La teoría como reflexión sobre el conocimiento construido.

Granja Castro Josefina

Mtra. Manuela Luna Briseño Martínez Martínez Edson Manuel

Teoría Pedagógica l 1101

El termino teoría no tiene un solo significado, la interpretación del papel de la teoría es

extenso. Desde posiciones que la definen como especulación abstracta distante de la práctica
y de lo empírico, o como un instrumento de la percepción de la realidad. Hay una franja de
ciencias positivas que la relacionan con sistemas hipotéticos-deductivos productores de
leyes. También la asocian con sistemas conceptuales del alcance y validez universales. Desde
su propia epistemología cada posición conceptúa de manera particular un conjunto de
referencias fundamentales: realidad-conocimiento, relación sujeto-objeto, práctica y teoría,
dispositivos de realización, etc. Cada época crea esquemas para entender y apresar el sentido
de lo teórico, dando características de la época sobre como entiende el lugar de la teoría y
sus usos. En la actualidad la variante de discursos pretende aferrar la realidad, cada época
se piensa a si misma como momento histórico donde se enlazan varias discursividades;
antiguas y modernas de concebir la realidad. Nuestra época es muy compleja y asumen la
parcialidad y relatividad de todas las perspectivas y en consecuencia reconocen como
imposible de describir de modo único y concreto la realidad. El énfasis en el significado y
uso de la teoría se desplaza, y se enfocan en la reflexión sobre sus mecanismos. Ya no
compete a la teoría en describir una realidad, sino a problematizarla sobre los principios que
sustentan sus propias descripciones. Bachelard dice que hay una función del espíritu
científico y es el de rectificar el saber y ampliar los esquemas del conocimiento, él entiende
la vigilancia epistemológica como un tipo de reflexión, y no sólo aparece cuando se vigila la
aplicación del método, sino el método mismo. Esta vigilancia rompe lo absoluto del método,
arriesga el conocimiento racional y genera crisis de interpretación de fenómenos
comprobados. Desde contextos del pensamiento social y filosófico actual se crean
planteamientos que a pesar de sus diferencias coinciden como un indicio que anuncia la
necesidad de desplegar y llevar a cabo programas de reflexión basados en la reactivación de
las formas mediante las cuales producimos conocimiento y descripciones sobre la realidad.
La perspectiva de Luhmann se basa en las formas conceptuales que habilita para entender
los problemas de reflexividad que son observación de segundo orden y autorreferencia. Esta
observación se hace sobre un observador y las distinciones que usa, se trata de observar la
forma en que el sujeto observa, contribuye a enfocarse en aquello que pasa por alto el sujeto
que observa, es decir, los puntos ciegos. El complemento es la autorreferencia, plantea que
las teorías deben llevar a cabo programas de reflexión basados en la observación de las
formas mediante las cuales observa el mundo, produce el conocimiento y promueve
descripciones sobre la realidad.