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RESUMEN DE LA ODISEA

Jhon Jairo Rojas

HOMERO
(Siglo VIII a.C.) Poeta griego al que se atribuye la autoría de la Ilíada y
la Odisea, los dos grandes poemas épicos de la antigua Grecia. En palabras de
Hegel, Homero es «el elemento en el que vive el mundo griego como el
hombre vive en el aire». Admirado, imitado y citado por todos los poetas,
filósofos y artistas griegos que le siguieron, es el poeta por antonomasia de la
literatura clásica, a pesar de lo cual la biografía de Homero aparece rodeada del
más profundo misterio, hasta el punto de que su propia existencia histórica ha
sido puesta en tela de juicio.

La iconografía
grecorromana ha
consagrado el noble
rostro barbado de un
anciano ciego como el de
Homero. Esta es la
imagen que ha atribuido
la tradición al poeta que
escribió la Ilíada y
la Odisea, los dos
poemas épicos con que
se inaugura la literatura
griega y la occidental y
cuyo vigor lírico y
narrativo permanece
fresco desde hace miles
de años. Su nombre y sus
obras han alcanzado la
gloria y alimentado
mitos, narraciones y leyendas a través de los siglos, sin que hayan perdido su
fuerza original.

La perfección y la calidad de la Ilíada y la Odisea, considerados obras maestras


de la literatura occidental, sólo se explica por la existencia de toda una
tradición previa sobre la Guerra de Troya que aedos y rapsodas fueron
elaborando y refinando durante siglos y que culmina en los grandiosos poemas
homéricos. A pesar de que Homero se sirve de los procedimientos de la
tradición oral, es indudable que en ambos poemas hay un propósito poético, un
plan y una estructura que revela la actividad de un poeta consciente de su arte.
ODISEA
HOMERO

Odiseo, el rey de Ítaca ha dejado su reino y su amada familia, para dejar en alto
su nombre con honor ante la gran batalla que reclama Menelao hacia los
troyanos. Este hombre de inteligencia, tuvo que dejar la batalla junto a sus
hombres tras verse atrapado ante la muerte, acción que disgustó completamente
al dios del trueno y del olimpo, Zeus, e hizo que los vientos que soplaban a la
embarcación de Ulises se desviaran y hacerlos perder durante nueve días. En
su viaje sin ruta fija, encuentran una isla, y tres de sus hombres fueron a
explorarlas. Cuando vio Ulises que sus hombres habían comido de la flor de
loto, planta que hacía que perdieran la memoria zarparon de la isla.

Mientras su esposa Penélope, espera la ansiosa llegada de su esposo Ulises,


mentor, el amigo fiel de Ulises le daba apoyo a Penélope para la crianza del
príncipe Telémaco. Éste anhelaba desesperadamente expulsar a los
pretendientes de su madre, pero no tenía la confianza ni la experiencia para
luchar contra ellos. Uno de los pretendientes, Antínoo, planeaba asesinar al
príncipe Telémaco para librarse de su único obstáculo de dominar el reino.

Mientras tanto, Ulises llega con su embarcación a dos islas pequeñas, donde en
ella encuentran una cueva grande llena de comida, pero lo que no sabían era
que esa isla era habitada por ciclopes gigantes. Ulises y sus hombres quedaron
saciados por la comida allí dentro cuando son sorprendidos por el más ni
menos el hijo de Poseidón, Polifemo. Éste, tapo la cueva con una piedra
gigante, dejándolos atrapados y siendo devorados dos de sus hombres por el
gran ciclope, que luego más tarde quedo dormido y Ulises pensó en asesinarlo
pero se dio cuenta que era mala idea, ya que la roca que tapaba la entraba era
inmovible. Entonces Ulises, ante este hecho, fabrico una lanza y bastante vino,
con el objetivo de emborracharlo y cegarlo con la lanza y de esa manera
Polifemo abriera la puerta desesperado pidiendo ayuda. Ulises, hombre muy
inteligente le había dicho al ciclope que su nombre era Nadie, entonces, éste
empezó a gritar: “Nadie me ha hecho daño”, Ulises amarro las cabras encima
de sus hombres para ser un escape más exitoso y zarpar hacia sus casas.
Llegaron a Eolia, isla del señor Eolo Hipótada, y se quedaron un mes en su
casa viviendo. Al marchar, Eolo les regala víveres y un cobre que solo podían
abrir cuando llegaran al Ítaca. Ya en su viaje, Ulises se quedó dormido, y sus
hombres por su curiosidad destaparon el cobre, desatándose una gran tormenta
haciéndolos vagar hasta la isla de Eolo, donde no los recibieron muy bien y
siguieron navegando hasta que encontraron tierra. Ulises ordenó a sus hombres
a explorar, donde encontraron a la hija del rey que los guió hasta su padre el
rey donde éste los mando a asesinar y Ulises se vio obligado a huir de esa zona.
Luego encontraron a un pueblo de caníbales comiéndose a la mayoría de sus
hombres, pero Ulises pudo huir con algunos de sus hombres.

