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El contrato de edición.

En sentido amplio, por derecho de edición se entiende el derecho del autor a permitir la reproducción material de su
obra mediante la fabricación de una serie de ejemplares (copias) de ésta. Se utiliza como equivalente de derecho de
reproducción y abarca, en consecuencia, toda forma de fijación de una obra (por la imprenta, por modulado, por
fotografía o por cualquier procedimiento de las artes gráficas o plásticas, por medios electrónicos, la grabación
sonora o la fijación audiovisual).
Comprende también el resultado tangible del acto de reproducir (libros e impresos en general, fotografías, filmes,
etc.)
Concepto: Artículo 92º. "El contrato de edición es aquel por el cual el autor (de una obra literaria, musical o
artística) o sus derechohabientes, ceden (autorizan) a otra persona (física o jurídica), llamada editor, el derecho de
reproducir (o hacer reproducir en forma gráfica, de manera uniforme y directa, un número determinado de
ejemplares, copias, y a publicitarlos) y distribuir la obra por su propia cuenta y riesgo(pagando una remuneración
proporcional)"
- Contenido del contrato de edición. Artículo 93º. "El contrato de edición expresará: 1. la identificación del autor,
del editor y de la obra; 2. la obra es inédita o no; 3. el ámbito territorial del contrato; 4. si la cesión confiere al editor
un derecho de exclusiva; 5. el número de ediciones autorizadas; 6. el plazo para la puesta en circulación de los
ejemplares de la única o primera edición; 7. el número mínimo y máximo de los ejemplares que alcanzará la edición
o cada una de las que se convengan; 8. los ejemplares que se reservan al autor, a la crítica y a la promoción de la
obra; 9. la remuneración del autor; 10. el plazo dentro del cual el autor debe entregar el original de la obra del editor;
11. la calidad de la edición; 12. la forma de fijar el precio de los ejemplares"

El derecho moral.
El derecho Moral es aquel que permite al autor crear la obra y hacerla respetar, defender su integridad en la forma y
en el fondo.
El derecho intelectual, en este aspecto, aparece como una manifestación, prolongación o emanación de la
personalidad, pues recae directamente sobre una obra en sí misma.
Pertenece a la familia de los derechos que protegen la personalidad humana, de carácter extrapatrimonial, como el
derecho a la vida, al honor, a la imagen, al respeto al secreto. Por eso se dice que la protección del derecho de autor
es el amparo de la libertad individual o de actividad, del honor y de la reputación del autor.
Una vez que el público ha tomado conocimiento de la obra, el autor tiene dos clases de derechos morales: positivos
o exclusivos, y negativos, concurrentes o defensivos.
a- Los principales derechos morales positivos son:
 1. Derecho al nombre y firma del autor.
 2. Derecho al seudónimo o al anonimato.
Estos dos integran el derecho de paternidad.
 3. Derecho al título de la obra.
 4. Que la obra sea representada en condiciones convenientes.
b- Los derechos negativos más importantes son:
 1. Respeto a la integridad de la obra y su título, o sea, impedir modificaciones.
 2. Exigir fidelidad en las traducciones.
 3. No permitir que nadie le atribuya una obra que no es de él y que otro no se atribuya la paternidad de la creación.
 4. Derecho de arrepentimiento, o sea, derecho de retirar la obra publicada y aún destruirla.

¿Qué derechos confiere el derecho de autor?


Los creadores originales de obras protegidas por el derecho de autor y sus herederos gozan de ciertos derechos
básicos. Detentan el derecho exclusivo de utilizar o autorizar a terceros a que utilicen la obra en condiciones
convenidas de común acuerdo. El creador de una obra puede prohibir u autorizar:
 su reproducción bajo distintas formas, tales como la publicación impresa y la grabación sonora;
 su interpretación o ejecución pública, por ejemplo, en una obra de teatro o musical;
 su grabación, por ejemplo, en discos compactos, casetes o cintas de vídeo;
 su transmisión, por radio, cable o satélite;
 su traducción a otros idiomas, o su adaptación, como en el caso de una novela adaptada para un guión.
Artículo 19º. - Por el derecho de divulgación, corresponde al autor la facultad de resolver sobre mantener inédita la
obra o de autorizar su acceso total o parcial al público, y, en su caso, la forma de hacer dicha divulgación. Nadie
puede dar a conocer sin el consentimiento de su autor el contenido esencial de la obra, antes de que aquél lo haya
hecho o la misma se haya divulgado.
¿Cuál es el carácter de la publicación?
Es de carácter moral y no patrimonial. Es una facultad vinculada con el derecho a la libertad espiritual. La doctrina
italiana lo considera como un derecho personal o moral. Precisamente antes de la publicación no existen derechos
patrimoniales, ya que la obra no puede explorarse.

