestas
Tabaco 10.9 11.1 9.5 —
en vigor por sus predecesores, la adopción de nuevas
México ocupa el cuarto lugar entre las naciones
americanas productoras de trigo, el tercer lugar
como productora de maíz y el segundo como pro-
ductora de arroz.
Existe una tendencia favorable a la intensifica-
ción de los productos del agro mexicano, como con-
secuencia de las leyes agrarias que posibilitan la
obtención de tierras a quienes deseen cultivarlas.
Del dominio público es que el Presidente Obre-
gón decretó en agosto del año 1923 que todos los G a n a d o bo-
mexicanos nativos o naturalizados podían aspirar vino mexica-
a recibir tierras del Estado. Condiciones indispensa- n o , en uno , y^-.:^^?^
bles eran: Ser mayor de dieciocho años y cultivar de los p r i n -
cipales r a n -
por sí mismo una sola parcela campera. Quedaba
c h o s desti-
prohibido el subarriendo o enajenamiento de la frac- nados a l a
ción recibida. Se constreñía la facultad de poseer recría.
parcelas superiores a cincuenta hectáreas tratándo-
se de terrenos irrigados, cien hectáreas cuando fue-
ran de secano o quinientas hectáreas siendo de pas- disposiciones beneficiosas para la agricultura mexi-
tizales. El Estado se reservaba el derecho de perci- cana. El primero de mayo del año 1935, coincidien-
bir veinticinco pesos oro como canon de alquiler por do con el primer aniversario de la elección presiden-
cada parcela. cial, fueron distribuidos 1.365.910 acres de tierras
Anunció el Presidente Calles, el día primero de entre 37.000 familias, en su mayoría del Estado de
septiembre del año 1925, en el Congreso, que Jalisco.
la Comisión Nacional Agraria llevaba distribuidos Las grandes obras de irrigación comprendidas
2.074.072 acres de tierras — una hectárea = 2.47 en el Plan Sexenal en vías de ejecución, vendrán a
acres — entre 76.549 campesinos mexicanos. Poste- acrecentar la riqueza del suelo mexicano, mejoran-
riormente se beneficiaron 2.537 granjeros con la re- do las cosechas y permitiendo que sean implantados
cepción de 1.432.480 acres. En 1928 se había logrado nuevos cultivos.
la colonización de 5.401.019 hectáreas. El censo de la ganadería mexicana se establece
El Banco Nacional de Crédito Agrícola inició su como sigue:
gestión beneficiosa en marzo de 1926, disponiendo Caballos, 1.036.000; asnos y mulos, 1.536.000; es-
de un capital inicial de 50 millones de pesos oro. pecies bovinas, 5.585.000; especie ovina, 2.698.000;
Siguió su marcha progresiva la reforma agraria especie caprina, 5.424.000; especie porcina, 2.903.000.
gracias a las medidas complementarias que fueron La producción de lana se expresa en 13.000 tone-
dictando los gobernantes mexicanos. ladas métricas.
Durango y sus cé-
lebres minas del
Cerro del Mercado
El subsuelo me-
xicano es, en el
mundo, el más
• • r i c o en p l a t a
Buscadores de
oro en «Los Pla- Gráfico de la pro-
ceres>, del Es- ducción mexicano
tado de Gue- de plata,compara-
rrero. da con la mundial.

El subsuelo mexicano es de una riqueza incalcu-


lable. Humbold llegó a afirmar que es una placa de
plata dejada caer por el Creador sobre nuestro glo-
bo. Sin duda alguna el equilibrio económico que ha
podido mantener México a pesar de las grandes con-
vulsiones políticas que ha atravesado el país, se ha
logrado gracias a las exportaciones de minerales,
pmiicciondcPLáTA
que han llegado a representar el 80 '/<: del total de
las mercancías salidas de México con destino a los
grandes mercados consumidores. En 1934 la valora-
ción de las exportaciones de mineral se cifró en
, nUNOlM BOít,^
511.002.000 pesos oro.
Las principales producciones corresponden a los
minerales siguientes: oro, plata, plomo, cobre, zinc,
mercurio, antimonio, arsénico y estaño.
México es el primer país productor de plata
del mundo, representando el mineral beneficiado
3.374.016 kilogramos, de los 8.041.100 correspondien-
tes a la producción mundial.
PPODI)(flONHUI[4Ni3i«(ll61í
Con arreglo a las cifras publicadas por la Sección
de Minas del Departamento de México, las princi-
pales producciones mineras reseñadas correspon-
den a:
Oro (onzas fina.s)
1932 1933
584.487
n)34
637.727 661.390
woDuaion nunoiÁL
Plata ( " " ) . 69.301.000 68.093.700 74.143.301
Cobre (tda.s. m é t r i c a s ) 35.213 39.825 46.268
8.041.100 K$.
Plomo ( "
Zinc ( "
"
"
)
)
130.293
57.256
120.600
89.339
106.333
125.185
opoDuccion níx/cm ^
Antimonio " ) 1.735 1.950 2.668
M e r c u r i o (kilogiamo-s) 157.923
Arsénico 7.859.722
tísimo. Refiriéndose a los yacimientos de hierro del
Cerro del Mercado, en el Estado de Durango, escri-
bió el inglés Bowring:
"Inglaterra produce al año 70.000 toneladas de
hierro que valen, por lo menos, 30 millones de pe-
sos; el Cerro del Mercado, solo, podría surtir de hie-
rro a aquella nación por un espacio de trescientos
iños, produciendo en el transcurso de ese tiempo
1900.000.000 de pesos, cantidad siete veces mayor
|ue todo el oro y la plata acuñados en la Casa de la
Moneda de México desde el año 1690 al 1803."
Mina de f Las dos Estrellas>, en el Estado de M i c h o a c á n .
Edmond Gabriel ha hecho destacar que las siete
Se ha concentrado la gran riqueza minera me- grandes zonas productoras de plata, son:
xicana en los Estados de Durango, Zacatecas, San Primera: Zona de la línea divisoria con los Es-
Luis de Potosí, Guanajuato, Hidalgo y México. tados Unidos, comprendiendo los Estados de Sono-
Tan formidables son los tesoros mineros de Mé- ra, Chihuahua, Sinalva y Durango; segunda, zona
xico, que se afirma que durante los trescientos años occidental de Jalisco; tercera, zona de Guerrero;
de la dominación española se llegó a exportar oro cuarta, zona occidental de Oaxaca; quinta, zona de
y plata por valor de 2.200.000.000 de pesos. Sin em- Hidalgo; sexta, zona de Guanajuato, y séptima, zona
bargo, como la mayor parte del oro y de la plata de la Sierrita de Zacatecas.
extraídos de las minas mexicanas se ha empleado en La superabundancia de plata ha hecho que se
la amonedación, para sintetizar mejor la importan- la designe con el nombre de metal nacional. A él
cia que tiene allí la industria minera, expresaremos debió en parte su gran fama la Nueva España.
las acuñaciones efectuadas desde el año 1537 hasta Los principales centros mineros argentíferos
el 1927, es decir, en un período justo de 390 años: son:
Período colonial 2.151.581.962 Mina de la Valenciana (Guanajuato), una de las
Independencia 1.579.142.776 principales del mundo, correspondiendo a la Veta
Reforma monetaria (1905-1927) . . 760.961.446 Madre, que viene siendo explotada desde el año 1558;
mina de la Raya (Guanajuato), que durante el pe-
Total 4.489.961.184
ríodo colonial, y por espacio de cuarenta y cuatro
Queda aún por consignar un extremo importan- años, produjo mineral por valor de 87.000.000 de pe-

PRODUCCIÓN MEXICANA DE PLATA


EN ONZAS DE LEY FINA

Gráfico
dala
produc-
ción me-
xicano
de piafo,
en los
oños
1932,
1933 y
1934.

ni^i 19SI 1154


El petróleo mexicano

sos; los distritos mineros de Pachuca y Real del


Las zonas petrolíferas mexica-
Monte (Hidalgo).
La producción de oro se concentra especialmente nas equivalen a
en los Estados de Sonora, Coahuila, Chihuahua, Du-
rango, Zacatecas, San Luis de Potosí, Tamaulipas,
Nuevo León, Guanajuato, Queretaro, Hidalgo, Jalis-
14.820.000 acres
co, México, Michoacan, Puebla y algunos más. México ocupa el
El hierro se produce en mayor escala en el Es- cuarto lugar eníre las
tado de Michoacan, cuyo distrito minero de Coalco-
naciones productoras
mán cuenta con yacimientos importantes; Estado
de Hidalgo, con masas enormes de hierro magnéti- de petróleo
co; Estado de Durango, con sus famosas minas del
Cerro del Mercado, cuya base triaungular cubre 560
kilómetros cuadrados.
El hierro meteorice de Jiquilpán (Zacatecas) goza Se ha de añadir a esas riquezas fabulosas el cau-
de gran fama desde hace muchísimos años. dal enorme que representan las piedras preciosas.
Los principales criaderos de cobre se concentran México es un vasto depósito de ópalos, turquesas,
en Michoacan (fundiciones de Inguarán, Oropeo, Chu- amatistas, cuarzo violeta, ónix y mármoles ricos.
rumuco, Santa Clara); en Tejupilco (cobre Gris), Sintetizando la posición de México como país pro-
del Estado de México; Chihuahua (minas de El Ma- ductor de minerales, se le pueden asignar en orden
gistral) ; Zacatecas (en Mazapil, cobre amarillo, ma- correlativo de importancia extractiva los puestos si-
laquita, azurita, cobre nativo, calcopirita) ; además guientes :
en distintos lugares de Sonora, San Luis de Potosí, Plata, primer país productor del mundo; plomo
Hidalgo, Aguascalientes, Coahuila y Oxaca. y zinc, segundo país productor de América; cobre
Los yacimientos explotados en gran escala son y oro, tercer país productor de América. En la pro-
los de El Boleo, en la Baja California, y los de Ca- ducción mundial de oro ocupa México el cuarto lu-
nanea, en Sonora. gar, y en la de petróleo, igualmente el cuarto lugar.
Las minas de Santa Eulalia (Chihuahua) contie- La producción de hulla coloca a México en cuarto
nen, sin duda alguna, las mayores reservas de plomo lugar entre las naciones americanas, con una produc-
argentífero del mundo. ción de 1.016.000 toneladas métricas.

Pozos petrolíferos mexicanos en actividad.


^^^fe¿;'í;'¿'í;ií|;:
En 1910 cobró valor comercial la explotación de
los pozos petrolíferos mexicanos. En 1920 se obtuvo
el 23.5 % de la producción mundial, pasando a ser
en 1924, el 13.8 % y en 1925, el 10.8 V<. La produc-
ción total desde el año 1901 al 1934 inclusive, fué
de 1.737.365.999 barriles, con un valor comercial de
mil quinientos millones de dólares.
En 1926 declararon los ingenieros del Gobier-
no federal que la zona petrolífera corresponde
a 14.820.000 acres, de los que únicamente han sido
puestos en explotación 14.820 acres, evaluados en
386.388.000 pesos.
La producción petrolífera de México, desde 1908
al 1933, corresponde al cifrado siguiente:

Barriles Sonda perforadora utilizada en los campos petrolíferos


Año Barrí le
para lo a p e r t u r a de pozos.

1908 3.932.900 1922 182.712.000 Año Barriles Año Barriles


1909 2.713.500 1923 149.584.856 1919 87.072.954 1933 ^ToToTiso
1910 3.634.080 1924 139.497.476 1920 163.620.551 1934 38.167.022
1911 11.552.798 1925 114.784.947 1921 193.397.587
1912 16.558.215 1926 90.421.000
1913 25.696.291 1927 64.121.142 El artículo 27 de la Constitución mexicana pro-
1914 26.235.403 1928 50.150.641 mulgada en 1917, reservando a los naturales de Mé-
1915 32.910.508 1929 44.688.885 xico la propiedad del suelo y del subsuelo, fué reco-
1916 40.545.712 1930 39.529.914 gido por la legislación puesta en vigor en 1." de ene-
1917 55.292.770 1931 33.038.853 ro de 1927, después de haber dado motivo a empe-
1918 63.828.327 1932 32.802.285 ñadas discusiones con los norteamericanos.

Gráfico de la producción petrolífera mexicana.

peoüi/cc/onfííxicmocP£mLCú
en MILLS 0£ B/ieP/lCS
6^17

/P27 /^¿S /^2^ /^JO /Kf/ /PJ2 /P33 /^^^


PRODUCCIÓN MEXiCANA
en t o n e l a d a s de mineralesde:

COBRE PLOMO ZINC

125185

ANOS
1932 19331 1934

Grófico de lo producción mexicano de cobre, plomo y zinc, en los oño$ 1932, 1933 y 1934.
México va acumulando
grandes riquezas

El saldo favorable de la ^ ,'


balanza comercial mexi- mt 'fw •»%(, jtílií-^-v -
cana representa benefi-

cios p o r valor de más de Soltos deagua de Juanacatlan, cerca de Guadalajara


de México.
dos mil millones de pesos industria, existen en el país las siguientes manu-
en un decenio facturas:
Fóbricos O p e r a r i o s C a p i t a l , pesos
Productos alimenticos, bebidas,
MÁS DE SEISCIENTOS MILLONES DE f"'"'^ ' ' • • ^'T ' ™ ItiTÁll
Textiles 266 40.300 83.394.382
PESOS INVERTIDOS EN EMPRESAS Productos químicos, pinturas, etc. 391 9.430 32.357.878
T M D T T ' s T P T A T TTís Talleres de maquinaria . . . 236 30.486 29.634.670
iiNiJUb i K i A L h b Cigarros y cigarrillos . . . . 100 3.713 29.840.000
Confecciones y calzado . . . . 920 7.232 5.278.550
Imprentas y litografías . . . . 134 2.432 5.121.650
Las industrias mexicanas Materiales de construcción . . 65 2.028 3.059.7.50
Muebles y objetos de madera . ~ 4.488 2.539.720
Las industrias mexicanas h a n dejado de ser u n Coches y vagones i9 346 888.200
factor desdeñable p a r a convertirse en u n a poderosa Pieles 38 157 182.300
fuente de riqueza de gran importancia. Según l a s diversos 3.485 134.347 33i.893.768
estadísticas oficiales recopiladas por el ministerio de Totales 6.718 269.272 608.576.626
Gráfico de las exportaciones e importaciones mexicanas, figurando cifradas las primeros en el plano superior.

COMERCIO INTERNACIONAL-'HEXICO
VALORES EN MILLARES DL PESOS
{¿4 711

mos
• •

COMERCIO INTERNACIONAL DENEXICO

EXPORTACIÓN

inPORTACION

Gráfico de las exportaciones e Impoitaciones mexicanos,expresado$ los volúmenes en millores de tonelados.

Los capitales invertidos en las distintas explota- como consecuencia de la acumulación de los bienes
ciones del país, incluyendo las manufacturas, repre- materiales amonedados provenientes del exterior.
sentan los valores siguientes: Este es precisamente el caso de México.
Pesos Las enormes reservas mineras de México, los pro-
ductos de su agricultura y algunas de sus especia-
Agricultura 1.081.170.286
lidades industriales hallan fácil colocación en los
Petróleo . . 1.065.548.110
grandes mercados consumidores. Los Estados Uni-
Minas . . 2.052.876.000 dos son el mejor cliente de México, absorbiendo del
Manufacturas 607.576.626 setenta al noventa por ciento del total de las ex-
Energía y luz 141.000 portaciones.
Total 5.621.370.152 En el decenio 1925-1934, el comercio internacio-
nal mexicano ha sido:
Entre otras industrias importantes merecen ser
destacadas la del azúcar, cuya producción se eleva
Una de los fábricas de popel del territorio mexicono.
a 1.790.000 quintales métricos, y la algodonera, que
tiene en función 760.000 husos.
Se estima en 6.000.000 de C. V. el potencial de
energía eléctrica aprovechable en México. En la ac-
tualidad sólo son aprovechados 450.000 C. V.
Los Estados Unidos totalizaron en su servicio de
energía eléctrica a México 11.083.000 kilovatios-
hora.

El comercio internacional de México


El mejor catalizador de la riqueza de un pueblo
está en el balance de su comercio exterior. País que
necesita saldar con déficit sus importaciones y ex-
portaciones vive condenado a una vida económica
precaria. Nación que recibe aportes superiores a sus
salidas de numerario verá acrecentada su riqueza
^ ^ ^
VALORES EN P E S O S ORO de algodón, lana y seda; géneros de punto, sombre-
ros, lencería, ropa hecha, artículos de caucho, papel,
Año Importaciones Exportaciones Bal. favorable hierro y acero obrados, maquinaria y herramientas,
1925 390.996.172 682.169.832 291.173.660 automóviles, instrumentos de música y pólvora y
1926 381.263.040 691.753.935 310.490.89E explosivos.
1927 346.387.272 633.658.850 287.271.578 Corresponden las principales partidas de expor-
1928 357.762.358 592.444.048 234.681.690 tación a los minerales de oro, plata, cobre, plomo,
1929 382.247.637 590.658.605 208.410.968 zinc, petróleo, henequén, ramio, lino, algodón, cáña-
1930 350.178.416 458.674.489 108.496.073 mo, frutas, garbanzos, café, azúcar, arroz, caucho,
1931 216.585.416 399.711.314 183.125.898 resinas, gomas, cera, maderas y pieles en bruto.
1932 180.912.211 304.697.177 123.784.966 El comercio de exportación mexicano y la rique-
1933 244.475.056 364.967.039 120.491.983 za mineral del país, del que se nutre aquél princi-
1934 333.945.000 644.711.000 310.766.000 palmente, coincidiendo con la acuñación de monedas
de oro y plata, marca el trazo vigoroso de la curva
El comercio con los Estados Unidos ha respon- ascensional del poderío económico de la Federación
dido a las características siguientes: de Estados Mexicanos. Y como los números tienen
VALORES EN D Ó L A R E S un valor probatorio indesvirtuable, pasemos a cifrar
la balanza comercial de México, para dejar estable-
Año Importaciones Exportaciones
cido su saldo favorable. Corresponden los enunciados
1929 133.863.144 117.738.122 que exponemos a continuación al periodo decenal
1930 116.135.365 80.293.493 1925-1934:
1931 52.365.778 47.611.857
Hesos oro
1932 31.899.714 37.422.588
1933 37.520.833 30.716.021 Importaciones. . 3.184.752.578
1934 55.355.548 36.495.473 Exportaciones. 5.363.446.289
Saldo a favor 2.178.693.711
En razón de su fuerza consumidora, pueden es-
tablecerse para los países que comercian con Méxi- Así es el país de maravilla cuyos destinos rige
co los porcentajes siguientes: el Presidente Cárdenas, realizador del Plan Sexenal
Importa- Exporta- llamado a multiplicar el rendimiento de la nación
Nación ciones ciones cuyas tierras asientan sobre la más rica bandeja de
Estados Unidos 67.98 66.49 plata que se conoce en el mundo.
Alemania 8.06 10.10
Gran Bretaña 6.35 7.83 Gráfico de la producción de energía eléctrica.
Francia 4.98 2.77
Otros países 12.63 12.81
España ocupa un lugar secundario en el comer-
cio internacional mexicano.
Expresada en porcentajes la importancia relati- míDGIA aLCTDICñ
va de las importaciones y exportaciones, por grupos
de mercancías, se obtiene el cifrado siguiente:
%ponnaurom 6.000.000 c¥.
Importa» Exporta-
ciones ciones # nttlA APfíOnCHñDá 450Jk}0CK
Animales vivos 1.4 1.2
Artículos alimenticios y bebidas . . 16.3 8.1
Materias en bruto o semiprepa-
radas 10.8 71.2
Productos manufacturados . . . 69. 0.5
Oro y plata en lingotes o amo-
nedado 2.5 20.
Los principales artículos de importación son:
Ganado vacuno, carnes preparadas y en conserva
y otros productos alimenticios, cereales y harinas,
aceites vegetales, vinos y bebidas espirituosas, ma-
nuuipewirua poriKuiiiinDuco
deras de todas clases, aceites minerales y sus deriva- m nuito
dos, lana, yute y otras fibras textiles, jabones, colo-
res, pinturas y barnices, productos químicos y medi-
cinales, cueros curtidos y calzado, hilados y tejidos nOOTí&riLDICA
PonnciAL 7S.000L
APfiOyiCMOOf 14.000.
^it&MUí
MÉXICO
Y LA GUERRA
DE ESPAÑA
Palabras de Narciso BASSOLS, significado me-
xicano Y entrañable amigo de España.

Hace varios meses que estuvo en España, luego


de cumplir mandatos diplomáticos de extraordinaria
significación, el que fuera ministro de Educación
pública y de Hacienda, embajador en Inglaterra y
representante a la Sociedad de Naciones, el gran
mexicano licenciado Narciso Bassols.
Para los mexicanos y para los que sin ser mexi-
"Soy un mexicano de paso por España. Mi
canos tienen exacta referencia de los hombres que en interés por ios problemas y las luchas españo-
los últimos años de México se han esforzado por en- las no e§ de hoy. Se recrudeció, se hizo más
caminar a su pueblo, sufridor de siempre, hacia hondo, más definido cuando una representación
planos de mayor dignidad moral y económica, el diplomática que me confirió la República me-
nombre de Bassols lo encuentran vinculado a mu- xicana me puso en contacto inmediato con
las inquietudes y los problemas españoles del
chos y sistematizados intentos de mejoramiento co-
año 1936. No podía, pues, terminada esta ges-
lectivo, de superación de unas taras en que una his- tión que en Ginebra me permitió levantar la
toria cuajada de injusticias había sumido al prole- voz en defensa del pueblo español, regresar
tariado. a mi patria sin expresar, rápidamente, en
La educación pública, la economía, la diploma- unos cuantos minutos, algunas ideas que con^
da tuvieron en Narciso Bassols, en el nuevo México, sidero fundamentales, porqué no sólo habré
de dejar a los camaradas españoles una ex-
un valedor incomparable. Y es seguro que las reali-
presión más de solidaridad y concordancia,
dades mexicanas volverán a exigir el concurso di- que por sí sola no es ni una actividad ni una
recto, generoso, clarividente del hombre a quien nos aportación que en los momentos actuales pu-
referimos. diera satisfacernos, ya que la angustia de la
A su paso por nuestra España en guerra, hace guerra no es cosa para ahogarla, sino para re-
algunos meses, el mexicano de excepción habló por partirla, para vivirla en común con ustedes.
radio, explicando las razones económicas y políti- Pero por encima de esa expresión reiterada de
cas que obligan a México, fiel a su sentido histórico solidaridad y simpatía que el pueblo de México,
de país señero en el continente americano, a estar hora por hora, renueva, como nos lo enseñan las
profundamente, decididamente, al lado nuestro en noticias recientes de que los obreros mexicanos
piden al Gobierno nuevos envíos en
la gran lucha antifascista.
ayuda del pueblo español; por encima de ella,
Las palabras que entonces pronunció en Valencia
como fruto de esta renovación de identidad en
Narciso Bassols se recogen en este número mono- las actitudes, está también la experiencia qué el
gráfico por entender que ellas aclaran de manera proletariado mexicano habrá de sacar para las
exacta la actitud de un país que para muchos se re- luchas próximas y que tengo interés en pun-
duce a generosa pasión familiar, a noble sentimiento tualizar en sus principales caracteres.
fraterno, a límites sentimentales.—M. Trazar, pues, los rasgos de la situación so-

