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Avance manual con fondo musical

BEATRIZ PRESENTACIONES – JUNIN – BUENOS AIRES - ARGENTINA


Edith Frank y Ana,
un día después de
nacer.

Annelies Marie Frank nace el 12 de junio de 1929 en Francfort del


Meno (Alemania). Es la segunda hija de Otto Frank y de Edith
Holländer. Su hermana Margot tiene entonces tres años.. Los
Frank y los Holländer son familias judías que llevaban varios
siglos residiendo en Alemania
“Mi padre, el más bueno de todos los padres
que he conocido en mi vida, no se casó hasta los
treinta y seis años con mi madre, que tenía
veinticinco. Mi hermana Margot nació en 1926
en Alemania, en Francfort del Meno. El 12 de
junio de 1929 le seguí yo.»

Ana Frank ( frase de su libro)


OTTO FRANK Y SUS DOS HIJAS
«Recuerdo que ya en 1932 pasaban las
tropas de la SA, cantando: "Cuando
salpica del cuchillo la sangre judía".»

Palabras de Otto Frank


La SA
Desfile de tropas de la SA
en una ciudad alemana.
El padre de Ana trabaja en el banco de la
familia; la madre es ama de casa. Para Margot
y Ana es una época feliz. En el barrio donde
viven hay muchos niños para jugar. Sin
embargo, sus padres están preocupados, Adolf
Hitler y su partido culpan a los judíos de los
problemas sociales y económicos,
convirtiéndolos en chivos expiatorios.
El antisemitismo en Alemania aumenta.
A principios de 1933 llega al poder en Alemania el
Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores
Alemanes (NSDAP). Su jefe, Adolf Hitler, es
nombrado canciller del Reich. Al poco tiempo
comienzan a discriminar a los judíos. Alemania
deja de ser una democracia y se convierte en una
dictadura, donde los padres de Ana ya no se
sienten seguros. Además, debido a la crisis
económica mundial, el banco de Otto Frank
atraviesa dificultades. Otto y Edith Frank deciden
abandonar el país
Edith Frank junto a sus hijas
Foto sacada el 10 de marzo de 1933 en el centro de
Francfort del Meno. Es la última foto que saca Otto
Frank en esa ciudad
Dictadura
«El mundo a mi alrededor se venía abajo.
Tenía que hacer algo, y aunque sentí un
gran dolor, me di cuenta de que Alemania
no era el mundo y abandoné el país para
siempre.»
Palabras de Otto Frank
Ana y Margot, 1933
Otto Frank se traslada a Holanda en el verano
de 1933.. Ana y Margot se instalan
temporalmente en Aquisgrán, en casa de su
abuela materna. Su madre viaja a menudo a
Amsterdam para buscar casa.

La madre de Ana encuentra en noviembre una


bonita vivienda en la plaza Merwedeplein, en un
barrio nuevo de la ciudad. Mientras que Margot
viaja a Amsterdam ya en diciembre, Ana no lo
hace hasta febrero de 1934. La envían a una
escuela Montessori, y a Margot a una escuela
primaria pública y aprenden muy rápido el
holandés.
Volver a empezar

«Después de lo que habíamos


experimentado en la Alemania nazi, en
Holanda recuperamos nuestras vidas.
Pudimos volver a empezar y sentirnos
libres.»

Palabras de Otto Frank


LA FAMILIA FRANK
En la plaza Merwedeplein, 1941
El 10 de mayo de 1940 el ejército alemán invade
Holanda. A partir del 15 de mayo de 1940, el país
queda ocupado por los nazis. Comienza la
discriminación de los judíos: ya no pueden poseer
empresas propias, se obliga a los niños a asistir a
escuelas judías, deben llevar una estrella que los
identifique, y muchas medidas más.

Un diario
El 12 de junio de 1942, Ana Frank cumple trece
años, le regalan un diario. Es su mejor regalo.
Comienza a escribir en él enseguida: «Espero
poder confiártelo todo (...) y espero que seas para
mí un gran apoyo».
«Después de mayo de 1940, se acabaron los
buenos tiempos: primero la guerra, luego la
capitulación, la invasión alemana, y así
comenzaron las desgracias para nosotros
los judíos.»
Ana Frank (frase de su libro)
Los rumores de que a los judíos los mandan a
Alemania se confirman. El 5 de julio de 1942,
Margot Frank y otros mil judíos de Amsterdam
reciben una citación. Los nazis pretenden
enviarlos a Alemania, a un campo de trabajos
forzados. Si Margot no se presenta, detendrán a
toda la familia.
La citación
En la oficina
central de
emigración judía
entregan a los
judíos citados este
formulario, en el
que viene
indicado con todo
detalle lo que
pueden llevarse y
la fecha de
partida.
Mudanza al refugio

