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Soluciones (o disoluciones) químicas

Una solución (o disolución) es una mezcla de dos o más componentes , perfectamente homogénea ya que cada
componente se mezcla íntimamente con el otro, de modo tal que pierden sus características individuales. Esto último
significa que los constituyentes son indistinguibles y el conjunto se presenta en una sola fase (sólida, líquida o gas) bien
definida.
Una solución que contiene agua como solvente se llama solución acuosa .
Si se analiza una muestra de alguna solución puede apreciarse que en cualquier parte de ella su composición es
constante.
Entonces, reiterando, llamaremos solución o disolución a las mezclas homogéneas que se encuentran en fase líquida .
Es decir, las mezclas homogéneas que se presentan en fase sólida, como las aleaciones (acero, bronce, latón) o las que se
hallan en fase gaseosa (aire, humo, etc.) no se les conoce como disoluciones.
Las mezclas de gases, tales como la atmósfera, a veces también se consideran como soluciones.
Las soluciones son distintas de los coloides y de las suspensiones en que las partículas del soluto son de tamaño molecular
y están dispersas uniformemente entre las moléculas del solvente.
Las sales, los ácidos, y las bases se ionizan cuando se disuelven en el agua.
Características de las soluciones (o disoluciones):
I) Sus componente no pueden separarse por métodos físicos simples como decantación, filtración, centrifugación, etc.
II) Sus componentes sólo pueden separase por destilación, cristalización, cromatografía.
III) Los componentes de una solución son soluto y solvente .
soluto es aquel componente que se encuentra en menor cantidad y es el que se disuelve. El soluto puede ser sólido,
líquido o gas, como ocurre en las bebidas gaseosas, donde el dióxido de carbono se utiliza como gasificante de las
bebidas. El azúcar se puede utilizar como un soluto disuelto en líquidos (agua).
solvente es aquel componente que se encuentra en mayor cantidad y es el medio que disuelve al soluto. El solvente es
aquella fase en que se encuentra la solución. Aunque un solvente puede ser un gas, líquido o sólido, el solvente más
común es el agua. (Ver: El agua como solvente ) .
IV) En una disolución, tanto el soluto como el solvente interactúan a nivel de sus componentes más pequeños (moléculas,
iones). Esto explica el carácter homogéneo de las soluciones y la imposibilidad de separar sus componentes por métodos
mecánicos.
Mayor o menor concentración
Ya dijimos que las disoluciones son mezclas de dos o más sustancias, por lo tanto se pueden mezclar agregando distintas
cantidades: Para saber exactamente la cantidad de soluto y de solvente de una disolución se utiliza una magnitud
denominada concentración .
Dependiendo de su concentración , las disoluciones se clasifican en diluidas, concentradas, saturadas, sobresaturadas.
Diluidas : si la cantidad de soluto respecto del solvente es pequeña. Ejemplo: una solución de 1 gramo de sal de mesa en
100 gramos de agua.
Concentradas : si la proporción de soluto con respecto del solvente es grande. Ejemplo: una disolución de 25 gramos de
sal de mesa en 100 gramos de agua.
Saturadas : se dice que una disolución está saturada a una determinada temperatura cuando no admite más cantidad de
soluto disuelto. Ejemplo: 36 gramos de sal de mesa en 100 gramos de agua a 20º C.
Si intentamos disolver 38 gramos de sal en 100 gramos de agua, sólo se disolvería 36 gramos y los 2 gramos restantes
permanecerán en el fondo del vaso sin disolverse.
Sobresaturadas : disolución que contiene mayor cantidad de soluto que la permitida a una temperatura determinada. La
sobresaturación se produce por enfriamientos rápidos o por descompresiones bruscas. Ejemplo: al sacar el corcho a una
botella de refresco gaseoso.
Modo de expresar las concentraciones
Ya sabemos que la concentración de las soluciones es la cantidad de soluto contenido en una cantidad determinada de
solvente o solución. También debemos aclarar que los términos diluida o concentrada expresan concentraciones relativas.
Las unidades de concentración en que se expresa una solución o disolución pueden clasificarse en unidades físicas y
en unidades químicas .

Unidades físicas de concentración


Las unidades físicas de concentración están expresadas en función del peso y del volumen, en forma porcentual, y son las
siguientes:
a) Tanto por ciento peso/peso %P/P = (cantidad de gramos de soluto) / (100 gramos de solución)
b) Tanto por ciento volumen/volumen %V/V = (cantidad de cc de soluto) / (100 cc de solución)
c) Tanto por ciento peso/volumen % P/V =(cantidad de gr de soluto)/ (100 cc de solución)
a) Porcentaje peso a peso (% P/P): indica el peso de soluto por cada 100 unidades de peso de la solución.

b) Porcentaje volumen a volumen (% V/V): se refiere al volumen de soluto por cada 100 unidades de volumen de la
solución.

c) Porcentaje peso a volumen (% P/V): indica el número de gramos de soluto que hay en cada 100 ml de solución.

Ejercicio:
Se tiene un litro de solución al 37%. ¿Cuántos litros de agua se tienen que agregar para que quede al 4%?
Resolvamos:
El problema no indica las unidades físicas de concentración. Se supondrá que están expresadas en % P/V.
Datos que conocemos: V = volumen, C= concentración
V 1 = 1 litro
C 1 = 37%
37% P/V = significa que hay 37 gramos de soluto en 100 ml de solución (solución = soluto + solvente).
C 2 = 4%
V 2 = ¿?
Regla para calcular disoluciones o concentraciones
V 1• C 1= V 2• C 2
Puede expresarse en: % P/V
Reemplazando los datos que se tienen del problema, se obtiene:

Entonces, si tenemos un litro de solución al 37%; para obtener una solución al 4% es necesario tener un volumen de 9,25
litros; por lo tanto, para saber cuantos litros de agua hay que agregar al litro inicial, hacemos:
V 2 – V 1 = Volumen de agua agregado
9,25 – 1 = 8,25 litros
Respuesta : Se deben agregar 8,25 litros de agua

Unidades químicas de concentración


Para expresar la concentración de las soluciones se usan también sistemas con unidades químicas, como son:
a) Fracción molar
b) Molaridad M = (número de moles de soluto) / (1 litro de solución)
c) Molalidad m = (número de moles de soluto) / (1 kilo de solvente)
a) Fracción molar (Xi): se define como la relación entre los moles de un componente (ya sea solvente o soluto) de la
solución y los moles totales presentes en la solución.

Ejercicio:
Se agregan 3 gramos de sal en una cacerola con 4 litros de agua ¿cuál es la concentración de sal?, o dicho de otra forma
¿cuál es la concentración de la solución?
Calcular la fracción molar de solvente y de soluto: Recordemos que la fracción molar expresa la concentración de una
solución en Moles de Soluto o de Solvente por Moles Totales de la Solución.
Solvente: agua (H 2 O)
Soluto: sal (NaCl)
Datos que conocemos: 3 gramos de soluto y 4.000 cm 3 (4 litros) de solvente.
Con estos datos debemos resolver el problema, calculando 4 valores significativos: moles de solvente, moles de soluto,
fracción molar de solvente y fracción molar de soluto .
Para el agua, se conoce su masa molar = M(H 2 O) = 18 g/mol (1 mol de H 2 O contiene 18 g, formados por 2 g de H y 16 g
de O).
Averiguar cuántos moles de solvente H 2 O) tenemos:

Para la sal (NaCl) su masa molar = M(NaCl) = 58,5 g/mol (1 mol de sal equivale a 58,5 g, formados por 23 g de Na y 35,5 g
de Cl)
Averiguar cuántos moles de soluto tenemos:

Ahora que conocemos la cantidad de moles de solvente y la cantidad de moles de soluto, podemos calcular las fracciones
molares de solvente y de soluto:
Fracción molar del solvente = X solvente

Fracción molar del solvente (agua) = 0,99977

Fracción molar del soluto= X soluto


Fracción molar del soluto= 0,00023
Pero sabemos que:

Entonces: 0,99977 + 0,00023 = 1

b) Molaridad (M): Es el número de moles de soluto contenido en un litro de solución. Una solución 4 molar (4 M) es
aquella que contiene cuatro moles de soluto por litro de solución .

Ejercicio:
¿Cuál será la molaridad de una solución que contiene 64 g de Metanol (masa molar del metanol 32 gr/mol) en 500 ml de
solución?
Datos conocidos: metanol 64 g
Masa molar del metanol: 32 g/mol
Masa de la solución: 500 ml (0,5 litro)
Primero calculamos la cantidad de moles que hay en 64 g de metanol.
Si un mol de metanol equivale a 32 g, 64 g equivalen a 2 moles (64/32=2)
Aplicamos la fórmula:

Respuesta: 4 molar
(Ver: PSU: Química; Pregunta 12_2006 )
c) Molalidad
En primer lugar debemos advertir que molalidad no es lo mismo que mola ri dad por lo cual debemos evitar confundirlas
puesto que el nombre es muy parecido pero en realidad cambian mucho los cálculos, y es un grave error pero muy
frecuente.
En la molalidad relacionamos la molaridad del soluto con el que estamos trabajando con la masa del disolvente (en kg)
que utilizamos.
La definición de molalidad es la siguiente:
Relación entre el número de moles de soluto por kilogramos de disolvente (m)

Solubilidad
En química, la solubilidad mide la capacidad de una determinada sustancia para disolverse en un líquido.
Algunos líquidos, tales como agua y alcohol, pueden ser disueltos en cualquier proporción en otro solvente. Sin embargo,
el azúcar tiene un límite de solubilidad ya que al agregar cierta cantidad adicional en una solución está dejará de
solubilizarse, llamándose a esta solución saturada.
Es la proporción en que una cantidad determinada de una sustancia se disolverá en una cantidad determinada de un
líquido, a una temperatura dada.
En términos generales, es la facilidad con que un sólido puede mezclarse homogéneamente con el agua para
proporcionar una solución química.
Concepto
La solubilidad es la mayor cantidad de soluto (gramos de sustancia) que se puede disolver en 100 gramos (g). de
disolvente a una temperatura fija, para formar una disolución saturada en cierta cantidad de disolvente.
Las sustancias no se disuelven en igual medida en un mismo disolvente. Con el fin de poder comparar la capacidad que
tiene un disolvente para disolver un producto dado, se utiliza una magnitud que recibe el nombre de solubilidad .
La capacidad de una determinada cantidad de líquido para disolver una sustancia sólida no es ilimitada. Añadiendo soluto
a un volumen dado de disolvente se llega a un punto a partir del cual la disolución no admite más soluto (un exceso de
soluto se depositaría en el fondo del recipiente). Se dice entonces que está saturada.
Pues bien, la solubilidad de una sustancia respecto de un disolvente determinado es la concentración que corresponde al
estado de saturación a una temperatura dada.
Las solubilidades de sólidos en líquidos varían mucho de unos sistemas a otros. Así a 20º C la solubilidad del cloruro de
sodio (NaCl) en agua es 6 M (molar) y en alcohol etílico (C 2 H 6 O), a esa misma temperatura, es 0,009 M (molar). Cuando
la solubilidad es superior a 0,1 M (molar) se suele considerar la sustancia como soluble en el disolvente considerado; por
debajo de 0,1 M (molar) se considera como poco soluble o incluso como insoluble si se aleja bastante de este valor de
referencia.
La solubilidad depende de la temperatura; de ahí que su valor vaya siempre acompañado del de la temperatura de
trabajo. En la mayor parte de los casos, la solubilidad aumenta al aumentar la temperatura.
Factores que determinan la solubilidad
Solubilidad en líquidos: al elevar la temperatura aumenta la solubilidad del soluto gas en el líquido debido al aumento de
choques entre moléculas contra la superficie del líquido. También ocurre lo mismo con la presión.
Solubilidad de líquidos en líquidos: Al aumentar la temperatura aumenta la solubilidad de líquidos en líquidos. En este
caso la solubilidad no se ve afectada por la presión.
Solubilidad de sólidos en líquidos: la variación de solubilidad está relacionada con el calor absorbido o desprendido
durante el proceso de disolución. Si durante el proceso de disolución se absorbe calor la solubilidad crece con el aumento
de la temperatura, y por el contrario, si se desprende calor durante el proceso de disolución, la solubilidad disminuye con
la elevación de temperatura. La presión no afecta a la solubilidad en este caso.
Unidades de medida
Puesto que la solubilidad es la máxima concentración que puede alcanzar un soluto, se medirá en las mismas unidades
que la concentración.
Es habitual medirla en gramos de soluto por litro de disolución (g/l) o en gramos de soluto por cada 100 cc de disolución
(%).
Aunque la unidad de medida se parezca a la de la densidad, no es una medida de densidad. En la densidad, masa y
volumen se refieren al mismo cuerpo. En la solubilidad, la masa es de soluto y el volumen es de la disolución, de la mezcla
de soluto y disolvente.

