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Podríamos decir que el núcleo central de la problemática quePopper trabaja en el texto, “La miseria

del historicismo”, es el demostrar que el historicismo es un método indigente, es decir, totalmente


estéril. De esta manera da cinco claves para comprender esta demostración. Estas claves son:

1. “El curso de la historia humana está fuertemente influido por el crecimiento de los
conocimientos humanos.”
2. “Es imposible predecir, racional y científicamente, el crecimiento futuro de los
conocimientos científicos.”
3. “Es imposible predecir el futuro de la historia humana.”
4. “No puede haber una teoría científica del desarrollo histórico.”
5. “El historicismo cae por su falta de fundamento racional o científico”. [Cf. POPPER,
Karl, La miseria del historicismo, Taurus, Madrid, 1973, p. 12.]

Una vez explicitadas estas claves o intenciones que el autor se propone demostrar a lo largo de la
presente obra, podemos analizar la estructura de la misma. Este libro se divide en cuatro capítulos,
a saber: I. Las doctrinas antinaturalistas del historicismo; II. Las doctrinas pronaturalistas del
historicismo; III. Crítica de las doctrinas antinaturalistas; IV. Crítica de las doctrinas pronaturalistas.

Las doctrinas o escuelas pronaturalistas o también llamadas por Popper, positivistas, están a favor
de la aplicación de los métodos de la física a las Ciencias Sociales, mientras que los antinaturalistas
o negativistas se oponen al uso de dichos métodos en las Ciencias del Espíritu.

Según Popper el historicismo es “…un punto de vista sobre las ciencias sociales que supone que la
predicción histórica es el fin principal de estas, y que supone que este fin es alcanzable por medio
del descubrimiento de los ‘ritmos’ o los ‘modelos’, de las ‘leyes’ o las ‘tendencias’ que yacen bajo la
evolución de la historia.”[POPPER, Karl, Op.Cit., p. 17]

De esta manera, una vez aclarado qué es el historicismo para Popper y en qué consisten las
escuelas antinaturalistas y pronaturalistas, el autor desarrolla en primer lugar, aquello que según él,
el historicismo no comparte con los métodos de las ciencias físicas. Luego procede a mostrar aquello
que si comparte con las ciencias físicas. Finalmente realiza una crítica a una y otra postura.

El primer elemento que las doctrinas antinaturalistas del historicismo rechazan es...
...el principio de generalización. “Este principio, al que se supone válido a través del espacio y el
tiempo, es considerado como la base del método de la física.”[POPPER, Karl, Op. Cit., p. 20] Los
antinaturalistas están en desacuerdo con el uso de este principio porque, según sostienen, las
uniformidades de las ciencias sociales son muy distintas a las de las Ciencias Naturales. Las
uniformidades sociales cambian por medio de la misma actividad humana, de un periodo histórico a
otro.

Además del principio de generalización, están en desacuerdo con el método experimental y esto
porque los experimentos sociológicos a gran escala nunca son experimentos en el sentido físico. No
están hechos para hacer progresar el conocimiento como tal sino para conseguir el éxito político. En
otras palabras, tiene un fin más bien práctico. Es por esto que podemos decir que las Ciencias
Sociales están dentro de la línea explicativa a diferencia de las ciencias naturales que están en la
línea comprensiva.
Están también en desacuerdo las doctrinas antinaturalistas con el principio de novedad, de
complejidad, de inexactitud de la predicción, de objetividad y valoración, y con el método cuantitativo.
Por razones de tiempo solo desarrollaremos de estos últimos, el problema del método cuantitativo.
Según da a entender Popper, el método de las Ciencias Sociales debería consistir en la realización
de una descripción de la sociedad y de su funcionamiento sin emitir juicio valorativo alguno.

“…la tarea del sociólogo es dar una explicación causal de los cambios sufridos en el curso de la
historia por entidades sociales…”[POPPER, Karl, Op. Cit., p. 39]

Por tanto, las leyes del comportamiento de estas entidades sociales no pueden ser cuantitativas sino
cualitativas. No podemos hablar en las Ciencias Sociales de cambio sin suponer una esencia que
no cambia. A esto Popper lo llama esencialismo metodológico, consistente en describir clara y
propiamente a las entidades sociales, distinguiendo lo esencial de lo accidental.

