You are on page 1of 22

Desarrollo temático

A partir de las lecturas, conocimiento y socialización de conceptos, el estudiante podrá identificar y


analizar diferentes escenarios de riesgo y podrá asemejar las debilidades y amenazas que puede
afrontar una empresa, organización o institución, y cómo se pueden prevenir dichos factores
mediante el conocimiento e implementación de un adecuado sistema de gestión de riesgos.

En primera instancia, se desarrollarán los conceptos y las generalidades de gestión y riesgo, así
como las definiciones de cada tipo de gestión de riesgo que se puede presentar en una organización,
empresa o institución; posteriormente, se desarrollaran en detalle cada uno de los objetivos de la
administración del riesgo y su pertinencia dentro de un área, organización, empresa o institución.

Para dinamizar los conceptos y los objetivos desarrollados, se abordará el marco conceptual de la
administración de riesgos en un contexto idóneo y pragmático para identificar los diferentes
aspectos desarrollados en principio y determinar acciones coherentes en un sistema de gestión del
riesgo.

Por último, se darán a conocer las diferentes metodologías de gestión del riesgo con el propósito
de establecer mecanismos eficientes y eficaces de gestión para prevenir y controlar acciones
contingentes que atente con el cumplimiento de los objetivos organizaciones, empresariales o
institucionales.
Conceptos de gestión y riesgo
¿Qué es Gestión?
La gestión es quizá uno de los elementos más abstractos contenidos dentro del argot gerencial
moderno. Anteriormente, manejar una empresa se resumía en el cumplimiento de varios procesos
administrativos fundamenta-les y muy precisos, a través de los cuales era posible convertir los
recursos de la empresa en productos. Entender la gestión a la luz de planificar, ejecutar, dirigir,
controlar y evaluar provee una visión bastante elemental, que deja de lado una diversidad de
aspectos involucra-dos en la coordinación de grupos humanos y recursos limitados para alcanzar
objetivos. (Lozano, 2006).

Si buscamos un sinónimo para entenderla mejor, la gestión es esencialmente algo muy similar a
ejecución, a la capacidad de hacer, de sincronizar aspiraciones y objetivos bajo la premisa del uso
eficiente de recursos y capacidades para lograr beneficios dentro de parámetros aceptables de
eficiencia. Asimismo, posee componentes fundamentales que se refieren a la estrategia, los
procesos internos, la cultura, los productos y el mercado.

Las empresas definen estrategias con el propósito de construir puentes que le permitan vincularse
con su entorno y bajo esa perspectiva, la gestión, puede interpretarse como la base de esos puentes
que les permite afianzarse de cada lado para poder comunicarlos.

Si las estrategias miran hacia fuera, la gestión es fundamentalmente interna; por el contrario, si se
abre un espacio de debate sobre la predominancia del término estrategia frente al de gestión, nos
encontraremos con la eterna discusión de qué es más importante, si los medios o los fines.

En términos particulares, se entiende que la gestión es el modo exclusivo de proceder de cada


empresa, con el fin único de alcanzar la misión de la organización, expresada en el trabajo mismo
de cualquiera que debe afrontar los problemas y aportar soluciones para asegurar los mejores
resultados. La gestión no posee fórmulas secretas ni requiere de habilidades extraordinarias, pues
su principal punto de apoyo está en la capacidad de hacer y concentrar el esfuerzo en un espacio y
tiempo a través del cual se logran los mejores resultados.

Nitin Nohria y William Joice en un artículo publicado en Harvard Business Review (2003), resumen
aquellas prácticas que se pue-den considerar fundamentales para la buena gestión, englobándolas
en cuatro conceptos:

Estrategia: relacionada con la construcción de proposiciones de valor alrededor del cliente, la


calibración del esfuerzo en función de los cambios del entorno, la comunicación de las aspiraciones
del negocio y la conservación del enfoque.

Ejecución: referida a la entrega de productos y servicios que cumplan consistentemente con las
expectativas de los clientes y consumido-res, la toma de decisiones oportuna, eliminar
constantemente cualquier forma de desperdicio y propiciar la mejora de la productividad.

Cultura: que se compone de la inspiración de quienes nos siguen, para que hagan las cosas mejor
por medio del faculta miento del personal para ejecutar toma de decisiones acertadas y oportunas,
la recompensa de los logros, crear retos y fortalecer y promover los valores de la empresa.

Estructura: Que busca simplificar y hacer el trabajo fácil de llevar, promover la cooperación, colocar
a la mejor gente en el frente de acción y diseñar sistemas para aprender y compartir el conocimiento.

Estos cuatro aspectos representan la evolución de los conceptos tradicionales asociados al ciclo de
administrar, y muestran como el trabajo de gestionar debe considerar dimensiones más allá del
simple logro de resultados.

De la misma manera como se plantea este modelo, Larry Bossidi y Ram Charam, en su libro
Execution (2002), precisan sus argumentos alrededor del concepto de ejecutar como fundamento de
la gerencia, señalando cómo la ejecución es una disciplina que se convierte en el mayor trabajo del
líder y que debe considerarse como el elemento central de la cultura de cualquier organización. Para
instrumentar su propuesta, estos autores señalan que las principales cualidades que componen los
bloques de la ejecución, son:

 Conocer el negocio y a las personas involucradas.


