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Didácticas Virtuales
para docentes
Orientada a promover la
formación de competencias
ciudadanas de niños y niñas
de educación básica y media
DILEMAS MORALES 1
MARÍA FERNANDA CAMPO SAAVEDRA
Ministra de Educación Nacional
EQUIPO ACADÉMICO
A
ntes de iniciar este recorrido por
los contenidos y apartados de
nuestra Caja de Herramientas
Didácticas, es importante,
profesor(a), que conozcamos los
trayectos que se han dado, en la última
década, para la institucionalización, en
el contexto educativo, de la formación
para el ejercicio de la ciudadanía. Al
respecto, es importante recordar que la
Ley General de Educación 115 de 1994,
en su artículo 78, establece la realización
de Lineamientos Curriculares, los cuales
se definen como las orientaciones
conceptuales, pedagógicas y curriculares
que regulan la construcción del currículo
DILEMAS MORALES 3
la formación política desde tres
componentes, a saber: subjetividad
democrática, comprensión de la cultura
política y conocimientos básicos de
las instituciones. Estas orientaciones
curriculares comprenden el aprendizaje
ciudadano como una vivencia surgida
de la experiencia escolar, por lo que
la educación democrática de nuestros
estudiantes “… deberá dar justo peso
a lo individual y lo social, a lo cognitivo
y a lo afectivo, a la información y al
conocimiento, que conjuntamente les
permitirá constituirse en ciudadanos
competentes” (MEN, 1998: 13-51).
DILEMAS MORALES 5
2. Caja de Herramientas Didácticas Virtuales para
docentes: contenidos y estrategias
E
sta Caja de Herramientas democráticos (familia, colegio, barrio,
Didácticas tiene como propósito vereda, otros).
fundamental, presentarnos a
los docentes un conjunto de Para ello, la Caja de Herramientas
estrategias didácticas que apoyen la Didácticas está organizada en cuatro
formación democrática y ciudadana en unidades, cada una de las cuales
las instituciones educativas en las que presenta el significado, uso y aplicación
laboramos. En este sentido, la caja de pedagógica de una estrategia didáctica,
herramientas ofrece una diversidad de señalando la forma como ésta favorece
recursos y mediaciones pedagógicas cuyo el trabajo con grupos (convivencia y
objetivo es favorecer la interactividad, paz, participación y responsabilidad
creatividad y aprendizaje colaborativo democrática, identidad, pluralidad y
de los estudiantes de educación básica valoración de las diferencias) y tipos de
y media, con el objeto de fomentar su competencias (emocional, cognitiva,
praxis ciudadana en distintos ambientes comunicativa) ciudadanas.
DILEMAS MORALES 7
desarrollo de la competencia cognitiva y la
explicación de temas acerca de la identidad, la
valoración de las diferencias y el reconocimiento
de sí y de otros.
a. Situaciones ciudadanas:
En ella encontraremos diferentes problemáticas y hechos
morales y políticos de la cotidianidad, a partir de los cuales
se promueve la reflexión de nuestros estudiantes. Estas
situaciones se presentan como ejemplificaciones iniciales del
uso de la estrategia didáctica que favorece la unidad.
e. Rejillas de evaluación:
Finalizadas las actividades, se expone la estrategia de
valoración y sistematización de los resultados obtenidos con
la implementación de los ejercicios propuestos. Estas rejillas
nos permiten reconocer las ventajas y dificultades en las
actividades para mejorar sus contenidos y actividades en la
siguiente aplicación.
DILEMAS MORALES 9
f. Glosario:
Corresponde a la explicación de algunos términos utilizados en
la unidad.
g. Murmullo bibliográfico:
Hace referencia a la bibliografía que podemos consultar para
ampliar o profundizar lo trabajado en la unidad.
DILEMAS MORALES 11
Situaciones
Ciudadanas
DENUNCIAR O NO DENUNCIAR
Al comienzo de estos rumores las dos familias mantuvieron sus buenas relaciones,
aunque nunca hablaron de tales cosas. Pero paulatinamente, tal vez debido a los mis-
mos comentarios negativos sobre los Mahecha, empezaron a
frecuentarse poco o a dejar de compartir los fines de
semana, como era su costumbre.
DILEMAS MORALES 13
¿ Algunas preguntas que pueden orientar el proceso de reflexión
con sus estudiantes son: ?
• ¿Deberían denunciar a los Mahecha los padres de Verónica?
• ¿Son cómplices de un delito los Zuleta por hacer caso omiso de los ru-
mores de los vecinos?
• ¿Es correcto que las dos familias nunca hayan hablado del rumor?
• ¿Deberían los Mahecha buscar a los Zuleta para explicarles esos rumo-
res?
El epígrafe con el cual iniciamos esta uni- Por eso, los maestros deben tomarse un
dad es un ejemplo de lo que se conoce tiempo para trabajar con sus estudiantes
como dilema moral. Se trata de una estra- diferentes tipos de dilemas y familiarizar-
tegia didáctica empleada para desarrollar los con los tipos de argumentos, especial-
en los estudiantes la reflexión, el juicio y la mente aquellos que sirven para respaldar
toma de decisiones. válidamente una opinión. Desde luego, no
se trata de convertir el aula en una clase
Comencemos por decir que un dilema, de lógica filosófica; pero sí, de ayudarles
hablando de manera general, es un tipo de a nuestros alumnos a que entiendan el
razonamiento práctico que lleva a nuestro proceso mediante el cual se organizan las
entendimiento a tener que elegir entre di- ideas o cómo el entendimiento construye
ferentes alternativas y a juzgar cuál puede discursos coherentes, relevantes, creíbles
ser la mejor opción o la mejor manera de y, especialmente, válidos. Discursos que
actuar. Luego la clave fundamental de for- sean el resultado del discernimiento y no
mular un dilema está en presentar dos op- del azar o de la espontaneidad.
ciones, una disyuntiva, frente a las cuales
nuestro entendimiento se vea en la nece- En el caso concreto del dilema moral, es
sidad de argumentar o buscar las mejores un tipo de dilema en el que –de manera
razones para elegir uno u otro camino. narrada– se presenta una situación pro-
blemática sobre un conflicto de valores.