«Me asusté muchísimo. ¡Una citación! Todo el


mundo sabe lo que eso significa. En mi mente
se me aparecieron campos de concentración y
celdas solitarias.»
Ana Frank
Escondite
secreto

Como los padres de Ana ya se lo esperaban, han


acondicionado un escondite secreto. No sólo para su
propia familia, sino también para Hermann van Pels
y flia. Los Frank deciden instalarse en su refugio ya
al día siguiente. Se llevan consigo varias bolsas
repletas de cosas. Naturalmente, Ana se lleva su
diario. Más adelante, al recordar ese momento,
escribirá en él: «La época despreocupada en que iba a
la escuela ya nunca volverá».
Detrás de una estantería giratoria

«Nuestro escondite sólo ahora se ha


convertido en un verdadero escondite. Al
señor Kugler le pareció que era mejor que
delante de la puerta que da acceso a la Casa
de atrás colocáramos una estantería (...),
pero se trata naturalmente de una estantería
giratoria, que se abre como una puerta.»
Ana Frank
El refugio
En esta vista aérea de la posguerra se aprecia
claramente la casa de atrás.

El refugio se encuentra en una parte desocupada de


la empresa de Otto Frank. Mientras que ésta sigue
funcionando normalmente en la parte delantera del
edificio, los escondidos se hallan en la parte trasera,
en la «casa de atrás». No tardarán en disimular la
entrada a este sector mediante una estantería
Los protectores

«Todos suben diariamente a visitarnos y


hablan de negocios y política con los hombres,
de comida y de los pesares de la guerra con las
mujeres, y de libros y periódicos con los niños.
En lo posible ponen buena cara, nos traen
flores y regalos en los días de fiesta o cuando
celebramos algún cumpleaños y están siempre
a nuestra disposición.»

Ana Frank
Miep Gies
Miep se encarga de comprar alimentos y artículos
necesarios para la casa. También su esposo Jan
participa en la ayuda a los escondidos,
procurándoles cupones de racionamiento.
Los ocupantes del escondite cuentan con la
ayuda de cuatro empleados de Otto Frank:
Miep Gies, Johannes Kleiman, Victor Kugler y
Bep Voskuijl. Ellos les procuran todo lo
necesario. Además, los mantienen al corriente
de las últimas noticias que llegan de la ciudad.
Malas noticias por lo general, pues por todas
partes se organizan redadas para detener a los
judíos que hacen caso omiso de las citaciones.
Los protectores suelen callar algunos detalles,
para evitar que los escondidos se sientan
temerosos y angustiados.
«Como refugio, la casa de atrás es ideal; aunque hay
humedad y está toda inclinada, estoy segura de que en
todo Amsterdam, y quizá hasta en toda Holanda, no
hay otro escondite tan confortable como el que hemos
instalado aquí.»
Ana Frank
El refugio es relativamente amplio. Los Frank viven
en dos habitaciones de la primera planta, los Van Pels
en dos cuartos de la segunda planta y en el desván
guardan las provisiones. En noviembre de 1942 llega
al refugio el octavo habitante: Fritz Pfeffer
Tensiones y peleas
«Las palabras que han volado por esta honorable
casa durante el último mes dan vértigo. (...)
Honestamente, a veces ya ni sé con quién estamos
reñidos ni con quién ya hemos vuelto a hacer las
paces. Lo único que me distrae es estudiar, así que
estudio mucho.»
Ana Frank
Habitación de Van Pels
Hace unos años, la casa de atrás se decoró
temporalmente con la mayor fidelidad posible. Esta es
la habitación de Hermann y Auguste van Pels.

Los escondidos permanecen encerrados las 24 horas


del día. Cuando hay gente trabajando en el almacén
de la planta baja, deben guardar silencio absoluto.
Durante el día, tienen que evitar en lo posible tirar de
la cadena del inodoro, ya que las tuberías del desagüe
pasan por el almacén.
Malas noticias

«Hoy sólo tengo noticias desagradables y


desconsoladoras que contarte. A nuestros
numerosos amigos y conocidos judíos se los
están llevando en pequeños grupos. (...) Los
cargan en vagones de ganado y los envían a
Westerbork, el gran campo de concentración
para judíos en Drente. Miep nos ha hablado de
alguien que se ha fugado de allí. Debe de ser un
sitio horroroso.» Ana Frank
Redada en Merwedeplein
Una redada realizada en el verano de 1943 cerca de
la plaza Merwedeplein, donde los Frank residen
antes de ocultarse.
¡¿Paz?!

