You are on page 1of 217

CULTIVOS DE CLIMA MEDIO

JUNER SANDRO TORRES MALAGÓN


Ingeniero Agrónomo

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA UNAD


ESCUELA DE CIENCIAS AGRARIAS, PECUARIAS Y DEL MEDIO
AMBIENTE
PROGRAMA DE AGRONOMÍA
2007
COMITÉ DIRECTIVO

Jaime Alberto Leal Afanador


Rector

Roberto Salazar Ramos


Vicerrector Académico

Sehifar Ballesteros Moreno


Vicerrector Administrativo y Financiero

Maribel Córdoba Guerrero


Secretaria General

Edgar Guillermo Rodríguez


Director de Planeación

MÓDULO CULTIVOS DE
CLIMA MEDIO

© Copyrigth
Universidad Nacional Abierta y a Distancia

ISBN

2007
Centro Nacional de Medios para el Aprendizaje

2
TABLA DE CONTENIDO

INTRODUCCIÓN 11

OBJETIVOS 13

UNIDAD 1. FUNDAMENTOS DE CULTIVOS DE CLIMA


MEDIO Y CARACTERÍSTICAS DE ALGUNOS CULTIVOS. 14

CAPÍTULO 1. ASPECTOS BÁSICOS 14

1.1. Lección 1. El piso térmico medio 15


1.1.1. Temperatura. 16
1.1.2. Precipitación. 16
1.1.3. Radiación solar. 18
1.1.4. Insolación (Brillo solar). 18
1.1.5. Vientos. 18
1.1.6. Evaporación. 18

1.2. Lección 2. Suelos de clima medio. 20


1.2.1. Reacción del suelo (pH) y aluminio. 20
1.2.2. Materia orgánica. 21
1.2.3. Fósforo. 21
1.2.4. Potasio. 21
1.2.5. Azufre. 21
1.2.6. Calcio y magnesio. 22
1.2.7. Elementos menores. 22

1.3. Lección 3. Aspectos botánicos de la planta. 23


1.3.1. Los órganos de la planta. 23

1.4. Lección 4. Aspectos técnicos (labores culturales). 32


1.4.1. Preparación de suelos. 32
1.4.2. Siembra. 33
1.4.3. Transplante. 34
1.4.4. Raleo. 34
1.4.5. Aporque. 34
1.4.6. Poda. 35
1.4.7. Tutorado. 35
1.4.8. Riego. 35
1.4.9. Fertilización. 36
1.4.10. Encalado de los suelos. 37
1.4.11. Control de arvenses. 38
1.4.12. Control de enfermedades. 38
1.4.13. Control de plagas. 39

3
1.5. Lección 5. Aspectos económicos. 40
1.5.1. Recursos financieros. 40
1.5.2. Tipo de producto 41
1.5.3. Cantidad a producir. 41
1.5.4. Entorno. 42
1.5.5. Mano de obra. 42
1.5.6. Maquinaria. 43
1.5.7. Tecnología. 43
1.5.8. Transporte. 44
1.5.9. Empaque. 44
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 45
AUTOEVALUACIÓN 45

CAPÍTULO 2. CULTIVOS DE CICLO CORTO. 47

2.1. Lección 6. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo de la habichuela. 47
2.1.1. Morfología. 48
2.1.2. Condiciones agroecológicas. 49
2.1.3. Labores del cultivo. 50

2.2. Lección 7. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo de la


habichuela y su control. 53
2.2.1. Manejo de Arvenses. 53
2.2.2. Plagas. 53
2.2.3. Enfermedades. 54

2.3. Lección 8. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo


del fríjol. 55
2.3.1. Botánica. 55
2.3.2. Aspectos ecológicos. 57
2.3.3. Variedades. 58
2.3.4. Labores culturales. 58

2.4. Lección 9. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del fríjol


y su control. 61
2.4.1. Control de Arvenses. 61
2.4.2. Plagas. 61
2.4.3. Enfermedades. 64
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 67
AUTOEVALUACIÓN 67

CAPÍTULO 3. CULTIVOS SEMIPERMANENTES. 68

3.1. Lección 10. Aspectos botánicos y labores culturales del.


cultivo de la arracacha. 68
3.1.1. Descripción botánica. 69
3.1.2. Condiciones ecológicas. 71

4
3.1.3. Actividades del cultivo. 71
3.1.4. Post-cosecha. 72

3.2. Lección 11. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo de.


la arracacha y su control. 74
3.2.1. Control de Arvenses. 74
3.2.2. Control de enfermedades. 74
3.2.3. Plagas. 75

3.3. Lección 12. Aspectos botánicos y labores culturales del.


cultivo del plátano. 77
3.3.1. Morfología. 77
3.3.2. Variedades comerciales. 79
3.3.3. Condiciones ecológicas. 80
3.3.4. Establecimiento y labores de manejo. 80
3.3.5. Post-cosecha. 84

3.4. Lección 13. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


plátano y su control. 85
3.4.1. Manejo de Arvenses. 85
3.4.2. Enfermedades. 86
3.4.3. Plagas. 91

3.5. Lección 14. Aspectos botánicos y labores culturales del.


cultivo de las aromáticas. 96
3.5.1. Plantas aromática recomendadas para las zonas de clima medio. 96
3.5.2. Condiciones agroecológicas para el cultivo. 98
3.5.3. Actividades de manejo. 98
3.5.4. Post-cosecha. 103

3.6. Lección 15. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo de las


aromáticas y su control. 105
3.6.1. Arvenses. 105
3.6.2. Enfermedades 105
3.6.3. Plagas. 107
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 110
AUTOEVALUACIÓN 110

UNIDAD 2. CULTIVOS DE CICLO LARGO DE IMPORTANCIA


EN EL CLIMA MEDIO. 111

CAPÍTULO 4. CULTIVOS VEGETATIVOS. 111

4.1. Lección 16. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo de la sábila. 112
4.1.1. Taxonomía y botánica. 112
4.1.2. Requerimientos agroecológicos. 114
4.1.3. Labores del cultivo. 115

5
4.2. Lección 17. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo de
la sábila y su control. 119
4.2.1. Arvenses. 119
4.2.2. Enfermedades. 119
4.2.3. Plagas. 121

4.3. Lección 18. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo del fique. 124
4.3.1. Clasificación. 124
4.3.2. Condiciones ecológicas. 126
4.3.3. Labores culturales. 127
4.3.4. Costos de producción. 131

4.4. Lección 19. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


fique y su control. 132
4.4.1. Arvenses. 132
4.4.2. Plagas. 132
4.4.3. Enfermedades. 134

4.5. Lección 20. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo del espárrago. 138
4.5.1. Botánica y taxonomía. 138
4.5.2. Condiciones agroecológicas. 140
4.5.3. Labores del cultivo. 140

4.6. Lección 21. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


espárrago y su control. 145
4.6.1. Arvenses. 145
4.6.2. Enfermedades. 145
4.6.3. Plagas. 146
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 148
AUTOEVALUACIÓN 148

CAPÍTULO 5. CULTIVOS ARBUSTIVOS. 149

5.1. Lección 22. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo del café. 149
5.1.1. Taxonomía y botánica. 150
5.1.2. Condiciones agroecológicas. 153
5.1.3. Labores culturales. 154
5.1.4. Costos de implantación. 158

5.2. Lección 23. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


café y su control. 160
5.2.1. Arvenses. 160
5.2.2. Plagas. 160
5.2.3. Enfermedades. 164

6
5.3. Lección 24. Aspectos botánicos y labores culturales del
cultivo del chachafruto. 169
5.3.1. Taxonomía y morfología. 169
5.3.2. Requerimientos agroecológicos. 171
5.3.3. Labores culturales. 172

5.4. Lección 25. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


chachafruto y su control. 177
5.4.1. Arvenses. 177
5.4.2. Plagas. 177
5.4.3. Enfermedades. 181

5.5. Lección 26. Aspectos botánicos, labores culturales y


características del cultivo de la higuerilla. 184
5.5.1. Taxonomía y botánica. 184
5.5.2. Condiciones agroecológicas. 185
5.5.3. Labores del cultivo. 186
5.5.4. Manejo fitosanitario. 188
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 189
AUTOEVALUACIÓN 189

CAPÍTULO 6. OTROS CULTIVOS. 191

6.1. Lección 27. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo del maní. 192
6.1.1. Morfología y taxonomía. 192
6.1.2. Condiciones agroecológicas. 194
6.1.3. Labores del cultivo. 195

6.2. Lección 28. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


maní y su control. 198
6.2.1. Enfermedades. 198
6.2.2. Plagas. 200

6.3. Lección 29. Aspectos botánicos y labores culturales del


cultivo del estropajo. 202
6.3.1. Taxonomía y morfología. 202
6.3.2. Condiciones agroecológicas. 203
6.3.3. Labores culturales. 204

6.4. Lección 30. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del


estropajo y su control. 209
6.4.1. Arvenses. 209
6.4.2. Enfermedades. 209
6.4.3. Plagas. 210
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS 212
AUTOEVALUACIÓN 212

BIBLIOGRAFÍA 213

7
ÍNDICE DE FIGURAS

Figura 1. Zonas de clima medio en Colombia. 17


Figura 2. Raíz fasciculada. 25
Figura 3. Diferentes formas de hojas 26
Figura 4. Flor con sus partes 28
Figura 5. Semillas sexuales de diferentes especies 31
Figura 6. Labor de rastra arado. 33
Figura 7. Legumbre de habichuela. 49
Figura 8. Sistema de tutorado y amarre en habichuela. 52
Figura 9. Planta de fríjol. 55
Figura 10. Hojas de fríjol. 56
Figura 11. Semilla de fríjol. 57
Figura 12. Adulto de Empoasca sp. 62
Figura 13. Planta afectada por empoasca. 62
Figura 14. Adultos, hembras y huevos de ácaros en el envés de
las hojas. 63
Figura 15. Adulto mosca blanca. 64
Figura 16. Adultos de Epitrix cucumeris. 64
Figura 17. Presencia de roya en hoja. 65
Figura 18. Raíz de arracacha. 70
Figura 19. Planta de arracacha. 70
Figura 20. Presencia de Alternaria en tallo. 75
Figura 21. Nemátodos. 76
Figura 22. Morfología del plátano. 78
Figura 23. Síntomas de Sigatoka amarilla. 86
Figura 24. Síntomas de Sigatoka negra. 88
Figura 25. Racimo afectado por Moko. 89
Figura 26. Adulto de Picudo negro. 91
Figura 27. Gusano Tornillo. 93
Figura 28. Gusano Canasta. 94
Figura 29. Gusano peludo de las hojas. 95
Figura 30. Planta de Hierba buena. 97
Figura 31. Planta de Orégano. 97
Figura 32. Planta de Menta. 97
Figura 33. Hoja con ataque de Alternaria sp. 106
Figura 34. Larva de Spodoptera. 108
Figura 35. Daño y adulto de Liriomyza sp. 109
Figura 36. Planta de Sábila. 113
Figura 37. Hoja de Sábila. 113
Figura 38. Cultivo de Aloe vera. 116
Figura 39. Adulto de Spodoptera. 121
Figura 40. Presencia de Áfidos en hoja. 123
Figura 41. Planta de fique. 124
Figura 42. Tallo de fique. 125
Figura 43. Hojas de fique. 125
Figura 44. Corte de hoja atacada por el pasador. 133
Figura 45. Planta afectada por Leptosphaeria sp. 135

8
Figura 46. Planta invadida por el C. salmonicolor. 136
Figura 47. Planta recién atacada por Macana. 137
Figura 48. Planta de espárrago. 138
Figura 49. Tallos de espárrago. 139
Figura 50. Disposición de los surcos para la plantación de espárragos. 141
Figura 51. Aporcado del espárrago para la cosecha. 142
Figura 52. Presencia de Roya en hoja. 146
Figura 53. Presencia de Cercospora en hoja. 146
Figura 54. Larva de Spodoptera. 147
Figura 55. Inflorescencia de café. 152
Figura 56. Fruto del café. 152
Figura 57. Adulto de Hypothenemus hampei. 161
Figura 58. Daño de minador del café. 163
Figura 59. Síntomas de la roya en hojas de café. 164
Figura 60. Síntomas de mancha de hierro en hojas de café. 166
Figura 61. Ataque de ojo de gallo en hojas. 167
Figura 62. Planta de chachafruto. 170
Figura 63. Semilla de chachafruto. 171
Figura 64. Adulto de Empoasca sp. 178
Figura 65. Daño de larva de Spodoptera sp. 180
Figura 66. Adulto de Epitrix cucumeris. 181
Figura 67. Presencia de roya en hoja. 181
Figura 68. Morfología del maní. 193
Figura 69. Flor del estropajo. 203
Figura 70. Fruto del estropajo. 203
Figura 71. Sistema del emparrado para el estropajo. 206
Figura 72. Estropajo procesado. 207

9
INDICE DE TABLAS

TABLA 1. Distribución porcentual del azufre disponible en los suelos 22


de las regiones de clima medio.

TABLA 2. Niveles de elementos mayores para el cultivo del fríjol. 59

TABLA 3. Métodos de propagación y distancias de siembra de


especies aromáticas. 100

TABLA 4. Costos de producción del cultivo del café. 158

10
INTRODUCCIÓN

Colombia es un país que gracias a su situación geográfica presenta ventajas


comparativas y competitivas que le permiten tener la posibilidad de desarrollar
un gran número de actividades agrícolas y productivas.

Es así que la presencia de tres cordilleras genera diferentes pisos térmicos con
condiciones de clima y suelos bien definidos y que los hacen característicos
con relación a su uso potencial desde el punto de vista de producción
alimenticia.

Entre los pisos térmicos que se expresan en nuestro territorio está el de clima
medio, sin duda uno de los más importantes por la calidad del sustrato edáfico
y por las condiciones de clima que permiten el establecimiento y desarrollo de
una gran cantidad de especies vegetales de importancia económica, social y
alimentaria para las personas que habitan estas regiones y para el país en
general.

Entre las especies que se desarrollan en las regiones de clima medio se


encuentran dos de gran importancia, el café y el plátano, que generan divisas
para el país y proporcionan bienestar a las familias productoras.

Por otra parte no se debe menos preciar la importancia de otras especies


desarrolladas en estas condiciones como son el fríjol, la arracacha y el
espárrago que suministran un buen número de proteínas y vitaminas al
convertirse en fuente primaria en la alimentación de las familias que realizan
los procesos productivos.

Un gran potencial productivo manifiestan otras especies establecidas en las


regiones de clima medio desde el punto de vista de manufactura y
transformación como el fique, la sábila y el estropajo, al servir como base para
la elaboración de subproductos que pueden llegar a comercializarse y porque
no convertirse en otro renglón generador de ingresos para la sociedad.

Dentro de todo proceso agrícola productivo es importante conocer y tener en


cuenta todas las variables que intervienen en el sistema y que van a permitir
obtener resultados aceptables desde el punto de vista de la producción. Es Por
esto que antes de iniciar el establecimiento de un cultivo se debe abordar
temas intrínsicos al mismo y a las condiciones del medio en donde se va a
desarrollar.

En el presente curso llamado cultivos de clima medio se dan a conocer las


condiciones climáticas y edáficas de esta zona. Igualmente se analizan los
factores técnicos, botánicos y económicos que son importantes para establecer

11
un sistema agrícola productivo. Estos conocimientos permiten tener las bases
necesarias para entender las características de manejo de cualquier cultivo.

Una vez analizados estos aspectos, en el presente módulo se continúa con la


presentación de los cultivos que se consideran de mayor importancia en las
zonas de clima medio de nuestro país, estudiando sus características
ecológicas, morfológicas y de manejo agronómico.

El estudiante al final del curso estará en capacidad de establecer o transformar


un sistema agrícola productivo que se exprese bajo las condiciones de clima
medio en nuestro país.

Durante el desarrollo de este curso el estudiante aumentará sus conocimientos


sobre los temas propuestos mediante la consulta en diferente material
bibliográfico y realizando revisiones en Internet.

Como este curso presenta características prácticas, es de gran importancia que


los conocimientos teóricos se vean complementados con actividades de campo
como visitas a diferentes sistemas productivos de esta zona. Con relación a
este aspecto el tutor será la persona indicada y responsable de hacer viable las
visitas prácticas de campo a diferentes cultivos.

Así mismo están definidos espacios, para el control, validación y discusión de


estas prácticas, ejercicios y componentes teóricos, en tutoriales, reuniones de
pequeños grupos colaborativos, grupos de curso y en una socialización final.

Los criterios de evaluación a tenerse en cuenta durante el desarrollo del


presente curso serán aquellos establecidos en el reglamento estudiantil de la
Universidad Nacional Abierta y a Distancia.

Se tendrán igualmente presente los enfoques estratégicos complementarios de


autoevaluación, coevaluación y heteroevaluación que permitan facilitar los
procesos de evaluación.

Como en la actualidad se requiere de personas calificadas y preparadas en


técnicas de manejo, aprovechamiento e investigación de los recursos agrícolas
que contribuyan a mejorar las condiciones de vida de las personas, es de gran
interés para la UNAD generar los espacios que faciliten la formación de estas
personas dentro de criterios de profesionalismo y ética social.

12
OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL

Conocer las características generales y de manejo de algunos cultivos de


importancia en la zona de clima medio.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

Reconocer las condiciones climáticas y edáficas presentes en las regiones en


donde se exprese el clima medio.

Contextualizar al educando dentro del contexto de producción agrícola


mediante la exposición de las características de las actividades realizadas
dentro de cada sistema productivo.

Generar la inquietud en el estudiante por la profundización en cada uno de los


cultivos propuestos en el curso.

Motivar al estudiante a continuar con su proceso de profesionalización


mediante la consulta y la visita a diferentes sistemas productivos.

13
UNIDAD 1. FUNDAMENTOS DE CULTIVOS DE CLIMA MEDIO Y
CARACTERÍSTICAS DE ALGUNOS CULTIVOS.

CAPÍTULO 1. ASPECTOS BÁSICOS

Antes de iniciar el estudio y desarrollo de un sistema agrícola no se puede


dejar de analizar los elementos que intervienen en el mismo. Factores como
las condiciones climáticas en donde se encuentra el cultivo; características de
los suelos base para el desarrollo de las especies; aspectos morfológicos de
las plantas; factores técnicos de manejo que permiten producciones óptimas; y
elementos económicos que regulan la ejecución de las actividades.

La interrelación de estos factores permitirá la viabilidad de todo sistema


productivo desde el punto de vista productivo y de rentabilidad.

En este capítulo se verán los aspectos más importantes que se deben tener en
cuenta y que son necesarios para establecer o manejar cualquier sistema
productivo en las zonas de clima medio de nuestro país.

Objetivos

Conocer los aspectos más importantes relacionados con las características


ecológicas y edáficas presentes en las regiones de clima medio.

Identificar las características botánicas y morfológicas de las plantas en


general.

Conocer las características de los aspectos técnicos y económicos que hacen


parte de todo sistema agrícola productivo.

14
1.1. Lección 1. El piso térmico medio

En nuestro país el piso térmico medio comprende una vasta zona, con
municipios ubicados dentro de las tres cordilleras que recorren el territorio
colombiano.

Son muchos los departamentos que presentan municipios con condiciones de


clima medio, entre los que se pueden mencionar Cundinamarca, Sur del Huila,
Nariño, Norte de Santander, Altiplano Cundiboyasence, Antioquia, Caldas,
Quindío y Tolima entre otros.

En términos generales los territorios pertenecientes al clima medio se


encuentran ubicados entre los 1000 y loa 2000 metros sobre el nivel del mar
(m.s.n.m) y una temperatura media no inferior a 17°C pertenecientes a los
diferentes departamentos ya mencionados.

Con relación a las características climáticas de Colombia se puede decir que


están determinadas fundamentalmente por la situación geográfica tropical del
país (la cual condiciona el tipo de circulación atmosférica general) y por sus
cadenas montañosas, las cuales modifican en cierto grado las condiciones
atmosféricas cerca de la superficie y originan diferentes situaciones
meteorológicas de carácter local.

La circulación atmosférica general sobre el país está asociada íntimamente con


el movimiento de la Zona de Confluencia Intertropical (ZCIT), principal sistema
meteorológico de estas latitudes. La ZCIT es aquella zona en la cual confluyen
masas de aire provenientes de los dos trópicos y que tienen diferentes
propiedades meteorológicas (temperatura, presión y humedad).

La confluencia de masas de aire con distintas características en un lugar dado


ocasiona una inestabilidad atmosférica que está acompañada de la formación
de nubes, precipitaciones y alta humedad relativa. Por ello, en las regiones
sobre las cuales actúa la ZCIT predomina el tiempo inestable y lluvioso.

Por esta razón, en la gran mayoría las zonas de clima medio del país se
presenta un régimen de precipitación bimodal, el cual se caracteriza por
presentar dos épocas de fuerte actividad pluvial que normalmente
corresponden a los meses de abril a mayo y de octubre a Noviembre y dos
períodos de escasas precipitaciones ente los meses de enero a febrero y de
julio a agosto.

El sistema orográfico es otro factor que determina las característica climáticas


que se manifiestan en las zonas de clima medio, debido a la influencia directa
de los vientos provenientes del este y oeste con alto contenido de humedad,
que ocasiona elevadas precipitaciones sobre las vertientes de las cordilleras
occidental y oriental.

15
Las condiciones climáticas en las zonas de clima medio son el resultado de la
interacción entre el relieve y los elementos metereológicos. Las dimensiones y
orientación de las montañas respecto a los vientos prevalecientes, influye sobre
los procesos a gran escala; el relieve relativo y la forma del terreno tienen
importancia a escala regional, mientras que la inclinación de la pendiente y su
aspecto causan diferenciaciones locales de clima.

Las zonas de clima medio presentan en términos generales las siguientes


características climáticas:

1.1.1. Temperatura

Las zonas de clima medio de nuestro país se encuentran geográficamente


ubicadas en su gran mayoría en las laderas de las cordilleras que alcanzan
alturas considerables. Este factor determina que se presente un clima
ecuatorial tropical isotérmico, es decir, prácticamente no existen variaciones
estacionales de temperatura a través del año, aunque sí se manifiesta una
oscilación diaria de la temperatura, con diferencias grandes entre el día y la
noche.

Se ha establecido que la temperatura media varía de acuerdo con la altitud,


esta disminuye 0.60 grados centígrados (°C) por cada 100 metros de aumento
en la ubicación sobre el nivel del mar.

En términos generales las temperaturas presentes en las zonas de clima medio


fluctúan entre los 20 y los 25°C.

1.1.2. Precipitación

Las lluvias en las zonas de clima medio son en su mayor parte de origen
coventivo, originadas por la influencia de relieve y por la circulación valle
montaña.

Teniendo en cuenta la situación tropical de Colombia, se puede decir que el


avance del Cinturón Intertropical de Convergencia determina el establecimiento
estacional de los períodos secos y lluviosos.

16
CLIMA fAlO
\olés de 2 000 m <; n ..,
CLIMA MEDIO

CLIMA CALIOO
.le O e 1 COO m & n '1"1.

Fuente: Guerrero Ricardo.1995


Figura 1.Zonas de Clima Medio en Colombia

17
1.1.3. Radiación Solar

La radiación solar es la encargada de suministrar la energía necesaria para los


procesos atmosféricos que ocurren en la tierra, y para permitir el desarrollo de
la actividad biológica más importante, la fotosíntesis.

Debido a la ubicación tropical de las zonas de clima medio, la radiación


astronómicamente posible es alta durante todo el año, con valores máximos en
las épocas secas del año.

La cantidad de radiación recibida en la superficie de la tierra presenta


modificaciones a nivel regional debido a la orientación y exposición de las
laderas. Altitudinalmente hay variación en la cantidad de la radiación asociada
con la frecuencia de nubosidad. El relieve del terreno influye en el tiempo de
exposición; una cadena de montañas suspende la radiación en algunas horas
de la mañana o de la tarde.

En términos generales y dependiendo de la presencia de sistemas


montañosos, en la zona de clima medio del país se presentan variaciones en la
radiación solar con valores entre 403 cal./cm2/día y 260 cal/cm2/día.

1.1.4. Insolación (brillo solar)

La insolación hace referencia al número de horas en que el sol brilla en una


localidad, en un período dado.

En las zonas de clima medio el brillo solar promedio es de 11.5 horas diarias,
dependiendo significativamente de las condiciones de nubosidad, exposición
de la ladera y la amplitud del horizonte.

1.1.5. Vientos

La topografía ejerce una gran influencia sobre la circulación de los vientos,


debido a la fuerza que ejerce el aire para desplazarse de un sector a otro.

Durante el día los vientos con aire caliente ascienden hacia la montaña y en la
noche desciende aire denso y frío hacia el valle. Este proceso da origen a
corrientes de aire de baja magnitud.

En condiciones generales en las zonas de clima medio se presentan vientos


con velocidades bajas, con valores promedios de 5.0 Km/hora.

1.1.6. Evaporación

18
La evaporación hace referencia a la perdida de agua en forma de vapor. Este
fenómeno depende de factores como la radiación, la temperatura, la tensión de
vapor y el viento.

En las zonas de clima medio la evaporación presenta volúmenes anuales


inferiores a 1.200 mm., debido a la poca variabilidad manifestada por los
factores climáticos ya mencionados.

19
1.2. Lección 2. Suelos de clima medio

Los suelos de clima medio en nuestro país han cumplido un papel muy
importante desde el punto de vista de producción agrícola, ya que a través de
la historia han sido la base para el establecimiento de un gran número de
especies vegetales como fuente principal de alimento e ingresos económicos.

Sin embargo, el uso contínuo de los suelos con manejos inadecuados y


condiciones abióticas ineficientes han ido disminuyendo el potencial productivo
expresándose en procesos de erosión y bajos rendimientos a través del tiempo.

En Colombia los suelos de las diferentes subregiones del clima medio se


distinguen por un relieve quebrado, con pequeñas áreas de tierras onduladas o
ligeramente planas. Esta zona cubre una extensión aproximada de 2.560.000
hectáreas. En general, en estos suelos los procesos erosivos son acentuados
hasta el punto que en algunas regiones el horizonte orgánico superficial, es
muy delgado con menos de 20 cm en la mayoría de los sitios.

Los suelos de las regiones de clima medio en nuestro país se caracterizan por
presentar una topografía quebrada que favorece los procesos erosivos. Son
suelos moderadamente evolucionados y su naturaleza mineralógica presenta
características variables.

Predominan en gran mayoría los suelos de naturaleza volcánica, producto de


las erupciones en épocas milenarias, particularmente en zonas cafeteras.

Los suelos presentes en las zonas de clima medio en nuestro país, con
relación a la fertilidad se caracterizan por:

1.2.1. Reacción del suelo (pH) y Aluminio.

La mayoría de los suelos de clima medio presentan valores de pH bajos


(menos de 5.5) o medios (5.6 - 7.0), relacionados con problemas de acidez,
que interfieren en el desarrollo de la mayoría de especies vegetales de interés
agronómico.

En gran parte de los suelos se presentan bajos niveles de aluminio


intercambiable (menos de 1.0 meq/100g) es decir, la mayor parte de los suelos
de clima medio del país están libres de niveles tóxicos de aluminio.

A nivel regional, se puede expresar que en los municipios de Cundinamarca


predominan los suelos con pH menos de 5.5, en tanto que, en municipios del
sur de Huila y Nariño manifiestan valores medios de pH (5.5 a 7.3).

20
1.2.2. Materia orgánica

En las zonas de clima medio de Colombia, existen suelos con predominio de


materia orgánica con niveles bajos (menos del 3.0 %), en cultivos establecidos
como pastos, caña y tomate; concentraciones medianas de materia orgánica
(3.1 a 5.0 %) en cultivos como pastos y cacao; y suelos con niveles altos (más
del 5%) en cultivos de caña y pastos. Esto quiere decir, que en el clima medio,
las concentraciones de materia orgánica distribuidos entre las categorías alta,
media y baja se encuentran relativamente equilibradas.

Debido al origen volcánico del material edáfico, es de esperarse que el


contenido de materia orgánica, sea relativamente mayor que el presente en
suelos de otras condiciones climáticas. Por otra parte, las temperaturas
medias, la alta humedad y los pH bajos, también condicionan una baja
actividad microbiana que ocasiona poca mineralización de la materia orgánica
y por lo tanto su acumulación mayor.

1.2.3. Fósforo

El mayor porcentaje de suelos de clima medio presenta valores bajos de


fósforo aprovechable, debido posiblemente al efecto antagónico de los pH
ácidos, sobre este elemento. Igualmente, los compuestos de origen volcánico
ejercen procesos de fijación de fosfatos que imposibilita la toma del elemento
por parte de las raíces de las plantas.

Es por esto, que en cultivos como caña, plátano, piña y cacao los rendimientos
en la producción se vean afectados por la deficiencia en fósforo.

1.2.4. Potasio

En clima medio la distribución de potasio cambiable no guarda una tendencia


clara. En términos generales los cultivos de piña, plátano, caña y cacao
presentan la mayor probabilidad de estar expuestos a deficiencias de este
elemento.

A nivel regional en los suelos de clima medio de Cundinamarca se presentan


valores bajos, medios y altos del potasio. En los suelos del sur de Huila
predominan valores medios de este elemento. En los suelos de Norte de
Santander predominan valores bajos, y en Nariño se observa alta
disponibilidad, debido principalmente por la presencia de material volcánico.

1.2.5. Azufre

En términos generales en los suelos de clima medio se presenta baja reserva


total de azufre con la consiguiente probabilidad de niveles deficientes del
elemento para los cultivos.

21
En algunas zonas del clima medio de Colombia, el azufre luce como un
elemento problema por presencia de concentraciones bajas de S-total y S-
orgánico como es el caso del Sur del Huila, Antioquia y Nariño.

Según Guerrero (Monómeros de Colombia) en 1995 y como se observa en la


tabla 1, la proporción de suelos con nivel de S-disponible muy bajo, en las
regiones de clima medio del país, oscila entre el 42% (Cauca) y 98% (Nariño).
En la mayoría de los departamentos, los suelos con disponibilidad baja o muy
baja son superiores al 80%. En consecuencia, la probabilidad de que en los
suelos de clima medio se presente deficiencia acentuada del elemento azufre
se considera muy alta.

TABLA 1. Distribución porcentual del azufre disponible en suelos de las


regiones de clima medio. Tomado de Guerrero, 1995.

Azufre C/marca Boyacá Nariño S/der Norte de Ant/quia Cauca Total


Disponible S/der
˂ 5 ppm 62.9% 61.6 % 98.9 % 61.7 % 81.2 % 69.0 % 42.6 67.5
Muy bajo % %
5.1 – 10 20.4 30. 0 2.0 35.8 17.7 27.5 48.1 25.2
ppm. Bajo
10.1-15 8.3 3.3 - 2.5 1.1 - 5.5 3.8
ppm
˂ 15 ppm 8.3 5.0 - - - 3.4 3.7 3.4
Alto

1.2.6. Calcio y Magnesio

En zonas de clima medio en Colombia la situación de la disponibilidad del


calcio y del magnesio es relativamente variable en los diferentes suelos,
caracterizándose por presentar niveles altos. Es así como se presentan
concentraciones cambiables altas, en departamentos como Nariño, Antioquia y
Cundinamarca hasta el punto de causar deficiencias de potasio por relaciones
(Ca + Mg)/K elevadas; en el sur del Huila y Norte de Santander predominan los
valores intermedios

1.2.7. Elementos menores

En el clima medio de Colombia se presentan ocasionalmente deficiencias de


boro, zinc, cobre y molibdeno, particularmente en cultivos de frutales.

La importancia de la presencia o ausencia de elementos menores depende


principalmente de las exigencias nutricionales de la especie vegetal que se
desarrolle, la cual determina el nivel de deficiencia de un elemento en
particular.

22
1.3. Lección 3. Aspectos botánicos de la planta

1.3.1. Los órganos de la planta

En las plantas superiores desde el punto de vista fisiológico existe una


diferenciación funcional y una distribución del trabajo. La asociación y
especialización de varias células origina la formación de tejidos que cumplen
funciones específicas y que son originados a partir de estructuras denominadas
meristemos.

El complejo cuerpo pluricelular de una planta con semillas es resultado de una


evolutiva especialización de larga duración. Esta especialización ha conducido
al establecimiento de diferencias morfológicas y fisiológicas entre las distintas
partes del cuerpo de la planta y ha determinado la aparición del concepto de
órganos estructurales.

Las relaciones de tallo, hoja y raíz, entre sí y con la planta como conjunto, han
sido, y todavía son, uno de los centros de estudio fundamentales de la
morfología de las plantas. A este respecto la cuestión principal es saber si los
órganos difieren esencialmente entre ellos o si constituyen modificaciones.

La naturaleza morfológica de las flores de las angiospermas es otro aspecto de


discusión. La interpretación más tomada es que la flor es homóloga a un brote
y las partes florales a hojas. Se cree que las hojas y las partes florales se han
originado a partir de sistemas de ramas.

Sin embargo, para realizar los procesos descriptivos de las plantas las
categorías morfológicas de raíz, tallo, hojas y flores son las más utilizadas.

La estructura de una planta vascular está formada por tres sistemas de tejidos,
el dérmico, el vascular y el fundamental:

El sistema dérmico forma la envoltura protectora exterior de la planta y está


representado en el cuerpo primario de la planta por la epidermis. Durante el
crecimiento secundario, la epidermis puede ser sustituida por otro sistema
dérmico conocido con el término de la peridermis, con células de corcho o
suber formando un nuevo tejido protector. El sistema vascular se compone de
dos principales conductores, el floema y el xilema. Estos tejidos contienen
muchos tipos de células, algunas de las cuales son comunes en los tejidos
vasculares mientras que otras también se presentan en los sistemas dérmico y
fundamental.

El sistema de tejidos fundamentales incluye los demás tejidos que no forman


parte de los sistemas dérmico y vascular: El parénquima es uno de los más
comunes; parte de él puede modificarse como tejido de sostén de paredes
engrosadas llamándose colénquima. Pueden presentarse otras modificaciones
de las células parenquimáticas, varias estructuras secretoras, las cuales
pueden hallarse en el sistema fundamental como células individuales o como

23
complejos celulares más o menos extensos. El sistema fundamental contiene a
menudo elementos mecánicos muy especializados y combinados en masas
coherente denominados esclerénquima.

A continuación se dan algunas características de los principales órganos de las


plantas. Se pretende con la discusión de este tema entender las
características morfológicas y su relación con los procesos productivos de las
especies tratadas en este módulo con base en los conocimientos adquiridos.

RAÍZ

Es la porción de la planta que crece en sentido inverso al tallo, hundiéndose en


la tierra, y que carece de hojas y de flores. Las funciones principales de la raíz
por un lado, es absorber el agua y las sustancias minerales necesarias para la
vida de la planta, y por el otro, servir a ésta de órgano de fijación y sostén.

Las raíces muestran una gran variación en cuanto a su morfología, pero de


modo general pueden distinguirse en ellas dos zonas principales: el ápice,
llamado caliptra o cofia, que es una zona de crecimiento, y otra revestida de
numerosos pelos de longitud variable, denominados pelos radicales. Cerca de
la superficie del suelo existe, además, una zona de transición que comunica
con el tallo.

La caliptra tiene forma de vaina, se encuentra en el ápice de la raíz, protege el


cono vegetativo y ayuda a la penetración en el suelo.

El crecimiento general de la raíz se realiza por un geotropismo que permite que


profundice cada vez más en la tierra.

Como ya se mencionó una de las funciones principales de la raíz es la


absorción de agua y de las sustancias que esta lleva disueltas. El fenómeno se
produce en especial en las partes más jóvenes, a través de los pelos radicales
y en menor medida a través de las porciones que han experimentado un
crecimiento secundario.

La raíz constituye también órgano de reserva de la planta y almacena en su


corteza diversas sustancias alimenticias sobre todo almidón. En algunos casos
transforma de manera específica para esta función y en ella aumenta entonces
el parénquima de reserva.

Una tercera función de las raíces es la de servir de órgano de fijación de la


planta. Al penetrar a mayor o menor profundidad en el suelo permite que la
parte aérea experimente un desarrollo variable y resista su propio peso a la
acción del viento.

La raíz puede ramificarse y llegar a formar una red muy tupida y extensa. La
ramificación es típica de las gimnospermas y de las dicotiledóneas y puede
presentarse de dos modos distintos. En unos casos se distingue una raíz

24
principal de la que surgen las secundarias, cuyo desarrollo global no supera al
de aquélla. En otras especies el desarrollo de la raíz principal y de las
secundarias es el mismo y pronto no se diferencian, con lo cual se obtiene una
amplia red fasciculada.

Foto del autor


Figura 2. Raíz fasciculada

El desarrollo de las monocotiledóneas se caracteriza porque la raíz principal


que nace de la semilla muere al cabo de un cierto tiempo y entonces de la base
del tallo surgen otras raíces, llamadas raíces adventicias, que también pueden
ramificarse. Las raíces adventicias crecen también en otras partes del tallo e
incluso de las hojas.

Algunas especies como las leguminosas presentan en sus raíces sistemas de


asociaciones con hongos que les permite aprovechar eficientemente el
nitrógeno del suelo.

TALLO

El tallo corresponde a la zona del eje de las plantas vasculares que lleva hojas,
yemas y órganos reproductores. Por lo general es la porción aérea aunque en
algunos casos como sucede con los rizomas es subterránea.

A partir del embrión se desarrolla la primera yema denominada plúmula y un


eje denominado epicotilo que en posteriores fases dará origen al tallo.

Externamente los tallos están formados por los nudos y los entrenudos. Los
nudos son aquellas porciones en las que nacen una o varias hojas con
disposición diversa, y los entrenudos son las zonas situadas entre aquéllos,
que se desarrollan por crecimiento intercalar, de longitud variable y no llevan
hojas.

25
La forma de los tallos caracteriza el porte de la planta. Existen así tallos
erectos, semi erectos, postrados o rastreros.

Existen diferentes formas especiales de tallos como son los subterráneos que
perduran cuando muere la parte aérea de la planta, entre los cuales se pueden
mencionar:

Los rizomas que son de aspecto más o menos cilíndrico y se desarrollan


paralelos a la superficie del suelo; los tubérculos en los que la médula
experimenta un gran desarrollo y sirve de depósito de sustancias de reserva;
los bulbos que presentan una gran transformación del aspecto original y el tallo
queda reducido a una pequeña porción del eje rodeada de numerosas hojas
modificadas.

Igualmente existen tallos carnosos o suculentos que se han convertido en


órganos de reserva de agua y que muchas veces, por reducción de las hojas,
se encargan de manera secundaria de la función fotosintética.

HOJAS

La hoja es todo órgano lateral que brota a partir del tallo o de las ramas, que
tiene forma más o menos aplanada y cuya función principal es la asimilación de
los hidratos de carbono.

Las partes fundamentales de una hoja adulta son: la base de inserción al tallo,
la vaina como ensanchamiento de aquélla, el pecíolo o parte alargada que le
sigue al sitio de unión al y la lámina o limbo, con una zona dorsal ( haz) y otra
ventral ( envés). Algunas hojas pueden tener apéndices basales denominados
estípulas.

Tomado de Internet
Figura 3. Diferentes formas de hojas

Las hojas se desarrollan a partir del ápice del brote o tallo. Por división celular
en los lados de dicho brote surgen los esbozos foliares denominadas yemas, a

26
partir de las cuales se originarán las hojas gracias a un proceso de crecimiento
continuado de diferenciación.

La duración de las hojas es variable: en algunas especies perduran durante


varios años y las nuevas que crecen sustituyen a las que mueren, con lo cual la
planta se mantiene siempre verde, en otras se están renovando
permanentemente.

La función principal de las hojas es realizar el proceso de fotosíntesis gracias a


la presencia de clorofila en su estructura. Para ello están dotadas de gran
cantidad de cloroplastos y de una membrana transparente que permite el paso
de la luz hasta estas fábricas biológicas.

El parénquima esponjoso aumenta la superficie interna de la hoja y mediante


sus numerosas cavidades y a través de los estomas permite el intercambio
gaseoso; es decir, durante el día la planta absorbe dióxido de carbono y
produce oxígeno y por la noche introduce algo de éste en su interior.

Las hojas de las monocotiledóneas se caracterizan por presentar las


nervaduras paralelas a la margen del limbo. Por su parte en las dicotiledóneas
se localizan comúnmente perpendiculares a ésta.

La clasificación de las hojas está dada principalmente por la forma que


presenta (acorazonada, lanceolada, circular), por la forma de la margen
(dentada, aserrada, lisa), por el ángulo que forma en la base (agudo, obtuso,
recto), por el ángulo del ápice y por otras propiedades relacionadas a sus
características morfológicas.

FLOR

La flor es la estructura reproductora típica de las angiospermas. Consiste en un


brote especializado con hojas transformadas que constituyen un órgano cuya
función primordial es la reproducción de la planta. Adquiere una gran diversidad
y vistosidad en muchas especies de plantas.

La flor consta de un eje denominado receptáculo, al que se insertan cuatro


órganos diferentes dispuestos a modo de niveles, llamados verticilos: los
sépalos, los pétalos, los estambres que hace parte del androceo, y el gineceo.

El conjunto formado por los sépalos y los pétalos recibe el nombre de perianto
y es la parte estéril de la flor, que no participa directamente en la reproducción
sino que actúa como órgano auxiliar, aunque su importancia es fundamental en
muchos casos.

Los sépalos son hojas transformadas que forman el verticilo más exterior de la
flor. Suelen ser de color verde y el conjunto de todos ellos se conoce con el
nombre de cáliz. Antes de que la flor se desarrolle, la cubren y protegen a
modo de escamas en la yema.

27
Tomado de Internet
Figura 4. Flor con sus partes

Los pétalos también son hojas, aunque con un mayor grado de diferenciación y
de transformación. El conjunto de todos ellos constituye la corola, que es el
segundo verticilo de la flor. La coloración puede ser muy diferente y se debe a
la presencia de cromoplastos o pigmentos en sus células.

Los estambres constituyen el tercer verticilo de la flor y son su órgano


reproductor masculino. También son hojas transformadas, en este caso de
forma extrema. En el estambre pueden distinguirse dos partes: el filamento v la
antera. El primero es un tallo delgado de tejido con un único vaso en el caso de
las plantas más evolucionadas. En su extremo se encuentra la antera, formada
por dos lóbulos que contienen un saco polínico en su interior. Éstos se hallan
formados por un tejido especial que contiene las células madres del polen.

El gineceo es el verticilo más interno de la flor y está formado por los carpelos.

El conjunto de la parte superior de diversos carpelos constituye el estilo y las


zonas fértiles engloban lo que se denomina el ovario. Los distintos carpelos
que forman el gineceo pueden hallarse sueltos entre sí o presentar un grado
variable de unión. El ovario en su interior puede estar dividido en varias
cámaras o formar una única cavidad.

En las flores más modificadas, en las que todos los carpelos se han unido en
un único ovario y un solo estilo, la parte superior de éste forma una estructura
llamada estigma. Tiene forma variable y muy a menudo secreta un líquido
azucarado y pegajoso mediante el cual los granos de polen quedan adheridos.

En la pared de la zona inferior de los carpelos, que corresponde a la parte fértil


se desarrollan los óvulos formados por un tejido central de células vegetativas y
esporógenas (nucela), una o dos capas protectoras (tegumentos) y un
filamento que les une al carpelo, denominado funículo. Tras la polinización el
ovario genera al fruto.

28
La posición del ovario con respecto al receptáculo permite distinguir varios
tipos. El ovario súpero se encuentra unido a aquél sólo por la base, el ínfero se
encuentra dentro de él y hay otros tipos que son intermedios entre ambos.

Es frecuente que las flores se agrupen en unidades más o menos completas


llamadas inflorescencias, con grados diversos de complejidad.

En los casos más sencillos, las distintas flores se disponen sobre un eje
principal común y no es difícil diferenciarlas, mientras que en otros cada una de
las flores se ha especializado en una función y el conjunto parece una única
donde unas parecen los pétalos y otras el centro.

Atendiendo a la presencia del gineceo, el androceo o ambos a la vez se


distinguen tres tipos de flores: femeninas, masculinas y hermafroditas. Otra
clasificación general de las flores se realiza en función de la morfología de los
pétalos. En tal caso cabe diferenciar los siguientes tipos básicos: cigomorfas
(pétalos desiguales), actinomorfas (pétalos iguales), dialipétalas (pétalos
separados) y simpétalas (pétalos soldados).

FRUTO

Después de la polinización y la fecundación de los óvulos, se producen las


semillas y el ovario experimenta una serie de transformaciones que afectan
también a sus órganos accesorios; todo ello culmina con la aparición de una
estructura denominada fruto.

El fruto es pues un órgano que encierra las semillas en el interior y que sirve en
la mayoría de los casos para su diseminación.

En el proceso de formación del fruto, la pared del ovario se transforma en el


pericarpo y sus células parenquimáticas se diferencian en tres partes: el
exocarpo, el mesocarpo y el endocarpo. La primera y la última constan de una
capa única, y el mesocarpo de varias. Estas tres partes presentan un desarrollo
distinto en los diversos tipos de frutos.

El pericarpo o pared del fruto puede ser básicamente de dos tipos, carnoso o
seco, lo cual permite distinguir entre frutos carnosos y secos.

El exocarpo suele mantenerse como una membrana más o menos delgada que
constituye la piel de la mayoría de los frutos. El mesocarpo experimenta a
veces un gran desarrollo hasta convertirse en un tejido carnoso y con multitud
de jugos, que recibe el nombre de pulpa. Por último, el endocarpo puede
adquirir una consistencia muy dura conocida como hueso o cuesco.

Teniendo en cuenta el desarrollo del mesocarpo se pueden encontrar frutos


secos, en los que las células se transforman en fibras y se produce una pérdida
progresiva de agua, y frutos carnosos en los que las células aumentan de

29
tamaño y acumulan diversas sustancias disueltas como azúcares, con lo que el
fruto adquiere un aspecto turgente.

Si consideramos su función de portador de las semillas hay que diferenciar


entre frutos dehiscentes, que se abren y sueltan las semillas, y frutos
indehiscentes, que al no abrirse deben experimentar una serie de procesos
para liberarlas.

Los principales frutos secos indehiscentes son: la nuez que es un fruto simple
formado por varios carpelos, que no se abre ni fragmenta de modo natural y
que presenta una semilla única; el aquenio que se caracteriza porque el
pericarpo no se adhiere a la semilla; y el cariopsis que se parece a una nuez
pero el pericarpo es delgado y está unido al tegumento de la semilla.

Los frutos indehiscentes en su mayoría son carnosos siendo los más


característicos: la drupa, la baya y el hesperidio.

La drupa se caracteriza por un exocarpo muy delgado, un mesocarpo grueso y


carnoso y un endocarpo lignificado muy duro. La baya es redondeada, con el
exocarpo muy delgado y el mesocarpo y el endocarpo carnosos y jugosos, que
engloban a las semillas. El hesperidio es el fruto típico de los agrios; tiene el
exocarpo delgado y con numerosas glándulas aromáticas, el mesocarpo
membranoso y blanco y el endocarpo jugoso y dividido en gajos.

SEMILLA

En las gimnospermas las semillas permanecen desnudas o protegidas por


algunas piezas accesorias, mientras que en las angiospermas se encuentran
en el interior del fruto.