íÍ'^í'*'^5.<i<S<S»3r3><»,S<V»<»<S<a^S^«^*<5^
cial de la América latina y vincularlos con las experien- para ello sea menester reducir el rendimiento del tra-
cias que se deriven 3e la lucha española será explicar bajo.
el alcance, el fundamento y el valor de nuestra sim- Cuando un Gobierno en tales condiciones trata de
patía. substituir la opresión sistemática en el plano político,
¿Cómo opera el fascio en la América latina? ¿Cuáles dando márgenes de libertad y progreso a las masas;
son los peligros que el fascismo encarna para los países cuando quiere substituir e! fanatismo incondicional y
que tuvieron, en un momento dado, a España como ciego de la maquinaria religiosa, consagrado y estable-
conquistadora y como dirigente política? Explicar rá- cido por los siglos; cuando esto se produce, la contra-
pidamente estos conceptos será hacer patente que no ofensiva de los elementos explotadores del país es ro-
se trata de una actitud sentimental en nuestro caso. Que tunda y surge, inmediata y definitiva, la afirmación de
cuando México lanza su voz de ayuda, de solidaridad y que ha llegado el instante de emprender una lucha a
entusiasmo para el pueblo español, no expresa simple- muerte contra un Gobierno que conduce al país al caos,
mente un anhelo vago, inconsistente o sentimental. Ex- a la confusión, al desastre.
presa más aún: una necesidad a cumplir en su lucha Pero, en cambio, cuando las fuerzas populares no
histórica. tienen poder bastante para engendrar Gobiernos que
Así concebido el proceso de la simpatía mexica- utilicen la maquinaria gubernamental contra el latifun-
na para España, se habrá de volver nuestra actitud cla- dism.o, los abusos en la vida industrial, la opresión polí-
ra y transparente, en su significado y en su propósito. tica, el fanatismo y la incultura, entonces, los elementos
Pero, para entenderlo, es menester que veamos cuáles poseedores de la riqueza plantean la lucha, mantenien-
son los pricipales caracteres de la lucha social, de la do la tesis de que es indispensable a toda costa conser-
lucha de clases, en América, y cómo dentro de ella se var, detener, paralizar la vida de la República, porque
vuelve una exigencia categórica el plantear en nues- de otro modo el peligro comunista asolará a una nación
tro plano, y dentro de nuestras peculiaridades sociales cualquiera.
y políticas, idéntica actitud de combate y de extermi- Y oscilamos, en los países latinos y americanos, en-
nio del peligro fascista en el mundo. tre estas dos actitudes que son el juego, contradictorio
Nuestra actitud es, pues, una consecuencia automá- en apariencia, pero idéntico al juego del fascismo inter-
tica, es una necesidad lógica de la política, de la lucha nacional, por la vinculación que en seguida expondré
social de los pueblos de América. Nuestros pueblos son, en dos palabras.
en general, países coloniales o semicoloniales en los O se es partidario del más ciego conservadurismo po-
que un fatifundismo derivado de la situación que la lítico, de la más implacable represión, encaminada a
conquista y la colonia española creó, uní servidumbre mantener privilegios exagerados, incultura, ceguera, po-
dé los trabajadores del campo, un régimen de ham- breza, miseria, sólo para mantener una oligarquía rica
bre y de miseria en el asalariado industrial, una opresión al servicio del extranjero, o se está frente a una actitud
política que lo mismo llega a la vida del muncipio que de sistemática oposición, de lucha continua contra los
a los regímenes nacionales, por medio de dictaduras gobernantes que, más comprensivos, más solidarios con
mantenidas sucesivamente por la represión y el poder su pueblo, procuran modificar vicios y lacras de la in-
más violento, y, por último, una opresión que el fanatis- justicia ancestral.
mo y la incultura hacen subsistir, son países, en estas Cuando la lucha de clases se conecta en el plano
condiciones, que exigen, que reclaman una rectificación internacional, esta doble tendencia conservadora-reac-
esencial en la estructura económica y social. cionaria dfc los países latinoamericanos se convierte en
Cuando las condiciones de la lucha social permiten, una fuerza al servicio del fascismo. Este fenómeno in-
tn un instante dado, oue un Gobierno más o menos ternacional se ha operado ya en América. Se ha opera-
identificado con los anhelos populares emprenda leyes, do, porque la lucha europea plantea, en los países fas-
reformas, a este conjunto de vicios en la organización cistas, la necesidad de proveerse de mercados nuevos,
social, se produce, como en México en los últim.os años, de abastecimientos de materias primas baratas y exige,
un Gobierno popular, que, frente al latifundismo, frente junto a colonias y mercados, productividad para una
al peonaje, frente a la servidumbre de los trabajadores capital que, en ocasiones, no encuentra dentro de los
agrícolas, inicia una reforma agraria encaminada a di- linderos del país industrial de primera categoría posi-
solver el latifundio, a dotar a! campesino de elementos bilidades de rendimiento suficiente. Cuando esta exigen-
de trabajo, convertirlo en ser autónomo, dueño de su des- cia internacional de colonias y de mercados se vuelve
tino y del íruto de su esfuerzo. Que frente a los sala- apremiante, el fascismo, o emprende el camino directo
rios de hambre, que tratan de obtener productos indus- de la conquista a estilo abisinio, o usa un procedimiento
triales que, dentro de una técnica retrasada por la bara- indirecto de ¡a captación sutil, invisible, pero real y
tura del trabajo del hombre, puedan todavía competir aplastante, de los países coloniales y semicoloniales,
con las ofensivas de los países industriales de primera para convertir la estructura política y la maquinaria eco-
categoría, se emprenda una obra regeneradora, desti- nómica en medios de abastecimiento y consolidación de
nada a nivelar ¡as condiciones de la producción indus- la economía de los países fascistas industriales.
trial, haciendo que el salario sea más justo, aun cuando Ésta es, en estos instantes, camaradas españoles, 'a
situación española, la situación americana; y ésta es, en mediata de las vinculaciones que existen entre la lucha
estos momentos, la amenaza más importante para el des- social de América y la lucha de clases de Europa. Es, en
tino de los pueblos hermanos. México puede asumir otros términos, la forma americana de participar en los
frente a la lucha de España una actitud de simpatía y problemas del mundo en la hora presente.
solidaridad gubernamental, porque se encuentra colo- Esta vinculación, esta solidaridad íntima, ineludible,
cado por la Constitución y los antecedentes de su Go- hija de la etapa en que el capitalismo está viviendo a
bierno en el grupo de aquellos países en los que las fuerzas estas horas, es la verdadera explicación de por qué, al
fascistas quieren, a toda costa, combatir la acción pro- día siguiente de iniciada la lucha en España, nuestro Go-
gresiva del gobernante popular, en tanto que, en el res- bierno, que está llevando a cabo la depuración ideoló-
to de los países latinoamericanos, con excepciones con- gica de todos los elementos gubernamentales, venciendo,
tadas y honrosas, tropezamos con una situación inversa: también, resistencias duras y hostilidades sordas; que
la actitud de los elementos fascistas al servicio de los está tratando de superar el obstáculo de un fanatismo
grandes países industriales, enemigos de la paz europea, estrecho, en el campo religioso, el Gobierno de México
consiste en procurar que se mantenga inerte, muerta, —digo—pudo poner el contingente que los recursos ma-
quieta, la vida de los países, a fin de obtener, como re- teriales a su alcance le daba posibilidades de hacer, pudo
sultado único, un abastecimiento barato de materias poner este contingente al servicio de ustedes.
primas, de productos no elaborados, que habrán de ser-
México, pues, no ha hecho sino ser congruente con
vir de elementos futuros de agresión en la lucha que en
las necesidades de la hora actual; obrar de acuerdo con
Europa habrá de ventilarse más o menos pronto.
las exigencias de su propio momento histórico. El resto
Los países latinoamericanos oscilan, pues, en una de los países latinoamericanos necesitarán que las fuer-
disyuntiva que, en todo caso, conduce a una fatal, inelu- zas populares superen los obstáculos que se oponen a la
dible contienda con el poder económico y social qué el liberación de las masas campesinas y obreras. Necesita-
fascismo encarna. En nuestra República, la agl'esión sis- 'rán en una u otra forma la organización de Gobiernos
temática contra el Gobierno popular no es de hoy, pero de tipo popular, eficaces, aptos, siquiera para Iniciar
es de hoy cuando empieza a vincularse a los intereses el proceso de depuración y elevación del nivel material
internacionales del fascio. En las otras Repúblicas lati- y espiritual de las masas. Pero, en una u otra forma,
noamericanas tampoco es de hoy la lucha para el man- toda la América latina está vinculada a la lucha de
tenimiento del privilegio y para la persistencia de la Esp?ña.
opresión. Pero es hoy cuando son ya palpables los sín- Los que no están, como vosotros, los elementos in-
tomas de intromisión clara y directa de las fuerzas eco- telectuales y trabajadores de México, vinculados en pro,
nómicas y políticas del fascismo internacional. están disimuladamente, emboscadamente, catalogados en
Todo espíritu latinoamericano que esté alerta a los contra del Gobierno español. Porque quieren que subsis-
problemas de su continente, y que sea capaz de vincular- ta la opresión económica, que habrá de suministrar,
los a los problemas generales del mundo, habrá de re- con las materias primas baratas, elementos de guerra
conocer que, en una u otra forma, es ya el fascismo la al fascismo internacional.
amenaza inmediata de América. Y, en tales condiciones, Nosotros queremos evitar que nuestro país se con-
la solidaridad de México para con la causa del pueblo vierta en un mercado más para el fascio, y a ello se debe
español no es ya un fenómeno ni gratuito ni disimulado; y se seguirá debiendo, hasta el último día de la lucha
es un hecho impuesto por las condiciones históricas de de ustedes, nuestra simpatía, nuestra ayuda y nuestro
nuestro Continente. Es, a su vez, una consecuencia in- cariño incondicional."

^¡:^,€yi>f>%>f>'i>^>'s>x>'^:^:g>%^sys>S'''ií^^

i Yo siempre fui, por alma y por cabeza, Y español soy por la lengua divina,
español de conciencia, obra y deseo, por voluntad de mi sentir vibrante,
5v2a hoL y yo nada concibo y nada veo, alma de rosa en corazón de encina;
sino español por mi naturaleza. quiero ser quien anuncia y adivina.

Con la España que acaba y la que empieza, que viene de la pampa y la montaña:
canto g auguro, profetizo y creo, eco de raza, aliento que culmina,
pues Hércules allí fué como Orfeo. con dos pueblos que dicen: ¡ Viva España!
Ser español es timbre de nobleza. y ¡Viva la República Argentina!
Por
Rub«n DARÍO
i;iniiirMinniiniHii)iiini<itititiiiiiiiiiiiiMiiii

DEL D I A R I O
DE UN ESPAÑOL
EN MÉXICO
Texto Y dibujos de
GARCÍA MAROTO
Para .Mi revista »

"AÍÉXICO A LA VISTA.—Atrás, lejos, el mar


por medio, una España sombría, amarga, manda-
da por un general señorito que se imagina poder
poner de acuerdo a la España dispar con la ayu-
da de unas botellas, de un abrazo cordial, de unas
palabras de disculpa, de mutuo perdón para un
pasado en el que todos tienen culpa, según su
ligero pensar.
Los crímenes, las diferencias insuperables de
casta y de merecimiento, el antagónico sentir del
mundo, nada cuenta para esta caterva de misera-
bles, de frivolos, de obscuros obscurecedores del
vivir popular.
Al fondo, México, adonde nos lleva un deseo
profundo de servir, de aprender, de enseñar.
El capellán del barco reparte estampitas contra
la impiedad que nos aguarda, envenenadora y fa-
tal. Las mujeres de los gachupines, gordas y de-
votas, que dejaron con desconsuelo la "paz espa-
ñola'', se abroquelan con estampitas y con rezos
para las contingencias de mayor o menor peligro
para la economía doméstica y la salvación de las
almas, que su México revueltito, a la vista de sus
ojos ya, pueda ofrecerles hoy, mañana.—3 de enero
de 1928."

"CIUDAD CAMINO.—La huella de la revolu-


ción se advierte aquí bien clara, en las cosas y
en las miradas, en el hacer y el rehuir, sobre todo
en el destino decidido que muestran templos y
creyentes.
Iglesias que son bibliotecas, niños que miran
cara a cara, mujeres que se han liberado de la
presión del "padrecito" que ha tenido siempre lo
más, que ha perdido ya hasta lo menos.
El tren pasa por un camino que es túnel y sen-
dero florido, que busca y consigue para nosotros
las mejores "vistas", los mejores ofrecimientos, las
mejores músicas de un decir humano que hasta
hoy consideramos agrio, desacorde, hostil. Las vo-
cecitas dulces de las mujeres mexicanas nos enter-
necen profundamente, nos ligan para siempre ya,
sea cual sea nuestra suerte, con el México que pi-
samos.—5 de enero de 1928."

"RÉPLICA.—En la capital hace días, enhechi-


zado por la personslidad de un medio que nos va
haciendo suyo, como una amante generosa que
se adelanta con destreza apartando las confusio-
nes, afirmando las complacencias.
El trabajo, el servicio a México a través de
nuestro saber, de nuestro querer sin reservas, ha
comenzado ya, se encuentra ya encuadrado en la
zona más eficaz.
Hoy he tenido que replicar claro y firme a'unos
españolitos que, venidos hace unos años con la
miseria atrás y la codicia por delante, hoy qui-
sieran ser "intangibles", hoy no se explican que se
mueva una hoja en la arboleda social de la Repú-
blica sin prevenir a su conveniencia. Hablaban
protestando con violencia. Y decía un norteño:
—No sabemos cuándo se va a estar quieto el
pueblo. No sabe uno ya qué decir, qué realizar,
que no corra peligro.
Apostillando un castellano:
—Se imaginan estos inditos que uno está aquí
para perder, que la fortuna que uno hizo puede
estar amagada por los azares de una revolución
estúpida. .TtMiiiiitiiii((niitiiiiiiiiiiti)tiniiMiMi)iiiiii)iiin)(tnliriiiiiiiiMtiiitiiiriinriiiiiiiiiitfiiiininMiMntmtnifnHUfM>ttti^iii un>!tiiiii]iiniMirtiri;iliinnlMt.tlillMlitHMinilIlll<^
j[ijniiitiiiiiniiiiiMiiMiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiaiitiiiifMniiiifUiiiiiMiitii[iilMliillllliniliiitiliiiiiiii)illiiliiiitiriiiMiiiiilill(i!iiiliiliiiiilliiiHiii(i^
Y así, en más o en menos, el mismo temor a la
revuelta, el mismo odio a! deseo natural de en-
contrar la buena postura que permita al pueblo
vivir, afirmar sus necesidades, hallar el cauce fa-
vorable a su desenvolvimiento pleno, que es jus-
ticia y seguridad permanentes.
—Yo tengo mis negocios claros, pero si huelo
que alguien quiere formar jarana se lo vendo a
un "gringo", que lo sabrá hacer respetar.
—¡Chingados! Se piensan que no hay otra cosa
que hacer que armar alborotos que retraigan el
capital. Ya verán ellos, ya verán...
Y así iba el diálogo, lanzado contra el amargor
natural, contra el justo resentimiento de un pueblo
de siempre oprimido. Hasta que yo salté, resuelto,
mirando a los ojos de aquellos varones prudentes.
—En Barcelona vive un escultor, un poquito
desordenado, a quien llaman Manolo Hugué. Por
artista y desordenado vive siempre al día, a la
ho''a, mal vive siempre, para acabar más pronto.
De Cataluña es, y casi siempre vive allí, Santiago
Rusiñol, pintor y escritor de fama nacional y del
que vosotros habréis visto acaso algún drama
fustigador. Rusiñol es un artista muy previsor, y su
economía está saneada desde que era niño, pues
sus padres eran ya ricos.
"Manolo Hugué necesitó una vez dinero, y no
vio más salida para cubrir su necesidad que ofre-
cerle al artista rico Santiago Rusiñol un busto en
bronce que la crítica había elogiado mucho. Rusi-
ñol regateó concienzudamente la oferta y el escul-
tor, lleno de angustia, le dejó el busto por lo que
le costó fundirlo. Y el busto, desde entonces, lució
su belleza original en el salón de Rusiñol, artista
rico y guardador. Estuvo en casa de Rusiñol el
busto hasta que alguien, amigo de Manolo, le pre-
guntó por él, sin saber que lo había vendido. Y
el escultor, astuto por necesitado, le respondió:
"Se lo vendo. —¿Cuánto? —Su precio." Y en su
precio exacto se lo vendió, cuatro veces más que
lo que Rusiñol pagó.
"Pretextando que iba a llevarlo a una exposi-
ción, Manolo recogió el busto, se lo entregó al
nuevo propietario, cobró su precio y... tan tran-
quilo. Hasta que Rusiñol lo supo y se desató con-
tra el escultor, al que calificó de ladrón, de mise-
rable, adjudicándole toda la gama de la- adjetiva-
ción ofensiva. Manolo supo esto, y comentó los jui-
cios del rico ofensivo y famoso artista: "Estos
burgueses son de una injusticia terrible: compran
barato y encima quieren que no les ocurra nada."
Así vosotros en América, en este México dolorido,
llegasteis con la codicia suelta, organizasteis el
despojo con habilidad indudable, y en cuanto
salisteis de pobres quisierais que la revolución
detuvieía su marcha, contuviese sus convulsio-
nes para respetar vuestras "compras", realizadas
a poco precio, con el busto en bronce del es-
cultor Manolo Hugué. Pero os equivocáis. La
revolución hace su camino, y os esperará donde
no pensáis y echará abajo vuestros planes de
dominación, de opresión.
De este modo hablé hoy a un puñado de com-
patriotas, ricos de ayer mismo con el sudor
del indio, por la agilidad propia, que me decla-
raron antiespañol, bolchevique, anarquista, echán-
dome encima los epítetos que ellos consideran
como más denigrantes para el diverso y contra-
dictorio linaje humano. — 4 de marzo de 1928."
"LOS NIÑOS ARTISTAS.—Cientos de miles de
niños atienden mis orientaciones, vibran por mis
ruegos, norman su goce creativo frente al medio
físico en torno por mis limpias aclaraciones.
Soy maestro guía de toda una provincia, la de
Michoacán, a los efectos de la enseñanza artís-
tica.
Desde Pátzcuaro, desde la quinta Eréndiva,
junto al lago, concierto un sistema estimulador,
activo, que permitirá aleccionar a niños y a
maestros en la tarea gustosa de percibir y pre-
cisar el mundo físico que les rodea, transmután-
dolo con gracia lírica, con diferenciadora perso-
nalidad.
Como tantos compañeros artistas de México
ecné a un lado mi capacidad de expresión per-
sonal, mi posibilidad creadora, en el afán de ser-
vir a la masa, masa rica, diversa, dueña de todos
M miimii II iimi mu iiiiiiiiiiii iiiiiiiiiiiiiiiiii iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiitiiMMMiiiiiiiiiiiii iiiiimiiimiimimiiiniiiiimiiimiimiiiiiiiiHiim ü
los mañanas: la niñez y la juventud.
i'iKijtiiirtiiiiiiMiiniiiiiHiimiimiiiiiiiitiiiiHtiiiiiiiiuiiiiiiimiiitiiiiitiiiKictit!:
Nada más unido a mi gusto. Nada que encua-
dre más exactamente en fo que es mi anhelo más
íntimo. Nada que mejor justifique el esfuerzo por
conocer, por ordenar, por tener a punto de entre-
ga generosa lo mejor de mis experiencias.—Abril
de 1932."
"EL GOBERNADOFÍ ANTIESPAÑOL. — El es-
pañolito receloso que me vino a buscar, me llevó
a un rincón y me dijo:
—Viene usted a una tierra muy rica, donde el
indio no se acabó de malear, y donde todo traba-
jador puede hacer pronto una tortunita. Yo la hice,
la hizo Méndez, la está haciendo López, la hará
Martínez... Si usted pretende hacerla no le será
nada difícil.
—¿Yo?—le respondí—. Mi fortuna la hice
cuando sentí la necesidad y la posibilidad de
servir a nuestros semejantes.
—Locuras, locuras... Usted se mueve, como yo,
por levantar cabeza, por salir de pobre, por lle-
gar a rico cuanto antes.
—Le aseguro que...
—No asegure nada porque no le habré de
creer.
—Yo salí de España porque la dictadura. Pri-
mo el frivolo y miserable...
—¡Cuidado! El general Primo de Rivera debe
merecer el respeto que todos los hombres de or-
den ..
—¡Pero si yo no soy hombre -de orden!
—Lo será, yo se lo aseguro. Pero déjeme ha-
blar ahora de lo que yo quiero decirle: Ésta es
una tierra magnífica y los espafioles estaríamos
como en la gloria si el gobernador a quien us-
ted tiene que tratar por razón de su cargo, no
la hubiera tomado con nosotros, los gachupines.
Es un antiespañol cerrado. Trabajo le doy para
entenderlo, para hacerle comprender la postura
de un español decente, que quiere hacer con toda
honradez una fotunita regando estas tierras con
su sudor y con el sudor de los indios.
De este diálogo hace ya unas cuantas semanas.
He conocido y he tratado al gobernador. Soy, por
su voluntad, su huésped. Su antiespañolismo se ha
trocado en cordialidad para un español cuyo mé-
rito sólo consiste en amar al oueblo, en servir
a! pueblo, no queriendo para sí otra cosa que un
tajo en el quehacer común, que una tarea social
activa contra una mínima remuneración, contra lo
indispensable para atender- las necesidades más
mínimas, más exactas y perentorias. — Junio
de 1932."
"AGRARISTAS DEL LAGO. —Uno de ellos,
comienza:
—Sernos gobiernistas, del nuevo Gobierno de
México.—Unas palabras en tarasco del más rece-
loso del grupo, y el orador pregunta—; ¿No hay
más que un Gobierno ahora en México?
— Uno solo y fuerte, y seguro—le responde-
mos, para fomentar su decir.
—Pues entonces nosotros sernos del Gobierno,
de! que manda, y también de nuestro general Lá-
zaro Cárdenas. Y sernos también agraristas, que
para eso nos inscribieron en la casa superior del
gobernador, en Morelia. Agraristas con todo y
fuerzas para hacer valer nuestros derechos. Pron-
to tendremos tierras, las del rancho Corona, que
ya el tata murió. Con todo y casa donde cobi-
jarnos. Dejaremos Janitzio, que aquí nos morimos
de falta de todo: ni leña, ni ocote, ni una bes-
tia. Piedras y agua. Sernos agraristas de los meros
resueltos. Y desde que semos agraristas nos de-
jan pescar a como esté la luna. Por eso semos del
Gobierno, agraristas y no pescadores de petate,
firmes hasta la muerte por el Gobierno, por nuesr
tro general Lázaro Cárdenas que nos ha prome-
tido la hacienda de la Corona, con todo y casa,
y terrenos sembrados, allí para el tiempo en que
el maíz está en granación.
—¿Toda la hacienda?
—Como quiera el Gobierno; nosotros semos
gobiernistas y no 'conveniencieros. Si el Gobierno
dice que la hacienda con todo y casa, bien;
si no levantaremos nuestras casitas. Si se enso-
berbecen los dueños, contra los dueños iremos, si
el Gobierno así nos lo pide, que por eso semos
gobiernistas, del Gobierno único, del que manda
en todo y por todo; y de Cárdenas, y de Serrato,
que ahora va a ser de los mandones, según dicen
que ha publicado un edicto presentándose para
gobernador. De éste semos también, porque luego ViitmniniiiniiintnitiiHiiHiHitHniniiíinn»uniHiiiniMuiiMiMfiitiiiiitMniMiHHíi»t[iiMfufnnimn!uiMHiiH)inii!niiniiimHMiiititiiri(tiii(ifntiiitiiiiiiiiiiíiiitiiiiriiii(iililtiír
¿miiininniritiiitiiiMrniitMnHinMtiniiiMmriiimiiniMiMniitMiiMirMUMiiiniiiuuinioiiniMiititiintHimnitiiiinMntiiiiriiiiititiiiiiitritiirriirtiiriniiiiiiiiiriirttMiiitiiliiniiiiitlii
que se vaya Cárdenas que nos quede un fuerte
en !a casa de Gobierno de Morelia.
•—¿Y cuándo pasan los pescadores del lago a
ser agraristas?
—Ya nos mandaron llamar, pero no está toda-
vía dispuesto el ocurso y no fuimos por las difi-
cultades del pasaje y que luego fuera "para ha-
blar" y no nos dejaran recoger el maíz. Pero nos
dijo Amado que sí, que el general no tiene más
que una palabra y que como sernos agraristas
de los firmes pos a los agraristas van a dar las
tierras Se la hacienda Corona del término de Zu-
rumuza. — Junio de 1932."
"VIAJE-DESCANSO.—Noche ya salimos. El ge-
neral requiere las armas.
—¿Es que hay peligro? — requerimos.
—Más vale evitarlo — nos responden con pre-
cisión.
En el coche vamos, el general, el coronel, el
licenciado y yo. El general y el coronel ponen a
punto de disparo sus pequeñas ametralladoras.
—¿Piensan que habrá ocasión de usarlas? — in-
sistimos.
—¡Quién sabe, señor!—nos responden los que
deciden—. Hace muy pocos días nos recomen-
daron prudencia al pasar por este mismo rum-
bo. "Hay unos cuantos bandiditos", nos dijeron
los agraristas.
La noche es obscura, gustosa. El camino juega
a subir las curvas, a esconderse entre tupidas ar-
boledas, se esfuerza en trepar por las laderas em-
pinadas. Los automóviles suben, bajan sin de-
tención, sin arrebato sospechoso. Los militares
van atentos a las márgenes del camino, a los
límites que los" faros potentes marcan.
Atravesamos pueblos pardos, adormilados, per-
didizos; nos detenemos varias veces olfateando
más que viendo la dirección exacta. El cielo se
ha poblado de estrellas brillantes.
Conversación tendida, viva, colmada de cama-
radería. Pueblos. Más pueblos. Gentes como som-
bras. Bosques tupidos. Perfiles borrosos amena-
zadores de serranías hostiles en la noche sin luna.
Camino, camino...
Por fin, a las nueve, el lugar donde debemos
descansar. Un hombre gordo, de polainas, som^
brero tejano y pistola escuadra. Otro hombre de
porte militar, con rojo paliacate al cuello. Grupo
de mujeres y de hombres del pueblo. Después, las
escenas de todos los días, los ruegos apremiantes
tras la actitud más humilde.
—¿A qué hora se apaga la luz eléctrica en el
pueblo?
—A la que el general ordene. La hora a que se
hace todas las noches es a las once, pero diga mi
general.
—Sea a las doce.
—Como quiera mi general.
Cena abundante, con espectadores atentos: el
presidente municipal, el maestro, el representan-
te de las agrupaciones agrarias del término. Al
terminar la cena las comisiones se amontonan ya
en la puerta de la vivienda.
—¿Salimos a dar una vuelta? — dice el general.
—Bien. Descubramos el pueblo — replicamos
nosotros.
—Sea — responde como un eco la unanimidad
del conjunto.
Y unos centenares de hombres en procesión
atenta dan vueltas a la plaza deslizando al oído
de! general gobernador necesidades y alabanzas.
A las once, a la cama, que hemos de madru-
gar. La maquinilla del mecanógrafo del general
teclea rápida y decidida. Anguiano y yo dormimos
en la misma pieza.
—¿Hablarás mañana? — preguntamos al licen-
ciado, orador oficial.
—Seguramente.
—¿Dirás algo que tenga principio, medio y
fin?
—Hablaré como siempre, con la "consabida
elocuencia".
—Ahora caigo en las verdaderas razones que
tiene el general para llevarte como orador: es
que puedes hablar diez (Toras, y entusiasmar al
auditorio sin comprometer los propósitos del go-
beinador.
—¿Piensas que es por eso?
—Sin duda alguna. Los problemas los resuelve
él, cara a cara con los interesados, en esas con-
versaciones lentas, que no parecen tener fin. — Ju-
S<uuiniiiuiMiuHiiiMiinriHiiiMiiijMinii)riHMHuiinniiiriiiiiiriiiiiriltiltiuiNiriiiiiii»iiiiiiiiii<iiitiiitiiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiitliiiiiiririiiiitrtiiiiiiiiitiliirulluitiiiui«uiuliiiitilili)ilifV ho de 1932 "
VARIACIONES
SOBRE EL VIVÍR DE MÉXICO
Texto de GABRIEL. Dibujos de JOSÉ

Tacos, chalupitas...
Un hornillo, unos cuencos humosos, una sombra parda por los soles y
por las lluvias, la abierfa sartén chisporroteando a toda hora, el humo con-
siguiente y la vocecita infantil de toda india que pregona su mercancía:
"Tacos, chalupitas, atole calentito..."
Es en la plaza recogida y bullente, en la explanada solitaria, en la calle
larga y polvosa, en el zaguán obscuro de la casa de vecindad. Por todo
México la misma invitación amable a la comida, a la bebida populares.
Por unos centavos, por casi nada, la tortilla ceñida, frita, dorada, "ata-
cada" de barbacoa, de carnítas, de queso; con su aguacate, su chilito verde,
su gracia única en la cocina de todas las nacionalidades.
A toda hora, en cada hora, como un puntal para la espera, en el México
gustador, popular, fácil, generoso, los tacos, las chalupas, los jarritos de
atole tibio hacen patria, nacen una "suave patria" que enhechiza el ánimo,
que unifica las voluntades más diversas en un concertante sabroso.

-itiiiiiiiinMiiiuiu;iiiinir.i:;iiii]iiu.;;iii;:iniiiiniiltllliiKiullniiiiiiüiiiinin<iaiiiinriuiniir.:)i'i<iiiMü¡iuiiiiiiiiiiiiiiiir

liiiliii!iilltuttiinittiii[iiiiiintiiliin:iniiniiinMiiMi!iniuiin(iiu!t!n:itiiniiiiiiii)tiiitinil]tiuiuii;;tiiitiiHtiinliiinii):j

Flores, flores...
¿De dónde llegan tantas flores, tanto perfume turbador, tanta armonía
cromática?
Las mujeres morenas se coronan de flores, rebosan flores, riegan flores,
hasta suelen recibir unos centavos, pocos, por grandes brazadas de flores
que alegran las casas sombrías de los barrios pobres, que restallan olor y
luz en las saletas luminosas de las "colonias" elegantes.
¿De dónde llega tanta flor a la capital de la República? ¿Cuántas indi-
tas viven entre las flores, para las flores, de las flores? En la mañana vienen,
de Xochimilco, de Tlalpan, de Tacubaya, con su andar rápido y menudo,
a !a espalda su mercancía, su regalo, su gracia. Y unas se van a los mer-
cados, y otras se llegan a las casas donde cada día les esperan, y otras
abren o entreabren puertas desconocidas para decir con voz de miel, de
rosa- "¿Quiere flores, niña?"
Esto hasta el mediodía, que en la tarde han de volver a sus rincones,
a Tacubaya, a Xochimilco, a Tlalpan, para regar la tierra negra, para
repasar el jardín murado, para decidir lentamente cuáles son las rosas que
merecen ya ser gozadas por las "niñas" de la ciudad.
ririlliliiilirilililiilliilil¡ltinili;:i!ilitii:n!iiin!iiiiiiii;inf!:ti(liHnii''.>iiillHinii'i»iiijuiniiiii'iiiiiiiuiuiiiiMin!niM:iitnif
¿illtllllluiniliriitiiirMiilii;iifniiniliirii

Caminos
Los mejores caminos, los más cuidados, los de Mé-
xico: alquitranados, repasados, mimados... Y los sen-
deros más hostiles, los más perdidizos y enemigos de
la planta humana, los que en el México contradictorio
aplasta el pie del indio, suaviza el andar proletario.
¿Cuántas horas puede resistir una indita tejiendo su
andar a lo largo de las trochas ásperas, tropezando con
pedernales, con lascas de obsidiana, aplastando espinas
hostiles?
Junto a su hombre, en silencio, suspirando muy leve-
mente de tiempo en tiempo, abrumada bajo un peso
siempre excesivo, la compañera mexicana gasta, mal-
gasta su energía, su vida, su única riqueza, por un
precio que nadie sabe, que nadie se esfuerza en saber
de vergüenza de avergonzarse.
^üinMurMlnililnillllillitMiMiiuhinHiliHiiuuii:iriMhiniinuriii»iNiinilUNuiiMniiiti(t>iiiittiiiiiiiiitiitiiniiií(tiillli(luruiiiiiiiiiiiiiiiiHi<ii:tiiiJniilllll)tinnill,-
Y son los anchos, abiertos, pulidos y brillantes ca-
minos, hechos para la admiración, los que menos saben y andar bajando y subiendo lomitas a la busca de la docena de tortillas,
del dolor del indio caminante, que todavía, pese a del vaso de pulque, de las pocas varas de manta para cubrir su mo-
los esfuerzos de la revolución constructiva, ha de andar renura.