 Ser realistas e insistir en ello.
 Establecer metas claras y priorizarlas
 Seguimiento del desempeño.
 Recompensa.
 Expandir las capacidades.
 Conocer sus limitaciones.

El trabajo de gerenciar, como sinónimo de gestión, no puede realizarse productivamente si se define


el espacio de actuación de forma estática y aislada del resto de los elementos que componen esa
unidad llamada empresa, lo cual es evidente en la lista anterior.

Finalmente este trabajo puede compararse como el del director de orquesta que establece el ritmo,
los tiempos y marca la intervención de cada instrumento, pero nunca toca uno; es crear la imagen
de un resultado y producir-lo, logrando consolidar un estilo característico que forma parte del ADN
de la empresa y que la hace mejor que sus competidores. Una de las mejores definiciones de las
funciones de un directivo es la que hace años dio Luther Gulik, quien identificó las seis funciones
fundamenta-les de toda gerencia:

 Planificación: tener una visión global de la empresa y su entorno, tomando decisiones


concretas sobre objetivos concretos.

 Organización: obtener el mejor aprovechamiento de las personas y de los recursos


disponibles para obtener resultados.

 Personal: el entusiasmo preciso para organizar y motivar a un grupo específico de personas.

 Dirección: un elevado nivel de comunicación con su personal y habilidad para crear un


ambiente propicio para alcanzar los objetivos de eficacia y rentabilidad de la empresa.

 Control: cuantificar el progreso realizado por el personal en cuanto a los objetivos


establecidos.

 Representatividad: el gerente es la “personalidad” que representa a la organización ante


otras organizaciones similares, gubernamentales, pro-veedores, instituciones financieras,
etc.

¿Qué es el riesgo?

El riesgo es algo inherente a todas las actividades humanas y por lo tanto está presente en las
decisiones. En Colombia, la norma técnica de calidad 5254:2006 define el RIESGO como la
“oportunidad de que suceda algo que tendrá impacto en los objetivos” y una versión más actual
(NTC-ISO 31000:2009) lo considera como: “efecto de la incertidumbre sobre los objetivos”

Mascareña (2008), define dos tipos de riesgos organizacionales:

El riesgo económico, que hace referencia a la incertidumbre producida en el rendimiento de la


inversión debida a los cambios producidos en la situación económica del sector en el que opera la
empresa. Así, a modo de ejemplo, dicho riesgo puede provenir de: la política de gestión de la
empresa, la política de distribución de productos o servicios, la aparición de nuevos competidores,
la alteración en los gustos de los consumidores, entre otros.

En últimas, el riesgo económico es una consecuencia directa de las decisiones de inversión. De


manera que la estructura de los activos de la empresa es responsable del nivel y de la variabilidad
de los beneficios de explotación.

Este es un tipo de riesgo específico o no sistemático puesto que sólo atañe a cada inversión, o
empresa, en particular. Como es único, la exposición al mismo varía según sea la inversión o la
empresa en la que se invierta, lo que influirá en la política de selección de activos de cada inversor
en particular. Hay que tener en cuenta que este tipo de riesgo puede producir grandes pérdidas en
un corto espacio de tiempo; por ejemplo, la aparición en el mercado de un producto más avanzado
y barato que el nuestro puede hacer descender las ventas de nuestros productos de una forma
realmente grande provocando innumerables pérdidas en la empresa.

Además, si se produce una recesión eco-nómica, al reducirse los beneficios de las empresas también
se reducen sus impuestos provocando con ello que los gobiernos centrales y locales vean reducidas
su capacidad financiera para servir a la comunidad. Así, pues, el riesgo económico afecta a las
instituciones gubernamentales de forma indirecta.

Una forma de evitarlo sería adquiriendo deuda pública, la cual no está sometida a este tipo de riesgo
(aunque sí a otros). Los activos financieros emitidos por empresas que tienen una amplia cartera de
productos poco correlacionados entre sí, tendrán menos riesgo económico que los emitidos por
empresas que los tienen muy correlacionados o cuya gama de productos es bastante corta. Incluso,
los propios productos tienen diferentes riesgos económicos, puesto que hay bienes o servicios con
demandas muy estables y otros, por el contrario, las tienen muy inestables (alta tecnología, industrias
emergentes).

El riesgo financiero o también conocido como riesgo de crédito o de Insolvencia, hace referencia a
la incertidumbre asocia-da al rendimiento de la inversión debida a la posibilidad de que la empresa
no pueda hacer frente a sus obligaciones financieras (principalmente, al pago de los intereses y la
amortización de las deudas); es decir, el riesgo financiero es debido a un único factor: las
obligaciones financieras fijas en las que se incurre.

