Professional Documents
Culture Documents
htm
Resumen
Este escrito es parte de los primeros resultados de un proyecto de investigación cuyo objetivo general es
conocer los procesos, representaciones sociales y grupos vulnerables al riesgo de contraer leishmaniasis
en el NO de la provincia de Misiones (Argentina). La finalidad del mismo es contribuir a planificar
estrategias de prevención y control basadas en la evidencia, para asegurar que la información científica
relevante sobre protección y tratamiento de la leishmaniasis circule, en el área de estudio, por redes
sociales pertinentes.
Este estudio, considerado complementario a los estudios epidemiológicos de morbilidad y de mortalidad,
se inscribe dentro del abordaje de la antropología médica, aplicando métodos cualitativos de investigación
en campo y recuperando las perspectivas de los actores sociales involucrados en el proceso de salud,
enfermedad y atención. El mismo contribuye a planificar medidas de prevención determinando cuáles son
las instituciones sociales que intervienen en los procesos de exposición al riesgo de los humanos
infectados, y haciendo más compleja la noción del sujeto enfermo o en riesgo, ya que incluye en la
comprensión de su capacidad de agencia, los roles sociales que desempeñan, al considerar variables como
el nivel de educación alcanzado, la condición étnica y de clase social en la estructuración de su identidad.
En el ámbito de la gestión de salud pública, la intención de este artículo es argumentar a favor de la
inclusión de la provincia de Misiones (junto con Catamarca, Formosa, Chaco, Santiago del Estero y
Corrientes) como zona donde la LTA es endémica, de modo que esta enfermedad sea reconocida por el
listado de enfermedades profesionales que reglamenta la Ley Nacional 24.557 y pueda como tal
promoverse su prevención y tratamiento.
Palabras claves
Leishmaniasis Tegumentaria Americana. Antropología Médica. Planificación de la prevención. Misiones-
Argentina.
Abstract
This paper describes first results of a research project about social representations and practices in a risk
group of Tegumentary Leishmaniasis (Argentina NE, Misiones province). Main objective of this field
research is to contribute for based on evidence prevention planning, trying to ensure disease scientific
information about prevention and treatment flow by proper social nets in the area under studying.
This kind of research complements epidemiological studies of morbility and mortality and it has a
medical anthropology approach: it uses mainly qualitative research methods and it is centred in actor´s
perspective about health, disease and health care. Among most important contributions of this kind of
study, there is the possibility to reveal social institutions involved in disease prevention, their
responsabilities and practices related with risk exposure, making by means of this more complex sick
person perception, providing tools for role, class and ethnic condition comprehension.
At health care sphere, this paper argues in favor of the inclusion of Misiones province as endemical LTA
area (as well as provinces of Catamarca, Formosa, Chaco, Santiago del Estero and Corrientes) in the
occupational diseases list associated with Argentina Federal Law Nº 24.557.
Key world
Tegumentary Leishmaniasis. Medical anthropology. Prevention planning. Misiones-Argentina.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 2
Introducción
1
Leishmaniasis Tegumentaria Americana o LTA.
2
Al momento de creación del Programa Nacional de Leishmaniasis, la Secretaría de Programas de Salud
de la Nación reconoció como áreas endémicas en la Argentina a las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán,
Catamarca, Formosa, Chaco, Santiago del Estero, Misiones y Corrientes (Res. 36/99). Sin embargo el
Decreto 658/96 que establece las enfermedades profesionales que deben cubrir las Aseguradoras de
Riesgo de Trabajo, determina los límites de la zona endémica son las provincias de Tucumán, Salta y
Jujuy.
3
Entrevistas en profundidad no directivas con pacientes e integrantes de los grupos en riesgo e
instituciones relacionadas. Observación de conductas y prácticas. Técnicas que componen el “método
etnográfico”.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 3
250
200
150
100
50
0
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
1968/77
1978/87
1988/97
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 4
1400
1200
1000
800
600
400
200
0
80
82
84
86
88
90
92
94
96
98
00
02
04
19
19
19
19
19
19
19
19
19
19
20
20
20
Fuente: Elaboración propia en base a información SINAVE 2005.