Tras la fecundación de un óvulo por parte de un grano de polen se desarrolla la


semilla, al mismo tiempo que se produce el proceso de transformación y
crecimiento del ovario para convenirse en fruto. De este modo cuando ambas
estructuras, el fruto y las semillas que hay en su interior alcanzan la madurez
se encuentran en condiciones de propagar la especie, función última a la que
están destinados.

Las semillas, provistas o no de tejidos de reserva permanecen durante un


tiempo variable en estado latente; es decir, mantienen sus potenciales de
desarrollo pero sin manifestar ninguna actividad. La acción de determinados
factores externo como la luz y la humedad desencadena una serie de procesos
diversos que conducen al desarrollo de la plántula. Esto es lo que se conoce
como germinación.

La duración de ese período de vida latente es variable en las distintas


especies, y puede prolongarse por espacio de varios años, e incluso de
decenios.

30
En la semilla pueden distinguirse las siguientes partes: el embrión, una
cantidad variable de endospermo, uno o dos cotiledones y una cubierta
protectora llamada testa.

El embrión constituye el gametofito, encargado de producir los gametos y de


facilitar la reproducción sexual. Consta de un eje, que presenta en uno de sus
extremos el meristemo de la futura raíz y en el otro el meristemo del primer
brote acompañado de uno o dos cotiledones.

El endosperma es un tejido de reserva cuya función es nutrir al embrión


durante su desarrollo. Consta de una o varias membranas que contiene
diversas sustancias como almidones, proteínas y grasas.

Los cotiledones, qué reciben asimismo el nombre de hoja primordial,


embrionaria o seminal, son una o dos salientes del brote del embrión, con
aspecto de hoja y que tienen una gran importancia para la futura planta que se
desarrollará.

El número de los cotiledones permite distinguir dos grandes grupos dentro de


las angiospermas: las monocotiledóneas, que tienen uno, y las dicotiledóneas,
que tienen dos, si bien existen algunas excepciones a esta regla.

La función de los cotiledones es por una parte alimentar a la plántula con las
sustancias de reserva que se han almacenado, por otra parte iniciar la
fotosíntesis, ya que son las primeras hojas que la planta crea.

Foto del autor


Figura 5. Semillas sexuales de diferentes especies

Para concluir, se puede expresar que la importancia de las semillas radica en


que interviene en los procesos de nutrición, protección, dispersión de los
genes, superación de las épocas desfavorables a través del estado de vida
latente y desarrollo de una nueva planta cuando las condiciones del medio son
favorables.

31
1.4. Lección 4. Aspectos técnicos (labores culturales)

Dentro de un cultivo se llevan a cabo un gran número de actividades que están


encaminadas a favorecer el desarrollo de las especies vegetales cultivadas, en
búsqueda de una producción que permita rendimientos económicamente
favorables.

El grado de especialización de la actividad realizada depende en gran medida


del nivel de tecnificación del sistema productivo. Por esta razón, en cultivos en
donde se involucra un componente tecnológico alto, la eficiencia de las labores
y la productividad van a ser igualmente elevadas.

El autor de este libro no pretende disminuir la importancia de los manejos


agrícolas productivos realizados a nivel de pequeño agricultor, si no por el
contrario busca hacer ver el valor que tiene la tecnología para obtener
rendimientos productivos importantes.

A continuación se enumeran y se explican algunas de las actividades que se


realizan en los diferentes cultivos. Vale la pena anotar que dependiendo del
sistema agrícola realizado y de la especie cultivada, se aplicará una u otra
actividad en particular.

Es de importancia entender en que consiste cada labor de tal forma que


permita comprender las actividades de manejo que se realizan a los diferentes
cultivos tratados en este módulo.

1.4.1. Preparación de suelos

La preparación del suelo es una de las operaciones básicas para obtener una
buena cosecha. No se puede decir que la preparación del suelo es similar para
todo cultivo, ya que hay muchos factores que influyen como estructura, textura,
profundidad efectiva o capa arable, cultivo anterior y posterior, topografía del
terreno, sistema a utilizar y equipo de labranza.

Básicamente la preparación del terreno busca obtener un sustrato con las


mejores condiciones para el desarrollo de las semillas o de las plántulas.

Las labores más comunes que se siguen en la preparación del suelo para el
establecimiento de los cultivos son de manera general:

La arada

Que tiene como objeto principal remover y airear la tierra a fin de incorporar el
barbecho o maleza para que se inicie el proceso de descomposición.

En los últimos años se vine dejando a un lado el uso del arado para la
preparación de los suelos debido al deterioro que causa esta labor a las
características físicas del suelo.

32
Fuente: Federalgodon, 1990
Figura 6. Labor de rastra arado

La rastrillada

Cuya finalidad es complementar la función del arado, es decir, desmenuzar o


mullir el suelo para formar una cama a las semillas y facilitar su germinación.
Además, al desmenuzar el suelo se controlan plagas y malezas, se facilita la
aireación del suelo y la retención de humedad.

La primera rastrillada es conveniente efectuarla con una rastra y cuando el


suelo esté en condiciones óptimas o sea con un 15 a 25% de humedad. Si se
hace con menos humedad no se desmenuza bien por su dureza, y si se hace
más húmedo también se dificulta el desmenuzamiento.

Paso del pulidor

En algunos cultivos el pulidor se pasa sobre el suelo después de la rastrillada


con el objetivo de eliminar los terrones más grandes que han quedado y así de
esta forma obtener un suelo más homogéneo en cuanto a tamaño de
partículas.

1.4.2. Siembra

Actividad que consiste en depositar la semilla en el sitio definitivo. También


se habla de siembra cuando se colocan las unidades germinativas en el
semillero o área pequeña de terreno que facilita el desarrollo inicial de las
plántulas.

Dependiendo del tamaño de las semillas la siembra se realizará a una


profundidad específica. Se tiene estipulado que la profundidad de siembra no
debe superar en dos veces el grosor de la unidad germinativa.

33
La siembra se puede realizar de dos formas: al voleo que consiste en distribuir
las semillas en forma desuniforme; y en surcos en donde la semilla llevan un
orden establecido dependiendo de la distancia de siembra estipuladas.

1.4.3. Transplante

El transplante consiste en el traslado de las plántulas desde el semillero hasta


el sitio definitivo.

Para disminuir daños en las plántulas se debe realizar esta actividad cuando
éstas presenten de 3 a 5 hojas verdaderas. Por otra parte, es necesario
realizar la actividad en días nublados y con semilleros previamente
humedecidos con agua.

Especies como el espárrago, el café y algunas plantas aromáticas necesitan


de esta actividad antes de establecer los cultivos, debido, ya sea por costo,
tamaño o fragilidad de las semillas.

1.4.4. Raleo

Esta actividad se realiza en siembras directas, ya sea en semillero o en campo


definitivo. Consiste en entresacar plántulas para dejar el cultivo con la
densidad poblacional establecidas.

Se debe ralear las plántulas que presentan menor desarrollo, de tal forma que
se garantice la permanencia en el cultivo o en el semillero de las plantas con
mejores características morfológicas.

Los cultivos ya mencionados en los que se lleva a cabo semillero y las


especies con siembras directas como el fríjol, la habichuela y el maní necesitan
de procesos de raleo.

1.4.5. Aporque

Esta actividad consiste en rodear con tierra la parte del tallo por encima del
cuello de la planta. El objetivo de esta labor es favorecer la aparición de raíces,
rizomas o tubérculos; evitar encharcamiento; y disminuir la posibilidad de
volcamiento de las plantas.

En cultivos como la arracacha, fríjol y habichuela se requiere de esta actividad


para favorecer y obtener mejores resultados productivos.

El aporque en la mayoría de los cultivos se realiza en forma manual, aunque en


otros, se lleva a cabo en forma mecánica mediante la utilización de
implementos acoplados al tractor destinados para este fin.

34
1.4.6. Poda

Esta labor cultural consiste en eliminar partes de la planta, ya sean hojas,


ramas, chupones, flores y frutos buscando mejorar las características del
órgano a cosechar.

Los objetivos buscados a través de esta actividad son los siguientes:

● Regularizar la producción.
● Obtener la cosecha más temprano.
● Facilitar la aireación de la planta y del cultivo.
● Facilitar el control de plagas y enfermedades.
● Facilitar la cosecha.
● Aumentar la iluminación del cultivo.

Normalmente la primera poda realizada en las especies que la requieren,


corresponde a la poda de formación que consiste en darle la forma estructural
que tendrá la planta.

1.4.7. Tutorado

Consiste en colocar una guía aérea que permite el desarrollo y crecimiento de


los tallos de las plantas para facilitar la recolección de los frutos.

De acuerdo a las características en la construcción de los tutores se pueden


encontrar diferentes sistemas.

El tutorado más utilizado en el de T, en el cual se manejan dos o tres hilos de


alambres por tutor. El emparrado es otro sistema utilizado en ciertos cultivos
como el del estropajo y consiste en formar un techo con hilos de alambre en
donde los tallos de las plantas se enredarán hasta cubrir todo el sistema. Al
final so obtiene un cultivo que cubre totalmente la superficie del techo del
emparrado.

Ciertas variedades de enredadera de fríjol y de habichuela requieren de un


tutor sencillo para facilitar el crecimiento vertical del tallo y así permitir el
proceso de cosecha.

1.4.8. Riego

Es la aplicación de agua al terreno con el fin de suministrar a las especies


vegetales la humedad necesaria para su desarrollo. En un sentido más amplio,
la irrigación puede definirse como la aplicación de agua al terreno con los
siguientes objetivos:

35
1. Proporcionar la humedad necesaria para que los cultivos puedan
desarrollarse.

2. Asegurar las cosechas contra sequías de corta duración.

3. Refrigerar el suelo y la atmósfera para de esta forma mejorar las condiciones


ambientales para el desarrollo vegetal.

4. Disolver sales contenidas en el suelo.

Para una aplicación eficiente del riego se debe tener presente factores como el
tipo del suelo, la especie vegetal a regar, el clima predominante en la zona y el
costo del riego en relación con el precio del producto en el mercado,

El riego puede realizarse de diferentes formas: por gravedad en la cual el agua


se deja correr teniendo en cuenta la inclinación del terreno; por aspersión que
consiste en suministrar el agua a las plantas simulando la lluvia; por goteo por
medio del cual el agua se proporciona a las raíces gota a gota; y por
microaspeción en las que las gotas de agua son muy finas.

1.4.9. Fertilización

Esta práctica consiste en suministrar a los cultivos los nutrientes que necesitan
para un óptimo desarrollo.

Los productos utilizados para realizar los procesos de fertilización pueden ser
de origen orgánico como materia en descomposición o humus, o de origen
inorgánico como productos sintetizados químicamente.

Los métodos más comunes utilizados para la aplicación de los fertilizantes son:

Aplicación al voleo

Este método consiste en aplicar el fertilizante uniformemente sobre la superficie


del suelo antes, durante o después de la siembra.

Con este sistema el fertilizante queda en la superficie del suelo. Es


recomendable utilizado en el caso de cultivos densos, tales como los pastos.

Aplicación en banda

Este método consiste en aplicar el fertilizante a uno o a ambos lados de la


semilla o de las plantas, y es particularmente aplicable en cultivos sembrados
en surcos.

El sistema de aplicación en banda tiene muchas variantes, por cuanto la banda


puede ser aplicada superficialmente o enterrada. En este último caso, la banda

36
puede quedar encima, al lado o debajo de la semilla, si la aplicación se hace al
momento de la siembra.

Aplicación en el fondo del surco

Como su nombre lo sugiere, es un sistema utilizable para cultivos en surcos, en


el cual el fertilizante queda localizado en una banda al fondo del surco, por lo
cual se puede considerar como una variante del sistema en banda.

La aplicación en el fondo del surco ofrece las mismas ventajas que el sistema
en bandas y en nuestro medio es muy utilizada en diferentes cultivos.

Aplicación en corona

En este sistema el fertilizante se coloca alrededor de la semilla o del tallo de la


planta y a distancias variables dependiendo de la especie. En algunos casos se
tapa con un poco de tierra. Se aplica en árboles frutales, en banano y café.

Aplicación en hoyos

Este tipo de fertilización se utiliza principalmente en el caso de árboles frutales


en producción. El fertilizante se distribuye en 4 o 6 huecos practicados en
corona a la gotera del árbol. Se ha encontrado que este método es más eficaz
que el de la simple corona, porque permite una mejor utilización del fertilizante
por la planta.

Aplicación incorporada

Este sistema es una variante de la aplicación al voleo, en la cual el fertilizante


una vez aplicado en la superficie es incorporado o mezclado con el suelo
utilizando el arado o el rastrillo.

La incorporación es una práctica muy apropiada cuando se aplican fertilizantes


de baja solubilidad en la presiembra, como la roca fosfórica, el calfos y también
en el caso de la aplicación de cales. La mezcla con el suelo permite que el
producto se disuelva y suministre el fósforo a la planta o para controlar la
acidez del suelo.

1.4.10. Encalado de los suelos

El uso de la cal en suelos ácidos es el factor más importante para lograr


mejores cultivos.

37
La cal corrige la acidez del suelo, lo abastece de calcio, mejora la disponibilidad
de otros nutrientes para las plantas y, consecuentemente, aumenta la eficiencia
de los fertilizantes químicos y naturales. Promueve una actividad biológica y
mejora la estructura de algunos suelos ácidos.

El encalado facilita la producción de abonos verdes y cultivos de cobertura y si


se lleva a cabo adecuadamente combinada con otras prácticas convenientes
en el manejo de los suelos, conduce usualmente a un aumento en los
rendimientos y mejores cosechas.

Químicamente hablando, "cal" significa óxido de calcio (CaO), más


comúnmente llamada" cal viva" o "cal rápida" (cal calcinada). En agricultura,
significa cualquier material con un contenido de calcio que es capaz de corregir
la acidez del suelo: cal viva, cal apagada, calfos, escoria de hornos y cal
dolomita entre otras.

1.4.11. Control de arvenses

Esta labor consiste en eliminar las plantas ajenas al cultivo principal.

El control de arvenses busca entre otras cosas evitar la competencia por luz,
agua y espacio que causan las plantas diferentes al cultivo; y eliminar posibles
hospederos de plagas y/o enfermedades.

El control de arvenses puede ser de forma mecánica si se realiza manualmente


o con tractor; de forma cultural si se utiliza cualquier sistema de cobertura o
mulch; o de forma química si se emplean productos sintetizados químicamente.

La utilización de un producto u otro depende principalmente de la especie


cultivada y, del tipo y estado de desarrollo de la maleza. Es así que existen en
el mercado herbicidas para aplicar antes y después de emerger las malezas
dentro del cultivo.

1.4.12. Control de enfermedades

Son todas las estrategias que se utilizan para prevenir o controlar la presencia
de elementos que causan desviación en el funcionamiento normal de los
procesos fisiológicos de las plantas, y que con suficiente duración e intensidad
ocasionan un perjuicio o detención de la actividad vital de las plantas.

Las enfermedades se clasifican de acuerdo con el agente causal en dos grupos


principales: Bióticas o patogénicas causadas por el ataque de hongos como
moho gris o antracnosis, bacterias, nematodos y virus; y las Abióticas o no
patogénicas caracterizadas por alteraciones en el desarrollo normal de la
planta, originadas por agentes no vivos como es el caso del golpe de sol o
desordenes producidas por efecto climáticos.

38
1.4.13. Control de plagas

Son todas las técnicas que se emplean para disminuir o controlar la presencia
de individuos de origen animal que generan un daño dentro del cultivo con
niveles poblacionales que llegan a causar daño económico

El control de insectos plagas en agricultura se ha convertido no solo en una


ciencia importante sino también en una actividad económica de primer orden
alrededor del mundo. Se estima que los insectos devoran un 20% de las
cosechas.

Si se considera la agricultura como un ecosistema que tiende a ser muy


homogéneo, la lucha entre el hombre y las plagas se convierte en un esfuerzo
del primero por cambiar las condiciones ecológicas que favorecen a las
segundas o en un intento directo de destruirlas por diversos medios. En todos
los casos, se trata de manipular poblaciones de insectos de tal manera que se
mantengan a niveles por debajo de daño económico.

En la permanente lucha con los insectos se han utilizado muchos métodos de


control de entre los cuales se pueden mencionar: control legal (medidas de
carácter jurídico y gubernamental), control cultural (conjunto de práctica de
cultivo), control físico y mecánico (trampas, sonidos, espectros de luz etc.),
control genético (manipulación de característica genéticas de los insectos),
resistencia varietal (materiales vegetales resistentes a determinados insectos),
y control químico.

La integración de todas estas técnicas de una manera armónica en el control


de plagas, recibe el nombre de Manejo Integrado de Plagas o MIP.

39
1.5. Lección 5. Aspectos económicos

Esta lección pretende mostrar de forma global los factores que hacen parte del
aspecto económico de los cultivos para que el estudiante soporte de forma
correcta los conceptos y contextualice los conocimientos adquiridos, para
disminuir la incertidumbre y el riesgo en la ejecución de los proyectos que se
pueden generar en el sector.

Para llevar a cabo cualquier proceso agrícola productivo es vital tener en


cuenta ciertos factores económicos que condicionan los resultados obtenidos y
la viabilidad del cultivo desde el punto de vista de rentabilidad y eficiencia.

Antes de iniciar un proceso de producción agrícola es necesario no solamente


conocer los factores técnicos de manejo, sino por el contrario antes de estos
análisis se debe realizar un estudio económico y financiero de todo el sistema.

Uno de los problemas más comunes que se presentan cuando se desarrolla un


sistema agrícola productivo es la falta de conocimiento de los rublos que
generan desembolsos de dinero durante el desarrollo del cultivo y antes de la
cosecha del producto. Por esta razón se incurre en gastos que no estaban
previstos y que generan por falta del recurso el atraso en las labores y en
detrimento de la calidad y de la cantidad del producto final.

A criterio del autor los siguientes son los factores que se deben analizar desde
el punto de vista económico antes de establecer un cultivo o durante la
ejecución de un sistema productivo:

1.5.1. Recursos financieros

El factor económico es el elemento más limitante para la ejecución de todo


proceso productivo. Es importante realizar previamente un análisis financiero
que pernita deducir si se cuenta con los recursos necesarios.

Muchos proyectos productivos agrícolas se han dejado sin terminar por falta de
una planeación efectiva con relación a la disponibilidad del recurso financiero.

Una vez establecidos los requerimientos financieros para llevar a cabo la


ejecución del proceso productivo, se debe establecer la forma de adquirirlos en
el caso de ser insuficientes.

En el caso de ser insuficientes los recursos financieros con que se cuenta, se


puede recurrir a sistemas de financiación en las diferentes entidades del sector
agrícola encargadas de proporcionar créditos para la agricultura.

Se recomienda que en lo posible se cuente con recursos financieros propios,


para evitar sobre costos por conceptos de pago de financiación.

40
No se puede ignorar la importancia de la función que cumplen las entidades de
financiación dentro de todo el sistema productivo. En las circunstancias en las
cuales los recursos propios no son suficientes para llevar a cabo el proceso se
debe contar con la colaboración de algún organismo prestador de servicios
financieros.

1.5.2. Tipo de producto

Hace referencia al cultivo que se piensa establecer.

Dependiendo de la clase de la especie vegetal a trabajar los costos de


producción iniciales van a ser variables.

Aquí tiene una gran importancia el material vegetal utilizado para la


multiplicación y establecimiento del cultivo.

Hay especies que para su multiplicación se utiliza material vegetal o semilla


asexual como es el caso de la arracacha, el plátano y algunas aromáticas.
Dependiendo del tipo y tamaño del material para la propagación el costo y el
manejo del mismo va a variar afectando los costos totales de establecimiento.

En otras especies la multiplicación se realiza mediante la utilización de semillas


sexuales como en el fríjol y la habichuela. De igual forma se presentan cultivos
que requieren antes de la siembra en campo definitivo el establecimiento de un
semillero que asegure el desarrollo inicial óptimo de las plantas como es el
caso del café.

El costo del material vegetal a utilizar varía dependiendo de la especie. Por


ejemplo la semilla a utilizar para establecer una hectárea de maní tiene mayor
precio en el mercado que la utilizada en un cultivo de fríjol.

En las especies que requieren un semillero los costos iniciales por este factor
representan un porcentaje alto en el establecimiento del cultivo.

Igualmente en ciertas especies la semilla se puede obtener directamente del


cultivo, factor que permite reducir los costos de establecimiento, pero por el
contrario en otras es necesario adquirir semilla certificada que en condiciones
normales es mucho más costosa.

1.5.3. Cantidad a producir

El área destinada al establecimiento del cultivo es factor que determina


directamente los recursos económicos requeridos para el proceso productivo.

A medida que aumenta el área a producir y por ende la cantidad del producto
cosechado, a sí mismo aumentan los costos de producción.

41
Por un lado se debe conocer de antemano la cantidad de producto a cosechar
y el mercado al cual se va a distribuir la producción, y por otro lado se hace
necesario identificar todos los costos que generan la obtención de la misma.

En muchas ocasiones se incurre en el error de proyectar una producción


determinada sin medir los costos y los recursos que se requieren para obtener
el producto, llegándose a convertir el sistema productivo en algo inmanejable.

Con relación a la cantidad de producción es necesario establecer el tipo del


mercado al cual se va a dirigir el producto, ya que así mismo éste determina el
tipo y características de su presentación. Desde el mismo momento de
establecimiento del cultivo se debe contar con el rublo que permita el manejo
adecuado en la etapa de post-producción.

1.5.4. Entorno

Las condiciones externas al sistema productivo hacen que varíen la cantidad


de los recursos requeridos.

Se debe tener en cuenta antes de dar inicio a un cultivo factores como


infraestructura existente, vías de acceso, maquinaria disponible, mano de obra
y centros de acopio y de comercialización.

En la mayoría de los centros rurales de nuestro país la infraestructura y las vías


de acceso son ineficientes ocasionando sobrecostos por transporte y por
retrasos en la ejecución de las labores.

Se debe evaluar las necesidades de recursos externos que se requieren para


calcular los costos adicionales, como mano de obra extra, maquinaria
especializada para la preparación y para el transporte de los insumos y de la
producción.

En este renglón se incluye una evaluación de la disponibilidad de fuentes


hídricas que permitan suministro de riego al cultivo. De tener acceso a este
recurso se debe también evaluar el costo del establecimiento de un sistema de
riego eficiente.

1.5.5. Mano de obra

En algunas regiones de nuestro país la mano de obra es escasa y no


calificada. Factor determinante para que la existente se encuentre a precios
relativamente altos frente a las condiciones normales de mercado.

Dependiendo del tipo de cultivo a sí mismo la cantidad de las labores culturales


y de manejo varían. Existen sistemas productivos que requieren una alta
concentración de mano de obra como se presenta en el café, en el que
intervienen labores exigentes del factor humano, que van desde el mismo

42
momento de la extracción de la semilla, pasando por las actividades de
semillero, siembra, labores culturales, cosecha y transformación del producto.

Cuando los procesos de cosecha no se encuentran mecanizados


(característica muy normal en la agricultura de las zonas de clima medio del
país) se requiere de una alta concentración de mano de obra que se ve
reflejada en altos costos generados por este proceso.

Se han presentado casos en los que la producción se ha perdido por falta de


mano de obra suficiente para ejecutar las labores intrínsecas a este proceso.
Igualmente que en la venta del producto, se debe realizar con anticipación la
búsqueda del personal necesario para desarrollar la cosecha del mismo.

1.5.6. Maquinaria

La eficiencia en la ejecución de las actividades agrícolas esta determinada por


la utilización de equipos y maquinaria especializada.

La maquinaria se convierte en uno de los elementos que hacen más eficientes


y rentables los procesos productivos.

Existen regiones en donde la presencia de maquinaria es constante. Mientras


que en otras el acceso a estos recursos no existe.

En gran parte de las regiones de clima medio, las condiciones de topografía


imposibilitan la utilización de maquinaria. En estos casos se emplean sistemas
que requieren fuerza motriz de animales o del mismo hombre.

Con relación a la disponibilidad de maquinaria se debe evaluar los costos que


implican la realización de las actividades dentro del cultivo ya sea en forma
mecánica o de alguna otra forma.

1.5.7. Tecnología

Sin duda alguna el uso de paquetes tecnológicos en los sistemas productivos


permite obtener mejores resultados con relación a calidad y cantidad de la
cosecha.

Si se quiere ser competitivo al momento de distribuir los productos en el


mercado este es un insumo necesario. Pero la inclusión de sistemas
tecnológicos a un sistema productivo requiere de inversiones en aspectos
como sistemas de riego, fertilización, empleo de insumos especializados y uso
de material de propagación certificados.

A nivel de producción agrícola rural en las zonas de clima medio de nuestro


país el grado de tecnificación es deficiente para gran parte de los sistemas
productivos presentes.

43
En cultivos como el café y el plátano la tecnología cumple un papel importante
en el posicionamiento que tienen en la economía de nuestro país estos dos
productos.

Sin duda alguna la tecnología involucra una inversión adicional, pero la


experiencia indica que los beneficios obtenidos por el uso de sistemas
tecnológicos son mucho mayores que los costos que implican su aplicación.

1.5.8. Transporte

Dentro de un sistema productivo el transporte cumple un papel muy importante


en el desplazamiento del producto cosechado al mercado o a los sitios de
acopio.

Dependiendo del producto se utiliza sistemas de transporte que van desde


equipos movido por animales, pasando por aquellos en los que se utilizan
tractores y llegando a sistemas que requieren vehículos especiales con
características de refrigeración y ventilación especializados.

Entre más delicado sea el producto y entre mayor sea la cantidad a transportar
los costos en los que se incurre van a ser mayores. Existen productos que
requieren de procesos de transporte especializados para mantener las
características de calidad del producto.

Son diferentes por ejemplo la forma y el tipo de transporte utilizado para la


distribución del producto cosechado en el plátano y en el fique. Estas
diferencias hacen que los costos por este rublo sean igualmente distintos entre
un sistema y otro.

1.5.9. Empaque

Para la distribución y comercialización de los productos o subproductos


agrícolas se necesita adicionar un valor agregado. Este valor está
representado en buena medida por las características del empaque en donde
éste es entregado.

Hay productos que se entregan empacados en costales de fique o en guacales.


Para éstos los costos por este renglón aunque se presentan y se deben tener
en cuenta no son tan significativos. Pero para otros productos es
imprescindible la presentación en un empaque especializado que garantice su
competitividad en el mercado.

En la mayoría de análisis económicos de un sistema productivo, no se tiene en


cuenta los gastos a los que se debe incurrir después de cosechado el producto,
pero este rublo es de importancia porque es el que permite que la
comercialización sea eficiente.

44
En términos generales para establecer el nivel de rentabilidad del negocio
agrícola (cultivo) se requiere llevar estrictamente un registro de todas las
entradas y salidas de dinero al sistema, de tal forma que al final de la venta del
producto se pueda realizar un análisis económico del proceso.

La agricultura desde el punto de vista económico es un negocio que requiere


de una planeación estratégica que permita tener en cuenta y ejecutar todas las
actividades que faciliten la obtención de los mejores resultados. Y para lograr
esto, es necesario disponer de todos los recursos económicos necesarios a
través del proceso productivo, desde los preliminares al establecimiento del
cultivo hasta la cosecha y transformación del producto cosechado.

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS

Para afianzara los conceptos vistos en el capítulo tome una planta, dibuje y
clasifique su raíz, tallo, hojas, flores y frutos.

Seleccione un cultivo cualquiera de su región y averigüe cuales son las


actividades de manejo agronómico que se le realizan.

AUTOEVALUIACIÓN

● ¿Cuáles son las características de las zonas de clima medio del país con
relación a altitud, temperatura, precipitación, evaporación y presencia de
vientos?

● Porqué la topografía afecta factores climáticos como presencia de vientos y


radiación solar?

● ¿Cuales son las condiciones presentes en las zonas de clima medio del país
con relación a pH y presencia de aluminio?

● ¿Por qué el contenido de materia orgánica es mayor en las zonas de clima


medio en comparación a otras zonas?

● ¿Cuáles son los órganos más importantes de la planta?

● Antes de realizar la siembra ¿Cuáles son las actividades de manejo que se


requiere realizar en el sistema productivo?

● Indique las formas de aplicar el fertilizante a un cultivo.

● ¿Por qué es necesario llevar a cabo el control de plagas y enfermedades?

45
• ¿Cuáles son los aspectos más importantes que se deben tener en cuenta
dentro de los factores económicos de un cultivo?

46
CAPÍTULO 2. CULTIVOS DE CICLO CORTO

Introducción.

Dentro de las especies que se desarrollan en las condiciones de clima medio


de nuestro país se encuentran aquellas en las que su etapa vegetativa es de
aproximadamente unos seis meses.

En este tipo de especies encontramos la habichuela y el fríjol que por sus


característica nutricionales se convierten en fuente importante en la
alimentación de las personas de las zonas rurales.

Dentro del ecosistema estas especies además presentan la importancia de


intervenir en los procesos de conservación de las características del suelo,
gracias a la propiedad que tienen de permitir la acumulación de nitrógeno en el
componente edáfico.

Este capítulo permite conocer y entender las características generales y de


manejo de estas dos especies desde el punto de vista de sistema productivo,
que permiten al estudiante intervenir en un cultivo específico.

Objetivos.

Conocer las características generales y de manejo agronómico del cultivo de la


habichuela y del fríjol.

Conocer las condiciones de manejo agronómico del cultivo de la habichuela y


del fríjol.

Determinar las características necesarias para establecer un sistema


productivo de habichuela y de fríjol.

2.1. Lección 6. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo de la


habichuela.

Se ha señalado a América como sitio de origen de la habichuela principalmente


los países de México y Guatemala en Centro América y Perú en Sur América.

En nuestro país esta especie es cultivada en zonas de clima medio de los


departamentos de Caldas, Cundinamarca, Risaralda, Tolima, y Valle
principalmente.

La habichuela en el país es una de las hortalizas cultivadas más importantes


debido a su contenido nutricional, la demanda por parte de los consumidores y

47
la posibilidad de manejar precios estables. Por esta razón, ofrece una buena
alternativa para los agricultores de las zonas de clima medio.

En la actualidad, se calcula que anualmente se siembran 1200 Ha y su


producción equivale al 10 % de la producción total de hortalizas. El contenido
nutricional de la habichuela se caracteriza por tener buenos niveles de
vitaminas A, tiamina, riboflavina, niacina, vitamina C y elementos como Ca, Mg,
Na, P y K. Aunque existen diferentes variedades en el mercado, el 90% del
área cultivada sembrada con la variedad Blue Lake.

Taxonómicamente la habichuela pertenece al orden leguminosas, familia


papilionaceae, genero phaseolus y especie vulgaris siendo su nombre científico
Phaseolus vulgaris L., al igual que el fríjol común debido a que es una
selección especial de éste por lo que se le denomina fríjol verde o judía.

El porte agronómico de la habichuela es similar el fríjol, se diferencia por la


textura de la vaina que es carnosa por lo que no forma fibras, lo que evita que
se abra. Esta característica la hacen apta para su consumo en verde

2.1.1. Morfología

La habichuela es una planta con un sistema radical bien desarrollado y de


crecimiento muy rápido, compuesta por una raíz principal con muchas y muy
ramificadas raíces secundarias, situadas en la parte superior cercana a la
superficie.

Sus tallos son delgados, débiles y angulosos de altura muy variable; el porte
de las plantas está determinada por la forma y posición de los tallos; si es
principal tiene una inflorescencia terminal, el desarrollo se detiene pronto y la
planta será de bajo porte, si el tallo no produce esta inflorescencia terminal
aparecen otras axilares y la planta será de enredadera.

Las hojas son alternas de textura lisa o reticulada, con la superficie más o
menos abullonada. El color del foliolo varía del verde normal al verde
amarillento.

Las Inflorescencias se presentan en forma de racimos terminales o axilares,


con pedúnculos erguidos. Cada pedúnculo lleva numerosas flores,
acompañadas por un par de bractéolas laterales.

En las formas de tallos volubles o de enrame las inflorescencias se encuentran


en situación lateral, con flores en un número variable. Cáliz más o menos
tubuloso; corola con el estandarte redondeado, alas más o menos ovales, quilla
puntiaguda, estambres diadelfos.

Presenta una vaina lineal más o menos comprimida. En su tamaño definitivo


estas estructuras pueden tener dimensiones variables. Su textura varía

48
dependiendo de la ausencia o presencia de tejidos fibrosos como pergamino y
hebra.

Las semillas de la habichuela son dicotiledóneas de forma reniforme, oblongas


y ovales.

Existen numerosas variedades que de acuerdo al sitio en donde se cultivan


reciben diversos nombres, tales como: Jaba, judía, Frisol, Frisuelo, entre otros.

Tomado de Internet
Figura 7. Legumbre de habichuela

La Federación Nacional de Cafeteros, 2002, indica que existen en habichuela


variedades de tipo arbustivas y de enredadera. Las variedades de tipo
arbustivo no han sido muy aceptadas por los agricultores debido a grandes
pérdidas por la pudrición de vainas cuando tocan el suelo. Por otra parte la
aceptación en los mercados no es la mejor. Entre éstas se encuentran la
Tendergreen, Top Crop e lcato.

Las variedades de enredadera son las más apetecidas tanto por los
cultivadores como por los consumidores. Entre éstas las de tipo Blue Lake o
Lago Azul es la más sembrada.

2.1.2. Condiciones agroecológicas

La habichuela presenta un gran rango de adaptación, desde los 800 a 2.200


metros sobre el nivel del mar. El ciclo del cultivo se acorta cuando la zona es
más baja o caliente, pero esto a su vez afecta la calidad ya que se aumenta el
contenido de fibra.

La variedad Lago Azul se adapta bien entre 1.000 metros sobre el nivel del mar
donde llega a rendir entre 8.000 y 12.000 Kg/Ha (Legumbre).

Las temperaturas óptimas en las que se desarrolla la habichuela oscilan entre


los 20 y los 25°C, porque temperaturas más altas producen legumbres con
mayor contenido de fibra, que son indeseables en el mercado. En época de
lluvias fuertes y ambientes muy cálidos su producción no es satisfactoria, por la

49
presencia de enfermedades fungosas y caída de flores. Los fuertes vientos
causan la pérdida de flores y una polinización inadecuada.

Con relación a los suelos la habichuela requiere que sean fértiles, con buena
profundidad efectiva, textura que va desde liviana hasta pesada y drenaje
adecuado ya que es susceptible a encharcamientos.

El pH más favorables oscilan entre 6.0 y 7.0 con bajo contenido de Aluminio;
fuera de este rango es limitante la producción de esta especie.

2.1.3. Labores del cultivo

Preparación del terreno

Para extensiones comerciales en monocultivo, se realiza una arada y dos


pasos de rastrillo. Si la siembra es intercalada con siembras nuevas de café u
otra especie sólo se prepara la franja o calle donde quedará el cultivo. Si se
siembra en zonas con terrenos pendientes se requiere de poco laboreo.

Siembra

La habichuela tiene un corto período vegetativo, por ello se siembra en todas


las épocas del año sin períodos definidos. Lo importante es disponer de riego
permanente o de lo contrario sembrar al iniciar el período de lluvias.

Las densidades de siembra para los tipos arbustivos están directamente


relacionadas con los arreglos de población que se realicen en el campo. Esta
distribución está de acuerdo a las condiciones de mecanización que se posea;
se ha establecido que 40 a 50 cm entre surcos y l0 a 15 cm entre plantas dan
los mejores resultados con relación a la producción.

También se puede usar surco doble de 30 cm, con distancias entre surcos de
60 cm.

En tipos volubles se pueden hacer arreglos que van desde 80-100 cm entre
surcos, o sea la distancia a que se siembra el maíz, usando 2 plantas por sitio
cada 25 cm entre plantas.

Si se trata de habichuela con tutores se pueden usar de 80-90 cm entre surcos,


con dos surcos dobles a 50 cm y distancia entre plantas entre 15 y 20 cm. El
espacio entre surcos se utiliza para regar el cultivo.

En una hectárea se requieren aproximadamente de 25 a 30 Kg/Ha de semilla.


La profundidad debe estar comprendida entre 3 y 5 cms.; 3 cms con suelo
húmedo y 5 cms cuando está seco. La planta de habichuela realiza su proceso
de germinación entre los 5 y 8 días.

50
En las variedades de tipo voluble los sistemas de tutorado que se pueden
utilizar son: de estaca individual en donde se clava una vara en cada sitio de
siembra y se hacen 3 ó 4 amarres a dicha vara; de entable que consiste en
hacer un armazón con varas gruesas, al final del surco con varas más
delgadas cada 4-5 m, se tiende un alambre por encima de los estantillos entre
1.8-2.0 m de altura y con cabuya se efectúan amarres periódicos para sujetar
las plantas a dicho armazón; y de espaldera en el cual se hace un armazón
con varas gruesas, y se van intercalando varas delgadas cada 3-5 m, luego se
tienden dos líneas de alambre, la primera a unos 20 cm. del suelo y la segunda
a 2 m de altura y se amarran cordeles de polipropileno formando un zigzag.

Riego

La habichuela es una especie muy sensible a carencia y a excesos de agua,


cualquiera de ellos puede ocasionar pérdidas en rendimiento. Se pueden
utilizar equipos de riego a baja presión para no romper los tallos que se tornan
fácilmente quebradizos en variedades arbustivas. El riego por gravedad es el
más aconsejable en terrenos planos o de poca pendiente, y puede ser
conducido por los surcos dejados por la cultivada en plantaciones de tipo
arbustivo o voluble.

Cuando las lluvias no son suficientes es necesario suministrar riegos de 30 mm


de agua aproximadamente cada semana.

El riego por aspersión puede aumentar los problemas de enfermedades porque


se aumenta la cantidad de humedad en el ambiente y se facilita el desarrollo de
ellas.

Fertilización

Es recomendable realizar la aplicación de las enmiendas con base en un


análisis del suelo.

Como cualquier otro cultivo, para obtener rendimientos consistentes es


necesario fertilizar adecuadamente con N, P y K. Diferentes autores han
demostrado que la habichuela es un cultivo que en general responde bastante
bien a la fertilización. En el país, se recomienda aplicaciones al suelo de NPK
desde 100 a 300 Kg/Ha ya sea en forma de 10-30-10 o de 15-15-15 aplicados
en presiembra o a la emergencia

En suelos de ladera, climas cálidos moderados y fríos se debe esperar


respuesta al nitrógeno y al fósforo, preferiblemente a este último, debido a que
estos suelos son de tendencia ácida. Es importante realizar procesos de
encalamiento antes de establecer el cultivo.

51
Tutorado y amarre

En las habichuelas de tipo voluble cuando las plantas tengan 10 centímetros,


se deben colocar los tutores a 1.50 metros de distancia. Estos tutores deben
ser de 1.80 metros de altura.

Fuente: Carrera Garzón Fernando


Figura 8. Sistema de tutorado y amarre en habichuela

El amarre se hace con fibras de polipropileno calibre 3.000, de la siguiente


manera:

A 10 cms del suelo se amarra y templa el hilo a lo largo del surco; se da en


cada tutor una vuelta. Luego se templa otro hilo a 1.70 mts de altura, en las
mismas condiciones. Finalmente se cruza un hilo entre los dos anteriores hasta
terminar el surco.

Cosecha

La recolección de vainas tiernas se inicia a los 50 días y dura entre 3 y 5


semanas. Este momento de cosecha corresponde a los 15-25 días después de
abierta la flor para el consumo en fresco.

La vaina completamente formada, produce al ser partida un ruido perceptible y


seco, sin doblarse. Además no tiene fibra que quede uniendo los segmentos.

Por otra parte las vainas al momento de la cosecha deben presentar un color
uniforme, las semillas apenas deben estarse formando, sin que aparezcan
constricciones pronunciadas en las vainas.

52
2.2. Lección 7. Malezas, plagas y enfermedades del cultivo de la
habichuela y su control.

2.2.1. Manejo de arvenses

La competencia por arvenses es perjudicial para la habichuela, por esto es


importante realizar las desyerbas adecuadas o en su defecto usar herbicidas

Durante la primera mitad del ciclo vegetativo de la habichuela, se debe tener


cuidado de evitar la presencia de malezas. La limpieza varía en número y se
hace de diferente forma, según el tipo de maleza y su presencia dentro del
cultivo. Generalmente se necesita hacer una o dos desyerbas únicamente.

Cuando el sistema de siembra es de monocultivo, se utilizan herbicidas


incorporados al suelo antes de la siembra, como los que son a base de
trifluralira y herbicidas selectivos.

La mayoría de las malezas presentes en los cultivos de habichuela son


hospedantes de gran número de insectos chupadores, por lo cual es necesario
tener las malezas gramíneas bien controladas para evitar infestaciones de
plagas en el cultivo.

2.2.2. Plagas

Las plagas y enfermedades presentes en la habichuela son comunes a las del


cultivo del fríjol, por esta razón en esta lección se darán solamente
generalidades sobre estos aspectos. En el capítulo correspondiente al cultivo
del fríjol se hablará con más detalle al respecto.

Para un buen manejo de plagas y enfermedades hay que efectuar un control


integrado de ellas, y así evitar excesivas y destructivas aplicaciones de
plaguicidas (insecticida y fungicidas).

Entre las plagas más frecuentes en el cultivo de la habichuela tenemos:

A. Insectos Chupadores, como el lorito verde (Empoasca sp), las arañitas o


ácaros y los áfidos o pulgones.

El lorito verde provoca plantas enanas, encrespamiento y amarillamiento de las


hojas.

Los pulgones succionan savia, transmiten enfermedades virosas y producen


miel de rocío que provoca la presencia de fumagina.

El control de estos chupadores, se hace sembrando en épocas de lluvia y


regando en época de sequía. Presenta muy buen control natural la especie
Lysiphlebus testaceipes parásito de ninfas y adultos de los pulgones.

53
El lorito verde tiene como enemigo natural a las avispitas Anagrus sp. que
parasitan sus huevos.

El control químico, cuando se deba realizar, podrá ser con productos a base de
dimetoato. La aplicación de insecticidas granulados sistémicos a la siembra o al
mes de transplante reduce considerablemente las poblaciones de estos
chupadores.

B. Perforadores de Vainas. Encontramos frecuentemente a Heliothis


virescens y Maruca testulalia. Heliothis sp perfora limpiamente la vaina e
introduce la mitad de su cuerpo, mientras que Maruca sp construye un orificio
con resto de sus excrementos y se introduce completamente iniciando el
consumo interno de la vaina y de granos en formación.

El control de Heliothis sp puede realizarse mediante el uso del parásito


Trichogramma sp cuando se localicen las primeras posturas de la plaga.

Estos perforadores tienen muchos enemigos naturales que mantienen sus


poblaciones en niveles subeconómicos.

Para el control de Maruca sp. se requiere efectuar buen control de malezas y


evitar mucha humedad en e! cultivo.

2.2.3. Enfermedades

La Roya (Uromyces phaseoli). Esta enfermedad afecta hoja, tallos y vainas.


La infección inicial se presenta como diminutas manchas blanquecinas. Al
madurar estas manchas forman pústulas pardo-rojizas cubiertas de un polvo
rojizo. Puede defoliar la planta y en ataque a vainas, demerita la calidad de
estas.

La antracnosis (Colletotrichum sp). Es una enfermedad que se propaga en


condiciones de mucha humedad en el ambiente, o con lluvias frecuentes,
factores determinantes para que el hongo se disemine e infecte.

La sintomatología en las vainas es de chancros deprimidos de color café rojizo


rodeados de un bordecito negro.

Cuando se presenta esta enfermedad es necesario rotar el cultivo y para


evitarla se recomienda tratar la semilla de habichuela con fungicidas.

También se presentan otras enfermedades, pero no son tan frecuentes y sólo


lo hacen si las condiciones son apropiadas: Mustia hilachosa (Thanetephorus
cucumeris) y marchitamiento (Fusarium sp).

54
2.3. Lección 8. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
fríjol.

El fríjol es una especie originaria de Centroamérica y que se ha constituido en


la base de la alimentación de muchos países americanos gracias a su alto
contenido de proteína (22 %), por lo que se le ha llamado la carne del pobre.

El fríjol pertenece a la familia de las leguminosas, subfamilia papilionácea


género Phaseolus y especie vulgaris. Desde el punto de vista taxonómico se
denomina como Phaseolus vulgaris L.

2.3.1. Botánica

La planta de fríjol posee una raíz fasciculada principal con numerosas raicillas
laterales, algunas de las cuales se desarrollan tanto como ella. De la parte
inferior del hipocótilo emergen también raíces adventicias.

Tomado de Internet
Figura 9. Planta de fríjol

Las raíces del fríjol presentan una asociación simbiótica con bacterias
nitrificantes que entran por los extremos de los pelos absorbentes, se
reproducen abundantemente y llegan hasta el periciclo, donde forman una
masa que se agrandan denominada nódulo. La simbiosis se presenta cuando
la bacteria suministra nitrógeno a la raíz y esta por su parte le proporciona
hospedaje.

El tallo puede ser erecto, semivoluble o voluble y en cada nudo aparecen las
ramas o las hojas. El erecto corresponde a las variedades arbustivas y el

55
voluble tiende a crecer alrededor de un soporte. En la planta madura el tallo es
aristado o cilíndrico y la médula hueca.

Las hojas se caracterizan porque en el primer par que aparece arriba de los
cotiledones son opuestas, simples, y acorazonadas. Las superiores, alternas,
están formadas por tres foliolos: el central es obovado y simétrico, los laterales
asimétricos. El pecíolo tiene una base engrosada, el pulvino, debajo del cual
hay un par de estipelas.

Tomado de Internet
Figura 10. Hojas de fríjol

Las flores en esta especie aparecen en racimos en las axilas de las hojas. Las
flores son papilionadas, con el cáliz tubular en la base y dividido arriba en 3 a 5
dientes. La corola se forma de una quilla con el ápice enrollado en espiral; hay
dos pétalos laterales, las alas, y uno superior y más grande, el estandarte. Los
colores de los pétalos varían de blanco a morado y cambian con la edad de la
flor y las condiciones ambientales.

El fruto del fríjol es una legumbre, es decir, un fruto de un sólo carpelo cuya
placenta ventral se abre en la madurez por si sola para que puedan salir las
semillas. Esta estructura puede ser aplanada, recta o curva, con ápice
encorvado o recto. El color varía según la variedad, de verde uniforme o
morado a casi negro. Al secarse la vaina la capa de fibras produce su
dehiscencia y da la torsión característica de las vainas secas.

La semilla en el fríjol común tiene formas muy diferentes, desde esférica hasta
casi cilíndrica. La coloración externa también varía mucho, de negro a blanco y
pasa prácticamente por todos los colores, y puede ser uniforme, jaspeada,
punteada o manchada. Estas características son intrínsecas a la genética de la
planta.

La semilla propiamente dicha está constituida principalmente por dos


cotiledones epigeos, formados por parénquima de alto contenido en almidón y
proteínas. Estas semillas constituyen uno de los pocos alimentos ricos tanto en

56
carbohidratos (60%) como en proteínas (22%); además contienen grasas y
minerales. El contenido de humedad fluctúa entre el 10 y 15 %.