Ahora bien, todo lo dicho anteriormente corresponde al planteo de las doctrinas antinaturalistas del
historicismo. Por otro lado las doctrinas pronaturalistas del historicismo, es decir, las que encuentran
algo en común entre las ciencias sociales y las ciencias naturales, afirman que tanto la sociología
como la física son ambas una rama del conocimiento que intentan ser al mismo tiempo empíricas y
teóricas. Como ciencias teóricas tiene que explicar y predecir acontecimientos con la ayuda de
teorías o leyes. Como ciencias empíricas han de estar corroboradas por la experiencia.

De aquí se desprenden los problemas de la predicción en el ámbito de las Ciencias Sociales. La


deficiencia en la predicción en las Ciencias Sociales “…nace de la complejidad de dichos
acontecimientos”. [Cf. POPPER, Karl, Op. Cit., p. 51]

Con la observación sucede otro tanto ya que “…la historia, política o social, es la única fuente
empírica de la sociología.” [POPPER, Karl, Op. Cit., p. 53] La ciencia social no es nada más que
historia y consiste en el estudio de las fuerzas que operan sobre el desarrollo social, y sobre las leyes
de este desarrollo. [Cf. POPPER, Karl, Op. Cit., p. 20]

Según los historicistas se le reconoce a las Ciencias Sociales una tarea práctica. Es en este terreno
donde se ubican estos y sus oponentes y donde se ubica también el autor que nos ocupa para
realizar su crítica, afirmando la pobreza del método historicista.

Las Ciencias Sociales se han desarrollado a través de las críticas de las propuestas de mejoras
sociales, o más precisamente a través de determinados intentos de descubrir si cierta acción
económica o política tiende o no a producir un resultado deseado. [POPPER, Karl, Op. Cit., p. 72]

De esta forma el autor introduce un nuevo concepto, el de tecnología social o ingeniería social
fragmentaria. Según las palabras del propio autor:

“…usaré la expresión de ‘ingeniería social fragmentaria’ para describir las aplicaciones prácticas de
los resultados de la tecnología fragmentaria.” [POPPER, Karl, Op. Cit., p. 78]
Es aquí que, en última instancia, lo que importa a la ingeniería social fragmentaria es la solución
práctica de un problema social determinado. Por tanto, la tarea del ingeniero social fragmentario será
la de proyectar instituciones sociales y reconstruir y manejar aquellas ya existentes. [Cf. POPPER,
Karl, Op. Cit., p. 79] Ahora bien, encontramos como opuesta a la ingeniería social fragmentaria, la
ingeniería social utópica, de la cual diremos solamente que, según el autor, es incompatible con una
actitud verdaderamente científica.

Ahora bien, con el concepto de ingeniería social fragmentaria, Popper busca oponerse críticamente
al historicismo ya que este se identifica con las ideas de la ingeniería social utópica.

“…los holistas [utópicos] no solo se proponen estudiar la totalidad de nuestra sociedad por un método
imposible, se proponen también controlar y reconstruir nuestra sociedad ‘como un todo’.” [POPPER,
Karl, Op. Cit., p. 93]

Luego hace una crítica a la ley de la evolución teniendo en cuenta el traslado o trasposición de dicha
ley al ámbito de los estudios sociales. De aquí surgirá la ley del movimiento de la sociedad en orden
al progreso de la misma. Sin embargo, la esperanza de que encontremos una ley que permita
comprender el proceso por el cual la sociedad va cambiando, no es más que el resultado de un
malentendido, y esto debido a que en la sociedad no hay movimiento alguno semejante al de los
cuerpos físicos. Por tanto no puede haber tal o tales leyes en la sociedad.

Finalmente el autor realiza luego una distinción entre leyes y tendencias y los problemas que surgen
de la confusión de ambas. La ley es algo estático que establece o es establecida por una regularidad.
De esta manera algo que siempre sucedió de determinada forma, como la caída de los cuerpos
físicos, seguirá sucediendo de la misma manera. Por otro lado, la tendencia es una orientación, una
posibilidad. Lo cual no implica que ocurra aquello que ha sido previsto.

Es por esto que Popper prefiere hablar de tendencias y no de leyes en el ámbito de las Ciencias
Sociales a diferencia del historicismo que usa el término ley para explicar los movimientos de la
sociedad.

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