4
“El ciclo de vida de estos dípteros pequeños tiene 4 etapas o estadios: huevo, larva, pupa y adulto, puede
ser completado en 45-60 días aproximadamente. Algunas especies prolongan dicho período durante
condiciones ambientales adversas como el invierno (diapausa). Los huevos son colocados aislados o en
pequeños grupos adheridos al sustrato, en tierra húmeda o materia orgánica no anegada, a la sombra. El
desarrollo del embrión dura 4-20 días (algunas especies pueden tener una latencia de hasta 160 días). Las
larvas terrestres sufren tres mudas (larva I a larva IV) moviéndose, pero sin abandonar el sustrato, y luego
de 20 a 40 días se fijan al mismo para mudar a pupa. La pupa se mantiene fijada al sustrato e inmóvil si
no es molestada, transformándose en adultos en unos 7 días. Los adultos viven 20-30 días en laboratorio.
Los genitales del macho rotan 180º tras la muda. La hembra toma sangre a los 1-4 días de vida adulta, y a
los 3-10 días de alimentarse coloca unos 40 huevos (hasta 70-110)” (Salomón, 2005: 67-68).
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 5
Los huéspedes más comunes son los roedores salvajes, edentados (perezosos),
marsupiales y carnívoros (Canidae). Sin embargo, en Argentina aún se desconocen los
reservorios, siendo el hombre, cánidos y equinos, según las evidencias hasta el
momento, huéspedes accidentales. Aún no se ha demostrado que el hombre ni el perro
puedan transmitir el parásito al insecto.
Las lesiones cutáneas tienen lugar a partir de la picadura producida por la hembra adulta
de un insecto flebótomo, en América del género Lutzomyia.. Los parásitos infectantes -
amastigotes, que se desarrollan y multiplican en el intestino del insecto- ingresan por el
sitio de la picadura e inician el proceso de infección.
La picadura en estado de vigilia suele ser percibida dejando una mancha rosada, de
bordes netos, sin induración; y en el caso de una picadura infectante, la pápula suele
aparecer en el sitio de la picadura a partir de los 15 días. En su inicio aparece una pápula
que se agranda y transforma en una úlcera indolora, esta puede ser una lesión única o
múltiple; puede cicatrizar sin tratamiento en el término de semanas o meses, o persistir
un año o más. Las formas cutáneas pueden presentarse como leishmaniasis cutánea
localizada, o difusa -esta última, no se ha registrado en la Argentina hasta hoy-. En las
formas localizadas la lesión se caracteriza como una úlcera de bordes elevados, en
general indolora, de fondo granuloso que puede o no tener exudado. La leishmaniasis
mucocutánea, generalmente concomitante, por contigüidad cutánea o secundaria por
metástasis de lesiones cutáneas, surge meses o años después de las lesiones de piel. Es
la manifestación más grave porque produce daños en los tejidos que desfiguran y
mutilan la cara. Afecta principalmente las cavidades nasales, luego la faringe, laringe y
la cavidad bucal. Los pacientes no tratados usualmente fallecen por sobreinfección de
vías respiratorias.
Este último tipo de leishmaniasis (la visceral) se caracteriza por fiebre de larga
duración, que tiene comienzo agudo frecuente en sujetos no residentes en áreas
endémicas, o progresivo. Sin tratamiento, este cuadro lleva a la muerte en 1 o 2 años
luego de la aparición de los síntomas.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 6
Algunas de las principales medidas preventivas a tomar son: cubrirse piernas y brazos
antes del atardecer en sitios de riesgo, o donde hayan aparecido casos (estaciones de
caza, pesca, etc.), ya que la hembra, por sus características, al picar no puede atravesar
la ropa; impregnar la ropa con repelentes; utilizar mosquitero de malla cerrada en
aberturas del domicilio, letrinas y camas, también impregnados con insecticida
(teniendo en cuenta las instrucciones técnicas de los mismos); alejar del domicilio los
lugares de cría de animales y los desechos. Todas estas precauciones pueden
constituirse en medidas altamente efectivas.