El maíz :.>MlMllMitMnilliiMKnltrilMillllniunninniilHii¡ii<iihtintMMiiiiiliiiiiiiiiiiutiiuniiniiiiinininiiiliniiii]nliiiiiiiiiiitMill[tiiliiiiHiinMi!iitinini:itiiii:iiitirtiiiiiii^

Uno de nuestros conocidos, español de los que exe-


cramos, de los que ahora, en México, hará mucho y más
menos dar dinero, su puerco dinero robado—contra
los que lo damos todo por dignificar nuestra patria, hizo
su fortuna con varios molinos de nixtamal, es decir, de
maíz, adonde el mexicano lleya su maíz remojado en la
noche para que se lo muelan, para que se lo devuelvan
hecho ya la masa de que ha de hacer sus tortillas, el pan
del'pueblo, desde el más humilde peón hasta el Presi-
dente de la República, si es que el Presidente es de ver-
dad pueblo, si es que no se halla maleado por las Nor-
teaméricas o las Europas sintéticas y funcionales.
No le perdonaremos nunca a ese españolito nix-
tamalero que haya medrado con exceso quitándole al
indio sus granos de maíz, su lazo de unión nacional, el
pan de su cuerpo, el medidor exacto de su mexicanismo
auténtico, de su ser cierto y popular. ;^lU1lhMrl1lutl1lnM^l1Ml)UlnnllnlMllIlll^llMlu>MlnlMlMluuUMlllMHllUl1hl1n1ll^lM'l^llHl^il1llrtlIlllMl•lMlll1llHMlllnllnMlr1Ulnln^nMHllnMtu

Chairales
La "güera" nos dijo junto al lago, en su jacalón de
madera frecuentado por los turistas:
—Tendrá que avenirse a comer lo que ofrece la
tierra, lo que el lago nos da: charales.
—¿Y eso qué es? — repusimos muy temerosos de
estar forjando nuestro ayuno.
—Pescadito blanco, pasadero, que me gustaría halla-
se bueno.
Y tart bueno como lo hallamos. Durante muchos me-
ses, todos los días, a las doce, a las ocho, era la misma
burla amable, con variantes que no alteraban la idea
central:
•—¿Cómo anda, "güera", ese pescadito blanco, pasa-
dero, de nombre charal?
— Dorándose al fuego.
—¿Cree qlie me gustará?
\ \ \m\
r<iMiiiiiMnHiniilllntlMinniMiuttMiiiliMlliniiuiiiHiiHiMiinHMiiiiiuiMtiiHniiMrii(iiMtiniiiiitiiiiillliniiii<niiniiiiiitniiiiiiiiiiiniiiiili'll iriiiinitltilllllltliMlllii?

—Veremos. Los extranjeros tienen gustos tan dife- —Dispénseme; me había olvidado. La verdad es que poco a poco va
rentes... entrando en nosotros, en nuestros gustos, en nuestro afecto. Ya ve usted,
—¿Yo extranjero? ¿Será capaz de ofenderme así? hasta encuentra los charales apetitosos...
Los gallos
—¿Dónde podré encontrar al jefe?
—En la placeta de los gallos, seguro; apostaría e! sarape.
Y allí estaba el "jefe", militar o civil, joven o viejo, jaranero o pru-
dente, rico o pobre, codicioso o desdeñador de los bienes ajenos.
Y en la arena de la plaza de gallos fija su mirada ardorosa, está el jefe
político, y io mismo el jefe militar, y el rico del rumbo, y todo aquel que
quiera enlazarse, para la vida y para la muerte, con los mandones de
la zona.
Espolones de acero, sangre caliente en chorro abierto, plumas al aire,
polvo cegador, apuestas sin límite... Y de cuando en cuando, la ofensa
sutil o directa:
—Mi "giro" y yo, dos, para ciento.
—De los "rajaos" se llenó el mundo. Menos platicar, que ello obliga
siempre.
—Yo lo que digo lo mantengo aquí y entre las nopaleras.
Mientras se abren miles de caminos a la pugna, a la violencia más o
menos disimulada, los gallos se atacan, se defienden, se buscan las zonas
más débiles, "estimulan", "ejemplarizan" un vivir y un morir humanos que
debemos dignificar.

'iiiUHiiitfiiifiitirifiitUHlililiuiilliiltlilliiliiiiliiiiiiiniiiiiiiiiüiiiimnDiliniMKiiiltiuikUiíniHliitiniítiiniímiiliiii;

itniniiiiiniiiiiiiniiiin

Xochimilco
¿Dónde mejor para el querer, para el comer, para el beber, para dejarse
acariciar por la melodía del corrido que cuenta como el hombre suele embo-
rracharse por olvidar a aquella ingrata que le había prometido amor para
toda su larga vida?
En Xochimilco, la Venecia rural, según se atreven a decir los que no
conocen Venecia y no saben de Xochimilco sino que está formado por "islas
flotantes", puede encontrarse todo esto, y mucho más que esto, con sólo
tener fantasía, ánimo abieito, alegría y dolor que poder comunicar a loa
"compadres" decididos.
Es bueno irse allí, a Xochimilco, cuando la obligación diaria le tiene a
uno pegado a la tierra dura, a comer, a beber, a querer al soii de corridos,
pero, sobre todo, es muy bueno llegarse allí cuando se siente uno desenamo-
rado, hostilizado, despegado del semejante por la prevención negadora. Allí
puede hallarse la lección más tierna y cordial de la naturaleza; un poquito
de tierra, unas semillas, unas raices, un lago amable... Y con el tiempo y
el esfuerzo, muchas islas flotantes, árboles, flores, frutos, familias sucias
por el quehacer desordenado, y... "gringas" amigas de experímentar que
ofrecen su corazón "standard" a quien se lo quiera tomar contra un esfuerzo
razonable.

^lltUllllllItlKlillllItlIllllllllIIIUlItlMIlIIllllItlIllllMIttlIllllfUIIMUllIlliaiJt: [iiiiiiiiniHiniiXiiininiiiuliliiilji?
¿iiniiMniminiHnnniiuiMiniiniiniiiniiinMiuiiiinn»iinii{riMiuiniiiiniMiiiiiinnMi»iitiiiiiiiiri,iiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiriiniiiiiiiiiininiiiniiuuniiiiirniiiiiiiiiinni|j

La cana s

No es el dolor terriblemente fermentado de los inge-


nios de la dulce Cuba donde los jamaiquinos mueren en
la zafra por el coste de una camisa color mamey, por lo
que les "apuntan" para unos zapatos brillantes.
En Morelos, pequeño y rico, unas familias, algunos
poderosos, se habian repartido la tierra, la fruta, las ma-
res de caña de azúcar. Y exprimían la posibilidad econó-
mica trasladándola a Francia, donde los hijos o los nie-
tos de los encomenderos la distribuían por los cabarés
distinn;iiidos o la acumulaban en las bancas más res-
ponsables.
Pero Zapata se puso en pie y murió para levantar a
sus compañeros de lucha, y se incendiaron los ingenios,
y se agrió el dulzor ancestral, y algunas mujercitas
francesas en los restaurantes de lujo increparon a "aque-
llos indios que olvidando su origen pretendían borrar
los naturales privilegios".
Para azúcar, la de Morelos. Sin amargor, morena,
que va de la semilla al gusto sin crear la grave injus-
ticia de las zafras cubanas, donde un negrito jamaiqui-
no le da al machete veinte horas diarias para que en
la tienda de raya le fíen unos cuantos fríjoles, unos sor-
bitos de licor y una camisa colorida. .TiiilinlHiiiriiiMiiiiiiiriuMiiii)intiiiiiinrtiitiiiiiiiiKHiininiiriiMiiininiuiiiniMiiinnntiiiiiii]iiiiiiiiiii)iiiiiriiiniiiiiiMiiiiiiiiilMiiíitiiiiiii(iii:iiii<iiiiiiiiiliitMiriiiiñ

^lllllltiniiiiiiiiirii:ii"itliiiMitiii(iiiiiiiuiii[in?iiMiiiiiniuiintn)ir!tiitiiiii.iiiiiiiiifii«iiiitiu(ti titiiiiriiiiitiiriiiKirumiMiiiiiiiitirdriinHiiiiiiiiiniiiHiiMriifíit

La feria
Después de las ferias de México nada hay que a uno
le cuente más de goce popular absorto, de alegría pro-
funda y sin gritos, de entrega a lo que trae el instante sin
reservas ni condiciones.
El gentío, en olas mansas, desfila y vuelve a desfilar
sin cansancio ni rebullicio. Como en un rito que llevase
el pago inmediato en el "mirar y ver" gustoso, sin limi-
tación, sin empacho, el pueblo vuelve a lo que es suyo,
hecho por él, o para él nacido, y que tiene su propia
esencia, el fiel sentido popular que es lo eterno en de-
cantación.
En las "carpas", teatros populares donde el pueblo
se advierte siempre en humor, valor y deseo, éste se
remansa, se olvida del tiempo, aviva lo que iba apa-
gando su auténtico modo de ser, refortalece su concien-
cia solidaria de la justicia y de la felicidad populares,
abre puertas a su sensualidad, malherida por el esfuer-
zo necio V ciego.
De Ins ferias de México, las "carpas" son el centro
activo, son la cátedra y el museo, son la lección más
expresiva, regocijante, auténticamente popular. i i
:<iiiiiiniuiitiiininriMniiiMiiui>MMiiTMrnMOiMiininiTmmmiiniimuiiirMitinmmMimiiiitiiiiiiiiimitnMimMiiiiiiimiu

Juguetes
Las "carpas" y les juguetes populares, siempre iguales y diferentes,
siempre matizados de una nueva originalidad siendo fieles a la norma cier-
ta, de peligroso variar.
El indio sensible, en el pueblito de la sierra, trabaja en relativa paz,
en pobreza excesiva, para las ferias, para las muchas ferias del país.
Nadie sabe quién hizo estos guaraches diminutos teñidos de unos colores
vejretales tan extraordinariamente ligados; nadie sabe tampoco, con exac-
titud verdadera, dónde se pulieron estos molinillos quemados, estas bateas
color tabaco.
¿Y de la loza sin ejemplo? Sabemos, saben muchos, el estilo, la zona,
hasta el grupo de hombres que en el rincón perdido la trabajó callada-
mente. Perc ¿y la pieza excepcional, señera, capaz de resistir la más hon-
rosa comparación, nacida de manos anónimas, vendida al precio más
normal, regalada casi, como la mayoría de lo que en los múltiples espera
la mano y la oferta?
¿Qué dedos sabios tejieron esta canastilla que es encaje y rayo de
luz, que se afirma en su fragilidad con seguridad de una teoría mate-
mática?
Nosotros poseemos un pequeño tesoro, un núcleo de riqueza perfecta
que ^ síntesis de nuestro aspirar, esencia de nuestra esperanza en la
posibilidad del pueblo como poder de creación: se trata de unas docenas
de pequeñas joyas hechas por indios ignorados y que vinieron a nuestras
?¡ Illlllll IIJIIII I I nuil IIIIIJIIilllllllllllllllllllllllllllllllUIIIIIIIIIIIIIIIIUIIIIII'lllllllll'lllllllll'lllK
manos en unas ferias mexicanas que nunca habremos de olvidar.
desea un equilibrio económico y no
MÉXICO ORIENTADOR el derecho ilimitado que reclaman los
individualistas, para la desmedida ex-
plotación de las mayorías productoras.
Se acusa a la Escuela Socialista de
enseñanzas iníeresaníísimas aconsejar la comunidad oficial de ias
mujeres, cuando lo que de verdad
persigue es su plena capacitación eco-
sobre la educación nómica, cívica y moral, para que de-
jen de ser víctimas de un régimen de
que "Mi revisía" se .servidumbre doméstica; de un siste-
Deseoso de interpretar fielmente el criterio sustentado por el honra en publicar ma explotador que, al igual que a la
C. Presidente de la República en múltiples circunstancias y para niñez desvalida, las trata sólo como
aclarar conceptos sobre las tendencias de la Reforma Educacio- en sus columnas, instrumentos de producción o como
nal, que implica el sincero propósito de la Revolución, de unificar debido a la pluma medios de placer, a los que son arro-
el pensamiento de nuestras colectividades, encauzando la acción vigorosa del señor jadas por la miseria y por un llama-
de las ni.'evas generaciones hacia la organización de un régimen do orden social unilateralmente pro-
en que la igualdad sea consecuencia de una equitativa distribu- Licenciado Ignacio
tector del varón.
ción económica, estimo que la implantación de la Escuela Socia- García Téllez, se' La Escuela Socialista tampoco pre-
lista significa un paso más hacia la redención material y espiri- creíario paríicular coniza la violencia, puesto que sabe
tual de ias clases asalariadas dentro de un orden de efectiva jus- que en la naturaleza misma del sis-
ticia social. de la Presidencia
tema individualista está su propia des-
Sería imposible tan generoso anhelo si el Estado no se pro- de la República de composición, y en la táctica de los
pusiese liquidar el analfabetismo de las masas y destruir los pri- México. trabajadores organizados, su más te-
vilegios de la cultura, poniendo la escuela al alcancé de las clases mible amenaza. No necesita coaccio-
laborantes. La educación estará encauzada preferentemente hacia nar las conciencias, porque la ex-
las clases campesinas y obreras, vinculada con los problemas del periencia y la verdad científicas le
medio, las necesidades y aspiraciones de las agrupaciones prole- ensenan que los dogmas, los sistemas familiares, las fórmulas po-
tarias y acorde con los progresos de la técnica para la sociali- líticas, los rumbos de la cultura, son superestructuras en constante
zación de la riqueza, a fin de que la nueva escuela se convierta
cambio de adaptación, que revelan la historia de las luchas so-
en capacitadora de trabajadores manuales e intelectulaes que, con
ciales por l'i adquisición de la igualdad de clases y de verdadera
conciencia de clase, puedan convertirse en eficientes y honestos
justicia para los oprimidos. El sincero educador socialista sabe
directores de sus propios bienes.
cuan inútil es la imposición autocrática de las doctrinas, ya que
La Escuela Socialista aspira a elevar las condiciones de vida para él ha dejado de ser el maestro un simple transmisor de ideas
de los trabajadores, a aumentar el bienestar del pueblo sometido ajenas, que las inculca en repetidores sumisos, faltos de carácter
a una economía semicolonial, enseñando a mejorar nuestros sis-
y de personalidad, y que en lugar de alumnos irresponsables for-
temas de cultivo, nuestra técnica industria!, así como a eliminar
ma trabajadores conscientes, disciplinados y aptos. El educador
a los intermediarios y a las clases e instituciones parasitarias, con
revolucionario no ignora que debe convertirse en un guía de la
ei objeto de crear una economía moderna y colectivizada por un
nueva organización, en descubridor de las ultimas verdades del
pueblo laborioso, culto y satisfecho.
La Escuela Socialista aspira a enriquecer la inteligencia y el progreso científ'co, en camarada de la juventud y en fiel delegado
sentimiento de los hombres con todo el tesoro científico y estético de los hogares que deseen para sus hijos una vida mejor. Sólo
de la Humanidad. Por ello no desconoce la importancia de la cul- imprecan al maestro avanzado y disputan una soberanía hoga-
tura en todas sus fases y todos sus grados, pues la considera como reña las clases burguesas que quieren para sus hijos mentalidad
un medio para el aprovechamiento y dominio de la Naturaleza, de explotadores, o las clases sumidas en la idolatría, que no com-
para la comprensión científica y razonada de los procesos del Uni- prenden que traicionan sus deberes de buenos padres al oponerse
verso y de la vida, a la vez que el factor del progreso colectivo. a la escuela que quiere sacar a sus descendientes de la condición
En consecuencia, es un centro de acción contra el fanatismo, los de parias.
vicios y las lacras sociales y los sistemas de explotación mante- Es verdad que la Escuela Socialista no hará por sí sola el
nedores de la miseria y la ignorancia. Quiero decir con esto que
cambio radical de un sistema económico parcialmente avanzado;
la Escuela nueva es combativa y crítica de todos los medios de
esclavitud material y espiritual que degeneran y aniquilan la dig- más su aceptación impone la coordinación de todos los esfuer-
nidad humana. zos oficiales y privados, principalmente de las clases sindicadas,
Se calumnia infundadamente a la Escuela Socialista diciendo para que la influepcia educadora de las aulas no sea desvirtuada
que pretende destruir el respeto y el cariño de los hijos para con o destruida por intervenciones o ejemplos contrarios.
sus padres, olvidando que, destinada la educación a las clases La reforma constitucional del artículo 3." que México ha lleva-
trabajadoras a fin de elevar su condición, es inconcebible que los do a cabo implica un compromiso ineludible del Instituto Político
padres piensen inhumanamente invocar la íntangibilidad de pre- de la Revolución y de todos los Poderes Federales, de los Es-
tendidos derechos para conservar a sus vastagos en la situación tados y los Municipios, para continuar acelerando la substitu-
de ignorancia y pobreza en que secularmente han vivido. ción de los sistemas individualistas con sujeción a un programa
Por el contrario, las clases oprimidas saben que la Escuela
científico, dirigido por entidades surgidas de verdaderas demo-
Socialista es su escuela, que representa la promesa de un hogar
feliz y los sacrificios de la generación presente por desterrar las cracias de trabajadores.
inicuas desigualdades que se amamantan desde la cuna. Se des- La implantación de la Escuela Socialista, lejos de conducir a
conoce el espíritu y estado económico y scoial de las clases tra- una situación de aguda contienda de clases o a una inmediata
bajadoras cuando se piensa que pudieran provocar una supuesta crisis de la tranquilidad nacional, debe recibirse como un augu-
pugna entre la educación doméstica y la educcaión del Estado, rio de paz, como el medio previsor por excelencia para encauzar
ya que no sólo carecen de medios para impartirla en el hogar, el antagonismo existente y las guerras industriales hacia la so-
sino aun para sostener a sus niños en la escuela, proveerlos de lidaridad más estrecha de los intereses nacionales con los de la
útiles de enseñanza y facilitarles el acceso económico a los esta-
Humanidad.
blecimientos superiores. Por el contrario, son ellos los principa-
les sostenes de la Reforma Educacional, que trata de evitar que La preparación armónica de las clases trabajadoras y de las
la cultura siga constituyendo un privilegio de las clases domi- futuras generaciones en el trabajo colectivo evitará que el des-
nantes para mejor afianzar su condición de detentadores de la quiciamiento de la actual civilización, basaci'i en la explotación
riqueza. del hombre por el hombre, en la mecanización del espíritu, en
La Escuela Socialista no es destructora de la libertad, enten- la deificación de la riqueza material, que posterga el legítimo de-
dida ésta no como libertinaje, que es el sentido anárquico en que recho de todo ser hacia la superación integral, conduzca, al acon-
la defienden los conservadores de ayer y exaltados de hoy, sino tecer el derrumbe de las instituciones tradicionales, a la impro-
como el deber de elevación personal e indispensable factor para visación demagógica y a un angustioso trance de prueba produ-
lograr el máximo progreso colectivo; inconforme diclja escuela con cidos por la falta de cerebros y voluntades selectamente educados
la libertad teórica y la igualdad artificial que las leyes estatuyen, para la dirección del nuevo régimen social.
LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL, FACTOR
DE UNIFICACIÓN EN LA VIDA MEXICANA
Los dos millones y medio de indios que no hablan
nuestro idioma, todavía están prácticamente
excluidos de lá vida social y política del país
Exclusivo para Por
«MI REVISTA» Juan SAUDADES

Ramón Beteta Quintana es una de las figuras rele- doles el español, les enseñaremos a ser mexicanos, en el
vantes de la intelectualidad mexicana. Su sagacidad ahonda verdadero sentido de esta palabra.
en los problemas fundamentales de la vida de la gran "La Revolución en su período de lucha armada hizo
nación americana, buscándoles soluciones prácticas y hace- mucho para ponerlos en contacto con el resto de la po-
deras, conducentes al mejoramiento de la obra renovadora blación. AI trasladar a nuestro pueblo de un lado del país
que realiza desde el Poder el Presidente Cárdenas, encar- al otro, y dar oportunidades a los que nunca las habían
nador de las grandes virtudes de la raza que han de llevar tenido, nuestro movimiento revolucionario ha llegado a ser
a México a ocupar, en el porvenir, uno de los puestos la fuerza de mayor importancia—después del cruzamiento—
avanzados de vanguardia en el mundo. para fomentar la unión y la fusión de todos nosotros.
Nos hemos acercado a Ramón Beteta Quintana para "Dos hechos hacen factible esta integración: en pri-
preguntarle: mer lugar carecemos absolutamente de prejuicios de raza
—A su juicio ¿cuál es el problema que ha de pre- y es por esto por lo que la educación tiene en México
ocupar más en estos instantes a los patriotas mexicanos? consecuencias tan trascendentales. Cualquier indio, me-
La respuesta del gran pensador no se hizo esperar. diante la educación, puede ascender a otro nivel y cambiar
Fluyeron las palabras de su boca, expresando los con- de modo de vida; por lo que, socialmente hablando, puede
ceptos que procuraremos reproducir con la necesaria.con- dejar de ser indio. En otras palabras, el ser indio no es
cisión impuesta por los apremios de espacio y de tiempo. cuestión de raza, sino de idioma, de modo de vivir y de
Dijo así: educación.
- L a Revolución al buscar el levantamiento moral y "El segundo hecho que favorece la integración es la
económico de nuestras clases indígenas, busca también evidencia de que somos un país indio. No solamente alre-
su cooperación en la obra nacional. Los núcleos que an- dedor de dos millones y medio de personas son indios
tes constituyeron civilizaciones autóctonas, al ser despla- puros, como lo demuestra el idioma que hablan, sino
zados por la conquista se mantuvieron alejados del medio también la mayoría de la población es mestiza; es decir,
en que se han debatido nuestros problemas, sirviendo úni- de sangre india y española mezcladas.
camente como elementos de ataque—materia prima en el "México, sin embargo, es más indio de lo que indican
fragor de nuestras luchas—, pero sin la consideración estas cifras, pues en nuestros alimentos, nuestra indu-
de sus vidas empobrecidas por el aislamiento implacable mentaria, nuestras casas y, lo que es más importante aún,
en que tenían que subsistir. en nuestra actitud hacia la vida, hemos sufrido grande-
"Para lograr esta aportación indígena en la obra de mente la influencia de nuestra herencia indígena.
edificación nacional, uno de los medios más efectivos es "Pero México no es indio únicamente; también es es-
la unificación del idioma. Casi el 15 % de nuestra pobla- paño!. España trajo a América lo mejor que tenía y nos
ción no conoce nuestra lengua o habla algún dialecto indio lo dio: su fe, su sangre, su idioma y con él un elemento
'de preferencia a ella. Para ser más exactos, en 1930 de unificador, el más eficaz que poseemos..
un total de 16.500.000 habitantes, había Ll 85.161 perso- "Por ello la enseñanza del idioma español en México
nas que solamente hablaban lenguas indias y los 1.064.234 significa mucho más que un esfuerzo cultural para pulir
que, conociendo tanto el español como alguna lengua in- nuestros medios de expresión. Un idioma común es para
dia, hablaban de preferencia ésta última. México el factor más importante en la integración del
"Cerca de setecientas mil personas hablan en México país.
el idioma náhuatl; medio millón, el mixteco zapoteca; cua- "Debo insistir, sin embargo, en este punto: no teña-
trocientas cincuenta mil, el maya-quiché; trescientas mil, mos el menor deseo de excluir al elemento indígena de
el otomí, y así en descenso a través del totonaco, el pima nuestra vida, sino más bien queremos realizar la doble
y el tarasco. En el México de hoy existen por lo menos tarea de incorporar al indio a la nación mexicana, de ab-
trece idiomas indios distintos, qué son absolutamente in- sorber al mismo tiempo la cultura indígena y el modo
dependientes entre sí. de vivir del indio, en la proporción que sea compatible
"Esos dos millones y medio de almas que no hablan con un nivei de vida más alto.
nuestro idioma, todavía están prácticamente excluidos de "Huelga asentar que nuestro problema es muy deli-
nuestra vida social y política. Viven dentro de un sistema cado. Por una parte, debemos dar a nuestro pueblo las
económico primitivo en que no se usa el dinero; un sis- ventajas de la higiene, de los descubrimientos científicos,
tema de consumo prepecuniario, precapitalista. Enseñán- de una td-cnica económica mejor, de sistemas más ade-
LO QUE
Hnrm,i;titiiii iiiiiniiinininFnntiiinTiiitliniiiri
PODEMOS APRENDER DE MÉXICO

