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Ángelo Victoria
Corrección de estilo
M______s
Diseño y diagramación:
Isabel Sandoval M.
Diseño de portada:
________
isbn: 978-958-____________
capítulo 1
Sociología de la profesión jurídica................................................... 9
Mauricio García Villegas
capítulo 2
Tradiciones, saberes y actores en el campo jurídico. .........25
Mauricio García Villegas
[ 7 ]
capítulo 3
La regulación de la enseñanza del derecho. ............................. 61
Freddy Alexánder Salamanca
capítulo 4
Acreditación y calidad en
la educación superior colombiana..................................................85
Isabel Goyes Moreno
capítulo 5
Educación legal en Colombia. Análisis cuantitativo
desde una perspectiva histórica.......................................................99
Freddy Alexánder Salamanca
capítulo 6
Los abogados en el gobierno colombiano desde
los albores del siglo XX hasta nuestros días..........................135
Luz María Sánchez Duque
capítulo 8
Caracterización del abogado en
la administración pública nacional............................................. 191
Ángelo Victoria
capítulo 9
Análisis estadístico de la oferta y la demanda
de educación jurídica en Colombia............................................. 213
Santiago Sánchez Jiménez
[ 8 ]
Los abogados en Colombia
Mauricio
por
N o todas las sociedades se interesan de igual
manera por el derecho ni en todas ellas los
abogados tienen la misma presencia o importan-
García
Villegas cia. En Japón, por ejemplo, los abogados y el liti-
gio tienen menor importancia que en los Estados [ 9 ]
Profesor de la Facultad
Unidos. De hecho, en ninguna otra sociedad del
de Derecho de la
mundo los abogados parecen tener tanta impor-
Universidad Nacional
tancia tan grande como en este último país1, lo
de Colombia. Quisiera
cual explica que allí exista una larga tradición de
agradecer a Sebastián
estudios de profesión jurídica.
Rubiano y a Aude
¿Qué importancia relativa tienen los aboga-
Lejeune, por la ayuda
dos en Colombia? Es difícil saberlo con certeza pero
académica prestada
no parece aventurado sostener que, al menos en lo
en la recolección
que a la configuración de la vida institucional y po-
de información
lítica del país se refiere, los abogados, y el derecho en
comparada para
general, han tenido más importancia en Colombia
este artículo.
que en otros países del continente, por ejemplo en
Quiero agradecer
los demás países andinos. No obstante, los estudios
también a Carolina
Galindo, estudiante
de la maestría, por
la colaboración
1 En 1980 había solamente unos doce mil abogados
prestada en la parte registrados en Japón (lo cual se explica por las dificultades
administrativa de que tenía el examen de admisión para litigar. Solo el
2% de los que se inscribían lo pasaban). Sin embargo,
este proyecto.
en los últimos 30 años esta situación ha cambiado
drásticamente. Al respecto, para una visión comparada de
19 países, ver la obra clásica en tres volúmenes editada por
Richard Abel y Philip Lewis: Lawyers in Society.
1. Visión general
1.1 Tradiciones y profesiones jurídicas
La profesión jurídica en países anglosajones ha estado dominada por la
práctica del derecho. En Europa continental, en cambio, la profesión jurí-
dica ha girado alrededor de las universidades. La explicación más célebre
de esta distinción se encuentra en Max Weber (1978, p. 785). Según este au-
tor, la temprana centralización del poder político en Inglaterra hizo posible
la creación de un sistema judicial relativamente unificado, alrededor del
cual surgieron los abogados. El trabajo conjunto de jueces y abogados fue
forjando el common law, entendido como un sistema relativamente unifi-
2 Entre las publicaciones existentes ver, por ejemplo, la del Ministerio de Justicia y del Derecho.
El abogado en el tiempo de la gente: realidad y prospectiva de la enseñanza del Derecho en
Colombia. Bogotá. 1995. En cuanto a publicaciones académicas, ver Silva (2001), Lynch (1981),
Pérez Perdomo (2004), Palacios (2001), Dezalay y Garth (1996), Estrada Álvarez (2006). Otra
cosa son los textos de historia de la profesión jurídica. Ver por ejemplo Uribe (2000), Uribe
Uran y Ortiz Mesa (2000), Uribe (2000).
5 Puede verse, por ejemplo, el libro publicado por la asociación Avocats sans frontieres bajo
el título Guía práctica del abogado litigante. El derecho de defensa y el ejercicio profesional
(2007). Bogotá: Casa del Abogado. Allí se compara la situación de la organización de la
profesión en varios países de América Latina.
6 Ver, por ejemplo, Lynch (1981); Palacios (2001); Pérez Perdomo (2004). De otra parte, en
términos cuantitativos Colombia no se queda atrás; según Rogelio Pérez, en la segunda
mitad del siglo XX Colombia era el tercer país con más abogados por cien mil habitantes
en América Latina (254), después de Argentina (345) y Costa Rica (309).
7 Con la excepción del estudio hecho por el Ministerio de Justicia en 1995. Ver cita 2.
***
Referencias
Abbott, Andrew. 1988. The system of professions: An essay on the division of
expert labor. Chicago: The University of Chicago Press.
Abel, Richard. 1985. Comparative Sociology of Legal Professions: An explora-
tion essay. American Bar Foundation Research Journal, 10(1) 1-79. 1:80.
. 1989. American Lawyers. New York: Oxford University Press.
[ 23 ]
Carlin, J.E. 1966. Lawyers’ Ethics: A Survey of the New York City Bar. New
York: New Sage Foundation.
1. El desafío antiformalista
La Revolución Francesa quería fundar un nuevo Derecho, diferente al del
ancien régime, que fuera simple y claro de manera que el pueblo pudie-
ra comprenderlo y utilizarlo para su beneficio. Un “derecho al alcance de
aquellos que tienen que obedecerlo” como solía decir Robespierre (1970).
Con este espíritu en mente, durante la primera parte del siglo XIX el de-
recho fue identificado con la legislación y más específicamente con el Có-
digo Civil promulgado en 1804. Se pensó entonces que el enorme esfuerzo
de racionalización llevado a cabo por Portalis y los demás redactores del
Código Civil hacía inútil, cuando no dañino, cualquier intento de inter-
pretación de sus normas por la ciudadanía. Durante la primera mitad del
siglo XIX, el Estado intentó por todos los medios bloquear el desarrollo de
un pensamiento jurídico independiente de los poderes políticos (Arnaud,
1975: 49). Se dice que cuando Napoleón supo que Maleville, uno de los
autores del Código, publicó el texto titulado L’Analyse raisonnée du Code
Civil, exclamó: “mi código está arruinado”2.
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
tarios sobre la legislación se hacían indispensables, especialmente en una
época de gran cambio social y político. En este contexto surgió la escuela
de la exégesis3. Sus seguidores reconocieron la necesidad de un análisis del
derecho, pero solamente con el objeto de clarificar su significado y alcance
a través de un examen meticuloso de los textos legales. El legislador y el
Código continuaban siendo no solo los protagonistas del campo jurídico.
El Código era la fuente de la verdad jurídica y por ello era objeto de vene-
ración y de orgullo republicano en el ámbito político. El análisis jurídico
estaba guiado más por el derecho legislado que por una descripción cien-
tífica. El derecho no fue visto como una ciencia sino como una disciplina
(Arnaud, 1975: 47) y esta concepción prevaleció en Francia hasta la última
década del siglo XIX.
En Alemania, en cambio, la codificación llegó tarde, en parte por
la reacción en contra de la influencia imperialista de la Francia napoleó- [ 27 ]
nica y su Código. En vez de eso, floreció la Escuela Histórica del Derecho,
liderada por Savigny y Puchta4 –una escuela que era contraria a la glorifi-
3 A pesar de ser llamados “escuelas”, los expertos en esta área no se adhirieron a principios
unificados ni compartieron una orientación claramente definida. La exégesis fue un
intento para entender y explicar el Código Civil, comenzando con una lectura detallada
en extremo de sus textos, y una extracción de principios tomados estrictamente de la
carta del Código. Entre sus mayores exponentes se encuentran Étienne Delvincourt
(Institutions de droit civil français), Alexandre Duranton (Traité des obligations et contrat
en général), Antoine Demante (Programme de cours de droit civil français), Jean Baptiste
Duvergier (Collection des lois, décrets, ordonnances, règlements et avis du Conseil d’Etat),
Victor Marcadé (Explication théorique et pratique du Code de Napoléon). Sobre este punto
ver Arnaud (1975) y Jestaz y Jamin (2004).
4 La Escuela Histórica se opuso al proyecto de codificación de 1814 inspirado en el modelo
francés y dirigido por Thibaut (Savigny 1815). Otro representante de la misma escuela
era Rudolf von Ihering, considerado el padre de la llamada “escuela de intereses”, la cual
promovió un método de interpretación de la ley teniendo como base los intereses en
juego. Definía el derecho como “judicially protected interests”. Algunos de sus trabajos
más memorables son Geist des romischen Rechts (1852), Der Kampf ums Rechts (1872) y
Der Zweck in Recht (1877). Ver también Ihering (1901).
5 Ver el trabajo de Savigny sobre la universidad en Alemania (2003).
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
141)10. Segundo, rechazaban la idea del derecho como un sistema racional,
coherente y autónomo; es decir, como un sistema que ignora la existen-
cia de vacíos y contradicciones. La dogmática jurídica, entendida como
un sistema unificado y coherente de conocimiento impulsado por la lógica
y la deducción, no existe; los vacíos y las lagunas son constantes en el sis-
tema jurídico11. Y, finalmente, proponían que el derecho viviente (living
law) fuera la fuente primaria del derecho oficial. Eugen Ehrlich (1922: 100)
decía que “[l]a gran masa del derecho, surge de inmediato en la sociedad
misma en la forma de un ordenamiento espontáneo de relaciones sociales,
de matrimonios, asociaciones familiares, posesión, contratos, sucesión y la
gran parte de este Orden Social nunca ha sido acogida dentro de las nor-
mas jurídicas (Legal Previsions)”. En resumen, el pluralismo jurídico, la in-
coherencia y el derecho viviente eran los tres rasgos esenciales del desafío
europeo al formalismo, todos ellos en oposición a un derecho concebido [ 29 ]
como legislación estatal.
La Escuela Histórica –y en especial el trabajo de Savigny– también
10 Eugen Ehrlich es reconocido por ser el vocero más renombrado del movimiento del
Derecho Libre. Ehrlich había demostrado, desde su primer escrito, cierta compasión por
el sistema de common law, en el cual él vio instrumentos en la lucha contra el formalismo
representado en la codificación. Su trabajo fue introducido/presentado en los Estados
Unidos por el jurista refugiado alemán Hermann Kantorowicz, otro representante de la
escuela, y más tarde por Roscoe Pound.
11 H. L. A. Hart sostiene, en referencia a Holmes, Pound y Ihering, que, a pesar de sus
diferencias, todos ellos lucharon contra los mismos errores con respecto a la naturaleza
del derecho, lo cual es “creer que los conceptos jurídicos son exclusivos y precisos, en el
sentido en que es posible brindar una definición completa y exhaustiva en términos de un
conjunto de condiciones necesarias y suficientes” (1970: 113).
12 Roscoe Pound fue el mayor defensor de las ideas del antiformalismo europeo durante
las décadas de 1920 y 1930, especialmente con su trabajo Interpretation of Legal History
(1967). Pound introdujo la jurisprudencia sociológica en un discurso en el American Bar
Foundation en 1906 (Pound 1904). En Duguit et ál. (1916) y Reimann (1993) se puede dar
cuenta de su admiración por autores como Gény, Lambert y Saleilles. Ver también Cohen
(1937). Llewellyn conocía muy bien el trabajo de Ihering y Ehrlich; ver, por ejemplo,
su texto A Realistic Jurisprudence (1930). Asimismo, como lo explica Duxbury (1995),
el libro The Common Law de Oliver Wendell Holmes está claramente en deuda con la
jurisprudencia histórica del siglo XIX de Savigny y Maine.
13 Con la llegada del laissez-faire hacia la segunda mitad del siglo XIX, se impuso una
nueva concepción de las decisiones judiciales –aquella basada en la deducción lógica
y el silogismo–. El formalismo jurídico se desarrolló como una reacción a lo que hacia
la primera mitad del siglo XIX se denominó el Gran Estilo, el cual se caracterizaba
por sentencias judiciales que tuvieran en cuenta el contexto, las consecuencias y las
experiencias derivadas de las decisiones jurídicas. En el formalismo jurídico se originó en
el programa y el método pedagógico instituido por Christopher Langdell en Harvard a
finales del siglo XIX.
14 Por lo general es complicado definir la esencia del pensamiento realista. Según Twining
(1985), si existe algún acuerdo entre aquellos que han estudiado este movimiento, se
referiría a su heterogeneidad y a su dispersión. Un enfoque menos crítico se encuentra en
autores como Ackerman (1984), Hunt (1978), Summers (1982). Ver también H. L. A. Hart
(1983).
15 En el artículo “The Next Step” Karl Llewellyn hace la diferencia entre “reglas escritas” y
“reglas reales”. “Lo que los funcionarios (del derecho) hacen respecto a las disputas es, a
mi parecer, el derecho mismo” (1930: 12).
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
2. La Dogmática Jurídica en Francia
2.1 El debate teórico
Durante las primeras tres décadas del siglo XX, tanto en Francia como
en Alemania, se intentó encontrar un punto medio entre el formalismo
y el antiformalismo en el derecho. Este intento fue el que dio origen a la
dogmática jurídica clásica en Francia. Entre sus principales fundadores es-
taban Léon Duguit (1889, 1922), François Gény (1899), Éduard Lambert
(1928), Marcel Planiol (1899), Henri Capitant (1898) y Louis Josserand
(1927). Todos ellos escribieron durante los años veinte y treinta, período de
rápida industrialización y creciente complejidad social, caracterizado por
una crítica del individualismo liberal y por la adopción de valores sociales
y colectivos16. En armonía con la época, estos autores se opusieron a la [ 31 ]
glorificación de la ley17 y por ello clamaron por la inclusión de las prácticas
16 Durante esta época surgió la idea de que las relaciones sociales debían basarse menos en
los principios de autonomía y responsabilidad individual, que en la noción de solidaridad
(Durkheim, 1993). Ver por ejemplo Duguit (1901) y para una visión general del período
ver Arnaud (Arnaud 1975).
17 A finales del siglo XIX en Francia, muchos pensaban que el Código Civil había envejecido;
algunos como Raymond Saleilles fueron más allá al opinar que el código representó un
“obstáculo al progreso social” (Saleilles, 1904).
18 El texto clásico es Gény (1899). En él se exponen las bases de una teoría pluralista de las
fuentes del derecho. Ver además R. Demogue (1911).
19 Para ver sus principales características, ver nota 20 supra.
20 Al comienzo del siglo XX una estancia izquierdista cobró fuerza en el continente europeo.
Los académicos de izquierda defendían los derechos sociales y las reformas jurídicas
como un paso necesario hacia el socialismo. En Alemania, estos abogados, inspirados en
Karl Marx, Friederch Engels y especialmente en Ferdinand Lasalle, tuvieron un impacto
sobre las reformas jurídicas instituidas durante la República de Weimar. Ver Lasalle
(1987, 1964), Ledford (1996), Menger (1899). Incluso algunos académicos liberales como
Gustav Radbruch y Herman Séller estaban políticamente comprometidos en favor de la
República de Weimar. En Francia, el ala de abogados izquierdistas luchaba por construir
el socialismo a través del derecho, confrontando tanto las posiciones economistas como
las antiintelectuales promovidas por Comte y Saint Louis, el marxismo de izquierda y el
movimiento obrero. Entre los juristas, Jean Jaureès, Leon Blum (Blum, 1965), Georges
Scelle (Scelle, 1929); Bouglé (1906), Lévy (1909), Hauriou (1910), Duguit (1922), Jaurès
(1972, 1964) son particularmente dignos de mención. Para un panorama general de lo que
era el movimiento, ver Herrera (2003a, 2003b, 2003c). Ellos se interesaron en la práctica
jurídica y en la doctrina, pero su movimiento era demasiado débil como para desafiar
seriamente al formalismo y al conservatismo jurídico (Israel y Mouralis, 2005).