Es clave tener esta idea de base antes de Esta disyuntiva se convierte en una estra-
lazarse a trabajar con dilemas morales. tegia didáctica porque pone a pensar o
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deliberar a los estudiantes sobre temas o para evaluar el estadio de desarrollo moral
problemas axiológicos, morales o éticos. de las personas. Después han sido utiliza-
Dada esta particularidad, los dilemas mo- dos por otros autores con el fin de educar
rales son un excelente recurso para for- en la ciudadanía, formar en valores o como
mar en nuestros alumnos un criterio ético técnica para el discernimiento moral.
o para desarrollar el razonamiento moral.
Los dilemas morales son una buena ma- los alumnos, el maestro si desea aplicar
nera de ejercitar a nuestros estudiantes un dilema moral puede utilizar el siguiente
en el razonamiento argumentado frente a protocolo, según la profesora Montserat
determinadas situaciones de la vida real Payà:
y, especialmente, un motivo o detonante
educativo para que ellos vayan descu-
briendo las consecuencias, tanto indivi-
duales como colectivas, de tomar una u
otra decisión.
DILEMAS MORALES 17
Adicionalmente, cuando se trabaja con real). Otra clasificación, según el profesor
dilemas morales es importantísimo insis- Laureano Benítez, diferencia el dilema de
tirles a los estudiantes que no hay salidas análisis, en el que “el protagonista de la
o soluciones “buenas” o “mejores” a las historia ya ha tomado una decisión y eje-
dos presentadas en la narración. Lo fun- cutado una conducta, y se trata de que el
damental es la reflexión o el razonamiento participante emita juicios de valor sobre
que cada cual haga frente a esa situación esa solución que se le ha dado al caso”,
problemática. del dilema de solución. Aquí se trata de
“exponer el caso y sus circunstancias
Recordemos que hay diferentes clases de pero sin presentar una solución concreta,
dilemas. Una primera división distingue para que el participante sea el que tome
entre los dilemas morales reales (centra- la decisión sobre el curso de acción más
dos en contextos cotidianos de los partici- correcto a su entender”.
pantes) y los dilemas morales hipotéticos
(en los que se plantean problemas abs-
tractos o conflictos alejados del ambiente
En tanto que los dilemas morales invitan De otra parte, y subrayando que las com-
a los estudiantes a reflexionar e ir desa- petencias cognitivas buscan promover,
rrollando su manera de argumentar, llevan fortificar y consolidar aquellas capaci-
por supuesto a favorecer las competen- dades para “identificar distintas conse-
cias cognitivas. Algunos de los procesos cuencias que puede tener una decisión”,
mentales puestos en juego cuando se los dilemas morales son una mediación
trabaja en el aula con los dilemas mora- didáctica de alto rendimiento si se desea
les son: el análisis, la comparación, la in- contribuir a familiarizar a los alumnos con
ferencia, la deducción, la explicación y la la resolución de problemas de la vida real,
síntesis. Cada una de estas habilidades y especialmente, con la toma de decisio-
de pensamiento apunta a que los estu- nes, asunto de especial importancia cuan-
diantes no sólo sean sujetos pasivos de do se desea convivir con otros o se quie-
información (leyes, normas, deberes) sino re educar en el ejercicio de la libertad y la
que, además, puedan tener una postura y construcción de democracia.
un razonamiento sobre las mismas. Des-
de esta perspectiva, los dilemas morales
catapultan el desarrollo de la reflexión y el
pensamiento crítico.
DILEMAS MORALES 19
todo tipo que apabulla a los estudiantes, miembros activos de una comunidad o
sino por el momento físico y psicológico cuidadores del entorno ambiental. La soli-
en el que se encuentran: dudas y conflic- daridad, desde la perspectiva del cuidado,
tos entre la prevalencia de lo individual permite ampliar nuestro radio de interés o
o lo grupal, o entre la aceptación de las bienestar; hace que nos desplacemos del
normas legadas por la tradición y el ejer- pequeño territorio de lo conocido y fami-
cicio de la propia libertad, o entre el cono- liar a considerarnos fraternalmente com-
cimiento de sí mismo y el reconocimiento prometidos con seres desconocidos o
de seres distintos. con la suerte de lejanas tierras.
Dando por adelantado que el valor que nos ocupa es el de la solidaridad, o que lo que
nos interesa es propiciar en los estudiantes actitudes solidarias, vamos a trabajar en el
aula de clase dos actividades centradas en los dilemas morales.
DILEMAS MORALES 21
esta estrategia didáctica: investigue o do- ción didáctica es un poema, se recomien-
cuméntese previamente sobre el valor o da a los maestros no sólo familiarizarse
cuestión de formación ciudadana objeto con el texto sino crear un ambiente en la
de su clase. No llegue a su salón sin ha- clase para que “resuenen” las imágenes,
berse empapado o leído algunos textos el ritmo y el lenguaje lírico. Es fundamental
que le permitan tener elementos de juicio que el texto se lea muchas veces y que el
o diferentes miradas al asunto sobre el maestro lo haya “estudiado” tanto en los
cual gira el dilema. En la parte de El mur- aspectos formales como de contenido.
mullo bibliográfico se incluyen algunas de
esas referencias. Paso a paso didáctico:
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los grupos constituidos sean impares. Solicíteles que compartan la lectura y que
saquen en limpio los versos que les llamaron la atención, pero enfocándose en los
dilemas que enfrenta un joven de hoy, según el poema de Mario Benedetti. Este será
el momento para que cada uno comparta sus subrayados y luego, como resultado
del diálogo, busquen puntos en común.
Referencias:
Poema: Mario Benedetti “¿Qué les queda a los jóvenes?”, en Inventario, Seix Barral,
Barcelona, 1986, p.p. 56-58
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4.2. Segunda Actividad.
c) ¿Con qué otras acciones humanas podría asociarse lo que muestra la secuencia grá-
fica?
Secuencia gráfica: “Señor, una ayuda, por favor”, en Quino, ¡Qué mala es la gente!, Edi-
ciones de la Flor, Buenos Aires, 1996, p. 59.
Textos: “La solidaridad” en “Avivar nuestros valores. Repertorio básico”, de Ser viento y
no veleta. Pistas de sabiduría cotidiana, Kimpres, Bogotá, 2010, pp. 90-91.
DILEMAS MORALES 29
Rejilla de auto-
evaluación para
Dilemas Morales
DILEMAS MORALES 31
Los juicios morales presuponen ciertas a la que se aplica el principio ético, y
normas que orientan y guían la acción”. la conclusión sería la decisión o evalua-
ción personal de la situación en la que
Razonamiento moral: se actúa”.