Efectividad de la Reforma Agraria


El control de la Escuela por el Estado
Antes de esa lucha social y económica que llamamos la De acuerdo con esta situación, la ambición del joven
Revolución, ningún mexicano podía discutir con sinceri- era siempre la de educarse en el extranjero, para allí vivir
dad las condiciones que prevalecían en su patria. De después, sin tener que trabajar, sino sosteniéndose con
hecho, casi no existía México como tal, excepto desde el el producto de sus grandes haciendas mexicanas.
punto de vista meramente geográfico, porque en el terri-
torio mexicano había dos países: uno, constituido por La explotación de México para extranjeros
las clases dirigentes, no era más que imitación barata
Se extrajeron muchos millares de toneladas de plata
de Europa; el otro, compuesto por los indígenas, era un
de las minas mexicanas, se exportaron del país miles
Estado feudal, en que la gente vivía en la miseria y el
de kilos de oro, y se embarcaron para el extranjero, des-
aislamiento. De estos dos países, el mexicano culto se
de nuestros puertos, millones de barriles de petróleo, en
enorgullecía sólo del primero y sólo hablaba de él. A él
pago de capitales e intereses correspondientes a inversio-
se refería cuando decía que "México ha sido admitido
nes hechas para extranjeros; pero los jornales pagados
al concierto de las naciones civilizadas". En opinión del
a los trabajadores variaban de veinticinco a setenta y
mexicano europeizado, la capital de México era "un pe-
cinco centavos diarios. Éramos productores de riqueza,
queño París"; el Teatro Nacional, copia del Teatro de
pero no nos pertenecía; teníamos ferrocarriles, cuyas bri-
la Ópera, y nuestra avenida principal rivalizaba con los
llantes cintas paralelas comunicaban a la capital de Mé-
Campos Elíseos. Y para que Chapultepec, nuestro bosque
xico con Tos Estados Unidos, y por medio de los puertos
legendario natural, se pareciera al Bosque de Bolonia,
con Europa; pero nuestro pueblo, como bestia de carga,
fué transformado con lagos artificiales y pasto inglés. El
andaba con paso pesado por las veredas de nuestras
francés era el idioma de la sociedad, y también el idioma
montañas, cargado hasta el límite de sus fuerzas, arrian-
en que nuestros estudiantes aprendían Derecho, medici-
do sus burros, fieles y abnegados compañeros de sus in-
na e ingeniería. Nuestra cocina era francesa o española.
terminables caminatas.
Nuestras costumbres, europeas. Norteamericanos los fla-
mantes ferrocarriles, ingleses y norteamericanos nuestras
minas y campos petroleros, español nuestro comercio, y Cómo se desplomó el México artificial
las tierras de las cuales nuestra población arrancaba un Al sobrevenir las revoluciones que intentaron destruir
mezquino sustento, también pertenecían a extranjeros o la soberanía constituida por una parte por los intereses
—lo que venía a ser lo mismo—a mexicanos residentes extranjeros, y desde otro punto de vista por los de nues-
fuera del país. tra aristocracia terrateniente, combinados con los de la

cuados de agricultura, etc., y, por otra, no debemos des- indios contra la codicia de los conquistadores. Así como
truir la índole de su genio. Por fortuna no estamos tan los misioneros consiguieron enseñar a, los indios algunas
orgullosos de nuestra civilización mecanizada como para de las artes de España, tales como la alfarería y el tejido,
sentir impulsos de imponerla al indio a cualquier precio. así pudieron también comprender su psicología e ''ncul-
La resistencia, adaptabilidad y perseverancia increíbles carles, por lo menos en parte, su propia fe.
del indio, que le permitieron sobrevivir a los esfuerzos de "He ahí una lección que vale la pena de ser aprendida
la conquista española por exterminar su cultura, son las por toda nación en cuyo territorio se encuentran elemen-
mismas que han salvado a México de muchos de los ma- tos humanos que, ignorando la lengua y las costumbres
les de la era industrial y que nos permitirán desarrollar de la gran mayoría, se confinen en sí mismos y no tomen
—así lo esperamos al menos—un sistema más acorde con parte en la vida del país. Para alcanzar este objetivo, el
la índole de nuestro pueblo. idioma español será el único factor importante.
"Muchos de los primeros misioneros, en su afán de "Es ésta—terminó diciéndonos Ramón Betefa Quin-
cristianizar a los indios de la Nueva España, aprendieron tana—una de las obras que con mnvor emneno está des-
idiomas indígenas. Todavía se discute si esos frailes pu- arrollando nuestro Gobierno revolucionario, con la fe
dieron traducir a las lenguas primitivas los ideales y la puesta en la masa indígena, que al participar en la vida
moral del cristianismo y si realmente catequizaron al indio; de México incorporándose a nuestro medio aportará las
pero todo el mundo está de acuerdo en que su influencia fuerzas que ha mantenido latentes a través de tantos años
hizo posible la conquista española y le restó crudeza, de menosprecio y que en otras épocas supieron crear civi-
pues muchos de ellos se erigieron en protectores de los lizaciones que causaron asombro al conquistador mismo.
jerarquía católica, el México artificial se desplomó y nos Se inicia la obro agraria
vimos obligados a mirarnos a nosotros mismos, para
Ya desde 1915 se dictaron leyes declarando que pro-
analizar la realidad nuestra, para examinar las condicio-
cedía legalinente que las comunidades indias recuperaran
nes realmente existentes en el país, en busca de nuestra
sus tierras. Aunque estas leyes fueron incorporadas a la
verdadera patria. Así fué como descubrimos a México.
Constitución de 1917, la verdadera distribución sólo em-
Mientras que la población blanca de México se había
pezó en 1920. Desde este año en adelante, el Gobierno
estacionado y el número de los indios puros no había
ha restituido al pueblo más de 11.000.000 de hectáreas,
aumentado considerablemente, el elemento que sí crecía
de las cuales 3.000.000 son de las tierras cultivables,
era el mestizo (de sangre india y española mezclada) el
siendo el resto de agostadero o monte no apto para el
cual excedía ya a los otros dos, en la proporción de dos
cultivo. Esta distribución ha beneficiado a unas 7.000
a uno. Con su sangre, el indio nos dio una gran parte
comunidades, que ahora se conocen con el nombre de
de su cultura original, y de su actitud hacia la vida.
ejidos, en donde habitan más de 800.000 jefes de familia
Hasta nuestras características más españolas, como el
con una población de un poco más de 3.000.000 de per-
idioma y la religión, han sido hondamente afectadas y
sonas.
modificadas por la influencia indígena. Nuestra piel es
El único principio que ha regido esta distribución ha
más obscura, nuestras creencias son más paganas, nuestro
sido el de la necesidad. Toda colectividad que necesite
idioma más rico, que los que nos diera España. Europa
tierras tiene derecho a recibirias. Dentro de los limites
había sojuzgado a México sin colonizarlo. En el proceso
del ejido, "la tierra pertenece a quien la trabaja con sus
había creado un nuevo producto, ni español puro ni indio
propias manos", como lo expresara el poeta indio.
puro; México, un país cuyas razas mezcladas habían
aportado cada una creencias, colores, trajes, ritos, in- No obstante la tremenda oposición de los terrate-
hibiciones, ambiciones e ideales multiformes para fomen- nientes, que recurrieron a todos los medios, tanto legales
tar una nueva nación. como indirectos, para detener la distribución de tierras;
a pesar también de la Iglesia católica, que ha empleado
No todo era recomendable, por supuesto, en el pro-
su influencia moral para impedir que los indios presenten
ducto así conseguido, pero existían algunas virtudes ge-
solicitudes de tierras, el movimiento sigue en plena mar-
nuinas: la paciente resistencia, la adaptación, la volun-
cha, como lo demuestran las cifras arriba citadas, y como
tad de vivir, el apego a la tradición, el amor patrio, la
lo ha comprobado la creciente productividad de los ejidos.
persistencia tenaz ante las fuerzas hostiles. La decep-
El Gobierno, por supuesto, se dio cuenta del hecho
ción, cuatro siglos de opresión, la explotación despiadada,
de que no era suficiente el simple reparto de tierras. Igual-
habían obligado al indio a retraerse dentro de él mismo,
mente esenciales son el crédito y la instrucción técnica,
pero no murió, porque conservó intacta su vida anterior.
y aquél está intentando proporcionar ambas cosas, dentro
Y en ello hemos encontrado valores espirituales que la
de los límites de sus posibilidades. En 1926 se fundó
civilización occidental había perdido y olvidado.
el Banco Nacional de Crédito Agrícola, con un capital
de $ 50.000.000. Tras de algunas modificaciones que re-
Con qué vino a encontrarse la Revolución
sultaron indispensables, ahora funciona como institución
La Revolución, al examinar las verdaderas condicio- sin fin lucrativo, que ayuda a los ejidatarios y pequeños
nes económicas de México, aprendió que nuestras de- agricultores, a quienes previamente organizara en forma
cantadas riquezas eran un mito. En la esfera de la agri- de cooperativas. Nuestro Plan Sexenal previene que el
cultura, encontramos escasas nuestras tierras laborables Gobierno Federal habrá de aportar la cantidad de 50 mi-
(catorce millones y medio de hectáreas, o sea, aproxima- llones de pesos más durante el período comprendido en
damente, el 11 % de la superficie total del país), aunque dicho Plan, suma que no deja de ser de consideración
más del 70 % de nuestra población, empleada en menes- tratándose de un Gobierno cuyo presupuesto total el pa-
teres lucrativos, derivaba su sustento de la agricultura. sado año apenas excedió de $ 200.000.000.
También supimos que la tierra había sido acaparada y
su propiedad estaba concentrada en unas cuantas manos;
No sólo tierras, sino escuelas rurales
el 2 % de la población poseía el 70 % de las tierras y en
algunos Estados el acaparamiento llegaba a tal grado, Por el momento ya ha cambiado toda la filosofía que
que el 98 % de los jefes de familias' rurales carecían de inspiraba nuestro sistema educativo, y nuestra mira en
tierras. la actualidad es precisamente la de enseñar a las masas
Supimos, además, que los que cultivaban la tierra, rurales métodos mejores de cultivo, el cuidado científico
que trabajaban como sier\'OS bajo un sistema de peonaje de los animales domésticos y un régimen de vida más ade-
que era una esclavitud desconocida ni amparada por la cuado y más sano. Para este fin, la Revolución que ya. en
ley, habían vivido antaño en comunidades indias libres, 1934 había fundado unas 8.000 escuelas rurales, se ha
en las que la vida era sencilla, se labraba la tierra en comprometido, de acuerdo con el Plan Sexenal, a estable-
común y prevalecía una especie de colectivismo; o bien cer 2.000 más en 1937, 2.000 en 1938 y 3.000 en 1939,
habían sido pequeños agricultores, de carácter empren-, Estas escuelas exigen, naturalmente, Normales Rurales,
dedor e individualista; pero que todos habían sido des-, en las que se prepara a los maestros, así como Misiones
pojados de sus tierras por medios reprobables, por la Culturales para mejorar la preparación de los que están
violencia real y efectiva o por medio de chicanas. No hay en servicio.
que sorprenderse, por lo tanto, que la Reforma Agraria El Gobierno Federal gastó el 15 % de su presupuesto
sea uno de los principios esenciales de la Revolución. en el ramo de Educación en 1934; en el año 1935 gastó
el 16 %, el año que viene el 17 %, y así sucesivamente la conveniencia de que ellos también constituyan un solo
hasta 1939, en el que el 20 % de los gastos totales del .grupo. Comprendemos que cuando así lo hagan, se sim-
Gobierno Nacional se empleará en el ramo de Educación. plificará el problema de la tierra, porque será más fac-
No es, sin embargo, el número de las escuelas el punto tible la cooperación en materia de venta de productos
de más significacion.de la reforma educativa, sino el he- para los fines del crédito; se llevará a cabo con mayor
cho de que cada una de tales escuelas rurales es un cen- rapidez la distribución de la tierra, porque los peones
tro de vida y acción en cada colectividad, y a la vez el no se amedrentarán tan fácilmente ante los terratenientes
modo más efectivo de obtener el mejoramiento físico y y la Iglesia, como ha sucedido con tan frecuencia en el
moral de los pueblos. pasado.
Si examinamos la situación minera del país, sabemos
que México es y ha sido desde hace muchos años el pri- El juego de la reacción contra la Escuela
mero entre los países productores de plata en el mundo, A semejanza de lo que hiciera en el caso de nuestras
que de hecho el 40 % de la producción mundial de ese condiciones económicas, la Revolución examinó también
metal ha salido de las minas de México; pero tratando de nuestra situación desde el punto de vista de la educación
averiguar lo que habíamos obtenido de toda esa riqueza, pública. Lo que vimos en este ramo, era, si cabe, más
nada pudimos ver, salvo grandes y obscuras cavidades deprimente aún. En el país, el 74 % de los habitantes
en el suelo, que antaño fueron minas; elevados montones eran analfabetos; las escuelas, frías, escasas, ineficaces
de escombros venenosos, cerca de las minas mismas, y y llevaban los apelativos simbólicos de escuelas rudimen-
hombres pálidos y enfermizos con los pulmones carcomi- tarias, o de escuelas incompletas.
dos por la silicosis, la enfermedad peculiar de los mineros.
Las clases adineradas mandaban a sus hijos a las
El resultado de estas investigaciones se tradujo en la escuelas católicas, en donde se les enseñaba a odiar a la
resurrección dé las antiguas leyes de México, que rigieran Revolución, así como a todos los caudillos y Presidentes
al país desde la época colonial y hasta la dictadura por- progresistas que México ha tenido en su historia. Se les
firiana; leyes qué prevenían que el subsuelo pertenece decía allí que la distribución de las tierras era obra cri-
a la nación y no al dueño de la superficie. Así intentamos minal; que la única esperanza de México se cifraba en la
limitar la explotación desenfrenada de los minerales y derogación de la Constitución, contraria a la fe católica,
del petróleo de nuestro país, con la esperanza de des- y en el reconocimiento del derecho supremo de la Iglesia
arrollar un sistema que permitiera una explotación más católica a dirigir al Gobierno en todas las cuestiones de
racional de las industrias extractivas, en la que se daría índole moral; derecho dado por Dios mismo, y que exis-
la preferencia al elemento humano sobre las considera- tía antes del Poder del Gobierno como temporal.
ciones que atañen a la producción.
De este modo se criticaba cada acto del Gobierno y
Nosotros queremos que México sea mexicano, y que de la Revolución, y ios niños crecían en una actitud men-
las riquezas de México se produzcan en beneficio del país tal que hacía cada vez más difícil la realización de nues-
en general, y en particular, de los que se ocupan del pro- tros propósitos. Bajo el pretexto de ensenar la religión,
ceso de la producción. Deseamos también que nuestros la Iglesia dividía a la familia mexicana y hacía intermi-
recursos naturales sean protegidos contra el despilfarro nables estas dificultades.
y la explotación descuidada, porque sabemos que estos
recursos no nos pertenecen a nosotros únicamente, sino
El control de la Escuela por el Estado
que también son propiedad de las futuras generaciones
de México. Sólo una cosa había que hacer: que el Gobierno con-
trolara la Educación primaria. Durante tres siglos y me-
Atención a las clases obreras del país dio la Iglesia había ejercido el dominio, no disputado por
Después nos pusimos a investigar las condiciones ur- nadie, de la educación. Los resultados habían sido el
banas del trabajo, sólo para darnos cuenta del hecho de analfabetismo, la intolerancia. Durante medio siglo se
que la suerte de nuestros trabajadores industriales no era había intentado la separación completa: el Gobierno im-
mucho mejor que la de campesinos e indígenas. Sin dere- partía la insirucción laica, dejando en entera libertad a la
cho para organizarse, carentes de legislación protectora, Iglesia; pero las condiciones no mejoraban. Era necesa-
nuestros trabajadores sufrían bajo el peso de ese capi- rio dar otro paso más adelante. La educación laica de-
talismo incipiente, de índole igual al que se desarrolla en bía ser obligatoria, ya fuese que la impartieran las es-
las colonias económicas. La organización de sindicatos cuelas oficiales o los planteles privados. Se habría de ex-
obreros constituía delito castigado por el Código penal. plicar a los niños los principios de la Revolución, incul-
El Gobierno de México no sólo permite que existan cándoles sentimientos de simpatía hacia las clases traba-
los sindicatos obreros, sino que los ha fomentado, y en jadoras, justamente con el deseo de ver el advenimiento
la actualidad ve con simpatía la formación de un frente de una sociedad basada en la justicia y en una distri-
unido, que bajo el nombre de Frente Único Proletario in- bución más equitativa de la riqueza.
cluye en sus filas a la mayoría de los trabajadores or- La educación habría de ser científica, pero no nece-
ganizados. sariamente atea. Habría de incluir la explicación racional
del Universo, pero no la negación de Dios. Al contrario
Labor pro unidad entre los campesinos de lo que han alegado el clero y los amigos de éste, nos-
Y, no satisfecho con ver a los obreros urbanos orga- otros no pretendemos que los niños sean propiedad del
nizados, trata de convencer a los obreros del campo de Estado y no de sus padres, porque la famalia sigue siendo
aún el centro de la vida en México. No enseñamos el ción puede significar despojo; para los terratenientes, sa-
comunismo, ni podríamos hacerlo tampoco sin reformar queo; para la jerarquía de la Iglesia católica, inmoralidad;
la Constitución. pero para la masa de peones hambrientos significa muchas
cosas inapreciables: alegría en su monótona miseria,
Las pugnas por el poder temporal acción en sus existencias inhibidas, fuerza después de
siglos de impotencia, recompensa a sus vidas ignoradas,
La lucha que la Iglesia Católica Romana libra por el
tránsito de la clase de los que sufren al grupo de los
poder temporal, es muy vieja. En México lleva un siglo
que guían.
de actividad y su encono ante nada se ha detenido. La na-
Ésa es la gran enseñanza que ofrece México a los
cionalidad y el patriotismo no son más que vanas pala-
españoles en estas horas augustas de su liberación.
bras cuando se oponen a la supremacía temporal. Fueron
los elementos clericales de México los que trajeron de R a m ó n BETETA
Austria al infortunado Maximiliano. Fué la influencia de
aquéllos, sus halagos y su dinero, los que corrompieron a
Díaz, y ellos fueron también los responsables del asesi-
nato del Presidene Madero y de la cruel y odiosa dictadu-
ra de Huerta. Obedeciendo una orden indirecta de ellos,
¡MÉXICO!
I
wuimiimtiniiiiiiiniiiiiiiiiiiiimiiiniiiriiwiiiaiiiiiminnmHiiiiiiiiiniffliwinii

actuó la mano de Toral en el asesinato de Obregón. Y ellos


Ahí va lo que tenemos
son los que en su deseo de detener la obra de la Revolución
solicitarían gustosos la ayuda de los Estados Unidos, en Quienes hemos vivido desde un principio la gran trage-
contra nuestra, aun a riesgo dé suscitar con ello una guerra. dia de A.sturias, producida por el levantamiento fascista para
aniquilar las libertades del pueblo, jamás podremos olvidar las
Pues ha sido la Revolución la que al confiscar las pro- gestas grandiosas, la ayuda limpiamente desinteresada del gran
piedades de la Iglesia, logró hacer cumplir las leyes de pueblo mexicano a la España que combate por un mañana me-
reforma- es la Revolución la que niega a la Iglesia per- jor de equidad y de justicia.
Si la desigualdad de fuerzas y de medios fué bien notoria
sonalidad civil, y la que ha ordenado que los sacerdotes, en todo el territorio español por el carácter y la extensión del
para poder oficiar, deben ser mexicanos y registrarse; es movimiento, reaccionario, fácil es comprender la del Norte,
aislado prontamente de la zona leal.
la Revolución la que sabe que ningún Gobierno de Mé- La Asturias de octubre que el 18 de julio volvía a mostrar
xico podría calificarse de independiente, ni de soberano su vigor, su potencia revolucionaria, desalojando a los suble-
e' país, si lo gobernara un prupo que recibiera órdenes vados de sus cuarteles, esforzábase con angustia ea encon-
trar los medios para mantener su triunfo, conociendo perfec-
de una potencia extranjera, el Vaticano; es la Revolución tamente que para ello habría de encontrar el capiino preñado
la que ha repartido unos once millones de hectáreas de de dificultades.
Fué entonces ya cliando pudimos percatarnos de que allá
tierras a unos siete mil pueblos de indios, en beneficio de lejos, muy lejos, un gran pueblo profundamente revolucionario,
casi 800.000 jefes de familias campesinas, y ha conse- celoso de sus libertades, sintiendo la universalidad de la Ra-
guido de este modo descartar toda posibilidad de que la zón y de la Justicia, había vuelto sus ojos protectores y amo-
rosos hacia la España que ansiando ser libre era apuñalada
iglesia se convierta de nuevo en el terrateniente máximo por muchos de sus propios hijos que la vendían a un extran-
del país; es la Revolución la que ha nacionalizado el jero tiránico y rapaz.
subsuelo, ha organizado a los obreros en sindicatos, les Y esta ayuda llegó. Y llegó oportunamente, causando nues-
tra admiración y haciendo brotar a borbotones de nuestros
ha otorgado ^,1 derecho de huelga, ha mejorado sus con- pechos la gratitud hacia México.
diciones económicas, y así ha substraído a los trabaja- En mi memoria ha quedado indeleblemente grabado un re-
cuerdo por su sencillez y grandeza a un tiempo. A cierto lugar
dores a la influencia fanatizadora de la Iglesia. Y es la del Norte llegó cierto día un obsequio de México. Quien tenia
Revolución, finalmente, la que ahora enseña a nuestros la misión directa de entregarlo, dijo con la más admirable
hijos que todas estas cosas son necesarias y deben seguir, sencillez.-
—AlU me han mandado que os diga que "ahí va lo que
.si es que nosotros deseamos que México sea a la vez in- tenemos". ¡No hay otra cosa, amigos!—añadió por su parte.
dependiente y mexicano. —¡Viva México! — exclamamos con emoción los presentes.
Era verdad. México nos enviaba de "aquello" lo único que
tenía. No en vano había luchado también por independencia y
más tarde por sus libertades.
Ño hay problema religioso en México De sus propias experiencias aprendió a sentir el dolor ajeno
y la práctica amplia de la solidaridad. País de finas y sensibles
Pero quizá preguntaréis: ¿En dónde está la cuestión inquietudes espirituales, sabe ser demócrata en la verdadera
religiosa? No existe tal cuestión religiosa. Nosotros no acepción de la palabra y otorgar su concurso sin reserva ni
impugnamos la fe católica, ni pretendemos substituir su dilación a quien lo necesite, esté lejos o cerca.
No entiende de rodeos, de secretos ni de intrigas diplo-
dogma con otro alguno, ni existe oposición entre la ética máticas. Sus actos por el bien son diáfanos e impolutos. Su
católica y la que la Revolución enseña en la escuela, ni verdad rebosante de amor y de justicia humana llega a todas
partes radiante de luz y de belleza.
tampoco nos entrometemos en asuntos del culto católico. De México tienen infinitamente que aprender los países de
Los templos están abiertos, y están al cuidado de sacer- régimen democrático de Europa y de América. Para dar, ra-
dotes católicos. Cuando vino la orden de cerrarlos, esa pidez, desprendimiento y renunciación a beneficios posteriores.
Para hablar y sentar una actitud, palabra clara, serena y de-
orden no emanó del Gobierno, sino de la Iglesia. En re- cisiva. .
sumen, lo que existe en México no es una cuestión reli- Tal es el gran pueblo de América que supo liberarse por
el vigor de sus hombres y de sus ideas del yugo de la tiranía
giosa, sino una cuestión económica y política, cuestión exterior e interior que quiso cabalgar sobre sus espaldas.
que ha dividido a! país en todo tiempo, desde el año 1822, A él nos unen vínculos de raza y de afanes liberadores. A
cuando la Iglesia y el Estado en México iniciaron esta México, como asturianos y como españoles debemos?, por su
especial conducta en estos instantes trágicos de la historia de
lucha por la supremacía política. España, la más profunda admiración y gratitud imperecedera.
Para los intereses extranjeros en México, la Revolu- Segundo BLANCO
Barcelona, diciembre de 1937.
Lo que más acerca a los hombres y los pueblos, no es
tanto la adversidad en sí, como el modo que se tenga de
reaccionar ante ella.
Dentro de ciertos límites los .hombres responden con
arreglo a una pauta bastante uniforme a la felicidad y todas
las posturas individuales o colectivas ante la misma se re-
ducen a simples diferencias cuantitativas en la intensidad
MÉXICO
con que se colorea la emotividad de cada uno ante el placer.
Pero el dolor es un sutil tornasol que valoriza cualidades y
Por el Dr. Félix
al choque de su duro pedernal es posible ver cómo se rom-
pen las almas de vidrio y se templan las de acero.
MARTI IBAÑEZ
Lo que más ha favorecido la proximidad espiritual hoy
existente entre México y España fué sobre todo su capacidad
de sufrimiento y su magnífica reacción ante el dolor. Porr
que las crisis históricas son en la vida de los pueblos lo paña. No obstante, en el corazón de ambas naciones burbu-
que los conflictos internos en el vivir de los hombres: O le jeaba como el vino nuevo en sus cubas, el néctar de un
sumen en un marasmo de triste apatía, grotesca imagen mismo afán de independencia.
vital de la muerte, o le incitan a una vida más fecunda y He ahí el gran mérito de México. Haber sabido siempre
eficaz, que con su ágil transitar por los caminos de la acción rascar con sus dedos la costra de pesadumbres que envol-
lleve en su propio dinamismo el antídoto del dolor. vía a la España obrera y dejar que reluciese el oro de sus
La Historia ofrece un rico muestrario de casos en los ideales. Alcanzar la intuición precisa para descubrir una
cuales una crisis en la vida de un pueblo le ha permitido España que desconocían muchos de los propios españoles.
vigorizar más sus propias y puras esencias. De la matanza No confundir lo que era fantochería y egoísmo de sus poli-
de indios durante la represión ejercida por lord Curzón ticos con la diáfana e ingenua nobleza popular.
brota la India heroica y universalista de Vivekananda; del Recuerdo u n día en la meseta castellana. Labradores de
México tormentoso en la época de Santa Anna, el México bronce y arcilla encorvados sobre la tierra de miel, y oro,
en vuelo ascendente de Juárez; de la España puesta en el bajo un cielo por cuya comba azul rodeada al balón dorado
yunque durante el bienio negro, emerge la España roja de del sol. Una mañana triunfal rumorosa y ardiente, como si
Asturias, la España revolucionaria de julio inmortal. exprimiéndose los racimos de cascabeles de la primavera
iAdmirable ley histórica esa que lleva a cruces en la chorreasen luz y canciones sobre la tierra.
vida de los pueblos, que les hace mezclar su sangre y sus Pero el labrador era—empadado y jadeante—un manojo
pasiones, odiarse a veces, para finalmente como esas gotas de carne y huesos doloridos y húmedos. «¡Es dura y cruel
de agua que resbalan por el cristal hasta unirse, juntar el la tierra!», le dije. Él me miró con esos ojos soñadores de
fluir de su existencia y borbotar fundidos hacia un mismo labrador castellano, por los cuales galopa toda una evoca-
futuro histórico! ción de la vieja Historia de España. «jNo!—respondió—. La
Meditemos sobre estas interferencias en la Historia de tierra es sudor, fuego, fatiga. Pero eso es sólo la cascara.
México y España tan jugosas en dorado zumo de sugeren- Y dentro está la mies rubia, el ganado correntón, los pastos
c'as: En tiempos posteriores a Cortés, cuando el filo relam- olorosos, el henil fresco y el alba de nácar y bermellón.
pagueante de la espada de los conquistadores abre de un La tierra es blanda y amable por dentro y quiero que ella
tajo en los flancos mexicanos ima vía histórica para Es- me recoja un día como mi madre que es.»
paña, chocan la indiada laboriosa y policroma de las civi- Cierto. Porque él sabía—labrador poeta frecuente en
lizaciones autóctonas y la España negra, de alma vestida Castilla—romper el cascarón de lija y acíbar y escarbar en
con ropilla de luto, de los virreyes católicos. México ha la moUa jugosa y dulzona de la tierra. Así, México supo
tropezado a la vuelta de una esquina de su callejeo histó- siempre romper la helada corteza que envolvía sus relacio-
rico a la España obscurantista y feudal. Y aquí viene lo nes con España y desbordar su amistad en manifestaciones
más interesante. Como la de muchos enamorados, el alma espontáneas de adhesión a ella, en la visita de un poeta
de los pueblos sabe recoger toda esa palpitación humana y mexicano a nuestra tierra, en la recepción que hacían a
aventurera que late por debjo del hecho episódico de que cualquiera de nuestros intelectuales, en su interés para es-
unos cuantos virreyes católicos intenten escribir con fuego tudiar los poetas y literatos de la nueva España.
sobre el libro sangrante de las espaldas de los indios la pá- «No se conocen bien dos enamorados mientras no mezclan
gina siniestra de sus crueldades. México supera conjunta- su sangre bajo las palmeras, ni se forja una amistad sin el
mente a esta crisis, sus odios al país tiranizante y sabe en la lazo de la sangre», dice un proverbio del viejo Levante que
nueva interferencia producida cuando Maximiliano de Aus- a la pituitaria del sociólogo muestra un sutil olorcillo árabe,
tria alberga el loco ensueño de ceñir sobre sus sienes con y la sangre espiritual de los pueblos es la cultura, savia
la simpatía española la corona imperial de México, agra- ideal que circulando por sus arterias constituye el expo-
decer la gesta liberal de Prim al repudiar este nuevo aten- nente en color y fuerza de su vitalidad. Las culturas hispana
tado a la soberanía popular del país hermano. y mexicana que manan de fuentes similares, corrieron por
Por dos veces ha conocido México la expresión oficial y cauces paralelos salpicándose mutuamente como ríos pró-
falsificada de España y visto de nuestra nave ibérica tan ximos, con la lírica espuma de sus prosistas y poetas. Ha
sólo la proa bárbara y cruel de sus despóticos pilotos, igno- bastado un obstáculo en el curso de una para que ambas
rando la existencia de una marinería proletaria que en la culturas se fusionaran al derivar una de ellas hacia el cauce
sentina entona ya sus cantos de rebeldía. de la otra. México y España son ya la misma vena fluvial.
La Revolución española es fundamentalmente un proceso
La Historia va desgranando las cuentas enhebradas en
de biología espiritual. Es la crisis de un cuerpo enfermo que
el hilo de su evolución. Ya México señala en su rosa náu-
en un espasmo convulsivo liquida sus achaques y su letargo
tica el rumbo de la Libertad, ya coloca timoneles revolu-
y afronta virilmente los peligros de la muerte por alcanzar
cionarios, ya el pueblo y su Gobierno son el alma y la carne
las durezas de la vida.
del mismo ideal como sucede en el caso del mandato presi-
dencial del insigne amigo de España Lázaro Cárdenas; y, México ya sabía hace tiempo lo que era jugarse su por-
sin embargo, México desconocía a través de la siempre he- venir espiritual al bello azar de una carta heroica. Cuando
lada relación de diplomacias, el sentir de la auténtica Es- México en réplica al criterio de sus dictadores se lanzó en
baro con que la Prensa fascista pintaba nuestra lucha, Mé-
xico supo transmutarlo en rutilante color de gesta. Era epo-
Especial para el número peya y no forcejeo lo que vivía nuestro proletariado. Y al
acercarse voluntariamente a nosotros vio el pueblo mexi-
de homenaje a México
cano que, como aquel vagabundo de Hamsun, nuestro pro-
letariado tenía los pies manchados por el fango de la guerra,
pero la cabellera aureolada por el polvo de estrellas de su
f>J idealismo. Por sus cónsules y embajadores, sus poetas .y li-
teratos, México se asomó al brocal de esa España revolucio-

