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El derecho
a comunicar,
hOY
Desmond Fisher
ISBN 92-3-301991-8
Edición francesa 92-3-201991-4
Edición inglesa 92-3-101991-o
Publicado por la Editorial de la Unesco
7, place de Fontenoy, 75700 París (Francia)
Impreso en los talleres de la Unesco
@ Unesco 1984
Printed in France
hdice

Página

Prólogo .......................................................................................................................... 4
Introducción .................................................................................................................. 5
1. La sociedad de información ....................................................................................... 7
2. Necesidades y derechos .......................................................................................... 9
3. La libertad de información ....................................................................................... 11
4. La comunicación contrapuesta a la información ...................................................... 13
5. Estudios realizados ....................................................................................................... 15
6. Derechos y libertades ................................................................................................... 18
7. Hacia una definición ................................................................................................. 21
8. El individuo y la sociedad ............................................................................................. 23
9. El individuo en la sociedad ........................................................................................ 26
10. De la idea a la acción ..................................................................................................... 28
ll. La incorporación al derecho internacional ................................................................. 30
12. Derechos y recursos ..................................................................................................... 32
13. Implicaciones ................................................................................................................ 34
14. De cara al futuro ........................................................................................................... 38

Apéndices

A. Reunión de Expertos sobre el Derecho a Comunicar: Estocolmo,


mayo de 1978, Informe Final, Unesco CC-78/CONF. 630 ..... . .._...................... 40
B. Reunión de Expertos sobre el Derecho a Comunicar: Manila (Filipinas),
octubre de 1979, Informe Final, Unesco CC-8$WSl47 ..._.._.,........_,.,.,.........,...... 46
C. Reunión del Grupo de Estudio sobre el Derecho a Comunicar, Londres,
marzo de 1980, Informe Final, Unesco CC-8O/wS/48 .._..__... .___,
,... .._.. 51
D. Reunión del Grupo de Trabajo sobre el Derecho a Comunicar, Ottawa,
septiembre de 1980, Informe Final, IIC . .._..........._..............,.,.......,.,.,................. 54

3
Prólogo

En cumplimiento de una resolución de la Conferencia Gene- En la presente obra se intenta hace una síntesis de los puntos
ral de la Unesco en su 20.’ reunión (1978), en la cual se invitaba de vista, opiniones y esperanzas expresados en diversas reu-
al Director General a fomentar «un estudio a fondo.. del niones convocadas por la Unesco y otras organizaciones, así
concepto del derecho de comunicación», la Organización em- como en el número creciente de obras publicadas sobre el
prendió diversas actividades: reuniones de expertos, estudios particular. Se aspira a dar mejor a conocer el concepto, con
sobre aspectos concretos de ese concepto,, consultas con objeto de fomentar un más amplio debate que pueda desembo-
grupos especializados, etc. Todos esos programas apuntaban a car en una definición más clara y más completa y en una
llegar a comprender mejor un concepto que era por entonces determinación precisa de los elementos que integran el dere-
relativamente nuevo. cho a comunicar.
Más tarde, en 1980, la Comisión Internacional de Estudio de El autor, Desmond Fisher, Director de Desarrollo de la
los Problemas de la Comunicación hizo la siguiente recomen- Radiodifusión de la RTE, organización nacional de radiodifu-
dación: «Las necesidades de una sociedad democrática en sión de Irlanda, se interesa vivamente por el concepto de
materia de comunicación deberían quedar satisfechas median- derecho a comunicar, y ha participado en los debates sobre el
te la formulación de derechos específicos tales como el derecho mismo.
a ser informado, el derecho a informar, el derecho a la
protección de la vida privada y el derecho a participar en la *
comunicación pública, que encajan todos ellos en ese nuevo
concepto que es el derecho a comunicar. En vísperas de lo que De la elección y presentación de los hechos en esta obra es
cabría calificar de una nueva era en materia de derechos responsable su autor, así como de las opiniones expresadas en
sociales, todas las implicaciones del derecho a comunicar ella, que no coinciden necesariamente con los puntos de vista
deberían ser objeto de un minucioso estudio». de la Unesco.
Introducción

El derecho a comunicar es una idea y un ideal. la vez quienes ven ese concepto como un aspecto más de un
Es una idea por cuanto sólo existe todavía en forma teórica. ataque aunado de los medios de comunicación «occidentales»
No se ha formulado definición alguna del mismo, y no se ha y los que estiman que es un modo de socavar la importancia
llegado aún a un acuerdo sobre sus elementos integrantes y las que asignan los Estados socialistas a los derechos de la colecti-
relaciones mutuas de éstos. No existe una expresión concreta vidad.
de él en convenios y acuerdos internacionales o en instrumen- A pesar de todo ello, el concepto de derecho a comunicar es
tos jurídicos nacionales. un tema de gran actualidad. Los expertos de la comunicación
Es un ideal en el sentido de que sus partidarios hacen todo lo de todo el mundo lo están estudiando, e intentan ponerse de
posible para que sea formulado, definido y promulgado como acuerdo, si es posible, sobre una definición que pudiera propo-
derecho humano básico. nerse para su inclusión en futuros instrumentos nacionales e
Esto no quiere decir que se rechace como concepto ético o internacionales, referentes a las libertades de comunicación.
filosófico el derecho a comunicar entre ellos de los seres El Instituto Internacional de Comunicación, antes Instituto
humanos, ni que se niegue en la práctica, en general, su Internacional de Radiotelevisión, ha incitado a sus miembros a
ejercicio. La inexistencia hasta la fecha de una formulación de estudiar el concepto, y una gran parte de los primeros trabajos
ese derecho se debe, al menos en parte, a que se da por sobre el particular han corrido a cargo del East-West Commu-
supuesto. Al igual que el derecho a existir, se estima que es tan nications Institute de la Universidad de Hawaii, de Manoa
fundamental que no hace falta expresarlo. (Honolulú).
No se le reconoce oficialmente por otras razones también. En 1974, la Conferencia General de la Unesco autorizó al
Abarca toda una gama de libertades y facultades conexas en Director General a «analizar el derecho a la comunicación», y
materia de información y comunicación. Algunas de esas la Unesco fomenta actualmente la realización de estudios al
libertades son aceptadas ya y, en muchos casos, han sido respecto y contribuye a financiarlos.
sancionadas en leyes y constituciones nacionales y en convenios El presente documento forma parte de esos estudios, y
internacionales; otras siguen siendo objeto de un debate en pretende reconstituir la historia del debate sobre el concepto
organismos y reuniones internacionales. Es difícil engarzar la de derecho a comunicar desde que fue enunciado públicamen-
relación entre ellas y, de hecho, no se ha intengado ensamblar te por primera vez, a describir el estado actual de las reflexio-
esos diferentes aspectos de los derechos de comunicación, para nes teóricas sobre el particular y, en la mayor medida posible, a
determinar si es posible considerarlos como aspectos concretos proponer las fases próximas en la tarea de definición de dicho
de un principio unitario. derecho.
En segundo lugar, el ejercicio de las diversas libertades y El autor tiene, sobre ciertos aspectos del derecho a comuni-
facultades en materia de comunicación que parezcan formar car, opiniones muy arraigadas que en ciertos casos, pueden
parte de un derecho global a comunicar está sometido a oponerse a las de sus colegas. Pero, como corresponde al
diferentes reservas y restricciones. Por consiguiente, la formu- ciudadano de un país que se mantuvo neutral durante la
lación de esas libertades y de sus limitaciones podría dar la Segunda Guerra Mundial y que no pertenece a ningún bloque
impresión de que restringe el derecho a comunicar propiamen- ideológico o militar, ha intentado honradamente adoptar una
te dicho, en vez de corroborarlo. actitud imparcial y equilibrada al resumir y ensamblar los
En tercer lugar, al reconocimiento del derecho a comunicar diversos puntos de vista expresados hasta la fecha en los
se oponen, desde puntos de vista ideológicos contrapuestos, a estudios referentes al derecho a comunicar.

Nota
La mayoría de las citas de las páginas siguientes corresponden a documentos de la Unesco y
a ensayos y artículos de dos libros que contienen los principales textos publicados sobre el
derecho a comunicar:
L.S. Harms, Jim Richstad y Kathleen Kie (comps.)
Right to Communicate: Collected Papers. Honolulu: Social Sciences and Linguistics
Institute, University of Hawaii at Manoa, 1977, y
LS. Harms y Jim Richstad (comps.)
Evolving Perspectives on the Right to Communicate. Honolulu: East-West Center, East-
West Communication Institute, 1977.
Estas dos obras se citan en el presente trabajo como sigue: Collected Papers y Evolving
Perspectives.
Desmond Fisher es Director de Desarrollo de la Radiodifusión de RTE, organización
nacional de radiodifusión de Irlanda, y redactor de la Irish Broadcasting Review.
1. La sociedad de información

Desde que el mundo es mundo, ha habido de cuando en ción permite a grupos más pequeños comunicar entre ellos.
cuando cambios que han repercutido profundamente en la Con el ritmo actual de progreso, la comunicación interperso-
condición humana. Muchos de los jalones de la evolución que nal entre dos individuos cualesquiera será técnicamente posi-
nos ha llevado a nuestra fase actual de desarrollo fisiológico, ble en un futuro próximo.
psicológico y sociológico se han perdido en la prehistoria. Pero En espera de esa nueva era de posibilidades de comunica-
en la era histórica podemos advertir una transición de la ción, se acepta cada vez más ampliamente que las actuales
humanidad, de una existencia nómada, basada en la caza, a disparidades en la posesión de la tecnología de comunicación
una vida comunitaria sedentaria de carácter agrícola, y de ella no son solamente injustas sino también peligrosas. El desfase
a la sociedad industrial de los dos siglos últimos. entre los países ricos en comunicación y los pobres está alcan-
Actualmente, estamos pasando de la sociedad industrial alo zando proporciones críticas, coartando los intentos de mejorar
que los sociólogos llaman la sociedad de información. No se la circulación de la información en todo el mundo, porque se
hace ya hincapié en la industria y los servicios sino en el estima que la reivindicación de libre circulación no es sino una
tratamiento de la información, esto es, la preparación, transfe- añagaza para consolidar la posición económica dominante de
rencia y almacenamiento de información. Hoy en día, más de las naciones que poseen recursos abundantes en materia de
la mitad de la población activa de los Estados Unidos de comunicación, y que los esfuerzos encaminados a equilibrar
América se dedica a esa forma de trabajo. El sector de la esa circulación en interés de todas las naciones constituyen una
comunicación es el que crece más deprisa en nuestro tiempo. forma de control y de censura. Por ello, los intentos de
Todo cambio fundamental del estilo de vida ha ido acompa- establecer un sistema mundial de comunicación más satisfacto-
nado de cambios de las estructuras social y política. Las rio, por muy diferentemente que pueda definírsele en las
familias nucleares se juntaron para constituir la tribu nómada. distintas partes del mundo, se han quedado atascados a causa
Los asentamientos permanentes desembocaron en la ciudad- de los enfrentamientos políticos e ideológicos. En particular,
Estado, los feudos, principados y ducados, los reinos e impe- la aparición del Tercer Mundo como importante elemento en
rios, las naciones-Estados y los bloques de poder. La industria- el escenario geopolítica ha suscitado la reivindicación de una
lización engendró el crecimiento de las ciudades y de los distribución más justa de la capacidad tecnológica de partici-
sindicatos, la instrucción universal y los sistemas democráticos par en la creciente transferencia de información.
actuales. La ciencia y la tecnología se desarrollaron al compás Todos esos factores han engendrado una preocupación nue-
de los cambios de las estructuras política y social: en realidad, va y acuciante por las libertades de comunicación. Si no existen
fueron en muchos casos las causantes de tales cambios. la libertad y la capacidad de comunidad, Lcómo podrá la
Es probable que la «explosión de la comunicación» de la humanidad actualizar plenamente su potencial, en el nivel del
época moderna suscite cambios de dimensiones comparables. individuo y en el de la comunidad? Si hay una disparidad
Existe ya la base tecnológica para los mismos. Los recursos en grande y creciente entre los recursos en materia de comunica-
materia de comunicación, tan escasos antes que su posesión ción disponibles en las diferentes partes del mundo, L4rno va
suponía la concentración en pocas manos del poder y de la ser posible establecer la paz, la prosperidad y el progreso? Si,
influencia, pueden llegara ser tan abundantes que desaparezca después de haber alcanzado su libertad política, las naciones
su valor de exclusividad o escasez. De hecho, la asociación de siguen siendo económicamente inferiores porque carecen de
la informática y de los sistemas de comunicación, que es la base tales recursos, Lpodremos decir que ha terminado realmente la
de la sociedad de información, permite un aumento de la era colonial?
capacidad de producir, someter a tratamiento, distribuir y Las actuales definiciones y formulaciones de las libertades
almacenar información tan descomunal que se teme incluso de wmunicación no ofrecen la perspectiva de contestar esas
una contaminación o un exceso de información. preguntas. Los diferentes conceptos -ampliamente debatidos
La capacidad de manejar las enormes cantidades de infor- y, en algunos casos, enunciados en acuerdos internacionales-
mación actualmente existentes producirá inevitablemente un de libertad de información, de expresión y de prensa y de la
cambio cualitativo del propio proceso de comunicación y, por circulación libre y equilibrada de la información han resultado
consiguiente, de sus efectos políticos y sociológicos. Desbara- insuficientes.
tará las pautas actuales de transferencia de información. Desa- Ello se debe a varias razones:
parecerá la necesidad-y también, por cierto, la posibilidad-
de ejercer el pleno control reglamentario que hacía falta 1. Se comprende ya mejor la importancia fundamental del
cuando escaseaban los recursos en materia de comunicación. acto de comunicar propiamente dicho, a la vez para el
Menguará la importancia de los medios de comunicación de desarrollo del individuo y para el bienestar de la sociedad de
masas, como se observa ya. En muchos países, a los periódicos la cual forma parte.
les resultará difícil sobrevivir. Los monopolios de radiodifu- 2. Se acepta ahora ya que los actuales criterios, políticas y
sión están desapareciendo casi por doquiera, al menos en los prácticas de comunicación tienen su origen en un pequeño
países occidentales. El material miniaturizado de comunica- número de ambientes culturales y concepciones del mundo

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particulares, y que es necesario tener en cuenta otras con- Todo ello depende, a su vez, de la definición, formulación
cepciones y culturas al determinar los principios generales. y ejercicio de unas libertades de comunicación básicas. Las
3. Al percibirse cada vez más claramente la interdependencia, declaraciones actuales referentes a tales libertades son inade-
no sólo de los individuos sino también de las comunidades, cuadas o inaceptables. La libertad de opinión y expresión
se exige una comprensión más amplia de las necesidades enunciada en la Declaración Universal de Derechos Huma-
mundiales en materia de comunicación y de los derechos y nos, no es lo suficientemente básica. Hace hincapié en el
deberes que de ellas se derivan. contenido de la comunicación de sentido único, del emisor al
4. A consecuencia de los recientes adelantos tecnológicos, la receptor de la comunicación. Otras formulaciones posteriores,
anterior escaze de posibilidades de comunicación está ce- como las de la «libre circulación de la información» y de la
diendo el paso a una abundancia relativa, si bien desigual- «circulación libre y equilibrada de la información» quedaron
mente repartida. enzarzadas en consideraciones ideológicas, y los intentos de
5. El reconocimiento de la necesidad de un nuevo orden definirlas resultaron vanos.
económico y de la información en el mundo realza la El concepto de derecho a comunicar brinda la posibilidad de
necesidad consiguiente de ampliar las formulaciones exis- salir de semejante atolladero. Este concepto, relativamente
tentes de los derechos de comunicación, con objeto de nuevo, fue enunciado por primera vez en 1969. Expresa un
poder hacer frente a nuevas exigencias y circunstancias. principio filosófico más fundamental y tiene una aplicación
Es urgentemente necesario volver a examinar y perfeccionar más amplia que las anteriores formulaciones de los derechos
anteriores declaraciones relativas a los derechos y libertades de comunicación. Procede de la naturaleza misma de la
de comunicación, para poder tener en cuenta las nuevas persona humana, como ser comunicador, y de la necesidad
realidades y conocimientos. Cabe prever que, al desarrollarse humana de comunicación, en el nivel del individuo y en el de la
la tecnología de la comunicación, al menguar la necesidad de sociedad. Es universal. Hace hincapié en el proceso de comu-
establecer controles y la posibilidad de aplicarlos, al hacerse nicación, y no en el contenido del mensaje. Implica la partici-
más acuciantes las necesidades en materia de información de pación. Parte del principio de que hay una transferencia
los individuos y las sociedades, al surgir nuevas oportunidades interactiva de información. Su fundamento es la idea ética o
de crear un equilibrio más justo entre los recursos internacio- humanista de que existe la responsabilidad de garantizar una
nales de comunicación, se produzcan grandes cambios en la distribución mundial más justa de los recursos necesarios para
sociedad o que, por lo menos, sean factibles tales cambios. La que la comunicación resulte posible.
eventualidad de que se concreten en la realidad y la forma que Sus partidarios consideran, por ello, que el concepto de
puedan revestir dependerá del grado en el cual se faciliten «derecho a comunicar» es más fundamental, más completo y
recursos y de la existencia de las libertades políticas y sociales más expresivo y que puede ser probablemente más eficaz que
que presupone su aplicación. las formulaciones anteriores.

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2. Necesidades y derechos

Según Albert Camus, «la libertad no es sino la oportunidad de enemigo. Si separamos a un niño recién nacido de todo contac-
ser mejor».’ La elegante sencillez de la frase encubre ideas to humano y lo mantenemos así durante años y años, al llegar a
capitales para el progreso humano y que son la fuente de todos la edad adulta no sabrá quién es. Únicamente mediante la
los esfuerzos encaminados a determinar las libertades funda- interrelación -esto es. mediante la comunicación con los
mentales y los derechos humanos básicos. demás- podemos conocer nuestra propia personalidad.
La vida es crecimiento. La historia del hombre, desde el La comunicación constituye además la base de la sociedad.
légamo o el polvo protoplásmicos hasta cualquier posible Sin ella no puede haber cooperación ni paz. La comunidad
«noosfera» teilhardiana a que puede llegar la especie humana, depende de la comunicación.
es la historia de un desarrollo, de una mejora, de la actualiza- La historia de la civilización es la historia de la comunica-
ción de un potencial. Como lo demostró Darwin, ese creci- ción. Los inventos de la palabra, de la escritura, de la impren-
miento depende de las posibilidades de elección, de la oportu- ta, del telégrafo, de la radio y la televisión, hasta llegar a la
nidad de escoger entre esas varias posibilidades o, como dice actual «explosión de la comunicación», han sido grandes jalo-
Camus, de la «oportunidad de ser mejor». La libertad es, pues, nes en la historia de la vida humana y han abierto nuevas
la oportunidad efectiva de tomar decisiones que contribuyan al etapas en su desarrollo y nuevas oportunidades de elección.
adelanto de la vida y al crecimiento de la especie humana. La comunicación -esto es, la transferencia de
Según Archibald McLeish, poeta, jurista y estadista norteame- información- puede emplearse -como cualquier otra dote
ricano y uno de los inspiradores de la creación de la Unesco: humana- para bien o para mal. En todas las sociedades y en
«La libertad es el derecho a escoger; el derecho a crearse todas las épocas, la información es poder. La omnisciencia es
posibilidades de elección». el equivalente de la omnipotencia: el Omnisciente es también
Por consiguiente, las libertades o derechos humanos vienen el Todopoderoso. Los fuertes son quienes poseen la informa-
determinados por necesidades humanas. Expresan lo que ción y controlan los mecanismos mediante los cuales se trans-
necesitan los seres humanos para poder actualizar plenamente mite la información, es decir, los cauces de comunicación.
su potencial, para alcanzar la plenitud de su humanidad. La evolución gradual de la democracia y la desmitificación
Ciertos derechos son fundamentales. Lo son evidentemente del proceso de comunicación, y la más amplia difusión consi-
el derecho a la vida, a la alimentación y la vivienda. Sin vida no guiente del poder que confiere la posesión de información y de
hay existencia; sin alimentos y sin vivienda, no es posible los medios pertinentes para comunicarla, han corrido parejas,
garantizar la perpetuación de la vida. y se puede decir que, esencialmente, aquélla se debe a éstas.
Hay otros derechos menos obvios. La libertad de la persona, Cuanto más numerosos sean los que poseen información, y
la libertad de religión y la no discriminación en función de la cuanto más amplia sea la información de que dispongan, tanto
raza o del origen figuran en la enumeración de los derechos mejor será la sociedad y tanto más sólida su base democrática.
humanos y libertades fundamentales de la Carta de las A este respecto, los historiadores futuros-y no los autores
Naciones Unidas. Y no porque sean indispensables para la de hoy- podrán evaluar la intensidad de la influencia de tres
existencia sino porque son necesarias para el crecimiento y el fenómenos recientes en la vida de la humanidad, a saber:
pleno desarrollo de los seres humanos. Proporcionan lo que 1. El crecimiento descomunal de la ciencia y de la tecnología,
Camus llamaba «la oportunidad de ser mejor». en particular en los campos de la informática y de las
El hecho de que en la historia humana abunden los casos de comunicaciones;
negación de los derechos humanos no invalida la necesidad de 2. La descentralización de la comunicación y la consiguiente
formularlos sino que hace que resulten más necesarios toda- redistribución del poder que confiere la posesión de infor-
vía. En el campo de la comunicación esa necesidad es particu- mación y de los medios pertinentes para difundirla y recibir-
larmente importante hoy en día. la;
La vida depende de la comunicación. Las reacciones quími- 3. La percepción cada vez más generalizada de la interdepen-
cas de los elementos de la célula más simple, la actividad dencia de los individuos, las culturas, las naciones y los
nuclear del átomo y la transmisión de la fuerza vital requieren pueblos en lo que Adlai Stevenson llamó «la nave espacial
todos ellos alguna forma de comunicación. Cuanto más alto Tierra», y la necesidad consiguiente de crear un nuevo
está un ser vivo en la escala de la evolución, tanto mayores son orden internacional en campos capitales de las relaciones
sus necesidades y sus dotes en materia de comunicación. Los humanas.
seres humanos, situados en el escalón más alto de la evolución En su forma más reciente, esos fenómenos tienen su origen y
-por lo menos mientras no se demuestre que existen seres su fuente en la Segunda Guerra Mundial, durante la cual hubo
más inteligentes-, son quienes tienen las mayores necesida- adelantos extraordinarios de la comunicación y de su empleo
des y las dotes más desarrolladas. para atacar más salvajemente que nunca la vida y la libertad
La comunicación es una necesidad para el individuo. Nadie
se conoce a sí mismo si no es en relación con otras personas:
como hijo de alguien, como padre, como amigo o como 1. Albert Camus. en L’homme révolré.
humanas, lo cual trajo consigo una reordenación del poder en 1946, las Naciones Unidas y sus organismos especializados se
el mundo y, al mismo tiempo, hizo ver a todos que, por el inspiraron en una perspectiva diferente. Se hacía entonces
hecho de poseer la capacidad de eliminarse a sí misma, la hincapié en la libertad de información, y no en la de comunica-
especie humana no ha sido nunca tan interdependiente como ción.
hoy. Todo ello suscitó nuevos y urgentes intentos de definir y A posteriori, se puede decir que aquella perspectiva era
promulgar unos derechos y libertades para la humanidad y de demasiado estrecha. Al centrarse en una medición cuantitati-
establecer unos sistemas más perfectos en los órdenes econó- va de los recursos en materia de comunicación, y no en el
mico y social, para garantizar-el desarrollo y la supervivencia contenido del mensaje y en el proceso de comunicación pro-
de la especie humana. piamente dicho, el debate sobre la libertad de información
Pero, inmediatamente después de la Segunda Guerra Mun- estaba abocado a la politización y a un callejón sin salida. El
dial, esos hechos nuevos no estaban todavía tan claramente derecho a comunicar constituye quizás un nuevo punto de
perfilados como hoy. Al empezar a trabajar en este campo en partida y brinda una nueva oportunidad.

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3. La libertad de información

Desde el primer momento, las Naciones Unidas destacaron la dependencia similar con respecto a los materiales de televi-
importancia de las libertades en materia de información para la sión, las películas y los libros. Se estimó entonces que la
construcción de una sociedad mundial mejor. El artículo 55 de importancia que se daba a los valores extranjeros constituía
la Carta estipula que los Estados Miembros promueven «el una grave amenaza para la identidad cultural de los países en
respeto universal a los dereechos humanos y a las libertades desarrollo.
fundamentales», y en su resolución 59 (1) la Asamblea Gene- Una autora resumió como sigue las críticas que se formula-
ral declaró, en 1946, que la libertad de información es un ban al respecto:
derecho humano fundamental y la piedra de toque de todas las «Los medios de comunicación de masas son demasiado
libertades que propugnan las Naciones Unidas. poderosos: su penetración es demasiado amplia y profun-
En la Declaración Universal de Derechos Humanos, apro- da. Presentan un punto de vista extranjero, que graban en
bada por la Asamblea General el 10 de diciembre de 1948, se unas naciones que están intentando forjarse una identidad
adoptó un criterio similar: en su artículo 19, que es el más moderna e independiente. Carecen, además, de los atribu-
importante en materia de comunicación, se dice que: tos de exactitud y objetividad.. . en los que han basado su
«Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de pretensión de preeminencia.»3
expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a A consecuencia de las críticas creecientes contra lo que se
causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informa- calificaba de circulación en un solo sentido de la información,
ción y opiniones y el de difundirlas, sin limitación de acabó por considerarse que resultaba inadecuado el anterior
fronteras, por cualquier medio de expresión.» concepto de la «libertad de información». Se propuso el nuevo
La labor de las Naciones Unidas en el campo de la comuni- concepto de «libre circulación de la información», que fue
cación se fue centrando poco a poco en la Unesco, la cual descartado, sin embargo, más tarde por otro más amplio: el de
empezó a hacer hincapié, a partir de 1960, en la estrecha «circulación libre equilibrada de la información», el cual pas á
vinculación que existe entre el desarrollo y la comunicación. formar parte del programa aprobado en su 18.” reunión por la
La compilación de datos sobre los recursos regionales en Conferencia General de la Unesco (1974).4
materia de comunicación había puesto de manifiesto la exis- Dos años más tarde, en Nairobi, la Conferencia General
tencia de grandes disparidades entre los países. Por ello, la aprobó un plan quinquenal en el cual se establecía que proce-
Unesco definió unas «normas mínimas» para los programas de día dar la máxima prioridad a las medidas encaminadas a
desarrollo. Se proponía en ellas que todo país debía aspirar a reducir la disparidad en materia de comunicación entre los
disponer por lo menos de diez ejemplares de periódico, cinco países desarrollados y los países en desarrollo y a lograr una
receptores de radio y dos plazas de cine por cada cien circulación internacional de la información más libre y más
habitantes.’ equilibrada. La Conferencia General encargó asimismo al
Ese criterio se basaba en la idea, predominante por enton- Director General que examinara todos los problemas de co-
ces, de que bastaba con establecer sistemas de comunicación. municación de la sociedad moderna, teniendo presentes los
Más tarde, se llegó a la conclusión de que había otros factores adelantos tecnológicos y toda la complejidad y envergadura de
más importantes, a saber: el contenido de los sistemas de la evolución reciente de las relaciones internacionales. A
comunicación y el derecho de los individuos a utilizarlos. Este consecuencia de esa decisión, se constituyó la Comisión Inter-
nuevo criterio se expresó claramente en el informe de nacional de Estudio de los Problemas de la Comunicación,
1969-1970 del Director General de la Unesco, en el cual presidida por el Sr. Sean MacBride, ex Ministro de Asuntos
señalaba que, en su doble aspecto -documentación, que es Exteriores de Irlanda y titular de los Premios Nóbel y Lenin.
memoria y comunicación, que es intercambio de todas las Otros dos años más tarde, en su 20.” reunión, celebrada en
formas de expresión y de estímulo-, la información resulta París, la Conferencia General expresó su preocupación por el
indispensable para la vida espiritual y la misión de la Unesco; y estado insatisfactorio del sistema de comunicaciones en el
que los verdaderos progresos de la Unesco habrán de calibrar- mundo, y propugnó un nuevo orden mundial de la información
se ante todo por lo que pueda hacer para facilitar a todos un y de la comunicación más justo y más equilibrado.
acervo de conocimientos y un sistema de comunicación que
sean uno y otro universales.*
1. Véase «iQué sabemos de la comunicación?», Documento n” 9 de la Comisión
Por aquehas fechas, se llevaron a cabo muchas investigacio-
Internacional de Estudio de los Problemas de la Comunicación, p. 5.
nes sobre el desequilibrio existente en la transferencia interna- 2. Introducci6n al Provecto de Proerama v de Presuouesto txua 1969.1970.
cional de información. Se pudo observar que el grueso de la Conferencia Generaí de la Une&, 15. á reunión. ks, 1968.
información mundial procedía de cuatro agencias de noticias 3. Rosemary Righter, ‘Whose New?, Politics, the Press and the Third World’,
Londres, 1978, p. 23.
occidentales, que se refería principalmente a los países occi-
4. Puede verse una exposición muy completa de la evolución del modo de
dentales, que era ím fiel reflejo de ideas occidentales y que, al enfocar las libertades de comunicación en la Unesco, en «De la libertad de
ocuparse de otras partes del mundo, las trataba con una visión información a la circulación libre y equilibrada de la información», Documen-
occidental. Esas investigaciones pusieron de manifiesto una to N.” 8 de la Comisión Internacional de Estudio de los Problemas de la
Comunicación. Unesco.

11
En el debate, se puso cada vez más claramente de manifiesto de muchas de las ideas actuales que llevan al reconocimien-
que el modelo de comunicación aceptado en general hasta to de nuevos derechos humanos.
entonces resultaba demasiado estrecho. La mejora de la circu- El derecho a la comunicación constituye una prolonga-
lación de la información no suponía aumentar la masa de ción lógica del progreso constante hacia la libertad y la
elementos informativos difundidos y el volumen de los medios democracia. En todas las épocas históricas, el hombre ha
de tecnología de la comunicación disponibles o el contenido de luchado por liberarse de los poderes que le dominaban,
la comunicación. Se estimó que el acceso y la participación independientemente de que fueran políticos, económicos,
eran factores decisivos para una buena utilización de las sociales o religiosos, y que intentaban coartar la comunica-
comunicaciones al servicio del fomento de la cultura, el desa- ción. Gracias únicamente a unos esfuerzos fervientes e
rrollo y el progreso de la humanidad. Se empezó a apreciar la infatigables, los pueblos han conseguido la libertad de
importancia del aspecto interactivo y de doble sentido de la palabra, de prensa y de información. Hoy en día, prosigue
comunicación, y se advirtió gradualmente la necesidad de las la lucha por extender los derechos humanos y lograr que el
libertades de comunicación, esto es, del derecho a comunicar. mundo de las comunicaciones sea más democrático que
Los resultados de esa nueva concepción del problema tuvie- ahora. Pero en la presente fase de la lucha intervienen
ron un fiel reflejo en el Informe Final de la Comisión nuevos aspectos del concepto fundamental de libertad. La
MacBride, que constituye el análisis más completo de toda la exigencia de una circulación de doble dirección, de un
problemática de la comunicación publicado en los últimos intercambio libre y de posibilidades de acceso y participa-
años. En él se resume la evaluación de las ideas sobre los ción dan una nueva dimensión cualitativa a las libertades
derechos de comunicación, y se expresa el convencimiento de conquistadas sucesivamente en el pasado. La idea del
que el concepto de derecho a comunicar puede constituir una derecho a comunicar eleva todo el debate sobre la «libre
solución: circulación» a un nivel superior, y ofrece la perspectiva de
Hoy en día se considera que la comunicación es un aspecto sacarle del callejón sin salida en el cual se ha mantenido en
de los derechos humanos. Pero este derecho se concibe los treinta años últimos.»5
cada vez más como el derecho a comunicar, y rebasa el En los capítulos siguientes se expone la evolución de ese
derecho a recibir comunicación o a ser informado. Se nuevo concepto de derecho a comunicar.
estima pues, que la comunicación es un proceso bidireccio-
nal, cuyos participantes -individuos o colectivos- man-
tienen un diálogo democrático y equilibrado. Esta idea de 5. Un solo mundo. voces múltiples. Informe de la Comisión Internacional de
diálogo, contrapuesta a la de monólogo, es la base misma Estudio de los Problemas de la Comunicación: Unesco, 1980, pp. 300 y 301.

