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El jazz fue considerado por la elite cultural como una inspiración y recurso para la
vanguardia, muchos artistas europeos encontraron apoyo en el jazz.
Dentro del jazz casi todas las nuevas tendencias eran consideradas de
vanguardia, esto fue muy evidente en los años 40s con el bebop. El swing era
criticado por los más puristas del movimiento por ser muy comercial y por el otro
lado el Bop era criticado por romper la conexión entre el jazz y la audiencia
popular. En lugar de seguir los estándares dictados por el mercado el bop fue un
movimiento de vanguardia.
Aun así el bop era muy accesible, aunque había cambiado muchas características
musicales de swing aún conservaba muchas tradiciones como un ritmo fuerte,
armonías estándares, melodías reconocibles y las reglas de conducción armónica,
la segunda vanguardia desafiaría estas reglas.
La segunda onda Avant-garde
Las condiciones de la vanguardia de los años cincuenta y sesenta coincidieron
con las de los años veinte: las nuevas guerras coloniales, las ocupaciones, la
guerra fría, la lucha por la igualdad racial, las exigencias de la igualdad de género
y el desmembramiento de algunas convenciones sociales establecidas.
Las expresiones artísticas que más demostraron estas tendencias fueron la nueva
onda del cine francés e italiano y el jazz,
-Free jazz llamado así tras el álbum de Ornette Coleman (el cual tenía una pintura
del pintor modernista pollock).
El ritmo: se dejó de usar un pulso estable para así pasar a uno más ambiguo
Armonía: se dejan de usar los patrones armónicos de las escalas para usar
armonías impredecibles basadas en la necesidad del momento
Forma: las estructuras del blues y canciones fueron reemplazadas por formas
creadas en base a la improvisación
Representación: el jazz dejo de ser una música para entretener y paso a ser un
arte serio y desafiante.
Con la aparición de Ornette Coleman y Cecil Taylor el mundo del jazz se dividió,
considerados por muchos unos genios o unos charlatanes.
Ornette Coleman
Jimmy Lyons podía transferir las ideas de Taylor al saxofón con el timbre y fraseo
de bebop, y mostraba su potencial al resto de la banda
Taylor tocó duetos con muchos bateristas, entre ellos Max Roach, Elvin Jones y
varios bateristas de vanguardia,
La vanguardia dividió el mundo del jazz por la mitad. Por un lado fue criticado por
ser demasiado político. Esto fue parcialmente cierto cuando se trató de los
derechos civiles, el movimiento contra la guerra de Vietnam, el poder negro y otros
movimientos. Por otro lado, sus partidarios llamaron a la Nueva Cosa una música
popular, aunque alienó a más gente de la que atrajo.
Músicos menos conocidos fueron más tarde venerados por su trabajo, que quedó
en la oscuridad para la mayoría de sus carreras (Sun ra, Herbie Nichols, Andrew
Hill).
Durante la década de 1970, Nueva York fue el imán para los músicos de
vanguardia.
Para toda esta actividad, se requerían nuevos lugares. Algunos conciertos tuvieron
lugar en casas particulares y algunos en lofts transformados en espacios de
conciertos a tiempo completo en el distrito abandonado de almacenes de Nueva
York
En 1987, the Knitting Factory abrió un gran espacio de actuación que animó a los
músicos a recortar modismos para llegar a un público más amplio.
Avant-Garde Visions