Todos.

Absolutamente todos, tenemos en nuestro interior voces siniestras que nos muestran
imágenes de venganza, de daños y de otras cosas que no nos atrevemos a confesar ni ante el
espejo.

La diferencia entre unos y otros radica, en que algunos de nosotros, elegimos escuchar esas voces
y exorcizarlas de nuestro ser -aunque parezca imposible - de manera armoniosa.

No siempre esas voces son nuestras, aunque se escuchan muy propias. Por esta razón es mejor
acudir a un especialista para que nos ayude a resolver nuestros dilemas. Nos ayudaran a escuchar
estas voces atentamente, a reconocerlas y a sanarlas sin juicios ni traumatismos.

Antes de sucumbir a los deseos de suicidio, asesinato, violación, incesto y otros; analice un poco
mas, y busque ayuda. Existen muchos profesionales que le van a ayudar sin juzgarlo y se podrá
evitar el dolor que le puede causar a su familia, amigos, a la sociedad en la que vive y sobretodo a
usted mismo.

Invito a todas las personas que sufren el drama de contener deseos que pueden dañar o
traumatizar a otros. (pedofilia, incesto y otros) a discutirlos con personas idóneas que le ayudaran
a resolver su situación sin generar más lesiones. Es muy posible que sus deseos sean el resultado
de sus propios traumas infantiles. Sin embargo, quiero que analice. ¿Si continúa la cadena. Cuando
va a parar esto?

Entiendo. Por más que nos cueste reconocerlo; que no hay seres malvados. Sólo seres enfermos y
llenos de dolor. Por eso le hago una invitación a estas personas a frenar su impulso y buscar
alternativas que ayuden a todos.

Recuerde. Antes de hacer algo que pueda dañar a otro para toda la vida. Analice y busque ayuda.
Si ya ha realizado actos que atentan contra la dignidad y la integridad de otras personas. Aun está
a tiempo de corregir estas conductas y evitar más daño a seres que nada le han hecho. Personas
que tal vez tienen como único defecto ser inocentes. 