21 El papel de la dogmática jurídica era definir estos problemas a través de una “construcción
jurídica de la realidad social” (Saleilles, 1911) o de una “libre investigación científica”
(Gény, 1899). De acuerdo con Gény (1899: 189), el juez debe tener en cuenta los “hechos de
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
derecho positivo en el que las tensiones internas del derecho son resueltas
con la ayuda de soluciones convenientes que son aplicables en la práctica
(Chevallier, 1993)22. “De acuerdo con la bien conocida tradición jurídica
francesa” –afirman Jestaz y Jamin (2004: 174)– “[la ciencia del derecho]
podría ser una ciencia inexacta, pero era una ciencia dura”23.
Con la formación de la dogmática jurídica a mediados del siglo
XX, los profesores de derecho consolidaron su posición privilegiada en el
campo jurídico francés. Una vez más, la antigua universidad europea se
convirtió en un centro intelectual destinado a estabilizar y normalizar –
como diría Foucault– el poder jurídico24. De nuevo los profesores de dere-
cho asumieron la responsabilidad de consolidar el viejo anhelo francés de
tener una fe, un soberano, una ley (une foi, un roi, une loi). Aunque la tarea
de producir un cuerpo unificado de derecho había sido ampliamente al-
canzada en el Código Civil durante el siglo XIX, fue la dogmática jurídica [ 33 ]
durante el siglo XX la que más contribuyó a esta unificación (Gazzaniga,
1994).
la vida social”, aunque tan sólo podría organizarlos y “aplicarlos a los fines deseados”. El
papel social de la justicia no difiere, en esencia, de su lugar en l’ancien régime –para ser el
guardián del orden social y económico existente, en este caso, del orden impuesto por la
burguesía (Arnaud, 1975).
22 En la fe católica, la fuente de la autoridad se encuentra en la fe de los creyentes en la Iglesia
y su liderazgo. Del mismo modo, en el derecho, la fuente de autoridad está en la creencia
en una ciencia de derecho, producida por los profesores.
23 Este fue el punto cumbre de la era de los “tratados” de derecho civil y administrativo. Un
ejemplo es el Traité pratique du droit civil français de Planiol y Ripert. Una explicación de
la importancia de estos trabajos y manuales se encuentra en Jestaz y Jamin (2004).
24 A finales de la Edad Media, la universidad ya había cumplido esta tarea de unificación
al trabajar para restaurar el derecho romano y, por esta vía, consolidar el régimen
absolutista (Anderson, 1979).
25 En el campo jurídico, el profesor de derecho público –professeur de droit administratif–
no tiene la misma reputación que su colega que enseña derecho civil. Hasta mediados del
siglo XX, el derecho público luchó por su autonomía con respecto al derecho civil.
26 Una muestra del recelo con el que los profesores de derecho cuidan este estatus se
encuentra en las reglas que determinan su selección y entrada al profesorado jurídico
(Mouly y Atias, 1993). Después de obtener su título de doctorado, los candidatos deben
aprobar un examen cualitativo conocido como l’agregation. Las características y las
dificultades de este examen lo convierten en un verdadero test del dominio de los
profesores en el área en la cual aspiran a ser contratados (Charle, 2003).
27 En 1952, por ejemplo, el prestigioso diario Archives de Philophie de Droit et de la sociologie
juridique decidió cambiar su título a Archives de Philosophie de Droit.
28 Igual que su antecesor en el cargo de editor de L’Année sociologique, Carbonnier se
formó en la Escuela francesa de Sociología Durkheimiana. Sin embargo, a diferencia
de Gurvitch, cuyos estudios en sociología jurídica no tuvieron mayor impacto en las
facultades de derecho, los escritos de Carbonnier, y en especial sus manuales, todavía se
estudian hoy día.
29 Un proyecto similar fue creado en Italia bajo el liderazgo de Renato Treves, un
prestigioso profesor de derecho que luchó contra el fascismo y el formalismo jurídico y
fue considerado como una figura líder en la sociología jurídica en Italia en el siglo XX.
Su proyecto difirió de la iniciativa francesa en el sentido de que se ocupó en los jueces
en lugar de la legislación. Surgió la propuesta de un nuevo juez, uno que fuera capaz de
interpretar el derecho a través de las ciencias sociales (Odorisio et ál., 1970). Las ideas
de Treves fueron una fuente de inspiración para la Magistratura Democrática, y un
movimiento antifascista de jueces que defendieron el derecho alternativo y el activismo
judicial progresista. El Derecho alternativo que se desarrolló en Latinoamérica durante
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
No obstante, la recepción de la sociología en las facultades de dere-
cho es algo bastante excepcional en la historia contemporánea de dichas
facultades, lo cual se explica ampliamente por la figura de Jean Carbon-
nier. El hecho de que él fuera un gran autor de tratados de derecho ci-
vil antes de convertirse en sociólogo del derecho, le permitió evadir las
típicas críticas que los juristas les hacían a los sociólogos del derecho,
según las cuales estos carecen del conocimiento jurídico necesario para
opinar sobre el derecho. Adicionalmente, Carbonnier compartió el espí-
ritu conservador de sus colegas, haciendo de la sociología una especie de
“sirvienta del derecho” –dirigida a realzar la capacidad y el impacto de la
legislación–, despojada así de autonomía o de potencial crítico (Commai-
lle, 1983, 1989, 2003).
Con el ánimo de despolitización que irrumpió en los años ochenta,
los estudiosos del derecho avistaron una nueva oportunidad para reforzar [ 35 ]
la autonomía del derecho. Una vez más, los profesores de derecho fueron
capaces de consolidar la dogmática jurídica, así como sus propias posicio-
los años sesenta se inspiró principalmente en este movimiento italiano (Oliveira, 1991;
Souza, 2001).
30 Para una crítica de esta subordinación de la sociología, ver Commaille (1983).
31 Para más información, ver Bowen y Bentaboulet (2002: 539), Cuin y Gresle (2002).
32 León Duguit dijo a comienzos del siglo XX que la sociología estaba formada por dos
componentes esenciales: el derecho y la economía política.
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
conocimiento estrictamente jurídico y técnico del derecho público –que
hacía falta en la ciencia política (Chevallier, 1997; François, 2002)– con el
objeto de mostrarse como algo diferente y de esta manera justificarse como
disciplina autónoma.
A principios de los años setenta, el concours d᾽agrégation –el exa-
men de admisión de profesores a la escuela de derecho– en droit public et
science politiques (derecho público y ciencia política) –uno de los tres tipos
de agrégation33– se dividió en dos concursos diferentes: uno en derecho pú-
blico y otro en ciencia política. De ahí en adelante los profesores de derecho
público se vieron forzados a desarrollar su propia justificación como grupo
disciplinario autónomo, separado de la ciencia política. Como resultado
de esta división de disciplinas, surgieron en Francia dos sociedades de ex-
pertos en derecho público. El grupo tradicional, compuesto por abogados
graduados de las facultades de derecho y que trabajaban como asesores [ 37 ]
jurídicos o practicantes de derecho en el sistema judicial, y el abogado de
derecho público formado en ciencia política y preparado para trabajar en
33 Además de las agregaciones en derecho privado e historia del derecho. La división en tres
tipos fue introducida en 1898.
34 Según Mouly y Atias (1993), la atracción del saber jurídico “viene de la posibilidad de
desarrollar actividades paralelas sin perder la seguridad obtenida por tener el status de ser
un funcionario civil”.
35 Según Mark Kelman (1987), cuando los profesores de derecho escriben historia,
señalan al realismo jurídico como la división jurisprudencial entre el antiguo orden y la
modernidad. Ver también Minda (1995).
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
solver problemas y para expandir el papel del Estado de bienestar” (Kal-
man 1996: 17). De acuerdo con Edward Robinson (1934: 266), los realistas
fueron capaces de imponer la idea de que era necesario convertir a los abo-
gados en ingenieros sociales, los cuales podían aplicar métodos generales
y científicos “sobre un rango amplio de soluciones prácticas a problemas
sociales”. Al hacerlo, “pusieron su fe en la utilidad de la ciencia social” (Ro-
binson, 1934: 266) y adaptaron el pensamiento jurídico a un ambiente de
cambio político en el que el Estado debía asumir un papel mucho más ex-
plícito (Ackerman, 1984). Según este punto de vista, autores como Pound
y Robinson quisieron utilizar “otras formas de conocimiento social para
mantener el predominio del derecho” (Robinson, 1934: 266)36. Es cierto que
existió una tendencia crítica y relativista en el realismo jurídico, pero ella
resultó ser incompatible con el punto de vista progresista del derecho y la
política que finalmente predominó dentro del movimiento (Peller, 1985)37. [ 39 ]
La estrategia de los realistas para intervenir en los asuntos sociales
y valorizar el derecho tuvo implicaciones importantes para la concepción
36 Según Dezalay, Sarat y Silbey (1989), los realistas modernizaron la imagen del derecho y
restauraron parte de su legitimidad. También tuvieron éxito en integrar abogados judíos
–hasta ese momento excluidos del establecimiento WASP– quienes abrieron nuevos
campos para la práctica jurídica.
37 Según Dezalay, Sarat y Silbey (1989: 100), los realistas “nunca pusieron en tela de juicio las
asociaciones especiales de la academia jurídica con el poder público”.
38 El positivismo jurídico, sin embargo, no siempre prosperó en Francia y los países vecinos.
El mejor ejemplo es probablemente lo que se llamó la escuela de teoría jurídica de Bruselas
bajo el liderazgo de François Ost y Michel van de Kerchove (1978, 1987).
39 Para una explicación general ver Abel (1995), Munger (1998), Sarat (2004), Trubek (1990).
Para un punto de vista crítico ver Friedman (1989), García-Villegas (2003).
40 La idea de crear un derecho más adaptable a los problemas sociales y más efectivo a la hora
de resolverlos tuvo gran fuerza en la Universidad de Wisconsin durante los años cincuenta,
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
fue reordenado en torno a lo social como terreno para una intervención
gubernamental efectiva”. El movimiento Derecho y Sociedad surgió así “en
el cenit de la concepción del derecho como acción del Estado, tanto en el
plano nacional como en el internacional” (Tomlins, 2000: 955)41.
Al inicio de los años ochenta, con el renacimiento de las ideologías
conservadoras y el consecuente desmantelamiento de la política social,
terminó la alianza entre el gobierno y los académicos liberales y se debi-
litó la concepción instrumentalista defendida por el movimiento Derecho
y Sociedad. Es entonces cuando la apertura del derecho hacia las ciencias
sociales dirige su mirada a la economía y da pie al movimiento Derecho
y Economía, percibido por muchos académicos como “la única ruta se-
gura para la promoción y ejercicio del derecho” (McCloskey, 1988: 765).
Durante las últimas tres décadas y gracias a su afinidad política con las
nuevas tendencias neoliberales e individualistas, el movimiento Derecho y [ 41 ]
Economía ha podido capturar la parte más importante del mercado jurí-
dico y utilizar la fuerza de la “ingeniería social” del derecho a favor de una
43 Ver, por ejemplo, lo que Jean-Claude Passeron (1992, 57- 58) explica sobre la relación
entre sociología e historia, gobernadas por la disciplina más que por los intereses
epistemológicos. Para el caso del derecho, ver Bancaud y Dezalay (1984), Commaille y
Perrin (1985).
44 No obstante, existe un extenso debate en Francia sobre el sistema universitario, en el cual
las referencias a los sistemas alemán y norteamericano se encuentran siempre presentes.
Una clara ilustración de ello a finales del siglo XIX se puede encontrar en Brunetière
(1897), Marchis (1914). Para una ilustración más reciente, ver Charle (2003). El sistema
universitario en Alemania es, en principio, descentralizado, pero está condicionado por
algunos requerimientos del Estado: por ejemplo, el Estado organiza los concursos para
obtener vacantes universitarias. En Alemania la fortaleza en habilidades de investigación
es un privilegio y se juzgan en términos de publicaciones, mientras que en Francia
el aprendizaje retórico y pedagógico es un historial favorecido para la entrada a una
educación superior (Becker, 1925; Charle, 2003; Von Humbolt, 1979).
45 En Francia, esta comprensión del contenido académico se origina en la relación estrecha
entre los programas de secundaria y la universidad. Hasta hace poco, los profesores
universitarios enseñaron en secundaria. La formación en filosofía y en ciencias sociales
se entendió como el trabajo académico de las escuelas de secundaria. Esta es la razón del
extraordinario prestigio de la École Normale Supérieur. Por sus puertas pasaron grandes
intelectuales franceses como Durkheim, Sartre, Simón de Beauvoir y otros semejantes.
Hasta finales de los años cincuenta, los temas en sociología y antropología eran dominio
de los filósofos.
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
profesores ingresan a la facultad a enseñar un curso básico, obligatorio y
estrictamente jurídico, pueden dictar los seminarios que ellos propongan,
casi sin ninguna restricción. Esto se debe, en gran parte, al hecho de que
en Estados Unidos el derecho se diseñó como un programa de posgrado,
lo cual no solamente se traduce en más flexibilidad en el contenido de los
cursos, sino también en contenidos más interdisciplinarios, dado que los
estudiantes vienen de programas de diferentes disciplinas.
De otra parte, el Estado se involucra mucho menos en el diseño de la
educación superior, lo cual se encuentra asociado a un mayor dinamismo y
participación de las organizaciones sociales. Este fenómeno norteamerica-
no, conocido como asociacionismo46, está ligado a la participación de fun-
daciones en la financiación a la investigación universitaria como resultado
de la noción pragmática según la cual la investigación debería apuntar a
alcanzar resultados útiles para toda la sociedad47. De esta manera, surgió [ 43 ]
un sistema universitario competitivo y jerárquico en el que las universida-
des son clasificadas (ranked) de acuerdo con su disponibilidad de recursos.
ello. En Europa, las divisiones lingüísticas y nacionales no han permitido una mejora
sustancial de este recurso. Ver Tenenbaum (1994: 57).
49 Aunque los juristas ingleses de los siglos XVII y XVIII rechazaron las categorías
fundamentales del derecho romano, sí aceptaron su concepción analítica, procedimental
y antisistémica personificada en el jurisconsulto romano (Roman legal advisor), el cual dio
significado a la práctica jurídica (Jestaz y Jamón, 2004).
50 Ver la edición especial del Yale Law Review (No. 90, 1981) titulada “Yale Law Journal
Symposium on Legal Scholarship: Its Nature and Purposes”. Ver también André Tunc
(1994).
Tr a d i c i o n e s , s a b e r e s y a c t o r e s . . .
sociales dependen de sus dividendos. La mayoría de las oportunidades
que ofrece el campo jurídico se asocian con los “recursos que los abogados
tienen para manipular e interpretar el mundo exterior” (Garth y Sterling
1998, 410). Por esta razón, la competencia entre los jueces, los abogados
y los profesores es con frecuencia menos importante que la competencia
entre las facultades de derecho51.
No obstante, a diferencia de Francia, el hecho de que la posición
dominante del juez nunca haya sido cuestionada en los Estados Unidos
ha dado mayor estabilidad al campo jurídico. La victoria de los profesores
y su doctrina en Francia fue, en gran parte, el resultado de la debilidad
de los jueces durante y después de la Revolución Francesa, y la de la ad-
ministración pública y los legisladores durante las primeras décadas del
siglo. XX. Empleando el marco analítico de Thomas Kuhn (propuesto en
La estructura de las revoluciones científicas), el campo jurídico francés, a [ 45 ]
diferencia del estadounidense, se caracterizó por cambios importantes de
paradigmas, que llevaron a la inestabilidad de sus miembros y a la incer-
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1 Para solicitar la inscripción como abogado se debía acreditar: “i) haber obtenido título
de “doctor o licenciado en Derecho o jurisprudencia de una Facultad o Universidad
privada colombiana que haya existido con anterioridad a esta ley; o en Instituto, Facultad
o Universidad extranjera de reconocidas fama y notoriedad, cuando quiera que el título
correspondiente haya sido expedido a favor de un ciudadano colombiano, con anterioridad
a esta ley", y ii) ejercido la profesión de abogado de manera "honorable y competente", por
un término no menor de cinco años, antes de la vigencia de la ley”. Corte Constitucional.
Sentencia C-1053 de 2001. M.P. Alvaro Tafur Galvis
2 Hernando Devis Echandia define el derecho de postulación como: “el que se tiene para
actuar en los procesos, como profesional del derecho, bien sea personalmente en causa
propia o como apoderado de otra persona.
… No se trata de disminuir la capacidad para comparecer a procesos, sino de reglamentar
el ejercicio de ella en defensa de los mismos interesados y de la profesión de abogado que
por su contenido social, merece esa protección.” Devis Echandia, Hernando. Compendio
de Derecho Procesal. Teoría General del Proceso. Tomo I. Editorial ABC. Bogotá. 1996.