Se han desarrollado algunos criterios que pueden ayudar a evaluar si una lesión
sospechosa es debida a LTA o a otra causa. Estos criterios pueden ser utilizados para
detección temprana y derivación a centros asistenciales por personal periférico
(enfermeras en postas sanitarias, agentes APS, ONGs, maestros, etc) o de orientación
diagnóstica.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 7
Este Programa Nacional, consensuado y llevado adelante por quienes tienen más
experiencia en el tema, permite una mayor eficiencia en el uso de los recursos
disponibles al: i) contar con una estructura preparada para un incremento previsible en
la casuística; ii) unificar y estandarizar las normas; iii) determinar procedimientos ante
brotes epidémicos; iv) capacitar recursos humanos locales; v) contar con diagnósticos,
tratamientos y estadísticas confiables; vi) instrumentar vigilancia entomológica continua
en puntos críticos; vii) realizar una transferencia rápida de estrategias e instrumentos de
control, una vez validados experimentalmente.
En este esquema el Sistema Asistencial Local ocupa un lugar muy importante, ya que
tiene a su cargo la vigilancia continua; la detección temprana de posibles infectados y su
derivación; el diagnóstico clínico y epidemiológico, con control de calidad y fichas
estandarizadas; así como también el diagnóstico de laboratorio (examen directo). El
tratamiento también está a cargo de este Sistema Local con el apoyo de la Atención
Primaria. La droga terapéutica es suministrada por la Coordinación Nacional de Control
de Vectores (CNCV -Ministerio de Salud de la Nación-) por intermedio de
responsables provinciales, para su uso según las normas estandarizadas, para la
terapéutica específica de los casos de leishmaniasis denunciados.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 8
Para ello se estableció como lugar de estudio un área que comprende los Municipios de
Colonia Wanda y Puerto Iguazú, en el Departamento Iguazú, Pcia. de Misiones
(Argentina). La selección de estos municipios fue intencional, realizada en base a
hipótesis interdisciplinarias, producto de trabajos de campo anteriores (Salomón, Sosa
Stani, Monzani y Scuder, 2001; Mastrangelo, 2006a y b), que permitieron establecer
que los grupos sociales en riesgo de contraer LTA en el área de estudio son tres:
visitantes ocasionales a áreas reservorio del flebótomo, trabajadores forestales que
transitan en fajas ecológicas y ocupantes recientes de tierras fiscales o privadas con
reservorios del flebótomo vector.
5
Este primer reporte de investigación se basa en los resultados de campo del estudio del grupo en riesgo
trabajadores forestales.
6
En Misiones, la categoría “ocupante” u “ocupante de tierras privadas” describe un tipo de la sociología
rural típico de las áreas de expansión de la frontera agraria (Schiavoni 1995ª).
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 9
público, hecho que facilita los contactos con los informantes en campo, su interacción
cara a cara, el acceso a servicios urbanos y administrativos del sistema de salud, Obra
Social del Personal Rural y Estibadores -OSPRERA-, clínicas y puestos de salud y del
proceso de trabajo forestal (empresas de servicios forestales: fumigación, plantación,
desmalezamiento, raleo, tala rasa, transporte) haciendo factible, por tanto, la aplicación
de técnicas cualitativas de trabajo de campo. Por todo esto se seleccionó Wanda para
llevar adelante esta investigación.
En el caso del grupo en riesgo “ocupantes” se seleccionó a “las 2000 Has.” de Puerto
Iguazú. “Las 2000 Has.” es un predio ubicado al S de la ciudad de Puerto Iguazú. Se
trata de 2000 Has. de selva paranaense remanente en calidad de reserva fiscal municipal
(allí proyectaba realizarse la expansión urbana de la ciudad) que fueron ocupadas
espontáneamente en el año 2003. Se estima que la ocupación originaria la realizaron
aproximadamente 1000 familias de bajos ingresos demandantes de lugar de residencia y
tierras para uso productivo. En los inicios de la ocupación las familias estuvieron
nucleadas en varias organizaciones territoriales, consolidándose progresivamente la
hegemonía de una única organización.
La proximidad al ejido urbano de Puerto Iguazú da accesibilidad a “las 2000 Has.” por
transporte urbano, lo que facilita el acceso a enfermos, instituciones y redes sociales.
7
Entre 1948 y 1954, durante los gobiernos peronistas, se expropiaron 6000 Has. del latifundio Bemberg,
que fueron repartidas en parcelas de 20 y 25 Has. Sin embargo, progresivamente la propiedad volvió a
concentrarse en pocas manos, manteniéndose la cuadrícula urbana de la antigua sede administrativa y
residencial de la plantación, en la actualidad rodeada replantada con coníferas en casi todo su perímetro.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 10
Es decir, a penas un 25% de la superficie del territorio queda libre para planificar el
asentamiento de la población y actividades productivas alternativas a la reforestación
con coníferas, cuyo principal destino fuera de la transformación mecánica de la madera
en aserraderos, es la producción de pasta de celulosa y elaborados de la madera (sobre
todo tableros de mediana densidad, MDF).