Cuanto mayor sea la suma de dinero que una organización privada o pública debe en relación con
su tamaño, y cuanto más alta sea la tasa de interés que debe pagar por ella, con mayor probabilidad
la suma de intereses y amortización del principal llegará a ser un problema para la empresa y con
mayor probabilidad el valor de mercado de sus inversiones (el valor de merca-do de la compañía)
fluctuará.

El riesgo financiero está íntimamente conectado con el riesgo económico puesto que los tipos de
activos que una empresa posee y los productos o servicios que ofrece juegan un papel
importantísimo en el servicio de su endeudamiento. De tal manera que dos empresas con el mismo
tamaño y con el mismo coeficiente de endeudamiento no tienen por qué tener el mismo riesgo
financiero.

Desde el contexto público pero no tan aleja-do de los aspectos de la empresa privada, el
Departamento administrativo de la función pública (2004, 2009) clasifica el riesgo consi-derando los
conceptos establecidos por Casals & Associates Inc, Price Waterhouse Coopers, USAID, en su
documento de mapas de riesgos (2003):

Riesgo estratégico:

Se asocia con la forma en que se ad-ministra la entidad. El manejo del riesgo estratégico se enfoca
a asuntos globales relacionados con la misión y el cumplimiento de los objetivos estratégicos, la clara
definición de políticas, diseño y conceptualización de la entidad por parte de la alta gerencia.

Riesgos operativos:

Comprende los riesgos relacionados tanto con la parte operativa como técnica de la entidad, incluye
riesgos provenientes de deficiencias en los sistemas de información, en la definición de los procesos,
en la estructura de la entidad, la desarticulación entre dependencias, lo cual conduce a ineficiencias,
oportunidades de corrupción e incumplimiento de los compromisos institucionales.

Riesgos de control:

Están directamente relacionados con inadecuados o inexistentes puntos de control y en otros casos,
con puntos de controles obsoletos, inoperantes o poco efectivos.
Riesgos financieros:

Se relacionan con el manejo de los recursos de la entidad que incluye, la ejecución presupuestal, la
elaboración de los estados financieros, los pagos, manejos de excedentes de tesorería y el manejo
sobre los bienes de cada entidad. De la eficiencia y transparencia en el manejo de los recursos, así
como su interacción con las demás áreas de-penderá en gran parte el éxito o fracaso de toda entidad.

Riesgos de cumplimiento:

Se asocian con la capacidad de la entidad para cumplir con los requisitos legales, contractuales, de
ética pública y en general con su compromiso ante la comunidad.

Riesgos de tecnología:

Se asocian con la capacidad de la entidad para que la tecnología disponible satisfaga las
necesidades actuales y futuras de la misma y soporten el cumplimiento de la misión.

Objetivos de la administración del riesgo

General

Facilitar el cumplimiento de la misión y objetivos organizacionales, empresariales o institucionales


mediante la prevención, administración y control de los riesgos identificados.

Específicos

 Generar una visión sistémica acerca de la administración y evaluación de riesgos, así como
del papel de la gerencia y su relación con las demás áreas y la coordinación de los sistemas
implementados o a implementar.

 Prevenir acciones que atenten contra los recursos de la organización, empresa o institución.

 Incluir dentro de los procesos y procedimientos organizacionales, empresa-riales o


institucionales la administración del riesgo.

 Involucrar y comprometer a todos los empleados y/o servidores de cualquier organización,


empresa o institución, en la investigación de acciones orientadas a prevenir y administrar los
riesgos.

 Asegurar el cumplimiento de normas y políticas.

3.3 Marco conceptual de la administración de riesgos

La gestión de riesgo se puede definir como “el proceso de toma de decisiones en un ambiente de
incertidumbre sobre una acción que va a suceder y sobre las consecuencias que existirán si esta
acción ocurre”.

El proceso general de la gestión de riesgo es aplicable a un programa, a una política, una actividad,
a una etapa de un proceso, etc. También este puede aplicarse en todos los ni-veles de una
organización ya sea estratégico, táctico u operacional. No obstante, el enfoque que se tome y los
métodos utilizados para tomar las decisiones, variarán de un programa a otro o bien de una actividad
a otra.

En este sentido, el proceso de gestión de riesgos aplicado a cualquier actividad consta de las
siguientes etapas:

En síntesis, la gestión o administración del riesgo sugiere pensar con rigor. La administración del
riesgo es un proceso sistemático que se utiliza cuando se toman decisiones para mejorar la eficiencia
y la efectividad. Es un medio hacia un fin y debe integrarse al trabajo diario.

a) ANTECEDENTES DEL RIESGO

A lo largo de la historia de la humanidad, el ser humano siempre ha estado


expuesto a algún tipo de riesgo, siempre han existido factores dañinos que el
hombre se ha visto en la necesidad de contrarrestar ya sea en el ámbito
económico, político o social.

Las organizaciones, no importa cuál sea su actividad y tamaño, afrontan una


serie de riesgos que pueden afectar a la consecución de sus objetivos. Todas
las actividades de una organización están sometidas de forma permanente a
una serie de amenazas, lo cual las hace vulnerables, comprometiendo su
estabilidad. Accidentes operacionales, enfermedades, incendios, pérdidas de
beneficios, catástrofes naturales, etc., son una muestra de este panorama, sin
olvidar las amenazas propias del negocio.