Pág. 389.
3 Corte Constitucional. Sentencia C-1053 de 2001. M.P. Alvaro Tafur Galvis
4 Ibíd.
5 Entre 1970 y 1980 se expidieron más de 15 decretos sobre la materia. Algunos de ellos son
los decretos 970, 1390 y 1391 de 1970, 1189, 1129, 1837 y 2670 de 1974, 0118, 0225, 0765,
1018 de 1977, 2354 de 1978, 2189 y 3200 de 1979 y 2022 de 1980.
6 El artículo 2 del decreto 1277 de 1973 enunció la documentación requerida: a) Acta
de fundación de la entidad solicitada; b) Copia de los estatutos que definan y objetivos
de la entidad, que definan sus órganos de gobierno, junto con sus funciones, y que
contengan la conformación de su patrimonio; c) Copia del plan de desarrollo, el cual
debe responder a las necesidades del país y de la región donde se propone actual el
respectivo establecimiento; d) Nombre, identificación y currículum vital del respectivo
representante legal y del rector, si las personas fueren distintas; y e) Certificación bancaria
de que la entidad dispone de recursos monetarios suficientes para garantizar la iniciación
y funcionamiento del establecimiento.
7 El artículo 1 del decreto 1189 de 1974, señaló los requisitos para la obtención de la licencia
La profesión jurídica en Colombia
básicas; 6. A partir del cuarto año, tener consultorio jurídico con director de tiempo
completo y tres monitores para las áreas civil, penal y laboral”. Artículo 4, ibíd.
9 “1. Veinticinco por ciento del profesorado, de tiempo completo de acuerdo con contrato
de trabajo; 2. Biblioteca jurídica no inferior a cinco mil títulos de los cuales el cincuenta
por ciento debe referirse a materias básicas; 3. Cursos de intensificación y especialización
de acuerdo con las normas legales vigentes y profesorado de tales cursos con título
de especialización o al menos diez años de experiencia como profesor de universidad
legalmente reconocida, en su respectiva materia; 4. Departamento de investigaciones
sociojurídicas”. Artículo 6, ibíd.
10 Así por ejemplo, aumentó el porcentaje de docentes vinculados de tiempo completo de
un 20% –según el decreto derogado– a un 25%, se especificaron las calidades requeridas
para ser docente, se incluyeron los cargos de síndico y de director de biblioteca, y se hizo
exigible desde el inicio la proyección de los programas de las materias, entre otros. Los
últimos dos requisitos en el decreto anterior eran parte de los requisitos exigidos para la
obtención de la licencia de funcionamiento. Ver decretos 3200 de 1979 y 1189 de 1974.
11 Artículo 5, literal b) del decreto 3200 de 1979.
12 Artículo 7, ibíd.
16 Así por ejemplo, exige que la facultad cuente con un director del centro de investigaciones
sociojurídicas con vinculación de tiempo completo y dos investigadores de tiempo
parcial, con un centro de publicaciones, con jefes de área de estudio con vinculación
de tiempo parcial como mínimo; a pesar de que no se señala un número determinado
de libros que deba poseer la biblioteca, como se hacia en el decreto 3200 de 1979, si se
establece que la institución debe destinar como mínimo el 2% de los ingresos anuales del
programa a la adquisición de libros y revistas. Ver decreto 1221 de 1990.
17 Fuentes Hernández, Alfredo. 2005. “Educación legal y educación superior en Colombia:
desarrollos institucionales y legales 1990-2002”. En revista: Sistemas Judiciales
No. 9. Tomado de: http://www.cejamericas.org/sistemas-judiciales/tema_central.
php?revista=9&idioma =espanol&secc=371& TemaNiv2=371. Noviembre 2 de 2007.
34 Decreto 1403 del 21 de Julio de1993. Derogado por el decreto 2566 de 2003.
35 Según el artículo 1 del decreto 1403 de 1993, para los programas de pregrado la
información requerida era: a) Nombre del programa; b) Título a expedir; c) Perfil
profesional y ocupacional; d) Plan de estudios; e) Duración; f) Estrategia metodológica;
g) Jornada; h) Periodicidad en la admisión; i) Justificación del programa; j) Convenios
para apoyar particularmente el programa; k) Otros programas que ofrecía la institución;
l) Recursos específicos para desarrollar el programa, en cuanto a: número de aulas
previstas, laboratorios y equipos, lugares de práctica, recursos bibliográficos y de
hemeroteca, y ayudas educativas; m) Personal docente especifico para el desarrollo del
programa, indicando el número de docentes de tiempo completo y medio tiempo y niveles
de formación; n) Número de estudiantes para el primer periodo académico; y ñ) Recursos
financieros específicos para el programa. Por su parte el artículo 2 dispuso que para la
creación los programas de especialización además de los ítems señalados anteriormente,
se debía precisar y determinar aspectos relativos a: a) Las políticas investigativas; b)
Tradición investigativa en el área del programa; c) Líneas y áreas de investigación para el
programa; d) Publicaciones de los docentes en el área del programa o áreas afines en los
últimos tres años; e) Financiación y administración de la investigación en el programa; y
f) Convenios institucionales y requisitos de ingreso y egreso para el programa.
36 Artículo 3, ibíd.
37 Artículo 6, ibíd.
38 Ibíd.
39 Artículo 4, ibíd.
40 Artículo 1. Decreto 2904 de 1994.
41 “Para la autoevaluación, la institución partirá de su propia definición de su misión y
proyectos educativos y utilizará los instrumentos que para efecto adopte el Consejo
Nacional de Acreditación”. Art. 5, ibíd.
42 “…asignados por el Consejo Nacional de Acreditación, estos aplicarán los criterios,
instrumentos y procedimientos adoptados por dicho Consejero”. Art. 6, ibíd.
45 Algunos de estos decretos fueron: 797, 917 y 2802 de 2001, 936, 937, 938, 939 y 940 de
2002.
46 El artículo 1 del decreto 2802 de 2001 señaló: “Información sobre el programa. Con la
finalidad de que los programas académicos de pregrado en Derecho cumplan condiciones
básicas de calidad para su ofrecimiento y funcionamiento, las Instituciones de Educación
Superior dispondrán y aportarán, de acuerdo con el procedimiento establecido en este
Decreto, información que se refiera a los resultados académicos, medios y procesos
empleados, infraestructura institucional, dimensiones cualitativas y cuantitativas
y condiciones en que se desarrolla el programa académico en la institución. Para el
efecto, allegará la siguiente documentación relativa a: a) Justificación del programa;
b) Denominación académica del programa; c) Aspectos curriculares básicos; d)
Organización de las Actividades Académicas; e) Formación Investigativa; f) Proyección
social; g) Sistema de selección; h) Sistemas de evaluación; i) Personal docente; j) Dotación
de medios educativos; k) Infraestructura física; l) Estructura académico-administrativa;
m) Autoevaluación; n) Egresados; o) Bienestar universitario; p) Publicidad del programa.”
47 Artículo 18, ibíd.
48 “Condiciones mínimas de calidad. Para obtener el registro calificado, las instituciones
de educación superior deberán demostrar el cumplimiento de condiciones mínimas
de calidad y de las características específicas de calidad. Las condiciones mínimas de
calidad son las siguientes: 1. Denominación académica del programa; 2. Justificación
del programa; 3. Aspectos curriculares; 4. Organización de las actividades de
conocimientos teóricos y demuestren que facilitan las metas del proceso formativo. 5.
La adecuada formación en investigación que establezca los elementos esenciales para
desarrollar una actitud crítica, la capacidad de buscar alternativas para el desarrollo del
país. 6. La adecuada relación, efectiva con el sector externo, que proyecte a la universidad
con la sociedad. 7. El fortalecimiento del número y calidad del personal docente para
garantizar, de una manera adecuada, las funciones de docencia, investigación y extensión.
8. El uso adecuado y eficiente de los medios educativos de enseñanza que faciliten el
aprendizaje y permitan que el profesor sea un guía y orientador y el estudiante sea
autónomo y participante. 9. La garantía de una infraestructura física en aulas, bibliotecas,
auditorios, laboratorios y espacios para la recreación y la cultura, que permitan la
formación integral de los estudiantes como ciudadanos de bien y garanticen la labor
académica.
178
160
140 148
120 IES
100
80 Programas
72
60 54 63
32 32 38
40
32 32
20 27 27
11
0
Año 1949 Dec. 1189 Dec. 3200 Dec. 1221 Ley 30 de Dec. 2802 Dec. 2566
de 1974 de 1979 de 1990 1992. de 2001 de 2003
L
[ 83 ]
a finalidad de este escrito es invitar a la re-
Directora Centro de
flexión en torno a los procesos de acreditación
Investigaciones y Estu-
que actualmente se adelantan en el país, con el ob-
dios Socio-Jurídicos y
jetivo de que las divergencias y el intercambio de
docente titular Facultad
miradas contribuyan a una depuración del sistema,
de Derecho Universi-
de tal forma que, respetando el principio constitu-
dad de Nariño.
cional de autonomía universitaria y el ejercicio de
la capacidad de intervención y control que el cons-
tituyente primario le reservó al Estado sobre los
servicios públicos educativos, sean la autorregula-
ción de las instituciones educativas, la validación
de la comunidad académica nacional e interna-
cional, pero fundamentalmente el reconocimiento
social, los que aseguren la calidad de la educación
superior en Colombia.
La preocupación por la calidad del sistema
educativo nacional, si bien no es nueva, ha tomado
un renovado interés a raíz de los procesos de inter-
nacionalización de todos los ámbitos de la vida. Es
claro que en la actualidad las instituciones de edu-
cación son continuamente evaluadas por los Esta-
dos, por los pares y especialmente por los usuarios
de dichos servicios, generando un mercado educa-
1. Fundamentos normativos
En el año de 1990 hizo crisis el decreto 80 de 1980 después de regular du-
rante diez años la educación superior. Su inoperancia se hizo evidente al
observar que su articulado no respondía a las urgencias de la nueva socie-
dad del conocimiento, a las demandas crecientes de una colectividad que
aspiraba a ingresar a la educación de tercer nivel y a una realidad que ya se
percibía interconectada a los mercados internacionales. Por eso, la razón
que se argüía con mayor fuerza era la necesidad de mejorar la calidad de
los programas de pregrado e incursionar con niveles de excelencia acadé-
mica en la formación posuniversitaria.
La coyuntura generada por la Asamblea Nacional Constituyente
permitió, gracias a la participación de delegados de las universidades y del
gremio docente universitario, que en la Carta Política de 1991 se consagra-
ran principios como la autonomía universitaria, la libertad de cátedra, de
enseñanza, de aprendizaje y de investigación. Así mismo, el constituyente
hizo referencia al compromiso del Estado Social de Derecho con la cali-
dad y pertinencia de la educación colombiana; a estos aspectos se refie-
ren los artículos 27, 68 y 69. Estos postulados deben conjugarse de manera
Acreditación y calidad...
fundamento en tres proyectos de ley presentados, en su orden, por el Icfes,
las organizaciones gremiales de docentes y el sector parlamentario, el Con-
greso de la República expidió la ley 30 de 1992, conocida como el estatuto
orgánico de la educación superior en Colombia, en la cual se desarrollaron
los mandatos constitucionales de autonomía, vigilancia y control y acredi-
tación, en los siguientes términos:
“El Estado, de conformidad con la Constitución Política de Colombia y con
la presente ley, garantiza la autonomía universitaria y vela por la calidad
del servicio educativo a través del ejercicio de la suprema inspección y vigi-
lancia de la Educación Superior”1
[ 85 ]
Para el legislador, entonces, autonomía, calidad e inspección y vi-
gilancia son derechos y deberes que, lejos de oponerse, están llamados a
Acreditación y calidad...
• Guía para la renovación para la acreditación de pregrado, 2001.
• Lineamientos para la acreditación institucional serie Documentos
CNA No. 2 de 2001.
• Lineamientos para la acreditación de programas, 2003.
• Autoevaluación con fines de acreditación de programas de pregra-
do. Guía de procedimiento CNA 03 de 2003.
• Guía para la evaluación de pares, 2006.
Acreditación y calidad...
1994 apareció la figura de la acreditación previa, como un proceso obliga-
torio de control de calidad, al cual debían someterse todos los programas
de educación vigentes o que se crearan en el futuro. El argumento fuerte
para entronizar este esguince se relacionó con la dudosa calidad de muchos
programas de educación y la responsabilidad social que ellos conllevaban
dado que se trataba de los centros formadores de los maestros.
En tal sentido, la acreditación previa tenía sus propias peculiarida-
des que se enuncian a continuación:
• Respecto a la calidad, la acreditación previa era un punto de parti-
da que solo constataba que los programas de educación cumplían
con requisitos mínimos de calidad, cuyos índices deberían acre-
[ 89 ]
centarse con el transcurrir del tiempo hasta acceder a la acredita-
ción voluntaria.
4. El registro calificado
Una vez cumplido el objetivo de la acreditación previa para los programas
de educación, el Ministerio de Educación Nacional evaluó la experiencia
como exitosa y en consecuencia, lejos de abolirla, la adecuó e implementó
Acreditación y calidad...
la norma exige también la observancia de otros acápites cuya responsabi-
lidad le compete a la institución educativa. Estos puntos se relacionan con
los procesos de ingreso de estudiantes, la estructura administrativa de la
universidad, el seguimiento a egresados, las condiciones de bienestar, la
solvencia económica y la existencia de la cultura de autoevaluación.
En consecuencia, los procesos de autoevaluación deben realizarse
de conformidad con los parámetros institucionales y programáticos, antes
mencionados, los mismos servirán de fundamento para la visita de com-
probación por parte de los pares, para cuyo efecto el representante legal de
la institución debe solicitar al Ministerio de Educación Nacional el registro
calificado, anexando toda la documentación requerida. El ministerio da [ 91 ]
inicio a la evaluación externa designando los pares académicos, los cuales
son escogidos del listado de académicos e investigadores colombianos que
podrán darse sus directivas y regirse por sus propios estatutos, de acuerdo
con la ley (art. 69).
En consecuencia, el Ejecutivo, en cumplimiento de la facultad re-
glamentaria, puede proferir los decretos, resoluciones y órdenes que se
necesiten para la ejecución de dichas leyes y, así mismo, ejercer la inspec-
ción y vigilancia de la enseñanza. Es decir, toda actividad gubernamental
debe practicarse en el marco legal porque ni la potestad reglamentaria ni la
competencia de inspección y vigilancia lo autorizan para reglamentaciones
autónomas o independientes.
Así las cosas, la Corte encuentra que la norma demandada es con-
traria a la Constitución, al otorgarle al gobierno la regulación del registro
calificado, los estándares mínimos de calidad y las pruebas de estado. De
igual manera, que en el ejercicio de dicha competencia se han proferido
varias normativas, de donde una declaratoria de inexequibilidad de efec-
to inmediato causaría un impacto negativo en un tema tan delicado como
la calidad cuya responsabilidad le corresponde al Estado, dando origen a
un vacío normativo inconveniente. En cambio, sostener un tiempo adi-
cional la norma demandada no sería tan gravoso, puesto que, lo que se
puso en tela de juicio fue la competencia regulativa en temas educativos
y no el contenido de dichas disposiciones, más aún cuando se trata de un
proceso participativo.
Acreditación y calidad...
En el año 2007 se demanda una vez más el artículo 8 de la ley 749
de 2002, pero ahora la inconformidad recae en la parte final del texto que
dice: “El Gobierno Nacional reglamentará: el registro de programas acadé-
micos, los estándares mínimos, y los exámenes de calidad de los estudiantes
de educación superior, como herramientas de medición y evaluación de ca-
lidad e instrumentos de inspección y vigilancia de la educación superior”4,
aspectos que deben tener regulación legal.
Con las argumentaciones jurídicas antes relacionadas, concluye la
Corte determinando que:
[…] la habilitación que consagra el artículo 8 de la Ley 749 de 2002 para
que el Gobierno Nacional reglamente en su totalidad lo relacionado con el [ 93 ]
registro de programas académicos, los estándares mínimos y los exámenes
de calidad de los estudiantes de educación superior, como herramientas de
Referencias
Constitución Nacional.
Decreto 2904 del 31 de diciembre de 1994.
Decreto 272 de 1998.
Consejo Nacional de Acreditación. Lineamientos para la acreditación, Au-
toevaluación con fines de acreditación, Evaluación externa con fines de
acreditación, Guías para la acreditación, Lineamientos institucionales.