12
4. La comunicación contrapuesta a la información

Mientras se debatía en las Naciones Unidas y en la Unesco el nario de las Naciones Unidas (Director de los Servicios de
tema de las libertades en materia de información, Jean d’Arcy Radio y Medios Audiovisuales de la Oficina de Información
escribió un artículo innovador en el cual proponía el concepto Pública de las Naciones Unidas, en Nueva York), su iniciativa
de derecho a comunicar. Su primera frase era admirablemente no suscitó gran entusiasmo. Muchos de quienes intervenían en
directa y sin rodeos: los estudios y debates de las Naciones Unidas sobre la libertad
«Llegará un día en que la Declaración Universal de Dere- de información temían que la introducción de ese nuevo
chos Humanos tendrá que abarcar un derecho más amplio concepto perturbara y retrasara sus deliberaciones.
que el del individuo a la información, formulado por prime- Lakshmana Rao expresó muy bien sus preocupaciones al
ra vez hace veintiún años en el artículo 19. Ese derecho es el preguntar en 1975 por qué iba a ser necesario rebasar los
derecho que tiene el individuo a comunicar.»’ conceptos de libertad de información y de libre circulación de
La tesis de d’Arcy era que los medios de comunicación han la información, sobre los cuales se habían hecho ya tantos
determinado siempre las estructuras políticas y sociales, y que trabajos preparatorios, para adoptar un nuevo concepto, es-
la persona 0 el grupo que controla las comunicaciones controla trechamente relacionado con ellos y que contenía en gran
de hecho la sociedad. Mientras los medios de comunicación parte los mismos elementos, lo cual produciría inevitablemen-
fueron limitados, el vulgo aceptó que los controlaran dirigen- te nuevas controversias y frenaría la adopción de medidas
tes,religiosos, políticos o individuos privados. Los instrumen- eficaces.
tos de comunicación determinaban las estructuras de comuni- «¿Qué ha ocurrido desde 1948 -preguntaba Rao- que
cación, y su posesión confería un poder. haya suscitado un giro casi total en nuestro modo de enfocar
Hoy, en cambio, esos instrumentos están cambiando y se las ambiciosas aspiraciones en lo tocante a la circulación de
utilizan mucho más ampliamente. Cuanto más accesibles re- la información? ¿Qué es lo que nos ha llevado gradualmen-
sulta, tanto más tienen que cambiar las estructuras de comuni- te, pero casi ineludiblemente, a replantearnos las premisas
cación, y todas las demás de la sociedad, para poder amoldarse en las cuales se basaba todo el edificio? ¿Por qué razón el
a la nueva situación. D’Arcy escribía: mismo organismo de las Naciones Unidas que ha estableci-
«En efecto, hoy en día pueblos enteros han catado los frutos do eficazmente unos acuerdos que facilitan la libre circula-
del saber, y si resultan más difíciles de gobernar ello se debe ción de la información en todo el mundo estima hoy necesa-
quizás a que los instrumentos de comunicación, informa- rio volver a empezar, y emprender estudios encaminados a
ción y participación que se les ofrecen han dejado de analizar más 0 menos el mismo tema con una formulación
corresponder al mundo actual y a sus progresos diferente: «el derecho a comunicar»? Aun suponiendo que
tecnológicos.»* esa nueva expresión sea algo más amplia y profunda en su
connotación que la anterior, se me antoja +ometiendo la
Y concluía diciendo:
insensatez de adentrarme en un terreno que otras personas
«Si tenemos presente que las estructuras sociales se crean más juiciosas han eludido- que la libre circulación de la
para el hombre, y que todo intento de mantenerlas cuando información es quizás el elemento más significativo del
han perdido ya su utilidad está abocado a la violencia, concepto de derecho a comunicar.»4
observaremos que el satélite de difusión directa y la tecno- Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial,
logía consiguiente engendrarán posibilidades de comunica- durante la cual había sido casi imposible distinguir entre
ción infinitamente mayores, y un derecho real a comunicar información y propaganda, yen el contexto de la «guerra fría»,
en todas sus formas. En esa trayectoria, el tiempo sólo tiene esa posición resultaba legítima. Su fallo, que se advierte mejor
una importancia secundaria; lo que cuenta es la voluntad de retrospectivamente, era que presentaba la libertad de infor-
llegar a la meta.»3 mación esencialmente en una forma pasiva: se trataba del
Han pasado más de diez años desde que se propuso pública- derecho de todos a ser informados.
mente en esa forma el derecho a comunicar. En cierto sentido, Se concebía la circulación de la información en un solo
el concepto de d’Arcy era una idea que estaba ya en sazón. Los sentido, desde la minoría a la mayoría, desde el centro a la
debates de las Naciones Unidas y de la Unesco sobre la periferia y de arriba a abajo. Era aquélla la época de unos
libertad de información y la libre circulación de la informa- medios de comunicación de masas controlados por los Estados
ción, que contenían muchos de los mismos elementos que el
derecho a comunicar, quedaron encerrados muy pronto en un
callejón sin salida, a causa de maniobras políticas y de conflic- 1. EBU Review. 118 (1969): 14.18.
tos de ideología. Podía, pues, resultar muy útil encontrar un 2. Ibrd.
modo de salir del atolladero. 3. Ibrd.
4. V.L. Rao, &!formation Imbalance in Asia)>, p. 59. Colkcted Papen. Rao es
El derecho a comunicar parecía proporcionar tal posibili-
actualmente uno dc 10s funcionarios de la Unesco que se dedican más
dad. Sin embargo, a juicio de otros autores introducía una activamente a fomentar la realización de trabajos sobre el concepto de
complicación. Aunque d’Arcy era por aquel entonces funcio- derecho a comunicar.

13
o por poderosos intereses privados y de una tecnología que iba No obstante, hay que aceptar que la introducción del con-
a quedar muy pronto afectada por una verdadera revolución. cepto de derecho a comunicar, en sustitución de los de libertad
En la actualidad, se concibe la información de otro modo. de información y de libre circulación de la información, puede
No interesa ya simplemente el contenido de la comunicación complicar el debate y retrasar el reconocimiento internacional
sino el propio proceso. Los progresos tecnológicos de las de derechos en materia de comunicación. Pomorski ha señala-
comunicaciones han puesto la posibilidad de comunicar al do con razón que el concepto de libre circulación resulta más
alcance de un número mayor de personas. Los medios de idóneo para la acción jurídica que el de derecho a comunicar.6
comunicación de masas están cediendo el paso a los minime- Al mismo tiempo, es evidente la probabilidad de que las
dios, y muy pronto quizás a los medios personalizados. No se anteriores formulaciones no sean aceptadas, o sólo después de
concibe ya la comunicación meramente como una recepción interminables demoras. No expresan todo el alcance de los
estática, sino como una participación activa. Es de doble derechos de comunicación ni contienen la útil hipótesis de que
sentido e interactiva y está basada en la participación, em- el ejercicio de esos derechos debe ir estrechamente unido a una
pleando la terminología que se maneja en los debates sobre el distribución más justa de los recursos en materia de comunica-
derecho a comunicar. ción. La mayoría de los que intervienen en el debate estarían
Por consiguiente, en vez de considerar el derecho a comuni- de acuerdo en que el derecho a comunicar es un concepto
car como parte integrante, o como equivalente, de la libertad mucho más rico y amplio y que subsume todos los derechos y
de información, parece más fecundo concebirlo como un libertades contenidos en las anteriores formulaciones, a la vez
concepto mucho más amplio, que abarque todos los derechos que los rebasa al expresar otros valiosos aspectos del tema.
de información que entrairaban los anteriores conceptos de El problema consiste en ponerse de acuerdo sobre una
libertad de información y de libre circulación y, además, otros definición que exprese todo lo que implica el derecho a
nuevos. Como mínimo, este nuevo enfoque proporcionará la comunicar.
oportunidad de salir del atolladero que impedía todo progreso
con las formulaciones anteriores.
Como dicen Harms y Richstad:
«La pregunta subsiguiente al artículo 19 es la siguiente:
icómo desarrollar los recursos mundiales en materia de
comunicación -tanto los recursos humanos especializados 5. L.S. Harms y Jim Richstad: ‘Right to Communicate: Human Rights, Malar
Communications Issues, Communication Policies and Planning’, p. 96, Co-
como los medios materiales y tecnológicos apropiados- de
llected Papers.
modo tal que todos tengan un derecho a comunicar equili- 6. Jerzy Mikulowski Pomorski. ‘The Right to Communicate: Emergmg concept
brado, interactivo y basado en la participación?.»’ and internatronal policy’, pp. 39-51, Evolving Perspectiva.

14
5. Estudios realizados

Al no existir un cauce formal que lo orientara y respaldara en del derecho del hombre a la información. En un plazo
forma coherente, el estudio del concepto de derecho a comuni- relativamente breve, el pleno desarrollo de instrumentos
car ha ido progresando «a saltos», según el interés esporádico tecnológicos más complejos traerá consigo la formulación
que suscitaba en individuos u organizaciones como el Instituto de un nuevo dereecho: el derecho del individuo a comuni-
Internacional de Comunicación y la Unesco. Puede verse una car.
historia detallada de lo ocurrido desde la publicación del Se requieren nuevas teorías. Una nueva concepción ge-
artículo de d’Arcy en el libro de Richstad, Harms y Kie.’ neral y un nuevo modo de enfocar los problemas de comu-
El propio d’Arcy escribió dos artículos más sobre el tema, nicación engendrarán estudios destinados a dar nueva for-
poco después del primero, y sus tesis influyeron en los ma a las estructuras de comunicación, nacionales e interna-
Canadian Telecommunication Studies. En uno de los informes cionales. El hecho de proponer desde ahora el futuro
principales figuraba lo que, según Richstad, Harms y Kie, es reconocimiento de ese derecho de los individuos y de las
«probablemente el primer gran análisis de los parámetros del naciones a comunicar abriría nuevas perspectivas a las
derecho a comunicar». En ese informe, titulado Instunt World, investigaciones relativas a problemas como los del proyecto
se decía que la libertad de conocimiento y la libertad de de declaración y convención sobre la libertad de informa-
expresión figuran entre los privilegios más valiosos de una ción, actualmente en estudio en las Naciones Unidas, el
sociedad democrática, y se aiiadía que: acceso y la participación, la circulación multilateral de
«Cabe considerar que los derechos a oir y ser oido, a información y la protección del patrimonio cultural.. . Tal
informar y a ser informado son, conjuntamente, los ele- es la propuesta que quiero presentar hoy.»5
mentos esenciales de un «derecho a comunicar». . . El esta- En el verano de 1974 se hicieron los primeros intentos por
blecimiento efectivo de un «derecho a comunicar» es un organizar y ensamblar el estudio de ese derecho. E. Lloyd
objetivo deseable para una sociedad democrática, en el Sommerlad, que había sido en la Unesco Jefe de la División de
sentido que a todo individuo le conste que tiene derecho a Libre Circulación de la Información y Políticas de Comunica-
ser informado y a ser oido, independientemente de cuál sea ción, cooperó con Harms y Richstad en la redacción de un
su lugar de trabajo o domicilio o sus cambios de residencia «documento justificativo», de dos páginas, sobre el derecho a
en su propio país.»* comunicar, en el cual decían lo siguiente:
Como d’Arcy era entonces miembro del Instituto Interna- «La comunicación es el proceso humano básico no sola-
cional de Radiotelevisión, hoy Instituto Internacional de Co- mente en cada comunidad local sino también en la naciente
municación, era lógico y apropiado que este organismo se comunidad mundial. La comunicación humana fluye por
interesara por su idea. Por éllo, adoptó el tema de «el hombre todas las instituciones sociales, y es indispensable para
y el derecho a comunicar» para su reunión anual, celebrada en muchos aspectos del desarrollo humano. Por ello, cada vez
Nicosia (Chipre) en octubre de 1973, e invitó a d’Arcy a se percibe más claramente que todo el mundo debe tener
preparar el documento básico de la misma. derecho a comunicar.»’
En ese trabajo, d’Arcy definió uno de los aspectos que había Se decía asimismo que se habían alcanzado parcialmente
de suscitar más discrepancias entre quienes intentaron más otros derechos, como el derecho a la información y el de
tarde definir el derecho a comunicar. Decía, en efecto, que: reunión, y que estaban en estudio otros. Se destacaba también
«Las libertades sucesivas se derivan de la tensión entre la la necesidad de proceder a una formulación teórica multicultu-
necesidad de comunicar que siente el individuo y la que ral de los elementos generales del derecho a comunicar, antes
tiene la sociedad de establecer sus propios cauces de comu- de que quedaran codificados unos derechos parciales, y aveces
nicación y de expresión.»3 contrapuestos.
Durante los debates subsiguientes sobre el concepto de A raíz de una iniciativa de la Delegación sueca, la Conferen-
derecho a comunicar, uno de los temas más discutidos fue el cia General de la Unesco autorizó en su 18.” reunión al
del sujeto del mismo: el individuo o la comunidad (sociedad, Director General a estudiar y analizar el derecho a la comuni-
región o nación) de la cual forma parte. Este tema suscitaba, cación, en consulta con los órganos competentes de las
para el derecho, las relaciones internacionales y el conocimien-
to básico de la condición humana, con problemas que no
parece que vayan a quedar fácilmente resueltos4
1. Jim Richstad, L.S. Harms y Kathleen A. Kie, ‘The Emergence ofthe Right to
D’Arcy terminaba con una predicción: Communicate’. pp. 112-136, Collecred Papen.
«Hubieron de pasar trescientos años entre el invento de 2. P. 3, htant World, Information Canada. 1977.
Gutenberg y el reconocimiento del derecho correspondien- 3. Jean d’Arcy, ‘The Right of Man to Communicate’. reproducido en Collected
Papers. pp. 45-52.
te, esto es, la libertad de expresión. No han pasado más que 4. VCanse los capítulos 8 y 9.
treinta anos entre la aparición de los medios de comunica- 5. Op. cit., p. 52.
ción de masas y la proclamación por la comunidad universal 6. Op. cit., p. 118.

15
Naciones Unidas, los Estados Miembros y las organizaciones En cumplimiento de esa resolución, la Unesco patrocinó
profesionales, y a informar a la Conferencia General en su 19.” una serie de reuniones sobre diferentes aspectos de dicho
reunión sobre otras medidas que fuere necesario adoptar.’ concepto. La primera de ellas se celebró en Estocolmo en
En una carta subsiguiente a los Estados Miembros y a las mavo de 1978. En su Informe Final se decía que:
comisiones nacionales para la Unesco, el Director General de 4 Él concepto de derecho a comunicar requiere un ulterior
la Unesco decía lo siguiente: análisis, investigación y estudio a fondo, a partir de ambien-
«En un momento en que se adquiere cada vez más conciencia tes culturales diferentes.
de la importancia fundamental de la comunicación en una b) Para la formulación de una definición práctica del derecho
sociedad democrática, las nuevas técnicas ofrecen la posibi- a comunicar, se recomienda que se estudien todos los
lidad de desarrollar y transformar los sistemas de comunica- derechos relacionados con él y pertinentes, que puedan
ción, así como oportunidades de participación e interacción, quedar comprendidos o citados en dicha definición, inclui-
tanto en el plano de la comunidad como en el plano dos nuevos derechos posibles como el derecho a ser selecti-
nacional. Desde que se aprobó la Declaración Universal de vo y el derecho a participar en la creación de información.
Derechos Humanos, en 1948, la evolución tecnológica ha C3Los principios intrínsecos del acceso y la participación
añadido nuevas dimensiones al derecho a la información deberían revestir una importancia capital en todo estudio
proclamado en el artículo 19, de tal modo que es hoy ulterior, en particular cuando se intente llevar a la práctica
necesario estudiar a fondo lo que se denomina e! derecho a el derecho a comunicar.
la comunicación. 4 Como la vertiente internacional del derecho a comunicar
Como se dijo en los debates que se desarrollaron durante no figuraba en el orden del día y sólo fue abordada en forma
la Conferencia General, se trata de un concepto nuevo. Se periférica, se sugirió la organización de otra reunión inter-
hizo observar que la comunicación debería ser un proceso nacional de expertos (categoría VI) para examinarlo, en
bidireccional, que entrañe tanto el derecho a informar particular en función del nuevo orden internacional de la
como el de ser informado -un diálogo entre los individuos comunicación
y una corriente libre y equilibrada de la información entre e> Se debería encargar a un grupo de trabajo de la Unesco que
las naciones. Se convino en que el derecho a la comunica- prosiguiera el estudio del concepto de derecho a comuni-
ción debería fundarse en las necesidades presentes y futuras car, con objeto de llegar a comprender mejor su gama
del hombre en materia de comunicación y en que debería posible de aplicaciones, teniendo presentes las realidades
formar parte integrante de las políticas de comunicación del derecho internacional.
formuladas por los Estados Miembros.»s f 1 Se deberían dar a conocer las recomendaciones de esa
En 1975, se celebró uno de los debates más completos sobre reunión a las conferencias intergubernamentales de la
el derecho a comunicar, en la reunión anual del Instituto Unesco sobre las políticas de comunicación en Asia,
Internacional de Radiotelevisión (hoy IIC), en Colonia (Re- África, etc., así como a otras conferencias que versen sobre
pública Federal de Alemania). El grupo de trabajo estimó temas conexos, como las políticas de educación y de
preferible no intentar dar una definición del derecho, pero cultura.»”
estableció una «descripción» del mismo: El Informe Provisional de la Comisión MacBride, publicado
unos cuatro meses después de la reunión de Estocolmo, dio un
«Todo individuo tiene derecho a comunicar. Se trata de una
nuevo impulso al examen del concepto. En ese informe se
necesidad humana básica y del fundamento mismo de toda
declaraba que «el derecho del individuo a comunicar, a trans-
organización social. Los sujetos de ese derecho son los
mitir y a recibir información, debería constituir un derecho
individuos y las comunidades, entre ellas y en cada una de
humano fundamental».t* Se propugnaba además el estudio
ellas. Ha sido reconocido internacionalmente desde hace
ulterior de dicho concepto:
tiempo, y su ejercicio tiene que evolucionar y ampliarse
constantemente. Habida cuenta de los cambios de la socie- «Hoy en día, el concepto (esto es, el derecho a comunicar),
dad y de los adelantos de la tecnología, procede facilitar a con el cual engarzan las nociones de libertad, responsabili-
toda la humanidad recursos adecuados -humanos, econó- dad, equilibrio, acceso y participación, tiende a sustituir al
micos y -tecnológicos- para colmar la necesidad de una derecho a la información, relativamente reciente también,
comunicación interactiva y basada en la participación y que abarcaba ya la libertad de información y la de prensa.
facilitar el ejercicio de dicho derecho.»’ A pesar de la ambigüedad del concepto, el derecho a
comunicar presupone una comunicación de doble sentido y
Debido principalmente a la reunión de Colonia, se prepara-
bilateral, una relación mutua. Implica varias libertades
ron las dos publicaciones más importantes, sobre el tema, que
fundamentales que no afectan solamente a los individuos
se mencionan en la introducción del presente trabajo y que se
sino también a los grupos y las naciones.
citan ampliamente en él: Right to Communicate: Collected
Sería muy oportuno estudiar el modo de reducir el abis-
Pupers, compilada por L.S. Harms, Jim Richstad y Kathleen
mo que media entre las especulaciones intelectuales sobre
A. kie (editada por el Social Sciences and Linguistics Studies
ese derecho y las realidades concretas de la comunicación
de la Universidad de Hawaii, de Manoa) y Evolving Perspecti-
en el mundo actual. Lo que está en juego justifica amplia-
ves on the Right to Communicate, compilada por L.S. Harms y
mente los esfuerzos necesarios para que el reconocimiento
Jim Richstad (editada por el East-West Center del East-West
del derecho pueda constituir un progreso en el estableci-
Communications Institute de dicha universidad). La lectura de
miento de un nuevo orden mundial de la información.»‘”
ambas obras resulta indispensable para quien se interesa por
estos temas.
En su 20.’ reunión (1978), la Conferencia General aprobó 7. Resolución 4.121 c), iv). aprobada por la Conferencia General en su 1X.”
una resolución en la cual autorizaba al Director General «a reunión (1974).
8. Carta del Director General: CLi2440, 1976.
llevar a cabo actividades (para). . promover las investigacio-
9. International Broadcast Institutc, Annual Conference. 1975, pp. 22 y 23.
nes sobre las medidas encaminadas a garantizar los derechos 10. Resolución 411.M (197X).
humanos.. . a la luz de los principios enunciados en la Declara- 11. Reunión de Expertos \obre el Dcrccho a Comunicar: Estocolmo,
ción Universal de Derechos Humanos», e invitaba al Director párrafo 71, Unesco CC-7XiConf. 630. mayo de 197X. VCase el Apéndice A.
General a.«que fomente un estudio a fondo y el intercambio de 12. Interim report on communication problems in modcrn society. Unesco:
CC-CIC-7XiWSi39. scpticmbrc de 197X. párrafo 94,~. 43.
opiniones sobre el concepto del derecho de comunicación.»” 13. Ibid., p, 76, párrafos 230-232.
Hubo otras reuniones de expertos sobre el concepto de «Las necesidades de una sociedad democrática en materia
derecho a comunicar, en Manila (octubre de 1979), Londres de comunicación deberían quedar satisfechas mediante la
(marzo de 1980), Ottawa (septiembre de 1980), Estrasburgo formulación de derechos específicos tales como el derecho
(septiembre de 1981) y Bucarest (febrero de 1982).14 a ser informado, el derecho a informar, el derecho a la
En la reunión de Ottawa se volvió a examinar la «descrip- protección de la vida privada y el derecho a participar en la
ción» del derecho a comunicar aprobada en la reunión del comunicación pública, que encajan todos ellos en ese nue-
IIRIIIC en Colonia en 1975, y se decidió mejorar su definición. vo concepto que es el derecho a comunicar. En víspe-
Se aprobó la siguiente formulación: ras de lo que cabría calificar de una nueva era en materia de
«Todo individuo tiene derecho a comunicar. La comunica- derechos sociales, todas las implicaciones del derecho a
ción es un proceso social fundamental, que permite a los comunicar deberían ser objeto de un minucioso estudio.»”
individuos y a las comunidades proceder a un intercambio Los trabajos actuales sobre el concepto corren principal-
de información y de opiniones. Es una necesidad humana mente a cargo de la Unesco, que lo ha incluido en su programa
básica y el fundamento mismo de toda organización social. en curso, y del Instituto Internacional de Comunicación, que
Los sujetos del derecho a comunicar son los individuos y las ha recibido últimamente una subvención de la Unesco para
comunidades que componen.»i5 poder proseguir sus estudios al respecto.
Mientras tanto, el Informe Final de la Comisión MacBride
14. Véanse los Apéndices B, C y D.
había ampliado el análisis del concepto de derecho a comuni- 15. Grupo de Trabajo sobre ei Derecho a Comunicar: Ottawa, septiembre de
car que figuraba en su Informe Provisional, y entre sus reco- 1980, Informe Final. p, 2.
mendaciones cabe citar la siguiente: 16. Un solo mundo, voces múltiples, párrafo 54, p. 452.

17
6. Derechos y libertades

En relación con los derechos humanos hay grandes diferencias trivializar la noción de comunicación si la definimos en
entre los países. las culturas y los sistemas ideológicos. LExis- términos de un «derecho a comunicar».»2
ten esos derechos? ¿En qué consisten? ¿Cómo se les define? Pero parece tratarse de una opinión minoritaria, y casi
LCuáles son sus elementos integrantes? LQuién o qué es su idiosincrásica. Como dice Don R. Le Duc:
sujeto? ¿Cómo distinguirlos de las libertades? iPuede versar «En el derecho fundamental de la mayoría de las naciones
sobre ellos el derecho internacional? iCómo y cuándo es modernas, no solamente se reconoce el derecho a comuni-
posible restringirlos? car, o alguna variante de la libertad de expresión, sino que
El empleo de la palabra «derecho» suscita de por sí un además se le garantiza a todo ciudadano en los términos
problema básico. En inglés y en otras lenguas se utiliza una más amplios.»3
misma palabra para expresar dos ideas: una de ellas relativa a
la justicia, y la otra al jus. En el Coda Justinimms, Justiniano En cambio, las opiniones discrepan en lo tocante a la
distingue entre un derecho público y otro privado o individual: formulación legal del derecho a comunicar. A juicio de algu-
«Publicum jus est quod ad statum rei Romanae spectat; priva- nos, la imposibilidad de garantizar ese derecho a todos sin
tum quod ad singulorum utilitatem pertinet».’ Con su agudeza restricción alguna desaconseja su promulgación en forma le-
gislativa. Pomorski, por ejemplo, califica tal propuesta de
habitual, Santo Tomás de Aquino distingue entre el jus des
jurista y el justum del moralista. Y, en Irlanda, la cartera del «utópica». Aunque acepta que:
Ministro de Justicia se expresa en gaélico con dos palabras: dli «todo legislador tiene derecho a hacer leyes «malas», leyes
(ju.s) y ceart (justicia). que se queden en letra muerta, paralizadas por la inexisten-
Por ello, en todo debate internacional o transcultural sobre cia de sanciones administrativas, o limitadas por múltiples
un derecho humano habrá que dilucidar si los conceptos excepciones legales, 0 leyes que surtan efectos sociales más
distintos que encierra el «right» inglés (esto es, jus y justicia) negativos de lo previsto»4,
quedan contenidos en el alemán «recht», el español «dere- duda de que sea aconsejable promulgar tales leyes.
cho», > el portugués «direito», el francés «droit», el ruso La razón de ser de la incorporación del derecho a comunicar
uprávo”, etc. al ordenamiento jurídico es que el reconocimiento de un
La distinción entre esas dos connotaciones es importante derecho ha de desembocar forzosamente en el reconocimiento
para determinar la condición jurídica de un derecho humano de la existencia de los deberes consiguientes. El derecho de
en los sistemas jurídicos nacionales e internacionales. Si una persona es un deber para otros, esto es, la obligación de
«right» es meramente un concepto jurídico, incumbirá obvia- establecer unas condiciones en las cuales pueda ejercer aquélla
mente a los Estados concederlo o prohibirlo. Si se trata de un ese derecho. Y solamente en virtud de una norma jurídica es
derecho fundamental, una condición necesaria para el desa- posible establecer y mantener semejante obligación que in-
rrollo de la vida humana y una actuación adecuada del ser cumbe a otros.
humano y de la sociedad a la cual pertenece, el Estado no Quizá sea mejor expresar el derecho como una «libertad».
estará facultado para negarlo o a restringirlo, por lo mismo que iExiste alguna diferencia entre los dos conceptos? Según
no puede negar o restringir el derecho a la vida. Cocea,’ «derecho» implica una norma que hay que acatar sin
En el caso del derecho a comunicar, intervienen claramente reservas, desviaciones ni vacilaciones. Es una facultad que se
las dos connotaciones de jus y de justicia. Se suele aceptar que deriva de la naturaleza intrínseca del sujeto del derecho y de la
el derecho es válido desde el punto de vista de la justicia. El índole misma del propio derecho. Como ya ha quedado dicho,
individuo tiene que comunicar para poder ser humano; por implica que los demás carecen de atribuciones para negar ese
consiguiente, el derecho a comunicar es un derecho humano derecho y que tienen la obligación positiva de respetarlo y de
básico, y procede formularlo como tal. La única objeción es la crear condiciones propicias para su ejercicio.
que formulan quienes estiman que la comunicación es un
aspecto tan fundamental de la naturaleza humana que es
erróneo clasificarlo como derecho humano, en el mismo plano
que los de reunión, de opinión, de expresión, etc. Kaarle
Nordesntreng, de la Universidad de Tampere (Finlandia), ha 1. fmritutiones Jurriniant, Lih. 1, Tít. 1, 4.
dicho que el derecho a comunicar 2. Kaarle Nordenstreng: Summary of intervention at Unesco meeting of
experts. ‘Towards a definition of the nght to communicate; Estocolmo,
«es una noción que, en una cierta forma esencial, define al 8-12 de mayo de 1978.
ser humano; es una cualidad principal de lo que entende- 3. Don R. Le Duc: ‘Thc right to receive communications: A thought worth
mos por ser humano, y no meramente una condición parti- entertainingn pp. 157.167. Evolving Perspective.
4. Op. cit.. p, 44.
cular o una disposición relacionada con el comportamiento
5. Aldo Armando Cocea: ‘The Right to Communicate: An evolutive con-
y la naturaleza humanos. Por consiguiente, al abordar este ccpt for a new personal and social dimension of a fundamental human
tema fundamental, corremos el peligro de vulgarizar y right’, pp. 22-37. Evolving Perspectives.