POR ESPAÑA naria que los «nacionales» (nacionales de sus naciones, no


de España) poblaban con fértil imaginación de violaciones,-
saqueos, asesinatos y actos vandálicos. ¿Y qué es lo que
vio? Sin sorpresa comprobó México que además de un pro-
letariado que en Asturias vivía la página más gloriosa de la
una cruzada cultural a la gran aventura de conquistar Historia del proletariado mundial, la España dormida des-
—como los - cruzados Jerusalén—su propia espiritualidad, pertaba, como la bella del bosque durmiente al conjuro del
no vaciló en presentar batalla a los «cristeros» e improvisar príncipe encantador de sus ideales. Vio a los labradores de
una legión de jóvenes maestros, paladines del estandarte Castilla, rostro de cobre y ojos de halcón, avanzar con sus
espiritual que no dudaban en jugarse su vida para sembrar,' fusiles regando de sangre la llanura que antes humedecie-
caballeros en una.muía por los desiertos, la semilla de una ron con sudor, hoy convertida en cáliz donde se ungía su
inquietud de superación espiritual en el alma de la indiada. sacrificio; vio a los campesinos andaluces combatir entre la
Recientemente conversábamos en Barcelona con dos jó- plata nueva de los oliyares y el oro viejo de los trigales, con-
venes maestros mexicanos y nos referían que aun en alguna virtiendo su resignación heroica de antaño en santa rebel-
villa de su país tropieza el viajero con maestros rurales día; vio al minero asturiano rasgar la bruma de algodón
cuyas orejas cortadas o nariz mutilada revelan la marca de sus valles con besos de dinamita y al marinero levantino
gloriosa con la cual la barbarie de los vengativos «cristeros» depositar en sus blandas velas, cunas que mecían al viento,
los estigmatizó y que acredita su heroísmo al servicio de la suerte de su vida y el alimento de sus hermanos. Vio fá-
la cultura. México ha podido, por tanto, comprender que bricas, talleres, minas, cultivos, en manos del proletariado,
a veces la cultura es preciso defenderla con las armas en convirtiéndose así el scherzo de antaño en sinfonía vibrante
la mano y que la defensa de la paz se verifica de modo del trabajo. Vio resurgir un arte nuevo: Poetas y pintores
parado jal en ocasiones mediante la guerra. forjados en la trinchera, escritores cuyo pupitre era el para-
peto. Contempló la obra de exaltación y ayuda al niño y la
Los imperialismos americano y británico hubiesen arras- mujer, la reforma eugénica verificada para crear una sexua-
trado a peligrosas aventuras bélicas a México a no haber lidad limpia y libre. Auscultando el país percibió el latido
éste sabido demostrar con su resuelta actitud, que por sal- de una espiritualidad nueva que florecía en la escuela, la
var la paz el país estaba dispuesto a guerrear contra quienes Universidad y la calle. En la trinchera, en el aire, en el
osaran romper aquélla. Y si México en la actualidad ha in- mar, vio combatir al soldado, al aviador, al marino revolu-
corporado la Revolución a su hatillo de viajero histórico y cionario—león, águila, delfín—; salvar mujeres y niños bajo
puede escoger sus guías entre los hombres que desde la cortinajes de metralla y arriesgar la vida para evitar la muer-
Presidencia de la Nación señalan con su dedo convertido en te de los tesoros artísticos puestos en trance de destrucción
brújula gloriosa el Norte de la Libertad, es porque previa- por la barbarie fasci.sta. Como ha referido,un autor sueco,
mente sufrió una' fase de amarguras antes de llegar a su vio a milicianos avanzar en descubierta para volver con
brillantez actual. Por eso desde un comienzo, cuando los trozos de capiteles en ruinas, pedazos de esculturas, libros
enemigos de España se llenaban la boca con el barro de su en pergamino y entregarlos a los organismos culturales.
alma hablando de la «barbarie roja» y los amigos demócra-
tas se limitaban a una platónica simpatía por ella, México Como los guerreros desnudos de Galeana en México, vio
supo, como preconizaba Gandhi a los pueblos libres, ser de pelear semidesnudos a veces, a los primitivos y heroicos
un idealismo práctico. Mientras en Ginebra la diplomacia guerrilleros revolucionarios y admiró después el empuje
encendía brillantes y variopintas pirotecnias y los diplomá- antifascista organizado en Ejército popular regular.
ticos después de levantar al aire como prestidigitadores de Y México se identificó totalmente con el espíritu de una
alta escuela sus manos enjoyadas, escamoteaban toda ayuda revolución que, como la suya, discurría por los cauces de
a España, México, que sabía algo sobre revoluciones, prin- las Reformas cultural y agraria propulsadas por arados y
cipió su eficaz auiülio. Salvando leguas de océano, la voz fusiles, libros y cañones. Dando un ejemplo a las pasivas
amiga sonaba en los oídos de los españoles como canto de democracias, México, E.spaña y la U. R. S. S. se convirtieron
esperanza. México tendía a España no solamente la mano en defensores del proletariado mundial, en adalides de la
simbólica del amigo, sino una mano en la cual alternaban civilización, cuya actitud dará un día vergüenza a los que
apretujados rifles y espigas, el pan de plomo y el pan de pudieron haber contribuido a nuestra derrota en el caso
trigo. Y al hacerlo México sabía que para flamear la palma imposible de suceder así; remordimiento a los que no su-
de la Paz era ineludible que previamente ciñera la frente pieron ayudar a la victoria.
de España antifascista el laurel de la Victoria. «iCuidado!
México y España han sellado con sangre su fraternidad
—decían alarmadas las potencias democráticas—. ¡España
y consolidado' ésta sobre una base indestructible. Los espa-
no defiende una República burguesa, sino una Revolución!»
ñoles—alto el orgullo revolucionario de nuestra raza^—salu-
Pero a un pueblo no le asusta ver en otro la imagen de su
damos a los mexicanos que arriman el hombro a nuestra
propio y espléndido pasado. México sabía que una reforma
lucha. Muchos años nuestros ojos se limitaron a ensoñar
histórica solamente és eficaz cuando además de modificar
la imagen ideal de una España justa y libre. Hoy los ojos
las que Louis llamó superestructuras, o sea la forma polí-
pintan albores de libertad próxima. Y como nuestros mari-
tica de un país, sabe remover ]as infraestructuras—propie-
neros levantinos, gritamos a los hermanos de México con el
dad, trabajo, orden público, justicia—y de entre sus arenas
clamor de los pescadores en día de bonanza: «¡Buen viento!
extraer las pepitas de oro de excelsas conquistas obreras.
¡Adelante la barca! ¡Y que las velas que traigan a España
¿Que eso era una Revolución? ¡Naturalmente! Y a mucho
el saludo de vuestra nación puedan después convertir la
honor, como lo fué la mexicana. En cuanto al colorido bár-
nave mexicana en portavoz mundial de nuestra Victoria!»
EL PARNASO MEXICANO
¿iHiiiiiiiUHiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiMiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinniiiiiiuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiuiiiiiiiiiiiiiiiiniiiii

I L a s más altas representaciones de la lírica del pueblo hermiano, |


= encarnada en las páginas de varios de sus gloriosos poetas |
ñiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiuuiiiiininHiiuiíiiiiiiiiiiui^

Por José P O M E S ParaMIREVISTA

México es una de las naciones más bellas, más ricas y más Son los versos de Sor Juana Inés de la Cruz dechado de
sugestivamente interesantes del planeta. perfección y poseen un sabor de «clasicismo» evidentemente
Ahí están, en las páginas de su historia admirable y fe- inigualable.
cunda, los hechos palpitantes de su bizarría, de su heroísmo, de Son también figuras destacadísimas y preeminentes del Par-
su amor a la Libertad. naso mexicano los poetas Antonio Zaragoza, Francisco Sosa,
México, que dio al mundo generales famosos, guerrilleros José Rosas Moreno, Ignacio Manuel Altamirano, José María
intrépidos, capitanes valientes, políticos insignes, sabios hom,- Roa Barcena, Ignacio Ramírez, Guillermo Prieto, José J. Pesado,
bres de ciencia, eminentes sociólogos, juristas ilustres, elocuen- José Peón Contreras, Manuel M. Flores, Agustín F. Cuenca, Ma-
tísimos oradores y una pléyade de artistas de la más alta jerar- nuel Gutiérrez Nareja, Manuel José Othón, José Pablo Rivas,
quía, tuvo también, como rico florón de su espiritualidad, mu- José J. Novelo, Luis G. Urbina. Salvador Díaz Mirón, J u a n de
chos y excelsos poetas. Dios Peza, Francisco de A. Icaza, Justo Sierra, Antonio Plaza,
Ns entra en nuestro propósito, ni sería dable condensar en Manuel Acuña, Juan José Tablada, Alfonso Reyes, Amado
las obligadas estrechas dimensiones de este trabajo, ofrecer a Ñervo...
los lectores una antología de todos los poetas mexicanos. Es ciertamente admirable la labor de estos poetas y la
Queremos, sencillamente, hacer resaltar en estas páginas de otros muchos cuyos nombres llenan de gloriosas páginas la
un breve, razonado y sincero estudio de la labor realizada por historia de la poesía mexicana.
los más altos representantes de la poesía lírica mexicana desde Pero... nosotros, aunque críticos, no podemos desposeernos
D. Antonio de Saavedra de Guzmán, autor del poema El pere- de nuestra condición de humanos, y ello nos decanta hacia lo
grino indiano, publicado en Madrid allá por los lejanos días que más nos agrada y lo que de un modo más amable nos
del año 1599. satisface.
Éste fué, según cuentan las crónicas, el primer libro impreso Sin regatear méritos ni entrar en odiosas y molestas compa-
del poeta mexicano. raciones, este último canto del poema Nocturno, de Manuel
Antes, en 1584, Francisco de Terraras había escrito diversas Acuña, nos parece sencillamente admirable. Vedlo;
poesías que merecieron incluso el elogio del propio D. Miguel «Ésa era mi esperanza...
de Cervantes Saavedra... Mas ya que a sus fulgores
Según las antologías, Francisco de Terraras fué efectiva- se opone el hondo abismo
mente un vate de prodigiosa inspiración y de una elegancia que existe entre los dos,
dialéctica insuperable. ¡adiós por la vez última,
Otro gran poeta, cuyo nombre va unido a los más famosos amor de mis amores,
de su tiempo, fué D. J u a n Ruiz de Alarcón. la luz de mis tinieblas,
Acerca de él, recogemos lo que h a dicho el culto y notable la esencia de mis flores,
mi lira de poeta,
escritor Arturo Ruiz Trías en su interesantísima obra Lira me- mi juventud, adiós!»
xicana:
«Por que no pueda parecer que regateo a mi patria el leal El poeta Manuel Acuña fué uno de los más combatidos de
reconocimiento de lo que puede con justicia llamar suyo, apun- su tiempo. Incluso Menéndez Pelayo, que le trató injustamente
to aquí el glorioso nombre de Juan Ruiz de Alarcón; pero apre-
surémonos a decir con las palabras bien autorizadas del maestro —a nuestro leal saber y entender—, mostrándose severo al
a quien seguimos en este estudio, que Alarcón no cultivó nunca enjuiciar la obra conjunta del poeta, h u b j de reconocer el mé-
la poesía lírica sino en pocos e infelicísimos versos de circuns- rito del poema arriba enunciado.
tancias, ó arrancados por la amistad para preliminares de Juan José Tablada es imo de los líricos mexicanos muy a
libros. Alarcón fué un gran poeta dramático español, nacido «nuestro gusto».
en México. Fué tan ingenio de Madrid, como los madrileños Ved la bellísima cuarteta que encabeza la poesía Jopón,
Lope, Tirso, Calderón y Moróte o el toledano Rojas.» dedicada a Carlos Noriega:
Al igual que Ruiz Trías, tampoco queremos nosotros «ex- «¡Áureo espejismo, sueño de opio,
poliar» a México y quitarle la gloria de este gran escritor, pero fuente de todos mis ideales!
suscribiendo íntegramente las advertencias y sentando las pre- ¡Jardín que im raro Kaleidoscopio
misas ya apuijtadas. borda a mi mente con sus cristales!»
Una de las figuras cumbre del Parnaso mexicano es sin
dudas de ningún género la poetisa Sor Juana Inés de la Cruz.
Su nombre en el siglo era el de D.* Juana Inés de Arbaje y Ra- He aquí un poeta, al estilo de nuestro Salvador Rueda.
mírez de Cantillana. . Rico en imágenes, impecable de forma, dando a la poesía
Nació el 12 de noviembre de 1651. Su padre era vasco y su cadencias suaves de música divina, Juan José Tablada nos
madre mexicana. ofrece este «Abanico Luis XV»:
Sor Juana Inés de la Cruz murió en 17 de abril de 1691. «y Manon sueña... Ramajes finos
Contaba, pues, cuando dejó de existir, cuarenta años. tienden arcadas de pastoral;
Durante su corta existencia publicó muchísimas poesías. ¡nunca crearon los Gobelinos
Las profanas las firmó con el nombre de Julia. en sus tapices postura igual!
Maravilla de versificación y de agilidad son estas estrofas Y en el estanque de tonos glaucos
de sus Endechas: se irisa el chorro de un caracol...
«Sabrás, querido Fabio, ¡Y Manon sueña, bajo los saúcos,
si ignoras que te quiero, a los postreros rayos del sol!»
que ignorar lo dichoso
es muy de lo discreto; Otro ilustre poeta mexicano, quizá el más conocido por los
que apenas fuiste blanco españoles, por haber convivido algunos años entre nosotros,
en que el Rapaz Arquero, es Amado Ñervo.
del tiro indefectible Rubén Darío y Amado Ñervo fueron tan populares en Es-
logró el mejor acierto; paña o quizá más que en sus patrias respectivas.
cuando en mi pecho amante, Los dos, el excelso Rubén y el prodigioso Ñervo ocuparon
brotaron el incendio, en nuestra adolescencia un lugar preferente en nuestros cora-
de recíprocas llamas zones. Luego, al pasar los años, sus libros un lugar también
conformes ardimentos.» preferente de nuestra biblioteca.
Una de las más sugestivas y, por decirlo así, «entrañables» y la fuente de gracia de donde procedía,
poesías de Amado Ñervo, es a nuestro juicio esta que Ueva por se volvió... ¡como gota que se vuelve a la mar!»
título «Gratia plena»:
Luego el gran poeta nos ofrece en «La montaña» esta mag-
nífíca estrofa, en la que se adivina el cansancio moral de su
«Todo en ella encantaba, todo en ella atraía; cuerpo y la placidez de su espíritu:
su mirada, su gesto, su sonrisa, su andar...
El ingenio de Francia de su boca fluía. «Finé mi humilde siembra; las mieses en las eras
Era llena de gracia, como el Avemaria. empiezan a dar fruto de amor y claridad;
¡Quien la vio no la pudo ya jamás olvidar! se cierne un gran sosiego sobre mis sementera?;
mi andar es firme... y siento que estoy en las laderas
Ingenua como agua, diáfana como el día, de la montaña augusta de la Serenidad.»
rubia y nevada como margarita sin par,
al influjo de su alma celeste amanecía... Recogiendo obras de Amado Ñervo llenaríamos varios vo-
Era llena de gracia, como el Avemaria. lúmenes.
¡Quien la vio no la pudo ya jamás olvidar! Y el espacio falta.
Dejemos, bien a nuestro pesar, tan grata tarea y dedique-
Cierta dulce y amable dignidad la investía mos un recuerdo al poeta potosino Manuel José Othón.
de no sé qué prestigio lejano y singular... Othón, el altísimo vate de San Luis de Potosí, fué sin duda
Más que muchas princesas, princesa parecía. alguna el poeta bucólico más definido de su tiempo y de su
Era llena de gracia, como el Avemaria. época.
¡Quien la vio no la pudo ya jamás olvidar! Sus bravas descripciones poéticas, sus cantos a la Natura-
leza, tienen una expresión y una majestad indescriptibles.
Hace ya muchos años que en su honor, y organizado por la
Yo gocé el privilegio de encontrarla en mi vida Redacción de Revista Moderna, se celebró un importantísimo
dolorosa; por ella tuvo fin mi anhelar acto en el teatro Renacimiento, hoy Virginia Fábregas.
y cadencias arcanas halló mi poesía... Jesús Urrieta, el elocuente tribuno, dedicó a Othón uno
Era Uena de gracia, como el Avemaria. de sus más formidables discursos.
¡Quien la vio no la pudo ya jamás olvidar! Y precisamente ahora se está gestionando el traslado de
\ los restos del cantor de la tierra—madre de todos—a la Ro-
tonda de Hombres Ilustres.
¡Cuánto! ¡Cuánto la quise! Por diez años fué mía; México honrará, pues, en la figura del poeta desaparecido,
...¡pero flores tan bellas nunca pueden durar! a la intelectualidad de aquel hermoso pueblo hermano.
Era Uena de gracia, como el Avemaria ¡Que no quita lo cortés a lo valiente!

llampos nuevos...
COLECTIVIDAD
Ó P T I C A DE
BARCELONA
• DE •

.aMím jGARANTÍACIENTÍFICA!

¡FINALIDAD SOCIAL!
m tnxts Mtve^xvccitrcLS
Por E d u a r d o LUQUIN

Secretario de la Embajo-

fH^ o do de México en España.

Para
MI REVISTA

ftl e ^ recursos si en toda su vida apenas ha visto en sus ma-


nos la centésima parte de lo que el médico cobraría? Y
no se piensa en acudir al dueño de la parcela donde sola
y aislada como un enfermo de lepra se levanta la choza,
porque el «patrón» vive en la ciudad y es muy difícil
En el fondo de una choza de paja, de escasos tres comunicarse con él y de ninguna manera proporciona-
metros cuadrados, se halla un duro camastro sobre el ría el dinero necesario. El enfermo recuerda que hace
que yace im hombre demacrado cuyos ojos miran sin un año se moría su madre allí mismo, confinada entre
ver. Telarañas obscurecen los rincones de la habitación. las paredes de la choza; que se acudió al patrón en
Moscardones verdes y lentos revolotean pesadamente solicitud de recursos y que nada se obtuvo. «Pero ma-
en la atmósfera de muerte que se respira en la estancia. ñana curaré; podré volver a correr y a saltar sobre cer-
De los cuernos de una cabeza de macho cabrio, fija en cas y matorrales», se dice el enfermo. Esta sola idea le
xma de las paredes de la choza, cuelga un sombrero inyecta fuerzas nuevas y arroja la cobertura y alarga
de paja amarillo y mugroso. Por las hendiduras del una pierna; pero vuelve a caer sobre el duro camastro.
carrizo puesto de cualquier modo, a guisa de techo, Junto a la choza, en cuclillas, la madre del enfermo
sobre las paredes, se cuelan haces luminosos que rayan sopla precipitadamente el fuego que se consume en el
la sombra como una pauta de claridad y de optimismo anafre de barro donde hierve la leche que extrae diaria-
donde todo es obscuridad y desesperación. mente de las cabras. Abandona de pronto el soplador
y asoma cautelosamente por la puerta de la choza. La
El enfermo se desespera, presa de alta temperatura;
mujer se bambolea al inclinarse. Hace ocho días que
abre desmesuradamente los ojos, se pasa la lengua por
apenas prueba el sueño. Cerca del enfermo, durante
los resecos labios, se lleva las manos a la cabeza y es-
la noche, vela constantemente. El más insignificante
truja sus cabellos. Al inclinarse, apoyado sobre dura
movimiento del hijo la hace incorporarse sobre el «pe-
almohada de «zacate», siente que se le astillan las arti-
tate» en que le arroja la fatiga. La sombra del enfermo
culaciones. Arroja desesperado la cobija que lo cubre
le sale al paso a cada momento, escueta y filosa como
hasta el estómago. Escupe una saliva sucia y pegajosa,
la silueta de la muerte. El hijo quiere que el médico
como la baba de los rumiantes. El enfermo siente que
le recete, pero ella no cree en los médicos; cree, en
la cabeza se le despedaza como los haces de leña bajo
cambio, ciegamente, con esa fe que sólo se produce en
el filo del hacha; que falta a sus brazos el vigor necesa-
los corazones campesinos, en la eficacia de los reme-
rio hasta para sostener el jarro que le ofrece la madre;
dios caseros. Ha intentado cataplasmas y «friegas», pero
que las piernas le pesan como si fueran sacos de arena;
el mal del enfermo no cede ni un ápice. ¡Si al menos
que sus fuerzas disminuyen minuto a minuto. ¿Es él,
pudiese la madre ir al pueblo por un poco de pan! Pero
el enfermo de ahora, el muchacho robusto y sano que
¿con quién dejar al enfermo? ¿De quién valerse para
hace apenas ocho días levantaba en sus brazos enormes
ello? Tardaría acaso dos días en recorrer las leguas que
haces de leña para conducirlos, como si hubiese sido
median entre la choza y la población. Decide acudir a
paja, a largas distancias? ¿Es él el mensajero veloz que
la curandera cuya reputación se debe más a su aspecto
recorría leguas enteras bajo un sol candente, con pier-
siniestro que a la eficacia de sus remedios.
nas de gamo, a campo traviesa, tras las cabras que pas-
toreaba desde su niñez? ¿Es él el mismo que competía * * *
sin proponérselo con el perro pastor y saltaba cercas y Por el tortuoso sendero que conduce a la choza don-
matorrales «como si llevase alas en los pies»? El enfer- de yace el enfermo avanza lentamente, con paso inse-
mo recuerda su energía y agilidad ahora aniquiladas guro, baja la cabeza, una mujer achacosa, envuelta
cada vez que alarga el brazo fuera de las raídas cober- hasta la cabeza en amplio chai. Los desgarrados hola-
turas para recoger el jarro que le ofrece la madre, cada nes de su falda levantan una nube de polvo que ensucia
vez que trata de incorporarse sobre la almohada, que la transparencia de la mañana. La mujer se apoya en
oye repicar sobre el ojo del pozo, ensartada en la nudosa delgado leño de roble. El leño ahora convertido en bas-
flecha de madera, el «carrete» puesto a girar por la so- tón era hace poco tiempo una rama verde y cubierta
licitud de la madre, cada vez que oye toser a «su vieja», de hojas, que desafiaba tempestades y saludaba al sol
que la mira curvada bajo el peso del cántaro. y sostenía en su musculoso brazo el plumón de las
Una nostalgia indecible oprime su pecho y brota en nubes; ahora sostiene el peso de setenta años de mise-
los ojos inyectados del enfermo. Hace quince días que ria, de soledad y de desesperación y de veinte siglos de
el pastor lucha constantemente. ¿Un médico? Habría astucia. Bajo el capuchón del chai asoma una nariz
que acudir al del pueblo cercano, situado a treinta le- afilada y granosa. La mujer continúa avanzando lenta-
guas de la choza, y los médicos no visitan gratuitamente mente con un manojo de hierbas marchitas en la mano
a los dolientes pobres. Sería preciso pagarle y ¿con qué izquierda. A veinte pasos aproximadamente de distan-
cia de la choza advierte a la madre del enfermo incli- peración y sus lágrimas son como gotas de agua recién
nada sobre el pozo y grita: llovida sobre la carroña de los muladares.
—Buenos días, comadre.
—Buenos días, Conchita — contesta la madre.
En la olla, sobre el fuego del anafre, borbota el agua.
—¿Cómo sigue el enfermo?
Un vapor amarillento se escapa y asciende en suaves
—Mal, Conchita. Hace tres días que no prueba bo-
espirales. Las hierbas, grises y secas al principio, se
cado.
coloran de un amarillo indeciso y se retuercen bajo la
—Mañana amanecerá bueno y sano—repone la vieja.
acción del fuego, bailotean en una danza macabra. Un
—Que Dios la oiga—comenta la madre.
olor indefinible satura la atmósfera. La curandera se
La madre vacía en otro recipiente la leche recién
acerca a la olla y remueve con una rama el cocimiento.
hervida y prepara el que acaba de vaciar. La curandera
Inclinada, pronuncia algunas palabras de sentido in-
se acerca al anafre; pide leña nueva; comprueba la lim-
comprensible. Y del fondo del recipiente se escapa un
pieza del recipiente destinado al cocimiento y arroja
rumor apagado. Lo que en realidad hierve allí es el
en él el manojo de hierbas marchitas a la vez que la
optimismo de la madre y la desesperación del enfermo
madre vacía sobre ellas medio cántaro de agua. Las
y la astucia de la curandera. La recién llegada retira
mujeres se sientan cerca del fuego y esperan.
al fin la olla y espera a que el cocimiento deje de her-
Advertido por la madre de la visita de la curan- vir. El vapor amarillento se despita paulatinamente;
dera, el enfermo espera también, impaciente. Escucha las ramas se asientan y en el mismo jarro en que la
el diálogo de las mujeres y trata de incorporarse sobre madre recibe la leche de las cabras recoge una poca
su camastro, pero las fuerzas le fallan nuevamente y del agua que va a operar el milagro de devolverle la
cae sin voluntad. Cualquier tratamiento, por más do- salud al enfermo.
loroso que sea; cualquier bebedizo, por más amargo
Y el enfermo bebe ávidamente... Arrodillada junto
que se le suponga; cualquier fricción, cualquier sacri-
a la cama del paciente la madre solloza cubierta la cara
ficio le parecerá menos duro que el mal que le acon-
con el rebozo, mientras que la curandera observa fija-
goja. «Que venga la curandera», piensa. En ese momento
mente el rostro del paciente descompuesto por el amar-
recuerda haber oído decir que Ramón el becerrero de
go sabor del bebedizo.
la casa de los patrones curó rápidamente de una anti-
gua dolencia que le llaman «el gálico». «Si será el 'gálico * * #
lo que padezco», se pregunta el enfermo. Ramón se Día siguiente. La mañana es limpia y radiosa. El sol
pudría. Llagas profundas se abrían en su carne; no ha- baña a raudales las amplias sementeras donde al influjo
bía quien se acercara al becerrero sin cubrirse la nariz. de la lluvia han brotado hierbas fragantes. Pájaros
«Pero yo no estoy llagado. Entonces no es el «gálico» veloces cruzan piando la comba transparente del cielo.
lo que padezco. Pero yo me pudro por dentro, puesto Por la angosta vereda que lleva al cementerio del pue-
que escupo sangre morada», continúa diciéndose. Al re- blo caminan cuatro hombres con un ataúd sobre los
cordar el color de sus esputos, el enfermo se incorpora hombros. Tras de ellos avanza difícilmente una mujer
sobre su lecho en un impulso supremo y contempla fija- llorosa a quien la muerte deja implacablemente sola...
mente los moscardones que esperan su alimento coti-
diano ¿unto al camastro, como una bandada de zopilotes
frente a los cuerpos descompuestos. «Me pudro por den-
tro», se repite el enfermo y llora de tristeza y dé deses- U éU-i^^LA-U^ ' ^ ^ ^ ^ • ^• • • C r y »