Documentos Consejo Nacional de Acreditación 1998-2006.
Acreditación y calidad...
Ley 115 de 1994.
Ley 1286 de 2009.
Sentencia C-852 de 2005 Corte Constitucional
Sentencia C-782 de 2007 Corte Constitucional.
García, Mauricio et ál. 2000. Teoría de la Constitución. Lecturas. Partes I y II.
Bogotá: Universidad Nacional de Colombia.
Goyes Moreno, Isabel y Mireya Uscátegui. 2000. Escenarios posibles de la edu-
cación. Bogotá: Ascun, El Espectador.
Goyes Moreno, Isabel y Mireya Uscátegui. 2004. Incidencia de la acreditación [ 95 ]
de programas en los currículos universitarios. Pasto: Universidad de Na-
riño.
por
Freddy E ste artículo hace una descripción cuantitativa
de la evolución de las facultades de derecho
desde 1960 hasta 2006, con especial énfasis en el
[ 97 ]
Alexánder
Salamanca período 1994-2006, en el cual se presentó un au-
mento significativo de las facultades y programas
Ramírez
de derecho, acompañado del consecuente creci-
miento cuantitativo de estudiantes de derecho,
egresados y graduados.
La descripción cuantitativa del crecimiento
de los programas de derecho desde 1960 hasta 2006
se hace teniendo en cuenta los siguientes factores:
evolución de programas de pregrado en derecho,
de Instituciones de Educación Superior (IES), po-
blación estudiantil, solicitudes, cupos, alumnos
matriculados en primer curso, egresados y gradua-
dos (según la pertinencia, se discrimina dicha in-
formación por regiones o departamentos).
El estudio se basa en documentos publica-
dos por el Instituto Colombiano de Fomento para
la Educación Superior (Icfes), los cuales se conocen
como “Estadísticas de la Educación Superior”. Es-
tos documentos recogen los informes suministra-
perior (IES). Ahora bien, casi todas las IES dejaron de suministrar, por lo
menos en un año, la información requerida por el Icfes o por el Snies. Esta
situación implica que los informes no son completos. Por eso fue necesario
hacer los cálculos estadísticos para llenar la información faltante2.
Como el objetivo del trabajo es realizar un análisis cuantitativo des-
de una perspectiva histórica, hemos definido tres períodos para el análisis
3 Entre 1970 y 1980 se expidieron más de 15 decretos sobre la materia. Algunos de ellos son:
970, 1390 y 1391 de 1970, 1189, 1129, 1837 y 2670 de 1974, 0118, 0225, 0765, 1018 de 1977,
2354 de 1978, 2189 y 3200 de 1979 y 2022 de 1980.
4 Algunas de las normas que han regulado estas materias son los decretos: 1403 de 1993,
837 y 2790 de 1994, 1225 de 1996, 807 de 2000, 2802 de 2001 y 2566 de 2003; este último
derogó todos los anteriores y a su vez estableció los estándares mínimos de calidad para la
obtención del registro calificado de los programas de educación superior.
5 Algunos de estos decretos fueron: 797, 917 y 2802 de 2001, 936, 937, 938, 939 y 940 de
2002.
gráfico 5.1. IES por municipio 1974 IES por municipio 1974
12 11
10
8
IES
6
4 4 4
2 2 2 2
1 1 1 1 1 1 1
[ 103 ]
la
es
ga
li
ta
ia
lu
ir
en
st
lí
yá
Ca
en
al
il
go
cu
an
el
re
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ag
pa
qu
iz
m
Cú
Bo
m
ed
Pe
Ar
Po
an
rt
an
ra
M
Ca
M
ca
rr
Bu
Ba
Municipio
13 A continuación se señalan las universidades que fueron creadas durante este período
–con su nombre actual– y el año en que empezó a funcionar el primer programa de
derecho de estas IES. Universidad de Medellín –1950–, Universidad de Caldas –1950–,
Universidad La Gran Colombia –1954–, Universidad Incca –1955–, Universidad Santiago
de Cali –1958–, Universidad Autónoma Latinoamericana –1966–, Universidad de los
Andes –1968–, Corporación Universitaria de la Costa –1970–, Universidad Católica
de Colombia –1970–, Universidad de San Buenaventura –1970–, Unidad Central del
Valle –1971–, Fundación Universidad Autónoma de Colombia –1971–, Universidad
Simón Bolívar –1972– Universidad de Manizales –1972– y Universidad Autónoma de
Bucaramanga –1973–.
14 14
12
10
No. de IES
[ 104 ]
8
6
Los abogados en Colombia
5
4 4
3
2 2 2
1 1 1 1 1 1 1 1
0
tá
la
li
es
ga
ta
ia
a
lu
ir
en
rí
st
lí
yá
Ca
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Bo
m
ed
on
Pe
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an
Po
rt
an
ra
M
M
Ca
M
ca
rr
Bu
Ba
Municipio
tabla 5.1. Número de IES que ofertan pregrado en derecho por año: 1993-2007.
Año IES
1993 32
1994 39
1995 44
1996 44
1997 48
1998 50
1999 53
2000 56
2001 63 [ 105 ]
2002 63
2. Programas de derecho
Es necesario diferenciar entre programas de derecho e IES que ofrecen
derecho. Ello debe hacerse por dos razones: la primera porque las IES tie-
nen la posibilidad de ofrecer programas en municipios diferentes a los de
su domicilio principal, lo cual se realiza bajo la modalidad de programas
de extensión, programas ofrecidos por seccionales, programas hechos por
convenios entre IES o por programas fruto de contratos con entidades te-
rritoriales. La segunda porque también existe la posibilidad de que una IES
ofrezca la carrera de derecho en diferente jornada, y de esta forma existen
dos programas de la IES en el mismo municipio.
IES.
Como consecuencia de la ley 30 de 1992, desde 1994 esta relación
de crecimiento –uno a uno– entre IES y programas se perdió. Lo anterior
se debió a que, a partir del uso del artículo 120 de la ley 30, las IES crearon
programas de extensión, seccionales y celebraron convenios entre IES. He-
cho que provocó que de seis programas de extensión existentes para 1993
se pasara a más de 100 en 2007; en términos cuantitativos, para 2007, en
promedio cada IES tenía casi 2,5 programas de pregrado de derecho. En la
* A pesar de que aparecen 54 programas, no se presentó un aumento real de estos en comparación a los 38 pro-
gramas de 1990. El aumento es consecuencia de un cambio metodológico en la presentación de los informes por
el Icfes a partir de 1991. Antes de este año se presentaban los programas sin discriminar jornada.
3.2. Programas
Otro es el panorama si el crecimiento de la oferta de estudios de derecho se
analiza a partir de los programas y no de las IES. A pesar de que las IES de
origen oficial representan casi el 30% del total de IES que ofrecen progra-
mas de pregrado en derecho, este porcentaje se ve drásticamente reducido
si contrastamos la participación de los programas ofrecidos por las IES de
origen oficial con el total de programas de derecho a nivel nacional, puesto
[ 108 ] que, de los 178 programas de derecho que existían a nivel nacional en 2007,
solo el 15,73% son de origen oficial y el 84,37% son de carácter privado (ver
Los abogados en Colombia
tabla 5.4).
150
100
50
0
1974
1975
1980
1981
1982
1984
1985
1986
1987
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2007
Años
[ 109 ]
Tendencias de crecimiento de los programas
Gráfico 5.4. Tendencias de crecimiento de los programas de derecho
de derecho
178
150
Sin jornada
100
Con jornada
50 32 55 53
38 38
0
1974 1986 1993 2007
Año
100
50
0
1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
Diurno 34 35 34 42 48 51 58 55 57 71 93 96
Nocturno 20 19 19 24 27 27 31 34 36 42 55 51
[ 110 ]
Diurno Nocturno
Los abogados en Colombia
0
1992 1997 2002 2007
programas
programas
programas
municipios
municipios
municipios
municipios
ies
ies
ies
ies
Departamento
antioquia 5 4 1 10 6 2 19 14 9 32 17 14
arauca 1 1 1 1 1 1
atlántico 9 5 1 8 5 1 9 6 1 9 7 1
bogotá 19 14 1 28 20 1 34 24 1 32 26 1
bolívar 1 1 1 4 3 1 4 3 1 10 6 1
boyacá 2 2 1 6 4 2 6 4 3
caldas 2 2 1 2 2 1 3 2 1 2 2 1
caquetá 1 1 1 2 2 1
casanare 1 1 1
[ 111 ]
cauca 1 1 1 1 1 1 2 2 1 5 3 2
cesar 4 2 1 4 3 1
Crecimiento
Gráfico 5.7. Crecimiento de programas
de programas por regionespor regiones.
80
70
Programas
[ 112 ] 60 Andina
50 Atlántica
Los abogados en Colombia
40 Pacífica
30 Llanos y Amazonia
20
Bogotá
10
0
1992 1997 2002 2007
Años
ráfico 5.8. Evolución del total de solicitudes para estudiar pregrado en derecho.
GEvolución del total de solicitudes para estudiar pregrado en [ 113 ]
1974-2002 derecho. 1974 - 2002
30.000
25.000
20.000
15.000
10.000
5.000
0
1974
1975
1976
1977
1978
1979
1980
1981
1982
1984
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
Años
16 Ibíd.
17 La proporción de solicitudes por cada 100.000 habitantes se calcula contrastando los
informes del Icfes con las estadísticas poblacionales del Departamento Administrativo
Nacional de Estadística.
Tendencia
Gráfico 5.9. delas
Tendencia de las
IESIES
concon mayor
mayor demanda
demanda 1994 - 2002
1994-2002
5000
4500 U. Libre
4000
Solicitudes
3500 U. de Antioquia
3000
2500 U. Nacional
2000
1500 U. Cooperativa
1000
500 U. Católica
0
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
18 Las cifras de solicitudes no se pueden tomar en términos absolutos puesto que con
seguridad se presentó el fenómeno de inscripción simultánea de un aspirante a estudiar
derecho ante diferentes IES.
19 Precisamente en este año la Universidad Cooperativa de Colombia abrió su primer
programa de pregrado en derecho, ubicado en la ciudad de Bucaramanga.
Tabla 5.6. IES con mayor número de solicitudes de ingreso a primer curso, 1994-2002.
Universidad Origen Solicitudes %
1 Universidad Libre P 27.935 10,3
2 Universidad de Antioquia O 23.756 8,79
3 Universidad Nacional de Colombia O 23.026 8,52
4 Universidad Cooperativa de Colombia P 12.650 4,68
5 Universidad Católica de Colombia P 11.373 4,21
6 Universidad del Atlántico O 9.217 3,41
7 Universidad La Gran Colombia P 8.840 3,27
8 Universidad Simón Bolívar P 8.814 3,26
[ 115 ]
9 Universidad de Medellín P 7.356 2,72
De manera similar a las cinco IES con mayor demanda, los cinco
programas de derecho más solicitados acapararon casi el 30% de la totali-
dad de solicitudes. Cuatro de los cinco programas pertenecen a las cinco
IES con mayor número de solicitudes20. Por su parte, la Universidad Libre,
sede Bogotá, es el programa privado con mayor demanda ya que acumu-
la un 4,93% del total de solicitudes. Adicionalmente, los cinco programas
referidos son anteriores a la ley 30, tres de ellos son oficiales y los otros dos
son de origen privado y se encuentran ubicados en Bogotá.
3.000
U. Nacional
2.500
2.000
U. Libre - Bogotá
1.500
1.000 U. Católica
500
0 U. del Atlántico
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
mas de derecho; en 1990 fueron 176; para 1995 fueron 200; y para 2000, 189
solicitaron ingreso a alguna facultad de derecho.
Hasta 1993, Bogotá tenía más del 35% del total de programas de
derecho que se ofrecían a nivel nacional; adicionalmente, algunas de las
principales facultades de derecho del país se encuentran en la capital, lo
cual genera migración estudiantil hacia la capital. No obstante, en los vein-
te años analizados no se presentó en Bogotá un aumento relevante en el
número de solicitudes por cada 100.000 habitantes.
A nivel departamental, Atlántico fue la entidad territorial con la
mayor demanda para ingresar a facultades de derecho22. El promedio de
personas interesadas en estudiar derecho en Atlántico superó ampliamen-
te la media nacional, a pesar que tan solo se podía y se puede estudiar
esta carrera en la capital del departamento. La situación del Atlántico es
comparable únicamente al caso de Bogotá. A diferencia del Atlántico, en
21 Para efectos del análisis, las regiones están comprendidas así: “Andina” por: Santander,
Norte de Santander, Antioquia, Boyacá, Cundinamarca, Tolima, Caldas, Risaralda,
Quindío y Huila; “Atlántica” por: San Andrés y Providencia, La Guajira, Magdalena, Cesar,
Atlántico, Bolívar, Sucre y Córdoba; “Bogotá” por: Distrito Capital; “Pacífica” por: Chocó,
Valle del Cauca, Cauca y Nariño; y “Amazonia y Llanos” por: Arauca, Casanare, Vichada,
Meta, Guainía, Guaviare, Caquetá, Vaupés, Putumayo y Amazonas.
22 En 1985, por cada 100.000 habitantes, 97 presentaron solicitudes de ingreso; en 1990 fueron
90; para 1995 aumentaron a 125 y para 2000 fueron 197, superando en este año a Bogotá.
18.000
Otros
Atlántico
15.000 Bogotá
Bolívar
Valores
12.000 Santander
Valle
Antioquia
9.000
6.000
3.000
0 [ 117 ]
1974
1976
1978
1979
1980
1982
1984
1986
1987
1988
1989
1990
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
1977
1983
1985
1975
1991
1981
200 P acífica
0
1985 1990 1995 2000
Años
18.000
15.000
Pacífica
Solicitudes
12.000
Atlántica
9.000 Andina
6.000 Bogotá
3.000 Amazonia y llanos
0
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
Años
1 0.5 0 0 Costa
Atlántica
Pacífica
7 .00 0
3 .50 0
0
1974
1976
1978
1979
1980
1982
1984
1986
1987
1988
1989
1990
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
1977
1983
1985
1975
1991
1981
Variable s
4.500 U. Nacional
4.000
U. Libre - Bogotá
3.500
Solicitudes
3.000
2.500 U. Católica
2.000
Esc. Mil. José
1.500
María Cordóva
1.000
500 U. La Gran
0 Colombia - Btá.
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
Años
Programas
Gráfico 5.16. Programascon
con mayor demanda
mayor demanda en laen la región
región Andina andina.
4.500
4.000 U. de Antioquia -
Medellín
3.500
Solicitudes
3.000 U. de Medellín -
Medellín
2.500
U. Autónoma
2.000 Latinoamericana
1.500 –unaula–
1.000 U. Libre - Pereira
500 U. Industrial de
0 Santander
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
[ 120 ]
Años
Los abogados en Colombia
1.500
U. Simón Bolívar -
1.000 B/quilla.
U. de Cartagena
500
U. Libre - B/quilla
0
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 U. Popular del Cesar
Años
24 Creemos que la baja de 2002 obedece a un error en las estadísticas del Icfes.
1.500 U. de Nariño
U. Libre - Cali
1.000
U. de San Buenaventura
500
U. del Cauca
0
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
[ 121 ]
Años
350
300 Corp. Univ. del Meta
Solicitudes
250
200 U. INCCA - Mocoa
150
100
U. de la Amazonia
50
0
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
Años
5. “Primíparos”
De las 269.029 solicitudes para estudiar derecho casi la mitad logró acceder
a las facultades, evidenciando que los filtros de entrada funcionan a me-
dias, y a veces ni siquiera en esta medida, pues cuando se abordan las cifras
de absorción de las IES privadas, el porcentaje de ingreso ascendió como
media al 64,43% de las solicitudes. En la universidad pública, en cambio,
[ 122 ]
solo el 17,88% de los aspirantes fueron admitidos.