“Es un proceso cognoscitivo mediante
el cual se pasa de algo conocido a una (Fuentes: Diccionario de ética de Ot-
nueva verdad no conocida. El razona- fried Höffe (ed.), Crítica, Barcelona,
miento moral es similar al razonamiento 1994; Diccionario de términos éticos, F.
deductivo, donde la premisa mayor vie- Blázquez Carmona y otros, Verbo Divi-
ne a ser el principio ético en que apoya no, Navarra, 1999).
la argumentación; la premisa menor ex-
presa la situación particular y concreta
Murmullo
Bibliográfico
Si se desea tener una visión más amplia, Para los docentes interesados en
uno de los mejores textos es el de profundizar en el tema de la solidaridad
Richard H. Hersh, Joseph Reimer y Diana pueden servir los siguientes textos:
Paolitto, El crecimiento moral. De Piaget
a Kohlberg, Narcea, Madrid, 1998. Las • Un texto de mucha utilidad tanto por su
recomendaciones y los ejemplos que claridad como por su voluntad didácti-
presenta el libro hacen de esta obra una ca es el de Laureano J. Benítez Gran-
referencia obligada para los maestros y de-Caballero, Actividades y recursos
maestras que usen en el aula los dilemas para educar en valores, PPC, Madrid,
morales. 2009. El capítulo 4 de esta obra está
dedicado específicamente a los dile-
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justicia y la misericordia al igual que la pre- daridad, vale la pena revisar el libro Educar
senta desde perspectivas diferentes bien para la solidaridad de José Ángel Paniego
sea entendida como una virtud o como y Carmen Llopis, Editorial CCS, Madrid,
principio ético. De igual modo, el texto in- 2001. En este texto no sólo se dan pistas
cluye algunas propuestas para “hacer rea- para trabajar metodológicamente actitu-
lidad el valor de la solidaridad”. Otro texto des solidarias con estudiantes y grupos
orientador es Los valores en la educación de educación no formal sino que se pasa
de Pedro Ortega Ruiz y Ramón Mínguez revista a técnicas, dinámicas y juegos re-
Vallejos, Ariel, Barcelona, 2001. Además lacionados con este aspecto.
de enfocar sus reflexiones sobre la ense-
ñanza, se enfoca en los valores del diálo- En la Revista del correo de la Unesco pue-
go, la tolerancia, la libertad, la justicia, la den encontrarse varias experiencias de
paz y, por supuesto, en la tolerancia. Ofre- solidaridad. Por ejemplo: “La solidaridad
ce prácticas didácticas que bien pueden empieza por casa” de Rupert Scofield, un
ser adaptadas o servir de inspiración a los artículo en el que se muestran diferentes
maestros. experiencias de solidaridad financiera en
países de América Latina, África y Asia.
Si lo que se desea es contar con un abani- http://www.unesco.org/new/es/unes-
co de actividades sobre el tema de la soli- co-courier/archives/
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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Situaciones
Ciudadanas
Maestros los invitamos a leer la siguiente situación ciudadana relacionada con la narra-
tiva moral: el apólogo.
Esta estrategia narrativa puede ser útil para desarrollar en los estudiantes las compe-
tencias emocionales en la medida en que provoca en ellos la autoreflexión, la autocrítica
y el reconocimiento de emociones, sentimientos y pasiones tanto propias como de los
demás.
Cuando el cazador abrió el odre para mostrar al tendero la miel, cayó una gota y de
inmediato sobre ella se posó una abeja. El tendero tenía un gato, dio un salto sobre la
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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abeja y la mató; el perro del cazador dio un salto sobre el gato y lo mato; el tendero,
dueño del gato, mató al perro; entonces el cazador, dueño del perro, mató al tendero
porque le había matado el perro; luego vinieron los aldeanos, conciudadanos del ten-
dero, y mataron al cazador dueño del perro; vinieron los conciudadanos del cazador a
la aldea del tendero, se pelearon en una disputa con palabras y pasaron a los hechos
hasta que se mataron unos a otros, de manera que no quedó ninguno como conse-
cuencia de la gota de miel.
El apólogo es la narración breve de un su- Cabe advertir que este tipo de narración
ceso o un hecho a partir del cual se puede se enmarca dentro de las formas literarias
inferir una enseñanza. Tiene, desde sus de la alegoría. Es decir, de una forma de
inicios, una intención didáctica especial- lenguaje que se vale de unos términos de
mente en lo referido en la enseñanza de la superficie para ocultar o guardar dentro
moral o de manera más amplia en apren- de sí un significado profundo que es el
der aquellas lecciones fundamentales para que en verdad desea comunicar. La estra-
aprender a vivir y convivir. El apólogo, en tegia alegórica del apólogo, por lo mismo,
este sentido, es un tipo de narración con es un recurso útil para los maestros cuan-
un claro objetivo edificante. do desean compartirles a sus estudiantes
valores, virtudes, comportamientos éticos
La escritura del apólogo, por lo demás, o principios que, por lo general, no son de
presenta siempre la relación entre alguien buen recibo cuando se los expone de ma-
que tiene que tomar una decisión o llevar a nera directa y prescriptiva.
cabo una acción y otra persona que hace
el papel de consejero o asesor. Esto hace El apólogo, como se sabe, nació en la In-
que el apólogo sea un género dialógico e dia (con el clásico libro del Panchatantra)
idóneo para incorporar experiencias rea- y luego pasó a Persia, Arabia y España a
les o imaginarias mediante las cuales se través de las colecciones de relatos como
pueda hallar una solución a problemas co- Calila y Dimna o El Conde Lucanor. Pero
tidianos o cercanos a la vida práctica. más allá de los pormenores de esta tra-
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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vesía narrativa lo importante es destacar, por el cristianismo (“El buen samaritano”,
como afirma la filóloga mexicana Helena “El hijo pródigo”), la fábula, que tiene como
Beristáin, que se “se trata de un género protagonistas principales a los animales
didáctico mediante el cual suele hacerse (las de Esopo, Iriarte, Samaniego…), el
crítica de las costumbres y los vicios loca- exemplum medieval, ampliamente explo-
les o nacionales, pero también de las ca- rado por la oratoria sagrada y la educación
racterísticas universales de la naturaleza religiosa (sirvan de ilustración algunos de
humana en general”. los contenidos en El Conde Lucanor) y la
alegoría, que es un procedimiento retórico
Otras formas narrativas asociadas con el simbólico o figurado usado por narradores
apólogo son la parábola, de uso frecuente y poetas (Ovidio, Dante).