ANTIFASCISTAS
• LEED Y PROPAGAD

CATALUNYA
DIARIO DE LA NOCHE

ÓRGANO DE LA CONFEDERACIÓN REGIONAL DEL TRABAJO


P a r a M I R E V I S T A P o r L U I S C A P D E V I L A
¿iiiiiniíiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiiiHiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnijiiniiiiiiiiiiuiiiniiniíiiiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiirniiiiiiiiiiii^

MADRID, CASTILLO FAMOSO I


ñiiiiiiiiniiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiHiiiiiiiiiiiiuniiiiiuiiMiiiiii^ iiiiiiiiiiiiiiiir

Madrid a distancia. Madrid redivivo en el recuerdo. tilo. Aristocracia es una voz griega que puede tradu-
En los páramos de Aragón—de una belleza austera, cirse por mejor, por superior. Pues -bien, si es así, si
ascética—el recuerdo amable del Madrid de ayer, del aristocracia significa «gobierno de los mejores», en
que fué y no volverá a ser, pues la Revolución, quie- España no hubo ni hay aristocracia porque ningún
ran que no, está dispuesta a trastocarlo todo y a re- aristócrata de verdad se pone al servicio de un canalla
juvenecerlo y a remozarlo. Al ritmo apolíneo—esta- como Alfonso XIII o de un memo como Franco.
tismo—ha sucedido el ritmo dionisíaco; dinamismo. Madrid del falso aristócrata, Madrid del pobre
Dinámica de la Revolución, de la guerra, que signi- señorito, del lamentable señoritismo. Madrid que usur-
fica inquietud, anhelo, fuerza apasionada, purificación pabas un lugar que no te pertenecía. Los extranjeros
por la sangre de los hijos—carne de sacrificio—y por no nos ven—afortunadamente— en señorito, es decir:
el dolor sagrado de las madres: carne de lágrimas. en falso. Nos ven en pueblo. Y cuando se habla de
Madrid frivolo y banal, amable y cortesano, de los hidalguía no cuenta la del señorito, la del falso aris-
últimos años de la monarquía, de los primeros años tócrata, que no la tienen, sino la del pueblo, la del
de la República, cuando los viejos políticos monár- único y verdadero aristócrata. El hidalgo español no
quicos eran—impúdicamente, desvergonzadamente, cí-. se llama duque de Alba: se llama Pedro Crespo.
nicamente—dueños del cotarro, como lo fueron con Madrid de las mañanas claras que huelen a lilas
la difunta monarquía. Sin embargo, no hay que enfa- de la Casa de Campo y a fresas de Aranjuez. Madrid
darse mucho con ellos, pues no fueron culpables: cum- de los sotillos del Manzanares, de la Moncloa, del
plían con su deber, con su deber de caballeros, y se- Parque del Oeste donde era una gloria sentirse joven
guían hozando plácidamente en el estercolero de los y con una boca de mujer muy cerca de nuestra boca.
ministerios, de las subsecretarías, de las oficinas y las Madrid de los barrios bajos—que en un orden espiri-
redacciones para demostrar con obras—obras son amo- tual son siempre los más altos—que tienen alma de
res y no buenas razones—que el ideal del hombre es verbena. Madrid que a todos nos evocas un nombre
hacer todos los posibles, y aun los imposibles, para de mujer querida y olvidada: Carmen, Lola, Mariana,
igualarse al cerdo. Isabel...
Madrid que, por afán de nuevo rico, se traducía Una pausa en la evocación. Y en la pausa, con la
al francés y se desvirtuaba con un aire postizo y fal- pausa, se esfuma el pasado que siempre /ué mejor,
samente cosmopolita en el Ritz y en el Palace. según Jorge Manrique.
Madrid de «Casablanca» y de «Molinero», Madrid Con un fogonazo, con una explosión, el presente.
burgués y estólido y cursi como todo lo burgués. Un Madrid nuevo: el de la guerra. Un Madrid como
Madrid simpático, cordial, acogedor, de la calle de debió ser el de 1808; pero con taques, bombas de mano,
Alcalá, trémula de varas de nardo, de décimos de la carros de asalto, artillería de largo alcance y aviación.
Lotería, de los primeros periódicos nocherniegos. Ma- Y sin Goya, aunque el Goya del Madrid de hoy podría
drid de la calle de Alcalá, que es una rué de la Paix ser Solana.
más larga, con más sol y más gritos que la famosa Hoy el cielo de Madrid es un cielo de tragedia
calle parisina de la que tanto se han servido los nove- poblado por las alas negras que bombardean hospita-
listas... que no han vivido en París. les, escuelas, museos, bibliotecas. Ya no es el Madrid
Madrid pintoresco de la Puerta del Sol, Uena de que sabe reír; es el Madrid que sabe morir. Y sabe
una humanidad abigarrada, ensueño y encanto de to- matar. Es el Madrid que sabe luchar, el que ha dado
dos los provincianos, de todos los «Isidros». Si el co- ejemplo de valor y de heroísmo. Ya no es un Madrid
razón de las grandes ciudades radica en la plaza o de Amiches, el sainetero: es un Madrid de Sófocles,
en el paseo donde abundan más los cafés, la Puerta el trágico.
del Sol ya no es el corazón de Madrid, que se ha des- Cuando el pueblo español, es decir, la aristocracia,
parramado por Alcalá y por la Gran Vía en cafés luchaba contra el señoritismo abyecto de Fernando VII
más confortables que los antiguos de Correos o de el Deseado—¿deseado por quién?—Jeremías' Bent-
Levante, más cómodos, raás limpios, más distinguidos, han escribía: «España, en este instante, es la única
pero que no tienen la gracia y el encanto de los anti- esperanza de Europa.»
guos cafés con música y media tostada. Hoy podría decirse lo mismo, pues en España se
Madrid de las juergas de los señoritos golfos y ca- libra combate por el triunfo de la inteligencia, que
nallas, que se emborrachaban con un entusiasmo dig- equivale a libertad, pues sin inteligencia no hay liber-
no de mejor causa, paseaban la mona monárquica tad posible. Y Madrid es el frente máximo, el corazón
por las calles lívidas de la madrugada, rompían las en el com)3ate. Los obuses llueven sobre sus casas,
lunas de los espejos en las mancebías, y apaleaban sobre sus parques, sobre sus paseos, sobre sus calles
a las prostitutas o bien las dejaban desnudas en la más concurridas. Es el odio de la barbarie contra la
Cuesta de las Perdices. Hoy el tipo de golfo bien ves- civilización. Mientras las hordas fascistas, después de
tido, el tipo de señorito chulo, se ha derrumbado: lo hacer hogueras con los libros en Italia y en Alemania,
ha derrumbado, lo ha hundido, el soplo magnífico de ametrallan niños y ancianos, en España nosotros crea-
la Revolución. ¡A la basura con él! mos escuelas y bibliotecas.
Madrid de la Bombüla, Madrid que sabe a Ricardo Madrid heroico. Madrid magnífico, Madrid corazón
de la Vega y a Bretón, a Carlos Fernández Shaw y a del mundo que luchas por un mundo mejor, por un
Chapí, a crónica del maestro Castrovido y a copla de mañana mejor. Ante tus muros se juega el porvenir
Luis de Tapia, el del gesto bravo y noble, cordial y de la civilización. Recuerdo que, en un acto de home-
generoso. ¡Querido, inolvidable Luis de Tapia! En ti, naje a Margarita Xirgu, celebrado durante el mando
en tus versos, en tu verbo, había lo mejor de Madrid: de los dos granujas que se llamaron Alejandro Lerroux
el alma del pueblo, el sentir hondo y hablar claro del y José María Gil Robles, dije que «toda España era
pueblo, que en España es el verdadero aristócrata, el Fuente Ovejuna» en aquellos instantes. Hoy podría
único aristócrata. Los artistas españoles más puros, decir lo mismo, pues toda España está en pie contra
más altos, han sido pueblo por esencia y potencia: Ve- el comendador, o sea: contra el despotismo, contra el
lázquez, Goya, Quevedo, Cervantes, Unamuno, Sola- escarnio vil, contra el señoritismo bárbaro, contra el
na, García Lorca. Lo aristocrático en España es lo feudalismo, contra la tiranía.
popular, no os quepa duda. En cambio, nada tan la- Madrid que luchas con una sonrisa .y una canción
mentable como nuestros aristócratas, los que actua- en los labios: defiendes, no tu libertad y tu cultura,
ban de aristócrata, los que hacían el oficio de aris- sino la cultura y la libertad del mundo.
tócrata. Aristocracia española equivalía a memez,
tontería, incultura, sordidez y otras virtudes por el es- Alcoriza, diciembre 1937.

»
LOS k conocíido...
mexicanos que yo De
Actrices, actores, músicos, toreros, Reportaje por Pepe NAVAZO
pintores, cantantes, escritores y poetas
T o d o s ellos v i n i e r o n a la vieja E s p a ñ a p a r a o f r e c e m o s
M I REVISTA dedica a México con efusiva gentileza todas las el e n t u s i a s m o d e s u a r t e , el c a u d a l d e s u i n t e l i g e n c i a
páginas de este número.
rfeida ni más justo, ni más profundamente humano. y l a c o r d i a l i d a d y el c a r i ñ o d e v e r d a d e r o s h e r m a n o s
¡A tal señor, tal honor! México ha sido y es en estas horas
de angustia y de zozobra, de lucha .y renovación, el único país
de nuestra raza y de nuestra sangre que de un modo auténti- las revistas de Alonso o de Guerrero que se ensayaban en Ro-
camente enérgico y decidido se colocó franca y honradamente mea, en Martín o en Maravillas...
al lado del Gobierno de la República española. Cierta noche hallamos casualmente al gran actor —a nos-
Ello merece cuando menos la gratitud eterna de todos los otros nos parece un gran actor y perdonen los que no opinen
buenos españoles. como nosotros—Casimiro Ortas.
M I REVISTA recoge oportuna y bellamente el anhelo colec- Acababa de regresar de una excursión artística por Amé-
tivo, rindiendo así homenaje y pleitesía a México, uno y—insis- rica. Venía de México.
timos nosotros—el único de Charlamos largamente.
vXos cachorros sueltos del león español» —He visto en México—nos decía Casimiro—un cómico que
que escribiera el glorioso Rubén Darío en su oda al «otro» cuando venga a España va a quitar muchísimos moños.
—¿Viejo?
Roosevelt. —Nada de eso, muy joven, pero se pone la peluca y, ohico,
Nosotros, como reporteros, vamos a ofrecer en estas pági- «mete miedo» de lo bien que lo hace.
nas, sencillamente, un reportaje. —¿Cómo se Uama?
Un reportaje pletórico de sinceridad y de cariño, de afecto —Fernando Soler.
y de cordialidad.
—¿Como el personaje de Doña Francisquita?
Vamos a repasar nuestros «carnets» de notas y nuestra me- —Exactamente. Ya lo verás si alguna vez se decide a
moria de viejos periodistas. venir...
Y vamos a hacer desfilar ante vosotros figuras destacadas Y vino Fernando Soler.
y preeminentes de la escena, de la pintura, de la poesía, de la No eran ni mucho menos exageradas las palabras de Casi-
música y de la tauromaquia, famosas allá en México y conoci- miro Ortas,
das por nosotros durante su estancia—más o menos dilatada— Fernando Sqler, pese a la «guerra sorda» que algunos le
en nuestra patria. hicieron, triunfó en toda la línea.
No todas ellas fueron amigos nuestros. Algunas sí y cier.ta- Yo os puedo asegurar que le vi interpretar los más diversos
mente entrañables. géneros teatrales y los personajes de caracteres más opuestos
Tampoco queremos, en estas breves notas—a vuela pluma— con la más perfecta dignidad artística.
asegurar que en nuestra «lista» y en nuestro relato estén todos A mí—y como a mí a muchos—^me pareció un actor senci-
los artistas mexicanos que durante la pasada década vinieron llamente eminente.
a España y actuaron entre nosotros. Nada de eso. Como eminente es la gentil y sugestiva Lupe Vélez Cacho,
Por ello encabezamos nuestra croniquilla «Los mexicanos que también actuó muchas veces entre nosotros, dejando a su
que yo he conocido...» paso una estela de gracia y de simpatía.
Los que no he conocido, si son artistas y vinieron a España, Y no hablemos de «Armillita», maestro de maestros, y de
disculpen y perdonen la involuntaria omisión. Carnicerito, más popular, sin duda, en Barcelona que en su
Vuelvan. Ello nos proporcionará el placer de aplaudirles de propia patria.
nuevo. Ni volvamos la vista atrás recordando los éxitos clamorosos
Comencemos, pues, el relato sin más exordio y demos prin- de aquel Lombardini y de aquel Pedro López, toreritos juncales
cipio al desfile. mexicanos, que vinieron con sus cuadrillas a España, y algu-
Remontémonos a las ya lejanas fechas de la actuación de la nos de cuyos hombres—'con cuya amistad nos honratnos—
ilustre actriz Virginia Fábregas. Triunfó plenamente. conviven aquí hace ya bastantes años.
Años roas tarde, Esperanza Iris. Luchó, trabajó con ahinco, Otro mexicano, no por modesto menos digno de mención:
venció. " Ángel Soto, cantante de magníficas facultades y pintor verda-
deramente excepcional.
Punto culminante de su actuación: el inolvidable estreno de
Benamor, del ilustre maestro Luna, en el teatro de la Zarzuela Este artista—modesto como una violeta—es todo bondad,
afecto, simpatía...
de Madrid. Un éxito clamoroso, entusiasta, indescriptible, para Pero como tenor—y sobre todo como dibujante—Ángel Soto
el compositor, para la Iris, para su compañía. es u n artista meritísimo a quien queremos por bueno, por hon-
He aquí condensado en «forma telegráfica el resultado de rado y por... mexicano.
aquella triunfal jornada. Otros nombres vienen a la punta de mi pluma. Pero si los
Luego... María Teresa Montoya, en el teatro Alkazar de anotáramos y comentáramos—siquiera fuese breve y levemente—
la calle de Alcalá del hoy Madrid heroico e invencible. haríamos esta croniquilla punto menos que interminable. Y no
María Teresa Montoya, actriz de recio temple dramático, es nuestro propósito ni aburrir ni molestar a nuestros buenos
de la vena trágica de nuestra D." María Guerrero, fué acogida lectores. ¡Palabra!
con aplauso por el público y con singular complacencia y rara Ya están ahí, en líneas precedentes, resaltadas las figuras
unanimidad por la crítica. Acaso ésta dio a la actriz menos de de las mexicanas y de los mexicanos que vinieron a la vieja
lo que ella en verdad merecía. España, durante los últimos años, para ofrecernos el entusias-
De todos modos, podemos asegurar que hizo creaciones pro- mo de su arte, el caudal de su inteligencia y la cordialidad y
digiosas y que su nombre corrió de boca en boca—elogiosa- el cariño de verdaderos hermanos.
mente por supuesto—en «peñas» y cenáculos teatrales. Un saludo entrañable para totios desde las páginas libres y
Por aquel entonces hizo también su aparición en Madrid hospitalarias de Mi REVISTA. Para los que se citan, para los que
Tatanacho... Era—y celebraré que lo siga siendo—un mozo no se citan, para los olvidados, para los que vinieron y no
enjuto, simpatiquísimo, efusivo e inteligente, que alegró va- conocimos...
rias de nuestras horas de tedio y de hastío, ofreciéndonos en Nuestro deseo es qué todos ellos reciban por conducto de
el rincón de un bar chamberilero las belh'simas melodías del estas líneas la expresión sincerísima de nuestro homenaje a la
cancionero típico mexicano: Que un viejo amor... junto con tierra hermosa y fecunda que les vio nacer o fué su madre
el inagotable caudal de su ingenio y de su arte expresado en adoptiva: México.
un centenar de canciones impregnadas de la más preciada y Y al escribir este nombre y al pronunciarlo lo hacemts con
preciosa savia popular. la más alta veneración y el más sentido reconocimiento.
Tatanacho estuvo unos días en Madrid, pocos, pero los su- Envío
ficientes para que su nombre mereciera los honores de la A los iirtistas que nos visitaron y que fueron y son nues-
«casi» popularidad. tros amigos:
Entretanto triunfaba en Romea y en Eslava otra mexicana En recuerdo de vuestros triunfos en España abogad por la
exuberante de gracia, de arte y de belleza. Hemos nombrado causa justa de la República.
a Margarita Carbajal. En honrada compensación a los efusivos aplausos que reci-
Y un mexicano simpático e inteligente, el maestro Armando bisteis de este pueblo, llevad al ánimo de todos los mexicanoá
Pereda, era el arbitro de los bailables en todas o en casi todas el convencimiento de que nos asisten la Justicia y la Razón.
¿JlllilllllllilllillllllllllUllllllillllMllllinillllllllllllilllllllllllllllililllllllllllllllllllillllllllllilllllRlllilllUililllllllllllH

I NUEVA CONQUISTA DE MÉXICO |


ñiiiiiiuiíiiiiiiniiniiiiiiiiiisiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiiiiiiiiiiiiiinniniiiiiiiiiiiiiiinniiiiiiiniiiiiiiiniiiiiiiiiuiiiiiiiiinniuiti
Nos cabe el honor de aumentar y corregir la Por I. CORBINOS águila y la serpiente simbólicas de México. Hernán
Historia. No lo hacemos constar para que la Cortés se las dejó olvidadas en Tabasco...
Historia nos lo agradezca, sino porque es preciso Quedó mudo de asombro el operario; pero siguió
pa-a el buen comienzo de este artículo. Natural- desembalando.
mente, nos referimos a la Historia de México. Aparecieron luego en otra caja, junto con algu-
Es creencia arraigada que las gestas más fa- nas cuerdas y jarcias y trozos de vela, unas hojas
mosas de los españoles conquistadores, las au- de árbol y una camisa de señora.
ténticamente memorables, fueron las gestas de —Deje usted la camisa aparte—advirtió D. Emi-
Hernán Cortés de Monroy, que fué el primer liano—, que es prenda del más alto valor histó-*
europeo desembarcado en Tabasco el año dé 1519. rico. Es la camisa que usó en "la noche triste"
Pero esto no es más que un error. Las gestas la nativa Maluche; y las hojas son las propias
heroicas y magnificas de Hernán Cortés las supe- hojas del árbol llamado ahuehete, bajo el cual
ró, en 1935, Emiliano Iglesias Ambrosio. * pasó Hernán Cortés la referida triste noche mien-
No, no. Ya sabemos que Hernán Cortés desem- tras desfilaban rotos sus tercios. En cuanto a los
barcó en la Nueva España al mando de una ex- trozos de jarcias y de velas, póngalos a buen
pedición de intrépidos deslumhrados por el oro recaudo: son parte de lo que de sus carabelas
que estaban seguros de encontrar; ya sabemos que desarboló en Veracruz Hernán Cortés antes de
los guerreros españoles quemaron sus naves y se quemarlas. Pero, ¡cuidado! Estas otras cajas son
ilustraron en Tenochtillán y Otumba, y que, si lo mejor que existió nunca en México.
no se trajeron a España todo el oro de México V era así. Les había tocado el turno a unas
fué porque no pudieron llevarlo sobre los hom- cajas con muchos precintos y cierres historia-
bros cuando les tocó correr. Y, por lo tanto, que dos. Vencidos éstos, aparecieron tesoros deslum-
la expedición de Emilano Iglesias en 1935 fué orantes. Un palanquín de oro bruñido, de au-
cosa distinta de la expedición de un guerrero. téntico y macizo oro; un palio de tejido de plumas,
Emiliano Iglesias Ambrosio sólo se había ilustrado sembrado de pedrerías y con flecos de plata, y
en temas guerreros en las calles de Hostafranchs unas sandalias con suela de oro también...
siempre que en Barcelona había elecciones mu- —Toda esta fortuna inmensa era parte del te-
nicipales o generales; y no fué a México, en prin- soro de Moctezuma. Calzando estas sandalias, sen-
cipio, más que como embajador, enviado por el tado en ese trono y bajo ese palio, recibió Moc-
"tándem" Lerroux-Gi! Robles que en aquel enton- tezuma a Hernán Cortés en e! famoso puente de
ces estraperlizaba a España. Xoloc, la fecha histórica en la que hizo su entr.ula
Hemos escrito que, en principólo, Emiliano Iglesias el conquistador en la ciudad de México. Éste es
fué a México como embajador. Luego, una vez un trofeo que corresponde como ninguno, y para
allí, se convirtió en admirador entusiasta de su su gloria, a Hernán Cortés. Era un deber traérse-
ilust.'-e antecesor, Hernán Cortés, primer enviado lo a España sin esperar engorrosas negociaciones
por España a México. Tanto, que rememorando diplomáticas, y me lo he traído. Yo soy un patrio-
sus hazañas y viviendo sus gestas, embarcó de ta; lo mismo patriota español que patriota mexi-
nuevo para España acompañado de numerosos cano...
fardos, todos los que de allí no pudo traerse Y, asi diciendo, D. Emiliano dirigíase hacia
Hernán Cortés. unos sacos que había allí en un rincón casi olvi-
Labor patriótica. ¡Desagradecida España, que no dados; pero tropezó con unas venerables piedras.
ha sabido comprender todos los sentimientos delica- —Por vida de... Me había olvidado. Aparte
dos que anidaban en el corazón generoso de D. Emi- de aquí ese monolito, que es la llamada "piedra
liano! Porque D. Emiliano llegó en su sacrificio del calendario", uno de los más famosos moiiu-
hasta el extremo de abandonar en México, para mentos de la civilización azteca; esa otra piedra,
llevar a efecto sus designios, no sólo la Emba- de menos valor, apártela también. Es la prime-
jada, sino ia propia nationalidad española. Y todo ra piedra de la catedral de México... Pero, vamos
para que le fuera posible traerse, en numerosas a los sacos, que es lo que importa.
cajas y fardos, todo lo que de México no pudieron —¡Esto es cacaoi^dijo, sorprendido, el buen
traerse ni Hernán Cortés, ni Alonso de Estrada, ^/A obrero, en cuanto abrió uno de ellos.
ni Gonzalo de Sandoval, ni Beltrán de Guzmán, V —Cierto que es cacao. Pero éste es el cacao
ni Antonio de Mendoza, ni Valderrama, ni Suárez que los antecesores de los aztecas, los chichimc-
de Mendoza ni ninguno de los otros virreyes de cas v los toltecas, utilizaban como moneda. Me
México.... he traído la moneda que no pudieron traerse los
conquistadores...

¿No lo recordáis? ¡Pues menudo pitoche se


armó! D. Emiliano, que viajaba con pasaporte Todos estos tesoros desembarcó D. Emiliano
diplomático, y, por lo tanto, no pagaba aduanas, Iglesias Ambrosio cuando regresó de México. Y,
desembarcó sus cajas y sus fardos en un puerto como es de sujioner que no se los haya entregado,
español. ¡Y que carga! Precisamente nos viene conforme prometió a su antecesor ilustre en la
a la memoria la conversación sos- conquista de México, a Hernán
tenida entre un obrero que ayudó Cortés, debemos reclamárselo todo
a desembalar los efectos, y el para devolverlo a la nación herma-
propio D. Emiliano. na, al noble México que inició su
Apareció en la primera caja un independencia al tocar a rebato la
águila que tenía entre sus garras campana de Dolores...
una serpiente. El águila y la ser- —Bueno—me interrumpe el hon-
piente estaban aiin bien conser- rado obrero que ayudó a desem-
vadas. lalar los fardos traídos por D. Emi-
—¡Ojo!, que esto son piezas liano—, pero que lo entregue todo...
buenas. ¿No sabe qué es esto? —¿Falta algo?
—dijo D. Emiliano—. Pues el —Sí, señor. ND lu- mencionado
águila que el\ azteca Nazahualco- un cono grande, de tierra que-
yolt vio, con la serpiente entre mada...
las garras, el día que fué decidi- —¿Y qué era?
da la fundación de Tenochtillán, —Dijo D, Emiliano que un crá-
o sea, la ciudad de México; el ter...
águila misma que en tiempos de
Moctezuma se llevó a un indio
hasta la mansión de los dioses y ¡Rucontra! ¡Se trajo hasta el crá-
lo devolvió luego a la tierra; el lur del Popocatepetl!

