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resuMen. John N. Gray es uno de los teóricos abstract. John N. Gray is one of the most
políticos más relevantes del panorama inte important political theorists of the contempo
lectual contemporáneo. Este trabajo ofrece rary intellectual scene. This paper gives an
una síntesis de su pensamiento, entendido overview of his thought, understood as po
como teoría política del modus vivendi. Se litical theory of the modus vivendi. It states
sostiene aquí que el pensamiento político de as well that the political thought of John Gray
John Gray es un tipo de liberalismo con is a type of liberalism consistent with the
gruente con los principios de la tradición del principles of the tradition of British conserv
conservadurismo británico. En concreto, el atism. Specifically, this article defends this
artículo defenderá esta vinculación atendien linkage focusing on the markedly anti-ration
do al marcado carácter anti-racionalista y alist and skeptical features of his thought,
escéptico de su pensamiento, elementos que which are elements that set him apart from
lo alejan de cualquier concepción universalis any universalist conception of liberalism.
ta del liberalismo.
Palabras clave: Liberalismo, conservaduris Key words: Liberalism, conservatism, ration
mo, racionalismo, escepticismo. alism, skepticism.
de los intelectuales con mayor presencia global capitalism de John Gray que el
en la esfera pública debido a su condi economista Lord Robert Skidelsky escri
ción de colaborador habitual de la BBC, bió para el prestigioso Times Literary
del periódico The Guardian, de la revis Supplement ilustra a la perfección los
ta New Statesman o del prestigioso sentimientos encontrados que Gray des
think-tank de orientación socialdemócra pierta entre algunos de sus colegas de
ta Demos. Precisamente, el hecho de que profesión,
Gray se prodigue mayoritariamente en Los cambios intelectuales de Gray se
medios de sensibilidad progresista para han convertido en legendarios. Me dijeron
dar cauce a sus críticas al neoliberalismo, que era un socialista en los 70. En los 80 era
a las políticas de expansión de la demo un thatcherita. (En cierta ocasión, la Dama de
cracia en Oriente Medio o para mostrar Hierro me comentó: «¿Qué le ha ocurrido a
su simpatía por algunas de las reivindi John Gray? Antes era uno de los nuestros»).
caciones del «occupy movement» hace Luego adoptó el comunitarismo de moda. A
que su adscripción a la tradición del con juzgar por su último libro, él es lo que Marx
hubiese denominado un «reaccionario» —sin
servadurismo británico no parezca evi esperanza, pero con un vivo temor al desas
dente a primera vista. tre. Actúa en cada papel con pasión y salero.
Lo cierto es que John Gray cultiva Sin embargo, dado todo lo que tenemos hoy,
con mimo la condición de intelectual he pero que mañana desaparecerá, es difícil sa
terodoxo que disfruta dificultando su ber si tomarse sus argumentos en serio. 2
identificación en el eje izquierda/dere Otro buen ejemplo de la ambigüedad
cha. Esta inclinación a no explicitar su que para algunos académicos se cierne
adhesión a ninguna escuela de pensa sobre la figura de John Gray puede en
miento, ni ideología, ni partido político contrarse en el libro The Reactionary
es un aspecto de la personalidad del John Mind, recientemente publicado por
Gray maduro. Tras mostrar entusiasmo Oxford University Press. El libro, escrito
en su juventud por la New Right de Mar por el politólogo norteamericano Corey
garet Thatcher, primero, y por el New Robin, presenta a John Gray como un
Labour de Tony Blair, después —pro «Machiavellian virtuoso of political
yectos que ahora critica con denuedo—, change», quien supuestamente abandonó
en la actualidad Gray se siente más có su original credo libertario para mudarse
modo en la posición de intelectual ico a la izquierda con el único objetivo de
noclasta que celebra la libertad de su conseguir un puesto en la LSE. 3
juicio. Una buena muestra de la indepen Sin embargo, si alguna definición
dencia de la que hace gala es la utiliza sienta como un guante a John Gray es la
ción de su tribuna en el republicano The célebre frase de Michael Oakeshott que
Guardian para reivindicar, sin ningún acompañó todos sus obituarios: «No per
empacho, el principio monárquico como tenezco a ningún partido político» —dijo
el mejor vertebrador político para las so en cierta ocasión. «Voto —si he de vo
ciedades plurales contemporáneas. 1 tar— al partido que probablemente hará
La personalidad provocadora de menos daño. En ese punto, soy un
Gray ha hecho que algunos académicos Tory». 4 Para Gray, como para el propio
vean en su biografía una trayectoria errá Oakeshott, uno de los mayores peligros
tica que dibuja el perfil de un pensador que se cierne sobre la vida política es la
caprichoso y oportunista cuyas ideas de política ideológica: id est, la política en