Damos inicio a esta unidad con un apólo- ciones con su propia vida o con expe-
go. Como puede leerse se trata de un tipo riencias cercanas.
de narración breve en la que, a partir de
un ejemplo, se busca de manera indirec- 4. Finalmente, pedirles a los estudiantes
ta que el lector saque conclusiones para que revisen la parte inicial y final del
su propia vida o que caiga en la cuenta apólogo para solicitarles en qué medida
de determinada actitud o comportamiento la última parte responde la inquietud del
equivocado. inicio. En esta parte es definitivo que el
maestro refuerce lo propio del valor que
El apólogo, como otras formas narrativas, está trabajando, bien sea subrayando
puede usarse de diferente manera en determinadas acciones o poniendo en
clase: alto relieve las consecuencias de no
tener presente lo que el mismo relato
1. Llevándolos al aula para ser leídos por pone de manifiesto.
cada uno de los estudiantes o leyéndo-
los de manera oral el maestro frente al 5. También puede usarse el apólogo des-
grupo. Tanto en uno como en otro caso, de el punto de vista de la creación es-
la relectura del texto es crucial para lo- critural. Explicadas las partes y leídos
grar excelentes resultados. varios de ellos, se solicita a los estu-
diantes que recreen un valor o que in-
2. Si se toma esta vía, el siguiente paso venten ejemplos relacionados con un
es pedirles a los estudiantes que iden- tema de educación ciudadana. Aquí es
tifiquen cuál es el valor que está oculto clave insistir en que los alumnos inda-
tras el lenguaje alegórico del apólogo. guen, antes de empezar a escribir, en
Este momento debe ser abierto y sin otras fuentes sobre el valor detonante
delimitar por parte del maestro las inter- de la actividad.
venciones de los estudiantes. La idea
es que el mismo texto provoque o des- 6. En todo caso, no sobra hacer una ad-
pierte en los estudiantes la experiencia vertencia a los maestros, especialmen-
estética, el componente emocional de te de estos grados, para no perder el
la narrativa. carácter alegórico del apólogo. Hay que
recordar que al no usar un lenguaje de-
3. Enseguida, el maestro puede centrarse notado o explícito, el apólogo tiene su
específicamente en el ejemplo, que es mayor riqueza comunicativa en lo suge-
la parte medular del apólogo. Con ese rido o connotado. Por ello, las posibles
ejemplo de referencia pasar a pedirles lecturas o las variadas alusiones a que
a los estudiantes que establezcan rela- de motivo no pueden ser censuradas o
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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descalificadas en la clase. Hasta podría Como se ha dicho en otras unidades, an-
sacarse provecho de esas posibles re- tes de llevar al aula una estrategia didác-
laciones tejidas por los alumnos, con tal tica el maestro necesita prepararse, do-
de que guarden un vínculo con la narra- cumentarse y, para el caso del apólogo,
ción tomada como motivo de discusión tener presente por los menos los siguien-
o análisis. tes puntos:
Como sucede con otros géneros narrati- de que ellos den cuenta o identifiquen las
vos el apólogo permite que el estudian- particularidades de las emociones propias
te, a la par que desarrolla su capacidad y ajenas, y que descubran algunas herra-
para experimentar imaginariamente las mientas para moderarlas. Las apólogos se
vidas de otras personas, también pueda convierten, entonces, en un medio para
reconocer algunos de sus sentimientos o que los estudiantes vivencien el suceder
emociones representadas en la historia re- de las emociones y saquen, de manera in-
latada. Además, esta estrategia didáctica directa, una enseñanza para su propio vivir
contribuye a provocar en el estudiante la y el convivir con los demás.
introspección y el reconocimiento de sus
propias emociones al igual que las conse- De manera amplia podríamos decir que la
cuencias de su poca o nula regulación. narrativa, en general, y el apólogo en par-
ticular, permite que los estudiantes com-
Las competencias emocionales, que no prendan, expresen y regulen sus emocio-
sólo son intrapersonales sino interper- nes. Esta triple función, explicadas por el
sonales, pueden tener en el apólogo una profesor Rafael Bisquerra Alzina, combina
piedra de toque para llevar a los alumnos conocimientos, capacidades, habilidades
a que avancen en su proceso de desa- y actitudes entre las que se cuentan: la em-
rrollo moral. Pero más que un profundo patía, el desarrollo de habilidades socia-
ejercicio argumentativo o de fino análisis les, ser asertivos, apreciar las diferencias
racional, como era la finalidad con los di- individuales, comprender las emociones
lemas morales, ahora de lo que se trata es de otros y saber autoobservarse y obser-
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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var los comportamientos de los demás. vida, el manejo de las pasiones, las habili-
Las competencias emocionales subrayan dades de automotivación y, muy especial-
el papel y la importancia para la educación mente, el manejo de conflictos.
ciudadana de los afectos, la actitud ante la
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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Trabajar
en el Aula
la Ciudadanía
Profesora, profesor: vamos a plantear una situación didáctica para trabajar en el aula de
clase con nuestros estudiantes.
2. Propiciar en los estudiantes las habili- Para esta actividad utilizaremos el artículo
dades de lectura crítica de medios im- del periodico el Tiempo ¡Viva el relativismo
presos y desarrollar las capacidades moral!. Escrito por el Sacerdote Alfonso
para identificar argumentos frente a de- Llano Escobar. Con anterioridad al ejerci-
terminada posición. cio, saque tantas fotocopias del artículo
“Viva el relativismo moral” de Alfonso Lla-
3. Familiarizar a los estudiantes con la no Escobar, como estudiantes tenga en la
forma expresiva del artículo o colum- clase.
Entréguele a cada alumno una copia. Terminada la entrega del documento, pídale al gru-
po que lo lea mentalmente, al menos dos veces. Pídales adicionalmente que subrayen
aquellas ideas que les llamaron la atención.
3. Una vez terminada esta segunda parte del ejercicio, deje un tiempo
para que cada grupo comparta con los demás el resultado
de la discusión. No debata ni estimule ninguna discusión. La idea es que
el plenario se entere de lo que cada subgrupo ha hecho.