18
Todo derecho expresa una necesidad permanente, la cual proporcionar también el derecho a no comunicar y a no
afecta al ser mismo del sujeto si es negada o restringida. No se recibir comunicación.»’
puede privar a los seres humanos de su derecho a la vida En el informe de la Canadian Telecommission, «Instant
porque lo necesitan para seguir existiendo: tampoco se les World», se citan «los derechos a oír y a ser oído, a informar y a
puede privar de su derecho a comunicar sin disminuir con ello ser informado» como «elementos esenciales» del derecho a
su dignidad humana y negar su humanidad misma. comunicar.x
La palabra «libertad» tiene una connotación más limitada. Hindley enumera los siguientes elementos integrantes del
Implica que su sujeto puede elegir entre ejercerla o no. Si derecho a comunicar:
decide esto último, no disminuye en nada su condición de ser 1. El derecho a hablar;
humano. En este caso, los demás sólo están obligados a 2. El derecho a ser oído;
abstenerse de coartar el ejercicio de esa libertad; no tienen 3. El derecho a recibir una respuesta;
obligación alguna de promover su ejercicio. 4. El derecho a contestar;
Así pues, el «derecho a comunicar» es un concepto mucho 5. El derecho a escuchar”.
más fundamental que el de «libertad de comunicar». Cocea añade los siguientes:
Habrá que preguntar asimismo si el «derecho a comunicar» 6. El derecho a ver;
es el mejor modo de formular el concepto ¿Por qué no hablar 7. El derecho a ser visto;
de «derecho de comunicación»? Hay quienes dicen que esta 8. El derecho a expresarse por escrito o en forma impresa;
última formulación es demasiado estática, que se refiere más al 9. El derecho a expresarse por medio del arte;
contenido de lo que se comunica que al acto de la comunica- 10. El derecho a ser selectivo (concepto éste que Cocea prefie-
ción propiamente dicho. Por esta razón, la mayorfa de los re al de «derecho a no comunicar» que propugnan otros
autores franceses prefieren la expresión «droit à la communi- autores como expresión del derecho individual a la protec-
cation», en vez de «droit de la communication», y los alemanes ción de la vida privada o «derecho a no ser informado»). ‘”
«das Recht zu Kommunizieren», y no «das Recht auf Kommu- En un trabajo que presentó en un simposio organizado por
nication». Cocea señala acertadamente que, en español, «el la Fundación Hanns Seidel en mayo de 1978,” Cocea intentó
derecho a comunicar» denota claramente que lo que se descri- agrupar algunos de esos conceptos. Para ello, distinguía tres
be con ello es la acción de comunicar más que el contenido de fases en la evolución de la aspiración de los seres humanos a
la comunicación. ’ llegar a comprenderse entre ellos, a saber:
Se precisa, aún más el peligro de confundir los derechos con a) El derecho a comunicar, concebido como derecho a la
las libertades cuando se intenta determinar lo que contiene la libertad de opinión y de expresión;
definición del derecho a comunicar. Parece haber un acuerdo b) El derecho a comunicar, ampliado de modo tal que abarque
general en el sentido de que se trata de un concepto «global», también la libertad de informar a los demás y de ser
que abarca toda una serie de derechos y libertades en materia informado uno mismo, gracias en especial a las posibilida-
de comunicación. Algunos de esos derechos y libertades han des que ofrecen los medios de comunicación de masas;
sido definidos y, en algunos casos, sancionados en la legisla- c) El derecho a comunicar, considerado como una capacidad
ción nacional. Otros siguen siendo objeto de estudio y debate, de interacción y de diálogo, una facilidad de acceso y de
y es posible que otros más no hayan sido identificados todavía. participación, y que implica deberes y obligaciones.
Quienes trabajan en este campo no menosprecian la dificul- Se procedió a un análisis preliminar del derecho a comunicar
tad y la complexidad de su labor. Reconocen que no les será con arreglo a tres categorías básicas:
fácil, ni inmediato, concebir una espada que corte el nudo a) Derechos del individuo;
gordiano en el cual están enredados muchos aspectos del b) Derechos de los medios de comunicación (inluidos los
concepto. Martelanc expresa muy claramente el dilema: grupos profesionales interesados);
«La mayoría de los autores están de acuerdo en que la c) Derechos de las comunidades locales, nacionales e interna-
antigua nocción de «libertad de información» se ha queda- cionales.
do en cierto modo tan anticuada como el principio del En el caso de los individuos, se estimó que los derechos más
«laissez-faire» en economía. Parecen coincidir en que el importantes eran los siguientes:
derecho a comunicar debería hacer hincapié en la igualdad - libertad de opinión y de expresión,
de todos los que intervienen en la comunicación, abarcar - derecho a ser informado,
una circulación multicultural y multilateral de la informa- - derecho a informar,
ción y entrañar un derecho activo, a la vez que pasivo, a la - protección de la vida privada,
comunicación, que permita el máximo grado de retroinfor- - libertad de movimiento,
mación, participación y acceso. Como dice Bert Cowlan, - derecho de reunión,
«la comunicación es una acción que se expresa en forma - acceso a las fuentes de información.
óptima mediante un verbo». Por otra parte, la importancia En el caso de las instituciones, se enumeraron los siguientes
y la atención que se prestan a la idea de derecho a comuni- derechos específicos:
car parecen muy diversas. Se hace un hincapié variable en la - acceso a las fuentes de información,
connotación nacional o internacional de ese derecho, que - libertad de opinión y de expresión,
difiere además según que se sitúa al ser humano o a la
sociedad en el centro del desarrollo y de la comunicación,
según que suponga la eliminacicín de la escasez de recursos
6. Op. cit.. passim.
en materia de comunicación o la protección del individuo 7. Tomo Martelanc: p. viii. Prólogo Collected Papen.
contra la reiteración de la información, según que exista la 8. fnsrant World. Intormation Canada. Ottawa. 197i. p. 3.
exigencia primaria de satisfacer las necesidades informati- Y. Henry flindley: ‘A ripht to Communicate? A Canadian approach’.
vas básicas de todos o de protegerlos contra todo posible pp.1 19.127. Evolvrng fenpectivrs.
10. Ibid.
abuso o manipulación a través del poder arbitrario y aliena- Il. A.A. Cocea, ‘District Satellite Broadcasting of Radio and Television’,
do de los medios de comunicación de masas, y según que se en ‘Freedom of lnformation-a Human Right’. Hanns Seidel Stiftung,
trate de garantizar un derecho a comunicar universal o de Munich 1978. pp. 71-73.

19

- - _--
- derecho a informar, b) El derecho del individuo a transmitir a los demás la verdad,
- derecho a publicar, tal como la concibe, sobre sus condiciones de vida, sus
- libertad de movimiento, aspiraciones, sus necesidades y sus quejas; se infringe este
- mantenimiento del secreto profesional. derecho cuando se reduce al individuo al silencio mediante
Se estimó que los de comunicación de las naciones más la intimidación o una sanción, o cuando se le niega el
importantes, en sus relaciones exteriores, eran los siguientes: acceso a un medio de comunicación;
- derecho a informar, c) El derecho a discutir: la comunicación debe ser un proceso
- circulación libre y equilibrada de la información, abierto de respuesta, reflexión y debate; este derecho
- protección de la integridad cultural, garantiza la libre aceptación de las acciones colectivas y
- intercambio cultural, permite al individuo influir en las decisiones que toman los
- libertad de opinión y de expresión, responsables.
- derecho a ser informado, A estos derechos fundamentales procede ariadir el derecho
- derecho de rectificación, al respeto de la vida privada. A menudo, el individuo
- derecho de respuesta.” necesita ser protegido contra las intrusiones en su vida
En el Informe Final de la Comisión MacBride se enumeran privada, ante las cuales puede estar inerme cuando se
como sigue los derechos de los individuos en materia de apoyan en el poder de la tecnología moderna.»‘3
comunicación: La simple enumeración de los derechos y libertades que se
«a) El derecho a saber, es decir, a ser informado y a buscar proponen como elementos integrantes del derecho a comuni-
libremente cualquier información que se desee obtener, en car indica ala vez la riqueza y la complejidad del concepto, y la
particular cuando se refiere a la vida, el trabajo o las dificultad de establecer una definición práctica y completa, y
decisiones que hay que adoptar a la vez individualmente y sin embargo inteligible, del mismo.
como miembro de la comunidad; la negativa a comunicar
una información o la divulgación de una información falsa 12. Ibid.
o deformada constituyen una infracción de este derecho. 13. op. cir., pp. 200 y 201

20
7. Hacia una definición

Los intentos de formular una definición del derecho a comuni- tan general que permita llegar a un consenso internacional
car aceptada por todos han tropezado con el obstáculo del a la vez que se quede despojado de todo sentido.»’
enfrentamiento de dos tesis. Unos quieren que la definición Pese a esas dificultades, el Sr. Tatad pidió a los expertos que
mencione el carácter fundamental del concepto como derecho tuvieran presente que:
humano básico e inviolable, y con tal fin desean que se formule
«Estamos estableciendo de hecho una visión normativa de
tan clara, simplemente y sin complicaciones, matices ni restric-
la comunicación relacionada con todos sus aspectos
ciones como el derecho a la vida o la libertad, por estimar que
-jurídicos, morales y -tecnológicos- y que abarcará
solamente así se destacará la importancia del derecho y se
todos los niveles: individual, nacional e internacional.
mostrará que sus violaciones se oponen a las exigencias huma-
Tenemos que intentar definir unos principios que se
nas más profundas.
ciñan en suma, a una visión mundial de las necesidades,
Otros quieren que la definición sea lo más amplia posible.
problemas y posibilidades en materia de comunicación; y,
En el Informe Final de la reunión del Grupo de Estudio
si es preciso especificarlos detalladamente, deberemos ha-
celebrada en Londres en marzo de 1980, se dice, por ejemplo,
cerlo, aunque sólo sea para eludir los fallos de otros dere-
que procede considerar el derecho a comunicar como «un
chos humanos, que han quedado privados de sustancia a
concepto dinámico y flexible», que debe « tener en cuenta la
causa de una generalización excesiva y de un aquilatamien-
diversidad de los flujos de información y la finalidad social de
to insuficiente.»’
los mismos», «expresar valores sociales positivos», «reconocer
las relaciones existentes entre la comunicación y el desarro- Está ciertamente justificado prever que, antes de que se
llo», etc. Propugnó asimismo que se concibiera «de modo tal llegue aun acuerdo sobre una definición del derecho a comuni-
que se tengan en cuenta los diferentes niveles de comunica- car, será necesario ensamblar en un concepto global todas las
ción: individuales, sociales, institucionales, nacionales, regio- consideraciones y temas de interés mencionados en la reunión
nales e internacionales.»’ de Londres y en otras ocasiones a través de la documentación y
Parece evidente que no hay definición que pueda amalga- de los debates al respecto.
mar tantas cosas. El derecho a comunicar no es una panacea Aunque tal integración es necesaria en la fase conceptual,
para los males de este mundo. No va a resolver los problemas hay quienes estiman que resulta contraproducente intentarla
del desarrollo, ni a lograr una circulación más equilibrada de la en la definición del derecho a comunicar propiamente dicha.
información o una distribución más justa en los planos nacio- No se puede hacer que esa definición abarque toda la gama
nal e internacional de los recursos disponibles en materia de de libertades de expresión, de opinión, de información, de
comunicación. No va a garantizar la paz mundial, ni a promo- prensa, del periodista, etc., que intervienen en la comunica-
ver la educación ni a suprimir los fallos del Tercer Mundo. ción. No todas ellas tienen la misma importancia, desde un
Quienes aspiran a emplear el concepto de derecho a comuni- punto de vista filosófico. Algunas son más fundamentales que
car como justificación de un «imperialismo cultural», o para otras. Las hay que admiten unas restricciones y excepciones
combatirlo, o con fines políticos o económicos lo están prosti- que no son aplicables a otras. Todo intento de incluirlas en la
tuyendo al servicio de unos objetivos que, aun siendo quizá misma definición enturbiarfa el tema y reduciría el valor del
muy valiosos, no deben quedar vinculados al derecho humano derecho «fundacional».
fundamental a comunicar. El Sr. Francisco S. Tatad, Ministro Fisher propugna una cuidadosa diferenciación entre los
de Información Pública de Filipinas, expresó una opinión muy diversos elementos del derecho a comunicar, de modo tal que
generalizada, en la Reunión de Expertos sobre el Derecho a no quede depreciado el derecho fundamental propiamente
Comunicar, celebrada en Manila en octubre de 1979 y organi- dicho.
zada por la Unesco, al señalar que el intento de resumir en un «Si no se diferencian jerárquicamente el derecho humano
solo principio todas las normas que pretendemos establecer en básico, las libertades que de él se derivan y las facultades
la comunicación moderna será una tarea muy difícil: prácticas necesarias para su ejercicio y se ensamblan todos
«Incluso en su formulación inicial en anteriores debates de ellos demasiado estrecha e intrincadamente en una misma
la Unesco, «el derecho a comunicar» está recargado ya con definición o descripción, se debilitará con ello la afirmación
toda una serie de consideraciones, entre ellas las de la del derecho básico ya que la definición global debe tener en
disparidad entre los países en desarrollo y los desarrollados, cuenta las posibles limitaciones del ejercicio de las liber-
el acceso y la participación en el proceso de comunicación, tades pertinentes y de las facultades derivadas de él, y en
la responsabilidad al respecto de los medios y de los profe- cierto sentido se considerará que esas limitaciones se apli-
sionales de la comunicación de masas, la soberanía de los can al propio derecho básico.
Estados, etc.
Lo que más nos preocupa es la posible deformación del 1. Véase cl Apéndice C.
2. Francisco S. Tatad, ‘Communications in a new key: a normative approach’:
sentido de ese principio cuando consigamos reducirlo a una p.7.
formulación única; y más probable todavía es que resulte 3. Ibid.

21

-
Es, con mucho, preferible formular el derecho en térmi- ejerce por conducto de las libertades secundarias y las faculta-
nos absolutos como un núcleo inviolable y especificar, por des, que pueden quedar limitadas. Así por ejemplo, las liber-
separado, las libertades que entraña, las facultades prácti- tades de información, de opinión y de expresión, que forman
cas necesarias para su ejercicio, las circunstancias que parte integrante del derecho central a comunicar, son esencial-
pueden justificar la limitación de ese ejercicio y el alcance mente inviolables. Pero en la práctica su ejercicio por medio
de las limitacieones justificadas.»4 de una prensa libre, la asociación libre con otras personas, el
Al organizar el concepto de derecho a comunicar en cuatro acceso a la información y una radiodifusión independiente
niveles, se adopta ese mismo enfoque en un documento de están sometidos a restricciones y limitaciones.
trabajo de la Unesco, en el cual se propone: Como dice Samuel Handel:
«a) Un derecho universal a comunicar: derecho humano gene- «En suma, para que esa libertad tenga sentido en una
ral, global e intercultural, válido en todas las sociedades y sociedad organizada es preciso que consista en una amalga-
en todos los niveles y concebido como objetivo a largo ma o jerarquía de libertades y limitaciones».
plazo. El párrafo 1 del artículo 1 del Convenio Europeo de Dere-
b) Derechos de comunicación espe@cos: conjunto de dere- chos Humanos, por ejemplo, garantiza la libertad de expresión
chos que pueden definirse y ejercerse y que proporcionan (incluida «la libertad de tener opiniones y de recibir y difundir
un marco general para el examen técnico de las facultades información e ideas sin ingerencias de las autoridades públicas
correspondiente y la aplicación práctica de un derecho y por encima de las fronteras». Pero queda limitado en virtud
general. del párrafo 2, que dice así:
c) Obligaciones en materia de comunicación: derechos que no «Como entraña deberes y obligaciones, el ejercicio de esas
pueden ejercerse sin una referencia a sus efectos sobre libertades puede estar sometido a trámites, condiciones,
otros.. Derechos que deben llevar aparejados unos debe- restricciones o sanciones establecidas en la legislación y que
res; quienes ejercen derechos de comunicación son res- son necesarias en una sociedad democrática en bien de la
ponsables de sus actos ante la sociedad, con arreglo al seguridad nacional, la integridad territorial o el orden
principio del bien común. público, la prevención de disturbios o delitos, la protección
4 Problemas de comunicación: en toda sociedad, se somete- de la salud o de la moral, la protección de la reputación o de
rá constantemente a examen toda una serie de problemas y
los derechos ajenos, la prohibición de la difusión de toda
posibilidades de comunicación, relacionados con proce-
información recibida con carácter confidencial, o el mante-
sos, políticas, actividades, recursos, estructuras, medidas
nimiento de la autoridad y la imparcialidad del poder
legislativas, etc., en cuatro niveles distintos: Estado, judicial».
comunidad, individuo e instituciones. ..»5
La verdadera dificultad surge al intentar determinar en qué
El enfoque jerárquico cuenta con el respaldo de los especia-
consiste el bien común, el orden público, la moral pública, etc.
listas del derecho internacional, que distinguen entre dos
Un Estado puede imponer restricciones injustas al ejercicio de
categorías de derechos humanos. Los derechos primarios
las libertades, alegando que representa el bien común para
-por ejemplo, la libertad religiosa y el derecho de los miem-
justificar la represión y la supresión de derechos humanos. A
bros de la sociedad a escoger el régimen de gobierno-- son
esa justificación de las restricciones se refería el Informe del
universales e inviolables. Los derechos secundarios, como la
Congreso de la Comisión Internacional de Juristas, celebrado
libertad de expresión, la de reunión y la de asociación, no
en Nueva Delhi, al señalar que:
figuran entre los derechos humanos fundamentales porque no
son absolutos, y pueden quedar limitados. «Las libertades de expresión, de reunión y de asociación no
Por consiguiente, con arreglo a un enfoque jerárquico se son absolutas. Sus excepciones están justificadas por la
establecería el derecho a comunicar como derecho humano necesidad de conciliar las reivindicaciones de diferentes
fundamental en el centro (o en la cima, según la descripción individuos a esos derechos y el criterio de conciliación es el
conceptual) de una serie de derechos secundarios y libertades interés jurídico de velar porque se respeten plenamente la
derivados del derecho básico a comunicar. Esos derechos condición y la dignidad de la persona.»’
secundarios protegerían la aplicación práctica del derecho a Esto introduce un importante concepto en el análisis del
comunicar, pero estarían sometidos a restricciones y derecho que tiene la sociedad a limitar o restringir las liberta-
limitaciones6 des de expresión, de opinión, etc. Lo que quiere decir es que el
Con arreglo a esa concepción teórica, se concebiría el único criterio aceptable en relación con esa limitación es el de
derecho a comunicar como el núcleo interior de una serie de la protección de un derecho primario, ya se trate del derecho a
libertades mutuamente relacionadas en el campo de la comu- la vida, de la libertad religiosa, de la libre elección del régimen
nicación, rodeado por la libertad de opinión, la libertad de de gobierno o, si ha quedado incluido en esta categoría, del
expresión y la libertad de información, las cuales no son derecho a comunicar. En otras palabras, se pueden limitar las
absolutas en sí mismas sino que constituyen los campos princi- facultades derivadas de la libertad de expresión, pero el crite-
pales de la vida humana en los cuales se ejerce el derecho rio aplicable es el de la protección de otros derechos iguales o
fundamental a comunicar. superiores, incluida quizá la libertad de expresión de otro
Las libertades secundarias, o derivadas, de expresión, opi- individuo. Esto proporciona la base para juzgar las acciones de
nión e información se ejercen, a su vez, mediante diversas los gobiernos o de las sociedades que limitan el ejercicio de las
manifestaciones prácticas: libertad de prensa, inexistencia de libertades en materia de comunicación.
la censura, independencia de la radiodifusión, derecho de los
periodistas a proteger sus fuentes, derecho de acceso a la 4. Desmond Fisher, ‘The Right to Communicate: A philosophical framework
información, etc. A su vez también, esas libertades engendran for the debate, Evolving Perspectives, p. 96.
5. Citado en «Towards a definition of the right to communicate: an expert
facultades: la de los periodistas a tener acceso ala información meetingw: Unesco, CC-78iConf.63012, p. 19, documento de trabajo prepara-
y a las fuentes de información, el derecho de respuesta del do para la Reunión de Expertos sobre el Derecho a Comunicar, celebrada en
ciudadano, el de los lectores de periódicos a disponer de una Estocolmo en mayo de 1978.
amplia gama de opiniones, el del individuo a una «administra- 6. Véaac «The Legislaturr and the Rule of Law. documento dc trabajo
destinado al Primer Comité de la Comisión lnternactonal de Juristas (Nueva
ción pública abierta», etc. Delhi. 1959). Citado cn The Hule of Luw rn a Free Sociefy, Informe del
Si bien el derecho fundamental a comunicar debe respetarse Congreso de Nueva Delhi, Ginebra, Comisión Internacional de Juristas.
universalmente como derecho humano básico, en la práctica se 7. op. cit., p. 213.

22

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8. El individuo y la sociedad

Uno de los mayores obstáculos para poder ponerse de acuerdo ciudadano puede pues hablar, escribir e imprimir libremen-
sobre una definición del derecho a comunicar es la existencia te, siendo, sin embargo, responsable de todo abuso de esa
de puntos de vista ideológicos y políticos contrapuestos en libertad en los casos determinados por la ley».
relación con el sujeto de los derechos humanos. La Declaración Universal de Derechos Humanos (1958)
Hasta la Revolución Francesa, la tradición europea, basada dice en su artículo 19 que «todo individuo tiene derecho a la
en la ética cristiana yen conceptos filosóficos griegos, adscribía libertad de opinión y de expresión».
los derechos humanos al individuo. Eran considerados como El Convenio Europeo de Derechos Humanos (1950) dice en
algo intrínseco de la persona, y no concebido por el Estado, su artículo 10 que «todo individuo tiene dereecho a la libertad
cuya función consistía en abstenerse totalmente de promulgar de expresión».
leyes en aquellos campos en los cuales intervenían los derechos El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos
humanos’, o bien en establecer mecanismos de regulación (1966) dice en su artículo 19 (párrafos 1 y 2) que «nadie podrá
mediante los cuales pudieran ejercerse los derechos humanos ser molestado a causa de sus opiniones» y que «toda persona
y resolverse las reivindicaciones contrapuestas en relación con tiene derecho a la libertad de expresión».
su ejercicio.
Al legislar sobre los derechos en este campo, las constitucio-
Los revolucionarios franceses proclamaron, por supuesto,
nes de muchos países hacen también del individuo el sujeto de
«los derechos naturales e inalienables del hombre». Pero
los mismos.
afirmaron también que «el principio de toda soberanía radica
en la nación esencialmente; nadie, ningún individuo, puede La Constitución austriaca (artículo 13) dice que «todo indivi-
ejercer una autoridad que no emane expresamente de ella».* duo tiene derecho, dentro de los límites de la ley, a expresar
Era inevitable que se acabara identificando a la nación con el sus opiniones de palabra y por escrito, en forma impresa o
Estado, y que se rechazara la idea de los derechos del individuo gráfica».
contra la sociedad, del ciudadano contra el Estado, que era La Constitución danesa (artículo 77) dice que «todapersona
base de la regla de derecho en la anterior tradición. tendrá la libertad de divulgar sus ideas e forma impresa, por
Actualmente, predomina en muchos países ese criterio de la escrito o de palabra, siendo, sin embargo, responsable de ello
supremacía del Estado según el cual las libertades pertenecen ante los tribunales».
colectivamente a la sociedad, y no individualmente a sus La Constitución de la República Federal de Alemania
ciudadanos. La sociedad, encarnada en el Estado, articula su (párrafo 1 del artículo 5) dice así: «todo individuo tendrá
consenso, determina el bien común y garantiza las libertades. derecho a expresar y difundir libremente sus opiniones, de
Los países socialistas sostienen que en el plano nacional la palabra, por escrito o en forma gráfica, y a informarse éZ
comunicación incumbe totalmente al Estado, y que en el plano mismo sin trabas, recurriendo a fuentes generalmente accesi-
internacional debe basarse en los principios del derecho inter- bies» .
nacional. La Constitución italiana (artículo 21) dice: «toda persona
Al mismo tiempo, la tesis socialista es que procede conside- tendrá derecho a expresar libremente sus opiniones de palabra
rar los derechos de comunicación en su aplicación práctica, y o por escrito y mediante cualquier otro medio de difusión.»
no en abstracto. Por ello, los pensadores socialistas insisten en Todas esas formulaciones legislativas reconocen al indivi-
la colectivización de los derechos humanos y rechazan la tesis duo como sujeto del derecho a comunicar. En la legislación de
de que su sujeto sea el individuo, por considerar que se trata de los Estados socialistas se determina que el sujeto es la socie-
una manifestación de «liberalismo burgués». dad, y no el individuo. Cabe citar los siguientes ejemplos:
Por otra parte, el hecho de adscribir el derecho humano al «La ley garantiza a los ciudadanos de la URSS: a) la
individuo implica el reconocimiento de que sólo puede ser libertad de palabra; b) la libertad de prensa; c) la libertad
abrogado o limitado por razones de orden público o de bien de reunión, incluida la celebración de reuniones de masas;
común, y además únicamente cuando se pueda demostrar que d) la libertad de organizar manifestaciones y desfiles.»
el ejercicio de un derecho por un individuo restringe el ejerci- - Captítulo x (artículo 125) de la Constitución de la
cio de ese mismo derecho, de un derecho distinto, por otros. URSS.
La diferencia entre los dos puntos de vista se pone de
manifiesto en los instrumentos jurídicos vigentes, en relación
con la libertad de expresión. Los siguientes ejemplos de
normas jurídicas nacionales e internacionales se ciñen al crite-
rio de que el sujeto del derecho es el individuo: 1. Véase la «Primera Enmienda» de la Constitución de los Estados Unidos
La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudada- de América. relativa a la libertad religiosa: «El Congreso no promulgará
no, promulgada en 1789, garantizaba, en su artículo XI, «la ley alguna que se refiera al establecimiento de una religión o que prohiba
su libre ejercicio». Texto en Beard, A New Bmic ffimry of he Unired
libre comunicación de los pensamientos y de las opiniones Slares. (Macmillan, Londres. 1Y60), p. 48.
[como] uno de los derechos más valiosos del hombre; todo 2. Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano (1979).

23
«Los ciudadanos de la República Popular de China goza- «La comunicación entre personas naturales y jurídicas
rán de la libertad de palabra, de la libertad de prensa, de la -esto es, personas, organizaciones, instituciones de comu-
libertad de reunión, de la libertad de asociación y de la nicación de masas o grupos de una sociedad- compete al
libertad de organizar manifestaciones y desfiles.» Estado.. En lo tocante al derecho a comunicar, solamente
- Capítulo III (artículo 87) de la Constitución china. el Estado puede garantizarlo, a la vez para los individuos,
Se garantizarán la libertad de la prensa y de otros medios las instituciones y los grupos de la sociedad.»4
de información, la libertad de asociación, la libertad de Beltrán y Fox de Cardona están esencialmente de acuerdo
palabra y de expresión pública y la libertad de organizar con ese punto de vista. A su juicio, la libertad de comunicación
reuniones públicas.» del individuo queda limitada por los derechos comunitarios de
- Capítulo III (artículo 40) de la Constitución yugoslava. su entorno social.
Las diferencias entre esas dos concepciones son de carácter «Así pues, en general, pero especialmente en los casos de
fundamental, y quizás demasiado grandes como para que sea discrepancia o conflicto, los derechos de comunicación de
posible armonizarlas. Al reconocer un derecho, una de ellas la sociedad (considerada en su conjunto o en función de sus
fija límites a la autoridad del Estado; la otra establece el grupos mayoritarios) deben prevalecer sobre los de los
Estado como garante y, por consiguiente, árbitro de las liber- individuos considerados por separado.,j5
tades. La primera adscribe el derecho al individuo, la otra a D’Arcy afirma que «tanto para las sociedades como para el
grupos amorfos como la «sociedad», «todas las personas» o hombre existen sin duda, un derecho a comunicar».6 Pero no
«los ciudadanos». Aquélla reconoce los derechos humanos sugiere que uno de los dos sea superior al otro, por considerar
como algo absoluto; ésta matiza la garantía de las libertades; ambos derechos como fuerzas iguales en tensión creadora:
por ejemplo en los artículos de la Constitución soviética antes
«Nos hallamos así ante la actuación de dos fuerzas: por una
citada que garantizan la libertad de expresión y de prensa «en
parte, aquélla que, para su existencia misma, empuja al
interés del pueblo trabajador y para fortalecer el sistema
individuo a afirmar su derecho a la comunicación y formar
socialista», y en la Constitución yugoslava, la cual, después de
así, mediante la comunicación establecida con sus semejan-
garantizar las libertades de comunicación, añade que «esas
tes, una sociedad; por otra parte, aquélla que empuja a la
libertades y derechos no podrán ser empleados por nadie para
sociedad así formada a elaborar, para su funcionamiento y
derrocar los cimientos del orden democrático socialista deter-
su expresión mismos, modos de comunicación cada vez más
minado por la Constitución, poner en peligro la paz, la coope-
perfeccionados que conducen hacia estructuras sociales
ración internacional o la igualdad, o la independencia del
cada vez más desarrolladas. De la tensión que se produce
país».
entre la necesidad del individuo de comunicarse y la necesi-
Ese antagonismo entre la concepción del Estado como fuente
dad que tiene la sociedad de establecer sus propios circuitos
y protector de las libertades fundamentales y la concepción
de comunicación y de expresión, de la tensión entre ambos
según la cual los derechos humanos imponen un límite a la
derechos a comunicar -el del individuo y el de la
autoridad del Estado se deriva de un conflicto fundamental
sociedad- nacen los derechos, deberes y libertades
sobre la naturaleza del hombre y de la sociedad, y es la base de
sucesivos. »7
la lucha ideológica entre el Este y el Oeste. Es también el
núcleo mismo del actual debate sobre el derecho a comunicar. En su informe Final, la Comisión MacBride no distingue
En el informe del Comité de Trabajo sobre el derecho a entre el derecho del individuo y el de la sociedad, y se limita a
comunicar, en la reunión de Colonia (1975) del Instituto afirmar lo siguiente:
Internacional de Radiotelevisión (hoy Instituto Internacional «Nuestras conclusiones se basan en el firme convencimien-
de Comunicación) se cometió el error de querer paliar las to de que la comunicación es tanto un derecho fundamental
contradicciones fundamentales. Al observar que el derecho a del individuo como un derecho colectivo, que procede
comunicar conferido al individuo «contrastaba a veces» con el garantizara todas las comunidades y a todas las naciones.»’
derecho conferido a la comunidad, se decía en ese informe lo En cambio, Fisher insiste en que el derecho del individuo es
siguiente: fundamental, y que los derechos de la sociedad se derivan de
<<<ElComité estimó que no tiene por qué haber un conflicto él. A su juicio:
importante entre los dos conceptos, salvo en los países que «. . el derecho a comunicar es esencial para el individuo con
consideran que los derechos, que incumben a la comuni- miras al desarrollo de su potencial humano, por lo que
dad, son ejercidos por el gobierno como depositario de los prcede considerarlo como un derecho humano con la mis-
mismos. Con arreglo a semejante criterio, el derecho a ma categoría que el derecho a la vida, el derecho a la
comunicar de los individuos sólo puede ejercerse en tanto libertad, el derecho a la religión, etc. Por consiguiente, su
en cuanto no se opone al orden político y social sujeto debe ser el individuo.»’
establecido.>p3
Los problemas no se resuelven fingiendo que no existen. A
pesar del optimismo del comité de trabajo de Colonia, hay un
conflicto evidente e importante entre los dos puntos de vista 3. International Broadcast Institute, Report of Annual Conference,
1915, p. 22.
relativos al sujeto del derecho a comunicar. Se está en general
4. Wolfgang Kleinwächter, «Internal and international aspects of the right to
de acuerdo en que tanto el individuo como la comunidad tiene cmnmunicate», documento presentado en la Reunión de Expertos e la
derecho a comunicar. Pero se discute que esos dos derechos Unesco sobre el Derecho a Comunicar: Estocolmo, 8-12 de mayo
sean del mismo orden. $urge el derecho del individuo única- de 1978, p. 2.
5. Luis Ramiro Beltrán S. y Elizabeth Fox de Cardona, uCommunication
mente porque forma parte de una sociedad en la cual radica el
rights: a Latin Ameritan Perspectivw, Evolving Perspectives, p. 149.
derecho básico? ~0 bien tiene la sociedad un derecho a 6. Jean d’Arcy, «El derecho a comunicar», Comisión Internacional de Estudio
comunicar que se deriva del derecho a comunicar del individuo de los Problemas de la Comunicaci&t+, documento n.’ 36, p. 2.
y que, es, por ende, subsidiario con respecto a este último? 7. Ibid.
8. Op. cit., p. 432.
El primer punto de vista ha sido expresado muy claramente
9. Desmond Fisher, «The Right to Communicate: Towards a definitiow,
por el Dr. Wolfgang Kleinwächter, del Institut für Internatio- Research Paper No. 37. International Commission for the Study of Commu-
nalen Studien de la Karl-Marx-Universität deleipzig: nication, Problems, Unesco, p. 16.

24
Y añade: sociedad de diferentes modos, con objeto de que sea posi-
«Se engendra una gran confusión cuando se intenta estable- ble ampliar el derecho y ejercerlo libremente.»”
cer que existe el mismo dereho -o un derecho de idéntica Parece lógico predecir que, si no se encuentra algún modo
transcendencia humana fundamental- en una comunidad, de conciliar esos puntos de vista contrapuestos, el debate sobre
un grupo de personas, una nación o una región. Esos grupos el derecho a comunicar se empantanará irremisiblemente. En
pueden tener, y tienen, derecho a comunicar. Pero su el capítulo siguiente se exponen algunos campos de posible
derecho no es el mismo -al menos por el grado- que el componenda; habrá que explorar exhaustivamente si ofrecen
que corresponde al individuo.»” alguna posibilidad de colmar la distancia que media entre el
Esto le incita a respaldar la idea de Este y el Oeste.
«una jerarquía de derechos, libertades, responsabilidades y
facultades, empezando por el derecho básico del individuo 10. Ibid.
a comunicar y que se plasme en una serie de libertades, 11. Desmond Fisher, «The Right to Communicate: A philosophical framework
facultades y obligaciones, adscritas al individuo y a la for the debate»,, Evolving Perspectives, pp. 99-100.