El Mapa A ilustra el proceso de transformación del régimen de propiedad de la tierra en
el período 1979-2000.
8
Estimamos esta superficie en base a los siguientes datos: Parque Nacional Iguazú 67.620 Has.(APN);
Paisaje Protegido del Lago Urugua-í 8.000 Has.; Parque Provincial Esperanza 686 Has. (Registro
provincial de áreas protegidas naturales. Ministerio de Ecología, Pcia. De Misiones). Refugio natural
privado Aguaray-mí 3.050 Has. Total hasta aquí 79.356 Has. A este cálculo habría que sumarle una
pequeña porción del Parque Provincial Urugua-í de 84.000 Has. totales, que en mayoría están en el
Depto. de Gral. Belgrano no encontrando fuentes confiables para calcular la superficie en jurisdicción de
Iguazú.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 11
Los estudios realizados por Salomón et. al. (2004) en Misiones y otras regiones
endémicas de Argentina asocian los brotes epidémicos de LTA a los fenómenos
climáticos inusuales y los cambios ambientales relacionados con migraciones a áreas
boscosas y rurales, o desde ellas a zonas periurbanas boscosas. Las grandes epidemias
de LTA generalmente se relacionan con la zona o el trabajo de deforestación,
modificaciones en el medio o actividades relacionadas a zonas de vegetación arbórea
densa como pesca o exploración petrolera.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 12
Como ilustran los gráficos precedentes (1 y 2), el brote registrado en el Km. 1 en Puerto
Esperanza, Misiones, se corresponde con un alza en el registro del total de casos a nivel
nacional, mientras que el elevado registro en el total de casos en Misiones durante 2004
no tiene correspondencia a nivel nacional. Esta diferenciación en conjunto con otros
estudios realizados a nivel nacional, permitió a Salomón et al. establecer que ambos
picos se corresponden a dos modelos de Focos de Transmisión de la LTA (Salomón et
al 2006). La acumulación en tiempo y espacio de casos de LTA ocurre por una
conjunción de factores climáticos, biológicos y antropológicos por los que se hace más
frecuente la interacción vector-ser humano (Salomón et al 2006:215).
Entre los factores biológicos que intervinieron en la aparición de este modelo de brote,
se advierte que es parte del ciclo silvestre de transmisión de LTA, coincidiendo las
fechas de infección con la dinámica actual de los flebótomos vectores en la zona. En las
zonas de cortina o faja ecológica, han sido capturados Lutzomyia whitmani, una de las
especies incriminada como vector de Leishmania braziliensis en el S de Brasil, cuya
presencia ha sido asociada históricamente a la vegetación primaria. Se sospecha que la
dispersión o aumento en la densidad de esta especie podría estar asociada a cambios
climáticos como los acontecidos en la zona (sequía, incendios). Entre los factores
ambientales, si bien la deforestación progresiva del área debe ser considerada como el
marco general, los autores señalan que han sido justamente las sequías e incendios de la
primera mitad de 2004 los que determinaron la aparición de “puntos calientes” por
acumulación de vectores y reservorios en zonas bajas y umbrías (Salomón et al.
2006:216).
9
El modelo Foco 2, Esperanza 1998 fue exhaustivamente descrito en Salomón et al 2001 y en Salomón et
al. 2006:213-214.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 13
Las empresas en las que estas forestadoras transfieren trabajo, las llamadas “contratistas
de servicios forestales”, son generalmente de capitales locales y menor capital que las
forestadoras. Así, por ejemplo, encadenadas a la empresa de mayor envergadura y
mayor concentración vertical de la región (empresa A) trabajan 22 empresas de trabajo
forestal, cuyos operarios tienen acceso al monte reforestado (Resolución 62/2006
Comisión Nacional de Trabajo Agrario). Estas empresas realizan tareas por contrato y
pueden variar entre plantación, mantenimiento (que incluye fumigación y
desmalezamiento), raleo y tala rasa. Las contratistas de plantación y mantenimiento son
empresas trabajo-intensivas: son las que más trabajadores ocupan. Mientras que las
contratistas de raleo y tala rasa presentan una capitalización mayor, pues requieren del
uso de maquinarias.