Equilibrio químico

Cuando estudiamos los cambios en la materia aprendimos que todo cambio químico involucra una reacción entre
diferentes sustancias produciendo la formación de sustancias nuevas.
Podemos decir, entonces, que una reacción química es un proceso en que una o más sustancias se transforman en otra u
otras sustancias de diferente naturaleza.
Las sustancias originales (las que se transformarán) se denominan reactantes o reactivos y las finales se
llaman productos .

Un cambio químico
siempre es una
reacción.
Todos los procesos químicos evolucionan desde los reactantes hasta la formación de productos a una determinada
velocidad hasta que la reacción se completa. En ese momento, la velocidad de formación de los productos es igual a la
velocidad de descomposición de éstos para formar nuevamente los reactantes de los que proceden.
Desde ese mismo momento las concentraciones de todas las especies reaccionantes (reactantes y productos) permanecen
constantes. Ese estado se conoce con el nombre de equilibrio químico.
El equilibrio químico es un estado en el que no se observan cambios visibles en el sistema. Sin embargo, a nivel molecular
existe una gran actividad debido a que las moléculas de reactantes siguen produciendo moléculas de productos, y estas a
su vez siguen formando moléculas de productos.

Como ya dijimos, cuando se alcanza el equilibrio químico las velocidades de la reacción directa ( ) e inversa ( ) son
iguales y las concentraciones de los reactantes y de los productos permanecen constantes. Para que esto ocurra, la
reacción debe suceder a una temperatura y presión constantes en un recipiente cerrado en el que ninguna sustancia
pueda entrar o salir.
Es importante diferenciar entre el equilibrio en términos de velocidad, en el que ambas velocidades son iguales, del
equilibrio en términos de concentraciones, donde éstas pueden ser, y normalmente son, distintas.

Los cambios en la coloración grafican el avance hacia el equilibrio


químico cuando reaccionan estas dos sustancias.
Factores que modifican el equilibrio
Existen diversos factores capaces de modificar el estado de equilibrio en un proceso químico, como son: la temperatura ,
la presión (afectando al volumen ) y las concentraciones .
La influencia de estos tres factores se puede predecir, de una manera cualitativa por el Principio de Le Chatelier, que dice
lo siguiente:
Si en una reacción química en equilibrio se modifican la presión, la temperatura o la concentración de alguna de las
especies reaccionantes, la reacción evolucionará en uno u otro sentido hasta alcanzar un nuevo estado de equilibrio.
Este principio es equivalente al principio de la conservación de la energía .
Más temperatura rompe el equilibrio de una reacción.

Efecto de la temperatura
Es la única variable que, además de influir en el equilibrio, modifica el valor de su constante.
Si una vez alcanzado el equilibrio se aumenta la temperatura, el sistema se opone a ese aumento de energía calorífica
desplazándose en el sentido que absorba calor; es decir, hacia el sentido que marca la reacción endotérmica.
Aquí debemos recordar que en las reacciones químicas existen dos tipos de variación con la temperatura:
Exotérmica : aquella que libera o desprende calor.
Endotérmica : aquella que absorbe el calor.
Es importante hacer notar que a bajas temperaturas, la reacción requiere más tiempo, debido a que bajas temperaturas
reducen la movilidad de las partículas involucradas. Para contrarrestar este efecto se utiliza un catalizador para acelerar la
reacción.
Respecto a los catalizadores, se ha determinado que estos no tienen ningún efecto sobre la concentración de los
reaccionantes y de los productos en equilibrio. Esto se debe a que si un catalizador acelera la reacción directa también
hace lo mismo con la reacción inversa, de modo que si ambas reacciones se aceleran en la misma proporción, no se
produce ninguna alteración del equilibrio.

Aumentar o disminuir la presión también rompe el equilibrio


químico.

Efecto de la presión
Si aumenta la presión la reacción se desplazará hacia donde exista menor número de moles gaseosos, para así
contrarrestar el efecto de disminución de volumen, y viceversa.
Lógicamente, en el caso de que las cantidades de moles gaseosos sean iguales para cada lado de la ecuación, no se
producirán cambios, es decir que el equilibro no se desplazará. También se puede aumentar la presión del sistema sin
afectar el equilibrio agregando un gas noble.

Efecto de las concentraciones


Un aumento en la concentración de uno de los reactivos hace que el equilibrio se desplace hacia la formación de
productos, y a la inversa en el caso de que se disminuya dicha concentración. Y un aumento en la concentración de los
productos hace que el equilibrio se desplace hacia la formación de reactivos, y viceversa en el caso de que se disminuya.

Ácido y base
Cuando en una solución la concentración de iones hidrógeno (H+)es mayor que la de iones hidróxilo (OH – ), se dice que
es ácida . En cambio, se llama básica o alcalina a la solución cuya concentración de iones hidrógeno es menor que la de
iones hidróxilo.
Una solución es neutra cuando su concentración de iones hidrógeno es igual a la de iones hidróxilo. El agua pura es neutra
porque en ella [H + ] = [OH – ]. (Ver: Ionización del agua )
La primera definición de ácido y base fue acuñada en la década de 1880 por Svante Arrhenius quien los define como
sustancias que pueden donar protones (H + ) o iones hidróxido (OH - ), respectivamente. Esta definición es por supuesto
incompleta, pues existen moléculas como el amoniaco (NH 3 ) que carecen del grupo OH - y poseen características básicas.
Una definición más general fue propuesta en 1923 por Johannes Brönsted y Thomas Lowry quienes enunciaron que una
sustancia ácida es aquella que puede donar H + , exactamente igual a la definición de Arrhenius; pero a diferencia de éste,
definieron a una base como una sustancia que puede aceptar protones.
Una definición más general sobre ácidos y bases fue propuesta por Gilbert Lewis quien describió que un ácido es una
sustancia que puede aceptar un par de electrones y una base es aquella que puede donar ese par.

Ver: ¿Qué es el pH?


Los ácidos y las bases se caracterizan por:

Ácidos Bases
Tienen sabor agrio (limón, vinagre, etc). Tiene sabor cáustico o amargo (a lejía)
En disolución acuosa enrojecen la tintura o papel de
En disolución acuosa azulean el papel o tintura de tornasol
tornasol
Decoloran la fenolftaleína enrojecida por las bases Enrojecen la disolución alcohólica de la fenolftaleína
Producen efervescencia con el carbonato de calcio
Producen una sensación untuosa al tacto
(mármol)
Reaccionan con algunos metales (como el cinc, hierro,…),
Precipitan sustancias disueltas por ácidos
desprendiendo hidrógeno
Neutralizan la acción de las bases Neutralizan la acción de los ácidos
En disolución acuosa dejan pasar la corriente eléctrica, En disolución acuosa dejan pasar la corriente eléctrica,
experimentando ellos, al mismo tiempo una experimentando ellas, al mismo tiempo, una
descomposición química descomposición química
Concentrados destruyen los tejidos biológicos vivos (son Suaves al tacto pero corrosivos con la piel (destruyen los
corrosivos para la piel) tejidos vivos)
Enrojecen ciertos colorantes vegetales Dan color azul a ciertos colorantes vegetales
Disuelven sustancias Disuelven grasas y el azufre
Pierden sus propiedades al reaccionar con bases Pierden sus propiedades al reaccionar con ácidos
Se usan en la fabricación de jabones a partir de grasas y
aceites
Tanto ácidos como bases se encuentran en gran cantidad en productos usados en la vida cotidiana, para la industria y la
higiene, así como en frutas y otros alimentos, mientras que el exceso o defecto de sus cantidades relativas en nuestro
organismo se traduce en problemas de salud.
Cómo reacciona una gota de fenolftaleína al unirse
con ácidos o con bases.

Teoría Ácido-Base de Lowry-Bronsted


Según Bronsted y Lowry, ácidos son todos los compuestos o iones capaces de ceder protones (H + ) al medio y bases son
los que pueden aceptar protones del medio.
Cuando una molécula o anión puede tomar un H + (base de Bronsted-Lowry), se forma su "ácido conjugado"

Base Protón que gana Ácido conjugado

OH - H+ H 2O

NH 3 H+ NH 4 +

CO 3 -2 H+ CO 3 H -

Cuando un ácido pierde un ion hidrógeno, se forma su "base conjugada".

Ácido Protón que pierde Base conjugada

ClH H+ Cl -

SO 4 H 2 H+ SO 4 H -

NO 3 H H+ NO 3 -

Fuerza de los ácidos y las bases


La fuerza de un ácido o la de una base está determinada por su tendencia a perder o a ganar protones. Los ácidos pueden
dividirse en fuertes (ClH, SO 4 H 2 , NO 3 H, etc.) y débiles (PO 4 H 2 – , CH3 COOH, CO 3 H 2 , etc.). Las moléculas de los
primeros se disocian en forma prácticamente total al ser disueltos en agua. Los segundos sólo ionizan una pequeña
proporción de sus moléculas. De aquí que, para una misma concentración de ácido, la concentración de iones hidrógeno
es mayor en las soluciones de ácidos fuertes que en las de los débiles.
Las bases también pueden dividirse en fuertes (NaOH, KOH, Ca (OH) 2 , etc.) y débiles (NH 3 , trimetilamina, anilina, etc.).
Las primeras se disocian completamente en solución. Al igual que para ácidos débiles, las constantes de disociación de las
bases débiles (K B ) reflejan el grado de ionización.
Una generalización útil acerca de las fuerzas relativas de los pares ácido-base es que si un ácido es fuerte, su base
conjugada es débil y, para las bases, si una sustancia es una base fuerte, su ácido conjugado es débil.
Nomenclatura de alcanos y Numeración de cadenas de carbono

Las reglas de nomenclatura para compuestos orgánicos e inorgánicos son establecidas por la Unión Internacional de
Química pura y aplicada, IUPAC (de sus siglas en inglés). (Ver: Nomenclatura química )
En este capítulo profundizaremos sobre las reglas para la nomenclatura de alcanos (hidrocarburos con enlaces sencillos)
ya que éstas constituyen la base de la nomenclatura de los compuestos orgánicos. (Para mejor comprensión del tema ir
primero a: Radicales ) .
Estas reglas son las siguientes:
1.- La base del nombre distintivo es la cadena continua más larga de átomos de carbono.
2.- La numeración correlativa de los átomos de carbono se inicia por el extremo más cercano a una ramificación (es lo
mismo que decir un sustituyente o un radical). En caso de encontrar dos ramificaciones a la misma distancia, se empieza a
numerar por orden alfabético desde el extremo más cercano a la ramificación de menor orden alfabético. Si se encuentran
dos ramificaciones del mismo nombre a la misma distancia de cada uno de los extremos, se busca una tercera ramificación
y se numera la cadena por el extremo más cercano a ella.
3.- Si se encuentran dos o más cadenas con el mismo número de átomos de carbono, se selecciona la que deje fuera
los radicales alquilo más sencillos. En los isómeros se toma los lineales como más simples. El n-propil es menos complejo
que el isopropil . El ter-butil es el más complejo de los radicales alquilo de 4 carbonos.
4.- Cuando en un compuesto hay dos o más ramificaciones iguales, no se repite el nombre, luego de colocar los números
que corresponden a las ubicaciones de dichos radicales se le añade el nombre con un prefijo numeral.
Los prefijos numerales son:

Prefijo
Número
2 di o bi

3 tri

4 tetra

5 penta

6 hexa

7 hepta

6.- Se escriben las ramificaciones (no olvidar: sustituyentes o radicles, es lo mismo) en orden alfabético y el nombre del
alcano que corresponda a la cadena principal se agrega al nombre del último radical.
Al ordenar alfabéticamente, los prefijos numerales y los prefijos n-, sec- y ter- no se toman en cuenta.
7.- Por convención, los números y las palabras se separan mediante un guión, y los números entre si, se separan por
comas.
La comprensión y el uso adecuado de las reglas señaladas facilitan la escritura de nombres y fórmulas de compuestos
orgánicos.