% frente
IES Primíparos Solicitudes % Ingreso al total de
Por su parte, las 10 IES en las cuales hubo mayor dificultad para
6.000 Otros
Barranquilla
Bogotá
4.500 Bucaramanga
Cali
Valores
Cartagena
3.000 Medellín
1.500
0
1984
1986
1987
1988
1989
1990
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
1985
1991
Variables
14.000
12.000
10.000
8.000
6.000
4.000
2.000
0
1974
1975
1976
1977
1978
1979
1980
1981
1982
1984
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
Años
[ 127 ]
60.000
Estudiantes
50.000
40.000
Primero
30.000 Segundo
20.000
10.000
0
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
1974
1975
1976
1977
1978
1979
1980
1981
1982
1984
1985
Años
50.000
Estudiantes
40.000 Privadas
30.000 oficiales
20.000
10.000
0
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
Años
8.000
Estudiantes
U. Cooperativa
6.000 U. Libre
U. Católica
4.000
U. La Gran Colombia
2.000 U. Simón Bolívar
0
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
Años
7.000
6.000
5.000
4.000
3.000
2.000
1.000
0
1974
1976
1978
1979
1980
1982
1983
1984
1986
1987
1988
1989
1990
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
1977
1985
1975
1991
1981
Años
Período Egresados
1960-1977 20.389
1978-1987 36.717
1988-1997 40.156
1998-2006 56.404
Períodos
IES
[ 130 ] 1960-1977 1978-1987 1988-1997 1998-2005
U. Libre 4.232 8.567 9.688 10.032
Los abogados en Colombia
U. Cooperativa 5.021
U. Externado 6.126
U. Libre 32.519
8. Conclusiones generales
Con base en la información contenida en este capítulo, podemos corro-
borar nuestra hipótesis de que el marco legal de la educación superior en
general y de la educación legal en particular, ha sido determinante en el
por
Los abogados en el
gobierno colombiano
desde los albores
Luz María del siglo XX hasta
Sánchez
Duque nuestros días
[ 133 ]
Abogada de la
Universidad de
Caldas. Candidata a I nscrito en el proyecto de investigación sobre
Profesión Jurídica en Colombia1, el presente tra-
bajo pretende dar cuenta de la transformación de
magíster en Derecho
de la Universidad la participación de los abogados en los altos cargos
Nacional de Colombia. de la administración pública en Colombia desde
los inicios del siglo XX hasta la actualidad. Para
tal efecto, el estudio se centra en quienes han ocu-
pado el cargo de presidentes y ministros durante
el período señalado, determinando cuál ha sido el
porcentaje de abogados que se han desempeñado
en tal cargo, comparando dicho porcentaje con el
de otros profesionales y estableciendo de qué modo
ha variado el grado de participación de aquellos
en el escenario de las altas esferas de dirección del
Estado colombiano. De otra parte, se determina
cuáles son las universidades de las que son usual-
mente egresados los profesionales que de un modo
Advertencias metodológicas
El presente estudio se elaboró a partir de una investigación de tipo cuanti-
tativo en la cual, en primer lugar, se indagó por la profesión de las personas
que han sido ministros en Colombia durante todo el siglo XX y lo que va
del siglo XXI, especificando las universidades de las cuales son egresados
quienes poseen el título de abogados, con inclusión de la información so-
[ 134 ]
bre los estudios de posgrado efectuados por estos. En total se identificó un
número de 1.135 ministros durante el período del estudio, cifra en la cual
no se tiene en cuenta a quienes se desempeñaron como ministros encar-
Los abogados en Colombia
2 Es preciso aclarar que de estos treinta y un presidentes, tres han ejercido este cargo en
dos períodos. Son ellos: Alfonso López Pumarejo, quien ejerció el cargo entre 1934 y 1938
y posteriormente entre 1945 y 1948; Alberto Lleras Camargo, quien se desempeñó como
presidente en los períodos de 1945 a 1946 y 1958 a 1962; y Álvaro Uribe Vélez, quien inició
su mandato en 2002 y fue reelegido en 2006.
3 En el gobierno de José Vicente Concha el 37,5% de los ministros eran militares, mientras
que los abogados eran el 25%.
4 Los porcentajes con los cuales participaron los abogados y militares en los gabinetes
ministeriales de los cuatro gobiernos referidos son: Rafael Reyes Prieto: 43,7% abogados
y 25% militares, Jorge Holguín: 41,6% abogados y 33,3% militares, Pedro Nel Ospina: 37%
abogados y 14,8% militares, Miguel Abadía Méndez: 42,3% abogados y 23% militares.
30
100
70
0
20
80
40
90
60
(1922 - 1926)
Miguel Abadía Méndez
(1926 - 1930)
Enrique Olaya Herrera
(1930 - 1934)
Alfonso López Pumarejo
(1934 - 1938)
Eduardo Santos
(1938 - 1942)
Alfonso López Pumarejo
% Ingenieros
(1942 – 1945 )
Alberto Lleras Camargo
(1945 - 1946)
Mariano Ospina Pérez
(1946 - 1950)
Laureano Gómez
(1950 - 1951)
Roberto Urdaneta
Los abogados en Colombia
Período
(1951 - 1953)
Gráfico 6.1. Perfiles profesionales en los ministerios desde comienzos del siglo XX
Junta Militar
(1957 - 1958)
Alberto Lleras Camargo
(1958 - 1962)
Guillermo León Valencia
(1962 – 1966)
Carlos Lleras Restrepo
(1966 – 1970)
Misael Pastrana Borrero
(1970 – 1974)
% Militares
(1986 – 1990)
César Gaviria Trujillo
(1990 – 1994)
Ernesto Samper Pizano
(1994 – 1998)
Andrés Pastrana Arango
(1998 – 2002)
Álvaro Uribe Vélez
(2002 – 2008)
L o s a b o ga d o s e n e l g o b i e r n o c o l o mb i a n o...
En el contexto latinoamericano, Rogelio Pérez Perdomo (2004) advierte
que en el período que va de 1830 hasta 1950, los abogados ocuparon altas
posiciones políticas, configurando de este modo una élite nacional, mien-
tras que a partir de la segunda mitad del siglo XX su participación en los
altos cargos políticos ha disminuido a favor de otros profesionales de áreas
como la economía, la sociología, la administración de negocios y las políti-
cas públicas. Por su parte, en el texto La internacionalización de las luchas
por el poder (Dezalay y Garth, 2002), en que los autores apuntan a examinar
los procesos en virtud de los cuales se produce la transformación de los
Estados latinoamericanos desde el desarrollismo propio de los años sesenta
hasta el neoliberalismo, también se da cuenta del referido desplazamiento
de los abogados. Los autores explican esa transformación de los Estados
latinoamericanos a la luz de los actores que agencian los procesos de cam-
bio, y advierten que en tal transformación se presenta un giro básico que se
caracteriza precisamente por el tránsito de la preeminencia de los abogados
a la de los economistas, estos últimos mostrados como prototipo de los po- [ 143 ]
líticos tecnócratas. Otro estudio que ratifica esta tendencia es el de Larissa
Adler Lomnitz y Jorge Gil-Mendieta, el cual analiza los cambios de élite de
30,0
70,0
20,0
80,0
100,0
40,0
90,0
60,0
Período
Roberto Urdaneta
1951-1953
Gustavo Rojas Pinilla
1953-1957
Junta Militar
1957-1958
Alberto Lleras Camargo
% Economistas
1958-1962
L o s a b o ga d o s e n e l g o b i e r n o c o l o mb i a n o...
Al relacionar las tesis anteriores con el fenómeno colombiano, re-
sulta bastante diciente que el declive de los abogados y el correlativo ascen-
so de los economistas se den precisamente a partir del gobierno de César
Gaviria, que es el gobierno de la apertura económica y de la contundente
y abierta inserción de las políticas neoliberales en nuestro país. De este
modo se confirmaría el vínculo advertido en los trabajos de Dezalay y Gar-
th y de Markoff y Montecinos, entre el ascenso de los economistas hasta los
cargos de dirección estatal y la articulación de la política latinoamericana
en torno a los postulados del Consenso de Washington. Pero también es
preciso advertir que este ascenso de los economistas en las dos últimas
décadas es el resultado de un proceso de consolidación de los estudios de
economía que empiezan a aparecer en el país a mediados del siglo XX y de
un cambio en la mentalidad de las élites en relación con los escenarios de
producción y adquisición de capital simbólico para acceder a los cargos de
dirección estatal. Ya habíamos indicado que el hecho de que la Universidad
[ 146 ]
de los Andes hubiera abierto sus puertas con una facultad de economía y
no con una de derecho reflejaba precisamente ese cambio de mentalidad,
el cual se consolida a través de una suerte de círculo de retroalimentación.
Los abogados en Colombia
7 Hasta 1994 este ministerio recibió el nombre de Ministerio de Gobierno. A través de la ley
790 de 2002 este ministerio se fusionó con el de Justicia y del Derecho para conformar el
Ministerio del Interior y de Justicia.
8 Mediante la ley 790 de 2002 el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social se fusionó con el de
Salud para constituir el Ministerio de Protección Social.
9 Durante los dos gobiernos de Álvaro Uribe el cargo de ministro de Protección Social ha
sido desempeñado por un médico.
10 El Ministerio de Obras Públicas existió hasta el gobierno de Julio César Turbay (1978-
1982).
12 Durante el gobierno de Andrés Pastrana hubo tres ministras de Comunicaciones: una era
ingeniera industrial, otra economista y otra administradora de empresas. Por su parte, en
los dos gobiernos sucesivos de Álvaro Uribe Vélez ha habido dos ministras en este ramo,
ambas economistas.
30
70
20
80
0
40
60
(1938-1942)
Alfonso López Pumarejo
(1942-1945 )
Alberto Lleras Camargo
(1945-1946)
Gráfico 6.3. Universidades de egreso de los ministros abogados
Laureano Gómez
(1950-1951)
Roberto Urdaneta
Período
(1951-1953)
L o s a b o ga d o s e n e l g o b i e r n o c o l o mb i a n o...
27/01/2010 12:13:45 a.m. ProfesionJuridica.indd 156
Porcentaje
10
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60
Laureano Gómez
(1950-1951)
Roberto Urdaneta
(1951-1953)
Gustavo Rojas Pinilla
(1953-1957)
Junta Militar
(1957-1958)
Alberto Lleras Camargo
(1958-1962)
Guillermo León Valencia
(1962-1966)
Carlos Lleras Restrepo
(1966-1970)
Misael Pastrana Borrero
(1970-1974)
Los abogados en Colombia
Período
(1974-1978) [ 156 ]
Julio César Turbay Ayala
(1978-1982)
Belisario Betancur
(1982-1986)
Virgilio Barco
(1986-1990)
Ministros abogados egresados de universidades Públicas
Ministros abogados egresados de universidades Privadas
100
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Porcentaje
60
40
20
0
(1950-1951)
(1951-1953)
(1953-1957)
(1957-1958)
(1958-1962)
(1982-1986)
Virgilio Barco
(1986-1990)
(1990-1994)
(1994-1998)
(2002-2008)
(1962-1966)
(1966-1970)
(1970-1974)
Laureano Gómez
Roberto Urdaneta
Belisario Betancur
Período
∗
En este gráfico no se incluyen los gobiernos de Alfonso López Michelsen (1974-1978), ni de Julio César Turbay
(1978-1982), pues no se encontró la información de las universidades en las que realizaron sus estudios los minis-
tros economistas.
20
80
40
100
60
Junta Militar
Posgrado en Colombia
(1957-1958)
Alberto Lleras Camargo
Los abogados en Colombia
(1958-1962)
Guillermo León Valencia
(1962-1966) [ 160 ]
Período
Carlos Lleras Restrepo
Gráfico 6.6. Lugar de estudios de posgrado de los abogados ministros
(1966-1970)
Misael Pastrana Borrero
(1970-1974)
Alfonso López Michelsen
(1974-1978)
Julio César Turbay Ayala
(1978-1982)
Belisario Betancur
Posgrado en Latinoamérica
(1982-1986)
Posgrado en Estados Unidos
Virgilio Barco
(1986-1990)
César Gaviria Trujillo
(1990-1994)
Ernesto Samper Pizano
(1994-1998)
Andrés Pastrana Arango
(1998-2002)
Álvaro Uribe Vélez
(2002-2008)
L o s a b o ga d o s e n e l g o b i e r n o c o l o mb i a n o...
Gráfico 6.7. Lugar de estudios de posgrados de economistas
60
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Porcentaje
40
30
20
10
0
Belisario Betancur Virgilio Barco César Gaviria Ernesto Samper Andrés Pastrana Álvaro Uribe Vélez
(1982-1986) (1986-1990) Trujillo Pizano Arango (2002-2008)
(1990-1994) (1994-1998) (1998-2002)
Período [ 161 ]
0
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20
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(1934-1938)
Eduardo Santos
(1938-1942)
Alfonso López Pumarejo
(1942-1945 )
Alberto Lleras Camargo
(1945-1946)
Mariano Ospina Pérez
(1946-1950)
Gráfico 6.8. Nivel de estudios de posgrado de Los abogados
Los abogados en Colombia
Laureano Gómez
(1950-1951)
Roberto Urdaneta
Especialización
(1951-1953)
[ 162 ]
Período
Gustavo Rojas Pinilla
(1953-1957)
Junta Militar
(1957-1958)
Alberto Lleras Camargo
(1958-1962)
Maestría
Belisario Betancur
(1982-1986)
Virgilio Barco
(1986-1990)
César Gaviria Trujillo
(1990-1994)
Ernesto Samper Pizano
(1994-1998)
Andrés Pastrana Arango
(1998-2002)
Álvaro Uribe Vélez
(2002-2008)
∗
ProfesionJuridica.indd 163
Porcentaje Porcentaje
10
0
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Laureano Gómez Laureano Gómez
(1950-1951) (1950-1951)
Roberto Urdaneta
(1951-1953) Roberto Urdaneta
(1951-1953)
Gustavo Rojas Pinilla
(1953-1957) Gustavo Rojas
Pinilla
(1953-1957)
Junta Militar
(1957-1958)
Junta Militar
(1957-1958)
Alberto Lleras Camargo
(1958-1962) Alberto Lleras
Camargo
Guillermo León Valencia (1958-1962)
(1962-1966)
Guillermo León
Sin estudios de posgrado
Período
Período
Julio Cesar Turbay Ayala Belisario Betancur
Especialización
(1978-1982) (1982-1986)
Belisario Betancur
(1982-1986) Virgilio Barco
(1986-1990)
Virgilio Barco
Gráfico 6.9. Nivel de estudios de posgrado de los economistas*
Trujillo
César Gaviria Trujillo (1990-1994)
(1998-2002)
Gráfico 6.10. Comparación de nivel de estudios entre abogados y economistas
(1998-2002)
(2002-2008)
En este gráfico no se incluyen los gobiernos de Alfonso López Michelsen (1974-1978), ni de Julio César Turbay
Conclusión
El Estado colombiano ha sido sin lugar a dudas un Estado dirigido tra-
dicionalmente por abogados. Así lo pone en evidencia el hecho de que la
mitad de los presidentes que ha tenido Colombia durante todo el siglo XX
y lo que va del siglo XXI son abogados y los gabinetes ministeriales de
casi todos los gobiernos han estado constituidos también en su mayoría
por abogados. La carrera de derecho fue durante mucho tiempo el camino
académico más efectivo para llegar a ocupar un alto cargo público. Sin em-
bargo, en la segunda mitad del siglo XX se produce una serie de fenómenos
que van a incidir notablemente en la composición profesional de las élites
Referencias
Adler-Lomnitz, Larissa y Jorge Gil-Mendieta. 2002. “El neoliberalismo y los
cambios en la élite de poder en México”, en Redes – Revista Hispana para
el Análisis de Redes Sociales, vol. 1, No. 5.
Dezalay, Yves y Bryant Garth. 2002. La internacionalización de las luchas por
el poder. La competencia entre abogados y economistas por transformar
los Estados latinoamericanos. Bogotá: ILSA y Universidad Nacional de
[ 166 ] Colombia.
Gaviria, Alejandro. 2005. “Reflexiones alrededor de la formación académica y
Los abogados en Colombia
E
Juan Manuel ste artículo hace una caracterización socioló-
Dumez Arias gica del juez de la jurisdicción ordinaria a par-
tir de una encuesta hecha a funcionarios (jueces y
Magistrado de la magistrados) de 7 de los 30 distritos judiciales que [ 167 ]
sala civil - familia en el país componen la jurisdicción ordinaria.
del Tribunal de Según el informe al Congreso de la Repú-
Cundinamarca y blica de la Sala Administrativa del Consejo Supe-
estudiante de maestría rior de la Judicatura (2007-2008), en los 30 distritos
en derecho de la judiciales de la jurisdicción ordinaria existen 406
Universidad Nacional. magistrados de tribunal superior y 3.309 jueces,
para un total de 3.715 funcionarios de los 4.293 que
componen la rama judicial1. Esta jurisdicción, cuya
cúspide en su estructura y autoridad superior es la
Corte Suprema de Justicia, comprende los ámbitos
civil, familiar, laboral, penal y agrario y se encuen-
tra presente en todo el territorio nacional.