Hablar sobre gestión de riesgos ya no se limita al enfoque financiero tradicional,


sino que la gerencia de riesgos en realidad posee una visión holística de la
compañía que contempla aspectos muy variados como la pérdida de control, la
seguridad, así como diversas estrategias para prevenir, reducir o transferir el
riesgo. La gerencia de riesgos en un entorno global se está perfilando como una
estrategia financiera y empresarial que proporciona una importante ventaja
competitiva a las empresas que disponen de ella, así como un importante
incremento de valor en el mercado.

Las innovaciones tecnológicas características de nuestro tiempo están dando


paso a una cultura del Riesgo (Beck, 1986; Legadec, 1981). Es evidente que la
emergencia de esta cultura está estrechamente ligada al desarrollo de la
tecnociencia contemporáneos y a las negligencias en subsanar sus riesgos
tecnológicos ambientales y sociales. Accidentes en las industrias nucléales,
químicas y armamentos, relacionados tanto con la producción como con el
transporte; la acumulación de residuos tóxicos y radiactivos que aumentan
incesantemente sin una forma segura de deshacerse de ellos; la contaminación
continua del medio ambiente y de los productos vitales mediante
procedimientos y sustancias químicas; la propagación de la lluvia ácida; el
deterioro creciente de la capa de ozono; los cambios climáticos en perspectiva
debidos al calentamiento global; la pobreza, las hambrunas y las permanentes
crisis económicas y sociales en el llamado Tercer Mundo, donde habita la mayor
parte de la población mundial en crecimiento incesante, la amenaza del
eventual empleo de armas químicas, biológicas y nucleares en confrontaciones
bélicas: todo ello forma parte de la larga lista de crisis que caracterizan nuestra
cultura del riesgo.

El modelo de evaluación del riesgo parte de


la existencia de teorías científicas cáusales
que permiten pronosticar con la suficiente
antelación los impactos de los desarrollos
tecnológicos como para dar eventualmente
la alarma anticipada. El análisis de
impactos tiene por objeto la identificación
de los impactos específicos, así como su
estimación en términos del análisis
económico de los costos-beneficios. Por último, se trata de analizar, en base a
los sistemas actuales establecidos “científicamente”, las opciones para la
decisión e intervención política de cara al control de las consecuencias positivas
o negativas.

En los últimos tiempos ha cobrado una gran importancia el riesgo en la gestión


empresarial, y por extensión se ha empezado a prestar más atención a la
información contable que se ofrece sobre esta variable; sobre todo si tenemos
en cuenta que esta información es indispensable para los inversores y la tienen
fragmentada en las cuentas anuales o en otros documentos presentados por
las empresas. La evaluación, identificación, control y clasificación de los riesgos
son de vital importancia para el desempeño favorable y la toma de decisiones
de cada empresa.

Madurez de la Cultura de Gestión de


Riesgos

Táctica Estrategia

Preparada para los


Reactiva a los Riesgos Anticipa los Riesgos
Riesgos
Ni Junta Directiva ni gerencia Ni la Junta Directiva y la alta Comités de Riesgo a nivel de
enfatizan en la gestión del gerencia respaldan la gestión la Junta Directiva y Alta
riesgo del riesgo Gerencia

Gestión del Riesgo desde


Empírica y casuística: basada Se establece el Comité de contexto estratégico
en la experiencia y a riesgos Riesgos y Políticas
sucedidos Optimización del riesgo

Se reconoce la necesidad de Enfoque a riesgos críticos


Cubrimiento incompleto y gestionar el riesgo en toda la
aislado de los riesgos, con empresa Predictiva: enfocada a prever
énfasis en riesgos financieros riesgos potenciales

identificación aislada de Identificación integral de


Responsabilidad diluida y riesgos según su naturaleza riesgos en procesos
casuística
Valoración cualitativa y semi- Propietarios responsables
cuantitativa
Falta de enfoque y lenguaje Valoración cuantitativa riesgos
común. Valoración muy Auto Evaluación del Control críticos
subjetiva (CSA)
CRSA / Eventos de perdida /
Monitoreo incipiente indicadores de riesgos
Auditoría tradicional
(Cumplimiento) Auditoría más proactiva Auditoría basada en Gestión
de Riesgos

DEFINICIÓN DE GESTIÓN INTEGRAL DEL RIESGO


La GESTIÓN DE RIESGOS se puede definir como el proceso de toma de
decisiones en un ambiente de incertidumbre sobre una acción que va a suceder
y sobre las consecuencias que existirán si esta acción ocurre.

El éxito en los negocios exige ser excelente en la gestión del riesgo. Por ello los
emprendedores deben ser “inteligentes” en este proceso. El emprendedor debe
tomar conciencia del riesgo, distinguir las distintas naturalezas del riesgo para
conocer la forma de mitigarlo o bien minimizar sus efectos y optimizar los
recursos empleados en la gestión, todo ello forma parte de la inteligencia de la
gestión empresarial.