bemos acoger con cierta cautela. La re tendida como un saber técnico que su
seña del libro False Down. Delusions of bordina la toma de decisiones a la apli-
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Conservadurismo británico contemporáneo
lítica es aquella que puede ser iluminada divertido en esparcimientos corrientes, han
a priori desde la razón, para el conserva llevado sus pensamientos muy poco más allá
dor la única actividad política merecedo de los objetos diariamente presentes a sus
ra de aprecio es aquella que integra a sentidos. Desde luego, yo no pretendo con
vertir en filósofos a tales personas, ni espero
posteriori los beneficios de la experien que me ayuden en estas investigaciones o que
cia. De aquí nace la pulsión natural del escuchen estos descubrimientos. Estas perso
conservadurismo británico: la pulsión nas harán muy bien en continuando en su
por conservar lo existente valioso, así sea situación actual. Y, en vez de refinarlas hasta
imperfecto. convertirlas en filósofos, me gustaría poder
Por tanto, hágase notar que mientras insuflar a nuestros fundadores de sistemas un
las corrientes de pensamiento político poco de esta grosera mixtura terrestre, ingre
que participan de la raison d’etre racio diente que por lo general les es muy necesa
nalista muestran una inclinación natural rio, y que podría servir para templar esas
ígneas partículas de que están compuestos. 15
a llevar la herencia social, política, legal
e institucional de una sociedad ante el Ironía mediante, lo que John Gray
tribunal de la razón, el conservadurismo quiere recordar con fragmentos como el
británico realiza la operación contraria, de Hume es el carácter limitado de la
siendo la razón la que debe comparecer razón —y, por tanto, de la teoría— como
ante el tribunal de lo tradicional y con instrumento para la ordenación de las
suetudinario que vertebra y da sentido de sociedades. En concreto, lo que nos quie
continuidad a una comunidad política. re recordar es que la política no tiene que
En última instancia, la razón por la ver con el diseño de sociedades perfectas
que John Gray ensalza una actitud escép sub specie aeternitatis, sino con la tarea
tica como elemento indispensable de más humilde, y limitada, basada en aten
todo buen gobierno es porque comparte der a los arreglos generales de una co
con toda la tradición conservadora la munidad que se reconoce, precisamente,
idea de que la política, en tanto que pro en la manera en la que atiende dichos
ducto humano, es un producto imperfec arreglos —que son, por naturaleza, loca
to per se. Por tanto, la actitud prudencial les, contingentes e históricos.
que un conservador debe imprimir a sus Precisamente, esta vinculación entre
actos en la vida política debe tener como la política y escepticismo hace que la
norte alejarse de la peligrosa ilusión se idea del liberalismo que Gray sostiene se
gún la cual todos los problemas políticos acueste más al conservadurismo que a
pueden ser conjurados y rectificados si cualquier otra variante, pues se trata de
damos con la teoría social perfecta y la un liberalismo orientado a poner en valor
aplicamos consistentemente. la idea en virtud de la cual lo importante
Una de las citas preferidas de John para el sostenimiento de una comunidad
Gray, y que mejor ilustra lo que hasta política no son tanto los consensos racio
ahora he referido, es un fragmento del nales últimos, sino las tradiciones insti
Tratado de la naturaleza humana de tucionales y ritos simbólicos comparti
Hume. Un fragmento en el que la mordaz dos que dotan de orden, estabilidad y
ironía del filósofo escocés invita a los continuidad en el tiempo a las socieda
filósofos y reformadores sociales a rela des. 16
jar su celo metafísico, Hete ahí, por ejemplo, el fundamen
…particularmente en Inglaterra, hay muchos to para su defensa de la institución mo
honrados caballeros que, habiéndose dedica nárquica frente a otros principios de
do siempre a sus quehaceres domésticos o vertebración política más modernos y
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sofisticados filosóficamente, pero que chael Oakeshott, sostenía una tesis clara
históricamente se han mostrado menos y distinta que resume a la perfección lo
sostenibles y más proclives a generar hasta ahora expuesto,
conflictos políticos. Como dijera el pro
En el liberalismo coexisten dos filoso
pio John Gray en un famoso y controver fías. En la primera la tolerancia se justifica
tido artículo llamado «The Monarchy is como un medio de alcanzar la verdad. Según
the key to our liberty»: «La constitución esta concepción, la tolerancia es un instru
monárquica que tenemos en la actualidad mento de consenso racional y la diversidad
—una mezcla de vestigios de la antigüe de modos de vida se soporta gracias a la con
dad y culebrones postmodernos— podrá vicción de que está destinada a desaparecer.