25
9 El individuo en la sociedad

No debe pensarse que la controversia relativa al sujeto del «La historia del hombre es, primero, la historia de la
derecho a comunicar tenga únicamente un interés filosófico. aceptación y la imposición de las restricciones necesarias
La decisión de considerar que se trata del individuo o de la para que sea posible la vida en común; en segundo término,
sociedad repercutirá poderosamente en la interpretación de la de la emancipación del individuo, dentro de ese sistema de
legislación nacional, y de los tratados internacionales en el trabas necesarios.»
caso de que acabe incorporándose a ellos ese derecho. Edmund Burke, gran aportación de Irlanda a la política
Ahora bien, en la práctica no es posible considerar al británica, lo expresó mejor todavía:
individuo por separado de la sociedad en la cual vive. El «Hay que limitar la libertad para poder poseerla. Es imposi-
individuo no actúa nunca al margen de la sociedad, y la ble precisar exactamente en cada caso el grado de restric-
sociedad no existe sin los individuos que la componen. Como ción. Pero todo órgano público juicioso deberá proponerse
dice Ruth Benedict: siempre encontrar el modo de determinar cuál es el míni-
«En su sentido más pleno, la sociedad no es nunca una mo, y no el máximo, de restricción con el cual puede
entidad disociable de los individuos que la integran. Ningún subsistir la comunidad. Porque la libertad es un bien que
individuo puede llegar ni siquiera al límite mínimo de sus procede mejorar, y no un mal que haya que reducir. No es
posibilidades sin una cultura en la cual participe. Recípro- solamente un bien de primera magnitud sino además una
camente, ninguna civilización contiene elemento alguno fuente de vida y de energía del propio Estado, que tendrá
que no sea, en definitiva, la aportación de un individuo.» tanta vida y vigor como libertad haya en él.»’
Por consiguiente, en su aplicación práctica el derecho a Como se decía en el capítulo anterior, habra que explorar
comunicar no concierne simplemente al individuo y a la socie- todo enfoque que brinde la posibilidad de salir del atolladero
dad, sino al individuo en la sociedad. Se podrá progresar al intentar determinar el sujeto primario del derecho a
mucho introduciendo este concepto en el debate sobre el comunicar.
derecho a comunicar, ya que servirá para colmar las lagunas La primera posibilidad se deriva de la distinción, antes
actuales. Ruth Benedict nos recuerda que: citada, entre el «derecho» considerado desde el punto de vista
«Debido en gran parte a la aceptación tradicional del legal y desde el de la justicia. La justicia, derivada de unos
conflicto entre la sociedad y el individuo, se interpreta tan a derechos humanos fundamentales, sería considerada como
menudo como una negociación de la autonomía de éste el algo inmutable y sin reservas, al paso que el jus sugiría unas
hecho de hacer hincapié en el comportamiento cultural... disposiciones legales que se prestaran a matices.
No se aclara el problema del individuo insistiendo en los La segunda es la distinción entre los conceptos de «derecho»
antagonismos entre cultura e individuo, sino destacando su y de «libertad». Si se acepta que los derechos incumben al
refuerzo mutuo.» individuo, mientras que la libertad de ejercerlos viene deter-
minada por la sociedad, de diferentes modos según las épocas
De lo que se trata es de encontrar una vía media entre
y las circunstancias, puede haber un cierto margen de compo-
quienes afirman, como B.F. Skinner, que
nenda o acuerdo al respecto.
«si insistimos en que los derechos del individuo son el Este razonamiento armoniza con la observación de Plomab,
summum bonum, se derrumbará toda la estructura de la en el sentido de que el concepto de derecho humano, tal como
sociedad», se plasma en el derecho nacional y en el internacional, ha
y los que dicen, con Julian Huxley: evolucionado gradualmente. Al examinar ciertos aspectos del
«Considero que el Estado existe para el desarrollo de las derecho internacional en materia de comunicación, observa
vidas individuales, y no los individuos para el desarrollo del que, considerándolos como una sucesión en el tiempo, ponen
Estado.» de manifiesto «varias tendencias interesantes», a saber:
El problema radica en encontrar el modo óptimo de promo- - la premisa inherente al Convenio Internacional de Teleco-
ver, proteger y ampliar el bien del individuo y el de la sociedad municaciones (cuya versión original fue el Convenio Tele-
a la vez, en función de las circunstancias y en cada edad con gráfico Internacional de 1869, es que hay una serie de
arreglo a sus luces. En ciertas épocas, ciertas sociedades harán Estados totalmente independientes que aceptan cooperar
hincapié en el individualismo; en otras sociedades o en otras en ciertos campos específicamente definidos;
ocasiones, se insistirá sobre todo en las necesidades colectivas. - después de la Segunda Guerra Mundial, el ser humano
La historia reciente de los nuevos países independientes mues- individual pasa a ocupar una posición en el derecho interna-
tra que en las fases iniciales de libertad se destacan las necesi- cional público (Carta de las Naciones Unidas, Declaración
dades colectivas de la sociedad, la cual, al irse desarrollando, Universal de Derechos Humanos, etc.);
puede otorgar una mayor libertad al individuo. Como dijo el
gran i.:: v magistrado norteamericano Abe Fortas: 1. Edmund Burke en «Letter to the Sheriffs of Brlstoln

26

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- el modelo de los instrumentos posteriores que adoptan excelencia del derecho. El derecho pasa del hombre a la
conceptos modernos de derecho internacional es el Tratado comunidad, y de ésta a la humanidad, que es el sujeto
sobre el espacio ultraterrestre de 1967; en él se reconoce último.»5
por primera vez la interdependencia de los Estados y se Cocea explica que la humanidad es actualmente un concepto
introduce un nuevo concepto: el de humanidad, que rebasa jurídico y que ha sido reconocido como tal por los Estados en
categorías tradicionales del derecho internacional como la los quince años últimos: «La humanidad está por encima de
de nación-Estado; todo.. ha alcanzado el nivel jurídico máximo.. es, en definiti-
- la amplia ratificación de instrumentos como la Convención va, la persona». A su juicio, «se cierra el círculo del hombre, la
Internacional sobre la eliminación de todas las formas de sociedad, la comunidad internacional y la humanidad», y los
discriminación racial, de 1965, parece implicar la acepta- derechos de la humanidad quedan plasmados en el concepto
ción por los Estados de nuevas obligaciones positivas en de jus humanitatis.
nombre de principios morales comunes.’ Es posible que esta idea de que el sujeto último del derecho
Ahora bien, las dificultades que suscita el tema de los es la humanidad permita resolver el dilema. Coincide con las
derechos humanos no se debe siempre a causas ideológicas. tesis de quienes desean adscribir el derecho a la persona
Ploman ha destacado con razón que a menudo parece ser que humana, y no a la sociedad. Al mismo tiempo, no lo limita al
se trata de dificultades de carácter político cuando, en reali- individuo, lo cual resulta inaceptable para los que consideran
dad, obedecen ala existencia de actitudes jurídicas diferentes. que la sociedad, representada por el Estado, es el sujeto de
Y dice que, incluso en la tradición jurídica occidental, existen todos los derechos y que los individuos tienen únicamente los
diferencias obvias entre los sistemas basados en el derecho derechos que les otorga el Estado.
romano y los de common law, a la vez que unos y otros se Es indudable que toda la controversia relativa al sujeto del
diferencia del sistema jurídico nórdico. Otros sistemas, basa- derecho a comunicar es uno de los puntos más arduos del
dos en el derecho islámico, chino e hindú, pueden ser más debate. Si se logra resolverla, desaparecerán los principales
diferentes todavía.3 obstáculos y resultará mucho más fácil llegar a una definición
A este respecto, se puede encontrar un paralelo en una del derecho y a su reconocimiento en el derecho nacional y en
sentencia del Tribunal Supremo de los Estados Unidos de el internacional
América, según la cual la libertad religiosa implica dos concep-
tos: la libertad de creer y la libertad de actuar. En esa sentencia
se decía que «la primera es absoluta, pero la segunda no puede
serlo por la naturaleza misma de las cosas».4 Análogamente, se
puede afirmar que el derecho a comunicar del individuo es
absoluto, y que no lo es, en cambio, la libertad de ejercerlo.
La tercera posibilidad de llegar a un punto de vista común se 2. Edward Ploman, «Present mternational framework of the Right to Communi-
deriva de una tesis propuesta por Cocea, que opina que el caten, Collected Papers, p. 80.
3. Op. cit., p. 79.
derecho a comunicar «corresponde al hombre, es un derecho 4. Cantwell v. Connecticcut, 1940. Texto en McGrath, Church and State in
de la persona. A partir del hombre, se extiende a la comunidad Ameritan Law, Milwaukee, 1962. pp. 270-287.
pero no a las instituciones. El hombre es siempre el sujeto por 5. Op. cit., p. 28.

27
10. De la idea a la acción

En una reunión de la Unesco sobre la planificación y las «Los medios pertinentes para alcanzar esas libertades son
políticas de comunicación, celebrada en 1972, se dio una ahora igualmente importantes. Antes, las condiciones im-
definición de la circulación de la información que tiene un plícitas eran que el Estado reconociera esas libertades al no
interés directo para el concepto de derecho a comunicar; aplicar leyes que las redujeran. Pero vemos hoy que no
«La concepción de la comunicación moderna debe rebasar basta con eso; el Estado no solamente tiene que salvaguar-
el modelo vertical anticuado, esto es, el concepto de circula- darlas sino que además ha de encontrar el modo de que
ción en un solo sentido. Es tan importante saber lo que puedan practicarse esas libertades con una mayor
quiere hacer la gente con los medios de comunicación como equidad.»”
preguntar lo que pueden aportarle éstos. Procede conside- Se plantea, pues, la siguiente pregunta: iqué debe hacer el
rar la circulación de la información con un proceso multila- Estado? La respuesta es doble. La primera medida será que
teral en el cual no solamente puede comunicar uno con cada Estado reconozca la existencia y la validez del concepto
muchos sino también uno con otro, muchos con uno y de derecho a comunicar.
muchos con muchos.»’ Esto quiere decir que el Estado debe reconocer que la comuni-
Siguiendo ese razonamiento, se observará que la importan- cación es una necesidad humana fundamental, indispensable
cia asignada al derecho a comunicar permite tal circulación para que el individuo pueda actualizar plenamente su poten-
horizontal de la información. Se dejará de considerar exclusi- cial de ser humano, y, por ende, un derecho humano funda-
vamente el proceso de comunicación en función de una circula- mental.
ción hacia abajo y hacia afuera: de una elite a las masas, del La segunda medida consiste en que el Estado debe precisar
centro a la periferia, de los ricos en comunicación a los pobres en una ley nacional las libertades que se derivan del derecho a
en comunicación. Se le concebirá como el desecho del indivi- comunicar -libertad de opinión, de expresión y de
duo a comunicar con tantos semejantes suyos como se lo información- y reconocer en la práctica las facultades que se
permitan su capacidad y los recursos disponibles. De este derivan a su vez de dichas libertades: libertad de palabra,
derecho del individuo se deriva el derecho de las comunidades, libertad de prensa, independencia de la radiodifusión «admi-
de las sociedades y de las naciones a comunicar entre ellas. nistración pública abierta».
Una segunda consecuencia de la formulación de la Unesco Este enfoque tiene ventajas e inconvenientes. En efecto,
es que lo que importa no es simplemente el contenido de la establecería el derecho a comunicar simpliciter como derecho
comunicación. También son importantes el proceso efectivo humano básico, inviolable en todas las circunstancias, sin
de comunicación y el uso que hacen de él los comunicadores. recargar el concepto con toda una letanía de libertades y
Es éste un aspecto de la comunicación muy poco estudiado facultades dependientes que, en la práctica, pudieran restrin-
todavía. Y sin embargo, tiene una gran transcendencia con girse o limitarse válidamente según las circunstanncias de
respecto al ser humano, para el cual la comunicación es una tiempo o lugar. Así pues, se trataría el derecho a comunicar
necesidad fundamental. como el derecho a la vida, que es el derecho humano más
No basta, pues, con reconocer la existencia de un derecho básico de todos; se declararía simplemente el derecho, sin
humano a comunicar. Si la necesidad de comunicar constituye añadirle formulaciones referentes a las libertades y facultades
al fundamental para la existencia humana -es decir, para que implica ni a las restricciones o limitaciones legítimas de
poder existir como ser humano capaz de actualizar plenamente esas libertades o facultades.
su potencial personal-, ha de ser posible ejercer ese derecho Se evitarían con ello las dificultades mencionadas en el
dentro de las limitaciones y restricciones propias de cada capítulo 7, donde se dice que sería contraproducente intentar
situación concreta. A su vez, esto impone a la persona, la incluir en la definición de derecho a comunicar toda la gama de
comunidad, la nación o a las entidades internacionales que obligaciones y temas que desean incluir ciertos partidarios del
reconocen la existencia de un derecho a comunicar la obliga- derecho a comunicar.
ción de garantizar unas condiciones en las cuales pueda ejer- Pero hay un grave inconveniente, y es que una definición
cerse ese derecho. Como dice de Sola Pool: que se redujera a una simple declaración del derecho a comu-
«Un derecho es una exigencia con respecto a otros. Impone nicar resultaría demasiado vaga y general, por lo que carecería
la obligación de hacer algo o de proporcionar ciertos de utilidad práctica. Aunque la aceptaran y adoptaran todos
recursos. »’ los Estados, podría seguir siendo una declaración general que
Por consiguiente, en el plano nacional el reconocimiento de no obligara a los Estados en forma alguna.
un derecho a comunicar impondrá al Estado la obligación de
crear unas condiciones que permitan ejercer las libertades
prácticas y las facultades derivadas del propio derecho, como 1. <sRcport of the Meeting of Expcrts on Communication Policies and
lo propugnan Rao y Kwan Siu, los cuales, al abogar por el Planning>,. COM/MD/24 (Unesco, 1972).
2. Ithiel de Sola Pool, «Scarcity, Abundance and the Right to Communicatc»,
establecimiento de parámetros más amplios de los derechos de
Evolvmg Perspectives-. p. 175.
comunicación, admiten que la libertad de expresión y la de 3. Y.V. Lakshmana Rao y Lu¡-Tan Kwan Siu, «Is Asia alone in its ambi-
prensa han dejado de ser conceptos adecuados. Y añaden: valencc?>), Evolving Perspectives, p. 66.

28
Es ésta una crítica justificada. La única solución intermedia pudiera ser necesario restringir o suspender esas libertades o
entre una vaga generalidad y una definición tan recargada y facultades en ciertas ocasiones, por razones fundadas.
matizada que resultara igualmente inútil sería una definición Esa definición en dos partes permitiría hacer la necesaria
dividida en dos partes. La primera obligaría al Estado a distinción entre los aspectos primario y secundario del dere-
reconocer el derecho global a comunicar; la segunda le obliga- cho a comunicar, garantizando el derecho primario y estable-
ría a garantizar el ejercicio del derecho en la práctica por ciendo a la vez limitaciones justificadas a las libertades y
medio de las libertades y facultades antes citadas, aunque facultades derivadas del derecho básico.

29
ll. La incorporación al derecho internacional

Una vez incorporado a la legislación nacional como derecho do en general de acuerdo en que los sujetos del derecho
humano básico, puede ser más fácil proponer el derecho a internacional son las naciones, y no los individuos. Por ello,
comunicar como principio de derecho internacional. A este el hecho de declarar que los individuos tienen ciertos
respecto, Le Duc ha esbozado un planteamiento interesante. derechos intrínsecos como ciudadanos de su nación con
Observa que el derecho a comunicar carece de un corpus arreglo al derecho internacional fue una idea revoluciona-
significativo de principios jurídicos universalmente aceptados. ria ya que, como señala William Bishop, Jr. en Znternatio-
Cada nación ha resuelto sus propias controversias de libertad nal Law (Nueva York: Prentice-Hall, 1953, p. 209), «el
de expresión sin tener presente la simetría filosófica, ni en una trato de dar un Estado a sus nacionales no parece suscitar
forma global. No existe, pues, un conjunto plenamente desa- actualmente cuestión alguna de derecho internacional, ni
rrollado de conceptos jurídicos nacionales en materia de co- los individuos tener derechos, aplicables en virtud del
municación que pueda servir de base para la creación de un derecho internacional, derivados de ese trato». Las
derecho internacional. Por ello, llega a la conclusión de que Naciones Unidas intentaron obviar el problema dando el
«Para que pueda surgir un corpus de doctrina jurídica carácter de tratados a sus declaraciones de derechos huma-
universalmente aceptado en el campo de la comunicación nos, aplicables, pues, como derecho internacional al ser
internacional, será preciso que los especialistas empiecen suscritos por cada nación. La teoría puede estar justificada,
por establecer un marco general que transforme cada uno, pero en general las naciones se han sentido sumamente
de esos valores de comunicación nacionales implícitos en reacias a ratificar todo tratado que rija algún aspecto de su
una serie de principios de derecho explícitos. Como la política nacional.»3
mayoría de los conflictos de derecho internacional parecen En tercer lugar, en la fase actual no cabe considerar que el
haberse referido a los medios de comunicación de masas, y derecho a comunicar sea un principio aceptado en general.
no a los derechos personales de comunicación, este tipo de Hay una lista impresionante de acuerdos e instrumentos inter-
marco general podría centrarse inicialmente tan sólo en los nacionales en materia de comunicación social, como se indica a
cauces de comunicación que transmiten mensajes públicos, continuación, pero no serfa posible deducir de ella que dere-
y no privados.»’ cho a comunicar esté lo suficientemente reconocido como para
Pero hay por lo menos tres grandes obstáculos que coartan poder decir que se trata de un principio de derecho inter-
los intentos de incorporar al ordenamiento jurídico internacio- nacional.
nal el derecho a comunicar. El primero de ellos es la división En el quinto periodo de sesiones del Grupo de Trabajo de
del mundo en campos antagónicos. Como dice Blumenwitz: las Naciones Unidas sobre los satélites de difusión directa
(Ginebra, 1974), las delegaciones de la República Federal de
«Por estar dividida la comunidad de naciones en varias
Alemania, Argentina, Austria, Bélgica, Indonesia e Italia
direcciones -Este y Oeste, Norte y Sur-, el derecho
prepararon una lista de acuerdos internacionales en materia de
internacional no se encuentra ya en condiciones de formu-
comunicación, dividida en las cuatro categorías siguientes:4
lar declaraciones coherentes, firmes o básicamente no con-
trovertidas en unos campos altamente políticos. Y la liber- 1. Naciones Unidas
tad de información, como parte integrante del sector más Carta de las Naciones Unidas (1945)Tratado sobre el espacio
general de la política de comunicación, es hoy también un ultraterrestre (1967)
de esos campos altamente políticos en las relaciones inter- Declaración sobre los principios de derecho internacional
nacionales. En una época en la cual el uso de la fuerza está referentes a las relaciones de amistad y a la cooperación
casi universalmente prohibido, los medios de comunicación entre los Estados de conformidad con la Carta de las
han pasado a ser instrumentos en una batalla de ideas, que Naciones Unidas (1970)
es actualmente el único modo de modificar legítimamente Declaración Universal de Derechos Humanos (1948)
el statu quo. »’ Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (1966)
En segundo lugar, no existe actualmente una entidad inter- Declaración sobre el fortalecimiento de la seguridad interna-
nacional que permita impugnar las leyes nacionales en nombre cional (1970)
del individuo. La Corte Internacional de Justicia de La Haya Convención sobre el derecho internacional de rectificación
dirime las contiendas entre Estados; el Tribunal Europeo de (1952)
Luxemburgo puede entender en las querellas de los individuos
contra un Estado únicamente porque las naciones de la CEE
han promulgado leyes que autorizan tal recurso. 1. Op. cit., p. 160.
Le Duc ha destacado las limitaciones del derecho internacio- 2. Dieta Blumenwitz. c<Freedom of Information in the Light of International
nal en relación con el individuo: Law, en Freedom of Information-a human right. Hanns-Seidel-Stiftung,
Munich 1078, p. 13.
«Desde la época del De jure belli acpacis de Hugo Grocio 3. Ibid., nota 2. p. 167.
(1625), los especialistas del derecho internacional han esta- 4. Ibid., pp. 25 y 26.

30
Resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas Estos otros argumentos son discutidos también por quienes
110 (II), 381 (V). 424 (V), 841 (IX), 1236 (XII), estiman que procede definir promulgar el derecho a comuni-
13001 (XIII), 1721 D (XVI), 1815 (XVII), 1962 (XVIII). car. A su juicio, la disparidad tecnológica y educativa entre las
2222 (Xx11) y 3182 (XXVIII) naciones puede desaparecer con el tiempo, y la aceptación
También es pertinente la resolución 756 (xX1X) del Consejo internacional del derecho a comunicar, haciendo hincapié en
Económico y Social. la distribución de los recursos internacionales en materia de
2. Unión Internacional de Telecomunicaciones comunicación para atender las necesidades nacionales, acele-
Convenios internacionales de telecomunicaciones (Montreux, rará el proceso.
1965, y Málaga-Torremolinos, 1973) Ahora bien, la disparidad entre los recursos tecnológicos y
Reglamentos de Radiocomunicación educativos de los diferentes países destaca el problema del
Actas finales de la Conferencia Administrativa Mundial de llamado «imperialismo cultural». Ciertos países y organiza-
Radiocomunicaciones Espaciales (1971) ciones procurarán utilizar la tecnología de la comunicación,
Recomendación sobre la transmisión sin trabas de noticias los sistemas de comunicación y las libertades en materia de
(Montreux, 1965). comunicación con fines políticos yio comerciales. Esto puede
servir para que se impongan los valores ideológicos y culturales
3. Unesco de las naciones ricas en comunicación a países dotados al
Resolución 7.22 sobre la Libre Circulación de la Información respecto.
(Beirut, 1948) Hay que trazar una difícil divisoria entre las restricciones
Declaración sobre los principios rectores del empleo de las legítimas del aflujo de materiales informativos y recreativos
transmisiones por satélite para la libre circulación de la extranjeros, con miras a proteger a la nación receptora, y una
información, la difusión de la educación y la intensificación rigurosa censura basada en razones políticas o ideológicas.
de los intercambios culturales (1972) En este caso, se puede manejar el concepto de derecho a
4. Otros documentos (de alcance regional) comunicar en apoyo de ambos aspectos del dilema. Se le puede
Declaración de Derechos Humanos (Bogotá, 1948), de alcan- alegar para oponerse a todo obstáculo que coarte el aflujo de
ce continental y que se anticipó ala Declaración Universal) materiales exteriores. AI mismo tiempo, el aspecto del dere-
Convenio Europeo de Derechos Humanos (1950) cho a comunicar representado por el derecho a escoger la
Acuerdo Europeo para la protección de las emisiones de comunicación que se desea recibir proporciona una justifica-
televisión (Estrasburgo, 1960, modificada en 1965). ción para rechazar ciertas formas de comunicación.
Para la reunión del Instituto Internacional de Radiotelevi- Con la «explosión» de las comunicaciones-en particular, el
sión celebrada en Colonia (1975), Edward W. Ploman preparó tráfico transnacional de datos y la introducción inminente de
una lista de textos e instrumentos internacionales pertinentes, los satélites de difusión directa- puede ocurrir que ciertas
algunos de los cuales se mencionan a continuación con objeto naciones procuren restringir la circulación por razones ideoló-
de complementar la anterior enumeración: gicas o legislar contra todo «desarme», discurrir nuevos siste-
Constitución de la Unesco (1945) mas de interferencia o intentar frenar los progresos tecnológi-
Resolución 59 (1) (1946) de la Asamblea General cos. Todos los precedentes históricos sugieren que tales medi-
Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las das tendrían un valor limitado y por poco tiempo solamente,
Formas de Discriminación Racial (1965) antes de que surgiera una tecnología capaz de circunvenirlas o
de invalidarlas.
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Cul-
Otra posibilidad más importante es que, en su legítima
turales (1966)
oposición al aflujo de materiales exteriores discutibles o inde-
Proclamación de Teherán (1968).
seables, esas naciones se opongan al propio concepto de
Según Cocea: derecho a comunicar. Considerarán que se trata de una impug-
«Todos esos instrumentos y documentos tienden a crear la nación no solamente de sus derechos internos para con sus
conciencia universal necesaria para poder convertir la liber- ciudadanos sino también de su derecho a proteger su sociedad
tad de información y la libre circulación de la comunicación contra una invasión cultural y política exterior injustificada.
social en un principio de derecho internacional.»5 No se puede hacer gran cosa para prevenir la oposición al
Otros no están de acuerdo con esa actitud.Proponen que se concepto de derecho a comunicar por tales motivos, ni tampo-
incluya el derecho a comunicar, así como otros derechos co existe garantía alguna de que quienes acepten en principio
humanos, en acuerdos internacionales, ya que de ese modo ese derecho vayan a concederlo en la práctica.
quedan al margen del dominio reservado del Estado, y sus Lo más que cabe esperar es que se adopte el derecho a
violaciones se exponen a presiones y críticas internacionales. comunicar en la legislación nacional, y que lo conceda en la
Como ejemplo de la eficacia de semejante acción mencionan práctica un número suficiente de naciones como para darle la
la reacción internacional contra el upartheid en Sudáfrica y la fuerza moral de un acuerdo internacional, de modo tal que la
condena del mismo. opinión pública mundial les obligue a rectificar a las naciones
Se aducen otras dos razones prácticas para justificar que no que se nieguen a aceptar el principio 0 que no lo apliquen en la
se promulgue el derecho a comunicar. Una de ellas es que el práctica.
desequilibrio en la tecnología de la comunicación en el mundo
impide garantizar el derecho a comunicar a todos. Según este
punto de vista, la proclamación del derecho traería consigo
una ampliación del desfase tecnológico.
La segunda objeción es que el nivel de instrucción de
muchos cientos de miles de personas de todo el mundo es tan
bajo que no estarían en condiciones de aprovechar el derecho a
comunicar. 5. Ibid.. p. 26

31

--
12. Derechos y recursos

Aun apoyando el concepto filosófico, ciertos participantes en contribuir sobremanera a mejorar y ampliar las oportunida-
el debate internacional sobre el derecho a comunicar dudan de des de comunicar de los individuos. Tal es la meta legítima
que tenga sentido proclamar un derecho universal si la mayo- de quienes se interesan por el tema del derecho a
ría o quizás incluso la totalidad de los cuatro mil millones de comunicar. »5
habitantes del globo carecen de los recursos, de la libertad y de Tampoco es la escasez de recursos en materia de comunica-
la posibilidad de aprovecharlo. ción, o lo desigual de su distribución, un obstáculo insuperable
Pomorski es uno de los que, aun admitiendo que todo para la consecución de tal objetivo. En primer lugar, los
individuo tiene derecho a comunicar, destaca que en la actuali- recursos no son ya tan limitados como antes. La tecnología
dad sólo pueden gozar de él los económicamente poderosos.’ moderna está aumentando la disponibilidad de comunicación
Otros, como Le Duc, estiman que el derecho a comunicar a un ritmo portentoso y, si bien sigue habiendo un amplio y
seguirá siendo indefinidamente una expresión abstracta del cada vez menos aceptable desequilibrio en la distribución de
derecho natural, o bien sencillamente que es demasiado gene- esos recursos, como dice de Sola Po01 nada impide la creación
ral como para que sea posible analizarlo.2 de una sociedad en la cual todos tengan un mayor acceso a los
Pero ciertos autores afirman que, si no se puede garantizar medios de comunicación, que no se reduzca al dos o tres por
la práctica o la aplicación del derecho a comunicar, no tendrá ciento superior y como ocurre hoy.6
sentido continuar intentando definirlo filosóficamente. Acon- En segundo lugar, si para formular la definición del derecho
sejan que, en vez de ello, se procure cambiar las estructuras de a comunicar hay que esperar a que exista una distribución
la sociedad, para permitir el ejercicio en la práctica del dere- equitativa de recursos de comunicación en todo el mundo,
cho a comunicar. Beltrán y Fox de Cardona, por ejemplo, habrá que esperar mucho tiempo. Se suele decir que lo perfec-
dicen que to se opone a lo bueno. Es injusto descartar una solución
«. . de poco servirá glosar y aquilatar las definiciones de las buena porque no da la respuesta perfecta al problema. En este
libertades y del derecho a comunicar si la trama de la mundo imperfecto no hay soluciones perfectas.
sociedad sigue promoviendo difícilmente su auténtica y Ali Shummo, representante del mundo pobre en comunica-
generalizada aplicación.»3 ción, da una versión más equilibrada. A su juicio, el derecho a
Otros juzgan que es ése un consejo inspirado por la desepe- comunicar no debe ser parcial sino absoluto. Ofreciendo a
ración, y que refleja el tipo de determinismo social expresado todos la misma oportunidad de ejercerlo. Pero acepta que:
por Campean en su conclusión: «No podemos, y no debemos, utilizar esto como pretexto
«No es el modo de comunicar de los individuos lo que para exigir que se interrumpa el caminar de otros hasta que
determina la estructura social, sino que es ésta la que también nosotros podamos disponer de los medios tecnoló-
determina aquél.>h4 gicos. Esperamos, sin embargo, que los especialistas de los
Señalan que siempre habrá obstáculos -jurídicos, econó- países desarrollados tomen en consideración esta cuestión e
micos, políticos e ideológicos- que coarten la plena aplicación inciten a sus sociedades a reconocer la necesidad de que los
del derecho a comunicar, independientemente de que se consi- países en desarrollo mejoren sus sistemas de comunica-
dere que su sujeto es el individuo o la sociedad, o uno y otra. ción... De este modo desaparecerán los prejuicios y las
Pero estiman que el hecho de ponerse de acuerdo sobre una actitudes parciales que suscita el sagrado derecho a comuni-
definición’ de dicho derecho sería de por sí un factor de car, y quedarán satisfechos quienes se sienten preocupados
transformación gradual de la sociedad nacional y de la interna- por la desigualdad entre su derecho a comunicar y el de sus
cional con arreglo al rumbo justo. Afirmar que la sociedad semejantes del mundo desarrollado. »7
debe cambiar antes de que se defina el derecho o bien que la
definición puede contribuir a cambiar la sociedad se parece
mucho a la controversia sobre la precedencia del huevo y de la
gallina.
Como dice Ithiel de Sola Pool:
«No hay modo alguno de satisfacer todas las exigencias de
1. Loc. cir., p. 46
acceso a los grandes medios de comunicación de masas. Las
2. Ibid., p, 160.
reivindicaciones acumuladas con respecto a otros indivi- 3. Ibid., p. 131.
duos, que supone el deseo de cada uno de ellos de comuni- 4. Pavel Campeanu, SA sociologirt’s view of the Right to Communicate»,
car, rebasan con mucho los recursos disponibles. La gente Evolving Perspectives, p. 237.
5. Ibld., p. 176.
se sentirá decepcionada al ver que su libertad de comunicar
6. Ibid., p. 177.
no pede plasmarse en un derecho a la forma de comunica- 7. Ali Mohammad Shummo, ScThe Right to Communicate as seen in developing
ción concreta que le interesa. Pero la política social puede countriew, Evolving Perspectives, p. 255.