La gestión del riesgo hace referencia a un complejo proceso social cuyo objetivo
último es la reducción o control del riesgo en la sociedad. Toma como punto de
partida la noción de que el riesgo como manifestación social es una situación
dinámica. La gestión del riesgo puede entenderse como el conjunto de
elementos, medidas y herramientas dirigidas a la intervención de la amenaza o
la vulnerabilidad, con el fin de disminuir o mitigar los riesgos existentes de
desastre. Su objetivo es articular los diferentes tipos de intervención, dándole
un papel principal a la prevención y mitigación sin abandonar la preparación
para la respuesta en caso de desastre. Una política de gestión de riesgos no
sólo se refiere a la acción de las entidades del Estado, sino por su propósito a
la articulación de las diversas fuerzas sociales, políticas, institucionales,
públicas y privadas. Esto significa la participación democrática y la suma de
esfuerzos y responsabilidades de acuerdo con el ámbito de competencia de
cada cual.

La gestión del riesgo colectivo involucra cuatro dimensiones o políticas públicas


bien diferenciadas: la identificación del riesgo (que se relaciona con la
percepción individual y colectiva; y con su análisis y evaluación), la reducción
del riesgo (que se relaciona con las acciones de prevención y mitigación); el
manejo de desastres (que se relaciona con la respuesta a emergencias, la
rehabilitación y la reconstrucción); y la transferencia y financiación del riesgo
(que se refiere a los mecanismos de protección financiera para cubrir pasivos
contingentes y riesgos residuales.

DEFINICIONES BÁSICAS:

RIESGO

El riesgo se puede definir como la combinación de la probabilidad de un suceso y sus consecuencias.


En todos los tipos de empresa existe un potencial de sucesos y consecuencias que constituyen
oportunidades para conseguir beneficios (lado positivo) o amenazas para el éxito (lado negativo). El
riesgo se haya asociado de manera inexorable a cualquier actividad que lleve a cabo la persona u
organización y que suponga la decisión entre varias alternativas. El riesgo, por tanto, acompaña a
todo cambio y está presente en cada decisión.

La palabra Riesgo viene del Italiano Risicare, que Significa desafiar, retar, enfrentar;
también se define como poner en peligro a una persona, en algunos escritos se refiere a la
proximidad de un daño. El riesgo también es conocido como la probabilidad de pérdida la
cual permite cuantificar el riesgo a diferencia de la posibilidad de riesgos donde este no se
puede cuantificar. El riesgo es Incertidumbre relacionado con la duda ante la posible
ocurrencia de algo que puede generar pérdidas.

Desde el punto de vista empresarial existen innumerables riesgos,


generados tanto por el entorno como por el desarrollo normal de sus
actividades.

RIESGOS DEL ENTORNO: Comprende elementos como el país donde


está ubicada empresa, su naturaleza, la región y ciudad, además del
sector, la industria y condiciones económicas, políticas, sociales y
culturales. En este orden de ideas se pueden presentar riesgos como:

a. Riesgo asociado a la naturaleza: Relacionados con riesgos


meteorológicos y climáticos como huracanes, lluvias, maremotos,
sequías, que afectan el logro de objetivos.
b. Riesgos asociados al País: De acuerdo al País se pueden encontrar
riesgos como el riesgo país que hace referencia al grado de peligro que
represente este para las inversiones extranjeras

RIESGOS GENERADOS POR LA EMPRESA: A nivel de la empresa se


pueden presentar un sinfín de riesgos que pueden afectar los procesos,
recursos humanos, físicos, tecnológicos, financieros y organizacionales,
a los clientes y hasta la imagen de la empresa. En este orden de ideas
se pueden presentar riesgos como:

a. Riesgo de reputación: es el desprestigio de la empresa que trae


como consecuencia la pérdida de credibilidad y confianza del público
por fraude, insolvencia, conducta irregular de los empleados,
rumores, errores cometidos en la ejecución de alguna operación por
falta de capacitación del personal clave o deficiencia en el diseño de
los procedimientos, este riesgo puede traer efectos como disminución
de la demanda, o la perdida de negocios atribuibles al desprestigio
generado.

b. Riesgo puro: este riesgo al materializarse origina perdida, como un


incendio, un accidente, una inundación.

c. Riesgo especulativo: al materializarse genera la posibilidad de


generar instantáneamente beneficio o perdida, como una aventura
comercial, la inversión en divisas ante expectativas de devaluación o
revaluación, la compra de acciones, el lanzamiento de nuevos productos,
etc.
d. Riesgo estratégico: son las perdidas ocasionas por las definiciones
estratégicas inadecuadas y errores en el diseño de planes , programas,
estructura, integración del modelo de operación con el direccionamiento
estratégico, asignación de recursos, estilo de dirección, además de
ineficiencia en la adaptación a los cambios constantes del entorno
empresarial, entre otros.