Tomado de Internet
Figura 11. Semilla de fríjol

Según hábito de crecimiento del fríjol se consideran cuatro tipos diferentes:

● Tipo Arbustivo: con plantas entre 0.25 y 0.60 m. de altura. A este tipo
corresponde las variedades comerciales de áreas de cultivo mecanizadles.

● Tipo Semivoluble: es un hábito intermedio entre el Arbustivo y el Voluble;


generalmente con plantas de más desarrollo foliar que las anteriores y
ramificaciones laterales de tendencia postrada.

● Tipo Voluble: hábito de crecimiento indeterminado postrado, con


ramificaciones bien desarrolladas. Son plantas con altura superior a 80 cms.

● Tipo de hábito de crecimiento indeterminado trepador. Este tipo de fríjol se


encuentra generalmente asociado con maíz.

2.3.2. Aspectos ecológicos

Desde el punto de vista como cultivo la planta del fríjol necesita para su
desarrollo suelos francos, fértiles, sueltos, permeables y con buen drenaje. Si
la textura es muy arcillosa se debe manejar sistemas de drenaje y si es muy
arenosa se debe facilitar el proceso de suministro de agua con riego.
Igualmente, el fríjol es muy sensible a los encharcamientos razón por la cual se
debe facilitar el movimiento adecuado del agua en el terreno.

El pH óptimo está entre 5,5 y 6,8; no tolera suelos calcáreos y arenosos, en los
arcillosos, no se desarrollan debidamente. En suelos ácidos es necesario hacer
enmiendas con cal, con dos meses de anticipación a la siembra, y de acuerdo
al análisis de suelo. En terrenos muy ácidos o alcalinos se observan
ocasionalmente deficiencias de elementos menores: cobre (Cu), hierro (Fe),
manganeso (Mn) y zinc (Zn).

57
En lo posible se debe tener para el desarrollo del cultivo suelos con un alto
contenido de materia orgánica, no solamente como humus sino como
materiales en proceso de de descomposición. Por otra pare, se debe procurar
niveles apropiados de nitrógeno (N), fósforo (P), potasio (K), calcio (Ca), azufre
(S), hierro (Fe), magnesio(Mg) y zinc (Zn).

El fríjol se desarrolla con unas condiciones óptimas de temperatura


comprendidas entre los 20°C y los 25°C dependiendo de la variedad, que son
a las que se expresa su máxima producción. Esta planta es susceptible a las
heladas, no resiste temperaturas inferiores a 2°C.

En zonas en donde la humedad relativa es alta (más de 80%) hay, buen


desarrollo vegetativo pero baja producción. Las hojas tienen los estomas
abiertos por donde entran los patógenos, habiendo una alta incidencia de
enfermedades foliares.

Con relación a los requerimientos hídricos, el fríjol se desarrolla bien en zonas


con 800 a 2.000 milímetros anuales de precipitación, pero bien distribuidos,
necesitando entre 280 a 360 milímetros durante su período vegetativo.

La falta de humedad reduce el crecimiento de las plantas y causa la caída de


las flores. Cuando se presentan épocas de sequía prolongada es necesario
suministrar agua en forma de riego.

2.3.3. Variedades

Dependiendo de cada región se tienen diferentes nombres para cada una de


las variedades.

En Colombia, hay preferencia por granos de color rojo, rojo moteado, crema
moteado de rojo y de tamaños medianos ó grandes. Factores estos que
determinan las variedades a sembrar en cada zona. Las variedades más
sembradas a nivel nacional son los fríjoles de tipo de enredadera denominados
Cargamanto, Radical, Mortiño, Bola Rojo, y los de tipo Calima (Arbustivo). De
las variedades mencionadas, se estima que el fríjol voluble participa con el
65% de la producción nacional y el tipo arbustivo con el 35% restante.

2.3.4. Labores culturales

Dependiendo de la zona, la preparación del suelo se realiza en forma mecánica


con tractor o por medio de animales de tiro. En ambos casos normalmente se
realiza una arada seguida por una ó dos rastrilladas y una melgada o surcada.

Siembra

58
La siembra se realiza normalmente con pala ó chuzo, y depende del sistema de
siembra utilizado.

En relevo con maíz se siembra a un metro en cuadros dejando tres a cuatro


semillas de fríjol por sitio. En monocultivo con espaldera se siembra a un metro
entre surcos, colocando una semilla cada 15 a 20 cm. El fríjol arbustivo se
siembra a distancias entre surcos de 50-60 cm., y entre plantas dejando una
semilla por sitio a 20-30 cm.

Fertilización

Estudios realizados por Tobón indican que en las zonas de clima medio
únicamente un 15 % de los agricultores acostumbran a fertilizar el fríjol.

La planta es exigente en nutrientes principalmente en nitrógeno y fósforo en las


primeras etapas de su desarrollo.

La aplicación de fertilizantes se debe hacer de acuerdo con los resultados del


análisis de suelo. De lo contrario, se recomienda aplicar un abono compuesto
al momento de la siembra en dosis de 200 kg/ha, aplicando en la primera
desyerba 50 kg/ha de úrea en corona. La fertilización se hace a chorrillo en
medio de los surcos.

En la tabla 2 se indica los parámetros para determinar los niveles de nitrógeno,


fósforo y potasio en el cultivo del fríjol.

TABLA 2. Niveles de elementos mayores para el cultivo del fríjol.

Nutriente bajo (B) Medio (M) Alto

Nitrógeno (N) Menos de O,15% De 0,15-0,22% mayor de0.22%


Fósforo (P) Menos de 15 ppm De 15-30 ppm mas de30 ppm
Potasio (K) Menos de 0,15 De 0,15-0,30 mas de0.30
meq/100 g de meq/100 g de meq/100 g de
suelo suelo suelo

La gran mayoría de los suelos de las zonas templadas presentan un pH bajo,


por lo que es necesario realizar antes de la siembra y en la última rastrillada la
corrección de la acidez con productos que contengan cal.

Un adecuado plan de fertilización con N-P-K basado en la fertilidad media de


los suelos, es el siguiente:

Suelo Bajo en P y K: 5-20-20, aplicar 300 Kg /Ha, en la siembra.

Suelo Bajo en P y mediano o alto en K: 10-30-10, aplicar 200 Kg/Ha, en la


siembra.

59
Suelo Mediano en P y mediano o alto en K: 10-30-10, aplicar 100 Kg/Ha, en la
siembra.

Suelo Alto en P y K: 14-14-14, aplicar 100 Kg /Ha, en la siembra.

Riego

El fríjol es una planta muy sensible al exceso y al déficit de agua, factores que
causan reducción en la producción. En cuanto a agua de riego el cultivo
requiere entre 300 y 400 mm bien distribuidos en todo su período vegetativo de
desarrollo.

Los periodos críticos del fríjol en cuanto a necesidades de agua son:


germinación, floración, fructificación y maduración de los granos. El riego debe
ser corto y el terreno no debe empantanarse. Los sistemas de riego más
utilizados en este cultivo son los de inundación y de asperción aunque este
último puede general la presencia de enfermedades fungosas.

Cosecha

La cosecha tanto en fríjoles volubles como arbustivos, se hace en forma


manual, utilizando además de la mano de obra familiar, jornales por contrato.
En el fríjol voluble y debido a la desuniformidad en la maduración de las vainas
en las variedades regionales, se hacen hasta dos cosechas.

Las plantas deben arrancarse cuando ya han dejado caer sus hojas y
aproximadamente ¾ partes de sus vainas se encuentran casi secas y la
humedad de los granos esté entre 8 y 20%.

La producción depende del tipo de sistema productivo realizado, en variedades


mejoradas se pueden obtener de1.400 a 1.500 Kg/Ha, en cultivos asociados
400 a 500 Kg/Ha.

Los costos de producción para el fríjol voluble oscilan entre valores de


1.200.000 y 1.600.000 pesos. La variación en los costos de producción está
relacionada con a las condiciones de cada región y con el manejo realizado.

60
2.4. Lección 9. Malezas, plagas y enfermedades del cultivo del fríjol y su
control.

El efecto negativo que expresa las plagas, las enfermedades y las malezas
sobre el cultivo se ve reflejado en disminución de la calidad y de la cantidad de
la producción. Por esta razón, es importante conocer y entender los diferentes
elementos bióticos que intervienen en la producción para llegar a tomar
decisiones acordes con las condiciones del cultivo.

2.4.1. Control de arvenses

El fríjol debe mantenerse libre de malezas durante los 30 días siguientes a la


germinación, en caso contrario, habrá una reducción del rendimiento
proporcional al número de días que permanezca enmalezado el cultivo. Si se
permite la competencia de malezas en estos 30 días, el rendimiento se reducirá
en más del 50%, contra el control que es el 10% del total de costos.

El control de malezas se efectúa comúnmente en forma manual realizándose


de dos a tres desyerbas en el cultivo de fríjol arbustivo. La primera desyerba se
hace a los 30 días después de la siembra, la segunda entre los 60 a 70 días y
la tercera a los 90 días.

Igualmente para el control de malezas se puede utilizar productos químicos. El


control químico es necesario en aquellas zonas donde hay un periodo de
lluvias después de la siembra y germinación; la cantidad de mano de obra es
escasa y costosa; y la maquinaria agrícola es reducida.

2.4.2. Plagas

Son muchas las plagas que afectan al cultivo de fríjol. A continuación se


expresan algunas que a criterio del autor representan importancia por su daño
y efecto sobre la producción.

Lorito verde (Empoasca sp)

Es la plaga más importante en el cultivo del fríjol en Colombia. Las hembras de


este insecto ovipositan introduciendo los huevos en el tejido de la hoja, las
venas, pecíolos o tallos de la planta afectada. La ninfa recién salida es color
blanco pálido; luego pasa a amarillo pálido y finalmente al verde de los adultos;
atraviesa por cinco instares ninfales tardando alrededor de 13 días; las ninfa se
alimentan en el envés de las hojas cerca de las venas.

Los adultos miden entre 3,0 y 3,5 mm de largo y son delgados de color verde y
alas transparentes más largas que el cuerpo. Los loritos verdes son más
abundantes en las épocas de fuerte sequía. El daño consiste en un

61
enrollamiento de la punta de las hojas y amarillamiento de éstas, debido a la
succión de la savia. Estos insectos son de suma importancia debido a que se
ha demostrado que son vectores potenciales de muchas enfermedades virosas
a las plantas.

El control del lorito verde se logra mediante diferentes sistema como el cultural
(empleo de variedades resistentes); biológico con parasitoides (Anagrus sp) y
algunos depredadores; y químico con productos de tipo sistémico.

Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997 Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997
Figura 12. Adulto de Empoasca sp Figura 13. Planta afectada por empoasca

Ácaros (Polyphagotarsonemus latus, Tetranychus desertorum)

Los huevos de esta arañita son depositados individualmente tanto en el haz


como el envés de las hojas. Son esféricos perlados, brillantes, muy pequeños,
con un medida promedio de 0.15 mm. Las ninfas son de color amarillo con dos
manchas negras sobre el dorso. Los adultos son de color amarillo pálido o
verde claro con manchas negras a cada lado del cuerpo. La hembra es
ligeramente más grande que el macho tiene una longitud de 0,35 mm y un
ancho de 0.20 mm. El macho tiene el abdomen más delgado que el de la
hembra.

En el envés de las hojas se localizan las colonias de arañitas rojas. Como


consecuencia de su ataque las hojas toman una coloración amarillo rojiza y sus
bordes se doblan hacia abajo. Llegan a alcanzar importancia económica en
épocas de verano.

El daño se manifiesta en forma de pecas amarillas sobre el haz de la hoja,


como secuencia de los puntos donde la arañita succiona la savia.

Para el control de la arañita se debe revisar periódicamente el follaje por el


envés especialmente en épocas secas y realizar aplicaciones de productos
acaricidas. Igualmente se han determinado especies de ácaros que actúan
como controladotes de estas especies.

62
Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997
Figura 14. Adultos hembras y huevos de ácaros en el envés de la hoja

Áfidos o pulgones (Aphis tabae, Myzus persicae)

Los áfidos son insectos chupadores que viven en colonias muy numerosas,
sobre los cogollos de la planta. Su importancia radica no sólo por el daño que
producen al succionar la savia, sino por la transmisión de virus al chupar una
planta enferma y luego trasladarse a una sana.

El daño de estos insectos se caracteriza porque las hojas se amarillean y


corrugan, disminuyéndose los rendimientos.

Los pulgones tienen un buen número de enemigos naturales entre insectos


parásitos (Aphidius testaceipes) y predatores (Chrysopa sp), además de
algunos patógenos (Vertticillium lecanii), que disminuyen sus poblaciones; sin
embargo, muchas veces estos organismos son incapaces de mantenerlos bajo
control, por lo cual se requiere el uso de insecticidas sistémicos.

Mosca blanca (Bemísia tabaci, Trialeurodes vaporariorum)

Los huevos de la mosca son de color amarillo pálido y translúcido. Son


colocados en el envés de las hojas en grupos de 3 a 8 huevos en forma
individual, sujetos a la hoja por un corto pedicelo.

Los adultos miden aproximadamente l.5 mm de largo, poseen dos pares de


alas blanquecinas cubiertas de un polvo, el abdomen es de color amarillo.

El insecto al chupar la savia secreta una sustancia azucarada, que sirve como
sustrato sobre el cual crece y se desarrolla el hongo denominado fumagina que
puede cubrir totalmente las plantas y acabarlas.

El control que ha mostrado mejores resultados es el que se presenta con la


combinación de diferentes estrategias como el uso de: variedades resistentes,
parasitoides (Encarsia Formosa), depredadores (coccinella septempunctata),
entopatógenos (verticillium lecanni, Beauveria bassiana), deshojes periódicos,
destrucción de socas y productos químicos.

63
Tomado de Internet
Figura 15. Adulto de mosca blanca

Cucarroncitos de las hojas (Epitrix cucumeris, Anomala ínconstans)

Son pequeños cucarrones de colores oscuros o claros y brillantes que poseen


los fémures de las patas posteriores amplios que les permite saltar ágilmente
cuando se les moleta.

Los adultos comen las hojas haciendo muchos agujeros redondos, en daños
severos puede causar la caída de las hojas y retardar el crecimiento.

Las siguientes son las formas de control que se pueden llegar a utilizar para el
manejo del insecto:

Control biológico: parasitoides (Microctonus epitricis), depredadores


(Peucetia viridans) y entopatógenos (entomophthora sp).

Control cultural: limpieza de los cultivos, eliminación de malezas, siembra de


variedades tolerantes al ataque del insecto, eliminación de hospedantes.

Otros métodos de control: El uso de productos químicos fosforados han


mostrado buenos resultados para el control de este insecto.

Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997


Figura 16. Adulto de Epitrix cucumeris

2.4.3. Enfermedades

64
En el fríjol se presenta un gran número de enfermedades que varían en
virulencia y agresividad de acuerdo con la susceptibilidad del material y las
condiciones ambientales. Las más importantes en el cultivo son:

Roya (Uromyces phaseoli)

En el envés de las hojas aparecen manchas cloróticas, donde más tarde se


encuentran pústulas color rojo ladrillo, conteniendo un polvo pardo oscuro, que
son llevadas por el viento a grandes distancias, propagándose aún más la
enfermedad. También es diseminada por insectos, máquinas y obreros. Es
favorecida por tiempo húmedo y caluroso.

La roya igualmente puede desarrollarse sobre los pedúnculos y tallos, donde


aparecen grietas longitudinales, causando el secamiento de muchas hojas y
finalmente la muerte de la planta.

Tomado de Internet
Figura 17. Presencia de roya en hoja

Para prevenir la enfermedad se debe sembrar variedades resistentes. En caso


necesario, tan pronto se noten los primeros síntomas de la enfermedad, aplicar
productos como Antracol o productos en base a mancozeb.

Antracnosis (Colletotrichum lindemuthianum)

Este hongo ataca toda la planta: hojas, vainas, semillas y tallos. Se transmite
por la semilla.

En las hojas aparecen manchas color café oscuro y en tiempo húmedo


muestran una coloración rosada en sus bordes. En la haz de las hojas se
observan manchas con anillos concéntricos. Las manchas son más típicas en
las vainas y se presentan hundidas y con una coloración gris en su centro y un
ligero halo rosado. En ataques serios el hongo alcanza a destruir todas las
semillas, tanto que los rendimientos de la cosecha son prácticamente nulos. En
tallos causa chancros color rojo oscuro.

El hongo es favorecido por alta humedad relativa y una temperatura de 17°C.

65
La presencia de la enfermedad se puede eliminar o disminuir mediante el uso
de estrategias como: usar semillas de variedades resistentes, hacer rotación de
cultivos por 2 ó 3 años, realizar las labores culturales cuando el folIaje esté
seco, empleo de semilla sana, desinfectar la semilla antes de la siembra y
hacer aspersiones preventivas con productos químicos.

Añublo bacterial común (Xanthomonas phaseoli)

Llamado también bacteriosis, marchitamiento bacterial y tizón bacteriano


común. La enfermedad es favorecida por la humedad relativa alta.

Inicialmente los síntomas se manifiestan por manchas húmedas en el envés de


las hojas. Las regiones infestadas se ven flácidas, rodeadas por una zona
amarilla que posteriormente se vuelve necrótica y de color café.

Puede llegar a causar defoliación o reducción del diámetro del tallo. En las
ramas se manifiesta en forma de manchas húmedas que crecen gradualmente,
se tornan oscuras y rojas y levemente deprimidas. La infección puede llegar
hasta la semilla, la cual se pudre y se arruga.

Se debe usar semilla libre de la bacteria y hacer rotaciones de cultivos como


una medida de control.

Mosaico común (virus CBMV).

Los síntomas de este virus se caracterizan por un amarillamiento de las venas,


moteado de las hojas y deformación de las mismas (pequeñas), distorsión de
pecíolos y vainas y enanismo o muerte prematura de las plantas. Si la planta
llega hasta la etapa de producción, las vainas generalmente son de menor
tamaño y granos malformados, arrugados y pequeños.

Se transmite por las semillas, mecánicamente o por insectos (áfidos). Los


síntomas que son sistémicos son favorecidos por temperaturas entre 20-25°C.

El único método de control es el uso de variedades resistentes. Además,


combatir los insectos chupadores y eliminar las plantas enfermas.

Nemátodo del nudo radical (Meloidogyne sp)

Estos son gusanos microscópicos causantes de síntomas externos en las


plantas que se manifiestan por clorosis, raquitismo, quemazones en los bordes
de las hojas y marchitamiento principalmente en horas de intenso calor. Al
descubrir el sistema radical se observan agallas o nudosidades producidas por
pequeñas lombrices que varían en forma y tamaño y pueden estar situadas en
las raíces primarias y secundarias.

66
En ataques severos se presenta disminución, acortamiento y engrosamiento de
raíces. Las agallas no se pueden desprender fácilmente sin romper las raíces,
lo cual permite diferenciarlas de los nódulos formados por las bacterias
fijadoras de nitrógeno. Las agallas forman parte integral de la raíz y los nódulos
son laterales, redondos y de un color blanquecino.

El uso de variedades resistentes es la medida de control más efectiva. También


la rotación de cultivos puede disminuir las poblaciones de nemátodos. La
utilización de productos químicos resulta dispendiosa y costosa debido a la
dificultad que se tiene en hacer llegar el ingrediente activo hasta el individuo.

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS

Investigue el nombre de 5 arvenses presentes en el cultivo del fríjol y la


habichuela.

Determine un programa de control para estas plantas arvenses, teniendo en


cuenta parámetros de manejo sostenible.

AUTOEVALUACIÓN

● Indique las características que presenta cada una de las variedades de


habichuela.

● ¿Cuáles son las actividades de manejo más importantes que se realizan al


cultivo de la habichuela?

● ¿Porqué se debe realizar un proceso de tutorado o amarre en el cultivo de la


habichuela?

● ¿Qué especies se clasifican como chupadoras dentro de las plagas que


afectan al cultivo de la habichuela?

● Explique como se manifiesta la roya en el cultivo de la habichuela.

● Indique las características morfológicas que presenta la planta de fríjol.

● Indique las características de una plaga presente en el cultivo del fríjol.

● Indique las características de una enfermedad presente en el cultivo del fríjol.

● ¿Cuáles son los requerimientos ecológicos del cultivo del fríjol?

67
CAPÍTULO 3. CULTIVOS SEMIPERMANENTES.

Gracias a las condiciones de clima y suelo presentes en las zonas de clima


medio del país, se desarrollan especies con diferentes características de
adaptación.

Aquellas especies en el que su ciclo de desarrollo es menor a dos años y


mayor a seis meses se convierten en una buena opción de producción agrícola
para las zonas de clima medio, gracias a su fácil manejo y adaptabilidad.

No se puede negar la importancia que tienen y han tomado en la economía, la


producción de especies como el plátano, la arracacha y las plantas aromáticas
dentro de parámetros de alimentación y generación de ingresos económicos.

En este capítulo se conocerán las características y condiciones de manejo de


éstas tres especies dentro de un marco de producción agrícola.

Objetivos

Conocer las características generales de especies como la arracacha, el


plátano y las plantas aromáticas bajo condiciones de clima medio.

Entender las actividades de manejo agronómico de cultivos como la arracacha,


el plátano y las plantas aromáticas bajo condiciones de clima medio.

Conocer e identificar los principales problemas fitosanitarios presentes en los


cultivos de la arracacha, del plátano y de las plantas aromáticas bajo
condiciones de clima medio.

Identificar las características más relevantes para establecer y manejar un


sistema productivo de arracacha, plátano y plantas aromáticas.

3.1. Lección 10. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo de la


arracacha.

Esta planta es una hierba originaria del área andina de Colombia, Ecuador y
Perú, donde se encuentra la mayor variedad de germoplasma. La arracacha se
ha convertido en una especie de interés desde el punto de vista social porque
sirve como base en la alimentación de muchas familias campesinas ubicadas
en las diferentes zonas de clima medio del país.

Se estima que esta especie ocupa un lugar segundario en la dieta de 80 a 100


millones de personas de Suramérica. Pero solamente en brasil presenta
importancia económica desde el punto de vista comercial.

68
Con muy pocas excepciones, en nuestro país no existen cultivos a gran escala.
En general el área sembrada es muy reducida, ya que la mayoría de los
campesinos cultivan lo que necesitan para su sostenimiento y solamente sacan
a los mercados pequeñas cantidades del producto.

La parte comestible es una raíz reservante, cuyo contenido de almidón es de


fácil digestibilidad y rico en minerales. En los Andes presenta diversas
variedades cultivadas y silvestres.

Vale la pena resaltar el contenido nutricional de esta especie debido a que


presenta altos contenidos de calorías, proteínas, carbohidratos, calcio y
vitamina A, que la convierten en una fuente económica y altamente alimenticia.

Con relación a su taxonomía la arracacha pertenece a la familia apiáceas,


orden umbelíferales, familia umbelífera genero arracacia y especie
xanthorrhiza, siendo su nombre científico Arracacia xanthorrhiza.

Las variedades más importantes en esta especie se encuentran clasificadas


por el color de la raíz, teniéndose tres a saber: blanca, amarilla y morada,
aunque algunos autores las consideran especies diferentes.

3.1.1. Descripción botánica

La arracacha es una planta herbácea, vivaz, que puede adquirir una altura de
1.30 m., siendo su tamaño promedio de 40 a 50 cms.

La raíz es cónica, tuberosa, carnosa y comestible. No se puede observar una


raíz principal, y la raíz que engruesa, no presenta ramificaciones. Su longitud
varía lo mismo que el peso. Se pueden encontrar raíces que alcanzan una
longitud de 20 cms y un diámetro inicial de 8 cms o más.

La raíz tuberosa reservante es apreciada no solo por su sabor sino también


por su digestibilidad ya que contiene un almidón muy fino (10-25%) así como
también un alto contenido de calcio y vitamina A.

69
Fuente: Internet
Figura 18. Raíz de arracacha

El tallo de la arracacha es un rizoma de forma variable, con mucha frecuencia


presenta forma de tonel y siempre manifiesta zonas continuas de crecimiento.
Las yemas en esta estructura solamente están presentes en la parte superior,
en la parte inferior da alojamiento a las raíces.

De la parte superior del tallo emergen las yemas caulinares que se dirigen
verticalmente hacia arriba y cubriéndose lentamente de hojas. A estas yemas
se les denomina colinos y presentan la importancia de servir como órgano de
reproducción de la planta.

Las hojas son compuestas, envainadoras, hendidas y tripinadas alternando a


poca distancia. A medida que las hojas se van cayendo van dejando una
cicatriz muy característica en el colino.

Presenta un pecíolo muy desarrollado, los bordes son aserrados y un ápice


agudo. Las tonalidades de las hojas son verdosas y rojizas por partes.

Fuente: Internet
Figura 19. Planta de arracacha.

70
Los tallos jóvenes pueden ser consumidos en ensaladas y las hojas pueden ser
utilizadas como forraje para ganado vacuno o porcino.

La inflorescencia es una umbela con tallitos que sostienen cinco umbelas de


color violeta amarillento.

Las flores son hermafroditas, pequeñas pentámeras y actinomorfas con la


característica de que su ovario es ínfero.

3.1.2. Condiciones ecológicas

La arracacha es una especie que se desarrolla entre los 600 y los 3000
m.s.n.m., esta amplitud en la adaptabilidad está relacionada con las diferentes
clases de variedades existentes.

Con relación a los suelos la especie se desarrolla muy bien en suelos sueltos,
drenados y con buen contenido de materia orgánica. Los suelos muy arcillosos
requieren ser laborados para que la planta se desarrolle.

El pH del suelo en los cuales se desarrollan las plantas se encuentran entre


valores de 4.5 a 7.0. Es de esperarse que entre el valor se encuentre cercano
a la neutralidad en desarrollo y la producción va a ser mejor.

Esta especie es propia de climas cálidos a templados, con precipitaciones


óptimas de 600 a 1.200 mm/año.

Las temperaturas óptimas para el desarrollo de la planta están comprendidas


entre los 15 y los 21°C. Las bajas temperaturas (heladas) son muy adversas
para su desarrollo.

Los ambientes en donde mejor se desarrolla la arracacha presentan


humedades relativas entre un 70 y un 75%. Cuando los porcentajes de
humedad son mayores se pueden presentar problemas fitosanitarios por
ataque de agentes fungosos.

3.1.3. Actividades del cultivo

El material de propagación se denomina hijuelos o esquejes y presentan


ramificaciones cortas o brotes, que parten hacia arriba de la corona o cepa
madre a la que están adheridos por una base angosta. La longitud de estos
hijuelos es variable; llegan hasta 6 a 7 cm. En el extremo superior se forman
las hojas. En la cosecha se separan estos hijuelos y se dejan marchitar por 3 a
4 días antes de la siembra.

Una vez el terreno está preparado se entierran los colinos dejando el brote
terminal descubierto, empleando una distancia de siembra de 90 cms entre

71
hileras y 40 cms entre plantas para una densidad de 27.770 unidades por
hectárea.

Los agricultores pequeños acostumbran a realizar la siembra de arracacha


intercalada con plantas como maíz y yuca para uso de la producción como auto
consumo.

Aun cuando la planta puede sembrarse en cualquier época del año, es


conviene establecerla cuando comienzan las lluvias, debido a su necesidad de
buen suministro de agua.

Debido a las características del cultivo de estar asociado con otras especies,
no se le lleva a cabo un proceso de fertilización determinado. Se ha
comprobado que suministros adecuados de nitrógeno, fósforo y potasio
mejoran las condiciones físicas del producto y aumentan la producción del
cultivo. Toda recomendación de fertilizantes debe estar basada en el análisis
químico del suelo y en los requerimientos de la especie.

En términos generales el suministro de agua se realiza de forma natural


mediante las precipitaciones presentes en cada región. Por esta razón es de
gran importancia programar la fecha de siembra teniendo en cuenta las
condiciones de lluvias expresadas en cada lugar determinado.

El período vegetativo de la planta es de 300 a 400 días hasta la cosecha


dependiendo de la variedad y de las condiciones climáticas. La recolección se
realiza cuando la planta está madura, lo cual se conoce por el color amarillento
que adquiere la planta. El proceso consiste en arrancarla totalmente,
agarrándola con cuidado por la base de las hojas y tirando de ella poco a poco,
para impedir que se suelten las raíces engrosadas.

Los rendimientos promedios en las zonas de clima medio se encuentran entre


valores de 5 a 10 t/ha. Con relación a este aspecto es bueno recordar que la
arracacha se siembra en asocio, factor que disminuye la producción obtenida
con relación a la potencial que puede expresar la especie.

3.1.4. Post-cosecha

La gran mayoría de la arracacha recogida no se almacena porque este


producto es cosechado escalonadamente a partir de los 12 meses es vendida
en el mismo sitio de producción o en los mercados locales.

El empaque utilizado en la gran mayoría es el de fique de primera, empleado


por una sola vez con capacidad para cinco arrobas.

La arracacha se clasifican en tres categorías, en primera, segunda


mezclándolas y el sobrante o riche que se vende en un precio inferior.

72
En términos generales en la arracacha no se lleva proceso de poscosecha
debido a que la producción es vendida o consumida inmediatamente después
de ser cosechada.

Los costos de producción para una hectárea de arracacha están en un valor


promedio de 1.582.000. Este valor depende principalmente de las condiciones
de la región productora y de las características de manejo agronómico, ya que
factores como valor de la mano de obra y costos de los insumos varía entre las
diferentes regiones.

73
3.2. Lección 11. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo de la
arracacha y su control.

Por encontrarse normalmente en asocio con otras plantas la arracacha


manifiesta problema fitosanitarios de baja incidencia. Esto no significa que en
ataques severos no se llegue a causar disminuciones importantes en la
producción.

3.2.1. Control de arvenses

Después de colocadas las semillas en el suelo, son decisivos para la cosecha


los cuatro primeros meses. Si se dejan de controlar las malezas se pueden
producir pérdidas de cosecha de hasta un 40%.

Durante el curso del cultivo deben darse por los menos tres deshierbas, que se
realizan frecuentemente a mano para no estropear la planta, una a los dos
meses de desarrollada, otra a los cuatro meses y otra a lo dos meses
siguientes.

Durante este proceso no es aconsejable aporcar la planta porque con ella la se


tiende a formar rizoma superficial o cabeza, lo cual va en detrimento de un
buen desarrollo de las raíces.

3.2.2. Control de enfermedades

Como la mayoría de las especies la arracacha no está exenta de presencia de


enfermedades, entre las cuales se pueden mencionar:

Cercospora sp

Este patógeno se caracteriza porque afecta el follaje y los pecíolos en donde


aparecen manchas amarillentas circulares de tamaño mediano que se van
oscureciendo y aumentando de tamaño con el tiempo.

La presencia de esta enfermedad se ve favorecida por el tiempo seco y las


altas humedades relativas.

Para controlar la presencia del patógeno se recomienda disminuir las


aplicaciones de nitrógeno, mejorar el drenaje y utilizar variedades resistentes.

Alternaría sp

Los ataques de Alternaría se inician en las hojas más viejas; en los bordes de
éstas, aparecen manchas de forma irregular y de un color pardo a negro. El
tejido necrosado presenta un halo amarillo. Cuando las manchas se aumentan

74
en número y tamaño se manifiesta un arrugamiento de la hoja. En ataques
fuertes la hoja se puede secar y morir.

En ausencia del hospedante, el órgano reproductor del hongo puede


permanecer en latencia por uno o dos años en los residuos de cosechas.

El control de la alternaria está relacionado con prácticas como rotación de


cultivos, drenaje adecuado del terreno y tratamiento a la semilla antes de la
siembra.

Tomado de Internet
Figura 20. Presencia de alternaria en tallo

Pudrición radicular (Pseudomonas sp.)

El patógeno causa una descomposición acuosa, que produce pudriciones y


olores avinagrados.

Puede comenzar en el campo cuando las plantas están llegando a su período


de madurez. La pudrición es muy severa cuando la arracacha cosechada se
deja al sol o se producen desgarraduras durante la recolección y se almacenan
en lugares húmedos y tibios.

Los organismos existen como saprofitos en el suelo y desechos orgánicos.


Penetran a través de heridas y tejidos viejos. También puede presentar la
infección a través de tejidos maltratados y quemaduras de sol.

Como medida de control de la enfermedad se puede utilizar una adecuada


ventilación y luminosidad en los locales destinados a almacenamiento de la
cosecha para evitar acumulación de humedad. El uso de variedades
resistentes es otro medio de prevención de la enfermedad.

3.2.3. Plagas

Cucarrón o Pulguilla negra, (Epitrix sp.)

Las pulguillas negras son cucarroncitos muy pequeños de unos 2 a 3 mm de


longitud, de color negro brillante. Tienen el último par de patas adaptadas para
brincar, por lo cual se observan en las plantas saltando de una hoja a otra. El
daño al follaje lo hacen los adultos mediante perforaciones más o menos

75
circulares y pequeñas en las hojas. La larva de este insecto es de color blanco
con la cabeza oscura, cuerpo muy delgado que alcanza unos 4 mm de largo.
La larva se alimenta de las raíces secundarias de las plantas.

El control biológico del insecto es muy importante para disminuir poblaciones


de epitrix, se han utilizado parasitoides (braconidaes), depredadores y algunos
entopatógenos. Para un control eficiente del insecto se recomienda emplear
diferentes técnicas como el control cultural, el control biológico y el control
químico.

NEMATODOS

Aunque no son insectos plaga, los nemátodos pueden llegar a causar daños
importantes dentro del órgano cosechado.

Los nemátodos son individuos microscópicos localizados en el suelo, causando


daño al sistema radicular de la planta.

Las plantas atacadas son de color verde pálido, presentan tejidos engrosados y
adquieren formas muy anormales. Se presenta igualmente atrofia en el
desarrolla y una apariencia fláccida en las hojas externas.

Cuando la raíz se forma, los nemátodos emigran a ésta e invaden los tejidos de
almacenamiento que adquieren una textura harinosa. La actividad de los
nemátodos ocasiona que la raíz no forme estructuras secundarias.

La única medida de control para prevenir el ataque de los nemátodos es la


rotación por largos períodos, 4 ó 5 años, con cultivos resistentes al ataque del
nemátodo. La utilización de material de propagación vegetativa procedente de
cultivos libres del nemátodo, puede evitar su presencia en áreas de cultivo.

Tomado de Internet
Figura 21. Nemátodos

76
3.3. Lección 12. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
plátano.

El plátano es una de las especies tropicales más cultivadas a nivel mundial


debido a su gran importancia en la alimentación humana y a las fuentes
económicas que genera a los países productores.

En nuestro país la mayoría de las regiones, tanto en zona urbana como rural, el
plátano es la fuente básica de carbohidratos para los sectores más deprimidos
de la población. En algunas regiones se convierte en una de las bases de
estabilización social, como fuente permanente de ingresos al agricultor,
alimento indispensable para los obreros y renglón asociado y complementario a
otras explotaciones.

Desde el punto de vista taxonómico la planta del plátano pertenece a las


monocotiledóneas, del orden de las escitamíneas, subfamilias musoidea y del
género Musa.

3.3.1. Morfología

Dentro del manejo técnico del cultivo es importante conocer las características
estructurales de la planta, de tal forma que permita entender el porque de la
ejecución de las labores intrínsecas al sistema productivo, y de la interrelación
permanente entre manejo y botánica.

Sistema radicular

El sistema radical está conformado por raíces de carácter netamente


adventicio, fasciculado y fibroso. Estas se originan a nivel de la capa de Magín,
atraviesan la zona cortical y emergen a través de los nudos y espacios
internodales subterráneos del cormo.

De las raíces primarias se originan otras laterales secundarias y terciarias. La


mayoría de las raíces se desarrollan en los primeros 20 a 40 cm de la
superficie del suelo, con una distribución espacial de carácter radial- horizontal.

Con relación a la consistencia las raíces a edad temprana son bastante


frágiles, principalmente su ápice el cual está protegido por la cofia; sin
embargo, con el tiempo se tornan más resistentes pero continúan siendo
flexibles.

77
Fuente: Champion Jean, 1968.
Figura 22. Morfología del plátano.

Tallo

El tallo corresponde a un cormo subterráneo erecto con ramificación


monopódica. En el ápice se encuentra anidado el punto vegetativo o meristemo
apical, rodeado por las bases de las hojas diferenciadas.

La forma del cormo está influenciada por la textura y la estructura del suelo. El
diámetro, tanto en sentido horizontal como vertical, no excede por lo general de
los 30 cm. La consistencia suele ser carnosa debido a su alto contenido de
parénquima de naturaleza amilácea.

78
Los nudos del cormo comprenden la región localizada por debajo del punto de
inserción de la vaina de la hoja. Los entrenudos en la porción basal o
subterránea son sumamente cortos y por ende escasamente diferenciados.

Los pecíolos dan origen al foliolo, el cual es pequeño y alargado en los


estados juveniles de la planta y posteriormente llega a medir hasta 1 metro
cuadrado. En la parte superior del cormo está ubicado el meristemo principal, el
cual produce inicialmente las hojas para posteriormente producir el racimo.

Yemas

En la planta del plátano las yemas dan origen a los colinos. En un principio el
crecimiento y desarrollo de las yemas respecto al del tallo es perpendicular,
pero luego se torna paralelo a éste.

La emergencia de las yemas sobre la superficie del suelo está condicionada


principalmente por la densidad poblacional y por la edad del tallo principal.
Cuando se trata plantaciones establecidas en siembras nuevas depende del
tamaño del cormo empleado como semilla. Igualmente la textura y estructura
del suelo afectan este proceso,

Inflorescencia

Esta estructura, que conduce después de determinados procesos fisiológicos a


la formación del racimo, se origina a partir del ápice vegetativo, localizado en el
centro de la superficie superior del tallo subterráneo. Este ápice posee la forma
de una cúpula achatada y está compuesto por dos zonas meristemáticas. Una
de ellas que se denomina como la túnica, constituida por una capa delgada de
células superficiales mantenidas por divisiones periclinales y la segunda zona
conocida como cuerpo, localizada debajo de la túnica, está mantenida por
divisiones celulares realizadas en cualquier plano.

3.3.2. Variedades comerciales

En las zonas de clima medio de Colombia se siembran diferentes clones de


plátano comestible, dependiendo de las condiciones ecológicas de cada sector
en particular.

Teniendo en cuenta su valor comercial se encuentran tres variedades de


importancia a saber: Dominico, Dominico Hartón y Hartón.

Existen otras dos variedades que se cultivan únicamente a nivel de núcleo


familiar, principalmente en aquellas áreas ecológicas marginales para el cultivo
de los tres primeros clones denominados como Cachaco o Popocho y Pelipita.

79
3.3.3. Condiciones ecológicas

La altitud en donde se establece el plátano va desde alturas del nivel del mar
hasta los 2.200 metros. A medida que aumenta la altura en la que se
encuentra el terreno se alarga el período vegetativo del cultivo.

La temperatura es un factor íntimamente relacionado con la altura. Reviste un


gran interés porque influye directamente sobre los procesos respiratorios y
fotosintéticos de la planta, al igual sobre la duración de su ciclo vegetativo. La
temperatura óptima para el cultivo del plátano está alrededor de los 27°C y es
el factor que más afecta la frecuencia de emisión de hojas alargándose o
acortándose el ciclo vegetativo dependiendo de la mayor o menor temperatura.

Un factor de mucho peso en el proceso de desarrollo y producción del cultivo


es la luminosidad. Se requieren por lo menos 1.500 horas de sol al año para
que la planta crezca vigorosa y produzca buen racimo.

La planta necesita para su normal crecimiento y buena producción, un


suministro de 4-5 mm diarios de agua, lo cual tiene una equivalencia de 120-
150 mm de lluvia mensual, bien distribuidos.

A pesar que la cantidad de agua requerida por la planta es de 1.800 y 2.800


milímetros al año bien distribuidos, la planta produce bien en regiones con 1500
mm de lluvia siempre que no se presenten veranos muy prolongados.

El cultivo del plátano se ve afectado seriamente por el viento cuando este


excede los 20 Km/h, produciéndose ruptura de las hojas, lo que afecta la
duración de la vida útil de la misma.

Los suelos destinados para el establecimiento del plátano, deben presentar


como propiedades físicas una buena proporción de arenas, arcillas y limos que
permitan el movimiento de gases, agua y desarrollo de la raíz. Entre los
factores químicos, el suelo debe estar caracterizado por pH entre 5.6 y 7.3 que
son los ideales para la mayoría de los cultivos. En cuanto a éste factor químico
la planta del plátano muestra un rango de adaptabilidad bastante amplio, razón
por la cual se puede cultivar en suelos con pH de 4.0 o en suelos con pH hasta
de 8.0.

3.3.4. Establecimiento y labores de manejo

Semilla

El plátano se reproduce por medio de material vegetativo o asexual. Esta forma


de reproducción relativamente fácil ofrece la ventaja que se puede disponer de
ellas en todo momento por parte del agricultor.

80
En término general cualquier yema vegetativa individual o cormo con su punto
de crecimiento diferenciado o no, se puede emplear como semilla.

Entre las clases de semilla utilizadas tenemos: Cepa que puede provenir de
plantas cosechadas, como también de aquellas que aún no han producido su
racimo; Colino Aguja o Puyón, semilla que corresponde a plantas con hojas
estrechas. Es fácil de manipular y posee un ciclo vegetativo corto; ésta es una
de las más usadas; y Colino orejón o bandera la cual posee hojas anchas,
seudotallo de forma cilíndrica y ciclo vegetativo un poco más largo.

En cultivos comerciales antes de la siembra se realiza un proceso de


tratamiento de la semilla, el cual consiste en impregnar el material con una
solución de fungicida e insecticida para evitar problemas fitosanitarios durante
las etapas iniciales del cultivo.

Siembra y densidad poblacional

El cormo debe sembrarse cuidando que las primeras yemas axiales queden a
ubicados a 10 cm. por debajo de la superficie del terreno y el corte en el
seudotallo a 5 cm por debajo de la superficie.

La densidad de siembra depende del tipo de explotación que se pretende


establecer: permanente, transitorio, monocultivo o asocio.

En cultivos permanentes la cantidad de plantas por hectárea no debe superar


las 1.500. En cultivo transitorio ya sea en asocio o no, las densidades no
deben superar las 3.000/Ha.

Trazado

Las distancias de siembra varían de acuerdo con diferentes factores Y


dependen de la densidad de siembra escogida.

El patrón de siembra puede ser en cuadro, triángulo o en forma exagonal


(triángulos equiláteros). Estos últimos patrones han sido los más utilizados
porque hasta cuando se iniciaron los ordenamientos lineales, se consideraba
que la siembra exagonal era la que permitía una mejor distribución de las
plantas.

En terrenos planos se puede emplear cualquiera de los sistemas mencionados


con distancias que pueden ser de 2.50 a 3.50 m. entre plantas. En terrenos en
pendiente la distancia debe ser mayor a los 3.0 m.

Una vez realizado el trazado se efectúan los huecos en donde se sembrará el


material vegetal. Se utilizan para este fin orificios de 40 cms de ancho, 40 cms
de largo y 40 cms de profundidad.

81
Deshije

Esta practica consiste en la eliminación de todos aquellos colinos o brotes que


no son necesarios para mantener una población constante ni para conservar
una adecuada secuencia de producción en cada unidad productiva.

Es necesario llevar a cabo el deshije porque la planta presenta la característica


de producir un número variable de colinos, cuya función es conservar la
especie, pero que disminuye la calidad del sistema productivo.

Deshoje

Es una labor que se hace en forma manual y que consiste en eliminar al mismo
tiempo las hojas que penden del seudotallo, al igual que los sectores de pecíolo
del seudotallo que se han secado.

Se ha determinado que la planta necesita un mínimo de ocho hojas durante


todo su ciclo de vida. Además, la planta puede soportar perdidas hasta de un
50% de su follaje en cualquier época de su desarrollo vegetativo.

El deshoje presenta la ventaja que permite adelantar manejos fitosanitarios


dentro del cultivo gracias a la eliminación de posibles focos de infección.

Apuntalamiento

Esta práctica esta encaminada a prevenir la pérdida de unidades productivas


por volcamiento. Este problema serio se puede deber al efecto combinado de
vientos fuertes con peso del racimo y altura de la planta o mal anclaje de la
misma.

Descalcetamiento

Consiste en quitar las vainas, calcetas o yaguas. Esta labor debe hacerse con
la mano, arrancándolas de abajo hacia arriba y sin usar herramientas.

El descalcetamiento ayuda al manejo de plagas y enfermedades que pueden


tener sus focos de infección en las calcetas o guascas descompuestas.

Destronque

Después de cosechar el racimo se debe cortar el seudotallo un poco por debajo


del sitio donde dobló la planta. Luego se continúa la labor de corte periódico de
la parte que se va descomponiendo, hasta su total eliminación.

82
El destronque permite manejo de parásitos, regulación de luz y aire y además
se recuperan espacios productivos.

Desbellote

Es una práctica que consiste en eliminar la bellota o parte terminal del eje de la
inflorescencia aproximadamente 20 días después de la aparición de la
fructificación en el exterior. Esta labor conviene efectuarla quebrando la bellota
preferiblemente con la mano o con una herramienta de madera.

El destellote se realiza para disminuir la posibilidad de volcamiento de la planta


por peso de la bellota y para evitar cicatrices florales y bracteales.

Embolse

Esta labor aumenta la velocidad de crecimiento de los frutos, al mantener a su


alrededor una temperatura mas alta y con cierto grado de constancia. Sin
embargo, esta práctica no es de uso común en el país. Esta actividad se debe
iniciar a partir de los primeros estados de desarrollo de los frutos.

Fertilización

En un cultivo comercial la fertilización es el proceso que permite obtener altas


producciones. Esta labor debe ser el resultado de la interpretación de un
análisis de suelos.

Según la Federación de Cafeteros (1992), el plátano requiere por hectárea para


su desarrollo las siguientes cantidades nutricionales, dadas en Kg,/Ha.:
Nitrógeno 45, fósforo (P205) 65 y potasio (K20) 135.

Uno de los elementos que la planta toma en gran cantidad durante todo su ciclo
de desarrollo es el potasio, en tanto que la de cal es el extremo opuesto.

Los fertilizantes deben aplicarse a los hijuelos en crecimiento (aplicación


localizada) en forma de corona. En plantaciones de alta densidad ha resultado
eficiente el abonamiento al voleo debido al extenso sistema radical del plátano.

Cosecha

La cosecha es el acto de recolectar los racimos que han completado su


madurez fisiológica. Dependido de la zona el tiempo comprendido entre la
floración y la cosecha varía entre 11 y a 14 semanas.

Es importante determinar la época de plena madurez fisiológica, porque si el


racimo se cosecha antes de esta época se tiene problemas en el mercadeo, o

83
si se quiere dejar para maduro su madurez es insuficiente, o si se pasa de esta
época se puede presentar el rajado de los frutos.

Para ser eficiente la cosecha con relación al momento oportuno es necesario


llevar registros en donde se programan las fechas de recolección con base en
la fecha de floración y el tiempo a recolección.

Una vez cosechado el fruto se realizan las labores de poscosecha que tienen
como finalidad mejorar la presentación, prolongar el tiempo en verde, eliminar
las manchas ocasionadas durante la cosecha y evitar el ataque de hongos en
el pedúnculo.