1 Lograr que los estudiantes reflexionen Esta 2° actividad toma la mediación co-
sobre las manifestaciones de la intole- municativa del mural. O, como sucede
rancia al igual que sobre los sentimien- en muchas de las instituciones, de los
tos y emociones que provoca. mensajes colocados en las carteleras. El
maestro puede tomar como referencia la
2 Propiciar en los estudiantes las habili- escritura propia del grafiti o insistir en el
dades de búsqueda de información, de impacto visual de las vallas publicitarias o
creatividad gráfica y el desarrollo las los afiches. Lo esencial es trabajar en el
capacidades para mostrar la importan- valor objeto de la unidad pero haciéndo-
cia de un valor desde el enfoque de los lo desde afirmaciones, citas, aforismos o
antivalores. “frases célebres” en las que se aborda el
valor pero desde un sentido contrario, en
3 Familiarizar a los estudiantes con los este caso, desde la intolerancia.
elementos de la comunicación gráfica,
la expresión pública y la importancia de
la expresión concisa para provocar la
reflexión.
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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3. Abra la discusión grupal sobre lo que es un antivalor. Busque
que sus alumnos identifiquen en las frases del mural lo que los diferentes
autores destacan de él, o de qué manera describen sus manifestaciones o
consecuencias. No tema en ir cita por cita. Este aspecto es importantísimo
porque, hablando didácticamente, es entendiendo los aspectos negativos
del valor como mejor se logrará inculcar o resaltar sus aspectos positivos.
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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Glosario
Murmullo
Bibliográfico
NARRATIVAS Y BIOGRAFÍAS
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También puede ser interesante la obra Texto: Vicente Leñero y Carlos Marín, “La
coordinada por Manuel Cruz, Tolerancia o columna”, en Manual de periodismo, Gri-
barbarie. Occidente ante el reto de la con- jalbo, México, 1986, p.p. 257-286.
vivencia, Gedisa, Barcelona, 1998. El libro
recoge diferentes abordajes a la tolerancia Texto: María de Jesús Casals Carro, “La
desde la mirada de filósofos, sociólogos e columna periodística: de esos embusteros
historiadores. días del ego inmarchitable”, en Estudios
sobre el Mensaje periodístico, 2000, N°
Otra fuente, con dinámicas colectivas 6: 31-51.
y actividades didácticas sugerentes, es http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?-
Educar en la tolerancia (Una propuesta de codigo=184793
trabajo), de Alfonso Luque Lozano, Ángela
Molina Bernáldez y Juan José Navarro Hi- Materiales segunda actividad
dalgo, Díada, Sevilla, 2000.
Textos: Libertad o muerte. Reflexionad…
Materiales primera actividad y escoged. Citas de la revolución france-
sa. Colección los muros tienen la palabra.
Cibergrafía: unesdoc.unesco.org/ima- 1789 citas reunidas y presentadas por De-
ges/0009/000914/091412so.pdf nis Roche, Extemporáneos, México, 1968.
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Situaciones
Ciudadanas
Registro N° 12
Fecha: Abril 15 de 2011
Institución: Institución Educativa Distrital
Lugar: Patio de secundaria
Inicio de la observación: 10:15 a.m.
Término de la observación: 10:30 a.m.
Criterio de observación: Comportamientos en el recreo
Era miércoles. El patio de secundaria, que da a la calle 25, estaba repleto de estudian-
tes. Algunos charlaban mientras compartían sus alimentos y otros jugaban a no dejar
caer una pequeña pelota de trapo. Un pequeño grupo, eran de 10°, trataba de jugar
basquetbol, moviéndose con dificultad entre sus compañeros. Los pequeños subgru-
pos corres
pondían un tanto a los grados. Al lado de la rectoría estaban los de 8°; más hacia el
oriente, al lado del salón de audiovisuales, vi a varios estudiantes de 9° y, en la esquina
norte del patio, cerca al podio de las banderas, noté a cinco estudiantes de 11°. Me di
cuenta de que varios de estos últimos estaban de pie, discutiendo. Como me hallaba
en el segundo piso, me desplacé por el corredor hacia el grupo, hasta lo más cerca que
podía. “Usted es un hampón”, oí que le decía uno de los estudiantes a otro, creo que se
56
trataba de Martínez. “Más hampón es usted que me vendió esa ‘maricada’ dañada”.
El que respondía era Aldana, uno de los estudiantes de mayor edad del grupo. Como
estaba un tanto lejos de la acción, y con ese griterío, apenas podía oír cuando el par de
estudiantes subían la voz.
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cara a Martínez. El muchacho se cogió la nariz varias veces comprobando si le corría
sangre. “Güevón, pelee como un varón”, lo provocaba Aldana. Martínez buscó en el
jardín una piedra de considerable tamaño. La tomó entre sus manos y se la lanzó a Al-
dana, pegándole en el pecho. El corrillo de estudiantes crecía. Ya no me quedaba fácil
observar lo que pasaba. Vi que el profesor Valencia corría hacia donde se desarrollaba
la pelea. Apenas llegó el profesor de convivencia, varios de los estudiantes se apartaron
del círculo. El mismo Martínez se retiró hacia el sector del Coliseo. Aldana estaba en
cuclillas sobándose el pecho.
58
pias de las actitudes o manifestaciones moral cumple un doble propósito: sensibi-
morales. lizar a maestros y estudiantes de un sinnú-
mero de hechos marcados de moralidad (a
La estrategia de observación moral es un veces insignificantes) que pueblan el aula
recurso para dar cuenta de aquellos as- o la institución escolar y, además, proveer-
pectos morales que, al ser habituales, pa- los de una herramienta investigativa para
san desapercibidos por el maestro, pero tener evidencias de cómo se desarrollan,
que son definitivos para la formación ciu- entran en contradicción o encarnan en las
dadana y el desarrollo moral de nuestros personas los conocimientos, las actitudes
alumnos. En este sentido, la observación y las prácticas referidas a la moral.
Herramientas para
formar ciudadanía:
La Observación
Moral
La observación moral es una modalidad trañamiento” es muy difícil que esta es-
de la observación investigativa en la que trategia didáctica sea efectiva o rinda sus
se busca, particularmente, conocer deter- mejores beneficios.
minadas acciones, discursos o compor-
tamientos relacionados con la vida moral De otra parte, la observación moral es
de los estudiantes. En tanto observación también una modalidad de la observa-
implica que el docente adquiera cierta ción sistemática. Esto quiere decir, que
actitud o disposición de extranjero en su el objetivo es observar durante un tiem-
ambiente habitual de trabajo. Sin ese “ex- po razonable, y durante varias sesiones,
59
a un mismo grupo, a determinados es- partir de los cuales sea más fácil registrar
tudiantes, ciertas acciones específicas, o el dinámico actuar de las personas.
un asunto moral previsto con anterioridad.
