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Una vez estudiada la obra pictórica de Van Doesburg, me gustaría continuar hacía su trabajo
en la Arquitectura y en el diseño de interiores; que a pesar de ser yo una estudiante de
Pintura, también me ha llamado la atención este aspecto del artista después de ver sus obras.
Van Doesburg se destacó mucho durante su etapa pictórica, inspirado e influenciado por
artistas contemporáneos a él, como Van Gogh (Post-impresionismo), Kandinsky (Abstracción
Lírica y lo espiritual en el arte), Cubismo, Futurismo italiano, etc. Por su tendencia a querer
añadir más dinamismo a sus obras (que eran estáticas por las horizontales y verticales
propuestas por Mondrian), realizó varias prácticas que lo llevaron a proponer su estilo
particular conocido como “Elementarismo” que acepta la diagonal como elemento
compositivo que genera dinamismo. Pero no se quedó únicamente allí, también tenía un
marcado interés por la arquitectura y eso se dejó notar en varios proyectos en los que
participó.
Parece ser que ya se escribía sobre arquitectura en la revista De Stijl desde sus inicios, que ya
algunos de sus miembros como Rietveld, Jacobus Johannes Peter Oud, Huszár, Van Hoff y en
especial Van Doesburg mostraron interés por la misma. Algunos de sus primeros proyectos
arquitectónicos que se cuentan son: la reconstrucción de la Villa Allegonda de la provincia
Katwijk, trabajo en que colaboró junto a J. Oud y el pintor Kammerkingh en 1916 e incluyen
dos vitriales del artista correspondientes a su Composición II (1917) y Composición V (1918,
arriba). Un segundo proyecto fue en la casa De Vonk, también colaborando con Oud, donde
Van Doesburg se encargó de diseñar las baldosas del suelo a partir de formas geométricas de
color amarillo, negro y blanco que recorren todo el edificio y se entrelazan entre sí; y podemos
notar claramente el estilo del neoplasticismo.
Otros proyectos de Van Doesburg del mismo incluyen el diseño de viviendas modelo junto con
Oud y Rietveld, con un colorido diseño de interiores, y el estudio para la decoración del
vestíbulo de la universidad de Ámsterdam en 1923, cuyas paredes y techos están decorados
con los colores amarillo, azul rojo y blanco con líneas negras, propias del neoplasticismo
(abajo), en comparación a las baldosas de De Vonk cuya paleta era aun más limitada; estilo
que seguiría trabajando tanto en la pintura como en la arquitectura por un largo periodo de
tiempo.
Se destaca también el trabajo realizado en conjunto con el arquitecto Cornelis Van Eesteren
para el diseño de diferentes
mansiones (Rosenber,
Particuliere), a partir de
dibujos preparatorios y
maquetas de cada
edificación. En dichos
dibujos se puede ver que el
uso de colores ya no era exclusivo para el diseño de interiores, que también se utilizaron para
la decoración de la fachada y que la paleta sigue siendo la misma, sin ningún otro cambio.
Todas las viviendas, mansiones y otras edificaciones diseñadas por Van Doesburg al estilo del
Neoplasticismo son muy interesantes y llamativas ya que rompe con el diseño tradicional de
una casa que estamos acostumbrados a ver, también sería el tipo de casa ideal para un artista
a quien le guste mucho el arte abstracto y en especial el trabajo realizado por De Stijl (De
hecho, el propio Mondrian decoró de esa misma manera su estudio en Paris, donde vivió hasta
1921. Se trataba de una composición más donde todo estaba cuidadosamente colocado para
no dañarla).
El trabajo arquitectónico de Van Doesburg resultó ser una influencia muy importante para los
estudiantes de la Escuela de La Bauhaus, cuando realizó su viaje a Berlin en 1920 para vivir en
Weimar y dictó un curso acerca de De Stijl y los fundamentos de la arquitectura. Por alguna
razón no fue aceptado como un profesor más de la escuela, pero se dice que sus enseñanzas le
aportaron muchas cosas a la misma y a generar un mayor interés de los estudiantes por la
arquitectura.
Van Doesburg fue un artista muy destacado, tanto en su trabajo pictórico como en el
arquitectónico en lo que se mantuvo hasta el final de su vida y también fue el iniciador del
Arte Concreto. Lamentablemente, el estilo neoplasticista y elementarista que aplicó en el
Aubette no fue apreciado en su momento como ya sucedía con el trabajo de los artistas
radicales que rompieron con las concepciones académicas para desarrollar algo nuevo,
tuvieron que pasar varios años para que obtuviese el valor que realmente merecía y hoy día
muchas personas siguen cometiendo el error de no dar demasiada importancia a las artes.
Una mentalidad que hemos de cambiar para ayudar a la sociedad a progresar culturalmente y
para que el trabajo de grandes maestros como Van Doesburg o Mondrian no quede en el
olvido.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
PRECKLER, Ana Maria-Historia del Arte Universal de los Siglos XIX y XX-Volumen II-
Editorial Complutense-2003