El lavado se realiza en tanques en donde se separa la fruta de acuerdo a sus


características de calidad. Para lavar los racimos se utiliza diferentes
detergentes y desmanchadores. Luego se encanastilla o se enguacala
previamente forrando el fruto en plástico

3.3.5. Post-cosecha

No se utiliza un empaque definido o adecuado propiamente para el manejo de


la fruta. En la mayoría de las zonas productoras, se transportan los racimos al
mercado en camiones en donde se colocan los racimos completos,
"encarrados" utilizando las hojas y/o papel periódico como amortiguador entre
éstos.

Otro sistema consiste en empacar en gajos o manos o también por unidades o


plátanos en sacos de fique. Los intermediarios lo negocian entre sí en esta
misma forma y el consumidor lo adquiere en racimos completos o por
unidades.

En la modalidad de mercadeo por dedos a granel, éstos se deben cortar o


desprender de la corona dejando un pedúnculo o "pezón" de 2,5 cms. y evitar
ruptura o maltrato del mismo en el "cuello" o punto de unión al dedo.

La fruta así preparada se sumerge en una solución de agua y piedralumbre al


0.5% para que el látex precipite y no cause manchas que den mala
presentación a los dedos. Finalmente se debe aplicar un tratamiento con
fungicidas específicos para prevenir el desarrollo de hongos durante el
transporte y almacenamiento.

De ahí que dada la carencia o deficiencia de empaques adecuados para el


manejo del plátano, como fuera por ejemplo el empleo de cajas plásticas, se ha
determinado que las pérdidas físicas de poscosecha, ocasionadas por el
maltrato del producto y las deficiencias del transporte (golpes, magulladuras,
cortaduras, etc.) van desde un 5%, en la fase mayorista (rural y urbana) hasta
un 10% en la fase minorista urbana. En muchos casos se habla da que las
pérdidas alcanzan hasta un 25% del volumen total de la producción.

84
3.4. Lección 13. Malezas, plagas y enfermedades del cultivo del plátano y
su control.

3.4.1. Manejo de arvenses

Dependiendo de las condiciones ecológicas en las que se desarrolla el cultivo,


se puede encontrar compitiendo diversas poblaciones de malezas. Además de
la competencia que ofrecen al cultivo, algunas malezas han sido reconocidas
como huéspedes de enfermedades y plagas.

El plátano necesita estar libre de malezas porque éstas son competitivas por
luz, agua y nutrientes; en ocasiones son hospederas de enfermedades e
insectos plagas.

Se recomienda mantener la mayor limpieza posible durante el primer año de


establecido el cultivo porque en este estado las plantas pequeñas están más
espaciadas y la competencia de las malezas es mayor.

Dentro de las especies malezas que potencialmente pueden considerarse


como problema en el cultivo del plátano se encuentra las gramíneas.

Una vez ocurre el completo desarrollo de las plantas, el follaje se expande


creando sombreamiento el cual ayuda al manejo de las malezas. Igualmente la
distribución de los residuos de cosecha, sí se hace en forma continua y
ordenada, contribuye al manejo de las malezas, creado coberturas que no sean
competitivas y reduciendo el número de desyerbas.

El cultivo de plátano es especialmente sensible a la competencia durante los


primeros cinco meses de su fase de establecimiento y que durante este periodo
se requieren cinco a seis desyerbas aproximadamente.

En la zona del plato del árbol es recomendable arrancar las malezas a mano
para no causar heridas al cormo por daño en las raíces.

El número de desyerbas por año depende del manejo integrado que se haga
del problema. En terrenos de ladera no debe desyerbarse con azadón sino con
machete para evitar la erosión. En estos terrenos pendientes conviene sembrar
en curvas 2 niveles haciendo terrazas sobre las cuales se van depositando los
residuos de cosecha para que formen barreras naturales que contribuyan a
disminuir la erosión. De ninguna manera conviene usar herbicidas en terrenos
de ladera.

En terrenos planos o ligeramente ondulados pueden hacerse controles


selectivos con herbicidas siempre teniendo en cuenta la clase y estado de
desarrollo del cultivo y de las malezas.

85
El control de malezas debe incluir tantos métodos como sea posible para evitar
el establecimiento, limitar el crecimiento y restringir la reproducción de las
malezas.

De esta manera un programa de control de malezas debe lograr, a corto plazo,


minimizar las pérdidas de los cultivos y a largo plazo mantener en los campos
una población fácilmente manejable.

3.4.2. Enfermedades

Son muchas las enfermedades que afectan al plátano, llegando a causar


reducciones considerables en calidad y cantidad de la producción. A
continuación se trataran aquellas que a juicio del autor de este módulo son las
más importantes.

Sigatoka amarilla, Mycosphaerella musicota

La sigatoca común o amarilla, es la enfermedad que ataca con mayor


intensidad los cultivos de plátano localizados en las zonas de clima medio.

La enfermedad se caracteriza por causar lesiones de color amarillo verdoso


que forman rayas o estrías que se alargan y se ensanchan tomando un color
de café a rojo herrumbroso. Al final la mancha se seca y se hunde en la parte
central, tomando un color gris rodeado de un halo amarillo oscuro, hasta
causar la muerte de la hoja.

Fuente: Belalcazar Carvajal Sylvio,


Figura 23. Síntomas de Sigatoka Amarilla.

Una forma de control cultural se logra disminuyendo la humedad excesiva


dentro de la plantación, especialmente la mojadura foliar. Esto se obtiene

86
eliminando las hojas afectadas por el patógeno y así de esta forma eliminar el
inoculo.

Otra forma de control utilizada es mediante el empleo de productos químicos


realizando fumigaciones aéreas con aceites y fungicidas, desarrollando esta
actividad de manera periódica.

Sigatoka negra, Mycosphaerella fijiensis

La sigatoka negra es la enfermedad foliar más destructiva que ataca al género


Musa.

En plantaciones con bajo nivel de infección, los síntomas de la enfermedad


pueden ser fácilmente confundidos con los síntomas de Sigatoka común o
Amarilla, especialmente en plantas jóvenes o en colinos bandera u orejones,
donde las manchas individuales presentan una apariencia circular a ovalada de
igual color y apariencia.

En ataques severos el patógeno es inconfundible en plantas desarrolladas aun


sin racimo, por la gran cantidad de rayas y manchas de color café a negro que
pueden cubrir toda el área foliar en forma descendente desde la tercera hoja
más joven abierta. La enfermedad evoluciona en la planta a través de la
siguiente secuencia:

• Pizcas (estado 1): pequeñas decoloraciones menores de 1 mm de Iongitud,


visibles únicamente por el envés de la hoja.

• Rayas (estado 2): Rayas de 2-3 mm de longitud de color café rojizo, visibles
primero por el envés y luego por el haz, donde varían de color amarillo a café y
negro.

• Estría (estado 3): Las rayas o estrías se alargan y amplían dando la impresión
de haber sido pintadas con un pincel. En ocasiones desfavorables pueden
alcanzar de 2 a 3 mm de longitud.

• Mancha (estado 4): manchas semiovaladas que tienen color café por el envés
y negro por el haz.

• Mancha negra (estado 5): manchas semiovaladas que tienen color negro, el
centro hundido y rodeadas de un halo amarillento.

• Mancha negra (estado 6): manchas semiovaladas que tienen color negro, el
centro hundido de color grisáceo.

En líneas generales se podría decir que los efectos de la enfermedad sobre la


planta son similares a los originados por la sigatoka amarilla, es decir:
defoliación, reducción del vigor vegetativo, pérdida de peso de los racimos,
maduración precoz y pérdida de calidad de la fruta.

87
Fuente: Merchán Vargas Víctor,
Figura 24. Síntomas de Sigatoka Negra.

La humedad relativa, según los efectos observados, es el factor que más


favorece el ataque de la enfermedad, por lo tanto, todas las prácticas
agronómicas que tiendan a disminuir la presencia de agua o humedad excesiva
en la plantación, contribuyen a reducir la intensidad del ataque de la
enfermedad

Para el control químico de la enfermedad se han utilizado los mismos


productos fungicidas protectantes y sistémicos, aplicados para la sigatoka
Amarilla considerando su similitud biológica y patogénica.

Moko, Ralstonia solanocearum

Enfermedad de origen bacterial y causada por el organismo denominado


Ralstonia solanacearum.

Los síntomas que ocasiona deben considerarse desde un punto de vista


externo e interno. Externamente, ellos guardan una relación estrecha con el
proceso de transmisión e infección. Cuando éste corresponde a transmisión por
corrientes de agua y/o herramientas, la infección siempre converge en el
cormo. Por lo tanto y una vez que la bacteria alcanza o invade los tejidos del
cormo, el desarrollo de los síntomas va a depender de la edad o tamaño de
colinos y/o plantas que conforman la cepa afectada.

En colinos pequeños sus hojas, comenzando de la central o bandera hacia


afuera, muestran marchitez, amarillamiento y secamiento; estos colinos por lo
general mueren. Sin embargo, cuando las plantas son de edad avanzada
presentan una sintomatología difícil de diferenciar de la correspondiente al
ataque de nematodos, caracterizados porque las plantas muestran, en horas
calurosas principalmente, una ligera flacidez de sus hojas, las cuales además
pueden registrar diferentes grados de clorosis. Estas plantas por lo general no
mueren, pero los racimos y dedos que las conforman, dependiendo de la época

88
de infección, pueden ser de tamaño normal o bien pequeños; pero invadidos
parcial o totalmente por la bacteria.

Cuando la transmisión es ocasionada por insectos e inclusive por herramientas,


la sintomatología en este caso hace alusión al racimo y a su inflorescencia
masculina. Al respecto, cuando el proceso de infección se lleva a cabo por las
heridas que dejan las flores masculinas al desprenderse, el primer síntoma
corresponde a una cierta clase de marchitamiento de las brácteas que cubren
los racimos de flores, las cuales no se levantan y enrollan sobre su cara
superior como ocurre normalmente, sino que permanecen sin levantarse, se
marchitan y secan.

Los síntomas internos, que pueden presentar tanto los cormos y seudotalIos
como frutos y raquis del racimo, están caracterizados por la presencia en los
tejidos vasculares de lesión es en forma de pequeñas manchas, cuya
coloración varía dé amarillo pálido a castaño oscuro. En el caso de los frutos, la
pulpa aparece en un principio decolorada, luego toma una coloración que de
castaña clara pasa a castaña oscura, hasta que finalmente todo el fruto se
pudre y momifica.

La forma de control más efectiva contra la presencia de moko es el preventivo


como la selección de semillas sanas, eliminación de plantas afectadas y el
manejo adecuado de los factores de transmisión.

Fuente: Belalcazar Carvajal Sylvio,


Figura 25. Racimo afectado por Moko

Elefantiasis

El agente causal de esta enfermedad es desconocido.

89
Los síntomas se caracterizan porque el seudotallo de las plantas afectadas
presenta en su parte basal una hipertrofia, la cual hace que las yaguas que
rodean al cormo presenten una especie de arrugamiento similar a la pata de un
elefante, de donde proviene su nombre. Estas posteriormente pueden mostrar
un cuarteamiento en sentido vertical, junto con un necrosamiento de las
mismas en su punto de unión con el cormo, ocasionando su separación y el
volcamiento de las plantas.

Mientras no se determine la naturaleza de su agente causal, todas las


recomendaciones para su control están dirigidas al empleo tanto de semillas
provenientes de plantaciones libres del problema como de la correcta
aplicación de prácticas de manejo de plantaciones, en lo relativo a fertilización
y control de malezas, plagas y enfermedades.

Mosaico, Virus del Mosaico del Pepino (CMV)

El mosaico es una enfermedad que se observa en la mayoría de las zonas


geográficas productoras de plátano.

Su agente causal es el virus del mosaico del pepino. Es un virus representado


por varias razas, el cual puede ocasionar mosaico, secamiento o pudrición de
la hoja bandera y cuarteamiento longitudinal o pudrición basal.

La infección ocasionada por el CMV en plátano es de carácter sistémico.


Origina clorosis intervenal más visible a trasluz; se puede manifestar como un
rayado clorótico o como manchas amarillas; las hojas de coloración normal
pueden tener las nervaduras secundarias excesivamente engrosadas, que le
dan un aspecto acanalado. Como síntomas de una infección avanzada se
presentan necrosis foliares a lo largo de las nervaduras secundarias. Los
vectores de la enfermedad principalmente son los áfidos.

El control de la enfermedad está encaminado en la utilización de semillas


sanas y el control de los vectores.

Pudrición acuosa del seudotallo, Erwinia chrysanthemi.

Esta enfermedad de naturaleza endémica es ocasionada por la bacteria


Erwinia chrysanthemi. Su ataque es favorecido por condiciones de sequía y
deficiente estado nutricional de las plantaciones.

Las plantas severamente afectadas presentan doblamiento por la parte media


del seudotallo. En la parte central y en las calcetas externas se presenta un
exudado bacterial nauseabundo. Se presenta una penetración de la pudrición
desde las calcetas externas a las internas.

Por ser una afección de carácter sistémico, las medidas a implementar para su
manejo deben estar dirigidas hacia su prevención, es decir a evitar que el

90
patógeno penetre a los tejidos de la planta hospedante. Por lo tanto, las
plantaciones deben mantenerse bien fertilizadas, con lo cual no sólo se
incrementará su vigor sino también su resistencia a la penetración del
patógeno.

En plantaciones establecidas, se debe recurrir además al proceso de


desinfección de las herramientas de trabajo. Igualmente debe utilizarse semilla
sana en las nuevas siembras.

3.4.3. Plagas

Picudo negro, Cosmopolites sordidus

El picudo negro es la plaga de mayor importancia económica del plátano en


Colombia. No sólo ocasiona grandes pérdidas a las plantaciones, sino que
también se encuentra diseminada en la mayoría de las zonas donde se
siembran estos cultivos.

Los adultos de C. sordidus, son cucarrones que miden de 1.5 a 2.0 cm de


longitud; la cabeza presenta un pico largo y curvo, con dos grandes antenas.
La coloración varía de café oscuro, recién nacidos, a negro cuando ya están
bien desarrollados.

Generalmente se encuentran localizados en la zona basal de las plantas,


debajo o dentro de los residuos de cosecha en descomposición, en donde la
humedad es muy alta y se presentan condiciones de luz tenue.

Las hembras ponen huevos durante la noche, en tallos cortados o en la base


de las plantas, prefiriendo la corona del cormo.

Fuente: Vélez Ángel Raúl


Figura 26. Adulto de picudo negro

Para su control se puede tomar una medida cultural mediante la creación de


condiciones adversas para el desarrollo y la diseminación del insecto. Es

91
importante al respecto mantener la plantación libre de malezas, con fertilización
adecuada y riegos oportunos, revisarla frecuentemente y destruir las plantas
que se encuentran afectadas.

También se puede realizar un control mecánico mediante la construcción de


trampas para capturar adultos de picudo utilizando los residuos de cosecha,
principalmente seudotallos.

Para el control del picudo es importante utilizar las herramientas biológicas ya


que el insecto tiene enemigos naturales que deben ser aprovechados dentro de
un programa de manejo de plagas como coleópteros y ciertas especies de
hormigas; entomopatógenos como Beauveria bassiana; y Metarhizium
anisopliae.

Picudo rayado, Metamasius hemipterus y Metamasius hebetatus

El picudo rayado es una plaga secundaria, cuya presencia en plátano está


relacionada con plantaciones en mal estado, con desbalances nutricionales,
especialmente con deficiencias de potasio.

Por su incapacidad para causar por sí mismo heridas a tallos sanos y fuertes
que permitan su entrada, siempre está asociado con algún disturbio,
preferiblemente con otros barrenadores. Luego ocasiona daños similares,
construyendo galerías en el seudotallo.

Los estados causantes del daño son tanto las larvas como los adultos, que
producen ablandamiento del tallo y caída de las plantas. Las larvas barrenan el
seudotallo causando debilitamiento de la planta, la cual se dobla antes de
producir el racimo.

Los adultos son cucarrones de color generalmente rojizo. Presentan diferentes


patrones de coloración, pero todos corresponden a la misma especie.

La presencia de este insecto hace que las hojas más externas de la planta se
vuelvan amarillas y luego se sequen. La planta produce un racimo pequeño y
raquítico que madura en forma prematura. En ocasiones las plantas, por la
debilidad de su seudotallo, se pueden doblar por el peso del racimo.

Para evitar el ataque de esta plaga se recomienda primordialmente no causar


heridas a las plantas. Además, se deben seguir las mismas prácticas sugeridas
para el control del picudo negro, manteniendo la plantación libre de malezas y
residuos, procurando además establecer y manejar un buen drenaje.

Gusano tornillo, Castmomera humboldtii

Los adultos son mariposas diurnas de color café oscuro con una banda blanca
que las atraviesa diagonalmente.

92
Las larvas son de color crema con cabeza marrón y áreas esclerotizadas de
color oscuro sobre el tórax. Poseen tres pares de patas torácicas, cuatro pares
de seudopatas y un par anal. Las larvas jóvenes se alimentan de las calcetas
externas de los puyones; posteriormente penetran hacia el cormo de la planta
madre y luego ascienden por el seudotallo a medida que crecen.

Las larvas taladran grandes galerías extendiéndose hasta el corazón del


seudotallo e imposibilitando a la planta para producir el racimo. Como
consecuencia de las heridas producidas, las plantas son más susceptibles a
doblarse por la acción de los vientos. Las hojas de las plantas infestadas
algunas veces se tornan amarillas o cafés y a menudo muestran poco
desarrollo.

La presencia del insecto se caracteriza por una masa gelatinosa secretada por
la planta, que libera hacia el exterior, a través de unos agujeros practicados por
las larvas para tal fin.

El uso de semilla sana y las buenas labores culturales como el deshije y la


recolección de material constituyen el mejor medio para manejar el problema.

Fuente: Rosero Álvaro, 1987


Figura 27. Gusano tornillo

Gusano canasta, Oiketycus kirbyi.

La hembra es larviforme y sólo los machos se presentan como mariposas.

La hembra nunca sale del cesto o canasta, donde inclusive es fecundada. El


macho, de color rojo oscuro, sus alas son relativamente pequeñas en
comparación con el grueso de su tórax; el abdomen es delgado, de apariencia
telescópica y la longitud de su cuerpo no pasa de 3.0 cm.

Las larvas pequeñas roen la epidermis superior de las hojas, pero cuando
crecen causan perforaciones grandes, presentándose así consumo foliar, el
cual es apreciable con altas infestaciones. Por lo regular, se localizan todo el
tiempo por el envés de las hojas, manteniéndose suspendidas dentro del
canasto. Para alimentarse sacan parte del cuerpo y al desplazarse arrastran el

93
canasto apoyándose sobre sus fuertes patas torácicas, levantando el abdomen
para caminar.

El control mecánico de las canastas es el medio más económico y efectivo de


manejo del insecto. En infestaciones fuertes s puede utilizar aplicaciones con
productos químicos.

Fuente: Rosero Álvaro, 1987


Figura 28. Gusano canasta

Gusano peludo de las hojas, Ceramidia sp

El gusano peludo de las hojas se puede presentar durante todo el año. Sin
embargo, sus poblaciones se incrementan en la época seca, llegando a ser
muy altas en años con un intenso verano.

Las larvas son de color crema en sus primeros estadios y más intensos en los
últimos; su cabeza es negra; alcanzan una longitud de 3.5 cm en su máximo
desarrollo; tienen el cuerpo completamente cubierto con pelos sedosos del
mismo color de la larva y no son urticantes.

Las larvas responsables del daño se localizan en el envés de las hojas. Recién
nacidas hacen unas raspaduras pequeñas y a medida que crecen comienzan a
hacer perforaciones ovaladas, siempre orientadas hacia el borde de la hoja,
paralelas a las nervaduras secundarias. Cuando el daño es viejo, se aprecia un
secamiento en los bordes de las perforaciones, sobre la cara superior de las
hojas.

La pupa es de color marrón y está cubierta por las vellosidades que tenía la
larva en su último instar, las cuales le dan una tonalidad crema al conjunto. Se
localizan en el envés de las hojas, cerca de la nervadura central y tienen una
duración promedia de diez días.

El gusano peludo es controlado por una gran cantidad de enemigos naturales


como Elachertus sp., Elachertus ceramidiae, parasitoides que convergen de

94
pupas como Brachymeria sp. y Spilochalcis sp. Además se presentan varios
predatores como lagartijas, arañas y sapos que ayudan en el control.

De igual forma los huevos de Ceramidia son parasitados eficientemente por


Trichogramma.

Fuente: Rosero Álvaro, 1987


Figura 29. Gusano peludo de las hojas

Mapaitero, abeja angelita (Trigona sp. Hymenoptera: Apidae)

Esta es una plaga que ha venido tomando importancia por su daño en las
zonas productoras de plátano del país.

El insecto realiza el daño sobre los frutos principalmente. Al alimentarse hace


roeduras de poca profundidad y de contornos irregulares sobre las aristas de
las frutas. El fruto pierde calidad y presentación.

En ataques fuertes de trigona se puede llegar a perder gran parte de la


producción, ya que ésta queda con características de comercialización muy
deficientes.

El control de la plaga se realiza con actividades de manejo como ejecución de


programas eliminación de malezas adecuado, realización de drenajes para
evacuar el agua del cultivo, y embolse prematuro de las frutas con bolsas
tratadas con un insecticida.

Se ha establecido como controlador biológico de esta plaga a las especies


Apiomerus sp. y Polystes.

95
3.5. Lección 14. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo de
las aromáticas.

El cultivo de las plantas aromáticas ha sido en nuestro país una línea de


profundización poco difundida debido a diferentes factores entre los cuales
sobresalen por su importancia los económicos. Sin embargo se convierte en
una perspectiva de ingresos importantes debido a que su proceso de
producción e industrialización se encuentra en plena etapa de expansión.

Por definición el cultivo de plantas aromáticas es orgánico, por esta razón


debe mantenerse actividades de cultivo que garantice la obtención de
productos naturales eficaces y seguros mediante prácticas de producción que
estén en concordancia con el medio ambiente.

3.5.1. Plantas Aromáticas recomendadas para las zonas de clima medio

Son muchas las especies aromáticas que se desarrollan bajo las condiciones
de clima medio, manifestando diferentes características morfológicas y
taxonómicas. A continuación se enumeran aquellas que representan
importancia significativa desde el punto de vista económico como proceso
productivo:

1. Anisillo (Tagetes pusilla)


2. Anís (Pimpinella anisum)
3. Albahaca (Ocimun basilicum)
4. Azarosa (Tagetes patula)
5. Borraja (Borrago officinalis)
6. Cedrón (Lipia citriodora)
7. Caléndula (Calendula officinalis)
8. Cilantro (Coriandrum sativum)
9. Chulco (Oxallis sp)
10. Chamico (Datura satramonium)
11. Hierbabuena (Mentha aquatica)
12. Hierba Luisa (Cymbopogon citratos)
13. Iso (Dalea mutisii)
14. Linaza (Linum usitassimum)
15. Llantén (Plantago major)
16. Marigold (tapetes sp)
17. Mejorana (Mejorana hortensis)
18. Menta (Mentha piperita)
19. Manzanilla (matricaria chamonilla)
20. Orégano (Oreganum vulgare)
21. Paico (Chenopodium ambrosoides)
22. Poleo (Bistropogon mollis)
23. Toronjil (Melissa officinalis)
24. Verbena (Verbena litoralis)

96
25. Valeriana (Valeriana polemonioides)

Tomado de Internet
Figura 30. Planta de Hierbabuena

Tomado de Internet
Figura 31. Planta de Orégano

Tomado de Internet
Figura 32. Planta de Menta

97
3.5.2. Condiciones ecológicas para el cultivo

Las plantas aromáticas tienen rangos diversos de adaptación tanto a las


condiciones climáticas, cómo de suelos.

Hay especies que solo se desarrollan en climas fríos (10-18 grados), en climas
medios (20- 25 grados) y otras que prefieren climas cálidos (25 - 35 grados).

Algunas especies se desarrollan en sectores de elevada humedad, mientras


que otras en áreas caracterizadas por su marcada sequedad. Hay plantas en
las que su habitad es de alta luminosidad y otras que prefieren sitios
sombreados.

Los suelos para el cultivo de plantas aromáticas deben ser, de tipo franco
(equilibrio entre arena, arcilla, limo), livianos y profundos, bien drenados, con
una alta provisión de materia orgánica (superior al 4%); a fin de mantener
condiciones como humedad, temperatura, nutrientes y mejorar las
características textuales y estructurales del suelo. El pH manifestado debe ser
ni muy ácidos ni muy alcalinos (pH entre 5.8 y 6.6) que permita el desarrollo de
las plantas.

La profundidad del suelo debe ser de por lo menos de 50 centímetros, lugar en


donde se desarrollan la mayor cantidad de raíces activas de las plantas, a fin
de facilitar un buen desarrollo del sistema radicular de las misma.

Para la implementación de explotaciones con este tipo de cultivos, se


recomienda escoger terrenos que sean relativamente planos, que no tengan
pendientes mayores al 10%, para facilitar las labores culturales, de cosecha y
post-cosecha que estos demandan.

De igual manera el campo donde se va a realizar la siembra de plantas


aromáticas no debe estar circundado por árboles de porte alto, con el propósito
de facilitar su aireación y luminosidad.

3.5.3. Actividades de manejo

Preparación del terreno

Para la preparación del terreno se procede igual que para otros cultivos. El
terreno se prepara 15-20 días antes de la siembra y generalmente antes del
inicio de las lluvias. Las labores consisten en picado y volteo con azadón,
barbechado o desmenuzado de la tierra, rastreo y nivelado, surcado,
camelloneado o preparación de tablones. Puede hacerse en forma manual, por
medios mecánicos o tracción animal.

El camellón consiste en preparar lomos o camas de 20.cm de alto y el largo


que se convenga según la planta por cultivar, dejando calles o pasos de unos

98
40 cm entre camellones. Si el cultivo es por trasplante las plantas se colocarán
cada 15-30 cm entre sí.

El camellón de doble hilera es el sistema más usado en terrenos quebrados. Se


preparan de 80 cm de ancho, 20 cm de alto y el largo que se desee. Las hileras
de plantas tienen una separación de 40-30 cm entre plantas.

Los surcos son de 15-20 cm de alto y 30-40 cm entre ellos por el largo que se
desee. Se siembra directamente en cada surco a distancias de 25-30 cm entre
plantas.

Siembra

Dependiendo de la especie es necesario realizar un semillero previamente para


luego realizar el transplante, o sembrar directamente en el sitio definitivo.

Las plantas aromáticas se pueden propagar de manera sexual y asexual


dependiendo de la especie.

La siembra de las plantas aromáticos de propagación sexual se realiza de


acuerdo al tamaño de sus semillas pudiendo ser directo o indirecto (elaboración
de semilleros); mientras que los de propagación asexual que responden a la
utilización de partes vegetativas de su progenitor deberán someterse a
procesos adecuados de brotación, enraizamiento, prendimiento, según sea el
caso.

Sistemas de propagación

Reproducción Sexual

Es aquella por la cual, las plantas se reproducen por semilla propiamente dicha
o semilla botánica verdadera presentándose recombinación genética.

Entre las plantas que se multiplican en forma sexual encontramos: borraja,


linaza, ruda, hierba buena, manzanilla, caléndula, marigold, paico, llantén,
orégano, anís y cilantro.

Reproducción asexual

Es aquella por la cual, las plantas son capaces de reproducirse a partir de


alguna de sus partes vegetativas, tales como: estacas, rizomas, esquejes,
estolones, yemas, bulbos, acodos y meristemas, etc. Este tipo de reproducción
origina un nuevo individuo con similares características al de su progenitor.

Disposición de las plantas

99
La disposición del campo de cultivo, responderá al sistema de riego a utilizarse.
Si se opta por el sistema de riego por goteo el campo deberá disponerse en
camas o platabandas de 1.0 a 1.2 metros de ancho por un máximo de 32.6
metros de largo para facilitar su manejo. Entre camas deberá haber una
distancia de 0.50 a 0.60 m. El campo dispuesto de esta manera deberá
dividirse en bloques de 32.6 x 32.6 m. separados en ambos sentidos por 1.1 m.

Si el sistema de riego es por aspersión, la disposición del campo en camas o


surcos dobles o simples funciona bien.

Si el sistema de riego es por gravedad, el campo deberá disponerse en surcos


que seguirán las curvas de nivel del terreno. Los surcos pueden ser simples o
dobles y de acuerdo a la pendiente del campo, a fin de protegerla de la erosión
por arrastre de materiales.

En la tabla 3 se registran los métodos de propagación y las distancias de


siembra de las especies aromáticas más importantes:

TABLA 3. Métodos de propagación y distancias de siembra de especies


aromáticas

DISTANCIAS (m)
ESPECIE PROPAGACIÓN PLANTAS HILERRAS
Anís Semilla 0.20 0.40
Anisillo Semilla 0.20 0.40
Albahaca Semilla 0.30 0.50
Borraja Semilla 0.50 1.00
Caléndula Semilla 0.25 0.50
Chulco Semilla 0.50 1.00
Chamico Semilla 0.60 1.20
Hierba buena Semilla, esqueje 0.30 0.40
Hierba Luisa Rizoma 1.00 1.00
Iso Estaca 1.20 2.00
Linaza Semilla 0.20 0.50
Llantén Semilla 0.30 0.30
Marigold Semilla 0.25 0.50
Mejorana Semilla, esqueje 0.40 0.80
Menta Semilla, esqueje 0.20 0.25
Manzanilla Semilla 0.10 0.50
Orégano Semilla, esqueje 0.30 0.60
Paico Semilla 0.30 0.50
Toronjil Semilla, esqueje 0.20 0.40
Verbena Semilla 0.30 0.60

100
Transplante

Una vez que las plántulas procedentes del semillero o del vivero están listas, el
trasplante a campo definitivo se puede realizar en cualquier fecha siempre y
cuando se cuente con riego, de lo contrario se debe hacer cuando comienzan
las primeras lluvias del periodo de precipitaciones.

Si la propagación es por semilla el transplante se realiza entre las 3 y las 5


semanas de germinadas o cuando la plántula tiene de 4 a 5 hojas.

El trasplante debe ser uniforme, se necesita que las hileras se tracen


correctamente y a los espacios e intervalos recomendados. La profundidad del
trasplante debe ser un poco mayor que la que tenía en el semillero. Es
recomendable cubrir con el suelo hasta las primeras hojas, apretándolo
firmemente alrededor del tallo.

Cuando las plántulas se han desarrollado en bolsas de polietileno, se


transportan al campo en Ias mismas bolsas, pero se les debe despojar de estas
en el momento de colocarlas en el sitio de siembra. El trasplante se hace a
raíz desnuda, las plántulas deben protegerse de la radiación solar con una
cobertura vegetal o con un paño húmedo, para evitar su deshidratación.

Al concluir la tarea de trasplante, es necesario regar cada planta y


posteriormente, mantener un buen nivel de humedad para facilitar la fijación de
las raíces.

Riego

La mayor parte de las plantas aromáticas son muy exigentes en agua, por este
motivo es necesario que haya en el campo una buena distribución de humedad
a fin de asegurar una buena calidad de la producción. Se recomienda una
buena elaboración de drenajes para evitar excesos de agua que pueden ser la
causa de enfermedades fungosas y desarreglos fisiológicos que irían en
detrimento de lo productividad y la calidad de los cultivos.

Se recomienda aplicar riego en época seca, el cual debe ser frecuente; este se
inicia al momento de la siembra o del trasplante y se prolonga por períodos
más o menos regulares según el progreso de las lluvias, la naturaleza de los
terrenos, tipo de suelo y las diversas necesidades de los cultivos hasta la
maduración de Ia cosecha, si fuera necesario.

El riego debe efectuarse de preferencia cuando el tiempo es fresco, en la tarde


o a primeras horas de la mañana, evitando las horas de sol fuerte para no
dañar los cultivos especialmente en las hojas por la evaporación rápida del
agua.

101
Como ya se mencionó los sistemas de riego más utilizados en los cultivos de
aromáticas son por goteo, por aspersión y por gravedad. La utilización de una
u otra forma depende del nivel de tecnificación del proceso productivo.

Fertilización

Las plantas aromáticas requieren en sus primeros meses de vida una buena
provisión de nitrógeno y de fósforo con el fin de que halla una adecuada
formación de hojas, ramas y raíces que son los órganos que en la mayoría de
ellas son las que se aprovechan.

Para las plantas cuyas partes aprovechables están representadas por flores,
frutos (bayas, granos, etc.) se deberá aplicar potasio. La aplicación de estos
fertilizantes es aconsejable realizarla a través de productos de origen orgánicos
como compost o vermicompost.

Según sea la clase del cultivo la aplicación de los abonos sólidos se puede
hacer en forma localizada en banda y en corona, mientras que los abonos
líquidos se pueden aplicar con el agua de riego especialmente a través del
sistema de goteo.

Aporque

Son prácticas necesarias para ayudar a fijar las plántulas sobre el campo,
mantenerlas erectas, facilitar un prendimiento y posibilitar la aireación de la
base radicular.

Esta actividad es común en especies de más de 30 cms de altura con


presencia de tallos largos y herbáceos o lignificados. Es común aprovechar el
aporque con el control de malezas ya que mientras éstas se erradican sirven
como soporte de las plantas.

Cosecha

Según sea el caso de las plantas medicinales se puede aprovechar


principalmente las hojas, flores, raíces, cortezas, semillas o la planta entera.

En el cedrón se aprovecha por ejemplo las hojas; en especies como la


caléndula y la manzanilla se toman las inflorescencias ya sea abiertas o en
botón; por su parte en la valeriana se aprovecha la raíz; las semillas son
importantes por su uso en la linaza; y la planta completa se utiliza en especies
como la hierba buena y la menta.

Para la cosecha de una planta medicinal deben tomarse en cuenta las


siguientes indicaciones:

102
● Seleccionar y cosechar material sano, sólo la parte que interesa, en la época,
lugar y hora adecuados.

● Llevar los utensilios necesarios para cosecha, los que deberán lavarse Y
desinfectarse antes de usar (herramientas, recipiente y canasta plásticos) para
cada parte deberá usarse un recipiente diferente.

● Tener preparado el lugar de secado y almacenaje, es decir, después de la


cosecha proceder inmediatamente con los pasos que se aconsejan para el
manejo más adecuado y evitar el deterioro del producto.

Para la obtención de la raíz se pica alrededor de la planta hasta la profundidad


en donde ésta se encuentra y sus ramificaciones. Si es una planta anual y
herbácea se puede extraer toda la planta, pero si se trata de una planta con
raíz pivotante y perenne se debe extraer sus ramificaciones sin causar daños.

En muchos casos deben cosecharse las hojas adultas recién al inicio de la


floración o durante la misma, aunque en algunos casos la cosecha debe
hacerse hasta la fructificación. Se corta la base de las hojas utilizando una
tijera manual de podar o bien puede hacerse manualmente.

Cuando se cosecha la corteza los cortes deben hacerse cuidando no dañar el


árbol; se traza con un punzón y con la ayuda de un machete o cuchillo limpios
se extrae la parte trazada.

Las flores deben colectarse como botones o justo antes de la fructificación para
no perder el fruto. Las flores se recolectan de preferencia en forma manual y de
acuerdo con la época de floración por la mañana cuando ya no hay rocío.

Los frutos y semillas se cosechan en la época de fructificación por la mañana,


cuando el ambiente no esté muy húmedo. Para árboles frutales puede usarse
una vara con horqueta o subirse al árbol para corte manual, llevando una red o
morral para depositarlos. Con hierbas o arbustos se cortan las flores caducas
al final de la floración y se abren cuidadosamente para extraer la semilla. En
otras plantas las semillas vienen en vainas, drupas o bayas, que se recolectan
al madurar o a punto de abrirse por sí mismas.

3.5.4. Post-cosecha

Después de efectuada la cosecha de las partes pertinentes de las plantas,


deben someterse a un proceso de post-cosecha, que permite presentar los
productos de manera adecuada en el mercado.

En los mercados locales buena parte de esta producción se suele expender en


fresco, otra parte es requerida en forma deshidratada por las fábricas de
especerías, condimentos y aguas aromáticas; mientras que los mercados
internacionales por lo general exigen que estos vegetales les sean enviados de
manera deshidratada.

103
Las labores de post-cosecha normalmente están relacionadas con actividades
como la limpieza, la selección y el secado.

La limpieza se realiza tan pronto sale el producto cosechado del campo. Se


debe someter las partes a un proceso de lavado con agua fresca y limpia.

Luego se eliminarán las partes vegetativas averiadas durante la cosecha o que


presenten algún problema fitosanitario en alguno de sus órganos.

El secado es uno de los procesos más importantes en la producción de plantas


aromáticas. Todas las partes de las plantas deben ser secadas correctamente
hasta el porcentaje de humedad requerido tanto para el almacenamiento como
para el transporte.

Para secar a las plantas en pequeña escala, basta con extender sus hojas o
flores sobre papel o colgarlas de un hilo, a modo de guirnaldas. Es preferible
efectuar la desecación a la sombra salvo para las raíces que necesitan que se
realice este proceso al sol en un granero, en una era o en cualquier otro local
bien aireado, expuesto a los rayos solares.

Cuando los órganos de una planta son carnosos, es mejor hacer la desecación
en estufa calentado progresivamente de 20 o 40°C. Conviene evitar que esta
temperatura sea superada con el fin de no cocer o alterar los órganos de la
planta.

Es importante resaltar que mediante la práctica de una deshidratación


apropiada, las plantas mantendrán su color y su fragancia por mucho más
tiempo.

104
3.6. Lección 15. Malezas, plagas y enfermedades del cultivo de las
aromáticas y su control.

En términos generales el cultivo de plantas aromáticas permite la aplicación de


un Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades, mediante la utilización de
diferentes formas de control como son: el cultural, el legal, el genético, el
mecánico, el biológico y el químico. La integración de todas estas tipos de
control permite un proceso productivo eficiente desde el punto de vista
ecológico y económico.

3.6.1. Arvenses

Las diferentes platas aromáticas de clima medio son muy malas competidoras
en los primeros días de su desarrollo fisiológico frente a las demás especies
entre las que figuran un gran número de arvenses.

En los primeros estados del cultivo las labores de deshierba son


imprescindibles a fin de evitar competencias por agua, nutrientes y
luminosidad, así como para eliminar posibles hospederos de insectos plaga y
enfermedades. Esta labor debe hacerse con el auxilio de herramientas
manuales de labranza. Una vez que la plantación toma cuerpo, este tipo de
labor ya no será necesario pues las arvenses se verán reprimidas naturalmente
por la densidad de los cultivos.

Dependiendo de la especie se recomiendan de tres a cuatro controles por año.


El primer control de malezas se debe realizar a los veinte días de efectuada la
siembra o el transplante de las plantas, época que se considera crítica para el
desarrollo de las mismas.

3.6.2. Enfermedades

Las enfermedades más comunes en las plantas aromáticas son causadas por
hongos, las que se manifiestan por manchas dispuestas en diversas formas
dependiendo del tipo de patógeno que causa la enfermedad. También se
pueden presentar daños originados por presencia de bacterias, virus o efectos
de origen abiótico.

La forma más efectiva para prevenir las infecciones es a través de una


disminución de los períodos de humedad ya que las esporas requieren de agua
para germinar e infectar a la planta. Se recomienda que el riego se haga muy
temprano en la mañana y cuidando de hacerlo, en la medida de lo posible
únicamente en el suelo. Por otra parte, las altas densidades dentro de un
cultivo generan microclimas que favorece el desarrollo de agentes patogénicos.

Las elevadas precipitaciones pluviales favorecen la presencia de mancha


temprana (Alternaría sp) en el cultivo del llantén, cuando este se encuentra
sembrado en camas, no así cuando se halla asociado con otras especies

105
vegetales. Los síntomas se caracterizan por la presencia en las hojas de
pequeñas manchas irregulares necróticas, rodeadas de zonas amarillentas,
generalmente se observan anillos concéntricos. Puede cubrir toda la hoja
amarillándola y causando defoliación en la planta.

Contrariamente el toronjil presenta resistencia al ataque de Alternaria sp pero sí


una marcada susceptibilidad a los daños causados por las heladas, lo que
provoca que sus hojas se necrosen y mueran. El desarrollo de nuevos brotes
en este caso es muy lento. En condiciones de bajas temperaturas esta planta
no se adapta, crece enanificada, reduciendo así su potencial biológico. Sin
embargo estas circunstancias parece que favorecen al concentrado de aroma
en sus hojas.

Tomado de Internet
Figura 33. Hoja con ataque de Alternaria sp

Especies como la hierba luisa presentan susceptibilidad al ataque de


enfermedades, especialmente pudriciones radiculares debidos a la presencia
de Fusarium sp. Este hongo inicia su desarrollo en las raíces de las plantas
dirigiéndose sistemicamente a todas las partes de la planta por vía de los
haces basculares. Para controlar a este hongo se utilizan diluciones conidiales
de Trichoderma viride que se deben aplicar al fondo del surco previo a la
siembra de los rizomas de esta planta.

Lo hierbabuena también manifiesta susceptibilidad al ataque de hongos del


grupo Phytophtora sp, produciéndose en las hojas necrosamiento irregulares
color negro, de consistencia acuosa, y retardando el desarrollo de la planta.
Este cultivo es resistente a las heladas.

El anís es una planta muy susceptible a las bajas temperaturas. En estas


circunstancias sus hojas se tornan violáceas y sus flores abortan. Este cultivo
en condiciones normales no expresa presencia de enfermedades fungosas.

En la menta se manifiesta presencia especialmente en su área foliar de royas,


pero a pesar de su expresión no llegan a causar una necrosis significativa en
las hojas, lo que demuestra la resistencia que esta planta tiene al ataque de la
enfermedad.

106
En otras especies como la albahaca, la linaza y la manzanilla se presentan
algunos daños pequeños por presencia de antracnosis (colletotrichum sp.).
Los síntomas se manifiestan por lesiones o zonas necróticas en las hojas de
color café oscuro, que al aumentar el tamaño pueden llegar a acarrear la
muerte de la estructura foliar.

En términos generales de manejo para evitar la presencia de enfermedades en


las plantas aromáticas debe eliminarse el exceso de humedad en el campo
mediante drenajes apropiados; realizar las siembras junto con otras especies
en distribuciones asociativas; llevar a cabo un programa de fertilización
adecuado; y realizar aplicaciones de extractos orgánicos con propiedades
fungicidas. Cuando el daño realizado por el patógeno es de importancia se
puede emplear productos químicos que permitan proteger el cultivo y erradicar
la enfermedad.

3.6.3. Plagas

En general la presencia de individuos plaga en los cultivos de aromáticas, con


niveles de daño económico es relativamente pequeña. Esto pone en evidencia
que la práctica de la biodiversidad al interior de un campo cultivado con esta
clase de plantas, es una estrategia valida para el manejo ecológico de
insectos.

Por otra parte muchas de las plantas aromáticas presentan propiedades


repelentes y alelopáticas. Otras por su parte actúan como hospederos de
especies benéficas, como el caso de la manzanilla que da albergue a arácnidos
predatores de muchas plagas.

Las plagas de insectos más comunes en las aromáticas se agrupan en las del
suelo y del follaje. Las del suelo se caracterizan porque en algunas de las fases
de su desarrollo viven enterradas, se alimentan del sistema radical de las
plantas por lo que causan graves daños a los cultivos.

Entre las plagas más comunes en las plantas aromáticas encontramos.

Gusanos cogolleros (Spodopthera sp.)

Es la plaga más común de las aromáticas especialmente en los primeros


estados de desarrollo de las plantas

La larva desarrollada mide unos 45 mm de largo; el cuerpo es de color marrón


oscuro o verde pálido con una línea media longitudinal de color marrón oscuro
entre dos líneas laterales en igual sentido más claras.

La cabeza es negra con suturas bien marcadas en forma de "Y" invertida. El


adulto es una polilla de color pardo moteado, más claro en los machos que en

107
las hembras. Las alas posteriores son de color blanco perlado y gris hacia los
bordes. Tanto las anteriores como las posteriores terminan en flecos.

El daño lo causa la larva que puede actuar como tierrero, comedor de follaje o
atacando botones florales; permanecen ocultos bajo el suelo durante el día,
cerca de las plantas y durante la noche las atacan.

Como métodos de control de esta plaga se pueden mencionar:

● Adecuada preparación del suelo.


● Uso de trampas de colores atrayentes.
● Uso de cebos envenenados
● Uso de parasitoides de huevos como Telenemus remus y de larvas como
Microplitis sp
● Uso de depredadores como Calosoma granulatum.
● Uso de entomopatógenos como Bacilllus thurigiensis

Tomado de Internet
Figura 34. Larva de Spodopthera sp.

Mosca blanca, (Trialeuroides vaporariorum)

Los adultos de la mosca blanca son de color blanco, pequeños y se colocan en


las zonas sombreadas de la planta. Las ninfas chupan la savia y pueden
transmitir algunos virus. Además estos insectos secretan un a sustancia
azucarada que puede general presencia de hongos foliares.

Como métodos de control se pueden mencionar: realizar deshojes periódicos,


destrucción de socas y residuos de cosecha, manejo adecuado de plantas
hospedantes alternas, uso de parasitoides, depredadores y entomopatógenos.

Cucarroncito de las hojas

Existen varias especies que atacan la estructura foliar de las plantas, entre
ellos están: el Epitrix sp caracterizados porque los adultos son muy pequeños
de color negruzco que saltan permanentemente de hoja en hoja, el daño lo
causan al dejar el follaje con muchas perforaciones pequeñas; y la Diabrotica

108
sp. en la que los adultos son de color verde con manchas pequeñas. Al igual
que el epitrix causa daños en las hojas al comer estas estructuras.

Los adultos de estas dos especies se alimentan del follaje, produciendo


agujeros redondeados con su aparato bucal masticador dando la impresión de
que las hojas han sido perforadas por tiros de munición fina. Generalmente los
daños se aprecian primero en las hojas inferiores, pero posteriormente se
distribuyen en toda la planta.

Como recomendaciones de control se puede indicar: mantener los cultivos


limpios de malezas; destruir los residuos de cosechas; uso de parasitoides de
la familia Braconidae, uso de depredadores de la familia Oxypidae y uso de
entomopatógenos de la familia entomopthoraceae.

Minador del follaje, (Liriomyza sp.)

El adulto de este insecto es una pequeña mosquita de color negro con los
apéndices amarillos; el cuerpo está cubierto por éstas. La hembra coloca sus
huevos dentro del tejido de las hojas. Las pequeñas larvas blancas que
emergen de estos huevos, se alimentan del parénquima de la hoja dejando la
epidermis de la hoja intacta. A medida que se alimentan traza caminos en
formas variadas, semejando dibujos. En ataques fuertes producen el
secamiento de las hojas.

Las medidas de control del insecto son las siguientes:

Realizar una adecuada preparación del terreno; destrucción de los residuos de


cosechas que pueden servir como medio de reproducción del insecto; limpieza
del cultivo con relación a presencia de malezas; uso de parasitoides como
Opios sp.; y empleo de depredadores como Cytopeltis modestus.