«¿Acaso este año de 1944 nos traerá la victoria?


Ahora mismo no lo sabemos, pero la esperanza,
que también es vida, nos devuelve el valor y la
fuerza. Porque con valor hemos de superar los
múltiples miedos, privaciones y sufrimientos.»

Ana Frank
Mapa de Normandía
En este pequeño mapa, los escondidos van indicando el
avance de las tropas aliadas.
Cuando los escondidos llevan casi dos años
viviendo en el refugio, llega la fabulosa noticia de
que se ha producido un gran desembarco de
tropas aliadas en las playas de Normandía.
¿Liberarán rápidamente a los países ocupados de
Europa? Ana espera poder volver a clase en
septiembre u octubre...
La estantería giratoria
El 4 de agosto de 1944 descubren a los escondidos.
El viernes 4 de agosto de 1944 se presenta como
un día cualquiera. En la casa de delante trabajan
los protectores; en el refugio, los escondidos
realizan sus tareas en silencio. De pronto, un
coche se detiene frente a Prinsengracht 263. Un
oficial de la SS y tres policías holandeses bajan de
un salto y entran en el edificio. Se dirigen en línea
recta a las oficinas y obligan a Victor Kugler a que
los conduzca al refugio. Alguien ha delatado a los
escondidos...
Descubiertos!

«Eran alrededor de las diez y media. Yo estaba


arriba, en el cuartito de Peter van Pels, ayudándole
a hacer los deberes. Cuando le estaba enseñando
un error en el dictado, alguien se lanzó escaleras
arriba. Los peldaños crujían. Me incorporé como
una bala, pues era temprano por la mañana y
todos debíamos guardar silencio. Entonces se abrió
la puerta y apareció ante nosotros un hombre con
una pistola en la mano, apuntándonos.»
Otto Frank
La cárcel
Tras su detención, los prisioneros son llevados al
centro penitenciario de la policía alemana de la calle
Euterpestraat, de Amsterdam.
Los escondidos y los dos hombres que los han
protegido son detenidos y conducidos a una cárcel
alemana para un interrogatorio. Los protectores
serán trasladados luego a otra cárcel. Miep Gies y
Bep Voskuijl se quedan en Prinsengracht,
poniendo a buen recaudo los papeles de los diarios
de Ana.
La detención

«Más tarde, Bep y yo subimos a los dormitorios


de los Frank, donde vimos los papeles de los
diarios de Ana tirados en el suelo. "¡A recoger!",
dije yo, porque Bep se había quedado como de
piedra, mirando. "¡A recoger, a recoger y a
llevárnoslo todo!". Pues bien, nos llevamos todos
los papeles lo mejor que pudimos, pues teníamos
mucho miedo. Bajamos a las oficinas y allí nos
quedamos, Bep y yo. "¿Qué hacer, Bep?", le
pregunté. Ella me dijo: “Tú eres la mayor. Mejor
guárdalo tú"».
Miep Gies ( protectora de la familia)
El campo de Westerbork
Es un campo de tránsito, desde el cual se deporta a los
campos de concentración y exterminio a judíos,
gitanos y miembros de la resistencia holandesa.

El 8 de agosto de 1944, los ocho escondidos son


trasladados en un tren de pasajeros a la localidad
holandesa de Westerbork, donde van a parar a unos
barracones de castigo por no haberse presentado
voluntariamente a la deportación. Durante el día,
tienen que desarmar pilas usadas. Es un trabajo sucio e
insalubre, pero al menos los prisioneros pueden hablar
Parcialmente reconstruida la barranca donde estuvo
Ana Frank y su familia.
A Westerbork

«Si bien en el campo todos teníamos que trabajar,


por las noches disponíamos de tiempo libre y
podíamos pasarlo juntos. Sobre todo para las
niñas suponía cierto alivio ya no estar encerradas
y poder hablar con otras personas. Pero los
mayores temíamos ser deportados a los campos de
concentración polacos, tristemente notorios.»