Los 7 distritos judiciales se escogieron de tal
manera que estuvieran representados los distintos
tamaños de los distritos en el país. Tres de ellos son
de los que mayor número de funcionarios tienen;
ellos son Bogotá, Cundinamarca y Cali; tres tienen
un número intermedio: Barranquilla, Boyacá y Vi-
llavicencio y uno de los más pequeños: Pamplona.
Los resultados
1. Sexo
De los 944 funcionarios objeto del muestreo, 416 son mujeres, es decir el
42,2%, y 528 son hombres, el 57,8%; esta tendencia no es uniforme en los
7 distritos judiciales, pues en los de Pamplona y Barranquilla las mujeres
ocuparon mayoritariamente los cargos de jueces 66,6% y 56,7% respectiva-
mente; mientras que los hombres fueron mayoría en los restantes distritos:
Villavicencio 69,7%, Bogotá 56,1%, Cundinamarca 54,5%, Tunja 52,0% y
Cali 51,0%.
2. Edad
El año de nacimiento reportado permite afirmar que un 90,6% de los fun-
cionarios de la jurisdicción ordinaria nacieron antes de 1970, es decir, son
mayores de 38 años; un 8,7% entre 1970 y 1980, y solo un 0,7% nacieron
después de 1980. Del total del primer grupo un 47,6% está entre 38 y 48 [ 169 ]
años, un 38,4% entre 48 y 58 años de edad y el restante 4,6% es mayor de
58 años.
j ua n m a n u el du m e z a r i as
El distrito judicial con promedio de población más joven es el de
Cali en donde el 64,4% de sus funcionarios son menores de 48 años; de
ellos el 13,1% es menor de 38 años; le sigue Villavicencio con un 62,6% me-
nor de 48 años y un 15,7% menor de 38; en Tunja el 59,7% de sus funciona-
rios es menor de 48 años y el 27,1% menor de 38; en Cundinamarca el 53%
es menor de 48 años, y el 15% menor de 38; en Bogotá el 47,6% es menor de
48, y de estos el 17% es menor de 38; en Barranquilla el 40% menor de 48 y
el 14% menor de 38 y en Pamplona 42,8% de sus funcionarios son menores
de 48 y el 51,2% mayores de 38.
La población de mayor edad predomina en Barranquilla donde el
60% de sus funcionarios son mayores de 48 y en el mismo rango en porcen-
taje le siguen, Pamplona con el 57,2%, Bogotá 52,4%, Cundinamarca 47%,
Tunja 40,3%, Villavicencio 37,4% y Cali con un 35,6%.
Los tribunales superiores con menor promedio de edad de sus ma-
gistrados son, en su orden, Villavicencio donde el 60% de aquellos es me-
nor de 48 años, mientras que el mismo rango de edad ocupa en Cali el
47,36%, en Bogotá el 39,13%, en Tunja el 36,36%, en Barranquilla el 20%,
en Cundinamarca el 15,38% y por último Pamplona en el que todos sus
magistrados se ubican en edad superior al referido rango.
El 43% de los jueces del Distrito Judicial de Barranquilla son ma-
yores de 48 años, mientras que en el mismo rango de edad están el 40% de
100
50
45
Porcentaje
40
[ 170 ] 35
30
25
Los abogados en Colombia
20
15
Magistrados
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19
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0/
0/
0/
sd
sd
95
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96
e1
e1
e1
te
ué
tr
tr
tr
An
sp
En
En
En
De
Nacimiento
3. Forma de vinculación
Aun cuando, por regla general3, los cargos de la Rama Jurisdiccional se
proveen por concurso de méritos, cuyo resultado final comporta una vin-
culación en propiedad o carrera administrativa, los resultados reflejan
vinculaciones en propiedad, provisionalidad y encargo. Estas dos últimas
formas son minoritarias, están previstas en la ley estatutaria y se presen-
j ua n m a n u el du m e z a r i as
de orden público los integrantes del registro de elegibles convocados no
se postulan para conformar las listas de elegibles para llenar las vacantes,
impidiendo así su formulación y generando que los cargos permanezcan,
por largos lapsos, ocupados en provisionalidad8.
Mientras que en Bogotá, para el momento de la muestra, el 70,46%
de los funcionarios encuestados se encontraban vinculados en propiedad,
el 29,18% en provisionalidad y el 0,35% en encargo; en Pamplona el 100% lo
0,8%
25,6%
Propiedad
Provisionalidad
Encargo
[ 172 ] 73,5%
Los abogados en Colombia
VILLAVICENCIO
1,09%
18,68%
80,23%
BARRANQUILLA
CUNDINAMARCA
4,7%
95,3% 14,55% 0,46%
84,99%
TUNJA
1,49%
21,64%
76,87%
PAMPLONA BOGOTÁ
0,35%
100% 29,18%
70,47%
CALI
12,6%
87,4%
j ua n m a n u el du m e z a r i as
ción anterior al ingreso a la rama. De allí provienen el 9,65% de los actuales
jueces y el 13,9% de los magistrados.
40
35
Porcentaje
30
Magistrados
25
Jueces
20
15
10
5
0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14
Ocupación
1. Asesor Jurídico 2. Abogado litigante 3. Empresa privada
4. Fiscalía 5. Procuraduría 6. I.C.B.F.
7. Inspección de Policía 8. Personería 9. Otros empleados públicos
10. Docente Universitario 11. Magisterio 12. Defensoría Pública
13. No reporta 14. Rama judicial, único empleo
55,5% de sus magistrados; en Tunja 57,7% de sus jueces y 80% de sus ma-
gistrados; Villavicencio 55,8% de sus jueces y 20% de sus magistrados; en
Cundinamarca 26,0% de sus jueces y 61,5% de sus magistrados; en Pam-
plona 38,8% de sus jueces y ninguno de sus magistrados; y, por último, en
Cali 49,0% de sus jueces y 18,75 de sus magistrados.
5. Estudios
5.1. Pregrado
El 43,3% de los funcionarios terminaron sus estudios de pregrado des-
pués del año 1990; el 47,4% en 1980-89, el 9,2% en 1970-79; por fuera de
estos rangos se encuentra el graduado más antiguo que es del 14 de mayo
de 1959.
La mayoría de funcionarios de la jurisdicción ordinaria, es decir un
22% (208 de 944) son egresados –pregrado– de la Universidad Libre. Este
porcentaje es ligeramente mayor que el porcentaje nacional de egresados
de la Universidad Libre (ver capítulo 5). La Universidad La Gran Colombia,
por su parte, obtiene un 11,1% (105 de 944); le sigue la Universidad Católica
con un 10,8%, (102 de 944), la Santo Tomás con 10,4% (98 de 944), Univer-
sidad Autónoma 8,2% (77 de 944), Universidad Nacional con 7,6% (72 de
j ua n m a n u el du m e z a r i as
18,8% de sus funcionarios, segunda en Villavicencio con el 15,3% y tercera
en Tunja con el 10,4%, tiene presencia en todos los distritos judiciales salvo
en Barranquilla. La Santo Tomás es mayoritaria en Tunja con un porcen-
taje igual al 21,6% de sus integrantes, cuarta en Bogotá con un 10,6% y
comparte el tercer lugar en Villavicencio con un 9,8%.
La Universidad Católica es segunda en Tunja con un 14,9%, y en
Cundinamarca con el 12,6% y tercera en Bogotá con un 14,9%; la Universi-
dad Nacional es tercera en Cundinamarca con un 11,2% de sus miembros,
cuarta en Bogotá con un 11,3% y sexta en Tunja con un 7,4% de sus miem-
bros. La Universidad Autónoma es mayoritaria en Villavicencio con un
20,8% de sus integrantes, cuarta en Cundinamarca con un 10,7% y quinta
en Bogotá con un 8,8%.
Otras universidades tienen una representación significativa solo en
determinados distritos, como ocurre con la Universidad Unicosta que en
Barranquilla forma el 21,1% de sus funcionarios, siendo superada, como
se anotó, únicamente por la Universidad del Atlántico, allí mayoritaria.
La Universidad del Cauca que en Cali ocupa el tercer lugar con un 10% de
9 Para estos efectos las universidades son tomadas como una sola, sin importar el número
de sedes que tienen en diversas ciudades del país. Así, la Libre tiene dos programas de
derecho en Bogotá y uno en Cali, Cúcuta, Socorro y Barranquilla.
UNIVERSIDAD DE CALDAS
UNIVERSIDAD DE BOYACÁ
UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
UNIVERSIDAD CORPORACIÓN UNICOSTA
UNIVERSIDAD COOPERATIVA
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL VALLE
UNIVERSIDAD CATÓLICA 10,8%
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA 8,2%
5.2. Posgrado
Independientemente del proceso de autoformación que en la Rama Judi-
cial lidera la Escuela Judicial Rodrigo Lara Bonilla, el nivel de capacitación
universitaria de los funcionarios judiciales que ingresan a la rama ha veni-
do variando de manera significativa con el paso del tiempo.
Sin embargo, un 21% de los funcionarios objeto de la muestra no ha
adelantado estudios de posgrado, es decir, uno de cada 5 funcionarios, por
género, un 9% mujeres y un 12% hombres.
Del 77,8% de funcionarios que adelantaron estudios de posgrado,
cursaron dos especializaciones un 36,6%; tres especializaciones el 13,1%, y
el 3,1% estudios en maestría.
El nivel de formación académica varía significativamente si se con- [ 177 ]
trastan los distritos judiciales: en Bogotá laboran el 33% de quienes tienen
al menos una especialización; el 39,6% de quienes tienen dos; el 50% de
j ua n m a n u el du m e z a r i as
los que tienen tres; el 30% de quienes tienen maestría y el 100% de los que
alcanzaron doctorado; mientras que en Villavicencio lo hacen el 8,3% de
los que tienen una especialización, el 8,09% de quienes tienen dos, el 5,65%
de quienes tienen tres y el 3,33% de quienes tienen maestría.
40
35
30
Porcentaje
25
20
15
10
5
0
Antes de entre entre entre Después Antes de entre entre entre Después
1950 1950/1959 1960/1969 1970/1979 de 1980 1950 1950/1959 1960/1969 1970/1979 de 1980
Estudios de posgrado
[ 178 ]
La diferencia en los niveles de formación podría explicarse por la facilidad
de unos y la dificultad de los otros para acceder a la formación académica
Los abogados en Colombia
40,0%
30,0%
30,0%
Valores
Valores
20,0%
20,0%
10,0%
10,0%
0,0%
Barranquilla Cundinamarca Pamplona Cali Barranquilla Cundinamarca Pamplona Cali
Villavicencio Tunja Bogotá Villavicencio Tunja Bogotá
[ 179 ]
Estadísticos : % del total de Estadísticos : % del total de
N "3º especialización" N "maestría"
j ua n m a n u el du m e z a r i as
50,0% 40,0%
40,0%
30,0%
Valores
Valores
30,0%
20,0%
20,0%
10,0%
10,0%
Jueces Magistrados
U. SIMÓN BOLÍVAR
U. SERGIO ARBOLEDA
U. SAN BUENAVENTURA
U. NACIONAL DE COLOMBIA 10,9%
U. MANUELA BELTRÁN
U. LIBRE DE COLOMBIA 21,66%
U. JAVERIANA
U. INVESTIGACIÓN GENERAL SANTANDER
U. EXTRANJERAS
U. EXTERNADO 24,63%
[ 181 ]
U. E.S.A.P.
U. DEL VALLE
j ua n m a n u el du m e z a r i as
U. DEL ROSARIO 3,91%
U. DEL CAUCA
U. DEL ATLÁNTICO
U. DEL NARIÑO
U. DE MEDELLÍN
U. DE LOS ANDES 0,94%
U. DE LA SALLE
U. DE CARTAGENA
U. DE CALDAS
U. DE BOYACÁ 1,48%
U. DE ANTIOQUIA
U. CORPORACIÓN UNICOSTA
U. COOPERATIVA
7,67%
U. CATÓLICA
U. AUTÓNOMA LATINOAMERICANA DE MEDELLÍN
4,3%
U. AUTÓNOMA DE COLOMBIA
6. Docencia
Un 29,9% de los funcionarios de la jurisdicción ordinaria es o ha sido do-
cente universitario10 282 funcionarios; el porcentaje varía según la cabe-
cera de distrito judicial con mayor concentración de funcionarios; es más
alto en los distritos de Barraquilla: 45,8% de los funcionarios de ese dis-
trito (30,7% magistrados y 69,3% jueces) es o ha sido docente universitario
282 funcionarios; en Bogotá, es equivalente al 43,7% (28,5% magistrados y
71,5% jueces); en Cali 39,4% (38,3% magistrados y 69,7% jueces); en Pam-
plona el 42,8% (33,3% magistrados y 66,6% jueces); en Villavicencio el [ 183 ]
28,1% (19,3% magistrados y 80,7% jueces); en el Distrito Judicial de Cundi-
namarca un 11,7% de sus funcionarios (52% magistrados y 48% jueces) y
j ua n m a n u el du m e z a r i as
por último en Tunja un 7,4% (70% magistrados y 30% jueces).
Sin embargo, en el Distrito Judicial de Bogotá se encuentra el 44%
de los docentes; en Cali el 16,8%, en Barranquilla el 13,9%, en Villavicen-
cio el 9,3%, en Cundinamarca el 8,9%, en Tunja el 3,5% y en Pamplona
el 3,2%.
Y diferenciados por la labor judicial que cumplen, se concluye que
de los 228 funcionarios que ejercen la docencia universitaria el 80,8% son
magistrados y el 22,4% son jueces.
En el Distrito Judicial de Barranquilla, la docencia la ejercen los
funcionarios mayoritariamente en la Corporación Universitaria de la Cos-
ta (CUC), 33,3% de quienes dictan clases; en la Universidad Autónoma un
15,3%; 12,8% en las universidades del Atlántico, Libre de Barranquilla y
del Sinú, 10,2% en la Universidad del Norte y, en menor proporción, un
5,1% en las universidades Rafael Núñez de Cartagena y Sergio Arboleda de
Santa Martha11.
del distrito en cuestión, se puede evidenciar que cuatro de las cinco uni-
versidades con mayor número de sus ex alumnos que ejercen la judica-
tura en Bogotá, Gran Colombia, Libre, Católica y Santo Tomas, son a su
vez las que más docentes universitarios acogen. La Universidad Nacional,
que en el número de egresados que laboran como jueces o magistrados
en este distrito ocupa el cuarto lugar, en la recepción de docentes ocupa
el puesto décimo.
En el Distrito Judicial de Cundinamarca, cuyo tribunal se radica en
Bogotá, las universidades en que sus funcionarios ejercen o han ejercido la
docencia, en orden descendente son; la Libre 24%, Externado 16%, Nacio-
nal 12%, Cooperativa 12%, Autónoma 12%, Católica 8%, y con un 4% figu-
ran Sergio Arboleda, Incca, de la Sabana, Antonio Nariño, Militar Nueva
Granada, Santo Tomás de Aquino, de Boyacá, Tecnológica de Tunja, de
Pamplona y Popular del Cesar.
La Libre y la Nacional ocupan en el Distrito Judicial de Cundina-
marca el mismo lugar en cuanto a ex alumnos vinculados a la judicatura
y funcionarios acogidos en sus aulas en la docencia; la Libre forma el
mayor número de funcionarios y recibe el mayor número de docentes del
distrito mientras que la Universidad Nacional es la tercera en la recepción
de docentes del distrito y la tercera Universidad de donde egresan los
funcionarios.
j ua n m a n u el du m e z a r i as
universitario; la Libre que aporta el mayor número de funcionarios a dicho
distrito judicial, tiene sede en Cúcuta, acoge solo al 11,1% de los funciona-
rios docentes de dicho distrito; y también emergen como universidades en
las que se ejerce o ha ejercido al docencia la Cooperativa, que tiene sede
en Cúcuta, con un 22,2%, la Santo Tomás de Bucaramanga y Francisco
de Paula Santander con participación similar de un 11,1%. Al igual que
en otros distritos algunos de los funcionarios ejercen docencia en varias
universidades a la vez.