Radicales alquilo
Ya sabemos que cuando alguno de los alcanos pierde un átomo de hidrógeno se forma un radical alquilo . Estos radicales
aparecen como ramificaciones sustituyendo átomos de hidrógeno en las cadenas .
Los radicales alquilo de uso más común son:
— CH 3 — CH 2 — CH 3
Metil o Metilo Etil o Etilo
— CH 2 — CH 2 — CH 3 — CH 2 — CH 2 — CH 2 — CH 3
n-Propil o n-Propilo n-Butil on-Butilo

isopropil o Isopropilo Isobutil o Isobutilo

sec-Butil o sec-Butilo ter-Butil o ter-Butilo

Las líneas rojas indican el enlace con el cual el radical se une a la cadena principal. Esto es muy importante, el radical no
puede unirse por cualquiera de sus carbonos, sólo por el que tiene el enlace libre.

Ejemplos de nomenclatura de alcanos


1)

Se define la cadena de carbonos continua más larga y se numera desde el extremo más cercano a un radical, y se
identifican todos los radicales que haya.

La cadena continua más larga tiene 7 carbonos y se empezó la numeración desde la derecha porque ahí está el radical más
cercano (CH 3 ) . Identificamos los radicales y el número del carbono al que están unidos (2-metil y 4-etil) , los anotamos
en orden alfabético (no importa el número) y al último radical le unimos el nombre de la cadena, y nos queda: 4-etil-2-
metilheptano
2)

Buscamos la cadena continua de carbonos más larga, la cual no tiene que ser siempre horizontal. Numeramos por el
extremo más cercano a un radical, que es el derecho. Ordenamos los radicales en orden alfabético y unimos el nombre de
la cadena al último radical.
5-isopropil-3-metilnonano

3)

Buscamos la cadena de carbonos continua más larga, numeramos por el extremo más cercano al primer radical, que en
este caso es del lado izquierdo. Nombramos los radicales con su respectivo número en orden alfabético y unimos el
nombre de la cadena al último radical.

3-metil-5-n-propiloctano

4)

Seleccionamos la cadena continua de carbonos más larga. Al tratar de numerar observamos que a la misma distancia de
ambos extremos hay un radical etil, entonces nos basamos en el siguiente radical, el n-butil para empezar a numerar.

Recuerde que el n-butil por tener guión se acomoda de acuerdo a la letra b, y no con la n:. 5-n –butil-4,7-dietildecano
5)
Al seleccionar la cadena de carbonos continua más larga observamos que a la misma distancia de cada extremo hay un
radical, un metil y un etil, entonces iniciamos la numeración por el extremo más cercano al etil ya que es el radical de
menor orden alfabético.

3-etil-4-metilhexano

Si conocemos el nombre del compuesto


En otros casos es posible que nos den el nombre del compuesto y a partir de éste graficar la fórmula estructural del
mismo:
Ejemplos:
1) 3,4,6-trimetil heptano
Graficamos la cadena heptano, que tiene siete átomos de carbono. Los numeramos de izquierda a derecha, pero se puede
hacer de izquierda a derecha.

Ahora colocamos los radicales en el carbono que les corresponda (Un metil en el 3, un metil en el 4 y un metil en el 6, que
es igual a 3,4,6 –trimetil). Tenga cuidado de colocar el radical por el enlace libre.

Como el carbono forma 4 enlaces, completamos nuestra estructura con los hidrógenos necesarios para que cada uno
tenga sus 4 enlaces.

2) 3-metil-5-isopropilnonano
Nonano indica que es una cadena de 9 carbonos .
Colocamos los radicales (un metil en el 3, un isopropil en el 5)

Los radicales pueden acomodarse de diferentes formas, siempre y cuando conserve su estructural.
Finalmente completamos con los hidrógenos necesarios para que cada carbono tenga sus 4 enlaces.

4) 5-ter-butil-5-etildecano
Decano es una cadena de 10 carbonos.

Los dos radicales de la estructura están en el mismo carbono (el Nº 5) por lo tanto se coloca uno arriba y el otro abajo del
carbono 5, indistintamente.

Completamos con los hidrógenos

5) 5-sec-butil-5-ter-butil-8-metilnonano
Nonano es una cadena de 9 carbonos.

Colocamos los radicales.


Ahora completamos con hidrógeno para que cada carbono tenga 4 enlaces.

6) 5-isobutil-4-isopropil-6-n-propildecano
Decano es una cadena de 10 carbonos que numeramos de izquierda derecha.

Colocamos los radicales cuidando de acomodarlos en forma correcta.

Contamos los enlaces para poner los hidrógenos necesarios para completar 4 enlaces a cada carbono.

Ir a: Otros ejemplos sobre nomenclatura y numeración de cadenas de carbono


Nomenclatura química

En un sentido amplio, nomenclatura química son las reglas y regulaciones que rigen la designación (la identificación o el
nombre) de las sustancias químicas.
Como punto inicial para su estudio es necesario distinguir primero entre compuestos orgánicos e inorgánicos .
Los compuestos orgánicos son los que contienen carbono , comúnmente enlazado con hidrógeno, oxígeno, boro,
nitrógeno, azufre y algunos halógenos. El resto de los compuestos se clasifican como compuestos inorgánicos. Éstos se
nombran según las reglas establecidas por la IUPAC .
Nomenclatura en química inorgánica
Los compuestos inorgánicos se clasifican según la función química que contengan y por el número de elementos químicos
que los forman, con reglas de nomenclatura particulares para cada grupo.
Una función química es la tendencia de una sustancia a reaccionar de manera semejante en presencia de otra. Por
ejemplo, los compuestos ácidos tienen propiedades característica de la función ácido, debido a que todos ellos tienen
el ion H+1 ; y las bases tienen propiedades características de este grupo debido al ion OH-1 presente en estas moléculas
Debemos recordar aquí que las principales funciones químicas son: óxidos, bases, ácidos y sales.
Ver: Compuestos inorgánicos
Actualmente se aceptan tres sistemas o subsistemas de nomenclatura, estos son:
el sistema de nomenclatura estequiométrica o sistemático,
el sistema de nomenclatura funcional o clásico o tradicional y
el sistema de nomenclatura Stock.
Estos tres sistemas nombran a casi todos los compuestos inorgánicos, siendo la nomenclatura tradicional la más extensa.
Algunas reglas para la nomenclatura inorgánica
Se escribe siempre en primer lugar el símbolo del elemento o radical menos electronegativo (menor capacidad de atraer
electrones) y a continuación el del elemento o radical más electronegativo (mayor capacidad de atraer electrones). Pero
se nombran en orden inverso a este orden.
Por ejemplo, CrBr 3 = tribromuro de cromo; CO = monóxido de carbono
Se intercambian las valencias de los elementos o los radicales, colocándolas en forma de subíndices. Estos subíndices se
simplifican, si se puede, teniendo en cuenta que deben ser números enteros y que el 1 no se escribe.
En los ejemplos anteriores: CrBr 3
El cromo está actuando con valencia 3 (Cr +3 ) y el bromo lo hace con valencia –1 (Br –1 ) (el cromo puede tener valencia
2,3,4,5,6 y el bromo puede tener valencia +1, –1, 3, 5, 7)
La fórmula sería Cr +3 Br –1 , intercambiamos las valencias pero poniendo su número como subíndice y
queda CrBr 3 (sería Cr 1 , pero el uno no se escribe).
La Unión Internacional de Química Pura y Aplicada (IUPAC) recomienda el uso de la nomenclatura sistemática, la más
extendida, y la de Stock o funcional, utilizada sobre todo para nombrar óxidos, hidruros y hidróxidos.
En la nomenclatura sistemática de los óxidos la palabra genérica óxido va precedida de los prefijos griegos mono-, di-, tri-,
tetra-, penta-, hexa- o hepta- , según el número de oxígenos que existan; a continuación se indica, de la misma forma, la
proporción del segundo elemento.
Por ejemplo, N 2 O 5 , pentaóxido de dinitrógeno (5 átomos de oxígeno y 2 átomos de nitrógeno).
En algunas ocasiones se puede prescindir del prefijo mono- (CaO, óxido de calcio).
En la nomenclatura de Stock no se utilizan prefijos. Los óxidos se nombran con la palabra óxido seguida del nombre del
otro elemento y su valencia entre paréntesis; siguiendo con el ejemplo: N 2O 5 , sería óxido de nitrógeno (V) . Si el
elemento que se combina con el oxígeno tiene valencia única, no es necesario indicarla; así, Li 2 O es óxido de litio (de la
misma fórmula deducimos que la valencia del litio es 1 y la del oxígeno 2).
En los hidruros metálicos el hidrógeno actúa con valencia –1 y se nombran con la palabra genérica hidruro seguida del
nombre del metal. El número de átomos de hidrógeno se indica mediante prefijos numerales; por ejemplo, AuH 3 ,
trihidruro de oro.
En la nomenclatura funcional se nombran con la palabra hidruro seguida del nombre del metal y su valencia
correspondiente, salvo que la valencia sea única [AuH 3 , hidruro de oro (III)] .
En los hidruros no metálicos el hidrógeno actúa con valencia +1 y los no metales con sus respectivas valencias negativas;
se nombran añadiendo el sufijo -uro al no metal. Por ejemplo, HCl, cloruro de hidrógeno .
Los hidróxidos se nombran con la palabra hidróxido seguida del nombre del metal, indicando con prefijos numerales sus
proporciones; por ejemplo, Mg(OH) 2 , dihidróxido de magnesio.
En la nomenclatura de Stock no se utilizan los prefijos: al nombre del metal se le añade su valencia, aunque ésta se omite
cuando es única; por ejemplo, Mg(OH) 2 , hidróxido de magnesio.
En la nomenclatura sistemática, los ácidos oxoácidos se nombran como compuestos binarios en los que el constituyente
negativo (anión) es poliatómico; se utiliza el sufijo -ato para el anión y se especifica la valencia del elemento central
mediante números romanos entre paréntesis, seguida de la palabra hidrógeno ; por ejemplo, HClO, oxoclorato (I) de
hidrógeno . Para estos ácidos, la IUPAC admite la nomenclatura tradicional (HClO, ácido hipocloroso) .