Por lo mismo, esta estrategia didáctica La observación moral puede ocuparse o
demanda seguimiento y continuidad en centrarse, al menos como lo proponen Phi-
los registros. No es una observación ca- lip W. Jackson, Robert E. Boostrom y Da-
sual o espontánea; por el contrario, es un vid T. Hansen, investigadores del proyecto
proceso continuo, focalizado y llevado a “Vida Moral en la escuela”, en aspectos
cabo durante un tiempo considerable. propiamente curriculares o en la morali-
dad expresiva en el aula, en los rituales y
La observación moral requiere de ciertos ceremonias, en las muestras visuales con
protocolos de observación a partir de los contenido moral, en las normas y regula-
cuales el amplio y complejo mundo del ciones del aula, o en los ambientes y obje-
aula o la escuela pueden ser reducidos a tos que de alguna manera evidencian una
unidades de observación más fácilmente manera de entender, marcar o asimilar un
describibles o caracterizables. Además, aspecto moral.
es necesario contar con ciertos códigos a
60
2.2 ¿Cuáles son los componentes de una observación moral?
61
ciertos “etnogramas” o convenciones gráficas para ubicar un objeto, un
personaje o la organización de un ambiente (un triángulo para represen-
tar a cada estudiante, un círculo señalar al maestro, un rectángulo para
ilustrar un pupitre, etc.).
62
2.3. ¿Cómo elaborar una observación moral?
63
Promover
Competencias
Ciudadanas
64
Precisamente por todo ello, y porque es son la concreción de formas de participa-
muy difícil hablar de democracia si no ción social y una expresión de cómo los
se acatan, en principio, las normas y los seres humanos llegan a consensos. Las
acuerdos, es que este tema es prioritario normas, en esta perspectiva, son garantía
en la formación ciudadana. Conocer qué y, a la vez, control de la conducta de los
es una norma, cuál es su función social, miembros de una sociedad.
de qué manera se organizan en el Esta-
do y qué organismos existen para atender Las normas regulan la vida de los seres hu-
sus contravenciones o garantizar su cum- manos en muchos espacios y situaciones.
plimiento, es una agenda de primer orden Forman parte de la vida familiar y laboral,
en la clase y en las diferentes instancias de la convivencia ciudadana, de los acuer-
de la Institución educativa. dos entre naciones y organismos interna-
cionales; y también son esenciales en la
Se conoce que la sociedad requiere de las crianza y en la escuela, en los procesos
normas para garantizar la convivencia pa- de socialización y en la construcción de la
cífica. Esas normatividades, como lo han identidad personal. Lo que la sociedad es-
estudiados los antropólogos, se transmi- pera es que esas normas se interioricen,
ten de manera inconsciente en las mores o que se vuelvan parte del individuo, que lle-
costumbres, se interiorizan en los hábitos ven a la genuina autonomía. No obstante,
de comportamiento y evolucionan hacia la sociedad también prevé ciertos meca-
los acuerdos o leyes que no sólo ofrecen nismos para “obligar” su cumplimiento. La
un rasero para garantizar la equidad y la vergüenza, la murmuración, la etiqueta, la
imparcialidad sino, y esto es fundamental, burla, hasta sanciones sociales más fuer-
tes como el castigo o la reclusión hacen
que las normas conserven su carácter de
prescripciones morales privilegiadas.
65
Trabajar
en el Aula
la Ciudadanía
Vamos a desarrollar dos actividades didácticas para que puedan ilustrar la manera como
pueden ser aplicadas en el aula.
66
“El pergamino con mis reglas de oro”
67
Paso a paso didáctico:
68
Regla 1- La Vida no es justa, acostúmbrate a ello.
Regla 4- Si piensas que tu maestro es duro, espera hasta que tengas un jefe. Él
no tiene vocación.
Regla 6- Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por
tus errores - aprende de ellos.
Regla 7- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son
ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa
y escucharte hablar acerca de lo buena onda que eres. Así que, antes
de que salves las selvas de la contaminación de la generación de tus
padres, por que no pruebas con limpiar primero el closet de tu propia
habitación.
69
4. Explíqueles a los estudiantes que lo prioritario al redactar
sus Reglas de oro es elegir aquellas normas que, en realidad,
pueden cumplir o llevar regularmente a cabo. Diferéncieles lo que
son idearios sin “polo a tierra” o un listado de acciones lejanas de la vida
cotidiana. Insista en este punto, pues de lo contrario será muy difícil que los
alumnos ajusten sus Reglas de oro a su edad, sus particularidades y con
texto real.
70
4.2. Segunda actividad
71
Tomado de: http://www.protocolo.org/extfiles/i-8023-cG.24436.1.png
72
Tomado de: http://www.protocolo.org/extfiles/i-8023-cG.24436.1.png
73
Paso a paso didáctico:
74
tablero con el fin de que el plenario corrobore o enriquezca lo que ha sido
un trabajo colaborativo.
75
Rejilla de auto-
evaluación para
Observaciones
Morales
76
Glosario
77
Murmullo
Bibliográfico
78
contienen varios registros de observa- • Si los docentes desean profundizar en
ciones con sus respectivas reflexiones. el tema de la observación pueden ser-
virles de referencia las siguientes obras:
• Otro libro, también fruto de otra inves- el Capítulo “Observar” de Jean Mason-
tigación, es de Susana García Salord nat, en la obra Técnicas de investiga-
y Liliana Vanella, Normas y valores en ción en ciencias sociales, AAVV, Nar-
el salón de clase, Siglo XXI, México, cea, Madrid, 1989.
2009. Las autoras ofrecen un listado
de categorías que podrían servir de en- • El capítulo 5: “Técnicas de observación
trada para futuros observadores mora- y participación: de la observación par-
les del aula. En la misma perspectiva ticipante a la investigación-acción par-
está el texto de Norberto Boggino, Los ticipativa” en Técnicas cualitativas de
valores y las normas sociales en la es- investigación social. Reflexión metodo-
cuela. Una propuesta didáctica e insti- lógica y práctica profesional, Miguel S.
tucional, Homo Sapiens, Rosario-San-
ta Fé, 2003.
79
80
COMUNICACIÓN
Unidad 4 SOCIO-MORAL
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 81
Situaciones
Ciudadanas
El proceso de elección de los representantes de cada curso tuvo una reducida partici-
pación de los estudiantes al punto de que el rector de la Institución decidió convocar a
nuevas elecciones. Parece que a nadie le importa la suerte del Gobierno estudiantil, a
pesar de que hubo muy buenos candidatos. Un trío de estudiantes ha sido convocado,
como si fueran una agencia de publicidad, para incentivar a una mayor participación
de los estudiantes. El rector ha solicitado un afiche ¿Qué propuesta haría su agencia
para lograrlo?