Tomado de Internet
Figura 35. Daño y adulto de Liriomyza sp

109
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS

Investigue cinco diferentes distancias de siembra utilizadas en el cultivo del


plátano. Indique la densidad poblacional para cada una de ellas.

Identifique 3 plantas aromáticas que se desarrollen en su región. Haga un


cuadro comparativo en donde se indique sus características morfológicas y
usos potenciales.

AUTOEVALUACIÓN

● Indique las características morfológicas que presenta la planta de arracacha.

● Indique los requerimientos ecológicos que requiere el cultivo de arracacha.

● ¿Cuáles son las características generales de la alternaria en arracacha?

● ¿Cuáles son los síntomas que se expresan por presencia de nemátodos en


plantas de arracacha?

● ¿Cuáles son las variedades comerciales más importantes de plátano?

● ¿Cuáles son los requerimientos ecológicos del cultivo del plátano?

● Mencione cinco labores culturales realizadas al cultivo del plátano.

● ¿Cuáles son las diferencias presentes entre la sigatoka amarilla y la sigatoka


negra?

● ¿Cuáles son las formas de control del picudo negro?

● ¿Cuáles son los sistemas de propagación de las plantas aromáticas?

● ¿Cuáles son las actividades de post cosecha más comunes en el cultivo de


las aromáticas?

● Indique las características de una plaga presente en los cultivos de plantas


aromáticas.

110
UNIDAD 2. CULTIVOS DE CICLO LARGO DE IMPORTANCIA EN EL CLIMA
MEDIO.

CAPÍTULO 4. CULTIVOS VEGETATIVOS.

Son numerosas las especies vegetales de ciclo largo que se expresan bajo las
condiciones de clima medio de nuestro país. La mayoría de estas especies
presentan un tallo lignificado que les periten subsistir por largos períodos de
tiempo.

Sin embargo existen varias especies agrícolas que son de gran importancia
desde el punto de vista agronómico y que presentan características herbáceas
dentro de su estructura morfológica.

La importancia comercial y/o alimenticia de estas especies está relacionada


directamente con la utilización de sus estructuras herbáceas. Es así que
cultivos como el fique, la sábila y el espárrago presentan una utilización
importante de estructuras herbáceas como son tallos y hojas.

Estas especies son plantas que bajo condiciones de adecuado manejo pueden
permanecer produciendo por un tiempo mayor a un año y con rendimientos
óptimos de producción.

En el presente capítulo se conocerán algunas características generales de


estas tres especies desde el punto de vista de sistema agrícola productivo,
encaminado a realizar un manejo adecuado del cultivo

Objetivos.

Conocer las características generales del cultivo del fique, de la sábila y del
espárrago.

Identificar las actividades de manejo agronómico del cultivo del fique, de la


sábila y del espárrago.

Conocer los principales problemas fitosanitarios presentes en el cultivo del


fique, de la sábila y del espárrago bajo condiciones de clima medio.

Entender las actividades de manejo necesarias para desarrollar un sistema


productivo de fique, sábila y espárrago.

111
4.1. Lección 16. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo de
la sábila.

La planta de sábila ha venido usándose hace muchos años a nivel mundial


como un remedio casero contra varias enfermedades, además de ser
considerada popularmente como una planta de buena suerte, viéndosele
colgada detrás de las puertas en muchos hogares y negocios. En la actualidad,
viene siendo usada en la industria farmacéutica y cosmetológica, no obstante,
se sabe muy poco acerca de su cultivo, a pesar de que es cultivada
comercialmente en Norteamérica y algunos países de Centroamérica.

Se puede considerar como una planta valiosa y promisoria en las zonas cálidas
y secas de Colombia ya que es una especie muy rústica y de buena
adaptabilidad en estas condiciones.

La sábila es una especie originaria de regiones tropicales y subtropicales,


especialmente del Suroeste de Europa, Norte de África y Madagascar. Se
conocen cerca de 200 especies, de las cuales muchas han sido introducidas en
las Antillas y Europa.

4.1.1. Taxonomía y botánica

La Clasificación taxonómica de esta especie es:

Tipo: Fanerógama
Subtipo: Angiosperma
Clase: Monocotiledóneas
Orden: Lilifloras
Familia: Liliáceas
Genero: Aloe
Especie: Vera
Nombre Científico: Aloe vera L.
Nombre vulgar: Sábila.

Desde el punto de vista morfológico la planta de Aloe vera se caracteriza por:

Es una especie que puede vivir colgada por varios años sin la utilización de
sustrato y agua.

112
Tomado de Internet
Figura 36. Planta de sábila

El tallo es corto y grueso y alrededor de el van creciendo hojas en forma de


rosetón hasta alcanzar alturas aproximada de 1 metro en unas especies y en
otras hasta tres metros.

Son llamadas pencas, muy suculentas y gruesas, carnudas anchas, con


dientes doblados hacia arriba. Las hojas típicas de las plantas son suculentas,
en forma de espada, duras, gruesas, muy grandes y carnosas, dispuestas en
grandes rosetones y con una espina recia en sus extremos, también posee
otras espinas marginales más pequeñas. Las hojas pueden ser de color
veteado de verde, blanco y verde ceniza plateado.

Las hojas pueden cerrar completamente sus estomas para evitar la pérdida de
agua por evaporación durante los periodos secos y son capaces de reponer
rápidamente la epidermis cuando se produce una fractura o un corte en su
superficie.

En las especies sin tallo, las hojas se encuentran dispuestas en pisos


sucesivos, en forma alterna dos a dos, tres a tres o en rosetas radiales de
cuatro o más hojas alternando los ángulos de modo que todas ellas puedan
acceder a la luz solar.

Tomado de Internet
Figura 37. Hojas de la sábila

113
En el caso de las especies con tronco o tallo, se ponen en rosetas alternadas
de 10 a 50 o 60 hojas, en los extremos libres de los tallos, son largas en
escapo floral de forma de tubo de color rojizo-anaranjado, con una
inflorescencia que esta sobre un eje cilíndrico, escamoso, con flores amarillas
anaranjadas y blancas, en corimbos espigados. Sus corolas se componen de
seis pétalos, que forman la cubierta floral y se sueldan todas entre sí en un
tubo. El cáliz es tubuloso, casi cilíndrico de seis divisiones verdosas en el
limbo, mientras que el resto es rojizo anaranjado.

Las flores están dispuestas en racimos que pueden ser verticales (espigas) o
colgantes (umbelas o sombrillas). Los estambres salen fuera del cáliz, estos
son seis, con largos filamentos que arrancan del fondo de la flor, debajo del
pistilo.

El fruto de la especie Aloe vera es seco con una cápsula oblonga de paredes
dehiscentes (las anteras de la flor y el pericarpio del fruto se abren para dar
salida al polen y a las semillas). Las cápsulas son alargadas y las semillas son
híbridas.

4.1.2. Requerimientos agroecológicos

Con relación a los requerimientos de la planta se puede decir que la sábila


tiene una amplitud de adaptación a diferentes climas y suelos, pudiendo
encontrarse creciendo en suelos con pendientes del 30%, con pobreza en la
fertilización, de igual forma se pueden encontrar en suelos planos o
ligeramente inclinados.

Las plantas de Aloe vera se cultivan en alturas que van desde los 400 a 2.500
m.s.n.m, aunque se han obtenido buenos rendimientos en plantaciones a
alturas inferiores a 400 m.s.n.m.

La planta prefiere climas secos, con temperaturas que van desde los 18 a los
40°C. Estos rangos son muy amplios debido a la característica que tiene la
planta de soportar condiciones altas de temperatura.

La planta requiere para su desarrollo igualmente rangos amplios de


precipitación pluvial. Se establece bien en sitios que presentan precipitaciones
de 400 a 2.500 mm/año. La humedad relativa que favorece el crecimiento está
entre 65-85%.

La Aloe vera no crece en bosques lluviosos ni en desiertos áridos. Aunque


sobrevive bien a una sequía prolongada, pero durante esta etapa no crece.

La especie crece en cualquier terreno, aunque prefiere suelos pobres. El ideal


es el calcáreo, seco, arenoso y bien drenado como son los desérticos. No
crece en áreas pantanosas.

114
Se ha comprobado que la sábila tolera la salinidad presente en los suelos,
encontrándose que la especie admite una concentración 6,25 molar de cloruro
de sodio.

Con relación al pH, esta especie se desarrolla en un amplio rango de valores,


que van desde lo 4.8 hasta los 7.5.

4.1.3. Labores de cultivo

Preparación del suelo

Esta especie no requiere condiciones especiales de preparación del suelo, por


lo que se puede utilizar cualquier sistema donde se logre crear el lugar
adecuado que asegure el enraizamiento y contribuya a su crecimiento y
desarrollo. Esto se logra conservando la estructura del suelo, el mantenimiento
de sus condiciones físicas, químicas y biológicas y evitando todo tipo de
erosión.

Esta operación comenzará con no menos de 45 días de antelación a la fecha


programada para la plantación y tomando en consideración que las diferentes
labores que comprende se ejecuten cuando el terreno no esté demasiado
húmedo o seco.

Propagación

Además de su propagación por semilla la sábila se propaga también por:

Acodo (parte de la planta se inclina sobre el suelo echando raíces); por gajos
(trozos que se enraízan al caer); por estolones (que son vástagos enteros que
brotan en la base del tallo y se extienden hacia fuera, echando raíces dando
lugar a plántulas nuevas).

También se utilizan rizomas para multiplicar las plantas de sábila. Al efectuar


las labores culturales se corta el rizoma y se da origen a una nueva planta o
hijo. Así se puede continuar propagando la plantación.

Siembra

En primer lugar debe prepararse la mezcla compuesta de tierra, materia


orgánica y arena para el desarrollo del semillero. Luego cuando las plantas
estén enraizadas después de los 2 meses, se llevan al lugar definitivo, lo cual
es necesario hacer hoyos para la siembra.

115
Tomado de Internet
Figura 38. Cultivo de Aloe vera

Los distanciamientos pueden variar de acuerdo con los condiciones del terreno,
pudiendo llegar a tenerse densidades de población que van desde las 2.500,
5.000, 10.000, 20.000 y 30.000 plantas por hectárea. El distanciamiento
recomendado es de 0,50 metros entre plantas y de 0.70 m entre surcos, para
que las pencas tengan un buen desarrollo lo que da una población de 28.571
plantas por hectárea.

Aunque la planta de sábila es poco exigente a los tipos de suelos, si requiere


ser plantada a plena exposición solar, pues necesita alta luminosidad para su
desarrollo.

Fertilización

La sábila requiere buen suministro de nitrógeno, fósforo y potasio después de


la cosecha.

La fertilización recomendada en el momento de la siembra es de unos 15


gramos por planta, lo que equivale a 429 Kg de la fórmula 16- 20-0 por
hectárea. A los 2 meses más tarde se aplicará la misma dosis de sulfato de
amonio, al igual que a la salida de lluvias. Es importante que exista humedad
en el suelo para efectuar las fertilizaciones.

De igual forma es recomendable realizar aplicaciones de materia orgánica en


diferentes etapas del desarrollo de la planta como es el caso de la siembra y
después de cada cosecha.

Riego

Aunque la planta es resistente a largos períodos de sequía en la primera etapa,


los dos meses posteriores a la plantación, demanda riegos ligeros, cada dos
días que garanticen su supervivencia. El tiempo de riego estará en
dependencia de las características físicas del suelo. Una vez establecido el

116
cultivo se espaciarán a uno semanal y en plantaciones adultas un riego
quincenal será suficiente.

Se ha establecido que 6 semanas antes de la cosecha, el cultivo debe ser bien


irrigado para incrementar el contenido de mucílagos.

Cosecha y recolección

La recolección de hojas comienza a partir de los 24 meses de plantadas, que


es cuando la planta alcanza la concentración necesaria de polisacáridos, no
obstante cuando el objetivo de la plantación es la obtención de derivados
antracénicos, entonces ésta puede comenzar a los 18 meses.

La planta es productiva durante 15 a 20 años en variedades comerciales y con


buenas condiciones de manejo.

La cosecha se puede efectuar durante todo el año, cortando siempre las hojas
más inferiores. Las hojas se cosechan en horas tempranas, las más frescas de
la mañana y se transportan hacia el lugar de procesamiento, en un tiempo que
no debe exceder de 6-8 horas.

La operación se efectúa de forma manual. Con el auxilio de cuchillas, se hace


una incisión en un extremo de la base de las hojas inferiores, que son las más
viejas y se tira en sentido contrario hasta desprenderla del tallo. En esta
operación se cortan de 6 a 8 hojas. Todas las cosechas se realizarán de igual
manera a intervalos de 6 meses. En la recolección se requiere de guantes y
camisas de mangas largas para protegerse de los daños que puedan ocasionar
los bordes espinosos de estas hojas.

La producción promedio puede llegar a 5 Kg. por planta en condiciones ideales,


requerimientos necesarios y oportunos. Con una densidad de población de
28.571 podemos tener una producción 142 toneladas por hectárea.

Procesado de la cosecha

De ser necesaria la entrega de droga en forma seca a la industria farmaceutica,


las hojas cosechadas deben secarse. Luego de recolectarse las hojas se lavan
y después se almacenan en cuarto frío.

Una vez recolectadas las hojas, se hacen pasar por un proceso de lavado y
desinfección a fin de disminuir la contaminación microbiana. Para ello, se
reúnen en grupos de 10 kg, se lavan con agua potable corriente, luego se
sumergen en un tanque de acero inoxidable de 100 litros de capacidad con
agua, por 10 minutos y posteriormente en otro tanque con solución de
hipoclorito de sodio al 0,5%, durante 10 minutos.

117
Cada tres grupos de muestras se cambia el agua del tanque y el de la solución
desinfectante. Para su escurrimiento, las muestras se sitúan sobre bastidores
de malla previamente desinfectados con formal al 1% y después se colocan en
refrigeración a temperatura menor de 15°C por 10 días para activar sus
principios activos. Se observa que con posterioridad a este proceso las hojas
no pierden su apariencia inicial, pues mantienen su color y textura, así como
cumplen con los requerimientos microbiológicos.

Las hojas se envasan en cajas plásticas de 70 cm de largo por 50 cm de ancho


y 30 cm de profundidad y se disponen en grupos, el primero con la base en un
sentido, el siguiente en sentido contrario y así sucesivamente hasta completar
la caja con un peso total de 50 kg. Una vez llenas, las cajas no deben
permanecer en el campo a expensas de los rayos directos del sol por más de 4
horas.

Si el objetivo es colectar la savia para la preparación de "aloes" o "acíbar", las


hojas recolectadas se colocan con la herida hacia abajo en recipientes
especiales, en un lugar fresco por 2 a 3 horas. Si lo que se persigue es la
obtención del mucílago, la hoja debe ser bien lavada y con cuchillo afilado
eliminarle toda la parte externa, dejándole al descubierto la parte gelatinosa. En
estas condiciones el producto es muy inestable, por lo que debe ser procesado
inmediatamente. Una vez obtenido el gel, se utilizan diversos métodos para la
estabilización del mismo. Entre estos métodos se encuentran el uso de altas
temperaturas para destruir las enzimas que causan las pérdidas de actividad.

118
4.2. Lección 17. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo de la sábila
y su control.

4.2.1. Arvenses

El control de malezas (arvenses) se debe realizar en forma manual, para evitar


daño en las plantaciones ya que no hay experiencia con el uso de herbicidas
en este cultivo, además que no se deben utilizar pues esta planta es de
consumo casi directo.

Al comienzo del crecimiento, la planta requiere deshierbas frecuentes (tres


mensuales), así como entre los surcos, que además de eliminarle las malezas
le proporcione aireación; con posterioridad deben espaciarse a uno quincenal y
finalmente con uno mensual será suficiente para él mantenimiento de los
campos.

Es importante eliminar las arvenses presentes en el cultivo porque además de


quitarle espacio y nutrientes a las plantas, se convierten en el hospedero de
gran número de plagas y enfermedades de importancia comercial.

El control químico de las malezas no se encuentra muy difundido en las zonas


productoras, normalmente se realiza esta forma de manejo por entre las calles,
y utilizando productos no selectivos como el glifosato, teniendo cuidado de no
impregnar las plantas de sábila con el líquido.

4.2.2. Enfermedades

Las enfermedades más comunes que se presenta en el cultivo de la sábila son


producidas por hongos, encontrándose favorecidas por problemas de exceso
de humedad en el suelo y en el ambiente.

Pythium sp.

Los organismos que producen esta enfermedad se encuentran en casi todos


los suelos de la mayoría de las regiones del país, pero se activan bajo
condiciones de alta humedad y temperatura.

La enfermedad se manifiesta por un daño en las raíces y en la base del tallo.


Las plantas muestran en su base un adelgazamiento que hace doblar la
plántula. La enfermedad ocurre en pequeños parches del terreno, en el estado
inicial de crecimiento, hasta cuando las plántulas alcanzan un tamaño en el
cual ya no son susceptibles al ataque del hongo.

El control de la enfermedad se realiza mediante técnicas de manejo preventivo


como desinfectar el sitio de siembra de los órganos de reproducción, realizar
drenajes que eliminen los excesos de humedad y tratar la semilla con
productos químicos protectantes.

119
Marchitez, (Fusarium sp.)

Este hongo produce pérdidas considerables en condiciones de alta humedad y


temperatura.

Los síntomas se caracterizan porque las plántulas se marchitan y luego


mueren. En plantas adultas los síntomas iniciales son amarillamiento de las
partes basales. También al inicio del ataque el daño se nota por el
marchitamiento pasajero de las planta con el calor del mediodía.

La afección puede empezar en un solo lado de la planta, pudiendo quedar la


otra parte completamente normal. Las hojas amarillentas se marchitan y
mueren. Al cortar transversalmente el tallo de una planta marchita, se observa
una decoloración de los tejidos cercanos a la corteza (el xilema), que son los
vasos conductores de agua. En las plantas que logran sobrevivir el desarrollo
no es normal. Generalmente el ataque se presenta acompañado de un
ahuecamiento del tallo en las partes superiores.

Esta enfermedad es común en muchas zonas en donde se cultiva sábila, sean


cálidas o frías y generalmente se concentra en los sitios más húmedos de la
plantación.

Como métodos de manejo de la enfermedad está la utilización de variedades


resistentes, adecuación de sistemas de drenaje dentro del cultivo y eliminar
las planas enfermas. De igual forma se puede desinfectar el suelo en donde se
van a multiplicar las plantas.

Phytophthora sp.

Este hongo se manifiesta con daños importantes en las plantas especialmente


en condiciones de altas temperaturas y altas humedades relativas.

Los síntomas iniciales son manchas irregulares negruzcas, de consistencia


acuosa, se presentan inicialmente en las hojas viejas de la planta. Las zonas
enfermas aumentan de tamaño rápidamente y más tarde, se puede observar
un crecimiento algodonoso en la cara inferior de las hojas. Los tallos sobre todo
los más nuevos, también pueden presentar áreas acuosas irregulares
necrosadas, semejantes a las ya descritas. Cuando el tiempo es lluvioso y
nublado con noches frías, la infección se extiende rápidamente que muchas
veces se afecta todo el follaje en pocos días, haciendo su control muy difícil.

El mejor medio de manejo de la enfermedad es eliminando las condiciones


favorables para su desarrollo como realizar drenajes y eliminar los residuos del
cultivo que aumentan la humedad presente en medio.

Antracnosis, (Colletotrichum sp.)

120
Zonas con bajas temperaturas, alta humedad relativa y lluvias moderadas pero
frecuentes, favorecen la infección y diseminación del hongo. El patógeno puede
afectar cualquier parte de la planta. La semilla infectada y los residuos de
cosecha son las fuentes primarias del inóculo. Los síntomas iniciales se
manifiestan como pequeñas lesiones de color café oscuro o negro. Al aumentar
el tamaño se observa una lesión deprimida.

El control más importante se basa en la obtención de semilla limpia como


también en la rotación de cultivos. Productos químicos para tratamiento de la
semilla se pueden utilizar con buen éxito.

De igual forma se pueden utilizar variedades tolerantes al patógeno y eliminar


los residuos de la cosecha junto con el control adecuado de las malezas.

4.2.3. Plagas

Aunque no se presentan ataques importantes de plagas en el cultivo de la


sábila, los más comunes son:

El gusano cogollero, (Spodoptera frugiperda)

Los huevos de este insecto pueden observarse en el campo, en el envés de las


hojas, en grupos o en masas de 100 huevos protegidos por escamas
entretejidas con una telilla algodonosa que deja la polilla.

La larva desarrollada mide unos 45 mm de largo; el cuerpo es de color marrón,


marrón oscuro o verde pálido con una línea media longitudinal de color marrón
oscuro entre dos líneas laterales en igual sentido más claras.

Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997


Figura 39. Adultos de Spodoptera

La larva presenta la cabeza de color negro con suturas bien marcadas en


forma de "Y" invertida. En este estado los insectos permanecen 20 días.

121
El adulto es una polilla de color pardo moteado, más claro en los machos que
en hembras. Las alas posteriores son de color blanco perlado y gris hacia los
bordes tanto las anteriores como las posteriores terminan en flecos.

El daño lo ocasiona la larva actuando como tierrero, comedor de follaje o


trozador. Sus daños son importantes en los primeros estados de desarrollo de
la planta.

La preparación adecuada del terreno permite realizar un control efectivo de la


plaga. Los cebos envenenados han demostrado buenos resultados de control.

Ácaros, (Tetranychus urticae)

Los huevos de esta arañita son depositados individualmente tanto en el haz


como en el envés de las hojas. Son esféricos perlados, brillantes, muy
pequeños, con un diámetro promedio de 0.15 mm. Las ninfas son de color
amarillo con manchas negras sobre el dorso. Los adultos son de color amarillo
pálido o verde claro con dos manchas negras a cada lado del cuerpo. El macho
tiene el cuerpo más delgado que el de la hembra.

El daño se manifiesta en forma de pecas amarillas en la hoja, como


consecuencia de los puntos donde la arañita succiona la savia. Las hojas
inician un proceso de amarillamiento progresivo.

El control de los ácaros está encaminado a la eliminación de las hojas y plantas


afectadas por insecto. De igual forma se debe procurar mantener el cultivo con
buen suministro de agua.

En ataques fuertes es necesario realizar aplicaciones dirigidas a las hojas con


productos químicos acaricidas.

Áfidos o pulgones, (Aphis gossypii)

Los pulgones son insectos chupadores que viven en colonias muy numerosas,
sobre los cogollos de la planta. Su importancia radica no solo en el daño que
producen al chupar la savia, sino por la transmisión de virus al chupar en una
planta enferma y luego trasladarse a una sana.

La especie morfológicamente se caracteriza por presentar un color verde,


presentan las antenas convergentes y los cornículos cilíndricos. El cuerpo es
alargado y muy sensible a condiciones externas desfavorables.

122
Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997
Figura 40. Presencia de áfidos en hoja

Estos insectos tienen un número grande de enemigos naturales entre parásitos


y predatores, además de algunos patógenos que disminuyen sus poblaciones;
sin embargo estos organismos son incapaces de mantenerlos bajo control, por
lo cual se requiere el uso de insecticidas sistémicos.

Debido a que los tejidos externos de los áfidos son muy sensibles se pueden
realizar controles con sustancias jabonosas que rompen la membrana externa
del insecto, convirtiéndole en un buen medio de control.

123
4.3. Lección 18. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
fique.

EL fique tiene su origen en la América Tropical, sobre todo en la región Andina


de Colombia y Venezuela. De allí, se fue difundiendo hacia la costa oriental del
Brasil, y, para el norte, a todas las Antillas.

La cabuya es la fibra nacional de Colombia por excelencia. Los habitantes del


actual territorio de nuestro país han extraído la fibra del fique desde tiempo
inmemorial, empleándola principalmente para la fabricación de hamacas,
redes, cuerdas para sus arcos, y para tejer alpargatas, jíqueras, costales y
enjalmas.

4.3.1. Clasificación

Fuente: Pérez Mejía Jorge, 1974.


Figura 41. Planta de fique

El fique se llama también cabuya, penca, maguey, cabui, chuchau, o cocouiza.


Es una planta monocotiledónea perteneciente al orden Liliaces, a la familia
Agavaceae y al género Furcraea.

El género Furcraea incluye cerca de 20 especies perennes y suculentas de las


zonas áridas y semiáridas de la América tropical.

Las especies más importantes del género Furcraea son Furcracea cabuya, F.
gigantea, F. humboldtiana, F. macrophylla, F. andina y F. cubensis.

Desde el punto de vista morfológico el fique se caracteriza por:

Sus raíces son primarias desarrollándose radicularmente de los bulbos o


hijuelos, la forma de la misma es faciculada. Las raíces primarias se ramifican
y dan origen a las secundarias siendo perennes y llegan hasta los 3 metros de
profundidad.

124
El tallo tiene forma de cilindro, su crecimiento es erguido, su superficie es
rugosa y deja ver fácilmente las cicatrices del corte de sus hojas; el jugo del
tronco cuando viejo es bastante cáustico.

La mayoría de las yemas son hojas, pero con una yema terminal, todas las
demás yemas están descubiertas, aunque posee yemas laterales, y
adventicias, existen otras que permanecen como dormidas esperando el
momento preciso para hacer brotar sus hijuelos.

Fuente: Sánchez Potes Alberto, 1998.


Figura 42. Tallo del fique

Las hojas son verdes, verticiladas, sencillas y simples. Su forma es lineal,


lanceoladas aproximadamente doce veces más larga que ancha, los bordes
dependen de las variedades, dentados aserrados, enteros y festoneados, el
limbo cambia también de acuerdo a las variedades, cuando se desarrollan son
carnosas y paralelinervias.

Fuente: Sánchez Potes Alberto, 1998.


Figura 43. Hojas de fique

125
Presenta una inflorescencia pluriflora, compuesta y en forma de panícula. Son
hermafroditas, actinomorfas, simetría radial, entomófilas y anemófilas rodeadas
de dos o más brácteas generalmente membranosas, tres sépalos de color
verde claro. Su corola es blanca, dialipétala, periantío inserto encima del
ovario. Seis estambres, opuestos al periantio y polen amarillo.

El fruto es una cápsula en donde se alojan muchas unidades germinativas. Las


semillas presentan endospermo carnoso que rodea el embrión que es
pequeño.

4.3.2. Condiciones ecológicas

El fique es una planta que se adapta bien a las condiciones climáticas de las
zonas tropicales. Crece desde las llanuras costeras hasta las regiones situadas
casi a los 3 000 m de altura. Los límites óptimos de temperatura están entre 18
y 24°C. A menos de 17 ° C el desarrollo de la planta es muy lento, la fibra es
menos resistente y el número de hojas es escaso. En regiones con temperatura
superior a 24°C tiene desarrollo rápido, pero el porcentaje de fibra y la
longevidad de la planta son menores.

Como ya se mencionó la temperatura óptima donde crece el fique corresponde


a los 18 a 24°C., es decir, la zona cafetera o tierra de clima medio,
comprendida entre los 1.000 y 2.000 metros de altura.

El fique requiere una precipitación superior a los 800 mm anuales. En lugares


demasiado lluviosos (más de 2.500 mm.) la fibra no es de buena calidad. Las
condiciones óptimas para su mejor crecimiento y rendimiento son aquellas que
se hallan en regiones de precipitación media anual de 1000 y 1.600 mm., bien
distribuidos a lo largo de todo el año.

La humedad relativa óptima a la cual se desarrolla el fique se encuentra entre


un 50 y un 70%.

La planta exige una buena luminosidad, se requieren para su desarrollo de 5 o


6 horas diarias de sol como promedio anual, aunque puede tolerar la sombra
de los árboles.

El fique es una planta rústica que se adapta a una gran variedad de suelos y
por eso, quizá, se le haya hecho una propaganda como planta de suelos
malos, pobres y que no sirven para nada. El hecho de vegetar en tales suelos
no indica que estos sean los más apropiados para una explotación económica;
por el contrario, son superiores en todo sentido las plantaciones que crecen en
terrenos ricos y apropiados.

Es por esta razón que se requieren de suelos con textura media como los
franco arcillosos, granulosos, con buena aireación, que permitan el desarrollo
normal de sus raíces fasciculadas. No resiste las inundaciones y tiene su mejor

126
crecimiento en suelos casi neutros, con un pH de 6.5, aunque puede prosperar
en pH de 5 a 7.

El cultivo del fique se adapta muy bien a tierras onduladas y puede contribuir,
plantado en curvas a nivel o en terrazas, a evitar la erosión. Esta especie, se
recomienda para programas de conservación de suelos, alternado con
gramíneas o con otros cultivos, corno café y plátano.

El fique es una planta que requiere gran cantidad de oxígeno y otros gases
para su desarrollo, los cuales circulan a través del perfil, proporcionando un
medio adecuado para las raíces; de ahí, la necesidad de que los suelos
destinados al fique sean porosos.

4.3.3. Labores culturales

Propagación

La reproducción del fique es principalmente asexual, presentándose dos


formas de multiplicación que son: Los hijuelos y bulbillos.

Los bulbillos nacen en la inflorescencia de la planta que son unas yemas


pequeñas epígeas transformadas en órgano de reproducción vegetativo, una
vez maduros se desprenden naturalmente cayendo al suelo, por la acción de
viento o por sacudidas violentas generadas por el operario que recoge este
material de propagación.

Es conveniente marcar las plantas sanas, fuertes y viejas que son las que
producen inflorescencias vigorosas dando lugar a bulbillos deseables para
iniciar la propagación. Un maguey bien desarrollado puede producir de 2.000 a
3.000 bulbillos.

Una vez recolectados los bulbillos la primera operación consiste en


seleccionados por madurez, conformación y tamaño, descartando todos los
que presenten alguna anormalidad.

Es necesario realizar un vivero para sembrar el material vegetal. Aquí deben


permanecer las plántulas durante cerca de 6 a 8 meses, que es cuando están
en las mejores condiciones para el transplante definitivo.

En la propagación del fique, por el método de los hijuelos existen opiniones


encontradas con relación a sus cualidades para la multiplicación de las plantas,
por esta razón este método no es tan utilizado.

127
Siembra

En el vivero los colinos deben ser plantados a distancias entre 15 y 20


centímetros uno de otro, apretando inmediatamente la tierra, de modo que
permanezcan siempre erguidos. No deben sembrarse ni muy enterrados ni muy
a flor de suelo; lo mejor es hundirlos hasta el punto de inserción de la primera
hoja.

Cerca de 6 u 8 meses después de sembrados, los colinos deben tener una


altura de 40 a 60 centímetros y un peso aproximado de 300 gramos, época en
la cual pueden ser pasados al lugar definitivo

Cuando el terreno ha sido arado y rastrillado en su totalidad o cuando esta


labor se ha hecho en fajas, basta para proceder a la siembra, es recomendable
no hundir demasiado las plantas ni cubrir la base de las hojas con tierra
(aporque).

En terrenos planos, la adecuación y/o preparación del suelo debe ser más
exigente a fin de favorecer el normal desarrollo de las plantas.

La distancia en la cual se trasplantan las plantas es de 4 m por 1 m., quedando


con este sistema un total de 2.500 plantas por hectárea. Si se usan cultivos
intercalados, las distancias deben ser mayores, de 4.0 por 1.50 m, con una
densidad de 1.670 plantas por Ha.

En terrenos ondulados se transplanta a curvas a nivel a distancias de 3 m por


1.50 m.

Resiembra

Un mes después de terminado el trasplante, es oportuno hacer una revisión


minuciosa de toda la plantación con el objeto de cerciorarse que la totalidad de
las plantas se hallen vivas; las que estén secas serán remplazadas
inmediatamente. Una resiembra tardía es siempre perjudicial puesto que altera
la uniformidad del cultivo, dificultando las labores culturales.

Eliminación de hijuelos.

Otro cuidado que se debe realizar a los sembrados durante toda la vida de las
plantas, se relaciona con la eliminación sistemática de los hijuelos que nacen
en el pie de algunas especies; este trabajo se puede ir haciendo a la par con
las desyerbas. Los hijuelos asimilan sustancias nutritivas de las plantas madres
y, una vez desarrollados, sus raíces compiten con las de la verdadera
plantación; además el crecimiento exagerado de hijos dificulta las labores
dentro del cultivo.

128
Durante los dos o tres primeros años de crecimiento y desarrollo de la planta es
conveniente, de cuando en cuando, cortar todas las hojas dañadas o maduras.
La descomposición y pudrición de estas hojas todavía adheridas a la planta,
puede perjudicar a ésta por la producción de sustancias nocivas (toxinas) que
inhiben su crecimiento.

Cultivos de cobertura.

Son aquellos cultivos que se hacen con el fin de proteger al suelo contra la
erosión, aumentar el contenido de materia orgánica y evitar la pérdida de
elementos nutritivos

En el caso del fique se pueden establecer entre las hileras de la plantación,


Para ello se puede emplear la vegetación espontánea siempre y cuando no
estorbe al desarrollo del plantío. Otra alternativa sería sembrar plantas
especiales de cobertura, sobre todo leguminosas.

Cultivos intercalados.

En las calles que deja libre el fique es posible y aún conveniente, económica y
técnicamente, establecer cultivos diferentes. Esta práctica no solamente
proporciona un ingreso adicional que permite cubrir gran parte de los gastos de
establecimiento y mantenimiento de la plantación de fique, sino que, utilizada
apropiadamente, contribuye de forma eficaz a controlar la erosión y a mantener
la productividad de los terrenos.

Fertilización

El fique requiere una buena disponibilidad de nutrimentos primarios, como


nitrógeno, fósforo y potasio, y también de elementos secundarios, como calcio
y magnesio.

La deficiencia de nitrógeno ocasiona un crecimiento lento de la planta,


amarillamiento de las hojas y escaso desarrollo de las raíces. La deficiencia de
fósforo causa coloración violácea o rojiza de las hojas y pobre crecimiento de
las raíces. La deficiencia de potasio se manifiesta por disminución en el tamaño
de las hojas, con clorosis en parches y degeneración, y muerte de las raíces.

En suelos ácidos, con pH de 4.5 a 5.0, deficientes en calcio y en fósforo, es


necesario encalar, aplicando de 2 a 3 toneladas de cal agrícola, y fertilizar con
abonos compuestos como 12-24-12 o 12-12-17 -2.

Es recomendable distribuir en el terreno los residuos de las hojas, después de


la separación de la fibra, preferiblemente descompuestos para favorecer la
presencia de materia orgánica en el suelo.

129
Cosecha

De acuerdo con las condiciones de clima y suelo, y manejo del cultivo, el primer
corte de hojas puede hacerse a los 30 o 40 meses después del trasplante. Es
recomendable, antes de iniciar la cosecha, eliminar todas las hojas rastreras,
frecuentemente muy dañadas. Esto facilita el beneficio y mejora la calidad de la
fibra.

Las hojas maduras comúnmente forman con el tronco un ángulo mayor de 45°.
Tan pronto se cortan, se eliminan las puntas y en las variedades espinosas los
bordes, a fin de facilitar el desfibrado. Las hojas cortadas deben beneficiarse en
un término no mayor de 24 horas.

El promedio de rendimiento de un cultivo es de tres a siete toneladas de fibra


por hectárea. Este se obtiene de 175 000 a 200 000 hojas que pesan cerca de
125 toneladas. Los rendimientos de plantas silvestres o de plantaciones mal
atendidas, pueden ser una tercera parte del promedio anterior.

Beneficio del fique y extracción de la cabuya

El beneficio del fique puede dividirse en tres fases principales: la preparación,


el desfibrado y el terminado.

En la preparación, las hojas desarrolladas se cortan con un cuchillo por su base


de unión con el tronco, empleándose también una larga pala afilada cuando se
trata de plantas grandes y espinosas. Cuando las hojas tienen espinas, se
efectúa con el cuchillo una operación que consiste en cortar longitudinalmente
los bordes. La eliminación de las espinas tiene por objeto evitar las
lastimaduras en el manejo de las hojas y hacer posible su desfibrado. Las hojas
cortadas se van dejando apoyadas en las plantas, y luego se recogen en haces
para transportarlas a hombro hasta el lugar donde se encuentra la
desfibradora.

En la segunda fase del beneficio se emplea la máquina desfibradora, que


consta de una mesa metálica sobre la cual se instala un motor de gasolina de 5
a 9 caballos de fuerza. Por medio de una banda se comunica el movimiento a
un cilindro raspador, que posee entre 15 y 29 cuchillas de metal. Al girar el
cilindro las cuchillas van raspando y limpiando las hojas contra una base
circular, llamada pechero. El desfibrador va introduciendo las hojas por la boca
de la máquina hasta la mitad, volteándolas luego para raspar la otra mitad y
quedar con las fibras de cabuya en sus manos. La pulpa, que constituye el 95%
del peso de la hoja, se va desprendiendo y cayendo al suelo, conformando una
masa espesa que es necesario drenar hacia otro lugar. Por su alto contenido
de nutrientes, la pulpa sirve como abono para el propio fique.

130
Extraída la cabuya, comienza la fase final del beneficio o terminado. La primera
operación es la fermentación o enriado, que consiste en dejar la cabuya verde
sumergida en el agua durante varias horas. Luego la fibra debe lavarse
enjuagándola repetidas veces y escurriéndola en el agua. La fermentación se
hace casi siempre "en seco", dejando simplemente durante una noche la fibra
verde amontonada en el lugar donde fue desfibrada; y para lavarla se baja la
cabuya a lomo de mula o al hombro hasta una quebrada o arroyo.

Para su secado, la fibra debe ser expuesta al sol y a la aireación, sacudiendo


permanentemente los manojos para liberarlos de motas, y volteándolos para
que la exposición sea uniforme. En el Oriente Antioqueño el secado se hace
extendiendo la cabuya sobre el pasto en los potreros, mientras que en
Santander se cuelga de alambres o en secaderos especiales construidos con
cañas. Por último, la fibra seca se empaca y prepara para la venta,
superponiendo los manojos y amarrándolos entre sí para formar bultos de entre
40 a 50 kilos cada uno.

4.3.4. Costos de producción

La medición económica en los predios fiqueros, no obedece a una, estructura


única de costos y beneficios, sino que está condicionada por la heterogeneidad
de combinaciones productivas y por las relaciones de intercambio voluntario de
difícil expresión monetaria. En un cultivo de 2500 plantas, se estima 48 jornales
en instalación y rnantenimiento y 51,3 en el beneficio. La compañía de
Empaques calcula 77 jornales en la instalación y mantenimiento y 126 jornales
en el beneficio.

La relación beneficio-costo en una explotación comercial es de 11.6 por ciento


anual pagando el desfibrado y de 22.5 por ciento anual con máquina propia. En
esta rentabilidad se incluyen estimativos de producción con un rendimiento
inicial de 1 kilogramo por planta hasta alcanzar un pico en el noveno y décimo
año de 3.6 kilogramos/planta.

131
4.4. Lección 19. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del fique y
su control.

4.4.1 Arvenses

Existe necesidad de controlar las plantas ajenas al cultivo, ya sea de forma


manual, mecánica o químicamente, o mediante cultivos de cobertura,
principalmente de leguminosas.

En los primeros estados de desarrollo de la planta y después del transplante se


deben hacer controles regulares ya que en estas etapas el poder competitivo
del fique es bajo. Una vez el cultivo ha crecido y cerrado espacios es
necesario efectuar mínimo dos controles por año.

Las malezas más comunes y perjudiciales en los cultivos de fique, sobre todo
cuando éstos están en el período de crecimiento, son las que se enredan en la
planta y aquellas que tienen un sistema radicular semejante que inhibe el
normal desenvolvimiento de las raíces de la planta, así como los arbustos y
hierbas altas que proporcionan un ambiente húmedo y sombra alrededor de la
planta, favoreciendo el ataque de plagas y enfermedades.

Entre las malas hierbas se puede enumerar las siguientes especies que
causan detrimento en el normal desarrollo del cultivo: batatillas ciertos pastos
de corte, como el elefante, y algunos otros de rápido crecimiento, como son el
pará, y la india.

4.4.2. Plagas

Gusano pasador de las hojas y de las plantas tiernas, (batachedra


cabuya)

El gusano pasador es una larva que tiene hábitos saprófagos; una vez que
alcanzan su máximo desarrollo miden hasta 15 y 17 mm., son supremamente
ágiles y cuando caminan lo hacen en forma rápida.

Los adultos que son mariposas ovopositan buen número de huevos,


generalmente sobre el envés de las hojas, en posturas aisladas a juzgar por el
número y localización de los orificios que las larvas dejan al salir, los cuales se
hallan ampliamente distribuidos entre la superficie foliar.

Los daños causados por la larva se presenta al consumir parte del parénquima
de la planta, originando pérdidas relacionadas con: disminución de la vitalidad
de la planta principalmente cuando ella es atacada joven; aceleración de la
florescencia y muerte prematura; tronchadura de la fibra; demeritación de la
fibra por manchas en las paredes de las que las larvas dejan en su recorrido; y
poca resistencia de las hebras debido a la inmaduración de las hojas.

132
Para el control del insecto el sistema más seguro y eficaz es el cultural o
indirecto, complementado naturalmente con el biológico, pues debido a las
condiciones especiales de vida de las larvas, la acción de los insecticidas no
importan cuales sean, parece deba descartarse en forma definitiva.

La recolección de las hojas malas y el corte bajo (sin dejar tocón), son prácticas
imprescindibles para el combate del insecto por el hábito saprofito que
presentan las larvas. Las hojas dañadas por cualquier causa y los cortes mal
ejecutados, proporcionan un ambiente favorable para la multiplicación de la
plaga.

El control biológico se ejerce por medio de insectos Reduvidae, por


Braconidae (Brachimerias), Chalcidae, por avispas (polistinae), por hormigas
(varias especies), por Dermápteros, y por buen número de arañas (Araneus).
Estos predatores son mucho más frecuentes en los campos en donde no se
han aplicado insecticidas.

Fuente: Pérez Mejía Jorge, 1974.


Figura 44. Corte de una hoja atacada por el pasador.

Chinche chupadora, (Cytopeltis notaza).

Son insectos de tamaño pequeño, muy ágiles, vuelan con facilidad y cuando
se sienten perseguidos corren presurosos a esconderse en la parte inferior de
las pencas.

Viven sobre las hojas chupando savia continuamente y su daño se delata por el
aspecto clorótico de las mismas y aún de toda la planta si el insecto se halla en
gran cantidad, cosa que ocurre generalmente en el verano.

Para el manejo del insecto se realiza un control de tipo cultural que consiste en
retirar del cultivo todas las malezas hospedantes del insecto y mantener la
plantación limpia.

133
Un control directo consiste en utilizar insecticidas mixtos (de digestión y
contacto), que son los más aconsejables.

Cochinilla de las raíces, (Pseudococcus brevipes).

El insecto es propio de cultivos en clima medio y cálido. Las plantas afectadas


muestran en el cuello, montones de tierra hechos por las hormigas que viven
en simbiosis mutualista con las cochinillas; las hojas también se tornan
cloróticas y flácidas. No es raro encontrarlas asociadas con hormigas
Aeromyrmex y Tridomyrmex.

La hormiga brava u hormiga fogonera, (Solenopsis germinata), es la que con


más frecuencia se asocia con este Pseudococcus para hacer sus estragos, que
son más frecuentes y graves en los meses de verano.

El control cultural más efectivo contra el insecto consiste en realizar con


frecuencia destrucción de las plantas hospederas y guerra abierta a las
hormigas. En el caso de tener cultivos con yuca, se corre el riesgo inminente de
que el Pseudococcus de la yuca pase al fique y viceversa.

Coleóptero de las hojas, (Platicelia valida).

Estos hexápodos son de colores verde o verde-amarillentos: con antenas


foliáceas en la terminación y aplanadas. Sólo presentan su forma gregaria muy
de vez en cuando (meses de marzo, abril y mayo). Demeritan la fibra
tronchándola, su daño está en proporción directa al número de insectos.

El control más indicado consiste en realizar las labores superficiales del suelo
durante los 3 ó 4 meses que pueden anteceder a sus apariciones, de tal
manera que las larvas y crisálidas quedan expuestas a la acción de los agentes
externos y puedan ser destruidas en su mayoría.

Cuando el insecto abunda con niveles de daño económico se deben reprimir


por medio del uso de un insecticida de digestión.

4.4.3. Enfermedades

Antracnosis del Fique, (Colletotricum agaves).

Son lesiones necróticas distribuidas indistintamente en el área de las hojas,


caracterizadas por manchas pardo oscuras e irregulares, de 10 a 25 mm de
diámetro. Al principio son de coloración verde más oscura que los tejidos
adyacentes y después se tornan cenizas y castañas. Frecuentemente estas
manchas se vuelven confluentes y abarcan toda la superficie foliar. Las fibras

134
en las partes que corresponden a las manchas son menos resistentes y de
coloración variada.

Como medio de combate es necesario realizar recolección inmediata y


destrucción por el fuego de todas las hojas atacadas, para eliminar las fuentes
de inóculo. Se recomienda también aspersiones con óxido cuproso en la
proporción de 1 lb. para 100 litros de agua.

Pudrición negra basal de la hoja, (Leptosphaeria sp).

La alta humedad y temperatura favorecen el ataque del hongo

Al inicio de la enfermedad se presenta una mancha rojiza en la base de la hoja


que se va poniendo cada vez más y más oscura hasta adquirir un color negro.
En este estado sobreviene la caída de la hoja y una pudrición húmeda. La parte
verde de la penca se seca totalmente y la zona basal se pudre completamente.
Generalmente la mancha aparece en las hojas más maduras, de afuera hacia
adentro.

El control cultural del patógeno ofrece buenos resultados y consiste en realizar


medidas como corte y destrucción de todas las hojas afectadas; desyerba de la
plantación para evitar en lo posible que la humedad atmosférica favorezca el
crecimiento del patógeno; y fertilización adecuada del cultivo con una fórmula
alta en potasio.

El control directo se refiere a las aspersiones periódicas (cada mes,


generalmente), con diferentes productos fungicidas.

Fuente: Pérez Mejía Jorge, 1974


Figura 45. Planta afectada por Leptosphaeria sp.

135
Mal rosado o felpa, (Corticium salmonicolor)

La enfermedad se caracteriza por una pudrición seca de los tejidos


parenquimatosos, en un área apreciable hacia la base de la hoja.

Las esporas son transportadas por el viento. El hongo forma una costra de
color rosado en el tronco de la planta entre las inserciones de las hojas y de allí
se empieza a propagar por la base de las pencas.

Fuente: Pérez Mejía Jorge, 1974


Figura 46. Planta invadida por el C. salmonicolor.

Las aspersiones con óxido cuproso han resultado una medida eficiente,
siempre y cuando se complemente con prácticas culturales como desyerbas,
corte, recolección y quema de las hojas afectadas.

Macana o Rayadilla.

La enfermedad se caracteriza atacar diferentes partes de la planta como hojas,


bulbillos, colinos y plantas adultas causando lesiones en los órganos y muerte
de la planta.

Para el control de la enfermedad se recomienda la destrucción y quema de


todos los individuos afectados, ojala fuera de la plantación misma; la
herramienta con que se efectúe el arranque y el corte de las hojas, aunque
sean aparentemente sanas, debe desinfectarse debidamente.

El material para efectuar nuevas siembras debe proceder de zonas libres de la


enfermedad para evitar en lo posible la diseminación de ella.