Nomenclatura en química orgánica


El sistema para nombrar actualmente los compuestos orgánicos, conocido como sistema IUPAC, se basa en una serie de
reglas muy sencillas que permiten nombrar cualquier compuesto orgánico a partir de su fórmula desarrollada , o
viceversa. Esta es la nomenclatura sistemática . Además existe la nomenclatura vulgar , que era el nombre por el que se
conocían inicialmente muchas moléculas orgánicas (como por ejemplo ácido acético, formaldehído, estireno, colesterol,
etcétera), y que hoy día está aceptada.
El nombre sistemático está formado por un prefijo , que indica el número de átomos de carbono que contiene la
molécula, y un sufijo , que indica la clase de compuesto orgánico de que se trata.
Algunos de los prefijos más utilizados son:

Átomos de C Prefijo

1 Met-
2 Et-

3 Prop-

4 But-

5 Pent-

6 Hex-

7 Hept-

8 Oct-

9 Non-

10 Dec-

Ahora veremos como se nombran las distintas familias de compuestos orgánicos.


En aquellos casos en los que se conozca el nombre vulgar, se incluirá al lado del nombre sistemático.

Hidrocarburos
Son aquellos compuestos orgánicos que contienen únicamente carbono (C) e hidrógeno (H) en su molécula.
Existen dos grupos principales de hidrocarburos, los alifáticos y los aromáticos , cada uno de los cuales se subdividen a su
vez en varias clases de compuestos:
• Alifáticos : Dentro de este grupo están los alcanos, alquenos, alquinos y cicloalcanos
• Aromáticos : Existen dos clases de compuestos, los monocíclicos o mononucleares, que contienen sólo un núcleo
bencénico y los policíclicos o polinucleares que contienen dos o más núcleos bencénicos.
Alcanos . Responden a la fórmula general C n H 2n+2 . Son hidrocarburos acíclicos (no tienen ciclos en su cadena) saturados
(tienen el máximo número de hidrógenos posible).
- Alcanos de cadena lineal . Se nombran utilizando uno de los prefijos de la tabla anterior seguido del sufijo -ano .
Ejemplos:

CH 4 metano
C 2H 6 etano
C 3H 8 propano
C 4 H 10 butano
C 5 H 12 pentano
C 6 H 14 hexano
Ver: PSU; Química,
Pregunta 07_2005
Pregunta 10_2006
Alcanos de cadena ramificada . Para nombrar estos compuestos hay que seguir los siguientes pasos:
Buscar la cadena hidrocarbonada más larga y ésta constituye el hidrocarburo principal, que nombra al compuesto y que
llevará la terminación -ano si es un alcano. Si hay más de una cadena con la misma longitud se elige como principal aquella
que tiene mayor número de cadenas laterales.
Se numeran los átomos de carbono empezando por el extremo más próximo a un carbono con sustituyentes (radicales) y
éstos se nombran anteponiéndoles un número localizador que indica su posición en la cadena, seguido de un guión.
Si existen dos sustituyentes en el mismo átomo de carbono, se repite el número separado por una coma. Cuando hay dos
o más sustituyentes diferentes en el compuesto se nombran por orden alfabético. Por ejemplo 4,5-dietil-2,2,7-
trimetildecano.
Para ver más sobre alcanos, ir a Nomenclatura y numeración de cadenas .
Alquenos y alquinos
Para nombrar los alquenos o los alquinos se toma como cadena principal la más larga que contenga el doble o triple
enlace y se termina en -eno o -ino ; su posición se indica con el número localizador más bajo posible y tiene preferencia
sobre las cadenas laterales al numerar los carbonos.
Otros compuestos
Los alcoholes se nombran añadiendo la terminación -ol al hidrocarburo e indicando con el localizador más bajo posible la
posición que ocupa el grupo -OH.
En los aldehídos se sustituye la terminación -o de los hidrocarburos por -al y la cadena se comienza a numerar por el
extremo que lleva el grupo carbonilo (C=O).
Las cetonas se nombran cambiando la terminación -o del hidrocarburo por -ona , y la posición del grupo carbonilo se
indica con un localizador.
En los ácidos carboxílicos se antepone la palabra ácido a la del hidrocarburo del que proceden, en el que la terminación -
o se sustituye por -oico .
Las aminas se nombran añadiendo al nombre del radical el sufijo -amina . Si un mismo radical está repetido dos o tres
veces se le anteponen los prefijos di- o tri- . Si la amina lleva radicales diferentes se nombran por orden alfabético.
Las amidas cambian la terminación -oico del ácido por el sufijo -amida .
Los nitrilos se pueden considerar derivados del cianuro de hidrógeno, H-CN, al sustituir el átomo de hidrógeno por
radicales alquilo. Se nombran añadiendo el sufijo -nitrilo al nombre de la cadena principal.

Cambios químicos en la materia


En la naturaleza y en la vida diaria, nos encontramos constantemente con fenómenos físicos y con fenómenos químicos .

El mejor ejemplo de
cambio químico:
combustión.
Fenómeno físico es aquel que ocurre sin que haya transformación de la materia involucrada. En otras palabras, cuando se
conserva la sustancia original. Ejemplos: cualquiera de los cambios de estado de la materia y también acciones como
patear una pelota, romper una hoja de papel.
En todos los casos, encontraremos que hasta podría cambiar la forma, como cuando rompemos el papel, pero la sustancia
se conserva, seguimos teniendo papel. (Ver: Cambios físicos de la materia ).
Fenómeno químico es aquél que, al ocurrir, tiene como resultado una transformación de materia. En otras palabras,
cuando no se conserva la sustancia original. Ejemplos: cuando quemamos un papel, cuando respiramos, y en
cualquier reacción química . En todos los casos, encontraremos que las sustancias originales han cambiado, puesto que en
estos fenómenos es imposible conservarlas.
Para entender claramente la diferencia entre fenómeno físico y fenómeno químico veremos lo que ocurre en un proceso
natural como la fotosíntesis .

Durante el proceso de fotosíntesis Fenómeno

a- la hoja toma CO 2 del aire (también llega el H 2 O tomada del suelo por la raíz) Físico

b- el agua se transforma en Hidrógeno y Oxígeno, Químico

c- el Oxígeno se desprende de la planta y vuelve a la atmósfera Físico

d- el Hidrógeno reacciona con el Dióxido de Carbono para formar Almidón. Químico

Ahora veamos qué ocurre en el motor de un auto cuando está en movimiento.

En un auto Fenómeno

a- se inyecta gasolina en un carburador, Físico

b- se mezcla con aire, Físico

c- la mezcla se convierte en vapor, Físico

d- se quema ( y los productos de la combustión ) Químico

e- se expanden en el cilindro Físico

Reacciones químicas

Un clavo se oxida con


el aire: reacción
química.
Por experiencia, sabemos que un trozo de hierro se oxidará si lo dejamos a la intemperie, y lo sabemos aunque no
poseamos conocimientos de química.
Lo que ocurre es una reacción química en la cual el hierro se combina con el oxígeno presente en el aire para formar una
sustancia distinta a las originales, un óxido de hierro.
El origen de una nueva sustancia, como el óxido de hierro en nuestro ejemplo, significa que ha ocurrido un
reordenamiento de los electrones dentro de los átomos, y se han creado nuevos enlaces químicos. Estos enlaces químicos
determinarán las propiedades de la nueva sustancia.
La mayoría de los cambios químicos son irreversibles. Al quemar un trozo de madera ya no podremos volver a obtenerlo a
partir de las sustancias en que se ha convertido: cenizas y gases.
Ver: PSU: Pregunta 01_2005(Química2)
Sin embargo, hay otros cambios químicos en que la adición de otra sustancia provoca la obtención de la sustancia original
y en ese caso se trata de un cambio químico reversible. Así, pues, para producir un cambio químico reversible hay que
provocar otro cambio químico.
Todo cambio químico involucra una reacción entre diferentes sustancias produciendo la formación de sustancias nuevas.
Entonces, una reacción química es un proceso en que una o más sustancias se transforman en otra u otras sustancias de
diferente naturaleza.
Las reacciones químicas se manifiestan en alguna de estas formas:
• emisión de gases
• efervescencia
• cambios de color
• emisión de luz
• elevación de la temperatura
• formación de nuevas sustancias.

Manifestaciones de una reacción química.


La respiración de los animales y la digestión de los alimentos constituyen ejemplos importantes de reacciones químicas;
por eso se dice que el cuerpo humano es como un laboratorio químico.
El estudio metódico de las reacciones químicas ha permitido a los científicos transformar los productos naturales y
obtener toda clase de sustancias, tales como: fibras sintéticas, plásticos, insecticidas y detergentes, todo ello tan útil en
nuestra vida diaria.
Tipos de reacciones químicas
Es necesario reconocer, que una reacción química sólo puede corresponder a un fenómeno químico que se verifique en
condiciones adecuadas; es decir, no se debe proponer una reacción química inventada o que no sea una reacción real. Sin
embargo, no siempre es posible predecir sí, al poner en contacto ciertas sustancias, se llevará a cabo la reacción o cuales
serán los productos.
Ahora bien, en miles de experimentos realizados en el mundo, debidamente repetidos y controlados en el laboratorio,
las reacciones químicas se pueden clasificar en los siguientes tipos:
De síntesis o combinación
Es un fenómeno químico, y a partir de dos o más sustancias se puede obtener otra (u otras) con propiedades
diferentes. Para que tenga lugar, debemos agregar las sustancias a combinar en cantidades perfectamente definidas,
y para producirse efectivamente la combinación se necesitará liberar o absorber calor (intercambio de energía).
La combinación del hidrógeno y el oxígeno para producir agua y la del hidrógeno y nitrógeno para producir amoníaco son
ejemplos
2H 2 + O 2 —› 2 H 2 O formación de agua
3 H 2 + N 2 —› 2 N H 3 formación de amoníaco
De descomposición
Es un fenómeno químico, y a partir de una sustancia compuesta (formada por dos o más átomos), puedo obtener dos o
más sustancias con diferentes propiedades.
Ejemplos: al calentar óxido de mercurio, puedo obtener oxígeno y mercurio; se puede hacer reaccionar el dicromato de
amonio para obtener nitrógeno, óxido crómico y agua.
Para que se produzca una combinación o una descomposición es fundamental que en el transcurso de las mismas se libere
o absorba energía, ya que sino, ninguna de ellas se producirá. Al final de cualquiera de las dos tendremos sustancias
distintas a las originales. Y ha de observarse que no todas las sustancias pueden combinarse entre sí, ni todas pueden ser
descompuestas en otras.
De sustitución o de reemplazo
En este caso un elemento sustituye a otro en un compuesto, ejemplos:
Zn + 2HCl ——› ZnCl 2 + H 2
Mg + H 2 SO 4 ——› Mg SO 4 + H 2
De doble sustitución o de intercambio
En este tipo de reacciones se intercambian los patrones de cada compuestos, ejemplo
2 CuOH + H 2 SO 4 ——› Cu 2 SO 4 + 2H 2 O
3BaCl 2 (ac) + Fe 2 (SO 4 ) 3 (ac) ——› 3BaSO 4 + 2FeCl 2 (ac)

Agua: reacción química de


síntesis.
Reactantes y productos
Para entenderlas y analizarlas, las reacciones químicas se representan, como ya vimos en los ejemplos
anteriores, mediante ecuaciones químicas .
Una ecuación química es la representación escrita de una reacción química. En toda reacción química debemos distinguir
los reactantes y los productos .
Los reactantes son sustancias que al combinarse entre ellas a través de un proceso llamado reacción química forman
otras sustancias diferentes conocidas como productos de la reacción. (Ver:Velocidad de una reacción química )
En una ecuación química, los reactantes y productos se escriben, respectivamente, a la izquierda y a la derecha, separados
mediante una flecha. El sentido de la flecha indica el transcurso de la reacción y debe leerse como: da origen a
Reactantes ——› dan origen a Productos
Tomaremos como ejemplo el agua, las sustancias reactantes son el hidrógeno (cuya fórmula es H 2 ) y el oxigeno (cuya
fórmula es O 2 ), al combinarlas se produce una reacción química y obtenemos como producto el agua:
Dos moléculas de hidrógeno (2H 2 ) reaccionan con una molécula de oxigeno (O 2 ) para formar dos moléculas de agua
(2H 2 O).
Reacción química aeróbica:
Es un proceso que requiere de la presencia del oxígeno para llevar a cabo la producción de energía.
Reacción química anaeróbica:
Es un proceso que a diferencia del aeróbico, se lleva a cabo en ausencia de oxígeno.
Cuando hacemos ejercicio aeróbico (correr, nadar por tiempo prolongado, etc.) la energía la obtenemos por medio del
oxígeno que respiramos. El oxígeno llega a las fibras musculares a través de la sangre, donde se produce una serie de
reacciones químicas con los nutrientes que nos entregan los alimentos, produciéndose la energía.
Cuando hacemos ejercicio anaeróbico (saltos, levantar pesas, carreras cortas y rápidas, etc.) necesitamos energía en un
corto periodo de tiempo, y esta la obtenemos por medio de los hidratos de carbono y las grasas, que al descomponerse
químicamente suministran la energía anaeróbica, llamada de esta manera porque toda esta reacción química se produce
sin la presencia de oxígeno.