32
En todos sus escritos sobre el particular, Harms y Richstad «Lógicamente. semejante recomendación debería haberse
han destacado la estrecha relación que existe entre la planifica- expresado, si es que es filosóficamente defendible, como
ción, la política, los recursos y los derechos en materia de una facultad de las sociedades, derivada del derecho a
comunicación. comunicar de los individuos. 0 bien, si no puede superar la
«Estamos descubriendo que los derechos de comunicación prueba del análisis filosófico, deberfa haber sido expresada
resultan ser derechos «secos» si no hay una distribución y un en un contexto que no sea el de una declaración relativa a
desarrollo adecuados y equitativos de los recursos en mate- un derecho humano.»”
ria de comunicación.»x Hay que llegar a una componenda que evite la necesidad de
Al intentar establecer una definición del derecho a comuni- incluir en la definición del derecho a comunicar recomendacio-
car, esa observación puede desempeñar un importante papel. nes referentes a una distribución más equitativa de los recursos
Puede ayudar a convencer a los países a cuyo juicio tal en materia de comunicación, a la vez que se destaca la obliga-
definición constituye una amenaza para su soberanía cultural o ción de los países ricos en comunicación de contribuir activa-
política que puede engendrar también un nuevo afán de mente a esa tarea.
organizar esos recursos mundiales de un modo más equitativo
y de dirigirlos allí donde son más necesarios. Fisher no se siente
muy a gusto con la idea de incluir en una definición del derecho
a comunicar lo que califica de
«recomendación humanitaria sobre la distribución de los
recursos humanos, económicos y tecnológiccos necesarios
para establecer el derecho a comunicar como objetivo
alcanzable en todo el mundo.»’ 8. L.S. Harms y Jim Richstad, t<Right to Communicate: Human rights, majar
En su opinión, el derecho de las comunidades y las socieda- communication issues, communication policres and planning)>. Cokted
Papen, p. 107.
des a los recursos en materia de comunicación no tiene la
9. Dcsmond Fisher. «Thc Right to Communicate: A philosophical framework
misma importancia básica que el derecho a comunicar de los for the debaten. Evolving Perspectives. p. 89.
individuos. Y llega a esta conclusión: 10. Ibid., p. 99.

33
13. Implicaciones

Como se destaca en esta obra, el derecho a comunicar es un radio rural, y no a la televisión urbana; otro dirá que implica el
concepto ético y filosófico. Es la razón de ser y la justificación derecho a vivir en paz; un tercero que presupone el derecho a
de los esfuerzos encaminados a que sea aceptado como dere- recibir ayuda para el desarrollo. Todos esos aspectos son
cho humano básico, y ratificado como tal en los planos nacio- importantes; la dificultad estriba en considerarlos como parte
nal e internacional. integrante del derecho a comunicar.
Al mismo tiempo, tal sanción tendría evidentemente impor- No es posible ampliar indefinidamente el derecho a comuni-
tantes consecuencias prácticas, así como implicaciones socio- car, para que abarque cualesquiera objetivos no relacionados
culturales, económicas, jurídicas, políticas y de otra índole con él que quepa adscribirle. Lo urgentemente necesario es
para la sociedad. Esas implicaciones -más que los aspectos encontrar una vía media entre intereses contrapuestos y deter-
filosóficos y éticos- fueron precisamente las que dificultaron minar las implicaciones prácticas de ese derecho, con objeto,de
y retrasaron el establecimiento de un acuerdo sobre el concep- que el concepto deje de ser una concepción filosófica embrio-
to propiamente dicho. naria.
Tal preocupación es comprensible. El derecho a comunicar Hay ciertos indicios de progreso, afortunadamente. El más
abarca una gama de libertades de comunicación mucho más esperanzador es que el derecho a comunicar ha sido aceptado
amplia que las anteriores formulaciones, que no consiguieron ya en el programa a largo plazo de la Unesco y, cada vez más,
un apoyo general debido a la incertidumbre que suscitaban sus entre los intelectuales y los especialistas de la investigación en
consecuencias prácticas. Era inevitable que la nueva formula- materia de comunicación, como concepto que merece un
ción tropezara con una oposición mayor todavía. estudio más a fondo. En segundo lugar, aunque fuera posible
Esa oposición tiene su origen en dos puntos de vista ideoló- descartar o aplazar indefinidamente el debate sobre el concep-
gicos principales. Las naciones «occidentales» desconfían del to filosófico de derecho a comunicar, los adelantos de la nueva
concepto de derecho a comunicar por considerar que forma tecnología de la comunicación imponen su propia urgencia,
parte de las propuestas relacionadas con el nuevo orden mun- oblitando a examinar claramente las implicaciones prácticas.
dial de la información y de la comunicación, que provoca en Ello se debe a que, en el mundo moderno, resulta cada vez
ellas un gran recelo. Temen que se aprovechen sus secuelas más indispensable llegar a un acuerdo sobre las políticas
como justificación para imponer restricciones alas agencias de nacionales de comunicación y llevar a la práctica éstas no
noticias occidentales, a la comercialización de programas de solamente con miras al progreso económico sino incluso para
televisión y de películas extranjeros en los países menos desa- la supervivencia de una nación como entidad cultural y políti-
rrollados y a la explotación de la tecnología de transmisión de ca.
datos y otras tecnologías nuevas. En el presente contexto, no importa mucho cuál vaya a ser la
En ciertos países socialistas y del Tercer Mundo, la oposi- política nacional que se decida; podrá tratarse incluso de la
ción obedece al temor a que pueda ser utilizado para justificar decisión de desinteresarse completamente de la nueva tecnolo-
la perpetuación del actual desequilibrio generalizado de los gía. Lo que cuenta es que la índole de esa tecnología hará que
flujos de información y la importación sin trabas de informa- toda decisión al respecto repercutirá, en un grado u otro, en las
ción y tecnología occidentales y, por ende, de valores occiden- libertades de una sociedad dada en materia de comunicación.
tales. En algunas sociedades, la nueva tecnología puede contribuir
No es nada fácil salir de ese atolladero, y las actitudes sensiblemente a garantizar libertades de comunicación mayo-
aparentemente inconciliables, adoptadas hasta ahora en el res para todos, facilitar el acceso y la comunicación interactiva
debate sobre los aspectos filosóficos del derecho a comunicar, y aumentar las oportunidades de desarrollo humano merced al
son el fiel reflejo de una profunda discrepancia sobre las intercambio de información y de opiniones. En otras, la
implicaciones prácticas. Y, como los políticos y otros dirigen- adopción de ciertos elementos de la nueva tecnología puede
tes de la sociedad se interesan más por las consecuencias surtir el efecto opuesto, por ejemplo al reducir el volumen de
prácticas que por el concepto filosófico, el hecho de que se recursos disponibles para otras formas más antiguas de comu-
haya prestado relativamente poca atención a aquellos aspectos nicación, como el teléfono o los periódicos, que quizá resulten
constituye un ingente obstáculo para llegar a un acuerdo más apropiados en una sociedad concreta.
general sobre el derecho a comunicar. Aunque no se han estudiado suficientemente las consecuen-
Es cierto que, como ya ha quedado dicho,’ varios autores cias prácticas del ejercicio del derecho a comunicar, las obras
han propuesto listas de los que, a su juicio, son los elementos publicadas sobre el particular sugieren los siguientes temas de
integrantes del derecho a comunicar, indicando con ello en investigación.
términos generales las implicaciones prácticas probables. Pero
cada una de esas listas es en gran medida la enumeración de los
intereses principales de su autor en materia de comunicación.
Un autor llegará a la conclusión de que en relación con el
derecho a comunicar, es imprescindible dar la prioridad a la 1. Véase el capítulo 6.

34
1. Aspectos socioculturales Como ha dicho el poeta irlandés Ferguson:
La comunicación está íntimamente relacionada con la cultura «. el hombre aspira
de cada sociedad, a la vez como fuerza creadora y como agente a unir su presente con el pasado de su país,
de cambio. El rápido desarrollo de la nueva tecnología de la y a revivir en el conocimiento de sus antepasados.»3
comunicación hace que los cambios culturales resulten a la vez Este problema no afecta solamente a los países que están
posibles y probables. Se advierten ya sus efectos en las impor- todavía en una fase de desarrollo, en el plano económico, sino
tantes aplicaciones en el campo de la educación, en el inter- también a otros como, por ejemplo, Irlanda y el Canadá, que,
cambio casi instantáneo de noticias, en el hecho de que todos desde ese mismo punto de vista económico, ocupan un puesto
puedan presenciar -y, en cierto sentido, participar- en relativamente alto en la clasificación de las naciones.
grandes acontecimientos como las misiones espaciales, las El escritor canadiense Harold Innis ha destacado que los
crisis internacionales y las grandes ceremonias. cambios tecnológicos pueden repercutir en las bases mismas de
En muchos países, la difusión de los sistemas de comunica- la cultura nacional, y el Ministro de Comunicaciones del
ción de masas y sus efectos homogeneizadores han debilitado Canadá ha declarado últimamente que:
las culturas locales y regionales, a la vez que han creado una «Por ser una nación que está todavía desarrollándose, nos
mayor conciencia nacional. Ese mismo fenómeno, con sus preocupa que nuestra soberanía nacional y nuestra identi-
ventajas y sus inconvenientes, está empezando a concretarse dad puedan quedar socavadas a causa de la aplicación
en el plano internacional, con la dominación en las pantallas de irreflexiva de tecnologías, sin tener en cuenta la trama
cine y de televisión de todo el mundo de nuevos materiales económica y social del país.»4
recreativos e informativos procedentes de un número limitado Como puede verse, las posibles implicaciones sociales y
de fuentes. culturales del ejercicio del derecho a comunicar figuran entre
Al examinar el derecho a comunicar desde la perspectiva de los más poderosos determinantes de toda decisión relativa a la
los nuevos adelantos tecnológicos, se corre el peligro de actitud de una sociedad ante ese derecho.
considerar la propia tecnología como un bloque que hay que
aceptar sin reservas o rechazar sin matices. Resulta evidente 2. Aspectos económicos
que la tecnología debe adaptarse a las necesidades de la Muchos de los autores que han escrito sobre el derecho a
sociedad, en vez de ser ésta quien tenga que amoldarse a las comunicar han señalado que es probable que siga siendo una
exigencias de aquélla. idea filosófica imposible de aplicar, debido a la incapacidad de
Es manifiesta la necesidad de proteger los valores de socie- muchas sociedades de llevarla a la práctica.’ No les preocupan
dad contra el «imperialismo cultural», si bien resulta más fácil simplemente las nuevas y onerosas tecnologías que están
formular el problema que resolverlo. El derecho a comunicar surgiendo sino también las estructuras globales de las teleco-
no significa que un país tenga que aceptar la invasión de su municaciones modernas.
propia cultura por valores importados. En tal caso, el derecho Por ejemplo, el CEJTEM (Centro de Telecomunicaciones
a comunicar supone el derecho a comunicar de la sociedad con para el Tercer Mundo) ha definido cinco obstáculos económi-
arreglo a sus propias exigencias, y a protegerse contra unos cos que coartan el empleo de las telecomunicaciones al servicio
sistemas de valores importados, que pueden socavar sus for- del crecimiento social, económico y cultura1 del Tercer Mun-
mas culturales de expresión. do. Califica de injustos, no igualitarios, no basados en la
Es ciertamente difícil trazar una divisoria entre esa protec- participación, ineficaces y no pluralistas la estructura y los
ción legítima y la censura, como lo destacó el sistemas actuales.
Sr. Amadou-Mahtar M’Bow, Director Genera1 de la Unesco, «Injustos, porque la estructura de telecomunicaciones se
en su discurso en la Conferencia Intergubernamental sobre presenta como un privilegio e unos pocos países, y no un
Políticas de Comunicación en África, celebrada en Yaundé derecho inato de la mayoría de ellos.
(Camerún) en julio de 1980. Al señalar que la evolución de la No igualitarios, porque la cantidad y la circulación de la
comunicación puede suscitar un debilitamiento de las formas información por conducto de los sistemas de telecomunica-
nacionales y locales de expresión, así como la necesidad de ciones está fuertemente orientada en favor de un contado
armonizar las nuevas tecnologías con las antiguas, precisó que: número de países. Los del Tercer Mundo son mucho más
«. hay que insistir una y otra vez en los efectos que entraña receptores que creadores de mensajes.
para el individuo y para la sociedad la invasión de unos No basados en la participación, porque los usuarios y los
modelos uniformes de comportamiento que debilitan la países del Tercer Munddo carecen prácticamente de todo
comunicación interpersonal y amenazan a toda la humani- control sobre la planificación, la administración y la progra-
dad con una pérdida irreparable de substancia cultural. mación de los sistemas de telecomunicaciones. Las decisio-
Por supuesto, no se debe renunciar a las ventajas de la nes en materia de inversiones relativas al tipo de tecnolo-
tecnología moderna sino que procede establecer los engar- gías de telecomunicaciones hacen caso omiso de las condi-
ces necesarios entre las formas vivas de comunicación ciones y necesidades básicas de los países pequeños, y
interpersonal y comunitaria y los medios de comunicación vienen determinados por el usuario típicamente grande de
de masas. Semejante simbiosis, cuya necesidad se reconoce los países ricos.
cada vez más, sólo puede tener éxito allí donde las formas
tradicionales de comunicación han conservado toda su
significación y todo su vigor.»’
El Sr. M’Bow se refería específicamente a las consecuencias 2. Amadou-Mahtar M’Bow: DGi80118, Unesco, París, 25 de agosto de 1980,
socioculturales del impacto de los valores transmitidos por los p. 3.
3. Samuel Ferguson, <cMeasgedra». The Poems of Sir William Ferguson,
medios de comunicación de masas en los sistemas interperso- Dublm 1880, p. 42.
nales de comunicación, que siguen siendo las formas principa- 4. Francis Fox, Canadian Minister of Communications, Kommunications and
les de comunicación en el mundo. Pero sus afirmaciones tienen the North-South Dialogue: A Vital Link»; address to ICC Anual Conferen-
interés para toda la interfaz entre las tecnologías de comunica- ce, Otawa. septiembre de 1980, p. 3.
5. El Profesor LS Harms. que es uno de los autores más prolíficos sobre el
ción antiguas y las nuevas. Incumbe a cada sociedad encontrar derecho a comunicar, ha calificado de «derechos secos» las libertades de
el modo de amoldarse a las nuevas formas a la vez que protege información, cuando se carece de recursos adecuados. Véase la anterior
los valores positivos que encerraban las antiguas. página 182.

35
Ineficaces, porque las tecnnologías disponibles no suelen De ahí se desprende que las principales implicaciones del
tener mecanismos de retroinformación, por lo que, al no derecho a comunicar, en relación con la nueva tecnología, no
existir el diálogo, mengua la calidad del contenido educati- radican tanto en la disponibilidad y la proliferación de nuevos
vo, informativo y cultural. sistemas e instrumentos como en los nuevos servicios de
comunicación y en las nuevas relaciones humanas que permi-
No pluralistas, porque el hecho de depender de unas ten. El crecimiento exponencial de los cauces de comunicia-
pocas tecnologías limitan la cantidad y el número de opcio- ción, la posibilidad de ignorar sistemas anticuados como las
nes informativas, educativas y culturales, prescindiendo de conexiones telegráficas en uns países que podrán pasar de unos
las restricciones políticas o ideológicas que pueda haber.»’ sistemas primitivos a otros muy adelantados sin tener que
Apoya esos puntos de vista del CETTEM Anthony Smith, recorrer las fases intermedias, la digitalización y la conmuta-
autor de fama mundial, especializado en los asuntos de comu- ción en bloque, la asociación de la informática con las teleco-
nicación, a cuyo juicio: municaciones y las nuevas formas de intercambio de informa-
«cada vez se advierte más claramente que las estructuras de ción (videotex interactivo, teletexto, cable, casetes, satélites
información predeterminan en cierto sentido la viabilidad de difusión directa, etc.) amplían todos ellos la capacidad de
de las naciones.»’ comunicación, aumentan la participación y el acceso y el
intercambio de doble sentido, ofreciendo con ello nuevas
Y añade: posibilidades de adelanto humano y de intercambio de infor-
«El hecho de que los países del Tercer Mundo insistan mación en cada nación y entre ellas.
ahora en que tiene que haber algún tipo de reestructuración Los responsables políticos podrán preguntar con razón cuál
del dispositivo de comunicación internacional forma parte va a ser el costo de esas nuevas técnicas. La respuesta tiene que
de su lucha por conseguir el control de sus economías. ser la siguiente: no todos los adelantos de la tecnología de la
Hasta la fecha, el único logro de esas sociedades ha sido la comunicación resultan idóneos para todas las sociedades, y la
independencia política; la inexistencia después de ello de aplicación de un nuevo sistema o sistemas deberá ceñirse a la
todo progreso económico puede interpretarse en función capacidad y a las necesidades del país. El derecho a comunicar
de su incapacidad de pasar de la independencia a un control no requiere la introducción de la nueva tecnología, como
autóctono de la información... Hoy en día, está ya más tampoco garantiza los recursos necesarios con tal fin. El
generalizada la idea de que una estructura de información crecimiento de la nueva tecnología destaca la necesidad de
controlada desde el exterior confirma meramente al país establecer el derecho, y no al revés.
receptor en un estado de dependencia más importante
incluso que antes.»’ 3. Aspectos jurídicos
Cada vez se percibe más claramente la necesidad de tomar En el plano jurfdico, y en los niveles nacional e internacional,
urgentementee medidas para invertir esa tendencia a una las implicaciones del derecho a comunicar resultan evidentes.
dependencia creciente. En el Informe Final de la Comisión Todo derecho humano es a la vez un concepto ético y filosófi-
MacBride se recomendaba la adopción progresiva de «medi- co, puesto que se trata del reconocimiento de la libertad de
das nacionales e internacionales que fomenten el estableci- actuar del individuo y, a la vez, de la obligación positiva de la
miento de un nuevo orden mundial de la información y de la sociedad de garantizar el ejercicio de dicha libertad. Esto
comunicación», y al mismo tiempo, que se dé a «la coopera- suscita inmediatamente la siguiente pregunta: ien qué medida
ción internacional en materia de desarrollo de las comunica- una sociedad o un sistema político, reconoce los derechos de
ciones la misma prioridad que se asigna a otros sectores individuo como tal individuo, y no como parte integrante de
(sanidad, agricultura, industria, ciencia, educación, etc.) ya una colectividad? Los problemas correspondientes han sido
que también la información es fundamenntal para el progreso analizados ya en los capítulos 8 y 9.
individual y colectivo y para el desarrollo global».’ Al referirse alas «diferencias fundamentales entre los distin-
En este contexto, la importancia asignada al derecho a tos países en lo tocante a la función del Estado en materia de
comunicar como concepto ético y filosófico proporciona la comunicación», el Informe de la Comisión MacBride presenta
base para las recomendaciones referentes a la transferencia de un útil criterio.
recursos de los países ricos en comunicación a los pobres. «En principio, el marco jurídico debería proteger y fomen-
Como ya ha quedado dicho, todo derecho implica el deber tar el pluralismo; debería contribuir a que todo individuo
correspondiente para otros, que han de establecer las condi- pudiera obtener información e ideas de diversas fuentes y
ciones que requiera su ejercicio; una libertad implica solamen- escoger libremente entre ellas.»”
te que no se debe hacer nada para coartar dicho ejercicio. En ese mismo informe se enumeran ciertas trabas a la
Una aplicación obvia del derecho en las condiciones actuales libertad de información, que extirparía claramente el derecho
se refiere a la reivindicación de los países en desarrollo a un a comunicar:
reparto más equitativo de los recursos naturales finitos, por «la violencia física y las medidas de intimidación, la legisla-
ejemplo,.el espectro electromagnético y la órbita geoestacio- ción represiva, la censura, la constitución de listas negras de
naria, según lo recomendado en el Informe de la Comisión periodistas, la prohibición de ciertos libros, los monopolios
MacBride.” derivados de medidas políticas, las obstrucciones burocráti-
Ahora bien, las implicaciones del derecho a comunicar no se cas, las de carácter judicial, tales como las audiencias a
refieren necesariamente, y ni siquiera primordialmente, a los puerta cerrada o la sanción por desacato al tribunal, las
medios de comunicación de masas. Por ser un derecho univer- derivadas de prácticas profesionales y los privilegios
sal, es aplicable a todas las sociedades, en todas las fases de parlamentarios.»‘*
desarrollo, incluidas aquéllas en las cuales lo único económica- 6. CETTEM. San José. Costa Rica. Año 1, N.” 1. 1980, p. 1.
mente posible es la comunicación interpersonal ola comunica- 7. Anthony Smith, «Thc Geopolitics of Informatiom, Londres, 1980, p. 174.
ción basada en una tecnología menos moderna. En tales casos, 8. Ibid., p. 27.
implica el reconocimiento por la sociedad de su obligación de Y. Unsolo mundo, voces múltiples. Uncsco, París, 1970, Quinta Parte, Sección
A.V. párrafos 66 y 67, p. 456.
garantizar a quienes la componen el derecho a comunicar con 10. Ibid.. p. 439.
los recursos existentes y en función de las circunstancias del 11. Ibid., p. 357.
momento. 12. Ibid.. p. 240.

36
Muchas legislaciones nacionales en materia de comunica- «Sin embargo, la idea del «derecho a la comunicación» no
ción fueron promulgadas en una época en la cual la tecnología ha recibido todavía su forma definitiva ni su contenido
era muy diferente de la actual. En la mayoría de los países, los pleno. Lejos de ser ya -como parecen desearlo algunos-
sistemas postales, telefónicos y telegráficos eran monopolios un principio bien establecido, cuyas consecuencias lógicas
del Estado. Al desarrollarse la radiodifusión, se adoptaron podrían deducirse desde ahora, está aún en una fase en la
inevitablemente las mismas pautas, y solamente ahora se está cual se reflexiona sobre todas sus implicaciones y se sigue
liquidando el monopolio estatal de la radiodifusión en gran enriqueciéndolo. Únicamente después de haber explorado
parte de Europa occidental. en la Unesco y en las numerosas organizaciones no guber-
Diversos elementos nuevos como la televisión de pago o de namentales interesadas, todas las aplicaciones posibles de
cable, los satéhtes de difusión directa y la técnica interactiva esta hipótesis, podrá decidir la comunidad internacional
del videotex combinan aportaciones estatales y privadas, en cuál es su valor intrínseco. Habrá que reconocer, o que
forma tal que han dejado de ser aplicables las anteriores rechazar, la existencia de un derecho nuevo, que podría
modalidades de propiedad y, por ende, las estructuras jurídi- sumarse a los derechos del hombre ya adquiridos, y no
cas que las regían. Pero las estructuras nacionales de comuni- sustituirlos.»15
cación y los sistemas jurídicos correspondientes se diferencian
tanto entre sí que la ratificación del derecho a comunicar 4. Aspectos políticos
tendría consecuencias diferentes para cada uno de ellos.
En el plano político es donde resultan más significativas las
Mientras no sea sancionado en el plano nacional, no podrá
implicaciones socioculturales, económicas y jurídicas del dere-
haber una base para establecer el derecho a comunicar como
cho a comunicar. La división del mundo en Este y Oeste, Norte
principio de derecho internacional. Los problemas pendientes
y Sur, incide en todos los intentos de llegar a un acuerdo sobre
se expresan claramente en dos comentarios de expertos sovié-
el concepto de derecho a comunicar, por no hablar de los
ticos. En uno de ellos, referente al Informe Final de la Comi-
esfuerzos destinados a conseguir que se promulgue y sancione
sión MacBride, Sergei Losev, miembro de la misma, dice:
universalmente. Actualmente, parece desde luego tan difcil
«Se habla demasiado del derecho a comunicar, aunque no colmar el abismo entre los paises de Europa occidental y los
haya sido nunca reconocido internacionalmente, del mismo socialistas en relación con la validz del concepto que en lo
modo que tampoco es reconocido, en el plano nacional, en tocante a temas de comunicación más generales que se han
ninguno de los países representados en la Comisión. Al discutido ampliamente en los últimos años.
mismo tiempo, no se ha analizado adecuadamente el pro- Al mismo tiempo, los enormes adelantos de la tecnología de
blema de la formulación de un derecho internacional en la comunicación y la interdependencia creciente que han he-
materia de información e intercambio de la misma.»i3 cho a la vez posible e inevitable parecen indicar que se encon-
El segundo comentario soviético es de Iuri Kolossov, en un trará alguna solución. Al adoptarse unas políticas nacionales
trabajo que presentó en la Reunión de Expertos sobre el de comunicación, se pondrán de manifiesto principios comu-
Derecho a Comunicar, organizada por la Unesco en Manila nes, y es probable que surja gradualmente un enfoque común.
(Filipinas) en octubre de 1979. Sus conclusiones eran las si- Diversos dispositivos internacionales, debidos a la labor de
guientes: la Conferencia Administrativa Mundial de Radiocomunicacio-
«l. La tesis de que existe en las relaciones entre Estados nes y de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT),
una «libertad de información» no tiene reflejo objetivo contribuirán también a crear una actitud más homogénea ante
alguno en el derecho internacional vigente. En el sistema las oportunidades y los problemas de comunicación.
de normas y principios que rigen el empleo de los medios de Por último, los reiterados esfuerzos por establecer un nuevo
comunicación de masas, el derecho a informar queda con- orden mundial de la información y de la comunicación servirán
trapesado por obligaciones específicas, lo cual significa que de invernadero e incitarán a examinar el tema del derecho a
no es posible reconocer la «libertad de información» como comunicar.
principio de derecho internacional público. Como se dice en el último párrafo del Informe de la Comi-
2. Jurídicamente hablando, el «derecho a comunicar» par- sión MacBride:
ticipa de la naturaleza del derecho nacional (interno), por «Es esencial ofrecer a todos los hombres y las mujeres, de
lo que no es posible utilizar ese concepto en un sistema de todos los medios sociales y culturales, la posibilidad de
derecho internacional público. participar en el esfuerzo de reflexión colectiva así empren-
3. En el derecho naciente de la información de masas dido. En efecto, es menester desarrollar armoniosamente
internacional es más apropiado emplear el concepto de las ideas nuevas y multiplicar las iniciativas para luchar
«derecho a informar». contra las fuerzas de inercia; con el establecimiento de un
4. El carácter preciso del derecho a informar se deriva de nuevo orden mundial de la comunicación, cada pueblo
factores políticos, sociales y técnicos que inciden forzosa- debe poder aprender de los demás, informándoles al mismo
mente en el contenido material del citado derecho. tiempo de cómo concibe su propia condición y de la visión
5. La índole y el alcance del «derecho a informar» deben que tiene de los asuntos mundiales. Cuando ello se logre, la
definirse en el contexto del desarrollo y la codificación humanidad habrá dado un paso decisivo hacia la libertad, la
progresivos de los principios y normas que rigen la utiliza- democracia y la solidaridad.»‘”
ción internacional de los medios de comunicación de masas. Es posible que el debate sobre el derecho a comunicar
Cabe considerar que esa codificación es equivalente, en el constituya el elemento catalizador.
plano jurídico, al establecimiento de un «nuevo orden
internacional de la información».» 14
Debido al contraste de opiniones sobre la condición jurídica
del derecho a comunicar en el derecho internacional, es impro- 13. Loc. cir., p. 412.
14. Iuri Kolossov: «Thc Right to Commqicate in International Lawn, Unesco
bable que se llegue pronto a un acuerdo. En el Informe de la IMIRICOMIDPI3, p. 10.
Comisión MacBride se resume óptimamente la situación ac- 15. Ibid., P. 301.
tual: 16. Ibid., p. 10.

37
14. De cara al futuro

Es evidente la necesidad de efectuar muchos más estudios y Otros estiman que la definición del derecho a comunicar
debates para poder proceder a una evaluación completa de debe ser una simple declaración del derecho humano, y que
todos los elementos del derecho a comunicar y de sus implica- debe corresponder a otro nivel diferente (e inferior) la tarea
ciones prácticas. Algunos de los más directamente implicados de hacer declaraciones sobre las libertades y facultades en
en esa tarea están resignados a que pase mucho tiempo, y materia de comunicación, sobre las circunstancias en las
d’Arcy, padre del concepto, declaró desde el primer momento cuales es lícito restringirlas, sobre una distribución más
que justa de dichos recursos, etc.
«en esta trayectoria, el tiempo sólo tiene una importancia 4. No hay una idea clara del modo de seguir estudiando el
secundaria: lo que cuenta es la voluntad de llegar a la concepto. Hay quienes consideran que no se debe hacer
meta.»’ nada para cerrar el debate, y que procede fomentar nuevos
estudios. Otros piensan que ha llegado ya el momento de
Al mismo tiempo, se observa que la controversia sobre
ensamblar las distintas corrientes y de ponerse de acuerdo
ciertos aspectos -por ejemplo, la libertad de prensa y la
sobre una definición.
función del Estado- se basa en actitudes ideológicas y doctri-
Martelanc ha señalado que:
narias que no podrá zanjar debate alguno, por muy intenso que
sea. «No resulta del todo evidente a dónde han de llevar 10s
Es claramente necesario disponer de una brújula que guíe actuales esfuerzos: a un convenio de declaración interna-
las deliberaciones hacia alguna conclusión, o por lo menos cional o a otra forma de acuerdo internacional.»’
hacia un punto en el cual se manifiesten los rumbos esenciales A juicio de Cocea, no es necesario definir el derecho a
de la definición deseada. comunicar por el momento. Estima que el método más apro-
No cabe duda de que el concepto ha cobrado cuerpo desde piado consiste en establecer un órgano encargado de estudiar
que lo enunció por primera vez Jean d’Arcy. Se puede objetar, la cuestión y de desarrollar el concepto, antes de intentar
ciertamente, que lo que parecía a primera vista un concepto difundirlo. En su opinión, todo intento de definición en la fase
relativamente simple se ha entenebrecido con la pálida sombra actual no limitaría solamente el campo de acción sino también
de la duda, como la voluntad de Hamlet. El peso de las el de reflexión.3
añadiduras éticas, psicológicas, sociológicas, políticas y cultu- Le Duc parece opuesto a todo intento de definición. A su
rales acumuladas desde 1969 amenaza con sumir ese derecho a juicio:
comunicar en un mar de exigencias contrapuestas y de conside- «El derecho a comunicar no es una doctrina única y unifica-
raciones intranscendentes. da, sino un término que describe un cierto número de
Del análisis de los puntos de vista aducidos hasta ahora en el derechos de comunicación diferentes y específicos.»”
debate relativo al derecho a comunicar se desprenden las Es posible, sin embargo, que llegue a tener una aceptación
siguientes conclusiones generales: general la definición aprobada por un número relativamente
1. El concepto de derecho a comunicar es válido. No se discute pequeño de participantes en la reunión del Grupo de Trabajo
la existencia del mismo; las únicas opiniones disidentes son de Ottawa, en septiembre de 1980. Esa definición ya citada,
las que se refieren a la posibilidad de que su definición era la siguiente:
pueda trivializarlo. Parece haber un acuerdo general en el
«Todo individuo tiene derecho a comunicar. La comunica-
sentido de que se debe seguir procurando llegar a un
ción es un proceso social fundamental, que permite a los
acuerdo sobre una definición de dicho derecho, e incorpo-
individuos y a las comunidades proceder a un intercambio
rarlo al derecho nacional e internacional.
de información y de opiniones. Es una necesidad humana
2. Se discrepa sobre el sujeto del derecho. Hay quienes pien-
básica y el fundamento mismo de toda organización social.
san que es primordialmente el individuo, y tan sólo secunda-
Los sujetos del derecho a comunicar son los individuos y las
ria y subsiguientemente la sociedad; otros ven en ésta un
comunidades que componen.»5
sujeto primario, estando facultado el Estado para restringir-
lo en areas del interés general. Una solución de equilibrio
consistir-fa en hacer del individuo en la sociedad, o de la
humanidad, el sujeto del derecho a comunicar.
3. Se discrepa también sobre el contenido del derecho. Algu-
nos desean que la definición comprenda todos los derechos
y libertades asociados al derecho a comunicar, las limitacio-
nes y restricciones del ejercicio de esas libertades, y preci- 1. Jean d’Arcy, EBU Revew 118 (1969). pp. 14-1X.
2. Tomo Martelanc. Prólogo de Collected Papen, p. IX
siones sobre la distribución de los recursos en materia de 3. Loe. cit., passim.
comunicación, el uso debido de la comunicación, las finali- 4. Loc. cit., p. 165.
dades sociales de la información y otros temas similares. 5. Véase el Apéndice D.