e. Riesgo operativo: es la posibilidad de pérdidas ocasionadas en la


ejecución de los procesos y funciones de la empresa por fallas en
procesos, sistemas, procedimientos, modelos o personas que participan
en dichos procesos.

f. Riesgo de mercado: puede generar ganancias o pérdidas a la


empresa al invertir en bolsa, debido a la diferencia en los precios que se
registran en el mercado.

g. Riesgo precio de insumos y productos: se refiere a la


incertidumbre sobre la magnitud de los flujos de caja debido a posibles
cambios en los precios que una empresa puede pagar por la mano de
obra , materiales y otros insumos de su proceso de producción, y por los
precios que puede demandar por sus bienes o servicios.

h. Riesgo de crédito: consiste en que los clientes y las partes a las


cuales se les ha prestado dinero, fallen en el pago. La mayoría de las
empresas se enfrentan ante este riesgo por cuentas por cobrar, pero
esta exposición es más alta en las instituciones financieras.

i. Riesgo legal: se refiere a la pérdida en caso de incumplimiento de la


contraparte en un negocio y la imposibilidad de exigirle jurídicamente el
cumplimiento de los compromisos adquiridos. También se puede
presentar al cometer algún error de interpretación jurídica u omisión en
la documentación, y en el incumplimiento de normas legales y
disposiciones reglamentarias que pueden conducir a demandas o
sanciones.

j. Riesgo tecnológico: el uso de la tecnología genera riesgos como los


virus, el vandalismo puro y de ocio en las redes informáticas, fraudes,
intrusiones por hackers, el colapso de las telecomunicaciones que
pueden generar el daño de la información o la interrupción del servicio.
También está el riesgo del constante cambio de tecnología lo que puede
ocasionar que las empresas no estén preparadas para adoptarlas y esto
incremente sus costos, menor eficiencia, incumplimiento en las
condiciones de satisfacción de los servicios prestados a la comunidad.

k. Riesgos laborales: pueden ser accidentes de trabajo y


enfermedades profesionales, pueden ocasionar daños tanto a la persona
como a la misma empresa.

l. Riesgos físicos: afectan a los materiales como por ejemplo; corto


circuito, explosión física, daño en la maquinaria, daño en equipos por su
operación, por su diseño, fabricación, montaje o mantenimientos;
deterioros de productos y daños en vehículos.

RIESGO EMPRESARIAL: El riesgo empresarial podría definirse como un


fenómeno subjetivo-objetivo del proceso de toma de decisión entre
diferentes alternativas en situación de incertidumbre, con la probabilidad de
ocasionar efectos negativos en los objetivos de la empresa, produciendo
después de realizarse la acción decidida un resultado peor del previsto.
De tal modo el riesgo se presenta como un fenómeno complejo, de carácter
objetivo y a la vez subjetivo que incluye: La situación de incertidumbre como
contexto y condición objetiva del riesgo. El acto de tomar decisiones sobre
la base de información incompleta. La vivencia de vacilación motivada por
la probabilidad de pérdidas o fracasos como resultado de la realización de
la alternativa privilegiada.

CAUSA

Se entiende por causas a los fundamentos o el comienzo de una situación


determinada. La causa es la primera instancia a partir de la cual se
desarrollan eventos o situaciones específicas que son una consecuencia
necesaria de aquella y que por lo tanto pueden ser completamente
diferentes a las que resulten de la presencia de otras causas o de las
mismas pero en el contexto distinto

CONSECUENCIA

La materialización de un riesgo puede generar consecuencias diferentes,


cada una de ellas con su correspondiente probabilidad. Así por ejemplo, ante
una caída al mismo nivel al circular por un pasillo resbaladizo, las
consecuencias normalmente esperables son leves (magulladuras,
contusiones, etc.), pero, con una probabilidad menor, también podrían ser
graves o incluso mortales.

Ante un posible accidente es necesario plantearnos cuáles son las


consecuencias previsibles, las normalmente esperables o las que pueden
acontecer con una probabilidad remota. En la valoración de los riesgos
convencionales se consideran las consecuencias normalmente esperables
pero, en cambio, en instalaciones muy peligrosas por la gravedad de las
consecuencias (nucleares, químicas, etc.), es imprescindible considerar las
consecuencias más críticas aunque su probabilidad sea baja, y por ello es
necesario ser, en tales circunstancias, más rigurosos en el análisis
probabilístico de seguridad.

AMENAZA

La amenaza hace referencia a los posibles acontecimientos negativos que pueden perjudicar a los
intereses u objetivos de la empresa, tales como los fraudes, los fallos en los sistemas, los daños
materiales o humanos, las reclamaciones, la mala reputación, etc.

Se conoce como amenaza al peligro inminente, que surge, de un hecho o acontecimiento que aún
no ha sucedido, pero que de concretarse aquello que se dijo que iba a ocurrir, dicha circunstancia o
hecho perjudicará a una o varias personas en particular. Por ejemplo de lo anterior, cuando se dice
que estamos bajo una amenaza de terremoto o maremoto, sin embargo, también sirve para que el o
los destinatarios de dicha amenaza puedan estar prevenidos y alerta para tomar las decisiones más
convenientes para enfrentar dicho hecho o acontecimiento, ya que las personas al estar en una
situación de alerta pueden pensar en lo que se debería hacer de concretarse el hecho del cual fue
amenazado.