.'liUitiiiiiiiiiinliltliliiiiliiitiitimiiiiuiiMiliiiimiiitiiiiiiiiiititiitiiiiitiiiMini uH.miutii'iJiiDniMnMUiituiuiitiitii-iiiiiiiiiMiittinint >ittittiuiitiiiiifiihtiii)itiiiiiii'


tierra amarillenta, dura, rocosa... Apenas si, como oasis, resaltan

MÉXICO parcelas de verdura, ahí donde abimda el .i.gua, especialmente


en e! Estado de Michoacán, que es como una isla feraz en medio
de la severidad solitaria del paisaje.
Saliendo del territorio mexicano, el cuadro cambia otra ver
de golpe. Es como si la división política correspondiera a una rea-
lidad geográfica. En Guatemala todo es más pequeño, más orde-
nado, más alegre. La vegetación de las tierras bajas guatemal-
Servicio Español de Información tecas es de lo más exuberante que se pueda soñar; y las mesetas,
ricas, pródigas mejor dicho, de un sempiterno verde y azul, devuel-
ven multiplicado el mínimo esfuerzo del sembrador. Es que Gua-
temala es país únicamente agrícola, mientras que los Estados del
Con este artículo se suma el sudoeste norteamericano, aunque grandes productores de petróleo,
Servicio Español de Informa^ son agrarios antes que mineros, y México, en cambio, es primor-
ción al homenaje de MI RE« dialmente minero y luego agrario. Este hecho ha tenido hasta
VISTA en honor de la Repú^ hjy enorme importancia en la organización económica, social y
blica mexicana y envía a ese política del país. Para hacer de México un país fundamentalmen-
te agrícola habría que darle lo que le falta: agua, fertilidad.
gran pueblo y a su Gobierno
Precisamente, algunos de los oasis a que antes nos referíamos
un saludo de simpatía y sus han sido creados artificialmente, por medio de complicados y
más fervientes votos por que costosos sistemas de riego. Tal el de la comarca lagunera, hoy
la obra del Presidente Carde» riquísimo centro de la industria del algodón.
ñas llegue a su feliz coro° Pero éstos son proyectos de altos vuelos y a largo plazo.
nación. Mientras tanto, México, durante siglos, ha formado en su molde
a los grupos humanos que lo pueblan. Como luego veremos, las
condiciones de la producción y la organización del trabajo son
fruto de la naturaleza del suelo mexicano y han influido a su
vez en el desarrollo histórico de la nación; pero queremos antes
Nada hay más instructivo para quien pretenda estudiar los observar la forma determinante en que la meseta obra sobre
problemas mexicanos que un viaje a través de todo el país, desde la psicología del mexicano.
el Bravo hasta el Suchiate, es decir, desde la frontera norteame- La meseta central de México tiene algo de común con la
ricana a la guatemalteca. castellana. Ambas desnudas y grisáceas; más alta por supuesto
Los Estados Unidos, conglomerado naturalmente múltiple, tien- la mexicana y rodeada de gigantescas moles graníticas; ambas
den a la uniformidad, debido sobre todo a la mecanización en también envueltas en esa atmósfera sutil, fruto de la elevación
todos los órdenes de ¡a actividad. La emigración hacia el oeste que del terreno y de la anchura penosamente hostil de los valles,
se produjo a mediados del siglo pasado llevó consigo una orga- turbada nada más de tarde en tarde por solitarios y pequeños
nización ya hecha de la producción, independiente, por lo tanto, chopos en Castilla, por espinosos nopales en el suelo mexicano.
de las condiciones del suelo y basada en la tendencia, cada día De esa similitud de paisajes tiene que nacer, no obstante las
más imperativa, de hacer de la máquina el eje central de ella. profundas diferencias raciales y sociales, cierta analogía moral.
Por causa de este fenómeno, la geografía particular de cada nueva Y la encontramos, en verdad. Como el castellano, el mexicano
tierra que se iba poniendo en explotación no pudo influir efecti- de la meseta es profundamente individualista, impetuoso, valien-
vamente en la economía y por ende en la vida social y en la te, apasionado de la justicia, indiferente al dolor propio o ajeno,
psicología de los mdividuos. Éstos llegaban a poblar los Estados con un desdén total de la vida y un concepto exaltado y casi religio-
recién anexionados llevando una mentalidad formada, acostum- so de su propio yo, afirmándose frente a la naturaleza ingrata.
brados a determinados métodos de trabajo y apoyándose en el Y así como Castilla domina psicológicamente a España, impo-
capitalismo "y en el maquinismo del este, ambos ya muy desarro- niendo como tipo de españolismo, a los ojos del extranjero, sus
llados en aquella época. virtudes y sus defectos, por encima de los alegres andaluces, los
Así, por muy diversos que fueran en un principio los me- industriosos catalanes, los pacientes y económicos valencianos,
dios geográficos de los territorios occidentales, hoy día presen- los gallegos, los vascos, así también la meseta mexicana domina
tan éstos cierta similitud, de manera que aunque el clima y el a México, dándole sus características, no obstante los esfuerzos
paisaje puedan variar, los métodos de trabajo son los mismos, del norteño, que busca incorporar a sus costumbres algo de la
tanto en California como en Texas, en Arizona o en Nuevo México; vida yanqui, y la llaneza del veracruzano, primo del habitante de
y las campiñas, bien cultivadas, feraces gracias a la máquina, se las Antillas.
parecen hoy más a las del Medio Oeste o a las del Este norte- Esa analogía psicológica entre el español y el mexicano se
americano que a las de la Repúbiica mexicana, de la que aquellos ha afirmado aún más a través de la historia, porque uno y otro
Estados formaron parte. pueblo han pasado por vicisitudes paralelas.
El viajero que sale de los rientes campos de Norteamérica El carácter ardoroso se ha hecho más combativo ante las
para entiar en los desiertos del norte de México y subir luego frecuentes invasiones que potencias ambiciosas y fuertes han
a la agreste y desolada meseta, cree pasar de un jardín a un desencadenado sobre el suelo patrio. Ambos pueblos han tenido
erial. La espina dcrsal de la cordillera se va irguiendo a través que defenderse dé la penetración económica imperialista, y am-
uti icrniuriü mexicano hasta alcanzar alturas de vértigo en el bos también se han visto obligados a luchar y desangrarse, em-
cintro de la Kciiública; luego desciende un poco y cruza mode- pujados por la miseria, para el logro de un mínimum de justicia
raüanientc toda la extensión de las naciones centroamericanas. social. '^
En las estrihationcs de la cordillera o en su ceno se abren los Hemos dicho que la naturaleza del suelo fué factor primor-
valles en los que están cificadas las ciudades, algunas de ellas dial en el desenvolvimiento económico—y por ello social y polí-
a varias kilómetros sobre el nivel del mar. México, por ejemplo, tico—de México, y ésta es afirmación fácil de comprobar.
casi a dos kilómetros y medio; Pachuca, Toluca, Puebla, más Durante la época precolombina pasaron por la meseta, domi-
altos aún. El caminante que sigue la vía del ferrocarril hacia la nándola, pueblos y razas de diverso origen. Toltecas (civiliza-
meseta central y luego hacia la frontera guatemalteca, o, mejor ción, mejor que raza), chichimecas y, por fin, aztecas y sus aliados.
todavía, el que puede obtener una visión de conjunto desde' la' Toda la agricultura de esos pueblos giró alrededor de la siembra
nave de un aeroplano, se da cuent.i perfecta de esa pobreza y del maíz, como producto central. El maíz rige la economía, la re-
sequedad del suelo mexicano comparado con el de sus vecino.-,. ligión, los mitos, la alimentación de los indios. La siembra del
Vegetación raquítica y poco abundante, montañas altas y peladas. maíz es un proceso ritual más que un acto de mero trabajo;
y el reparto de la tierra (poseída sobre todo por el jefe del puso de campesinos maltratados y expoliados por los grandes
gobierno y los grandes señores, y colectivizada, el resto en par- hacendados.
celas comunales) es también un producto de la actividad econó- Sería muy largo narar las vicisitudes de la lucha revolucio-
mica. Las tierras, aunque extensas, no son fecundas y esto prohi- naria en México a través de los años. Bástenos observar que
be toda explotación individual. Por otra parte, las minas, que después de la efímera reacción huertista, triunfantes ya las armas
requieren enorme esfuerzo humano para su laboreo, tampoco pue- populares, tres fracciones se disputaron por largo tiempo el Po-
den ser naturalmente trabajadas por el particular. Pertenecen der; y, aunque en forma instintiva y sin programa político ver-
al príncipe y éste aprovecha para el lujo de su corte los pro- daderamente definido, esas tres facciones correspondieron a tres
ductos de ellas. El oro y las piedras preciosas no son realmente elementos de la vida social mexicana: la facción de Villa, la de
una riqueza. Son un adorno. La moneda la constituyen objetos Carranza-Obregón-Calles y la de Zapata. Guerrillero genial,
de más valor de consumo y más raros también: el cacao, sobre salido de Ijis capas más pobres de la población. Villa comenzó jJor
todo, y las plumas linas y brillantes. ser abanderado de ios proletarios; pero por una de esas com-
La llegada de los conquistadores vino a cambiar todo el siste- binaciones extrañas que presenta a veces la política, cuando Villa
ma. Deslumbrados ante el oro y la plata, los españoles dedicaron se enfrentó con Carranza y su grupo, poco a poco se le fueron
to.iós sus esfuerzos a las minas y desde ese momento México sumando elementos moderados y hasta reaccionarios, haciendo
dejó de ser rudimentariamente agrario para convertirse en fun- que, al fin y a la postre, Villa viniera a representar en la lucha,
damentalmente minero. Necesitados los nuevos dueños del país como un contrasentido, los intereses católicos y capitalistas. Villa
de mano de obra, llevaron a la industria extractiva todos los estuvo por algún tiempo sostenido por los norteamericanos, pero
brazos de que pudieron disponer, arrancándolos al suelo, y éste, sus errores y la habilidad de sus contrarios le hicieron perder
ya de por .sí ingrato, fué perdiendo cada vez más su importan- ese apoyo en favor de la facción de Carranza, quien represen-
cia en 'a vida económica de la Nueva España. Así fué como la taba los intereses de la pequeña burguesía, especialmente de la
Independencia encontró ya grandes latifundios inexplotados en provinciana. En cuanto a Zapata, quizás no con la claridad de
manos de algunos dueños, no por ello más ricos, pues que se conciencia que se le ha querido atribuir después, no cabe duda
limitaban a hacer trabajar por sus colonos pequeñas parcelas de de que fué el defensor de los verdaderos proletarios, campesinos
sus grandes tierras. El trabajo mismo era tan rudimentario como hambrientos y desposeídos.
el de la época anterior a la conquista, y nadie se preocupó jamás Carranza triunfó y con él una reedición de la tradición liberal
por buscar adelantos en los métodos de producción agraria, en de los juaristas. Pero en México se fueron formando poco a poco
contra de lo que pasó con la minería, que fué estudiada y mejo- una doctrina y un ambiente verdaderamente revolucionarios. Den-
rada en el curso de los siglos de dominación colonial. tro del grupo que ocupaba el Poder se agitaron hombres que,
México independiente se encontró con dos formidables para lograr influencia entre las masas, tuvieron que ir cada vez
poderes dentro de su propio seno: la Iglesia, único organismo más a la izquierda; de manera que en quince años de sobresaltos
verdaderamente rico en el nuevo Estado, y el pequeño núcleo políticos y de movimientos armados, en los tres lustros transcu-
de latifundistas, herederos de los viejos poseedores de! tiempo rridos de 1920, fecha de la caída de Carranza, al 10 de diciembre
de la colonia. Las luchas de la Independencia, cuando Hidalgo y de 1934, día en que tomó posesión de la Presidencia Lázaro
sobre todo Morelos encabezan grandes masas de indios y mestizos Cárdenas, los hombres del Gobierno fueron llevados por el propio
desheredados, son ya una expresión del antagonismo entre la clase pueblo al camino de las leivindicaciones sociales.
pobre, constituida por la mayor parte de la población, y el redu- El grupo pequeño curgués, que encontró su paladín en el
cido grupo de privilegiados, encabezados por las órdenes mo- general Calles, buscó desesperadamente la manera de asegurarse
násticas; ese antagonismo se perpetúa durante las primeras dé- la perpetuidad política, apelando a la demagogia y a la lucha
cadas de vida libre hasta culminar en la invasión francesa y en anticlerical, a fin de distraer con ello al pueblo de su miseria
la derrota final de la clase poseedora. y hacerle olvidar el triste estado en que se hallaba. A la sombra
Pero los secuaces de Benito Juárez y sus sucesores en el del Poder continuaron amasándose fortunas fantásticas como la
Poder—y más que nadie Porfirio Díaz—no supieron comprender del propio Calles, calculada en más de cien millones de pesos, la
el hondo anhelo del pueblo mexicano y, entregados como esta- de Abelardo Rodríguez y las de otros potentados.
ban a una doctrina de liberalismo económico, fomentaron la crea- Pero si en México la revolución social no era efectiva sino
ción de la gran propiedad, repartiendo los latifundios eclesiásticos en mínima parte, la revolución fermentaba, en cambio, en los
y de paj-ticulares entre algunos cuantos paniaguados y permitien- espíritus. Porque era imposible estar hablando todo el tiempo de
do que otros, audaces y poco escrupulosos, se adueñaran de las 'evolución y que las masas continuaran sujetándose a un sistema
tierras aun baldías y de las que todavía estaban en poder de las de vida antirrevolucionario. Como arma demagógica había nacido
colectividades indígenas. la C. R. O. M. (Confederación Regional Obrera Mexicana); pero
llegó el momento en que los trabajadores se percataron de que
Porfirio Díaz fué el gran protector de este sistema y también
su esclavitud era exactamente la misma del pasado y de que su
de la penetración imperialista europea y norteamericana, llevado
líder, Morones, turiferario de Calles, tenía palacios y joyas y
de su sueño de hacer de México un país émulo de los grandes
dinero a manos llenas para derrocharlo en orgías a costa del
Estados occidentales.
trabajo del pueblo; y nació en la C. R. O. M. un formidable
Las compañías extranjeras se apoderaron poco a poco de la movimiento escisionista, dirigido por el joven abogado Lombardo
riqueza minera, a la que añadieron los ferrocarriles, las indus- Toledano, movimiento que culminó en la fundación de la F. R.
trias que se iban creando y el completo sistema bancario. Esto hizo O. C. (Federación Regional de Obreros y Campesinos) y reciente-
que el problema de la tierra cobrara otra vez actualidad. Porque mente en la gran asociación obrera la C. T. M. (Confederación
los terratenientes, que hasta entonces habían desdeñado S»JS de Trabajadores de México), que ha llegado a englobar a la in-
enormes latifundios, quisieron explotarlos para brillar en la mensa mayoría de los proletarios y lleva adelante su pro-
corte porfiriana a la par de los millonarios de nuevo cuño, mag- grama de reformas revolucionarias contra el imperialismo y el
nates extranjeros o burócratas enriquecidos con los pingües be- gran capitalismo.
neficios que les dejaban las compañías en sus negocios con el
Presionados por los trabajadores y por los elementos sanos
Estado.
de la izquierda, los políticos de! Partido Nacional Revolucionario
Entonces se hizo más ruda y despiadada la esclavitud del eligieron como candidato a la Presidencia de la República, para
peón y, para obligar a los campesinos a trabajar en los grandes el período 19.1J-1940, al general Lázaro Cárdenas.
fundos, se les despojó por todos los medios— sobre todo por el El nueve Presidente no defraudó los anhelos del pueblo me-
fraude de titular com.o baldías las tierras de comunidades—, aca- xicano. Con él, la Revolución pasó de su forma ideológica a ser
bando con lo poco que aun quedaba de propiedad colectiva. verdadero proceso social. Es inútil repetir aquí cuanto ya se sabe
La miseria y la esclavitud fueron la causa inmediata de la respecto a la obra de Cárdenas: los repartos de tierras, que
revolución de 1910. Madero encontró eco entusiasta en todas las sólo en el primer año de su gobierno fueron mayores que los
capas populares, pero el grueso de las tropas luchadoras se com- efectuados durante los veinte años de vida revolucionaria ante-
rior; las leyes sociales; la protección a los trabajadores y a sus brantado, el círculo criollo conserva todavía algo de! desmesurado
huelgas; el formidable fraccionamiento de la comarca lagunera, poderío que logró adquirir en la época de Porfirio Díaz. Esto le
explotada hoy en forma colectivizada, con la ayuda económica permite vivir al margen de la reforma laica, sostener escuelas
del Estado, y, por fin, aunque no por último, su magnífica actitud confesionales, más o menos toleradas, para educar a sus hijos y
frente a la invasión de España por los traidores y sus aliados ex- a los niños de familias pobres protegidas, o enviados a institu-
tranjeros. ciones extranjeras de la misma índole. El problema sigue, pues,
La obra de Cárdenas no está terminada. Ha necesitado un siendo actual y candente en México,
carácter de hierro y una serenidad absoluta para llevarla a cabo. Esos elementos de reacción—imperialismo, capitalismo agrario
Frente a él la reacción se agita y hasta conspira. criollo y clericalismo—escarmentados por sucesivos fracasos, no
¿Qué pretende esa reacción y quiénes la integran? se atreven a enfrentarse abiertamente con el Gobierno de Cár-
Una política encaminada a aliviar en lo posible las injusticias denas y se limitan a obstaculizarlo en forma sorda, a desencadenar
sociales tiene que chocar, naturalmente, con aquellos que han ve- contra él su Prensa (controlan gran parte de los diarios y casi
nido usufructuando el abuso y la desigualdad. todos los semanarios y revistas) y a fomentar con su dinero las
En forma más o menos encubierta encontramos, pues, frente agrupaciones fascistas, como la Asociación de la Clase Media y
a Cárdenas, a las grandes compañías imperialistas, explotadoras la Acción revolucionaria mexicanista (Camisas doradas), esta últi-
de las minas de metales preciosos, del petróleo, de distintos ser- ma liga facciosa legalmente suprimida, pero que, según dicen,
vicios públicos y de algunas otras industrias; en segundo lugar, conserva una organización secreta.
a los map-nates de la tierra—porque, a pesar de todo, en un país Como los partidos de la oposición son débiles y están mal
de las fantásticas proporciones de México aun quedan latifundis- organizados, los reaccionarios, en uno de esos paradójicos cam-
tas que pueden contar por millares de hectáreas la extensión de bios a que les tiene acostumbrados el oportunismo, han puesto
sus heredades—, y, por fin, a los círculos, familias y personas los ojos en sus antiguos adversarios, revolucionarios enriqueci-
de filiación clerical. dos y dispuestos a traicionar su pasado para conservar la posi-
Apenas puede creerse que, después de transcurridos más de ción que les labró su demagogia. Calles es hoy una de las espe-
setenta anos desde la reforma laica de Juárez, todavía pueda ranzas de la reacción, y, más que él, Saturnino Cedillo, general
ser el clericalismo un problema en México. Sin embargo, esto se multimillonario que .se ha hecho un feudo en el Estado de San
explica fácilmente. Hay países en la América española en donde Luis de Potosí y que, por razones de ambición y odio personal,
la influencia de la Iglesia es todavía predominante: Argentina, ayudó a Cárdenas a limpiar a México del callismo, formando
Perú, Bolivia, Paraguay, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador; hay el eje Cárdenas-Cedillo-Almazán (jefe militar del Estado de Nuevo
otros en donde el clericalismo ha dejado de ser un problema León). Destruida la preponderancia política de Calles, Cedillo qui-
agudo para convertirse en secundario: Cuba, Honduras, Guate- so recoger los frutos de sus labores y desde el ministerio de
mala; y hay algunos, por último, en donde el problema religioso Agricultura, adonde le llamó Cárdenas, emprendió su política de
es todavía eje de lucha: México, Chile, Colombia. En México los alianza con la reacción. Fomentó las ligas facciosas, abrió el
elementos progresistas combaten desde arriba; en Chile, desde Estado de San Luis a las congregaciones religiosas y se presentó
abajo, y en Colombia se lucha con armas iguales. como paladín de la tolerancia y del conservadurismo económico
S' observamos un momento el organismo social de cada frente a ¡as audaces reformas del Gobierno.
una de estas naciones podemos comprobar que el clericalismo
Una situación así no podía durar. Los grupos mexicanos de
sigue siempre una trayectoria paralela al mayor o menor poder
izquierda, cada día más conscientes de su valor y mejor organi-
económico de los circuios criollos que han constituido la casta
zados, lograron ir echando por tierra, uno tras otro, a los políti-
dominarte.
cos oportunistas que, fingiéndose partidarios de Cárdenas, estor-
Tomemos como ejemplo un país de cada grupo. En la Argen- baban su política y conspiraban contra ella.
tina, la plutocracia nacional ejerce enorme influencia y poder al
lado de los imperialismos yanqui e inglés. Sus intereses y su sim- Primero fué Tomás Garrido Canabal, señor feudal del Estado
patía la ligan a la jerarquía católica, que, a su vez, encuentra de Tabasco y gran demagogo (líder de los Camisas Rojas) que
en ella un apoyo político y una fuente de ingresos. hoy llora sus culpas en Costa Rica; luego. Portes Gil, ex Presi-
En Guatemala, por influencia de la revolución de Juárez, dente de la República, ex ministro y jefe del Partido Nacional
triunfó en I8T1 un movimiento de reforma que logró en el curso Revolucionario (el partido gubernamental), cargo que le hizo re-
de quince años no sólo quebrantar el poderío económico de la nunciar el Congreso, desaprobando sus maniobras electorales;
Iglesia, sino también deshacer el incipiente capitalismo criollo. por último le tocó la vez a Cedillo, el más fuerte de todos, aunque,
Los hijos de las familias de la clase feupérior, privados de fortu- según parece, ha sido ya en lo posible reducido a la impotencia,
na, tuvieron que optar, pues, por las profesiones liberales, la bu- quedando hoy el Gobierno fortalecido y unánime en sus desig-
rocracia, etc., recibiendo del Estado una educación laica cuyos nios progresistas.
efectos no han alcanzado a borrar siete años de la cruel dicta- El porvenir de la revolución en México no está aún completa-
.dura fascistizante y pro-católica del actual Presidente Ubico. Por mente asegurado.
desgracia, si bien es verdad que allí los hombres de la revolución Cárdenas marcha hacia adelante, con paso firme y serenidad
liberal del 71 rompieron la oligarquía feudal imperante, hay que ejemplar, pero la reacción cuenta con elementos económicos y
reconocer que la substituyeron por círculos de políticos ávidos y humanos y no cesa de agitarse.
brutales militares que hicieron de la corrupción un sistema per-
Sin embargo, los obreros, los campesinos, los intelectuales,
petuo de gobierno. En Guatemala, como en toda la América es-
los empleados están preparados para cualquier contingencia. Un
pañola, pesa despiadadamente el imperialismo, agravado allá por
movimiento reaccionario no les cogería desprevenidos y lo menos
la explotación que hacen del pueblo los elementos influyentes
que puede decirse es que las fuerzas retrógradas encontrarían
de la administración. Los indios, los campesinos, los proletarios
en México tan viva oposición como en España.
urbanos son tratados peor que bestias de carga y si hay un país
en América que necesite y exija una pronta y radical transfor- Es de desear y esperar que el Gobierno mexicano, consciente
mación .social éste es Guatemala. El problema es en verdad impor- de! ejemplo de cuanto aconteció en España de febrero a julio de
tante para los mexicanos, porque el Gobierno reaccionario de 1936, continúe vigorizándose y aplaste con mano fuerte todo in-
Ubico está siempre al acecho, pronto para ejercer con respecto tento de fascistización.
a México el mismo papel que Portugal con respecto a España. Sólo así podrá Cárdenas cumplir hasta el final la hermosa
Muy pocos meses hace que se descubrió en la capital azteca una tarea que se ha impuesto y pasar a la historia como el presidente
conspiración en la que se barajaban confusamente conservadores más hábil, más amitío de los desvalidos, más popular y más que-
mexicanos, armamentos nazis, contrabando de material de guerra rido que haya tenido México.
a través de la frontera guatemalteca, etc. Por su pasado y por las muestras de cordura y capacidad que
Volviendo a México, como prototipo de los países del tercer Cárdenas ha dado durante su administración, estamos ciertos de
grupo, observemos que, aunque económicamente bastante que- que así lo hará.
-•iiHiiiinitmtiiiriiiii[iliri'iHríHitirirtminiutmrlirpitFiuitittiitmirnin!i¡'MiiiniiTni)iMtMiMi[mMiimiuniiimiiliilllliiHimiii>^

S ""^^"^ KULTUEA FASCISTA por Bofamll I ESTAMPAS DE GUERRA |

EL EVADIDO |
I Frío, agua, lodo, silencio; ia tierra \
I roja extremeña se esponja mientras |
I el centinela se sacude los cuchillos |
I del aire pisando con fuerza. Corazón |
i caliente, mirada aguda que escudri- |
I ña las sombras de la noche por el I
I recuadro de las troneras. En los re- |
I fugios el hombre-topo hace florecer |
I el rubí del cigarrillo que distrae la |
i vela. Y en la calma algo que repta, I
¡ que toma forma corpórea y se acer- |
I ca. Voz temblorosa de angustia des- \
I pierta: "¡Salud, camarada! ¿Dónde |
I te encuentras?" Y allí entre los para- |
I petos el " p o i l u " del pueblo, sin im- |
I paciencia, acecha. ¿Traición? ¿Inten- . |
I to de sorpresa? No; un evadido que |
I el infíerno fascista ahuyenta. |

I Juan de CREDOS.
i Frente de Extremadura, 1937. |

El aviador alemán: ¡Hombre, qué contrariedad! No hoy escuela hoy 'iiiiiiiiiiiiimtuiuttmitiiiiiniutiiituuiitttutiii rHiMíiiniíiinMiniiiiDiitiiuiiMuiiiitiiriiiitMiiiDliilUlU)'

¡Tendremos que conformarnos con bombardear aquel hospital!


—Mire * ó m o
T'YT^
duerme nuestro .^-\'^cn'^ O O í^) r^ —¿Viste a
vei'ino desde que nuestro a mi ir o
romenzn I ¡i, p e- l'ércz? Acaba
lifula. de pasar con su
auto como un
—AihJKO mío, rayo.
no creo que sea
esa una razón —¿Como un
para dcspcrtar- rayo?
—Sí: haciendo

—Yo h a K o 10
que quiero^ ron
mi acordeón.
—¿Y no ha
probado nunca
quemarlo?

IJon .luán. —
Siento mucho
decírselo; pero
su e s c e n a del
sofá no ha con-
vencido al pú-
blico.
Doña Inés. —
Me extraña: es
la primera -tez
que me lo dicen
dcupuís do cua-
renta años que
estoy represen-
tando CSC pap'.'l.

iiiiiiMwiiiurtniHiiiiMitiMiiititiiiitifHnHnMi'íiitiintiHiitMntiMiiiiiiitiiiiiitiiiiiittrniíiiitiiiuiiiiiiiMiiiiiiiMnntniín'iu

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ocupará extensamente.

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TEJIDOS YI Para la dueña de casa
ESTAMPADOS S ECONOMÍA DOMÉSTICA
Muchas amas de casa se preguntan para qué sirve un reloj en la co-
J. A. J U A N J cina. Lo consideran como algo accesorio, superfluo, casi ubicándolo en la
categoría de íujo. No obstante un reloj, eléctrico, costoso o barato, de esos
despertadores económicos, desempeña un papel preponderante tanto desde
el punto de vista de asegurar la marcha más perfecta de la comida como
LA ANTIGUA de atender a las obligaciones y quehaceres cotidianos siempre a su debido
C A S A DE tiempo.
Las horas y los minutos que pasan tienen gran valor y es casi seguro
T R O Z O S que las incrédulas pronto verían cómo ese adminiculo al que no conceden
importancia alguna ¡es retribuye con creces su exiguo costo; con menos
AL P E S O apuros innecesarios, con ahorro de carbón, previendo la hora cierta de tener
los manjares listos, dividiendo el tiempo para que la casa conserve constan-
BUEN A VIST A, 8 - T. 71845 temente un orden inalterable a no ser por circunstancias ajenas a la voluntad
de la dueña de casa hacendosa y amante de su hogar.
BARCELONA
I
k>»<s^:?<»<s=<»<s=<5KS=<a<í<»K»<SKjp«r4
Otra inversión que también consideran superflua las mujeres es la que
supone la adquisición de una balanza pequeña para verificar el peso que
::inl!fi!)iiiimiiiiimiiittiiiiitiiltiiiitilirilitiiiniinllirTiiriitll(lltitiiiiit)llMirirtiiit(i dan los proveedores habituales. Generalmente se reputa esta compra como un
gasto completamente inútil. No obstante, es probable que en poquísimo tiem-
po recuperan el desembolso, sin contar con ios ahorros posteriores a efectuar
gracias a la utilización amplia de ese instrumento, evitando, de paso, los
engaños y abusos.
í

Es preferible, al adquirir guantes, salvo en casos especiales, escoger


los de piel lavable, que, aunque resultan un poco más caros, dan muchí-
simo mejor resultado.