Velocidad de una reacción química

Cuando ocurre un proceso químico las sustancias denominadas reactivos se transforman en otras sustancias
llamadas productos .

Combustión, reacción química muy rápida.


En algunos casos el cambio de reactivo a producto se verifica con lentitud. Así ocurre con un clavo (de hierro) que
expuesto a la intemperie (con el oxígeno del aire), necesita de cierto tiempo (horas, días, meses) para que se observe la
formación de óxido.
Sin embargo, hay reacciones que se realizan muy velozmente, como la de magnesio (trozo de cinta) que al agregarle unas
gotas de ácido clorhídrico concentrado reacciona rápidamente transformándose en cloruro de magnesio con
desprendimiento de hidrógeno y calor (en una reacción exotérmica).
La velocidad de reacción se calcula midiendo la rapidez de aparición de un producto o la desaparición de un reactivo.
Los factores que afectan la velocidad de las reacciones químicas son:
La naturaleza de las sustancias que reaccionan
La naturaleza y variedad de sustancias involucradas en una reacción química determinan el tipo de reacción que se
produce; estas diferencias pueden atribuirse a las desigualdades de reactivos, estructura de los átomos, moléculas y iones
participantes.
Es condición necesaria que las partículas que reaccionan choquen unas contra otras, para que haya una transformación
química, aunque no todos los choques entre las partículas que constituyen los reactivos producen un cambio químico,
pues existen algunas que al chocar rebotan sin sufrir transformación alguna, porque no tienen la suficiente energía o la
orientación adecuada.
La velocidad con que reaccionan las sustancias dependerá de que los choques entre partículas (átomos, iones o moléculas)
sean efectivos; esto es, deben tener la energía necesaria para reaccionar.
Al respecto, veamos qué dice la Teoría de las colisiones : Para que tenga lugar una reacción química debe cumplirse
necesariamente que el choque o colisión de las partículas de los reactivos se produzca entre átomos, moléculas o iones.
Para que se garantice la reacción debe cumplirse que: la energía cinética sea suficiente para que tenga lugar el
reordenamiento de los enlaces y se forme la nueva sustancia y que colisionen con la debida orientación. Si cumplen esto
se denomina choque eficaz .
La Temperatura
La temperatura aumenta la velocidad de cualquier reacción. Asimismo, se incrementa la velocidad de desplazamiento de
las moléculas, lo cual conduce a un mayor número de choques entre ellas; es decir, aumenta la energía cinética.
La velocidad de reacción se duplica aproximadamente cada 10º C que aumenta la temperatura.
Por tanto, cuando se eleva la temperatura en una reacción, las moléculas pueden chocar con la energía suficiente para
que se efectúen rupturas en los enlaces y se formen nuevas moléculas de producto, aumentando así la velocidad de la
misma.
Los Catalizadores
Un catalizador es un factor importante que influye en la velocidad de una reacción química; asimismo, es la sustancia que
presente en un proceso químico interviene en él sin transformarse, siendo capaz de provocar aceleración o retardo en la
velocidad de la reacción química.
Muchas de las reacciones industriales para obtener productos de consumo son catalizadas (como la gasolina). Con
frecuencia se habla de que cada día más automóviles cuentan con un convertidor catalítico para disminuir sus emisiones
contaminantes.
Las vitaminas, fermentos, levaduras, hormonas y enzimas son catalizadores biológicos. Su presencia en los seres vivos
hace posible efectuar reacciones químicas que desarrolladas en el laboratorio resultarían extremadamente lentas.

Número de oxidación o estado de oxidación

Los compuestos químicos son eléctricamente neutros , excepto los iones cuando los consideramos separadamente. Es
decir, la carga que aporten todos los átomos de un compuesto tiene que ser globalmente nula, debemos tener en un
compuesto tantas cargas positivas como negativas. Respecto a los iones, se dice que quedan con carga residual.
Para entender qué significa esto de que un compuesto sea eléctricamente neutro , veamos un ejemplo: tomemos el caso
del ácido sulfúrico (H 2 SO 4 ) :

+1 +6 −2

H 2 aS b O 4 c

a + b +c =0

+2 +6 −8 = 0
El número que aparece sobre el símbolo del elemento debe colocarse como superíndice y con el signo más (+) o el menos
(−) puesto a su izquierda, para diferenciarlo del número de carga de los iones en que el signo se pone a la derecha del
digito. Así, H +1 para indicar el número de oxidación del Hidrógeno (+1) y Ca 2+ para indicar ión Calcio (2+).
Siguiendo la explicación de nuestro cuadro, los elementos se han identificado con las letras a, b y c para mostrar la
ecuación que debe ser igual a cero .
Ahora bien, ese número de arriba representa algo que se llama número de oxidación o estado de oxidación y representa
la carga eléctrica que aporta cada átomo en el compuesto y que sumadas debe ser igual a cero (eléctricamente neutro).
Pero, en nuestro ejemplo, + 1 + 6 − 2 es igual a +7 −2 = 5 (no es igual a cero como debería ser). Claro, pero debemos
fijarnos en que son dos átomos de hidrógeno (H 2 ) , un átomo de azufre (S)y cuatro átomos de oxígeno (O 4 ) , así es que
ese numerito de arriba se debe multiplicar por el número de átomos de cada elemento que participa en el compuesto, y
nos quedará +2 +6 −8 = 0.
Conocer el número de oxidación de los elementos de un compuesto es de vital importancia para reconocer si
una semirreacción es de oxidación o de reducción en las reacciones de ese tipo.
Ver: Reacciones Redox .
¿Qué es el número de oxidación?
El número de oxidación es un número entero que representa el número de electrones que un átomo recibe (signo
menos) o que pone a disposición de otros (signo más) cuando forma un compuesto determinado .
Eso significa que el número de oxidación es positivo si el átomo pierde electrones, o los comparte con un átomo que
tenga tendencia a captarlos. Y será negativo cuando el átomo gane electrones, o los comparta con un átomo que tenga
tendencia a cederlos.
El número de oxidación se escribe en números romanos: +I, +II, +III, +IV, -I, -II, -III, -IV, etc. Pero en esta explicación
usamos caracteres arábigos para referirnos a ellos: +1, +2, +3, +4, -1, -2, -3, -4 etcétera, lo cual nos facilitará los cálculos al
tratarlos como números enteros.
Importante
Más arriba dijimos que el número de oxidación es distinto al número de carga, pero debemos agregar que en los iones
monoatómicos (de un átomo) la carga eléctrica coincide con el número de oxidación. Por ello es imprescindible recalcar
que cuando nos refiramos al número de oxidación el signo + o – lo escribiremos a la izquierda del número, como en los
números enteros. Por otra parte, la carga de los iones, o número de carga , se debe escribir con el signo a la derecha del
dígito: Ca 2+ ión calcio (2+), CO 3 2− ión carbonato (2−).
¿Será tan complicado saber cuál es el número de oxidación que le corresponde a cada átomo?
Veamos. Dijimos que el número de oxidación corresponde al número de electrones que un átomo “recibe o pone a
disposición” de otro, lo cual indica que ese número puede ser variable en un mismo átomo.
En efecto, por ejemplo el Manganeso (Mn) puede tener número de oxidación +2, +3, +4, +6 y +7 (significa que al formar
un compuesto puede “ofrecer” 2, 3, 4, 6 ó 7 electrones, dependiendo de ciertas condiciones).
Es inportante notar que el número de oxidación de todos los elementos aislados (es decir no formanfo compuestos) es
cero (0).
Hay algunos pocos elementos que, formando parte de un compuesto, tienen un único número de oxidación. Esto será útil
ya que si conocemos el número de oxidación de esos pocos elementos será fácil deducir el de los otros elementos del
compuesto a partir de las configuraciones electrónicas.
Algunos números de oxidación aparecen en la tabla siguiente. Los números de oxidación de los demás elementos los
deduciremos de las fórmulas o nos los indicarán en el nombre del compuesto, así de fácil.

Nº oxidación
Elemento
Único Con el H y con los metale s En los oxácidos

Li, Na, K, Rb, Cs, Fr, Ag, NH4+ (amonio) + 1

Be, Mg, Ca, Sr, Ba, Ra, Zn, Cd +2

B, Al, Ga, In, Tl, Sc, Y, La +3

F −1

Cl, Br, I −1 + 1, + 3, + 5, + 7

S, Se, Te −2 + 4, + 6

O −2 + 4, + 6

O en peróxidos (Como en H2O2) −1

N, P, As, Sb, Bi −3 + 3, + 5

C, Si, Ge, Sn, Pb −4 +4

H (con no metales) +1

H (con metales) −1

Puntualicemos:
El hidrógeno (H) presenta número de oxidación +1 con los no metales y – 1 con los metales.
El oxígeno (O) presenta el número de oxidación – 2 , excepto en los peróxidos donde es – 1.
Los metales alcalinos (grupo 1, o grupo del Li) tienen 1 electrón de valencia, tenderán a perderlo poseyendo siempre en
los compuestos número de oxidación +1 .
Los metales alcalinotérreos (grupo 2, o grupo del Be) tienen 2 electrones de valencia, tenderán a perderlos poseyendo
siempre en los compuestos número de oxidación +2 .
El grupo del B (grupo 13) tiene 3 electrones de valencia, tenderán a perderlos poseyendo siempre en los compuestos
número de oxidación +3 .
El grupo del C (grupo 14) tiene 4 electrones de valencia, que tienden a compartirlos, tienen número de
oxidación +4 frente a los no metales, y número de oxidación –4 frente a los metales y al H.
El grupo del N (grupo 15) tiene 5 electrones de valencia, tenderán a ganar 3 poseyendo siempre con el H y con los metales
número de oxidación –3 .
Los calcógenos (grupo 16, o grupo del O) tienen 6 electrones de valencia, tenderán a ganar 2 poseyendo siempre con el H
y con los metales número de oxidación –2 .
Los halógenos (grupo 17, o grupo del F) tienen 7 electrones de valencia, tenderán a ganar 1 poseyendo siempre con el H y
con los metales número de oxidación –1 .
Dentro de los metales de transición debemos saber que la Ag tiene número de oxidación +1 , el Zn y Cd tienen número de
oxidación +2 , y el Sc , Y y La tienen número de oxidación +3 .
Los grupos 14 al 17 presentan varios números de oxidación cuando formen oxácidos (Ver: Oxácidos) .
Un par de ejemplos simples:
Cloruro de sodio
Na 0 + Cl 0 2 → Na +1 Cl −1
Los gases de un solo tipo de elemento, en este caso el cloro, están presentes en forma diatómica.
El sodio (Na) se combina con el cloro (Cl) , produciendo cloruro sódico . El número de oxidación de ambos elementos sin
combinar es 0 (cero), ya que están equilibrados eléctricamente. El número de oxidación del sodio combinado es +1, ya que
cede un electrón. El número de oxidación del cloro combinado es −1, ya que acepta el electrón cedido por el sodio.
Oxido de aluminio
Al 0 + O 0 2 → Al +3 2 O −2 3
El oxígeno (O) está presente en forma diatómica (gas).
El aluminio (Al) se combina con el oxígeno (O), produciendo óxido de aluminio . El número de oxidación de ambos
elementos sin combinar es 0 (cero), ya que están equilibrados eléctricamente. El número de oxidación del aluminio
combinado es siempre +3, ya que cede tres electrones. El número de oxidación del oxígeno combinado es −2, ya que
acepta hasta 2 electrones.
Las reglas prácticas para conocer o descubrir el número de oxidación pueden sintetizarse de la siguiente manera:

 En las sustancias simples, es decir las formadas por un solo elemento, el número de oxidación es 0 .
Por ejemplo: Au 0 , Cl 2 0 , S 8 0 .

