¿Cómo influye el reglamento técnico para redes internas de

telecomunicaciones tanto para los proveedores como para los

constructores y que repercusión puede traer esto?

Es necesario que se analice a profundidad lo relacionado con las competencias de los

diferentes entes que participan de manera directa e indirecta en todos los procesos de
regulación, vigilancia y control de este reglamento, de tal manera que se blinde su
expedición y aplicación frente a posibles conflictos que puedan surgir por parte de
entidades públicas de todos los niveles, constructores e inclusive los propios
administradores de propiedades horizontales que puedan ver afectados sus intereses
particulares.

En este sentido, el solo mensaje de construir “cableado estructurado” al interior de las

edificaciones puede tener un efecto económico importante, por lo tanto, no faltarán los
comentarios en relación con el incremento del costo para los constructores, y el impacto
que este puede tener en algunos sectores de la población. Esto sin tener en cuenta que
hoy los proveedores de redes y servicios tenemos como costumbre construir las redes
internas.

Respecto de la responsabilidad de los constructores y administradores para garantizar

redes internas de telecomunicaciones de buena calidad, es necesario precisar que
dichas redes deberán ser diseñadas, construidas y puestas en funcionamiento bajo los
parámetros técnicos previstos en el RITEL. La verificación de ello estará en cabeza de
los organismos acreditados para certificar la conformidad de las redes internas frente al
Reglamento Técnico.

Con el fin de garantizar redes internas de telecomunicaciones aptas y de calidad para

la prestación de los servicios, el RITEL hace énfasis en que los materiales con los que
se construya la red, sean de calidad, lo cual garantizará la adecuada prestación de los
servicios a los usuarios finales y se evitará conflictos futuros entre constructores,
usuarios y proveedores de servicios de telecomunicaciones.

Sin embargo, el documento RITEL establece exclusivamente la norma ISO/IEC 11801

como guía para el diseño y construcción de la infraestructura de cableado de
telecomunicaciones, desconociendo el uso de las normas utilizadas en los Estados
Unidos de América para este mismo propósito (ANSI/TIA). Adicionalmente, se estaría
limitando a los usuarios, integradores, proveedores de servicio, etc., a poder acceder a
tecnologías de última generación desarrolladas bajo esta normativa (ANSI), por ejemplo,
el cableado de comunicaciones para 40G en cobre, que en un futuro cercano estará
disponible. Específicamente, esta tecnología será normalizada por los entes
estadounidenses y presentada al público.