Otto Frank
Auschwitz
La puerta de entrada al campo de concentración de
Auschwitz-Birkenau
En la madrugada del 3 de septiembre de 1944
parte de Westerbork un largo tren de carga. En
cada vagón viajan más de setenta personas. Entre
los 1019 prisioneros judíos se encuentran los ocho
escondidos de la casa de atrás. Después de un
terrible viaje de tres días, llegan a Auschwitz-
Birkenau. En el anden, los hombres son
separados de las mujeres. Médicos nazis dividen a
los prisioneros en dos grupos: los que, según ellos,
todavía pueden trabajar y los que son enviados
directamente a la cámara de gas. Los ocho
escondidos no son enviados allí todavía, sino que
deben realizar trabajos pesados.
No olvidar
«Nunca olvidaré que Peter van Pels -que tenía
entonces diecisiete años- y yo vimos pasar a un
grupo de hombres seleccionados, entre ellos al
padre de Peter. El grupo se alejó marchando. Dos
horas más tarde regresó un camión cargado con sus
ropas.» Otto Frank
El campo de Bergen-Belsen
Prisioneras de Bergen-Belsen, poco después de la
liberación del campo por el ejército británico.

Ana y Margot Frank son trasladadas de Auschwitz-


Birkenau a Bergen-Belsen. Su madre se queda en
Auschwitz-Birkenau. Edith Frank cae enferma y
muere de inanición en enero de 1945. En marzo de
1945, Ana y Margot Frank mueren de tifus, unas
semanas antes de la liberación del campo por el
ejército británico.
Auschwitz bajo la nieve
El 27 de enero de 1945, soldados rusos liberan el
campo de Auschwitz-Birkenau. Encuentran allí tan
sólo a 7.650 sobrevivientes.
Otto Frank es liberado en Auschwitz el 27 de
enero de 1945. Los nazis abandonan el campo
poco antes de la liberación, llevándose a los
prisioneros que aún están en condiciones de
andar. Entre ellos está Peter van Pels. A
finales de enero llega al campo de
Mauthausen (Austria), donde los prisioneros
deben realizar trabajos pesados. Peter van
Pels fallece de inanición el 5 de mayo de 1945.
Liberación de
Auschwitz

Los prisioneros fueron


liberados por las tropas
soviéticas el 27 de
enero de 1945
Conservar la esperanza...

Querida madre: Espero que te lleguen estas


líneas que te transmiten, a ti y a todos nuestros
seres queridos, la noticia de que me han salvado
los rusos, de que gozo de buena salud y de que
estoy bien de ánimo y bien cuidado en todo
sentido. Desconozco el paradero de Edith y las
niñas, nos separaron el 5 de septiembre de 1944.
Sólo he sabido que fueron trasladadas a
Alemania. Debemos conservar la esperanza de
reencontrarlas sanas y salvas.»

Primera carta de Otto Frank a su madre, 23 de


febrero de 1945.
Tras largas peregrinaciones, Otto Frank regresa a
Amsterdam el 3 de junio de 1945. Durante el viaje
se entera de que su mujer ha muerto en
Auschwitz, pero conserva la esperanza de que sus
hijas estén aún con vida. En Amsterdam descubre
que los cuatro protectores han sobrevivido a la
guerra.
Otto y los protectores
Otto Frank y los protectores, octubre de 1945. De
izquierda a derecha: Miep Gies, Johannes Kleiman,
Otto Frank, Victor Kugler y Bep Voskuijl.
Otto Frank hace lo imposible por conocer la suerte
que han corrido sus hijas: publica un anuncio en el
periódico y habla con supervivientes que regresan de
los campos. El 18 de julio de 1945 se entrevista con las
hermanas Brilleslijper, testigos de la muerte de Ana y
Margot en Bergen-Belsen.
La suerte de Margot y Ana

«Continuamente regresaban de los campos de


concentración pequeños grupos de supervivientes
y yo intentaba averiguar algo sobre Margot y
Ana. Por fin encontré a dos hermanas que
habían coincidido con ellas en Bergen-Belsen. Me
contaron lo horribles que habían sido los últimos
días de mis hijas y cómo habían muerto.»

Otto Frank
Mujeres sobrevivientes del campo
de
concentración nazi Bergen-Belsen
Los diarios, cuadernos y hojas sueltas con apuntes de
Ana Frank.