7. Publicación de libros
Son pocos los funcionarios judiciales que hayan escrito textos de derecho
publicados; 39 funcionarios, que equivale solo a un 4,1% del total encuesta-
dos, han escrito una o más obras jurídicas que fueron editadas como libros;
el primer lugar lo ocupa Bogotá donde 19 funcionarios judiciales (48,7%
del total) han publicado un libro; le sigue Cali con 8 funcionarios (20,5%);
en tercer lugar Barranquilla con 7 (17,9%), en Cundinamarca y Villavi-
cencio solo 2 (7,8% c/u) y en Tunja un único funcionario hizo publicación
jurídica (3,9%); Pamplona es el único distrito en el que ningún funcionario
ha escrito y publicado un libro de derecho.
8. Conclusiones
La mayoría de funcionarios judiciales son egresados de universidades no
consideradas de élite (Libre, Gran Colombia, Autónoma, Nacional y Santo
Tomás de Aquino), un porcentaje menor proviene de las universidades pri-
vadas que se reconocen como exclusivas por los costos de sus matrículas
(Externado, Javeriana, Rosario). Aun cuando no hay una tendencia expresa
en la formación universitaria, los porcentajes de egresados por universi-
[ 186 ]
dades permiten afirmar que centros educativos como la Libre, Católica,
Gran Colombia y Santo Tomás, tienden a formar a sus estudiantes con
clara orientación hacia la judicatura.
Los abogados en Colombia
12 Los jueces son evaluados anualmente y cada dos años los magistrados, la calificación
insatisfactoria, esto es inferior a 60 puntos sobre 100, conlleva la separación del ejercicio
del cargo.
j ua n m a n u el du m e z a r i as
Universidad Nacional repuntan en los estudios de posgrado, donde alcan-
zan el segundo y tercer lugar, la Universidad Libre sigue siendo la primera
universidad escogida para adelantar estudios de posgrado y aparecen en
escala mínima las universidades Javeriana, Rosario y de Los Andes; es de-
cir, se mantiene la tendencia de que, salvo la prelación de las universidades
Nacional y Externado, los funcionarios estudien posgrados en los mismos
claustros en que hicieron el pregrado.
13 Desde el año 1988 se iniciaron los concursos de méritos para el ingreso a la Rama, el primer
concurso organizado por el Consejo Superior de la Judicatura fue en el año 1994.
14 La rama no exige estudios de posgrado como requisito indispensable para ingreso o
ascenso.
15 El sistema de carrera judicial permite al concursante que pasa todas las etapas clasificatorias
y por ello conforma el registro de elegibles que reclasifique en la tabla sumando, cuando
a ello hay lugar, la experiencia adicional adquirida y los posgrados en los que se haya
graduado con posterioridad al inicio del concurso.
por
Caracterización
del abogado en la
administración
Ángelo pública nacional
Mauricio
Victoria
Russi Introducción [ 189 ]
Abogado de la Unidad
Central del Valle del
E n Colombia hay 64.804 profesionales que se
encuentran vinculados mediante contrato
de trabajo a la administración pública nacional,
Cauca, candidato a central y descentralizada. De este total 15.770 son
maestro en Derecho abogados. El presente informe hace una caracteri-
de la Universidad zación sociojurídica de estos abogados funciona-
Nacional de Colombia. rios del Estado.
Los datos que han servido de soporte en el
análisis son producto de la información que reca-
ba el Departamento Administrativo de la Función
Pública mediante el Sistema Único de Información
Personal (SUIP)1 que suministra detalles sobre la
ubicación de las entidades dentro del Estado, su es-
tructura y jerarquización, la planta de personal y la
hoja de vida de cada funcionario. Esta información
se cruzó con otra base de datos suministrada por el
Registro Nacional de Abogados, dependencia per-
* Departamento Administrativo de la Función Pública. 2007. Informe de caracterización del Empleo Público en
Colombia. Junio. p. 16.
* Como se dijo, se ha incluido la categoría de las “ingenierías” por su alta representatividad, así no sea conside-
rada por DAFP como disciplina académica, dado que así se le denomina a una ingeniería civil, o ambiental, o
industrial, o cualquier otra.
Como se observa, los abogados son los profesionales más numero- [ 191 ]
sos en el nivel nacional. No existen investigaciones regionales o munici-
angelo victoria
pales sobre estas proporciones, pero todo indica que allí el porcentaje de
abogados es aún mayor.
La gran mayoría de los profesionales trabajan en la Rama Ejecutiva
(en adelante, RE). Allí se recluta el 73% de los profesionales del Estado, y el
42% de los abogados según los datos de DAFP.2
Organismos autónomos 50
TOTAL 15.770
1. Género
En la división por género, la población femenina supera por 14 puntos por-
centuales a la masculina.
2. Entidades
El dato neto de abogados que laboran para el Estado es de 15.726. Sin em-
bargo, al cotejar detenidamente la información producto del cruce entre
3 Téngase en cuenta que el DAFP postula como entes de la Rama Judicial a la Fiscalía
General de la Nación, y al Instituto de Medicina Legal, excluyendo a los jueces,
magistrados y demás funcionarios de los despachos judiciales.
angelo victoria
Superintendencia de Notariado 434 2,70
Inpec 248 1,50
Defensoría 215 1,30
DAS 212 1,30
Estas entidades tienen casi las tres cuartas partes de los abogados
del Estado.
3. Niveles
El sistema de niveles está diseñado en la administración pública para deta-
llar las funciones y las remuneraciones de los funcionarios. Su reglamen-
tación se encuentra en la ley 1006 de enero 23 de 2006. En el cuadro 8.7 se
muestran los niveles y el porcentaje de abogados del Estado que pertenece
a cada nivel.
Cuadro 8.8. Distribución del abogado por rama u órgano, y nivel jerárquico
Profesional
Asistencial
Directivo
Ejecutivo
Técnico
Rama u órgano
Asesor
Otros
Total
SMLMV Abogados
1a2 166
2a3 1.007
3a4 4.041
4a5 2.078
5a6 1.603
6a7 1.009
7 a 10 4.184
10 a 15 1.352
[ 195 ]
15 a 20 92
angelo victoria
20 a 30 182
Más de 30 56
5. Universidades
5.1 Carácter
La gran mayoría de los abogados del Estado se forman en universidades
privadas, tal como lo muestra el cuadro 8.10.
* Restan 17 funcionarios que obtuvieron título extranjero, o no registraron el dato de la universidad en el SUIP.
4 Para efectos del análisis, las regiones están comprendidas así: la “Andina” por Santander,
Norte de Santander, Antioquia, Boyacá, Cundinamarca, Tolima, Caldas, Risaralda,
Quindío y Huila; la “Atlántica” por San Andrés y Providencia, La Guajira, Magdalena,
Cesar, Atlántico, Bolívar, Sucre y Córdoba; “Bogotá” por el Distrito Capital; la “Pacífica”
por Chocó, Valle del Cauca, Cauca y Nariño; y la “Amazonia y Llanos” por Arauca,
Casanare, Vichada, Meta, Guainía, Guaviare, Caquetá, Vaupés, Putumayo y Amazonas.
angelo victoria
del Estado. Como se observa en el siguiente cuadro, en la Universidad Li-
bre estudió 1 de cada 5 abogados del Estado (esta cifra está en sintonía con
la tendencia general de todos los abogados del país5).
Universidades Abogados
Nacional 435
Antioquia 304
Cauca 292
Cartagena 284
[ 198 ] Nariño 270
Atlántico 230
Los abogados en Colombia
Caldas 195
Santo Tomás
Católica
Gráfico 8.2. Participación de los abogados en el nivel profesional según universidad [ 199 ]
de origen
angelo victoria
Gran Colombia Libre
13% 27% Libre
Católica
15% Santo Tomás
Externado
Católica
Gran Colombia
Externado Santo Tomás
21% 24%
Gran Colombia
Católica
Simón Bolívar
Gran Colombia Santo Tomás
17% 20%
[ 201 ]
Nivel profesional
angelo victoria
Las cinco universidades con el mayor número de sus egresados en el nivel
profesional, que es el nivel más copado por los abogados en el Estado (58%,
equivalente a 9.159 funcionarios), son de carácter público. A continuación
se muestran los datos.
Simón Bolívar
13%
Libre
40%
Católica
16% Libre
Gran Colombia
Cooperativa
Cooperativa Católica
16%
Simón Bolívar
Gran Colombia
15%
Libre
41%
Gran Colombia
14%
Libre
Santo Tomás
Católica
angelo victoria
El mayor rango salarial lo muestra el gráfico 8.6, en el que la Uni-
versidad Libre es desplazada por el Externado, y seguida por la Javeriana.
30 o más SMLMV
Gráfica 8.6. 30 o más SMLMV
Santo Tomás
9%
Externado
Javeriana 41%
21%
Externad0
libre
javeriana
Santo Tomás
Libre
29%
2 a 3 SMLMV
A pesar de que la Universidad Cooperativa es la que ubica más egresados
en el nivel técnico, estos no son los peor asalariados. La Universidad Incca
de Bogotá y la Simón Bolívar de Barranquilla, en cambio, tienen los ma-
[ 204 ]
yores porcentajes de egresados (14% y 11%, respectivamente) con remune-
ración baja.
Los abogados en Colombia
7 a 10 SMLMV
La Universidad Nacional desaparece, lo que indica que aunque la mayoría
de sus egresados se ubican en el nivel profesional, sus salarios fluctúan; lo
anterior no sucede con los abogados de la de Antioquia.
20 a 30 SMLMV
4 universidades privadas se consolidan en este rango salarial.
[ 205 ]
Cuadro 8.21. Participación de egresados por universidad en el rango de 20 a 30 SML-
angelo victoria
MV
5.3.5. Posgrados
El mercado de los posgrados es de una gran importancia, como se dijo en
la introducción y en el capítulo 5 de este libro. Aquí se constata esa afirma-
ción. Uno de cada 4 abogados tiene algún posgrado.
Posgrados
Gráfico 8.7. Posgrados por rama u organismo
por rama u organismo
1 .6 9 9 Rama Judicial
1.800 (Fiscalía)
1 .4 0 1
1.600 Rama Ejecutiva
1.400
Organismos de
1.200 934 control
1.000
Rama Legislativa
800 organismos
autónomos y
600 Organización
400 Electoral
26
200
0
Posgrados
Los posgrados en la rama penal son los más cursados por los abo-
gados del Estado, debido a que en la Fiscalía la gran mayoría de abogados
tienen esta especialidad con ocasión de las funciones que cumplen. Sor-
* La categoría “otros privado” se refiere a las bastantes disciplinas que encuadran en el derecho privado, como las
muchas que comprende la categoría “otros público”. Podemos citar como especializaciones del derecho privado
la de procesal civil, probatorio, finanzas, contratos, minero, seguros, entre otras; y del derecho público la de
disciplinario, público económico, electoral, y demás similares.
[ 207 ]
6. Época de egreso
angelo victoria
Entre 1990 y 1997 hubo un total de 4.788 egresados de las facultades de
derecho que se convirtieron en funcionarios públicos. En estos años, como
se dijo antes –capítulo 5– se producen los efectos de la ley 30 de 1992 que
reguló la educación superior en el país, flexibilizando los requisitos tanto
de ingreso como de egreso a las universidades, incluyendo las facultades de
derecho, que habiendo empezado a admitir aspirantes en el 1992 los egresó
rápidamente en 1997.
5.000 Entre 26 y 30
Entre 31 y 40
4.000 3.756 3.756
Entre 41 y 50
3.000
Entre 51 y 60
2.000 Más de 60
1.000 849
293
53
0
Abogados
Universidad Cantidad
Libre 12
Gran Colombia 10
Católica 5
Cauca 5
Externado 4
Nacional 4
Conclusiones
angelo victoria
A continuación se reseñan brevemente las conclusiones que se consideran
pertinentes:
• El 10% de todos los funcionarios estatales son abogados, lo cual
representa el 24,1% de todos los profesionales que laboran con el
Estado.
• Los abogados constituyen el mayor número de profesionales en el
Estado, seguidos de cerca por los ingenieros. Los economistas ocu-
pan el quinto lugar detrás de los administradores de empresas y los
contadores.
• Después de la Fiscalía, la Procuraduría General de la Nación es la
que más abogados tiene en el Estado. Les siguen la Dirección de
Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), de la Rama Ejecutiva, y
la Contraloría General de la Nación.
• El 53% de los abogados que laboran en el Estado se encuentra ubi-
cado en el nivel profesional.
• El salario promedio del abogado que trabaja para la administración
pública nacional es de $2´957.257.
• Sorprende la poca participación estatal de los abogados egresados
de universidades públicas en el Estado. Entre las 10 IES que más
I. Variables demográficas
Para empezar es importante mencionar que la evolución demográfica del
país durante el período está sujeta a importantes variaciones interdeparta-
mentales que dificultan el análisis comparativo a nivel nacional. Con el fin
de dilucidar el evolutivo y poder establecer patrones de comparación entre
las diferentes regiones y departamentos, comenzaré por hacer una síntesis
de los mismos, basado en las cifras que ofrece el Departamento Adminis-
trativo Nacional de Estadística (DANE).
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
mento con la mayor población tenía 4.225.649; por su parte, para 2000 la
población nacional era de 40.282.217 habitantes, con un mínimo departa-
mental de 67.672 y un máximo de 6.302.881.2 Esto significa un incremento
de casi diez millones de personas en un período de quince años, es decir,
del 30,8%, debido a la disminución en las tasas de mortalidad y a una cierta
prosperidad económica.3
Estas diferencias hacen que un análisis comparativo regional sea
inocuo. Por ejemplo, una comparación de medias poblacionales no nos
dice nada sobre las condiciones reales de distribución de la educación a
nivel nacional, ni un comparativo del número de jueces y magistrados en
cada distrito nos informa sobre la cobertura total en el territorio. Se advier-
te que varios departamentos no reportan dato alguno sobre universidades
o escuelas de educación superior, ya que su poca densidad demográfica no
justifica su existencia, como Guainía, Vichada o Vaupés, en territorio sel- [ 213 ]
vático; o San Andrés y Providencia, con una población muy reducida; o el
caso de La Guajira, cuya población es de mayorías étnicas. Por lo tanto, los
300
200
100
0
1985 1990 1995 2000
Departamentos
Antioquia Chocó Risaralda
Arauca Córdoba Santander
Atlántico Cundinamarca Sucre
Bogotá Huila Tolima
Bolívar Magdalena Valle
Boyacá Meta Casanare
Caldas Nariño Grupo Amazonia
Caquetá Norte de Santander La Guajira
Cauca Putumayo San Andrés
Cesar Quindío
8 La media para el período es de 220,29 cupos por programa/año, con un error típico de la
media de 22,23 y una desviación típica de 185,29.
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
con el aumento poblacional antes mencionado, pues mientras la población
aumenta un 30,8%, la oferta en educación jurídica lo hace en un 197,1%.
Tras este lapso se evidencia la apertura de programas de oferta
masiva,9 ya que los cupos ascienden a 30.613 en 2001 y a 36.784 en 2002,
es decir, 13.078 cupos nuevos en dos años, 4,62 veces más que a inicio del
período. Así mismo es de resaltar que en estos dos años tanto la región An-
dina como la Costa Atlántica superan la oferta de Bogotá, sobrepasando
los 11.000 cupos cada una de ellas para 2002, frente a cerca de 9.000 cupos
en la capital.
Al principio del período la proporcionalidad de cupos públicos
frente a los cupos que ofrece el sector privado es de 1:6,87, mientras que
para 2000 es de 1:6,1.
Gráfico 9.2. Evolutivo de la oferta. Total nacional por carácter. Total de cupos
[ 217 ]
Carácter
20.000
15.000
10.000
5.000
0
1985 1986 1987 1988 1989 1990
1991 1992 1993 1994 1995 1996
1997 1998 1999 2000
9 Para 2002, una sola institución ofrece 2.907 cupos a lo largo del territorio nacional.
[ 218 ]
Evolutivo de la Oferta. Total Nacional por Carácter. Total de Cupos.