Luego, desembarcaron en la isla de una hechicera, Ulises mando a sus hombres


y Eurícolo, y encontraron la casa de la hechicera donde ésta los recibió de
buena manera, quien los convirtió en cerdos a todos menos a Eurícolo, que
logró huir para decírselos a Ulises. Éste fue a la casa de la hechicera Circe para
rescatar a sus hombres que fueron convertidos en cerdos por la maga, pero ésta
le dio hospitalidad durante un año. Antes de partir, Ulises pidió ayuda a los
dioses, y Zeus con intervención de Hermes pudieron convencer a Circe que los
dejara escapar y prometer que nunca más volviera a hacer daño. Ulises siguió
los concejos de la hechicera de cómo entrar al mundo de los muertos y salir
vivo del mismo. Consulto al vidente Tiresias la manera de encontrar una ruta
segura hacia Ítaca. Para ello, bajo al mundo de los muertos donde se cruzó con
muchas almas, entre ellas la de su madre, Anticlea, y las de sus amigos
Agamenón y Aquiles, muertos en la guerra de Troya.

Retomando el camino a casa, encontraron con las sirenas. Ulises consiguió que
sus hombres resistieran a los canticos seductores de estas criaturas siguiendo la
recomendación de Circe de taparles los oídos con cera y atándose él mismo al
mástil del barco de manera que pudiera oír su dulce voz sin peligro. Después
de resistir el letal remolino. De Caribdis en el mar y de escapar a Escila, un
monstruo de seis cabezas sediento de sangre, llegaron a la isla donde Apolo
cuidaba de su ganado. Hambrientos, los hombres ignoraron todo aviso y
sacrificaron algunos animales, lo que provoco que Apolo enviara una tormenta
de la que Ulises fue el único sobreviviente.

Tras la tormenta, Ulises fue arrastrado hasta la costa de Ogigia donde Calipso,
la bella ninfa del mar, se enamoró de él y lo mantuvo prisionero durante ocho
años, prometiéndole buena suerte e inmortalidad. Finalmente, Atenea
intercedió ante los dioses y estos convencieron a la ninfa de que lo liberara.

Justo cuando comenzaba a ver el final de su viaje, Ulises se topa con otra
desgracia: el dios Poseidón, enfurecido por la humillación que le había
infligido a su hijo Polifemo, envió una violenta tormenta que le hizo naufragar
en la costa de Feacio. Y así es como termina la narración de Ulises ante el rey
Alcino quien, conmovido, le proporciona un barco para que pueda volver a
Ítaca.

Siguiendo el consejo de Atenea, Ulises desembarca en Ítaca disfrazado de


mendigo. El pastor Eumaeus le informa de la arrogancia de los pretendientes
de Penélope y de la fidelidad de ésta. Entonces Ulises se reúne con su hijo
Telémaco y le revela su identidad. Oculto por su disfraz, Ulises llega al palacio
donde nadie lo reconoce excepto su fiel perro Argos y su antigua sirvienta
Euriclea. Penélope cuenta al mendigo el engaño con el que había conseguido
evitar la elección de un nuevo esposo entre sus muchos pretendientes: les
prometía elegirlo una vez que hubiese terminado de tejer la mortaja para su
suegro Laertes pero deshacía cada noche el trabajo realizado el día anterior. El
ardid le funcionó hasta que una criada la traicionó, y Penélope no tuvo más
remedio que completar su trabajo. La vuelta de Ulises se produce en el
momento en que los pretendientes intentan forzarla a tomar una decisión.

Es entonces que Penélope tiene la ocurrencia de someter a sus pretendientes a


una competición cuyo vencedor se convertirá en su esposo. Cada pretendiente
debe lanzar una flecha con un arco mágico que sólo Odiseo sabe utilizar. Todos
los participantes fracasan en el intento excepto Ulises, todavía disfrazado de
mendigo. Después de la victoria, Ulises y Telémaco ejecutan a todos los
pretendientes.

Finalmente, Ulises revela su verdadera identidad a Penélope, quien lo recibe


con lágrimas de alegría. La diosa Atenea retrasa el amanecer para prolongar su
reunión. De esta forma Ulises cuenta sus aventuras a su esposa mientras yacen
en el lecho matrimonial. La diosa interviene por última vez a favor de Ulises
contra los parientes de los pretendientes que querían vengarse. La paz vuelve a
establecerse en el reino.
GÉNERO: Clásicos universales / Ficción y literatura/Epopeya

AUTOR: Homero.

PERSONAJES PRINCIPALES:

Ulises/Odiseo: Rey de Ítaca.

Penélope: Esposa de Odiseo y madre de Telémaco.

Telémaco: Hijo de Odiseo y Penélope.

Atenea: Diosa de la sabiduría. Ayuda a Ulises en casi toda su aventura.

PERSONAJES SECUNDARIOS:

Mentor: Amigo de Odiseo.

Polifemo: Hijo de Poseidón, es uno de los ciclopes.

Antínoo: Uno de los pretendientes de Penélope. .

Poseidón: Era el dios del mar. Odiaba a Odiseo por dejar ciego a su hijo el
ciclope Polifemo.

Calipso: Era una diosa de las bellas trenzas. Tuvo como huésped a Odiseo por
ocho largos años.

TIEMPO: La Odisea fue escrita en el siglo VIII a.C, pero los hechos que narran
se sitúan en el XII a.C.

ESPACIO: Grecia.

RESEÑA DE LA ODISEA:

Esta obra, sin duda, es uno de los legados más maravillosos que ha dejado el
ingenioso Homero. En esta obra se manifiesta toda la esencia de la inteligencia,
demostrando que ésta le gana a la fuerza personificada en el magnífico Ulises.

Por otra parte, la Odisea es también una metáfora sobre los obstáculos que se
tienen que sortear en la vida para conseguir nuestros objetivos.

Justificación: Pese a no encontrar la obra JUVENTUD EN EXTASIS 2, tuve


que buscar otra que la reemplazara. Ésta me llevó a leer La Odisea.

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