38
Ese proyecto de definición proporciona, por lo menos, un les. Pero la idea ha prendido en diferentes países y en pensado-
punto de partida nuevo para otro intento oficial de llegar a un res de distintos orígenes y disciplinas. Ha empezado a cobrar
acuerdo general sobre una formulación que pueda presentarse gradualmente cuerpo, y el concepto forma ya parte de muchos
a la Unesco y a otros organismos internacionales, para su programas y actividades en curso de las Naciones Unidas y de
examen y posible ratificación. la Unesco.
Antes de llegar a esa fase, habrá que contestar las siguientes Es posible que, como previera d’Arcy, el momento de su
preguntas: promulgación, por mucho que tarde en venir, no tenga sino
9 ,$e puede convenir en que el concepto de derecho huma- una importancia secundaria. Pero, dado el entusiasmo activo
no a comunicar es válido? que ha suscitado el concepto, está justificado pensar que existe
ii) LQuién es el sujeto de ese derecho: el individuo o la la voluntad de llegar a la meta.
sociedad, el individuo y la sociedad, o el individuo en la Quienes se esfuerzan por alcanzar tal objetivo se han sentido
sociedad? $e trata de tres derechos distintos? En tal muy estimulados por el hecho de que en el Informe Final de la
caso, itienen todos ellos la misma importancia? Comisión MacBride se propugnara el estudio ulterior del
iii) iDeberá haber una declaración simple del derecho a concepto. En ese Informe se decía, en efecto, lo siguiente:
comunicar, o se deberá intentar dar una definición que «Las necesidades de una sociedad democrática en materia
parezca incluir todos los demás aspectos -jurídicos, so- de comunicación deberían quedar satisfechas mediante la
ciológicos, humanistas, etc.- de las libertades y obliga- formulación de derechos específicos tales como el derecho
ciones en materia de comunicación? a ser informado, el derecho a informar, el derecho a la
iv) ¿Se debe incitar a los participantes en el debate a ampliar protección de la vida privada y el derecho a participar en la
sus investigaciones y observaciones, ose debe empezar ya comunicación pública, que encajan todos ellos en ese nue-
a encauzar ese debate en la dirección de una definición vo concepto que es el derecho a comunicar. En vísperas de
aceptada por todos? lo que cabría calificar de una nueva era en materia de
Estos son los campos principales en los cuales quizá resulte derechos sociales, todas las implicaciones del derecho a
útil recabar la opinión de los participantes en el debate, en comunicar deberían ser objeto de un minucioso estudio.»6
relación con sus futuras actividades. Cada una de esas catego- Precisamente con ese fin ha sido escrita la presente obra.
rías contendrá evidentemente muchas más preguntas específi-
cas sobre aspectos detallados del problema que surgirá, en
función de las actitudes adoptadas ante la cuestión esencial.
El derecho a comunicar no ha sido definido aún, y menos
todavía incorporado a instrumentos nacionales e internaciona- 6. Loc. cit., p. 452.

39
Apéndice A

Reunión de Expertos
sobre el Derecho a Comunicar
(Estocolmo, 8-12 de mayo de 1978)

Informe Final 4. La Reunión eligió Presidente al Sr. Bengt Gustafsson


(Suecia), Vicepresidente al Sr. Ah Shummo (Sudán), y relato-
res a los Sres. L.S. Harms (Estados Unidos de América) y
El presente informe final es una versión ligeramente Tomo Martelanc (Yugoslavia). Al tercer día, la Reunión se
modificada del proyecto de texto presentado por los dividió en tres grupos de trabajo, presididos por los Sres. G.
relatores en la sesión plenaria final de la reunión. Se Anim (Ghana), A.A Moemeka (Nigeria) e 1. Kolossov
pidió a la Secretaría de la Unesco que tomara nota de los (URSS). Los relatores fueron los Sres. A.A Cocea
comentarios formulados en relación con dicho proyecto, (Argentina), D. Fisher (Irlanda) y Sr. Siagian (Indonesia).
y que enviara una versión revisada a todos los partici- 5. La Reunión examinó un documento de trabajo relativo a
pantes y observadores. Algunos participantes hicieron los principales puntos del orden del día, así como un cierto
tras ello observaciones adicionales sobre la versión revi- número de documentos básicos, redactados por diversos parti-
sada, que han sido tomadas también en consideración en cipantes, entre ellos el presentado en nombre de la Comisión
este informe final, habida cuenta de que el mismo tenía Nacional de Suecia. El documento de trabajo principal, pre-
que seguir reflejando lo más fielmente posible el tenor sentado por la Unesco, se inspiraba ampliamente en las dos
de las deliberaciones habidas en la reunión propiamente antologías de textos recientes sobre el derecho a comunicar,
dicha. compiladas por los Sres. Stan Harms y Jim Richstad. Acompa-
ña a este informe una lista de documentos de la Unesco y de
otras fuentes, facilitados a los participantes en la reunión, así
Introducción como los citados durante los debates.
6. Las deliberaciones se ciñeron en general al orden del día
1. La finalidad principal de la reunión consistía en «exami- preparado por la Secretaría de la Unesco. Después de la
nar algunos de los grandes problemas que implica el concepto presentación del documento de trabajo y de un examen gene-
de derecho a comunicar.. y en eclarar y definir más cabalmen- ral del estado actual de la reflexión teórica sobre el concepto,
te este concepto relativamente nuevo, especialmente en su los participantes lo examinaron con cierto detenimiento, en
posible aplicación en los niveles del individuo, la comunidad y relación específicamente con el individuo, la comunidad, di-
la nación». versos grupos de interés y, por último, la nación. Se había
2. Los participantes eran especialistas en varios aspectos de explicado previamente a los participantes que la Unesco se
la comunicación, y la mayoría de ellos habían intervenido ya en proponía celebrar otra reunión de expertos casi exclusivamen-
anteriores debates y redactado textos sobre el concepto de te dedicada a los aspectos internacionales del concepto. Pero,
derecho a comunicar. Al igual que los observadores, proce- como se indicará más adelante, la Reunión estimó que no le
dían de diversos países de todo el mundo y de organizaciones era posible establecer una distinción precisa entre los distintos
no gubernamentales. A todos se les había invitado a título niveles en los cuales podría estudiarse y aplicarse el derecho a
personal. comunicar. Además, los participantes consideraron que no
3. Declaró abierta la reunión el Sr. Erland Bergman, Secre- podían descartar de su examen en la reunión los aspectos
tario General de la Comisión Nacional para la Unesco de internacionales aplazando tal estudio hasta una reunión ulte-
Suecia, el cual dio la bienvenida a los participantes y a los rior. El representante de la Unesco les aseguró que, en reali-
observadores. El Sr. Lakshmana Rao, Oficial de Proyecto de dad, ello podría constituir un factor positivo, ya que sus
la Secretaría de la Unesco (Parfs), indicó en su intervención deliberaciones podrían proporcionar la base para el orden del
inicial que la reunión era la primera actividad de un programa día de la siguiente reunión programada por la Unesco.
sexenal propuesto. Manifestó que la Unesco se proponía
fomentar la labor de reflexión y teórica sobre el concepto,
examinar los puntos de acuerdo y de discrepancia y, en gene- El concepto de derecho a comunicar
ral, promover en cierta medida los trabajos al respecto. Ade-
más de las reuniones de expertos, el programa de la Unesco, 7. Del debate general sobre el concepto de derecho a comu-
aprobado por la Conferencia General en su 19.” reunión nicar y el estado presente de la reflexión teórica al respecto,
(1976), comprendía varios estudios a fondo, destinados a parecieron desprenderse tres actitudes distintas:
explorar los aspectos esenciales del concepto. Estaba también a) la tesis de que el derecho a comunicar es un concepto
prevista la publicación de los documentos y debates de dichas filosófico válido, que puede y debe constituir la base de una
reuniones y de los resultados de las investigaciones realizadas. nueva definición de un derecho humano;
Dio asimismo las gracias a la Comisión Nacional para la b) la tesis de que la comunicación forma hasta tal punto parte
Unesco de Suecia por su cooperación al acoger la reunión, y a integrante de la condición humana que es filosóficamente
los representantes de las organizaciones internacionales no innecesario, y quizás incluso erróneo, calificarla de derecho
gubernamentales por su interés, participación y apoyo a las humano;
actividades de la Unesco.
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c) la tesis de que no es aconsejable, por razones prácticas yio rencias y en las prioridades que asignaban a los diversos
políticas, un largo y tedioso debate filosófico sobre la elementos integrantes del concepto de derecho a comunicar.
conveniencia de definir el derecho a comunicar como dere- 15. Uno de los participantes resumió aparentemente esto, al
cho humano, y que todos los esfuerzos deben centrarse en decir que parecía obvio que la noción de derecho a comunicar
lograr la aceptación y aplicación de ciertos aspectos capita- abarca diversos derechos, en diferentes niveles y campos de
les del proceso de comunicación, en especial el «acceso» y comunicación. Sería, pues, recomendable, como posible me-
la «participación». dida futura, enumerar esos derechos, aquilatarlos y eva-
8. No obstante, hubo un acuerdo general en el sentido de luarlos, para poder determinar en qué medida una misma
que en los debates se había puesto de manifiesto una nueva expresión, como la de «derecho a comunicar», puede abarcar
dimensión de la política de comunicación, a saber, la necesidad adecuadamente toda la gama de los derechos de comunica-
de tomar nota de la aparición de un nuevo orden mundial de la ción.
comunicación, en el cual el acceso y la participación son 16. El derecho a participar fue quizás el más debatido de
elementos decisivos que procede implantar lo más ampliamen- dichos elementos. (Se sugirió también la posibilidad de que ese
te posible. derecho sustituyera incluso al actual concepto de derecho a
9. Los participantes parecían estar de acuerdo en que el comunicar y resultara más aceptable en todas las sociedades y
derecho a comunicar no es un principio jurídico establecido en todos los niveles). Los participantes y observadores acepta-
sino un concepto en evolución, y que no había todavía un ron unánimemente la necesidad de una intervención activa en
consenso sobre cuál podría o debería ser el desenlace de tal el proceso de comunicación. Pero hubo discrepancias sobre el
evolución. A este respecto se expresaron muchos puntos de alcance del derecho a participar. A juicio de algunos, se trata
vista diferentes. de un mismo principio, desde el nivel local hasta el internacio-
10. Uno de ellos fue que la necesidad de conocer y de nal. Para otros, parece tener una aplicación sin reservas en
informarse, de intercambiar ideas y de dar a conocer la opinión ciertos contextos, pero no en todos. Por ejemplo, se dijo que se
propia y de salvaguardar los aspectos positivos de la cultura aplica plenamente a los grupos de interés, pero no en las
propia constituyen todos ellos una parte indispensable de la relaciones internacionales. Un orador destacó que la participa-
vida. Si no conocemos y entendemos y si no estamos convenci- ción estimula el derecho a comunicar en el nivel local. Otro
dos de la necesidad de actuar, no podemos progresar, ni física manifestó que el derecho a participar no es sinónimo de
ni mentalmente. Y, cuando el individuo no progresa, tampoco derecho a comunicar, sino solamente un elemento de este
progresa la nación. El progreso y el desarrollo son, pues, la último. Se dijo asimismo que «la forma más alta de participa-
justificación del derecho de todos a comunicar. ción es la autogestión».
11. Un participante manifestó que en África no se considera 17. Se estimó que el derecho de acceso a los recursos en
que el derecho a comunicar lo sea en sí mismo, sino que se trata materia de comunicación es un elemento clave del derecho a
de un derecho derivado de la necesidad de promover el comunicar y de su aplicación. Este derecho está estrechamente
desarrollo físico y mental del individuo, de estimular la coexis- ligado a la disponibilidad de los recursos que requiere una
tencia inteligente entre los individuos y las comunidades y de comunicación interactiva y basada en la participación, e impli-
promover el desarrollo nacional. caría el acceso a la vez a los componentes materiales e intelec-
12. Se opinó asimismo que quizá sea utópico pensar que tuales de la comunicación.. . Otro elemento igualmente impor-
pueda llegarse a una concepción unánime y que «es posible tante es la accesibilidad de los medios de comunicación, tan
que tengamos que resignarnos a seguir teniendo diferencias de básico que sin él no puede haber un verdadero ejercicio del
opinión en el futuro, reconociendo al mismo tiempo la necesi- derecho a comunicar.
dad de que prosiga el debate, por lo menos hasta que se logre 18. La mayoría de los participantes consideraron asimismo
un acuerdo general sobre la necesidad fundamental de que los que los derechos de información son elementos decisivos del
individuos participen más intensamente en las actividades derecho a comunicar, y que el examen de tales derechos se
de comunicación en su país». El derecho a comunicar no solía hacer en relación con su formulación presente, en el
requiere solamente garantías constitucionales, como los artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Huma-
demás derechos humanos, sino además un cambio básico de nos. Sin embargo, un participante serialó que la aplicación de
las perspectivas y políticas actuales en materia de esos derechos no es la misma en todos los niveles, especial-
comunicación. mente en el nacional y en el internacional. En cierta medida,
13. Un participante senaló que, a su juicio, «la búsqueda esas diferencias tienen un fiel reflejo en los instrumentos
desesperada de un terreno común no resultaba demasiado jurídicos. Se observó que el Pacto Internacional de Derechos
fecunda en la fase presente, porque era preciso en primer Civiles y Políticos de 1966 contiene cláusulas (artículos 19
término aclarar las diferentes perspectivas relacionadas y 20) que son también pertinentes a este respecto. Es todavía
con los aspectos intrínsecos del derecho a comunicar, en demasiado pronto para determinar si esas disposiciones son
particular desde puntos de vista socioeconómicos y políticos adecuadas o no. Otros varios participantes afirmaron que los
diferentes. Tras ello, quizá fuera posible ver si estaba sur- derechos de información resultan especialmente pertinentes
giendo un terreno común, y lo que cabría hacer con semejante en la situación actual de desequilibrio en materia de informa-
consenso. ción, en el plano internacional.
14. Así pues, los participantes estimaron, en general, que el 19. Un participante declaró que el debate sobre el derecho a
concepto de derecho a comunicar tienen diversos elementos. comunicar tenía su origen en la idea de que la definición de un
Entre ellos el derecho a participar, el derecho a informar, el derecho a la información, formulado en el artículo 19 de la
derecho a recibir información, el derecho de acceso a los Declaración Universal de Derechos Humanos, resultaba aho-
recursos que requiere la comunicación, etc. A juicio de mu- ra insuficiente, puesto que parecía sugerir «un derecho de
chos de ellos, hay uno o dos que parecen tener la máxima sentido único, desde un plano superior a otro inferior, desde el
importancia, por ejemplo la información en cada localidad. La centro a la periferia, desde una institución a un individuo,
extracción cultural, los moldes profesionales, la experiencia desde una cultura dominante a otra más débil, y desde una
práctica, etc., de los participantes parecían influir en las prefe- nación rica en comunicación a otra pobre en comunicación».

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El derecho a comunicar y el desarrollo social ción, la idea de un proceso equitativo de intercambio o reparto
y la capacidad de diálogo, y la participación activa en el
20. La Reunión estimó que, en toda sociedad, la apreciación proceso de comunicación. Por su misma naturaleza, la comuni-
del derecho a comunicar está indiscutiblemente ligada al en- cación interactiva trae consigo, a juicio de muchos, la necesi-
torno social, económico y cultural específico. El nivel de dad de que los comunicadores escuchen a la vez que hablan. La
desarrollo general --económico, social y cultural- determina concepción interactiva hace hincapié en la comunicación hori-
en gran medida la índole, la extensión y la forma, así como 10s zontal, y no en la vertical. Se ha sugerido también que puede
límites, del ejercicio del derecho a comunicar. interpretarse esto como un indicador de la «desmonopoliza-
21. Ciertos participantes manifestaron que el desarrollo ción», y quizá de la udesprofesionalizacióm~, de los medios de
nacional y el fomento de los recursos de una nacion, y su nivel comunicación.
de progreso económico, social y cultural, están estrechamente 27. La comunicación, considerada como un proceso social
relacionados con la formulación y la aplicación del derecho a interactivo y basado en la participación, rebasa los límites de
comunicar, en el contexto nacional, y que la concepción y los medios de comunicación tecnológicos. Procede considerar
ejercicio de dicho derecho dependen en gran parte de los los medios de comunicación de masas como una parte sola-
esfuerzos deliberados e incesantes de la sociedad por lograr mente de las múltiples estructuras del proceso de comunica-
una verdadera democratización del sistema y de la vida socia- ción social. Este punto de vista reviste particular importancia
les. Por ello, procede fomentar y promover el acceso, la en relación con los países en desarrollo, en los cuales la
participación y la autogestión, que están orgánicamente liga- tecnología de la comunicación es un elemento ajeno y cuya
dos al concepto de derecho a comunicar. adopción sin discernimiento por ellos, sin adaptarla a las
22. A juicio de la mayoría de los participantes y observado- estructuras de comunicación existentes, puede resultar más
res, la formulación y ejecución de una política clara de comuni- pernicioso que beneficioso.
cación es indispensable para el establecimiento efectivo del 28. La Reunión señaló que, además de los medios de
derecho a comunicar. En particular, en el documento presen- comunicación tecnológicos, hay otras estructuras de comuni-
tado por la Comisión Nacional para la Unesco de Suecia se cación tradicionales y de base social que no parecen haber sido
exponían algunas de las medidas políticas que se desprenden adaptados suficientemente a las necesidades del desarrollo,
del derecho a comunicar en los sectores educativo y cultural en social y económico en los países en desarrollo. Se indicó que las
general, y más concretamente en forma de una política de investigaciones científicas han demostrado que los medios de
subvenciones a la prensa. Otro participante citó el caso del comunicación de masas no siempre tienen un impacto directo
consorcio (Po@) de agencias de noticias de los países no en la población. En sus efectos inciden varios factores, entre
alineados como ejemplo de resultados de una política que ellos otras estructuras de comunicación.
armoniza con el concepto de derecho a comunicar. 29. Por ello, en los países en desarrollo en los cuales sigue
habiendo una escasez de tecnología, se debería estudiar más
detenidamente el uso que pueda darse a las estructuras tradi-
Características de la comunicación humana cionales de comunicación para intensificar un proceso de
comunicación social interactivo y basado en la participación.
23. Se debatió ampliamente el tema de las características de 30. A este respecto, la Reunión tomó nota de varios ejem-
la comunicación humana. Aunque se estuvo en general de plos de vínculos entre las estructuras tradicionales y la tecnolo-
acuerdo en que la comunicación tiene carácter interactivo y gía de la comunicación establecidos en ciertas partes del
está basada en la participación, se convino también en que el mundo, y los recomendó para su estudio por otros países.
intercambio de información es una actividad central en ese 31. Los participantes estimaron que la concepción de la
proceso. Se entendó la comunicación en el sentido de que comunicación como proceso interactivo y basado en la partici-
abarca los medios de comunicación de masas pero también pación resulta particularmente fecundo. Proporciona la justifi-
como concepto que tiene un alcance mucho más amplio. Se cación ética de las reivindicaciones de acceso al proceso de
propuso como tema de estudio el de las relaciones entre el comunicación y de reparto de los recursos de modo tal que les
proceso de comunicación y su contenido informativo. resulte posible la participación a los países, comunidades,
24. Se estimó que, en ese contexto, procedía examinar la grupos e individuos que carezcan de medios para tal acceso.
comunicación en forma global, es decir, incluyendo no sola- 32. Una de las opiniones expresadas fue que se reconoce
mente los medios de comunicación tecnológicos sino también ampliamente que distamos todavía mucho de vivir la comuni-
los demás tipos de estructuras y procesos de comunicación de cación como un diálogo, se depositan pura y simplemente en la
la sociedad. Se debe tener presente, además, que la retroinfor- mente de la mayoría demasiadas de las ideas que circulan en la
mación es un elemento esencial de la comunicación. No se sociedad, confeccionadas deliberadamente como productos
debe olvidar que, pese a los grandes adelantos de la tecnología que ha de absorver una masa anónima de consumidores, y no
de la comunicación, los contactos tradicionales y personales de interlocutores en un diálogo. Con ello, se ha negado a un
directos siguen desempeñando un importante papel como número excesivo de personas el derecho a hacer oír su voz, y se
modo de promover la comunicación social. les somete a una violencia que, aun no siendo física, resulta tan
25. En el documento de trabajo, por ejemplo, se destacaba deshumanizadora como la propia agresión física.
que el cambio esencial del concepto de comunicación consistía
en que, en vez de considerarlo como una transferencia de
información de sentido único, vertical y del emisor al receptor, Derechos humanos y libertades fundamentales
se interpretaba ahora como un proceso interactivo, horizontal
y basado en la participación. La comunicación, concebida 33. Concebidos en esos términos generales y globales, las
antes sobre todo como un modo de informar a los individuos y comunicaciones humanas guardan relación con la idea de los
de influir en ellos, empezaba ya a entenderse como una derechos humanos. Ajuicio de la mayoría de los participantes,
interacción social mediante un intercambio equilibrado de la relación entre aquéllas y éstos es obvia y compatible.
información y de experiencia. 34. En opinión de algunos participantes, la comunicación es
26. Ese cambio encierra varios elementos que, a juicio de algo más que el derecho humano reconocido actualmente en
muchos, son fundamentales para el derecho a comunicar. instrumentos internacionales o documentos especializados. La
Entre ellos cabe citar el carácter interactivo de la comunica- comunicación es un proceso humano intrínseco que rebasa la

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noción social de «derecho» en su aplicación a la comunicación. respecto, cabe considerar que el sujeto del derecho a comuni-
La noción de «derecho» es la fuente y el núcleo de la comunica- car es el grupo minoritario y/o las personas que pertenecen a
ción. La libertad es dinámica, existe únicamente en la acción y él.
evoluciona constantemente en virtud del libre albedrío. La 43. Los grupos nacionales, étnicos, lingüísticos y religiosos
libertad no puede existir en el vacío. tienen derecho a la existencia, al respeto y a la promoción de
35. Según un participante, el derecho a comunicar es un sus características nacionales, culturales, lingüísticas, etc., y a
derecho humano pero «también algo más». Abarca muchas la plena igualdad en relación con el resto de la población,
libertades fundamentales que no conciernen únicamente al independientemente de su número.
individuo sino también a grupos y naciones, y debe plasmarse, 44. Todos estos derechos deben ejercerse sin discriminacio-
con una expresión apropiada, en el plano internacional, en las nes basadas en el origen nacional, racial o étnico, la lengua o la
relaciones entre Estados, naciones, sociedades y culturas. religión. En gran medida, se puede y se debe garantizar el
36. Básicamente, el hombre está en el centro del derecho a ejercicio de todos esos derechos mediante la comunicación.
comunicar, pero no como ser abstracto sino como ser humano Por consiguiente, el derecho a comunicar es un factor intrínse-
concreto que vive en un ambiente social junto con otros co de garantía de los plenos derechos de las minorías. El
hombres. El hombre sólo puede ser libre, como ser social, en la ejercicio de tales derechos humanos y libertades fundamenta-
medida en que todos los demás hombres lo sean. En este les entraña asismismo deberes y obligaciones para la población
sentido, no puede haber una libertad absoluta e ilimitada, mayoritaria. Por consiguiente, también en este sentido el
porque hay una interdependencia mutua de los individuos. La derecho a comunicar de las minorías tiene dos facetas acusa-
índole de esa interdependencia determina y da un marco das: el derecho propiamente dicho y los deberes correspon-
general a la dimensión real de la libertad. dientes.
37. Así pues, con arreglo a esas consideraciones hay tam- 45. Es preciso aquilatar el alcance y la definición de tales
bién determinantes sociales y limitaciones del derecho a comu- derechos.
nicar. Pero, al formular y aplicar el derecho a comunicar, la
sociedad tiene que hacer todo lo necesario para crear las
mismas dimensiones y oportunidades para todos. El derecho a Impacto de la tecnología
comunicar ha de ser un elemento sobresaliente de las liberta-
des fundamentales, y abarcarlo todo. 46. La Reunión estimó que no se debe hacer un hincapié
excesivo en la tecnología al conceptualizar los procesos de
comunicación, porque hay otras partes importantes de las
El derecho a comunicar y los grupos sociales estructuras de comunicación que no son tecnológicas. No
obstante, sería difícil hacer caso omiso del impacto social y
38. Una de las opiniones expresadas fue que el derecho a cultural de los adelantos tecnológicos, que pueden incidir en la
comunicar es algo esencial para el individuo, con miras al formulación del derecho a comunicar.
desarrollo de su potencial humano, por lo que procede consi- 47. Los descubrimientos e innovaciones son la fuerza impul-
derarlo como un derecho humano con la misma categorfa que sora que causa y promueve el cambio social, acarreando con
el derecho a la vida, el derecho a la libertad, el derecho a la ello consecuencias importantes para la vida social y cultural. El
religión, etc. No obstante, se engendra una gran confusión cambio tecnológico exige una cierta modificación de la pauta
cuando se intenta establecer que existe el mismo derecho, o un existente de instituciones de comunicación y de la estructura
derecho de idéntica transcendencia humana fundamental exis- social. Un cambio importante de la tecnología de la comunica-
te en una comunidad, un grupo de personas, una nación o una ción afectará a toda la red y sistema de comunicación, y en
región. Esos grupos pueden tener, y tienen, derecho a comuni- último término grabará su imprenta en toda la trama social y
car, pero su derecho no es el mismo -al menos por el grado- cultural.
que el que corresponde al individuo. 48. Por consiguiente, el derecho a comunicar, considerado
39. Otro participante estimó que seguía pendiente la tarea, como concepto dinámico, ha de: 1) tener presente la necesi-
además de informar simplemente a los individuos sobre su dad, especialmente en los países en desarrollo, de adaptar más
derecho a comunicar y de encontrar cauces para él, de enseñar- plena y deliberadamente las estructuras de comunicación tra-
les a ejercer sus derechos. En semejante contexto, se aclararía dicionales y de base social y concebir medios de vinculación
quizás el problema examinando más detenidamente las estruc- con los medios de comunicación tecnológicos; 2) adaptarse a la
turas de comunicación comunitarias. Los grupos de interés, evolución de la tecnología y a los cambios consiguientes de las
por ejemplo, pueden ser eficaces instrumentos que permitan al instituciones sociales; y 3) tomar en consideración los cambios
individuo ejercer su derecho a comunicar. e innovaciones futuros que puedan derivarse de progresos
40. En efecto, como miembro de un grupo ligado por actitu- científicos y tecnológicos.
des, ideas y opiniones comunes con respecto a temas específi- 49. Por otra pate, un concepto establecido del derecho a
cos, aumentan sus oportunidades de ser oído cuando le consta comunicar debería influir y orientar la elección y la adopción
su derecho a comunicar y se le incita a ejercerlo. El hecho de de la tecnología más apropiada, teniendo constantemente
ser miembro de un grupo entraña deberes y responsabilidades, presente su impacto social y cultural. A este respecto, un
y por ello la persona no se limita a promover sus propios participante indicó, a modo de ejemplo, que la única esperan-
intereses egoístas. Los grupos de interés pueden desempeñar, za de ejercicio efectivo del derecho a comunicar en el Africa
pues, un influyente papel en el proceso de comunicación, si se rural radica en el empleo de la radio. La pregunta es, pues, la
les fomenta adecuadamente. siguiente: icómo obtener resultados óptimos utilizando ese
41. Hubo un acuerdo general en el sentido de que los grupos medio de comunicación y los limitados recursos disponibles?
sociales deberfan disponer de los derechos de acceso y partici- La respuesta presupone la determinación de una estrategia
pación en el proceso de comunicación. adecuada en el modo de producir programas idóneos o perti-
42. Se destacó también la conveniencia de dedicar especial nentes, y de buena calidad, yen encontrar un sistema viable de
atención, con respecto al derecho a comunicar, a las diversas cooperación y coordinación entre los organismos y de interac-
minorías: nacionales, étnicas, religiosas y lingüísticas. A este ciones entre los productores de programas y su público.