CONSEJOS PRÁCTICOS
El zumo de limón y también el vinagre son eficaces para quitar las
m.anchas de tinta que pudieren haber afectado alguna prenda tejida. Si
.s Su MAQUINA la mancha fuese muy reciente y la tela blanca, entonces puede emplearse
leche, en la seguridad de conseguir idéntico resultado.
I de COSER podrá VENDERLA,
Cuando un cuchillo se lo emplea una vez por distracción para revolver
! ARREGLARLAoCAMBIARLAen grasa o aceite caliente, con toda seguridad que le queda el filo embotado,
I AVIÑÓ, 3 0 ( f r e n t e ai Bolsín) ríe ahí por qué debe tenerse la precaución de no darles ese uso.
i T E L É F O N O 2 4 3 8 1
Si se desea conservar un ramo de camelias con toda su frescura por
C A S A espacio de varios días no hay más que fundir un poco de cera a calor suave
y cuando esté casi fría sumergir en ella los tallos de las flores recién corta-
LUIS E S T I L - L E S S O L É | das Asi quedará el ramo con frescura durante varios días.
donde e n c o n t r a r á un extenso i El bórax disuelto en agua caliente es eficacísimo aplicado a las pren-
surtido en MÁQUINAS y MUEBLES |
das sobre las que hayan caído gotas de café y se les desee quitar las
manchas.
HUNDIBLES al alcance de todos I
Gran surtido en agujas de todos I Son legión las amas de casa que empapelan cuidadosamente los arma-
ritos de sus cocinas por la parte de adentro, esperándose en hacerles a las
sistemas y clases |
hojas de color que emplean originales recortes y por este procedimiento
D e s c u e n t o : 5 "/o c o n t r a I dar un aspecto alegre al cuarto en que por fuerza han de estar varias horas
presentación de este anuncio | al cabo del día. Sin embargo, mucho mejor resulta barnizar el interior de
dichos armarios con esmalte blanco, bien graduado, lo que evita el cambio
illiilliiiiElDiiiiiiiiDillliiilliliJlilliinitn iiiiiiniiHi iilMiitiiiiii mi i
frecuente de papeles, ahorra tiempo y supone mucha inás higiene, ya que
de esta manera el armario puede limpiarse con cualquier trapo o esponja.
CONFiíERIAI PASTISSERIA Un sistema muy cómodo de limpiar las botellas o floreritos de cuello
iriiiniimiiiiiMiitiiiiiiiiKiiiihiiiiiiiiiiiiiiiM'iiitiiiiiiii
asaz estrecho consiste en echarles dentro pequeñas tiras de papel secante y
agua jabonosa en cantidad suficiente, agitando luego con energía.
Después se los enjuaga en la forma corriente.
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Por S A N D R A
(Notable adivina
de H o l l y w o o d
"LAS 6AN6AS"
Cada "estrella" de Cinelandia tiene su doble en el reinado de las flores Puigmartí, 1 i 4 - Tel. 72893
BARCELONA (G.)
y su personalidad puede ser traducida en una florescencia armonizante. Para
quien comprenda la clarividencia estas flores toman formas definidas en el
:!i(iii(iiiiiii.riiiriit<.ifti(iit(iiiiiiriu(iiitiiiiiiiiit(iiiiiiiifiiritiHi
•iiiKiriiimiiriiMiii'--
vidrio esférico al estarse analizando las personalidades de las artistas.
PARA
De acuerdo con la interpretación de mi ciencia floral, la personalidad ALPARGATAS
de Ginger Rogers se ve simbolizada por una rosa dorada y amarilla con Y ZAPATILLAS
LA
bnllantes hojas verde... Ma-ion Davis se traduce en una fulgurante amapola
ae matiz azul celeste. Joan Fontaine se ve personificada por el dorado jun- I Alpargata hlanca |
quillo de tal manera que parece como si los rayos de Febo se hubieran infil- I JOAQUÍN COSTA, 11 |
trado en sus pétalos. A la inigualable estrella de carácter Katharine Hepburn =virii'i)iitii(tiriit)iii>iittiiiiiiiiiM>tiii(itiiitiiriiriiittiJMii)iiMiriiit<>iiiiiiiiMiiiiiiii>^

ia veo como un crisantemo bronceado. Las orquídeas armonizan con la per- r.<tt>itMiniiiiiiirriitiii(iiMiiiiitiiiiiiiiMitiiitíiiiiiiiitiiiriittiiiitiiiiiiiiiiiiiiTiiiitnir!:

sonalidad de Dolores del Río, y Francés Dee se manifiesta en el cristal como I FARMACIA I
un ramito de violetas sobre cuyos pétalos ha caído recientemente el rocío.
La imagen de Mirlan Hopkins se torna en una camelia rosada, y Bárbara I LAPORTA I
Stanwyck se ve convertida en un rojísimo clavel. Lily Pons se nos antoja
cual vivida amapola. La metamorfosis de Harriet Hilliart se lleva a cabo por
I CENTRE D'ESPE- I
i CIFÍCS, ORTOPE- i
una bellísima gardenia, y Ann Sothern resplandece en los fastuosos matices
i DÍA, ANÁLISIS, I
de las capuchinas. i AIGÜES MINERO- I
Ahora bien, si todas estas artistas se vieran simultáneamente a través
I MEDICINALS |
i • i
de la esfera de cristal, el conjunto se convertiría en el ramillete más bello
= P e r a encíirrcca a c n i t de ca- |
que se haya visto y hasta yo misma quisiera poseer el don de vivir en el I rácter iir^cnt, avisar s e r e n o o %

jardín de las "estrellas": tan celestial así sería el espectáculo. "- vigilnnt o en ultre cas utilitzar |
: el tímbi'c I
I HORTA, 40 .: i "EL. 8oa86 I
i BARCELONA I

¡expulse al dolo ^(ii;rfiiniiiiiiii(iitiiiiiii)iiiiiiii')iiii<iiiiitii)iiiiii(iniiiiiiiiitiiiii>!i


ntiiiiitiiiiiiriiiír

iiiiitifiit(i;KiiiMiiiifjii;iiiin,.i;iiiiiitittitiiriiiiriitititiitiiitiitiiinir<iitMiittiítr(rt;

teniendo fiempreamano un froh I Jaramago Valadía |


Superior
p a p e l de
fumar

EN60MAD0
.}iiiiirtiii(iit(iiiiitiitiiriiiriifiiriiiiiiiit<iiiiiiini<tMiiiitiittirti.iiiiiiMi>iiiiMiiiriiiii7

BAR BAL MES


'í COMIDAS ECONÓMICAS é
SERVICIO ESMERADO
s r n o cúNTRico

CEREBRINO HÁMDRI JOSÉ COSTA


B A L M E 5 . 1 2 . T E L É F O N O 2420^
EFICAZ INOFENSIVO h (Junio Pla^a Cataluña) BARCELONA
Reconstrucción económica de España
Los traba-
No se ha hablado hasta ahora de la labor callada y discreta que han reali- 'esponsabilidad revolucio- •
zado los obreros del Carbón Mineral, esos parias de la antigua burguesía,
encuadrados centro de la Organización confederan y que fueron los más
narias, fueron los obre- i
ros del Carbón Mineral • jadores
sañudamente perseguidos y explotados antes del 19 de julio de 1936. de los primeros en apres- :
Estos compañeros, no obstante ser de los que más agravios tenían tarse a organizar, a cons- i
que vengar, también han sido luego quienes con más ahinco, con más
fe y con más entusiasmo se han dedicado a una labor constructiva, orga-
truir, a fundar una nue- •
va economía que habia :
del
nizando su industria maravillosamente en el orden de la distribución y de ser luego, incorpora- •
la descarga, ocupando hoy esta Sección—centro del Sindicato de las In-
dustrias de Agua, Gas, Electricidad y Combustibles de Cataluña—un
da al conjunto, base de •
la resistencia y del triun- :
Carbón
lugar de honor en cuanto a organización se refiere y un puesto desta- fo definitivo. •
cado dentro de la Confederación, por la solvencia y capacidad de sus
militantes. I • fP
Ellos fueron, p u e s ,
quienes, haciéndose car- :
:
Mineral en
go de la responsabilidad :
en que estaban incursos :
ante lo que ya era gue- ;
rra y la revolución, socia- :
la guerra
lizaron inmediatamente :
sus industrias, preoc.i-
pandóse en servir y cui- :
;
Y en la
iar, en primer lugar, todo :
cuanto estaba relaciona- i
do con las industrias de
guerra y los servicios pú-
:
:
r e vo -
blicos, base, en uno y E
otro caso, de todo cuan-
to se necesitaba para se-
;
:
lución
guir combatiendo a la ;
facción que nos atacaba =
desde otros puntos de i
España.
Labor económica
No se crea que ios obreros del Carbón Mineral
encontraron allanado el camino para la realización
de la tarea que se habían impuesto a si mismos,
en beneficio de su colectividad y de los intereses
económicos.
La burguesía, que celaba sin descans(j, después
dr haber abandonado todos los puestos de man-
do desde buen principio, se dedicó a poner tra-
bas a la labor de los trabajadores.
Estaban acostum.brados al régimen anterior de
injusticias y humillaciones y creían cosa pasaje-
Oficinas instaladas en la rombla de Jaime Compte. ra lo que la realidad había de venir luego a
demostrarles que era conquista básica de los ex-
plotados del carbón.
Los obreros del Carbón
Mineral dieron, en los días Compañeros que formón porte del Consejo de Empresa.
de la revuelta de julio,
cuanto podían dar como lu-
chadores libertarios y como
trabajadores que no esta-
ban dispuestos a dejarse es-
clavizar por la casta capi-
talista. En las calles de Bar-
celona, con las armas en
la mano, los compañeros
del carbón no regatearon
sacrificios para conseguir
la victoria definitiva.
Y precisamente cuando ya,
sofocada la intentona, había
que dar al estado de cosas
que creaba la actualidad un
marchamo de solvencia y de
bajadores, para humanizar mas su labor y para responder
al impulso revolucionario que en aquellos días aportaba a la
causa de la clase trabajadora conquista tras conquista.
¿Cómo hubiera sido posible lograr esto en un régimen
burgués que no Jaba el abasto a sus propios egoísmos?

Proyectos de orden técnico


También er. el orden técnico se preocupan los obreros
del Carbón Mineral de aportar soluciones que dignifiquen el
trabajo humano y que incorporen a la industria al plano mo-
derno que hoy traza Europa.
H?y, pues, proyectos, estudios, para llevar esto a la prác-
tica, en forma de máquinas adecuadas para efectuar la des-
Sección Contabilidad. carga de los barcos y la estiba y desestiba en los almacenes,
cosas todas ellas que, procurando un mejor rendimiento, ha-
brán de permitir, naturalmente, el abaratamiento del producto.
Una de las primeras ventajas que aportó a la nueva eco-
Otras cosas de menor trascendencia
nomía la labor revolucionaria de los obreros del Carbón Mi-
neral fué la unificación de precios, que jamás había podido Podríamos hablar aquí de otras cosas de menor trascen-
lograrse con la antigua burguesía. Eran demasiado mezqui- dencia, pero creemos que no tenemos derecho a perder el
nos los intereses del Sindicato de Almacenistas de Carbones tiempo ni a hacérselo perder a los compañeros del Carbón
para que se hiciera posible esta medida que, ai fin y a la Mineral que han tenido la amabilidad de responder a nuestro
postre, había de redundar en beneficio de la industria y, so- extenso interrogatorio.
bre todo, de la seriedad comercial en general. Si diremos, para finalizar, que, como no podía menos de
Naturalmente que estas cosas tenían siempre una justi- ocurrir, los trabajadores del Carbón Mineral han tenido que
ficación en el ámbito de rapiña en que se desenvolvía aquella sostener rudas luchas por mantener las mejoras logradas,
sociedad podriua. más que logradas conquistadas en la calle, cara al enemigo
Dentro de la "justicia" patronal, el pez gordo se comía y cor. las armas en la mano.
al pequeño, y un exponente de esta política nos ío ofrece el Pero la contrarrevolución acecha en cada esquina, en cada
hecho del desorden que reinaba en reparto cupos de distri- adoquín de la calle y hay que salir a su paso, enseñando a
bución, lo que permitía que unos se enriquecieran a costa veces los dientes, para exigir el respeto que merece la clase
de'los otros, aun dentro de la misma entidad patronal. trabajadora.
¡Pues qué habían de hacer con los obrerosl ¡Porque ni que Por eso estos compañeros del Carbón Mineral sostuvieron
decir tiene que, tanto la abundancia de los unos como las mi- hace poco una pequeña trifulca con sus ex patronos, que pre
gajas que recogían los otros, todo era a costa de la clase tra- tendían nada menos que hacer borrón y cuenta hueva, ni que
bajadora, que había de perder la salud y la vida para man- decir tiene que en detrimento de la economía de los traba-
tener la voracidad de unos buitres que hasta los medios jadores.
higiénicos sabían regatear a sus explotados. No cuajó la cosa. Y no cuajó porque no podía cuajar,
Así podía Contemplarse a diario, en el puerto de Barce- pese a darse ei caso lamentable de que alguien con repre-
lona, el caso bochornoso de unos encargados que "seleccio- sentación oobrera—claro que no de la C. N. T.—uniera su
naoap" a los trabajadores según su capricho y sin tener voto al de la patronal para ver si se llevaba a cabo cierta
pará'nada e;i cuenta las aptitudes profesionales de los mismos. maniobra que hubo de quedar inédita.
Y para rato tienen los que crean que ha llegado la hora
Una magnífica labor social
del "borrón v cuenta nueva".
f^or fortuna pasaron esos tiempos ominosos de esclavitud
y humillación, y gracias a la magnifica labor social de esta
Colectividad ccnetista los obreros viven el ambiente de dig-
nidad social que merecen como seres humanos. Hoy los tra-
bajadores del Carbón Mineral gozan de un semanal fijo que D i s p e n s a r i o de
les permite por lo menos poder atender las más imperiosas la Colectivización.
necesidatlL's de su vida, aunque estén sometidos, voluntaria-
mente, a todos los sacrihcios que la guerra impone.
Más -iin. Y este "más" es que, lógicamente, no podía
olvidarse a aquellos que habían dejado, en el rudo luchar
cotidiano, su salud, su juventud y con ello sus energías de
hombre.
Los obreros del Carbón Mineral, en este aspecto, respon-
dieron también plenamente a lo que de ellos podía y debía
esperarse. Lina de las primersa cosas que hicieron fué ponpr
en práctica ia aplicación de un régimen de seguros donde Se
prevenían enfermedades, viudedad, orfandad, etc., de sus tra-
Cooperativa Obrera de
Consumo "LA PAZ"

Fachada.

He aquí una obra constructiva, verdaderamente revolucio-


naria. Llevada a cabo por miembros de la C. N. T. Obras como
ésta hacen falta en la retaguardia.
La Cooperativa Obrera de Consumo "La Paz" surgió por un
imperativo de las circunstancias actuales. Magnífica idea plas-
mada por los compañeros de Comunicaciones y Transportes.
Nadie ignora que la guerra ha traído como corolario una
desarticulación en el abastecimiento de la población civil. Este
Almacenes.
problema de la retaguardia, tan intensamente manifestado en los
distintos aspectos, hizo que los compañeros de Comunicaciones
y Transportes pensaran instintivamente en su defensa y se unieran
contra los acaparadores, contra los explotadores, formando una
Comisión que se encargara de efectuar los primeros trabajos para
la constitución de una cooperativa de consumo. Nombrada esta
Comisión, y dado cima al proyecto magnífico, por acuerdo de la
asamblea cooperativista dicha Comisión quedó elegida Directiva
de la Cooperativa Obrera de Consumo "La Paz", que empezó a
funcionar, con singular acierto, el día 7 de diciembre último. For-
man la Directiva los compañeros Pascual Vidal, como presidente;
Ramón Anadón, secretario; Baltasar Gabela, tesorero, y Francisco
Fresno, que desempeña el cargo de contador.
Instalados los almacenes de la cooperativa en la calle de
Mallorca, 127 y 129, en la planta baja del edificio, en dos amplias
y claras naves del local vense las secciones de comestibles, ver- Almacenes.

Secretario.

Sección vinos y licores.


Mallorca, 127 y 129

Teléfono 71042

BARCELONA

Contabilidad.

duras, vinos y licores, embutidos, etc. Para el porvenir, y siempre


que las circunstancias lo permitan, creará la cooperativa obrera
de que nos ocupamos secciones para el despacho de tejidos y
para la venta de carnes y otros artículos.
La Cooperativa Obrera de Consumo "La Paz", acogida a los
beneficios que se marcan para las instituciones cooperativistas, ha
legalizado su funcionamiento y puesto en condiciones de brillante
marcha la industria cooperativista. Hállase encuadrada en la
Federación de Cooperativas. Y los anhelos de su Directiva, tan
inteligente y activa, son ampliar el servicio cooperativo de sus
socios.
Sección embutidos.
Los carneradas de la Cooperativa Obrera de Consumo
'La Paz" hállanse gratamente agradecidos a los centras oficiales
,^^úm4kiiú^MmmHmH^4muMzn^mimj3imv\Tn por las facilidades que se les prestaron para la organización de
la institución, como asimismo al Control de Garages, que les faci-
litó el local para su instalación. Instalación, a pesar de los pocos
días de su funcionamiento, ya insuficiente para el abastecimiento
de sus socios, por lo que se ha pensado en ampliar los servicios
en nuevos locales, en distintas barriadas de Barcelona y su radio
— alguno de estos locales será inaugurado brevemente ^—, para
el mejor servicio de los cooperativistas.
Todo lo que se dijera en elogio de los camaradas que inte-
gran la Directiva de la cooperativa y dependencia que la forma
resultaría pálido, pues la realidad, cristalizada por el esfuerzo
común de todos, supera a lo que la pluma encomiásticamente
pudiera estampar.
Los lespüiisables y dependientes.
Secretaria.

Sección comestibles.
Industria Colectivizada

PRODUCTOS
ROCAMORA
La perfección de la mano de obra y el celo que pu-
sieron siempre ios obreros en la producción de las ma-
terias básicas que constituyen el fundamento de la ac-
tuación de la antiquísima casa Rocamora, cuya denomi-
nación al advenir el movimiento liberador pasó a ser
la que encabeza este artículo, han determinado la fama
que alcanzó esta representación soberbia de la produc-
ción catalana, que ocupa lugar destacado entre todas
las que integran el patrimonio nacional, siendo solicita-
dísimos sus productos en todos los grandes mercados
consumidores del extranjero. ,

Al asumir ios obreros la gerencia de la industria pu-


dieron dedicar a ampliaciones y perfeccionamiento de
algunas de las instalaciones gran parte de las sumas
cuantiosas que absorbía la gerencia burguesa, rivali-
zando en celo en la tarea diaria todos los obreros de
la casa, en su mayoría controlados sindicalmente por la
C. N. T., y de manera especial el Consejo Permanente,
formado por los compañeros José Nebot, Juan Martínez
y Miguel T^lcón. cuya labor abnegada y consciente ha
servido para acrecer el crédito industrial de la casa, co-
locándola a la cabeza entre todas las de su género.
La industria Colectivizada Productos Rocamora re-
presenta en la economía nacional una de sus bases
más sólidas. Su producción destaca por su magnífica
presentación, por su bondad indiscutible y por su per-
fección inigualada por las casas competidoras naciona-
les y extranjeras. De ahí la preferencia que dedica el
público consumidor a todos los artículos salidos de In-
dustria Colectivizada Productos Rocamora, fallo jus-
ticiero que hace destacar con toda su fuerza mora' }
material la labor que realizan les obreros catalanes.
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Alcoholera, Vinos y Cerveza


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Forestal y Carbón vegetal
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Azúcar y derivados
Sindicato t r a b a ¡adores
Aceite y Margarina
Avícola y Cunícola sindicados
Corchotaponera
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Horticultura
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ALGUNAS COLECTIVIDA-
Ganadera DES MAS IMPORTANTES
1
Pesquera
Láctea
Carne
Industrias Mercado Central de Frutas
y Verduras

Mercado Central del

Pescado


ALGUNAS COLECTIVIDA- A

r\ limenticias
Matadero General
DES MAS IMPORTANTES /V

"
Industria Confederal de

Industria Láctea
Socializada
Bebidas Carbónicas
0 •
Industria Gastronómica Industria del Pan
• •
Enrique Granados, 6
Dulcerías, Chocolates Industria Maltera
y Cafés y Cervecera de Cataluña
TELÉFONOS 17869-17985
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y de artes pequeñas BARCELONA Industria del Aceite
9
9

Colectivizaciones de la Refinería «Iberia »


Industria de la Carne •

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Aceites Sensat, Harineras de Barcelona
E^mpresa Obrera y su radio

ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE TRABAJADORES


initiiuiiiiiniiiMiiiuninitMitMrinniniiMiiiiiirHMiiiiiniiiiniiniHiiiiiiiiiiUiitiiuirtr'uiMiinirwrniMifiiiriiriMiniiiriiiiiiiiriiiiiriurNt.iiMUMNMiiMiuiiniiuii^

Sindicato de Industrias Químicas de


Barcelona C. N. T.
CASPE, 52 -^ ' • -

Empresas Colectivizadas pertenecientes a este


Sindicato, integradas por personal de la C. N. T.

C. M. P . (Caretas), E. C. Botonia,
Lacalle. Ibérica Comercial.
Fábricas Reunidas. Pinol.
Boston Blanki. Solé Magrañé.
Varitas Iris, Manufacturas Galaloide.
Nubiola. Sucarrat.
Industrias Salas. , Industrias Casanovas,
Industrias Cataluña. Lencesa.
Industrias M. Guardiola. Planell.
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Laboratorios Elpas, Vidriería.
Perfumería Portabella. Barcelonesa.
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Productos Rocamora. Unión Vidriera n.° 5.
Colectiva M. García. Unión Vidriera n." 7.
Foret. Zorrilla.
Productos Químicos Las Corts. Irum.
Refinería Tártaros. Manufacturas del Vidrio,
Vilella. Styl.
Galleto. Casa Roig.
Durdit, Derivados Hidrogenación,
Gene, Colectividad Cuso.

Empresas Socializadas íntegramente C. N. T.


Curtidores. Óptica. Vidrio Negro.
Correas y Tacos, Vidrio Soplado. Vidrio Plano.

^iiMitiin iniuirMiriitiitiMiiiuitiiiHiihiiiiHiiMMiiiMMrinnitiitMiiininiuirHiirniiiiMiriiiiiitniíiiMhiitiirnMiMriniHiiiMiriiiinMit^iiiiMiHitMHMiiNiiuiiirMnMMiitHiiinii^
jnnMiiiiiiiMniiiHiiniiiiuuiiiuniiuiiiNNiuiiiMuiuiiiuiiuuiuiimiuiuiíuiuuituiiuuiíiuiiiutuiiiiiimiiiiiiiinitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiim

C. N. T. A. I. T.

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de Barcelona
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Central: Tel. 17858 - Secciones: centralita Tel. 14639

He aquí, lector, el exponente más gráfico de la actividad además, el óbolo de nuestro esfuerzo a los pueblos de Aragón
sindical en Barcelona. La revolución hispana, con su terrible rescatados, esos compañeros de paro, intensivamente, lograron
corolario de la guerra civil, está dando enseñanzas al mundo cubrir las referidas necesidades de la guerra El movimiento
entero. En la economía, por sus florecientes y magníficos sin- de rogación admitido en estas secciones de Camisería y Sastrería
dicatos; en el área política, por la viril entereza del obrero es- fué tan enorme que hoy, a los diecisiete meses y medio de
pañol que, con el fusil en la mana, defiende sus libertades. El guerra, sin aquel esfuerzo del comienzo, con un ritmo prpoio
Siruficato Único Fabril y Textil del Vestido y sus Anexos, dt que el mismo trabajo diario impelió, abastecen un área mayor,
Barcelona, puede servirnos de índice señalador de rutas. el de todos los frentes militares, y producen para las neces.-
El 19 de julio de 1936, como todos sabemos, pur el bellaco sidades internas de otro frente importantísimo, el de la pobla-
alzamiento militar contra la República, se rompió la mecá- ción civil. La poblacióri, civil, la retaguardia, que con su trabajo
nica interna de 'a economía española. Hubo una inalienable y SI. constancia lucha, también, por y para la guerra.
necesidad, p.isados los primeros momentos. La de la recons- F: Sindicato Único de la Industria Fabril y Textil del Ves-
trucción del trabajo. Y el Sindicato Único Fabril y Tcxlü del tido V sus Anexos, inteligente y perseverante, tiende en sus
Vestido y sus Anexos, de Barcelona, previsor y audaz en los trabajos a una colectivización integral de todas las actividades y
instantes de desconcí';rto general, logró que se re'raegraran sus d ferenles especialidades. Especialidades tan dispares, pero
a la cotídian:i Ubor las distintas industrias que lo integraban. tan unidas entre sí, como son la sastrería, la modistería, corse-
Hay que advertir, y ello se debe registrar coii encomio tería, camisería ^ corbatería, peletería, colchonería, impermea-
para que sirva de enseñanza, que el ochenta por ciento de la ble, gnarnicionería, calzado y su sección alpargatera, guante-
pobhción obrera de la industria del tejido quedó, automática- ría, paragüería, artículos para viaje, etc. Esto, en el primer
mente parada. En Hílatur ay Telares, solamente, viéronse sii' plano, en lo que atañe a Cataluña: luego, más tarde, cuando
el sustento diario unas 50 a 60.000 operarías. El trabajo, el las pcsibilidades se muestren propicias, hacerlo extensivo a toda
sistema de trbaajo burgués a que estaban esclavizadas esas la na'TÍón. Y para dar final a estas líneas, que merecerán el
secciones era el l'amado a destajo. Aparte lo ignominioso, lo asenso y consenso del que nos lea, por la alta labor social que
horrible de !a labor a que se hallaba sujeto el conjunto de esto significa, diremos que, unidas en estrecho haz todas las
las 60.000 criaturas, sobre todas las cosas de orden moral y secciones del S'".dicato Único de la Industria Fabril y Textil
físico vibraba una: la del pan diario. Y el sindicato, previsor del Vestido y sus Anexos, procuraron, desde el primer instante,
y diligente, abordó el arduo problema. Formáronse, en las dis- una reivindicación de aquellos camaradas de Hilaturas y Tela-
tintas secciones, comités de control que llevaron a cabo la res. Reivindicación que no se hallaba incluida en el régimen
colectivización. Exceución hecha de los pequeños talleres, esa burgués, antes del 19 de julio, y es la de otorgar el subsidio
de enfermedad y paro a los mencionados obreros. Pobres pa-
serie de miserias de la clase media que arrastra sin su propio
rías que, por el hecho del trabajo a destajo, no gozaban de
desenvolvimiento la plutocracia, que se anularon y organiza-
tan importante beneficio. Hoy, en cambio, al trabajar con un
ron en agrupaciones confederales para un mayor rendimiento
jornpl digno, honroso, sacudida la esclavitud del trabajo a
económico y un reparto más equitativo de los beneficios.
destajo, se atiende a las comodidades de la producción genera!,
Miróse cara a la guerra. Había que laborar por y para pues se hallan motorizadas todas las actividades; y, además
ella. Y a este respecto, las secciones de Camisería y Sastrería, de efectu,?rse el trabajo sin ningún esfuerzo, los salones y
las más íntimamente ligadas al imperativo bélico que el mismo naves antiguos en fábricas y talleres están a la máxima altura
alzamiento militar imponía, cubrieron las inmediatas necesida- en lo que atañe o respecta a la higiene y salud del obrero.
des que gravitaron sobre nosotros al primer chispazo. Organi- En la lucha por sus libertades, como apuntamos al prin-
zadas en talleres confederales, netamente confederales, a bas cipio, España admira al mundo; en lo que respecta a su eco-
del personal ¡)aradü, empezaron a producir. Porque, apuradas nomía, al desenvolvimiento de sus sindicatos, escribe un texto
todas las existencias que había en Barcelona, para dar abasto que será el abecé de todas las organizaciones del trabajo
a las Milicias que fueron n luchar contra el enemigo, y llevar. universal.
Autobuses «G»
Barcelona

La Colectividad Obrera "Autobuses G" es sin duda un


exponente de la capacitación de los trabajadores para dirigir
y administrar la economía.
Abandonada la Empresa del servicio público de autobu-
ses por los capitalistas y sus esbirros, todos fascistas de-
clarados, pasó a manos de los obreros, quienes han llevado
adelante la industria con plena responsabilidad y entusiasmo.
Los propios obreros, en su afán de superación y deseo de
dotar a Barcelona de un servicio de comunicaciones completo
y perfeccionado, estudian sin descanso las necesidades de
traslado de los viajeros a fin dé poder atenderlas, dentro,
naturalmente, de las dificultades dimanantes de la tragedia
que vive España, amoldando sus planes a las circunstancias
actuales, que no permiten llevar a cabo grandes proyectos
por las restricciones a que obliga la guerra, sobre todo te-
niendo en cuenta que nuestro país venia siendo comple-
tamente tributario del extranjero en lo referente a automo-
vilismo.
Lo que más destaca en la administración obrera de la
Empresa es el profundo cambio operado en la situación
moral de los trabajadores, tan relegada por los antiguos
propietarios. Al caer para siempre la clase directora capi-
talista ha desaparecido el aspecto tiránico que existía en el
régimen de trabajo. En vez de la relación de sumisión y
dependencia que antes del 19 de julio había respecto a los
dirigentes, se labora actualmente con la mayor comprensión
y libertad entre todos los productores, desde los más ca-
paces hasta los que desempeñan cometidos más simples,
consiguiéndose mayor rendimiento que en épocas anteriores.
Todos nuestros esfuerzos han de tender a que la obra
revolucionaria se afiance. Que los avances sociales conquis-
tados sean indiscutibles. ¡Ni un paso atrás!

Diipaniorio.

Visto g e n e r a l do las Oficinas, Cochara< y Talleres. — A d m i n i s t r a c i ó n . -


Un d e t a l l e de la Sección d e AAáquinos. — V i i t o porcial de la Sección
de M o n t a j e . — Coctie construido en los talleres.
i
PLAZA LETAMENDI, 27 • TEL. 7075¿
'VeoA^ BARCELONA
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