El derecho de paternidad del autor se caracteriza por ser perpetuo e inalienable.

Artículo 22º. - Por el derecho de retiro de la obra del comercio, el autor tiene el derecho de suspender cualquier
forma de utilización de la obra, siempre que existan graves razones morales apreciadas por el Juez, indemnizando
previamente a terceros los daños y perjuicios que pudiere ocasionar. Si el autor decide reemprender la explotación
de la obra, deberá ofrece preferentemente los correspondientes derechos al anterior titular, en condiciones
razonablemente similares a las originales. El derecho establecido en el presente artículo se extingue a la muerte del
autor y no será aplicable a las obras colectivas, a las creadas en el cumplimiento de una relación de trabajo o en
ejecución de un contrato de obra por encargo.
El derecho de modificación es, en ciertos aspectos, más grave que el retiro, pues si el cesionario no está conforme
con los cambios, y no tiene derecho de rescindir el contrato, al final tiene que difundir una obra que no aceptó hacer
circular. Por eso debe ser muy estricto el uso de este derecho.

El Contrato de Traducción y normas que la regulan.-


La traducción, es la expresión de obras escritas u orales en un idioma distinto del de la versión original. Traducir es
trasladar en forma fiel una obra creativa, a otro idioma distinto del original.
La ley 1328/98 establece en su artículo 16º. - El derecho de autor sobre las traducciones y demás obras indicadas
en el Artículo 5º. puede existir aun cuando las obras originarias estén en el dominio público, pero no entraña ningún
derecho exclusivo sobre dichas creaciones originales, de manera que el autor de la obra derivada no puede
oponerse a que otros traduzcan, adapten, modifiquen o compendien las mismas obras, siempre que sean trabajos
originales distintos del suyo.
Artículo 30º. - El autor tiene el derecho exclusivo de hacer o autorizar las traducciones, así como las adaptaciones,
arreglos y otras transformaciones de su obra, inclusive el doblaje y el subtitulado.
Art. 2171.- El traductor de obras que no pertenecen al dominio privado, sólo tiene propiedad sobre su versión, y no
podrá oponerse a que otros la traduzcan. Su derecho durará veinte y cinco años.
Si el traductor reclamare contra una nueva traducción, alegando ser ésta una reproducción de la primera, y no un
nuevo trabajo hecho sobre el original, decidirá la autoridad judicial competente.
Art. 2172.- Si la obra traducida fuere del dominio privado, su traducción deberá hacerse conforme a las limitaciones
que el autor hubiere establecido respecto del idioma en que su obra podrá verterse, y a las estipulaciones del
contrato celebrado con el traductor sobre la participación de ambos en sus respectivos derechos de autor, por cada
edición de la obra traducida. El traductor gozará en este caso del derecho de propiedad respecto de su traducción,
sin perjuicio de los derechos del autor sobre su obra.

Los derechos patrimoniales, derivan del hecho de poder enajenar a otros las facultades de explotación de la obra,
mediante contratos de edición, de representación, de ejecución o similares, por medio de los cuales el autor, sus
causahabientes, sus herederos o terceras personas, pueden percibir una retribución económica por la explotación de
la obra, generalmente a través de su reproducción y venta (así por ejemplo la fijación de audiogramas (o
"fonogramas") o videogramas en soportes materiales gráficos, magnéticos, ópticos, optoelectrónicos o digitales),
pero también, según la naturaleza de la obra, mediante otros procedimientos (ejecución de obras musicales,
representación pública de obras dramáticas, derecho de uso de programas de cómputo o de bases de datos; por
emisiones de radiodifusión, etcétera)

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