136
Fuente: Pérez Mejía Jorge, 1974
Figura 47. Planta recién atacada por Macana.

Quemazón de las puntas, (Verticilium sp y Fusarium sp)

Estos hongos ocasionan en las plantas enfermedades de carácter vascular,


produciendo marchitamiento de las hojas, amarillamiento y secamiento de las
extremidades de las mismas.

El control de estos patógenos está determinado a la eliminación del exceso de


agua de los viveros por medio de obras de avenamiento; rotación de las áreas
destinadas a almácigos y roturación y aireación de los suelos. Entre los
métodos directos se encuentra la desinfección del sustrato utilizado en el
vivero.

137
4.5. Lección 20. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
espárrago.

El espárrago es una planta originaria de Europa y Asia, caracterizada por tener


gran importancia en la alimentación al ser una hortaliza comestible, tanto como
consumo en verde como para blanco y en forma fresca o enlatada.

4.5.1. Botánica y taxonomía

Botánicamente el espárrago pertenece al tipo de las Fanerógamas, el cual


incluye plantas con raíz, tallos, hojas, flores y frutos.

En base a la parte comestible denominadas turiones se clasifican en el grupo


de las hortalizas de tallos.

La clasificación taxonómica científica del espárrago es la siguiente: clase


Monocotiledónea, familia Liliácea, genero Asparagus y especie Officinalis,
siendo su nombre científico Asparagus officinalis.

Las variedades de espárragos recomendados para las regiones de clima medio


de nuestro país son Mary Washintong, Martha Washintong, Rutger, Limburgia
y Limbras por su vigor, resistencia a roya y alta calidad comercial.

Desde el punto de vista comercial, las variedades se dividen en blancos o


verdes de acuerdo con el color de los turiones. El primer grupo presenta brotes
verde claro; el otro grupo produce turiones verde oscuro con la punta morada,
sin embargo, cuando los dos tipos se aporcan alto, los turiones serán blancos,
práctica que se conoce como blanqueo. En nuestro país se prefieren los tipos
blancos, aunque los verdes son más nutritivos y de sabor más fuerte.

Tomado de Internet
Figura 48. Planta de Espárrago

138
El espárrago es una planta perenne provista de un sistema radicular formado
por diversas raíces cortas, gruesas, retorcidas unas en otras, constituyendo la
llamada garra o madre del espárrago, que paulatinamente se aproxima a la
superficie del suelo al desaparecer cada 2 o 3 años las raíces existentes y ser
sustituidas por otras nuevas situadas en plano superior al anterior.

Los tallos son subterráneos y brotan permanentemente; están revestidos por


escamas que envuelven las yemas, alcanzan hasta 180 centímetros de altura;
son cilíndricos, erectos, muy ramificados y ligeramente glaucos, de color blanco
cuando están protegidos contra la luz, luego cambian a rosado y por último a
verde y constituyen la parte comestible cuando se han desarrollado de 40 a 45
centímetros.

Tomado de Internet
Figura 49. Tallos de espárrago

Las hojas están reducidas a escamitas enteras, dispuestas en haces,


sustituidas en su función por cladodios que aparecen en número de uno o
varios en la axila de aquellas.

Las flores se presentan en número de 1 a 4 en la axila de los cladodios, en


forma de campana, existiendo plantas machos con flores estériles amarillo
verdosas de aproximadamente 3 a 4 mm., de longitud, provistas de un gineceo
abortado, y las hembras con flores fértiles más pequeñas que las anteriores, en
las que el androceo no se ha desarrollado, observándose claramente tres
estigmas sobresalientes.

Los frutos son bayas pequeñas de unos dos centímetros de diámetro, globosas
de color verde en un principio y rojo vivo cuando están maduros.

Las semillas son pequeñas, de color negro azulado, de 3 a 4 mm de diámetro,


triangulares, con una superficie cóncava que semeja una hendidura con dos
caras convexas.

139
4.5.2. Condiciones agroecológicas

Es un cultivo rústico que soporta factores climáticos extremos, se adapta muy


bien en zonas templadas y tropicales.

La temperatura óptima para su desarrollo se encuentra entre 17 y 21°C.

Es ideal para la formación de buenos turiones que se presente una diferencia


de 10°C entre la temperatura diurna y la temperatura nocturna; esto hace que
disminuya la fibrocidad del tallo.

En las condiciones de nuestro país los mejores resultados se obtienen con


cultivos ubicados entre los 1600 y los 2200 m.s.n.m.

La precipitación adecuada para el buen desarrollo de la especies debe ser de


1000 a 2400 mm anuales, bien distribuidos.

Humedades relativas entre 50 y 70% resultan favorables para el desarrollo de


las plantas.

Respecto al factor edáfico los más apropiados son los francos o franco
arenosos, sueltos, ricos en materia orgánica; debe evitarse los muy compactos
que presenten alto contenido de arcilla. Los suelos arenosos se calientan
bastante en la superficie dando origen a turiones deficientes en calidad por la
propensión a ramificar.

El color del suelo parece ser un factor para tener en cuenta, pues los colores
oscuros, absorben mejor el calor del sol y en igualdad de condiciones
favorecen la salida de los turiones. La pedregosidad también constituye un
factor limitante en cuanto hace que los turiones salgan torcidos, perdiendo así
calidad. Esta planta es especialmente exigente en materia orgánica, por lo cual
se hace necesaria la aplicación de gallinaza. El espárrago es altamente
tolerante a suelos salinos. El pH recomendable está entre 6.5 y 7.2.

4.5.3. Labores del cultivo

Propagación

Comúnmente se hace por semilla, aunque también se utilizan los rizomas. La


siembra puede realizarse directamente en el campo, pero lo más aconsejable
es recurrir al semillero y trasplantar más tarde.

La preparación del semillero es similar a la que se aconseja para las hortalizas,


pero enfatizando en la necesidad de mayor cantidad de materia orgánica para
favorecer el desarrollo de la planta y el suelo profundo donde puedan crecer y
desarrollarse las raíces sin dificultad.

140
Las distancias de siembra en el semillero son de 0.15 a 0.20 m entre sitios de
colocación de la semilla. En cada hoyo se deposita la semilla a 1 o 2 cm de
profundidad. Se recomienda mantener la semilla antes de sembrarla y durante
3-4 días en agua tibia, con el fin de disminuir el período de germinación, que es
lento. Luego se seca a la sombra o se siembra inmediatamente si el suelo está
húmedo. Para una hectárea se necesitan 1.5 kg de semilla, distribuidas en
1.000 m² de semillero.

Los cuidados culturales en el semillero se reducen a controlar malezas y a


regar cuando sea necesario. Usualmente entre el quinto y sexto mes a partir de
la siembra, las plantas han adquirido una altura de 40-50 cm, que es el tamaño
ideal para el trasplante al sitio definitivo.

Preparación del terreno

Después de la arada profunda, se rastrilla el terreno las veces que sea


necesario; se surca a 1.20 m y a 30 cm de profundidad para suelos planos, en
pendientes se trazan líneas curvas en contorno con desnivel del 3% a una
distancia de 1.20 a 1.40 m y terrazas de 0.8 m de ancho.

Sobre las terrazas se excavan zanjas a 0.4 x 0.4 m de ancho y profundidad. El


suelo que se saque de las zanjas se coloca en la parte superior de la
pendiente. Posteriormente se rellenan las zanjas con una mezcla del suelo
removido adicionando gallinaza y fertilizantes de acuerdo con el análisis de
suelos. La parte de suelo que no se utilice se deja en su sitio para labor
posterior de aporque.

Igualmente, en zonas pendientes deben hacerse las labores de drenaje


necesarias, para evitar el exceso de humedad, lo que perjudicaría el cultivo y
disminuiría los rendimientos.

Fuente: ICA 1977


Figura 50. Disposición de los surcos para la plantación de espárragos

141
Trasplante

Al arrancar las plántulas del semillero para trasplantarlas, debe ponerse


especial cuidado en no dañar las raíces (llamadas garras o coronas) para
conseguir un crecimiento continuo en el sitio definitivo. Una vez sacada la
planta, se poda parte del follaje y se siembran las garras más vigorosas y
sanas y que presenten yemas grandes.

A pesar de que se ha observado que las plantas machos producen brotes más
numerosos y pequeños, no es aconsejable hacer selección por el sexo, ya que
esto se sabrá algo más tarde y no se justifica arrancar plantas ya establecidas
en el campo.

Para obtener espárragos verdes, las garras se siembran extendiendo las raíces
a 50 cm entre sí y a 1.5 m de distancia entre hileras, en hoyos hechos con pala
ahoyadora o barretón en la zanja, profundizándolos hasta 30 cm, con lo cual la
plántula quedará casi enterrada

Para espárragos blancos las distancias entre hileras se aumentan a 2 m; como


norma general, la profundidad de siembra dependerá de la textura del suelo,
será mayor en los livianos y menor en los más pesados; las garras se tapan
con capas delgadas de tierra que se van adicionando a medida que la planta
crece.

Con la densidad indicada se obtendrán entre 15.000 y 20.000 plantas por


hectárea; si el terreno es pendiente la densidad disminuye a 10.000 plantas por
hectárea.

Durante el primer año, luego del trasplante, la planta iniciará el almacenamiento


de reservas en las raíces.

Aporque

Esta actividad solo es necesaria cuando se quiere producir espárrago blanco;


para espárrago verde solo se realiza cuando la garra esta muy superficial.

Fuente: ICA 1977


Figura 51. Aporcado del espárrago para la cosecha.

142
Soqueo

Cuando las plantas se tornan doradas y los frutos maduran están listas para
producción de turiones. Se procede a cortar los tallos a nivel de las garras,
para lo cual se necesita remover la tierra, aprovechando para hacer aplicación
de fungicida y fertilizante. El material vegetal cortado debe sacarse del cultivo
para evitar enfermedades.

Fertilización

En los suelos de las regiones recomendadas para el espárrago, la fertilización


se comienza desde el trasplante mezclando el suelo, si éste es ácido y pobre,
con 50 toneladas/hectárea de gallinaza más 2 ton. de Calfos por hectárea.

Antes de iniciar la época de la cosecha y aprovechando la poda de tallos y


consecuente remoción del suelo, se realiza la primera fertilización propiamente
dicha; sin embargo, algunos investigadores afirman que la época de aplicación
del fertilizante no tiene relación con los rendimientos.

En nuestras zonas productoras ha dado buen resultado el uso de 70 g por


planta de 12-12-17-2 o 12-6-22 más urea en la proporción de 700-180-250 kilo-
gramos/hectárea por año. Parece que el nitrógeno y el potasio son los
elementos básicos en la nutrición del espárrago. Luego de podar y fertilizar la
plantan se aporca con la tierra remanente de la preparación inicial del terreno.
En general, la adición de materia orgánica parece ser de mayor importancia
que la aplicación de N, P Y K en forma mineral.

Como norma general, se recomienda fertilizar cada 3-6 meses con fertilizante
completo en relación 1-1-1 o 1-2-1 en cantidades de 2 toneladas por hectárea y
aplicado en la época de formación de la planta y no en la proximidad de la
cosecha.

Riegos

El espárrago no admite excesos de humedad, soporta sequías, pero responde


muy bien al riego. Bajo condiciones de 1.500 mm de precipitación al año bien
distribuidos, se requieren muy pocos riegos, especialmente durante la fase de
cosechas. El sistema de riego preferible es el goteo, pues impide la humedad
de la parte aérea de la planta y así se evitan ataques de hongos dañinos.

Cosecha

Aproximadamente a los doce meses del trasplante se inicia la primera cosecha


comercial. Se conoce el momento de iniciarla porque las falsas hojas empiezan
a amarillar y caerse y los frutos están maduros. Es en este tiempo cuando se
descubre el tallo hasta la raíz, cortándolo inmediatamente por completo y

143
aplicando el fertilizante. Esta operación estimula el crecimiento de brotes o
turiones, los cuales empiezan a salir en forma continuada a los pocos días de
la poda. El material resultante de la poda deberá sacarse del campo y
transformarse en compost.

Debido a las condiciones tropicales, la esparraguera puede cosecharse


continuamente, pero ello no es recomendable porque la plana se agotaría
rápidamente.

El tiempo de cosecha debe coincidir con una época de verano o de pocas


lluvias, preferencialmente. Esto con el fin de alternar los períodos de
producción y reposo y permitir que la planta recupere sus reservas durante los
períodos lluviosos. Para inducir el reposo o descanso, se deja de cortar los
turiones permitiendo que 2 o 3 de ellos regeneren la parte aérea de la planta.
Estos tallos, conocidos como tallos madre aseguran a las partes subterráneas,
especialmente a las raíces del almacenamiento, una alimentación adecuada.

En nuestras condiciones tropicales existen dos períodos lluviosos y dos más


cortos, los cuales varían entre las regiones, pero, para fines prácticos, permiten
establecer períodos de cosecha y descanso cada tres meses
aproximadamente, una vez que el cultivo se ha desarrollado de manera
suficiente.

Al final de la 5 o 6 producción puede establecerse un periodo de cosecha de


tres meses, o sea que por año se tendrían seis meses de corte y seis meses de
descanso y un rendimiento promedio de 5 a 7 toneladas por hectárea, aunque
para el año 6 y 7 pueden llegar a obtenerse de 8 a 9 toneladas por hectárea,
por año, en condiciones excepcionales.

Después del 6° - 7° año de cosecha, los rendimientos empiezan a decrecer y


hacia el 8°- 9° año, seguramente debe pensarse en remplazar el cultivo,
aunque la planta puede durar más años.

En cuanto a los brotes, éstos se cortan diariamente tan pronto como aparece
su extremo apical. Para ello se remueve el suelo circundante y con un cuchillo
se cortan cerca a la raíz y se depositan cuidadosamente en cajones protegidos
del sol.

Es muy importante no permitir que los turiones salgan del suelo, porque con la
luz del sol toman un color verde y pierden calidad. Una vez cosechados los
turiones empiezan a perder agua y propiedades; por esto se deben guardar en
un sitio fresco, húmedo y protegidos de la luz después de lavarlos, los verdes
no se lavan excepto que tengan tierra, los ápices no se mojan, se clasifican y
empacan, mientras se llevan lo más rápido posible a la procesadora o al
mercado.

Es recomendable empacarlos en cajas de cartón o madera plegables y en lo


posible envueltos en plástico para disminuir la transpiración y disminuir la
pérdida de peso.

144
4.6. Lección 21. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del
espárrago y su control.

4.6.1. Arvenses

Durante el año que transcurre entre la siembra y la primera cosecha real, se


realizan tres desyerbas que deben ser superficiales. Debe tenerse en cuenta
que la planta es muy susceptible a la competencia por malezas.

En los primeros estados de desarrollo las plantas son poco competitivas frente
a las otras especies debido a que su tamaño les impide colonizar espacio
dentro del cultivo.

Durante los años siguientes se efectúa un control manual si el cultivo lo permite


o por el contrario puede usarse diferentes herbicidas que dependiendo de sus
características se pueden utilizar durante o inmediatamente después de la
cosecha.

En lo posible antes de la cosecha el control debe ser mecánico o manual para


así aflojar el suelo y favorecer el desarrollo de los turiones.

Junto con el control de malezas se pueden desarrollar otras actividades del


cultivo como el ablandamiento del suelo y el aporque de las plantas.

4.6.2. Enfermedades

Marchitez por Fusarium sp

Se caracteriza por causar una pudrición de la raíz y de la garra causando


amarillamiento y marchitamiento de la planta. Estos hongos son favorecidos
por la humedad alta del suelo.

La enfermedad se puede identificar por la presencia de manchas color café en


el rizoma y la muerte eventual del tallo aéreo.

Como métodos de manejo de la enfermedad puede realizarse actividades


sanitarias previas como tratamiento de la semilla y sistemas de drenajes
adecuados.

Roya (Puccinia asparagi)

La enfermedad se caracteriza por ocasionar manchas pequeñas amarillo


rojizas que aparecen en los tallos aéreos y en las ramas muy delgadas de los
tallos, disminuyendo el crecimiento y debilitando la planta. La enfermedad es
más frecuente con temperaturas altas y elevadas humedades relativas.

145
Tomado de Internet
Figura 52. Presencia de roya en hoja

Se recomienda para su manejo y control, uso de variedades resistentes y


aspersiones de la parte aérea, con caldo bordelés o cualquier fungicida cúprico
o a base de azufre, en aplicaciones periódicas durante la época de invierno.

Tizón (Cercospora asparagi)

Se caracteriza porque aparece en troncos, ramas y brácteas de las plantas,


pequeñas lesiones color gris ceniza. En ataques fuertes puede ocasionar
defoliación y tizón.

Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 1979


Figura 53. Presencia de Cercospora en hoja.

El método de control cultural para el manejo de la enfermedad consiste en


eliminar el material vegetal resultante de la poda, disminuir la humedad del
cultivo mediante procesos de drenaje y limpieza del terreno.

4.6.3. Plagas

Aunque el ataque de insectos plaga con niveles de daño económico no es de


importancia dentro del cultivo, los siguientes individuos se pueden presentar
dentro del ciclo productivo.

146
Gusano soldado (Spodoptera sp)

La larva de este insecto realiza el daño sobre la planta. Su efecto consiste en


consumir tejido verde especialmente hojas. En ataques fuertes puede llegar a
causar defoliación total de la planta.

Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997


Figura 54. Larva de Spodoptera

El control de este insecto está encaminado a realizar actividades de manejo


como adecuada preparación del terreno, apropiada selección de semilla,
eliminación eficiente de malezas.

En el control biológico de la plaga se pueden utilizar parasitoides


(Trichogramma sp), depredadores (Coccinélidos) y entomopatógenos (Bacillus
thuringiensis).

Phyllophaga sp

El daño de este insecto es causado por el inmaduro denominado chiza, las


cuales se alimentan de los turiones subterráneos causando heridas por donde
pueden entrar infecciones secundarias.

El control de esta plaga se realiza mediante prácticas como la adecuada


preparación del terreno, recolección de desechos vegetales y adecuado
manejo de malezas.

Se han utilizado algunos entomopatógenos para el control del insecto con


buenos resultados.

Cucarrón del espárrago, (Crioseres asparagi)

Son pequeños insectos que se alimentan de los turiones verdes y


eventualmente de la parte aérea de la planta.

147
En ataques importantes puede llega a causar defoliación total de las plantas
afectando considerablemente la producción.

El manejo de la plaga se puede adelantar mediante la utilización de algunas


especies depredadores y parasitoides del insecto.

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS

Investigue cuales son los diferentes sistemas para la extracción del fique. Para
cada uno de ellos indique sus características.

Investigue cuales son los diferentes procesos realizados para la obtención de


Aloes a partir de las hojas de sábila.

AUTOEVALUACIÓN

● Indique la clasificación taxonómica de la sábila.

● ¿Cuáles son las características morfológicas de la planta de sábila?

● ¿Cuáles son las densidades de siembra más utilizadas en el cultivo de


sábila?

● ¿Cómo es el sistema de procesamiento de la cosecha de sábila?

● ¿Cuáles son los requerimientos ecológicos del cultivo de fique?

● ¿Cómo es la forma de propagación del fique?

● Indique el nombre y las características de una enfermedad presente en el


cultivo del fique.

● Indique las características morfológicas del cultivo del espárrago.

● ¿Cómo es el sistema de propagación del espárrago?

● ¿Qué parámetros se deben tener en cuenta para la cosecha del espárrago?

● ¿Cómo se manifiesta el Fusarium en las plantas de espárrago?

148
CAPÍTULO 5. CULTIVOS ARBUSTIVOS.

Las condiciones privilegiadas de la zona de clima medio de nuestro país con


relación al factor edáfico y a factores climáticos permite el desarrollo de
especies arbustivas de interés comercial como son el cultivo del café, el
chachafruto y la higuerilla.

Entre éstos el cultivo del café representa para la región y para el país el
sistema productivo más importante por la generación de empleos y de ingresos
económicos.

Gracias al cultivo del café el país presenta una cultura agrícola en las zonas de
clima medio que le permite competir con potencias cafeteras de otras latitudes.

Por su parte, el cultivo del chachafruto proporciona una muy buena fuente de
alimentación rica en proteína para las familias campesinas, y representa una
posibilidad para obtener alimentación animal mediante forrajes obtenidos a
través de su sistema foliar.

La higuerilla a pesar de no estar muy masificada dentro de las zonas de clima


medio representa una opción de ingresos familiares para las comunidades
campesinas mediante la extracción de aceites presentes en sus semillas.

En el presente capítulo se dan a conocer las características más relevantes de


los sistemas productivos del café, la higuerilla y el chachafruto.

Objetivo.

Conocer las características generales del cultivo del café, el chachafruto y la


higuerilla

Establecer las actividades de manejo agronómico del cultivo del café, el


chachafruto y la higuerilla.

Conocer los problemas fitosanitarios presentes en los cultivos de café,


chachafruto e higuerilla.

Identificar las actividades que permiten establecer un sistema productivo de


café, chachafruto e higuerilla.

5.1. Lección 22. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
café.

La historia del café se inicia aproximadamente en el año 900 de la era Cristiana


y nos da cuenta de que en un principio, los cafetos crecieron como plantas

149
silvestres en las montañas de Abisinia (hoy Etiopía, situada en el extremo
nororiental del continente africano).

Por mucho tiempo se pensó que el café era originario de Arabia, pero las
últimas investigaciones que se han hecho en tal sentido han demostrado que
esta planta es africana.

Las primeras semillas de café, fueron traídas a Colombia en el año de 1732 por
los Jesuitas. Estas semillas fueron sembradas concretamente, en los territorios
de la misión de Santa Teresa de Tabage, fundada por la compañía de Jesús,
cerca a la desembocadura del rió meta en el Orinoco.

La Historia trae noticias sobre la siembra de plantas de café en las distintas


regiones del país, entre 1732 y 1810, pero puede asegurarse que la mayoría de
siembras se realizaron por curiosidad y que el cultivo industrial del café, en
plantaciones de alguna consideración, solamente se inició en Colombia hacia
1808 en los Santanderes.

5.1.1. Taxonomía y botánica

El cafetero o planta productora del café es un arbusto que se da en la región


tropical de la tierra. Pertenece a la gran familia de las rubiáceas, muy numerosa
por cierto, ya que abarca 500 géneros y 8.000 especies. Uno de los 500
géneros de la familia es el Coffea que lo constituyen árboles, arbustos y
bejucos y comprende unas 10 especies civilizadas, es decir, cultivadas por el
hombre y 50 especies silvestres.

De las 10 especies civilizadas las más importantes son: Coffea Arábica L. y


Coffea Canephora o Café Robusta.

El primer lugar de importancia corresponde a la Arábica, ya que el 70% del café


que se consume en el mundo pertenece a esta especie, en sus distintas
variedades. La especie canephora o robusta representa el otro 30% restante.
La primera de estas especies es la que se cultiva particularmente en América y
en algunas regiones del África por sus condiciones especiales y por la
resistencia que esta especie tiene contra la enfermedad de la roya.

La variedad más utilizada en Colombia es la denominada Coffea Arábica L.

El café Arábica tiene numerosas variedades. De ellas las que se cultivan en


Colombia con mayor intensidad son la variedad TIPICA , que es el prototipo de
la especie; la variedad BORBÓN descubierta en 1715 en la isla de Borbón, de
la Reunión; la variedad CATURRA, originaria del estado Brasileño de Minas
Gerais y conocida desde 1715, la Variedad de MARANGOGIPE, descubierta
en el municipio de este nombre perteneciente al estado de Bahía, Brasil, en
1870, y la variedad COLOMBIA de porte bajo y resistente a la roya.

150
El sistema radical de la planta de café es aIorrízico. Posee una raíz principal
algunas veces bifurcada, de crecimiento vertical, cuya profundidad rara vez
alcanza los 50 cm. No obstante, el crecimiento de ésta dependerá de muchos
factores, entre los cuales se pueden citar la profundidad, textura y estructura
del suelo, etc. Cerca de la región apical de la raíz principal emergen raíces con
un crecimiento oblicuo, pudiendo alcanzar hasta profundidades de 2 a 3 m, si
las características del suelo lo permiten.

El café posee un sistema radical superficial, que imposibilita la ejecución de


prácticas mecánicas para el control de malezas, ya que el daño que se haría al
sistema radical sería considerable.

El sistema aéreo de la planta de café exhibe un dimorfismo único en su


crecimiento. Una planta producida por semilla presenta normalmente un eje
vertical llamado tallo ortotrópico, del cual emergen lateralmente ramas que
forman un ángulo variable con éste y son llamadas ramas plagiotrópicas.

Las hojas del café son pecioladas, caducas y están colocadas en pares
opuestas. Su forma puede cambiar mucho de una variedad a otra, pero en
general son elípticas, a menudo oblongas y aun lanceoladas, con superficie lisa
y glabra. Las dimensiones (largo y ancho) son también variables, existiendo
variedades con hojas cuya longitud puede alcanzar alrededor de 1 cm y otras
con hojas muy grandes, hasta de 20 cm o más.

El color de la hoja es verde oscuro y brillante por el haz y verde pálido y mate
por el envés; no obstante, existen variedades de hojas púrpura y otras de hojas
variegadas. El color de los brotes puede variar desde verde a bronceado y aun
púrpura aunque esta característica no siempre es varietal. Las nervaduras
laterales son poco prominentes, de 8 a 12 pares por hoja.

Además de las hojas, en todos los nudos existe un par de estipulas


interpeciolares de aproximadamente 5 a 8 mm de longitud, fuertemente
adheridas al tallo y son de forma triangular.

Las flores del café se agrupan en inflorescencias llamadas cimas; no obstante,


debido a la poca longitud de los pedicelos y pedúnculos, todas parecen salir de
un mismo punto. Comúnmente a estos grupos de flores se les da el nombre de
glomérulos florales. Cada glomérulo está compuesto de 2 a 3 cimas con 4 a 5
flores por cima. Cada glomérulo posee dos pares de bractéolas en su base de
forma lanceolada y triangular respectivamente.

La flor del café es hermafrodita y autocompatible, es decir, que es autógama,


aunque admite un cierto porcentaje (5 a 10%) de polinización cruzada. Es
pentámera con un cáliz compuesto por cinco sépalos muy pequeños (1 a 2
mm) soldados (gamosépala) de color verde pálido.

Las flores del café son muy olorosas, produciendo un perfume parecido al
jazmín; de allí que originalmente la especie arábica fue denominada Jazminum
arabicum.

151
Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 2002
Figura 55. Inflorescencia del café.

El fruto del café es una drupa de forma ovoide elíptica, con un pedúnculo corto.
Es de color verde cuando está inmaduro y rojo o amarillo al madurar. El color
en la madurez no es una característica varietal, ya que en casi todas las
variedades es posible encontrar frutos de ambos colores.

Fuente: Ascanio Evannoff Carlos, 1994


Figura 56. Fruto del café

El fruto normalmente contiene dos semillas, aunque ocasionalmente pueden


presentarse tres o más. Posee un pericarpio carnoso y grueso, conformado de
afuera hacia adentro por un epicarpio o exocarpio muy delgado, siendo éste el
que da el color al fruto maduro; luego un mesocarpio constituido por dos tipos
de tejidos: uno fibroso que se desprende junto al epicarpio al presionar el fruto
entre los dedos y es lo que comúnmente se conoce como pulpa, y una porción

152
gelificada llamada mucílago que se adhiere fuertemente al endocarpio. El
endocarpio, también llamado pergamino, es de constitución fibrosa, con un alto
porcentaje de celulosa; es de color amarillo pálido.

5.1.2. Condiciones agroecológicas

El clima es importante para el crecimiento de las plantas; por lo tanto, si se


conocen se sabrá cuándo y cómo sembrar el café y en que momentos hacer
las labores al cultivo.

Los cafetales se deben sembrar en zonas que tengan una temperatura media
entre 18 y 21 grados centígrados. En climas más fríos, donde la temperatura es
inferior a 18°C las variedades de café crecen menos y su producción es menor.
En climas más calientes, por encima de 21°C las plantas se desgastan y su
vida productiva es más corta. Además, es más severo el ataque de la roya del
cafeto a las variedades susceptibles como Borbón, Típica, Maragogipe y
Caturra.

La cantidad de lluvia necesaria para el buen desarrollo de los cafetales está


entre 1.800 y 2.800 milímetros anuales, correspondientes a 125 mm/mes. Se
requiere que esta cantidad de agua se distribuya en todos los meses del año.
En los meses más lluviosos se aprovecha para sembrar los cafetales. El
exceso de lluvias puede afectar la floración del cafetal disminuyéndola o
dañándola

En el trópico la principal fuente gratuita de energía es la lumínica. El cafeto,


como todas las plantas, necesita de la luz solar para poder realizar el proceso
de la fotosíntesis. Los requerimientos de brillo solar del cafeto están entre 4 y 7
horas diarias, lo cual da un total anual que oscila entre 1.460 y 2.560 horas.

Con relación al suelo se puede decir que el éxito que se pueda alcanzar en el
cultivo del café depende, entre otros factores, de la calidad del suelo donde se
siembra, ya que de él depende la rapidez del crecimiento y desarrollo de los
árboles, la iniciación de la producción, la cantidad y calidad de ésta, la
resistencia al ataque de plagas y enfermedades, y la duración de su vida
productiva.

Los suelos oscuros son los mejores para el café porque tienen buen contenido
de materia orgánica.

Los mejores suelos para el café son los llamados suelos francos, que tiene en
igual proporción los contenidos de arena, limo y arcilla. La mejor estructura
para el cafeto es la granular porque las raíces crecen y penetran fácilmente y
las plantas se encuentran los nutrimentos y el agua.

En forma general el café requiere de suelos con una profundidad media de 1,5
m como mínimo, que permita el normal desarrollo de las raíces. A medida que
disminuye la profundidad, las plantas no logran anclaje suficiente, son

153
susceptibles al volcamiento por la acción del viento y pueden verse afectadas
por cortos períodos de sequía, debido a la escasa retención de humedad en
suelos poco profundos.

La disponibilidad de los nutrientes en el suelo depende en gran medida del pH.


Las variaciones de éste, hacen que algunos suelos puedan ofrecer mayor o
menor facilidad para la movilización y transporte de los nutrientes a la planta. El
pH óptimo para el desarrollo del café debe estar entre 4,8 y 6,0, aunque se han
encontrado plantas desarrollándose a valores de más alta acidez.

5.1.3. Labores culturales

Elaboración del germinador

La semilla debe estar disponible 8 meses antes del transplante definitivo en


campo; de este período, dos meses corresponden a la etapa de germinador y
seis meses al almácigo. En las etapas del proceso productivo de germinador y
almácigo se necesitan insumos que se pueden adquirir en la zona, como
guaduas o estacones de madera redonda, arena lavada de río, tierra, pulpa
descompuesta o materia orgánica, bolsas plásticas, materiales para disponer
sombra en viveros, plaguicidas de baja toxicidad, sólo si se requieren.

A los 60 o 70 días ya se cuenta con las plántulas o chapolas listas para ser
llevadas a bolsas en el almacigo.

Existen dos clases de germinadores: de piso y aéreo, consiste en un cuadro


hecho con madera o ladrillos, en el cual se siembra la semilla en arena lavada
de río con riego permanente. Su tamaño depende del área a sembrar y la
época más recomendable para su establecimiento son los meses de enero y
septiembre.

Elaboración del almácigo

Su finalidad es el desarrollo adecuado y la selección de las plántulas para el


establecimiento definitivo del cultivo. En este proceso es indispensable
asegurarse de la buena selección del material.

En su construcción se usan bolsas de polietileno color negro; calibre uno y


medio o dos, perforadas a los lados y al fondo, y de un tamaño de 17x23cm.

El mejor sustrato es una mezcla de tierra y pulpa de café, en una proporción de


3 a 1.

Las bolsas se disponen a nivel, en eras de 1 metro de ancho y 10 m de largo,


separadas por calles de 0.5 metros, las que deben llevar zanjas 0.1 metros de
profundidad para que el agua escurra con facilidad.

154
La desinfección del suelo para el almácigo se puede hacer mediante
solarización, lo que se logra tapándola con un plástico y dejándola al sol por
una semana.

El control de arvenses en el almácigo se puede hacer manualmente, evitando


el uso de herbicidas, hasta donde sea necesario.

Preparación del suelo

Como el cafeto es una planta que vive muchos años, la preparación del terreno
tiene que hacerse de la mejor manera de forma que no tengamos problemas
por esta razón durante la vida de nuestro cafetal. Se debe procurar dejar el
suelo lo mejor suelto posible para facilitar el desarrollo de las raíces.

Trazado

El trazado se ejecuta después de haber determinado la distancia de siembra. El


tipo de trazado, obedece a la inclinación que tenga el terreno a reforestar.
El trazado es importante porque determina, cuántas plantas necesita el
agricultor, como van distribuidas y como controla la erosión. Así que para cada
inclinación de terreno se escoge el trazado que más convenga.
Los trazados más usados en la siembra del café son los siguientes: En cuadro,
en triángulo o tresbolillo y en curvas a nivel

Ahoyado

Para el ahoyado lo primero que debemos tener en cuenta es la existencia de


un surcado ya definido para colocar una pita y hacer los surcos bien trazados;
otro aspecto importante es conocer la variedad para determinar la distancia de
siembra, además debemos tener en cuenta cuantas plantas por sitio vamos a
sembrar para saber que clase hueco vamos a realizar. Un hueco sencillo se
hace de una dimensión de 30 cm de ancho por 30 de profundidad, para poder
adicionar material orgánico en el momento de la siembra.

Siembra definitiva

En la siembra se debe tener sumo cuidado ya que en esta etapa podemos


fracturar las raíces con que vienen las plantas del almácigo y dañar todo el
anterior proceso. Cuando vayamos a sembrar debemos dejar que la planta se
deshidrate para que el pilón de sustrato se compacte un poco más y al
momento de quitar la bolsa no se rompa y se fracture la raíz de la planta.
Debemos tener en cuenta de no aplicar abonos sin estar descompuesto
totalmente par evitar que la planta se queme por la fermentación de los
mismos. Luego de estar la planta en el hueco se debe pisonear un poco la
tierra que se coloco alrededor de ella para que se compacte y en época de

155
sequía no se separe del pilón de la planta. La tierra que se adiciona al hueco
no debe superar la altura del pilón de la planta.

Las distancias de siembra dependen de la variedad y del manejo del cultivo.


Las distancias más utilizadas son de 1.5 m entre plantas y 2.5 m entre hileras,
y 1.5 m entre plantas y 2.0 m entre hileras

Establecimiento del sombrío

El sombrío para los cafetales debe disponerse según las condiciones climáticas
y el tipo de suelo y la pendiente del terreno.

Existen dos clases:

El transitorio que proporciona sombra durante los dos primeros años de vida
del cultivo y mientras se desarrolla el sombrío permanente. Los más usados
son el plátano y el banano.

Y el permanente que da sombra durante toda la vida del cafetal. La especie


más utilizada es el guamo.

Los sistemas de trazados para el sombrío buscan conservar el recurso suelo.


Se usan el trazado en cuadro y en triangulo, los cuales, además de dar sombra
o ser productivos, también son proteccionistas del suelo.

Fertilización

El concepto de nutrición para el cultivo de café está en marcado dentro de lo


que se conoce como agricultura sostenible, que es la que optimiza la
efectividad de los insumos sin deterioro del medio ambiente, procurando la
conservación del suelo y fundamentalmente de su capa orgánica. Comprende
las etapas de instalación, establecimiento, crecimiento y producción. La
fertilización química se complementa con adiciones sucesivas de materia
orgánica, principalmente por el manejo de subproductos del cultivo. La
fertilización foliar no es utilizada en el cultivo del café.

En los primeros estados de desarrollo de la planta se debe aplicar productos


ricos en nitrógeno y fósforo. A partir de los 24 meses el cafetal se considera en
producción, y es necesario adicionar un fertilizante compuesto rico en nitrógeno
y potasio, y bajo en fósforo, que tenga aproximadamente la relación 3:1:3.

Beneficio del café

En Colombia se utiliza el sistema de beneficio del café por la vía húmeda y


comprende cuatro etapas que son: despulpado que consiste en retirarle la
cereza a los granos maduros del café; la fermentación que consiste en dejar

156
ablandar y descomponer las mieles que cubren el pergamino del grano; el
lavado que consiste en retirar las mieles fermentadas del pergamino; y el
secado que consiste en llevar el grano hasta una humedad del 12% para su
comercialización.

Recolección. Con esta labor se inicia el beneficio del café, consiste en


recolectar los frutos maduros y sobremaduros del lote de tal forma que no se
dañe las ramas del árbol. Se debe tener en cuenta de no coger granos
inmaduros para que no repercuta en el sabor en taza cuando este se convierta
en bebida.

Despulpado. En este proceso se realiza en compañía de una máquina


denominada despulpadora, peladora o descerezadora.

La máquina despulpadora consta, generalmente, de un tambor mecánico


forrado en lámina de cobre perforado de adentro hacia a fuera para formar las
protuberancias que desprende la pulpa cuando al girar el tambor las paredes
cóncavas de máquina hace presión sobre las cerezas.

El fruto se debe despulpar el mismo día, seleccionando previamente los frutos


maduros y sobremaduros.

Fermentación. Esta etapa consta de 24 horas como máximo que se realiza en


un tanque de fermentación donde el mucílago se desprende del pergamino
permitiendo un fácil lavado.

Lavada. Cumplida la fermentación, el café debe lavarse con agua limpia


retirando todo el mucílago fermentado. Para desprender el mucílago en su
totalidad hay que friccionar el grano varias veces contra las paredes del tanque
o entre sí.

Secado. El secado constituye otro de las etapas del beneficio del café y es
determinante para establecer su calidad.

El mejor secado es aquel que se hace al sol. Antes de exponer el grano al sol
hay que hacerle un preciso escurrido. El secado debe hacerse lo mas uniforme
posible para esto es recomendable regar el grano en capas delgadas. Su punto
óptimo de secado es cuando este cumple con unas cualidades físicas como es
de color y de humedad. El color debe ser verde oliva característico del grano y
una humedad del 12%.

Se recomienda no exponer el grano a altas temperaturas para no alterar sus


condiciones naturales.

Beneficio ecológico del café.

CENICAFÉ, lleva muchos años investigando sobre el beneficio ecológico del


café, por vía húmeda, la cual consta de varias etapas para transformar la

157
cereza del café en café pergamino seco, obteniendo la misma calidad, pero
utilizando mínimas cantidades de agua, y aprovechando los subproductos (miel
y pulpa) para evitar la contaminación de las aguas.

En las etapas que se puede suprimir o reducir el gasto de agua son:


- En el recibo de las cerezas, utilizando tolvas secas, o recirculando aguas
en el caso de tolvas húmedas.
- El despulpado sin agua.
- Transporte del café en baba, por gravedad o por tornillo sinfín desde la
despulpadora hasta la zaranda o desmucilaginador.
- En el transporte de la pulpa, ya sea por gravedad o mecánicamente.
- Clasificado del café en baba o en seco.

El mucílago se puede eliminar del café mecánicamente sin afectar la calidad.


Se ha utilizado el modelo de tipo ascendente, el cual realiza la eliminación de
café en baba por la parte inferior junto con agua y restos de pulpa.

El café sale lavado por la parte superior del desmucilaginador, el agua


necesaria para el lavado se le agrega por medio de dos mangueras plásticas
que deben garantizar un consumo de 1 litro de agua por cada kilogramo de
semilla.

5.1.4. Costos de implantación

Los costos de establecimiento de una hectárea de café son los siguientes:

TABLA 4. Costos de producción del cultivo del café.

COSTO
DETALLE CANTIDAD UNITARIO TOTAL

GERMINADOR
KILOS DE SEMILLA CERTIFICADA 1,5 7.000 10.000
SOBRE DE VITAVAX 1 40.000 40.000
JORNAL CONSTRUCCIÓN DE GERMINADOR 2 7.500 15.000
JORNAL CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES 1 15.000 15.000
JORNALES PREPARACIÓN DE TIERRA PARA EMBOLSADO 10 15.000 150.000

ENCAPACHADO Y ENCHAPOLADO
JORNALES DE EMBOLSADO DE TIERRA 10 15.000 150.000
ENCAPACHADO 4 15.000 60.000
ENCHAPOLADO 3 15.000 45.000
DEYERVA ALMACIGO 6 15.000 90.000
CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES DEL ALMACIGO 1 15.000 15.000

ADECUACION DEL TERRENO

158
TALA Y SOCALADO 14 15.000 210.000
SURCADO 8 15.000 120.000
AHOYADO 18 15.000 270.000
ENCALADO 2 15.000 30.000
BULTOS DE ABONO ORGANICO PARA SIEMBRA
DEFINITIVA 16 16.000 256.000

SIEMBRA A TERRENO DEFINITIVO


JORNALES SIEMBRA DEFINITIVA 20 15.000 300.000
TRANSLADO DE ALMACIGO AL TERRENO DEFINITIVO 8 15.000 120.000
OTROS JORNALES DE IMPLANTACION 3 15.000 45.000

TOTAL COSTOS DE IMPLANTACION 1.941.000

159
5.2. Lección 23. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del café y
su control.

5.2.1. Arvenses

La actividad de control de malezas está basada en la selección de coberturas


nobles, que permiten la conservación del recurso suelo. El establecimiento de
coberturas protege el suelo del impacto de las gotas de lluvia, principal
causante de la erodabilidad de los suelos colombianos cafeteros.

Los sistemas de desyerba utilizados por los agricultores de manera tradicional


en las zonas de ladera del país, han tenido como finalidad desnudar totalmente
los suelos. Para ello se han usado herramientas como el azadón, la pala, el
machete, la guadañadora y, en los últimos 20 años, los herbicidas.

Este manejo inadecuado origina una disminución permanente de la


productividad de los suelos, pérdidas por escorrentía al no regular las aguas y
disminución de la biodiversidad genética que conduce a un desequilibrio
ecológico y a una agricultura insostenible para las generaciones presentes y
futuras.

El uso del azadón ha sido reemplazado por tecnologías conservacionistas del


recurso suelo como el mantenimiento de coberturas nobles y la mínima
labranza, las barreras vivas y productivas y el asocio con cultivos de pan coger,
como el maíz y el fríjol. Éste último, es utilizado alternativamente como abono
verde.

El nombre de maleza y su definición ha conducido a los agricultores a la


destrucción permanente de la flora herbácea y arbustiva en forma
indiscriminada, sin medir beneficios y consecuencias. El tema de las arvenses
orienta al agricultor hacia un manejo racional de las mismas, consiguiendo
además la protección de los suelos contra la erosión, la regulación de las
aguas de escorrentía, la conservación de la biodiversidad genética y la
reducción de los costos de las desyerbas hasta en un 85%.

Esta actividad está basada en la selección de coberturas nobles, que permiten


la conservación del recurso suelo. El establecimiento de coberturas protege el
suelo del impacto de las gotas de lluvia, principal causante de la erodabilidad
de los suelos colombianos cafeteros.

5.2.2. Plagas

La broca del café (Hypothenemos hampei)

La broca del café es considerada oriunda de África central, de la región del lago
victoria y el primer registro de daño al grano de café se hizo en semillas
provenientes del Congo y Gabón en 1901. En 1913 llega a Brasil en semillas

160
provenientes de Angola y en el año de 1998 fue detectada por vez primera en
Colombia en el Departamento de Nariño, en el municipio de Tumaco, en la
Vereda de mata de plátano.

Es una plaga que inicia su ataque en los frutos verdes del cafeto, entre los 3 y
4 meses después de la florescencia, cuando éstos se encuentran en estado
lechoso o pastoso.

En la medida que se permita un mayor ataque en frutos verdes, mayor será el


daño en los granos pintones, maduros y sobré maduros.

La broca es del tamaño de la cabeza de un alfiler. Cada hembra pone 40


huevos durante su vida. Después de una semana, de los huevos salen larvas o
gusanos, que son los que mayor daño causan. Permanecen dos semanas
comiéndose la almendra, abriéndole túneles o destruyéndola totalmente
parecidas a granitos de arroz.

Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 1998


Figura 57. Adulto de Hypothenemus hampei

La broca hembra causa mucho daño y vuela de fruto en fruto. En una población
de broca hay 10 hembras por cada macho. Si ataca frutos verdes menores de
tres meses, la mayoría se caen. Si ataca frutos de mayor desarrollo, la broca
se establece en ellos perforando casi siempre una almendra, hasta destruirla
completamente.

El manejo del insecto se realiza mediante técnicas de control cultural como el


RE-RE que consiste en mantener los cafetos sin frutos maduros sobré maduros
y secos mediante recolecciones oportunas y repases permanentes.

En frutos maduros y sobré maduros la broca vive, se multiplica y puede afectar


la siguiente cosecha. Realizar el RE-RE oportuna y periódicamente, evita que
los frutos se caigan y se acumulen poblaciones de broca en el suelo.

161
Entre los beneficios del RE-RE están el interrumpir el ciclo de vida de la broca,
evitar que la broca se multiplique libremente, bajar el nivel de infestación del
insecto, reducir el daño de la cosecha y evitar que el café se caiga.

El control biológico de la broca se basa en la utilización de avistas y de hongos


que reducen las poblaciones del insecto. Las avispas se crían y luego se
liberan en los cafetales para que se establezcan y coman parte de la población
de broca, buscándola dentro de los frutos. El hongo es un moho blanco que se
asperja a los cafetales para que se establezca y controle parte de la población
de broca.

Palomilla de la raíz (Homóptera: Pseudococcidae)

Es un complejo de especies del género Dysmicocus. Las especies de este


género son consideradas las más dañinas, pues causan la muerte a árboles en
producción.

En el cafeto, las colonias se inician en los almácigos en el cuello de la raíz y en


el campo la población aumenta y es cuidada y dispersada por la hormiga del
género Solepnosis, las cuales son conocidas como “chispa” o “polvo de
tabaco”. Del cuello de la raíz las palomillas se van desplazando a lo largo de la
raíz principal y de las raíces secundarias.

Las ninfas y adultos succionan savia de las raíces de las plantas, y a medida
de que la población prospera se presenta marchites y luego clorosis foliar; y
posteriormente la muerte del árbol cuando la mayor parte del sistema radicular
ha murto cubierto por el hongo, esto generalmente ocurre durante o después
de la primera cosecha.

Para evitar daño en sus cafetales se recomienda revisar los colinos antes de
sembrarlos y tener cuidado especial con los que tienen hormigas en la base del
tallo. Después de la siembra, sobre todo cuando se hace en lotes donde antes
hubo café, cada mes pasear el lote en zig-zag buscando hormigas en la base
del tallo, y los arbolitos que se presenten colonias o nidos de hormiga se
mecen suavemente y si hay palomillas éstas se pueden ver formando una
colonia alrededor del cuello de la raíz. Si es común la presencia de hormigas
en la base del tallo, se debe recorrer el lote surco por surco, marcando los
arbolitos afectados.

Cuando se encuentran árboles en producción (mayores de dos años) afectados


por la palomilla, lo recomendable es sustituirlos, arrancando muy bien todas las
raíces colonizadas y luego se siembra un colino sano.

Minador de la hoja, (Leucoptera coffeella)

El adulto es una polillita muy pequeña de color blanco con puntos de color
amarillo metálico en las puntas de las alas.