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El derecho a comunicar y el Administrativa Mundial de Radiocomunicaciones que había
Nuevo Orden Internacional de convocar la Unión Internacional de Telecomunicaciones en
de la Comunicación 1979, pidiendo un replanteamiento de la asignación de fre-
cuencias y de las tarifas de telecomunicación, ayudando a los
50. Hubo un acuerdo general en el sentido que existe un países en desarrollo a formar profesionales de comunicación
grave desequilibrio en la actual circulación de la información competentes y a crear servicios adecuados de producción de
en el mundo. Para corregir la situación y lograr una circulación materiales de comunicación de masas, y estableciendo acuer-
más equilibrada de la información, tendría que haber un dos de cooperación internacional, basados en el principio de la
intercambio más intenso de información, basado en la igual- igualdad, en el campo de la comunicación de masas.
dad de oportunidades, el respeto mutuo y la adopción de los 57. Varios participantes manifestaron que, para poder esta-
justos principios de la cooperación internacional. blecer un nuevo derecho a comunicar en un nuevo orden-
51. Varios participantes manifestaron que la aplicación del internacional de la comunicación, será preciso formular y
derecho a comunicar constituiría una medida importante para aplicar un corpus substancial de normas de comunicación, en
el establecimiento del Nuevo Orden Internacional de la Comu- los planos mundial, nacional y subnacional. Afortunadamen-
nicación y que, por ende, con arreglo a ese Nuevo Orden te, de las actividades en materia de política de comunicación
habría oportunidades realistas y grandes posibilidades de sub- está surgiendo lo que cabe calificar con cierto fundamento de
sanar los actuales desequilibrios en el intercambio y la circula- ciencia de la política de comunicación. Se suele pensar que la
ción internacionales de información. No obstante, un partici- nueva ciencia tiene un sesgo axiológico, se orienta en el sentido
pante afirmó que el concepto resultaría inaplicable en las de la resolución de problemas y recurre a múltiples métodos.
relaciones interestatales, en lo que se refiere al empleo de los En otras palabras, no encaja exactamente en ninguna catego-
medios de comunicación de masas, y que quizá no fuera ría teórica u orgánica actual, sino que se rige por sus propias
posible explorar más a fondo la noción de nuevo orden interna- premisas.
cional, al no existir un «orden internacional de la comunica- 58. Se estimó asimismo que, para poder establecer un equi-
ción». librio no solamente en la circulación de la información sino
52. El establecimiento del derecho a comunicar requeriría a también en relación con las metodologías de investigación,
la vez la creación de nuevas estructuras de comunicación y la será necesario concebir nuevos métodos de investigación con
transformación -quizá radical- de las ya existentes, en espe- respecto a la política de comunicación, basados en las tradicio-
cial de las de los grandes medios de comunicación de masas. nes intelectuales de las diversas regiones en desarrollo. Aun-
Hubo a este respecto un amplio acuerdo. La Reunión estimó que semejante tarea exigiría probablemente una dedicación a
asimismo que la creación de las nuevas estructuras necesarias largo plazo de los especialistas de varias regiones, el estableci-
en las comunidades pobres en recursos de comunicación exigi- miento siquiera fuera de un nuevo método de investigación en
ría una cooperación internacional y un intercambio más equili- ese campo, que facilitara el examen de los aspectos cualitativos
brado de medios materiales e intelectuales, reduciéndose con de un problema mundial de comunicación como el desequili-
ello la disparidad entre las comunidades ricas en recursos y las brio en materia de información, justificaría una inversión
demás. No hubo ningún participante que estimara fácil esta- importante de tiempo y de esfuerzos.
blecer en la práctica el derecho a comunicar; hubo un acuerdo
general sobre la necesidad de facilitar los recursos en materia
de comunicación necesarios. La comunicación entre Estados
53. Los participantes, por ejemplo, estimaron urgentemen-
te necesario, en los planos nacional e internacional, organizar 59. Aunque se pretende que el derecho a comunicar era un
unos programas que aumentaran la disponibilidad de medios concepto global, ciertos participantes estimaron que puede
de comunicación en las zonas «pobres en comunicación». Las hacerse una distinción según que se trate de la comunicación
políticas y la tecnología y los métodos de actuación empleados entre Estados y entre individuos. Ajuicio de uno de ellos, en el
deberían ser lo mejor adaptados a las necesidades globales de mundo actual la unificación de las legislaciones nacionales en
cada país o zona, con objeto de ofrecer las máximas oportuni- materia de comunicación de masas es todavía un «objetivo
dades de acceso y participación a la población de ese país o remoto».
zona. 60. Según ciertos participantes, los principios generalmente
54. Como dijo un participante, en el nuevo orden de la reconocidos del derecho internacional pueden aplicarse a las
comunicación el problema político capital consiste en velar por relaciones internacionales en el campo de la comunicación de
que se disponga de unos recursos en materia de comunicación masas, siendo uno de esos principios el del respeto de la
que satisfagan las necesidades de comunicación humana, te- soberanía nacional.
niendo muy presentes los valores multiculturales del derecho a 61. El empleo de medios de comunicación de masas en el
comunicar. En ese momento, una formulación más clara de los plano internacional puede exigir la formulación de ciertos
valores derivados del derecho a comunicar facilitaría la aplica- principios básicos, en opinión de varios participantes. Se dijo
ción del derecho por medio de un conjunto de normas. que esa labor de formulación podrfa empezar quizás, para ser
55. Aun reconociendo tal desequilibrio, otro participante realista, en el nivel regional. Pero ciertos participantes señala-
manifestó que, si el mundo tolera que persista, ello fomentará ron que existe la posibilidad de aplicar a las relaciones interna-
los recelos entre naciones y retrasará el establecimiento del cionales la formulación de ciertos principios fundamentales,
mundo armonioso del mañana, que todos anhelan. Por su- con carácter mundial y en una atmósfera de comprensión
puesto, las medidas necesarias para corregir el actual «dese- mutua. Esos dos enfoques no son necesariamente contradicto-
quilibrio», al brindar a las naciones en desarrollo mayores rios.
oportunidades de comunicar con las desarrolladas (haciendo 62. Un participante observó que la influencia de las empre-
oír sus opiniones y entender y apreciar su cultura), son ingen- sas transnacionales ha sido particularmente determinante.
tes y complejas. Muchos de los aspectos indeseables de la tecnología moderna
56. Se sugirió que, tomando como base los principios del han sido implantados en los países en desarrollo a consecuen-
derecho a comunicar, la solución al actual desequilibrio en las cia del dominio progresivo de los mercados nacionales por
relaciones internacionales en materia de comunicación podría empresas. En gran parte, la «contaminación» en materia de
encontrarse en primer término, en el marco de la Conferencia comunicación se ha debido a su constante afán de ensenar a la

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gente a comprar y a consumir sus propios productos. La Ajuicio de algunos, el derecho a comunicar tiene sus raíces en
destrucción de las pautas culturales de las sociedades periféri- la pauta de interacción social, capital para el acceso y la
cas se debe en gran parte a su decisión de transformar el participación, al paso que el derecho a participar reviste la
mundo en un gigantesco mercado, mediante una publicidad máxima importancia desde ciertas perspectivas culturales; pa-
mundial más barata. Está, pues muy justificado preguntar en ra otros, lo más interesante es el derecho a dispensar informa-
qué medida es posible promover el establecimiento de un ción y a recibir información en los planos interno e internacio-
derecho a comunicar si no se examina la actual estructura nal. En otras circunstancias, el derecho a la protección de la
transnacional y se apunta a transformarla. En suma, el derecho vida privada personal o cultural tiene una importancia capital.
a comunicar sólo puede ser hoy un concepto que tenga sentido Así pues, el derecho multicultural a comunicar responde a
si presupone un esfuerzo por superar las limitaciones estructu- intereses culturales diferentes debido a la inclusión de un
rales y económicas, que siguen siendo una parte esencial del cierto número de derechos de comunicación integrantes del
sistema de mercado internacional. mismo.
63. Se dijo también que puede ser necesario reestructurar o 69. En el caso de un derecho específico, en su ejercicio
revisar los intentos de estabelcer un nuevo orden económico inciden aspectos de libertad y de responsabilidad. La tensión
internacional para que pueda surgir un nuevo orden mundial derivada de las reivindicaciones de libertad y de responsabili-
de la información, ya que uno y otro estarfan estrechamente dad suscita entonces la formulación de una política de comuni-
relacionados, especialmente en el caso de las infraestructuras cación, ya sea implícitamente como parte integrante de la
de comunicación de masas de los países en desarrollo. cultura o bien explícitamente en el derecho positivo.
70. Incluso en la fase inicial de la formulación, el derecho a
comunicar engendra preguntas relativas al modo de llevarlo a
Resumen y conclusiones la práctica, lo cual parece exigir el desarrollo y la asignación de
unos recursos en materia de comunicación que permitan satis-
64. Para la mayorfa de los participantes y observadores, el facer las necesidades humanas al respecto. A su vez, tal
concepto de derecho a comunicar no resulta totalmente ma- aplicación requiere el marco general de un nuevo orden en
nejable. Ajuicio de algunos participantes, sigue siendo dema- materia de información y de comunicación.
siado vago. Para un observador, el concepto no encaja clara-
mente en el aspecto omnipresente de la comunicación. Para un
participante, el desfase entre la «utopía» del derecho a comu- Medidas futuras
nicar y las realidades «prácticas» de la comunicación es hoy
muy grande. Para otro observador, lo más arduo parece 71. La Reunión hizo varias sugerencias y propuestas relati-
consistir en establecer la equidad y la igualdad en todo el sector vas a la acción futura:
de la comunicación. a) El concepto de derecho a comunicar requiere un ulterior
65. En opinión de la mayoría de los participantes y observa- análisis, investigación y estudio a fondo, a partir de ambien-
dores, el concepto de derecho a comunicar plantea problemas tes culturales diferentes.
graves y arduos, que requieren una visión más amplia que la b) Para la formulación de una definición práctica del derecho
que permite tener un solo ambiente cultural, una sola discipli- a comunicar, se recomienda que se estudien todos los
na o un núcleo dado de experiencia profesional. Y, si bien derechos relacionados con él y pertinentes, que puedan
algunos participantes y observadores estimaron que hay aspec- quedar comprendidos o citados en dicha definición, inclui-
tos del concepto no muy aceptables, señalaron al mismo dos nuevos derechos posibles como el derecho a ser selecti-
tiempo que, a su juicio, se trata de un concepto esperanzador y vo y el derecho a participar en la creación de información.
alentador. c) Los principios intrínsecos del acceso y la participación
66. Se destacó enérgicamente la importancia de la comuni- deberían revestir una importancia capital en todo estudio
cación humana. Un participante observó que la comunicación ulterior, en particular cuando se intente llevar a la práctica
crea la sociedad, y otro que el hombre tiene que comunicar el derecho a comunicar.
para poder ser verdaderamente hombre. Se hizo hincapié en lo d) Como la vertiente internacional del derecho a comunicar
delicado de la formulación de un derecho humano a comuni- no figuraba en el orden del día y sólo fue abordada en forma
car. Por último, se subrayó , enérgicamente también, que la periférica, se sugirió la organización de otra reunión inter-
aplicación del derecho a comunicar requerirá, durante mucho nacional de expertos (categoría VI) para examinarlo, en
tiempo todavía, el desarrollo de los recursos en materia de particular en función del nuevo orden internacional de la
comunicación que hacen falta para poder atender las necesida- comunicación.
des humanas en ese campo. e) Se debería encargara un grupo de trabajo de la Unesco que
67. Se estimó, en suma, que el concepto multicultural de prosiguiera el estudio del concepto de derecho a comuni-
derecho a comunicar es dinámico y que está en evolución. car, con objeto de llegar a comprender mejor su gama
Desde los primeros trabajos relacionados con el concepto, se posible de aplicaciones, teniendo presentes las realidades
ha venido intentando incluir en él una amplia gama de perspec- del derecho internacional.
tivas culturales. El concepto resulta dinámico al centrarse en f) Se deberfan dar a conocer las recomendaciones de esa
una comunicación interactiva y basada en la participación. reunión a las conferencias intergubernamentales de la
Además, sigue evolucionando y cambiando a consecuencia de Unesco sobre las políticas de comunicación en Asia,
los estudios y debates al respecto. África, etc., así como a otras conferencias que versen sobre
68. Se considera actualmente que la comunicación humana temas conexos, como las políticas de educación y de
es fundamentalmente interactiva y basada en la participación. cultura.

45
Apéndice B

Reunión de Expertos
sobre el Derecho a Comunicar
(Manila (Filipinas), 15-l 9 de octubre de 1979)

Informe Final nuevo orden mundial de la información, exponiendo su propia


concepción de lo que procede hacer en el sentido del cambio:
«Estimo urgentemente necesario un replanteamiento glo-
El presente informe es una versión ligeramente modifi- bal de los principios de la comunicación, que abarque todos
cada del proyecto de texto presentado por los relatores sus aspectos y todos sus niveles...
en la sesión plenaria final de la reunión. Se pidió a la Incluso en su formulación inicial en anteriores debates de
Secretarfa de la Unesco que tomara nota de los comenta- la Unesco, «derecho a comunicar» está recargado ya con
rios formulados sobre dicho proyecto, y que enviara una toda una serie de consideraciones, entre ellas las de la
versión revisada a todos los participantes y observado- disparidad entre los países en desarrollo y los desarrollados,
res. Tras ello, se solicitaron observaciones adicionales el acceso y la participación en el proceso de comunicación,
de los participantes, antes de dar los toques finales al la responsabilidad al respecto de los medios y de los profe-
informe. sionales de la comunicación de masas, la soberanía de los
L Estados, etc.
Lo que más nos preocupa es la posible deformación del
sentido de ese principio cuando consigamos reducirlo a una
En octubre de 1979 se celebró en Manila una Reunión de formulación única; y más probable todavía es que resulte
Expertos sobre el Derecho a Comunicar, organizada por la tan general que permita llegar a un consenso internacional
Unesco en cooperación con la Comisión Nacional para la a la vez que quede despojado de todo sentido.
Unesco de Filipinas. El problema no es ciertamente simple. A mi juicio,
Su finalidad esencial consistía en estudiar temas prioritarios tenemos que regirnos por una clara percepción del pluralis-
relacionados con las dimensiones internacinales del derecho a mo de valores en nuestro mundo, la diversidad de sistemas
comunicar, como prolongación de una reunión similar, cele- y la diferencia de condiciones. Pero ha de haber algún
brada en Estocolmo en 1978, que versó sobre algunos de los punto en el cual se aglutinen nuestras ideas y nuestros
grandes problemas que se derivan del concepto. valores y se aclaren para nosotros la importancia y las
Inauguró la reunión el Consejero Pedro F. Abella, Secreta- posibilidades de la comunicación.
rio General de la Comisión Nacional para la Unesco de Una segunda consideración importante ha de ser la
Filipinas, el cual dijo en su discurso: «Esta reunión ha sido percepción de las posibilidades creadoras y beneficiosas de
convocada por la Unesco en cumplimiento de una resolución la comunicación. En efecto, existe también el peligro de
aprobada por la Conferencia General en su última reunión, en que intentemos formular el derecho a comunicar con miras
la cual autorizaba al Director General de ia Unesco a llevar a a controlar, y no a liberar, las posibilidades que ofrece para
cabo actividades encaminadas a promover las investigaciones el hombre.
sobre las medidas destinadas a garantizar los derechos huma- En nuestra concepción del derecho a comunicar debemos
nos teniendo presentes los principios enunciados en la Decla- reconocer seriamente y sin rodeos que, además del equili-
ración Universal de Derechos Humanos. Se invitaba asimismo brio, debemos promover el desarrollo de los pueblos, y
al Director General a fomentar el estudio a fondo y el debate que, además de hacer que la comunicación sea responsable,
sobre el concepto de derecho a comunicar. debemos actualizar plenamente su potencial.»
Se trata de un concepto nuevo y que es necesario precisar, La reunión eligió Presidente al Excmo. Sr. Francisco S.
por lo cual ha invitado la Unesco a destacados especialistas, Tatad, (Filipinas) y relatores a los Sres Narayana Menon
para que expliciten y aclaren los diversos aspectos de dicho (India) y Erland Bergman (Suecia).
concepto.» En el debate sobre el documento principal, un participante
El Sr. Lakshmana Rao, representante de la Unesco, dio la se refirió al desequilibrio de la circulación de la información, y
bienvenida a los participantes en nombre de la Organización, y declaró que ciertas naciones industrializadas se interesaban
declaró: sobre todo por sus propios estereotipos nacionales y por su
«En Estocolmo examinamos el concepto de derecho a perpetuación, ejerciendo con ello los medios de comunicación
comunicar esencialmente en tres niveles: el del individuo, de masas un fuerte impacto, con algunos aspectos de su
el de la comunidad (incluidos los grupos de interés) y el de cultura, en los países en desarrollo.
la nación. Las dimensiones internacionales del concepto
que estamos intentando definir concretamente habían de
correr a cargo de la presente reunión.» El Simposio de Pune
Al declarar abierta la reunión, el Excmo. Sr. Francisco S.
Tatad, Ministro de Información Pública de la República de Se aludió al simposio celebrado en Pune (India) en julio
Filipinas, hizo un análisis del dilema existente en materia de de 1970, muy poco después de la Reunión de Expertos de
comunicación. Propugnó una vez más el establecimiento de un Estocolmo. En él se intentó precisar la evolución del concepto

46
de derecho a comunicar desde su formulación inicial diez años La libre circulación es sinónimo de «facultad que tienen los
antes, el derecho a informar y a ser informado, y los derechos poderosos de explotar a quienes carecen de poder» El derecho
de información conexos que han acabado poniendo de mani- a comunicar es un concepto más amplio, y sus temas centrales
fiesto la importancia de todos los aspectos de la comunicación, de interés y sus dimensiones rebasan ampliamente los límites
la sutil distinción entre derechos y libertades, el concepto de del concepto de «libre circulación».
libertad, uno de cuyos elementos esenciales es la oportunidad, Un participante manifestó que el derecho a comunicar no
y las obligaciones consiguientes. El Simposio destacó la afir- podrfa ejercerse fuera de las fronteras nacionales. No es
mación contenida en el preámbulo de la Declaración de la posible extender este derecho, legítimo en el comportamiento
Unesco: «La libertad de información requiere, como elemento humano, más allá de las fronteras de la naci6n-Estado. El
indispensable, la voluntad y la capacidad de usar y no abusar derecho, en las diferentes culturas y con arreglo a tipos dife-
de sus privilegios. Requiere, además, como disciplina básica, rentes de regímenes, debería quedar subsumido en la formula-
la obligación moral de investigar los hechos sin prejuicio y ción de una política de comunicación que reconociera la
difundir las informaciones sin intención maliciosa». El Simpo- interdependencia creciente de las naciones, cuya comunica-
sio examinó detenidamente la pregunta propuesta por el Sr. ción ha sido considerada como un determinante de las estrate-
Sean MacBride: «¿Cómo establecer el derecho a comunicar, gias de democratización.
con todas sus implicaciones jurídicas y éticas, como nuevo Otro participante señal6 la existencia de una crisis en el
rumbo de pensamiento y de acción en todo el campo de la sistema existente de comunicación internacional. Se percibe
comunicación?» cada vez más claramente, en todo el mundo, la necesidad de
Al repasar el debate sobre el concepto de derecho a comuni- cambiar el presente desequilibrio mediante una acción radical,
car en su propia región desde la reunión de Estocolmo que modifique fundamentalmente la actual estructura de co-
de 1978, un participante señal6 que no había sido excesiva- municación internacional. El nuevo orden internacional de la
mente animado. A su juicio, las personas de esa región empe- comunicación forma de hecho parte integrante del nuevo
riadas en el estudio y el examen de problemas de comunicación orden económico internacional. La lucha por un nuevo orden
no consideraban que ese concepto resultara totalmente ma- internacional es la lucha a la vez por un nuevo orden económi-
nejable. co y por un nuevo orden social, cultural y de la comunicación.
En relación con el derecho a comunicar, cabe resumir en las La descolonización y la emancipación de todas las sociedades
siguientes hipótesis las conclusiones derivadas de los debates es un proceso integral, económico, político, cultural y mental.
de Pune: La función de la comunicación en ese proceso de cambio
- el derecho a comunicar podría fortalecer la identidad cultu- radical tiene una importancia capital, por ser uno de los
ral, lo cual es un requisito previo para que los individuos principales factores de promoción, aceleración y catálisis del
sientan algo por su grupo 0 nación; desarrollo social. Es inevitable que la lucha por ese nuevo
- el derecho a comunicar estimula la acción innovadora; orden sea larga y difícil. El concepto de derecho a comunicar
- se podrían contrastar las distintas opiniones existentes en no debe seguir siendo un concepto filosófico o meramente
una sociedad mediante un derecho a comunicar que no abstracto, sino que debe suscitar una radical acción social y
correspondiera exclusivamente auna minoría, sino a todos. tener carácter dinámico.
Los poderes efectivos deberían acoger con satisfacción tal Dicho participante sugirió asimismo diversas actividades
reflejo de las opiniones predominantes en una sociedad; complementarias de la reunión. En primer lugar, sería muy
- el derecho a comunicar estimula también la fiscalización importante dar a conocer a la Comisión Internacional de
por el pueblo de los poderes económicos y políticos, lo cual Estudio de los Problemas de la Comunicación los resultados de
fomenta la eficacia en general. la misma. Además, la Unesco debería preparar y llevara cabo
A juicio de los participantes, el derecho carece de todo un nuevo programa, que incluyera el establecimiento de un
sentido si no hay unos recursos adecuados que lo respalden, en fondo especial para el desarrollo de la comunicación y un
materia de educación, tecnología y economía ya que, en ese centro de investigaciones en materia de comunicación, de la
caso, existe el peligro de que se honre de palabra el concepto Unesco. (No compartieron este punto de vista otros partici-
pero sin que haya una aplicación efectiva del mismo. Un pantes, uno de los cuales expresó su decidida oposición a ello,
participante señaló que, en muchas partes del Tercer Mundo por estimar que dicha propuesta no incumbía a la reunión.
no se conocen suficientemente ni siquiera los derechos básicos Declaró asimismo que le parecía más aconsejable para el
propios. futuro la creación de un organismo independiente de comuni-
Llegado a este punto, uno de los participantes abrió un cación internacional).
debate sobre los derechos y la libertad. La libertad no es el
libertinaje, y la Reunión estimó en general que es preciso
ejercerla con responsabilidad, en un enfrentamiento abierto
entre las diferentes opiniones. Debe haber oportunidades para La nueva tecnología
ese ejercicio. Los derechos tienen que ser creados por la
sociedad y llevados a la práctica por las autoridades publicas o No se debe consentir que la nueva tecnología de la comunica-
los Estados, con un respaldo internacional o universal. ción destruya formas tradicionales de comunicación humana y
de difusión de información, si es que quiere que llegue a ser
una realidad, una verdadera circulación de la comunicación de
doble sentido. La inexistencia anterior de tal sistema se debió
Libre circulación y derecho a comunicar en parte auna situación de escasez en el campo de la comunica-
ción humana. La situación ha cambiado, y actualmente se vive
Un participante hizo una distinción entre el concepto de en la abundancia a ese respecto. Pero, como ocurrfa antes,
derecho a comunicar y el de libre circulación de la informa- quienes poseen el poder económico y político están intentando
ción, estimando que tal distinción no resultaba evidente para controlar el nuevo tipo de tecnología. Esos poderes consti-
todo el mundo. tuyen, pues, un obstáculo para el establecimiento de una
Se dice con frecuencia que el concepto de libre circulación comunicación de doble sentido.
de la información es «una cortina de humo ideológica que No se debe considerar que la nueva tecnología sea simple-
encubre una circulación de la información en un solo sentido». mente un juguete para los habitantes en los países ricos.

47
Quienes más pueden beneficiarse de ella son, por el contrario, Estados del mundo, e hizo recomendaciones sobre diversas
los pueblos del llamado Tercer Mundo, si se utilizan delibera- medidas futuras encaminadas a promover el conocimiento del
damente esos nuevos medios. concepto.
A propósito de tecnología y comunicación, un participante
abogó por la desaparición de la «mentalidad de comunicación A. Problemas socioculturales que inciden
de masas». La comunicación tiene también una dimensión en el derecho a comunicar
horizontal, y el Tercer Mundo en particular debe rebasar el Los debates se centraron en:
horizonte de la comunicación de masas. 1. La dominación de la cultura intensiva de comunicación de
Es preciso convertir el actual desequilibrio en la circulación los Estados más poderosos y tecnológicamente adelantados
de la información y de los materiales culturales en un equilibrio en los medios de comunicación de masas de los países de
más equitativo. El desarrollo de los cauces de comunicación en tecnología menos adelantada.2. La publicidad intensiva de
los países de tecnología poco adelantada se basa a menudo en bienes de consumo de fabricación extranjera (bombardeo
logros del mundo desarrollado, lo cual podría resultar acepta- de imágenes), que inculca gustos de prejuicios extranjeros a
ble si el contenido de la comunicación -0, mejor dicho, la la población nacional.
información- no estuviera también dominado por los valores 3. El empleo de técnicas publicitarias sutiles para hacer que
del mundo desarrollado. En algunos países en desarrollo, la hasta unos bienes de consumo importados inferiores parez-
influencia del consumismo occidental es hoy agobiante. Por can superiores a otros de fabricación nacional mejores y más
ello, los gobiernos de los países en desarrollo tienen que tomar baratos.
a veces medidas políticas, para proteger a sus ciudadanos. 4. Una televisión y un cine que, sociocultural y educativamen-
Oponiéndose a esas medidas, ciertos participantes manifesta- te, carecen de interés para las naciones de tecnología poco
ron que eran tan lamentables como la dominación ejercida por adelantada acaban por eliminar a la producción nacional,
las empresas transnacionales de comunicación. La finalidad debido a su hábil producción, manipulada mediante técni-
última debería consistir en liberar al ciudadano corriente de cas de venta, y eliminan con ello a unos programas o
todo tipo de influencias que vayan en detrimento del desarro- películas nacionales, culturalmente mejor adaptados a los
llo de su identidad cultural. En tal sentido, el derecho a objetivos nacionales en materia de educación pero desgra-
comunicar podría ser un catalizador e incluso una «fuerza ciadamente producidos con una menor calidad profesional.
revolucionaria». 5. La desorientación social y cultural de Ios jóvenes del Tercer
Se habló también de la noción de «cultura» y los participan- Mundo, derivada de la «contaminación» cultural por obra
tes estuvieron más o menos de acuerdo en una definición de unos programas que fomentan los instintos bajos y unos
antropológica, que resumió uno de ellos al decir que la cultura seriales de televisión que proponden a ensalzar la violencia.
es lo que un individuo-o también, por cierto, una sociedad- 6. El establecimiento de modelos perniciosos, al centrar la
piensa, hace y tiene, y que la cultura se hereda, transmite y atención del público en individuos de conducta dudosa y al
comunica. Existe, pues, una igualdad intrínseca entre las presentarlos como «héroes» y «ángeles» gracias a trucos de
diferentes culturas, incluso considerándolos como culturas de publicidad (por ejemplo, el síndrome de la «superestrella»).
la mayoría y de la minoría de una sociedad y como culturas de 7. La impresionante posición que se han creado las empresas
diferentes países y regiones del mundo. transnacionales de comunicación de masas en los países del
Resulta indispensable el desarrollo de nuevas estructuras de Tercer Mundo, y el modo en que tienden a producir una
comunicación, especialmente en las comunidades pobres en letargia social y cultural en sus pueblos, lo cual trae consigo
comunicación, así como una transformación de las estructuras una sensación de pasividad, apatía e impotencia, que ha
de comunicación existentes, sobre todo en relación con la coartado la capacidad creadora de innovación en las na-
función de las empresas transnacionales. ciones del Tercer Mundo e impedido su desarrollo cultural y
social.
Aspectos educativos:- En el campo de la educación, el pro-
Grupos de trabajo blema radica en la escasez de instrumentos de comunicación
a causa de la pobreza. Los maestros disponen únicamente
Tras ello, la reunión decidió constituirse en dos grupos de de tizas y pizarras. Es manifiesta la falta de libros, revistas y
trabajo, según se sugería en el orden del día, con objeto de materiales audiovisuales y de otro tipo, necesarios para
examinar detenidamente ciertos aspectos específicos del con- poder enseñar los valores humanos pertinentes.- En cuan-
cepto de derecho a comunicar, haciendo hincapié en sus to al contenido de los planes de estudio, siguen observán-
dimensiones internacionales. dose vestigios de la influencia colonial, que desvían a los
El Grupo de Trabajo 1 se ocupó de los aspectos sociocultura- objetivos nacionales de las metas deseadas y que frenan
les y educativos y el II de las implicaciones jurídicas y económi- considerablemente el desarrollo (por ejemplo, el predomi-
cas del derecho a comunicar. Los dos grupos de trabajo nio en los planes de estudio de lenguas extranjeras que los
examinaron ciertos documentos de debate, presentados por alumnos consideran carentes de toda relación directa con
varios participantes, además del documento de trabajo básico, sus aspiraciones).
el discurso del Ministro de Información Pública y el trabajo del - Como la mayoría de las obras de ciencias, incluidos en
Sr. Iuri Kolossov sobre «El derecho a comunicar en el derecho ciertos casos los libros de texto y otros materiales didácticos,
internacional», escrito especialmente para la reunión a peti- están escritos en francés, inglés u otra lengua extranjera, a
ción de la Unesco. los niños de los países en desarrollo les resulta difícil enten-
Antes de la redacción definitiva, se examinaron en sesión derlas y asimilarlas, con lo que el estudio es para ellos
plenaria los proyectos de informe de ambos grupos de trabajo. doblemente arduo.
- A menudo, no es nada fácil traducir libros de ciencia y de
tecnología a las lenguas del país, ya que se aplican a ellos
Aspectos sociales, culturales y educativos leyes relativas al derecho de autor, cuya violación se sancio-
na severamente. (Cuando se consigue la autorización de
El grupo definió y examinó, en el contexto del derecho a reproducción, puede seguir habiendo, para la traducción, el
comunicar, diversos temas importantes relacionados con la obstáculo de la inexistencia en las lenguas del Tercer Mundo
vida social, cultural y educativa de las distintas naciones- de símbolos equivalentes a los de esos libros).

48
B. Sugerencias y recomendaciones b) El Grupo recomendó asimismo que se concedieran re-
para la acción futura compensas, con carácter regional, a destacados mate-
Después de resumir los problemas socioculturales y educativos riales impresos, programas de radio y televisión y pelícu-
mencionados en la sección A sobre el derecho a comunicar, el las de producción nacional que resulten culturalmente
grupo presentó varias propuestas y recomendaciones para la enriquecedores, con objeto de fomentar las dotes crea-
acción futura. doras y la innovación en este campo.
Esas recomendaciones apuntan a contrarrestar los efectos c) Con objeto de ayudar a las distintas naciones a subsanar
de corrosión de la cultura de los países del Tercer Mundo, el retraso y el desfase cultural entre una tecnología de
producidos por los medios de comunicación de masas extranje- comunicación rápida y la capacidad de los países del
ros, y a dar un contenido al concepto de derecho a comunicar Tercer Mundo de amoldarse a ella, se recomendó el
en la medida en que afecta a las distintas naciones-Estados y a establecimiento de un dispositivo internacional encarga-
sus elementos subculturales y de otra índole. do de estudiar este tema y de formular criterios prácticos
1. Producción en el país de películas y programas de radio y de al respecto.
televisión de gran calidad, con objeto de reconquistar al d) Con la ayuda de la Unesco, se podrían llevar a cabo los
público nacional, en particular a los jóvenes alienados. Con estudios pertinentes sobre una transferencia de tecnolo-
tal fin, se incita a los gobiernos y a los organismos nacionales gía apropiada y útil (poco onerosa y conveniente), de los
competentes a velar por que se fomenten el profesionalis- países desarrollados a los países en desarrollo.
mo, los códigos de deontología, la calidad artística y técnica e) También es preciso que los organismos nacionales y las
y la idoneidad social. Procede ceñirse a los objetivos nacio- organizaciones no gubernamentales procuren conven-
nales sociales, educativos y culturales nacionales. cer a los medios de comunicación impresos y de radiodi-
2. En la mayor medida posible, los libros, las publicaciones fusión de que deben dedicar programas periódicos a las
periódicas y otros materiales didácticos deberían producirse actividades de las Naciones Unidas y de la Unesco.
en el propio país, dando importancia ala vez al «contenido» f) Se sugirió que la Unesco intensificara la labor de la
y a la «forma». Hay que fomentar la reactivación de los compilación de ejemplos de estructuras de comunica-
medios de comunicación tradicionales y autóctonos (por ción nacionales (órganos de política y planificación) y de
ejemplo, juglares, tamborileros, etc.), que han quedado modelos de acceso y participación, así como del empleo
relegados a un segundo plano a causa del desdichado exter- de la comunicación al servicio del desarrollo nacional. El
minio provocado por los medios de comunicación Grupo examinó el caso de un órgano de comunicación
extranjeros. (el de Yugoslavia), integrado por representantes de
4. La localización y la descentralización de las prácticas y varios sectores de la sociedad, los cuales determinan la
medios materiales de comunicación, y más concretamente política al respecto.
la elección de su contenido y del modo de presentarlos, son g) El Grupo recomendó que la Unesco emprendiera inves-
elementos esenciales del derecho a comunicar. tigaciones sobre los resultados y las consecuencias de los
5. Se recomienda el examen del sistema de recompensas occi- sondeos y encuestas, efectuados por empresas transna-
dental, basado en la competitividad y en el logro individual. cionales, sobre el modo de penetrar en los mercados
Una adopción sin discernimiento de éste y de otros modelos nacionales.
similares podría engendrar una estratificación caracterizada h) En materia de comunicación transcultural, el Grupo
por el elitismo y el culto de la personalidad, y mermar las estimó que el dilema radica en que no se puede conside-
oportunidades de acción colectiva en los programas naci- rar que toda la cultura importada sea mala, ya que una
nales de desarrollo. parte de ella puede no serlo. De lo que se trata es de
6. Se deberían crear órganos consultivos de comunicación, determinar en qué medida se puede tolerar la infiltra-
semiestatales o independientes, facultados para establecer ción, y en qué medida procede proteger y preservar a las
normas de comunicación que constituyan un fiel reflejo del culturas nacionales. Se debe examinar el tema de la
consenso público. importación en función de los sistemas de valores y los
7. En relación con el problema de la escasez de libros de ideales del país. Habría que realizar estudios sobre el
producción nacional, se recomendó que los gobiernos sufra- particular.
garan la publicación de libros de autores nacionales, ya que i) Se sugirió asimismo que la Unesco patrocinara una
esos libros armonizarán mejor con los objetivos nacionales reunión internacional, encargada de examinar los pro-
en materia de educación, especialmente en relación con las blemas de las comunidades y los grupos étnicos en
aspiraciones patrióticas y el desarrollo nacional. (Cabe citar relación con su derecho a dar a conocer sus puntos de
como ejemplo el Grupo Especial de realización de un vista.
proyecto de desarrollo de la educación (EDPITAF) del j) Habrfa que efectuar estudios sobre la adopción de deci-
Gobierno filipino, que selecciona, sufraga y ayuda a los siones, tal como influyen en ella los ideales y valores
autores nacionales, al publicar libros de texto de enseñanza culturales y, más concretamente, nuevas investigaciones
elemental y secundaria, textos internacionales y manuales sobre el tema, a cargo de directores de empresas de la
para el personal docente, en inglés y en la lengua nacional). industria de la comunicación.
8. Tras ello, el grupo examinó los sistemas de comunicación e
Aspectos jurídicos y económicos
información destinados a realzar la preservación y la conser-
vación de los valores culturales que fomentan el desarrollo A. Hacia una definición
nacional. Se estimó procedente utilizar los medios de El Grupo de Trabajo II examinó los aspectos jurídicos y
comunicación para promover la buena voluntad, la económicos del derecho a comunicar. Estimó urgentemente
comprensión y la cooperación internacionales. necesaria una definición adecuada del mismo, que debería
a) Habida cuenta de los efectos negativos de unos medios entrañar los siguientes elementos:
«sensoriales» excesivos sobre la capacidad de estudio de Se trata de un derecho a la vez individual y social, indispen-
los individuos, en particular en relación con sus dotes en sable para el desarrollo armonioso del ser humano y de la
materia de lectura y escritura, se recomendó la realiza- colectividad. Es, pues, un derecho humano básico y, como tal,
ción de estudios sobre el modo de contrarrestar tales debe quedar incorporado al texto de la Declaración Universal
efectos. de Derechos Humanos.