Es un término que sirve para referirse a ese riesgo o posible peligro de que ocurra una situación
específica, y que a su vez genera miedo, ansiedad o estado de alerta en aquella o aquellas personas
que fueron amenazadas, lo cual podemos definir como un maltrato psicológico, ya que el o los
individuos que fueron amenazados pueden sufrir trastornos por la misma, lo cual es un tipo de
violencia específica que en muchas ocasiones es penada por la ley.

En el día a día de nuestra sociedad, y en los más cotidiano el convivir es algo que no es tarea fácil,
por eso surgen en muchas ocasiones problemas y conflictos entre vecinos, cohabitantes, y hasta la
propia familia que convive en una misma casa, de allí que puedan acontecer problemas en los que
un individuo puede amenazar a otro para infundir en éste miedo y así mantener un control psicológico
sobre éste, con la promesa de que si continuar la problemática puede ocurrir un hecho o evento
violento como una desgracia, por ejemplo cuando un vecino escucha música a todo volumen y no
deja dormir a nadie y uno de los vecinos lo llama y lo amenaza con llamar a la policía.

OPORTUNIDAD

La oportunidad hace referencia a la relación que existe


entre el riesgo y el retorno que proporciona la oportunidad.
Cuanto más alto es el riesgo, más alto debe ser el
potencial del valor que se busca y, cuanto más alto es la
rentabilidad que se espera, más alto es el riesgo de
pérdida.

La oportunidad engloba la conjugación de la posibilidad que se presenta o existe que una persona
realice una acción para conseguir o alcanzar algún tipo de mejora, es por esto que decimos que es
una conspiración entre tiempo y acción para lograr una mejora o un beneficio gracias al
aprovechamiento de ciertas circunstancias en un momento específico.

De esta forma, se habla de que existen personas que saben aprovechar las oportunidades para
referirse a aquellos que logran sacar provecho de esas circunstancias que se les presentan en un
tiempo determinado. Del mismo modo, existen personas que no saben aprovechar dichas
oportunidades, es decir, se le presentan circunstancia favorables para hacer algo que le
genere una mejora o algún beneficio y no hace nada al respecto, perdiendo así la
oportunidad que en ese momento se le presentó. Hay psicólogos que dicen que a medida
que las oportunidades se van aprovechando van surgiendo nuevas oportunidades mientras
que aquella persona que no la sabe aprovechar vive arrepentido y con pocas opciones de
que aparezcan nuevas oportunidades.

Por lo tanto, cuando existe una circunstancia favorable o que se da en un momento adecuado u
oportuno para realizar algo podemos decir que estamos en presencia de una oportunidad. Sin
embargo, cada persona puede analizar de maneras distintas las oportunidades que se le presentan,
y si realmente valen la pena o no.

El factor tiempo juega un papel crucial en la mayor parte de las oportunidades que se le pueden
presentar a un sujeto, se trata de un ejercicio mental que debe realizar la persona al momento en el
que se le presenta una oportunidad porque de esa decisión puede depender su éxito o su desdicha
o fracaso, como también el simple lamento de no saber aprovechar la oportunidad que le fue
brindada y que ya no está vigente.

VULNERABILIDAD

La vulnerabilidad puede ser considerada como el grado de pérdida de un elemento o la


predisposición o susceptibilidad física, económica, política o social que tiene una comunidad de ser
afectada o de sufrir daños en caso de que un fenómeno desestabilizador de origen natural o
antropogénico se manifieste. La vulnerabilidad de los asentamientos humanos está íntimamente
ligada a los procesos sociales que allí se desarrollan y está relacionada con la fragilidad, la
susceptibilidad o la falta de resiliencia de los elementos expuestos ante amenazas de diferente
índole. Por otra parte, la vulnerabilidad está íntimamente ligada a la degradación ambiental, no solo
urbana sino en general del entorno natural intervenido o en proceso de transformación. Por lo tanto
la degradación del entorno, el empobrecimiento y los desastres no son otra cosa que sucesos
ambientales y su materialización es el resultado de la construcción social del riesgo.

Tal como se definió con anterioridad, la vulnerabilidad corresponde a la predisposición o


susceptibilidad que tiene un elemento de ser afectado o de sufrir una pérdida. En consecuencia, la
diferencia de vulnerabilidad de los elementos determina el carácter selectivo de la severidad de los
efectos de un evento externo sobre los mismos.

La vulnerabilidad, en términos generales, puede clasificarse como de carácter técnico y de carácter


social, siendo la primera más factible de cuantificar en términos físicos y funcionales, por ejemplo en
pérdidas potenciales referidas a los daños o la interrupción de los servicios, a diferencia de la
segunda, que prácticamente sólo puede valorarse cualitativamente y en forma relativa, debido a que
está relacionada con aspectos económicos, educativos, culturales, ideológicos, etc.