162
Pone huevos muy pequeños, en el haz de las hojas maduras. Una semana
después salen los gusanitos que penetran en la hoja y comienzan a destruirla
internamente, labor que se prolonga por unas dos semanas, al cabo de las
cuales queda una pústula o zona de tejido muerto de forma muy irregular.

La larva madura abandona la parte muerta y se dirige al envés de la hoja


donde construye un capullo sedoso de color blanco en el cual vivirá una
semana más antes de transformarse en polilla. Cuando su ataque es muy
intenso puede causar la caída de las hojas más afectadas por pústulas o
minas.

Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 1998


Figura 58. Daño del minador del café.

Una forma de manejo del insecto es mediante la eliminación del follaje atacado
por medio de podas. Cuando el ataque es fuerte su combate se hace durante
los períodos secos, con aplicaciones de productos sistémicos al follaje.

La palomilla de las ramas, (Planococus Citri)

Potencialmente es de los insectos más dañinos porque causan el secamiento


de todo el nudo por lo consiguiente, la pérdida de la producción. Cuando las
producciones crecen mucho, después de colonizar todos los nudos, y formar
colonias sobre las hojas, hay abundantes secreciones azucaradas, que sirven
de medio de cultivo de los hongos conocidos como Fumagina.

La hembra adulta de palomilla es de color rosáceo y de forma ovalada, cubierta


con una capa cerosa, presenta numerosos filamentos laterales, siendo los dos
últimos los más desarrollados. Tanto las ninfas como los adultos son móviles,
inicialmente se forman colonias en el tercio superior en árboles aislados y luego
se dispersan a todo el cafetal. Alrededor de las colonias se forman otras
comunidades de insectos, depredadores, parasitoides, oportunistas y
comensales.

163
Para impedir ataques generalizados, se debe tener en cuenta que la presencia
de focos de palomilla suele aparecer en lotes donde se han hecho aspersiones
de fungicidas o de insecticidas. Los lotes deben revisarse frecuentemente y
marcar los árboles afectados con algún distintivo, para luego hacerle alguna de
las aspersiones de insecticidas de contacto de corto efecto residual al 0.2% y
aceite vegetal al 0.5%. Se debe dirigir la aspersión a las ramas afectadas y
siempre tratar de no destruir los controladores naturales.

Gusanos anilladores o trozadores.

Son larvas de mariposas nocturnas de los géneros Spodoptera y Agrotis.

Estos gusanos durante el día permanecen enterrados y en la noche salen y


trozan las plántulas cuando están recién pasadas a las bolsas, o roen la
corteza de los arbolitos de más de cuatro meses y durante su primer año de
vida; cuando la corteza es destruida alrededor del tallo, la planta se marchita y
se muere.

La presencia de la plaga suele ser más común en almácigos hechos cerca a


los maizales o en siembras efectuadas en terrenos que, antes estuvieron
cubiertos con pastos u otras plantas como maíz y fríjol.

El manejo de la plaga se realiza mediante procesos de preparación de terrenos


adecuados. De igual forma se debe eliminar las malezas que sirven como
hospederos y destruir los residuos de cosechas. En ataques severos se
pueden utilizar cebos envenenados y aplicaciones de productos químicos.

5.2.3. Enfermedades

La roya del cafeto, (Hemileia Vastatrix)

Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 1979


Figura 59. Síntomas de la roya en hojas de café.

164
Es una enfermedad, que afecta tanto al crecimiento y desarrollo de la planta
como a la producción del grano. Esta enfermedad es producida por un hongo
que afecta las hojas del café de todas las edades. Las lesiones son manchas
redondas en el envés de la hoja cubiertas por un polvo de color amarillo-
naranja. Generalmente la hoja atacada cae, afecta a variedades como el Típica
y el Caturra en las zonas marginales bajas, en especial en tiempo de lluvias se
propagan las esporas de este hongo, pero se reflejan durante la sequía. En
cafetales bajo sombra la roya es menos severa que en cafetales al sol.
Entonces podemos decir que los factores que permiten la presencia de la roya
son: el clima, la variedad del cafeto, condiciones fisiológicas y ambientales
entre otras.

La forma más efectiva del manejo de la roya es mediante la siembra de


materiales resistentes como la variedad Colombia y la variedad Tabi.

El control químico de la enfermedad se realiza efectuando de tres a cinco


aplicaciones a partir de la entrada de lluvias, con intervalos de 30 días. Se
realizan aspersiones con productos que tienen como base oxicloruro de cobre
50%, en dosis de 3 kg/ha. También se usan los fungicidas basados en óxido
cuproso y otros como el caldo bordelés.

Antracnosis, (Colletotrichum sp)

Esta enfermedad se presenta en cafetales mal abonados y sobre tejidos


afectados por otras enfermedades, o por daños físicos.

La enfermedad pudre los cogollos y tumba las hojas de las puntas de las
ramas. En los bordes o en las puntas de las hojas se presentan manchas
irregulares de color café oscuro. Los granos verdes y pintones atacados se
manchan y arrugan. Las ramas atacadas se ponen negras y se secan.

La enfermedad ataca durante la época de invierno, en las hondonadas y cerca


de los arroyos.

Para prevenir la enfermedad se recomienda abonar en forma oportuna y


adecuada los cafetales. También es importante disminuir la humedad relativa
del cultivo mediante la eliminación de residuos de cosechas y de plantas
arvenses.

Mancha de hierro, (Cercospora coffeicola)

Es una de las enfermedades más importantes del cafeto en Colombia y se


presenta en plantas de cualquier edad, en los cafetales mal abonados o sin
abonar, y sembrados a libre exposición solar o con poca sombra. También es
frecuente en los almácigos cuando tienen poca sombra y preparados sin
materia orgánica descompuesta. Afecta las hojas y los frutos. En las hojas
inicialmente se ven pequeñas manchas circulares de color marrón rojizo;

165
posteriormente, a medida que crecen sin perder su forma, el centro de la
mancha se torna blanquecino, se rodea de un anillo rojizo, y la parte externa de
la lesión, corresponde a un borde amarillento que contrasta con el verde normal
del tejido sano.

Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 1979


Figura 60. Síntomas de mancha de hierro en hojas de café.

Afecta los frutos verdes, pintones y maduros. Inicialmente se presenta en forma


de pequeñas manchas de halo rojizo y de forma circular. Posteriormente, las
manchas comienzan a hundirse en el tejido y a volverse pardas. Continúan
agrandándose conservando su forma circular, o alargándose. La mancha se
ennegrece y se hunde por completo, haciendo que se peguen al pergamino y la
pulpa, produciendo lo que se conoce comúnmente como café pasilla. Mientras
más joven esté el fruto cuando es atacado, mayores serán los daños en el
pergamino.

Una buena prevención de la enfermedad en cultivos establecidos se logra


mediante una fertilización oportuna y adecuada. En daños importantes es
necesario el uso de productos fungicidas.

Gotera u ojo de gallo, (Mycena citricolor).

Esta enfermedad es más frecuente en cafetales con exceso de sombrío y


cercanos a los arroyos y quebradas, donde el aire tiene mucha humedad.

Afecta las hojas, los frutos, las ramas y los tallos. En las hojas se presenta en
forma de manchas circulares o ligeramente ovaladas, a excepción de las
localizadas en la vena central, las cuales son alargadas. Inicialmente la
mancha es de color pardo, pero cuando envejece va tomando un color gris
cenizo, notándose una Iínea divisoria bien clara entre la parte sana y la parte
enferma del tejido de la hoja. En muchas ocasiones estas zonas, manchadas
se caen dejando agujeros en la hoja. Esta es una característica que la
diferencia de las otras manchas de la hoja.

Los ataques en la vena central, cerca del pecíolo, ocasionan caída prematura
de las hojas. La gotera también ataca los frutos, en todos sus estados de
desarrollo, manifestándose por unas manchas redondas, hundidas y de
diferentes tamaños. Con el avance de la enfermedad, el fruto va tomando un

166
color amarillento, volviéndose pardo al final del ataque. La gotera también
ataca el tallo y las ramas produciendo manchas hundidas de diferente forma.

Sobre las manchas de las hojas, los frutos, las ramas y los tallos, se pueden
distinguir pequeños hilos terminados en cabezuelas de color amarillo, que son
las semillitas del hongo.

Para combatir la enfermedad se recomienda ralear el sombrío para dar buena


luz y ventilación al cultivo o renovar el cafetal.

Fuente: Federación Nacional de Cafeteros, 1979


Figura 61. Ataque de ojo de gallo en hojas.

Mal rosado o brasa, (Corticium salmonicolor)

Los síntomas de la enfermedad se manifiestan en los tallos, las ramas tiernas y


leñosas, las hojas y los frutos, de plantas en producción.

Los árboles enfermos se destacan por presentar en sus ramas superiores hojas
de color amarillento y marchito, al inicio de la enfermedad. Posteriormente, las
hojas se van secando y corrugando, permaneciendo adheridas a las ramas que
dan la impresión de haber sido quemadas por el fuego. Las ramas atacadas, en
consecuencia, pueden aparecer completamente secas y sin hojas.

En ataques fuertes, la corteza de las ramas y tallos se agrieta y se forman


callos, que, al rodear completamente los sitios afectados, suspenden el paso
de nutrimentos y en consecuencia la rama se seca y se muere. Los ataques en
la copa de los cafetos ocasionan detención en el crecimiento y proliferación de
chupones.

En los frutos se observa inicialmente un amarillamiento prematuro; el


pedúnculo se seca y el ennegrecimiento avanza hasta cubrir totalmente el fruto,
dejándolo completamente seco y pegado a la rama. Las partes afectadas del
árbol se presentan cubiertas por finos hilitos blancos; luego se forman una
costra blanca que envuelve las partes afectadas. Finalmente, la costra se
vuelve de color rosado.

167
Para combatir la enfermedad, se recomienda la poda de las partes enfermas en
la época de verano. Si la enfermedad ha alcanzado al tallo principal, se debe
saquear a partir del tejido sano. Los tejidos enfermos se deben retirar de la
plantación con el objeto de reducir la propagación de la enfermedad.

168
5.3. Lección 24. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
chachafruto.

El chachafruto o balú es un árbol propio de los valles interandinos del norte de


Suramérica, recibe nombres variados en cada país, y aún en las diferentes
regiones de varios países.

En Colombia recibe los nombres de balú, frisol, balú, sachafruto y chaporuto,


los cuales varían dependiendo de cada región en particular.

Se cultiva especialmente para la alimentación, ya que se obtiene un fríjol


gigante, de 2 a 7 cm de largo, 1,5 a 3 cm de ancho y 3 cm de grueso, con un
contenido de 23% de proteína.

Además del consumo de la semilla, del chachafruto se aprovecha igualmente


las hojas y las ramas para alimentación animal como forraje.

5.3.1. Taxonomía y morfología

Desde el punto de vista taxonómico el chachafruto se encuentra clasificado en


la subfamilia Papilionoideae, familia Leguminosae, género Eritrina, y especie
edulis, siendo su nombre científico Erythrina edulis.

El chachafruto o balú es un árbol con una altura promedio de 8 metros y un


diámetro de tronco de 24 centímetros. Puede alcanzar hasta 14 metros y un
diámetro de copa de hasta siete metros.

La planta presenta un sistema de raíces prominente con una raíz principal bien
desarrollada. Junto a esta emergen numerosas raicillas segundarias que le
sirven de órgano de absorción de agua y nutrientes. Como todas las
leguminosas el chachafruto presenta interacciones con bacterias formando
unas estructuras denominadas nódulos que le sirve para la toma de nitrógeno
del suelo.

El tallo principal es leñoso y al igual que las ramificaciones secundarias


presentan espinas a manera de aguijones cortos. El diámetro del fuste es de
unos 24 cm, pero puede alcanzar diámetros de 37 cm en árboles adultos de
unos 25 años y hasta 47 cm en árboles de 40 años.

La filotaxia (distribución de las hojas) es alterna y con las hojas


pinadotrifoliadas, semicoriáceas con espinas no suberizadas en hojas maduras;
los pecíolos son largos, usualmente poseen también espinas. El color de las
hojas es verde claro y se caen en buena parte cuando esta iniciando la
floración.

El foliolo central de la hoja posee un área foliar más grandes que los foliolos
laterales de los cuales uno generalmente es un poco más grande que el otro.

169
Por su floración periódica copiosa que se ve favorecida en aquellos árboles que
están expuestos a plena exposición solar, el árbol es de gran valor estético y se
valora como ornamental.

Tomado de Internet
Figura 62. Planta de chachafruto

Las flores son de tonalidad rojo carmín y están agrupadas en inflorescencias


definidas tipo racimo de hasta 45 cm de longitud. La tendencia de estos
racimos es a ser caulinares, por cuanto se les ve en ramúsculas, en ramas
gruesas y en el fuste y en la misma base del fuste o tronco. Una inflorescencia
tiene entre 180 y 200 flores con un pedicelo corto, organizadas en triadas
alrededor del eje floral.

Las flores son completas, típicas de la familia Papilionaceae, es decir


dialipétala, zigomorfa, pentámera con el plano de simetría anteroposterior y
prefoliación vexilar. Cada flor tiene un tamaño de 2.8 x 1.2 cm, sus cinco
pétalos están organizados así: el más grande es el estandarte, las 2 laterales
conforman las alas, y las inferiores que dan apariencia de uno solo, por ser
más o menos concrescentes conforman la quilla.

Los frutos de E. edulis son legumbres lampiñas, lateralmente curvadas, con


doble línea fisural: sutura dorsal y sutura ventral. La legumbre es cilíndrica. En
un mismo racimo se pueden encontrar legumbres maduras, siempre del mismo
diámetro 3.0 a 3.5 cm, pero de tamaños que oscilan entre: 55 cm con a 11
semillas, a 15 cm con 2 a 3 semillas; para un promedio de 32 cm de largo con 6
semillas.

La semilla del chachafruto es un fríjol gigante de configuración cóncava-


convexa, formada por 2 cotiledones de color blanco-verdoso, unidos por su

170
parte plana, de un tamaño de 3.5 a 7.0 cm de largo por unos 2.0 o 3.0 cm de
diámetro.

Fuente: Acero Duarte Luis. 2002


Figura 63. Semilla de chachafruto

La testa según el proceso de maduración va de un rosado hasta un tono


marrón o colorado oscuro. Se han observado morfotipos con semillas
convexoplano y de cubierta seminal negra.

5.3.2. Requerimientos agroecológicos

Erythrina edulis es un árbol que crece a libre exposición y acepta sombra en


los primeros estados de su desarrollo.

Es una especie que se encuentra en forma natural y cultivada en la cordillera


de los Andes: no se le ve creciendo en el bosque climax sino que es pionera y
colonizadora en aquellos sitios en que la selva subandina ha sido derribada.
Este comportamiento se ve reflejado en uno de los nombres quechuas que
recibe en el Perú "antiporoto" que quiere decir fríjol de borde o ceja de la selva.

El chachafruto crece mejor asociado con otros árboles.

Se desarrolla bien en suelos de textura suelta franco-arenosa y en suelos


pesados con drenaje suficiente. Los suelos muy ácidos, pH 4.5, demeritan su
desarrollo. Se establece muy bien en valores de pH entre 5.0 y 7.0, en suelos
muy ácidos es necesario aplicar cal antes de la siembra para favorecer el
establecimiento adecuado de la planta.

Aunque la planta tiene cierta tolerancia a encharcamientos temporales es


necesario realizar sistemas de drenaje en los terrenos para evacuar el exceso
de agua presente.

171
Con relación a los requerimientos hídricos es exigente en agua, requiere de
valores de precipitación de 1.500 a 2.000 mm de lluvia al año, bien distribuidos.
En zonas más secas requiere riego al menos en los primeros diez meses de su
establecimiento, después, resiste, aunque el desarrollo es lento.

Esta especie crece bien y entra en producción de frutos en zonas de clima


medio y medio-frío que van desde los 1.400 a los 2.400 metros sobre el nivel
del mar.

5.3.3. Labores culturales

Preparación del terreno

A pesar que la planta del chachafruto presenta un sistema radical rustico es


necesario ablandar bien el terreno en donde va a establecerse. Se debe dejar
el terreno bien mullido y suelto.

Es importante en terrenos pesados realizar drenajes que eviten los


encharcamientos, porque la planta puede manifestar problemas bajo
condiciones de excesos de agua permanentes.

En suelos muy ácidos la adecuación del terreno incluye realizar u n proceso de


encalamiento previo a la siembra.

Propagación

El chachafruto se puede reproducir por tres formas: semilla, estacas y acodos


aéreos.

Por semilla: La seleccionada para sembrar debe ser de buen tamaño, sana y
colectada directamente del árbol, su siembra debe ser en la misma semana de
su colección y antes de llevarla a la bolsa de siembra se debe conservar dentro
del fruto o vaina para que no se deshidrate.

Se recomienda la siembra de la semilla en bolsa de polietileno de 25 x 14


centímetros; la posición de siembra de la semilla debe ser con su dorso o
espalda hacia arriba y su ombligo o parte cóncava hacia abajo.

La siembra debe ser superficial de tal forma que el dorso de la semilla quede
casi a la vista

La germinación de la semilla se inicia a los 11 días de su siembra en la bolsa.


A los 60 días de haber sembrado la semilla, se tiene en vivero una plántula de
40 centímetros de altura lista para llevar al campo.

172
Por estaca: La reproducción por ramas, estacas o esquejes se recomienda con
base en las ramas de la parte media de la copa.

Se deben cortar estacas de 1 ó 1.20 metros de altura y de 3 a 5 centímetros de


gruesas. El corte de la estaca en la base y en la punta debe ser sesgado u
oblicuo.

En la siembra, la estaca se debe enterrar unos 20 centímetros y la siembra


debe hacerse a más tardar a los 4 días siguientes a su colección.

Por acodo aéreo: Se trata de facilitar la generación de raíces en las ramas del
árbol. Para ello se seleccionan ramas con un grosor de 3 a 5 centímetros de
diámetro y 80 centímetros de longitud. Sin retirar la rama del árbol, y con una
navaja se hace un corte en forma de anillo que llegando hasta la madera de la
rama, tenga un ancho de un centímetro.

Se cubre la incisión con paja o musgo húmedo y se coloca un pedazo de


plástico transparente, el cual se amarra en los extremos. Si se realiza el acodo
en época de verano, se hacen agujeros pequeños en el plástico para aplicar
riego.

Pasado un mes, se realizan dos cortes, uno por debajo del plástico y otro en la
punta de la rama, estos cortes deben ser oblicuos o sesgados. Al retirar el
plástico se observan las raíces generadas; en forma inmediata se procede a
sembrar la rama o acodo en el sitio definitivo.

Siembra

Se recomienda llevar a campo solamente árboles de chachafruto (en bolsa)


que tengan mínimo 35 centímetros de altura. Para la siembra se hacen hoyos
de 30 x 30 x 30 centímetros. Al suelo se le puede adicionar gallinaza o cereza
de café bien descompuesta. Si el suelo es ácido, se le debe agregar una fuente
de calcio.

Una vez retirada la bolsa y sembrado el arbolito, es importante colocarle a los


lados 2 estacas de 50 centímetros de longitud para que en las futuras limpias
de la finca los trabajadores puedan ubicar la plántula y no la corten.

En las zonas de clima medio de nuestro país un árbol de chachafruto alcanza a


los 8 meses de sembrado una altura de 1.35 metros; a los 13 meses 2.25
metros y a los 25 meses 3.20 metros .

En chachafruto puede sembrarse en asocio con otros cultivos, en cercas vivas


o como cultivo denso, dirigido a producir forraje para alimentación de ganado
en establo.

Manejo de la planta en cultivo asociado

173
El chachafruto se puede cultivar asociado con café, lulo (naranjilla), dejando
una distancia de 8 metros entre árboles de chachafruto y 2 metros entre
plantas de lulo o de café.

Otra asociación puede ser chachafruto con bore; en este caso, el bore produce
hoja como forraje para ganadería en establo. El distanciamiento entre plantas
de bore es de un metro y entre chachafruto es de 8 metros.

La modalidad de cultivo asociado permite un rendimiento intensivo del suelo y


disminuye los efectos nocivos de plagas y enfermedades.

Manejo de la planta como cerca viva

Los árboles de chachafruto a utilizar como cerca viva pueden ser obtenidos de
semilla, de estacas o de acodo aéreo; por su mejor enraizamiento y mayor vida
productiva útil, se recomiendan los obtenidos por semilla.

La distancia de siembra es de 2 metros, y se recomienda ubicarlos inicialmente


en medio de dos postes que sostienen las cuerdas de alambre de la cerca.

El ahoyado para la siembra de las plántulas se debe hacer 15 centímetros por


dentro de la línea de cerca, adicionando 500 gramos de gallinaza a la tierra del
hoyo. El hoyo debe ser de 30 x 30 x 30 centímetros.

Para evitar la competencia y el entrecruzamiento de copas, es aconsejable


intercalar así: un árbol a libre crecimiento para producción de fruto, el siguiente
se mantendrá podado a 1.0 metros de altura para producción de forraje (hoja) y
así sucesivamente a lo largo de la cerca viva.

El grapado del alambre de púa a los árboles se debe hacer cuando estos
tengan tres años de edad.

Manejo de la planta como banco de proteína

El chachafruto puede cultivarse en forma densa a una distancia de 50


centímetros entre árboles y 1 metro entre líneas. Esta forma de siembra se
llama banco protéico y está destinada a producir forraje (hojas y rama) para
alimentación de vacas, cabras, caballos, cerdos, pollos, gallinas y conejos.

A cada hoyo en el momento de la siembra se le debe adicionar 700 gramos de


gallinaza y una puñada de cal dolomítica (cal agrícola), si el suelo es ácido.

Con el distanciamiento de siembra ya propuesto se alcanzan densidades de


17.000 plantas por hectárea.

174
A los 18 meses de siembra, se inicia el proceso de podas para producción de
forraje; esta poda se debe realizar cada 4 meses; es decir; se realizan 3 podas
al año.

La primera poda a los árboles, es una poda de copa y se hace a 1.40 metros
de altura, el corte se debe realizar con un serrucho o un machete bien afilado;
en las siguientes podas, se cortan sólo los rebrotes tiernos con tijeras
podadoras.

Las hojas se pueden secar y moler para obtener una harina que siendo rica en
carotenos le da un mejor color a la piel y huevos de las aves que la consumen.

Cosecha

El chachafruto empieza a producir frutos a los 27 meses de edad, la producción


promedio a esta edad es de 27 kilos por árbol por año.

En un cultivo de árboles a libre crecimiento con 156 árboles por hectárea


sembrados a 8 x 8 metros de distancia, se tiene en esta primera cosecha, una
producción de 4.2 toneladas por hectárea por año.

En árboles de más de 10 años de edad la producción promedio por árbol por


año es de 170 kilos de fruto. Si se tiene una hectárea de cultivo con árboles
sembrados a 8 x 8 metros de distancia se tiene una producción anual de 26.5
toneladas por año. De este total de fruto la mitad del peso corresponde a
semilla y la otra mitad es cáscara de fruto.

En general ocurren dos cosechas anuales que coinciden con los periodos de
lluvia, sin embargo, cuando en las fincas hay más de 30 árboles siempre y en
cualquier época del año se encontrarán algunos frutos para cosechar.

Se han observado árboles de chachafruto de 40 años de edad que todavía


están en plena producción.

Se recomienda recoger los frutos directamente del árbol utilizando


desjarretaderas. En lo posible no se deben recoger frutos del suelo porque
estos son atacados por gusanos y hongos.

Poscosecha

Se prefieren días soleados para cosechar los frutos, hay que evitar los días
lluviosos pues la humedad favorece el ataque de hongos y la pudrición
temprana de los frutos.

La semilla para consumo humano se puede conservar al medio ambiente y


entre la vaina o cáscara por unos 8 días sin que los frutos se dañen. En nevera
los frutos se conservan 15 días.

175
Por su alto contenido de humedad, los frutos deben ir en empaques bien
aireados o en canastillas plásticas.

Hay que seleccionar bien los frutos, empacar siempre frutos frescos y sanos.
Nunca empacarlos si están picados, con gusanos o con hongos.

Del chachafruto se pueden aprovechar las hojas, la cáscara del fruto y las
semillas, destinando sus ventajas en la alimentación animal mediante forrajes y
en la alimentación humana con el aprovechamiento de los granos.

176
5.4. Lección 25. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del
chachafruto y su control.

5.4.1. Arvenses

Tanto para monocultivo, cultivo asociado o en banco de proteína es importante


en los dos primeros años realizar los plateos o limpias cada 3 meses, con el
objeto de eliminar la competencia por luz, agua y espacio que se presenta por
acción de las plantas arvenses.

Una vez la planta aumenta su área foliar el efecto adverso de las plantas
malezas disminuye por el proceso de sombra de las ramas del chachafruto que
evita el desarrollo de las diferentes arvenses.

En monocultivo y después de los primeros años de desarrollo de las plantas, el


control de malezas se limita a la zona del plato. Las calles se pueden manejar
con herbicidas o con cultivos de cobertura.

El control de malezas se efectúa comúnmente en forma manual realizándose


de dos a tres desyerbas en el cultivo por año. La primera desyerba se hace a
los 30 días después de la siembra, la segunda entre los 60 a 70 días y la
tercera a los 90 días.

La planta del chachafruto es altamente competitiva con relación a desarrollo y


crecimiento sobre otras plantas en todas sus etapas de vida, a excepción de
los primeros estados de vida en donde se ve fuertemente afectada por la
acción de otras plantas dentro del cultivo diferentes a las de su especie.

5.4.2. Plagas

Las plantas del chachafruto presentan ciertas características de rusticidad que


permiten que el daño de plagas y enfermedades no sea de importancia
económica.

Cuando se encuentra especialmente en asocio con otras especies se ha


comprobado que el daño sobre la planta por insectos y patógenos es mínimo.

A continuación se expresan algunos individuos que representan importancia


por su daño y efecto sobre la producción.

Lorito verde (Empoasca sp)

Es uno de los insectos de presencia más común en el cultivo del chachafruto.

Las hembras de este insecto ovipositan introduciendo los huevos en el tejido de


la hoja, las venas, pecíolos o tallos de la planta afectada. La ninfa recién salida

177
es color blanco pálido; luego pasa a amarillo pálido y finalmente al verde de los
adultos; atraviesa por cinco instares ninfales tardando alrededor de 13 días; las
ninfas se alimentan en el envés de las hojas cerca de las venas.

Los adultos miden entre 3,0 y 3,5 mm de largo y son delgados de color verde y
alas transparentes más largas que el cuerpo. Los loritos verdes son más
abundantes en las épocas de fuerte sequía. El daño consiste en un
enrollamiento de la punta de las hojas y amarillamiento de éstas, debido a la
succión de la savia. Estos insectos son de suma importancia debido a que se
ha demostrado que son vectores potenciales de muchas enfermedades virosas
a las plantas.

El control del lorito verde se logra mediante diferentes sistema como el cultural
(empleo de variedades resistentes); biológico con parasitoides (Anagrus sp) y
algunos depredadores; y químico con productos de tipo sistémico.

Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997


Figura 64. Adulto de Empoasca sp

Ácaros (Tetranychus sp.)

Los huevos de esta arañita son depositados individualmente tanto en el haz


como el envés de las hojas. Son esféricos perlados, brillantes, muy pequeños,
con un medida promedio de 0.15 mm. Las ninfas son de color amarillo con dos
manchas negras sobre el dorso. Los adultos son de color amarillo pálido o
verde claro con manchas negras a cada lado del cuerpo. La hembra es
ligeramente más grande que el macho tiene una longitud de 0,35 mm y un
ancho de 0.20 mm. El macho tiene el abdomen más delgado que el de la
hembra.

En el envés de las hojas se localizan las colonias de arañitas rojas. Como


consecuencia de su ataque las hojas toman una coloración amarillo rojiza y sus
bordes se doblan hacia abajo. Llegan a alcanzar importancia económica en
épocas de verano.

El daño se manifiesta en forma de pecas amarillas sobre el haz de la hoja,


como secuencia de los puntos donde la arañita succiona la savia.

178
Para el control de la arañita se debe revisar periódicamente el follaje por el
envés especialmente en épocas secas y realizar aplicaciones de productos
acaricias. Igualmente se han determinado especies de ácaros que actúan
como controladotes de estas especies.

Áfidos o pulgones (Aphis tabae, Myzus persicae)

Los áfidos son insectos chupadores que viven en colonias muy numerosas,
sobre los cogollos de la planta. Su importancia radica no sólo por el daño que
producen al succionar la savia, sino por la transmisión de virus al chupar una
planta enferma y luego trasladarse a una sana.

El daño de estos insectos se caracteriza porque las hojas se amarillan y


corrugan, disminuyéndose los rendimientos.

Los pulgones tienen un buen número de enemigos naturales entre insectos


parásitos (Aphidius testaceipes) y predatores (Chrysopa sp), además de
algunos patógenos (Vertticillium lecanii), que disminuyen sus poblaciones; sin
embargo, muchas veces estos organismos son incapaces de mantenerlos bajo
control, por lo cual se requiere el uso de insecticidas sistémicos.

Gusano trozador, (Spodoptera sp.)

El daño es caudado por las larvas que afectan especialmente las plantas en los
primeros estados de desarrollo de las mismas.

Los adultos son unas mariposas de color café oscuro. Éstas presentan vida
nocturna viéndosele aparecer en las primeras horas de la noche.

Este insecto afecta los tallos tiernos y el sistema foliar de la planta. En los
tallos actúa como trozador causando la muerte de las plántulas. Sobre las
hojas realiza cortes en el limbo al alimentarse del tejido foliar. En daños fuertes
puede causar pérdida de toda el área de hojas de las plantas.

Una medida de control sobre este insecto es mediante una buena preparación
del terreno. Se ha demostrado que existen insectos depredadores y patógenos
que afectan el desarrollo de estos individuos.

179
Fuente: Federación Nacional de Algodoneros, 1990
Figura 65. Daño de larva de Spodoptera sp.

Cucarroncitos de las hojas (Epitrix cucumeris)

Son pequeños cucarrones de colores oscuros o claros y brillantes que poseen


los fémures de las patas posteriores amplios que les permite saltar ágilmente
cuando se les moleta.

Los adultos comen las hojas haciendo muchos agujeros redondos, en daños
severos puede causar la caída de las hojas y retardar el crecimiento.

Las siguientes son las formas de control que se pueden llegar a utilizar para el
manejo del insecto:

Control biológico: parasitoides (Microctonus epitricis), depredadores


(Peucetia viridans) y entopatógenos (entomophthora sp).

Control cultural: limpieza de los cultivos, eliminación de malezas, siembra de


variedades tolerantes al ataque del insecto, eliminación de hospedantes.

Otros métodos de control: El uso de productos químicos fosforados han


mostrado buenos resultados para el control de este insecto.

180
Fuente: Vélez Ángel Raúl, 1997
Figura 66. Adultos de Epitrix cucumeris

5.4.3. Enfermedades

Roya (Uromyces sp.)

En el envés de las hojas aparecen manchas cloróticas, donde más tarde se


encuentran pústulas color rojo ladrillo, conteniendo un polvo pardo oscuro, que
son llevadas por el viento a grandes distancias, propagándose aún más la
enfermedad.

La roya igualmente puede desarrollarse sobre los pedúnculos y tallos, donde


aparecen grietas longitudinales, causando el secamiento de muchas hojas y
finalmente la muerte de la planta.

Tomado de Internet
Figura 67. Presencia de roya en hoja.

Para prevenir la enfermedad se debe sembrar variedades resistentes. En caso


necesario, tan pronto se noten los primeros síntomas de la enfermedad se
puede aplicar productos químicos.

181
Antracnois (Colletotrichum lindemuthianum)

Este hongo ataca toda la planta: hojas, vainas, semillas y tallos. Se transmite
por la semilla.

En las hojas aparecen manchas color café oscuro y en tiempo húmedo


muestran una coloración rosada en sus bordes. En el haz de las hojas se
observan manchas con anillos concéntricos. Las manchas son más típicas en
las vainas y se presentan hundidas y con una coloración gris en su centro y un
ligero halo rosado. En ataques serios el hongo alcanza a destruir todas las
semillas, tanto que los rendimientos de la cosecha son prácticamente nulos. En
tallos causa chancros color rojo oscuro.

El hongo es favorecido por alta humedad relativa y una temperatura de 17°C.

La presencia de la enfermedad se puede eliminar o disminuir mediante el uso


de estrategias como: utilización de semillas de variedades resistentes, hacer
rotación y asocio de cultivos por 2 ó 3 años, desinfectar la semilla antes de la
siembra y hacer aspersiones preventivas con productos químicos.

Mosaico común (virus CBMV).

Los síntomas de este virus se caracterizan por un amarillamiento de las venas,


moteado de las hojas y deformación de las mismas (pequeñas), distorsión de
pecíolos y vainas y enanismo o muerte prematura de las plantas. Si la planta
llega hasta la etapa de producción, las vainas generalmente son de menor
tamaño y granos malformados, arrugados y pequeños.

Se transmite por las semillas, mecánicamente o por insectos (áfidos). Los


síntomas que son sistémicos son favorecidos por temperaturas entre 20-25°C.

El único método de control es el uso de variedades resistentes. Además,


combatir los insectos chupadores y eliminar las plantas enfermas.

Nematodo del nudo radical (Meloidogyne sp)

Estos son gusanos microscópicos causantes de síntomas externos en las


plantas que se manifiestan por clorosis, raquitismo, quemazones en los bordes
de las hojas y marchitamiento principalmente en horas de intenso calor. Al
descubrir el sistema radical se observan agallas o nudosidades producidas por
pequeñas lombrices que varían en forma y tamaño y pueden estar situadas en
las raíces primarias y secundarias.

En ataques severos se presenta disminución, acortamiento y engrosamiento de


raíces. Las agallas no se pueden desprender fácilmente sin romper las raíces,
lo cual permite diferenciarlas de los nódulos formados por las bacterias

182
fijadoras de nitrógeno. Las agallas forman parte integral de la raíz y los nódulos
son laterales, redondos y de un color blanquecino.

El uso de variedades resistentes es la medida de control más efectiva. También


la rotación de cultivos puede disminuir las poblaciones de nemátodos. La
utilización de productos químicos resulta dispendiosa y costosa debido a la
dificultad que se tiene en hacer llegar el ingrediente activo hasta el individuo.

183
5.5. Lección 26. Aspectos botánicos, labores culturales y características
del cultivo de la higuerilla.

La higuerilla es una planta anual en el caso de las variedades mejoradas que


actualmente se utilizan en los cultivos comerciales extensos.

El grano o semilla, que constituye la parte útil de la planta, es de diferentes


tamaños, de acuerdo con la variedad sembrada. Si bien los de mayor tamaño
son los que contienen más cantidad de aceite, en la escogencia de variedad a
sembrar se debe tener en cuenta, no tanto el tamaño del grano, ni su contenido
de aceite, sino el mayor rendimiento en materia grasa por hectárea, ya que en
el mercado internacional del aceite de higuerilla su precio se rige por el mayor o
menor contenido de materia grasa de la semilla.

La higuerilla es originaria probablemente de Etiopía. El aceite de ricino es uno


de los productos comerciales más antiguos que se conocen, siendo utilizado
por los egipcios hace más de 4.000 años.

5.5.1. Taxonomía y botánica

La higuerilla pertenece al orden Euphorbiales, familia Euphorbiaceae, género


Ricinos y especie communis, siendo su nombre taxonómico Ricinos communis.

Según la altura de la planta existen tres variedades: altas, medianas y enanas.


Las variedades altas son plantas criollas que se dan en las cercas y solares de
las casas, su altura es de 2.50 m. En las variedades medianas la altura va de 2
a 2.5 m y se cosecha a los 150 días. Las higuerillas de porte enano crecen
hasta una altura de 1.6 m., con un período vegetativo de 120 días y una
maduración uniforme.

La higuerilla se desarrolla como cultivo anual y como planta leñosa en las


diferentes regiones tropicales.

El sistema radicular de la planta es bien desarrollado pudiendo alcanzar hasta


1.50 m de profundidad, la raíz es pivotante; posee un gran número de raíces
secundarias las cuales son fasciculadas.

El tallo es de forma cilíndrica y hueco en su interior, de crecimiento erguido,


con formación definida de nudos y entrenudos, ramificación simpódica. El tallo
principal termina en la primera inflorescencia por debajo de esta se desarrollan
dos o tres ramas que continúan con el crecimiento. El color varia de verde a
morado, pasando por el rojo en sus distintas coloraciones; el tallo puede o no
tener una cera que lo recubre llamada cerosina.

Las hojas son alternas, palmeadas con tres a once lóbulos, glabras; lóbulos
lanceolados y de margen aserrado; pecíolos de tamaño variable e insertos en

184
la mitad de la hoja y del mismo color del tallo; glándulas nectaríferas a todo lo
largo del pecíolo.

Las flores están agrupadas en una panícula terminal, bisexual, las flores
femeninas están localizadas en la parte superior de la inflorescencia y las
masculinas en la parte inferior. Las inflorescencias generalmente tienen de un
30 a un 50% de flores femeninas y de un 50 a un 70% de flores masculinas.

EI fruto es una cápsula globosa y espinosa compuesta por 3 lóculos, las


cápsulas pueden ser dehiscentes, es decir que cuando están secas se abren
solas o indehiscentes cuando no se abren.

El tamaño de la semilla varía, como también la forma. El contenido de aceite va


de 33 a 58%. La semilla que es dicotiledónea con endosperma, tiene en su
extremo una estructura esponjosa, la carúncula, que es un crecimiento en la
envoltura externa. El embrión consta de dos cotiledones con nervaduras con
espinas, un hipocotilo corto, una plúmula diminuta y una corta radícula.

Las semillas además poseen propiedades altamente tóxicas debido a la ricina


que está presente y que es una proteína de las clases de las albúminas.

5.5.2. Condiciones agroecológicas

Las regiones más apropiadas para el cultivo de la higuerilla son las de clima
caliente y seco.

La producción se realiza bien desde pocos metros hasta 1.500 metros de altura
sobre el nivel del mar.

Las mejores temperaturas medias están entre los 22 y los 27°C, aunque se
produce a más altas o bajas temperaturas.

Las lluvias deben coincidir con el período de desarrollo de la planta y la época


seca con la etapa de maduración de los racimos.

El desarrollo normal de las plantas se consigue con climas calientes y secos y


con precipitaciones de 700 a 1.200 mm anuales y baja humedad relativa.

En las variedades mejoradas, se consideran precipitaciones ideales de 35 a


100 mm mensuales, durante el período de crecimiento.

Con relación al factor edáfico el cultivo de la higuerilla no es muy exigente en


cuanto al tipo de suelos, crece mejor en suelos de origen aluvial, con buen
contenido de cal y buena capacidad de retención de agua. Se desarrolla mejor
en suelos de textura media y bien drenados así como fértiles y que no se
inunden. Los suelos franco-arenosos, franco-limosos y franco-arcillosos, son
los apropiados para el establecimiento del cultivo. No importa la alcalinidad del
suelo pero prospera bien en suelos ligeramente ácidos.

185
Las raíces de la higuerilla son muy sensibles al exceso de agua, por esta razón
se debe procurar sistemas de drenaje en el suelo que permitan el desalojo de
agua cuando los suelos tienden a inundarsen.

5.5.3. Labores del cultivo

Preparación de suelo

El sistema radicular de la higuerilla es profundo por lo tanto debe ararse no


menos de 20 cms. El terreno debe dejarse bien mullido empleando las
rastrilladas necesarias para adecuar el terreno y proporcionarle las condiciones
más favorables. En suelos con hard-pan o pie de arado es necesario subsolar a
la profundidad indicada para romperlo, a fin de que la penetración y desarrollo
de las raíces sea el mejor.

Siembra

El momento de la siembra debe realizarse cuando el terreno esté húmedo, y


que las lluvias coincidan con la etapa de crecimiento y con el periodo seco en
época de la cosecha.

Las distancias de siembra más utilizada en el cultivo de la higuerilla son de 1.2


a 2.0 metros entre surcos y de 1.50 a 1.00 m. entre plantas, con dichas
distancias caben 6.000.plantas por hectárea. La distancia cambia de acuerdo
con la variedad.

La siembra se realiza a mano o a máquina, en chorro continuo. Si ésta se


efectúa a mano, se colocan tres semillas por hoyo a una distancia de 70 a. 80
cms en cuadro. Los huecos hechos deben tener una profundidad de 5 cms,
dejando en cada uno tres granos debidamente seleccionados, y tapando luego
con suavidad.

Resiembra

La semilla debe germinar de los 8 a los 20 días como máximo, después de 20


días se revisa la plantación para resembrar las fallas; esto debe hacerse con
semilla remojada durante 12 horas.

Fertilización.

La higuerilla es exigente en elementos nutritivos, ya que extrae grandes


cantidades de nitrógeno fósforo y potasio, por lo cual es necesario mantener el
nivel de fertilidad uniforme. Las fertilizaciones demasiado altas en nitrógeno no
son recomendadas ya que estimulan el desarrollo excesivo del follaje. La

186
fórmula y dosis de la fertilización dependen del contenido de los diferentes
elementos presentes en el suelo

Aporque

Esta actividad se debe realizar durante la primera limpieza, esta labor ayuda a
mejorar el anclaje y buen desarrollo de la planta.

Raleo

Cuando las plantas tienen treinta días de germinadas es necesario entresacar


las plántulas eliminando las menos desarrolladas, de tal forma que queden
distanciadas a 70 cm entre plantas para variedades enanas y 1.5 m., entre
plantas para variedades medianas.

Riego.

Se hace cuando se presentan sequías largas, así se evita la caída de capsulas


en desarrollo, y por tanto los riesgos de pérdida son menores.

El riego se debe hacer en horas de la mañana, porque al hacerlo con


temperaturas altas, es posible, la caída de las cápsulas tiernas de la planta.

Los sistemas de riego más utilizados en el cultivo de la higuerilla son por


aspersión y por gravedad, siendo el primer método la forma más eficiente de
aprovechamiento del recurso hídrico.

Recolección y beneficio

A los 100 o 150 días de sembradas las semillas, los racimos están aptos para
cosechar, labor que se puede hacer manualmente o con máquinas. En el
primer caso se usan guantes de cuero para evitar las heridas que causan las
espinas de las cápsulas que con el sol se vuelven rígidas; en el segundo caso
se usa anticipadamente un defoliante, para facilitar la recolección de una sola
pasada.

Las cápsulas recogidas se pueden secar en patios de cemento expuestos al


sol, o en máquinas descascaradoras que rompen la cápsula con presión y con
ventiladores separan la cáscara de la semilla.

La higuerilla no se puede cosechar húmeda, en caso de hacerla, es necesario


secarla antes de almacenarla o de descascararla.

La higuerilla tiene un rendimiento de 1.000 a 3.500 kg/Ha., de acuerdo con la


variedad utilizada, prácticas de cultivo, suelo, maquinaria y manejo.

187
5.5.4. Manejo fitosanitario

Plagas.

Gusanos tierreros o trozadores. Estos insectos realizan el daño grave en la


primera semana de desarrollo de la planta, roen los tallitos, ocasionando su
muerte y merma de productividad.

Chinche de encaje (Corythuca gossypii). Los adultos y las ninfas infestan el


envéz de las hojas, invaden preferencialmente el sitio de unión del pecíolo,
ocasionando la muerte del tejido. Es la plaga quizá más importante de la
higuerilla. Pueden atacar en forma simultánea con la arañita roja, entonces se
deben hacer mezclas de acaricidas e insecticidas.

Comedores de Hojas. Se presenta en forma leve el gusano tigre (Prodenia


sp), falso medidor (Trichoplusia sp) y gusano ejercito (Spodoptera, sp). El daño
es causado por la larva al masticar él follaje.

Araña roja (Tetranychus sp). En algunas ocasiones ataca severamente al


cultivo, incluyendo las malezas; invade el envés de las hojas, suspendiendo la
fotosíntesis dando un color blancuzco. Destruye los racimos y los brotes
tiernos; los hilos se entrecruzan de una planta a otra formando toldillos; las
hojas se arrugan y secan, se presenta defoliación severa.

Pulguillas (Epitrix sp). El daño más importante ocurre en la primera semana


de desarrollo de la planta. El daño lo realizan los adultos actuando como
comedores de follaje dejando sobre la superficie foliar orificios pequeños y
redondeados.

Enfermedades

Moho gris (Botrytis sp). Ataca al racimo aún en flor, vaneándolo, ramas
tiernas y hojas. Las partes atacadas toman una coloración gris amarillento, que
se torna gris aceitoso. La presencia de la enfermedad es común en inviernos
fuertes, alta humedad, alta temperatura y en plantaciones poco distanciadas o
mal raleadas.

Cercospora. El hongo causante de esta enfermedad ataca hojas y plantas


adultas. Se presenta como manchas redondas, negras rodeadas de un halo
verde pálido; las manchas son visibles en el haz y en el envéz de las hojas. La
hurnedad excesiva es un factor que aumenta su presencia.

188
Bacteriosis (Xanthomonas sp). Los síntomas aparecen en Ios ápices de las
hojas, rara vez sobre los pecíolos, en forma de manchas redondeadas con
diámetro de 5 mm, que al principio son húmedas y de color verde pálido; en
forma más avanzada ennegrece. Estas lesiones están cubiertas por una
película más o menos viscosa y se encuentra en ambas caras de las hojas. Un
ataque muy grave ocasiona defoliación prematura de las hojas y pérdida de
cosecha.

Marchitez (Fusarium oxisporum). Es la infección común en el cuello o en la


raíz. La planta se va marchitando lentamente hasta que muere debido a que la
enfermedad es de característica sistémica. Se aconseja eliminar y sacar fuera
las plantas enfermas y no sembrar por un año en el mismo terreno.

ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS

Investigue cuales son las especies utilizadas como sombrío en el cultivo del
café. Cuales son las distancias utilizadas para cada especie.

Investigue cuál es el manejo agronómico realizado en el chachafruto cuando se


utiliza esta especie como banco de proteína.

AUTOEVALUACIÓN

● Indique las características morfológicas de la planta del café.

● ¿Cuáles son los requerimientos agroecológicos del cultivo del café?

● ¿Cuál es el objetivo de realizar el almacigo en el cultivo del café?

● ¿Cuáles son los pasos en el proceso del beneficio del café?

● ¿Cuáles son las características de la roya en el café?

● ¿Cuáles son las características de la broca en el café?

● Indique las características morfológicas de la planta de chachafruto.

● ¿Cuáles son los requerimientos agroecológicos del cultivo del chachafruto?

● Indique las características de una plaga presente en el cultivo del


chachafruto.

189
• ¿Cuáles son los requerimientos agroecológicos del cultivo de la higuerilla?

• ¿En qué consiste el proceso del raleo en el cultivo de la higuerilla?

190
CAPÍTULO 6. OTROS CULTIVOS

Además de los cultivos ya expuestos en este módulo, son muchas las


posibilidades de producción agrícola que se pueden aprovechar en las zonas
que expresan condiciones de clima medio.

Las bondades de las características agroecológicas presentes en el clima


medio permiten que las posibilidades y opciones de producción sean ilimitadas.
Son muchos los proyectos productivos de producción agrícola que se han
iniciado y que han generado renglones productivos eficientes desde el punto de
vista de rentabilidad y sostenibilidad alimentaria.