 El oxígeno, cuando está combinado, actúa frecuentemente con –2 , a excepción de los peróxidos, en cuyo caso
actúa con número de oxidación –1 .

 El hidrógeno actúa con número de oxidación +1 cuando está combinado con un no metal, por ser éstos más
electronegativos; y con – 1 cuando está combinado con un metal, por ser éstos más electropositivos.

 En los iones monoatómicos, el número de oxidación coincide con la carga del ión.

Por ejemplo:
Na 1+ (Carga del ión) Na +1 (Número de oxidación)
S 2− (Carga del ión) S -2 (Número de oxidación)
Al 3+ (Carga del ión) Al +3 (Número de oxidación)
Recordemos que los elementos de los grupos IA (1) y IIA (2) forman iones de carga +1 y +2, respectivamente, y los del VIIA
(17) y VIA(16), de carga –1 y –2 cuando son monoatómicos. (Ver: Tabla periódica de los elementos )
Recordemos también que la suma algebraica de los números de oxidación de los átomos en un ion debe ser igual a la
carga del ion.
Y que la suma algebraica de los números de oxidación de los átomos en un compuesto debe ser igual a (0).
Otros ejemplos:
a) Para calcular el número de oxidación del S en el Na 2 SO 3 , no podemos recurrir a la tabla periódica, ya que da varios
números para este elemento. Nos basaremos en los elementos cuyos números de oxidación conocemos, que son el Na: +1
y el O: –2
Na +1 2 S x O –2 3
Nota: es frecuente colocar los números de oxidación individuales en la parte superior de cada elemento, pero si no se
ponen debemos deducirlos (conocerlos).
La suma de los números de oxidación en este caso debe ser igual a 0, ya que la especie en cuestión no posee carga
residual (no es un ion):
(+1) • 2 + X + (–2) • 3 = 0
2+X-6=0
X= +4
Na +1 2 S +4 O –2 3
En este caso, como hay un solo átomo de S, la totalidad de la carga le corresponde a él.
b) Para calcular el número de oxidación del Cr en el ion Cr 2 O 7 = (es lo mismo que (Cr 2 O 7 ) 2− ) nos basaremos en el O con
número de oxidación –2
(Cr x 2 O –2 7 ) 2−
2 • X + (–2) • 7 = –2 (Suma igual a la carga del ión) resolviendo, encontramos que X = + 6

(Cr +6 2 O –2 7 ) 2−

Óxido-reducción (Ecuaciones redox)


Definición
Una reacción de óxido-reducción se caracteriza porque hay una transferencia de electrones , en donde una sustancia
gana electrones y otra sustancia pierde electrones:
• la sustancia que gana electrones disminuye su número de oxidación . Este proceso se llama Reducción .
• la sustancia que pierde electrones aumenta su número de oxidación. Este proceso se llama Oxidación.
Por lo tanto, la Reducción es ganancia de electrones y la Oxidación es una pérdida de electrones.
(Ver: PSU: Química; Pregunta 08_2005 (Química2)
Número de oxidación
Corresponde a la carga del elemento químico; es decir, corresponde a un valor arbitrario que se le ha asignado a cada
elemento químico, el cual indica la cantidad de electrones que podría ganar, perder o compartir cuando se forma un
compuesto.
(Ver: PSU: Química, Pregunta 02_2005 )
Para calcular el número de oxidación se deben tener en cuenta las siguientes reglas:
Regla Nº 1 : El número de oxidación de cualquier átomo en estado libre o fundamental; es decir, no combinado, es cero .
Ejemplos: Pt , Cu, Au, Fe
Regla Nº 2: El número de oxidación del hidrógeno es +l , excepto en el caso de los hidruros que es –1 .
+
1: cuando el hidrógeno se combina con un no-metal (ácido).
Ejemplos: HCl; ácido clorhídrico
número de oxidación del hidrógeno: + 1
número de oxidación del cloro: – 1
HI; ácido yodhídrico
número de oxidación del hidrógeno: + 1
número de oxidación del cloro: – 1

1: cuando el hidrógeno se combina con un metal (hidruros)
Ejemplos : NaH; hidruro de sodio
número de oxidación del hidrógeno: - 1
número de oxidación del sodio: + 1
LiH; hidruro de litio
número de oxidación del hidrógeno: - 1
número de oxidación del litio: + 1
Regla Nº 3: El número de oxidación del oxígeno es -2 , excepto en los peróxido donde es -1 .
Ejemplos: CaO; óxido de calcio
número de oxidación del oxígeno: - 2
número de oxidación del calcio: + 2
H 2 O 2 ; peróxido de hidrógeno o agua oxigenada
número de oxidación del oxígeno: - 1
número de oxidación del hidrógeno: + 1
Regla Nº 4: Los metales tienen un número de oxidación + (positivo) e igual a su valencia .
Ejemplos : Ca (calcio): valencia = 2
número de oxidación: + 2
Li (litio): valencia = 1
número de oxidación: + 1
Regla Nº 5: Los no-metales tienen número de oxidación – (negativo) e igual a su valencia .
Ejemplos: Cl (cloro): valencia = 1
número de oxidación: – 1
I (yodo): valencia = 1
número de oxidación: –1
Regla Nº 6: En compuestos, el número de oxidación del Flúor ( F) es siempre –1 .
Ejemplo. NaF: fluoruro de sodio
número de oxidación del flúor: – 1
número de oxidación del sodio: + 1
Regla Nº 7: En las moléculas neutras , la suma de los números de oxidación de cada uno de los átomos que la forman es
igual a 0.
Ejemplos: Cu 2 O: óxido cuproso
número de oxidación del cobre: + 1; como hay dos átomos de cobre, se multiplica el número de oxidación por el número
de átomos de la molécula: 2 • + 1= + 2.
número de oxidación del oxígeno: – 2
+
2+–2= 0
H 2 SO 4 : ácido sulfúrico
número de oxidación del hidrógeno: + 1; hay 2 átomos = 2 · + 1 = + 2
número de oxidación del azufre: + 6; hay 1 átomo = 1 · + 6 = + 6
número de oxidación del oxígeno: – 2, hay 4 átomos = 4 · – 2 = – 8
+
2 + +6 + – 8 = 0
Regla Nº 8: En un ión la suma de los números de oxidación de sus átomos debe ser igual a la carga del ión.
Ejemplo: PO 4 –3 : fosfato
número de oxidación del fósforo: + 5; hay 1 átomo = 1 • + 5 = + 5
número de oxidación del oxígeno: –2; hay 4 átomos = 4 • – 2 = – 8
La molécula tiene una carga de – 3, por lo tanto, al sumar los números de oxidación del fósforo y del oxígeno, el resultado
debe ser igual a – 3.
+
5+–8=–3
–3=–3

Concepto de oxidación- reducción:

Cuando se introduce una lámina de zinc (Zn) en una disolución concentrada de cobre II (Cu ; valencia = 2), transcurridos
unos segundos, se observa que la lámina se recubre de una capa de cobre metálico.
La ecuación química que representa este proceso es:
Zn + CuSO 4 —> Cu + ZnSO 4
El sulfato de cobre (II), CuSO 4, y el sulfato de zinc, ZnSO 4 , son compuestos que, fundidos o disueltos en agua, se disocian
en iones, según la siguiente ecuación iónica:
Zn 0 + Cu + 2 + SO 4 – 2 —> Cu 0 + Zn + 2 + SO 4 – 2
En esta ecuación puede apreciarse que el ión sulfato (SO -2 ) aparece en ambos lados de la ecuación, por lo tanto, la
ecuación puede escribirse de manera más sencilla :
Cu + 2 + Zn 0 —> Cu 0 + Zn + 2
La ecuación química nos indica que durante el proceso el átomo de zinc, que era eléctricamente neutro, se ha
transformado en el ión Zn +2 . Para esto, tuvo que ceder 2 electrones; en cambio, el ión Cu +2 aceptó los 2 electrones del
zinc, que lo convirtieron en un átomo de cobre, eléctricamente neutro.
De acuerdo a este hecho experimental, se puede concluir que:
• la sustancia que pierde electrones hace que la otra sustancia gane electrones; es decir, la sustancia que se oxida hace
que la otra sustancia se reduzca . Por esto se dice que la sustancia que se oxida es el Agente Reductor, y la sustancia que
se reduce es el Agente Oxidante.
• como los electrones son cargas negativas, cuando una sustancia gana electrones; es decir, se reduce, se vuelve más
negativa, por lo que disminuye su número de oxidación. Por el contrario, cuando una sustancia pierde electrones , se
vuelve más positiva, por lo que aumenta su número de oxidación.
Ejemplo: Zn 0 + Cu +2 —> Zn +2 + Cu +0
Esta es una reacción de óxido-reducción porque hay una transferencia de electrones, pues los números de oxidación del
Zn y Cu, al comienzo de la reacción, no son los mismos al final de la reacción.
El Zn cambia su número de oxidación de 0 a +2; esto significa un aumento del número de oxidación, por lo tanto, hay una
pérdida de electrones (2 electrones); el Fe es agente reductor.
El Cu cambia su número de oxidación de +2 a 0; esto significa una disminución del número de oxidación, por lo tanto, hay
una ganancia de electrones (2 electrones); el Cu es agente oxidante.

Esquema de una pila alcalina.

Esta reacción química entre el zinc y el sulfato de cobre se utiliza para obtener corriente eléctrica . Para ello es necesario
diseñar un dispositivo que permita que la reacción se desarrolle en dos partes físicamente separadas: una parte donde se
generan los electrones (por la oxidación del Zn), y otra, en la que se reciben (por la reducción del Cu +2 ). Si conectamos
ambas partes con un alambre, el movimiento de los electrones a través de él generará una corriente eléctrica.
Semi-reacciones de óxido-reducción:
De acuerdo a lo anterior, puede decirse que la reacción química descrita anteriormente involucra dos procesos, los cuales
pueden representarse mediante semi-reacciones, una semi -reacción de oxidación y una semi-reacción de
reducción. Como estos dos procesos ocurren simultáneamente, la suma de ambas semi-reacciones, da la reacción total.
Las ecuaciones que describen estos procesos son:

Semi-reacción de oxidación :
Zn —> Zn +2 + 2e –
Semi-reacción de reducción :
Cu +2 + 2e – —> Cu
Por lo tanto, en el proceso de oxidación un átomo o ión cede uno o más electrones; mientras que en el de reducción, el
átomo o ión capta uno o más electrones. Ambos procesos son complementarios y ocurren simultáneamente. De ahí el
nombre de reacciones redox.
En los procesos de óxido-reducción, la transferencia de electrones siempre ocurre desde un agente reductor a un agente
oxidante.