ser absurda, pero permite que una socie En la segunda filosofía, la tolerancia se valo
dad plural pueda continuar unida sin de ra como una condición de paz y los modos
de vida divergentes se aprecian como marcas
masiada fricción». 17 de la diversidad de la buena vida. La primera
Es este, precisamente, el punto en el concepción respalda un ideal de convergencia
que el carácter post-liberal y escéptico última de valores, la segunda, un ideal de
del pensamiento de John Gray se hacen modus vivendi. El futuro del liberalismo está
congruentemente conservadores. Pues al en dar la espalda al ideal del consenso racio
tiempo que considera que el liberalismo nal y asumir el del modus vivendi. 18
no encuentra su mejor versión como una Para John Gray, los pensadores que
filosofía política, sino como una historia mejor ejemplifican la tradición liberal
de prácticas institucionales orientadas a como prescripción de un régimen univer
preservar la libertad individual en socie sal son John Rawls, F. A. Hayek, Ronald
dades modernas, Gray está reivindicando Dworkin y Robert Nozick. Autores que
una forma de política —la política del encuentra su mejor inspiración en John
modus vivendi— que se apoya antes en Locke y en Immanuel Kant. Por el con
la historia y en el saber acumulado por trario, los mejores exponentes de una
la experiencia que en cualquier forma de concepción del liberalismo como un pro
metarrelato para legitimarse. yecto de coexistencia que renuncia de
cualquier consenso racional último en
Dos conceptos de liberalismo: la teoría aras de un compromiso de paz son Isaiah
política del modus vivendi Berlin y Michael Oakeshott, cuya inspi
ración se remonta a la tradición escéptica
Isaiah Berlin hizo su propia lectura de la de Thomas Hobbes y David Hume. 19
historia del concepto de libertad en su Llegado el punto, la pregunta que
célebre conferencia «Dos conceptos de urge hacer a Gray es la siguiente: ¿qué
libertad», ofrecida en 1958 tras asumir la tiene en común la filosofía política de
cátedra Chichele de Teoría Social y Po Locke, Kant, Rawls, Hayek, Dworkin y
lítica de la Universidad de Oxford un año Nozick? Más allá de escolásticas quere
antes. John Gray, quien nunca ha escon llas sobre si un autor se aviene con una
dido su admiración por el anti-racionalis tradición de izquierda o de derecha, lo
mo del pensamiento de Berlin, emuló a que John Gray propone es una redescrip
su mentor oxoniense ofreciendo su pro ción del liberalismo en base a un criterio
pia lectura de la historia del liberalismo fundacional. Para Gray la tradición libe
en su obra Two faces of liberalism, pu ral se divide entre aquellos que buscan
blicada en el año 2000. un fundamento metafísico para las insti
Two faces of liberalism, obra dedica tuciones liberales y aquellos que recha
da precisamente al propio Berlin y a Mi zando cualquier aventura metafísica fían
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Jorge del Palacio Martín
nosotros esto significa abandonar la ilusión Hume, D., Tratado de la naturaleza hu
de que las teorías de la justicia y de los dere mana, Madrid, Editora Nacional,
chos puedan librarnos de las ironías y las 1991.
tragedias de la política. 28 Kelly, P., «Political Theory in Retreat?
Contemporary political theory and the
historical order», en O’Sullivan, N.
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NOTAS
1
Véase, por ejemplo, el artículo «The Monarchy 4
The New York Times 22/12/1990, The Guardian
is the Key of our Liberty» en http //www.guardian. 22/12/ 1990, The Daily Telegraph 21/12/1990.
co.uk/commentisfree/2007/jul/29/comment.politics1. 5
Gray, J., Liberalismo, Madrid, Alianza Editorial,
2
Skidelsky, R , «What’s wrong with global capita 1994, p. 141.
lism?» en Times Literary Supplement, (27/03/1998). 6
Laslett, P. Rucimann, W. G. (eds.), Philosophy, Poli
3
Robin, C., The Reactionary Mind Conservatism tics and Society, New York, Barnes&Noble, 1956, p. vii.
from Edmund Burke to Sarah Palin, Oxford Universi 7
Hernández, J. M. «El liberalismo ante el fin de
ty Press, 2011, p. 111-120. siglo» en Quesada, F. La filosofía política en perspec-