Producto esperado. Se espera que cada trio de estudiantes presente en una cartulina
de 70x100 un afiche en el que se invite a los estudiantes de la institución educativa a
participar en las elecciones de representantes estudiantiles. Pueden usarse distintos
materiales y emplear fotografías u otro tipo de imágenes.
http://deconceptos.com/arte/afiche
http://www.ligasmayores.bcn.cl/content/view/1521921/La-palabra-afi-
che-cartel-y-poster.html
http://www.fmv-uba.org.ar/comunidad/cursodisenio/CURSO%20IN-
TRODUCCI%C3%93N%20AL%20DISE%C3%91O%20DE%20AFI-
CHES.pdf
http://www.ceibal.edu.uy/contenidos/areas_conocimiento/aportes/co-
mohacer.pdf
http://odas.educarchile.cl/objetos_digitales/odas_lenguaje/basica/
5to_Avisos_publicitarios/index.html
http://comunidad.biensimple.com/tecnologia/w/tecnologia/Como-ha-
cer-un-afiche-publicitario.aspx
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 83
Iniciamos esta unidad con una miniquest Las miniquest pueden ser una estrategia
de exploración. Como se aprecia, se trata preliminar para que los docentes empie-
de una actividad investigativa, guiada por cen a familiarizarse con este tipo de herra-
el maestro, en la que se plantean una serie mienta de indagación en la que los recur-
de preguntas, se ofrecen unas direccio- sos ofrecidos por internet se convierten
nes de internet y se le solicita al alumno en la ayuda fundamental para el trabajo
un producto específico. Esta miniquest es docente.
una versión reducida de la denominadas
webquest y de las cuales nos ocuparemos
en detalle más adelante.
Herramientas para
formar ciudadanía:
Webquest
La webquest es una investigación dirigida requiere que los alumnos vayan más allá
por el docente con el fin de que el estu- del “pega y copiar”.
diante use y analice los materiales dispo-
nibles en la web alrededor de un tema o Agreguemos que la webquest se emparen-
un problema determinado. En tanto mo- ta con otras formas de investigación en las
dalidad de investigación se puede utilizar que internet sirve de soporte, tales como
para diferentes temas de la formación ciu- las cazas del tesoro o las miniquest. En to-
dadana o sobre problemas relacionados das ellas, el profesor presenta al estudian-
con la formación moral, y en los que se te una inquietud o un problema y le propo-
Desde los primeros lineamientos de su creador Bernie Dodge hasta desarrollos como los
del profesor español Antonio Temprano Sánchez, una webquest está compuesta o debe
organizarse de acuerdo a las siguientes partes:
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 85
detallada de cada momento, puestas en relación con los objetivos previstos,
son fundamentales en este momento.
Bien sea que el mismo maestro desee elaborar una webquest o proponerla como activi-
dad a sus estudiantes, debe tener presente por lo menos los siguientes puntos:
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 87
4. Fomentar el trabajo colaborativo. Es bueno que las tareas propues-
tas en la webquest involucren a varios estudiantes. Esto con el fin
de que la lectura de la información suministrada sea más rápido de
hacer y, especialmente, para que el análisis de esa misma informa-
ción sea más rico en la discusión. Cabe decir que la misma tarea
alcanza mejores resultados cuando los diversos miembros de un
grupo contribuyen desde diferentes saberes a resolverla. Y más aún
al momento de elaborar el producto final resultado de la pesquisa.
La webquest privilegia las competencias ner que convertir esa información en nue-
comunicativas. No sólo porque los estu- vos productos comunicativos, necesitan
diantes deben saber entrar en relación desarrollar las competencias de análisis,
con los nuevos medios de comunicación producción y traducción de mensajes. Así
e información sino porque, además, al te- que las competencias derivadas de esta
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 89
estrategia se relacionan con la recepción, que los estudiantes exploren y diferencien
mediación y emisión de diferentes pro- diferentes tipologías textuales.
ductos comunicativos.
Debido a que la webquest es, en sí mis-
Recordemos que las competencias co- ma, una estrategia de investigación en la
municativas, especialmente cuando se re- que entran procesos de análisis, diferen-
fieren a las nuevas tecnologías, van más ciación y argumentación, favorece tam-
allá de buscar información. De lo que se bién las competencias cog nitivas y ar-
trata es de hacer algo con la información gumentativas. Este aspecto se hará tanto
recolectada. En esta perspectiva, la web- o más amplio cuanto la tarea o las subta-
quest es una herramienta que ayuda a los reas propuestas conlleven a la discusión
alumnos a tomar una distancia crítica o al entre pares, la búsqueda de consensos y
menos comprensiva de lo que circula en la aplicación de la información a contextos
internet. De igual modo puede contribuir, determinados.
dependiendo de las tareas propuestas, a
Es sabido que los jóvenes de hoy son apá- za de propuestas de cambio y renovación
ticos a participar en varios de los escena- democrática.
rios políticos de su país o en propuestas
democráticas de largo aliento. Muy con- Y es aquí en donde el tema del liderazgo
tados son los que en verdad asumen el entra a cumplir una función primordial. El
derecho del voto como estrategia política liderazgo, que mucho tiene que ver con
de participación ciudadana y pocos tam- el poder, con la influencia y con la toma
bién los que ejercen en su comunidad o de decisiones y también con las ideas
en las instancias sociales de participación de ayudar a otros, lograr sacar adelante
un protagonismo significativo. Hay una proyectos sociales y, al menos como lo
especie de apatía o escepticismo ante los queremos entender acá, con aprender a
mecanismos y las instancias de partici- ejercitar la participación democrática. Es
pación establecidas. Es posible que este sabido que el liderazgo ha sido estudiado
desánimo esté asociado al pésimo ejem- desde la mirada de los sociólogos y los
plo de las clases dirigentes y a una frac- psicólogos sociales quienes han conclui-
tura entre lo prometido y lo cumplido por do que es un conjunto de capacidades o
los estamentos políticos. O esto se deba a aptitudes en el que ciertos rasgos de per-
que hace falta una mayor iniciativa de los sonalidad (buena comunicación, empatía
jóvenes para tomar la iniciativa y ser cabe- con los seguidores, capacidad de visión,
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 91
Un liderazgo con este matiz requeriría que los docentes al menos insistiéramos en clase
en seis rasgos o cualidades propias de los líderes:
a) Visión de futuro.