10
Grupo Arauco, Alto Paraná S.A. APSA.
11
LIPSIA S.A.
12
www.vidasilvestre.org.ar/bosques/fsc.asp
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 14
En el caso del trabajo forestal ligado a las grandes empresas cuyas forestaciones son
ilustradas en el Mapa A los requerimientos de seguridad e higiene ocupacional hechos
al contratista de servicios forestales en el marco del contrato de trabajo que regula la
ley, son controlados por los/as “prevencionistas”. Los “prevencionistas” son técnicos
terciarios o universitarios formados en los requerimientos legales que resguardan la
salud de los trabajadores en el ámbito laboral, la prevención de emergencias
tecnológicas, los accidentes y/o enfermedades profesionales. El trabajo de estos
profesionales permite a los contratistas forestales cumplir con un requerimiento legal;
ya que tienen la obligación de visitar los equipos de trabajo dispersos en áreas rurales
con la finalidad de controlar el uso de elementos de seguridad (v gr. barbijo y trajes de
fumigación; casco; ropa de trabajo adecuada a la tarea), las condiciones de higiene del
ambiente laboral) y realizar charlas de inducción a la seguridad y persuasión de los
comportamientos riesgosos. Aunque no forma parte de su responsabilidad primaria,
algunas empresas forestadoras incluyen en la planilla de relevo de la seguridad e higiene
datos de productividad13. Los prevencionistas trabajan para el contratista forestal, pero
entregan copias de sus informes y algunas veces una planilla extra a la empresa
forestadora, a modo de control de sus propias actividades en terreno. La agenda de
capacitación de los prevencionistas es sugerida por los técnicos de la Aseguradora de
Riesgo de Trabajo -ART-, quienes seleccionan los temas en base a los tipos de
accidentes y/o enfermedades más frecuentes en un período de referencia.
Entre los trabajadores forestales con acceso al monte relacionados con este sector del
mercado de trabajo las prácticas de higiene y seguridad están presentes. Sin embargo, en
las entrevistas con los enfermos, hemos notado que esta presencia institucional es más
fuerte en los trabajadores que se desempeñan en zonas geográficas o realizando
procesos de trabajos más próximos a empresas como la A o la B y más lábil en las
empresas y prestadoras de servicios de menor volumen de capital.
Por otra parte, en relación con las prácticas de prevención de LTA el mayor control del
cumplimiento de las normas no implica un mayor cuidado, ya que las entrevistas a los
prevencionistas y trabajadores dejan ver dos zonas de conflicto: por un lado que ni
prevencionistas ni trabajadores cuentan con la información necesaria sobre la
enfermedad, su diagnóstico, etiología, tratamiento y formas de prevención y por otro, el
13
Es parte de la verdad que como parte del saber de la ingeniería en higiene y seguridad, por ejemplo
algunas formas de corte que implican menor aprovechamiento del raleo implican comportamiento laboral
riesgoso (inf. prevencionista M).
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 15
En relación con la falta de información entre los técnicos en higiene y seguridad sobre
la LTA, citamos algunos ejemplos:
En relación con la leishmaniasis empezamos a saber hará unos dos o tres años
atrás. Cuando empezaron a aparecer casos. Y al principio no se sabía que era,
porque parecía una enfermedad de la piel que no se sabía bien de qué se
trataba. Hasta que el Dr. M que es el que trabaja acá en el Hospital diagnosticó
un dengue, porque decían que era úlcera varicosa y un montón de otras
enfermedades relacionadas con la piel hasta que se diagnostica esta
enfermedad. Y así después fuimos sabiendo que se asociaba al desmonte.
Hicimos un relevamiento en todas las empresas en las que yo trabajaba que
tenían gente trabajando en el perilago (...) ese año no me acuerdo si tuvimos 61
o 68 casos que fueron tratados (...) pero para prevención no podemos
determinar exactamente la zona ni en que lugar está (...) Actuamos cuando la
enfermedad ya estaba. Información para la prevención no tenemos: no sabemos
en qué lugar, lo que hacíamos era recomendar condiciones de higiene, el tema
de instalarle campamentos, que tuvieran baños (Entrevista prevencionista H).