El cultivo del maní y del estropajo se han convertido en una posibilidad de


producción en las diferentes zonas que hacen parte del clima medio
colombiano, gracias a la versatilidad en la alimentación y a las posibilidades de
industrialización que presentan.

Estas dos especies se han venido cultivando a través de la historia de las


comunidades campesinas, pero desde un punto de vista de autoconsumo y pan
coger. Solo hasta los últimos años se ha despertado el interés por su
producción agrícola productiva y rentable.

El maní constituye una fuente adecuada para la alimentación de las


comunidades. El estropajo por su parte, se convierte en una posibilidad de
procesamiento de la producción para adicionar un valor agregado al producto
final y que se vea reflejado en mayores ingresos para el productor.

En el presente capítulo se conocerán las características más importantes y las


condiciones de manejo agronómico realizado en los cultivos de maní y
estropajo.

OBJETIVOS

Conocer y entender las características generales de los cultivos del maní y el


estropajo.

Identificar las condiciones de manejo agronómico de los cultivos del maní y el


estropajo.

Conocer las problemas fitosanitarios presentes en los cultivos de maní y


estropajo.

Entender los procesos realizados en los sistemas productivos que permiten


obtener producciones óptimas en los cultivos de maní y estropajo.

191
6.1. Lección 27. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
maní.

El cacahuate o maní es otra fuente importante de aceite vegetal y proteína. Es


una planta originaria de América del sur, y de allí se distribuyó a los países del
Lejano Oriente, África y Europa.

La planta se utiliza en forma integral. Su follaje se utiliza como forraje fresco o


ensilado. Las semillas se comen crudas, cocidas, tostadas o en gran variedad
de formas. Con un contenido de aceite de 40 % y proteína de excelente
calidad para la alimentación humana, el maní tiene un rendimiento en grano
tres veces mayor que el del ajonjolí.

6.6.1. Morfología y taxonomía

El maní pertenece a la familia Leguminosa, subfamilia Papilionidae y género


Arachis. La especie cultivada es denominada Arachis hipógaea. Esta
comprende dos grupos de principales de variedades erectas y rastreras. Casi
todas las variedades comerciales son de porte erecto.

El sistema de ramificación difiere según las variedades, no sólo en lo que se


refiere a la frecuencia de las ramificaciones, sino también por el hecho de que
las disposiciones relativas de las ramillas vegetativas y de las ramillas
reproductoras siguen esquemas diferentes que constituyen el carácter de
clasificación más importante.

Las plantas están formadas por una raíz principal pivotante que origina un gran
número de raíces secundarias. Estas a su vez producen raicillas absorbentes
que forman una densa red. Al igual que en las demás plantas leguminosas, en
las raíces del maní se originan nódulos por la presencia de bacterias
nitrificantes.

El tallo en la mayoría de las variedades comerciales de maní es erecto. Puede


alcanzar una altura de 15 a 70 cm. Produce ramas desde la base. Estas
pueden originar raíces cuando tocan el suelo. El tallo es ligeramente
pubescente. Son de sección angulosa en su juventud y se tornan cilíndricas al
envejecer; la médula central desaparece con el tiempo, y los tallos de cierta
edad son huecos.

Las hojas son pinnadas con dos pares de foliolos ovalados, obtusos o
ligeramente puntiagudos, con márgenes lisos, y de 4 a 8 cm de largo. Tienen
en la base del pecíolo dos hojuelas o estipulas angostas, alargadas y
puntiagudas.

Las inflorescencias del cacahuete se presentan como unas espigas de tres a


cinco flores.

192
Las flores se originan, agrupadas, en yemas axilares. Al principio éstas son
sésiles. La corola es de color amarillo brillante y de 0.9 a 1.4 cm de diámetro,
formada por un estandarte grande, frecuentemente con manchas moradas y
alas libres de la quilla, que es puntiaguda. Tiene nueve estambres alrededor
del ovario alargado. Comúnmente, las flores se autopolinizan.

1. Raíces 5. Fruto joven


2. Tallo 6. Fruto
3. Hojas 7. Semillas
4. Flores

Fuente: Sánchez Potes Alberto, 1999


Figura 68. Morfología del maní.

193
Después de la fecundación, la base del ovario se alarga para permitir la
aparición de un órgano, mal llamado ginóforo, que es, en realidad, una parte
del propio fruto y, en cuyo extremo, se desarrolla la vaina después de su
penetración en el suelo.

El ginóforo tiene una longitud que no suele rebasar los 15 cm, y posee una
estructura de tallo, pero desarrolla en su parte enterrada unas formaciones
semejantes a pelos absorbentes que le confieren una función de raíz.

Mientras el ginóforo se desarrolla verticalmente por efecto de un geotropismo


positivo, la vaina adquiere una posición horizontal, entre 2 y 7 cm bajo la
superficie del suelo.

La vaina está formada por una cubierta y de uno a cuatro granos. La cubierta o
pericarpio comprende un exocarpio esclerenquimatoso y un endocarpio
parenquimatoso. El exocarpio se escama en el transcurso de la maduración y
permite la aparición del tejido mecánico reticulado de la parte exterior del
mesocarpio. La estructura del mesocarpio es continua, salvo a lo largo de las
estructuras de las dos partes de la cubierta. A pesar de esta discontinuidad, la
cubierta es indehiscente.

Las semillas son de dimensiones, formas y colores diferentes según las


variedades. Su peso puede oscilar entre 0,2 y 2 g; su forma puede ser esférica,
elíptica o más o menos alargada, con una parte a menudo aplastada en la zona
de contacto con el grano vecino. El color del tegumento seminal puede ser
blanco, rosado, rojo, violáceo, negro o incluso rojo y blanco.

6.1.2. Condiciones agroecológicas

EI maní se desarrolla en climas cálidos. Es susceptible a las heladas. En


general, se cultiva en la franja comprendida entre los 40° de latitud norte y sur.

La temperatura promedio para su desarrollo se encuentra entre los 15 y los


30°C, aunque también le favorecen las de 25 a 30 °C.

Exige buena luminosidad ya que necesita de ésta para alcanzar su desarrollo


normal y propiciar un buen contenido de aceite en las semillas. Por ello, debe
evitarse en su cultivo la presencia de otras plantas que le produzcan sombra.

Las lluvias, a intervalos frecuentes, lo benefician en su ciclo vegetativo, pero


pueden dañarlo si se presentan al tiempo de la formación y maduración de las
vainas. Una precipitación de 300 a 500 mm, con lluvias bien distribuidas
durante su ciclo vegetativo, es suficiente para asegurar una buena cosecha.
Hasta el momento de la floración, a los 30 a 40 días, requiere humedad
moderada.

194
De la floración hasta la maduración inicial, a los 40 o 50 días, exige mayor
humedad. Durante el periodo final de maduración, 20 a 30 días, necesita muy
poca humedad. La recolección debe coincidir con tiempo seco.

Con relación a las condiciones edáficas debe procurarse que el suelo sea
suelto, preferentemente franco-arenoso, sin cascajo o piedras, y sin residuos
vegetales en la superficie. La profundidad deseable para el buen desarrollo de
las raíces y de los frutos es de 20 a 50 cm de suelo, y de 50 a 90 cm de
subsuelo bien drenado. Esto último, al igual que la topografía plana, es
importante pues el maní se afecta con los encharcamientos.

Un pH entre 5.8 y 6.2 es el más favorable. Este también es aconsejable para


otros cultivos como algodón, maíz, ajonjolí y sorgo, con los cuales puede
rotarse. El pH por debajo de 5.8 puede ser perjudicial para el establecimiento
de las bacterias nitrificantes. En este caso, hay necesidad de encalar el suelo,
pues el calcio es un elemento muy importante para la planta.

6.1.3. Labores del cultivo

Preparación del suelo

Para la preparación del terreno, se recomienda una aradura primaria profunda,


de aproximadamente 30 cm, y una secundaria, para dejar bien mullida la capa
superficial del suelo y facilitar la germinación de las semillas. En esta labor, es
muy importante eliminar las malezas y enterrar bien los residuos vegetales,
pues si quedan superficiales, pueden favorecerse enfermedades y, por lo tanto,
dificultarse la siembra.

Es conveniente nivelar el terreno para evitar encharcamientos; facilitar el


drenaje; favorecer una distribución uniforme del agua de riego, y obtener una
profundidad uniforme de siembra.

Siembra

El uso de una buena semilla es básico para lograr una alta población de
plantas y obtener una producción satisfactoria, Debe preferirse semilla
certificada que asegure pureza varietal, viabilidad y sanidad. Es más práctica la
siembra de semilla desgranada, preferentemente a mano, que la siembra de
semilla con cáscara.

La siembra debe realizarse al inicio de la época de lluvias, de tal manera que la


cosecha coincida con la época de sequía.

La profundidad de la siembra depende del tipo de suelo y de su contenido de


humedad. En suelos sueltos, se recomienda una profundidad de 4 a 7 cm, y en
suelos más pesados, de 3 a 5 cm. Las mayores profundidades corresponden a

195
suelos secos. Lo ideal es sembrar en suelos húmedos, pues así la semilla
germina más rápida y uniformemente.

La densidad de siembra difiere de acuerdo a las variedades y su hábito de


crecimiento. Para variedades de porte erecto pueden usarse dos semillas por
sitio, distanciadas de 30 a 40 cm, sembradas en surcos separados entre sí de
40 a 50 cm. En esta forma, se requieren entre 130 y 200 kg de semilla por
hectárea. Pueden usarse menores densidades, como una semilla por sitio cada
15 cm, en surcos separados 60 cm. En esta forma, se requieren 60 kg/ha y se
obtiene una población de plantas de 1 00 000 a 125 000 por hectárea.

Riego

Con un ciclo de lluvias de dos y medio a tres meses, generalmente no se


necesita riego, si la siembra se hace oportunamente. Si se presentan periodos
intermedios de 15 y más días de sequía, debe aplicarse agua suplementaria al
cultivo. El agua que se utilice no debe ser salina, ni tener en suspensión
materiales orgánicos. La pendiente debe ser uniforme para evitar erosión y
encharcamientos. Los surcos de riego, en suelos sueltos, no deben ser más
largos de 100 metros. Al tiempo de la maduración de los frutos, debe
suspenderse el riego.

Los sistemas de riego más recomendados para el cultivo del maní son por
aspersión y por gravedad (mediante la elaboración de surcos a través del
terreno).

Requerimientos nutricionales

El maní necesita una fertilización intensa y es conveniente sembrarlo en


rotación de dos años.

El uso muy intenso que esta planta hace durante su desarrollo de los nutrientes
existentes en el suelo, es una razón muy poderosa por la cual no conviene
explotar esta cosecha como monocultivo, esto es, cultivada un año tras otro en
una misma tierra.

Por la gran capacidad que tiene el maní para aprovechar los residuos de
fertilizantes aplicados a la cosecha anterior, se recomienda que este cultivo
siga a una cosecha que haya sido abonada intensamente, como las de maíz,
algodón, etc.

No obstante que la planta del maní es una leguminosa que posee una gran
capacidad para obtener el nitrógeno del aire, en la forma en que se cultiva esta
planta, agota casi siempre por completo todos los nutrientes que el suelo
posee.

196
Un aspecto muy importante de la planta del maní está en que es capaz de
absorber nutrientes en suelos poco dotados de ellos y puede empobrecerlos
más aún para otros cultivos

Las recomendaciones para las clases y cantidades de abonos que conviene


aplicar a los cultivos de maní son diversas en distintas regiones, pero se ha
estimado en que son muy convenientes los fertilizantes que contienen poco
nitrógeno, regular cantidad de fósforo y muy poco potasio.

Cosecha y beneficio

Para determinar la época de cosecha, se arrancan varias plantas por surcos


para observar si la mayor parte de las vainas están maduras. Las semillas
maduras deben ser de color rosado o rojo, deben haberse despegado
internamente de la vaina y su testa debe desprenderse fácilmente. Si se
obtiene 75 u 80% de frutos maduros, el cacahuate estará listo para su cosecha.
Esto coincide con el amarillamiento de las plantas.

La cosecha puede realizarse en forma manual, semimecanizada o mecanizada,


dependiendo de la superficie del cultivo. En la cosecha manual se arrancan las
plantas y agrupan en montones pequeños, alineados, para que el sol las
termine de secar. Luego, se separan los frutos y se someten a otro periodo de
secamiento al sol.

El arranque a mano sólo se justifica en cultivos pequeños, de tipo familiar. Es


laborioso y debe realizarse con cuidado, a fin de aprovechar todos los frutos
formados.

Para el desgrane y almacenamiento, la semilla de cacahuate debe tener un


porcentaje de humedad de 8 a 10%. El desgrane consiste en la rotura de las
cápsulas para separar las semillas. Esta labor se realiza mecánicamente.

El rendimiento promedio de producción es de 25 a 30% de cáscara, y de 70 a


75% de semilla. Puede haber diferencias de acuerdo a las variedades.

Si la semilla va a utilizarse para la siembra, debe almacenarse en bodegas con


adecuada ventilación, y previamente tratarse con insecticidas y fungicidas. Si el
periodo de almacenamiento va a ser largo, debe almacenarse con la cáscara,
pues así se conserva mejor y pierde menos rápidamente su viabilidad. Esta
puede durar hasta 2 años, en buenas condiciones de almacenamiento.

Si la semilla va a usarse en la industria de alimentos; para la obtención de


aceite y de pasta, no debe tratarse con insecticidas.

La extracción de aceite se realiza usando el método combinado de extracción


con expulsor y con disolventes, o el prensado continuo por medio de
expulsores.

197
6.2. Lección 28. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del maní y
su control.

El maní en sus estados iniciales de desarrollo es muy sensible a la presencia


de malezas, ya que éstas limitan su desarrollo y normal aprovechamiento de
recursos como luz, agua, espacio y nutrientes.

Por esta razón a los 20 o 30 días de haber sido establecido el cultivo de maní
se debe realizar el primer control de malezas, desarrollando preferiblemente
esta actividad a mano.

Después de las etapas iniciales de crecimiento de las plantas es necesario


llevar a cabo controles periódicos y permanentes que faciliten el normal
desarrollo del cultivo.

Una vez las plantas de maní ocupen espacio van colonizando y retrazan el
crecimiento de plantas ajenas que pueden convertirse en poblaciones
vegetales con características de malezas.

En lo posible debe evitarse el uso de productos químicos para el control de


malezas, porque las plantas de maní son muy sensibles al efecto de ciertos
herbicidas.

Las especies de mayor importancia desde el punto de vista de competencia


son aquellas que pertenecen a la familia de las gramíneas que demeritan y
retrazan del desarrollo de las plantas.

Existen otras clases de malezas de hoja ancha que también realizan un efecto
de competencia dentro de un cultivo de maní.

6.2.1. Enfermedades

Pudrición de las semillas y de las plántulas

Esta enfermedad es causada por varias especies de hongos del suelo como
Pythium sp. y Fusarium sp.

Los patógenos atacan principalmente las semillas deterioradas y las plántulas


cuya emergencia se demora, debido a siembras profundas, temperatura baja y
exceso de humedad.

En algunas ocasiones las plántulas emergen pero al poco tiempo mueren por el
daño sistémico causado por los hongos. En muy pocos casos las plantas
llegan a estado adulto.

La enfermedad puede prevenirse empleando semilla seleccionada y de buena


calidad. Otra forma de manejo consiste en tratar con fungicidas protectantes,
las unidades germinativas antes de la siembra.

198
Pudrición negra de la base del tallo.

Es también causada por hongos del suelo, que afectan el tallo en la zona del
cuello. El hongo Rhizoctonia sp esta relacionado con la presencia y
manifestación de esta enfermedad.

En ataques fuertes puede afectar tallos y frutos causando necrosamiento en los


tejidos de las plantas, llegando a disminuir considerablemente la producción.

Los daños iniciales de la enfermedad son amarillamientos progresivos en la


base del tallo. A medida que el daño aumenta estas manchas van tomando
características acuosas hasta causar la muerte del tejido.

Las condiciones secas y la alta temperatura del suelo favorecen la enfermedad.

Los factores de manejo para la enfermedad están relacionados con buenas


preparaciones del terreno; evitar el aporque del cultivo pues éste puede
provocar una mayor susceptibilidad de la planta a esta enfermedad por el
contenido de humedad; y garantizar el drenaje para evitar encharcamientos
que favorecen el desarrollo del patógeno.

Manchas foliares.

Dos especies de hongos ocasionan estas manchas.

En un caso son de color amarillo pálido y con el tiempo se tornan de color


marrón rojizo o negro en el envés de la hoja, y de color marrón claro en el haz.

Las manchas aparecen rodeadas por un halo amarillo, son pequeñas y


circulares. En otro caso, las manchas son de color marrón oscuro o negro en
ambos lados de la hoja, de tamaño más pequeño y no presentan halo.

El control de la enfermedad esta encaminado a utilizar variedades resistentes,


disminuir la humedad ambiental dentro del cultivo y a la eliminación de malezas
que favorecen las condiciones para que el patógeno se desarrolle.

Cuando las condiciones son favorables para el desarrollo de la enfermedad se


pueden realizar aspersiones con fungicidas protectantes.

Marchitez o tizón, Sclerotium sp.

El hongo invade los tejidos de la base del tallo, ocasionando su pudrición.


Corno consecuencia de ello, la planta se marchita y se seca. Cuando la
humedad del suelo es alta, se forman esclerocios pequeños, redondos, de
color crema, sobre la superficie de los tejidos invadidos. El exceso de humedad
en el suelo, favorece el desarrollo de la enfermedad.

199
El maní es vulnerable durante todo su período vegetativo. Generalmente, el
parásito ataca el cuello y después asciende por los tallos; éstos se necrosan en
sus bases, y las hojas se marchitan.

El cuello y las zonas invadidas por el parásito ostentan un micelio blanco en el


que aparecen pequeños esclerocios globulares, de 1 mm poco más o menos,
blanquecinos en estado joven y más tarde pardo rojizos.

El ataque a los ginóforos es la forma más perniciosa de la enfermedad, pues


provoca su rompimiento durante el arranque, de modo que los frutos quedan en
tierra. Las vainas y los granos atacados quedan recubiertos por un vello
blanquecino y se pudren.

El manejo de la enfermedad está encaminado a reducir al mínimo las materias


orgánicas no descompuestas en la capa superficial o la superficie del terreno;
en la utilización de las variedades resistentes; preparar el suelo a una
profundidad de 15 a 20 cm, procurando enterrar la totalidad de los restos de la
cosecha precedente; y sembrar sobre terreno llano o sobre un ligero caballón,
nunca en un surco.

6.2.2. Plagas

Lorito verde, Empoasca sp

Son insectos color verde claro que pica la planta y succiona los fotoasimilados
elaborados por las plantas.

Las larvas y los adultos pican la cara inferior de la hoja, provocando la


aparición de relieves en el limbo y su enrollamiento hacia abajo; los bordes
adquieren un color rojo y se resecan. El aspecto de la planta es achaparrado.

Como forma de control biológico del insecto se han utilizado parasitoides de


huevos (Anagrus sp.), depredadores (Nabidae, Reduviidae) y algunos
entomopatógenos.

El control cultural del lorito verde está determinado por el uso de variedades
resistentes o tolerantes al insecto. De igual forma se debe evitar la presencia
de plantas hospedantes dentro del cultivo como el fríjol y ciertas gramíneas.

Gusano cogolleros, Spodoptera frugiperda.

Son larvas que miden 45 mm de largo, el cuerpo es de color marrón, marrón


oscuro o verde pálido con una línea media longitudinal de color marrón oscuro
entre dos líneas laterales de igual sentido más claras. La cabeza es negra con
suturas bien definidas en forma de Y invertida.

200
El daño del insecto es importante sobre el cultivo del maní ya que se puede
presentar como tierrero, como comedor de follaje o dañando estructuras
florales.

Una buena preparación del terreno disminuye considerablemente la incidencia


de tierreros, al destruir un buen número de de larvas.

Otras formas de control para el manejo del insecto son: uso de cebos
envenenados; destrucción de malezas; eliminación de desechos vegetales
dentro del cultivo; uso de parasitoides, depredadores y entomopatógenos.

Nemátodos

Los ataques de los nematodos agallígenos son muy frecuentes en las zonas
productoras de maní.

Los síntomas se caracterizan por la formación de agallas en el pivote, las


raíces laterales, los ginóforos y las vainas. Si la infección es precoz, los
cacahuetes se achaparran y el borde de las hojas se necrosa. Las principal
especie patógena causante de daños importantes es la Meloidogyne sp.

Cuando las plántulas son atacadas, pueden morir antes de emerger. Aquellas
plantas que logran salir a la superficie son de color verde pálido, tejidos
engrosados y adquieren formas muy anormales

La estrategia más efectiva para el manejo de la plaga es mediante la rotación


de cultivos por largos períodos con cultivos resistentes al ataque del nemátodo.

201
6.3. Lección 29. Aspectos botánicos y labores culturales del cultivo del
estropajo.

El cultivo del estropajo y la industrialización de la fibra han venido tomando


auge en Colombia desde hace unos diez años, debido a la facilidad del cultivo
y a las muchas aplicaciones industriales y artesanales de la fibra, tales como:
relleno de cojinería de vehículos automotores; aislamiento térmico de aviones
comerciales; filtros de aire y aceite para automotores; hombreras para ropa de
hombre y mujer; guantes y bandas para friccionar la piel durante el baño;
empaque de mercancía frágil; artesanías (sombreros, flores secas, etc.); y
colchonetas para playa.

El estropajo es tan antiguo que se ha hecho imposible determinar si es


originario de África, del Asia o de India. Inclusive algunos autores le asignan
un origen árabe, por su participación en los papiros egipcios de hace tres
siglos.

6.3.1. Taxonomía y morfología

El estropajo pertenece a la familia botánica Cucurbitáceas, género Luffa y


nombre científico Luffa aegytiaca y Luffa cylindrica.

En el mercado nacional establecido no existen aún variedades, pero sí se


conocen especies bien definidas y adaptadas a nuestro medio, como:

Luffa acutangula roxb (estropajo paishhte) y Luffa aegytiaca (estropajo -


Ndungo -papagaia).

Comercialmente, las características de Luffa aegytiaca (Luffa cylindrica) y Luffa


acutangula son las más apetecidas.

El estropajo es una planta con tallo trepador mediante estructuras foliares


modificadas denominadas zarcillos.

Las hojas son lobuladas y de gran tamaño que le permite a la planta realizar
los procesos de fotosíntesis de forma eficiente.

Las flores generalmente unisexuales y amarillas, atractivas, con cinco pétalos


en la corola y los estambres y los pistilos separados en la flor. El cáliz y la
corola tienen cinco piezas, los estambres son cinco y llevan anteras flexuosas;
las flores femeninas tienen el cáliz y la corola semejante a la flor masculina,
colocada sobre un ovario que termina en tres estilos bilobulados. En las flores
femeninas el ovario es unifero y suele tener celdillas.

El fruto es largo, puntiagudo, liso de color verde, más o menos cilíndrico con
tamaño promedio de 30 a 60 cm, alcanzando a veces hasta 90 cm, diámetro de
8 a 12 centímetros.

202
Fuente Internet
Figura 69. Flor del estropajo

El pericarpio es delgado y el mesocarpio está formado por una masa de fibras


entrelazadas; cuando el fruto madura toma un color amarillento marcado con
10 líneas longitudinales verde oscuro; la masa suave se convierte en una fibra
resistente en cuyo interior se encuentran las semillas aplanadas de color negro
su corteza es dura y gruesa.

Tomado de Internet
Figura 70. Fruto del estropajo

6.3.2. Condiciones agroecológicas

El estropajo como cultivo se adapta bien a zonas de clima medio con


temperaturas promedio de 18° a 25°C; soporta climas fríos, pero su producción
comercial es baja. Esta especie es extremadamente sensible a las heladas.

203
Requiere una buena distribución de lluvias a lo largo del cultivo; sin embargo
demasiadas precipitaciones son perjudiciales para la época de floración,
porque disminuye el número de frutos por planta.

Las zonas de producción se encuentran en alturas de 1.000 y 1.500 m.s.n.m.,


en donde se expresan las condiciones óptimas para su desarrollo.

Cuando las condiciones ambientales favorecen el desarrollo de la especie se


obtiene en la fibra buenas cualidades industriales como son elasticidad,
resistencia y compactación.

Con relación al componente edáfico el cultivo es muy exigente en este aspecto,


se recomiendan suelos permeables, ricos en nutrientes vegetales, con pH que
oscile entre 5.5 a 6.5. El estropajo prefiere suelos ricos con perfecto drenaje,
pero capaces de retener la humedad por el tiempo necesario para permitir el
crecimiento continuo.

Las condiciones más aconsejables son: suelos ricos y bien drenados; agua a
disposición para riego y un sistema fuerte de espalderas capaz de soportar las
plantas y los frutos.

Los vientos fuertes ocasionan caída de partículas florales y heridas en hojas y


frutos por roce entre ellos.

Es una planta exigente en cuanto al suelo que debe ser rico, en nutrientes, algo
arenoso como todos los adecuados al cultivo de las cucurbitáceas.

6.3.3. Labores culturales

Preparación del suelo

Las actividades de preparación del terreno están relacionadas con una arada y
dos rastrilladas con el objeto de dejar el suelo suelto y mullido. Si es necesario
se debe realizar una pulida que mejore aún más las condiciones del mismo.

Después de preparado el terreno, se surca en dirección de Oeste o Este para


su mejor exposición solar, siendo la distancia entre surcos de 1.25 metros

Siembra

La forma de propagar el estropajo es por semillas. Es importante utilizar


unidades germinativas certificadas que aseguren una buena calidad y cantidad
de frutos.

204
La siembra requiere de suministro de agua que garantice y facilite la buena
germinación de la semilla.

La época en que la luna se encuentra en su fase menguante debe ser el


período para sembrar, ya que favorece la germinación y arraigamiento de la
plántula y la posterior formación de hojas y frutos, de una manera bastante
equilibrada.

Debido a la rápida germinación que presenta la semilla, no se recomienda el


establecimiento de semilleros para la multiplicación inicial de las plántulas.

La germinación ocurre, aproximadamente, a los 10 días después de la siembra


El desarrollo de las plantas (tallos y hojas) se inicia a los 20 días. En el
segundo mes aparece la formación de los primeros botones florales, que darán
origen a los frutos. Éstos inician su desarrollo, en forma continua, a partir del
tercer mes. Se considera un período productivo eficiente de 10 meses por
planta.

La semilla se siembra a 70 centímetros entre sitios y en cada uno de estos se


colocan tres semillas para eliminar luego las dos más débiles. De este modo en
un surco de 100 metros se ubican 133 unidades. Las plantas sembradas
quedan muy juntas al nacer y se enredan entre sí pero ello es una verdadera
ventaja, porque provoca la fecundación cruzada que se traduce en una mejor
calidad de la fibra.

Sistema de siembra

El sistema de siembra para el estropajo es el mismo realizado a otras


cucurbitáceas que presentan el mismo tipo de desarrollo.

El sistema más utilizado para la siembra del estropajo es el de ESPALDERA, el


cual consiste en hacer líneas con una distancia entre surcos de 1.25 metros y
una distancia entre plantas de 1.5 m., sembrando en cada sitio dos o tres
semillas para ralear y dejar una planta. Es necesario establecer los estacones
los cuales sirven de base a las cuerdas tendidas y sobre las cuales irán
posteriormente soportadas las plantas. Es importante que los estacones sean
resistentes y fijos, pues el peso que soportarán irá aumentando; a veces un
solo fruto puede llegar a pesar hasta dos kilogramos.

La longitud de los estacones es de 2.50 metros, enterrados cada tres metros


haciendo divisiones más o menos cada 10 estacones, colocando un poste
templete para que refuerce el estacón; luego, se unen entre sí por medio de
alambres paralelos, a 60 centímetros uno del otro, quedando dos líneas de
alambre y finalmente un alambre más grueso que irá sobré la parte superior del
estacón.

De cada planta se establece un tutoraje con el fin de facilitar que cada planta
enrede hasta alcanzar la altura determinada.

205
Otro sistema de siembra es el EMPARRADO, que se hace en forma triangular
a una distancia de 2.5 metros el uno del otro, a una altura de dos metros,
unidos por alambre, también en forma triangular, en la base de cada estación
se siembran las semillas.

Fuente: ICA, 1989


Figura 71. Sistema de emparrado para el estropajo

Raleo

En el momento de realizar la siembra se establecen tres semillas por sitio. Una


vez las plántulas han germinado, se debe realizar un proceso de eliminación de
dos de aquellas, buscando dejar sólo una que presente las mejores
características de desarrollo y crecimiento.

Poda

La primera floración se inicia más o menos a los dos meses de haber


germinado; es recomendable quitar esta primera florescencia en su totalidad,
para lograr una mejor producción. Los insectos se encargan de hacer la
polinización, aunque ella es innata en estas plantas. Durante el cultivo no es
muy recomendable dejar todas las flores masculinas, porque le reduce la
fertilidad a la planta y por consiguiente la futura producción.
Igualmente se deben eliminar las hojas que se encuentren secas y en mal
estado con el objeto de evitar posibles presencia de enfermedades.

206
Riego

A pesar de ser una planta que requiere suelos con buen drenaje, no es
exactamente resistente a la sequedad, le es necesaria una atmósfera fresca
para un adecuado desarrollo, se recomienda riego por lo menos dos veces por
semana en estación seca. En general, debe proporcionársele al suelo la
humedad suficiente para que las plántulas puedan crecer lo más rápida y
vigorosamente posible, sobre todo que es un período de desarrollo delicado
(fase de crecimiento lento).

Cosecha

Los frutos comienzan su maduración a los cuatro meses, cuando ya están


listos para el primer corte; el tamaño promedio a la madurez oscilará entre 30 y
60 cm de largo.

La recolección de los frutos se inicia en el momento de observar un leve color


amarillo, tanto en el pedúnculo como en el fruto, con el fin de obtener un mejor
color de la fibra seca.

Los rendimientos por planta se encuentran entre 30 y 40 frutos; en un sistema


de espaldera se tendían 5.300 plantas/ha. y una, producción promedio de 40
frutos por planta, se estima una producción total de 200.000 frutos por ha.
durante todo el ciclo del cultivo el cual dura 15 meses.

Beneficio

Los frutos se cortan con una porción del pedúnculo de que penden tan pronto
como maduran, luego se ponen en agua corriente por tiempo suficiente para
que se descomponga la corteza, después de lo cual se lavan a mano, frotando
un fruto contra otro, hasta que estén limpios de todo, menos de las semillas
que se quitarán más tarde.

Fuente Internet
Figura 72. Estropajo procesado.

207
Las esponjas se extienden luego en alambres colocados a la sombra, jamás al
sol para que sequen; antes de que estén completamente secas, se sacuden
suavemente para extraer las semillas que están colocadas en los anillos
interiores.

Otro método es el de colgar los frutos rectos en un cobertizo, con corrientes de


aire o secador durante dos o tres días, después de los cuales la corteza se
torna suave y plegadiza. Con este método debe cortarse la punta de los frutos
en la extremidad más baja, dejando un pequeño orificio por la cual la humedad
pueda escurrir; posteriormente los frutos libres de cáscara se llevan a un
tanque que contiene una solución en una proporción de cinco libras de cal por
cincuenta galones de agua; esta solución se utiliza para darle una mayor
blancura y textura a la fibra y finalmente, se enjuagan y se exponen al aire para
su secado. Es conveniente agitarlos bien para lograr que se sequen con mayor
rapidez, porque de lo contrario la fibra se torna quebradiza y se fomenta la
pudrición de modo que termina por deteriorarla.

La limpieza del fruto es fundamental para así obtener, finalmente una buena
calidad que representará un buen mercado y excelentes precios.

El blanqueo de los estropajos puede hacerse por azufrado y por su tratamiento


en soluciones de hipoclorito de calcio. El tratamiento con azufrado se practica
en cámaras y el hipoclorito exige recipientes de madera para hacer las
soluciones.

208
6.4. Lección 30. Arvenses, plagas y enfermedades del cultivo del
estropajo y su control.

6.4.1. Arvenses

Para una buena producción del cultivo se requiere un estricto control de


malezas, ya que si es deficiente ocasiona desde una merma en la
productividad hasta la muerte de plantas por infestación de virus y
enfermedades, además de generar deficiencia de nutrientes al estropajo.

Existen tres métodos de control de malezas, químico (no recomendable),


mecánico y manual. El más sano y efectivo puede ser el mecánico con
guadañadora. El control manual con machete resulta antieconómico por el bajo
rendimiento de área en unidad de tiempo.

6.4.2. Enfermedades

Las principales enfermedades que afectan al cultivo del estropajo son:

Mildeo, Cenicilla o Añublo Polvoso, (Pseudoperonospora cubensis)

Es un hongo que se presenta sobre las hojas, ramas y pecíolos en forma de


pequeñas manchas redondas y blanquecinas que dan la impresión de estar
formadas por un polvillo, constituido de millones de esporas del hongo. El
estado polvoso puede aparecer en ambos lados de las hojas y causar
defoliación prematura.

El control del patógeno más efectivo es mediante el uso de variedades


resistentes y en ausencia de éstas, por medios químicos usando aspersiones
de productos que ofrecen protección a la planta.

Hay que tener mucho cuidado con esta enfermedad, pues ella es la principal
causa del fracaso de muchos cultivos de estropajo.

Antracnosis, (Colletotrichum lagenarium)

Se manifiesta en las venas de las hojas, en forma de manchas que luego se


extienden a los tejidos adyacentes. Las lesiones aparecen en los frutos casi
maduros, en forma de manchas circulares, hundidas, húmedas al comienzo y
más tarde, se tornan verde oscuro y negras con centro lamoso.

Las condiciones favorables para el desarrollo de la enfermedad son los climas


cáIidos y húmedos.

209
Ente las medidas para manejar la enfermedad tenemos: desinfectar la semilla;
disminuir la alta humedad relativa con adecuados drenajes; y hacer controles
eficientes de malezas.

Mosaico

Es producido por un virus. Cuando las plantas están afectadas presentan un


aspecto moteado en las hojas, con zonas decoloradas verdosas claras y más
oscuras. Cuando el ataque es fuerte las hojas adquieren aspecto rugoso
causando a las plantas más adultas un color amarillento y luego la muerte. Los
frutos también son atacados presentando manchas y deformaciones.

El control de la enfermedad está basado en el uso de variedades resistentes,


control de los insectos transmisores (ácaros, áfidos y trips), conservar la
plantación libre de malezas, las cuales se pueden convertir en huésped del
virus y destruir las primeras plantas que aparezcan enfermas, quemándolas.

Marchitamiento bacterial, (Erwinia trapcheiphila)

La bacteria se desarrolla en los tejidos conductores de la savia, causando


marchitamiento y muerte. Esta bacteria es trasmitida por insectos y por semilla
infectada. Por esta razón, la mejor medida de control es la eliminación de los
insectos barrenadores del tallo, y por tratamiento químico de la semilla antes
de la siembra.

6.4.3. Plagas

Las plagas más comunes en los cultivos de estropajo son:

Gusano del fruto, (Diaphania nitidalis)

El daño es ocasionado por las larvas de color blanco con hileras de puntos
negros a lo largo del cuerpo.

Estas larvas se alimentan al principio de las hojas, flores y tallos; más tarde,
perforan los frutos, en cuyo interior penetran causando pudrición y pérdida de
los mismos.

Se han encontrado ciertas avispas parasitando las larvas. En ataques fuertes


de la plaga es necesario realizar controles químicos.

210
Minador de la Hoja, (Liriomyza sp)

Es una larva pequeña, que al llegar a adulto se transforma en una mosca


diminuta y amarillenta.

El daño que realiza el estado inmaduro consiste en la construcción de galerías


semitransparentes en las hojas en el tejido parenquimático.

Las hojas se observan con pequeños caminos consistente en el


desplazamiento que realiza la larva dentro de la hoja antes de salir.

El control del insecto se basa en actividades como: eliminación de residuos de


cosechas; deshoje y eliminación de las estructuras foliares con presencia de la
larva; y erradicación de malezas hospedantes de la plaga.

Áfidos, (Papis gossypii)

Estos insectos atacan la planta especialmente en los brotes y por debajo de las
hojas más nuevas, al alimentarse succionan savia, retrasando cuando los
ataques son fuertes, el crecimiento normal.

El ataque de áfidos está relacionado con la transmisión de enfermedades


virosas.

Se han encontrado individuos que controlan las poblaciones de áfidos como


ciertos parásitos (braconidae, aphelinidae), depredadores (coccinellidae,
syrphidae) y entomopatógenos (Entomophthora).

Lorito Verde, (Empoasca sp)

Son insectos saltahojas de color verde o verde claro. Los adultos atacan las
partes tiernas chupándolas, causando encrespamientos, amarillamientos, a
veces puntos necróticos.

Son individuos muy activos que se encuentran en el envés de las hojas,


especialmente en las zonas nuevas. Las ninfas se encuentran en el envés de
las mismas y caminan de lado.

Además del daño directo que causan, son portadores de virus.

Como control biológico de esta plaga se encuentran parasitoides como


Anagrus sp., y depredadores como nabidae, reduviidae y dolichopodidae.

El control cultural de la plaga está determinado por el efectivo control de


malezas y el uso de variedades tolerantes al ataque del insecto.

211
ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS

Investigue las actividades que se realizan en los diferentes procesos para la


extracción de aceite a partir de la semilla de maní.

Investigue cuáles son los procesos que se realizan para el beneficio del
estropajo. Cuáles son las características de cada uno de los procesos.

AUTOEVALUACIÓN

● Indique las características morfológicas del maní.

● ¿Cuáles son los requerimientos agroecológicos del cultivo del maní?

● Indique las características de una plaga presente en el cultivo del maní.

● Indique las características de una enfermedad presente en el cultivo del


maní.

● Indique las características morfológicas de la planta del estropajo.

● ¿Cuáles son los requerimientos agroecológicos del cultivo del estropajo?

● ¿En qué consiste el proceso de poda en el cultivo del estropajo?

● ¿Cuáles son los síntomas de la antracnosis en el cultivo del estropajo?

● ¿Cuál es el daño causado por el minador de la hoja en el cultivo del


estropajo?

212
BIBLIOGRAFÍA

ACERO DUARTE, Luis Enrique y BARRERA MARÍN, Nancy. Chachafruto o


Balú. Erythrina edulis T, cultivo y aprovechamiento.1996. Bogotá. Colombia.
Pág. 11.

ACERO DUARTE, Luis Enrique. Guía para el cultivo y aprovechamiento del


Chachafruto o Balú, Erythrina edulis T, Convenio Andrés Bello. 2002.
Colombia. Pág 5.

ADAMES BOHORQUEZ, Jorge Emilio. Producción de Cultivos II. 1995.


Colombia. Pág 189.

ALVAREZ ZAMBRANO, Roberto. Adaptación de dos variedades de porte


enano de higuerilla Hale y Beber en Moniquirá-Boyacá. 1975. Colombia. Pág 3

BELALCÁZAR, Sylvio. El Cultivo del Plátano en el Trópico. 1991. Colombia.


Pág 63.

BELALCÁZAR, Sylvio. Plagas y Enfermedades del Plátano. 1991. Colombia.


Pág 7.

BIBLIOTECA ILUSTRADA DEL CAMPO. La Huerta Agrícola y Plantas


Medicinales. 2004. Pág 73.

CASTRO, Irma y LÉRIDA, Lázara. Agrotecnología parea el cultivo de Sábila o


Aloe. 2000. Bogotá. Pág 98.

CELEDÓN MANOTAS, Alfredo. Curso Básico de Agricultura para Clima Cálido.


2000. Colombia. Pág 317.

CHAMPION, Jean. El Plátano. 1968. Barcelona.

CHAPARRO CARDOSO, Adriana y SUESCUM CÁRDENAS, Javier. Estudio


Exploratorio sobre fertilización en Espárrago Asparagus officinalis en Combita-
Boyacá. 1996. Colombia. Pág 4.

COMPAÑÍA NACIONAL DE CHOCOLATES SA. Manual para el cultivo del


cacao. 1998. Colombia.

CORPOICA. El Cultivo del Plátano y su Perspectiva en el Piedemonte Llanero.


1994. Colombia.

CORREA GARZÓN, Fernando. El Cultivo de la Habichuela. Revista ESSO


Agrícola, volumen 34, número 2. 1987. Pág 18.

213
COYUNTURA COLOMBIANA. Centro de Estudios Ganaderos y Agrícolas,
número 47, Septiembre de 1995. Colombia. Pág. 120

DURÁN RAMIREZ, Felipe. Cultivo de Plantas Aromáticas y Medicinales. 2003.


Pág. 9.

DURÁN RAMIREZ, Felipe. Manual de Cultivos Orgánicos y Alelopatía. 2003.


Pág 475.

ESAU, Catherine. Anatomía Vegetal. 1985. Pág. 513.

EVANOFF, Ascanio. Biología del Café. Universidad Nacional de Venezuela.


1994. Caracas. Pág 73.

FEDERECIÓN NACIONAL DE ALGODONEROS. Bases Técnicas para el


cultivo del Algodón en Colombia. 1990. Colombia.

FEDERACIÓN NACIONAL DE CAFETEROS. Fruticultura Tropical. 1992.


Bogotá-Colombia. Pág 3.

FEDERACIÓN NACIONAL DE CAFETEROS DE COLOMBIA. El Cultivo del


Plátano en Zona Cafetera. Colombia. Pág 3.

FEDERACIÓN NACIONAL DE CAFETEROS. Guía Ambiental para el


Subsector Cafetero. 2002. Colombia. Pág 7.

FEDERACIÓN NACIONAL DE CAFETEROS. Manejo Integrado de la Broca del


Café. 1998. Colombia. Pág 11.

FEDERACIÓN NACIONAL DE CAFETEROS DE COLOMBIA. Manual del


Cafetero Colombiano. 1979. Colombia. Pág 3.

FONNEGRA, Ramiro y JIMENEZ, Silvia. Plantas Medicinales Aprobadas en


Colombia. 1999. Pág. 211.

GUERRERO, Ricardo. Fertilización de cultivos de clima medio, MONÓMEROS.


1995. COLOMBIA. Pág 17.

GILLIER, P. El Cacahuete o Maní. 1970. Barcelona. Pág 13.

GUHL, Ernesto. Las Lluvias en el Clima de los Andes Ecuatoriales Húmedos de


Colombia. Universidad Nacional. 1974. Bogotá. Pág 5.

GUÍA AMBIENTAL PARA EL SUBSECTOR CAFETERO. Sembrando Café


Cosechamos Vida. 2002. Colombia Pág 38.

214
HARTMANN, Hudson. Propagación de Plantas, Principios y Prácticas. 1985.
México.

INSTITUTO COLOMBIANO AGROPECUARIO. Manual de Asistencia Técnica.


Colombia. Pág 253.

INSTITUTO COLOMBIANO AGROPECUARIO. Revista Trimestral, volumen


XXIII, número 2. Junio de 1989. Colombia. Pág 16.

JARAMILLO ROBLEDO, Álvaro. Clima Andino y Café en Colombia,


CENICAFÉ. 2005. Chinchiná-Caldas. Pág 38.

MARTINEZ, José Vicente y BERNAL, Henry Yesid. Fundamentos de


Agrotecnología de Cultivo de Plantas Medicinales Iberoamericanas. 2000. Pág
17.

MARTINEZ GARNICA, Alfonso. El Cultivo del Plátano en los Llanos Orientales.


Manual Instruccional número 01. 1998. Colombia.

MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE. Guía Ambiental para el Subsector


Fiquero, Dirección general ambiental sectorial 202. Pág. 28.

MONTALDO, Álvaro. Cultivos de Raíces y Tubérculos Tropicales. 1991. Pág.


297.

OSORIO GIL, Gabriel. La higuerilla y su situación actual en Colombia. Medellín.


Pág 57.

ORDOÑEZ SANTAELLA, Luis Eduardo. Estudio en las Enfermedades


Fungosas del Espárrago Asparagus officinalis en predios de la Universidad
pedagógica y tecnológica de Colombia. 1997. Colombia.

PÉREZ MEJÍA, Jorge. El Fique su Taxonomía, Cultivo y Tecnología. 1974.


Colombia. Pág 79.

ROSERO, Álvaro. Banano y Plátano: Enfermedades y Plagas, Guía Práctica.


1987. Colombia. Pág 35.

RUIZ, Ruben, Cultivo de Maíz y Fríjol. Temas de Orientación Agropecuaria.


2000. Colombia. Pág 13.

RUIZ, Ruben, El Cultivo del Fríjol. Temas de Orientación Agropecuaria. 1986.


Colombia.

RUIZ, Ruben, El Cultivo del Café. Temas de Orientación Agropecuaria. 1983.


Colombia.

SÁNCHEZ POTES, Alberto. Cultivos Oleaginosos, manuales para educación


agropecuaria. 1999. Colombia.

215
SÁNCHEZ POTES, Alberto. Cultivos de Fibras. 1998. Colombia. Pág 79.

SÁNCHEZ, Vicente. Glosario de Términos sobre Medio Ambiente. 1989.


Santiago de Chile.

SUGDEN, Andrew. Diccionario Ilustrado de la Botánica Everest. 1997. España.


Pág 58.

TAMHARE, R. Suelos su Química y Fertilidad en Zonas Tropicales. 1979.


México. Pág 432.

TOBÓN, José Hirian. Curso Internacional sobre cultivo de fríjol Phaseolus


vulgaris L en zona de ladera de la región andina. 1992. Pág. 7.

TOVA, José. Enciclopedia Didáctica de las Ciencias Botánicas. 1990. Pág. 14.

VEGA LÓPEZ, Nely Fabiola. Estudio sobre la Comercialización del Fique en el


Centro Comercial y Administrativo de la Plaza Real y el Complejo de Servicios
Públicos en el Sur de Tunja. 1995. Tunja. Pág 25.
VÉLEZ, Ángel Raúl. Plagas Agrícolas de Impacto Económico en Colombia:
Bionomía y manejo integrado. Universidad de Antioquia. 1997. Colombia.

VILLATE INFANTE, Sandra. Estudio Comparativo de Cultivos Hidropónicos de


arveja Pisum satibum y Habichuela Phaseolus vulgaris a nivel semicomercial
como rotación para tomate en Tunja-Boyacá. 1993. Tunja. Pág 24.

YEPES, Emilse y ALZÁTE, Pedro. Boletín Técnico Facultad Ciencias


Agropecuarias, Universidad Nacional. 1992. Medellín.

ZAMOSC, León. El Fique y los Empaques en Colombia. Fundación Mariano


Ospina Pérez. 1981. Pág. 20.

Http://html.rincondelvago.com/hortalizas.html

Http://latiendadelaloe.comserpro.com/aloe.index

Http://fichas.infojardin.com/hortalizas_verduras/espárragoblanco

Http://eraecologica.org/revistaOO/eraecologica.ohtm

Http://www.monomeros.com

Http://es.wikipeda.org/wiki/arracacha

Http://www.walcoagro.com/investigaciones/inuhabichuela.htm

Http://lunaazul.vcaldas.edu.co

216
Http://www.peruecologico.co/raíz_arracacha.htm

217

You might also like