Átomo o ión que se:

Oxida Reduce

Cede electrones Acepta electrones


Aumenta su número de oxidación Disminuye su número de oxidación
Es un agente reductor Es un agente oxidante

Para escribir las semi-reacciones siempre se debe considerar lo siguiente:


1. se debe igualar cada semi-reacción en cuanto a átomos (balance de masa) y en cuanto a carga (balance de cargas)
2. al escribir las semi-reacciones y equilibrar las cargas, se deben agregar electrones a la derecha en la oxidación (hay
pérdida de electrones) y a la izquierda en la reducción (hay ganancia de electrones).
3. como en la ecuación total no aparecen electrones, se debe multiplicar cada semi-reacción, si fuese necesario, por un
número que permita igualar los electrones de la derecha con los electrones de la izquierda, a fin de que se simplifiquen.
4. Sumar las semi-reacciones y comprobar que los átomos y las cargas estén equilibradas a ambos lados de la ecuación.
Volviendo al ejemplo anterior:
Zn 0 + Cu +2 + SO 4 -2 —> Cu 0 + Zn +2 + SO 4 –2
Como los átomos que participan en la reacción son sólo el Zn y el Cu, se anota la ecuación química en forma más simple:
Zn 0 + Cu +2 —> Zn +2 + Cu +0
Se plantean las semi-reacciones:
Semi-reacción de oxidación:
Zn —> Zn +2 + 2e –
Semi-reacción de reducción:
Cu +2 + 2e – —> Cu
Sumando ambas semi-reacciones se tiene:
Zn —> Zn +2 + 2e –
+ Cu +2 + 2e – —> Cu
--------------------------------------------------------------------------
Zn 0 + Cu +2 —> Zn +2 + Cu +0
(Ver: PSU: Química, Pregunta 10_2005 )
Aplicaciones de la oxidación-reducción
Las reacciones de oxidación-reducción son muy frecuentes en la industria ya que constituyen el principio de
funcionamiento de las pilas eléctricas , tales como las pilas alcalinas y se emplean para refinar electroquímicamente
determinados metales, tales como el cobre en nuestro país. También se utilizan para la protección de los metales contra la
corrosión. En la naturaleza, intervienen en larespiración celular y en la fotosíntesis .

Concepto de Oxidación
Expresado de una manera muy general, diremos que la oxidación ocurre cuando un átomo inestable pierde un electrón, lo
que permite que el átomo forme un compuesto nuevo con otro elemento.
Básicamente existen dos tipos de reacciones químicas:
1) Aquellas en las cuales reaccionan iones o moléculas sin cambio aparente de la estructura electrónica de las partículas, y
2) Reacciones en las cuales los iones o átomos experimentan cambios de estructura electrónica.
En el segundo tipo de reacción puede haber transferencia real de electrones de una partícula a otra o la forma en que se
compartan los electrones puede modificarse. Este último tipo de reacción que involucra cambios electrónicos se
llama reacción de oxidación-reducción .

Oxidación
Originalmente, el término oxidación se asignó a la combinación del oxígeno con otros elementos. Existían muchos
ejemplos conocidos de esto. El hierro se enmohece y el carbón arde. En el enmohecimiento, el oxígeno se combina
lentamente con el hierro formando óxido ferroso (Fe 2 O 3 ); en la combustión, se combina rápidamente con el carbón para
formar CO 2 . La observación de estas reacciones originó los términos oxidación “lenta” y "rápida” .
Sin embargo, los químicos observaron que otros elementos no metálicos se combinaban con las sustancias de la misma
manera que lo hacia el oxígeno con dichas sustancias. El oxígeno, el antimonio y el sodio arden en atmósfera de cloro y el
hierro en presencia de flúor. Como estas reacciones eran semejantes, los químicos dieron una definición de oxidación
más general. Los reactantes O 2 o Cl 2 , eliminaban electrones de cada elemento. Por tanto, la o xidación se definió como el
proceso mediante el cual hay pérdida aparente de electrones de un átomo o ión .(Ver: PSU: Química, Pregunta
02_2005 )

Reducción
Originalmente una reacción de reducción se limitaba al tipo de reacción en la cual los óxidos se “reducían" (se
desprendían) de sus óxidos. El óxido de hierro se "reducía” a hierro con monóxido de carbono. El óxido de cobre (II) podía
“reducirse” a cobre con hidrógeno. En estas reacciones se eliminaba oxígeno y se obtenía el elemento libre. El elemento
libre puede obtenerse de otras maneras. La inmersión de un clavo de hierro en una solución de sulfato de cobre (II) causa
una reacción en la cual se produce cobre libre.
La semejanza entre las reacciones de oxidación-reducción condujo a los químicos a formular una definición más general de
reducción: La reducción es un proceso mediante el cual los átomos o iones adquieren electrones.

Agentes oxidantes y reductores


En una reacción de oxidación-reducción hay transferencia de electrones. Todos los electrones intercambiados durante una
reacción deben tomarse en cuenta. Por tanto, parece razonable que la oxidación y la reducción ocurran simultáneamente
en una reacción: se pierden y se ganan electrones al mismo tiempo. De otro modo, los electrones (electricidad) serían
almacenados en los productos. No existe evidencia de tal almacenaje de electrones.
La sustancia que en la reacción suministra electrones es el agente reductor. El agente reductor contiene los átomos que se
oxidan (los átomos que pierden electrones). La sustancia que en la reacción gana electrones es el agente oxidante. Este
contiene los átomos que se reducen (los átomos que ganan electrones).
Si una sustancia suministra fácilmente electrones se dice que es un agente reductor fuerte. Sin embargo, su forma
oxidada normalmente es un agente oxidante débil. Si una sustancia gana electrones con facilidad, se dice que es
un agente oxidante fuerte. Su forma reducida es un agente reductor débil.
Número de oxidación
¿Cómo puede determinarse que se ha efectuado una reacción de oxidación-reducción? Esto se logra detectando cualquier
desplazamiento electrónico ocurrido durante la reacción. Para indicar los cambios electrónicos, se utiliza el número de
oxidación de los átomos de la reacción. El número de oxidación es la carga aparente de un átomo cuando se asigna un
cierto número de electrones a determinados átomos o iones. El cambio de los números de oxidación durante una reacción
indica la realización de una reacción de oxidación-reducción.
Por ejemplo, supóngase que el hierro, como reactante tiene un número de oxidación de 2+. Si el hierro aparece como
producto con un número de oxidación diferente de 2+ por ejemplo, 3+ ó 0, se ha efectuado una reacción redox (óxido-
reducción).

El número de oxidación se define como: El número


de electrones que un elemento puede ganar o
perder cuando se combina con los átomos de otro
elemento.

Este número de oxidación depende en principio de la posición que tienen los elementos en la tabla periódica y del hecho
que presentan los elementos de adquirir la estructura atómica de los gases nobles, es decir el tener ocho electrones en su
último nivel de energía
Una de las reglas empíricas fundamentales de la química es que un átomo que contiene ocho electrones en su nivel más
externo es particularmente estable. Esta regla se llama regla del octeto.Aunque el átomo de helio tiene únicamente dos
electrones en su nivel más externo, también es uno de los elementos excepcionalmente estables. Su nivel más externo
también es el primer nivel y sólo acomoda un par de electrones. Por tanto, su nivel más externo está completamente
lleno. De manera que se considerara que la regla del octeto incluye al helio.
Tipos de Oxidación
Por lo general, el término oxidación se aplica a procesos cuyas manifestaciones son lentas ( oxidación lenta ) y en donde la
energía que se produce (siempre energía química) no se percibe porque se disipa en el ambiente, por ejemplo, son
fenómenos de oxidación lenta: la respiración, la corrosión de los metales, la putrefacción de la madera , etcétera.
En las oxidaciones rápidas los efectos son inmediatos, claramente visibles, generan grandes cantidades de calor y en ellas,
debido a la elevación de la temperatura, se puede producir la llama; a este tipo de reacciones se les llama reacciones de
combustión .
Como vimos anteriormente, la oxidación es la pérdida de electrones experimentada por un elemento o un ión en
beneficio de otro que se comporta como agente oxidante. Toda pérdida de electrones de una sustancia va acompañada
por la ganancia de electrones de otro. A este último proceso se le conoce, como también ya dijimos, con el nombre
de reducción.
La oxidación es el proceso que origina y conduce a la corrosión , tendencia que tienen los metales (y en general todos los
materiales de la naturaleza) a recuperar su estado original (situación de mínima energía).
La mayoría de los metales, y el caso particular del hierro (acero), se encuentran en la naturaleza en forma de óxidos,
sulfuros y carbonatos: Sulfuro de hierro (piritas), Óxido de hierro (hematites roja / parda, magnetita), Carbonato de
hierro (siderita) a partir de los cuales pueden obtenerse mediante la aportación de grandes cantidades de energía. Los
metales así obtenidos se encuentran en una situación inestable por lo que progresivamente vuelven a su estado natural.
Lo mismo sucede con el Zinc , metal que no se encuentra en la naturaleza tal y como lo conocemos sino que se presenta
en forma de Sulfuro de zinc (blenda), Óxido de zinc (cincita), Carbonato de zinc ( Smithonita)
La diferencia entre el Hierro y el Zinc la encontramos en que cuando este último se oxida, debido al ataque de los agentes
atmosféricos, se recubre de una capa blanca muy estable e insoluble de sales de zinc que impide el progreso de la
corrosión mientras nada ni nadie la elimine. En cambio en el hierro, la oxidación se produce progresivamente hasta la total
destrucción del metal.
Para realizar el proceso de oxidación se pueden utilizar diferentes mecanismos o sistemas, entre ellos podemos
mencionar:
Oxidación química.
Reacción que tiene lugar, por ejemplo, en presencia del oxígeno disuelto del agua en un proceso a través del cual el
oxígeno es reducido y el compuesto orgánico es oxidado. (Utilizado para purificar aguas servidas)
Oxidación electroquímica
La oxidación electroquímica (depuración electroquímica) se produce mediante reacciones anódicas (indirectas y/o
directas) en las que el oxígeno es transferido desde el disolvente (agua) a los productos que deben oxidarse.
La característica principal del tratamiento es que utiliza la energía eléctrica como vector de descontaminación ambiental.
Oxidación biológica
Llamamos metabolismo al conjunto de reacciones de un organismo. Estas reacciones son producidas por la acción de los
microorganismos.
Fauna microbiana intestinal en la oxidación biológica de los alimentos
Los microorganismos son sistemas que necesitan una gran cantidad de energía para mantenerse ordenados. Esta energía
se obtiene de la oxidación de compuestos orgánicos reducidos. Los nutrientes proporcionan esos compuestos reducidos y,
en el curso de la oxidación, se libera energía (que se acumula en forma de moléculas almacenadoras de energía,
especialmente el ATP ) y se producen elementos estructurales que servirán para la construcción de nuevas células
(crecimiento y diferenciación).
Al proceso por el que se obtiene energía y elementos estructurales básicos a partir de nutrientes se le
denomina catabolismo y al que utiliza la energía obtenida en el catabolismo para sintetizar nuevos componentes celulares
se le denomina anabolismo . Es importante tener en cuenta que aunque se estudie de forma separada el anabolismo y
el catabolismo , ambos tipos de procesos ocurren simultáneamente de forma que conforme se van produciendo
elementos estructurales y energía en el catabolismo , esos elementos se usan para formar nuevos componentes celulares
en procesos anabólicos.
Un ejemplo de este tipo de oxidación es la Oxidación de los ácidos grasos ( metabolismo ).
También se utiliza la oxidación biológica en los procesos de purificación de aguas residuales.
La oxidación biológica consiste en suministrar oxígeno al agua residual en unos tanques cuyo volumen está previamente
calculado para mantener el agua durante un tiempo de cuando menos ocho horas, regulando el oxigeno disuelto entre 1 a
3 Mg/Lt.
Oxidación térmica
Método de oxidación que empleando hornos se aplica para incinerar de residuos, los que se transforman en materias
inertes (cenizas o escorias) y gases a través de una combustión controlada a temperaturas elevadas (900º C).
Lo que comúnmente llamamos basura, técnicamente se conoce como desechos sólidos y consiste básicamente de todo
material, producto de las actividades humanas, que se bota o elimina por carecer de valor o utilidad.
El compostaje es un proceso biológico controlado de descomposición aeróbica acelerada de los materiales orgánicos. Se
puede hacer una comparación entre la combustión (oxidación química) y el compostaje (oxidación biológica). En ambos
procesos el carbón presente se oxida (química o biológicamente respectivamente) y si la combustión es completa se
tienen como productos dióxido de carbono (CO2), agua (pO) y energía en forma de calor.
Es importante señalar que el oxígeno vital puede desplazarse más todavía por otros gases, tales como el dióxido de
carbono. Cuando esto sucede, el resultado es a menudo una atmósfera que puede ser peligrosa o fatal cuando se la
respira. Las deficiencias de oxígeno también pueden ser ocasionadas por moho, corrosión, fermentación u otros tipos de
oxidación que consumen oxígeno. El impacto de las deficiencias de oxígeno puede ser paulatino o repentino.
Oxidación catalítica
Existen unas sustancias, denominadas catalizadores , que tienen la propiedad de acelerar la reacción de oxidación de los
compuestos orgánicos volátiles a temperaturas relativamente bajas, generalmente entre 250 y 350º C, sin experimentar
un cambio químico.

