Hablo y no pienso,
lloro y no siento,
río sin razón y miento
sin intención.
El Loro
No lo parezco y soy pez,
y mi forma la refleja
una pieza de ajedrez.
El caballito de mar
Sal al campo por las noches
si me quieres conocer,
soy señor de grandes ojos
cara seria y gran saber.
El búho
Mi reinado está en el mar,
soy de peso regordeta;
un día, siglos atrás,
me tragué entero a un
profeta
aunque luego lo expulsé
al pensar que estaba a dieta.
La ballena
Salta y salta por los montes, Orejas largas, rabo cortito;
usa las patas de atrás,
su nombre ya te lo he dicho,
fíjate y lo verás.
El saltamontes
Soy señor muy elegante
y excelente nadador,
y puedo hacer con mi cuello
signos de interrogación.
El cisne
Mamífero rumiante
de cuello alargado,
por el desierto, errante,
siempre anda jorobado.
El camello
Por un camino muy oscuro
va caminando un animal.
El nombre del bicho
ya te lo he dicho.
La vaca
Es que el pobre ve tan poco
que tampoco mira ya,
topa que topa que topa,
con la topa lo hallarás.
El topo
Míralo del derecho y del revés,
va y viene, viene y va.
Si taba no es,
¿Qué será?
El tábano
corro y salto muy ligerito.
El conejo
Soy un animal pequeño,
piensa mi nombre un rato,
porque agregando una «n»
tendrás mi nombre en el acto.
El ratón
Mi casa llevo a cuestas,
tras de mí dejo un sendero,
soy lento de movimientos,
no le gusto al jardinero.
El caracol
Dos pinzas tengo,
hacia atrás camino,
de mar o de río
en el agua vivo.
El cangrejo
La jaula es su casa,
su ropaje amarillo,
con su canto alegra
a todos los vecinos.
El canario
Canta cuando amanece
y vuelve a cantar
cuando el día desaparece.
El gallo
Te doy leche y mi lana,
y para hablar digo:
«beeeee»,
si no adivinas mi nombre
yo nunca te lo diré.
La oveja
Las cinco vocales
en su nombre llevan,
y no siendo ave
por la noche vuela.
El murciélago
Nadie admira tu cantar,
ni tus patas, ni tu pico.
Todos se quedan
prendados de tu abanico.
El pavo real
¿Quién hace su casa
en la verde rama,
y allí a sus hijos
solicita y llama?
El pájaro
¿Qué animal de buen olfato,
cazador dentro de casa,
rincón por rincón repasa
y lame, si pilla, un plato.
El gato
Para ser más elegante
no usa guante ni chaqué
sólo cambia en un instante
por una “efe” la “ge”.
El elefante
Buscando bambú
por la China anda,
aunque está muy solo,
siempre va en panda.
El oso panda
Si te pregunto
cómo se llama
este gran bicho,
ya te lo he dicho.
La llama
Tiene lamparitas de luz verde Mi nombre lo leo,
y cuando es de noche las mi apellido es pardo,
enciende. quién no lo adivine,
es un poco tardo.
La luciérnaga
El leopardo

En rincones y entre ramas Trabajar, siempre mucho

mis redes voy construyendo,
para que moscas incautas,
en ellas vayan cayendo.
(La araña)
trabajé; aunque nunca estudié
en la escuela me conocen bien;
algunos dicen de mí: «terco
bicho es» y Pinocho mucho se
asustó cuando en mí casi se
convirtió. ( El burro)

LAS UVAS LA FRUTILLA

El sol
La Bruja

LA ABEJA
LA GATA
LA PERA

EL PERRO
EL PARAGUAS

LA MARIPOSA EL CANARIO

EL CARACOL LA RANA