Desarrollo sostenible

El cambio climático (que afecta a los ecosistemas y a los seres humanos en general),
la explotación exagerada de los recursos naturales y la sobrepoblación (que reclama
una mayor producción de alimentos), son situaciones complejas que permiten
entender por qué actualmente se habla del desarrollo sostenible.

El desarrollo sostenible es un movimiento económico y político en donde se

plantean alternativas para resolver los problemas ocasionados por el crecimiento
económico sin control, el desarrollo industrial y el consumo excesivo de los
habitantes.

Los defensores del desarrollo sostenible piensan que los seres humanos, únicos
responsables de la devastación actual, debemos tomar consciencia de todos los
daños producidos por la industrialización y la pérdida de la capacidad de
recuperación del planeta y, en consecuencia, cambiar de actitud modificando
nuestros hábitos de consumo, eliminando las principales fuentes de destrucción de
la vida natural.

Uno de los casos más llamativos que reflejan las consecuencias terribles de no
adoptar medidas que eviten la destrucción y la devastación, es el de la ocupación
de los litorales y costas alrededor del mundo: en ellos la interacción entre las
actividades humanas, el agua y el clima, sumada a los desechos producidos por las
personas y a los usos indebidos de actividades económicas centradas en el
comercio provocan en las zonas costeras la desaparición de especies vegetales y
animales de manera irrecuperable.

De acuerdo con la interpretación que hacen los defensores del desarrollo

sostenible, tales situaciones como las de la desaparición de los ecosistemas costeros
en todo el planeta, tiene que ver con una actitud muy clara: las personas no están
dispuestas a disminuir sus ganancias económicas y el interés egoísta no permite
que se vea hacia el futuro. Paradójicamente, por estar pensando en disfrutar el
momento actual, no pensamos en que aquellos que heredarán el planeta, como
nuestros hijos, cada vez están más cerca de quedar condenados a una vida
miserable, sin recursos y sin fuentes de alimento y de vida.

Como conclusión, se puede decir que sería importante que todos comprendamos el
sentido del desarrollo sostenible ya que no es una iniciativa caprichosa, en contra
del progreso y del consumo, sino una preocupación realista por el futuro de la vida
en el planeta.

Intereses individuales y preservación de bienes comunes

Cuando nos relacionamos con otras personas, se crean vínculos pero también
surgen diferencias sobre gustos y preferencias. Una de las principales dificultades de
la vida en comunidad es el hecho de que los seres humanos justificamos nuestras
actuaciones recurriendo una escala de valores compartida.

Tendemos a identificar y a usar nuestros pensamientos en busca de seguridad y

aceptación; sin embargo, cuando reflexionamos sobre temas de interés que van
más allá de las preocupaciones inmediatas, no es fácil encontrar razones para
ocuparnos de cosas que no hacen parte de nuestros intereses.

El interés individual aparentemente no parece conciliarse bien con las

preocupaciones comunes porque estas últimas exigen esfuerzos colectivos que
dejen a un lado nuestros gustos y caprichos. Se trata, entonces, de comprender que
hay necesidades mutuas y compartidas; es decir, responsabilidades que nos
competen a todos.

Ejemplo de una preocupación general es la conservación del medio ambiente, ya

que el cuidado de los recursos naturales y la no contaminación son temas de interés
común que, si logran resolverse bien, terminan beneficiándonos a todos.

El caso del Parque Nacional de Zante en Grecia, es un ejemplo típico de cómo la

necesidad de proteger a las tortugas marinas en vía de extinción, llevo a que las
personas no frecuentaran las playas del Golfo de Laganos para no perturbar el
proceso de reproducción de las tortugas. Así, las personas lograron despojarse de
sus intereses individuales privilegiando el bien común de la protección de una
especie amenazada.

Como conclusión es necesario decir que la conciliación entre intereses individuales

y bienes comunes es una decisión responsable que debemos tomar para asegurar
un futuro donde se mantengan mejores con el entorno y con los demás habitantes
del planeta.