EN DEFENSA DE LOS PROFESORADOS

¿Por qué las Escuelas Superiores de Educación

Artística (ESEAs) decimos NO a la intervención y
desintegración de los 29 Institutos Superiores de
Formación Docente?

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció un plan de reforma de la formación

docente de gestión estatal. El proyecto que envió este 1° de diciembre a la Legislatura (de espaldas
a la comunidad educativa) no “crea” una universidad tal como publicita, sino que interviene y
desintegra los 29 institutos de formación docente de la Ciudad.

Los 8 institutos de Nivel Superior de formación artística afectados: Prof. de Artes Visuales
Manuel Belgrano, Lola Mora, Rogelio Yrurtia, Prof. de Artes Cerámicas Fernando Arranz, Prof de
Danzas Jorge Donn, Nelly Ramicone, Aída Mastrazzi y Prof. de Música Pedro Esnaola, nos unimos a
los otros 21 institutos de formación docente para manifestar nuestro profundo rechazo frente a la
desintegración de los profesorados de Nivel Superior y exigir que el proyecto de ley se retire de la
Legislatura porteña.

Las ESEAs rechazamos el proyecto de creación de una Universidad de formación docente

porque:

-Desconoce la trayectoria y el prestigio de nuestras instituciones de formación docente artística, que

han formado referentes insoslayables dentro del campo artístico y educativo.

-Bajo la órbita de una única institución de formación docente se desintegra e invisibiliza la

especificidad de la educación artística, entendida como un derecho, que propicia la construcción de
sujetos sensibles, creativos y críticos.

-Hace peligrar la amplia oferta de formación en los distintos lenguajes artísticos existentes en la
currícula actual, así como la carga horaria que es necesaria para el desarrollo de nuestros
estudiantes en cada una de estas disciplinas. La actual oferta está constituida por: Profesorado de
Artes Visuales con orientación en grabado, dibujo, pintura, escultura, cerámica; Profesorado de
Danza con orientación en danza clásica, contemporáneas, folklóricas y tango; Profesorado de
Música con orientación en educación musical, distintos instrumentos, canto.

-Pretende borrar la identidad e historias de nuestras escuelas, que nos marca a quienes las
habitamos en nuestras maneras de entender, mirar, escuchar, movernos y hacer la realidad
cotidiana. Y a su vez, la reubicación territorial y centralización edilicia, destruiría la integración de las
comunidades educativas con los barrios en que están insertas.
-Agrava las condiciones de trabajo precarizadas de los docentes así como la falta de infraestructura,
y recursos indispensables como son los modelos vivos, ayudantes, músicos acompañantes, bedeles,
administrativos y otros cargos, etc.

-Avasalla la autonomía de cada escuela en el funcionamiento político democrático de su vida

institucional, mecanismos de conducción y producción de conocimiento.

-Frena el desarrollo del proyecto educativo de las ESEAs, que persigue el objetivo de consolidar la
unidad académica entre el Nivel Medio y el Terciario, para la formación completa del artista docente
dentro de una misma institución, al tiempo que destruye la articulación entre ambos niveles que se
han construido a lo largo de muchos años de trabajo.

-No toma en cuenta que aún no existen cohortes de finalización de estudios en nuestras ESEAs que
permitan evaluar las fortalezas y aspectos a mejorar de nuestros institutos.

-Desjerarquiza la titulación actual que ofrecen nuestras ESEAs, que habilita a ejercer como
profesores y profesoras a nivel nacional, y a su vez desconoce el 5to año, implementado en 2016 en
varias de nuestras instituciones, que habilita al ejercicio docente en el Nivel Superior.

-La existencia de los institutos públicos de formación docente garantiza el acceso a una formación
docente profesional, que convive con la oferta universitaria vigente dado que persiguen distintos
objetivos pedagógicos. En la Ciudad de Buenos Aires ya existe una universidad nacional de
formación artística (UNA), la cual ya oferta la carrera docente en artes. No obstante, un alto
porcentaje de los estudiantes de la UNA, eligen nuestros institutos para su formación docente.

Por todo lo mencionado, el proyecto de universidad de formación docente presentado en la

Legislatura, lejos de mejorar nuestra oferta académica, implica una DESJERARQUIZACIÓN de la
formación artística y del trabajo docente.

Nuestras instituciones recorrieron un largo camino hasta su actual conformación, en el

cual la lucha y la defensa de la educación artística siempre han sido nuestro norte y bandera.
Junto a nuestras comunidades educativas resistimos a todos aquellos intentos de
vaciamiento, peleamos por nuestras condiciones edilicias, salimos a la calle a denunciar que
nos querían cerrar e invisibilizar y nuevamente nos encontramos reclamando y exigiendo que
se nos escuche.

Y por todo ello decimos SÍ a nuestros actuales PROFESORADOS DE FORMACIÓN

ARTÍSTICA, PÚBLICA Y GRATUITA.
NO a la INTERVENCIÓN y DESINTEGRACIÓN DE NUESTROS PROFESORADOS.