La cantante brasilera, por azares del destino, terminó viviendo en
Colombia. En su voz, como en la de las grandes vocalistas cariocas, viven la saudade y la alegría de este continente que no deja de cantar y contar con su música. Con solo tres años de edad, inició estudios de violín en la Escuela de Música de Brasilia. Después, ingresó al Conservatorio Carlos Gomes, donde tomó clases de ballet, claqué y expresión corporal. Siendo adolescente, en medio del furor de los años noventa, se sumergió en las aguas del rock y del heavy metal. Formó su propia banda de chicas, Witchcraft. Con el nuevo milenio, sin embargo, Amarilis inició un nuevo proyecto. Junto a su hermana, Marise Vitale, creó Nsista, propuesta musical que mezclaba ritmos afrolatinos y brasileros con beats y secuencias electrónicas. Como solista, Amarilis, actualmente, recorre el rumbo de la experimentación. El planeta agradece, presentación que hizo parte de ¡Fantástico!, incluye música, pinceladas teatrales y actos performativos que abordan los temas de la espiritualidad y el medio ambiente. La brasilera, para estimular la consciencia del público, basa su acto en el principio de las tres erres: reducir, reciclar, reutilizar.