Conflictos ¿Qué es un conflicto? Cuando tengo un conflicto con alguien, ¿Cómo lo Soluciono? ¿Existirá alguna técnica para solucionar conflictos de mejor manera? Qué es un conflicto
Actualmente se tiene una perspectiva integradora, que
considera el conflicto como adecuado o inadecuado, funcional o disfuncional, y esto depende de cada situación particular dada. Asimismo, sostiene que a veces es necesario fomentar el conflicto para que surjan ideas creativas para el cambio Niveles de conflicto Existen diversas fuentes motivadoras de conflictos y se pueden ubicar en distintos niveles:
a) Intrapersonal (al interior de una persona)
b) Interpersonal (entre individuos) c) Intragrupal (al interior de un grupo) d) Intergrupal (entre grupos).
Estos niveles están relacionados entre sí
El conflicto a nivel intrapersonal: Este sucede en el mundo interno del individuo y frecuentemente se da un conflicto entre metas, conflicto cognitivo o afectivo. El conflicto a nivel interpersonal:
Se da cuando existen diferencias en
actitudes, valores, conductas, metas entre dos o más personas. Existen varias modalidades de conflicto (Dubrin, 2008; Hellriegel, 2009; Luthans, 2008): ● Conflicto de funciones o roles: las funciones son tareas y comportamientos que los demás esperan de una persona en el trabajo. En ese sentido, un emisor de funciones es aquel que tiene expectativas de cómo debe comportarse el receptor. De ahí que, las percepciones del receptor y las presiones pueden provocar conflictos de funciones. Pueden ocurrir conflictos al ser incompatibles dos objetivos. O al recibir instrucciones incompatibles. Asimismo, puede surgir conflictos cuando dos funciones desempeñadas son incompatibles. Finalmente se puede dar conflictos cuando los requerimientos de la función o rol son incompatibles con las actitudes, valores, opinión, etc. propios. ● Conflicto por ambigüedad de funciones o roles: este conflicto surge a partir de la incertidumbre o falta de claridad de las funciones o tareas alrededor de un puesto. Ello provoca una situación de estrés, conductas agresivas (violencia, robo, ataques verbales), renuncias, ausentismo, o en el mejor de los casos una búsqueda de solución.
● Conflicto por la competencia por escasos recursos: este conflicto
surge cuando dos o más personas pelean por la repartición de recursos de la organización.
● Conflicto de personalidad: este conflicto se da porque existe una
relación opuesta entre dos personas que pueden ser por diferencias de metas, preferencias, valores, estilos de vida, rasgos de personalidad, etc. Conflicto a nivel intragrupal:
Este tipo de conflicto concierne a las oposiciones o pugnas entre
algunos o todos los miembros de un grupo. En estos conflictos los factores que intervienen en los conflictos intrapersonales son aplicables a lo intragrupal. Conflicto a nivel intergrupal: Se refiere a la oposición, desacuerdo, pugna entre grupos o equipos. Se han registrado factores que influyen en este conflicto:
● Competencia por los recursos: los grupos o equipos de las
organizaciones frecuentemente compiten y se generan conflictos por ganar fondos, espacio físico, proveedores, personal y servicios debido a la limitación de recursos. ● Dependencia en las tareas: cuando dos grupos o equipos de una compañía dependen uno del otro, la tendencia es a producirse conflictos que si los grupos son independientes uno de otro. Si a ello se le suma las diferencias en objetivos, prioridades o personal, habrá mayor conflicto. ● Falta de claridad de jurisdicción: debido a la superposición de responsabilidades puede ocurrir conflictos.
● Ambición por lograr mayor estatus: muchos de los equipos tratan de
mejorar su estatus y se pueden dar pugnas por ello pues se genera una percepción de injusticia o un trato especial para uno de los grupos (recompensas, privilegios, condiciones laborales). Estilos de Manejo de Conflictos Estilos de Manejo de conflicto
Existen ciertas tendencias o estilos para gestionar los
conflictos. Kenneth Thomas, identificó cinco estilos de manejo de conflictos según el nivel de cooperación (satisfacción de los intereses del otro) y la asertividad (satisfacción de intereses propios). Competitivo
- Estilo competitivo: esta tendencia se define por la motivación de
satisfacer las propias metas. Existe una dinámica de un ganador y un perdedor, es decir, las personas se basan en la se dan pugnas por el poder y surgen confrontaciones. Este estilo resulta efectivo en momentos en los que se tiene que actuar con rapidez sin embargo, reduce la creatividad para encontrar soluciones. Complaciente
- Estilo complaciente: se caracteriza por la satisfacción de los
intereses de los demás. Las personas que tienen este estilo tratan de ser empáticas e incluso se sacrifican. Este estilo es funcional pero si todo el tiempo se van a reprimir emociones, sentimientos o malestar por complacer al otro esto puede desencadenar conflictos internos. Participativo
- Estilo participativo o compromiso: este estilo se ubica entre la dominación
y la pacificación, es decir, tiende a satisfacer a ambas partes aunque no de manera completa. Este estilo se emplea cuando el poder de ambas partes es generalmente semejante, de ahí que cada parte tiene que ceder en algo para ganar algo. La desventaja radica en que no hay ganadores y con frecuencia las partes son conscientes que han tenido que ceder. Colaborativo - Estilo colaborativo: se caracteriza por el deseo de satisfacer completamente los intereses o metas de ambas partes, de ganar algo valorable o en todo caso de no perjudicar excesivamente a las partes. Se parte de la base de que la participación creativa en el problema genera soluciones en las que todos ganen y no sea un recurso fijo que presiona a todos a ceder para ganar algo. Si bien demanda mucho tiempo esta técnica y puede que no hayan resultados cuando estén implicados diferencias de valores, la principal ventaja es que efectivamente favorece la unión. Los individuos que utilizan este estilo se preocupan de sus intereses y de los de la otra parte, reconocen el conflicto como natural, útil y que puede ser un medio que lleva a encontrar soluciones creativas para ambas partes. Evasivo
- Estilo evasivo: al emplearse este estilo, las personas reconocen el
conflicto pero no desean enfrentarse y no hacen ningún tipo de esfuerzo por satisfacer sus metas ni las de los demás pues perciben que el conflicto se resolverá solo. Pueden reprimir sus emociones o evitar la causa del conflicto y alejarse. Esta forma de actuar resulta apropiada cuando se requiere de tiempo para que el conflicto se vuelva a conversar. Asimismo cuando las personas no tienen la suficiente información para solucionar el conflicto en ese preciso momento, o cuando una de las partes tiene poco poder para lograr algún cambio.