Sólo después de unos días, Otto Frank encuentra


fuerzas para informar de lo sucedido a su familia.
Al enterarse Miep Gies de la triste noticia, le
entrega los diarios, cuadernos y hojas sueltas con
los apuntes de Ana. Tras la detención de los
escondidos, Miep y Bep habían encontrado los
diarios de Ana tirados en el suelo de la casa de
atrás. Miep los ha conservado todo el tiempo en
El diario de Ana
«No le entregué [a Otto Frank] inmediatamente
después de su regreso los papeles de Ana, pues
mantenía la esperanza, por más pequeña que
fuera, de que ella volviese... Cuando en julio de
1945 supimos que Ana y Margot habían muerto
en Bergen-Belsen, devolví al señor Frank los
papeles con los escritos de su hija.
Le di todo lo que había guardado en mi escritorio
de la oficina.»
Miep Gies
«Después de regresar, cuando supe que nunca
volvería a ver a mis hijas, Miep me entregó los
papeles de los diarios de Ana. Yo diría que se
salvaron como de milagro. Me llevó mucho tiempo
leer todo. Confieso que me quedé muy sorprendido
por los pensamientos tan profundos de Ana, su
seriedad y su autocrítica ante todo. Resultó ser una
Ana totalmente distinta de la hija que había
conocido.» Otto Frank
«La Casa de atrás»,
1947
Portada de la
primera edición
holandesa del diario,
titulada «La Casa de
atrás».
Otto Frank comienza a leer el diario de su hija.
Es toda una revelación, pues se da cuenta de que
no la conocía tan bien. En el diario de Ana, Otto
lee que ella tenía planes de publicar después de
la guerra un libro sobre su encierro en la casa de
atrás. Incluso había reescrito ya gran parte de su
diario original. Otto Frank duda al principio,
pero finalmente decide concretar el deseo de su
hija.
Primeras ediciones
Las primeras ediciones de los diario de:
Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania y Francia.

Tras la edición holandesa se publican traducciones en Alemania,


Francia, Estados Unidos y Gran Bretaña. Sin embargo, la gran
notoriedad que adquiere el diario de Ana Frank se debe sobre
todo a su adaptación escénica. Con ocasión del estreno de la obra
en Nueva York, Otto Frank escribe una carta dirigida a todos los
participantes, en la que explica por qué le resulta imposible
asistir. Unos años después, el diario es llevado también al cine.
Muy doloroso

«La obra teatral es en realidad parte de mi vida, y


la idea de ver a mi mujer, a mis hijas y a mí
mismo representados en escena me resulta muy
dolorosa. Por eso, no puedo ni quiero ver la
obra.»

Otto Frank
Inauguración del museo
Otto Frank (izquierda) y Gijs Van Hall, alcalde de
Amsterdam, con ocasión de la inauguración del
museo, el 3 de mayo de 1960. (colección fotográfica
del Archivo Nacional de los Países Bajos)
El refugio
convertido en
museo
«Una vez restaurada la Casa de Ana Frank, me
preguntaron si había que volver a amueblar las
habitaciones. Yo dije que no. Durante la guerra se
lo llevaron todo y quiero que así se quede. Después
de la inauguración de la Casa, a algunos visitantes
les llamó la atención la amplitud de las
habitaciones. Yo les dije que su impresión era
equivocada y que no olvidaran las insoportables
tensiones que había...»
Otto Frank
Reconciliación
Tengo casi noventa años y mis fuerzas decaen. Pero
la tarea que me ha encomendado Ana me da
siempre nuevas energías para luchar por la
reconciliación y los derechos humanos en todo el
mundo.» Otto Frank

Otto Frank en 1979

Fallece el:
19 de agosto de 1980
En los años de la posguerra, Otto Frank aboga
por los derechos humanos y el respeto. Junto con
Fritzi, su segunda esposa, responde a miles de
cartas de lectores del diario que le llegan de todo
el mundo. Con algunos lectores entablan una
nutrida correspondencia. Otto Frank declara al
respecto: «Sobre todo los jóvenes me preguntan
una y otra vez cómo han podido ocurrir estos
hechos tan monstruosos. Yo les contesto lo mejor
que puedo, y al final de mis cartas suelo ponerles:
"Espero que el libro de Ana pueda inspirarte
cuando seas mayor, para que en tu entorno puedas
luchar, en la medida de lo posible, por la paz y el
acercamiento entre los hombres"».
La tumba de
Anne y
Margot Frank
está en el lugar
donde estaba
Bergen-Belsen
Monumento a Ana Frank, está a unos metros de la
casa en donde escribió su diario
Frente de la casa donde Ana Fran pasó sus últimos días
Miep Gies, uno de los protectores,
con el libro de Ana frank
Fondo musical: ejecutado por Clayderman

Beatriz Presentaciones – Junín – Buenos Aires -


Argentina
Las imágenes de este PPS fueron bajados
de una pagina de Internet

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