ProfesionJuridica.indd 218
1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997
Cupos 6955 9357 8088 7642 7799 8088 8237 9534 7817 10607 13223 13162 14253
Media 239,83 322,66 278,9 263,52 268,93 278,9 187,2 216,68 177,66 192,85 206,61 193,56 192,6
Privada
Programas 29 29 29 29 29 29 44 44 44 55 64 68 74
% del total 87,30% 88,90% 88,60% 91% 89,70% 87,80% 87,20% 89,40% 86,20% 89,60% 89,40% 92,70% 87,50%
Cupos 1012 1169 1044 755 894 1128 1207 1134 1247 1228 1564 1043 2028
Media 112,41 129,89 116 83,89 99,33 125,33 120,7 113,4 124,7 111,64 130,33 94,82 126,75
Oficial
Programas 9 9 9 9 9 9 10 10 10 11 12 11 16
% del total 12,70% 11,10% 11,40% 9,00% 10,30% 12,20% 12,80% 10,60% 13,80% 10,40% 10,60% 7,30% 12,50%
Cupos 7967 10526 9132 8397 8693 9216 9444 10668 9064 11835 14787 14205 16281
Media 209,65 277 240,32 220,97 228,76 242,53 174,89 197,56 167,85 179,32 194,57 179,81 180,9
Total
Programas 38 38 38 38 38 38 54 54 54 66 76 79 90
% del total 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0% 100,0%
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
cuatro veces sus programas de derecho en el período, de 11 IES en 1985 a
40 en 2000, y de 6 a 26, respectivamente. A su vez, la región Pacífica triplica
sus programas, de 6 a 18. Bogotá los duplica, de 15 a 31. Y la región de la
Orinoquia-Amazonia es incluida con la apertura de 4 programas.
Sin embargo, es el porcentaje del total de cupos lo que nos da el
marco comparativo: para inicios del período, Bogotá concentra el 50,2%
del total de cupos, la región Andina el 20,8%, la Costa Atlántica el 16,7% y
la región Pacífica el 12,3%.
La tendencia a la centralización aumenta durante el primer quin-
quenio, ya que Bogotá eleva dos puntos la concentración de la oferta, pa-
sando a tener el 52,5%, en detrimento de las regiones Atlántica y Pacífica,
mientras que la Andina se mantiene igual.
Después de la entrada en vigencia de la ley 30, el incremento más
vertiginoso en la oferta de cupos es el de la región Andina, que durante [ 219 ]
el quinquenio de 1991-1995 incrementa al 27,1% y se mantiene semejante
hasta 2000; a su vez, la región Atlántica aumenta al 16,2%; la región de
[ 220 ]
Los abogados en Colombia
Bogotá
Andina
Orinoquía y Amazonía
Costa Atlántica
Pacífica
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
total de 18.003 cupos.
El comportamiento según el carácter de la oferta varía mucho se-
gún departamentos: Atlántico, por ejemplo, aumenta su oferta privada y
disminuye su oferta pública que para 1985 era del 3% del total nacional, a
un 0,8% del total para 2000.
El caso contrario lo ejemplifica Bogotá, que disminuyó su oferta
privada, del 47,8% del total nacional para 1985 al 30,1% en 2000, mientras
aumentó en oferta pública del 2,4% al 4,1%. De igual manera el departa-
mento del Valle aumenta su oferta pública y disminuye su oferta privada
respecto al total.
Por su parte, el departamento de Antioquia, que en términos na-
cionales ofrecía el 12% del total de plazas al final del período, aumentó su
cobertura tanto en el sector público como en el privado. El departamento
de Santander comienza a tener una oferta pública solo en el segundo quin- [ 221 ]
quenio, después de implementarse la ley 30 del 92, ofreciendo el 0,4% del
total nacional, frente a una oferta del 5,1% del total nacional de carácter
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
% del total 8,8% 9,1% 6,3% 8,1%
Privada Total de cupos 700 840 929 1914
Programas 3 3 5 9
% del total 1,5% 0,7% 2,0% 2,1%
Valle Oficial Total de cupos 120 60 300 488
Programas 1 1 1 2
% del total 10,3% 9,8% 8,3% 10,1%
Total Total de cupos 820 900 1229 2402
Programas 4 4 6 11
10 La media para el período es de 358,89 solicitudes por programa/año, con un error típico de
la media de 19,54 y una desviación típica de 75,59.
Gráfico 9.4. Evolutivo de la demanda. Total nacional por carácter. Total de solicitudes
Los abogados en Colombia
Carácter
Privada
Oficial
Total
30.000
20.000
10.000
1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
Solicitudes 12868 15540 13052 12377 12810 12408 12512 11308 13920 16772 17874 15911 16052 16741 17764 19777
Media 443,72 535,86 450,07 426,79 441,72 427,86 284,36 257 316,36 304,95 279,28 233,98 216,92 217,42 216,63 199,77
Privada
Programas 29 29 29 29 29 29 44 44 44 55 64 68 74 77 82 99
% del total 81,60% 81,20% 73,60% 79,10% 78,50% 76,80% 76,60% 74,70% 78,70% 75,00% 72,50% 71,80% 66,60% 57,10% 57,30% 58,60%
Solicitudes 2911 3594 4679 3272 3518 3754 3815 3828 3771 5604 6785 6249 8048 12579 13217 13990
Media 323,41 399,33 519,89 363,56 390,89 417,11 381,5 382,8 377,1 509,45 565,42 568,09 503 662,05 660,85 666,19
Oficial
Programas 9 9 9 9 9 9 10 10 10 11 12 11 16 19 20 21
% del total 18,40% 18,80% 26,40% 20,90% 21,50% 23,20% 23,40% 25,30% 21,30% 25,00% 27,50% 28,20% 33,40% 42,90% 42,70% 41,40%
Solicitudes 15779 19134 17731 15649 16328 16162 16327 15136 17691 22376 24659 22160 24100 29320 30981 33767
Media 415,23 503,53 466,61 411,82 429,68 425,32 302,35 280,3 327,61 339,03 324,46 280,5 267,78 305,42 303,74 281,39
Total
Programas 38 38 38 38 38 38 54 54 54 66 76 79 90 96 102 120
% del total 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00% 100,00%
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
nacional de la demanda, con una media de 147 solicitudes por programa.
Bogotá
Andina
Orinoquia y Amazonia
Costa Atlántica
Pacífica
[ 227 ]
público.
En el caso del Valle, el comportamiento general es oscilante ya que
en términos generales la demanda aumenta para 1990, disminuye para
1995 y vuelve a aumentar en 2000, mostrando un comportamiento con-
trario a la tendencia general, que es a aumentar después de la implemen-
tación de la ley 30 del 92. En este caso, y pese a la apertura de seis nuevos
programas de carácter privado, la demanda hacia este sector decae progre-
sivamente, mientras que la demanda pública se duplica con la apertura de
un programa en 1998. La tendencia aquí también es a nivelar la demanda
pública con la privada.
Asimismo es significativo ver que en los departamentos de Mag-
dalena, Meta, Norte de Santander, Quindío, Risaralda, Sucre y Tolima, en
que la oferta es exclusivamente privada, la demanda disminuye en todos
los casos, con excepción del departamento de Córdoba, donde aumenta.
Por su parte, los departamentos que tienen una oferta exclusivamente pú-
blica, Cauca y Nariño, mantienen tasas de demanda continuas a lo largo
del período, aunque en el caso del Cauca decae en el último quinquenio
con la llegada de la oferta privada, y en el caso de Nariño se mantiene.
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
Deptos Carácter 1985 1990 1995 2000
% del total 13,50% 6,40% 7,70% 6,50%
Privada Total de solicitudes 2.129 1032 1905 2.180
Programas 3 3 6 14
% del total 1,30% 6,10% 4,00% 10,50%
Antioquia Oficial Total de solicitudes 205 989 987 3555
Programas 1 1 1 3
% del total 14,80% 12,50% 11,70% 17,00%
Total Total de solicitudes 2.334 2.021 2.892 5735
Programas 4 4 7 17
% del total 5,50% 5,70% 5,40% 6,20%
Privada Total de solicitudes 872 929 1324 2080
Programas 3 3 6 8
% del total 3,80% 3,70% 4,10% 5,60%
Atlántico Oficial Total de solicitudes 602 595 1009 1901 [ 229 ]
Programas 1 1 2 1
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
tralizados, independientemente del carácter de estos. Esto se debe en gran
medida al amplio sector privado que ha dirigido su oferta a los estratos
medios y bajos, cubriendo parcialmente el déficit que deja el sector público.
El comportamiento en la oferta no se corresponde con la tenden-
cia en la demanda, lo que nos indica una falta de coordinación entre los
mecanismos de planeación con que se ejecutó la apertura de los nuevos
programas, siendo el patrón común la sobreoferta del sector privado y la
insuficiencia del sector público.
Los cambios en la oferta tardan entre dos y tres años en empezar a
manifestarse en la demanda, cuando lo hacen. Es decir que las estrategias
de planificación que se realicen en el futuro deben considerar que un cam-
bio efectivo en la demanda a través de modificaciones en la oferta tienen su
propia dinámica temporal de adaptación.
[ 231 ]
Gráfico 9.6. Relación entre oferta y demanda. Total nacional
30.000
Demanda (solicitudes)
20.000
Oferta (cupos)
10.000
0
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
Oferta (cupos)
30.000
20.000
10.000
2000
1997
1998
1999
1994
1995
1996
1990
1991
1992
1993
1987
1989
1985
1986
1988
Oferta (cupos)
15.000
10.000
5.000
0
2000
1999
1998
1996
1997
1995
1994
1993
1991
1992
1990
1989
1988
1987
1986
1985
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
continuación, en cuanto a las personas que desean acceder a la educación
jurídica, son en realidad mucho más elevados.
En términos nacionales la cobertura general tuvo una tendencia
general al incremento, aumentando especialmente los últimos diez años
del período, donde pasa de una cobertura del 68,8% en 1990 al 115,13%
en 2000.
Esto se debe principalmente al sector privado: con una cobertura
inicial del 72,76% en 1985, aumenta al 77,53% en el primer quinquenio y,
después de la implementación de la ley 30 del 92, alcanza el porcentaje de
cobertura total en 1995, con el 109,89%, y una sobreoferta para 2000 de
127,31%. Por su parte, el sector público muestra un comportamiento inver-
so con un decrecimiento constante desde comienzos del período, cuando
era de 43,87%, hasta 1995, cuando es tan solo del 33,88%, aunque para el
último quinquenio casi se duplica llegando al 60,6%. [ 233 ]
En la región Andina la cobertura pública, que es del 53,7% a co-
mienzos del período, decae a lo largo de este, y finalmente vuelve a subir
[ 234 ]
Los abogados en Colombia
Bogotá
Andina
Orinoquia y Amazonia
Costa Atlántica
Pacífica
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
La cobertura privada presenta el fenómeno contrario, de incremento cons-
tante durante el período, llegando incluso a una sobreoferta del 168,2% en
1995, para nivelarse, respecto a la demanda, en 2000.
En Santander la oferta pública comienza con la promulgación de la
ley 30 del 92, siendo hasta entonces de carácter exclusivamente privado, y
sin embargo con tasas de cobertura general alrededor del 100%. De hecho
la cobertura general decrece con la apertura de los programas oficiales, por
un desplazamiento de la demanda hacia el sector público, que sin embargo
alcanza a cubrir solo el 28,7% de la demanda en 1995 y el 12,5% en 2000.
Sin embargo, esta disminución se ve compensada por el aumento de la
cobertura privada en el último quinquenio.
Para quienes abogamos por el fortalecimiento de la educación pú-
blica, el caso más alentador es el del Valle, que ya para 1985 tenía una co-
bertura media del 71,1%, y ha mantenido una media de cobertura oficial [ 235 ]
constante a lo largo del período. La cobertura privada fue también siempre
estable y alta.
An á l i s i s e s t a d í s t i c o d e l a of e r t a y l a ...
Privada ,7541 1,8182
Magdalena
Total ,7541 1,8182
Privada ,9952 ,9289
Meta
Total ,9952 ,9289
Privada 1,4159
Nariño Oficial ,2247 ,1914 ,1844 ,1941
Total ,2247 ,1914 ,1844 ,8050
15 Bourdieu, Pierre. 1993. “Génesis y estructura del campo burocrático”. Actes de la Recherche
en Sciences Sociales, 96-97, pp. 49-62.
Solicitudes a
13,50% 1,30% 14,80% 5,50% 3,80% 9,30% 48,60% 4,10% 52,70% 2,60% 2,60% 6,70% 1,20% 7,90% 81,60% 18,40% 100,00%
Primer Curso
Matriculados
6,70% 2,40% 9,20% 9,20% 3,20% 12,40% 46,30% 4,10% 50,40% 4,60% 4,60% 8,60% 1,50% 10,10% 83,50% 16,50% 100,00%
en Primer Curso
1985
Cupos de
6,20% 1,30% 7,50% 11,30% 3,00% 14,30% 47,80% 2,40% 50,20% 5,00% 5,00% 8,80% 1,50% 10,30% 87,30% 12,70% 100,00%
Admisión
Porcentaje de
28,89% 48,78% 33, 86% 112,50% 39,87% 94,39% 63,61% 27,90% 58,85% 98,69% 98,69% 73,67% 63,49% 71,12% 72,76% 43,87% 65,92%
Cobertura
Solicitudes a
6,40% 6,10% 12,50% 5,70% 3,70% 9,40% 46,00% 7,90% 53,80% 2,30% 2,30% 9,30% 0,90% 10,10% 76,80% 23,20% 100,00%
Primer Curso
Matriculados
6,60% 3,70% 10,30% 9,00% 3,60% 12,70% 45,80% 4,30% 50,10% 3,90% 3,90% 9,10% 0,70% 9,90% 84,40% 15,60% 100,00%
en Primer Curso
1990
Cupos de
6,50% 1,10% 7,50% 9,20% 3,90% 13,10% 48,80% 3,70% 52,50% 4,60% 4,60% 9,10% 0,70% 9,80% 87,80% 12,20% 100,00%
Admisión
Porcentaje de
61,10% 10,11% 48,36% 89,86% 60,17% 82,43% 76,50% 32,91% 70,69% 114,57% 114,57% 72,80% 41,96% 65.09% 77,53% 37,62% 68,08%
Cobertura
continúa...
* Los matriculados a primer curso incluye tanto los primíparos como los que lo cursan por segunda vez. Es significativa la relación entre los cupos ofrecidos y los matriculados según el
carácter de la educación, análisis que resulta impertinente en este trabajo.
** El porcentaje de cobertura se ha calculado dividiendo la sumatoria de cupos entre la sumatoria de solicitudes, por 100. Porcentajes por encima del 100% indican sobreoferta.
[ 240 ]
Antioquia Atlántico Bogotá Santander Valle Total Nacional
ProfesionJuridica.indd 240
Privada Oficial Total Privada Oficial Total Privada Oficial Total Privada Oficial Total Privada Oficial Total Privada Oficial Total
Solicitudes a
7,70% 4,00% 11,70% 5,40% 4,10% 9,50% 36,30% 10,10% 46,30% 3,40% 1,30% 4,70% 5,60% 0,80% 6,50% 72,50% 27,50% 100,00%
Primer Curso
Matriculados
7,80% 1,20% 8,90% 9,00% 2,90% 12,00% 40,10% 2,20% 42,30% 6,10% 0,80% 6,90% 7,40% 1,10% 8,50% 88,40% 11,60% 100,00%
en Primer Curso
1995
Cupos de
11,00% 1,00% 12,00% 8,70% 2,40% 11,10% 43,50% 1,80% 45,40% 5,20% 0,60% 5,80% 6,30% 2,00% 8,30% 89,40% 10,60% 100,00%
Admisión
Porcentaje de
81,56% 14,49% 71,98% 105,94% 34,85% 88,17% 168,17% 17,59% 156,12% 91,97% 28,75% 79,33% 70,77% 144,23% 83,01% 109,89% 33,88% 97,89%
Cobertura
Solicitudes a
6,50% 10,50% 17,00% 6,20% 5,60% 11,80% 23,30% 11,90% 35,30% 3,10% 2,30% 5,40% 7,50% 1,50% 9,00% 58,60% 41,40% 100,00%
Primer Curso
Matriculados
8,60% 4,80% 13,30% 9,80% 1,00% 10,80% 31,00% 3,60% 34,50% 5,70% 0,60% 6,20% 8,20% 2,70% 10,80% 81,30% 18,70% 100,00%
en Primer Curso
2000
Cupos de
9,70% 2,30% 12,00% 13,50% 0,80% 14,20% 30,10% 4,10% 34,10% 5,10% 0,40% 5,50% 8,10% 2,10% 10,10% 85,80% 14,20% 100,00%
Admisión
Porcentaje de
127,71% 83,28% 118,82% 151,02% 9,47% 133,32% 107,05% 78,07% 103,31% 166,56% 12,55% 147,30% 143,13% 97,22% 133,95% 127,31% 60,60% 115,13%
Cobertura
a. El porcentaje de cobertura se ha calculado con la suma total de cupos entre la suma total de solicitudes. Porcentajes por encima del 100% indican una sobre oferta.