Esto es, que los jóvenes no se contentaran con la mirada inmediatista propuestas
por el consumismo, ni con el mero “aguante” de lo dado por perdido. La visión de
futuro comporta ir más allá de lo evidente, derrotar el conformismo, mantener viva la
esperanza. Pero, además, la visión de futuro conlleva a mantener vivo un proyecto
de vida personal; como quien dice, una meta, un propósito, un sueño de largo alien-
to.
b) Tenacidad o persistencia.
Sin esta cualidad del carácter, sin esta virtud, es muy difícil que los jóvenes se con-
viertan en guías para otros compañeros o miembros de su comunidad. La tenacidad
riñe con un mundo en el que todo parece sucumbir a lo fácil, a lo dado por hecho, a
lo leve e inmediato. La tenacidad pone a los jóvenes en la tarea de trabajar con ahín-
co para lograr los grandes objetivos. Y, por supuesto, va en contravía de una cultura
que a todo momento recalca la poca importancia de los vínculos, de lo permanente,
de lo duradero.
e) Asumir compromisos.
Este rasgo si que parece difícil para los jóvenes de hoy; sin embargo, no es concebi-
ble el liderazgo sin la asunción de algún tipo de compromiso. Ese valor de aprender
a comprometerse es el que marca la diferencia entre el sobrevivir y el vivir con un
propósito. Los compromisos, por lo demás, contribuyen a que los jóvenes vayan a
prendiendo a priorizar. Tarea que, de alguna forma, conlleva a aprender a planear, a
no dejar que las circunstancias gobiernen el día a día.
Basten esas seis características o cualidades del liderazgo como un abrebocas al tema
que nos interesa. En el apartado del Murmullo bibliográfico incluimos algunos materiales
para que los docentes se documente sobre el tema del liderazgo y, con su tacto y ex-
periencia, logren motivar a sus estudiantes o darles elementos de juicio para reflexionar
sobre esta habilidad o este rol que los jóvenes necesitan hoy más que nunca desarrollar,
pues lo que parece cómodo y fácil en nuestra época es la actitud pasiva, anónima y des-
esperanzadora del “todo está perdido”.
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 93
Trabajar
en el Aula
la Ciudadanía
1. Lograr que los estudiantes reflexionen Para el desarrollo de esta actividad se uti-
sobre los talentos, la relación con el li- lizarán recursos virtuales, especialmente,
derazgo y la posibilidad de ponerlos al páginas web que favorecen la compren-
servicio de otros. sión del tema trabajado en la unidad, en-
contrando vínculos con experiencias e ini-
2. Propiciar en los estudiantes la reflexión, ciativas en el campo. Adicionalmente, se
el autoexamen y descubrimiento de sus utilizará un video, el cual permitirá abordar
valores, talentos o cualidades. el protocolo propuesto para la construc-
ción de la webquest. Finalmente, se utili-
3. Familiarizar a los estudiantes con el pro- zará una diapositiva que orientará algunos
grama de presentaciones Power point, de los pasos propuestos en el ejercicio.
prestando especial importancia al valor
de la síntesis, la relación entre gráficas
y texto y la comunicación persuasiva.
Cibergrafía: http://www.psicoaragon.es/aacc/conceptos/talentos.html
http://davidtopi.com/descubriendo-tus-talentos/
Videos: http://www.youtube.com/watch?v=ur6csKpRvF8
http://www.youtube.com/watch?v=cW908I81V8k&feature=related
Diapositiva: “Rasgos y características de un líder”, se anexa diapositiva.
Desarrollo de la actividad:
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 95
4. Dígales, además, que usen esa misma estrategia con al-
gunos de sus compañeros de estudio o con determinados
profesores que los conozcan. Que transcriban esas respuestas y
que las incluyan en su presentación. Sugiérales que clasifiquen todos esos
testimonios (los de los familiares como los de sus compañeros y maes-
tros), bajo el título: “Testimonios”.
Objetivos de la actividad
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 97
Desarrollo de la actividad:
COMUNICACIÓN SOCIOMORAL 99
Rejilla de auto-
evaluación para
Comunicación
socio-moral
Criterios Calificación
1 2 3 4 5
Valore de 1 a 5 (siendo uno malo y 5 excelente) cómo desarrolló la actividad:
A. MEDIACIONES E INTERACCIONES COMUNICATIVAS
PLAN DE MEJORAMIENTO:
• Describa, atendiendo a los criterios expuestos, los aspectos que recogería y ampliaría en la siguiente aplica-
ción de la actividad.
Acompañamiento: Autoaprendizaje:
Conjunto de acciones y recomenda- Forma de aprender en la que prima la
ciones hechas por un tutor o mentor a autonomía y las particularidades del
un aprendiz o discípulo. El acompaña- aprendiz. Buena parte de la educa-
miento es clave para que los procesos ción a distancia o virtual consideran
de enseñanza se imbriquen con los de al autoaprendizaje como su estrategia
aprendizaje. El acompañamiento impli- formativa básica. El autoaprendizaje
ca planeación, seguimiento y evalua- requiere, a demás de disciplina y per-
ción. El uso de protocolos para este sistencia, habilidades específicas tan-
tipo de ayuda es indispensable si se to cognitivas como metacognitivas: de
quieren tener resultados de calidad. lectura, de escritura, de selección de
material, de estudio.
Actividad guiada:
Forma ordenada de prever la realiza- Caza del tesoro:
ción de una acción o la hechura de un “Es un tipo de actividad didáctica muy
producto. Corresponde a uno de los sencilla que utilizan los docentes que
aspectos fundamentales de la didácti- integran Internet en el currículum. Con-
ca: la planeación. La actividad guiada siste en una serie de preguntas y una
da especial valor a la secuenciación, el lista de direcciones de páginas web de
tipo de recursos, los tiempos necesa- las que pueden extraerse o inferirse las
rios y el nivel de conocimientos de los respuestas. Algunas incluyen una gran
aprendices. pregunta’ al final, que requiere que los
• Sobre el tema del liderazgo son varias • Mentes líderes. Una anatomía del lide-
las fuentes que pueden servirle al do- razgo, Paidós, Barcelona, 1998. En esta
cente de guía. Para empezar el texto obra se hace un estudio sobre once ca-
coordinado por los psicólogos socia- sos de líderes en diversos campos, en-
les Fernando Molero y José Francisco tre los que se cuentan a Margaret Mead,