En consecuencia, un análisis de vulnerabilidad es un proceso mediante el cual se determina el nivel


de exposición y la predisposición a la pérdida de un elemento o grupo de elementos ante una
amenaza específica, contribuyendo al conocimiento del riesgo a través de interacciones de dichos
elementos con el ambiente peligroso.

Los elementos bajo riesgo son los contextos social y material, representados por las personas y por
los recursos y servicios que pueden ser afectados por la ocurrencia de un evento, es decir, las
actividades humanas, los sistemas realizados por el hombre tales como edificaciones, líneas vitales
o infraestructura, centros de producción, utilidades, servicios y la gente que los utiliza.

SINIESTRO

Es la manifestación concreta del riesgo asegurado, que produce unos daños garantizados en la
póliza hasta determinada cuantía. Siniestro es el incendio que origina la destrucción total o parcial
de un edificio asegurado; el accidente de circulación del que resultan lesiones personales o daños
materiales; el naufragio en el que se pierde un buque o las mercancías transportadas; el granizo que
destruye una plantación agrícola, etc. Siniestro es pues, un acontecimiento que, por originar
unos daños concretos previstos en la póliza, motiva la aparición del principio indemnizatorio,
obligando a la entidad aseguradora a satisfacer, total o parcialmente, al asegurado o a sus
beneficiarios, el capital garantizado en el contrato.

En el de los Seguros, se llamará siniestro a aquel daño o accidente plausible de ser indemnizado
por una aseguradora. Es una cuestión que se encuentra aplicada en casi todos los contratos de
seguro y contempla entonces la avería grave, la destrucción fortuita o en su defecto alguna pérdida
importante que sufre alguna persona u organismo como consecuencia de un accidente o catástrofe
de tipo natural y que entonces, por estar las mismas contenidas en un contrato de seguro, la
aseguradora que le corresponda, lo indemnizará o responderá por el arreglo de cualquier rotura. En
este caso, el siniestro puede ser desde el choque entre dos vehículos hasta la destrucción total de
una casa tras un huracán.

Entonces, una vez ocurrido el mismo, las aseguradoras tienen la obligación, siempre y cuando esté
estipulado en el contrato arreglado oportunamente, de indemnizar a las partes involucradas.
Vinculado a esta referencia aparece el concepto de siniestro total que dice que este tipo es la pérdida
o destrucción total de un bien tras un siniestro, es decir, que la reparación de los daños es imposible
tanto económica como técnicamente.

También, es muy común que a aquel evento o acontecimiento inesperado y que provoca una gran
destrucción y daño a su paso se lo denomine como siniestro. Los incendios, los accidentes de
tránsito, entre otros, son llamados muchas veces como siniestros, por ello es que normalmente en
la prensa y en el lenguaje corriente suelen aparecer denominados de este modo por las personas
que lo relatan.

DESASTRE

El desastre es la realización o concreción de las condiciones de riesgo preexistentes en la sociedad.


Esta realización ocurre en el momento en que un determinado evento físico, sea este un huracán,
sismo, explosión, incendio, u otro ocurre y con ello muestra las condiciones de vulnerabilidad
existentes, revela el riesgo latente y lo convierte en un producto, con consecuencias en términos de
pérdidas y daños.

Con el impacto y la generación de las condiciones de desastre automáticamente se conforman otros


escenarios de riesgo en las zonas y poblaciones afectadas que difieren sustancialmente de aquellos
existentes con anterioridad, aun cuando incorporan elementos y componentes importantes de los
mismos. La dinámica y la expresión particular del riesgo existente con anterioridad han sido
modificadas y presentarán nuevos desafíos para la sociedad.

PRINCIPALES DIFICULTADES PARA UNA GESTIÓN DEL RIESGO MÁS EFECTIVA


e) PARADIGMAS RESPECTO A LA GESTIÓN DEL RIESGO:

 La Empresa es exitosa, los riesgos están controlados…


 Los riesgos son responsabilidad de un equipo que pertenece a otra área…. Los riesgos se
encuentran cubiertos por los seguros de la Empresa….
 La responsabilidad está en manos de los directivos….
 Yo no tomo decisiones en la Empresa….cómo la podría afectar?...
 Yo no debería hacer cosas para las que no me contrataron, me puedo meter en problemas….
 Este contrato no vale mayor cosa….La pérdida para la empresa no le haría ni cosquillas….

f) COMPORTAMIENTO DE LAS PERSONAS FRENTE AL RIESGO:

La tolerancia o aceptabilidad al riesgo es el grado de riesgo que se está dispuesto a asumir en


búsqueda de un beneficio esperado.

Una decisión de riesgo puede tener un resultado positivo o negativo, puede obtenerse una
oportunidad o una pérdida.

Factores que influyen:

 Control de la situación.
 Riesgo desconocido o peligros nuevos no detectables.
 Número de expuestos al riesgo.
 Valores de las personas: metas personales, beneficios esperados.
 Género.
 Nivel educativo.
 Ingresos.
 Edad.

You might also like