Este antagonismo no es de todos los peones forestales contra todos los prevencionistas,
sino que estructura un arquetipo de relación fundada en el prejuicio que organiza la
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 16
socialización en el trabajo, y cuyo fundamento son ejemplos como los citados. Sin
embargo, a fuerza de presencia en el ambiente laboral rural hay prevencionistas, sobre
todo una mujer, que tienen bien ganada la confianza y la influencia con los equipos de
trabajo y cuyos equipos de trabajo han logrado trabajo más seguro.
Estas dos zonas de conflicto implican dos tipos diferenciados de dificultades a la hora
de planificar la prevención y la atención. Por un lado, la falta de información respecto
de un problema sanitario re emergente genera morosidad en el diagnóstico y un
peregrinar de los enfermos entre médicos e instituciones hasta acceder al referente
adecuado. Esta situación, si bien ha mejorado entre 1998 y el presente, sobre todo
porque se ha organizado un centro de referencia de LTA en el Hospital SAMIC de
Puerto Esperanza, no ha redundado en la replicación de información confiable en
instituciones no sanitarias, aunque relacionadas con el trabajo forestal como la
asociación profesional de higiene y seguridad del trabajo, las ART, el seguro de salud
de los trabajadores -OSPRERA- o su sindicato -UATRE, Sindicato del Papel-.
Por ejemplo, en el caso de la delegación del seguro de salud, la Obra Social OSPRERA
en Wanda, que si bien en el ámbito nacional desarrolla campañas de prevención sobre
dengue y hantavirus, no contaban con información médica actualizada sobre el origen y
modo de transmisión de la LTA. El testimonio de los empleados de la obra social,
permitió reconocer a los casos como aquellos pacientes que van y vienen sin
diagnóstico, buscando los “bonitos de $1”14. Otro modo en el que los casos de LTA
fueron reconocidos en esta instancia fue por un paciente que siendo atendido por el
Programa Nacional de Leishamaniasis había recibido el tratamiento de medicación
inyectable y, según la interpretación propia del sector asistencial local “requería ayuda
económica porque no podía cubrir el costo de las jeringas descartables”15.
14
Comprobantes administrativos de la atención médica.
15
El PNL cubre el costo total del tratamiento incluídas las jeringas descartables completas (Salomón com.
Personal).
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 17
Esta forma de asalariar explica la reticencia de los trabajadores a “estar reposado”, pues
el justificativo médico sólo les permite, en el mejor de los casos, no perder el puesto de
trabajo, pero les implica perder dinero en la liquidación final de la mensualidad.
Por otra parte, en el trabajo en terreno, entre los casos de LTA de trabajadores forestales
infectados durante 2004, se han detectado dos casos que no han podido volver a trabajar
luego del tratamiento, presentando síntomas como alta presión, debilidad general y
pérdida del tono muscular. En diferentes circunstancias estos trabajadores quedaron
desocupados y el no haberse considerado como enfermedad ocupacional les impide
acceder a asistencia médica dentro del seguro de salud y el tener los beneficios de un
retiro anticipado.
Esta falta de información en los médicos que prestan servicios al seguro médico de los
trabajadores forestales pero que no están vinculados al PNL puede considerarse la
primera causa de demora en el diagnóstico, siendo que esta demora, según la
experiencia clínica, implica un aumento en el riesgo de recaídas cutáneas y en la
mucosa (PNL 2004).
El desconocimiento general sobre los ciclos del parásito y los hábitos del vector por
parte de los equipos profesionales que acompañan a los trabajadores (médicos y
prevencionistas de higiene y seguridad) impide identificar certeramente
comportamientos de riesgo y planificar acciones preventivas. A modo de resultado
parcial de nuestra investigación hemos sistematizado los siguientes comportamientos de
riesgo:
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 18
El desafío que encara la planificación de una prevención en este sector del grupo en
riesgo, trabajadores forestales, es la falta de información científica aunque las
instituciones llegan a los actores sociales en riesgo.
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 19
Conclusiones y propuestas
En lo normativo
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 20
En lo operativo
Se recomienda:
Agradecimientos
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 21
Bibliografía
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm 22
http://www.fmv-uba.org.ar/antropologia/index2.htm