49
Se aplica a la vez en el plano nacional y en el internacional. Aspectos económicos:
Implica deberes y obligaciones para los individuos, los gru- En el plano nacional:
pos y las naciones. 1. Los gobiernos deberfan dar carácter de inversión prioritaria
Presupone la asignación de recursos adecuados en todos los a las infraestructuras de comunicación.
niveles. 2. Procede señalar a la atención de los gobiernos los efectos
En el ejercicio de su soberanía, las naciones tienen derecho restrictivos de ciertas tarifas e impuestos nacionales sobre el
a comunicar, lo cual presupone un proceso bilateral en sus derecho a comunicar. Cuando se basan exclusivamente en
relaciones internacionales. consideraciones financieras esos impuestos y tarifas consti-
En relación con los derechos soberanos de los Estados, tuyen un obstáculo para el proceso de comunicación y, en
procede considerar el derecho a comunicar en el mismo plano último término, para la expresión nacional y local. Se
que el derecho a la existencia, la independencia, la igualdad y debería hacer un estudio comparado al respecto.
la propiedad de un Estado soberano. 3. Los consejos de desarrollo de la comunicación no deberían
1. Es indispensable plasmar y garantizar en el futuro derecho tomar en consideración solamente la planificación de los
internacional el derecho a comunicar, habida cuenta del medios de comunicación de masas, como han venido ha-
inaceptable desequilibrio actual en materia de comunica- ciéndolo, sino también los modos de comunicación tradicio-
ción, que favorece unilateralmente a las naciones de tecno- nales, así como el potencial de los medios de comunicación
logía adelantada. La definición de ese derecho constituirá el locales (prensa rural, estaciones de radio locales, etc.) para
marco general para un nuevo orden mundial de la informa- el establecimiento efectivo del derecho a comunicar. Se
ción. debería hacer una evaluación de los costos y de la eficacia
2. Como los medios de comunicación son esencialmente del funcionamiento de los medios de comunicación locales.
«transfronterizos» o de alcance supranacional, surgen pro- 4. Para un país, el ejercicio del derecho a comunicar es una
blemas de interferencia internacional, pero el derecho a tarea permanente y, necesariamente, de gran alcance. Pro-
comunicar ha de ser básicamente compatible con el ejerci- cede, por ello, planificar la asignación de los recursos a largo
cio de su soberanía por otro Estado. plazo.
3. El ejercicio del derecho a comunicar acarrea deberes y En el plano internacional:
obligaciones de reciprocidad, respeto mutuo y tolerancia. 1. Con objeto de lograr el deseable equilibrio entre el Norte y
Ese derecho y las obligaciones correspondientes se aplican a el Sur, se deberían facilitar recursos equitativos en materia
quienes intervienen en el proceso de comunicación en todos de comunicación mediante una reasignación adecuada del
los niveles. espectro de frecuencias. Para mejorar aún más ese equili-
4. El derecho a comunicar debe amoldarse a los factores brio, se deberían tomar medidas encaminadas a dar a las
sociales, culturales, económicos y ambientales que predo- naciones de tecnología poco adelantada mayores oportuni-
minen en cada sociedad. dades de disponer de un material y equipo de comunicación
5. Como las decisiones de carácter tecnológico que inciden en apropiado.
el ejercicio del derecho a comunicar tienen consecuencias 2. Las tarifas internacionales que no toman en consideración
sociales, culturales y políticas de gran alcance, no deben los valores políticos, sociales y culturales constituyen una
tomarse en función exclusivamente de consideraciones téc- limitación injusta de un buen ejercicio del derecho a comu-
nicas y económicas. En el campo de la cooperación interna- nicar de una nación. Habría, pues, que revisarlas oportuna-
cional, los gobiernos deberían proporcionar técnicos, con mente.
las debidas directrices normativas. 3. Los países desarrollados deberían modificar su modo de
enfocar sus relaciones, en el campo de la comunicación, con
los países del Tercer Mundo, pasando de una política
B. Sugerencias y recomendaciones para la acción futura «hipercomercializada» en general a otra más realista y más
apropiada.
Aspectos jurídicos: 4. En algunos casos, la legislación y los acuerdos en materia de
1. En el plano nacional, se deberían formular políticas y derecho de autor pueden constituir un impedimento para el
promulgar leyes en materia de comunicación, con miras a buen ejercicio del derecho a comunicar. Se deberfa hacer un
establecer el ejercicio efectivo por todos del derecho a estudio detenido de este problema.
comunicar. 5. La informática, tecnología cuyo uso se está generalizando a
2. Se deberían crear órganos nacionales, regionales e interna- la vez en los países en desarrollo y en los desarrollados,
cionales para planificar el desarrollo de la comunicación y como lo indica el rápido desarrollo de los bancos de datos,
fiscalizar y arbitrar los problemas que se derivan del ejerci- tiene profundas implicaciones para la vida pública y privada
cio del derecho a comunicar como parte integrante del de individuos, grupos y naciones. Procede, por ello asignar
proceso de comunicación. una atención prioritaria a sus aplicaciones positivas, a la vez
3. Para promover y estimular el debido ejercicio del derecho a que a sus posibles efectos negativos. Procede estudiar esta
comunicar, así como para facilitar el arbitraje en los casos cuestión para poder establecer políticas y reglamentaciones
de controversia, se deberían establecer códigos deontológi- apropiadas.
cos, en varios niveles.

50

_-_,-.._ ._-..- _..,..-- ..--_


Apéndice C
Informe Final de la
Reunión del Grupo de Estudio
sobre el Derecho a Comunicar
(Londres, marzo de 1980)

Introducción Hay razones obvias para la aparición y el crecimiento del


nuevo concepto de comunicación, del nuevo derecho de comu-
Del 3 al 5 de marzo de 1980 se celebró en Londres una reunión nicación en la sociedad al igual que en las relaciones interna-
del Grupo de Estudio sobre el Derecho a Comunicar, convoca- cionales. En primer lugar, ha habido progresos impresionantes
da por la Unesco en cooperación con el Instituto Internacional de la ciencia y de la tecnología, que han repercutido en todos
de Comunicación. los puntos del globo. En segundo lugar, cada vez se advierte
En la sesión inaugural, el Grupo eligió por unanimidad más claramente la función de la comunicación en la sociedad y
Presidenta a la Sra. Jadwiga Pastecka. su desarrollo, así como la necesidad de que haya una política
El Sr. Lakshmana Rao, representante de la Unesco, expuso de comunicación integrada y coherente. En tercer lugar, se
sucintamente las actividades realizadas por la Unesco en rela- está empezando a reconocer la interdependencia de las socie-
ción con el derecho a comunicar antes de decidirse la constitu- dades, las naciones y las culturas. En cuarto lugar, el despertar
ción del Grupo de Estudio, cuya tarea consistía en evaluar los del Tercer Mundo suscita nuevas reivindicaciones, en pro de
progresos logrados con miras a una mejor y más amplia un nuevo orden más justo y más sano, y no solamente econó-
apreciación del concepto, en examinar los informes de las mico sino también social, cultural, educativo e informativo.
reuniones de expertos celebradas bajo los auspicios de la Hoy en día, parece haber, especialmente entre los estudio-
Unesco en Estocolmo (1978) y Manila (1979) y, por último, en sos del nuevo derecho, un consenso básico en el sentido de que
definir campos de acción futura al respecto. El Grupo había de el derecho a comunicar debe destacar sobre todo la igualdad
«preparar una breve lista de actividades (especialmente estu- de todos los copartícipes en la comunicación, en los planos
dios que pudieran tomar en consideración la Unesco y las nacional 0 internacional, incorporar la circulación multicultu-
organizaciones profesionales interesadas al preparar sus futu- ral y multilateral de la información, y abarcar no solamente el
ros programas en este campo)». derecho a ser informado sino además el derecho a informar,
Como base para su examen del derecho a comunicar, el permitiendo el máximo grado posible de retroinformación,
Grupo destacó la necesidad de adoptar un enfoque y un marco participación, acceso y autogestión.
general abierto hacia el futuro y que respondiera a las exigen- Tras ello, el Grupo centró su análisis del «derecho a comuni-
cias de las distintas sociedades y de la comunidad internacio- car» en tres preguntas básicas:
nal, no solamente hoy sino también en el porvenir. La predic- A. ¿Por qué ha surgido esa reivindicación del derecho a
ción es siempre difícil e incierta, pero el Grupo convino en que comunicar?
los individuos y las sociedades del mañana tendrán que enfren- B. ¿Qué se entiende por derecho a comunicar?
tarse con un mayor nivel de interdependencia en todos los C. ¿Cómo desarrollar el derecho a comunicar?
sentidos: interdependencia creciente de los países, de los
problemas y de las políticas nacionales e internacionales.
El Grupo se basó en el principio de que la comunicación es A. Razón de ser del derecho a comunicar
un proceso humano y social fundamental: «la comunicación es
la comunidad. Sin ella no puede haber una sociedad organiza- El objetivo previsto -conseguir la aceptación de un nuevo
da y viable». precepto como el derecho a comunicar- requiere una clara
Por ello, decidió que el concepto de derecho a comunicar explicación de las razones de la aparición del concepto y una
merecía un ulterior estudio a fondo, con miras a promover su respuesta a la pregunta: Lpor qué debe suscitar un nuevo
reconocimiento general y su incorporación a las normas y concepto de comunicación la atención y la acción de la comuni-
políticas de comunicación. dad internacional y de los gobiernos?
El Grupo decidió asimismo que el análisis del concepto de ¿Cuál es la razón de ser del derecho a comunicar? El Grupo
derecho a comunicar debería apuntar a dar una descripción dividió la respuesta a esta pregunta en tres categorías: cambios
exhaustiva y a establecer un marco teórico que suscitara una sociales y técnicos que inciden en el sector de la comunicación;
aceptación general. Llegados a este punto, y como primera ineficacia comprobada de conceptos tradicionales; necesidad
medida positiva en tal dirección, el Grupo utilizó el derecho a de nuevos conceptos que correspondan a las actuales preocu-
comunicar como «concepto global», que todo lo abarca y que paciones y situación.
rebasa los conceptos tradicionales aplicados al complejo de la 1. Cambios que inciden en el sector de la comunicación.
comunicación y la información. Procede considerar el derecho a comunicar en relación con
el afán de lograr una mayor democracia y libertad en ese
Raíces del derecho a comunicar sector al igual que en los demás. Los cambios actuales en
materia de comunicación requieren la formulación de con-
Es posible que el derecho a comunicar no sea un concepto ceptos, políticas y reglas que expresen más adecuadamente
totalmente nuevo, pero tendrá que serlo básicamente para la situación presente y que estén abiertos al futuro. Son
poder solventar los problemas del mundo actual. particularmente idóneos los siguientes aspectos:

51
4 Los efectos de los adelantos tecnológicos, que han curso sobre el derecho a comunicar, que corresponden a los
engendrado cambios profundos en los sistemas de co- siguientes temas de interés y rumbos de desarrollo
municación existentes y la aparición de nuevos sistemas deseables:
y servicios, lo cual ha traído consigo no solamente un i) Es necesario aclarar, ampliar y desarrollar conceptos
aumento cuantitativo sino además cambios cualitativos tradicionales como el de la «libertad de información»,
de los modos de comunicación social, con los efectos con objeto de rebasar el ámbito de los medios de
consiguientes sobre la organización y la realización de comunicación de masas y de consolidar la tendencia a la
las actividades en todos los campos de la vida, a la vez democratización y la participación pública.
laborales y recreativos. Esto presupone el paso de una ii) La percepción cada vez más general del papel funda-
situación de escasez material a otra de abundancia mental de la comunicación en la sociedad y su desarro-
potencial, lo cual surte grandes efectos sobre la organi- llo ha traído consigo el reconocimiento de la necesidad
zación y la utilización de los sistemas de comunicación. de unos conceptos más amplios, como el de derecho a
ii) Conjuntamente con el cambio social, los adelantos comunicar, que puedan relacionarse estrechamente
tecnológicos han acarreado una profunda modificación con la formulación de una política de comunicación
de las pautas de comunicación. Las modalidades de consciente y coherente.
comunicación interpersonal han quedado complemen- iii) El concepto de derecho a comunicar supera los límites
tadas e influidas por formas sucesivas de «comunicación de los conceptos tradicionales al hacer sobre todo hin-
de masas»; la actual tecnología brinda la posibilidad de capié en el carácter central dei hombre y en las dimen-
una utilización más flexible y variada, en particular en siones sociales globales; la importancia asignada al
los niveles del individuo y del grupo. individuo corresponde asimismo al afán de ir más lejos
iii) Simultáneamente, ha habido cambios de gran alcance que el enfoque basado en los medios de comunicación
en las actitudes ante la comunicación y la información, y de masas.
se reconoce ya que la comunicación completa es un iv) El concepto de derecho a comunicar puede quedar
proceso social fundamental; sin comunicación no puede también estrechamente relacionado con la reivindica-
haber una comunidad viable. ción de un nuevo orden internacional de la informa-
iv) La evolución de las actitudes ante la comunicación y sus ción.
formas está ligada a otros grandes cambios sociales: el v) El derecho a comunicar armoniza con el carácter evolu-
progreso de la democracia, la difusión creciente del tivo del complejo de información y comunicación, Su
poder económico y político y la reivindicación de una calidad dinámica se concreta en la importancia que se
mayor participación pública, que deben plasmarse en da aun proceso, descartándose con ello toda sugerencia
nuevos conceptos de comunicación. de estado estático.
v) Análogamente, en los conceptos básicos empleados en
el sector de la comunicación se debe tener en cuenta la
transformación de las relaciones internacionales, a par-
tir de la descolonización. B. Contenido del derecho a comunicar
vi) Con arreglo a esa perspectiva, los conceptos y reglas en
materia de comunicación deben amoldarse también al Tras ello el Grupo examinó la siguiente pregunta: Lqué enten-
despertar del Tercer Mundo y a las aspiraciones y demos por derecho a comunicar, qué debe comprender este
hechos recientes que se han expresado en la formula- concepto y cuáles han de ser los posibles límites de su defini-
ción de un Nuevo Orden Mundial de la Comunicación. ción?
Después de haber afirmado que el análisis del derecho a
2. Ineficacia comprobada de conceptos tradicionales:
comunicar no había llegado todavía a una fase en la cual
i> Los factores antes citados han tenido un impacto profe- pudiera resultar aceptable en general, el Grupo decidió que el
sional en conceptos tradicionales como los de libertad
procedimiento más apropiado consistía en indicar algunos de
de información, libertad de opinión y de expresión,
sus elementos principales, para facilitar la realización de ulte-
libre circulación de la información, etc., que han que-
riores trabajos al respecto.
dado desbordados por ellos. Dichos conceptos y las
El Grupo destacó los siguientes aspectos, por considerarlos
reglas correspondientes son anteriores a la revolución
elementos vitales y necesarios del concepto de derecho a
de la comunicación y a la transformación del sistema
comunicar:
internacional.
9 En primer término, procede considerar el derecho a
ii) En su aplicación, esos conceptos no han sido capaces de
comunicar como un concepto dinámico y flexible, que
proporcionar la base para un equilibrio y equidad so-
debe amoldarse a toda una gama de exigencias y situacio-
cialmente deseables en la circulación de la información;
nes socioeconómicas, así como a nuevos e imprevistos
antes por el contrario, se reconoce en general que la
servicios y sistemas de comunicación. No cabe, pues,
situación actual se caracteriza por graves desequili-
ligarlo a un nivel dado de estructura socioeconómica o a
brios, tanto en el plano nacional como en el internacio-
un determinado nivel de desarrollo tecnológico. Hay que
nal.
entenderlo como un concepto universal.
iii) Por consiguiente, ciertos conceptos tradicionales como
ii) El derecho a comunicar debe basarse en una noción
el de la libertad de información han pasado a ser causas
amplia y positiva de la comunicación y en el reconoci-
de controversia y de división, lo cual ha menoscabado
miento de que la comunicación incide en todos los cam-
en gran medida su eficacia.
pos de la vida.
3. Necesidad de nuevos conceptos. Hacen falta conceptos iii) En el derecho a comunicar se debe tener en cuenta la
nuevos que puedan abarcar y superar los ya existentes, diversidad de los flujos de información en la sociedad y
independientemente de que pretendan ser de aplicación las finalidades sociales de los mismos.
universal o de que hayan tenido tan sólo una aceptación iv) Así pues, el concepto de derecho a comunicar apunta a
limitada. Este criterio se ha concretado en los trabajos en expresar valores sociales positivos, el más importante de

52
los cuales se refiere al afán de lograr un mayor grado de - directrices normativas
democratización, acceso y participación pública, igual- - programas sociales
dad y autogestion. - planes y proyectos de desarrollo
v> En particular, en el derecho a comunicar se deben reco- - reglas jurídicas.
nocer las relaciones existentes entre la comunicación y el El análisis de la expresión óptima de los diferentes
desarrollo, y la función de la comunicación como modo aspectos del concepto deberá referirse a las distintas
de centrar el desarrollo en la plena actualización del situaciones socioeconómicas y culturales y a los diferen-
potencial humano y la promoción de la participación tes niveles de aplicación.
popular en el proceso de desarrollo. ii) El Grupo convino asimismo en que la labor de promo-
vi) En el derecho a comunicar se debe hacer hincapié en la ción y desarrollo del concepto de derecho a comunicar
comunicación como proceso interactivo, y en la necesi- debería interpretarse como un proceso evolutivo a largo
dad de establecer pautas de comunicación no solamente plazo. Como se ha puesto de manifiesto en otras cuestio-
verticales sino también horizontales. nes internacionales recientes, condicionadas por nuevos
vii) Procede concebir el derecho a comunicar como una conocimientos científicos y sociales y por rápidos cam-
combinación de derechos reconocidos en varias formas bios tecnológicos (por ejemplo, los trabajos relativos al
en el plano internacional como, por ejemplo, el derecho derecho a comunicar), la formulación efectiva del dere-
a vivir en paz, el derecho a la cultura y a la educación, y el cho a comunicar podría concebirse en forma de un
derecho al desarrollo. En un plano más concreto, el proceso educativo, en el que intervinieran no solamente
derecho a comunicar debería reconocer y abarcar los organizaciones internacionales y autoridades nacionales
derechos tradicionales de «información» como el dere- sino también especialistas de universidades y otras insti-
cho a dar y a recibir información y el derecho a la tuciones de investigación de todas las partes del mundo.
protección de la vida privada.
viii) El derecho a comunicar debe concebirse de modo tal que
se tengan en cuenta los diferentes niveles de comunica- Propuestas específicas
ción; como primera medida en tal sentido, el Grupo
propuso que se tomaran en consideración los siguientes El Grupo examinó una amplia gama de propuestas relativas a
niveles: la acción futura.
- el nivel individual 9 El Grupo estimó que sería útil promover la aprobación
- el nivel de los grupos sociales por la Conferencia General de la Unesco, en 1980, de una
- el nivel de las instituciones sociales y los organismos resolución en la cual: a) recomendara el reconocimiento
de los sectores público y privado del derecho a comunicar y b) medidas ulteriores al
- el nivel nacional respecto.
- el nivel regional ii) El Grupo recomendó que se tomaran medidas en rela-
- y, por último, el nivel internacional. ción con los siguientes aspectos:
ix) El derecho a comunicar es un concepto global, que - descripción exhaustiva del derecho a comunicar
encierra también las nociones de deberes y responsabili- - estudio a fondo de la relación entre el derecho a
dades. Es preciso analizar cuidadosamente no sólo los comunicar y otros derechos reconocidos en este cam-
derechos que procede incluir en él sino además los dere- po, y de sus interrelaciones
chos y deberes correspondientes, en relación con los - análisis de la relación entre el derecho a comunicar y
diferentes niveles en los cuales se aplique el concepto. el concepto de libre circulación
x> Procede considerarlo en el contexto del derecho interna- - estudio de la relación entre el derecho a comunicar y
cional y de instrumentos internacionales, así como de el nuevo orden internacional de la información
convenios, pactos .etc. - estudio de las implicaciones del derecho a comunicar
para el desarrollo sociocultural
- estudio de la relación entre el derecho a comunicar y
el nuevo orden económico
C. Promoción y desarrollo del
- publicación por la Unesco de una obra sobre el estado
concepto de derecho a comunicar
actual de la reflexión teórica sobre el derecho a comu-
nicar y las implicaciones para el futuro.
Una vez examinada la razón de ser y el contenido del derecho a
comunicar, cabe preguntar: icómo expresar el concepto y qué
medidas futuras pueden recomendarse?
Conclusión
Consideraciones generales Por último, el Grupo expresó su deseo unánime de invitar al
Después de haber decidido emplear la expresión de Director General de la Unesco a intensificar los esfuerzos de la
«derecho a comunicar» para facilitar el debate, el Grupo Organización por llegar a comprender mejor el concepto de
destacó que ello no implicaba un juicio previo sobre la derecho a comunicar, con arreglo a una base más amplia,
forma en que puede o debe expresarse el mismo. Dada la promoviendo para ello la realización de un estudio a fondo de
necesidad de flexibilidad y de aplicación en contextos las consecuencias económicas, sociales y culturales de la adop-
socioeconómicos diferentes, no se debe interpretar el ción de ese derecho por la comunidad internacional.
derecho a comunicar únicamente en función de unas El Grupo estimó asimismo que se debería invitar a todos los
posibles reglas de derecho. Antes por el contrario, la Estados Miembros de la Unesco a proceder a un examen
riqueza y el alcance del concepto requerirán probable- crítico de sus sistemas de comunicación, ya estudiar la posibili-
mente una expresión en muy diversas formas, por ejem- dad de incorporar el concepto de derecho a comunicar a su
plo: política de comunicación.

53
Apéndice D

Grupo de Trabajo sobre


el Derecho a Comunicar
(Ottawa, ll y 12 de septiembre de 1980)

Los días 11 y 12 de septiembre de 1980 se celebraron dos de dar una definición breve y precisa, que pudiera servir de
sesiones de un Grupo de Trabajo sobre el Derecho a Comuni- base para los trabajos futuros y de ayuda a los responsables
car, en conexión con la Conferencia Anual del Instituto Inter- políticos.
nacional de Comunicación y en cooperación con la Unesco. Después de un amplio debate, el Grupo de Trabajo
La documentación facilitada para la reunión comprendía el aprobó la siguiente definición:
informe de la reunión de Londres (mayo de 1980) del Grupo Todo individuo tiene derecho a comunicar. La comunica-
de Estudio de la Unesco, un estudio de Desmond Fisher, ción es un proceso social fundamental, que permite a los
preparado para la Unesco con el título del «El derecho a individuos y a las comunidades proceder a un intercambio
comunicar: un concepto en busca de una definición» y un de información y de opiniones. Es una necesidad humana
documento de trabajo preparado por el IIC. básica y el fundamento mismo de toda organización social.
Esas sesiones de trabajo brindaron la oportunidad de proce- Los sujetos del derecho a comunicar son los individuos y las
der a un amplio intercambio de puntos de vista con respecto a comunidades que componen.
los trabajos ya realizados, ala situación presente y al rumbo de Se decidió asimismo enviar esta definición a un cierto
las futuras actividades. En este informe se resumen los puntos número de expertos interesados, para que formularan los
principales del debate. oportunos comentarios.
1. En los últimos años, el tema de los derechos humanos ha 4. El Grupo de Trabajo examinó también la relación entre las
cobrado un nuevo impulso, lo cual ha desembocado en la nuevas tecnologías de la comunicación y el derecho a comu-
formulación de nuevos conceptos de derechos humanos, nicar, y el impacto de esas tecnologías en los planos social y
uno de cuyos ejemplos iniciales fue el de derecho a comuni- económico.
car. No obstante, el Grupo de Trabajo se mostró convenci- Hubo un acuerdo general en el sentido de que las nuevas
do de que el concepto de derecho a comunicar no debe tecnologías de comunicación permiten mejorar el derecho a
quedar subsumido en otros nuevos conceptos que están comunicar en lo que se refiere al acceso, la participación y la
surgiendo en este campo como, por ejemplo, el del propues- comunicación de doble sentido. Procede, sin embargo, ser
to «derecho a la solidaridad». Asimismo, procede tratar en prudentes en la aplicación de nuevas tecnologías y servicios
lo sucesivo el derecho a comunicar como concepto indepen- en diferentes ambientes socioeconómicos y culturales. La
diente, con miras a promover la formulación de derechos elección y la transferencia de tecnología deben armonizar
específicamente relacionados con la comunicación y la in- claramente con las necesidades del individuo y de la
formación. comunidad.
El interés más intenso y últimamente creciente, por ese Al concebir sistemas y servicios de comunicación habrá
concepto se ha puesto de manifiesto en muchas reuniones. que tomar en consideración las modalidades de comunica-
A este respecto, se señaló que había sido mencionado en las ción que resulten posibles gracias a la aplicación de la nueva
conferencias intergubernamentales sobre las políticas de tecnología. Sería, pues, muy importante estudiar las impli-
comunicación organizadas por la Unesco, y que en el infor- caciones del derecho a comunicar en la fase de la concep-
me de la Comisión MacBride y en muchos de los debates de ción, y recabar la participación de diseñadores de sistemas
la Conferencia del IIC de Ottawa se hicieron referencias en el análisis del derecho a comunicar y de sus
muy precisas a dicho concepto. implicaciones.
2. En el documento de Desmond Fisher se presentaba un 5. La aparición de nuevas técnicas ha traído consigo el estable-
resumen sucinto del origen y la evolución del concepto y la cimiento de nuevos servicios y aplicaciones, que tienden a
labor realizada desde entonces. Se indicaban también las difuminar las distinciones tradicionales entre categorías de
lagunas subsistentes en el análisis de las implicaciones del servicios y, por consiguiente, de las estructuras jurfdicas e
concepto, en relación con la política y la planificación. Era, institucionales basadas en dichas categorfas. En particular,
pues, preciso continuar esa labor, principalmente en lo se aludió a la distinción clásica entre los servicios de teleco-
tocante a los aspectos tecnológicos y económicos. municaciones de punto a punto y los de radiodifusión o, en
3. Se señaló que una gran dificultad obedecía a la inexistencia términos más generales, entre los servicios que tienen un
de un acuerdo sobre definiciones de conceptos tan básicos destinatario preciso y los demás. Ese fenómeno nuevo
como los de «comunicación» e «información». realza precisamente la necesidad de un nuevo concepto,
Pero, como se estaba de acuerdo en ciertos elementos como el de derecho a comunicar, mejor adaptado a la
básicos del concepto de derecho a comunicar, el Grupo de situación actual que los conceptos tradicionales, que se
Trabajo decidió formular una nueva definición, mejorando basaban esencialmente en consideraciones relacionadas
los anteriores intentos al respecto, en particular los realiza- con la prensa.
dos en reuniones previas del IIC. Se convino en la necesidad

54
Se señaló asimismo que, independientemente del criterio nicar. Se expresó la esperanza de que esa publicación
teórico adoptado, había que reconocer que ia aplicación contuviera nuevos materiales que pudieran ayudar a
práctica del derecho a comunicar implica el empleo de un los planificadores y responsables políticos en la aplica-
medio de comunicación, y que cada medio opone su propia ción del derecho a comunicar.
resistencia y distorsiones. b) En cuanto a los estudios futuros, el Grupo de Trabajo
Si bien el estudio de los aspectos teórico-filosóficos revis- estimó que se debía asignar una gran prioridad a las
te gran importancia para facilitar el análisis y la aceptación implicaciones tecnológicas y económicas del derecho a
del concepto de derecho a comunicar, procede estudiar comunicar. Tanto el IIC como sus miembros interesa-
paralelamente aspectos más prácticos y tecnológicos y eco- dos se manifestaron dispuestos a cooperar con la
nómicos concretos. Unesco en esos proyectos.
Habría que tomar asimismo en consideración los procedi- c) El Instituto podría seguir trabajando por conducto de
mientos pertinentes para lograr un más amplio reconoci- un Grupo de Trabajo, integrado por miembros del IIC
miento del derecho a comunicar en el plano internacional e activamente interesados por el tema. Los participantes
intergubernamental. Aun estando de acuerdo sobre la fina- recomendaron que el Profesor Stan Harms actuara
lidad última, consistente en plasmar el concepto de derecho como coordinador de dicho grupo, que podría reunirse
a comunicar en un instrumento jurídico internacional, se en conexión con la Conferencia Anual del IIC de 1981;
señaló la conveniencia de tener presentes el marco cronoló- en el ínterin proseguirían los trabajos por correspon-
gico posible y preferible, la organización más apropiada dencia. Una de las tareas del grupo que se sugirió fue la
para ello y el trabajo preparatorio. de continuar estudiando los aspectos teóricos en rela-
6. En relación con el trabajo futuro, se hicieron las siguientes ción con la nueva definición propuesta en la reunión de
sugerencias: Ottawa y las implicaciones económicas y tecnológicas
a) El Grupo de Trabajo acogió con satisfacción la idea de del derecho a comunicar.
una publicación de la Unesco sobre el derecho a comu-

55
PUBLICACIONES DE LA UNESCO: AGENTES GENERALES DE VENTA
(lieta abreviada)
Alemania (República S. Karger GmbH, Karger Buchhandhmg, Angerhofstr. 9, Postfach I, D-8034 G~ausnx~o/Mw~c~w. “El Como
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/

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