Respiración: un proceso de oxidación.

Los gases a depurar deben ser calentados hasta alcanzar la temperatura de funcionamiento del catalizador. Este calor
necesario es suministrado por un quemador a gas o un calentador eléctrico. Para reducir el consumo energético, puede
instalarse un precalentador que aproveche el calor de los gases ya depurados.
Oxidación y respiración
La oxidación es el efecto primario de la respiración en el cuerpo, es un proceso natural que implica que el oxígeno se
combine con otra sustancia. Como resultado de esta oxidación, la composición química de ambas sustancias cambia.
Otro ejemplo lo tenemos con la respiración celular , que no es más que la oxidación de glucosa (C 6 H 12 O 6 ) a CO 2 y la
reducción de oxígeno a agua .
La ecuación sumaria para la respiración de la célula es:
C 6 H 12 O 6 + 6O 2 → 6CO 2 + 6H 2 O
Ya vimos que, técnicamente hablando, la oxidación incluye cualquier reacción en la cual se transfieren electrones, la
mayoría de las oxidaciones producen grandes cantidades de energía. La oxidación es como una combustión dentro del
cuerpo, cuando el oxígeno convierte los azúcares en energía.
Nuestro cuerpo también usa la oxidación como defensa contra bacterias, virus, fermentaciones, etcétera, porque las
moléculas oxidantes atacan a las células patógenas y éstas son expulsadas de cuerpo a través del proceso normal de
eliminación.

Concepto de Mol

En el laboratorio o en la industria no se trabaja con símbolos o números, se trabaja con sustancias concretas, que se
palpan. Para facilitar las tareas de investigación sobre algún elemento químico los científicos utilizan siempre gran
cantidad de átomos.

Los átomos no se pueden contar, pero


igual podemos saber cuántos hay.
Como la cantidad de átomos que necesitan es realmente impresionante, para simplificar sus cálculos los químicos utilizan
una unidad de cantidad de materia llamada mol (del latín moles que significa montón).
Esta nueva unidad que estamos definiendo hace que para las diferentes sustancias un mol de una no tenga la misma masa
en gramos o kilogramos que para otra sustancia.
Haciendo un pequeño símil no puede ser igual la masa de 100 "tornillos" que la masa de 100 "destornilladores", aunque
en ambos casos haya el mismo número de unidades.
¿Qué es el mol?
Un mol es la cantidad de materia que contiene 6,02 x 10 23 partículas elementales (ya sea átomos, moléculas, iones,
partículas subatómicas, etcétera). Por eso, cuando un químico utiliza el término mol , debe dejar en claro si es:
1 mol de átomos
1 mol de moléculas
1 mol de iones
1 mol de cualquier partícula elemental.

Un número con nombre propio

Este número tan impresionante:


602.000. 000.000. 000.000. 000.000
o sea: 602.000 trillones = 6,02 x 10 23
tiene nombre propio, se llama Número de Avogadro .
Ver: PSU: Química,
Pregunta 01_2005
Moles de
Pregunta 05_2005
algunos
Pregunta 06_2005 (Química2) . elementos.

Medir la masa de las sustancias


El problema para medir moles reside en su propio concepto: no se puede tomar un mol de una
sustancia sobre la base de contar sus partículas (ya sean átomos, moléculas o iones) debido a lo
grande que es el Número de Avogadro y al hecho de que es imposible tomar una de estas unidades. Por eso, en el
laboratorio, para realizar cálculos se necesita encontrar una relación entre el mol y otra magnitud más fácil de medir: la
masa .
De acuerdo con el Sistema Internacional de Medidas , el mol se define como la cantidad de sustancia que contiene tantas
entidades (átomos, moléculas, iones) como el número de átomos existentes en 0,012 kg de carbono-12 puro.

La cantidad de átomos que hay en 1 mol es tan grande que puede medirse su masa
en una balanza.

Mol de átomos
No podemos medir la masa de cada átomo individualmente, pero si podemos medir la masa de un grupo representativo
de átomos y compararla con una masa de otro número igual de un átomo distinto.
Ejemplo:
6,02 x 10 23 átomos = 1 mol de átomos
Entonces:
6,02 x 10 23 átomos de Cu = 1 mol de átomos de Cu
6,02 x 10 23 átomos de H = 1 mol de átomos de H
6,02 x 10 23 átomos de Fe = 1 mol de átomos de Fe
Sabemos que la masa atómica del Cu = 63,54, lo cual significa que la masa del átomo de Cu es 63,54 veces mayor que
la Unidad de masa atómica (uma) ,
1 mol de átomos de Cu = 63,54 g significa que la masa de 1 mol de átomos de Cu es 63,54 gramos.
Respecto al Fe, sabemos que la masa atómica del Fe = 55,847, esto significa que la masa del átomo de Fe es 55,847 veces
mayor que la uma,
1 mol de átomos de Fe = 55,847 g significa que la masa de 1 mol de átomos de Fe es 55,847 gramos.
Como vemos en los ejemplos anteriores, el cobre (Cu) y el fierro (Fe) a igual número de átomos (mol o número de
Avogadro) tienen distinta masa.
Mol de moléculas
No podemos medir la masa de cada molécula individualmente, pero si podemos medir la masa de un grupo representativo
de moléculas y compararla con una masa de otro número igual de una molécula distinta.
Ejemplo:
6,02 x 10 23 moléculas = 1 mol de moléculas
Entonces:
6,02 x 10 23 moléculas de NH3= 1 mol de moléculas de NH 3
6,02 x 10 23 moléculas de H 2 O= 1 mol de moléculas de H 2 O
6,02 x 10 23 moléculas de Al 2 O 3 = 1 mol de moléculas de Al 2 O 3
La masa molecular del H 2 O = 18 significa que la masa molecular relativa del H 2 O es 18 veces mayor que la uma,
1 mol de moléculas de H 2 O = 18 g significa que la masa de 1 mol de moléculas de H 2 O es 18 gramos
La masa molecular del Al 2 O 3 = 102 significa que la masa molecular relativa del Al 2 O 3 es 102 veces mayor que la uma,
1 mol de moléculas de Al 2 O 3 = 102 g significa que la masa de 1 mol de moléculas de Al 2 O 3 es 102 gramos.
Ver: Masa atómica, masa molecular y unidad de masa atómica

Volumen atómico molar (Vam)


Se refiere al volumen ocupado por un mol de átomos. Dicho de otro modo, el volumen atómico molar corresponde a los
centímetros cúbicos ocupados por un mol de átomos:

1 mol de átomos en estado gaseoso ocupa un volumen (en condiciones normales) de 22,4 litros.

Ver: PSU: Química;


Pregunta 11_2006
Pregunta 13_2006
Las condiciones normales son presión a 1 atm (atmósfera) y temperatura a 0º C. Si estas condiciones cambian, el volumen
cambiará.
Ahora bien, para conocer cuántos moles hay de un átomo o molécula en una determinada cantidad de materia (masa,
en gramos) es necesario saber cuántos gramos hay de dicha materia y conocer su peso atómico o molecular.
Usando la siguiente igualdad:
Gramos del átomo o molécula
mol =
Peso atómico o Peso Molecular
que se lee mol es igual a gramos del átomo o molécula dividido por el peso atómico o peso molecular.

Ejemplo:
Tenemos 23 gr. de Na y el peso atómico del Na es 23 gr.
23 Gramos del átomo o molécula Na
mol =
23 Peso atómico o Peso Molecular Na
Entonces, el volumen atómico se calcula dividiendo la masa atómica (expresada en gr/mol) de un elemento por su
densidad (peso atómico). Por lo tanto, las unidades del volumen atómico son cc/mol (volumen/masa).
Otro ejemplo:
Tenemos 2,21 moles de una sustancia y sabemos que su peso molecular es 40 gr.
¿Cuántos grs. Tenemos de la sustancia?
De la igualdad sabemos:
X Gramos del átomo o molécula
2,21 moles =
40 Peso atómico o Peso Molecular
Despejando X (los gramos) obtenemos 2,21 moles x 40 gr. = 88,4 gr.

Otro ejemplo:
Tenemos 100 gr. de agua y sabemos que el peso molecular (PM) del agua es 18 gr. ¿Cuántos moles de agua tenemos?
100 Gramos del átomo o molécula agua
mol =
18 Peso atómico o Peso Molecular agua
Despejamos la ecuación: 100/18 nos da 5,55 cc/mol (moles)
Otros ejemplos:

 Calcule el volumen atómico molar si la densidad es 0,36 gr/cc y la masa es 50,31 gr/mol.

 Determine el volumen atómico molar si la masa atómica es 7,26 gr/mol y la densidad es 10,3 gr/cc.

Mol curiosidades
La palabra "mol" se deriva de la palabra latina "moles" que significa "una masa". "Molécula" es el diminutivo de dicha
palabra y significa "una masa pequeña".
Estamos acostumbrados a utilizar la notación científica cuando operamos con números muy grandes. De esta manera, por
ejemplo, utilizamos 10 6 en vez de 1.000.000, y manejamos siempre potencias de diez.
El número de partículas que existen en un mol (llamado número de Avogadro , como ahora sabemos) de cualquier
sustancia, también lo expresamos lógicamente en notación científica como: 6,023 x 10 23
Sin embargo, esta manera de expresarlo, aún siendo correcta desde el punto de vista matemático, nos impide muchas
veces darnos cuenta de la inmensidad de las cantidades que manejamos y su significado; a título de ejemplo, veamos
algunas casos:
El número de Avogadro es tan enorme que si echáramos un vaso de agua en cualquier parte de un océano y supusiésemos
que al cabo de unos años el agua de todos ellos se ha removido suficientemente, en cualquier sitio del mundo que
tomásemos otro vaso de agua éste contendría 1.000 partículas del agua original.
Las cataratas del Niágara vierten algo más de 6.500 m 3 de agua por segundo. No obstante, en una gota de agua hay más
moléculas que gotas de agua caen en 400 años en las cataratas del Niágara.
También se podría considerar, a modo de ejemplo de este enorme número, que el aire que estamos ahora mismo
respirando contiene 12 moléculas de las que espiró Julio Cesar cuando, al morir, exclamó: "Bruto, tú también, hijo mío".
Toda la Tierra dividida en pequeñas bolas de unos 15 cm de diámetro daría el número de Avogadro .
Supongamos una lámpara eléctrica, de poco más de 200 cc, totalmente vacía y que tiene un orificio a través del cual
penetran en ella 1 millón de moléculas de aire por segundo. Al cabo de unos 200 millones de años estaría a la presión
atmosférica.

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